El principio da por ao Angel Manuel Rodrguez

Daniel 8:14 no slo contiene una referencia al da escatolgico de expiacin, sino que tambin incluye un perodo de tiempo proftico que nos informa con respecto al momento histrico cuando comienza ese evento. "Hasta 2,300 tardes y maanas..." a. Tardes y maanasLa frase "tardes y maanas" se usa muy rara vez en la Biblia. El nico otro lugar donde encontramos la expresin es en Gnesis 1:5, 13, 19, 23, 31, donde se usa para referirse a un da completo. Basados en eso, algunos eruditos han sugerido que "la forma natural de comprender la frase [en Daniel] es con el significado de 2,300 das". (Goldingay, pg. 213; cf. M. Sabo, "Yom" in Theological Dictionary of the Old Testament ed. G. J. Botterweck and H. Ringgren (Grand Rapids: Eerdmans, 1990), tomo 6, pg. 21; y Ernst Jenni, "Yom Tag", Theologisches Handwrterbuch zum Alten Testament, tomo 1, col. 710. Vase especialmente S. J. Schwantes, "cEreb Boqer of Daniel 8:14 Re-examined", Symposium on Daniel, pgs. 472-474. ) Tambin sabemos que en los servicios del santuario se mencionaban ciertas actividades que se realizaban tarde y maana, es decir, cada da (por ejemplo vase Exo. 27:20, 21; Lev. 24:2, 3). (Vase Shea, "Unity of Daniel" Symposium on Daniel, pg. 197. ) Esto muestra una vez ms la conexin que hay entre Daniel 8:9-14 y los servicios del santuario. Deberamos interpretar los 2,300 das en trminos del principio da por ao? El texto mismo seala en esta direccin. En el versculo 13 se formula esta pregunta: .Hasta cundo durar la visin... ? Ya hemos visto que la palabra "visin" designa toda la visin, comenzando con el carnero de Media y Persia. Los 2,300 das iban a comenzar durante el tiempo del Imperio Medopersa y terminaran cuando comenzara el da escatolgico de expiacin. El hecho de que la visin cubra por lo menos la historia de dos imperios mencionados explcitamente en ella (vers. 20, 21) es evidencia de que los 2,300 das no pueden ser literales sino profticos. (Vase Shea, Studies, pgs. 80-83. Yo tengo una deuda con l por lo que sigue.)b. El principio da por ao en el Antiguo TestamentoOtros lugares de la Biblia tambin convalidan el principio da por ao. El trmino "da" puede ser usado en las Escrituras para designar un ao. (Jenni, col. 722, menciona el hecho de que "da" se usa idiomticamente en lugar de "ao" en el Antiguo Testamento cerca de 800 veces. Y esto est apoyado tambin por Saebo, pg. 21.) Por ejemplo, en algunas versiones un sacrificio anual es llamado "sacrificio de das" (1 Sam. 20:6); el perodo de "un ao y cuatro meses" es llamado "das y cuatro meses" (1 Sam. 27:7); una persona anciana es "avanzada en das", lo cual obviamente significa "avanzada en aos" (1 Rey. 1:1). En los libros poticos encontramos das y aos paralelamente y como sinnimos (por ejemplo, vase Job 10:5; 15:20; Sal. 90:9, 10).Job 10:5 5 Son tus das como los das del hombre, O tus aos como los tiempos humanos,Un caso interesante en el cual "da" se toma en lugar de ao se encuentra en la ley sabtica. El sptimo ao es llamado "un sbado en honor del Eterno" (Lev. 25:2, Nueva Reina-Valera); el nombre de un da se usa para referirse a un ao; el sbado semanal se toma aqu en lugar del ao sabtico. En el caso del jubileo, siete perodos de aos sabticos eran seguidos por el ao del jubileo. "Y contars siete semanas de aos, siete veces siete aos, de modo que los das de las siete semanas de aos vendrn a ser cuarenta y nueve aos" (vers. 8). Dios dice aqu a los israelitas que interpreten los 49 das como 49 aos.Tambin hallamos un da tomado por un ao en el contexto de las profecas del juicio. Este mismo principio se establece en Nmeros 14:34 y Ezequiel 4:6. En Nmeros, 40 das vienen a ser 40 aos, mientras que en Ezequiel 40 aos se reducen a 40 das. Sin embargo, en ambos casos hallamos la misma fraseologa con respecto al principio involucrado: "Da por ao, da por ao te lo he dado". Otro ejemplo interesante se registra en la primera profeca del juicio que se halla en la Biblia. Dios anunci al mundo antediluviano que "sern sus das ciento veinte aos" (Gn. 6:3). Aqu encontramos de nuevo una clara conexin entre "da" y "ao", indicando que uno equivale al otro.La evidencia indica que para la mentalidad hebrea era natural usar "da" o "ao" en forma intercambiable. Dios puso en prctica la idea de que un da poda tomarse por un ao en las visiones apocalpticas de Daniel como un smbolo para referirse a largos perodos profticos. Es interesante observar que el principio da por ao lo usaron tambin los escritores judos durante el perodo intertestamentario, tambin los que vivieron en la comunidad de Qumrn, posiblemente Josefo, y algunos escritores rabnicos. (Vase Shea, Studies, pgs. 89-93; y Brempong Owusu-Antwi, "An Investigation of the Chronology of Daniel 9.24-27" (Ph.D. Diss., Andrews Universily, 1993), pgs. 140-146.)Basados en este fondo bblico que acabamos de revisar y en la evidencia interna de Daniel 8, confiadamente podemos concluir que los 2,300 das significan 2,300 aos. De acuerdo a la profeca, este largo perodo iba a comenzar en algn momento durante el Imperio Medopersa. Esto explica la omisin de Babilonia en la visin. Encontramos el dato especfico para el comienzo en Daniel 9. El principio de da por ao

