7
0 LA ORACIÓN SACERDOTAL JUAN 17 JHONY ALEXANDER CEBALLOS GUERRERO Taller requerido en la asignatura de JUAN Y LOS ESCRITOS JOANICOS PBRO. LIC. JAIME RESTREPO SALDARRIAGA SEMINARIO DIOCESANO SAN JUAN EUDES CICLO DE TEOLOGIA JERICÓ ANTIOQUIA 2014

Ensayo Juan capitulo 17

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Ensayo Juan capitulo 17

0

LA ORACIÓN SACERDOTAL

JUAN 17

JHONY ALEXANDER CEBALLOS GUERRERO

Taller requerido en la asignatura de

JUAN Y LOS ESCRITOS JOANICOS

PBRO. LIC. JAIME RESTREPO SALDARRIAGA

SEMINARIO DIOCESANO SAN JUAN EUDES

CICLO DE TEOLOGIA

JERICÓ ANTIOQUIA

2014

Page 2: Ensayo Juan capitulo 17

1

SAN JUAN 17

A MANERA DE INTRODUCCION

Para entender el capítulo XVII del Evangelio de San Juan, hay que leer

precisamente todo el evangelio, descontextualizar esta oración impedirá hacer

una mirada crítica desde el punto de vista exegético y entenderlo con

verdadero espíritu de oración desde el punto de vista de fe.

A lo largo del semestre hemos ido reflexionando sobre el estilo literario, las

formas y figuras empleadas por el escritor sagrado, hemos profundizado en

algunos signos, en su teología, que resulta ser bastante amplia e inabarcable,

lo que implica una responsabilidad mucho más seria para adentrarse en la

lectura acertada del cuarto Evangelio. El presente trabajo, se sirve de estos

elementos de clase y de otras fuentes bibliográficas -algunas coincidentes otras

disidentes entre sí, pero todas ricas en contenido y toma de posturas-, para

realizar una reflexión en torno al texto ubicándolo en su contexto y

presentándolo de manera somera, no digo profunda, porque ciertamente un

trabajo como este no agota ni un mínimo porcentaje la grandeza y amplitud

exegética y espiritual de la oración sacerdotal.

1. CONTEXTUALIACION

El capitulo 17 continua un largo discurso que viene desde el capitulo 13,

terminado el lavatorio de los pies y su posterior explicación, Después de

retirarse el traidor Judas (Jn 13, 31) empieza el primer discurso de despedida.

“Ahora que tiene lugar la separación en el círculo íntimo de los discípulos,

Jesús está reunido sólo con sus verdaderos leales, los suyos en sentido

auténtico”.1 Con ello se describe también el círculo de los destinatarios de este

discurso. “Ya no se dirige, como toda la parte primera del Evangelio de Juan a

los que están fuera, al «mundo», sino que se endereza a quienes han

encontrado el camino de la fe en Jesús. Apunta a la comunidad interna (el

grupo íntimo) de los creyentes.”2

Este capítulo dentro de lo que se denomina discursos de despedida, se

distingue de los anteriores como un género literario especial, incluso desde el

punto de vista externo, como plegaria de Jesús al separarse de sus discípulos.

1 BLANK, Joser. El evangelio de San Juan. Tomo II. Herder. Barcelona, 1979. P 55 2 Ibíd.

Page 3: Ensayo Juan capitulo 17

2

De todas las cuestiones que esta solemne oración plantea –Estructura, estilo,

sentido y género literario- hay que decir también que solo aparece en el

evangelio de San Juan, nada parecido aparece en los evangelios sinópticos3

“se impone la sospecha de que Juan 17, es una composición de de la escuela

joánica para exponer con mayor profundidad el «tránsito» de Jesús desde el

mundo al Padre (…) es además una súplica de Jesús por su propia

glorificación”4

2. DIVISIÓN

a. 17,1-5 presenta a modo de compendio la revelación de Jesús y su

importancia;

b. 17,6-19 es una plegaria por los discípulos que se quedan en el mundo;

c. 17,20-24 es una oración por la comunidad futura;

d. 17,25-26 constituyen el final de la oración.

3. ESTILO LITERARIO

No es fácil encasillar la oración de Jn 17 en una forma literaria, más bien está

emparentada con las palabras y bendiciones de despedida que pronuncian los

patriarcas en la tradición bíblica y judía. Recoge en todo caso la idea de

intercesión de otros pasajes. Este estilo particular de oración es propio del

Jesús de la Escuela joánica.

