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EMOCIONALIDAD E INDIVIDUACIÓN, UNA EXPLORACIÓN A TRAVÉS DE LA
PRODUCCIÓN LITERARIA PERSONAL
TRABAJO DE GRADO PRESENTADO PARA OPTAR AL TÍTULO DE ESPECIALISTA EN
DESARROLLO HUMANO CON ÉNFASIS EN PROCESOS AFECTIVOS Y DE
CREATIVIDAD
Katerín de Alba Hernández Rodríguez
Código: 20161176016
UNIVERSIDAD DISTRITAL FRANCISCO JOSÉ DE CALDAS
FACULTAD DE CIENCIAS Y EDUCACIÓN
ESPECIALIZACIÓN EN DESARROLLO HUMANO CON ÉNFASIS EN PROCESOS
AFECTIVOS Y DE CREATIVIDAD
Bogotá, 2017
EMOCIONALIDAD E INDIVIDUACIÓN, UNA EXPLORACIÓN A TRAVÉS DE LA
PRODUCCIÓN LITERARIA PERSONAL
TRABAJO DE GRADO PRESENTADO PARA OPTAR AL TÍTULO DE ESPECIALISTA EN
DESARROLLO HUMANO CON ÉNFASIS EN PROCESOS AFECTIVOS Y DE
CREATIVIDAD
Katerín de Alba Hernández Rodríguez
Código: 20161176016
Yury Ferrer Franco
Asesor
UNIVERSIDAD DISTRITAL FRANCISCO JOSÉ DE CALDAS
FACULTAD DE CIENCIAS Y EDUCACIÓN
ESPECIALIZACIÓN EN DESARROLLO HUMANO CON ÉNFASIS EN PROCESOS
AFECTIVOS Y DE CREATIVIDAD
Bogotá, 2017
Dedicado al ímpetu y a la sensibilidad que habita en lo más entrañable de mi condición
humana.
AGRADECIMIENTOS:
Agradecimientos a los todos docentes que han aportado mi construcción profesional y humana.
6
Tabla de Contenido
A modo de introducción:
Contexto de la pregunta de investigación …………...…………………………………………8
Objetivo General.………………………………………...…………………....…………………..9
Objetivos específicos………………………………………..……………….…………………..9
Capítulo 1. Marco Teórico y Metodológico…………………..…………………...…………..11
Emocionalidad y Subjetividad en el Contexto del Desarrollo Humano…...………..………11
Emocionalidad……………………………………………………………..……………...……12
Imagen Mental e Imagen Poética……………………………………………………………….13
Expresión de la Emocionalidad o Catarsis en el Desarrollo Humano……………..…………...15
Individuación en el Desarrollo Humano……………….……………………….………………16
Literatura y Poética…………………………………….………………………………………19
Emocionalidad en la Poesía…………………………….………………………………………21
El concepto de Performance Emocional……………..………………………………………..22
Catarsis en la poesía…………………………………….…….…...……………………………22
Marco Metodológico……………………………………………………………………………24
Enfoque Fenomenológico………………………………………………………………………24
7
Instrumento de investigación…………………………………………………………………….25
Desarrollo de la investigación:
despliegue de un proceso vinculante ……………………………………………………..…………26
Lo Afectivo y la Otredad……………………………………………………………………….26
Desarrollo Ético-Moral…………………………………………………………………………30
Dimensión Afectiva de la Soledad.…………………..………………………………………...32
Reconocimiento del “Yo” Sensible……………………………………………………………33
Idealización de la Muerte, otra Dimensión del Yo…………………………………………….34
Corporalidad……………………………………………………………………………………37
Expresión de emocionalidad a través del cuerpo……………………………………………...41
Conclusiones…………………………………………………………………………………….44
Referentes Bibliográficos……………………………………………………………………….46
Anexos………………………………..………………………………………………………….50
8
A modo de introducción:
Contexto de la pregunta de investigación y las respuestas que suscita
El presente trabajo pertenece a la línea de Emocionalidad en la Especialización en
Desarrollo Humano con Énfasis en Procesos Afectivos y de Creatividad, dentro del marco de
proyectos de Posgrado.
La modernidad, con inicios en el XVIII y auge en los dos siglos posteriores, proclama la
universalidad, la unidad y la claridad como valores fundamentales del ethos social y científico
(Bauman, 1996), este paradigma ha construido sus bases epistemológicas y sociales en el
pensamiento cartesiano que instauró la racionalidad como único elemento válido para conocer al
individuo y el contexto donde se encuentra inmerso, por lo cual el sujeto moderno es escindido
de otros componentes del ser.
Para la actualidad es un desafío conocer al hombre de manera holística, dicha producción de
conocimiento se convierte en tarea de la academia y es allí donde empiezan a visibilizarse otras
dimensiones del ser humano para ser comprendidas. La emocionalidad se vuelve uno de los
escenarios fundamentales de entendimiento que conforman la integralidad del hombre, y por
tanto un elemento trascendental del desarrollo humano integral.
La Especialización en Desarrollo Humano con Énfasis en Desarrollo Humano y Procesos
Afectivos y Creativos dirige a los estudiantes a explorar diversos ámbitos que corresponden a
necesidades “de orden cognitivo, de aprendizaje de orden psicoafectivo, psicosocial o estético
expresivo” (Universidad Distrital Francisco José de Caldas, 2009, p. 8) para aportar a la creación
de proyectos de impacto personal y comunitario que contribuyan la labor científica y social de la
academia. Posee tres campos académicos de formación: 1. Pedagogía y Desarrollo Humano; 2.
9
Campo afectivo y emocional; 3. Campo de la creatividad expresiva y artística.
A partir del componente vivencial y teórico, surge la idea de indagar y analizar la
producción literaria propia, para a partir de allí generar categorías de análisis que permitan
comprender cómo esta revela elementos de emocionalidad que aportan al proceso de
individuación, y por tanto apoyan el desarrollo humano personal y contribuyen teórica y
metodológicamente a la producción de conocimiento científico.
Debe aclararse que en este trabajo, la creación literaria es contemplada como un pretexto para
entender la asimilación e interpretación de la realidad por parte de la autora, el fin último no es
la elaboración de piezas poéticas de riqueza formal y técnica, sino hacer énfasis en el acto
creativo como posibilidad de expresión estética del individuo y encuentro con su emocionalidad.
En ese sentido surge la pregunta de investigación: ¿Qué procesos de individuación y
contenido emocional se encuentran en la producción literaria propia, para aportar así al
Desarrollo Humano personal?
Los objetivos que movilizaron el desarrollo de este proceso investigativo son:
Objetivo General
● Analizar la emocionalidad y los procesos de individuación en la creación literaria propia,
en el contexto del Desarrollo Humano Personal.
Objetivos específicos
● Entender la escritura como un espacio de expresión de la emocionalidad y de procesos de
individuación.
10
● Identificar la contribución de la creación literaria al Desarrollo Humano, lo cual es un
elemento del componente creativo propio de la especialización.
El informe final de investigación formativa se organiza en dos grandes apartados: el primero
está dedicado al desarrollo de los referentes teórico-conceptuales y la metodología,
componentes que se reúnen en un gran bloque que busca contextualizar el desarrollo del
proceso que se desglosa en el segundo capítulo. Las conclusiones correspondientes cierran el
documento que busca constituirse en un punto de referencia para investigaciones análogas.
11
Capítulo 1. Marco Teórico y Metodológico
En este capítulo se realizará una aproximación teórica a los conceptos desarrollados a lo largo
de este trabajo de grado y la identificación de un enfoque metodológico que permita alcanzar los
objetivos propuestos.
