El Medio Juego en Ajedrez (GM Fine) (2)

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  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ

  • NUEVA BIBLIOTECA DE AJEDREZ

  • RU BE N FI NE

    EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ

    Cmo debe conducirse una partida, desde la apertura hasta el final. - El juego de combinacin y los

    ataques de mate. - Desarrollo de la habilidad del jugador para analizar una determinada

    posicin y proceder de acuerdo. - Cmo manejarse cuando la posicin es

    superior, o equilibrada, o inferior.

    T R A.D U e e 1 O N D 1 RE e T A DEL 1 N G L E S DE

    HECTOR NARANJO

    EDITORIAL SOPENA ARGENTINA S. A. COMERCIAL, INDUSTRIAL E INMOBILIARIA

    ESMERALDA 116 BUENOS AIRES

  • Es propiedad Derechos reservados

    Copyright 1962 by Editorial Sopena Argentina S. A. C. l. e l. Hecho el depsito que marca La ley 11.723 Prohibida la reproduccin total o parcial

    PRINTED AND PUBLISHED IN ARGENTINA IMPRIM ET PUBLI EN ARGENTINE

    STAMPATO E PUBBLICATO NELL'ARGENTINA DRUCK UND AUSGABE IN ARGENTINIEN IMPRESSO E EDITADO NA ARGENTINA

    SEGUNDA EDICION

    MARZO DE 1962

    IMPRESO Y EDITADO EN LA ARGENTINA

  • CAPTULO I

    UNAS POCAS IDEAS

    El acceso al medio juego se logra por el anlisis de las posiciones que ocurren. Contrariamente a Jo que sucede en la apertura, las variantes t e r i c as son de escaso valor y, contrariamente a lo que ocurre en los finales de partida, las posiciones detalladamente analizadas no se repiten continuamente. En el m e d i o juego, nuestra principal preocupacin debe ser la de las ideas que se emplean para comprender lo que se est haciendo.

    La fuerza (o el material) , la movilidad y la seguridad del rey son los tres principios b s i c os del ajedrez. La movilidad p u e d e subdividirse en e s tr u c tura de peones (o movilidad de peones) y libertad general de las piezas. Agrguese a esto la situacin tctica e n c u a l qu i er momento (combinaciones) , y se tendr un bosquejo completo para el anlisis de cualquier posicin.

    Sin embargo, no todos estos elementos son de igual i m p o r t anc i a . Ante todo, debe tenerse en cuenta, naturalmente, la p o si c i n del rey. Cuando sta es peligrosa, ninguna otra cosa importa. Por eso, debemos dedicar un captulo especial a las diversas p o s i b i l i d a d e s de ataque contra el rey, es decir, a los ataques tendientes a dar el mate.

    Con todo, aun en esos ataques, el

    factor de primordial importancia es la combinacin. En ltimo anlisis, toda partida de ajedrez se decide en forma tctica. La razn por la cual un jugador fuerte puede dar ventaj a material a uno de menos fuerza es la de que aqul Ve ms, es decir, est ms familiarizado con las combinaciones inherentes a la posicin. Entre jugadores de igual fuerza, es siempre el ltimo error y la capacidad para verlo lo que determina quin ganar. En todos los niveles de capacidad ajedrecstica, inclusive en la clase de campeonato mundial, sigue siendo verdad que la tctica constituye el 99 por ciento del juego. Por eso, la primera parte de este libro se dedica al desarrollo de los principios del juego de combinacin.

    Las combinaciones, por lo general, se hacen con el propsito de ganar material. Tericamente, si en todo lo dems hay igualdad, cualquier ventaja material es suficiente para ganar. La fuerza de un jugador puede, en rigor, medirse por la cantidad de material que necesita para forzar el triunfo. Por lo comn, para un maestro basta un pen. Para el trmino medio del jugador de club, muy probablemente se necesitar un caballo.

    C u a n d o no hay ventaj a material

  • 6 RUBN FINE ni un ataque decisivo que amenaza La naturaleza del juego de posicin mate, nos hallamos en el terreno del puede parafrasearse diciendo que es juego de po s ic i n. Evidentemente. el arte de ganar una partida ganada, las metas del juego de posicin de- o, desde el punto de vista del jugaben ser, o bien la ganancia de mate- dor que est a la defensiva, de hacer rial, o la preparacin de un ataque tablas una partida perdida. Naturaldecisivo. Sus principios son, en rea- mente, en la prctica, nos encontralidad, mucho ms sencillos que los mos frecuentemente inseguros de si que se indican en la mayora de los una p os i c i n est o no claramente libros de texto ; como lo veremos, ese ganada; hablamos de posiciones sujuego gira en torno de la avaluacin periores o inferiores. Estas cuestiode una posicin y de los medios pa- nes ocuparn la seg u n d a parte de ra explotar una posicin superior. este libro.

  • CAPTULO II LOS ELEMENTOS DE LAS COMBINACIONES

    Una combinacin es una serie de movidas ms o menos forzosas y que frecuentemente implican un sacrificio de material, calculado para efectuar algn c amb i o r ad i c a l en la p o s i c i n. Ese cambio traer como resultado una de estas dos ventajas fundamentales tangibles: ganancia de material o ataque contra el rey.

    Las combinaciones son lo que especialmente distinguen al ajedrez de los dems juegos y hacen de l una cosa aparte. Representan lo que Reti llamaba el triunfo de la mente sobre la materia. Son inesperadas, empiezan por sorpresa, frecuentemente consisten en una serie de movidas sin objeto y hasta de errores. Son, literalmente, la agrupacin de jugadas para formar un todo y alcanzar un objetivo. Son la poesa del tablero y su sencilla belleza suele no permitirnos ver los mritos del juego de posicin, que es la prosa.

    A primera vista, las combinaciones nos p r o d u c en el efecto de un trueno en un cielo sereno. El aficion a d o c on te m p l a las partidas del maestro y se dice asombrado : Cmo lo vi? Sin embargo, las combinaciones se basan en slo dos sencillos principios : si el rey no est implicado en ellas, todas las combinaciones se basan e n un ataque doble; si el rey est implicado, la com-

    binacin tiene como eje una amenaza de mate.

    En este captulo nos ocuparemos n i c am en t e de l a s combinaciones elementales, en las que el rey no est implicado. Para ese fin, exploramos el poder combinativo de las diferentes piezas.

    Es claro que cada p i e z a p o dr preparar ataques dobles, en formas peculiares a su manera de moverse. El anlisis m u e s t ra , sin embargo, que hay cinco tipos bsicos de ataque doble:

    l. Pinza de dos unidades no defendidas, o de dos unidades de mayor valor: ste es un poder que todas las piezas poseen.

    2. Jaque y captura de una pieza no defendida, o de una de mayor valor: todas las piezas, excepto el rey.

    3. Clavar a una pieza no defendida o a una de mayor val o r: alfil, torre y dama.

    4. Captura y amenaza de mate: torre y dama por lo comn, aunque en algunos raros casos esto es posible con cualquier pieza.

    5. Captura o avance : el pen. E x a m i n e n o s estas posibilidades

    combinativas en mayor detalle, para cada pieza separadamente.

  • 8 RUBN FINE l.-LA DAMA

    Esta es, con mucho, la pieza ms poderosa y la que se presta ms fcilmente para combinar.

    El primer tipo para combinaciones de dama es la pinza. En el diagrama 1 tenemos un e j e m p l o tpico. Las negras acaban de jugar, por error, su pen a 3 e D, y las blancas contestaron D 4 R. Ahora la torre y el caballo estn simultneamente atacados y uno de ellos, forzosamente, se perder.

    Aqu vemos a la dama operar en ambas direcciones como alfil. E'n el

    DIAGRAMA NQ 1

    Pinza

    DIAGRAMA NQ 2

    Pinza

    dwgrama 2 vemos que la dama ataca al caballo como alfil y al alfil como torre, de nuevo con igual eficacia, naturalmente. Es claro que la dama tambin puede amenazar en ambas direcciones como torre, segn puede verse en el diagrama 3. Ntese que, en todas estas combinaciones de dama, las piezas atacadas son de menor valor que ella. Ms an, es esencial que las piezas no puedan defenderse mutuamente. Por ejemplo, en el diagrama 3, si el caballo estuviese en 4 T D, en vez de estar en 4 e D, las blancas podran parar el ataque con e 3 A D.

    DIAGRAMA NQ 3

    Pinza

    DIAGRAMA NQ 4

    Jaque y captura

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ

    El segundo tipo para combinaciones de dama es jaque y captura. Un ejemplo tpico se ve en el diagrama 4. Aqu, la dama jaquea diagonalmente (es decir, como alfil) y tomar al caballo de 4 T D de las negras horizontalmente (es decir, como torre) . En el diagrama 5, tanto el jaque como la captura se realizan diagonalmente (es decir, como alfil) . Despus que el rey negro haya movido, la T D de las blancas ser tomada. En a l g u n a s posiciones de esta clase, la dama n e g r a p o d r a quedar encerrada y ser capturada, pero se no es el caso aqu.

    DIAGRAMA N

  • 10 DIAGRAMA N9 8

    Captura y amenaza de mate

    DIAGRAMA NQ 9

    Pinza.

    DIAGRAMA N9 10

    Jaque y captura.

    RUBN FINE dran l o s recursos d e f e n s iv o s de . .... , A 4 A, p orque si e nt o n c e s D 8 R +,AlA.

    2.-LATORRE

    Lo mismo que para la dama, hay cuatro tipos combinatorios para la torre. El primero, naturalmente, es la pinza. Esto explica la gran eficacia de una torre en la sptima fila. Por ejemplo, en el diagrama 9, las negras tienen que defender su caballo y perdern el P C D. Una posicin tpica de jaque y captura se ve en el diagrama 10. Aqu el rey tiene que moverse y entonces las blancas toman el alfil con la torre. Ntese que si la torre negra estuviese en 2 A R, podra ir a 1 A R, tapando el jaque y defendiendo al alfil.

    Algo diferente es la situacin que se presenta en el diagrama 11. _Aqu el rey tiene que moverse y las blancas contestan T X C.

    La clavada con la torre se ilustra en el diagrama 12. All es imposible defender al alfil negro.

    Finalmente, en el diagrama 1 3 se ve una amenaza de mate y captura. Nuevamente, la preocupacin inmediata de las negras es evitar el mate en 8 D ; cualquiera que sea la jugada defensiva que hagan, seguir T X A.

    3.-EL ALFIL

    Para el alfil tenemos tres tipos de combinacin: pinza, jaque y captura, y clavada. E'n el diagrama 1 4 vemos u n ejemplo comn d e pinza. Los dos caballos negros no pueden d e f en d e r s e mutuamente y uno de ellos est perdido. Ntese que si el caballo negro estuviese en 2 C D en vez de estar en 3 A D, las negras podran sostener su posicin con ..... , C (de 5 R) 3D.

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 11 DIAGRAMA NQ 1 1 DIAGRAMA N Q 1 4

    Jaque y captura. Pinza.

    DIAGRAMA NQ 12 DIAGRAMA NQ 15

    Clavada. Jaque y captura

    DIAGRAMA NQ 13 DIAGRAMA NQ 16

    Captura. y amenaza. de mate Clavada

  • 12 RUBN FINE Un ejemp-lo de combinacin de j a

    que y captura es el del diagrama 1 5. Una vez que el rey negro se haya movido, las blancas e o n t e s t a n A X T, ganando la calidad.

    En el diagrama 16 vemos la clavada en accin. El e a b a 11 o negro en 2 A D est cubriendo a la torre y no puede ser defendido. Las negras perdern, por lo menos, la calidad.

    4. -EL CABALLO

    Con el caballo, slo hay dos posibilidades combinativas : la pinza y el jaque-captura. En el diagrama 17

    DIAGRAMA N 9 1 7

    Pinza

    DIAGRAMA N9 18

    Jaque y captura.

    vemos la pinza : una de las dos torres negras est perdida. N a t u r a lmente, el caballo tendr que atacar a dos piezas no defendidas, o a dos unidades de mayor valor que l, como aqu. Tres ejemplos comunes de co m b i n a c i n d e jaque-captura se ilustran en los pocos diagramas siguientes. En el diagrama 1 8, el rey debe moverse, y entonces el C toma la T. En el diagrama 19, el alfil est perdido. Ntese que si aqu el P e D de las negras estuviese en 3 e D, en vez de e s t a r e n 4 e D, despus de . . . R2R, e X A; D2A, el e blanco no podra escapar.

