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El poder del pensamiento en positivo ¿El vaso medio lleno o medio vacío? La mente es demasiado poderosa como para minimizar el efecto de nuestras ideas e intenciones sobre la realidad. De cómo y por qué aquello que pensamos determina en gran parte lo que nos sucede. Atrévase: el artículo que usted comienza a leer sólo trae buenas noticias. En línea paralela con los escépticos, los trágicos, los eternos derrotados y aun los nihilistas – aunque sin malgastar energías en el enfrentamiento–, hay mucha gente en el mundo convencida de que todos podemos pensar en positivo y que esto nos conducirá, inevitablemente, a una mejor calidad de vida. "El optimismo es aprendido –asegura Andrés López Pell, psicólogo, director de la Fundación para la Salud y la Educación (Funsaled) y autor de investigaciones sobre el tema–. Por lo tanto, se mejora a través de distintos recursos, entre ellos, la psicoterapia. Se puede traer un bagaje genético que marque una tendencia o la influencia de aspectos de crianza, pero todo es modificable. El optimismo no es ingenuidad ni fantasía: es un conjunto de expectativas respecto del futuro que nos permite interpretar verazmente la realidad. Si la canoa se está hundiendo, se está hundiendo. El punto es no llorar, sino intentar nadar (o aplicar otro recurso, que siempre existen) para ponerse a salvo." Hugo Hirsch, director del Centro Privado de Psicoterapias (CPP), dice que ver el vaso medio lleno o medio vacío no es otra cosa que un hábito, y que un hábito es algo que podemos cambiar. "Se puede aprender a ver lo positivo de cada situación –dice Hirsch, un psicoterapeuta de larga trayectoria–. Hay personas que lo logran más fácilmente que otras; existen aquellos que lo hacen naturalmente, pero todos podemos entrenarlo por medio de distintos métodos, por ejemplo, la autoconciencia y el autoconocimiento, aprendiendo a identificar pensamientos negativos y cuestionándolos. Si tenemos en claro la propensión hacia el pensamiento negativo, somos conscientes de la dificultad para ver lo positivo. Es un buen inicio." La búsqueda del bienestar (o de la felicidad) es una meta que parece haber nacido con el ser humano. Tema filosófico por excelencia –desde los griegos, primer escalón reflexivo de la cultura occidental, distintas escuelas y corrientes sumaron aportes sobre el tema–, su status científico fue sin embargo bastante relegado: hasta podría decirse que

El Poder Del Pensamiento en Positivo

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El poder del pensamiento en positivo

El vaso medio lleno o medio vaco? La mente es demasiado poderosa como para minimizar el efecto de nuestras ideas e intenciones sobre la realidad. De cmo y por qu aquello que pensamos determina en gran parte lo que nos sucede.

Atrvase: el artculo que usted comienza a leer slo trae buenas noticias. En lnea paralela con los escpticos, los trgicos, los eternos derrotados y aun los nihilistas aunque sin malgastar energas en el enfrentamiento, hay mucha gente en el mundo convencida de que todos podemos pensar en positivo y que esto nos conducir, inevitablemente, a una mejor calidad de vida.

"El optimismo es aprendido asegura Andrs Lpez Pell, psiclogo, director de la Fundacin para la Salud y la Educacin (Funsaled) y autor de investigaciones sobre el tema. Por lo tanto, se mejora a travs de distintos recursos, entre ellos, la psicoterapia. Se puede traer un bagaje gentico que marque una tendencia o la influencia de aspectos de crianza, pero todo es modificable. El optimismo no es ingenuidad ni fantasa: es un conjunto de expectativas respecto del futuro que nos permite interpretar verazmente la realidad. Si la canoa se est hundiendo, se est hundiendo. El punto es no llorar, sino intentar nadar (o aplicar otro recurso, que siempre existen) para ponerse a salvo."