Emocionalidad y Subjetividad en el Contexto del Desarrollo Humano
El concepto de Desarrollo Humano es “un proceso mediante el cual se amplían las
posibilidades de los individuos (…) entonces este proceso está orientado y obtiene su sentido en
la vida cotidiana, desde la vivencia misma de las mejoras en las opciones y la libertad de las
personas” (Universidad Distrital Francisco José de Caldas, 2009, p.27) Comprender el
Desarrollo Humano como la igualdad en oportunidades y acceso a todo aquello que contribuya al
bienestar del sujeto, además de la aceptación y entendimiento de la cotidianidad como
posibilidad de desarrollo, implica realizar una exploración en todas las dimensiones del ser
humano, tales como corporalidad, salud física y mental, acceso a educación, emocionalidad y
subjetividad, entre otros.
Este trabajo reconoce la subjetividad y la emocionalidad como categorías antropológicas
que construyen un campo simbólico de interacción social, “El componente afectivo debe
integrar lo actitudinal individual y colectivo, para cualificar su entorno equilibrado, su
enriquecimiento personal y social, su calidad de vida, su reconocimiento del otro como
posibilidad de existencia” (Universidad Distrital Francisco José de Caldas, 2009, p. 21) por lo
cual se hace prioritario contemplar al hombre y auto reconocimiento desde una visión holística
de Desarrollo Humano.
12
Emocionalidad
Según Chabot y Chabot (2009), la palabra Emocionalidad se deriva del verbo emocionar, es
decir poner algo en movimiento. Las emociones son definidas como “los poderosos motores que
hacen mover de manera sensible al ser humano, y esto tanto como al interior de sí como
externamente” (Chabot y Chabot, 2009, p.37) es decir que el hombre en su actuar y vivir se
determina entorno a la producción y relación con sus emociones.
La emoción ha contado con varios intentos y dimensiones para definirla, “las únicas que son
aceptadas por prácticamente todos los autores y que además son ortogonales son la dimensión
agrado-desagrado y la intensidad de la reacción emocional” (Chóliz, 2005, p.3). Toda reacción
afectiva tiene un componente agradable o desagradable, y cierta intensidad con la que se
experimenta.
Aún está presente el debate teórico en torno a si existen las emociones primarias, pues
diversos autores proponen un número determinado de ellas que algunas veces no coinciden; sin
embargo: “existen ciertos patrones de reacción afectiva distintivos, generalizados y que suelen
mostrar una serie de características comunes en todos los seres humanos”, (Chóliz, 2005, p.9)
estos patrones son alegría, tristeza, ira, sorpresa, miedo y asco, a partir de las cuales se pueden
derivar y relacionar otro tipo de emociones.
Paul Ekman identificó seis emociones primarias: Miedo, cólera, tristeza, aversión, sorpresa y
felicidad, Chabot y Chabot indican indica que estas emociones tienen activadores y
comportamientos, puesto que “Son las experiencias de vida las que hacen sentir esas emociones”
(Chabot y Chabot, 2009, p.41)
Un activador es una situación que desencadena cualquier tipo de emoción, el
13
comportamiento es la reacción posterior a la activación de una emoción. Chabot y Chabot
conciben los comportamientos desde el actuar, Ekman desde el lenguaje corporal; También es
posible identificar estos comportamientos en la producción escrita, entender la poética como
reacción desencadenada a partir de alguna situación propia de la subjetividad del autor.
Mariano Chóliz sostiene que “cualquier proceso psicológico conlleva a una experiencia
emocional de mayor o menor intensidad y de diferente cualidad” (Chóliz, 2005, p.3), lo que
indica que la emocionalidad esté presente en la mayoría de dimensiones del individuo.
En las variables para teorizar sobre la emocionalidad se hace pertinente en este trabajo la
perspectiva cognitiva, donde se asume que “la emoción es una consecuencia de los procesos
cognitivos” (Chóliz, 2005, p.29). La emoción se desenlaza como consecuencia de la Activación
y la Interpretación Cognitiva, en estos procesos mentales se hace énfasis en las Imágenes
Mentales, producto de dicha activación, que incluyen la existencia de la Imagen Poética.
Imagen Mental e Imagen Poética.
El concepto de Imagen Mental desde la psicología cognitiva es un producto de la mente del
individuo “algunos individuos tenderán a representarse problemas de acuerdo a una estrategia
basada en imágenes, otros individuos tenderán a utilizar una estrategia representacional basada
en descripciones verbales, y, por último, algunos individuos tendrán la capacidad de utilizar
estrategias representacionales basadas en imágenes y en descripciones verbales, según las
demandas de la tarea” (Colom, R. y Espinoza, M. 1990, p.8)
Según Colom y Espinoza (1990), en la corriente cognitivista proposicionalista existe un
lenguaje del pensamiento establecido desde las estructuras sintácticas y semánticas del individuo,
“la idea es que los lenguajes sintácticos de una determinada fórmula interna codifican su
14
significado, y más específicamente los aspectos del significado que determinan su papel en los
procesos mentales de inferencia” (Colom y Espinoza, 1990, p.9)
La poesía tiene una relación directa con la imagen, “La imagen y la poesía son solidarias
entre sí” (Menard, 1973, p.10) La poesía es una representación del mundo mental, es “una
reverberación del sentido esencial del mundo sobre nuestra mente” (Menard, 1973, p.11)
La Imagen Poética es conceptualizada y analizada por Bachelard, “una imagen poética
puede ser el germen del mundo, el germen de un universo imaginado ante las ensoñaciones de un
poeta” (Bachelard, 1969, p.10), la palabra “ensoñación” traducción “rêverie” del francés no
significa “soñar” como pura actividad onírica sino que se entiende como actividad de divagación
mental y adentramiento en lo quimérico.
Dicha “ensoñación” tiene origen imaginativo y psíquico aunque no inconsciente “La imagen
poética ilumina con tal luz la consciencia que es del todo inútil buscarle antecedentes
inconscientes” (Bachelard, 1969, p.12), el poeta vive procesos imaginativos lúcidos que son
expresados en las imágenes que produce visualmente, auditivamente, verbalmente, desde la
palabra escrita, y cualquier otro tipo de representaciones.
La Imagen Poética es el producto de ensoñación del sujeto, representación la realidad
social y la realidad mental que percibe y construye. Octavio Paz contempla la actividad poética
como catarsis, “La actividad poética es1 ejercicio espiritual, es un método de liberación interior.
La poesía revela este mundo; crea otro (…) Experiencia, sentimiento, emoción, intuición,
pensamiento no dirigido.” (Paz, 1994, p.3)
En ese sentido la producción literaria de este contiene son diversas imágenes producto de la
1 La cursiva es mía.
15
emocionalidad y la subjetividad, de la autora, en su obra se identifica no sólo la influencia de
diversos eventos de su vida, sino también el modo como los asimila y el mundo poético que crea
a partir de ello.
Expresión de la Emocionalidad o Catarsis en el Desarrollo Humano.
Desde la perspectiva de la psicología Gestalt, se utiliza el término Catarsis como sinónimo
de Desahogo emocional, (Cuevas, 2013) y corresponde a la exteriorización de lo sentido para
“contactar las emociones, ser consciente de ellas y poder desahogarlas conscientemente”
(Cuevas, 2013) a través de terapia de chocke o técnicas artísticas.
La catarsis posibilita liberar contenidos emocionales, “el despliegue de emociones asociado
con la reminiscencia de una escena traumática en el contexto de una conversación con el
terapeuta.” (Laso, 2006, p.37), es decir que la catarsis es un acto de evocación de eventos
traumáticos en psicoterapia; Para efecto de esta investigación no se comprenderá la catarsis
como acontecimiento psicoterapéutico, más sí como una posibilidad de exteriorizar la
emocionalidad interna.