4. LA ORACIÓN SACERDOTAL

El nombre de «oración sacerdotal»5 no es exegéticamente incorrecta, pues

Jesús ejercita en ella, la función de intercesor ante el Padre en favor de los

suyos6, tal como la primitiva concepción cristiana la había atribuido al Cristo

glorificado ante la presencia de Dios7 se descubre una clara expresión del

ministerio sacerdotal de Jesús, referida, con toda probabilidad, a su pasión en

la que Jesús mismo, se ofreció como víctima. Así las cosas, la oración habría

3 Cfr., Schnackenburg, Rudolf. El evangelio según San Juan. III Version, comentario e índices. Herder, Barcelona. 1980. P. 210 4 Ibíd. P. 211 5 Tal designación se debe al teólogo protestante Luterano David Chytreus (1531- 1600) que

estudió en Tubinga y en Wittenberg con Melanchton. Su verdadero nombre era Kochhafe. Promotor de

la reforma. Profesor en la Universidad de Rostock y también participó en la fundación de la universidad de Helmstedt. (Tomado de “The general biographicalDictionary” col IX de Alexander Chalmes . Artículo en Línea: en https:// books.google.com.co / 6 cf. Jn 17,6-24 7 cf. Rom 8,34; lJn 2,1s; carta a los Hebreos,

Page 4: Ensayo Juan capitulo 17

3

que verse como una oración consecratoria de Jesús con vistas a su muerte

inminente.8 Jesús ora como Sumo sacerdote9 su oración, según la

consideración del sacerdote licenciado en teología Heriberto Rivas, tiene un

tono muy particular, pues las expresiones utilizadas dejan ver la actitud de

alguien que tienen la plena certeza de su poder, esta oración no se parece a la

del Jesús temeroso del Getsemani que presentan los sinópticos, este Cristo ya

sabe que está en la gloria.10

4.1. Jesús revelación del Padre

Jesús da por terminada la “obra” y pide su Glorificación, poniendo en primer

lugar en forma enfática el pronombre “Tu”, y añadiendo la invocación “Padre”.

Luego en forma reiterada dice: “Glorifícame junto a Ti, con la gloria que tenía

junto a Ti antes que el mundo existiera” (Jn 17, 5), recuerda esta parte de la

oración, el comienzo del evangelio: “En el principio existía el logos, y el logos

estaba con Dios, y el logos era Dios” (Jn 1, 1). El logos como la sabiduría del

Antiguo Testamento que estaba en el principio junto a Dios, antes de la

creación del mundo.

Jesús manifiesta de manera explícita que El es el Logos preexistente,

encarnado en la historia, que retoma la gloria eterna junto al Padre.

Se suma a esto el hecho de que la oración de despedida de Jesús representa

como un compendio de todo el evangelio de Juan y de su teología de la

revelación. La importancia de sus afirmaciones sólo puede valorarla quien

conoce, de algún modo, el cuarto evangelio, y sobre todo quien conoce los

discursos de despedida. Sin ello es imposible medir sus profundidades. Así lo

afirma E. Kasemann11 «Cualquiera que sea la respuesta dada al problema del

lugar originario del capítulo, indiscutiblemente constituye un compendio de los

discursos joánicos y, en esa medida, una réplica del prólogo».

La oración contiene, pues, toda la teología joánica de la revelación, sólo que ya

no bajo la forma de una enseñanza por obra del revelador, sino al modo de un

proceso orante vivo, como una especie de liturgia terreno-celestial.

4.2. Comunidad y unidad

Se vislumbra en esta oración lo que, según Juan, es la comunidad cristiana en

su esencia espiritual más honda, y no simplemente según su aspecto externo

8 Cfr. BLANK, Op. Cit., p 247 9 San Cirilo de Alejandría lo l lama “nuestro sumo sacerdote” en “In Ioh 17, 9; PG LX -XVI, Citado en RIVAS, Luis Heriberto. El evangelio de Juan. Ed. San Benito, Buenos Aires. 2006. P437 10 Cfr., RIVAS, Luis Heriberto. El evangelio de Juan. Ed. San Benito, Buenos Aires. 2006. P. 438 11 Ernst Käsemann Luterano teólogo, Doctor en Biblia y profesor de Nuevo Testamento en Maguncia (1946-1951), Göttingen (1951-1959) y Tubinga (1959-1971).

Page 5: Ensayo Juan capitulo 17

4

sociológico; muestra claramente cuál es su concepción de la Iglesia. Esa

concepción se desprende sobre todo de su palabra clave, que es la «unidad».12

Jesús invoca al “Padre Santo” y ruega por una especial protección para los

discípulos. Ellos que han guardado la Palabra de Dios, para que sean

guardados en el ámbito seguro de la santidad de Dios; y sean como El y el

Padre, “Uno”13 y añade además “uno como nosotros” (Jn 17, 11b). Pero no es

una unidad excluyente y excluida, se trata de “participar de la Unidad

proclamada entre el Padre y el Hijo, unidad separada del mundo, pero con una

misión hacia el mundo”14

La súplica de Jesús por los suyos es un indicio de que todo el proceso, se

desarrolla en el marco de una libertad gratuita o, lo que es lo mismo, en el

marco del amor divino, que, de una vez para siempre, ha abierto la obra

reveladora de Jesús15. En ese «marco» Jesús y los suyos forman una sola

realidad. La protección de Dios no representa en ningún caso para la fe un

«mundo feliz» en esta vida. De lo que debe ser preservada la comunidad es

ciertamente del «mal» -incredulidad, la mentira y el odio- La comunidad

necesita por ello de la santificación, es decir, de la acomodación permanente a

la índole y naturaleza de Dios: «Santifícalos en (o por) la verdad» (Jn, 17, 17).16

