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UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID FACULTAD DE ÓPTICA Y OPTOMETRÍA
DEPARTAMENTO DE ÓPTICA
TESIS DOCTORAL
Estabilidad rotacional y caracterización visual de lentes tóricas intraoculares monofocales y
multifocales
MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTORA
PRESENTADA POR
Nuria Garzón Jiménez
DIRECTOR
Juan Antonio Quiroga Mellado
Madrid, 2017
© Nuria Garzón Jiménez, 2015
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
FACULTAD DE ÓPTICA Y OPTOMETRIA
Departamento de Óptica
Estabilidad rotacional y caracterización visual
de lentes tóricas intraoculares monofocales y
multifocales
MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTOR
PRESENTADA POR
Nuria Garzón Jiménez
Bajo la dirección del doctor
Juan Antonio Quiroga Mellado
Madrid, 2015
TESIS DOCTORAL
ESTABILIDAD ROTACIONAL Y
CARACTERIZACIÓN VISUAL DE LENTES
TÓRICAS INTRAOCULARES MONOFOCALES Y
MULTIFOCALES
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
Facultad de Óptica y Optometría
Departamento de Óptica
Memoria presentada para optar al grado de doctora por la
Universidad Complutense de Madrid
Nuria Garzón Jiménez
Madrid, 2015
Dale vida a los sueños que alimentan el alma,
no los confundas nunca con realidades vanas.
Y aunque tu mente sienta necesidad, humana,
de conseguir las metas y de escalar montañas,
nunca rompas tus sueños, porque matas el alma.
Dale vida a tus sueños aunque te llamen loco,
no los dejes que mueran de hastío, poco a poco,
no les rompas las alas, que son de fantasía,
y déjalos que vuelen contigo en compañía.
Dale vida a tus sueños y, con ellos volando,
tocarás las estrellas y el viento, susurrando,
te contará secretos que para ti ha guardado
y sentirás el cuerpo con caricias, bañado,
del alma que despierta para estar a tu lado.
Dale vida a los sueños que tienes escondidos,
descubrirás que puedes vivir estos momentos
con los ojos abiertos y los miedos dormidos,
con los ojos cerrados y los sueños despiertos.
Mario Benedetti (1920-2009)
Informe del director de tesis
Informe del director de tesis
INFORME DEL DIRECTOR DE LA TESIS
JUAN ANTONIO QUIROGA MELLADO, Profesor Titular de
Universidad del Departamento de Óptica de la Universidad
Complutense de Madrid,
CERTIFICA:
Que NURIA GARZÓN JIMÉNEZ, Diplomada en Óptica y Optometría, ha
realizado bajo su dirección, en el Departamento de Óptica de la
Facultad de Óptica y Optometría de la Universidad Complutense de
Madrid, la Tesis Doctoral titulada “Estabilidad rotacional y
caracterización visual de lentes tóricas intraoculares monofocales y
multifocales” para optar al grado de Doctora por la Universidad
Complutense de Madrid.
Informa que el presente trabajo ha sido realizado sobre la base
de hipótesis científicas, contiene una base experimental y unos
resultados originales, y posee un formato académico pertinente.
En Madrid, a 3 de Junio de 2015
Fdo. Dr. Juan Antonio Quiroga Mellado
Agradecimientos
Agradecimientos
“Cuando la gratitud es tan absoluta, las palabras sobran”
Alvaro Mutis
Agradecimientos
Quiero dar mi más profundo y sincero agradecimiento a mi director
de tesis, Juan Antonio Quiroga Mellado. Gracias por ser tan exigente y duro,
en el mejor sentido de la palabra, porque eso me ha hecho darme cuenta
que soy capaz de hacer algunas cosas que en principio me parecían
imposibles.
Mil gracias al Dr Francisco Poyales porque me ha permitido
crecer en el Instituto de Oftalmología Avanzada, dándome libertad y alas
para poder trabajar, escuchando las ideas y propuestas y mostrándose
siempre abierto a comenzar nuevos proyectos.
Gracias a la Dra Begoña Ortíz de Zárate porque me ha hecho
sentir desde el principio, que soy parte de esa familia que forma el
Instituto.
Anibal, nuestras conversaciones alrededor de la tesis siempre
me han hecho reír y quitar presión, de modo que muchas gracias, con una
sonrisa en la cara enorme.
A las chicas de las “plazas”, cuyas cañas en “El Abuelo” hacían
que sacase fuerzas para continuar con este proyecto.
Agradecimientos
A mis compañeros del Instituto de Oftalmología Avanzada,
especialmente a Jaime y a Alfonso que siempre son cómplices de mis
historias y que son, y serán aunque pasen los años, mucho más que
compañeros. Y a Pepe Bueno, porque me gusta que estés ahí y disfruto de
esas conversaciones que mantenemos, aunque sea tan de vez en cuando.
A Miguel Romero, un amigo con el que no dejo de reír. Que aún
en los malos momentos hace que siempre lo haga a carcajadas. Las
discusiones que mantenemos a veces son parte de nuestra forma de ser.
También así se alimentan las columnas de la amistad.
A Laure, porque desde que te conocí me he sentido apoyada y
me has ayudado siempre que te lo he pedido. Y también sin pedírtelo ;)
Y sobre todo, os pongo los últimos pero sabéis que siempre
sois los primeros en mi vida, infinitas gracias a José Luis, papá, mamá,
Mario, Jesús y Olga. Porque pase lo que pase, y a pesar de la distancia que
hay muchas veces entre nosotros, sé que siempre estáis ahí.
Resumen
Resumen
Resumen
Objetivo: Evaluar la estabilidad rotacional y su influencia en la agudeza
visual postoperatoria de diferentes lentes intraoculares tóricas monofocales
y multifocales. Crear un Sistema de marcado que permita implantar la lente
tórica en el eje correcto en el acto quirúrgico.
Material y método: Se realizó un estudio prospectivo intervencional. Se
incluyeron noventa y uno pacientes con una edad media de 71.65±11.82
años a los que se les implantó una lente intraocular tórica LIOs) tras
facoemulsificación. Se implantaron tres LIOs monofocales tóricas (Lentis LT,
EnVista toric and Acrysoft IQ toric) y una lente multifocal tórica (Acrysoft IQ
Restor). Se tomaron imágenes preoperatorias y postoperatorias para
calcular el desalineamiento (misalignment) debido al sistema de marcaje.
Para evaluar la rotación en las distintas visitas postoperatorias se tomaron
fotografías a la hora, al día, a los 7 días y a los 30 días tras la intervención
quirúrgica. La refracción, la mejor agudeza visual sin refracción (UDVA) y la
mejor agudeza visual corregida (CDVA) se midieron en la visita
postoperatoria al mes de la cirugía.
Resultados: La UDVA postoperatoria fue de 0.1 logMAR o mejor en el
64.6% de los ojos implantados con lentes tóricas monofocales y en el
46.4% de los ojos con implante de lente tórica multifocal. La lente Envista
tórica mostró la mejor UDVA cuando se comparaban las lentes monofocales,
con un 81% de ojos que alcanzaban una agudeza de 0.1 logMAR o mejor. El
desalineamiento ó misalignment medio en el grupo total evaluado fue de
Resumen
0.07±0.60 grados. El 69.6% de las lentes monofocales tóricas y el 67.9%
de las multifocales tóricas mostró una rotación menor del 5º. Se encontró
una correlación positiva postoperatoria entre la UDVA y la rotación tanto en
las lentes tóricas monofocales como en las multifocales tóricas implantadas.
(r=0.439 (p<0.011) and r=0.787 (p=0.001), respectivamente).
Conclusiones: Las lentes con un diseño de hápticos en C-loop mostraron
ser más estables que los diseños de plato. La UDVA postquirúrgica fue
similar en todas las lentes monofocales tóricas evaluadas. Existe una
correlación entre la UDVA y la rotación de la lente tanto en lentes
monofocales tóricas como en lentes multifocales tóricas. Al mes de la
implantación, la UDVA se veía ligeramente más afectada por la rotación en
las lentes multifocales tóricas que en las monofocales tóricas. El sistema de
marcaje resultó muy efectivo.
Abstract
Abstract
Abstract
Purpose: To evaluate rotational stability and its influence on post-operative
visual acuity of different monofocal and multifocal toric IOLs. To devise a
marking system that allows the positioning of the toric IOL in the right axis
of orientation upon implantation, as part of the surgical procedure.
Methods: A Prospective interventional study was designed. Ninety-one
patients with a mean age of 71.65±11.82 years were implanted with toric
intraocular lenses (IOLs) after phacoemulsification. Three monofocal toric
IOLs (Lentis LT, EnVista toric and Acrysoft IQ toric) and one multifocal toric
IOL (Acrysoft IQ Restor) were implanted. Pre-operative and post-operative
images were taken to calculate the misalignment due to the marking
method. To evaluate rotation in the different follow-up visits, another
photograph was taken 1 hour, 1 day, 7 days and 30 days post-surgery.
Refraction, uncorrected distance visual acuity (UDVA) and best corrected
distance visual acuity (CDVA) were measured 30 days post-surgery.
Results: Post-operative UDVA was 0.1 logMAR or better in 64.6% of eyes
implanted with monofocal IOLs and 46.4% of eyes implanted with multifocal
IOLs. EnVista toric showed the best UDVA compared to the other monofocal
IOLs, with 81% of eyes with 0.1 logMAR or better. The mean misalignment
in the total group studied was 0.07±0.60 degrees. 69.6% of monofocal IOLs
and 67.9% of multifocal IOLs showed less than 5º of rotation. A correlation
Abstract
was found between post-operative UDVA and rotation in the monofocal and
multifocal IOLs implanted (r=0.439 (p<0.011) and r=0.787 (p=0.001),
respectively).
Conclusions: The IOLs featuring double C-loop haptics proved to be more
stable than those having a plate-haptic design. Post-operative UDVA was
similar across all monofocal toric IOLs under assessment. A correlation was
observed between UDVA and the magnitude of lens rotation, both for
monofocal and for multifocal toric IOLs. At 1 month after implantation,
UDVA was slightly more affected by IOL rotation in multifocal than
monofocal toric IOLs. Also, the marking method was very effective.
Indice
Índice
Indice
LISTA DE SÍMBOLOS, ABREVIATURAS Y ACRÓNIMOS….……...……..….………………………………………..….i
LISTA DE TABLAS…………………………………………………………….……………………………………….……………... vii
LISTA DE FIGURAS…………………………………………………………………………………..…………..……...…….…..…xi
ESTRUCTURA DE LA TESIS ………………………………..………………………………………………..………………...xxi
Índice
1 JUSTIFICACIÓN .......................................................................... 3
2 OBJETIVO ................................................................................... 9
3 ASTIGMATISMO........................................................................ 13
3.1 Concepto de Astigmatismo .............................................. 13
3.2 El lugar del astigmatismo y de la cirugía del astigmatismo en
la historia ……………… ........................................................................ 14
3.2.1 Siglos XVII-XIX ............................................................................. 14
3.2.2 Siglo XX ....................................................................................... 26
3.3 Prevalencia y epidemiología del astigmatismo .................... 33
3.4 Astigmatismo: eje y meridiano ......................................... 36
3.5 Astigmatismo, conoide de Sturm y círculo de mínima
confusión ……….. ............................................................................. 36
3.6 Clasificación del astigmatismo .......................................... 40
3.7 Medida del astigmatismo corneal ...................................... 47
3.7.1 Queratometría .............................................................................. 48
3.7.2 Topografía corneal ......................................................................... 52
3.8 Análisis vectorial del astigmatismo ................................... 61
Indice
3.9 Corrección del astigmatismo mediante cirugía en la actualidad
…………………………………………………………………………………………………67
3.9.1 Incisiones en córnea clara en el meridiano más curvo ........................ 69
3.9.2 Incisiones corneales relajantes (IRLs) .............................................. 69
3.9.3 Incisiones en córnea-clara opuestas (ICCOs) .................................... 70
3.9.4 Queratotomía astigmática .............................................................. 71
3.9.5 Lentes intraoculares tóricas ............................................................ 72
3.9.6 Cirugía refractiva con láser excimer o láser de femtosegundo ............. 73
3.10 Historia de las lentes intraoculares tóricas ...................... 75
4 ESTADO DEL ARTE .................................................................... 83
4.1 Marcaje de la posición de la lente tórica ............................ 87
4.1.1 Estabilidad rotacional de las lentes intraoculares tóricas ..................... 88
5 HIPÓTESIS DE TRABAJO .......................................................... 99
5.1 Objetivo principal ........................................................... 99
5.2 Objetivos secundarios ..................................................... 99
6 DISEÑO DEL ESTUDIO ............................................................ 103
6.1 Criterios de inclusión .................................................... 105
6.2 Criterios de exclusión .................................................... 106
6.3 Retirada y sustitución de sujetos .................................... 106
7 DEMOGRAFÍA ......................................................................... 109
8 MATERIALES Y MÉTODOS ....................................................... 117
8.1 Pruebas preoperatorias ................................................. 117
8.2 Lentes intraoculares ..................................................... 119
8.2.1 Lentis® LT, ................................................................................. 119
8.2.2 EnVista®® toric .......................................................................... 121
Indice
8.2.3 Acrysof® IQ toric ......................................................................... 122
8.2.4 Acrysof® IQ Restor ...................................................................... 124
8.3 Cálculo de la potencia de la lente ................................... 127
8.4 Método de marcado ...................................................... 132
8.5 Proceso quirúrgico ........................................................ 135
8.6 Pruebas postoperatorias ................................................ 136
8.7 Análisis estadístico ....................................................... 138
9 RESULTADOS .......................................................................... 141
9.1 Agudeza visual y refracción postoperatoria ...................... 141
9.2 Sistema de marcaje y rotación de las lentes .................... 146
9.3 Correlaciones entre agudeza visual y astigmatismo residual
………………………………………………………………………………………………151
9.4 Cálculo del valor de SIA quirúrgico ................................. 152
10 DISCUSIÓN ......................................................................... 157
11 CONCLUSIONES ................................................................... 173
12 TRABAJO FUTURO ................................................................ 179
12.1 Desarrollo sistema de medida de posición de lentes tóricas
……………………………………………………………………………………………179
12.2 Desarrollo sistema optimizado rotación giro lente tórica en
cirugía secundaria ......................................................................... 180
13 BIBLIOGRAFÍA .................................................................... 185
14 ANEXOS ............................................................................... 211
14.1 Aportaciones científicas resultado de la tesis doctoral ..... 211
Indice
14.2 Proyectos en los que se ha colaborado durante la realización
de esta tesis doctoral .................................................................... 214
14.3 Hoja de información para el paciente ........................... 217
14.4 Consentimiento informado .......................................... 224
Lista de símbolos, abreviaturas y acrónimos
i
Lista de símbolos, abreviaturas y
acrónimos
ii
Lista de símbolos, abreviaturas y acrónimos
iii
Ac
Astigmatismo corneal
ACD
Profundidad de cámara anterior
AHC
Astigmatismo hipermetrópico compuesto
AHS
Astigmatismo hipermetrópico simple
AMC
Astigmatismo miópico compuesto
AMS
Astigmatismo miópico simple
At
Astigmatismo total
ATR
Astigmatismo contra la regla
AV
Agudeza visual
AXL
Longitud axial
B&L
Bausch and Lomb
CA
Coeficiente de ajuste
CDVA
Agudeza visual de lejos con corrección
CI
Índice de corrección
Cil
Cilindro
CL
Háptico cerrado (Close-loop)
CRO
Centro de rotación del ojo
D
Dioptrías
d
Distancia
DV
Diferencia vector entre objetivo y logrado
Esf
Esfera
et al.