Hugo Hirsch, director del Centro Privado de Psicoterapias (CPP), dice que ver el vaso medio lleno o medio vaco no es otra cosa que un hbito, y que un hbito es algo que podemos cambiar. "Se puede aprender a ver lo positivo de cada situacin dice Hirsch, un psicoterapeuta de larga trayectoria. Hay personas que lo logran ms fcilmente que otras; existen aquellos que lo hacen naturalmente, pero todos podemos entrenarlo por medio de distintos mtodos, por ejemplo, la autoconciencia y el autoconocimiento, aprendiendo a identificar pensamientos negativos y cuestionndolos. Si tenemos en claro la propensin hacia el pensamiento negativo, somos conscientes de la dificultad para ver lo positivo. Es un buen inicio."

La bsqueda del bienestar (o de la felicidad) es una meta que parece haber nacido con el ser humano. Tema filosfico por excelencia desde los griegos, primer escaln reflexivo de la cultura occidental, distintas escuelas y corrientes sumaron aportes sobre el tema, su status cientfico fue sin embargo bastante relegado: hasta podra decirse que ciertas disciplinas arrojaron la propensin humana al bienestar o la felicidad a la estantera de los temas menores.

Beatriz Vera Poseck, licenciada en psicologa por la Universidad Complutense de Madrid, escribe que durante muchos aos la psicologa se centr exclusivamente en el estudio de la patologa y las debilidades del ser humano, y que esta perspectiva la convirti en algo as como una "ciencia de la victimologa", como si el estudio de la "parte positiva" de la existencia humana no tuviera (casi) sentido.

Sin embargo, cuando, en 1998, asumi como presidente de la Asociacin Americana de Psicologa, el psiclogo estadounidense Martin E. P. Seligman, nacido el 12 de agosto de 1942 en Albany, dio un contundente giro al estado de las cosas. Naca as la psicologa positiva.

Un golpe de timn

"Despus de 25 aos de estudiar la depresin, Seligman dijo basta explica Hugo Hirsch. Entonces comenz a preguntarse por qu haba muchos que, en lugar de deprimirse, eran o intentaban ser felices. Advirti que desde fines de la Segunda Guerra Mundial, o quizs antes, todas las disciplinas vinculadas con la salud mental se haban ocupado nicamente de lo que andaba mal, de recuperar lo roto, por decirlo de alguna manera, pero poco y nada se haba investigado para trabajar con lo bueno."

Hirsch plantea que la psicologa positiva se orienta al hallazgo emprico de aquellos elementos que contribuyen al bienestar, la felicidad, la realizacin personal. "Por ejemplo enumera, las caractersticas familiares que tienen aquellos hogares con nios ms sanos, o cmo incide el sentimiento de esperanza en el proceso de curacin de las enfermedades. No es una escuela, no hay un nico modelo, lo que s existe es una bsqueda de investigaciones cientficas que demuestren cmo es posible que alguien desarrolle una virtud. Se parte de un supuesto: que podemos ser felices, y se busca identificar factores que conduzcan a eso y producir material cientfico con evidencia emprica que permita que cualquiera los utilice. Por ejemplo, est demostrado cientficamente que la actividad fsica regular mejora el estado de nimo. Es bien prctico; la informacin les sirve tanto al profesional de la salud como al lego. Es una reaccin al nfasis de ms de 50 aos de bsqueda de solucin de la patologa: ms que identificar debilidades se busca sealar fortalezas y trabajar sobre ellas. Y es ms probable que se consigan resultados trabajando sobre fortalezas que sobre debilidades."

Todo ser humano (s, cada una de las personas que habitan este planeta) tiene un conjunto de fortalezas personales segn Seligman: curiosidad, amor por el conocimiento, pensamiento crtico, ingenio, perspectiva, valenta, perseverancia, honestidad, vitalidad, amor (capacidad de amar y ser amado), generosidad, distintos tipos de inteligencia, sentido de la justicia, capacidad de liderazgo, don de perdonar, modestia, prudencia, autocontrol, aptitud para apreciar la belleza, disposicin para agradecer, optimismo, sentido del humor, espiritualidad.

