Upload
espacio-diseno
View
228
Download
1
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Espacio Diseño No. 221 Diciembre 2013 - Enero 2014
Citation preview
Editorial
Lourdes Zolezzi. Imaginación: trabajo e impulso Eduardo Cruz
Lorena Saravia: La suerte se reparte a las 7 de la mañana Alejandro López Sánchez, María Fernanda Escobar Trejo
Diana Espinosa
El baile, sublimación de la sensualidad Adriana Chargoy
Azul Navarrete: El eros en la cotidianidad Adriana Chargoy
El Fru Fru o cómo fue que desperté en el cabaret Rodolfo Ávila Mejía, Jonathan Emmanuel Vega Reséndiz
¿Pospornoqué? Una primera mirada al posporno Eduardo Cruz
El lenguaje es el límite de mi mundo Antonio Rivera Díaz
Martín Morales Ramírez
Salvador Díaz Berrio
Novedades editoriales
248121618222426303840
María Fernanda Escobar Trejo / Eduardo Cruz Santos
Chiapa Sánchez Fernando R.
Convocatoria
Galeria 444648Espacio Diseño recomienda
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
9
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
19
De una manera totalmente transgresora para con el estereotipo
varonil de 1950 (época de creación del film), se ve arder de deseo un
hombre alto, fornido, protector y con pelo en el abdomen; el filme
sensibiliza y rompe con los esquemas de concepción de la hombría;
esa visión que al cabo de varios años se volvió un concepto obsoleto
e incluso falto de humanidad. Un hombre, con sus manos toscas y
sucias, anhelante acaricia su pecho
lleno de pelo; fantasea incesante-
mente, con cuerpos que danzan y se
aman, o danzan mientras se aman;
el racimo alargado de flores que el
“amante” furtivamente (y por fue-
ra de las ventanillas de las celdas)
desea compartir reasienta la sensi-
bilidad del pene.
El cortometraje es circular, termi-
na justo como comienza, y por ello
resalta en su discurso cíclico, la lucha
secreta que desde entonces se ges-
taba por hacer expreso el deseo de
sensibilidad, erotismo, y emociona-
lidad del hombre (¿varón?) para su
mejor desenvolvimiento en el mun-
do sexual (hetero, homo o bi, ¿qué
mas da?). Es al mismo tiempo uno
de los primeros pasos hacia la com-
prensión del mundo de la diferencia,
ya sea de preferencia sexual, de gé-
nero, o simplemente de ideas.
¿varón?
Un chant d’amour de Jean Genet, Francia, 1950 (25 min.)
http://vimeo.com/31598448
hetero, homo o bi
Espacio Diseño
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa2
21
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
imaginación:trabajoimpulso
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
tel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
que, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
frustración, y en ese momento hice una imagen
para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
a violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
gente me conoce en aquel país, aunque luego
nvitaron a que con ese mismo cartel participa
¿Y te contrataron?
e sp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
tel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
que, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
frustración, y en ese momento hice una imagen
para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
a violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
gente me conoce en aquel país, aunque luego
nvitaron a que con ese mismo cartel participa
e sp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: Pues que no tengan tanto miedo, que lo dejen a un lado, y que enfo-
quen toda su atención a su trabajo. Yo nunca estoy viendo quién es mejor o
peor que yo; yo solo me concentro en mirar, crear o transformar las imáge-
nes que me encantan y en que quiero generar imágenes que digan muchas
cosas, que hagan contacto con los demás, que sean emocionales, y espero
poder conectarme con los demás a partir de ellas.
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
tel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
que, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
frustración, y en ese momento hice una imagen
para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
a violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
gente me conoce en aquel país, aunque luego
nvitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
Work byDr Reflujo
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
WTF? O
esp
acio
dis
eño
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
22
1
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participaLZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y nacional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
Segunda Modernidad urbano arquitectonica. Construccion teorica y caracterizacion del
periodo
LZ: ¡Quinientos! ¡Quién sabe!, ¡o sea, a todos! No
sé, nunca los conté. Yo me metía y se iban los car-
teles y ya; y es más, el cartel que me ha dado más
reconocimiento i nternacional y n acional, porque
es uno de los carteles más importantes de mi vida,
se llama “Contra la violencia a la mujeres”, y es creo
el mejor cartel que he hecho en toda mi vida… ese
cartel no se lo hice a nadie; me lo hice a mí misma,
porque, efectivamente, tuve un m omento d e mu-
cha frustración, y en ese momento hice una imagen
solo para mí. Me la regalé, y la puse en mi página de
Internet, pero de repente pasó algo increíble porque
unas chavas de Irán me hablaron y me preguntaron
que si se los podía prestar para un movimiento con-
tra la violencia de la mujer, y se lo presté. Y en ese
momento fue que se volvió cartel, y ahora pues mu-
cha gente me conoce en aquel país, aunque luego
me invitaron a que con ese mismo cartel participa
Diseno en Slntesis Número 49. Primavera 2013
Diseno y Sociedad Número 33-34. Otoño 2012-Primavera 2013