Y colaboradores
ETDRS
Test Early Treatment Diabetic Retinopathy Study
FDA
Food and Drug Administration
HD
Alta definición
ICCO
Incisión en córnea clara opuesta
Lista de símbolos, abreviaturas y acrónimos
iv
IOS Índice de éxito
IRL
Incisión corneal relajante
K
Queratometría; potencia en meridiano corneal
LASIK
Queratomileusis in situ con láser (laser in-situ keratomileusis)
LIO
Lente intraocular
m
Metros
mm
Milímetros
MTF
Función de transferencia modular
N
Número de ojos
n
Índice de refracción
OCT OD OI
Tomografía de Coherencia Óptica Ojo derecho Ojo izquierdo
OL
Háptico abierto (Open-loop)
PMMA
Polimetilmetacrilato
PRK
Queratectomía fotorrefractiva (Photorefractive Keratectomy)
QA
Queratotomía astigmática
r
Radio de curvatura
RAE Real Academia Española
ReLex Smile
Extracción Lentículo refractivo (Small incision lenticule extraction)
SD
Desviación estándar
SE
Equivalente esférico
SIA
Astigmatismo inducido quirúrgicamente
SimK
Queratometría simulada
SNR
Índice señal-ruido
TIA
Astigmatismo objetivo (a aplicar)
Lista de símbolos, abreviaturas y acrónimos
v
UDVA
Agudeza visual lejos sin corrección
VE
Vergencia de entrada; inverso de la distancia a la que se encuentra el objeto expresada en metros
VL
Visión lejana
VS
Vergencia de salida; inverso de la distancia a la que se forma la línea focal expresada en metros
WTR
Astigmatismo a favor de la regla
W-W
Distancia Blanco-Blanco
x
Aumentos
vi
Lista de tablas
vii
Lista de tablas
viii
Lista de tablas
ix
Tabla 1. Lugar en el que algunos de los topógrafos o queratómetros
empleados habitualmente hacen las medidas del
astigmatismo corneal. Las medidas señaladas con (*)
indican que son distancias aproximadas ya que la medida
real está relacionada con la curvatura de la córnea que se
esté midiendo en ese momento. ............................................... 55
Tabla 2. Algunos de los estudios que muestran la rotación de
diversos tipos de lentes ........................................................... 91
Tabla 3. Cambios de rotación postoperatoria de LIO declarados en
estudios con 15 o más ojos, publicados desde 1998. (OL =
open-loop; CL = close loop). .................................................... 93
Tabla 4. Caracterización demográfica de la población incluida en
este estudio ......................................................................... 113
Tabla 5. Especificaciones de las lentes incluidas en el estudio ................ 126
Tabla 6.Datos post-operatorios de agudeza visual, refracción y
equivalente esférico con los distintos modelos de lentes
implantados ......................................................................... 141
Tabla 7. Datos post-operatorios de misalignment y rotación con los
distintos modelos de lentes implantados .................................. 147
Tabla 8. Astigmatismo inducido (SIA) por el cirujano (FPG) en
función de la lente implantada y el ojo intervenido .................... 154
x
Lista de figuras
xi
Lista de figuras
xii
Lista de figuras
xiii
Figura 1: Esquema de la sección sagital de un ojo al que se le ha
implantado una LIO tórica. ........................................................ 4
Figura 2: Esquema de la sección frontal de un ojo al que se le ha
implantado una LIO tórica. ........................................................ 5
Figura 3. Representación gráfica de cómo entra la luz en el ojo y
debido al astigmatismo focaliza en distintos puntos,
existiendo un punto máximo y un punto mínimo que se
corresponden con los meridianos principales. Imagen
tomada del sitio http://coopervision.com.mx/salud-
visual/problemas-visuales/astigmatismo .................................... 14
Figura 4. Test de Green. Imagen obtenida del sitio
http://www.oftalmo.com/secoir/secoir2005/rev05-2/05b-
04.htm .................................................................................. 23
Figura 5. Datos aportados por el laboratorio Alcon donde se muestra
el porcentaje de astigmatismo estimado en pacientes con
cataratas y asocia estos datos a su lente intraocular
monofocal tórica Acrysof SN60T, mostrando el porcentaje de
pacientes que se podrían beneficiar en función de la cantidad
de astigmatismo que hubiese que corregir. Imagen tomada
del sitio
http://www.alconsurgical.co.za/images/CataractIOLs/graph-
expanded-large.jpg ................................................................. 35
Figura 6. Conoide de Sturm, focales máxima y mínima e intervalo de
Sturm entre las focales principales. Imagen obtenida del
sitio
Lista de figuras
xiv
http://www.oculist.net/others/ebook/generalophthal/vaugha
n/public/co_figures/ch020/ch20fg12.jpg .................................... 37
Figura 7. Círculo de mínima confusión y focales correspondientes al
meridiano horizontal y al meridiano vertical.Imagen obtenida
del sitio http://tilanotv.es/wp-
content/uploads/2014/04/Figura42.png ..................................... 38
Figura 8. Mapa preoperatorio de Catarata creado por Maeda para
Pentacam. En este ejemplo se observa como el astigmatismo
simulado de cara anterior (SimK) y el astigmatismo total
coinciden por lo que podemos afirmar que en este caso el
astigmatismo de cara posterior no tiene una influencia sobre
el astigmatismo total. .............................................................. 59
Figura 9. En este ejemplo podemos observar que el astigmatismo de
cara anterior (SimK) no coÍndice con el astigmatismo total ni
en eje ni en potencia. Ello implica que el astigmatismo de
cara posterior sí que afecta de manera relevante al
astigmatismo corneal total. Si utilizásemos el astigmatismo
resultante de medir con un queratómetro, o cualquier otro
instrumento que midiese sólo la cara anterior de la córnea,
para calcular la lente tórica a implantar en un paciente con
cataratas, nos encontraríamos con un astigmatismo residual
tras la intervención. ................................................................ 60
Figura 10. Nomograma de Baylor (Koch). Valores de la tabla
considerando el astigmatismo de cara anterior
(Astigmatismo cara anterior) y el astigmatismo inducido
(SIA). En astigmatismos a favor de la regla (WTR) suma el
Lista de figuras
xv
SIA mientras que en astigmatismo contra la regla (ATR)
resta el SIA para seleccionar la potencia cilíndrica de la lente
tórica. ................................................................................... 61
Figura 11. Diagrama del vector de doble ángulo. Los valores del eje
del astigmatismo se han duplicado pero las magnitudes no
se han modificado. Las líneas de trazos se corresponden con
vectores mientras que las líneas con puntas de flecha
indican la orientación. Podemos decir, haciendo un análogo
con el golf, que se correspondería con la dirección y la fuerza
con la que debo golpear la pelota para que entre en el hoyo.
Este diagrama vectorial de ángulo doble permite cálculos en
un sentido 360 y permite el uso de coordenadas
rectangulares. La técnica analítica simplifica la
interpretación de diferencias entre valores preoperatorios,
deseados, y logrados, y permite el cálculo de la magnitud y
dirección de los vectores quirúrgicos. Publicada por Alpins
(Alpins and Goggin 2004). ....................................................... 64
Figura 12. Esquema del vector quirúrgico en forma polar. Se
observa la diferencia entre el tratamiento objetivo (TIA), el
astigmatismo que induce el cirujano (SIA) y la diferencia
entre estos dos vectores (DV). Publicada por Alpins (Alpins
and Goggin 2004). .................................................................. 65
Figura 13. Representación simplificada del SIA, el TIA y el DV
haciendo la analogía con el juego del golf .................................. 66
Figura 14. Las relaciones entre el TIA y el SIA nos proporcionan la
información sobre el alineamiento del tratamiento, tanto si
Lista de figuras
xvi
ha sido realizada en el eje preciso como si se ha tratado la
cantidad correcta. El DV, clínicamente, significaría el efecto
que en una segunda fase sería necesario para tratar el
defecto residual. ..................................................................... 67
Figura 15. Distribución, por edades, de los individuos incluidos en el
estudio ................................................................................ 103
Figura 16. Porcentaje de ojos derechos e izquierdos incluidos en el
estudio ................................................................................ 104
Figura 17. Edad media de los pacientes incluidos en el estudio en
función del tipo de lente ........................................................ 109
Figura 18. Distribución por sexo del grupo total de pacientes
incluidos en el estudio ........................................................... 110
Figura 19. Equivalente esférico medio preoperatorio en función del
tipo de lente implantada y rangos ........................................... 111
Figura 20. Distribución de AV con compensación, previo a la cirugía,
en función de la lente implantada. AV expresada en sistema
decimal. ............................................................................... 112
Figura 21. Astigmatismo corneal, previo a la cirugía, medido con
biómetro óptico .................................................................... 112
Figura 22. Imagen de la captura de la medida del blanco-blanco con
el biómetro óptico IOL Master ................................................. 118
Figura 23 . Captura de la imagen de una mácula sin alteraciones con
el Tomógrafo de Coherencia Óptica Cirrus (Carl Zeiss) con el
protocolo lineal HD. ............................................................... 118
Figura 24. Modelo de lente tórica Lentis LT (Oculentis, Berlin,
Germany), ........................................................................... 121
Lista de figuras
xvii
Figura 25. Modelo de lente tórica EnVista® (MX60T) (B&L,
Rochester; USA) ................................................................... 122
Figura 26. Potencias disponibles a día de hoy del modelo EnVista®
Tórica. En el momento del estudio, sólo estaban disponibles
las potencias de 1.25, 2.00, 2.75 y 3.50 dioptrías en el plano
de lente. .............................................................................. 122
Figura 27. Modelo de lente tórica Acrysof monofocal (Alcon, Fort
Worth, TX, USA) ................................................................... 123
Figura 28. Potencias disponibles del modelo Acrysof toric y sus
equivalencias en plano de lente, plano de córnea así como la
recomendación del fabricante para la elección en función del
astigmatismo del paciente. ..................................................... 124
Figura 29. Esquema de la plataforma Acrysof y características
técnicas de la lente. Se muestran también la disponibilidad
de potencias cilíndricas. (Alcon, Fort Worth, TX, USA) ............... 125
Figura 30. Observación de las marcas que presenta cada lente
empleada en el estudio. (A) Lente enVista tórica, (B) Lentis
LT, (C) Acrysof IQ Tórica y (D) Acrysof IQ Restor tórica. ............ 127
Figura 31. Imagen del calculador online que proporciona el
laboratorio Alcon para el cálculo de la potencia de sus lentes
intraoculares tóricas. Calculador disponible en
http://www.acrysoftoriccalculator.com/ ................................... 131
Figura 32. Gráfico que genera el calculador de Bausch & Lomb al
calcular la potencia de la lente tórica. Muestra la posición
tanto de la incisión como del eje en el que hay que colocar la
Lista de figuras
xviii
lente.Calculador disponible en
https://envista.toriccalculator.com/ ......................................... 131
Figura 33. Con un rotulador de Violeta de genciana se pintan las
marcas en el eje 0-180º (A). A continuación, se fotografía al
paciente a una distancia mínima de 2.5m (B). .......................... 132
Figura 34. La primera imagen muestra cómo se puede capturar la
imagen del paciente (A) y cómo el zoom permite ampliar la
imagen hasta observar los puntos marcados con violeta de
genciana. ............................................................................. 133
Figura 35. La cámara empleada fue una Coolpix P90 (Nikon), con un
objetivo de 26.0 – 624.0 mm, una CCD de 12.10
megapíxeles efectivos y un zoom 24x (óptico) / 4x (digital). ...... 133
Figura 36. Imagen de la exportación al ordenador. Una vez
exportada la imagen se activa el software Scale 2.0. Para
facilitar el desarrollo en quirófano, se coloca la imagen del
ojo invertida ya que resulta más cómodo para que coincida
esa imagen con la que luego observa el cirujano en el
microscopio. ......................................................................... 134
Figura 37 (A, B, C): La Figura A muestras las dos marcas sobre el
limbo en el eje horizontal (0-180º) a las 3 y a las 9
realizadas en la lámpara de hendidura. Las Figuras B y C
muestran la posición exacta de las marcas y su diferencia
angular con respecto al meridiano de 0-180º. En este
ejemplo, una de las marcas estaba a 175º en lugar de 180º
y la otra a 349º (-16º) en lugar de a 0º. .................................. 135
Lista de figuras
xix
Figura 38. UDVA post cirugía en función de si las lentes eran
monofocales tóricas o multifocales tóricas ................................ 142
Figura 39. UDVA acumuladas en las lentes tóricas evaluadas ................ 143
Figura 40. Astigmatismo postoperatorio refractivo, al mes de la
intervención, en función de si la lente era monofocal ó
multifocal ............................................................................. 145
Figura 41. Astigmatismo refractivo postoperatorio, al mes de la
intervención, para los tres modelos de lentes monofocales
tóricas ................................................................................. 146
Figura 42. Valores de rotación a lo largo de las visitas
postoperatorias para los cuatro modelos de lentes evaluadas ..... 148
Figura 43. Rotación con los distintos modelos de lentes evaluadas ......... 151
Figura 44. Captura del cálculo de uno de los ojos evaluados con el
Software Assort para evaluar el astigmatismo inducido. En
este caso se trata de un ojo derecho. ...................................... 154
Figura 45. Situación real de algunas de las marcas realizadas con
violeta de genciana. La marca (A) que debería estar a 0º, se
encontraba a 3º. Las marcas B, C y D, que debían estar a
180º, realmente estaban situadas a 187º, 188º y 194º
respectivamente. .................................................................. 159
Figura 46. Lente POD FT, trifocal tórica, diseñada por el laboratorio
Physiol, con hápticos en doble Y. ............................................ 167
Figura 47. Gráfico en el que se muestran los cálculos realizados a
través del software recalculatortoric desde Mayo de 2014 a
Mayo de 2015 y los países en los que se ha empleado. .............. 213
xx
Estructura de la tesis
xxi
Estructura de la tesis
xxii
Estructura de la tesis
xxiii
El presente trabajo consta de dos partes: una primera parte
constituida por tres capítulos introductorios y una segunda parte, formada
por nueve capítulos, en la que se detalla el estudio realizado, incluyendo la
discusión de los resultados.
En el capítulo 1 se muestra la justificación que me ha llevado a
realizar esta tesis doctoral sobre la rotación y estabilidad de las lentes
intraoculares tóricas, tanto monofocales como multifocales.
En el capítulo 2 se establece el objetivo perseguido con este estudio
así como los puntos principales que se evaluarán. Mientras, en el capítulo 3,
se revisa la fundamentación teórica de la investigación de forma general.
A partir del capítulo 4 se muestran de manera detallada todos los
puntos incluidos en el estudio.
El capítulo 4 está dedicado a mostrar el estado del arte. En el capítulo
5 se muestran las hipótesis con las que se ha trabajado en esta tesis y se
detallan los objetivos principales y secundarios. Del capítulo 6 al 8 se
muestran los materiales y métodos empleados en esta investigación.
Estructura de la tesis
xxiv
El capítulo 9 se dedica a mostrar todos los resultados obtenidos,
mientras que en el 10 se muestra la discusión de los resultados y en el
capítulo 11 se incluyen las conclusiones generales de la presente tesis.
En el capítulo 12 se muestran tanto las nuevas líneas de investigación
como el trabajo futuro sobre el tema.
Para terminar, se han incorporado una serie de anexos. En estos
anexos se muestran los consentimientos informados empleados en este
estudio. Los dos últimos anexos recogen las contribuciones científicas y los
proyectos de investigación relacionados con el desarrollo de esta tesis
doctoral.
1. Justificación
1
1. Justificación
"Un científico debe tomarse la libertad de plantear cualquier cuestión, de
dudar de cualquier afirmación, de corregir errores."
Julius Robert
2
1. Justificación
3
1 Justificación
La cirugía más ampliamente realizada en oftalmología es la cirugía de la
catarata. En la actualidad, con dicha intervención cada vez se busca de
manera más intensa, no sólo eliminar la opacidad del cristalino, sino
conseguir la emetropía para lograr la independencia de las gafas, bien en
una distancia, con lentes monofocales, o a varias distancias, con lentes
multifocales.
La miopía o la hipermetropía que tenga el paciente se compensan a
partir de la potencia esférica de la lente intraocular pero si el paciente
padece también astigmatismo, una de las opciones es implantar una lente
intraocular tórica que corrija todos los defectos refractivos a la vez.
Por lo tanto, la corrección del astigmatismo en el momento de la
realización de una cirugía de cataratas consiste en implantar en el ojo una
lente intraocular (LIO) con:
Una potencia esférica para suplir la ausencia de la lente natural del
cristalino.
Una potencia cilíndrica para corregir el astigmatismo corneal.
1. Justificación
4
La implantación de este tipo de lente para compensar el astigmatismo,
llamada lente tórica, puede suponer una mejora real de la calidad de la
visión del paciente siempre y cuando la lente intraocular se sitúe en la
posición correcta. De hecho, si hacemos la comparativa de la corrección del
astigmatismo con lentes oftálmicas (gafas), la corrección solamente es
eficiente cuando el eje cilíndrico de la lente coÍndice con el meridiano que se
quiere compensar ya que cuando la línea de visión se desplaza del eje de la
lente oftálmica, la distorsión de la imagen debida a este tipo de lentes
afecta negativamente a la calidad de la visión.
Por tanto, para que la corrección sea óptima es esencial que el
alineamiento de la corrección tórica con el eje del astigmatismo (en el plano
frontal, véase la Figura 2) sea preciso. Esto solamente se puede lograr si la
LIO es estable dentro del ojo, es decir, no debe rotar dentro del ojo después
de la implantación.
Figura 1: Esquema de la sección sagital de un ojo al que se le ha implantado una
LIO tórica.
1. Justificación
5
Figura 2: Esquema de la sección frontal de un ojo al que se le ha implantado una
LIO tórica.
Los nuevos diseños de lentes intraoculares tóricas permiten lograr
corregir la catarata, miopía, hipermetropía y/o astigmatismo que presenta
el paciente en una única intervención de un modo preciso, seguro y con
muy rápida recuperación. Si bien el principal reto que se presenta ahora es
conseguir que el eje de la lente implantada se corresponda exactamente
con el eje del astigmatismo corneal que presenta el paciente ya que una
ligera variación hará que el paciente vuelva a presentar un astigmatismo
postoperatorio, de diferente potencia y en distinto eje que el preoperatorio.
La colocación exacta del eje del astigmatismo exige, en el momento
del implante, corregir posibles errores motivados por la convergencia o la
ciclotorsión que se producen en el sistema ocular derivados de cambios de
posición del paciente. Una vez concluida la intervención, debemos
determinar si la lente está posicionada correctamente, si existe algún grado
de desviación y conocer si la lente rota o se desplaza, especialmente los
días siguientes a la intervención. Una vez estabilizada la lente en el saco
capsular será preciso evaluar la relación entre el defecto refractivo cilíndrico
postoperatorio y la posición final que haya ocupado la lente.
6
2. Objetivo
7
2. Objetivo
"La ciencia se compone de errores, que a su vez, son los pasos hacia
la verdad”
Julio Verne
8
2. Objetivo
9
2 Objetivo
El objetivo principal de esta tesis doctoral es comparar los resultados
obtenidos con distintos diseños de lentes intraoculares tóricas empleadas en
la cirugía de cataratas en pacientes con un astigmatismo corneal previo.