La intención de la catarsis es alcanzar un estado de bienestar del individuo, al ponerlo en
contacto con su modo de sentir y el porqué de su sentir. En el texto “Encuentro con la sombra”
(Zweig y Abrams, 2002) se propone un ejemplo para curar la ansiedad: “El primer paso consiste
en ser plenamente consciente de la ansiedad, establecer contacto con ella (…) sentirla realmente,
aceptarla y expresarla” (Zweig y Abrams, 2002, p. 393), es necesario entonces reconocer la
dimensión afectiva y llevarla a un plano expresivo.
La catarsis es detonante de la emocionalidad, además de ser un paso importante para lograr
salud en cualquier individuo porque posibilita exteriorizar el inconsciente. Al ser el arte un canal
16
de expresión y comunicación de estados emocionales y/o psíquicos, es posible entender la
catarsis desde elementos latentes en la creación artística.
El arte es un canal de comunicación de la dimensión cognitiva, social y psíquica del
individuo, además es una evidencia de su subjetividad, por lo cual, a través de él es posible
identificar elementos emocionales y afectivos.
La emocionalidad posee dimensiones intrapersonales e interpersonales, esto aporta a la
construcción de sujeto, contiene un factor expresivo que se manifiesta de manera consciente e
inconsciente, el arte permite conectar lo consciente y lo inconsciente y exteriorizarlo.
Individuación en el Desarrollo Humano
La subjetividad tiene una relación directa con la formación del Yo “El yo reproduce a la
realidad en abstracto, lo cual tuvo que suceder después de que el ser humano tomó conciencia de
que él era quien reproduce a la realidad.” (Corral, 2004, p.185), es decir que la subjetividad se
forma a partir de la toma de consciencia del ser sobre sí mismo y genera una necesidad de
representación del mundo.
Esta formación del Yo es entendida como el proceso de Individuación, Jung la explica
como la realización del Sí mismo, permite “la tranquilidad psíquica, integridad y delimitación
que nos permite mantener la cabeza clara ante tormentas emocionales, ofertas de fusión y
enredos sin dejar de sentirnos relacionados” (Garro, 2012, p.7)
La individuación “se caracteriza por la confrontación de lo consciente con algunos
componentes del inconsciente: con la persona, la sombra, el ánima, el ánimus y el sí mismo y la
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tarea básica consiste en diferenciar el yo de todos estos complejos, para lo cual éste se debe
relacionar objetivamente con todos ellos, evitando identificarse con ello” (Alonso, 2004, p. 62)
Según Alonso, (2004) la persona es la máscara, lo que cada uno idea para representarse ante
otros y poder convivir con ellos, la sombra es lo inconsciente que oculta cada uno porque es
inconmensurable con la vida social, el ánima es la parte femenina en el hombre, y el ánimus la
parte masculina en la mujer.
“El sí mismo puede definirse como el arquetipo de la totalidad y centro regulador de la
psique, oculto detrás de la personalidad total y encargado de llevar a la práctica el proyecto de
vida y de guiar el proceso de individuación. Por eso, Jung decía que su vivencia podría sentirse
psicológicamente como el «Dios dentro de nosotros» (Alonso, 2004, p. 63). La individuación
conduce a una “adaptación del individuo, tanto a su realidad externa como a su realidad interna”,
lleva a la madurez del sujeto y complementación de todas sus facetas.
Dicha necesidad de representación se produce a partir de la palabra, la acción verbal
constituye la subjetividad y es una expresión de esta, Corral (2004) afirma
Todo verbo, en su semiótica, se origina a partir de la expresión subjetiva. El verbo indica,
de manera contradictorio-complementaria, la relación propositiva afectada por las
apreciaciones intersubjetivas. El lenguaje intenta contener el carácter inacabado de
realidades fragmentadas que se transforman en reestructuración constante, pero sucede
que a cada momento que se les encierra, estas realidades escapan convirtiendo al lenguaje
en búsqueda perenne de sentidos en la realidad. (Corral, 2004, p. 188)
18
Desde la perspectiva de Corral, la existencia del sujeto está mediada por procesos
comunicacionales “Existir es lenguaje, socialización, comunicación, interacción subjetiva,
simulación de lo real: seducción. Por mediación del lenguaje emana la totalidad fenoménica que
define a la existencia misma, determina a lo real verdadero como concepto encerrado de lo
vivido” (Corral, 2004, p.88)
En relación al Desarrollo Humano el ser humano debe colocarse en diálogo con sus
subjetividad, Jung lo llama el encuentro con su propia sombra (Zweig. y Abrams, 2002),
establecer una ruta de encuentro con procesos conscientes o inconscientes que le conforman
como unidad.
Escuelas Junguianas hablan de las técnicas de imaginación activa, que ayudan a hacer
conscientes los contenidos inconscientes “consiste básicamente en un contacto e interacción
dinámica de la consciencia del Yo/Ego con una serie de imágenes psíquicas, en el plano
imaginal, pero estando plenamente conscientes de tal situación y entregándonos, desde un estado
de apertura y receptividad mental, a una verdadera experiencia vivencial-fenomenológica de
dicho plano y de sus imágenes simbólicas.”
http://www.centrojung.com.ar/imaginacion_activa_individuacion_desarrollo_de_la_personalidad
.htm
Este encuentro con la propia sombra, proceso de autoconocimiento y reconocimiento del
YO se produce de diversas maneras que buscan contraponer imágenes mentales del interior del
sujeto
Karl Pribram afirma que el conocimiento más profundo es la relación entre la esfera de
frecuencia y la imagen/objeto. (…) “Las imágenes son construcciones mentales. Nacen
19
de procesos en los que están implicados el cerebro (objeto), los sentidos (objetos) en sus
interacciones con el entorno (...). Las imágenes (un aspecto de la mente) son, por tanto,
cosas que nacen en una formulación filosófica objetiva, objetivadora” (Pribram, 1987:
51) (Corral, 2004, p.193).
Según esto, la subjetividad del ser humano puede ser identificada en la imagen que se
produce desde el interior de su cerebro y que exterioriza, dichos procesos intrasubjetivos e
intersubjetivos se expresan mediante la construcción de símbolos como el logos, por lo cual la
escritura hace parte de dichos procesos expresivos.
Literatura y Poética
Es de suprema importancia para esta investigación definir qué se comprende por literatura y
poética, Eagleton (1994) menciona que se podría definir desde la creación producto de la ficción,
sin embargo distinguir lo real de lo imaginativo es una frontera bastante dudosa “Quizá haya que
definir la literatura no con base en su carácter novelístico o ―imaginario- sino en su empleo
característico de la lengua.” (Eagleton, 1994, p.5), es decir, la literatura puede definirse desde el
uso que se le da a la lengua a través de ella.
La literatura se sale del uso cotidiano del lenguaje pero no se define meramente desde el
formalismo de este, es aún más importante es la intencionalidad con la que se utiliza el lenguaje
y la transgresión a su finalidad meramente comunicativa. Las funciones del lenguaje que habían
sido desconocidas dentro de los estudios literarios fueron teorizadas en el trabajo de Roman
Jakobson quien identifica: función referencial, función apelativa, función conativa, función
expresiva o emotiva, función fática, función poética y función metalingüística. (Jakobson, 1960)
Para este trabajo es trascendental la función poética a la que se hace referencia, que no es
20
igual a la poesía “el estudio lingüístico de la función poética tiene que rebasar los límites de la
poesía” (Jakobson, 1960, p. 359), Jacobson habla de cómo la función poética está mediada por la
organización de las palabras, la organización silábica y la estructura del verso.
Respecto a la poética Jakobson indica “El análisis de un verso se halla por entero dentro del
campo de la poética, que podemos definir como aquella parte de la lingüística que trata de la
función poética en sus relaciones con las demás funciones del lenguaje” (Jakobson, 1960, p.363)
es decir que se estudia en relación a las otras funciones del lenguaje que están presentes en todo
acto comunicativo, con mayor o menor influencia, el estudio de la poesía no se desprende de la
lingüística y la semiótica.
