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EL TRABAJO DE EXTENSION EN ECONOMIA DOMESTICA RURAL Situación de la Economía Doméstica Rural El trabajo de Economía Domés- tica en el ámbito internacional, suele ir siempre unido al de Ex- tensión Agraria. Desde los inicios de los Servicios o Programas de Extensión más antiguos, por ejem- plo, en Estados Unidos, Canadá e Irlanda, hasta los más recientes, entre otros los de Portugal y di- versos países latinoamericanos, Economía Doméstica ha manteni- do una vinculación e integración en Extensión Agraria, sin perder la identidad como programa es- pecífico. Desde un punto de vista estruc- tural y organizativo, existen cier- tas diferencias entre los Servicios de Extensión de los distintos paí- ses, incluso pertenecientes a áreas geográficas próximas como, por ejemplo, los de Europa continen- tal occidental. Sin embargo, estas diferencias no afectan en la gene- ralidad de los casos a los conte- nidos y programas básicos exis- tentes, por lo que son mayoría los países que disponen de un progra- ma nacional sólido, destinado a acciones de extensión en temas de familia o si se prefiere en ma- terias concernientes a Economía Doméstica Rural en su sentido más amplio. Como orientación global de su importancia, se indi- ca que en el conjunto de los paí- ses de la 0.C.D.E., los efectivos totales de Economía Doméstica son 14.330 Agentes que suponen el 16 por 100 del total de Agen- tes y Técnicos existentes entre los Servicios de Extensión de dichos países. Examinando en los países de la 0.C.D.E. el estado actual del pro- grama de Economía Doméstica, se comprueba que está unido al resto de programas de Extensión. Por supuesto este hecho es más patente en países de predominio de la explotación familiar, pero tam- bién se manifiesta en forma clara en este sentido en países con otras estructuras en el sector agrario. En todos los casos es una ca- racterística constante la adecua- ción de los objetivos y contenido de trabajo a los problemas de ca- da situación. El nivel socio-econó- mico de cada país o región, el ti- po de estructura de población y las distintas circunstancias de ca- da sociedad rural son las determi- nantes de los problemas existen- tes y, por tanto, del tipo de pro- gramas. Así, por ejemplo, en cier- tos países es notable el interés y preocupación actual por abordar problemas referentes a la conta- minación y conservación del me- dio, especialmente en los países nórdicos y en otros de alto desa- rrollo económico. También es in- dicativo en estos países la ten- dencia creciente a ocuparse de la nutrición con un enfoque más tecnificado, de la atención a la tercera edad y de determinados sectores de población en inferiori- dad de condiciones, del ocio y en definitiva de aquellos problemas propios de sociedades rurales con elevado nivel de ingresos y condi- ciones de vida. Igualmente se advierte que en la importancia relativa entre los distintos grupos de programas, corresponde un peso específico destacado a Economía Doméstica. Así, por ejemplo, en Estados Unidos la distribución entre los cuatro grandes grupos de progra- mas era, en 1977, la siguiente: Programa nacional Efectivos en % sobre el total de programas principales Efectivos Personas pleno empleo/año Agricultura y re- cursos naturales. 7.008 41,5 Desarrollo de re- cursos comuni- tarios 1.330 7,9 Economía Domés- tica 3.665 21,7 Trabajo con jóve- nes Clubs 4-H 4.901 28,9 16.904 100 } Otros ejemplos destacados en los que Economía Doméstica man- tiene altas cotas de importancia relativa son, entre otros, los de Alemania, Austria, Irlanda y Fin- landia, y el caso singular de Ja- pón, que tiene un potentísi- mo servicio, tanto técnico agra- rio como de economía doméstica, disponiendo en este último pro- grama de más de 2.200 Agentes. En países en vías de desarrollo es frecuente la existencia de Ser- vicios de Extensión que incluyen entre sus programas, los dirigidos a la mujer campesina. Sin embar- go, aún predominan los países en 23