Y en tanto los tratamientos psicolgicos habitualmente se focalizan directamente sobre los problemas que aquejan a la persona, Seligman postula que la psicoterapia positiva es una "estrategia de amortiguacin", en la que el dilogo con el terapeuta se centra en incrementar las emociones positivas, las fortalezas, en lugar de las carencias. Accediendo a la pgina web del instituto que dirige, es posible conocer este conjunto de cualidades, adems de (previa registracin, totalmente gratuita) tomarse autotest y trabajar sobre ellas (http://www.authentichappiness.sas.upenn.edu/questionnaires.aspx).

"Pero la psicologa positiva se vincula tambin con el concepto de resiliencia agrega Hugo Hirsch, que ha sido tomado de la fsica, y es la capacidad de los materiales de regresar a su estado inicial aunque hayan sido completamente alterados. Pero si lo utilizamos en psicologa o en cualquier otra ciencia humana, resiliencia quiere decir ms que eso, y es, por ejemplo, la capacidad que muestran las personas, por caso muchos nios, para atravesar circunstancias por dems difciles o trgicas y salir fortalecidos de eso. Todos estos aos aprendimos mucho sobre factores de riesgo. Sin embargo, olvidamos que un factor de riesgo no es necesariamente una condena." Pensar, un arma poderosa

De qu se nutre un pensamiento? Segn Andrs Lpez Pell, "lo que se cree de las cosas es muchas veces una idea infundada que se adquiri a lo largo de la vida sin saber bien ni cundo ni cmo, y que probablemente nunca haya sido sometida a un anlisis racional. Seligman afirma que a menudo muchas de las creencias son prejuicios y, por lo tanto, sumamente intiles. La indicacin es tomar distancia de las explicaciones pesimistas, al menos hasta verificar su certeza".

El mtodo propuesto por el creador de la psicologa positiva consiste en un dilogo interno con uno mismo que permite discutir (sin intermediarios) acerca de la evidencia, las alternativas, las implicaciones y la utilidad de la creencia pesimista que la persona presenta y que habitualmente es un obstculo para su propio bienestar. "Uno tiene que actuar como un detective, buscando evidencias de esa creencia", ironiza Lpez Pell. "Aunque se obtengan pruebas que apoyen esa creencia agrega el psiclogo, generalmente la realidad estar a favor de rebatirla porque las ideas pesimistas tienen un punto dbil: suelen exagerar algn aspecto de la realidad y los hechos pueden poner de manifiesto esas distorsiones, generalmente asociadas a explicaciones catastrficas. Los acontecimientos son siempre multideterminados, y las personas pesimistas suelen aferrarse a las explicaciones ms negativas; por eso, la tarea consiste en desechar esa costumbre destructiva y habituarse a generar pensamientos ms realistas y lgicos."

Hirsch explica que lo tpico del pensamiento pesimista, segn Seligman, es considerar: "Lo que me pasa de malo es lo nico que me pasa, abarca toda mi vida, va a durar para siempre y yo soy responsable o culpable de eso".

Y cmo garantizar que la influencia de los aspectos inconscientes no atenten contra la intencin de modificar nuestros patrones negativos de pensamiento? "Durante mucho tiempo explica Hugo Hirsch se puso tanto nfasis en lo inconsciente que les hemos restado demasiada importancia a los aspectos conscientes, que son los voluntarios. Pensar en trminos positivos nos dispone a que algo salga razonablemente bien. Podemos ampliar nuestro margen de conciencia perfectamente. La felicidad depende ms de desarrollar ese margen y, con esa conciencia, hacer algo. Porque de poco o nada sirve entender y entenderse sin autogestin: el autoconocimiento sin autogestin no sirve para nada. Tengo que conocer mis recursos, pero tambin saber cmo administrarlos." Ms sanos, ms longevos

Diversos estudios cientficos demuestran que de la mano del pensamiento positivo se suma mejor salud fsica y emocional. Andrs Lpez Pell explica que una investigacin realizada entre pacientes de la institucin que dirige junto a Alexis Kasansew revel que aquellos que haban incrementado su nivel de optimismo sufran menos somatizaciones: malestar estomacal, taquicardia, nuseas, sensacin de ahogo: "Toda la sintomatologa que corresponde al estilo somtico dice Lpez Pell. Estas personas suelen ser ms pesimistas, tienen peores expectativas sobre el futuro; responden al tipo de gente que cuando se divorcia, por ejemplo, cree que estar solo para siempre y, de ese modo, genera un crculo vicioso, una autoprofeca que posiblemente se cumplir".