G. PfandlA travs de la mayor parte de la historia de la iglesia, se han interpretado las profecas apocalpticas de tiempo segn el mtodo historicista de interpretacin. Slo en los ltimos 200 aos han surgido otros sistemas, como el preterismo y el futurismo, que han reemplazado al historicismo como el mtodo dominante en la interpretacin de los libros de Daniel y Apocalipsis. Los adventistas del sptimo da, no obstante, han persistido en este sistema de interpretacin, y continan empleando el principio de da por ao que constituye la espina dorsal del historicismo. Podemos resumir los puntos principales para apoyarlo, como sigue:31. Siendo que las visiones de Daniel 7 y 8 son mayormente simblicas, con varias bestias diferentes que representan imperios histricos importantes (Dan. 7:3-7; 8:3-5,20, 21), los perodos de tiempo (7:25; 8:14) tambin debieran considerarse como simblicos.2. El hecho de que las visiones tratan del surgimiento y cada de imperios conocidos de la historia que existieron durante cientos de aos indica que los perodos profetices tambin deben cubrir largas pocas.3. La manera peculiar como Daniel expresa los perodos de tiempo ("tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo") (Dan. 7:25; 12:7), indica que no debiramos tomarlos literalmente.4. En Daniel 7 el gobierno del cuerno pequeo sigue a las cuatro bestias que juntas representan un reinado de por lo menos mil aos. El cuerno es el tema central de la visin ya que se encuentra en abierta oposicin a Dios. Asignar tres aos y medio literales a la lucha entre el cuerno pequeo y el Altsimo no guarda proporcin con la extensin abarcante de la historia de la salvacin representada en la visin entera.5. Segn el contexto, las expresiones "tiempo, tiempos, y la mitad de un tiempo" (Dan. 7:25; 12:7; Apoc. 12:14), "cuarenta y dos meses" (Apoc. 11:2; 13:5), y "mil doscientos sesenta das" (Apoc. 11:3; 12:6) se aplican todas al mismo lapso, pero la expresin natural "tres aos y seis meses" no aparece siquiera una vez. "Es como si el Espritu Santo, de alguna manera, empleara todas las frases que podran usarse para expresar el intervalo, pero excluyendo siempre la forma particular que se utilizara naturalmente en la escritura comn, y que se usa invariablemente en otras ocasiones para denotar el perodo literal. Esta variacin es muy significativa, si aceptamos el sistema de da por ao, pero totalmente inexplicable si tomamos la otra posicin".46. Las profecas en Daniel 7, 8, 10 y 12 conducen hasta el "tiempo del fin" (8:17; 11:35, 40; 12:4, 9) que es seguido de la resurreccin (12:2) y el establecimiento del reino eterno de Dios (7:27). "En el desarrollo de la historia descrito por estas profecas que se extiende desde el profeta en el siglo VI a.C. hasta nuestros tiempos y ms all, los perodos literales de tiempo de apenas 32 y 62 aos distan mucho de alcanzar esta fase del tiempo del fin. Por lo tanto, estos perodos profetices deben verse como simblicos y representativos de perodos considerablemente ms largos del tiempo histrico real que se extienden hasta el tiempo del fin".57. La nica medida comn del tiempo que no se utiliza en las profecas de Daniel y Apocalipsis es el ao. Hay referencias a das, semanas y meses, pero no a la unidad de tiempo "ao". La explicacin ms obvia es que el "ao" es la unidad simbolizada en todas estas profecas.8. En Nmeros 14:34 y Ezequiel 4:6 Dios deliberadamente emple el principio de da por ao como un recurso pedaggico.9. En Daniel 9:24-27, la profeca de las 70 semanas encontr su cumplimiento en el momento exacto, si empleamos el principio de da por ao para interpretarla. Muchos intrpretes, que en otros pasajes apocalpticos no emplean el principio de da por ao, reconocen que las 70 semanas son en efecto "semanas de aos" que van desde el perodo persa hasta el tiempo de Cristo. Por lo tanto la prueba pragmtica de Daniel 9 confirma la validez del principio de da por ao.