EL TRABAJO DE EXTENSION EN ECONOMIA … · problemas referentes a la conta-minación y conservación del me- ... relativa son, entre otros, los de Alemania, Austria, Irlanda y Fin-

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EL TRABAJO DE EXTENSION ENECONOMIA DOMESTICA RURAL

Situación de la EconomíaDoméstica Rural

El trabajo de Economía Domés-tica en el ámbito internacional,suele ir siempre unido al de Ex-tensión Agraria. Desde los iniciosde los Servicios o Programas deExtensión más antiguos, por ejem-plo, en Estados Unidos, Canadá eIrlanda, hasta los más recientes,entre otros los de Portugal y di-versos países latinoamericanos,Economía Doméstica ha manteni-do una vinculación e integraciónen Extensión Agraria, sin perderla identidad como programa es-pecífico.

Desde un punto de vista estruc-tural y organizativo, existen cier-tas diferencias entre los Serviciosde Extensión de los distintos paí-ses, incluso pertenecientes a áreasgeográficas próximas como, porejemplo, los de Europa continen-tal occidental. Sin embargo, estasdiferencias no afectan en la gene-ralidad de los casos a los conte-nidos y programas básicos exis-tentes, por lo que son mayoría lospaíses que disponen de un progra-ma nacional sólido, destinado aacciones de extensión en temasde familia o si se prefiere en ma-terias concernientes a EconomíaDoméstica Rural en su sentidomás amplio. Como orientaciónglobal de su importancia, se indi-ca que en el conjunto de los paí-ses de la 0.C.D.E., los efectivostotales de Economía Domésticason 14.330 Agentes que suponenel 16 por 100 del total de Agen-tes y Técnicos existentes entre losServicios de Extensión de dichospaíses.

Examinando en los países de la0.C.D.E. el estado actual del pro-grama de Economía Doméstica,

se comprueba que está unido alresto de programas de Extensión.Por supuesto este hecho es máspatente en países de predominio dela explotación familiar, pero tam-bién se manifiesta en forma claraen este sentido en países con otrasestructuras en el sector agrario.

En todos los casos es una ca-racterística constante la adecua-ción de los objetivos y contenidode trabajo a los problemas de ca-da situación. El nivel socio-econó-mico de cada país o región, el ti-po de estructura de población ylas distintas circunstancias de ca-da sociedad rural son las determi-nantes de los problemas existen-tes y, por tanto, del tipo de pro-gramas. Así, por ejemplo, en cier-tos países es notable el interés ypreocupación actual por abordarproblemas referentes a la conta-minación y conservación del me-dio, especialmente en los paísesnórdicos y en otros de alto desa-rrollo económico. También es in-dicativo en estos países la ten-dencia creciente a ocuparse de lanutrición con un enfoque mástecnificado, de la atención a latercera edad y de determinadossectores de población en inferiori-dad de condiciones, del ocio y endefinitiva de aquellos problemaspropios de sociedades rurales conelevado nivel de ingresos y condi-ciones de vida.

Igualmente se advierte que enla importancia relativa entre losdistintos grupos de programas,corresponde un peso específicodestacado a Economía Doméstica.

Así, por ejemplo, en EstadosUnidos la distribución entre loscuatro grandes grupos de progra-mas era, en 1977, la siguiente:

Programa nacional

Efectivosen % sobreel total deprogramasprincipales

EfectivosPersonas

plenoempleo/año

Agricultura y re-cursos naturales. 7.008 41,5

Desarrollo de re-cursos comuni-tarios 1.330 7,9

Economía Domés-tica 3.665 21,7

Trabajo con jóve-nes Clubs 4-H 4.901 28,9

16.904 100 }

Otros ejemplos destacados enlos que Economía Doméstica man-tiene altas cotas de importanciarelativa son, entre otros, los deAlemania, Austria, Irlanda y Fin-landia, y el caso singular de Ja-pón, que tiene un potentísi-mo servicio, tanto técnico agra-rio como de economía doméstica,disponiendo en este último pro-grama de más de 2.200 Agentes.