Tres de los modelos de lentes son monofocales, con distintos diseños y
distintos materiales: Lentis LT (lu-313T) del laboratorio Oculentis (Berlin,
Germany), enVista® Toric del laboratorio Bausch & Lomb (Rochester, NY) y
la lente Acrysof IQ toric, fabricada por Alcon, (Fort Worth, TX). La cuarta
lente, es un modelo similar a la lente Acrysof IQ tórica pero que en su zona
óptica tiene un diseño difractivo lo que la convierte en una lente bifocal con
un foco de lejos y uno de cerca, denomina Acrysof IQ Restor tórica.
Para comparar los cuatro modelos, se estudiará:
- La agudeza visual sin corrección (UDVA) obtenida con cada una de
ellas.
- La agudeza visual con corrección (CDVA).
- La rotación y estabilidad de las lentes en distintos momentos tras
el implante.
- La refracción postoperatoria incluyendo esfera y cilindro.
10
3. Astigmatismo
11
3. Astigmatismo
"Si un hombre no sabe a qué puerto navega, ningún viento es favorable"
Séneca
12
3. Astigmatismo
13
3 Astigmatismo
3.1 Concepto de Astigmatismo
El término astigmatismo, deriva del griego ἀ- (a = no) + στίγμα
(stigma = punto) y fue acuñado en 1849 por sugerencia de Whewell a Airy.
Se trata de un defecto refractivo por el cual el sistema óptico que constituye
el ojo no puede formar imágenes puntuales de un punto objeto debido a
que la potencia refractiva del sistema óptico varía de un meridiano a otro.
Otros autores posteriores sugirieron otros términos que no prosperaron,
como el astigmism de James Dixon en 1866 o el astigmia de Swan Moses
Burnett en 1887.
El astigmatismo se produce en una superficie cuya curvatura
progresa desde un valor mínimo hasta un valor máximo en meridianos
perpendiculares, de forma que los rayos no sufren la misma desviación en
todos los meridianos. En vez de un punto focal simple hay dos líneas
focales separadas entre sí por un intervalo cuya longitud es directamente
proporcional a la diferencia de potencia entre los dos meridianos principales.
La Real Academia Española de la Lengua (RAE) define el
astigmatismo de dos maneras, una atendiendo a la física y otra a la
3. Astigmatismo
14
medicina. El concepto físico se refiere al “defecto de un sistema óptico que
reproduce un punto como una pequeña área difusa”, mientras que la
acepción médica lo define como un “defecto de visión debido a la curvatura
irregular de la superficie de la córnea y el cristalino”.
Figura 3. Representación gráfica de cómo entra la luz en el ojo y debido al
astigmatismo focaliza en distintos puntos, existiendo un punto máximo y un punto
mínimo que se corresponden con los meridianos principales. Imagen tomada del
sitio http://coopervision.com.mx/salud-visual/problemas-visuales/astigmatismo
3.2 El lugar del astigmatismo y de la cirugía del
astigmatismo en la historia
3.2.1 Siglos XVII-XIX
Para conocer una de las primeras referencias al astigmatismo
debemos remontarnos hasta principios del siglo XVII (1604), cuando Kepler
estableció la teoría matemática de la cámara oscura y la primera explicación
correcta del funcionamiento del ojo. Kepler explicó las consecuencias de
3. Astigmatismo
15
una refracción a través del cristalino, comparando el efecto de los rayos
axiales con el producido por la refracción oblicua de un objeto paraxial y
dedujo que, si bien ambos interceptaban sobre él, el cono directo formaba
una imagen nítida sobre la retina mientras que el oblicuo formaba una
imagen desenfocada. Consideraba que el empeoramiento de la visión, a
uno o dos grados del eje visual, se debía no sólo a la insensibilidad de la
retina a ese nivel sino al efecto de la aberración óptica (mencionada por
primera vez por Maurolico en 1554) por la incidencia oblicua de los rayos,
adelantándose al concepto de astigmatismo por incidencia oblicua.
En 1623, Daza de Valdés, un cordobés con amplios conocimientos en
óptica y matemáticas, escribió Uso de anteojos para todo género de vistas
en el que hablaba de la miopía, la presbicia, la hipermetropía o la afaquia y
cómo corregirlas con lentes. En este libro, Daza comentaba también cómo
con los vidrios “mal labrados” algunas personas lograban una mejor visión
que con los más perfectos por lo que, sin conocerlo, ya apuntaba la
existencia de un defecto óptico diferente a los que trataba.
Pasada la mitad del siglo, Newton, tomando como base trabajos de
Pascal y Barrow, consideró la formación de dos focos y demostró la
formación de una imagen de puntos sagital y tangencial cuando un estrecho
haz de rayos incidía sobre una superficie plana o esférica, apuntando la
presencia de un punto focal entre dos líneas focales.
3. Astigmatismo
16
A comienzos del siglo XVIII, François-Poufour du Petit presentó en la
Academia de las Ciencias de París un trabajo sobre las mediciones de la
curvatura corneal, en ojos de cadáver, a partir de una regla graduada que
permitía medir la longitud axial del globo y la curvatura en distintas
direcciones. Poco después, Euler, resolvió la fórmula empleada actualmente
para trasponer el poder del cilindro de acuerdo con los ángulos que forman
sus ejes, deduciendo que cilindros iguales con sus ejes perpendiculares son,
desde el punto de vista óptico, equivalentes a una lente esférica del mismo
poder.
Una de las primeras referencias explícitas del astigmatismo procede
de Tomas Young (1796) a través de la obra On the Mechanism of the Eye
basándose en trabajos que había realizado Scheiner casi dos siglos antes
(1619). Young construyó el optómetro para observar su propio ojo,
comprobando que la imagen de una línea se cruzaba a diferente distancia si
colocaba el instrumento en el plano vertical o el horizontal, y que los rayos
verticales procedentes de un objeto se enfocaban en la retina a una
distancia distinta de donde focalizaban los horizontales. Sin embargo, el
prestigio de Young y el curioso detalle poco frecuente de que su
astigmatismo no fuera corneal sino cristaliniano, y además contra la regla,
supuso, por un lado, un retraso en su reconocimiento como un defecto
localizado principalmente en la córnea, y por otro, que otros autores
contemporáneos más acertados situaran en segundo plano, como Fisher, a
la córnea como causante principal del astigmatismo. Tampoco tuvo eco
Gerson Hartog, discípulo de Fisher, a pesar de escribir el primer estudio
fisiológico detallado sobre la anomalía, y de encontrar que en la córnea
3. Astigmatismo
17
elíptica el radio vertical es menor que el horizontal. Además, en 1808, usó
como test de detección del astigmatismo una tarjeta rectangular y series de
líneas horizontales y verticales.
Situándonos ya a principios del XIX, el inglés Wollaston patentó una
lente periscópica para permitir la visión central y también en la periferia al
eliminar el astigmatismo por incidencia oblicua, realizando el primer intento
serio de mejorar el diseño de las lentes oftálmicas. Unos años después,
Fisher estableció la hipótesis de que la curvatura corneal se asemejaba a la
de un elipsoide y que en algunos casos esta aberración era tan evidente que
se podía demostrar tan sólo midiendo y comparando con un calibre sus
meridianos horizontal y vertical. Por la misma época, Sachs describió la
apreciación en su ojo y en el de su hermana de un astigmatismo
hipermetrópico, indicando que, junto a la hipermetropía absoluta, su córnea
tenía un menor poder dióptrico en el meridiano horizontal, observando a
cualquier distancia las líneas verticales borrosas mientras que las
horizontales las veía nítidas.
En 1818, David Brewster, a partir de trabajos de Young, describió los
efectos ópticos subjetivos del astigmatismo, aunque atribuía su causa a la
secreción lagrimal. En 1837 aceptó el papel de la córnea o del cristalino en
el astigmatismo. También en ese año, Fresnel pudo realizar el primer uso
científico de una lente cilíndrica con el propósito de obtener una fuente
luminosa lineal y que más tarde se emplearía en los faros costeros. Un año
después, Purkinje introdujo dos figuras que aún se usan para la
3. Astigmatismo
18
determinación subjetiva del astigmatismo: los círculos concéntricos y la
estrella. En 1823 sugirió que la curvatura de la córnea podría medirse
mediante un microscopio provisto de un micrómetro con un método
comparativo consistente en calcular el tamaño de la imagen reflejada,
utilizando como referencia las medidas obtenidas sobre secciones de esferas
de vidrio. Comprobó que podía alterar la visión presionando la córnea para
modificar su curvatura.
En 1825, el inglés George Biddell Airy realizó la primera corrección
del astigmatismo a pesar de que desconocía los trabajos de Young. Siendo
estudiante notó que su ojo izquierdo era inútil al observar un objeto
próximo. Suponiendo que el problema era la falta de uso, intentó usarlo
más ocluyendo su ojo derecho, pero no obtuvo éxito. Sin embargo, observó
que inclinando el cristal de sus gafas o mirando el objeto en un punto cerca
del borde, podía percibirlo más claramente y también observó que la
imagen formada por un punto brillante no era circular sino elíptica. De esta
manera afirmó que esto podía corregirse haciendo una lente en la que los
rayos incidentes paralelos produjeran la divergencia en un plano desde una
distancia de 3 1/2 pulgadas y en el plano perpendicular desde 6 pulgadas.
Para elaborar la lente esfero-cilíndrica empleó un cristal con un índice de
refracción de 1,53 y un radio de curvatura de 3,18 pulgadas y 4,45
pulgadas, para las superficies esféricas y cilíndricas respectivamente,
equivalente a un poder dióptrico de 6,25 D y 4,62 D aproximadamente. Los
datos del astigmatismo de Airy en pulgadas supondrían un valor de entre 4-
4,5 dioptrías. Podemos decir que los trabajos de Airy sirvieron para sentar
3. Astigmatismo
19
las bases teóricas del astigmatismo y las aplicaciones prácticas de una lente
cilíndrica para su corrección (Airy 1827).
En esos mismos años, Hawkins y Herschel señalaron a la córnea
como causante del astigmatismo. El primero destacó la utilidad del
optómetro para detectar el astigmatismo, pero sugirió emplear, como
sustituto “casero” de éste, un libro de música y sus partituras. Aconsejaba
taparse un ojo, desplazar el libro situado horizontalmente de delante hacia
atrás hasta ver las líneas enfocadas, y medir la distancia con una regla y
después realizar la misma operación con el libro verticalmente. Por su parte
Herschel, describió el astigmatismo como una alteración en la morfología de
la córnea que presentaba diferente curvatura en el plano vertical y
horizontal, y propuso varios métodos para corregir el astigmatismo
irregular, como adaptar una lente al ojo con su cara interna reproduciendo
la superficie corneal irregular (intaglio facsímile), a partir de un molde,
manteniendo la cara externa esférica.
Poco después Henry Coddington publicó las primeras ecuaciones
matemáticas aplicadas al astigmatismo en A Tratise on the Reflexion and
Refraction of Light y Krause determinó las dimensiones exactas en forma y
tamaño del ojo humano, incluyendo el grosor de la córnea y del cristalino y
su poder refractivo.
3. Astigmatismo
20
A mitad del XIX, Rudolf Kohlrausch presentó un trabajo sobre la
medición del radio de curvatura de la superficie anterior del ojo humano en
vivo, empleando un sistema de proyección sobre la córnea que se
observaba a través de un sistema telescópico, si bien en principio sólo
servía para hacer medidas del diámetro horizontal. También Sturm presentó
su monografía sobre la teoría de la visión. Describió una figura geométrica,
el conoide, que representaba el particular trayecto de los rayos refractados
a través de una lente tórica. Mientras, el irlandés Henry Goode refirió la
corrección de su propio astigmatismo y el de otros individuos empleando
cristales cilíndricos tallados por el óptico francés Chamblant.
En 1846, Sneff, a través de un sistema parecido al de Kohlrausch,
determinó el perfil elíptico de la córnea. Ese mismo año el óptico Simms ya
fabricó lentes esfero-cilíndricas de forma regular para gafas con diferentes
potencias. Esos primeros cristales se cortaban de forma redonda para
insertarlos en monturas circulares de forma que permitieran su rotación
hasta encontrar el eje apropiado. Uno de los problemas que surgieron en la
elaboración de las primeras lentes tóricas y en su posterior montaje fue
decidir el tallado cóncavo o convexo del cristal cilíndrico y si, en relación al
ojo, el cilindro debía situarse en la parte interna o externa de la gafa. A
partir de aquí, Airy recomendó realizar varios cilindros sobre una sola cara
que permitieran tallar una superficie esférica en la otra para conseguir la
corrección de la visión a diferentes distancias.
3. Astigmatismo
21
Gabriel Stokes desarrolló un método simple para determinar el grado
de astigmatismo creando la lente astigmática o lente de Stokes. Esta lente
es la base de las lentes diseñadas posteriormente para estimar el grado de
astigmatismo. Básicamente, la lente de Stokes era un cilindro variable
consistente en la combinación de dos cristales plano-cilíndricos positivos
(convexos) y negativos (cóncavos) de igual potencia, dispuestos para poder
rotar en direcciones iguales y opuestas. La potencia sería igual a cero
cuando los ejes fueran paralelos, al neutralizarse recíprocamente, o a la
suma algebraica de la correspondiente a cada uno de los dos plano-cilindros
si los ejes se cruzaran perpendicularmente entre sí.
En esos años, Goulier presentó un informe sobre el astigmatismo que
incluía una ilustración consistente en una serie de líneas horizontales y
verticales, que usaba en su detección y que constituye uno de los primeros
test conocidos. La tabla estaba diseñada para detectar no sólo los
meridianos horizontal y vertical sino también los oblicuos. Señalaba además
la posibilidad de su corrección mediante vidrios cilíndricos. En 1886, hace
referencia por vez primera vez al biastigmatismo. Mientras, el francés
Vallée consideraba al astigmatismo un defecto muy frecuente y aconsejaba
los cristales cilíndricos para su corrección publicando una teoría sobre lentes
bicilíndricas con ejes cruzados perpendicularmente, la forma de prescribirlos
y la fórmula para el cálculo de su equivalente esferocilíndrico.
3. Astigmatismo
22
A la vez que se intenta tratar el astigmatismo a través de lentes,
comenzaron los primeros intentos por corregirlo a finales del siglo XIX.
Herman Snellen propuso la más conocida pantalla de optotipos, a la
que incorporó el disco radial para detectar el astigmatismo y que se
mantiene aún vigente. Aportó la definición de astigmatismo "según la regla"
y "en contra de la regla". Este mismo año, el francés Giraud-Teulon
presentó unos optotipos análogos, constituidos por letras que formaban una
palabra completa.
El holandés F. C. Donders (Donders 1864) editó en inglés su clásico
On the Anomalies of Accommodation and Refraction of the Eye, en que se
aclaraban los conceptos confusos de los defectos de refracción y del
astigmatismo, estableciendo la forma de corregirlo con lentes cilíndricas.
Enfatizaba que la disminución de agudeza visual era el síntoma más
importante del astigmatismo. Además, Donders interpretó la imagen radial,
ya fuese procedente de una estrella brillante como en la referencia pre-
cristiana, o de un punto lejano iluminado. Donders estimó que cada sector
del cristalino producía una imagen separada y clasificó esta poliopía como
una manifestación del astigmatismo fisiológico irregular. Previamente, en
1858, había publicado su trabajo Über die Refraktions und Accomodations
Anomalien en el que escribía el método subjetivo de refracción. Ya en 1862
había publicado Astigmatismus und cylindrische Gläser, suponiendo la
incorporación a partir de ese momento de las lentes cilíndricas en las cajas
de prueba.
3. Astigmatismo
23
En 1866 Albrecht Nagel, y Dubrowski en 1868, discutieron el papel de
la acomodación en el astigmatismo, y admitieron la existencia de
contracciones del músculo ciliar que provocaban un astigmatismo en el
cristalino capaz de neutralizar el corneal. A la vez, John Green incluyó en
Detection and measurements of astigmatism tres ilustraciones de sus discos
de astigmatismo, uno de los cuales está formado por un punto central y 60
líneas radiales. Los test de Green (Figura 4) son el modelo de los optotipos
empleados actualmente para medir el astigmatismo.
Figura 4. Test de Green. Imagen obtenida del sitio
http://www.oftalmo.com/secoir/secoir2005/rev05-2/05b-04.htm
Woinow y Von Reuss publicaron un documento sobre el astigmatismo
corneal tras la operación de cataratas y ya en 1871 publican la primera
monografía sobre el astigmatismo, analizando su aplicación clínica.
Mientras, Snellen publicó Die Richtung der Haupmeridiane des
astigmatischen Auges (Snellen 1869), sugiriendo por vez primera utilizar
incisiones perpendiculares al meridiano corneal de mayor curvatura, con el
fin de aplanarlo y corregir el astigmatismo.
3. Astigmatismo
24
Blix construyó un nuevo aparato que además de medir la curvatura
corneal podía medir el espesor, la profundidad de la cámara anterior e
incluso permitía visualizar la reflexión de la cara posterior de la córnea.
Fue Schiötz, en 1885, quien realizó incisiones corneales límbicas para
reducir el astigmatismo iatrogénico a un paciente de 33 años con un defecto
de 19.50D después de la cirugía de catarata, empleando una incisión
penetrante, con un cuchillete de von Graeffe de 3,5 mm, a nivel del limbo,
en el meridiano más curvo, consiguiendo una reducción de 7D a los 5
meses. Fick, tras experimentar en ojos de conejo y de cadáver, tomó
moldes del ojo humano y fabricó lentes de contacto esclerales,
recomendándolas para corregir el astigmatismo irregular.
