Éras e u n a vez , n o h ace m uch o t iem p o en el p an tan o d e Plas en ciavivían u n gru p o d e p eces qu e s e d iver t ía ech an d o carreras h as ta lascom p u er tas .

Era p or el m es d e feb rero cu an d o tod avía h acía frío y au n q u e h acíau n d ía relucien te, es tab an tod as m u y t ran q u ilas tom an d o el s ol qu e s eveía a t ravés d el agu a.

En ton ces , u n a d e las t ru ch as d el gru p o s e en con trab a u n p ocorevu elta y con gan as d e viajar r ío arr ib a .Pero an tes , d ecid iód es p ed irs e d e sus am igas y con tarles qu e ella n o h ab ía n acid o en elp an tan o, q u e ven ía d e Torn avacas .Y em p ez ó as í:

Yo n ací en Torn avacas , d on d e s ien d o tod avía cas i u n h u evo m een con tré con u n a vaca. Es tab a com ien d o al lad o d el r ío y m e con tóqu e es tab a con tam in ad o p orq u e la gen te es tab a t iran d o cos as alagu a.

Entonces, una de las truchas del grupo se encontraba un poco revuelta y con ganas deviajar río arriba .Pero antes, decidió despedirse de sus amigas y contarles que ella nohabía nacido en el pantano, que venía de Tornavacas .Y empezó así:

Todos los fines de semana iban algunas personas a lavar su coche y el agua sellenaba de espuma y en la orilla dejaba los restos de los botes tirados.-¡Que guarro!,¡ cómo el no se baña en el río.!-dijo la trucha. Entonces vino una corriente de agua y sin poder despedirme, me llevó hasta otrositio más tranquilo.

-¡Vaya, qué sitio tan bonito!¿Dónde estaré?-dijo la trucha.

Allí, la trucha se encontró con una liebre que estaba saltando por la orilla del río y ledijo que aquel pueblo se llamaba Jerte. Ésta le contó que el río estaba muy suciotambién por allí porque, en verano, la gente iba a bañarse, llevaban comida o hacíanbarbacoas y quedaban las basuras tiradas por la orilla del río, ¡eso, cuando no sequemaba algún árbol!.

-¡Jo que rollo ¡.todos los ríos están contaminados .Metió la cabeza y se fue nadandohasta llegar a Cabezuela .

Una tarde , estando en Cabezuela, escuchó unos sollozos de un sauce que se sentíatriste porque habían cortado a sus amigos, unos alisos .-¿Y por que hicieron eso?-preguntó la trucha.

-No sé, los humanos son así.Muy enfadada la trucha se fue de allí . La trucha fue nadando hasta Navaconcejo y allí se encontró con una bonita libélula,que andaba volando sobre el río y le empezó a contar todas las historias que habíavivido. La trucha fue nadando hasta Navaconcejo y allí se encontró con una bonita libélula,que andaba volando sobre el río y le empezó a contar todas las historias que habíavivido.

Y nadando, nadando llego hasta un riachuelo que venía del Rebollar. Allí seencontró un topo que salía de su topera. La trucha le preguntó como se llamaba elpueblo de lo alto de la montaña y el topo le dijo que se llamaba Rebollar y entonces,le contó una historia que había pasado allí.

Hace mucho tiempo había un cochino tallado en piedra, parecía una hucha y losniños la lanzaban al suelo. Un día, un señor en caballo, pregunto por él y le encontró.Hizo un agujero y había oro dentro. La trucha dijo: ¡por fin, que historia tan bonita! .

Y siguió nadando muy contenta hasta llegar a un arroyo llamado Marta que traíamucha agua de un pueblo llamado Valdastillas.

-¿Qué ruido es ese?-quiso saber la trucha -Soy yo , un cuco. Canto y vuelo por todo el Valle. -Entonces sabrás muchas historias de por aquí .