En países en vías de desarrolloes frecuente la existencia de Ser-vicios de Extensión que incluyenentre sus programas, los dirigidosa la mujer campesina. Sin embar-go, aún predominan los países en

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que existen programas indepen-dientes que abordan aspectosparciales de la población rural,tales como: alimentación huma-na, alfabetización, salud e higie-ne, vivienda, servicios y equipa-mientos básicos para la familia yla comunidad. Este segundo siste-ma presenta deficiencias de coor-dinación, dificulta la adecuacióndel trabajo a las prioridades delos agricultores y sus familias, eimpide el aprovechamiento ópti-mo de los equipos humanos deExtensión. Por otra parte, aunquees evidente que este tipo de pro-gramas son necesarios en paísesen vías de desarrollo, se reconocesu insuficiencia para abordar losmúltiples problemas existentes.Por todo ello, muchos de esospaíses han visto la urgencia deintensificar y ampliar los conteni-dos de actuación y, al mismotiempo, ir a sistemas de organiza-ción de servicios que permitan lamáxima coordinación entre losprogramas y el óptimo aprove-chamiento de recursos.

Economía Doméstica en España

Desde su creación, se le enco-mendó al Servicio de Extensión

Agraria la preparación del agri-cultor y de su familia y así apa-recen, casi simultáneamente, eltrabajo en técnicas agrarias y eltrabajo en técnicas del hogar. Du-rante la etapa inicial se actúa enmaterias aisladas, como, por ejem-plo, alimentación, corte y confec-ción de ropa, higiene y arreglosdel hogar, que responden a pro-blemas existentes, pero que sonsólo aspectos parciales de un pro-grama global de Economía Do-méstica.

A medida que avanza la déca-da de los 60 e incluso aún en losprimeros años de los 70, se produ-ce una evolución del trabajo deExtensión, sobre todo al surgirprogramas nuevos de gran impac-to como el trabajo con Juventu-des, la Gestión de Explotaciones,el Desarrollo Comunitario, y elFomento de Cooperativas que na-cen con planteamientos de Exten-sión más integrados, que hacende la empresa agraria el centrode la actuación en asuntos técni-co-económicos, y de la comuni-dad rural el destinatario de losprogramas socio-económicos.

Sin embargo, los programas deEconomía Doméstica evolucio-

nan más lentamente; de un lado,se produce una ampliación deáreas de trabajo, sin aplicar crite-rios de selectividad o prioridad,dando lugar a una excesiva e in-conveniente diversificación deobjetivos y de otro, buscandomás calidad en el trabajo con ob-jetivos de mayor incidencia en lapoblación, se cae en un progresi-vo abandono de algunas de lasactividades iniciales y que, sinduda, eran útiles. Además no con-siguió romperse la práctica y há-bitos de trabajo que manteníandemasiado separados los progra-mas de Economía Doméstica conlos de Explotaciones, cuando lodeseable es que dichos progra-mas aún diferenciados funcional-mente entre sí, debieran tener ladebida conexión y coordinación,como consecuencia de que nacendel análisis conjunto de los pro-blemas de las explotaciones y delas familias agrarias. Un claroejemplo de esta conexión se en-cuentra en la directiva 72/161 dela C.E.E. sobre información socio-económica y cualificación profe-sional de las personas que traba-jan en la agricultura, que da lu-gar a actuaciones en las que se

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analizan las situaciones de parti-da de las familias agrarias conexplotaciones insuficientes y selas vierte hacia las distintas posi-bilidades: complemento de ingre-sos mediante trabajos ajenos a laexplotación, agricultura a tiempoparcial, abandono total o parcialdel sector, etc.

La orientación que ha de tenerel actual trabajo de EconomíaDoméstica ha de tener en cuentala situación de la sociedad rural ysu más reciente evolución, sóloasí podrá obtenerse la máximaeficacia de las actividades des-arrolladas.