Pensar en positivo tambin nos hace ms longevos. Un estudio de la Universidad de Yale, en Estados Unidos, encabezado por la doctora Becca Levy y realizado durante varias dcadas sobre ms de 600 personas mayores de 50 aos, demostr que aquellos con una disposicin ms positiva hacia el envejecimiento vivan ms tiempo (hasta un promedio de 7,5 aos) y libres de enfermedades tpicamente asociadas a la vejez.

En este sentido, la doctora Martina Casullo, directora del Departamento de Psicologa de la Universidad de Palermo, profesora emrita de la UBA e investigadora principal del Conicet, dice que a menudo hacemos una asociacin inmediata entre la vejez y el deterioro, "cuando tambin puede ser sinnimo de sabidura; por qu no mirarla tambin de esta manera?".

Casullo coordin durante los dos ltimos aos el 1 y el 2 Encuentro Iberoamericano de Psicologa Positiva en nuestra ciudad, organizado por la Universidad de Palermo, y que cont con la asistencia de ms de un centenar de especialistas de todo el continente. "Seligman envi a un delegado, James Pawelski, que es hispanohablante, para que asistiera a la reunin de este aocomenta la psicloga, sin disimular su entusiasmo y el ao pasado l mismo prolog la edicin especial de la revista Psicodebate, que edita la Universidad, dedicada completamente a artculos sobre psicologa positiva." (Psicodebate 7, revista de Psicologa, Cultura y Sociedad de la Universidad de Palermo, Buenos Aires, 2006).

La especialidad del planteo no radica en lo "novedoso" de las ideas: el propio Martin Seligman dice que la psicologa positiva no descubre nada nuevo en realidad, nada muy diferente de lo que el sentido comn nos puede ensear. Temas olvidados

Martina Casullo plantea que en este inicio del siglo hay dos ejes que dominan el ambiente de la reflexin sobre la condicin humana. "Uno es el respeto al aporte de las neurociencias dice la psicloga y otro, el enfoque sociocultural. Hoy est demostrado que el medio ambiente no es slo estresor y negativo, sino que tambin puede influir positivamente en el individuo. La psicologa positiva de hace eco de este espritu de poca y recupera temas que han sido olvidados a pesar de que tienen una importancia central en el bienestar de las personas: entre stos, los valores, que constituyen en buena parte el capital psquico del sujeto y que lo ayudan a buscar el bienestar a partir de sus posibilidades, de sus propios recursos. Si se trabaja desde all, es posible que las expectativas sean ms reales para cada uno de nosotros y enfrentemos menos frustraciones."

Casullo dice que un tema al que la psicologa positiva da especial nfasis es la capacidad de perdonar. "Y no hablamos del perdn como sinnimo de reconciliacin, o de anular la demanda ante una ofensa o un delito. Es, en realidad, un trabajo de autoperdn para lograr que la propia persona no se sienta culpable. El desarrollo de la capacidad de perdonar debera integrar programas de promocin y prevencin de la salud, porque son muchas las personas que podran beneficiarse si tuvieran la posiblidad de hablar y reflexionar sobre el tema."

La psicologa positiva tambin enfoca su mirada hacia la influencia que tienen aspectos tales como la religiosidad, la vida cultural, la gratitud, el sentido del humor y la autoestima, o las estrategias puestas en marcha frente a los duelos, en la calidad de vida de los colectivos sociales, y ocupa buena parte de las investigaciones el estudio de cmo poblaciones de alto riesgo logran enfrentar (y superar) las negativas condiciones de vida que les tocan, es decir, la resiliencia.