Ahora debe clarificarse qué es poesía, su relación y diferencia con el poema. El poema en
tanto, existe como formalidad de la poesía, así es:
“no todo poema —o para ser exactos: no toda obra construida bajo las leyes del metro—
contiene poesía. Pero esas obras métricas ¿Son verdaderos poemas o artefactos artísticos,
didácticos o retóricos? Un soneto no es un poema, sino una forma literaria, excepto
cuando ese mecanismo retórico —estrofas, metros y rimas— ha sido tocado por la
poesía” (Paz, 1994, p.3)
No puede pensarse la poesía como estructuras lingüísticas organizadas de manera
armoniosa, ni pretender que todas las palabras acomodadas en rima o soneto sean poéticas.
En la poesía converge la formalidad y la contingencia, es “Experiencia, sentimiento,
emoción, intuición, pensamiento no dirigido. Hija del azar; fruto del cálculo. Arte de hablar en
una forma superior; lenguaje primitivo. Obediencia a las reglas; creación de otras” (Paz, 1994,
p.3) La formalidad existe en el poema como “fruto de un cálculo” que obedece a reglas
21
lingüísticas, pero también crea reglas, viola otras y amplía sus límites a través de la ampliación
de la necesidad expresiva, es decir que transgrede la palabra y lo ya dicho hasta hallarse un
espacio más amplio que la mera comunicación.
Teniendo esto en cuenta, la forma no es lo trascendental en la producción literaria analizada
en este trabajo porque su objetivo no es este, es la “Experiencia, sentimiento, emoción, intuición,
pensamiento no dirigido” (Paz, 1994, p.3), busca indagar en y desde la sensibilidad de la autora
para producir canales expresivos del mundo que representa.
Según lo anterior, la poesía se entiende como Mímesis, “Imitación de los antiguos, copia de
lo real, copia de una copia de la idea. Locura, éxtasis, logos.” (Paz, 1994, p. 3) esta imitación no
es una simple reproducción de la realidad. En la Poética Aristóteles (s.f.), plantea que la Poiesis
existe porque representar el mundo es inherente al hombre. Aristóteles concibe el arte por la
tendencia natural del hombre a imitar, desde la Mímesis no sólo se representa sino se aprehende
el entorno. Es una necesidad del ser humano describir el mundo y también inteligir lo posible o
lo necesario. La creación nace y es desarrollada por el ser humano ante la necesidad de
representación y descripción del mundo desde lo posible y lo probable. (Hernández, 2016, p.6)
Emocionalidad en la Poesía
Simone Belli define las emociones como “experiencias corporales naturales que luego se
expresan a través del lenguaje, y ese lenguaje, a su vez, suele calificarse como irracional y
subjetivo” (Belli, 2009, p.1). La relación entre la emocionalidad y el lenguaje se identifica al
reflexionar en torno a dos preguntas “si las emociones se pueden “localizar” en el lenguaje o si a
través del lenguaje se accede a las emociones” (Belli, 2009, p.18).
22
Se ha discutido entorno a la asociación entre emoción y materia, según Wittgenstein, las
emociones y las reacciones psicológicas no son distintas, existe una relación entre materia y
forma: “mantiene la característica denominada “alteración orgánica”, es decir, la conexión entre
la emoción y los objetos, y entre la emoción y los cambios psicológicos y conductuales, ya que
son lógicos y necesarios, hasta llegar a una síntesis de ambos y a una definición común de
emoción” (Belli, 2009, p.19), la emocionalidad tiene relación intrínseca con la materialidad de la
realidad.
El concepto de Performance Emocional
Un concepto que atañe a esta investigación es el de Performance Emocional (Belli, 2009),
definido cómo el acto expresivo de alguna emoción, sea desde el lenguaje hablado, el gestual,
pictórico, entre otros “a través del uso de determinadas palabras, la construcción de determinados
contextos, permiten recrear esta performance” (Belli, 2009, p.23). No es posible revivir una
emoción, mas “con las palabras es posible reconstruir estos particulares estados de ánimos, estas
situaciones puramente emocionales, sólo a través del uso del lenguaje, sólo gracias a esta
performance” (Belli, 2009, p.23). El análisis de lo enunciativo, lo nominativo, lo contextual
dentro de un discurso hablado o escrito, se puede identificar en la materialización y performance
de cualquier emoción, en este sentido es posible identificar el contenido emocional en la poética
de un autor.
Catarsis en la poesía
El autor Ángel Sánchez realiza una construcción etimológica de la palabra Poética, en el
sentido del procesos de composición de una obra, normas para escribir bien y estudios de la
producción poética en la Historia del arte; En La poética de Aristóteles, el poeta no es el que
23
construye versos sino el que copia la realidad a través del lenguaje (Sánchez, 2016).
Según Sánchez, el término Catarsis aparece en la Poética de Aristóteles del siguiente modo:
Es, pues, la tragedia imitación de una acción esforzada y completa, de cierta amplitud, en
lenguaje sazonado, separada cada una de las especies (de aderezos) en las distintas partes,
actuando los personajes y no mediante relato, y que mediante compasión y temor lleva
acabo la kátharsis de tales afecciones. (p. 129)
Aristóteles identifica la compasión y el temor como afecciones del individuo, ambas son
parte de la emocionalidad, y es mediante el relato de la tragedia griega como acto de catarsis que
se expresa tal dimensión emocional.
Poéticamente, la tragedia griega es una imitación del mundo, no la imitación del hombre
sino la de su actuar. “La imitación artística es, ante todo, creación. Las obras de arte no se
reproducen en el sentido vulgar de fabricar cosas útiles o multiplicarías indefinidamente, como lo
hace la industria” (Sánchez, 2016, p. 131), la creación poética corresponde a la creación del
mundo desde la representación verbal.
24
Marco Metodológico
Esta investigación no parte de una hipótesis que ha de ser comprobada sino de la
problematización de una pregunta de investigación, la metodología para desarrollarla posee un
enfoque puramente cualitativo, se incluyen concepciones, visiones y técnicas de análisis de
información no cuantitativos (Sampieri, R., Fernández, C., y Baptista, P., 1991,) pues el
problema de investigación: realizar un análisis literario para identificar contenido emocional
y procesos de individuación en la producción literaria propia, que aporte así al Desarrollo
Humano personal, se escapa de la mera enunciación y cuantificación de datos concretos y
requiere un proceso de interpretación que medie con lo subjetivo y lo sensible.
Enfoque Fenomenológico
Para el desarrollo de este trabajo se realizará un análisis de tipo fenomenológico que
pretende comprender experiencias humanas sin acudir a explicaciones causales (Sandoval,
1996); es importante porque lo que se busca en los textos analizados en este trabajo no será el
“¿por qué?” de lo escrito para evitar narraciones anecdóticas, sino en el ¿Qué? Es decir que se
pregunta “¿Cuál es la naturaleza de este fenómeno (…) en tanto que experiencia esencialmente
humana?” (Ayala, 2008, p. 412) dicha naturaleza fenomenológica equivale a la presencia de
contenido emocional y de individuación en los productos literarios.
La investigación fenomenológica no tiene pasos a seguir, mas sí algunas rutas para alcanzar
el “significado esencial de los fenómenos así como por el sentido y la importancia que éstos
tienen” (Ayala, 2008, p. 411). La existencia de un fenómeno tiene componentes que al integrarse
dan acceso a la experiencia, según Ayala (2008) tales componentes existenciales son: el espacio
vivido (espacialidad), el cuerpo vivido (corporeidad), el tiempo vivido (temporalidad) y las
25
relaciones humanas vividas (relacionabilidad o comunalidad)
En esta investigación es pertinente el método empírico de la fenomenología, que se orienta a
la recolección de material de la experiencia vivida para su posterior descripción. Se encuentran
métodos empíricos como: “la descripción de experiencias personales, las experiencias de otros u
obtención de descripciones en fuentes literarias” (Ayala, 2008, p.412) en este trabajo se obtienen
análisis descriptivos de textos personales que evidencian fenómenos de emocionalidad y
subjetividad.