El medio rural y la familia agraria

Los cambios más significativosque configuran nuevos papelesde la mujer en la familia y el me-dio rural, en una sociedad ruraldiferente, son resultado de lasmodificaciones habidas comoconsecuencia del desarrollo so-cio-económico. Entre otros, pue-den concretarse los siguientes:

Ha habido un intenso procesomigratorio de población activa,tanto hacia el exterior como ha-cia las zonas industrializadas delpaís; 1,4 millones de agricultoresabandonan el sector en los dosúltimos decenios, para incorpo-rarse a la industria y servicios,dando lugar a una pérdida de signifi-cación relativa del mundo rural ydel sector agrario, y a un importan-te aumento de trabajadores in-dustriales por la trascendenciade este sector.

Se ha producido un incrementoapreciable de la renta per cápitay una fuerte evolución del presu-puesto familiar. Aparecen nuevaspautas de consumo en el mediorural, con difusión de las actitu-des típicas de la sociedad de con-sumo y una diferente mentalidadde las nuevas generaciones rura-les que pone en crisis algunos va-lores tradicionales.

Todo ello ha modificado la si-tuación social y profesional de la

mujer y ha transformado el perfiltradicional de la familia.

Las causas más próximas alproceso de cambio en el mediorural hay que buscarlas en las di-ferencias intersectoriales de ren-ta, desfavorables para el sectoragrario, unido al aumento de pues-tos de trabajo en la industria yservicios. También han influidodecisivamente los nuevos siste-mas de comunicación social, quehan roto la incomunicación tra-dicional del mundo rural ponien-do de manifiesto las necesidadesde instalaciones básicas y sus de-ficiencias estructurales o de otrotipo aún existentes.

Este proceso de cambio ha sidode diferente intensidad según re-giones y comarcas y, aún cuandola familia permanece como uni-dad económica y como medio devinculación a la propiedad priva-da y de transmisión del patrimo-nio y hasta del status social, sehan producido modificacionessustanciales y generalizadas quehan determinado:

— La especialización produc-tiva, pasándose de explotacionescon fuerte autoconsumo, a explo-taciones especializadas que ven-

den una parte importante de suproducción y compran en el mer-cado materias primas y productostransformados de muy diversa ín-dole. Se produce una disminuciónsignificativa de la población acti-va agraria provocándose una fuer-te capitalización de las explota-ciones, para el aprovechamientode una moderna tecnología y unaumento, también importante, dela productividad por persona ocu-pada en el sector.

— El deterioro demográfico dela población rural, consecuenciadel fuerte envejecimiento, que es-tá suponiendo una inferioridadeconómica y biológica, y quepuede ser especialmente grave enun futuro muy próximo.

Ha aumentado la participaciónporcentual de la mujer en activi-dades agrarias que, en muchoscasos, realiza un trabajo sustituti-vo del hombre por emigración delcabeza de familia o por dedica-ción de éste a otras actividadesindustriales o de servicios. Hay,por tanto, un cambio de su papelen el sentido de no ser sólamentetrabajadora para tener una mayorparticipación en las decisiones fa-miliares y de la explotación.

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Porcentaje demujeres activasrespecto al totalde la poblaciónactiva agraria

Años

1960 12,31965 20,81970 22,01975 24,71977 27,21978 26,81979

27,32*

EVOLUCION DEL TRABAJO FEMENI-NO EN EL SECTOR AGRARIO.

Fuente: Encuesta de la población acti-va IN E. (*) Avance 4.° trimestre de 1979.

Es frecuente la profesionaliza-ción de la mujer rural en otroscampos distintos del agrario, queexige una organización diferentede las tareas del hogar y propor-ciona a la esposa e hijas una ma-yor autonomía e independencia.