    DIAGRAMA N9 19

    Jaque y captura

    DIAGRAMA N9 20

    Jaque y captura

  • EL MEDIO JUEGO EN A.TEDREZ 13 DIAGRAMA N9 21 DIAGRAMA 22 A

    l'inza

    DIAGRAMA N9 22

    Jaque y captura

    Esta s dos ltimas combinaciones son contra el rey no enrocado. Una combinacin tp i c a contra el rey enrocado se ve en el diagrama 20. Nuevamente el rey deber moverse y el alfil de las negras est perdido.

    5.-EL PEON

    Con el pen, hay tres posibilidades combinat iva s: pinza , jaque y captura y c aptu ra o avance. Un ejemplo tpico de una pinza en la apertura puede verse en el diagrama 21 . Las blancas acaban de entregar un caballo (las jugadas de la

    --- -

    Captura o coronacin

    DIAGRAMA N'? 23

    Captura o coronacin

    apertura fu eron: l. P 4 R, P 4 R; 2. C 3 A R, C 3 A D ; 3. A 5 C, A 4 A; 4. C X P, C XC; 5. P4D, que recupera la pieza). Una posicin de jaque y captura se ve en el diagrama 22. Ella es resultado de- un ataque, basado en sacrificio, contra el rey blanco. Las negras recuperan ahora su pieza.

    El tipo de combinacin de captura o coronacin slo el pen puede realizar la y es posible gracias al poder especial del pen para coronarse. Esto, por lo comn, slo ocurre en el final de la partida. En el diagrama 22 A, si el C de 2 C de las ne-

  • 14 RUBN FINE gras se mueve, las blancas coronan su pen de T R, y si es el otro caballo el que se mueve, seguir P X C, coronando a la jugada siguiente. Esta combinacin slo es posible en la columna T. En el diagrama 23 se observa una s ituac in s imilar : las blancas coronarn, ya sea capturando o avanzando. Estas combinaciones con el pen no apoyado por otras piezas slo son posibles contra los caballos; contra otras piezas, el pen necesita apoyo.

    6.-EL REY

    Con su majestad, slo un tipo de combinacin es practicable: la pinza. Aun sta es limitada, puesto que el rey no puede efectuar una pinza contra una pieza que est dndole jaque; as, por ejemplo, el rey jams puede atacar a la dama. Por lo comn, el rey ataca simultneamente a dos peones o a un pen y una pieza menor. Tpico de esto es el diagrama 24. Aqu, las blancas pierden ya sea el P A o el P R.

    Puede hacerse un comentario respecto a las combinaciones en general. Puesto que se basan en ataques

    DIAGRAMA N9 24

    Pinza.

    dobles, se plantea el interrogante: cundo son factibles esos ataques? La contestacin es que son factibles nicamente cuando existen debilidades en la posicin del enemigo. Estas debilidades necesariamente implican una e xposicin de alguna clase, ya sea que haya piezas no defendidas, haraganeando solas por el tablero, o que el rey est expuesto, o ambas cosas a la vez. En tales casos, hay muchas p ersp ec tivas de combinaciones ; algo -pensamos -es posible que se produzca.

    COMBINACIONES COMPUESTAS

    Hemos pasado revista sistemticamente a todas las combinaciones posibles con una sola pieza. Ahora llegamos a aquellas combinaciones que comprenden a dos piezas. Aqu tenemos cuatro posibilidades: la pinza, el jaque descubierto, descubiertas en general y ataques aislados.

    A. LA CLAVADA

    Las clavadas son una forma bsica combinativa para toda pieza, ex.,. cepto el pen o el rey. Lo que aqu

    nos interesa son las clavadas en las que una pieza inmoviliza al enemigo, mientras alguna otra aplica el golpe del knock ouh.

    En un tipo de posicin, la clavada es absoluta, es decir, la pieza sirve de escudo al rey y toda movida de esa pieza es ilegal. Un caso comn, desde la apertura, se ve en el diagrama 25. El caballo negro no puede moverse y el pen blanco lo tomar. Un ejemplo en el que la pieza clavada est ata e a da por ms piezas que las que pueden llevarse para

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ

    defenderla se ve en el diagrama 26. El alfil blanco est defendido dos veces, pero atacado tres veces ; est perdido. Ntese que si el rey estuviera ms cerca de l, el alfil estara salvado.

    Un segundo tipo de clavada es la relativa, en la que la pieza clavada puede moverse; pero, si lo hace, expone al jugador a sufrir una prdida mayor. Un caso tpico es aquel en el que una pieza est cubriendo a la dama del ataque de una torre. Un caso que se p resenta con frecuencia se muestra en el diagrama 27. Aqu, si el alfil se mueve, la dama ser capturada. La nica regla es la de que la pieza clavada debe estar sirviendo de escudo a otra de mayor valor. As, en el diagrama 28, vemos que el caballo est escudando a la torre.

    B. EL JAQUE DESCUBIERTO

    Este es uno de los recursos ms destructores a que el jugador puede recurrir, es la bomba de hidrgeno del t a b 1 ero. Porque la pieza que queda e n l ibertad de movimiento puede donde le p lazca , ata car cualquier cosa y capturar impunemente lo que quiera. En efecto, el jugador puede hacer dos movidas en una fila. Un caso divertido es el que ilustra el diagrama 29. A pesar de la enorme ventaja de material que tienen las negras, las blancas pueden ganarlo todo y dejar al adversario tan impotente como un beb. En esa posicin las blancas juegan: l. T X T + dese., R 1 e ; 2 . T 7 e +, R 1 T ; 3 . T X e + dese., R 1 e ; 4. T 7 e +, R 1 T; 5. T X A + dese., R 1 e ; 6 . T 7 e +, R 1 T; 7. T X P + dese., R 1 e ; 8. T 7 e +, R 1 T ; 9. T X P + dese., R 1 e ; 10. T 7 e +, R 1 T ; 11. T X P + dese., R 1 e ; 12. T X D, y las negras quedan perdidas. Aqu se presentara

    DIAGRAMA NQ 25

    Clavada. absoluta

    DIAGRAMA NQ 26

    Clavada absoluta

    DIAGRAMA NQ 27

    Clavada relativa

    15

  • 16 DIAGRAMA NQ 28

    Clavada relativa

    DIAGRAMA NQ 29

    Jaque descubierto; gana

    DIAGRAMA NQ 30

    Jaque descubierto; gana

    RUBN FINE

    una situacin de m a te si la casilla 2 T R de las negras estuviese bloqueada. As, por ej emplo, si estuviese el pen negro en esa casilla, las blancas podran continuar en esta forma: 1. T X T + dese. , R 1 e ; 2. T 7 e +, R 1 T; y 3. T 6 e mate.

    Por lo regular, los j aques descubiertos no son tan enteramente destructores, pero causan bastante dao. U na posicin, tomada de la defensa Petroff, se ve en el diagrama 30. Aqu, l. e 6 A +, gana la dama negra.

    El jaque doble es un caso especial del jaque descubierto, en el que la pieza que descubre a la otra que jaquea tambin da jaque. Puesto que elimina las posibilidades de interposicin y de captura de la pieza que jaquea, la nica defensa consiste en mover al rey, pero con frecuencia no se dispone de esa defensa, de modo que se llega al mate. Ej emplo de ello se ve eri el diagrama 31 . l. . . . . . , e 5 T + y mate, a pesar de que, separadamente, cada uno de los dos jaques del j aque doble podra fcil mente pararse.

    Una caso especial de jaque doble se ve en el diagrama 32, el famoso legado de Filidor>>. Aqu las blancas dan mate en tres jugadas as: l. e 6 T + +, R 1 T ; 2 . D 8 e +, T X D ; y 3. e 7 A mate.

    C. DESCUBIERTAS EN GENERAL

    Los mismos principios se aplican aqu que en el caso del jaque descubierto, pero la amenaza a una da ma o una torre no es tan compulsiva como la amenaza a un rey, de modo que esas amenazas descubiertas son algo menos ef i c a c es . Un ejemplo comn se ve en el diagrama 33. Despus de l. P 4 D, quedar atacados el alfil y la dama negros; una de las dos piezas est perdida.

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 17 D. ATAQUES AISLADOS

    Estos se producen cuando hay dos ataques separados, en dos sitios diferentes. Pueden ocurrir como resultado de un a t a q u e descubierto (como en el diagrama 33, donde las blancas ganan una pieza jugando P 4 D) o a causa de una equivocacin. E'n el diagrama 34, las negras jugaron por error l. . . . . . , D X P + ?

    DIAGRAMA N9 3 1

    Jaque doble; gana.

    DIAGRAMA N9 32

    Jaque doble; gana. ("Legado de Filidor'')

    Despus de 2. R 1 C, quedan atacados el alfil y la dama negros y uno de los dos est perdido.

    A fin de completar el examen de las posibilidades combinatorias bsicas de las piezas de aj edrez deberemos todava examinar el ataque para dar el mate, que obedece a sus propias reglas . Sobre este tema nos ocupamos especialmente en el captulo siguiente.

    DIAGRAMA N9 33

    DIAGRAMA N9 34

  • CAPTULO III EL ATAQUE PARA DAR EL MATE

    Si bien el ataque para dar el mate implica, por lo general, todas las diversas combinaciones descritas en el captulo anterior, existe la consideracin especial del mate, que la coloca en una clase por s misma. Debido a esto, las cuestiones de material son frecuentemente secundarias. En vez de ellas la cuestin dominante es la de la situacin ex-

    puesta del rey. En todos los casos, tenemos que decidir si esa exposicin es o no compensacin suficiente del material sacrificado. De todos modos, sta es una c u e s t i n tctica que difiere para cada posicin, pero hay ciertos p r i n c i p i o s generales y un conocimiento d e posiciones tpicas que constitu'yen una ayuda para ver claro en esta maraa.

    EL REY NO ENROCADO

    Cuando el rey permanece en el centro demasiado tiempo, la presin de las piezas enemigas suele volverse abrumadora. Por esta razn el experto prefiere, por lo general, enrocar temprano y llevar a su rey a sitio seguro.

    A fin de penetrar en los principios que gob iern an las combinaciones contra el rey no enrocado, empecemos con dos famosas brillanteces de Anderssen, entre las ms celebradas que se conservan.

    El diagrama 35 est tomado de la partida Anderssen-Kieseritzky, Londres, 1851. Las blancas tienen una pieza menos, pero lo arriesgan todo en el ataque. La partida sigui as :

    1 A 6 D ! ! AX T

    Es esencial calcular las combinaciones para dar el mate con absoluta precisin. Si aqu, por ejemplo,

    DIAGRAMA N9 35

  • Para e 't

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    2 D

    esorganizadas es-

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    Si 2.

    . . R X D .. . . . , R 1 A3 D ' . X C mate.

  • 20 RUBN FINE 3 A5A++ RlR

    Si en vez de ello, 3 . . . . . . , R 3 A; 4. A 7 D, mate.

    4 A 7 D + R l D

    Si 4 . .. ... , R 1 A; 5 . A X e mate. 5 AXC + +

    Si analizamos las dos partidas que preceden, encontraremos varios puntos comunes. Ante todo, en un ataque para dar el mate, el material es de importancia secundaria. En ambos casos, las negras tenan una torre, o la dama o an ms de ventaja ; a pesar de eso, n o podan evitar el mate. En s e g u n d o lugar, la i d e a esencial es la de exponer al rey. En realidad, ninguna otra cosa cuenta. De be despojarse de defensores al rey contrario y mantenrselo despojado de ellos. Tercero y principal, todas las combinaciones deben calcularse con precisin. N o basta con sacrificar de acuerdo con principios generales segn los cuales la posicin expuesta del rey conducir automticamente al mate. Este es un error en que comnmente incurre el principiante, que hace sacrificios con vistas a : l. P4R, P 4 R; 2. A 4A, A 4A; 3. D 5 T, C 3 A D (? ?) y 4. D X P n-ate.

    Aparte de esas inadvertencias, tenemos, ante todo, el jaque doble que conduce al mate. El e j e m p l o ms sencillo puede verse en el diagrama 39. Despus de C 6 A j aque doble,

    mueve el rey negro ; 2. D 8 R mate. Debe notarse aqu que e X A, jaque doble, no es tan fuerte como e6A jaque doble. Otro caso tpico se ve en el diagrama 40. Aqu, el blanco juega l. A 5 e jaque doble, mueve el rey negro y 2. T 8 R mate:

    Un caso interesante en el que el jaque doble conduce a una caza del rey o a un mate rpido se muestra en el diagrama 41 . Aqu la continuacin es: l. A 7 A + ! RXA; 2. e5R jaque doble, R 2 R (si 2 . . . . . . , R 1 A; 3. D 7 A mate) ; 3. D 7 A+, R 3 D ; 4. e 4A +, R 4A; 5. D5D +, R5 e; 6. A 2 D+, R 5 T; 7. P 3 e mate. Al jaque doble, ha seguido la caza del rey.

