3
Angie Lorena Cruz Góngora 25401799 Santiago López Tavera 244935 Nicolas Moreno Diaz 2527783 Paul Watzalawick nació el 25 de Julio de 1921 en Villach, Australia. Falleció el 31 de Marzo de 2007 en Palo Alto, California. Fue un teórico y psicólogo y algunas de sus obras fueron: Teoría de la comunicación humana y del Constructivismo radical, El Sinsentido del Sentido, y es una importante referencia en el campo de la Terapia familiar, terapia sistémica y en general de la psicoterapia. Desde 1960 vivió y trabajó en la ciudad y en la Universidad de Palo Alto. El Sinsentido del Sentido, publicado en Viena en 1992, fue basado en las conferencias del autor en el Ayuntamiento de Viena el 17 de mayo de 1989 y 5 de noviembre de 1992. La versión en castellano fue traducida por Victor A. Martínez de Lapera y publicada en 1995 en Barcelona por la editorial Herder. El texto es de 84 páginas y cuenta con 21 apartados. El primer apartado habla acerca de las conferencias de Viena inauguradas en 1987, y como lo estimulante de las conferencias, para Ursula Pasterk (Concejala de cultura del Ayuntamiento de Viena) radica en conseguir personalidades visionarias que son capaces de ver más allá de los límites de una disciplina concreta. El prólogo, redactado por Hubert Christian Ehlat habla de como en las Conferencias, Paul Watzlawick pronunció dos disertaciones que estuvieron dedicadas a la relatividad de lo que nosotros llamamos realidad. Apunta que Watzlawick es un defensor del constructivismo, y que ha formulado una nueva concepción científica del mundo tanto en las ciencias naturales como en las del espíritu, y cómo esta interpretación constructivista del acontecer social, es un fundamento de un relativismo y nihilismo. El primer apartado de Watzlawick, titulado Punto de partida: Alma o masa, aborda algo fundamental, y es una cuestión que

El Sinsentio Del Sentido

  • Upload
    stav

  • View
    237

  • Download
    0

Embed Size (px)

DESCRIPTION

El Sinsentio Del Sentido

Citation preview

Page 1: El Sinsentio Del Sentido

Angie Lorena Cruz Góngora         25401799Santiago López Tavera                  244935Nicolas Moreno Diaz                      2527783

Paul Watzalawick nació el 25 de Julio de 1921 en Villach, Australia. Falleció el 31 de Marzo de 2007 en Palo Alto, California. Fue un teórico y psicólogo y algunas de sus obras fueron: Teoría de la comunicación humana y del Constructivismo radical, El Sinsentido del Sentido, y es una importante referencia en el campo de la Terapia familiar, terapia sistémica y en general de la psicoterapia. Desde 1960 vivió y trabajó en la ciudad y en la Universidad de Palo Alto.El Sinsentido del Sentido, publicado en Viena en 1992, fue basado en las conferencias del autor en el Ayuntamiento de Viena el 17 de mayo de 1989 y 5 de noviembre de 1992. La versión en castellano fue traducida por Victor  A. Martínez de Lapera y publicada en 1995 en Barcelona por la editorial Herder. El texto es de 84 páginas y cuenta con 21 apartados.El primer apartado habla acerca de las conferencias de Viena inauguradas en 1987, y como lo estimulante de las conferencias, para Ursula Pasterk (Concejala de cultura del Ayuntamiento de Viena) radica en conseguir personalidades visionarias que son capaces de ver más allá de los límites de una disciplina concreta.El prólogo, redactado por Hubert Christian Ehlat habla de como en las Conferencias, Paul Watzlawick pronunció dos disertaciones que estuvieron dedicadas a la relatividad de lo que nosotros llamamos realidad. Apunta que Watzlawick es un defensor del constructivismo, y que ha formulado una nueva concepción científica del mundo tanto en las ciencias naturales como en las del espíritu, y cómo esta interpretación constructivista del acontecer social, es un fundamento de un relativismo y nihilismo.

El primer apartado de Watzlawick, titulado Punto de partida: Alma o masa, aborda algo fundamental, y es una cuestión que se plantea comúnmente en la actualidad con frecuencia creciente, y es aquello que  toma la exigencia de una toma de postura clara entre un extremo y otro, entre alma o masa, dentro o fuera. Para exponer esta idea, muestra una serie de ejemplos y citas de otros autores, concluyendo que la sociedad en la que vivimos es patógena, generadora de enfermedad, y que precisamente sus miembros más sensibles padecen esta patología. En el funcionamiento combinado del dentro y del afuera, se exponen dos ejemplos, para mostrar cuánto más inmediata es la relación de eficacia entre mónada y colectividad, en donde se expone porque no se debe cometer el error clásico de las ciencias del comportamiento al observar solo un elemento.

En la cuestionabilidad de nuestra visión dualista del mundo el autor intensifica su idea de que el intento de dar prioridad al dentro o al afuera sería equivocado, y que lo que debemos hacer  es comprender los fenómenos que derivan de las relaciones y que,por consiguiente desbordan el ámbito de lo personal. Esta forma

Page 2: El Sinsentio Del Sentido

de ver que en el fondo todos tenemos, en la que dividimos al mundo en verdadero y falso, en bueno y malo, en blanco y negro genera el indignado rechazo de la idea de que una relación es más que la suma de las propiedades de ambos socios de la relación. Este tipo de enfoque sistémico se remonta a la forma de ver que predominó en el siglo pasado, en la que se suponía que el hombre nace con una forma de ser totalmente predeterminada. Todo esto es soportado por más ejemplos expuestos por Watzlawick.

Gracias a los ejemplos y  a las conclusiones de Watzlawick, parece ser que esta vista dualista no es correcta, y que debemos ampliar nuestro modo de ver mediante el factor relación. Debemos aprender a cambiar nuestra manera de pensar, pero nuestra comprensión de las propiedades de las relaciones es aún muy rudimentaria, y en realidad nos crea más enigmas que aclaraciones. Luego de dar otro par de ejemplos, Watzlawick afirma que no se debería tomar demasiado serio la posibilidad de computarizar la vida humana, aspecto sobre el que una serie de genes han lucubrado, al contrario, para el autor es muy interesante trabajar con gente que anhela con ojos chispeantes el día en que el mundo humano se libre por fin de todas las irracionalidades y las efervescencias sentimentales y pueda ser reducido al 0 y al 1, ya que estas personas al parecer tienen un gran vacío interior.Nosotros no somos factores computarizables. Por un lado estamos determinados mediante las propiedades del sistema al que pertenecemos, pero también estamos en condiciones de poder intervenir de modo autónomo y de generar cambios. Entre individuo y sistema, entre dentro y fuera existe una interdependencia que debemos tener en cuenta de forma creciente a fin de encontrar otros accesos a nuestros problemas comenta Watzlawick.