Mientras, Burnett propuso que para designar el astigmatismo se
emplease el concepto astigmia, ya que consideraba que desde el punto de
vista etimológico era más correcto, si bien esta idea no prosperó.
En 1890, el sueco Gullstrand estableció los principios básicos del
astigmatismo en su tesis Contribución a la teoría del astigmatismo,
recibiendo ese mismo año el Nobel de Medicina. Desarrolló lentes asféricas
para corregir el astigmatismo por incidencia oblicua y contribuyó al
conocimiento de la estructura y función de la córnea determinando que la
potencia total del ojo era de 43D (suma del poder de la superficie anterior,
49D, y la posterior, 6D).
3. Astigmatismo
25
Galezowski intentó, sin éxito, aplanar el contorno corneal mediante la
resección de una pieza semilunar mientras que Bates reportó 6 pacientes
que presentaron aplanamiento en el meridiano corneal que intersectaba una
cicatriz quirúrgica o traumática y postulaba que incisiones corneales
realizadas en ángulo recto en los meridianos más curvos podían corregir el
astigmatismo aunque atribuía este defecto refractivo no a modificaciones
morfológicas de la córnea sino a la hinchazón del cristalino o al
alargamiento del globo y consideraba el astigmatismo mixto producido por
una tracción hacia arriba de la inserción del músculo recto superior.
Faber publicó Operative Behandeling van Astigmatisme en el que
refería haber realizado incisiones anteriores transversas perforantes
unilaterales en un joven paciente de 19 años, con un astigmatismo
idiopático de 1.5D, reduciéndolo en 0.75D. Se trata de la primera
intervención reportada con un objetivo laboral ya que permitió al paciente
ingresar en la Academia Militar. Y Lucciola publicó Traitement chirurgical de
l’astigmatisme en el que empleaba incisiones no perforantes en diez casos
para aplanar uno de los lados del meridiano más curvo y corregir el
astigmatismo, discutiendo la influencia del tipo y localización de las
incisiones.
Kagenaar, dedicado a la fabricación de instrumentos, introdujo en el
mercado alemán un “astigmómetro”, que era una modificación del
oftalmómetro de Javal-Schiötz. El holandés Leendert Jan Lans en su tesis
doctoral Experimentelle Untersuchungen über Entstehung von
3. Astigmatismo
26
Astigmatismus durch nicht-perforierende Corneawunden, realizó uno de los
primeros estudios sistemáticos de cirugía refractiva. En su experimentación
animal definió los principios de la queratotomía astigmática y establecía que
variando el número, dirección y forma de las incisiones se podían manipular
los efectos y adaptarlos a la corrección visual prevista. Mostró que el
aplanamiento en los meridianos perpendiculares a una incisión transversa
se asociaba a la incurvación en el meridiano ortogonal y que un mayor
efecto podía lograrse con incisiones más largas y profundas o si se
aplicaban puntos de cauterización en áreas corneales yuxtalimbares en el
meridiano opuesto.
A finales del XIX, Reutler describió la aparición de astigmatismo en
contra de la regla en casi el 90% de los pacientes intervenidos de cataratas.
3.2.2 Siglo XX
Comienza el siglo con Dufour presentando la monografía Les verres
cylindriques et toriques et la correction de l´astigmatisme y con Sulzer
revisando la historia del astigmatismo en la Encyclopedie française
d´Ophtalmologie. Mientras, el óptico inglés Sutcliffe diseñaba un
queratómetro que permitía medir los dos meridianos principales a la vez, a
través de unas miras circulares y el danés Tscherning (Tscherning 1963)
perfeccionaba la lente periscópica ortoscópica que permitía eliminar casi
completamente el astigmatismo de incidencia oblicua evitando la distorsión
periférica de la visión.
3. Astigmatismo
27
Márquez (Márquez 1926) observó que el astigmatismo corneal y el
total no coincidían ni en el valor dióptrico ni en la inclinación de los
meridianos principales. Para su corrección determinó el astigmatismo
corneal mediante queratometría y el astigmatismo que denominaba
restante lo medía colocando en la montura un segundo cilindro
perpendicular a la dirección en la que los radios se percibían más nítidos,
miopizando previamente el ojo y empleando esquiascopía o el círculo
horario. Esta combinación bicilíndrica podía trasponerse en un cilindro único
según las tablas que elaboró junto a Busto en 1922.
En 1910, Gullstrand conjeturó que los rayos observados alrededor de
un punto luminoso se debían a diferencias en la curvatura del cristalino o a
las estrías provocadas por la tensión sobre su superficie de las fibras
zonulares. Wray redujo mediante cauterización corneal un astigmatismo
hipermetrópico de 5 dioptrías y Terrien, en su trabajo Dystrophie marginale
symétrique de deux cornées avec astigmatismo régulier consécutive et
guérison par la cautérisation ignée, aconsejó la cauterización ígnea en casos
de astigmatismo directo o inverso considerable de diez o doce dioptrías.
Practicó algunas aplicaciones muy superficiales en los extremos del
diámetro menos refringente a fin de provocar una retracción cicatricial y, en
consecuencia, su disminución.
Sato, al observar el aplanamiento espontáneo de la córnea de un
paciente con queratocono tras una rotura de la membrana de Descemet
(hydrops agudo), comenzó una extensa investigación experimental sobre la
3. Astigmatismo
28
queratotomía radial y astigmática para tratar de definir el tipo de incisiones
en la cara posterior de la córnea que podrían resultar más efectivas para
modificar su configuración estableciendo dos modelos básicos: incisiones
posteriores transversas en el eje más curvo para astigmatismos medios e
incisiones posteriores transversas asociadas a radiales para astigmatismos
más graves. Sin embargo, las incisiones en la cara posterior corneal
dañaban finalmente el endotelio, lo que le hizo abandonar la técnica años
más tarde. La aportación de Sato marcó sin duda el comienzo de la
moderna cirugía refractiva (Sato 1950, Sato 1953, Sato 1955).
En 1932 y 1934 Bausch & Lomb y Carl Zeiss Jena modificaron y
perfeccionaron los instrumentos para medir el astigmatismo mediante la
introducción de un disco de Scheiner el primero, que mejoraba el enfoque, y
un sistema de desdoblamiento con prismas que mejoraba la medida.
O’Connor (O´Connor 1933), en 1933, aplicó una cauterización a 90º
del eje más curvo, que se extendía desde el borde pupilar hasta más allá
del limbo, logrando un resultado parcial inmediato y una corrección de 8D
de astigmatismo miópico a los nueve años de la intervención. Groengolm y
Kangasniemi observaron que el astigmatismo en contra de la regla se podía
reducir incrementando el número de puntos para suturar la incisión.
3. Astigmatismo
29
Thiele comenzó a enseñar a sus alumnos a graduar el astigmatismo
empleando la técnica de los cilindros cruzados y en 1941 impartió el primer
curso con reconocimiento oficial al respecto.
Barraquer, en 1949 (Barraquer 1949), inició sus trabajos e introdujo
el término queratoplastia refractiva para designar aquellas intervenciones
plásticas practicadas sobre la córnea con el fin de modificar la refracción del
globo ocular. Más adelante, a partir de 1958, desarrolló su técnica de
queratomileusis básicamente para la corrección quirúrgica de la miopía y
planteó realizar injertos lamelares tallados sobre una base tórica para la
corrección de astigmatismos.
Paez Allende dio cuenta de sus casos tratados por queratotomías
límbicas, perpendiculares al meridiano de máxima curvatura, dependiendo
su amplitud del grado de astigmatismo, realizando unas veces incisiones
amplias hemicorneales y otras reducidas a sectores menos extensos.
Mientras, Tosti (Tosti 1953) basó su técnica en el aumento de curvatura del
meridiano corneal menos refringente en cuyos extremos aplicaba una
corriente termocoagulante, buscando aplanar el meridiano perpendicular.
Alvaro Poyales (Poyales 1953) adoptó procedimientos
queratoplásticos realizando dos trepanaciones corneales concéntricas no
penetrantes, resecando y suturando sólo los sectores de la doble
3. Astigmatismo
30
trepanación correspondientes a los cuadrantes perpendiculares al meridiano
de máxima refracción. En 12 casos logró una reducción del astigmatismo de
4-5 dioptrías. Inicialmente empleaba trepanaciones menores de 5 y 6 mm y
posteriormente ampliaba a 8 y 9 mm para alejar la cicatriz del área pupilar.
Mientras, Barraquer y Muiños (Barraquer J 1956) describieron la resección
escleral lamelar situada en el eje menos refringente de la córnea
modificando su amplitud según el grado de defecto con lo que se tendería a
igualar ambos meridianos y aconsejaban la técnica para corregir
astigmatismos de 3-4 dioptrías.
En el mismo año, Corcóstegui Moliner, en un estudio experimental en
conejos, realizó varias modalidades de queratotomía. La incisión penetrante
límbica hemicorneal con sutura conjuntival era la que producía mayor
hipermetropización por encima de 6 dioptrías, aunque la consideraba
arriesgada por la posibilidad de que se produjese un prolapso del iris.
Fyodorov (Fyodorov and Durnev 1981) presentó varias modalidades
de incisiones transversas asociadas a queratotomía radial para la corrección
del astigmatismo miópico. También en esa época, en las cirugías de
cataratas, se empiezan a emplear suturas de poliéster monofilamento 10/0
lo que permitía un mayor control sobre el astigmatismo inducido.
3. Astigmatismo
31
En 1981, Ruiz describió la queratotomía trapezoidal e investigó su
efecto en el astigmatismo congénito destacando la importancia del centraje
de la incisión, el efecto de su longitud así como la magnitud de acción sobre
el eje a 90º y el efecto según la profundidad, que estableció en el 75-80%
del espesor corneal. Su técnica era aplicable especialmente en el
astigmatismo miópico compuesto, mayor de 3 dioptrías de cilindro y cuando
el equivalente esférico no superase las 6 dioptrías. Consistía en practicar 3-
4 incisiones paralelas a cada lado de la zona óptica, opuestas entre sí, sobre
el eje astigmático a corregir, acompañadas siempre de incisiones
semiradiales que las enmarcaban, adoptando la forma de un trapecio.
A principios de los 80, Osher fue el primer cirujano que a la vez que
intervenía al paciente de cataratas intentaba corregir al astigmatismo
previo. Thornton (Thornton 1990, Arciniegas and Amaya 1993, Thornton
1994) propuso una técnica que incluía tres pares de incisiones arcuatas y
después Arciniegas (Arciniegas and Amaya 1993) proponía la asociación de
incisiones circulares con la doble longitudinal para la corrección del
astigmatismo. A finales de los años 80 se iniciaron los estudios para el uso
del láser excimer en cirugía corneal. La técnica de ablación con láser
excimer se afianzó de manera imparable en la década de los 90,
desplazando en gran medida a la cirugía incisional en las ametropías
esféricas aunque mantiene su vigencia en astigmatismos elevados,
especialmente tras la queratoplastia.
3. Astigmatismo
32
En 1992, Troutman y Buzard publicaron Corneal Astigmatism.
Etiology, Prevention and Management que constituyó una importante
contribución práctica a la literatura del tema (Troutman R 1992).
*Para realizar la sección 3.2., además de la bibliografía referenciada,
se han consultado los siguientes libros:
- Gil del Río. Optica Fisiológica Clínica. Refracción. Ediciones
Toray, Barcelona. 1984.
- Wade, N. A Natural History of vision. A Dradford Book.
London. 1998.
- Cristóbal, JA. Astigmatismo. Sociedad Española de Cirugía
Ocular Implanto Refractiva. Madrid. 2006.
- Duke-Elder, S. System of Ophthalmology, Ophthalmics Optics
and Refraction. Henry Kimpton. London. 1970.
- Munoa, JL. Historia de la Oftalmología española
contemporánea. Salamanca. 1964.
- Salado, F. Astigmatismo. Universidad de Cádiz. 1988.
3. Astigmatismo
33
3.3 Prevalencia y epidemiología del astigmatismo
La prevalencia del astigmatismo en la población es muy variable ya
que depende de factores como la raza, la región geográfica, la edad de los
individuos que se estudien o incluso el valor inicial en el que se considere el
astigmatismo como significativo.
La prevalencia y magnitud de este error refractivo suele ser elevado
al nacer, encontrando algunos estudios hasta un porcentaje del 70%
(Atkinson and French 1979, Atkinson, Braddick et al. 1980) incluyendo
astigmatismos menores de 1.00 D que disminuyen con la edad. Los estudios
que han seguido la evolución del astigmatismo en niños han mostrado que
entre el primer y el cuarto año de vida se produce una disminución
significativa de este porcentaje, considerándose estable entre los 7 y 9 años
(Gwiazda, Scheiman et al. 1984, Gwiazda, Mohindra et al. 1985, Gwiazda,
Grice et al. 2000). Otros estudios muestran que la disminución de este
astigmatismo puede estabilizarse hacia los 10 años (Howland, Atkinson et
al. 1978, Howland and Sayles 1984).
Si se incluyen grupos de edad adulta, la frecuencia estimada puede
oscilar entre el 30 y el 60% de la población (Satterfield 1989, Hashemi,
Hatef et al. 2005). En el estudio longitudinal donde se incluyeron individuos
entre los 13 y los 33 años se observaba que tanto el astigmatismo corneal
como el refractivo variaban poco durante esta etapa (Morgan and Munro
1973, Grosvenor 1978).
3. Astigmatismo
34
Sin embargo, diversos estudios sí confirman que el astigmatismo
contra la regla aumenta en pacientes de edades más avanzadas (Lyle 1951,
Hirsch 1959, Lyle 1971) estando causado por cambios en el astigmatismo
corneal, en el cristaliniano o en ambos.
Los astigmatismos directos son los más frecuentes (hasta un 45%)
mientras que los inversos pueden constituir alrededor del 35%. Los oblicuos
son los menos frecuentes (Cowen and Bobier 2003).
De acuerdo con los datos de los diferentes estudios, Grosvenor
(Grosvenor, Quintero et al. 1988, Grosvenor 2007) concluyó que la
evolución que sigue el astigmatismo a lo largo de la vida es que el niño
nace con astigmatismo contra la regla; éste disminuye marcadamente
durante la edad preescolar llegando a convertirse en un pequeño
astigmatismo directo, que evoluciona poco durante al juventud y que a
partir de los 30-40 años va tendiendo a convertirse en 0. En las edades más
avanzadas pasa a ser un astigmatismo inverso, debido a que la zona tarsal
del párpado superior comienza a perder su rigidez hacia la mitad de la vida.
Si nos centramos únicamente en estudios que nos muestran la
incidencia de astigmatismo en pacientes con caratatas, el valor vuelve a ser
muy variable debido a las consideraciones de cada estudio. Podemos
encontrar desde valores del 2%, algo muy por debajo de la realidad, hasta
3. Astigmatismo
35
valores mayores del 20%. La literatura estima que hasta el 30% de los dos
ojos pueden tener un astigmatismo mayor de 1.50D (Hoffer 1980, Ninn-
Pedersen, Stenevi et al. 1994, Ninn-Pedersen, Stenevi et al. 1994,
Mendicute, Irigoyen et al. 2008, Ferrer-Blasco, Montes-Mico et al. 2009). La
incidencia mayor de 3.00D en ojos se reduce en casi la totalidad de los
estudios a menos del 5% (Frohn, Dick et al. 1999, Gills and Van der Karr
2002, Till, Yoder et al. 2002, Urminsky, Rozsival et al. 2007).
Figura 5. Datos aportados por el laboratorio Alcon donde se muestra el porcentaje
de astigmatismo estimado en pacientes con cataratas y asocia estos datos a su
lente intraocular monofocal tórica Acrysof SN60T, mostrando el porcentaje de
pacientes que se podrían beneficiar en función de la cantidad de astigmatismo que
hubiese que corregir. Imagen tomada del sitio
http://www.alconsurgical.co.za/images/CataractIOLs/graph-expanded-large.jpg
3. Astigmatismo
36
3.4 Astigmatismo: eje y meridiano
Uno de los principales errores que se comete al hablar de
astigmatismo, es el confundir los términos eje y meridiano.
Cuando nos referimos a un astigmatismo corneal, el término eje se
define como la orientación de una lente cilíndrica donde no hay potencia
refractiva, mientras que el meridiano se define como el arco que atraviesa
la córnea, de limbo a limbo, donde la potencia corneal es medible (Waring
1989).
Cuando los clínicos se refieren al “eje curvo” o al “eje plano”, el
término “eje” está empleado de manera incorrecta ya que se debería hablar
del “meridiano curvo” y del “meridiano plano”.
Para poner un ejemplo más clarificador, en un astigmatismo directo,
la curvatura de mayor poder se encuentra en el meridiano vertical, por lo
que el eje del cilindro corrector se encuentra a 180º.
3.5 Astigmatismo, conoide de Sturm y círculo de mínima
confusión
Como ya hemos dicho anteriormente, el astigmatismo es el defecto
refractivo del ojo en el que existe distinta potencia refractiva en distintos
3. Astigmatismo
37
meridianos, lo que impide que se forme en la retina una imagen puntual a
partir de un objeto puntual.