    DIAGRAMA NQ 39

    DIAGRAMA NQ 40

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 21 DIAGRAMA N9 41

    DIAGRAMA N9 42

    El prximo tipo de combinacin es el que implica ganancia de materia o mate. Un ejemplo tpico de ste, se conoce con el nombre de mate de Lega l . E'n el diagrama 42 el negro acaba de cometer un error. La partida se ha desarrollado as : l. P 4 R, P 4 R; 2. e 3 A R, P 3 D; 3. A4A, A5e; 4. e3 A, P3eR (??) ; jugada que es castigada con la contestacin 5 e X P ! ! , porque si aho-ra 5 . ..... , AX D; 6. AXP+, R 2 R; 7. e 5 D mate.

    Existen m u c h a s variantes de la idea del Legal. Daremos unas pocas. En el diagrama 4 3 , d e s p u s d e l . e x e!, A X D ; 2 . A X P+, R 2 R;

    3. e 5 D mate, porque el caballo negro est clavado.

    Algunas veces puede darse el mate por medio de otra pieza. Esto se ve en el diagrama 44. Aqu, despus que l a s n e g r a s j ue g a n l. . . . . . , C X P ! ; 2. A X D (?) A X P+; 3. R 2 R, A 5 e mate. Aqu, como en tantos casos del legado de Legal, las blancas pueden jugar 2. D 2 R y contentarse con haber perdido slo un pen.

    Una lnea algo ms c o m p l i c a d a d e juego se ve en el diagrama 45. Despus de l. e X P ! , A X D; 2 . A X P +, D X A; 3. T 8 D mate. Esta es en realidad una combina-

    DIAGRAMA N9 43

    DIAGRAMA N9 44

  • 22 RUBN FINE DIAGRAMA N9 45

    DIAGRAMA N9 46

    cin del legado de Legal con un sacrificio de rodeo.

    Otro tipo de posicin en la que la alternativa es el mate o la prdida de material se ve en el diagrama 46. La continuacin aqu es :

    1 AXP+ R XA

    Si l. .. .. . , R 1 A; 2. C 6 R +

    2 C 6 R ! ! D l R

    Si 2 . .. . . . , R X C; seguira 3. D5D+, R 3 A; 4. D 5 A mate.

    3 C X P A D l D

    Despus de 3. . . . . . , D 1 A; las variantes son similares.

    DIAGRAMA N9 47

    4 D 5 D +

    Lo ms rpido de todo, pero las blancas tienen u na al t er nativa adecuada, con 4. D 5 T +, P 3 C; 5. D5D+, R3A; 6. A5C+, R 2C; 7. C 6 R +, ganando la dama.

    4 RlA Si 4 . . .. . . , R3A, .. . . . , 4. R3C;

    5. D 5 A, es mate.

    5 C6R+ RlR 6 CX P +

    Conduce al mate. Tambin es bastante bueno 6. C X D.

    6 7 C6R+ 8 DS T + 9 D SA++

    R lA R 2A R XC

    El tipo siguiente de sacrificio que podemos encontrar, es el de sacrificio para despejar. Como su nombre lo indica, en este tipo de sacrificio se despej an las lneas para permitir las amenazas de mate. Tomamos un ej emplo clsico de la partida Morphy-duque de Brunswick,.

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 23 Pars, .1858. A partir de la posicin DIAGRAMA NC? 5o del dtagrama 48, la continuacin fue:

    DIAGRAMA NQ 48

    1 C X P ! 2 A X P C + 3 0-0-0 ! 4 T X C + 5 T 1 D 6 A X T +

    P X C C D 2 D T 1 D T X T D 3 R C X A

    DIAGRAMA NQ 49

    7 nsc+!! cxn 8 T S D + +

  • 24 RUBN FINE El examen del diagrama 52 reve- jado hacia campo abierto, en el co

    la cmo puede producirse la combi- mienzo del juego, es casi seguro que nacin de rodeo. Si la dama blanca le ocurrir el desastre. Los ej emplos no cubriese la casilla de 3 R, el ne- son tan bonitos como instructivos. gro p o dr a jugar . . . . . D 6 R + y Las partidas en que un jugador dara el mate despus de A 2 R, con da ventaja de una pieza al otro sueD X A mate. La cuestin es desviar len ofrecer rica cosecha de esas coma la dama blanca. Veamos : binaciones, porque el jugador que la

    DIAGRAMA N 9 52

    1 . . . . . T 6 C ! ! 2 DXT

    Si 2. P X T, D 6 R + 2 . . . . . A 5 T! !

    Y ganan. El ltimo tipo de combinacin a

    considerar aqu es la caza del rey. Una vez que el rey haya sido empu-

    DIAGRAMA N9 53

    recibe no est bastante familiarizado con los principios del buen ajedrez. Aqu vemos una posicin de un juego en que se da una torre de ventaj a y que fue sucesivamente ganada por Walker, Morphy y Steinitz y tal vez por muchos otros. A partir del diagrama 53: .

    1 P X A ! c x n Con l. . . . . . , P A+ P; las negras

    pueden demorar algo ms la derrota, pero el final no sera tan bonito.

    2 P X P + + R 2 D 3 A 6 R + R 3 A 4 C 5 R + R 4 C 5 A 4 A + R 4 T 6 A 4 C + R 5 T 7 P X C + +

    Aunque no haya un mate inmediato a la vista, un rey en campo abierto corre peligro. En el diagrama 54, a primera vista, las blancas parecen relativamente seguras; sin embargo, no podrn librarse de caer en la red. La partida sigue as :

    DIAGRAMA NQ 54

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 25 1 2 R 3 T 3 P 6 R

    A 7 A + P 3 D + desc .

    Si 3. P 4 e, e 5 A mate Aun en el caso de que las blancas tratasen de entregar la dama con D 4 e, recibiran el mate con e 5 A +

    3 . . . . . 4 R 4 e

    e 5 A + e x P R

    Son muchas las amenazas aqu. Adems del jaque descubierto con el caballo, las negras disponen de . .. . . T 5 A +, seguido de T 5 T mate.

    5 P 3 e 6 R 5 e

    e X e + dese.

    Ya no hay escapatoria. Si 6. R 4 T, con T 5 A se forzar la :rpisma posicin.

    6 7 R 4 T 8 R 5 e

    T 4 A + T 5 A +

    Otra bonita variante de mate es: 8. R5T, P 3 C + ; 9. R6T, C2 A mate.

    8 9 R 5 T

    10 R 6 T 11 P X T

    e 3 R + P 3 e + T 5 T +! A 6 R + +

    No debe presumirse que un sacrificio para empujar al rey hacia campo abierto gane automticamente; hay muchas excepciones a la regla. Una muy conocida es el llamado ataque Fegatello, en la defensa de los dos caballos, que se produce des-

    pus de l. P 4 R, P 4 R; 2. e 3 A R, C 3AD; 3. A 4A , C 3A; 4. C5C, P 4D; 5. PXP, CXP; 6. CXP A (?) , R X e; 7. D 3 A + , R 3 R ( diagrama 55). N os llevara demasiado lejos tratar de agotar el anlisis de esta posicin, que ha demostrado que es preferible la partida de las negras. La variante principal es :

    DIAGRAMA N

  • 26 RUBN FINE Cuando el rey no ha enrocado, el

    punto ms vulnerable en la defensa es 2 A R. Cuando ha efectuado el enroque corto, el eslabn ms dbil en la cadena defensiva es 2 T R. Es contra este punto que se dirigen la mayora d e l as combinaciones de sacrificio.

    La posicin tpica puede verse en el diagrama 55 A. Las blancas continan en esta forma:

    DIAGRAMA 55 A

    Juegan las blancas y ganan

    1 A X P+! 2 C5C+

    RXA R3C

    Las negras no tienen nada bueno para elegir. Si aqu, 2 . . . . . . , R 1 C ; 3 . D 5 T y mate en la jugada siguiente, con D 7 T +

    3 D4C P4A

    Con cualquier otra jugada se pierde la dama, por el jaque descubierto.

    4 D 3 T Cualquier jugada 5 D7T++

    Es claro que este sacrificio slo es prac t i c a b l e cuando las negras no pueden defender su casilla de 2 T R. Cuando la pueden defender, el ataque de las blancas puede fracasar fcilmente. Por ejemplo, en el diagrama 56, el sacrificio es vano.

    DIAGRAMA NQ 56

    1 A X P (?) 2 C5C+

    3 D5T

    RXA R 1C A4AR

    y las blancas estn perdidas. Con frecuencia, el sacrificio del

    A R se combina con la accin a lo largo de la columna T R. Un ejemplo de ello se puede ver en el dia- grama 57.

    DIAGRAMA NQ 57

    1 AXP+! 2 C5C+

    RXA

    Hay tres continuaciones posibles:

    A. 2 AX C 3 P X A + dese. R 1 C

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 27 Si aqu las negras, 3 . . . . . . , R 3 C ; y las negras tienen que entregar su

    4. D 5 T +, R 4 A; 5. D 3 T +, R 3 C ; dama, para demorar algo e l mate. 6. D 7 T mate. Con frecuencia un s ac ri f i c i o es

    4 D 5 T 5 P 6 C

    P 3 A

    y mate en la jugada siguiente. B. 2 . . . . .

    3 D 5 T R 1 C T 1 R

    Con 3. . .... , A X C ; las negras pueden volver a la variante A.

    4 D 7 T+ R 1A 5 D S T+ +

    c. 2 R3C 3 P5T+ R3't

    4 CXPA++ R 2 T 5 c x n

    y ganan fcilmente. En la mayora de los casos, en el

    transcurso de las partidas, el sacrificio no quebranta inmediatamente al adversario, pues ello depende de que se pongan en accin las reservas. As, en el diagrama 58 la continuacin es:

    DIAGRAMA N9 58

    1 A X P + 2 D 5 T + 3 D X P + 4 T 3 C

    R X A R 1 C R 1 T

    seguido por otros, todos ellos posibles por la inminencia del mate. El diagrama 59 est tomado de la clebre partida C o l l e - O ' H anlon, Niza, 1930.

    DIAGRAMA N 9 59

    1 A X P + ! ! 2 C 5 C +

    RXA R3C

    Otro bonito ofrecimiento se produc e despus d e l a alternativa

    2. . .... , R 1 C ; 3. D 5 T, C 3 A ; 4. D X P+, Rl T; 5. T4R! !, CXT; 6 . D5T+ RlC ; 7. D7T+, RlA;

    8. D8T +, R2R; 9. DXP mate. 3 P 4 T R !

    Amenazando P 5 T + . 3 T l T

    (Vase el diagrama siguiente) 4 TXP+!! C3A

    Las negras se ven en la alternativa de perder su dama o recibir el mate. Despus d e P XT, seguira

    5. D3 D +, R3 A (si 5 ...... , R3T o R 4 T, las variantes son similares) ; 6 . D 3A + , R 3 C; 7. D7 A +, R3T;

    8. C X P + dese., seguido de mate muy poco despus.

    5 P 5 T + ! R 3 T

  • 28 RUBN FINE DIAGRAMA N9 60 1 A X P + !

    2 D 5 T + 3 D X P +

    R X A R l e R 2 T

    . Exactamente la misma p o s i e i n ocurri quince aos despus en la p ar t i d a Mikenas-Kashdan, Praga, 1931. Mikenas opt por el empate, despus de la retirada de R a 1 T, por medio del j aque perpetuo. En vez de ello, J anowski gan de este modo :

    4 e 7 D 5 T X e

    e X e (forzoso)

    que amenaza, s i mult n e a m e nt e , Si 5 . . . . . . , R X P; 6 . D 3 D +, TXA y DXA.

    R 3 T; y 7. e X P mate. 5 . . . . . A 3 A 6 T X A 6 e 4 R

    Naturalmente, 6 . e X P + d o ble es tambin muy bueno.

    6 D 4 T 7 e x P + + R 2 T 8 e 5 e + R l e 9 D 3 e + ! Abandonan .

    porque tienen que entregar ms material y no pueden evitar el mate.