-¡Sí claro!,en ese pueblo de ahí arriba ,Valdastillas, hace muchos años sucedió algoinolvidable .Hubo un terremoto ,o eso me contaron, no muy grande pero asustó atoda la gente, y todo Valdastillas salió a la calle porque creían que se iban a caer lascasas .

-Muy interesante tu historia pero me tengo que ir, hasta luego. Unos metros más abajo se encontró con otro de su especie, con un pez y erapiornalego.

El pez le contó que una mañana en Piornal, en invierno amaneció todo blanco había2 metros y medio de altura de nieve. La gente se quedó sorprendida, aunque nevabamucho, nunca había nevado tanto y los hombres tuvieron que limpiar la nieve con laspalas .Todo se quedó como si fuera un laberinto y por el laberinto solo se veía nieve.

-¡Cómo me gustaría ver la nieve algún día!-dijo la trucha.-¡Es preciosa sí, pero muy fría! Y de todas formas, cada vez nieva menos-dijo suamigo.

La trucha siguió nadando hasta que llegó a un arroyo que venía de Cabrero; y alpasar por allí se encontró con una Cabra.

La trucha le contó que había nacido en Tornavacas, que iba dirección a Plasencia yque se había encontrado con muchos animales que la habían contado muchashistorias; algunas bonitas y otras no. La cabra, asombrada, la miraba atentamente porsi se trataba de una broma.

-Pues, por aquí no ocurre nada. Y pasando de ella, se fue.

La trucha se dio cuenta de que estaba anocheciendo y se tenía que ir. Al día siguiente la trucha despertó y siguió su marcha. Llegó a un arroyo muy cercano y esta vez no se encontró con ninguna cabra; seencontró con un burro que estaba comiendo porque estaba cansado de arar con suamo en las Casas del Castañar.

La trucha le contó que había viajado todo el valle y los otros animales la habíancontado que estaba contaminando. El burro le dijo que nunca había estado ensemejantes sitios. Él sólo había ido a los huertos de las Casas, que tenían muchoscerezos y todos estaban muy bien cuidados.

-¿Conoces tú alguna historia?-le preguntó al burro.-En Casas del Castañar hay un bosque de castaños muy antiguos que gracias a lagente se conserva desde hace mucho tiempo. No siempre la gente es tan mala comoen tus historias. Hay gente que cuida el medio ambiente. Podan los árboles para quepuedan crecer, los curan cuando están enfermos o quitan las hierbas secas paracuando la gente tuviese que hacer fuego no se quemaran los árboles.-¡Qué interesante!. Bueno, me voy que se va haciendo tarde.

Al pasar por El Torno la trucha se encontró con un águila real.-¡Qué grande y qué bonita eres!, ¡Ojalá yo pudiera volar!- dijo la trucha. Y la empezó a contar su recorrido desde Tornavacas.

Al águila le cayó bien, a pesar de que le pareció que tenía que estar muy rica tambiénle contó una historia.

El águila la contó que había una señora muy mala, porque cada día venía y tiraba labolsa de basura al río. -Un día se me ocurrió que podría bajar cerca del río y picotear la bolsa para que no latirara al río y lo contaminara más.-dijo el águila.-La señora no ha vuelto a pisar poraquí, desde entonces.

-¡Bien hecho!-dijo la trucha. Bueno, mejor me voy, adiós y gracias por contarme tuhistoria.

Y desde entonces vivo en el pantano con todos vosotros. Fue un viaje muy largo,pero mereció la pena porque además de conocer a muchos seres vivos me hancontado muchas historias de cada pueblo y lo que hay que hacer para cuidar el medioambiente; pero ahora hay que me dice que mi sitio no está aquí y debo volver aTornavacas.

-No te vayas, te echaremos mucho de menos.-No puedo quedarme pero espero volver a veros el año que viene. Hasta entonces. Y cogiendo sus huevos, se marchó río arriba. FIN.