Se produce en una superficie cuya curvatura progresa desde un valor
mínimo hasta un valor máximo en meridianos perpendiculares, de forma
que los rayos no sufren la misma desviación en todos los meridianos. En
vez de un punto focal simple hay dos líneas focales separadas entre sí por
un intervalo cuya longitud es directamente proporcional a la diferencia de
potencia entre los dos meridianos principales. Estas dos focales reciben el
nombre de focales de Sturm y el haz de luz formado por el sistema
astigmático se llama conoide de Sturm.
Figura 6. Conoide de Sturm, focales máxima y mínima e intervalo de Sturm entre
las focales principales. Imagen obtenida del sitio
http://www.oculist.net/others/ebook/generalophthal/vaughan/public/co_figures/ch
020/ch20fg12.jpg
En el gráfico (Figura 6) se observa que la imagen que forma una
superficie astigmática de un punto objeto situado en el eje a distancia
infinita no es otro punto sino dos pequeños segmentos perpendiculares,
situados a diferentes distancias de la superficie. Entre las líneas focales y el
3. Astigmatismo
38
círculo de menor confusión se encuentran elipses horizontales y verticales
dependiendo de la línea focal que esté más cerca.
Si se colocara una pantalla perpendicularmente al eje en distintas
zonas del haz emergente (conoide de Sturm) se observaría que el haz tiene
forma de elipse excepto en tres posiciones concretas que se corresponden
con las dos focales principales y con el círculo que está situado entre ambas
líneas y que recibe el nombre de círculo de mínima confusión por ser en
esta posición donde la imagen tiene mayor parecido con el objeto.
Figura 7. Círculo de mínima confusión y focales correspondientes al meridiano
horizontal y al meridiano vertical. Imagen obtenida del sitio http://tilanotv.es/wp-
content/uploads/2014/04/Figura42.png
La posición o localización de las líneas focales pueden conocerse al
aplicar la fórmula para lentes delgadas:
Ecuación 1. Fórmula de lentes delgadas
3. Astigmatismo
39
Donde…
= Es la distancia focal
do = Es la distancia entre el objeto y la lente
di = Es la distancia entre la imagen
El círculo de menor confusión es el lugar donde la imagen que se
forma por la superficie tórica es mejor o más nítida, pero debemos recordar
que nunca será perfecta en este punto porque la energía se concentra en
un círculo y no en un punto cómo idealmente debería de ser. Esto hará que
el círculo de menor confusión sea el lugar donde tengamos una mejor
agudeza visual, pero aunque el círculo de menor confusión esté sobre la
retina, ésta no será tan buena como cuando se trata de un paciente
emétrope.
Cuando queremos lograr que un paciente astígmata obtenga la mejor
visión posible con lentes esféricas, deberemos llevar el círculo de menor
confusión a la retina. Por ello, podemos definir el equivalente esférico (SE)
como la lente esférica que lleva el círculo de mínima confusión y que se
corresponde con la fórmula:
Ecuación 2. Cálculo del equivalente esférico
3. Astigmatismo
40
3.6 Clasificación del astigmatismo
Para clasificar el astigmatismo podemos hacerlo atendiendo a
diferentes parámetros.
En función de la relación de las dos líneas focales con la retina
(con la acomodación relajada) (Márquez 1926) (García Martínez 1914):
- Astigmatismo simple: Se produce cuando una línea focal se
localiza en la retina y la otra por delante o por detrás de ésta. Si la
focal se encuentra por delante de la retina diremos que se trata de
un astigmatismo miópico simple (AMS), y si se encuentra
posicionada detrás de la retina estaremos ante un astigmatismo
hipermetrópico simple (AHS).
- Astigmatismo compuesto: En esta situación las dos focales estarán
situadas fuera de la retina si bien, las dos estarán posicionadas o
bien por delante o bien por detrás. En el primer caso estaremos
ante un astigmatismo miópico compuesto (AMC) mientras que en
el segundo caso tendremos un astigmatismo hipermetrópico
compuesto (AHC).
- Astigmatismo mixto: Una línea focal está delante y otra detrás de
la retina, de modo que un meridiano es miope y el otro
hipermétrope.
En el caso de los astigmatismos miópicos, la imagen se formará por
delante de la retina y el sujeto verá borroso de lejos. Al mirar de cerca la
imagen se acercará a la retina y puede que la visión mejore algo, pero no
3. Astigmatismo
41
puede ser perfecta ya que no existe un foco puntual que pueda ser llevado
a la retina.
En los astigmatismos hipermetrópicos la imagen estará por detrás de
la retina, el sujeto verá borroso de lejos, pero si tiene capacidad para
acomodar podrá llevar alguna de las líneas focales a la retina y mejorará
algo la visión
En función de la relación que existe entre los meridianos
principales (García Martínez 1914, Belmonte 1989):
- Astigmatismo regular: Es el más frecuente. Se produce cuando los
dos meridianos refractivos principales forman un ángulo recto.
- Astigmatismo irregular: Se produce por falta de regularidad en la
superficies refringentes, generalmente la córnea (cicatrices
corneales, queratocono,…) y más raramente el cristalino
(opacidades incipientes, lenticono).
Esta clasificación tiene un valor importante a la hora de intentar
corregir el astigmatismo mediante lentes intraoculares tóricas ya que,
debido al diseño actual de este tipo de lentes, sólo se podrán corregir de
manera precisa los astigmatismos regulares ya que las lentes tienen la
misma potencia a lo largo de todo un meridiano.
En función de la posición del meridiano más potente (García
Martínez 1914, Keller, Collins et al. 1996, Kleinstein, Jones et al. 2003)
(Read, Collins et al. 2007):
3. Astigmatismo
42
- Astigmatismo directo o según la regla: El meridiano de máxima
potencia es el meridiano vertical.
- Astigmatismo inverso o contra la regla: El meridiano de máxima
potencia es el meridiano horizontal.
- Astigmatismo oblicuo: Se produce cuando el meridiano de máxima
potencia es oblicuo, siempre que los meridianos principales estén
en ángulo recto. Por convención, si los dos meridianos principales
están más alejados de 30º de la horizontal o la vertical se
considerará que el astigmatismo es oblicuo.
El astigmatismo directo de 0.25D ó 0.50D se considera fisiológico y es
debido a la presión constante del párpado superior sobre la córnea, que
provoca un aumento de la curvatura vertical, con el consiguiente aumento
de potencia en ese meridiano.
En cuanto a la visión, atendiendo a esta clasificación del
astigmatismo, los ojos con astigmatismo oblicuo sin compensar tienen un
rendimiento visual inferior que los ojos con astigmatismo a favor o en
contra de la regla (Kobashi, Kamiya et al. 2012).
Esta clasificación es importante a la hora de hablar de la cirugía de
cataratas ya que la tendencia de muchos cirujanos es dejar algo de
astigmatismo contra la regla en el ojo no dominante de lejos, creando una
mini-monovisión que hace que se aumente la profundidad de foco y el
paciente obtenga una visión binocular más cómoda en cerca. Es por ello,
3. Astigmatismo
43
que no siempre el target que se busca en cuanto al astigmatismo sea el
plano.
También hay que considerar, que esta mini-monovisión sólo se
recomienda con lentes monofocales o monofocales tóricas ya que cualquier
defecto refractivo postoperatorio, cuando el paciente lleva lentes
multifocales, hará que la visión en lejos sea más sintomática y pueda ir
asociada a efectos relacionados con la luz.
En función de la estructura del ojo que tenga la superficie tórica
(García Martínez 1914, Read, Collins et al. 2007):
- Astigmatismo corneal: Se produce cuando la toricidad se
encuentra en la córnea y es la mayor causa de astigmatismo
ocular, normalmente debido a la cara anterior de esta estructura.
- Astigmatismo lenticular, interno o cristaliniano: Se debe al
cristalino y la causa puede ser una asimetría de curvatura de
cualquiera de las superficies o de ambas, aunque también puede
deberse a un descentramiento o inclinación del cristalino con
respecto al eje visual (el cristalino está inclinado entre 3º y 7º
alrededor del eje vertical, con el lado temporal desplazado hacia la
córnea). El cristalino tiene fisiológicamente cierto grado de
astigmatismo de índice en forma de astigmatismo inverso de
0.50D ó 0.75D que aumenta con la edad.
- Astigmatismo retiniano: Generalmente no es apreciable y suele
deberse a la variación de la orientación macular que se puede
producir en distintas patologías.
3. Astigmatismo
44
- Astigmatismo de vítreo: La presencia de flóculos, densificaciones u
opacidades vítreas puede modificar el índice de refracción habitual
e inducir un astigmatismo irregular.
- Astigmatismo zonular: Puede producirse cuando alteraciones en la
zónula o a nivel del músculo ciliar pueden producir una alteración
en la acomodación de diferentes sectores del cristalino.
Clasificación atendiendo al origen del astigmatismo (Solsona 1975)
puede ser:
- Astigmatismo congénito: El astigmatismo habitual es el congénito
hereditario dependiente de variaciones normales de las
estructuras oculares.
- Astigmatismo adquirido: Puede deberse a cambios lenticulares
(como diabetes o uremia,), afectaciones corneales (úlceras,
traumatismos, infecciones,...), uso prolongado de lentes de
contacto, operaciones quirúrgicas, etc.
Por último, el astigmatismo refractivo, subjetivo o total es el que
se determina con la refracción del sujeto (Read, Collins et al. 2007).
En 1890, Javal, propuso una regla empírica para predecir el
astigmatismo subjetivo a partir del astigmatismo corneal medido mediante
queratometría (Grosvenor, Quintero et al. 1988).
Ecuación 3. Fórmula para calcular el astigmatismo total a partir del astigmatismo
corneal
3. Astigmatismo
45
Donde
At= Astigmatismo total o refractivo
Ac= Astigmatismo corneal
p= Constante de valor 1.25
k= Valor constante de +0.50 a 90º
Hasta ahora hemos clasificado el astigmatismo de manera monocular,
evaluando un solo ojo, pero también se puede hacer una clasificación si se
compara el astigmatismo entre un ojo y otro.
Clasificación al relacionar el astigmatismo de ambos ojos (García
Martínez 1914, Martínez de la Casa 1999):
- Astigmatismo simétrico: Se produce cuando los meridianos
principales de cada ojo están inclinados en una posición simétrica
(especular).
- Astigmatismo asimétrico: No existe simetría entre los meridianos
principales.
- Astigmatismo homónimo: Los dos ojos presentan astigmatismo a
favor o en contra de la regla pero en cualquier caso del mismo
tipo.
- Astigmatismo heterónimo: Un ojo presenta un astigmatismo
directo, inverso u oblicuo mientras que el otro ojo presenta una
opción diferente.
Además del dato ya comentado sobre la teoría de muchos cirujanos
de dejar algo de astigmatismo contra la regla en el ojo no dominante de
3. Astigmatismo
46
lejos, la principal consideración que se debe hacer del astigmatismo en
pacientes que se van a operar de cataratas, atendiendo a esta clasificación,
es saber distinguir exactamente el astigmatismo corneal del interno.
Cuando un paciente es intervenido de cataratas, su astigmatismo
cristaliniano desaparecerá por lo que la principal consideración a la hora de
hacer el cálculo es saber cuál es exactamente el astigmatismo corneal que
presenta el paciente, particularmente si lo que se busca es su
compensación a través de una lente intraocular tórica.
En estos pacientes, el astigmatismo refractivo tampoco se ha de
tener en cuenta ya que en él interviene el astigmatismo cristaliniano y en
muchas ocasiones también se puede producir un astigmatismo secundario a
la formación de la catarata u opacificación del cristalino.
Diversos autores han confirmado que se produce una variación entre la
relación del astigmatismo de la cara anterior y posterior de la córnea con la
edad (Dubbelman, Van der Heijde et al. 2005, Ho, Liou et al. 2010, Ueno,
Hiraoka et al. 2014), y que no considerar el astigmatismo de la cara
posterior de la córnea puede llevar a un error en el cálculo de la potencia de
la lente (Ho, Tsai et al. 2009, Pinero, Alio et al. 2010, Cheng, Tsai et al.
2011, Koch, Ali et al. 2012, Koch, Jenkins et al. 2013). De ahí la necesidad
de conocer de la manera más precisa posible, como veremos más adelante,
la potencia del astigmatismo de la cara anterior de la córnea y la potencia
del astigmatismo corneal total.
3. Astigmatismo
47
3.7 Medida del astigmatismo corneal
La córnea es una superficie convexa a la vez que reflectante y
refractante. Si se desea conocer la potencia refractiva es suficiente con
reflejar un objeto de tamaño conocido a una distancia determinada de la
superficie corneal, determinar el tamaño de la imagen reflejada y calcular la
potencia a partir de un índice de refracción conocido, aunque hay que
considerar que debido a los micromovimientos oculares para hacer posible
esta medición de manera correcta los distintos instrumentos empleados
deben corregir esta situación(Gutmark and Guyton 2010).
La medida del astigmatismo corneal, tanto cualitativa como
cuantitativa, se puede hacer mediante el queratómetro u oftalmómetro
(manual o automático) o mediante un topógrafo corneal.
La queratometría manual fue descrita por Helmholtz (1854) y aunque
es sencilla de realizar, hay que considerar que los queratómetros manuales
están sujetos a errores de lectura, de enfoque y de mala calibración.
Por su parte, la queratometría automática aporta rapidez, exactitud y
una gran reproductibilidad entre exploradores diferentes. En cambio, la
topografía corneal, siempre y cuando hablemos de medir el astigmatismo
corneal central, resulta de mayor utilidad en córneas muy planas o muy
curvas al obtenerse una mayor precisión. Además de ser más precisa en
córneas irregulares o en pacientes intervenidos previamente, aporta una
3. Astigmatismo
48
representación gráfica del astigmatismo que no ofrece la queratometría, lo
que la hace más útil en astigmatismos medios y altos ya que ayuda a
obtener una mejor valoración del mismo.
Pero los queratómetros, ya sean manuales o automáticos, presentan
la limitación de dar sólo información de la cara anterior de la córnea, por lo
que para conocer la cara posterior o la potencia corneal total debemos
acudir a topógrafos que permitan el análisis de las dos superficies
corneales.
3.7.1 Queratometría
Se trata de la técnica clínica objetiva que más se utiliza para medir
la curvatura de la cara anterior de la córnea(Gutmark and Guyton 2010).
La medida de los radios corneales, en una porción de la córnea
aproximadamente de 3 mm centrales, se obtiene en milímetros que se
pueden convertir a dioptrías mediante una fórmula que utiliza un índice de
refracción, característico de cada sistema de medición, y que ha de tenerse
en cuenta para no obtener resultados erróneos.
Existen distintos tipos de queratómetros manuales, pero todos se
basan en el reflejo que produce la córnea como superficie curva convexa de
varias imágenes (o miras) calibradas, proyectadas sobre ésta. De la relación
entre la posición real de las miras y de la posición del reflejo de éstas se
obtiene el poder refractor de la córnea y los radios de curvatura
3. Astigmatismo
49
correspondientes y ejes principales. La mayoría de los queratómetros
utilizan el principio de duplicación. Cuando se refleja un objeto sobre la
córnea, al ir a medirlo, por muy corto que fuese el tiempo empleado, el ojo
se habría desplazado lo suficiente para hacer medidas queratométricas poco
exactas. Por ello, si se duplicara el objeto, por ejemplo mediante un sistema
prismático, se podría hacer la medida de forma precisa tomando estos dos
puntos como referencia.
La construcción de la imagen corneal a partir de la mira del
queratómetro se puede realizar trazando un primer rayo dirigido al punto
focal, el cual es reflejado por el espejo (córnea) y sale paralelo al eje óptico.
Un segundo rayo es dirigido directamente al centro de curvatura, el cual
incide y se refleja en la misma dirección; por la prolongación de estos rayos
se puede localizar la posición de la imagen corneal virtual. Dentro del
principio óptico en el diseño del queratómetro se hace la siguiente
aproximación (Bennett and Rabbetts 1991): la mira (objeto) está lo
suficientemente lejos de la córnea para que la imagen virtual se forme muy
cerca del plano focal de la córnea, la distancia a partir de la mira real al
plano focal es poco diferente de la actual distancia (d) entre el objeto (mira)
y su imagen corneal. Por lo tanto:
Ecuación 4. Fórmula que permite conocer el radio corneal a partir del tamaño de las
miras proyectadas y reflejadas
Donde
h = Tamaño del objeto (mira)
3. Astigmatismo
50
h´ = Tamaño de la imagen (imagen corneal)
r = Radio de curvatura del espejo (córnea)
d = Distancia entre objeto e imagen.
Para obtener la potencia en dioptrías de la córnea, la conversión la
realizaremos con la fórmula:
Ecuación 5. Cálculo de la potencia corneal a partir del radio medido
Donde
K = Potencia del meridiano corneal (D)
n = Índice de refracción queratométrico
r = Radio de curvatura de la cara anterior
Existen queratómetros automáticos que en la actualidad aparecen
asociados a otros instrumentos como los refractómetros y también se puede
tomar la medida mediante interferometría (IOLMaster® o LenStar®). Si
bien cabe destacar que en estos casos los instrumentos utilizan un índice
diferente al resto por lo que las medidas no son directamente
intercambiables (Haigis 2014).
Independientemente del tipo de queratómetro que se emplee, la
diferencia de potencia entre los dos meridianos principales indicaría la
potencia de la lente cilíndrica necesaria para corregir el astigmatismo
corneal del paciente (entendiendo siempre como astigmatismo de la cara
anterior que en la mayoría de los pacientes se corresponde con el
astigmatismo corneal total).