    La pos i e i n mostrada en el diagrama 61 tiene una historia divertida. Primeramente se present en una partida Janowski-ehajes, Nueva York, 1916. Janowski continu:

    DIAGRAMA NY 61

    Una elegante jugada ; si 6 . ..... , A X T; 7. e X A + , que lleva pron-to al mate, mientras que si 6 . ... .. , A X e ; en vista de la presin de la T blanca, 7. D X A, ser demoledora.

    6 7 e 5 e + 8 P 4 e !

    A X P e D R 3 T P 3 e

    El r e y n o t i e n e a d n d e i r . Si 8 . . . . . . , R x e ; 9. D 5 T +, R 3 A; y 10. T 7 A mate.

    9 P 4 T R T I T DIAGRAMA 61 A

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 29 y ya no hay defensa contra P 3 A mate.

    JO D7T+! Y, d e s p u s de 10 . . . . . . , T X D ;

    11 . T X T mate. Algunas veces este sacrificio pue

    de rechazarse ventajosamente. P o r ejemplo, en el diagrama 62, d e una partida Ma rs h a l l - B u r n , Ostende, 1907, el blanco jug :

    DIAGRAMA N9 62

    1 AX P+ R X A (?)

    Despus de esto, est perdido. Con l. . . ... , R 1 A; poda haber refutado los sacrificios previos, que Marshall d e s cr i b i c o m o .

    2 C5C+ R3C

    Si 2. . .... , R 1 C ; la torre blanca puede oportunamente entrar en accin con un efecto d e v a s t a d or : 3. D X P, C 3 A; 4. DXP + , RlT; 5. 0-0-0 y gana.

    3 C (2 D) 3 A 4 C4T+ 5 C7T+ 6 C5A +

    7 CX A+ 8 C5A+ 9 P5 D+

    10 D X P + 11 0-0-0

    P4 R R3A R2 R

    R3 R R2 R R3 R RXC R5 R

    Como hemos visto, frecuentemente la consecuencia del sacrificio en 7 T R implica la llevada de la torre a la columna T R. As, en la posicin del diagra'ma 63 las blancas ganan en esta forma:

    DIAGRAMA N9 63

    1 AX C AXA

    Es indiferente que tomen con ei pen ; el mismo sacrificio gana.

    2 AXP+ RX A 3 T3T-+- R1C

    (Si 3. . . . . . , A 5 T ; 4. D 5 T + ) . 4 D5T

    Para detener el mate, las negras: debern jugar 4. . . . . . , A 5 T; y en- tregar el alfil y la dama.

    Una idea algo parecida se ilustra. en el diagrama 64, de una partida Keres-Fine, Ostende, 1937. Las blan- cas continuaron as :

    1 CX PT! 2 T3T

    e x e

    El caballo no puede moverse aho- ra, a causa del mate en 8 T. Las negras ensayaron una maniobra desesperada, pero sin xito.

  • 30 RUBN FINE DIAGRAMA N9 64

    2 D 8 A 3 DXC+ R 1 A 4 T (3) 3 R P 5 D 5 D8T+ R 2 R 6 D X P

    Amenazando D X P mate.

    6 7 D A + 8 P 6 R !

    T 1 A R 1 R

    Con el rey tan expuesto, la partida de las negras se derrumba. Podra haber c ont inuado 8 . ... .. , P X T; 9. PXP+, R2D; 10. A6R+R3D; 11. A X T + dese., R2A; 12. TXD+, pero las negras prefir ieron abandonar.

    Otra continuac in combinativa que desbarata las defensas del rey enemigo es el sacrificio de los dos alfiles. Esta se vio por primera vez en la clsica partida Lasker-Bauer, Amsterdam, 1889. A partir de la posicin del diagrama 65, Lasker continu:

    , !:

    Qu seguir ahora? 3 AXP!!!

    RX A R 1 C

    DIAGRAMA N9 65

    El ofrecimiento del segundo alfil es decisivo.

    3 ..... R X A

    Las negras no tienen otra alterna-tiva. Si 3 . . . . . . , P 3 A; 4. T 3 A con-duce rpidamente a dar el mate.

    4 D 4 C + ! R 2 T Naturalmente, si 4 ... .. . , R 3 A;

    5. D5C mate.

    5 T 3 A P 4 R Las negras apenas pueden demo

    rar el mate sacrificando su dama. Si la dama negra estuviese en la casilla 2 A D, el mate sera forzoso.

    6 T3T+ 7 TX D+ 8 D7 D

    D3T RXT

    Ganando uno de los alfiles. 8 A 3 A R

    9 D X A R 2 C 10 T 1 A R T D 1 C 11 D 7 D T R 1 D 12 D 4 C + R 1 A 13 P X P A 2 C Si 13 . ..... , A X P; 14. D 6 R, ga-

    na el alfil. 14 P 6 R T 2 C

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 31 15 D 6 C P 3 A 16 T X P + ! N o es necesaria, pero s eficaz. 16 17 D X A + 18 D 8 T + 19 D 7 T +

    AX T R 1 R R 2 R Abandonan

    Veinticinco aos despus, en San Petersburgo, en 1914, Tarrasch hizo el mismo sacrificio contra el archicrtico Nimzovich. La posicin crtica puede verse en el diagrama 66. Aqu, Tarrasch continu:

    DIAGRAMA N9 66

    1 2 R X A 3 R 1 C

    A X P + ! ! D 5 T+ AX P ! !

    Como en la partida Lasker-Bauer. Y, nuevamente como en esa partida, las blancas pueden retardar el mate sacrificando su dama, pero en ese caso pierden una p i ez a . As , si 4. . .... , R X A; seguira 4. . .... , D5 C + ; 5. R2T, T4D; 6. D X P A, D5 A+; 7. R2 C, TXD; 8. T X T, D X C. Nimzovich ensay. aqu una defensa diferente.

    4 P 3 A T R 1 R!

    Amenazando D 6 C, y si entonces C4R, T X C.

    5 C 4 R

    N o era posible tomar el alfil, pues si RXA, T7R+.

    5 6 R 2 A

    D 8 T + AX T

    Las blancas ya tienen que recurrir a maniobras desesperadas. E's claro que si 7. T X A, las negras contestan D 7 T +, ganando la dama.

    7 P 5 D

    Tratando de parar una amenaza.

    7 . . . . . P 4 A! 8 D 3 A

    Amenazando mate en 7 C. Naturalmente, las negras pueden conjurar fcilmente la amenaza.

    8 9 R 3 R

    10 P X T

    D7 C + T X C + P 5 A +

    Puede servir de consuelo al aficionado ver que el gran maestro no acert con el camino ms corto. Con 10 . ..... , D 6 C +; daba el mate en tres jugada s en es ta f orma: 11. R2D, D7 A +; 12. R1D, D7R mate. Con todo, el detalle no tiene

    mayor importancia.

    11 R X P 12 R 5 R 13 R 6 R 14 R7 D

    T I A + D7 T + T l R + A 4 C + +

    El sacrificio de los dos alfiles se produce muy rara vez. Damos aqu otro ejemplo, tomado de la partida Koltanowsky-Defosse, campeonato de Blgica, 1936. En el diagrama 67 Koltanowsky (esta vez v iendo el tablero), jug:

    1 AX P + 2 D 5 T + 3 AX P !

    RX A R 1 C RX A

  • .32 RUBN FINE DIAGRAMA N9 67

    Koltanowsky indica que si 3 . . . .. . , P 3 A; se gana con 4. D 8 T +, R 2 A; .5. A X T, A X A; 6. D 5 T +, R 2 R; '7. D 7 T +, R 3 D; 8. T X A +, etc.

    4 D 5 C + 5 T 4 D

    R 2 T

    Como en el caso anterior, las blancas tienen que en treg ar su dama :para evitar el mate.

    5 6 R l T 7 TX D 8 DX A 9 T 5 R

    A7 T + D S A R AX T T l C R

    Aunque la dama no atac, las negras se encuentran expuestas a demasiadas amenazas de mate. Por ejemplo, si 9 . .. ... , R2e; seguira 10. D 5 e +, R 2 T; 11. D 6 A, y la amenaza de T 5 T + es fatal. Las negras abandonaron.

    Fuera del sacrificio en la casilla '7 T R , ha y p o e as posibilidades de abrirse paso a travs de la posicin -de un rey enrocado, cuando los peones de la defensa no se han movido. Esas posibilidades slo se presentan en ciertos casos especiales; no po-dra realmente formularse reglas respecto a ellas.

    Un tipo de combinacin para dar el mate comprende un mate con dos caballos. El modelo clsico es una partida Marache-Morphy, jugada en Nueva Orlens, en 1857. A partir de la posicin del d i a g r a m a 68, Morphy jug:

    DIAGRAMA N9 68

    1 . . . . . C 6 C R ! ! !

    Las blancas abandonaron, pues si 2. DXD, e (de 5D) 7R mate. Cualquiera otra jugada que hagan las blancas, les har perder _la dama o recibir el mate.

    Una idea anloga apareci en la clebre parti d a Le vi tzki-Marshall, Breslau, 1912. En la posicin del diagrama 69, Marshall jug:

    DIAGRAMA N9 69

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 3 3 1 ..... D 6 e R ! ! !

    Las blancas abandonaron, puesto que en todas las variantes razonables estn perdidas . Las posibilidades son:

    A.- 2. P T X D, e 7 R mate. B. - 2. D X D, e 7 R +; 3. R 1 T,

    e X D +; 4. R 1 e, e 7 R +; 5. R 1 T , T 6 T D; y el negro queda con una fuerte pieza de ventaja.

    C.-. P A X D, e 7 R +-; 3. R 1 T, T X T mate.

    La historia volvi a repetirse. En una exhibicin de partidas a ciegas, Alekh i n e , jugando contra Supico, lleg a la posicin del diagrama 70. La misma jugada que en el caso anterior, gana.

    DIAGRAMA NI? 70

    1 D 6 e R ! ! ! Las principales variantes son: A. - 1 . .... . , P AXD; 2. e xP+,

    P X e; 3. T 3 T +, D 5 T; 4. T X D mate.

    B.-l . .. . . . , P T X D; 2. T 3 T mate.

    C.-l . . . . . . , A X A; 2. D X P e mate.

    D.__::_ l . . . . . . , D X e; 2. D X P e n1ate.

    Algunas veces, la casilla 2 C R de la defensa es especialmente vulne-

    rable al ataque. Un caso de ello se ve en el diagrama 71 (SpielmannGrnfeld, Carlsbad, 1929). Las blancas jugaron:

    DIAGRAMA NI? 71

    1 A X P e ! 2 D5 e +

    R X A C 3 e

    Si 2. . . . . . , R 1 T ; 3. D 6 A + , R 1 C; 4. P 6 T y mate en seguida.

    3 P 6 T + Y d es p u s de 3 . . . . . . , R 1 C;

    4. D 6 A, el mate es inevitable.

    Otra posibilidad puede verse en el diagrama 72, de la partida Spielmann - Tartakower, Munich, 1909. Spielmann continu :

    DIAGRAMA NI? 72

  • 34 RUBN FINE 1 e x P e D 1 D

    Acep tar el s a cri fi c io lleva al mate, por que despus de l . . . . . . , R X C; 2. C 5 A + , R 1 C ; 3. D X C.

    2 e (7 e) 5 A Como el rey negro est expuesto,

    las blancas tienen ahora un ataque ganador. La amenaza inmediata es A 5 C R.

    2 3 D 6 T 4 e 3 A !

    . 5 P X A 6 e s e 7 e 7 R +

    e 3 e e 1 R A X A + D 3 A D 1 T

    El mate es forzoso , despus de 7 . . . . . . , C X C; 8. A X P +

    Cuando el alfil concentra su presin sobre la casilla 2 C R de la defensa, se presentan las posibilidades de sacrificio. Un hermoso ejemplo se ve en el diagrama 73, de una partida Nielsen- Nimzovich, Copenhague, 1930 (en una exhibicin de simultneas) . Nimzovich jug :

    DIAGRAMA N9 73

    mate. El negro estaba obligado a sacr i fi c a r su dama y, por lo ta nto, abandon.

    Como vimos en un captulo anteror, si el alfil puede mantenerse en la gran diagonal y la torre ocupar la casilla 7 C R, un jaque descubierto puede resultar devastador. De esta idea se hace uso en el diagrama 74, tomado de una partida AlekhineSterk, Budapest, 1921 . Alekhine hizo la siguiente inesperada movida:

    DIAGRAMA N 9 74

    1 A 6 A ! ! T R 1 A Se produce la combinacin clsi

    ca despus de l. . . . . . , T D 1 A; 2. T 4 C ! ! , D X D; 3 . T X P + , R 1 T ; 4. T 6 C + dese. y mate.