Se han transferido tradicionalesfunciones de la familia rural a lasociedad y ello ha determinadoun debilitamiento de los lazos fa-miliares padres-hijos, que se hatraducido en una anticipación dela emancipación real, en una ten-dencia a la autonomía de los hi-jos en la elección de su actividadprofesional y en la desaparicióndel control y presión familiar res-

pecto a la edad y elección matri-monial.

Era frecuente, por ejemplo, quelos hijos se mantuvieran muy vin-culados a la explotación agraria ydependieran estrechamente delpatrimonio familiar; era el únicomedio en que apoyar económica-mente su matrimonio y el futurode su familia recién formada. Es-ta situación ha sido totalmentesuperada por la mayor movilidadlaboral y las mejores oportunida-des de formación profesional queactualmente se ofrecen a los jó-venes.

Este conjunto de transforma-ciones ha alterado muchos de lossupuestos sobre los que se basa-ba la conformación social tradi-cional del medio rural. Conse-cuentemente, el trabajo con las fa-milias, debe adaptarse progresiva-mente a estos cambios, que hanconfigurado no solamente unosnuevos papeles de la mujer sinouna sociedad rural diferente.

Desde esta perspectiva haga-mos un rápido recorrido por losdiferentes y más importantescampos de actuación de Econo-mía Doméstica que, sin duda, sonun aspecto decisivo en el trabajode Extensión.

Mejora de los recursoseconómicos familiares

Aumento de /os ingresos

Ya se ha señalado que, en losúltimos años se ha pasado, enmuchos casos, de explotacionescon un fuerte autoconsumo fami-liar a otras más especializadas decara al mercado, y en las que elconsumo de la familia ha pasadotambién a depender del mercadode forma muy significativa.

La preparación profesional dela mujer, que era suficiente cuan-do se trataba de ayudar al hom-bre en operaciones fatigosas, pe-ro sencillas, se ha hecho más exi-gente para dar respuesta a otrostrabajos, menos esforzados, peromás complejos y que, general-mente, procuran mayores satis-facciones económicas y morales.

La mujer demanda ahora mejo-res niveles de información y deformación profesional agraria enmuchos aspectos, que faciliten suincorporación a tareas de mayorresponsabilidad de producción ocomercialización en la explota-ción, bien a pleno empleo o co-mo colaboración regular o coyun-tural. Asimismo, plantea la nece-sidad de capacitación para estaren disposición de adoptar mejo-res decisiones, para valorar lasposibilidades de mejora y de ra-cionalización de la explotaciónen base a la aplicación de nuevay más adecuada tecnología. El fu-turo de los hijos es quizá el pro-blema que se plantea con másfuerza en las familias agrarias. Elanálisis con los jóvenes, y es ob-vio que nos referimos a los dossexos, de sus posibilidades de in-corporación al sector y al mediorural, hay que seguir haciéndolono sólo desde unas coordenadasde viabilidad económica futurade las explotaciones, sino, ade-más, contemplando el contextosocial donde se desarrolla la agri-cultura y analizando sus posibili-dades de transformación para ha-

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cene más satisfactorio, sobre to-do, por la acción de los propiosjóvenes.

Según datos del último Censoagrario de España, la agriculturaa tiempo parcial afectaba el 48,1por 100 de los empresarios agra-rios existentes, y la tendencia deeste tipo de agricultura es crecien-te según las . «Encuestas de po-blación activa». , En estos casos,en los que las familias agrariasdedican a actividades exteriores asu explotación más de la mitadde su tiempo de trabajo, es preci-so que Extensión continúe apor-tando, al nivel que corresponda,la información y capacitación ne-cesaria para una ordenación y ra-cionalización de la explotación ydel hogar que haga compatiblestodas las tareas, elevando al má-ximo los ingresos y reduciendo es-fuerzos y costos.

También se contribuye a queestas familias agrarias mejorensus ingresos, mediante una mejory más completa utilización de losexcedentes de mano de obra fa-miliar y, en muchos casos, por el

aprovechamiento de recursosociosos de carácter agrario y ex-tra-agrario.