Instrumento de investigación.
La búsqueda del contenido emocional y de individuación en la producción literaria personal,
a través del análisis fenomenológico, se realiza a través de la selección de textos literarios
producidos por la autora a lo largo de sus vivencias, para generar un corpus de textos pertinentes
que correspondan a la pregunta de investigación, posteriormente se diseña una matriz que
permite ubicar los textos literarios y generar categorías y subcategorías correspondientes al
contenido emocional y a los procesos de individuación (Anexo 1).
Posteriormente se toma cada categoría y se despliega sobre ella un análisis literario a los
textos, que conjuga disciplinas del conocimiento tales como la psicología, la filosofía y la
antropología, para comprender lo procesos vivenciales ya explicados propios de la investigación
fenomenológica (espacialidad, temporalidad, corporeidad y comunalidad), que revelarán
emocionalidad e individuación, cuyo reconcomiendo contribuye al Desarrollo Humano personal.
26
Capítulo 2
Desarrollo de la investigación: despliegue de un proceso vinculante
A continuación se presentará la producción literaria propia, que forma el corpus literario
(Anexo 2) para analizar, junto con las categorías surgidas a partir de la creación literaria propia.
En cada categoría existe un análisis del contenido emocional y de los procesos de individuación,
en el marco de la construcción del “Sí mismo” que contribuyen al Desarrollo Humano personal.
Lo Afectivo y la Otredad
No vienen
Odio a los otros porque no tienen respuestas
les odio porque imagino que nadie sufre como yo
les odio buscando motivos.
Odio a los otros por no estar, porque no me ayudan a olvidar
les odio porque no tienen sexo para cesarme
les odio porque no me reconocen
les odio porque no secan mis lágrimas, ni saben qué decir cuando sollozo.
Odio a los otros por ser tan humanos,
27
tan psicólogos y cristianos con sus verdades a medias,
les odio porque no me abrazan
porque les llamo y no me escuchan, no entienden
les odio tanto que les necesito, necesito sus oídos,
sentir pena de mí en ellos.
Ni con ellos-Ni sin ellos
No puedo estar con alguien y sin alguien,
aún rodeada de afectos les detesto,
y sin embargo sola, les extraño a cada instante.
Clamo a lágrimas arrullo
y si alguien me lo brinda no lo quiero
ando asqueada, insatisfecha y vulnerable.
Les amo también
por su abrazo me doblego
y por aprobación busco su afecto.
28
No juego
yo no juego,
en verdad les aborrezco.
Los dos texto referencian el odio en múltiples ocasiones, sin embargo la emoción que
prima en ellos es la opuesta; El odio es definido como rechazo o repulsión “engendra el ataque
destinado a eliminar la fuente de frustración” (Chabot y Chabot, 2009, p.38), en ambos textos no
se propende a la anulación del otro, en la frase “Clamo a lágrimas arrullo” se ve por el contrario
la búsqueda de comprensión y de permanencia. En “Ni con ellos-Ni sin ellos” se afirma “yo no
juego, en verdad les aborrezco” e inmediatamente se niega lo dicho a través de la confirmación
de amor que profesa “Les amo también, por su abrazo me doblego y por aprobación busco su
afecto” hay expresión de afectividad de la autora hacia los demás y una búsqueda constante de su
acogimiento.
El producto muestra la dicotomía de la relación entre la autora y quienes le rodean, “En la
difícil lucha que debe realizar el sujeto para conservar esa construcción que lo identifica, surge la
figura del Otro, el alter, el ajeno, que cuestiona por similitud o por diferencia esa construcción en
la cual se apoya el psiquismo.” (Falcon, 2008, p. 2) quiere decir que la otredad involucra
contradicción por per se, un antagonismo entre el yo y la sombra (Zweig. y Abrams, 2002), la
relación entre opuestos que conforman el “sí mismo”. En el verso “y sin embargo sola, les
extraño a cada instante”, se presencia dicha contradicción, porque para extrañar debe haber
29
distancia, para necesitar se requiere desposeerse, la autora requiere encontrar la soledad primero
para sustraerse y comprender cómo en la ausencia requiere al otro.
Existe la otredad como oposición o confirmación de la propia identidad, enunciados tales
como “les odio porque no secan mis lágrimas, ni saben qué decir cuando sollozo”, “les odio
porque no me abrazan,” u “odio a los otros porque no están” refleja de por sí contrariedad de la
autora y el otro, pues el odio demanda repulsión y lejanía, los textos en cambio son un clamado
por la cercanía y la confortación. En la frase “No puedo estar con alguien y sin alguien” la autora
llama a los otros, a partir de la contradicción acepta y reclama su presencia.
La construcción del “sí mismo” no es un proceso únicamente individual “En otras palabras, la
identidad no es sólo el resultado de una definición personal, sino que incluye, ya sea por
aceptación o rechazo, una “carga” que las diferentes instituciones por las que transita el
individuo a lo largo de su vida, depositan sobre él”, (Falcon, 2008, p. 2) el individuo es un ser
social que requiere del otro para construirse y definirse.
En el texto está presente la otredad como elemento fundamental de individuación, la autora no
se desvincula de los otros, al contrario les necesita porque posee consciencia de que es en el otro
que confirma su existencia, enunciados como “les odio tanto porque les necesito, necesito sus
oídos, sentir pena de mí en ellos” y “les odio porque no me reconocen” evidencia cómo urge la
participación de los demás en el auto reconocimiento y en la elaboración del “sí mismo”.
30
Desarrollo Ético-Moral
Texto sin título 1.
¡Alguien que me salve!
Nada me salva.
He respirado,
he leído la biblia,
me he vuelto cristiano.
Temo a mis palabras herejes pero nada me salva,
nadie con valentía,
ningún dios pide un taxi pide un taxi y evita que muera esta noche.
Desarrollo ético-moral.
La individuación tiene un componente ético-religioso que contribuye a la reafirmación del sí
mismo, para ofrecerle sentido a las vivencias “Convertirse en individuo es una tarea ético-
religiosa: conseguir colocar el espíritu en primer lugar, (…) Según la conciencia que uno tenga
de sí mismo, esto es, dependiendo de la fuerza que tenga la autoafirmación del yo” (Fazio, 2002)
es decir que es casi una necesidad del hombre asumir la espiritualidad como otra dimensión que
le compone integralmente.
Sioren Kierkegaard plantea tres etapas del desarrollo ético del hombre: la etapa estética,
donde el ser es un ser inmediato que vive en un absurdo, carente de espiritualidad ahogado en el
aburrimiento; la etapa ética donde llega a la desesperación causada por la inmediatez de lo
31
estético, inicia el camino para lograr la trascendencia ética a través de elementos como el
arrepentimiento, la desesperación por el absurdo, lo absoluto y real; La tercera etapa es la
religiosa que implica mediante la realización personal llegar a ser alguien frente a Dios.” (Fazio,
2002) Estos planteamientos permiten comprender cómo la dimensión ético moral forma parte
del Desarrollo Humano, donde parte de asumir la existencia es reconocerse a sí mismo.
No se afirma con ello que haya alcance de una realización ética de la autora, sino de la
contradicción espiritual presente en el texto para alcanzarla. Hay alguien agobiado tocando las
puertas de su propia espiritualidad para encontrarse, “He respirado, he leído la biblia” son
acciones para para adscribirse a una dimensión espiritual heredado de un sistema de creencias
que adquirido culturalmente.