    2 D 5 R ! ! T 4 A Desesperacin. Si 2. . . . . . , T X T;

    3 . D 5 C R, conduce rpidamente al mate as : 3 . . . . . . , R 1 A; 4. D X P +, R 1 R; 5. C 5 R !

    3 D 3 e P 3 e 4 T X C

    1 T 7 D ! T D 1 D (forzosa) Las blancas han ganado una pieza 2 T X A ! 3 D 6 A ! !

    T X T y mantienen sus amenazas de mate.

    La j ugada brillante. Si 3 . . . . . . , P X D ; 4. T 4 C +, R 1 T; 5. A X P

    El resto es sencillo. 4

    5 T 1 A R D 6 D D 4 A

  • 6 D 4 A EL MEDIO JUEGO

    7 D 6 T D 7 A

    EN AJEDREZ

    y mat . . . . . t

    Los sacrificios 35

    e mu

    ornar vari en 6 A R

    y poco despu , algunos t

    as f o rmas D pueden

    Un s

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    pa acrlficio en 1

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    as blancas . . n el dia-

    orre y el alfil columnas ar

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    . . . ... ' e 3 C. me latamente

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    avasi-Sacco . '

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    ana. _Pero . Havasi jug , .

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    7 D 3 D T 7 e '

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    8 R 1 C T X p +

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    e haber

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    u mstructivo. Enlal, por-

    hle do- da el m

    . . . . . . ' T 1 C R a alter-

    y mate. 3. T 8 Date con 2. D X p ;

    el blanco

    + , T X T 4 T +, T X D

    ' . X T mate '

  • 36 RUBN FINE DIAGRAMA N'? 77

    2 P X P 3 T 8 D ! 4 T X T 5 D 7 C + +

    T l C R T (l A) X T T X T

    Cuando el alfil tiene el dominio de la gran diagonal, pueden pres:r:tarse diferentes interesantes c

    to 1-. Ya hemos visto an enor-nacwnes. 71 7 3 mente a lgunas, (diagrama ' md 74) Otra se muestra en el dtagra

    78 . . Las blancas dan mate en cuatro jugadas:

    DIAGRAMA N Q 7 8

    1 T X P + 2 T S C + + 3 T I C + 4 T X D ++

    R l T R X T . D cubre el +

    Otra b o n i t a comJuaci_l que se hace posible por el domini? de la gran diagonal se ve n e: dwgra

    l

    79 de la partida Rabinovich-Gog se: lVIosc , 1939.

    DIAGRAMA NQ 79

    1 D 6 T ! !

    Las negras abandonara?, porque e l mate es inevitable. S l. D. e X p mate ' y Sl l. . . . . . ' P X '

    A X D con las D 3 A; sencillamente ' mismas amenazas. . . , d S. b . n la ms segura posicwn e-fenive para el rey consiste en estar

    ondido detrs de los tres peones e no se hayan movido, esto comporta un peligro, el del mate en la oc-

    DIAGRAMA NQ 80

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 37 tava fila. La posicin elemental se muestra en el diagrama 8 O . Aqu , las blancas dan el mate en dos jugadas con:

    1 T S R + T X T 2 T X T + +

    DIAGRAMA N9 81

    En el diagrama 81 , l a p o s i c i n mostrada en e l diagrama 80 s e obtiene por m e di o d e l .sacrificio, en esta forma:

    1 D X T + 2 T S R + 3 T X D + +

    D X D D X T

    Evidentemente, cuando la octava fila es vulnerable a los ataques de la artillera pesada, est abierto el

    DIAGRAMA N9 82

    camino para las combinaciones. Daremos algunos ejemplos. El diagrama 82 es similar a los dos casos anteriores .

    Las blancas ganan con :

    1 D X T + R X D 2 T S R + +

    Es natural que en las partidas verdaderas, las combinaciones son, por lo comn, ms complicadas. Una de las ms extraordinariamente hermosas que se hayan visto jams se p r e s en t en una partida AdamsTorre, en Nueva Orlens, jugada en 1925. En el d i a g r a m a 83, la continuacin fue :

    DIAGRAMA N9 83

    l. D 4 C R ! La dama no puede ser t omada ,

    por l a amenaza de mate : l. . . . . . , D X D; 2. T X T, seguido de mate.

    1 . . . . . D 4 C 2 D 4 A D ! !

    Cada vez ms interesante. Tampoco ahora puede ser tomada la dama por la amenaza de mate.

    2 D 2 D 3 D 7 A ! ! D 4 C 4 P 4 T D D X P T 5 T 4 R D 4 C o D X P C !

  • 38 RUBN FINE La dama, por fin, no tiene movi

    da satisfactoria y las negras tendrn que sufrir fuerte prdida de m a terial para evitar el mate.

    Queda por mencionar un ltimo tipo de combinacin contra el rey defendido por peones que no se han movido, y es el del sacrificio de la casilla 2 A R. Este comporta, como en los otros casos, la colaboracin de varias piezas y se hace posible por las amenazas de mate en la octava fila. La posicin modelo puede verse en el diagrama 84.

    DIAGRAMA NI? 84

    I D X P + T X D 2 T S R + +

    DIAGRAMA NI? 85

    Un tema similar se ofrece en el diagrama 85, tomado de una partida Thomas-Marshall, Hamburgo, 1930. Thomas sorprendi a su eminente contrincante con:

    I D X P + T X D 2 T S A + A I R 3 T X A + T I A 4 T X T + +

    Otros dos ejemplos ilustran nuevas variantes diferentes. El diagrama 86 est tomado de una pa r t i d a de Anderssen.

    DIAGRAMA NI? 86

    I D X P + T X D 2 T S R + T I A 3 T X T + R X T 4 T S R + +

    DIAGRAMA NI? 87

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 39 Capab lan c a es el autor de este de los peones que no se hayan roo

    ejemplo, tomado de la partida Capa- vido. Esto explica por qu esa disblanca-Tanerow, Nueva York, 1910. posicin es, con mucho, la posicin Capablanca jug : defensiva ms segura.

    1 C 6 T + 2 D X A ! 3 C X P + 4 ' T 8 D

    R 1 T D X D T X C

    y mate inmediatamente despus.

    Resumiendo lo dicho en esta seccin, cuando el rey de la defensa est colocado detrs de tres peones que no se han movido hay algunas combinaciones tpicas con las que el a tacan te puede dar el m a te. Son ellas :

    1 .- Sacrificio en la casilla T 7 R. (Diagramas 55 A-67) . Por lo comn, se sacrifica al alfil para despejar las lneas para la dama, apoyada por otras piezas. El atacante contina

    su presin en la columna torre abierta. 2.- Sacrificio en 7 C R. (Diagra

    mas 71-79) . Puede ofrecerse cualquier pieza. El atacante contina presionando en la columna abierta de CR. El pen de la defensa, en 2 C R, puede eliminarse por medio de un jaque o un ataque en 6 A R, o 6 T R.

    3.- Sacrificio en la octava fila. (Diagramas 80-83). Este se realiza por medio de la artillera pesada.

    4.- Sacrificio en 7 A R. (Diagramas 84-87) . Este se combina con un mate en la octava fila.

    De esta enumeracin y de los ejemplos citados resulta aparente que no es necesaria una abrumadora masa de piezas enemigas para abrirse paso directamente a travs

    Cuando los peones de la defensa estn en 2 A R, 2 C R y 2 T R, el pen negro de 2 T R es un blanco natural. El principio, para el atacante es: Acumular piezas y sacrificar en el momento apropiado.

    U na posicin modelo para el sacrificio se muestra en el diagrama 88.

    DIAGRAMA N

  • 40 RUBN FINE see el dominio de la gran diagonal. As, en el diagrama 89, las blancas juegan:

    DIAGRAMA N9 89

    1 C X P ! Toda jugada que no sea sa, no

    hace sino demorar el m a te por poco tiempo.

    2 D 4 C + 3 D 5 A ! 4 A X C 5 D 7 T + +

    R 1 T R 1 C A X A

    Un hermoso sacrificio de dama conduce al mate, en la posicin mostrada en el diagrama 90, tomado de la partida Sp i elmann-L'Hermet , Magdeburgo, 1927.

    DIAGRAMA N9 90

    Spielmann jug :

    1 D X P ! ! La alternativa es l . . . . . . , P 3 A;

    2. P X P + dese., que no es mejor. 2 P X P + R 1 A 3 T S C + ! !

    Una bonita segunda sorpresa . . .

    3 R X T 4 P 7 T + R 1 A 5 P 8 T = D ++

    Cuando el P T R ha avanzado a 3 T R, el dominio que el enemigo tjene de l a diagonal 1 C D - T 7 R, se ve reforzado por dicho avance. Una posicin modelo para el ataque se ve en el diagrama 91 . Las negras tienen que entregar material p a r a detener el mate.

    DIAGRAMA N9 91

    1 . . . . . P 5 A ?

    podra seguir

    2 D 7 T + R 1 A 3 D S T + +

    Despus de l. . . . . . , P 3 C ; forzoso para parar el mate, 2. P X P es decisivo.

    Una bonita i lus t r a c i n de esta idea se muestra en el diagrama 92,

  • 41

  • 42 RUBN FINE DIAGRAMA NC? 95

    Juegan las blancas y dan mate en dos jugadas

    Las amenazas de mate se producen, naturalmente, en 7 C R. Una posicin modelo se ve en el diagrama 95.

    1 D 6 T El mate es forzoso.

    La defensa puede mantener su posicin cubriendo su casilla de 2 C R. Hay un caso importante en el que resulta inadecuado cubrirla. En el diagrama 96 juegan las b l an c as y dan mate as :

    DIAGRAMA NC? 96

    1 D 6 T 2 T 3 A

    T 1 C R

    Ahora se amenaza D X P T +, R X D y T 3 T mate.

    2 . . . . . P 4 C 3 T 3 T

    y mate a la jugada siguiente, o a las dos jugadas, si las negras optan por dar un jaque de despecho.

    Aun cuando las negras mantengan bien su casilla de 2 C R, pueden presentarse brillantes combinaciones. Damos aqu unas pocas. La posicin del diagrama 97 se present en una partida entre los maestros que viajaban para participar en el torneo internacional de equipos realizado en Buenos Aires en 1939.

    DIAGRAMA NC? 97

    1 C 5 C ! ! y las negras abandonaron, pues si

    l. ... . . , D X D; 2. C X P mate. Con cua lqu i er otra jugada el mate es igualmente inevitable, por ejemplo,

    l . ... . . , T 2 C ; 2. T 8 D ! ; D X T ; 3. D X T mate.

    Es natural que el alfil puede ser sustitudo por el pen en 6 A R. En lo esencial, la misma clase de posicin se presenta cuando el pen est en 6 T R y la dama en 6 A R.

    Como ya hemos dicho, la defensa en esta posicin deber poder cubrir su casilla 2 C R. Damos a continua-

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 43 cin var i a s otras posiciones en las E'n el diagrama 99, la primera meque se rompe, p o r la fuer z a , esta dida, nuevamente, es eliminar la cu-defensa. bierta de la casilla decisiva.

    DIAGRAMA N9 9 8

    En el diagrama 98 las blancas continuaron :

    1 T X A ! D X T 2 A 5 C ! !

    Si aqu 2 . . . . . . , D X A; 3. A 6 A y mate a la siguiente.

    2 3 A X T 4 A 6 A 5 D X D + 6 T 1 D

    D 1 A D X A D 1 A R X D Abandonan

    Las negras tienen que entregar el alfil para dtener el mate.

    DIAGRAMA N9 99

    1 T X A ! T X T 2 D 4 D D 4 R

    Parecera que las negras hubieran encontrado una defensa adecuada.

    3 T 1 R ! !

    Pero no la haban encontrado. Si toman la dama, vendr 4. T X T mate.

    En conjuncin con el dominio de la gran diagonal por el alfil, las blancas pueden construir varios tipos de amenaza de mate.

    Nuestro primer e j emplo implica un jaque de caballo en 6 T R. Esto llega a ocurrir, a partir del diagrama 1 00, como sigue:

    DIAGRAMA N9 100

    1 C 6 A + R 1 T

    Si l. . . . . . , R 2 e ; 2. e 5 T jaque doble, R 1 e; D 7 C mate.

