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El Anillo de Balder MANUEL VELASCO Este es un nuevo capítulo final, publicado en la edición digital pero no en la física. Blog de libros de Manuel Velasco bibliotecaMV.com Blog Territorio Vikingo elDrakkar.blogspot.com

Epílogo - El Anillo de Balder

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Nuevo capítulo final del libro.

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Page 1: Epílogo - El Anillo de Balder

El Anillo de Balder MANUEL VELASCO

!

Este es un

nuevo

capítulo final,

publicado en

la edición

digital pero

no en la

física.

Blog de libros de

Manuel Velasco

bibliotecaMV.com

Blog Territorio Vikingo

elDrakkar.blogspot.com

Page 2: Epílogo - El Anillo de Balder

!1Epílogo:

Y, finalmente, el Ragnarök

Las lágrimas recorrían las mejillas de Odín mientras observaba desde el Valaskialf, su residencia del Asgard, la evolución de la vida en Midgard. Todo estaba ocurriendo como ya predijera aquella völva: “Vendrá el invierno que llaman Fimbulvetr. Entonces caerá nieve en todas las direcciones, las heladas serán grandes y los vientos gélidos. El sol no saldrá. Tres inviernos se sucederán, sin ningún verano en medio. Pero antes vendrán otros tres inviernos en el que sucederán las guerras en todos los mundos; entonces se matarán entre hermanos por avaricia y no respetarán al padre y al hijo ni las matanzas ni el incesto”. Y así era lo que él veía ahora: el intenso frío se mezclaba con terremotos y tsunamis, y en cualquier lugar, la hambruna anulaba cualquier sentido de humanidad.

Terrible era la vida en el Midgard, aunque no era mucho mejor en el resto de los mundos. Y Odín sintió sobre sí el peso del desastre generalizado. Ya nada podía detener el fin de ese tiempo en el que había sido el Altísimo.

Las palabras de Frigga retumbaron en su cabeza: “Somos dioses. No tenemos que aceptar que nuestra creación termine. Tú eres Odín; si no tienes una solución, búscala”. Pero todos sus intentos por mantener la continuidad fueron duras pruebas para él que sólo lograron retrasar aquel temido final, mientras los mundos se mantenían en una lenta agonía, como un animal malherido al que nadie se atreve a rematar.

Y el último gran intento; una idea de Frigga tan grandiosa como inestable: engendrar al sustituto del mismísimo Odín y que fuese la gran esperanza del envejecido Asgard; un dios de tal naturaleza que todos los seres de los nueve mundos lo amasen y que hasta el universo entero dejase de resquebrajarse poco a poco conmovido por ese amor. Un plan perfecto que logró una estabilidad como nunca la había habido… hasta que llegó Loki.

Una nueva lágrima cayó al recordarlo. Realmente llegó a querer a su hermano de sangre, pero ahora, desligado de sentimientos, podía alinear todo cuanto hizo, incluido el incidente que provocó el hermanamiento. ¿Cómo podría haber estado tan ciego para no ver a tiempo todas aquellas estratagemas, juegos y trampas que no tenían otra finalidad que crear confusión y debilidad? Finalmente, el asesinato de Balder, con lo que se borraba definitivamente cualquier esperanza.

Page 3: Epílogo - El Anillo de Balder

!2Tuvo un frío deseo de ver cómo lo habían dejado Thor y sus acompañantes. Ellos creían que habían ocultado su localización por si aun quedaba en su padre algún rescoldo de aquel aprecio fraternal. Pero eso ya no era posible. Y, en cualquier caso, no le costó ningún esfuerzo saber qué había pasado y donde estaba la cueva. Un leve trance le hizo ver algo que en otras circunstancias le hubiera resultado alarmante, pero que ahora miraba como un elemento más en el discurrir de los acontecimientos: Angerboda, la esposa de Loki, entraba en la cueva acompañada por Vafflrú∂nir, uno de los gigantes más sabios con el que había mantenido larguísimas charlas en el pasado. A este no le fue nada difícil romper el conjuro rúnico que mantenía las ataduras de Loki.