3. Astigmatismo
51
Por otra parte, el meridiano de menor potencia refractiva indicaría la
posición del eje negativo del cilindro corrector.
Las principales fuentes de error a la hora de hacer queratometría
pueden estar relacionadas con la superficie corneal y el índice de refracción
empleado. Al ser tomadas las medidas por reflexión sobre la superficie
corneal, ésta ha de estar en perfectas condiciones de regularidad. La
película lagrimal presenta sus mejores condiciones inmediatamente después
del parpadeo. En casos de sequedad ocular o problemas de recubrimiento
de la superficie corneal se recomienda instilar lágrimas artificiales antes de
la medida. Los pacientes portadores de lentes de contacto han de suspender
su uso hasta obtener lecturas queratométricas estables. En el caso de
lentes blandas pueden ser suficientes un par de días mientras que en el
caso de lentes permeables puede llegar a ser de varias semanas el periodo
de descanso.
En cuanto al índice de refracción más utilizado en Europa es de 1,332
mientras que en Estados Unidos se usa 1,3375. Si se intercambiaran estos
índices se induciría un error de 0.8D, además, el índice de refracción usado
por los métodos de interferometría es diferente al usado por el resto de
equipos de medición (Haigis 2014).
3. Astigmatismo
52
Las lecturas habituales de las potencias corneales estarán entre las
40D y 47D y debemos sospechar que se ha cometido un error al realizar la
prueba cuando encontramos diferencias de 1D o más entre los dos ojos. Las
diferencias entre el astigmatismo corneal y el refractivo deben ser revisadas
para detectar posibles fallos.
Requieren especial atención las córneas irregulares y en estos casos
se ha de intentar obtener datos de la topografía y si no es posible, del ojo
adelfo. Además, requieren una atención especial los ojos que previamente
han sido intervenidos de cirugía refractiva corneal ya que se tiende a
sobreestimar el poder dióptrico. La acomodación del observador también
influye aunque sólo ocurre en los queratómetros manuales, si el observador
utiliza su acomodación puede obtener medidas inferiores a las reales hasta
de 1.0D.
3.7.2 Topografía corneal
En los últimos años, la topografía corneal ha evolucionado desde un
procedimiento elaborado y costoso, a un dispositivo muy utilizado en la
clínica diaria. Además de los avances en el software, los topógrafos se han
hecho más pequeños, compactos, asequibles y precisos.
3. Astigmatismo
53
La topografía computerizada obtiene el modelo de la superficie
corneal en base al estudio de la luz reflejada que ha sido previamente
proyectada en la cara anterior de la córnea.
Para remontarnos a los orígenes de la topografía computerizada,
debemos irnos a Rowsey (Rowsey, Reynolds et al. 1981, Rowsey, Balyeat et
al. 1988) que fue quien inició la proyección de las imágenes del disco de
Plácido y, en 1984, Klyce (Klyce 1984) convirtió valores numéricos
digitalizados por ordenador en códigos de colores de distinta curvatura.
Según se fue desarrollando la técnica fueron publicándose en la literatura
datos corneales hasta entonces imposibles de caracterizar (Rabinowitz and
McDonnell 1989, Maeda, Klyce et al. 1995, Rabinowitz, Yang et al. 1996,
Maeda, Klyce et al. 1998, Rabinowitz and Rasheed 1999).
La mayoría de los primeros topógrafos corneales hacían sus medidas
a través de un disco de Plácido, basado en la extensión de mira única usada
por el queratómetro. Los datos de la curvatura se derivaban de las distintas
medidas entre los anillos. Este tipo de topógrafo mide la desviación de los
anillos reflejados y calcula la curvatura de los puntos de la superficie
corneal en dirección axial. Mide los radios de curvatura dando un mapa a
partir de la posición de estos radios en el plano, no en el espacio.
La topografía corneal representa un avance significativo en la medida
de la curvatura corneal sobre la queratometría. La mayoría de los
topógrafos corneales evalúan entre 8000 y 10000 puntos de la superficie
3. Astigmatismo
54
corneal, en contraste con los cuatro puntos evaluados en los 3-4 mm
centrales que evalúa el queratómetro.
Con la topografía se puede obtener una precisión hasta de 0.2D y
permite tener información de cualquier sitio de la córnea, mapas de
astigmatismo y superficie posterior. Es un instrumento que nos ayuda con
el diagnóstico precoz de alteraciones como las ectasias corneales.
La topografía puede estar indicada en muchas situaciones clínicas.
Condiciones como el queratocono y la degeneración marginal pelúcida
pueden presentar una variación de la curvatura corneal antes de que se
observen cambios en la biomicroscopía de polo anterior. En el queratocono,
los mapas dan información de la localización, tamaño y curvatura del ápex
del cono, y pueden ayudar en el seguimiento de la progresión de la
enfermedad.
En la actualidad, los topógrafos corneales están muy extendidos por
todas las consultas y poco a poco se va perdiendo el uso del queratómetro.
La queratometría topográfica es útil en casos de córneas más planas de 40D
y más curvas de 46D. Además podemos emplearla para obtener mapas
corneales completos y caracterizar astigmatismos medios y altos previos a
la cirugía. Es muy útil en córneas irregulares (queratoconos, traumatismos)
y en ojos con cirugías corneales previas (refractivas). Sin embargo, en el
3. Astigmatismo
55
caso del cálculo de las lentes intraoculares, para hacer que la potencia sea
más exacta para conseguir la refracción final deseada, el valor de la
curvatura debe ser el valor medio en los 3 mm centrales, es decir, la
medida que nos hace el queratómetro corneal. También, en caso de no
tener queratómetro, podemos optar por la queratometría simulada (SimK)
que nos da el topógrafo pero siempre en los tres milímetros centrales. En
el biómetro óptico, el valor queratométrico obtenido realmente se trata de
un valor medio ya que cada vez que se hace una medida queratométrica,
ésta se realiza cinco veces aunque se nos informe del valor medio obtenido
entre esas cinco medidas.
La razón por la que se debe tomar este valor es porque las
constantes que proporcionan las casas comerciales para las lentes
intraoculares estás basadas en esta medida. Si decidiésemos, por ejemplo,
usar la queratometría total (cara anterior + cara posterior) deberíamos
ajustar la constante de las lentes ya que el error que arrastraríamos estaría
situado alrededor de 0.90D.
Instrumento Distancia
IOL Master 2.6mm*
Lenstar 2 anillos: 1.65 y 2.30mm*
Atlas (Zeiss) SimK a 3mm
Queratómetro manual 2.8 a 3mm*
Pentacam SimK 3mm n=1.3375 Total 4mm n=1.376/1.336
Tabla 1. Lugar en el que algunos de los topógrafos o queratómetros empleados
habitualmente hacen las medidas del astigmatismo corneal. Las medidas señaladas
con (*) indican que son distancias aproximadas ya que la medida real está
relacionada con la curvatura de la córnea que se esté midiendo en ese momento.
3. Astigmatismo
56
Algunos de los topógrafos de última generación incluyen sistemas o
una combinación de sistemas más avanzados que el original disco de
Plácido que ofrecen información adicional sobre la curvatura corneal
posterior.
El sistema Galilei™ (Ziemer Ophthalmic Systems AG, Suiza) realiza el
análisis tridimensional del segmento anterior basado en 2 cámaras
Scheimpflug con una alta precisión en la topografía corneal y un disco de
Plácido. Al combinar las ventajas de las 2 tecnologías este sistema es
altamente sensible y preciso (Shirayama, Wang et al. 2009, Karimian, Feizi
et al. 2011, Savini, Barboni et al. 2011).
El sistema Oculus Pentacam® (Oculus, Wetzlar,Alemania), basa su
análisis con una cámara giratoria de Scheimpflug. Se trata de una
herramienta útil, precisa, con una alta reproductibilidad y una destacada
función en paquimetría sin contacto. Del mismo modo, aporta información
de la verdadera elevación en lugar de derivar la elevación de la curvatura,
por lo que constituye una valiosa ayuda para la detección de queratocono,
así como los valores queratométricos para la cara posterior y anterior de la
córnea (de Jong, Sheehan et al. 2013, Kanellopoulos and Asimellis 2013,
Kim, Cho et al. 2013, Mao, Savini et al. 2013).
En la topografía corneal resultan de gran importancia el alineamiento
y el enfoque durante la medida, ya que hacer una medida con cualquiera de
3. Astigmatismo
57
estos dos factores incorrectos inducirá un error de medida. Cuanto más
preciso es el topógrafo, mayor es el error por un mal alineamiento. Un
topógrafo de poca precisión mide puntos más alejados entre sí, la lectura es
más grosera y el alineamiento menos crítico.
Como hemos comentado previamente, sólo con este tipo de
instrumentos podremos medir la potencia total de la córnea, lo que tendrá
consecuencias directas sobre el cálculo de la lente intraocular tórica que se
vaya a implantar.
Para entender cómo afecta la cara posterior de la córnea a la potencia
total, debemos considerar que estamos ante un sistema óptico formado por
el acoplamiento de dos lentes astigmáticas con potencias distintas y
orientaciones diferentes, pero de espesores despreciables. La primera lente
es un cilindro positivo formada por la cara anterior de la córnea y la
segunda es un cilindro negativo compuesta por la cara posterior.
Si ambas lentes tuvieran los ejes con idéntica orientación la suma de
potencia cilíndrica sería simplemente algebraica conservando el eje, y
despreciando el factor correctivo que puede introducir la distancia entre
ambas, pero lamentablemente la situación se complica porque la orientación
entre ambas lentes es distinta. Con objeto de sumar ambas componentes
se debe realizar la descomposición vectorial de los dos astigmatismos. De
este modo podremos volver a transformarlos de nuevo en el formato
habitual de eje y potencia al que estamos acostumbrados.
3. Astigmatismo
58
Los topógrafos nos facilitan enormemente estos cálculos de manera
que a través de una sencilla medida son capaces de aportarnos toda la
información en un “lenguaje” fácilmente entendible por nosotros.
El mapa de potencia real corneal considera las condiciones reales
ópticas de la córnea. Los dispositivos de topografía basados en el sistema
de Plácido normalmente usan un índice refractivo de 1.3375 de la córnea
completa para calcular el poder refractivo de la superficie anterior de la
córnea. No obstante, esto solo aporta un valor aproximado debido a que la
superficie posterior no es tenida en cuenta. Mientras la córnea tenga una
forma regular, los valores basados solamente en la superficie anterior son
aceptables para propósitos prácticos, pero cuando la córnea se sale de los
valores normales es cuando hay que considerar si el astigmatismo corneal
anterior puede extrapolarse al corneal total para el cálculo de la potencia de
las lentes intraoculares tóricas o nos llevará a un error. Los valores
refractivos de la cara anterior de la córnea se calculan usando la diferencia
entre el índice de refracción del aire (n=1) y el índice de refracción del
tejido corneal (n=1.376). Para la cara posterior se usa la diferencia entre el
índice de refracción del tejido corneal (n=1.376) y el índice de refracción del
humor acuoso (n=1.336). Los valores refractivos mostrados en el mapa de
True Net Power son la suma de los valores refractivos de las dos superficies.
Esto proporciona la base para un cálculo mucho más preciso del poder de
refracción de la córnea.
Si nos centramos en el topógrafo Pentacam, por ser el que se ha
empleado en este estudio, en 2011, Maeda junto con Oculus (Maeda 2011)
3. Astigmatismo
59
desarrolló una pantalla ó display llamada “Preoperatorio cataratas” donde
aparecen fácilmente recogidos los datos de los que estamos hablando. En
las tablas de datos nos aparecerá reflejado el SimK, o queratometría
simulada, que se correspondería con la queratometría que podríamos
obtener con cualquier queratómetro, aproximadamente a 2.8-3.0 mm del
centro corneal. Junto a este valor, nos aparecerá el astigmatismo total,
tanto en potencia como el eje en el que se sitúa. Cuando el valor de la
potencia o del eje se alejen de los valores considerados como normales,
aparecen los colores amarillos o rojos sobre las medidas advirtiendo de la
posible irregularidad de la zona evaluada.
Además, como valor añadido, en la pantalla podemos observar si el
ratio que existe entre la cara anterior y posterior es del 82% como ocurre
en los ojos considerados “normales” o si ese valor se aleja de la normalidad.
Por último, a través de las aberraciones de alto orden podemos saber si esa
córnea se puede considerar dentro de la normalidad o se aleja de ella.
Figura 8. Mapa preoperatorio de Catarata creado por Maeda para Pentacam. En
este ejemplo se observa como el astigmatismo simulado de cara anterior (SimK) y
el astigmatismo total coinciden por lo que podemos afirmar que en este caso el
astigmatismo de cara posterior no tiene una influencia sobre el astigmatismo total.
3. Astigmatismo
60
Figura 9. En este ejemplo podemos observar que el astigmatismo de cara anterior
(SimK) no coÍndice con el astigmatismo total ni en eje ni en potencia. Ello implica
que el astigmatismo de cara posterior sí que afecta de manera relevante al
astigmatismo corneal total. Si utilizásemos el astigmatismo resultante de medir con
un queratómetro, o cualquier otro instrumento que midiese sólo la cara anterior de
la córnea, para calcular la lente tórica a implantar en un paciente con cataratas, nos
encontraríamos con un astigmatismo residual tras la intervención.
Ante la situación de no disponer de un topógrafo que nos pueda
medir el astigmatismo total corneal o de la cara posterior de la córnea, Koch
(Koch, Ali et al. 2012) desarrolló un nomograma a partir del cual se puede
seleccionar la potencia cilíndrica de la lente intraocular tomando como
factores la cantidad de astigmatismo corneal y si es a favor o en contra de
la regla.
3. Astigmatismo
61
Figura 10. Nomograma de Baylor (Koch). Valores de la tabla considerando el
astigmatismo de cara anterior (Astigmatismo cara anterior) y el astigmatismo
inducido (SIA). En astigmatismos a favor de la regla (WTR) suma el SIA mientras
que en astigmatismo contra la regla (ATR) resta el SIA para seleccionar la potencia
cilíndrica de la lente tórica.
3.8 Análisis vectorial del astigmatismo
La representación matemática y la manipulación estadística de los
errores de refracción esfero-cilíndricos es un tema recurrente en la
literatura y gran parte de este debate gira en torno a las dificultades que
surgen cuando el astigmatismo se representa en la forma tradicional polar
de magnitud y el eje, en lugar de la forma más matemáticamente tratable
de coordenadas cartesianas.
Comúnmente, el componente astigmático en la refracción se especifica
en forma polar (es decir, la potencia en algún eje), y no resulta adecuado
3. Astigmatismo
62
para el cálculo de la suma o diferencia de uno o más objetivos. Por lo tanto,
es difícil de realizar incluso el más simple cálculo estadístico de los datos de
error de refracción, o calcular la potencia total de diversas lentes tóricas
colocadas a la vez. Asímismo existe una segunda dificultad causada porque
la notación estándar para los errores de refracción nos lleva de manera
natural a la idea de que una lente esfero-cilindro es la suma de una lente
esférica y una lente cilíndrica.
La principal ventaja de representar a los errores de refracción por
vectores de potencia es que cada uno de los tres componentes
fundamentales de un vector de este tipo son matemáticamente
independientes unos de otros. Por lo tanto, la expresión del astigmatismo
puede superponerse con la expresión matemática de un vector, definido por
la potencia (módulo) y el eje (grados) si se habla de astigmatismo
refractivo o definido por la diferencia queratométrica (módulo) y el
meridiano (grados) si se habla de astigmatismo corneal.
Para hacer frente a estas dificultades se han sugerido varios métodos,
entre ellos el sugerido por Gartner (Gartner 1965), que propuso un método
de funcionamiento en el que los dos parámetros que se utilizasen para
especificar las lentes de astigmatismo (la potencia y el eje) se
representasen gráficamente como un vector de 2 dimensiones, o Keating
(Keating 1981, Keating 1981) y Harris (Harris 1989) que desarrollaron
métodos estadísticos para el análisis de los errores de refracción basados en
la representación de una lente esfero-cilíndrica como una matriz de poder
dióptrico.
3. Astigmatismo
63
Thibos (Thibos and Horner 2001) propuso emplear un análisis de
Fourier que permitía la representación de manera intuitiva del perfil de
potencia completa de una lente esfero-cilíndrica por un solo punto, o un
vector de potencia, en un espacio de tres dimensiones de dioptrías. Estos
resultados son una extensión natural del método de Gartner y los métodos
anteriores de funcionamiento de Harris, y por lo tanto proporcionaban una
base teórica sólida para los métodos de análisis de datos vectoriales de
errores refractivos.
Alpins (Alpins 1993, Alpins 1994, Alpins 2001, Alpins 2001, Alpins
2002, Alpins 2006) introdujo una modificación al método de vector que
permitía hacer un análisis incorporando el concepto de diagrama vectorial
de doble ángulo con el objetivo de evitar los posibles errores derivados de la
representación clásica del vector en 180º convirtiendo todos los valores
vectoriales en un diagrama vectorial de doble ángulo para realizar los
cálculos, dividiéndolo luego en un sistema convencional de ejes polares.
Para poder realizar estos cálculos de manera más sencilla, creó el Software
Assort (Assort Pty, Ltd.)