    2 C 4 C + ! 3 A 6 A + 4 C 6 T + +

    c x n R l C

  • 44 RUBN FINE Una combinacin notable se pre- den evitar el mate por medio de una

    senta en el diagrama 1 01 . Las blan- captura, ya sea de la dama o del al-eas jugaron : fil, u ocupando la casilla de 2 e R.

    DIAGRAMA N9 101 Si las piezas b 1 anea s e s t n muy

    1 C 5 A ! ! Que da lugar a d ivers as bo

    nitas variantes. Si l . . . . . . , P X e ; 2 . D 4 e + ! seguido de mate en la columna e R. Y si l . . . . . . , D 3 R; 2. e 6 T mate. En vista de ello, las negras ensayaron:

    1 . . . . . DX T pensando que si tomaban su dama, tomaran la del adversario . . .

    2 D 5 T ! ! y las negras abandonaron, pues no puede contrarrestarse este segundo sacrificio. Si 2 . . . . . , D X D ; 3. e 7 R rDate. Si 2 . . . . . . , P X e ; 3. D X D. Hasta el contrasacrificio de 2. . . .. . , T 8 D; se contesta con el mate de

    C 6 T. Aparte de un

    mate en 7 C R, el dominio de la gran diagonal sug i e re tambin un m a te en 8 T R. Las amenazas ms fuertes se producen cuan

    do la dama est apoyada por el alfil. En esa posicin las negras pue-

    otrs, puede ser posible una interposicin para bloquear la diagonal.

    Para el mate en 8 T R, la posicin modelo se p r oduj o realmente una vez, en una partida Euwe-Loman, Rotterdam, 1923. A par t i r del diagrama 1 02, Euwe jug :

    DIAGRAMA N9 102

    1 D S T + A X D 2 T X A + +

    Por lo comn, son necesarios algunos sacrificios para abrirse paso hacia el rey enemigo. Damos algunos ejemplos. En el d i a g ra m a 103, to-

    DIAGRAMA N9 103

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 45 mado de l a partida B l a ckburne Schwartz, Berln, 1881 , Blackburne se abri paso en una sorprendentemente rpida forma :

    1 n x C ! ! 2 T X P ! 3 T X P

    A X D P X T

    y 1nate a la siguiente, en 8 T R.

    U na idea similar se concret en la par t id a Teichmann-Mieses, Car lsbad, 1907. A partir del diagrama 1 04, las blancas dan mate en tres jugadas :

    DIAGRAMA N9 104

    1 T X P + P X T 2 D X P + R 1 C 3 D S T + +

    DIAGRAMA N9 105

    Spielmann, el gran maestro atacante, es el autor de nuestro ejemplo siguiente. En el diagrama 1 O 5 , tomado de una partida suya contra Honlinger, en Viena, 1929, l jug :

    1 C 7 R + ! 2 D X P T + ! ! 3 T5 T + 4 T S T + +

    n x c R X D R 1 C

    El jaque que permite a la torre penetrar en 8 T es un arma poderosa. El diagrama 1 06 es otro ejemplo tpico, t omado de una partida Beli tzmann-R u binstein, V a r s o vi a , 1917. Las negras jugaron:

    DIAGRAMA N9 106

    1 2 R X D 3 R l C

    D X P T + ! P X P + T S T + +

    Cuando los dos alfiles estn dirigidos hacia el rey enemigo, es posible un mate en 7 T R. Este caso se ilustra en el diagrama 107. Las blancas dan mate con

    1 D X P ! P X D 2 A 7 T + +

    U na idea similar se concret en una pa r t i da Flohr-Pitschak, Bilin, HlO. A partir d e l d i a g ra m a 1 0 8 , P i tschak jug :

  • 46 RUBN FINE DIAGRAMA N9 107

    DIAGRAMA N9 108

    1 2 e (1 R) 3 A 3 e x e 4 P X D

    D X P ! e x e + A x e A 7 T + +

    Ms complicadas posibilidades de sacrificio pueden producirse en diversas posiciones cuando la casilla 2 e R de la defensa no est protegida. Aqu damos algunos ejemplos. En el diagrama 109, las blancas dan mate en la forma siguiente:

    1 T X P +

    Si ahora l. . . . . . , P T X T; 2. D 8 T mate ; y si l. . . . . . , P A X T; 2. e 7 R, jaque doble y mate.

    DIAGRAMA N9 109

    DIAGRAMA N9 110

    En el diagrama 1 1 0, el final fue as :

    1 2 R X D 3 R i e

    Si 3. R 1 R, T 7 R + ; 4. R 1 D) T 8 A mate.

    3 . . . . T S A + 4 R 2 e T (l A) 7 A + +

    La vulnerabilidad d e l a c as i l l a 2 A R de l a defensa se pone de manifiesto en el diagrama 1 1 1 , tomado de una partida Janowsky y So lda,tenkow, c on tra Lasker y Tauben ..

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 47 haus, Pars, 1909. Los aliados blancos jugaron:

    DIAGRAMA N9 1 1 1

    R X A P r o l o n g a l a agona. Si l . . . . . . ,

    T X A; 2. T 8 R + , T 1 A; 3. D X T mate.

    2 D X P T + 3 D 4 T + 4 T 7 R + 5 D 4 D + 6 D S T + ! 7 T l R + 8 D 4 D + + : --. -

    R 3 A R 2 C T 2 A R 1 A R X T R 3 D

    El diagrama 112, a primera vista p a r e c e completamente inofensivo ; las negras pueden consolidar su po-

    DIAGRAMA N9 112

    sicin con . . . . . , D 2 D ; con . . . . . , T 3 R; o con . . . . . , P 3 A; obtenien-do s a t i s f a c t o r i a igualdad. Pero se presenta un rudo despertar :

    1 D X T + 2 A 6 T + 3 T S R + +

    R X D R 1 C

    Otra manera de explotar la debilidad del rey se ve en el diagrama 1 1 3, celada que resulta de la apertura Ruy Lpez.

    DIAGRAMA N9 113

    1 T 5 T R ! ! 2 D 6 A + +

    Cuando el pen de 2 A R de la defensa est ausente, pueden presentarse amenazas de mate si el atacante tiene el dominio de la gran diagonal. Aqu mostramos la posicin final de mate. Es evidente que, p::tra llegar a esa posicin f in a l , las b l a n c a s debern forzar la eliminacin del P T R. Esto puede hacerse en una de dos formas -ya sea por un jaque en 6 e, o por un sacrificio (por lo comn de torre o dama) , en T 7 R. Estas dos posibilidades pueden apre-

  • 48 RUBN FINE ciarse en los diagramas 1 1 4 y 1 1 5. En el diagrama 1 1 4 el mate se da como sigue :

    DIAGRAMA N9 114

    11 .ft

    jl. 11

    fi i R R 1 C 6 C + P X C 2 T 1 T + +

    mientras que en el d i a g r a m a 1 1 5, las blancas dan el m a te as :

    DIAGRAMA N9 1 1 5

    1 T X P + R X T 2 T I T + +

    A m h a s posibilidades se v e n con frecuencia en la prctica del juego. Daremos algunos ej emplos.

    El diagrama 1 1 6 lo da el italiano Greco en su manual escrito en 1619.

    DIAGRAMA N9 1 1 6

    1 T X C + R X T 2 D 5 T + +

    El j aque doble es un expediente u s a d o con frecuencia para abrirse paso a travs de las defensas. En la posicin que muestra el d i a g r a m a 1 1 7, el temible Marshall fue vencido por un desconocido llamado J ohnston, ( p er o d e b e advertirse que la partida se jug en 1899, poca en que ambos eran desconocidos) .

    DIAGRAMA N9 117

    1 C 7 R + doble 2 C 6 C + 3 P T X C + 4 T X D -f - +

    R 1 T P X C D 5 T

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 4 9 Hasta los grandes maestros caen

    en celadas. He aqu una elemental , tomada de una partida G r n f e l d Torre, Baden-Baden, 1925. En e l diagrama 1 1 8 Torre j ug:

    DIAGRAMA N 9 118

    1 . . . . . A 4 A + 2 R 1 T

    Puede demorar el mate con T 2 A. 2 3 P X e 4 A 3 T

    e x P + D 3 T + D X A + +

    A travs de los tiempos, las combinaciones de sacrificio como las que se muestran en los diagramas 1 1 4 115 se han presentado repetidas ve-

    DIAGRAMA NI? 1 19

    ces. Daremos algunos otros ejemplos. interesantes. El diagrama 119 e s t tomado de una partida AnderssenLange, Breslau, 1859.

    1 2 R l T 3 P X e

    A 4 A + e 6 e + ! D 4 e

    Amenazando D 3 T mate. 4 T 5 A !

    Aparentemente, una defensa adecuada.

    4 . . . . . P 4 T R ! ! N o era adecuada. Si las b 1 a'n e a S

    toman la dama, reciben el mate con P X P jaque descubierto.

    5 P X P T D X T Todava amenazando mate.

    6 P 4 e D 7 A Amenazando nuevamente c o n e l

    mate.

    7 P 3 e 8 D 1 A

    D x P e D X P e

    Cada movida de las negras amenaza un nuevo mate.

    9 D X P + Qu es esto? N a da ms que unos

    pocos jaques de despecho.

    9 10 A X P + 11 A 2 e 12 A 3 T

    R X D R 2 R D 5 T + D X A + +

    La ltima versin est tomada de una partida Denker-Botvinnik, d el match>> por radio EE. UU.-U.R.S.S, disputado en 1945. E'n el d i a g ra m a 120, Botvinnik jug :

    1 2 R X T 3 D 4 T 4 A X T

    T X P + ! T l T + T X D + D 5 A

  • 50 RUBN FINE DIAGRAMA N9 120

    Las blancas abandonaron, porque uno de los alfiles est perdido.

    Otras combinaciones de mate pueden agruparse en torno de las posiciones de peones que se presenten. Discutiremos este punto detalladamente ms adelante, pero el lector debera adquirir el hbito de observar las caractersticas de la estructura de una p o s i c i n (particularmente los peones) y de imaginar, en

    aqullas, las posibilidades combinativas.

    Cuando la defensa tiene slo dos peones, en 2 A R y 2 T R, restringiendo al rey, est expuesta a ser

    blanco de las combinaciones del atacante.

    Un mate t p i c o que se presenta slo en esta posicin se ve en el diagrama 121 . Aqu, el procedimiento es :

    1 A X P + R 1 T 2 A 6 C + R 1 C 3 D 7 T + R 1 A 4 D X P + +

    Hay, naturalmente, otras posibilidades, pero que no corresponden a una agrupacin sistemtica. El uso de la columna abierta de C R se discutir a continuacin.

    DIAGRAMA N9 1 2 1

    Cuando los peones de la defensa estn en 2 A R, 3 A R y 2 T R, el poder de coordinacin de las piezas de la defensa se encuentra bloqueado, lo que permite al atacante dar distintos y bonitos mates. La concentracin de artillera pesada contra las columnas C R y T R est naturalmente indicada. As, en la posicin modelo del diagrama 122, las blancas dan mate en tres jugadas.

    DIAGRAMA N9 122

    1 D X P T + ! R X D 2 T 4 A Cualq. jugada 3 T 4 T + +

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 51 U na vez que las piezas fuertes es

    tn a mano, la defensa, por lo general, se dificulta. El diagrama 123 est tomado de una partida K a s h d a n Steiner, Nueva York, 1942. Las blancas, frente a las distintas amenazas, jugaron errneamente

    DIAGRAMA NQ 123

    1 P 6 A (?)

    El anlisis p o s t e r i o r revel que l . A 2 R, era bastante para permitir el empate.

    1 . . . . . D 6 T !

    Y ahora tienen que perder la dama para detener el mate.

    2 A 2 R 3 D 1 C 4 T X T 5 R X T 6 A 5 C

    T 7 C T X D + T X T + D 1 A D 2 A

    y las negras ganaron el final. Varias otras a m e n a z a s de mate

    pueden prepararse con el dominio de las columnas abiertas. El diagrama 123 A est tomado de una partida de C a p a b l a n c a , en la que l jug:

    1 T 7 R ! ! D X T 2 C X A

    DIAGRAMA NQ 123 A

    Y ahora el mate es i n e v i t a b l e . 2 . . . . . . , D 1 A ; 3 . T X P + , R X T; 4. D 5 T +, D 3 T; 5. D X D mate.