Odín miró su rostro. Estaba irreconocible y no sólo por las muestras del dolor producido por el goteo del veneno. Simplemente, era otro. Tras liberarse, se mostró tal como era, como siempre había sido tras la máscara del engaño. Sus ojos parecían hechos de fuego negro y su cuerpo en nada recordaba la antigua fragilidad. Esa imagen se fundió con otra que a Odín le llegaba desde un pasado remoto: era el mismo rostro de Ymir, aquel gigante que matasen él y sus hermanos, y con cuyos despojos formaron los cielos, las montañas y los mares del nuevo mundo.

No quiso ver más de aquello y se preguntó cómo estaría su querido hijo Balder, allá en el submundo. Inmediatamente vio su imagen, pero no la de alguien que se consume lentamente en el Hel, sino como un ser luminoso. Ya se le llamaba así en vida: el brillante, pero nunca ese apodo había tenido tanto significado como ahora. Y no estaba en el Hel, sino protegido por el tronco del Yggdrasil. Comprendió que alguna fuerza superior a los dioses o los gigantes había decidido que así fuesen las cosas, y que aquel anillo forjado por sabios enanos y que sólo su destinatario debía portar, finalmente acabase en uno de sus dedos. ¿Habían sido ellos, desde sus ciudades subterráneas quienes habían movido los hilos de aquella historia?

El toque del cuerno de Heimdal, tocado por primera y última vez, lo sacó violentamente del trance. Todo el Asgard se estremeció ante un sonido nunca antes escuchado, pero reconocido por todos.

La vida que conocían estaba llegando a su fin, pero nadie iba a quedarse esperando con los brazos cruzados. Valkirias y einherjar salieron por las puertas de Valhalla abiertas de par en par y corrieron hacia los campos de Vigrid, donde ya esperaban los dioses armados y dispuestos. En cabeza, el propio Odín, con un yelmo resplandeciente y su inseparable lanza Grugnir en la mano.

Primero se escucharon los gritos lanzados por los gigantes que daban así rienda suelta a su odio milenario y sus ansias de venganza. Después, el muro de Asgard cayó desmoronado, como si sólo estuviese hecho de arena. La presencia jotun oscureció el horizonte.

Page 4: Epílogo - El Anillo de Balder

!3Odín tuve una fugaz última visión de Balder, resplandeciendo más que nunca, extendiendo su poder sobre el Yggdrasil, como protegiéndolo de lo que estaba a punto de ocurrir. Balder había sido engendrado como heredero y continuador de Odín y lo sería, aunque no del modo previsto. Algo parecido a una sonrisa se dibujo en su rostro, aunque esta se borró inmediatamente cuando vio a Loki al mando del barco de los muertos. Entonces invocó a la Furia y lanzó su más terrible grito de guerra. Y así comenzó la batalla del fin de los tiempos.

———

Y tras el Fuego, la Oscuridad reinó sobre la Muerte, como si la Vida nunca hubiese existido. Pero esa muerte no era sino el anticipo de la nueva vida. El chamuscado Yggdrasil emitió una vibración que se expandió como un estremecimiento que recorriese los pocos restos del viejo mundo. Ramas y raíces crecieron velozmente, como si recordaran y recuperaran un tiempo de esplendor.

Yggdrasil estaba preparado para mantener el nuevo mundo. Y un nuevo Sol, que haría reverdecer la nueva tierra. Y siguieron vientos y nubes, mareas y lluvias, y se formaron montañas y valles. Y del nuevo árbol, una nueva pareja que originaría una nueva humanidad bajo la protección de Balder, hijo de Odín; Balder, el luminoso, a quien estaba destinado gobernar el siguiente ciclo.

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cubierta de la edición digital