Son ejemplos conocidos lasgranjas de cerdos, aves, conejos,la apicultura, los huertos familia-res, etc., que no exigen base te-rritorial y se adoptan en unidadesde explotación que, además desatisfacer los mínimos de rentabi-lidad que justifican las inversio-nes necesarias, son adecuados pa-ra el manejo por la mano de obradisponible bien sea familiar o ex-clusivamente femenina.

La producción extra-agraria co-mo complemento de estas econo-mías familiares, presenta posibili-dades muy variadas que están li-gadas a las características socio-económicas del área, a los recur-sos y tradición de empleo de lamisma, y hasta a las condicionesnaturales de su entorno y a lasposibilidades de oferta turísticaque pueda brindar. A título deejemplos, de actividades que Ex-tensión debe promover o en lasque se colabora, pueden citarse:

• Talleres de confección y otrasactividades industriales, que faci-litan la incorporación a la activi-dad laboral de la población ruralfemenina sin salir de su pueblo ycon el significado importante deevitar el envejecimiento demográ-fico.

• Actividades artesanales que,además de la consecución de in-gresos familiares, cubre el objeti-vo de mantener y revitalizar lastradiciones artesanales como va-lor cultural.

• Aprovechamiento de los re-cursos turísticos de muchas zo-nas, que determina no solamenteuna fuente adicional de ingresossino, además, un incentivo parala mejora de la vivienda rural yde los servicios de la comunidad,y una oportunidad de conoci-miento mútuo de la sociedad ru-ral y urbana.

• Actividades de promoción, ymejor comercialización de pro-ductos de consumo y de otro ti-po, tradicionales de la zona. Pro-yecto éste íntimamente ligado alos dos anteriores

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Ahorro de recursos y utilizaciónmás racional de los mismos

Es habitual en las actividadesde Economía Doméstica la capa-citación del ama de casa rural co-mo consumidor, y la promoción yorganización de cooperativas deconsumo que permitan una racio-nalización de la compra, un aba-ratamiento importante en la mis-ma, y una oportunidad para lasamas de casa de organizarse ydesarrollar sus iniciativas y capa-cidades.

La conservación de alimentos,coyunturalmente excedentarios ode bajo precio en el mercado,que contribuyen a facilitar dietasmás racionales al tiempo que sig-nifica un ahorro para la familia,es otro ejemplo de las activida-des normales en este campo detrabajo, no por tradicionales me-nos importantes.

Mejora del bienestar social

Mejora del medio rural

Como consecuencia de haberpasado importantes funciones yservicios de la familia a la comu-nidad, se han hecho necesariasnuevas instituciones públicas y

organizaciones comunitarias quesatisfagan las nuevas necesidadesque han aparecido como conse-cuencia de la elevación del nivelde vida de la población rural.

Así han surgido los programasde información y promoción paraconstrucción y mejora de equipa-miento colectivo que incluye des-de los servicios más elementalescomo los que se refieren a la do-tación de agua potable y alum-brado público, hasta otros de ca-rácter cultural y de esparcimien-to, pasando por los de caráctergeneral como el mantenimiento yconservación de viales, plazas yzonas verdes, o más específicoscomo guarderías infantiles y coo-perativas de consumo.

También han aparecido progra-mas de cooperación con organis-mos y entidades para promovercon la población acciones enca-minadas a resolver problemas deeducación y formación profesio-nal de los hijos, y de asistenciasanitaria adecuada en la comu-nidad.

Aspectos éstos del trabajo enlos que es necesario resaltar y pro-mover la participación de la mu-jer rural en la resolución de losproblemas de bienestar comuni-tario.

Mejora de la vivienda

Están siendo de gran utilidad lasacciones encaminadas a informara la población agraria de las ayu-das de todo tipo establecidas enla legislación española para nue-vas edificaciones en el medio ru-ral, así como la promoción decooperativas de viviendas que fa-cilitan las nuevas construccionesy los equipamientos complemen-tarios necesarios para dotar a lasmismas de unas más favorablescondiciones de habitabilidad.