    Aun los maestros suelen no acertar con la forma de forzar el mate. El diagrama 124 est tomado de una partida Henneberger-Bernstein, Zurich, 1934, que termin e m p a t a d a. Henneberger no atin a ver este elegante mate :

    DIAGRAMA NQ 124

    1 A 7 C + 2 T S A + 3 D 4 C ! ! 4 T X D

    T X A T 1 C D 1 D

    Y es mate i n m e d i a t a m e n t e ; si 4 . . . . . . , A X C; 5. D X T mate ; si cualquier otra jugada, 5. D 7 C mate.

  • 52 RUBN FINE En e o 1 a b o r a e i n con el alfil en DIAGRAMA N9 126

    6 T R puede forzarse un m a te en la columna C R. {Wfl" ':.".: Tw' , % ' , IWJ ...

    - Juegan las blancas y dan mate

    en 3 jugadas

    Juegan las blancas :

    1 T I C + 2 A 7 C + 3 A X P + +

    R I T R I C

    Esta idea fue empleada por Pillsbury en una celada que l invent en el gambito de dama. Despus de 16 movidas se lle g a la posicin del diagrama 125.

    1 D 3 A ! . . . . . ' y las negras abandonaron, puesto que si l. . . . . . , D X D ; el blanco da mate como en el caso anterior, con 2. T 1 C + y, si hacen cualquier otra jugada, pierden la torre.

    DIAGRAMA N9 125

    El comando de una columna abier ta basta para proporcionar abundan t es amenazas de mate. El diagrama 126 es un ej emplo, t o m a d o del gambito de dama. Las blancas juegan :

    1 A 7 T + 2 A 6 C + 3 T 8 T + !

    R I T R I C R X T

    4 D 5 T + R I C 5 D 7 T + +

    Con frecuencia el dominio de una columna abierta puede asegurarse artificialmente. En el diagrama 127, d e u n a p ar t i d a Menchik-Thomas Londres, 1932, las blancas ganarm con :

    DIAGRAMA N9 127

    1 D X P + ! 2 T I T + 3 T X A + +

    R X D A 6 T

    El rey negro est excluido de la columna C R por su propia torre y por el pen blanco.

    Una idea algo semejante puede apreciarse en el diagrama 128. Aqu, el mate se efecta por medio de:

  • EGO EN AJEDREZ

    S negras tienn EL MEDIO JU

    York, 1933, la ll de ventJa

    Nueva dos caba os

    'an JU-

    MA N Iza - una torre y

    !lo slo podn , un

    DIAGRA

    esar de e , "ble l o gra r - - 1!1, ' :d lo ':ej;ti':'continu : 53

    "" - f. !diii empate. L P A NQ

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    .

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    '7 .jj .W'"%!J fL.

    . *. w. "JJ, - : ta 00 ,, . V@ q dllr"" W8,'7@N.... .N N ;j

    . 61

    R X D t. -- WfY: 1 o s e +

    T X T

    g -- -8 R +

    '!!\ :J, T X T

    t , abiertas,

    2 T + +

    WL....

    e X p ( ?) l , e as es an

    por 1 . . . . . R 3 T

    Cuando las m . se presentan 9

    2 T 1 e + R 2 T

    "ficios casi d" grama 12 ,

    R + T

    J os sacn As en el tata manera: 3 D 3

    R 3

    "%.1. A +

    , " T 7. D 7 , .. . ,

    & !if"'' "IJ D 3 , drn que 11"1"" IJ

    ;--5."

    --. ":ni:ta rs e co; !:J'--".W Pn -... dar j aque pe . Id . '!"-- G pendo las blan- G JI'J - 'lfJfJ esta- ii@O!'i@llj.

    ('"//- --- /1"!. cas logra;en en fi"

    blecer unproducen .

    rl'"l.

    6 T R se a z a s ]

    1 T 7 T + 2 D X P + 3 T l T +

    + 4 T X T + ,

    pletamen-ey esta com de de-

    Cuando el rl mate slo pu

    de

    gran-uesto, e

    osta e te exp

    evitarse a e l d i a g r a m a

    ararse 0 , en e , m , d"das. Asi , . Grossman, des per I artida F!ne -7 30, de una p

    . amen '"" "'

    vanas l ar- "' an c""s v

    ate. A m Ju;-:n 'as 2 mo\' i d a

    de m m U e S t r a dan mate en gen se

    para as dan

    l esquema l Las blanc

    e . . , mode o. la pSICln mate con :

    R 1 C 1 D 4 T + 2 D 7 T + +

  • 54 RUBN FINE Hay, por supuesto, innumerables

    variantes respecto a la manera en que pueda explotarse la situacin expuesta del rey negro. En la prctica, la ms importante es aquella en la cual se sacrifica una torre en

    8 T, para abrirle camino a la dama. El diagrama 131 est tomado de la apertura Ruy Lpez. Juegan las negras y dan el mate en esta forma:

    DIAGRAMA N9 13 1

    1 2 R X T 3 R 1 C

    T S T + D 5 T + D 7 T + +

    Obsrvese que las negras no pueden permitirse el lujo de esperar: Si l. . . . . . , R 2 D (para seguir lue-

    DIAGRAMA N9 132

    go con . . . . . , D 1 T) ; 2. T 1 R, D 1 T; 3. R 1 A, y e l rey blanco escapa.

    Una viej a aplicacin de esta idea puede verse en el diagrama 132, tomado de una partida Mayet-Anderssen, Berln, 1859. Anderssen anunci el mate en cinco jugadas y lo dio as :

    1 2 T X A 3 D 1 R 4 T 1 A 5 R X T

    A X P + D S D + D X D + T S T + D X T + +

    U na de las ms ingeniosas versiones de este tema proviene de Alekhine.

    En el diagrama 1 33, dio el mate en esta forma:

    DIAGRAMA N9 133

    1 C 5 R ! ! 2 P 6 C 3 D 4 A + 4 D X A + 5 T S T + +

    P X C D X P A 4 D T 2 A

    Cuando el rey de la defensa est confinado en el rincn, las posibilidades de mate se p r e s en t a n en la gran diagonal. Damos aqu dos bo.nitos ej emplos. A la.posicin del diagrama 1 34 l l e g Pillsbury, en una exhibicin de partidas a ciegas . Dio mate as :

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ DIAGRAMA N9 134

    1 . . . . . 2 A 1 C 3 A X D

    D S A + D 6 A + ! A X A + +

    Tambin en una e x h i b i c i n de partidas a ciegas, Blackburne, partiendo del diagrama 1 35, dio mate jugando as :

    DIAGRAMA N 9 135

    1 . . . . . 2 P X D

    D X P + ! ! A X P + +

    Cuando la fila sptima se halla expuesta, se presentan a m e n a z as de mate con dama y torre. En el diagrama 1 36, tomado de una partida Taubenhaus-Janowsky, P a r s, 1903, las blancas se a bren paso por medio de un sacrificio.

    DIAGRAMA N9 136

    1 T X P + R X T 2 D 5 T + R 1 C 3 D 7 A + R 1 T 4 D X P + +

    Otra forma de sacrificio se ve en el diagrama 137, tomado de una partida Stahlberg-Keres, Bad Nauheim, 1936. Keres jug :

    DIAGRAMA N9 137

    1 . . . . . C 6 A ! y las blancas abandonaron. La partida poda haber continuado as :

    2 P X C 3 P 4 A 4 R l C 5 R 1 A

    T 7 D D X P D X P + D S T + +

  • 56 RUBN FINE

    Una aproximacin oculta a la sptima fila puede verse en el diagrama 13 8, tomado de una partida FineDake, Detroit, 1933.

    DIAGRAMA N9 138

    1 C X P A ! ! R X C 2 C 4 R + R 2 C 3 T 2 A D ! D 5 T 4 D X P + A 3 C 5 T 7 A + R 1 C 6 D X A + ! !

    La clave. 6 . . . . 7 C 6 A + 8 T 7 T + +

    P X D R 1 T

    Un mate muy raro, dado con los dos caballos, puede verse en el diagrama 139. Las negras jugaron :

    DIAGRAMA N9 139

    1 D X T + ! ! 2 R X D

    (Si T X D, C 7 A mate) . 2 . . . . . C 7 R + 3 R 1 T C 7 A + +

    U na idea parecida se desarroll en la partida Bogoljubow - Monticelli , San Remo, 1930. A partir del diagrama 1 40, las negras jugaron :

    DIAGRAMA N9 140

    1 2 T X C 3 R X T 4 R 2 A

    C 7 R + ! T S A + D S T + C 5 C + +

    El rey expuesto permite con frecuencia mates relativamente sencillos. As, en el diagrama 141 , tomado

    DIAGRAMA N9 141

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 57 1 D X P + " de a par.tida de Morphy, las blan- 2 p 6 e +

    . . cas JUegan .

    3 T 1 e +

    P X D R X P R 2 T 1 T 8 A + D X T 4 T X A + +

    2 T X D + T X T Si el lector preguntara cul de las 3 D X p + +

    dos torres toma al alfil, le contesta-En el diagrama 1 42 se d

    _emuestra

    nuevamente la fuerza del Jaqe doble. Las blancas dan mate asi :

    DIAGRAMA N9 142

    1 D 7 T + 2 T7R + doble 3 T 7 T + +

    R X D R l T

    Las p os ic i o ne s, etrem_ad.amente congestionadas, es t

    _a n p 1 d 1 en d o )>

    una d e c i s i n combinativa. La del diagrama 1 43 es soprendentemente sencilla. El blanco JUega :

    DIAGRAMA N9 143

    ramos que cualquiera de las dos. y u n a ve z ms se demuestra la

    fuerza del j aque descubierto, en el diagrama 144. El blanco da el mate as :

    DIAGRAMA N 9 144

    1 A 7 R + 2 A 6 A + 3 D 7 R + 4 D X A + +

    R l R R l A R l e

    Cuando los r e y e s de uno y otro bando estn expuestos, el resultado final se producir para aquel d7 los dos jugadores ql;le encu_

    etre pnmero la combinacion d e c i s i v . En . el diagrama 1 45, de una partida VImar-Euwe, Carlsbad, 1929, parecena que las blancas estuveran . a puto de recibir el mate. El ingenwso VIdmar encuentra una forma muy hermosa de salir del paso :

    1 T 8 R + A l A 1 n t e r p 0 s i e i n necesaria, puesto

    que si 1. . . . . . , R 2 T; 2. D 3 D + , ganando la torre.

    2 T X A + R X T

  • 58 RUBN FINE DIAGRAMA N9 145

    Tambin forzoso, puesto que si las negras hacen cualquier otra jugada, pierden la dama, porque las blancas continuaran T X P A + . C o n todo, todava n o aparece claro cmo se las arreglarn las blancas para escapar. Ser recurriendo a jaques de despecho?

    3 C 5 A + R 1 C 4 D 8 A + ! !

    Ahora s vemos la clave de la combinacin. L as n e g r as recibirn el mate en la jugada siguiente, puesto que si 4. . . . . . , R X D ; 5. T 8 D mate; y si 4. R 2 T, D 7 C mate.

    Las lneas abiertas siempre plantean la cuestin de la combinacin. En el diagrama 146, de una partida Rotlevi-Rubinstein, Lodz, 1907, Rubinstein continu as :

    1 . . . . . T X C ! ! 2 P X D

    Cualquiera o tr a j u ga d a pierde igualmente. Si 2. A X T, A X A + ; 3. D X A, D X P mate. Si 2. A X A, T X P C desmantelar la posicin de las blancas. Pero, cmo continuarn las negras el desarrollo de esta variante?

    2 . . . . T 7 D ! !

    DIAGRAMA N9 146

    Ahora todas las piezas, excepto el A R, quedan amenazadas.

    3 D X T Tampoco aqu haba una defensa

    mej or. P o r e j e m p l o , si 3. D X C, A X A ser decisivo, mientras que si 3. A X T, T X D conduce al mate.

    3 . . . . . 4 D 2 C

    A X A + T 6 T ! !

    El esplndido remate. El mate es ahora forzoso. Las ltimas jugadas podan haber sido :

    5 A 4 D 6 T 3 A 7 D X A

    A X A A X T T X P + +

    Ms s e n c i l l o , pero en su forma tranquila no menos brillante, es el final mostrado en el diagrama 1 47, de la partida Reti-Bogoljubow, Nueva York, 1924. Reti jug :

    1 A 7 A + R l T 2 A 8 R ! !

    Las negras abandonaron, porque no pueden evitar el mate. Si 2 . . . . . . , T X A; 3. D X A + , T X D ; 4. T X T mate. Tampoco sirve 2 . . . . . . , P 3 T; p u e s s e g u ir : 3. D X A + , R 2 T ; 4 . A 6 C +, R X A; 5. D 5 A mate.

