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UNIVERSIDAD EAN FACULTAD DE HUMANIDADES Y CIENCIAAS SOCIALES COMPETENCIAS COMUNICATIVAS II ENSAYO ALUMNA MARIANA GARCIA RODRIGUEZ PROFESORA ANGELICA MARIA GUZMAN

Ensayo Final

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UNIVERSIDAD EAN

FACULTAD DE HUMANIDADES Y CIENCIAAS SOCIALESCOMPETENCIAS COMUNICATIVAS II

ENSAYO

ALUMNAMARIANA GARCIA RODRIGUEZ

PROFESORAANGELICA MARIA GUZMAN

BOGOTA D.C., 05 DE JUNIO DE 2015

El comportamiento humano frente a todas las acciones que se realizan en el medio ambiente es crucial para el desarrollo y la preservacin de este. Sin duda alguna los animales son parte vital de la naturaleza, cumplen una importante funcin en ella y adems es innegable que alegran y enriquecen la vida del ser humano. Es cierto tambin que la humanidad ha hecho un uso indiscriminado de los animales, sin tener la potestad de hacerlo y todo esto acosta de su sufrimiento. Las grandes instituciones multinacionales que hacen uso de los animales con fines cientficos, ponen en tela de juicio el aspecto moral y la responsabilidad que tiene la humanidad frente a otras especies. Como lo afirma (Pardo A), los animales son, como nosotros, seres vivos, pertenecientes a la naturaleza; no existe ninguna diferencia cualitativa radical entre el hombre y los dems seres vivos, todos son un cmulo de clulas que funcionan coordinadamente. En el caso de los animales, estos tambin tienen su autoconciencia, son capaces de sentir y de sufrir, del mismo modo que los humanos (quiz con diferencias de grado segn el animal del que se trate). El hecho de que no sufran en el mismo grado de un humano no limita a estos seres a ser denominados como objetos y no como sujetos, que si bien no tienen la mismas caractersticas humanas, si son seres vivos, comparten el misterio de la vida, y su dignificacin no puede depender de las caractersticas que se asemejen o no a la humanidad para ser merecedores de este trato digno.Una de las caractersticas que diferencian al ser humano de otras especies es que es un sujeto tico; es decir, est genticamente capacitado para prever las consecuencias de sus actos, para hacer juicios de valor y distinguir el bien del mal, eligiendo libremente hacer lo uno o lo otro, (RODRIGUEZ E). Es decir tenemos la capacidad de asumir deberes y responsabilidades con las criaturas que nos rodean porque de alguna manera u otra podemos prever las consecuencias que causaramos con nuestras acciones y la incidencia positiva o negativa del uso que le demos a nuestros recursos. En el aspecto cientfico la biotica comprende los problemas relacionados con valores, conductas y principios que surgen en todas las profesiones de la salud, y son aplicados a las investigaciones biomdicas; abordan cuestiones sociales relativas a la salud pblica y amplan su marco hasta la experimentacin animal y los problemas del medioambiente.( ACOSTA, J. R). No podemos referirnos nicamente a un marco de la Biotica para establecer los parmetros de responsabilidad con los animales, sino debemos hacer referencia a la conciencia humana en general Que tan consientes somos de la responsabilidad que tenemos con los seres vivos?, limitar esto a un marco de la biotica es como delegar la moralidad solo a un grupo de cientficos, por ello ser concientes como sociedad de los daos que se causan con los procesos cientificos que las grandes instituciones multinacionales, nos lleva a tomar un papel de reguladores, y no de simples observadores, y quiz tomar conciencia sobre los efectos negativos que se causan a los animales con los distintos procesos de testeo y experimentacin animal, nos llevan a considerar el sufrimiento que pueden llegar a soportar estos seres, un dolor fsico y una alteracin psicolgica, solo para satisfacer nuestra necesidad de saber si nuestros inventos funcionaran bien o no sobre un humano.El dolor, por su parte, es definido como una experiencia sensorial y emocional no placentera asociada con el dao potencial tisular (Kohn, et al., 2007). Varios estudios han mostrado la importancia de identificar y tratar el dolor, ya que al igual que el distrs, puede afectar el desarrollo de los ensayos y es indicador evidente de sufrimiento en el animal experimental (OECD, 2002; Roughan & Flecknell, 2003; Stokes, 2000).