EL TRIÁNGULO COSMOTRONICO

Este ejercicio te permitirá cargar energía cosmotrónica cada vez que te lo propongas.En un lugar tranquilo, preferentemente al aire libre o cerca de una ventana, cómodamente sentado, abre tus brazos en cruz. Imagina un gran triángulo cósmico del cual surge una fuerte luz blanca. Recibe esa luz y cárgate de energía cosmotrónica.

Cada vez que inicies algún trabajo psicotrónico recurre a la técnica del triángulo cosmotrónico.

A continuación profundiza el ejercicio de la siguiente manera:

Imagina ahora un gran tubo de energía que une el centro de tu cabeza con el cosmos. Imagina que este tubo atómico concentra la energía cosmotrónica y la hace ingresar por el centro de tu cabeza, inundando todo tu cuerpo.

Una vez que incorpores esta energía y sientas sus efectos imagina dos tubos saliendo de la planta de los pies hacia la tierra. Absorbe esa energía por los tubos y hácela interactuar con la energía interior.

Siente que todo tu ser se inunda de energía. Imagina que tu cuerpo está cubierto por un halo muy luminoso de energía que lo nutre, le da vida y poder.

Realiza este ejercicio por tres días consecutivos y concentrará notablemente tu energía psicotrónica.

Luego de esta preparación podrás emitir energía hacia tu interior o hacia el exterior.Antes de hacerlo, deberás realizar siempre los ejercicios anteriores.