En el texto está fuertemente la afiliación a la tradición judeocristiana, la exclamación
“¡Alguien que me salve!- nada me salva” revela el pensamiento propio de la tradición occidental
que acude figuras del mesiánicas para encontrar bienestar propio. El “dios” que “pide un taxi y
evita que muera esta noche” es el hombre mismo como redentor, a quién se acude cuando no se
tiene nada más, y es que según Kierkegaard, es a Dios a quien se acude cuando ya el hombre no
es capaz de construir sus propias soluciones.
Hay una desesperación latente en el sentido Kierkegaariano, producida por una vida estética,
vacía y carente de espiritualidad, por lo cual la dimensión Trascendente forma parte del
Desarrollo humano. En el texto la autora requiere de un “dios valiente” para evitar la muerte
física, pero también un Dios metafórico como remedio a la muerte de la existencia, esos
llamados de su existencia facilitan reconocerse a sí mismo.
32
Dimensión Afectiva de la Soledad
El elemento emocional más destacable del Texto sin título 1 es la Soledad. Todos los seres
humanos experimentan la sensación de soledad constantemente, hay ocasiones donde se halla el
hombre únicamente consigo mismo, lo cual no tiene por qué ser un problema; Sin embargo hay
que preguntarse cómo se relaciona cada individuo con la soledad.
En el Texto sin título 1, la relación que construye la autora con la soledad es la emoción de la
melancolía, lo que se traduce en aislamiento interno y sensación de abandono, significados
atribuidos por la dimensión afectiva del individuo, y que generan una confrontación personal.
El producto literario al que se hace referencia es un llamado de auxilio a la humanidad para
“evitar morir”, es decir, para no sumirse en la tristeza absoluta, en lo bucólico de las reflexiones
de la autora. Le Breton (1999) desarrolla la idea de la necesidad del hombre por buscar consuelo
cuando sufre, el texto es esa búsqueda de un bálsamo para el dolor, el clamor por la confortación.
Cabe preguntarse si tal dependencia por la presencia de otros es saludable para el
Desarrollo Humano, probablemente la respuesta es no, ya que el sujeto debe aprender a lidiar
consigo mismo, comprender que solo se tiene a sí mismo y que una relación afectiva con la
soledad desde lo positivo tiene otra serie de implicaciones, como el tiempo y el espacio para la
autoconstrucción.
33
Reconocimiento del “Yo” Sensible
Texto sin Título 2
Lo que recubre mis entrañas no es verdugo,
la poesía me habita
a mi modo sigo viva
Soy yo violentamente.
En este texto se evidencia un claro proceso de individuación, pues se representa el
reconocimiento del Yo. “Soy yo violentamente” es un enunciado para analizar en dos partes:
“Soy yo” es profundamente significativo porque tiene la contundencia para posicionar a la
autora como dueña de sí misma, confirma su propia existencia.
Ser “violentamente” es poner en movimiento, “emocionar”, conforma el Sí mismo. Expresa
la pulsión de vivir, existir violentamente no es ser violento, sino encontrarse cargado de pasión.
La existencia es inherente a tormentas emocionales y debates del sentir, se compone de
emociones constructivas y destructivas. “A mi modo sigo viva” muestra la manera en que
permanecer es un enfrentamiento constante, es la ambigüedad entre eros y thanatos, pulsiones en
oposición, instinto mortal y vital.
El texto posiciona a la autora como sujeto sensible “Lo que recubre mis entrañas no es
verdugo” acepta lo visceral del sentir y no lo condena a ser negativo y/o insano, reconoce esta
característica como una faceta de la existencia que edifica al Yo. “La poesía me habita” es la
34
sensibilidad configurando el Sí mismo, asumiendo los modos de sentir como experiencias
estéticas que hacen que cada quien sea uno diferente, construyen un mundo de la representación
que la autora elabora sobre su propia vida.
El texto es pertinente porque logra conectar al hombre con su subjetividad, aporta al
Desarrollo Humano de la autora porque le permite contemplarse holísticamente, sacar a la luz
elementos inconscientes y consciente que la hacen un todo, la construyen como individuo.
Idealización de la Muerte, otra Dimensión del Yo
Texto sin título 3.
Juego el juego de fingirme muerta,
me pongo al espejo con la mirada vacía y veo de reojo,
me doy miedo.
Acurrucada a oscuras en la cama
la idea del suicidio me devuelve a la vida,
siempre habrá una salida – me dice- a la lentitud y al sufrimiento.
Me escucho respirar en mi tumba.
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El texto refleja la búsqueda de soluciones a un mundo emocional de padecimiento, “a la
lentitud y al sufrimiento”, para ello se vale de la idealización de la muerte, que puede ser
interpretada de múltiples maneras. “Matarse, en cierto sentido, y como en el melodrama, es
confesar. Es confesar que se ha sido sobrepasado por la vida o que no se la comprende” Camus
(p.6), en el texto hay una confesión de la autora sobre su incapacidad para encontrar salidas a las
situaciones emocionales por las que transita.
Hay una ambivalencia en la construcción del Sí mismo, Vall habla de “la relación entre un
Yo debilitado por la pérdida del objeto que trata de agraciar a un Súper-Yo sádico” (Valls, 1985,
p.30) en el primer párrafo del texto existe la dicotomía del autora entre la idea “sádica” de
imaginarse a sí mismo muerto, y a otra complaciente, en su opuesto casi que masoquista,
reflejada en el miedo que genera la idea misma.
Este análisis no es una apología al suicidio, sino que desentraña su idealización en la mente de
la autora. Durkheim (1887), aunque estudia el suicidio desde la sociología, reconoce en él la
emocionalidad y la interrelación con el mundo “si no pueden defender cuidadosamente su
delicadeza enfermiza de los choques con el exterior, tienen muchas probabilidades de
experimentar más dolor que placer. Estos organismos son terreno abonado para la idea del
suicidio” (Durkheim, 1887, p.34), es ese sentido la persona con idealizaciones suicidas
experimenta mayor displacer, la autora menciona la lentitud y al sufrimiento, dos estados
emocionales correspondientes a la Tristeza y aversión (Chabot y Chabot, 2009) que le conduce a
pensar en la idea de la muerte como opción, siempre habrá una salida, una ruptura con el
Absurdo de la vida (Camus, 1942)
La idealización suicida refleja inestabilidad emocional: “la extremada sensibilidad de su
36
sistema nervioso, sus ideas y sus sentimientos siempre están en equilibrio inestable. Las
impresiones más ligeras tienen en él un eco anormal, su actividad mental acaba patas arriba
(Valls, 1985, p.35) Valls tal desequilibrio es una constante en el mundo emocional de la autora,
se refleja en el texto en la relación dialéctica con la muerte, en lo atemorizante y lo gratificante
que conviven alternamente.
El texto presenta una imagen de dos sujetos opuestos, al estilo de doctor Jekyll y Mr. Haig,
hay una construcción mental de la autora que la sustraerse de sí en la imagen poética: Me
escucho respirar en mi tumba. En tal construcción existe individuación “el suicida no desea
salvar todo de sí, sólo sus partes «buenas»: lo inmortal ha de ser un self fantaseado y no logrado
(o su self perdido).” ” (Valls, 1985, p.32) con la frase la idea del suicidio me devuelve a la vida
fantasea y se autoconstruye, la autora “asesina” una parte de sí misma, la que le genera dolor,
pero se escucha respirar la otra parte, vuelve a la vida.