Son más frecuentes las obrasde acondicionamiento y repara-ción de las viviendas ya construi-das, para proporcionar a éstasmejores condiciones higiénico-sa-nitarias; aumentar el número dehabitaciones o capacidad de lasmismas para adecuarlas a la com-posición familiar del ocupante;proporcionar a la vivienda mayorduración y/o mejor aspecto; yconseguir una ventilación, lumi-nosidad y decoración que la hagamás confortable.

Equipamiento familiar

El aumento de las exigenciasde la familia agraria ha dado lu-gar a programas que faciliten laracionalización de los trabajosdel hogar a través de la adquisi-ción y utilización correcta deelectrodomésticos, mobiliario ymaterial y equipo diverso, así co-mo de la dotación de serviciosinternos como agua caliente, telé-fono y otros.

Alimentación y nutrición

Posiblemente este sea uno delos proyectos que más ha carac-terizado el trabajo de EconomíaDoméstica y, con frecuencia, nose ha valorado suficientementela importancia que para la po-blación agraria tiene conseguiruna información y capacitaciónen educación nutricional, y en nu-trición y alimentación práctica;contar con una adecuada organi-

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zación para el consumo, a travésde la promoción de cooperativaspara conseguir un abastecimientoregular de productos; tener cono-cimientos suficientes para la con-servación de alimentos por dife-rentes métodos; y disponer dehuertos y granjas familiares paraautoconsumo. Todo ello permi-te a las familias rurales aproxi-marse a dietas alimenticias másequilibradas y sanas.

Salud e higiene

La mayor complejidad de losservicios y recursos sociales dis-ponibles han hecho necesarias ac-tividades de información, promo-ción y capacitación, que facilita-sen un mejor aprovechamiento dedichos recursos por la mujer ru-ral. Dentro de este capítulo sepueden incluir las acciones de in-formación para un mejor uso delos servicios sociales, sanitarios yde seguridad social, estatales y/ocomunitarios; y los relativos a lalucha contra el alcoholismo y las

drogas. También, son interesantesen los Programas de las Agenciaslas actividades de capacitaciónen puericultura y primeros auxilios.

ResumenTodo este conjunto de temas

de trabajo constituyen únicamen-te una guía esquemática del tra-bajo de Extensión en EconomíaDoméstica, que configuran uncampo amplio y complejo, peroque responde plenamente a losesquemas genuinos de Extensióna nivel internacional, y requiereun entronque con el resto de laactuación de Extensión Agraria,integrándose la acción familia-ex-plotación-comunidad, bajo la res-ponsabilidad de la Agencia y suequipo. La selección y ejecuciónde los distintos temas expuestosdeben someterse, por una parte,al criterio de responder a las ne-cesidades y prioridades de la po-blación agraria y, por otra, seradecuados a la propia responsabi-lidad que el Servicio de Extensióntiene en cada una. En este senti-

do conviene tener en cuenta quede los tres niveles distintos de ac-tividades que realiza Extensión:información, promoción y capaci-tación, no se aplican en el mismogrado a todos los programas. Hayunos (por ejemplo, conservería)en los que las Agencias estánusualmente en condiciones derealizar los tres tipos de activida-des. Sin embargo, hay otros en losque por su naturaleza habrá quelimitarse a la información, dejan-do la capacitación a otros servi-cios especializados.

Es en estas circunstancias cuan-do, de una manera especial, Ex-tensión debe propiciar, con susenseñanzas y orientaciones, cam-bios rezonables que resulten úti-les no sólo para resolver favora-blemente la situación concretaactual, sino que permitan poten-ciar las capacidades de las fami-lias rurales para enfrentarse conmayores posibilidades de éxito enel futuro.

Jesús Alvarez GonzálezMartín Segovia Manso