La analogía del putt de golf, como le gusta comentar a Alpins, hace
más fácil el entendimiento de este análisis; un putt de golf es un vector,
que posee magnitud y eje. Si estamos jugando al golf y el hoyo está frente
a nosotros (vector objetivo, TIA) pero hay una aire intenso en el campo que
viene desde la derecha (vector inducido- SIA), si golpeamos la pelota recta
el aire hará que se desvíe hacia la izquierda del objetivo y por tanto no
3. Astigmatismo
64
entre en el hoyo. De modo que deberemos conocer con qué fuerza y en qué
dirección exacta debemos golpear la bola para que, sumando mi golpe con
el aire, la bola finalmente entre en el hoyo.
Figura 11. Diagrama del vector de doble ángulo. Los valores del eje del
astigmatismo se han duplicado pero las magnitudes no se han modificado. Las
líneas de trazos se corresponden con vectores mientras que las líneas con puntas
de flecha indican la orientación. Podemos decir, haciendo un análogo con el golf,
que se correspondería con la dirección y la fuerza con la que debo golpear la pelota
para que entre en el hoyo. Este diagrama vectorial de ángulo doble permite cálculos
en un sentido 360 y permite el uso de coordenadas rectangulares. La técnica
analítica simplifica la interpretación de diferencias entre valores preoperatorios,
deseados, y logrados, y permite el cálculo de la magnitud y dirección de los
vectores quirúrgicos. Publicada por Alpins (Alpins and Goggin 2004).
3. Astigmatismo
65
Figura 12. Esquema del vector quirúrgico en forma polar. Se observa la diferencia
entre el tratamiento objetivo (TIA), el astigmatismo que induce el cirujano (SIA) y
la diferencia entre estos dos vectores (DV). Publicada por Alpins (Alpins and Goggin
2004).
TIA: Es el tratamiento que se quiere aplicar (en cantidad y dirección) para
la corrección del astigmatismo previo.
SIA: Se trata del astigmatismo que se induce quirúrgicamente con la
cirugía, el que se realiza.
DV: Se corresponde con la diferencia vector que mide la cantidad y la
orientación de tratamiento requerido para lograr el objetivo.
Magnitud del error: Es la diferencia aritmética entre las magnitudes de SIA
y TIA.
Índice de corrección (CI): Se trata del cociente entre las magnitudes del SIA
y el TIA. Idealmente, su valor sería 1, mientras que un valor superior
indicaría sobrecorrección y uno menor infracorrección. Sin embargo, si el
3. Astigmatismo
66
alineamiento de los dos vectores SIA y TIA no es correcto, la corrección del
astigmatismo no sería completa.
Coeficiente de Ajuste (CA): Se corresponde con la inversa del índice de
corrección (CI).
Índice de éxito o index of success (IOS): Es el resultado de dividir el DV por
el TIA. Su valor ideal sería el 0, ya que eso indicaría que el vector
diferencial sería 0, es decir, no sería necesario ningún nuevo tratamiento
para alcanzar el TIA.
Torque: Se corresponde con el astigmatismo inducido por el SIA, debido al
alineamiento incorrecto del tratamiento. Tras una cirugía perfecta, con una
alineación exacta de la lente tórica, su valor sería 0.
Figura 13. Representación simplificada del SIA, el TIA y el DV haciendo la analogía
con el juego del golf
3. Astigmatismo
67
Figura 14. Las relaciones entre el TIA y el SIA nos proporcionan la información
sobre el alineamiento del tratamiento, tanto si ha sido realizada en el eje preciso
como si se ha tratado la cantidad correcta. El DV, clínicamente, significaría el efecto
que en una segunda fase sería necesario para tratar el defecto residual.
3.9 Corrección del astigmatismo mediante cirugía en la
actualidad
En la actualidad podemos encontrar diversas técnicas quirúrgicas que
permiten la corrección del astigmatismo en pacientes con cataratas. Desde
las técnicas corneales a través de incisiones o a través del empleo de
láseres excimer o de femtosegundo hasta las técnicas que corrigen el
astigmatismo a partir del implante de una lente intraocular que sustituya al
cristalino.
Los avances en la cirugía de catarata moderna, los nuevos sistemas
de facoemulsificación con complejos sistemas de fluídica, las lentes
plegables, la introducción de estas en el ojo mediante el empleo de
3. Astigmatismo
68
inyectores, etc, han permitido que a través de incisiones mínimas se pueda
realizar una cirugía de catarata sin que haya necesidad de realizar suturas
corneales, lo que permite una rápida recuperación visual, y, si nos
centramos en el astigmatismo, permiten que no se induzca un astigmatismo
considerable en función de cómo sea la cirugía.
Pero como hemos mencionado en la introducción, al haberse
convertido la cirugía de la catarata en una cirugía casi refractiva, en la que
se intenta corregir o disminuir lo máximo posible no solo la miopía o
hipermetropía que presente el paciente sino también el astigmatismo, se
requiere del empleo de técnicas cada vez más precisas para su corrección.
La elección correcta del punto en el que se hará una incisión en la
córnea, su longitud, su profundidad o su valvulación permitirán reducir e
incluso eliminar el astigmatismo que tiene el paciente. Si bien hay factores
que siguen estando fuera del alcance del cirujano como pueden ser el
conocer la laxitud o elasticidad de esa córnea en concreto o su biomecánica
(Jacobi, Dick et al. 1998, Inoue, Maeda et al. 2001).
Además, una de las situaciones que se suelen producir cuando el
paciente tiene un ojo ocluido es la ciclotorsión, por ello resulta fundamental
que el cirujano haya marcado previo a la cirugía la posición de los
meridianos principales y el lugar exacto en el que debe situarse la incisión.
3. Astigmatismo
69
A continuación se describen las técnicas más habituales para la
corrección del astigmatismo en pacientes con cataratas:
3.9.1 Incisiones en córnea clara en el meridiano más curvo
En la mayoría de los casos, el cirujano puede controlar el
astigmatismo preoperatorio realizando incisiones en el eje más curvo en
aquellos pacientes con un astigmatismo a favor de la regla próximo a
1.00D, mediante la realización de incisiones de 3.2-2.0 mm. En casos de
astigmatismo oblicuo o en contra de la regla entre 1.00-1.50D se debe
añadir otra técnica incisional como las arcuatas o las incisiones relajantes
que permitan en la mayor medida posible la corrección completa. (Kohnen
and Koch 1996, Kohnen 1997, Rainer, Menapace et al. 1999, Lever and
Dahan 2000).
3.9.2 Incisiones corneales relajantes (IRLs)
Las IRLs se realizan al final de la cirugía, calibrando el cuchillete de
diamante en función de la paquimetría intraoperatoria del lugar donde
vamos a realizar la incisión. Las IRLs se realizan en el eje más curvo a nivel
del limbo, justo por delante de la empalizada de Vogt. Estas incisiones
causan menor distorsión e irregularidad corneal, minimizando el riesgo de
halos al estar localizadas cerca del limbo.
Otra ventaja de este método es su sencillez y seguridad, aunque la
hipocorrección parece ser el principal inconveniente (Budak, Friedman et al.
3. Astigmatismo
70
1998, Muller-Jensen, Fischer et al. 1999, Akura, Matsuura et al. 2000,
Bayramlar, Daglioglu et al. 2003, Saragoussi 2012).
Los mejores resultados con las IRLs se han obtenido para
astigmatismos preoperatorios por debajo de las 3.00D.
Autores como Gills (Gills 1994, Gills and Rowsey 2003) o Budak
(Budak, Friedman et al. 1998) han publicado nomogramas para la
realización de las IRLs.
3.9.3 Incisiones en córnea-clara opuestas (ICCOs)
La técnica fue descrita por Lever y Dahan (Lever and Dahan 2000) y
se ha empleado a lo largo de muchos años, especialmente en
astigmatismos de baja potencia.
Estas incisiones, que se colocan en el meridiano corneal más curvo,
son simétricas y opuestas y tienen como objetivo aplanar el meridiano. La
técnica consiste en realizar dos incisiones idénticas y opuestas en el
meridiano más curvo. El cirujano elige cuál de las dos es la más cómoda
para realizar la facoemulsificación y la incisión del lado opuesto no se
utiliza. En casos de astigmatismo en contra de la regla, las ICCOs se
realizan a las 12 y a las 6 horas. En los astigmatismos altos, al requerirse a
veces incisiones de 3 mm situadas en posiciones opuestas, muchos
cirujanos deciden aplicar otra técnica ya que se aumenta considerablemente
el riesgo de endoftalmitis.
3. Astigmatismo
71
3.9.4 Queratotomía astigmática
La queratotomía astigmática (QA) es menos predecible en los
pacientes de edad avanzada (los más frecuentes en cirugía de catarata) que
en los jóvenes, pero si se realiza con incisiones arcuatas o rectas, el
procedimiento es bastante efectivo para reducción de astigmatismos entre
1.50 y 3.00D. La utilización de zonas ópticas de 7 mm permite minimizar el
riesgo de deslumbramiento. Asimismo, cuando corregimos astigmatismos
bajos con zonas ópticas amplias haciendo incisiones de 3 mm o con un arco
de 45 a 60º, se reduce el efecto de acoplamiento de la QA. La queratotomía
astigmática se realiza en el eje más curvo con un bisturí de diamante
calibrado a una profundidad del 90% de la paquimetría intraoperatoria del
lugar donde vamos a realizar la incisión. Es preferible realizar la incisión o
en el meridiano de las 9 horas o en el cuadrante de las 9-12 horas y
alejada de la QA para evitar un solapamiento de las dos heridas, ya que
podría conducir a un retraso en la cicatrización y una hipercorrección.
Probablemente los nomogramas más empleados hayan sido el de
Lindstrom (Lindstrom and Destro 1985, Lindstrom and Lindquist 1988,
Lindstrom, Agapitos et al. 1994) o el de Nichamin (Nichamin 2003,
Nichamin 2006).
Las normas son claras: a mayor longitud de la incisión, mayor efecto.
Cuanto más próxima esté del centro, mayor efecto (Duffey, Jain et al. 1988,
3. Astigmatismo
72
Hanna, Hayward et al. 1993, Liu 1993, Vrabec, Durrie et al. 1993, Kershner
1995, Oshika, Shimazaki et al. 1998).
3.9.5 Lentes intraoculares tóricas
Desde que Shimizu (Shimizu, Misawa et al. 1994) desarrollase la
primera lente intraocular tórica, han sido numerosas las publicaciones que
han demostrado la eficacia de este método para la reducción del
astigmatismo postoperatorio. Frente a los tratamientos sobre la córnea
utilizados hasta ahora, las lentes intraoculares tóricas no requieren cambios
importantes en la técnica quirúrgica de la catarata. La córnea no se
modifica, con lo que se eliminan los riesgos asociados a las incisiones
corneales, incluyendo el astigmatismo irregular o la regresión del efecto, y
es un procedimiento reversible.
Además, su predictibilidad no está ligada a la variabilidad de un
nomograma y permiten corregir grados altos de astigmatismo mediante
lentes personalizadas o combinaciones de estas o con otras técnicas. Con
ello podemos resumir que las ventajas de corregir el astigmatismo
mediante LIOs tóricas en vez de utilizar procedimientos queratorrefractivos
son básicamente su mayor predictibilidad y su reversibilidad.
Algunos de los problemas más importantes con este tipo de LIOs son
el riesgo de rotación y cómo conseguir un buen centrado de la lente (Patel,
Ormonde et al. 1999, Schwenn, Kottler et al. 2000).
3. Astigmatismo
73
En la mayoría de estudios, los objetivos se centran en conseguir
lentes con mayor estabilidad dentro del saco capsular para así evitar
descentramientos y rotaciones, así como la obtención de lentes de
materiales más biocompatibles y con geometrías que posibiliten evitar la
opacificación de la cápsula posterior. Al implantar una lente intraocular
tórica, necesitaremos saber tres parámetros: Potencia esférica, potencia
cilíndrica y eje en el que se ha de implantar la lente.
En la práctica habitual, las lentes intraoculares tóricas se engloban
dentro de las lentes PREMIUM, dadas las características especiales que
tienen y la necesidad de hacer cálculos preoperatorios precisos.
3.9.6 Cirugía refractiva con láser excimer o láser de
femtosegundo
Otra forma de corregir el astigmatismo en los pacientes intervenidos
de cataratas es mediante el empleo del láser excimer, ya sea con la técnica
de la PRK o del LASIK o mediante el empleo del láser de femtosegundo a
través de la técnica ReLex Smile con la plataforma Visumax de Zeiss (Tay,
Li et al. 2012, Vestergaard, Ivarsen et al. 2012, Blum, Kunert et al. 2013).
Cuando se plantea un tratamiento de este tipo se puede decidir bien
antes de la cirugía de cataratas o bien tras la cirugía debido al defecto
refractivo postoperatorio. En cualquiera de las dos situaciones, el
tratamiento debe realizarse una vez la refracción sea estable y la lente esté
en su posición definitiva por lo que no se recomienda hacerlo nunca sin que
3. Astigmatismo
74
haya pasado al menos un mes de la extracción del cristalino aunque la
mayoría de los cirujanos optan por esperar hasta los tres meses(Guell and
Vazquez 2000, Ayala, Perez-Santonja et al. 2001, Nichamin 2001, Velarde,
Anton et al. 2001, Zaldivar, Oscherow et al. 2002, Hassaballa, Ayala et al.
2003).
La técnica de la PRK requiere un tratamiento en superficie y puede
que la recuperación, al tratarse de pacientes de edad avanzada, sea más
lenta que en pacientes jóvenes.
La técnica del LASIK requiere la creación de un flap mientras que en
la técnica Smile se talla un lentículo en el estroma corneal que se extrae por
una incisión de unos 3 mm. En la técnica Smile sólo es posible corregir
astigmatismo miópicos.
La cirugía láser tras una facoemulsificación es menos predecible que
cuando se trata de un procedimiento primario, probablemente debido a que
la edad media de los pacientes que se someten a la misma es mayor y la
biomecánica de la córnea sea distinta a la de los pacientes jóvenes que se
someten a estas técnicas para tratar sus defectos refractivos. No obstante,
los resultados finales son bastante satisfactorios.
3. Astigmatismo
75
3.10 Historia de las lentes intraoculares tóricas
Los años 1992-94 resultaron clave para la corrección del
astigmatismo en pacientes a los que se intervenía de cataratas ya que fue
el año en el que surgen las primeras lentes intraoculares tóricas aunque las
incisiones arcuatas, como las que describe Keshner (Kershner 1995,
Kershner 1997) en córneas claras, eran cada vez más utilizadas.
En Japón, 1992, Shimizu diseña una lente tórica de PMMA, junto con
Nidek (NT-98B). Se trata de una lente de 3 piezas con la potencia óptica
tallada sobre una superficie oval de 5.5x6.5 mm y disponible en toros de
2.00 D y 3.00 D. El hecho de ser una lente de PMMA que requería hacer
una incisión amplia para poder insertar y que luego requería sutura, unido a
que la lente rotase, hizo que la lente tuviese poco éxito. Además, las
rotaciones que superaban los 20º eran casi un tercio de los implantes
(Shimizu, Misawa et al. 1994).
Mientras, ese mismo año, en Estados Unidos, la casa STAAR
comienza la Fase I de los estudios de la FDA con la lente AA-4203T
(Shimizu, Misawa et al. 1994). En este caso se trata de una lente con
diseño de plato. En 1998 la FDA aprueba la lente de STAAR tras una serie
de modificaciones que aumentaban la estabilidad y disminuían la rotación
(Sun, Vicary et al. 2000).
3. Astigmatismo
76
En Europa, es la casa Schmidt quien fabrica la primera lente que se
comercializa aquí con el hito de corregir hasta 12.00 D de astigmatismo.
Las lentes tóricas fueron sufriendo modificaciones en sus diseños
buscando siempre el lograr la mayor estabilidad rotacional posible. Los
primeros estudios realizados por la FDA a este respecto ya mostraban que
las rotaciones más importantes se producían en las 24 primeras horas que
seguían a la cirugía.
Till presentó un estudio en 2002 (Till, Yoder et al. 2002) con la lente
diseñada por Staar, con toros de 2.00 D y 3.50 D donde el 14% de las
lentes implantadas habían tenido rotaciones superiores a los 15º. Estudios
como el de Ruhswurm (Ruhswurm, Scholz et al. 2000) o el de Sun (Sun,
Vicary et al. 2000) siguieron manteniendo valores altos de rotación, con
más del 18% de las lentes rotadas hasta 25º en el primer estudio y el 18%
con rotaciones entre 20 y 40º.
La FDA aprobó la lente AcrySof IQ Toric IOL, de los laboratorios
Alcon, en septiembre de 2005, la cual ha sido, probablemente, la lente
tórica más implantada a lo largo de la historia.
3. Astigmatismo
77
Hasta la fecha, el problema de la rotación de las lentes sigue estando
presente. Si bien el número es cada vez menos elevado, situaciones como
sacos grandes hacen que aumente significativamente el grado de rotación
de las lentes colocadas en estos pacientes. Un mayor diámetro total y una
modificación en el diseño de algunos hápticos han llevado a disminuir las
rotaciones (Patel, Ormonde et al. 1999, Chang 2003, Shah, Praveen et al.
2012) pero las mejoras deben continuar.
En la actualidad casi todas las casas comerciales disponen de lentes
intraoculares tóricas de múltiples diseños como es la toricidad tallada en la
cara anterior de la lente, en la posterior, o incluso en ambas caras creando
lentes bitóricas. Lentes que a la vez son asféricas o esféricas, plegables,
que se introducen por microincisiones reduciendo el astigmatismo inducido,
lentes tóricas y multifocales a la vez, etc. Esto aporta un abanico enorme de
posibilidades que pueden llegar a todos los pacientes ya que hay
laboratorios, como Oculentis, que permiten la fabricación totalmente
customizada sin límites de potencias.