El texto acerca al lector a las imágenes poéticas creadas por la autora para facilitar el
reconocimiento de emocionalidad y construcción de subjetividad,
(…) el suicidio surge en este contexto y frecuentemente cuando la inhibición empieza a ceder,
es decir, cuando reanuda sus relaciones con objetos externos. En este momento se le hace más
accesible al sujeto el fracaso de su búsqueda de una nueva identidad y el suicidio se
constituye en un intento de restitución de la autoestima.” (Valls, 1985, p.32)
Puede verse que no es un reflejo de alguna neurosis que le lleva a una idealización de la
muerte, sino una necesidad de construcción propia.
El impulso de muerte para Camus es “Matarse, en cierto sentido, y como en el melodrama, es
confesar. Es confesar que se ha sido sobrepasado por la vida o que no se la comprende” (Camus,
37
1942, p.6) es decir el motor para salid del estado de lasitud en el que el hombre se encierra.
Corporalidad
Texto sin Título 4.
No respiro.
Hay un dolor más grande que mis propias penas,
soporto en el pecho la gravedad del mundo
lloro fuerte para no morirme de silencio.
Cuerpo fuerte
Tapadas mis fosas inhalo por la boca
me revuelco entre el llanto
pero mi boca solo exhala lamentos.
Siento espasmos en el vientre
expulso dolor por cada esfínter
me retuerzo.
Entre lágrimas y arrugas sujeto mi cuerpo
estrujo mi cabeza para ahogar los pensamientos
me compadezco del rostro rojo y enfermo del espejo.
Pende mi alma,
partes mías no han caído
38
no pueden saltar de mi garganta,
le tengo pánico al tiempo,
no respiro.
Materia en los labios y anatemas en la boca,
aruño mi rostro y abrazo mis piernas
toco mi pecho y me unto de mis agujeros
Siento alegría de mi muerte,
¡Angustioso descenso!
Desaparezco
no queda rastro mío.
Ambos textos exponen la existencia del Dolor y el Sufrimiento como elementos que
construyen una corporalidad, esta se asocia con la consciencia de sí mismo, proviene del
ejercicio consciente de la experiencia de sí mismo y el modo como se reconoce en la
corporalidad; “Es posible comprender las condiciones simbólicas y el uso cultural de formas de
modelado del cuerpo, cuyo alcance trasciende a su mera conformación somática y cabe más bien
entender como intenciones de transformación personal y de modelado del yo” (Pedraza, 2004, p.
2), Así, la corporalidad viene a constituir una de las variables definitivas de la subjetividad
contemporánea y es elemento clave en la construcción de individuación en el ser humano.
El individuo requiere tomar consciencia de su cuerpo para construirse como sujeto, ““por
cuanto le permite al ser humano ser consciente de ella a través de la cenestesia y, luego,
establecer vínculos emocionales mediante el cuerpo.” (Pedraza, 2004, p. 9) estos vínculos
emocionales se generan de múltiples maneras porque los hombres habitan en cuerpo de múltiples
39
maneras, en “Cuerpo fuerte” y en el Texto sin título 3, los vínculos emocionales surgen desde la
experimentación del dolor y el sufrimiento.
El Dolor existe como hecho psicológico y antropológico, está en la dimensión afectiva del
hombre “(Ética a Nicómaco, libro 11), “Sin embargo, para comprender las sensaciones en las
cuales está en juego el cuerpo no hay que buscar en el cuerpo, sino en el individuo, con toda la
complejidad de su historia personal.” (Le Breton, 1999, p. 10) el dolor no existe en la dimensión
corporal sino que se produce en un interior de sujeto, es decir en su dimensión emocional.
El sufrimiento es el resultado de procesos de interpretación del ser sobre el dolor “No hay
dolor sin sufrimiento, es decir, sin significado afectivo que traduzca el desplazamiento de un
fenómeno fisiológico al centro de la conciencia moral del individuo.” (Le Breton, 1999, p. 12)
los textos de esta categoría muestran la fusión entre lo fisiológico y lo afectivo, abundan líneas
como “No respiro. Hay un dolor más grande que mis propias penas” o “Pende mi alma, partes
mías no han caído, no pueden saltar de mi garganta” las cuáles muestran la convergencia entre
lo emocional y lo físico como unidad, las penas o el alma, intangibles, retoman formas físicas en
la imagen que producen.
Aunque ambos elementos emocionales conforman la corporalidad antes explicada, no se está
afirmando que la corporalidad de la autora está conformada únicamente por estos dos elementos,
sino que se demuestra que hay una unidad formada entre el cuerpo y la emocionalidad que
aportan a la construcción del Sí mismo o Sujeto. Además de asume el dolor y el sufrimiento
como categorías antropológicas que también componen el ser.
40
Más que ir a la representación del cuerpo explícita en las figuras literarias utilizadas, la
intención de la autora es aproximarse al acto de representación poética de imágenes expresivas,
busca transmitir una sensación a través de la performance emocional, entendida como la
representación de situaciones emocionales a través de algún tipo de lenguaje, en este caso
escrito.
Tal performance emocional en Cuerpo Fuerte se produce en el tránsito de autora por un
proceso de duelo, justamente después de la negación e inicio de una etapa de depresión. El Texto
sin título 4 no tiene una ubicación dentro de un suceso concreto, sino se origina en una reflexión
sobre el mundo angustioso interno que suele habitar la autora.
Deambulo
Soy alma sonámbula en mi propia casa
siento ajena la sombra mía del espejo;
Al pensar en lo oscuro, es otra voz la que habla
discute sobre los peldaños de la escalera y el papel del silencio.
Después de las ocho el tiempo no existe,
mi cuerpo tampoco
¿las horas? lamentos,
¿los minutos? reproches,
¿los días? perdidos.
Vivo en un rezo.
41
Expresión de emocionalidad a través del cuerpo
El cuerpo es un escenario de expresión y representación de las emociones “los gestos de la
cara y, por extensión, los signos corporales constituyen la puerta de acceso a los estados
emocionales” (Moscoso, 2011, p.24) las descripciones literarias de los textos de esta categoría
son una puerta de acceso al espacio emocional experimentado, expresiones como “Siento
espasmos en el vientre, expulso dolor por cada esfínter,” “Tapadas mis fosas inhalo por la boca”
son muestra de la emocionalidad vivida en el cuerpo, cómo la toma de consciencia sobre esta
permite el reconocimiento de la dimensión afectiva del ser, parte del Desarrollo Humano
integral.
Para Lacan, el Sí mismo se conforma por las representaciones de las experiencia corporales,
el cuerpo no es carne y hueso “somos lo que sentimos de nuestro cuerpo: soy el cuerpo que
siento y el cuerpo que veo” (Nasio, 2008, p. 56) en ambos textos analizados está constante la
construcción de sí “Pende mi alma, partes mías no han caído, no pueden saltar de mi garganta”
refleja el vínculo de lo sentido y lo vivido.
El texto Deambulo expresa una dicotomía entre el ser vivido y el ser visto, lo que según Nasio
(2008) es la imagen Inconsciente del Cuerpo y la Imagen Especular. “el yo está, pues,
compuesto por dos imágenes corporales diferentes pero indisociables: la imagen mental de
nuestras experiencias corporales y la imagen especular de nuestro cuerpo” (Nasio, 2008, p.57) La
imagen inconsciente del cuerpo, según François Dolto, es el tipo de imagen del Sí mismo a
través de las sensaciones internas experimentadas por el cuerpo, “Este tipo de imágenes, aunque
reprimidas, permanecerán vigorosamente activas a lo largo de la existencia y se exteriorizarán
continuamente a través de innumerables manifestaciones espontáneas de nuestro cuerpo” (Nasio,
2008, p. 23)
42
El segundo tipo de imagen es la que se genera desde la contemplación de la propia imagen,
que no es objetiva sino distorsionada por el mundo emocional construido y por la relación
emocional del ser con el cuerpo “nuestro yo es un conjunto de imágenes de uno mismo
cambiantes y con frecuencia contradictorias y la causa de esa disparidad es la vivencia subjetiva
de nuestro cuerpo” (Nasio, 2008, p. 57) “siento ajena la sombra mía del espejo; Al pensar en lo
oscuro es otra voz la que habla” representa la disociación de lo visto y lo vivido, cómo lo
especular puede significar un engaño si no corresponde al espacio interior, está presente
nuevamente un ser escindido, que discute consigo mismo.