Martina Casullo comenta que el enfoque de la psicologa positiva tiene especial aceptacin entre sectores medios y bajos, "por la necesidad concreta de sobrevivir en ambientes ms adversos reflexiona. Por ahora, para sectores ms ligados a lo intelectual no se trata de un pensamiento de primera lnea Se lo ve facilista o simplista, se lo asocia a la new age sin tener en cuenta que se gest y se est desarrollando en mbitos acadmicos y cientficos, y tampoco se tiene en cuenta lo ms importante: que contempla temas esenciales de la vida, que recupera lo mejor de la psicologa humanstica y existencial y de la psicologa social".

El secreto radica, todo parece, en desarrollar recursos que apunten a la prevencin y que permitan que cada persona enfrente mejor y ms dotada con sus recursos, reconocindolos, su propio proyecto de vida.

"El balance de lo que se hizo durante el siglo XX es negativo dice Martina Casullo, ensayando una sonrisa que oscila entre el realismo ms cruel y la tmida esperanza. No hacen falta ni ms resentimientos y ni ms broncas. Tenemos que tener un propsito, y este enfoque puede ayudarnos a ir tras l."

Por Gabriela Navarra

La paradoja de Seligman

Parece mentira, pero el hombre que firm el acta fundacional de la psicologa positiva pas ms de la mitad de su vida estudiando la depresin: Martin E. Seligman, director del Centro de Psicologa Positiva de la Universidad de Pensilvania, EE.UU, desafi a sus colegas y, tras haber sido nombrado presidente de la Asociacin Americana de Psiquiatra, en 1998, destin todos sus esfuerzos al desarrollo de una tendencia que algunos ya consideran escuela y que, aseguran, gana adeptos da a da.

Seligman pas muchos aos de su vida estudiando cmo las personas que sufren depresin llegaban a un estado que llaman de desamparo aprendido y que consiste bsicamente en considerar que no tienen ninguna alternativa viable para cambiar esa situacin explica Andrs Lpez Pell. En determinado momento, invirti sus preguntas y comenz a buscar respuestas acerca de cmo existan sujetos que, aun sometidos a los peores estresores y situaciones difciles, siempre eran capaces de salir adelante.

Seligman fue uno de los primeros investigadores en demostrar, por ejemplo, que, alcanzado cierto nivel mnimo que garantice la cobertura de las necesidades bsicas, tener mayor dinero no es un pasaporte hacia la felicidad. Y de esto, fundamenta, dan fe los estudios sobre la depresin en sociedades econmicamente desarrolladas y opulentas.

Seligman plantea que existen tres tipos de felicidad, aplicados a tres niveles de vida diferentes: La vida placentera, la vida buena y la vida con sentido dice. Para alcanzar el primer tipo de felicidad debemos intentar disfrutar de los mayores placeres posibles y echar mano de mtodos que nos permitan saborearlos y disfrutarlos mejor: compartirlos con los dems, aprender a describirlos y recordarlos, y usar tcnicas como la meditacin para ser ms conscientes de esos placeres. El segundo nivel, mucho menos superficial y pasajero, es lo que Aristteles llam eudaimonia y que ahora denominamos flow, o estado de flujo, y que consiste en encontrar las propias virtudes y los talentos, y ponerlos a nuestro servicio, viviendo experiencias que nos dejen absortos, fuera del tiempo. Finalmente, la vida con sentido supone encontrar alguna causa, motivo o tarea ms grande que uno mismo, estar el servicio de los dems de alguna forma, y es la que permite una felicidad ms profunda y duradera.

Para pensar en positivo

Tener en cuenta estas claves pueden ayudar a reformular nuestra forma de sentir, pensar y actuar.

1.- Evitar las ideas del tipo todo o nada. La realidad no es blanco y negro o buena o mala. Si pensamos en esos trminos, somos rgidos y no damos lugar a matices o puntos de vista.

2.- No generalizar demasiado. Alguien minti o no acudi a la cita, pero eso no significa que ocurra en todos los casos. Conclusiones que comiencen con siempre o nunca suelen conducir a exageraciones.

3.- No focalizar en el peor detalle. Las situaciones tienen distintos puntos de vista. Si elegimos centrarnos en lo peor, todo se ver mal. Por ejemplo, dar ms importancia a crticas que a elogios.