En los versículos 20 y siguientes se contempla a la Iglesia en su prolongación

temporal: «No sólo por éstos te ruego, sino también por los que, mediante su

palabra, van a creer en mí...» (v. 20). Siempre habrá hombres que, por el

testimonio de los discípulos, llegarán a creer en Jesús. Debe entenderse

entonces en el sentido de una prolongación y continuidad temporal como

espacial. Por la predicación y la fe nace también la continuidad histórico-

temporal de la comunidad así como su unión y trabazón por toda la tierra. La

unidad es el don de Cristo17, presente en la comunidad, unidad, en camino

hacia la unidad completa y colmada “Donde esta Cristo glorificado”. La

deseada unidad se realiza solo en el amor recíproco.

El versículo 24 expresa aún la súplica por la consumación de la comunidad. La

comunidad se mueve en el seguimiento del revelador Jesús. Y ese seguimiento

conduce -como lo manifiestan repetidas veces los discursos de despedida- a

través del «camino», que es Jesús, a la contemplación abierta de la gloria

divina.

12 Cfr., BLANK, Op. Cit., p 248 13 Cfr., Schnackenburg, Op. Cit., p. 226 14 Cfr., RIVAS., Op. Cit., 446 15 Cfr., Schnackenburg, Op. Cit., p. 228 16 Cfr., BLANK, Op. Cit., p 248 17 Cfr., BLANK, Op. Cit., p 2

Page 6: Ensayo Juan capitulo 17

5

4.3. PADRE SANTO

Terminar la oración invocando nuevamente al Padre, expresa el deseo de

Jesús de que los suyos contemplen su Gloria. Jesús ya no ruega sino que

manifiesta su deseo de la consumación de los suyos, sabe que en su voluntad,

esta también la voluntad del Padre.

La conclusión recoge una vez más todos los motivos esenciales de la plegaria,

al tiempo que reafirma que en esta oración queda abierto el verdadero lugar de

la comunidad creyente. Ese lugar no es otro que el amor divino, del que ha

venido el revelador Jesús y al que vuelve de nuevo. Su objetivo era y sigue

siendo para todo el tiempo futuro el de abrir ese espacio a los creyentes y el de

introducirlos en él.

5. CONCLUSION

Como todo el evangelio de san Juan, tan rico en símbolos y contenido, el

capitulo 17 no deja de sorprenderme, muchas veces he leído este pasaje o lo

he escuchado en las celebraciones litúrgicas, pero solo hasta ahora lo veo con

un sentido más amplio, pues visto en conjunto con el resto del evangelio y con

los elementos propios tomados de las clases, me ayuda a descubrir cosas que

no me hubiera imaginado antes, Jesús perfecto revelador del Padre, que

proyecta su misión en el tiempo y la eternidad, que ora y garantiza a quienes

permanezcan en la unidad, la contemplación de la gloria del Padre, que

encamina nuestra Psyje a la Zoe. Pero sobre todo, me hace orar como

aspirante al orden del presbiterado, por todos los que el Padre eligió sin

distinción alguna, como Jesús oro.

Nuevamente es este un impulso para leer las Sagradas Escrituras cada vez

más con espíritu de oración y descubriendo la inagotable riqueza que en ellas

se encuentra, riqueza que no se logra con una lectura superficial o meramente

humana, sino y sobre todo bajo la óptica de la fe.

Page 7: Ensayo Juan capitulo 17

6

6. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

“The general biographicalDictionary” col IX de Alexander Chalmes . Artículo en

Línea: en https:// books.google.com.co /

Biblia de Jerusalen Jn 17,6-24, Rom 8,34; lJn 2,1s; carta a los Hebreos,

BLANK, Joser. El evangelio de San Juan. Tomo II. Herder. Barcelona, 1979. P

55, 247, 248

RIVAS, Luis Heriberto. El evangelio de Juan. Ed. San Benito, Buenos Aires.

2006. P437, 438, 248, 446

Schnackenburg, Rudolf. El evangelio según San Juan. III Version, comentario e

índices. Herder, Barcelona. 1980. P. 210, 211, 226, 228