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 59 DIAGRAMA NC? 147

    Los peones avanzados, atacando, permiten muchos lindos sacrificios. En el diagrama 148 se ve uno, tomado de una partida A n d e r s s enZukertort, Barmen, 1869. Anderssen jug:

    DIAGRAMA N 9 148

    1 D X P + ! ! R X D 2 P 6 A + R 1 C

    De nada sirve D X A, pues segui-r 3. T 3 T + , y T 8 T mate.

    3 A 7 T + ! R X A 4 T 3 T + R 1 C 5 T S T + +

    En el diagrama 1 49, a partir del gambito de rey, un doble sacrificio forzar el mate :

    DIAGRAMA N9 149

    1 C 6 A + ! P X C 2 D 8 A + ! ! R X D 3 A 6 T + R l C 4 T 8 R + +

    El lector habr notado que en muchas de las posiciones que anteceden, la concentracin de las fuerzas blancas es abrumadora. Esa acumulacin de fuerzas conduce nuevaroen te, en el d i a g r a m a 1 5 O , a u n brillante f i n a l q u e las blancas ga-naron.

    DIAGRAMA N9 150

    1 T 7 D D X T 2 T X P + ! R X T 3 A 6 T + R l T 4 C 6 C + ! P X C 5 P X P !

  • 60 RUBN FINE L a t r a n qui l i d a d d e l blanco es

    asombrosa; es porque ve que los jaques del negro sern intiles.

    5 6 R 4 T 7 A 7 C + doble 8 D 7 T + +

    D S A + D 6 A R X A

    He aqu otro ej eruplo de la clase de castigo devastador que puede suf r i r un rey expuesto. El diagrama 1 51 est tomado de una partida Reshevsky-Vasconcellos, B o s t o n , 1944. Reshevsky forz el mate en la siguiente forma :

    DIAGRAMA N'? 1 5 1

    1 T X P + A 2 R

    D e s e s p e r a c i n, pues si l . . . . . . , A _,< T; 2. D 4 e + y da m a t e d e S pues d e 2 . . . . . . , R 3 A; 3 . D 3 A + , R 2 C ; 4 . D 7 A + , R 3 T ; 5 . D 6 A + , A 4 T ; 6. P 4 C mate.

    2 D 5 T ! T I A Si aqu 2. . . . . . , A X T ; se pro

    ducir el mate, pero por va de 3. D 7 A -!-- R 3 T; 4. C 4 C + , R 4 C ; 5. D 7 C + , R 4 T; 6. D 6 T + , R X C ; 7. P 3 T +, R 4 A ; 8. P 4 C mate.

    3 D 5 C + R l T 4 C 6 C + ! P X C 5 D 6 T + R l C

    6 D X P -+- R 1 T 7 T ( 7 C) X A

    Las negras abandonan, pues no es p o s i b l e evitar el mate, ya sea en 7 C o en 7 T R.

    La meta p e rs e g u i d a en 1nuchos ataques para dar el mate consiste en empujar al rey e n e m i g o hacia campo abierto, en donde est suj eto a toda suerte de mates. La continuacin, a partir dei diagrama 1 52, est tomada de una partida Eduardo Lasker-Thomas, Londres, 1 9 1 1 , que se ha hecho clsica:

    DIAGRAMA N '? 152

    1 D X P + ! ! R X D 2 C X A + doble R 3 T

    Naturalmente, el rey no puede ir a 1 T, puesto que recibira el mate con C 6 C.

    3 C (5R )4C -t- R 4 C 4 P 4 T + R 5 A

    Todas las movidas del negro son forzosas.

    5 P 3 C + R 6 A 6 A 2 R + R 7 C 7 T 2 T + R 8 C 8 R 2 D + +

    Otro e l e g a n t e e j e m p l o de esta idea se muestra en el diagrama 1 .53 , de u na partida Blackburne-Gifford, La Haya, 1874.

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 61 DIAGRAMA N 9 153 4 R 2 D ! ! Cualq. jugada

    Blackburne jug : 1 D X C (6T) + ! 2 C 6 R + 3 A 2 R + 4 T 4 A + ! 5 P 3 C + s c x C + +

    R X D R 4 T R 5 T C X T R 6 T

    Muchos ataques q u e empuj an al rey hacia campo abierto tienen finales de problema. El diagrama 154 est t o m a d o de una exhibicin de partidas simultneas hecha por Kasparyan.

    DIAGRAMA N9 154

    1 D X A + ! ! R X D 2 C 5 R + doble R 4 A 3 C 3 D + R 5 D

    5 P 3 A + + El d i a g r a m a 1 5 5 , tomado de la

    partida F i n e - S h a in s w i t , Nueva York, 1944, conduce a un final muy poco comn. Las blancas jugaron :

    DIAGRAMA N9 155

    1 T X P ! 2 D X P +

    Forzosa. 3 D 4 A +

    D X T R 3 T

    D 4 C E1 mate slo podra evitarse a costa

    de prdida de material. Si 3. . . . . . , P 4 e; s e g u i r a 4. D 6 A + , R 4 T;

    5 . P 3 T ! , T 5 R; 6 . D 7 e , P 3 T; 7. P 4 e + , TX P +; 8. PX T + , R X P; 9. D X P T, c o n f in a l g a -n a d o r . S i a qu 5 . . . . . . , D 3 R; 6. P 4 e + , R 5 T; 7. D 3 A , D 3 D ; 8. R 2 e ! y no ser posible evitar el mate. Una situacin similar a sa se ver en el diagrama 156.

    4 A 7 C + R 4 T 5 D 3 A + D 5 C 6 D 5 D + D 4 A

    La mejor posibilidad era 6. . .. . . , e 4 R; 7. A x e, D 4A; 8. D lD + ,. R 3 T; pero, de todas maneras, las blancas ganaran.

    7 D 1 D + 8 P 3 A !

    D 5 C D 3 R

  • 62 RUBN FINE 9 P 4 C + R 4 C

    10 R 2 e ! !

    La c l a v e d e l a combinacin del blanco. El negro tiene que entregar su dama para evitar el mate.

    10 . . . . . 11 P 4 T +

    D X P R R X P

    Si 11 . . . . . . , R 5 A; 12. A 6 T + 12 D 1 T + R 4 C 13 D 6 T + +

    Un final parecido a la v ar i a n t e que hemos visto e n la nota que pusimos a la jugada tercera de las negras en este desarrollo se produj o en el diagrama 156, tomado de una partida de Tartakower. Fue as :

    -

    DIAGRAMA N9 156

    - , 11 11 - //jffi - -

    - - - Wff %/////} ///)

    - 1 2 R 3 C 3 D 4 C 4 P X D 5 R 4 T 6 R 5 T 7 D 5 A +

    D 5 D + D 3 C + D (3C) X D+ D 6 R + P 4 C + ! D 3 R

    Ganarn ahora las blancas?

    7 . . . . . D 3 C + !

    N o, no ganarn . . .

    8 D X D +

    A veces, aun cuando el rey est en campo abierto , el mate no es fcilmente visible. Pero, por lo comn, puede encontrrselo. En el diagrama 1 57, tomado de una partida ganada por Maroczy, se ve una bonita ilustracin de ello. Las negras jugaron :

    DIAGRAMA N9 157

    1 2 R X T 3 R 5 C 4 R 4 A 5 R 5 R

    T 4 T + ! D 6 T + P 3 T + P 4 C + D 3 R + +

    Cuando el jugador que est a la defensiva ha enrocado en el flanco dama, las posibilidades combinatorias son, de todos modos, de carcter similar a las que se presentan en el otro flanco. Con todo, existe una diferencia importante. Desde que el P T D queda sin defensa, el atacante tendr, por lo general, ms blancos a dnde apuntar y menos trabaj o.

    Varias combinaciones para dar el mate, que no ocurren en el flanco rey, son dignas de mencin. La primera se produce cuando las blancas controlan la diagonal 2. T R - 8 C D. U na posicin t pica es la que se muestra en el diagrama 1 58.

    1 D 6 A + 2 A 6 T + +

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 63 DIAGRAMA N9 158

    Una segunda posibilidad de mate, que se ve principalmente en el flanco dama, es la que muestra el diagrama 1 59. Aqu, el blanco da el mate en seis jugadas :

    DIAGRAMA N9 159

    1 D S R + A 1 D 2 D X P + ! R X D 3 A 4 C + R 3 D

    4 T 6 R + R 2 D 5 T 5 R + R 3 D 6 P 5 A + +

    Tpica entre las c o m b i n a c i o n e s para dar e l mate permitido por la situacin e x p u e s t a d e l r ey en el flanco dama es la del diagrama 1 60, tomado de una partida del match Pillsbury -Lasker, San Petersburgo, 1895-1896.

    DIAGRAMA N9 160

    Las negras jugaron :

    1 2 D 6 R + 3 R X T

    T X P ! R 2 T

    Esto permite un mate forzoso, pero ya no hay defensa adecuada.

    3 4 R 4 T 5 R X P 6 R 5 T 7 D 6 C

    D 6 A + P 4 C + D 5 A + A 1 D + A X D + +

  • CAP1,ULO IV

    EL ARTE COMBINATORIO

    Los elementos del juego combinatorio son los distintos poderes de las piezas, ya descritos en el captulo 1II. En este captulo discutiremos las combinaciones del juego prctico, que forman la e s e n c i a de toda partida, ya sea jugada por aficionados o por campeones mundiales. El nfasis en cada caso ser una tentativa de analizar a fondo cada combinacin en sus partes ms elementales, en forma que no aparezca como Un trueno en c i e l o s e r en o , como suele aparecer con frecuencia.

    Las combinaciones que se descri.birn en este captulo se limitarn a aquellas en las que hay una ganancia directa de m a t e r i a l . Hay otro tipo, la combinacin posicional, que tiende no a una inmediata ganancia de material, sino al logro de una posicin superior ; sta se r e s e r v a r para captulos posteriores. Adems, -como ya hemos discutido con cierta Xtensin las combinaciones para dar el m a t e , las omitiremos a q u , salvo cuando ocurran en e l curso de alguna otra combinacin.

    En el diagrama 1 61 se sugiere una -combinacin, por la expuesta situacin de la torre del negro. Vemos que si la gran diagonal e s tuvi e s e abierta y si el alfil blanco o la dama

    -pudieran ubicarse en la casilla 4 R, 1a doble amenaza sobre las casillas

    8 T D y 7 T R proporcionara la ganancia de un pen. Por lo tanto :

    DIAGRAMA NQ 161

    1 P 4 R ! El negro no tiene otra alternativa

    a causa d e l a a m e n a z a e n pinza de P 5 R.

    Si 1.. . . . . . , e 1 e; 2. e X P gana el pen dama, mientras que si mueve la dama, 2. P 5 R gana el pen T.

    2 C X P D l D L o m e j o r . S i 2 . . . . . . , e X e ;

    3. A X C, quedando atacados la torre y el P T R, uno de los cuales se perder.

    a c x c + 4 A X P +

    A X C R l T

  • EL MEDIO JUEGO EN AJEDREZ 65 El negro dispone ahora de una do- realidad, las negras pueden detener

    ble amenaza : encerrar al alfil blan- el mate nicamente gracias a la inco con P 3 C, o tomar el P D, pero el terposicin de su caballo en 1 R. Enblanco c o n ti n a c o n u n a contra- tonces -razonamos-, si p od emos amenaza: debilitar en cualquier forma la casi

    5 A 4 R ! 6 A 3 R

    T 2 T

    El blanco poda tambin ceder su pen jugando 6. O - O, puesto que si ento n c e s 6 . . . . . . , A X P; 7. T 1 D. Disponiendo ya de una ventaja material, cualquiera de las dos jugadas es bastan te buena.

    En el diagrama 1 62, en una posicin resultante del gambito de dama rehusado, se presenta la idea de una combinacin si observamos la situacin de l a d am a n e g r a . Ella puede moverse nicamente a lo largo de la diagonal 1 D - 4 T D. Por lo tanto, si el alfil pudiese atacarla en esa diagonal, estara perdida. De este m o d o , las b l a n c a s g a n a n con l . C X P !, pues si l . . . . . . , P X C ; A 7 A gana la dama. Este es, en efecto, un ataque de mate contra la dama negra.

    DIAGRAMA NI? 162

    En el diagrama 163, de una partida Reshevsky-Fine, Hamilton, 1941, resulta claro que hay muchas amenazas de mate en la octava fila. En