4.- No minimizar lo bueno. Siempre hay algo positivo para destacar. Si lo pasamos por alto o lo desvalorizamos, perdemos la oportunidad de apreciar sus ventajas.

5.- Por menos o por ms. Nos equivocamos tanto cuando exageramos la importancia de un problema como cuando minimizamos nuestras capacidades para afrontarlo.

6.- Evitar las predicciones. Ante indicios confusos o que nos despiertan ansiedad, anticipamos la peor conclusin. Pensar que algo saldr mal incide en su resultado.

7.- Decir no a las suposiciones. En nuestra comunicacin cotidiana es frecuente que creamos que otro (amigo, pareja, compaero) piensa o siente de un modo. Cmo sabemos que es as? Preguntar es mejor que suponer.

8.- Huir de la victimizacin. Frases o sentimientos como por qu me toca siempre a m? o siempre tengo mala suerte o por qu a los otros s y a m no? nos alejan de la responsabilidad sobre nuestros actos.

9.- No poner ni ponernos etiquetas. Al equivocarnos, no toda nuestra persona merece ser descalificada; y algo similar ocurre cuando otros cometen errores. No es lo mismo decir esto lo hice que soy un tonto. Pero atencin: tampoco responsabilizar a los dems por errores propios.

10.- Poner lmites a la propia responsabilidad. Si nos creemos responsables de cada problema (una separacin, un hijo que desaprueba, etc.) slo sentiremos culpa. Esta idea, sin embargo, oculta otra, ms negativa an: creer que todo est bajo nuestro control.

Lucha siempre

Me ha ocurrido muchas veces que he dejado a un amigo o conocido en condiciones desastrosas, ya de salud, econmicas o de trabajo. Y me he preguntado con miedo cmo habra hecho para resistir, en qu habra acabado su situacin. Y muchas veces, reencontrndolo despus de aos, he descubierto que estaba bien, alegre, lleno de vida, con una nueva actividad, a veces con una nueva esposa o un nuevo marido. Y he entendido que, en realidad, no podemos decir que la vida de una persona est acabada, porque todos poseemos enormes capacidades que no utilizamos y la vida siempre nos ofrece una nueva oportunidad, antes impensable. Pero se ponen en juego cosas muy profundas. Cuando ests duramente derrotado, o cuando enfrentas una enfermedad mortal, te alejas de la realidad, te repliegas en ti mismo; es un poco como su estuvieras muerto. Y cuando te recuperas, cuando te curas, es como si te fuese dada una segunda vida, y te invade un deseo febril de hacer, de tener nuevas experiencias. Un amigo mo, que se recuper de un tumor considerado incurable, se compr un bellsimo barco con el que sale a navegar por el Mediterrneo. Otro ha escrito un libro que ha tenido un xito inesperado. Una amiga se ha hecho famosa haciendo publicidad, otra ha adoptado un nio, una tercera simplemente se ha dedicado a gozar de las cosas bellas: un bao en el mar, su jardn, un viaje, una fiesta, y cuando hablas con ella te serena. Por eso nunca hay que decir : No hay nada que hacer; qu se le va a hacer, no puedo tener hijos; qu se le va a hacer, no me gradu; qu se le va a hacer, me lleg la menopausia; qu se le va a hacer, estoy jubilado. No tiene sentido: es como decir qu se le va a hacer, se termin la liquidacin. Si la liquidacin se termin, hay otras infinitas posibilidades de compras. Y no hay que perder tiempo en lamentarse de no tener ms esto o aquello, ni de rumiar nuestros errores o las maldades que han cometido los dems. Errores cometemos todos y todos padecemos las maldades ajenas. No se trata de ser optimista solamente: tenemos que hacer las cosas que nos gustan, que nos estimulan, e ignorar las dems. No hables con los que te resultan antipticos, con los que te irritan, y no veas pelculas que no te interesan; evita los programas de televisin que te fastidian. Y si encuentras algo que realmente tiene valor, lucha por realizarlo. Debes estar tan vivo a los noventa aos como a los veinte. Y lucha sin miedo, con placer, con el gusto de hacer algo como si fuera una competencia de esqu, o de tenis o una maratn.