El enunciado “Después de las ocho el tiempo no existe, mi cuerpo tampoco” expone también
cómo vivir el cuerpo es una experiencia temporal que tiene que ver con la consciencia sobre sí,
conduce a la reflexión de si vida es sinónimo de actividad, y de ser así, ¿se está vivo aún en una
vida llena de letargo, sin actividad y sin cambio? “vivo en un rezo” afirma la posibilidad de
existir sin estar, cómo la autora se siente encerrada en un eterno retorno, se realiza las preguntas
sobre la vida y el sentido de ella en la repetición de los días, al igual que Albert Camus en el
Mito de Sísifo.
Ante tal reflexión puede pensarse cómo la existencia debe tener un componente emotivo, es
decir, algo que le ponga en marcha. El ser humano se convierte en esclavo de lo rutinario, pierde
la consciencia de sí y se abandona a lo repetitivo: “¿las horas? lamentos, ¿los minutos?
reproches, ¿los días? Perdidos” tales palabras representan para la autora el absurdo de la
existencia, puede ser un día de procrastinación, pero también puede ser la cotidianidad de un
sujeto cualquiera, “Levantarse, coger el tranvía, cuatro horas de oficina o de fábrica, la comida,
43
el tranvía, cuatro horas de trabajo, la cena, el sueño y lunes, martes, miércoles, jueves, viernes y
sábado con el mismo ritmo es una ruta que se sigue fácilmente durante la mayor parte del
tiempo. Pero un día surge el "por qué" y todo comienza con esa lasitud teñida de asombro”
(Camus, 1942, p.9) La rutina es la manifestación de la lasitud de la que habla Camus, a través de
Deambulo se toma consciencia de ello, se identifica la vida enajenada y se rompe con el estar sin
estar de la autora.
44
Conclusiones
El trabajo “Emocionalidad e individuación en la producción literaria personal” aporta a la
producción de conocimiento en la dimensión teórica, personal y metodológica. En este apartado
se enunciarán las conclusiones de la investigación:
✓ El análisis de la emocionalidad y los procesos de individuación generó seis categorías:
Lo Afectivo y la Otredad; Desarrollo Ético-Moral, Dimensión afectiva de la soledad;
Reconocimiento del “Yo” Sensible, Idealización de la Muerte, otra Dimensión del Yo; y
Corporalidad. Cada categoría permite identificar y comprender el contenido emocional
en el marco de la construcción del “Sí mismo” que contribuye al Desarrollo Humano
personal.
✓ El ejercicio de creación literaria aporta al Desarrollo Humano, en tanto ofrece
mecanismos de expresión de la interioridad, reconstruye elementos inconscientes para
permitir la toma de consciencia de sí, faculta al individuo para construir una relación
estética con su emocionalidad, su entorno y la representación de ambos. Permite un
Desarrollo Integral al contactarlo con su dimensión trascendente, cognitiva y afectiva.
✓ En el trabajo investigativo logra entenderse la escritura como un espacio de expresión y
representación de la emocionalidad y la subjetividad, a través de la construcción teórica
y el análisis de la creación literaria personal.
✓ El desarrollo de la investigación tiene coherencia con el diseño metodológico propuesto.
El enfoque investigativo fenomenológico permitió la comprensión de los fenómenos de
emocionalidad y procesos de individuación, a través de la visión hermenéutica de las
creaciones literarias analizadas.
45
✓ Un producto creativo permite contemplar el mundo emocional en retrospectiva. Los
textos analizados en esta investigación tienen temporalidad, imaginería y espacialidad,
son un mapeo de la emocionalidad de la autora y establecen una ruta de individuación y
comprensión del “Sí mismo”
✓ Este trabajo de investigación aporta teóricamente a la comprensión de la emocionalidad
y la subjetividad, abre rutas metodológicas que pueden ser utilizadas en otras
indagaciones afines y contribuye a la construcción de conocimiento interdisciplinar.
46
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50
Anexos
Anexo 1. Matriz de análisis para categorización de textos.
CATEGORÍAS Y
ACOTACIONES
Título del texto para analizar.
Texto para analizar
Anexo 2. Corpus literario.
No vienen
Odio a los otros porque no tienen respuestas
Les odio porque imagino que nadie sufre como yo
Les odio buscando motivos.
Odio a los otros por no estar, porque no me ayudan a olvidar
les odio porque no tienen sexo para cesarme
les odio porque no me reconocen
les odio porque no secan mis lágrimas, ni saben qué decir cuando sollozo.
Odio a los otros por ser tan humanos,
tan psicólogos y cristianos con sus verdades a medias,
les odio porque no me abrazan
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porque les llamo y no me escuchan, no entienden
les odio tanto que les necesito, necesito sus oídos,
sentir pena de mí en ellos.
Ni con ellos-Ni sin ellos
No puedo estar con alguien y sin alguien,
aún rodeada de afectos les detesto,
y sin embargo sola, les extraño a cada instante.
Clamo a lágrimas arrullo
y si alguien me lo brinda no lo quiero
ando asqueada, insatisfecha y vulnerable.
Les amo también
por su abrazo me doblego
y por aprobación busco su afecto.
No juego
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yo no juego,
en verdad les aborrezco.
Texto sin título 1.
¡Alguien que me salve!
Nada me salva.
He respirado,
he leído la biblia,
me he vuelto cristiano.
Temo a mis palabras herejes pero nada me salva,
nadie con valentía,
ningún dios pide un taxi pide un taxi y evita que muera esta noche.
Texto sin Título 2
Lo que recubre mis entrañas no es verdugo,
la poesía me habita
a mi modo sigo viva
Soy yo violentamente.
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Texto sin título 3.
Juego el juego de fingirme muerta,
me pongo al espejo con la mirada vacía y veo de reojo,
me doy miedo.
Acurrucada a oscuras en la cama
la idea del suicidio me devuelve a la vida,
siempre habrá una salida – me dice- a la lentitud y al sufrimiento.
Me escucho respirar en mi tumba.
Texto sin Título 4.
No respiro.
Hay un dolor más grande que mis propias penas,
soporto en el pecho la gravedad del mundo
lloro fuerte para no morirme de silencio.
Cuerpo fuerte
Tapadas mis fosas inhalo por la boca
me revuelco entre el llanto
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pero mi boca solo exhala lamentos.
Siento espasmos en el vientre
expulso dolor por cada esfínter
me retuerzo.
Entre lágrimas y arrugas sujeto mi cuerpo
estrujo mi cabeza para ahogar los pensamientos
me compadezco del rostro rojo y enfermo del espejo.
Pende mi alma,
partes mías no han caído
no pueden saltar de mi garganta,
le tengo pánico al tiempo,
no respiro.
Materia en los labios y anatemas en la boca,
aruño mi rostro y abrazo mis piernas
toco mi pecho y me unto de mis agujeros
Siento alegría de mi muerte,
¡Angustioso descenso!
Desaparezco
no queda rastro mío.
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Deambulo
Soy alma sonámbula en mi propia casa
siento ajena la sombra mía del espejo;
Al pensar en lo oscuro, es otra voz la que habla
discute sobre los peldaños de la escalera y el papel del silencio.
Después de las ocho el tiempo no existe,
mi cuerpo tampoco
¿las horas? lamentos,
¿los minutos? reproches,
¿los días? perdidos.
Vivo en un rezo.