Por Francesco Alberoni

El arte de fluir

En el libro Pensamiento positivo (RBA Libros), Miriam Subirana y Ramn Ribalta explican que la modificacin de viejos hbitos o creencias es la clave para transformar nuestros patrones de pensamiento. Las motivaciones, las visualizaciones, las afirmaciones positivas y la meditacin, definida como el poder del pensamiento concentrado, son buenas herramientas. La meditacin, desafan sus adeptos, no tiene nada de complicado. Se puede comenzar repitiendo palabras sencillas (amor, paz, luz), en voz alta o en silencio, durante lapsos de 10 a 20 minutos, en lugar y situacin tranquilos, cmodamente ubicados, respirando en forma pausada y consciente. El fenmeno est lo suficientemente estudiado y los resultados son contundentes: por derecho y por revs, meditar hace bien.

Subirana y Ribalta dan ejemplos de pensamientos innecesarios (generalmente referidos al pasado; por ejemplo: Si hubiera estado ah no habra sucedido esa desgracia), negativos (del tipo todo va a salir mal), y en tanto dicen que esta clase de pensamientos ms all de la razn que uno tenga acerca de lo que expresan nos vuelven perdedores porque estimulan un estado de polucin mental, un pensamiento positivo, por sencillo que sea, siempre genera un beneficio y no daa a nadie.

Simon Reynolds, en Mejor que el chocolate (Ed. V&R), enumera 50 tcnicas para ser ms felices: registrar qu cosas nos hacen bien, practicar actividad fsica, ser disciplinados, agradecer, rer, dormir mejor, tener metas altas, cultivar la amistad, no hacer del dinero la prioridad de la vida, expresar el cario, mantenernos ocupados, tener un propsito vital. Reynolds explica el concepto de fluir (flow), introducido por el psiclogo de origen hngaro (y apellido impronunciable) Mihaly Csikszentmihalyi, uno de los aportes ms importantes para explicar las claves del disfrute. El fluir consiste en realizar una actividad con cierto nivel de complejidad, ver claramente que avanzamos en ella, usar en eso toda nuestra concentracin, y sentir que tenemos el control.

Los expertos aseguran que cuanto ms fluimos ms felices somos. Y cmo?

El propio Martin Seligman da ejemplos de fluir. Dice que l es jugador de bridge, un entretenimiento muy comn entre los estadounidenses mayores. El promedio de edad de quienes participan en los torneos es de 70 aos, una poca de la vida en que es frecuente sentir dolores y molestias fsicas reflexiona. Sin embargo, ninguno de ellos se queja de nada mientras juega. Estn completamente absortos en lo que hacen, se olvidan de todo. El propio bienestar

En 1984, el psiclogo Edward Diener, de la Universidad de Illinois, EE.UU, elabor una escala de medicin del propio bienestar.

Slo lleva unos minutos y puede orientarnos acerca de cun conformes (o no) estamos con nuestra propia vida. A continuacin, cinco afirmaciones con las que puede estar de acuerdo o no.

Utilizando esta escala de 1 a 7 indique su grado de acuerdo con cada frase colocando a continuacin de ella el nmero apropiado.

1. En total desacuerdo 2. En desacuerdo 3. Ligeramente en desacuerdo 4. Ni de acuerdo ni en desacuerdo 5. Ligeramente de acuerdo 6. De acuerdo 7. Totalmente de acuerdo

a) En la mayor parte de los aspectos, mi vida est prxima de mi ideal b) Las condiciones de mi vida son excelentes c) Estoy satisfecho/a con mi vida d) En gran parte, he logrado las cosas importantes que quera en la vida e) Si pudiera vivir mi vida otra vez, no cambiara casi nada de ella

Puntuaciones:

31 a 35: extremadamente satisfecho con su vida 26 a 30: muy satisfecho 21 a 25: ligeramente satisfecho 20: punto neutral 15 a 19: ligeramente insatisfecho 10 a 14: insatisfecho 0 a 9: extremadamente insatisfecho