78
79
Estudio clínico
80
4. Estado del arte
81
4. Estado del Arte
"El mejor científico está abierto a la experiencia, y esta empieza con
un romance, es decir, la idea de que todo es posible”
Ray Bradbury
82
4. Estado del arte
83
4 Estado del arte
Con los avances que se han producido en los últimos años en cuanto
a la técnica quirúrgica y a la tecnología en la cirugía de la catarata, esta
cirugía, la más realizada en el mundo, ha pasado de ser un tratamiento de
rehabilitación visual a ser un tratamiento refractivo, con un tiempo de
recuperación muy corto.
Por ello, cuando hablamos de intervenir de cataratas a pacientes que
presentan un astigmatismo corneal previo, el handicap se presenta a la
hora de intentar reducir lo máximo posible ese astigmatismo para que el
paciente pueda obtener una buena visión sin necesidad de recurrir a gafas u
otros sistemas de corrección. Autores como Villegas (Villegas, Alcon et al.
2014) han reportado que astigmatismos menores de 0.5 D no provocan una
degradación de la calidad visual.
Los métodos que se han venido empleando hasta la aparición de las
lentes intraoculares tóricas incluían las incisiones arcuatas, las incisiones
limbales relajantes o incluso la queratectomía fotorrefractiva una vez se
había estabilizado la refracción tras la intervención de cataratas.
4. Estado del arte
84
Todos los métodos mencionados anteriormente, a excepción de la
queratectomía fotorrefractiva, no aseguraban la eliminación total del
astigmatismo debido a la cantidad de factores que influyen.
Todas las incisiones corneales tienen la propiedad de aplanar la
córnea en el meridiano donde se practican, pero a su vez provocan la
modificación del meridiano perpendicular produciendo su incurvamiento
(incisiones transversales) o aplanamiento (incisiones radiales).
Además se plantea el problema de cómo corregir el componente
esférico y si la corrección del astigmatismo puede afectar debido al acople
que puede producirse. Para ello, el objetivo añadido sería conseguir que el
efecto acoplamiento, entendiendo la relación aplanamiento/incurvamiento,
sea 1:1 y de este modo no se modifique el valor del equivalente esférico.
Cuando el acoplamiento tiende a ser mayor de 1 el equivalente esférico se
modifica ligeramente hacia la hipermetropía.
Factores como el tamaño de la incisión, distancia a la que se realizan
respecto al centro corneal, el acompañamiento de incisiones semirradiales o
la simetría afectarán al grado de acoplamiento.
Por ello, la incorporación de la lente intraocular tórica ha aportado
una mayor predictibilidad y eficacia a la corrección del astigmatismo,
4. Estado del arte
85
pudiéndose emplear tanto en cirugías de cataratas como en otras cirugías
que impliquen la extracción del cristalino.
Ante la pregunta entonces de por qué emplear una lente tórica frente al
uso de técnicas incisionales, las conclusiones son claras:
- Las técnicas incisionales son más dificultosas y son muchos los
nomogramas los que se pueden encontrar en la literatura, prueba de
que ninguno ha conseguido una predictibilidad total.
- Se precisa de un instrumental caro (cuchilletes de diamante,
topógrafos, paquímetros).
- Varía mucho su eficacia en función de la edad del paciente. En
pacientes jóvenes su eficacia se reduce y eso es otro problema
añadido ya que la edad de este tipo de intervenciones se ha reducido
considerablemente en los últimos años.
- Es difícil conseguir resultados favorables más allá de las 3.00 D de
astigmatismo.
- Son irreversibles.
Por otro lado, la implantación de una lente tórica no supone grandes
cambios para el cirujano a excepción del marcado previo del eje en el que
se debe implantar la lente y de que el astigmatismo que se induzca en la
intervención debe ser conocido por el cirujano para compensarlo con la
potencia de la lente a implantar.
4. Estado del arte
86
Las principales ventajas de las lentes intraoculares tóricas son:
- Cirugía sencilla y dentro de la dinámica habitual del cirujano y el
equipo de quirófano.
- No se precisa material adicional excepto marcadores de eje.
- Resultado refractivo predecible si se conoce el astigmatismo que se
va a inducir en la cirugía.
- No se verá afectada la curvatura corneal y por lo tanto no se
producirá tampoco una regresión del astigmatismo por esta causa.
- Técnica reversible si se requiere cambiar la lente intraocular.
- Incisión pequeña ya que este tipo de lentes ya son plegables y en la
mayoría de los casos se introducen a través de un inyector.
- Capacidad de corregir astigmatismos elevados y de asociarse a otros
defectos refractivos también elevados.
En cualquier caso, también es necesario conocer que este tipo de lentes
pueden presentar inconvenientes como los que se enumeran a
continuación:
- Se requiere que el saco capsular esté íntegro para poder implantarla.
La mayoría de estas lentes tienen un diseño que no es compatible
con su implantación en sulcus.
- Requiere un buen centrado por lo que no está indicada cuando se
sospeche que este hecho puede no ser posible, por ejemplo, cuando
existen debilidades zonulares.
4. Estado del arte
87
- Es preciso que la lente quede implantada en el eje correcto ya que
cada grado de rotación respecto al eje correcto implicará una
reducción del 3.3% de su eficacia (Novis 2000).
4.1 Marcaje de la posición de la lente tórica
Como ya hemos mencionado, la corrección astigmática de la lente a
implantar (cilindro) debe coincidir exactamente con el eje del astigmatismo
corneal que presenta el paciente para obtener una completa compensación.
En caso contrario, no se logrará una reducción total y además, se generará
un nuevo astigmatismo con una potencia y un eje diferente al
preoperatorio.
Para determinar la posición óptima de la lente intraocular y asegurar
su correcto posicionamiento, se han descrito diversos métodos. La mayoría
de ellos están basados en la colocación de dos marcas de tinta en el limbo
en el meridiano 0-180º o en el meridiano 90-270º (Viestenz, Seitz et al.
2005, Graether 2009, Cha, Kang et al. 2011, Visser, Berendschot et al.
2011, Roumeliotis and Hutnik 2012, Jain, Gupta et al. 2013). En algunos de
estos sistemas, las marcas corneales se colocan en condiciones de
monocularidad (ocluyendo un ojo al paciente) para evitar la convergencia
que se produce al fijar a un punto cercano o en situ, tal y como han descrito
diversos estudios (Viestenz, Seitz et al. 2005, Popp, Hirnschall et al. 2012).
4. Estado del arte
88
Por otro lado, si las marcas se realizan en condiciones de
binocularidad (Hine 1990, Inoue and Ohzu 1997, Morad, Lederman et al.
2002, Jackson and Arnoldi 2004, Bharadwaj, Hoenig et al. 2007, Momeni-
Moghaddam, Goss et al. 2014), la convergencia que se produce quedará sin
corregirse.
Como tercera situación que consideramos puede ser una fuente de
error es que, aún en el caso de que no existiese ningún grado de
ciclotorsión o de convergencia, estos sistemas no corroboran que las marcas
que se han realizado estén precisamente en los ejes deseados.
4.1.1 Estabilidad rotacional de las lentes intraoculares tóricas
Que una lente no quede posicionada en el eje en el que
correspondería es la complicación más común que puede aparecer en las
lentes intraoculares tóricas frente a las lentes esféricas donde si la lente
rota, no afectará a la efectividad de esa lente.
El incorrecto posicionamiento de las lentes tóricas puede deberse a
dos factores:
1. La lente no ha quedado implantada en la cirugía en el eje preciso,
lo que algunos autores estiman en un error medio de unos 5º
(Visser, Berendschot et al. 2011).
4. Estado del arte
89
2. Que la lente rote una vez ha sido colocada en el saco capsular
durante el postoperatorio (Ohmi, Tanaka et al. 1999, Koshy, Nishi
et al. 2010, Shah, Vasavada et al. 2012).
En cuanto a la estabilidad rotacional de las lentes intraoculares
tóricas implantadas en saco, los estudios publicados aportan datos muy
variables, desde los 0.23º de rotación hasta los 33º, con tiempos de
seguimientos que se sitúan entre los 15 días y los 6 meses.
En las Tablas 2 y 3 se recogen algunas variables de medida
procedentes de la literatura donde se aporta la rotación media de la LIO con
respecto al tiempo.
4. Estado del arte
90
Estudio Tipo de LIO Rotación de la LIO
N ojos
Sanders (Sanders DR 1992) Hápticos de plato antiguos 10.4 mm
9%≥15° 52
Shimizu (Shimizu, Misawa et al. 1994) C-loop de 3 piezas 21%≥30°
Grabow (Grabow 1994, Grabow 1997) Staar4203T 10.8 mm 4.4%≥33°
Werblin (Werblin 1995) Háptico J-loop 8%≥30° 12
Patel (Patel, Ormonde et al. 1999) Háptico loop
Háptico de plato
41%≥10°
38%≥10°
23
25
Sun (Sun, Vicary et al. 2000) StaarTF 10.8 mm 25%≥20° 130
Ruhswurm (Ruhswurm, Scholz et al. 2000) StaarTF 10.8 mm 19%≥10° 37
Gerten (Gerten, Michels et al. 2001) PMMA de 3 piezas personalizado
26%≥10°
Leyland (Leyland, Zinicola et al. 2001) Staar TF 18%≥30° 22
Till (Till, Yoder et al. 2002) Staar TF y TL 14%≥15° 100
Chang (Chang 2003) Staar TF 10.8 mm
Staar TL 11.2 mm
50%≥15°
10%v10°
6
50
Da Silva (De Silva, Ramkissoon et al. 2006) MicroSil 0%≥10° 21
Kwartz (Kwartz and Edwards 2010) Akreos Adapt 2,53 ± 2,40° 64
Kwartz (Kwartz and Edwards 2010) Acrysof 2,67 ± 2,22° 58
Tsinopoulos (Tsinopoulos, Tsaousis et al. 2010)
Acrysof 2,2 ± 1,5° 29
Wolffsohn (Wolffsohn and Buckhurst 2010) Akreos Adapt 2,23 ± 1,58° 107
4. Estado del arte
91
Chang (Chang 2003) AA4203 5,56 ± 8,49° 90
Chang (Chang 2008) Acrysof 3,35 ± 3,41° 100
Weinand (Weinand, Jung et al. 2007) Acrysof Mediana 0,7° 17
Mendicute (Mendicute, Irigoyen et al.
2008)
Acrysof 3,63 ± 3,11° 30
Rozema (Rozema, Gobin et al. 2009) Morcher 89A 1,27 ± 0,82° 59
Koshy (Koshy, Nishi et al. 2010) Acrysof 2,44 ± 1,66° 30
Bauer (Bauer, de Vries et al. 2008) Acrysof 2,5 ± 2,1 ° 53
Visser (Visser, Ruiz-Mesa et al. 2011) Acrysof 3,2 ± 2,8 ° 67
Alió (Alio, Pinero et al. 2011) Acrysof 5,06 ± 4,21° 27
Alió (Alio, Agdeppa et al. 2010) Acri.Comfort 646 TLC -1,75 ± 2,93° 21
Alió (Alio, Pinero et al. 2011) ATLisa909M 3,10 ± 5,44° 23
Hoffmann (Hoffmann, Auel et al. 2011) Acrysof Mediana 2° 40
Mingo-Botín (Mingo-Botin, Munoz-Negrete
et al. 2010)
Acrysof 3,65 ± 2,96° 40
Dick (Dick, Krummenauer et al. 2006) MicroSil 3,7 68
Jampaulo (Jampaulo, Olson et al. 2008) STAAR 4203TF y 4203TL 1.36 ± 1.85º 25
Zuberbuhler (Zuberbuhler, Signer et al. 2008)
Acrysof 2.22 ± 2.22 44
Leyland (Leyland, Zinicola et al. 2001) AA4203TF 8,9 ± 11,6° 22
Dardzhikova (Dardzhikova, Shah et al. 2009)
Acrysof Entre 7.8º y 1.8º
111
Ruiz-Mesa (Ruiz-Mesa, Carrasco-Sanchez et al. 2009)
Acrysof 0.91 ± 1.77º 32
Ahmed (Ahmed, Rocha et al. 2010) Acrysof 2.00 ± 2.00º 234
Kim (Kim, Chung et al. 2010) Acrysof 3.50 ± 3.40º 30
Entabi (Entabi, Harman et al. 2011) Rayner 3.4º 33
Tabla 2. Algunos de los estudios que muestran la rotación de diversos tipos de lentes
4. Estado del arte
92
Rotación (Grados)
Media ± σ Absoluto (% de ojos)
Estudio LIOs Háptico Examen
post-op
Ojos (n)
Con signo
Sin signo
0-5 5-10 10-15
> 15
Dick (Dick,
Krummenauer et al. 2006)
HumanOptics
MicroSil 6116TU
En Z 3 meses 68 1,2 ± 5,7 3,7 85 14 - 1
Gerten (Gerten,
Michels et al. 2001)
Dr. Schmidt 600TW
OL 6 sem. 23 6,4 ± 0,8 74 26 - -
Leyland (Leyland,
Zinicola et al. 2001)
Staar AA4203TF De plato 4-53 sem. 22 - 8,9 ± 11,6
46 32 9 13
Patel (Patel, Ormonde et
al. 1999)
Bausch & Lomb C10UB
Advanced Medical Optics
SI-30NB
De plato
OL
6 meses
6 meses
24
23
1,8 ± 12,9
7,61 ± 7,25
-
-
79
44
12
26
8
13
1
17
Scorolli
(Scorolli, Ricci et al.
2002)
Bausch & Lomb
EasAcryl 1
Allergan Sensar
AR40
Chauvin Akreos
CL
OL
OL
30 días
30 días
30 días
300
100
100
1,02 ± 0,2
1,10 ±
0,49
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
4. Estado del arte
93
Fit 1,08 ± 0,13
Till (Till,
Yoder et al. 2002)
Staar AA4203T De plato 23 sem. 100 - - 62 27 1
Warlo (Warlo,
Krummenauer et al. 2005)
HumanOptics MicroSil 612S
HumanOptics MicroSil 6120
OL
En Z
3 meses
3 meses
25
25
-
-
-
-
40
60
28
16
20
16
12
4
Wehner
(Wehner 2007)
Acri. Tec
Acri.Smart 46S
De plato 12 -19
meses
43 - - 98 2 - -
Weinand (Weinand, Jung et al.
2007)
Alcon AcrySoft SA60AT
OL 6 meses 17 - 0,9 100 - - -
Rozema (Rozema, Gobin et al.
2009)
Morcher 89 A BIL 5 sem. 46 0,05 ± 2,02
1,8 ± 1,4
96 4 - -
Tabla 3. Cambios de rotación postoperatoria de LIO declarados en estudios con 15 o más ojos, publicados desde 1998. (OL = open-loop;
CL = close loop).
4. Estado del arte
94
La rotación, según se refiere en la literatura, ocurre principalmente
en el período postoperatorio precoz. Una vez que el saco se ha contraído y
las cápsulas anterior y posterior se han fusionado (entre la primera y
segunda semana), la rotación es poco probable. Por ello, es importante
prestar atención a este hecho en las primeras visitas del seguimiento, con
un examen bajo midriasis para poder observar la posición de las marcas de
las lentes.
En cuanto al efecto que tiene sobre la refracción un desplazamiento
del eje de la lente tórica respecto al correcto, Novis ya se refirió a lentes
monofocales tóricas, estimando que aproximadamente 1º de desviación
supone una pérdida del 3.3% de la potencia efectiva del cilindro, no
habiendo ninguna referencia en cuanto a lentes tóricas multifocales(Novis
2000). De este modo, con rotaciones de 5º, 10º ó 30º tendremos una
pérdida del 16%, 33% ó 100% del efecto cilíndrico de la lente. Si la lente
rota más de 30º añadirá astigmatismo al sistema óptico. Además, el cambio
en el eje y la potencia del cilindro resultante aumentan a mayor potencia
cilíndrica de la lente (Viestenz, Seitz et al. 2005).
En suma, el defecto refractivo residual no será un astigmatismo puro
sino que irá acompañado de un cierto grado de hipermetropización, que
será mayor cuanto más se desvíe el eje de la lente respecto al eje correcto
(Jin, Limberger et al. 2010).
4. Estado del arte
95
No obstante, el desalineamiento de la lente tórica no sólo provoca un
astigmatismo residual sino que también provocará una disminución de la
calidad visual y de la función de transferencia de modulación (MTF) (Hamdi
2009, Hayashi, Manabe et al. 2010, Felipe, Artigas et al. 2011, Felipe,
Artigas et al. 2012, Perez-Vives, Ferrer-Blasco et al. 2014), teniendo en
cuenta que sólo 5º de rotación o de tilt son suficientes para provocar una
importante disminución de la MTF (Felipe, Artigas et al. 2012).
96
5. Hipótesis de trabajo
97
5. Hipótesis de trabajo
"Es de importancia para quien desee alcanzar una certeza en su
investigación, el saber dudar a tiempo”
Aristóteles
98
5. Hipótesis de trabajo
99
5 Hipótesis de trabajo
La posición final del eje del astigmatismo de las lentes intraoculares
pseudofáquicas tóricas determina el defecto refractivo cilíndrico residual. El
astigmatismo residual resulta más importante, desde el punto de vista
óptico, en el caso de las lentes multifocales tóricas frente a las monofocales
tóricas.
5.1 Objetivo principal
o Evaluar la estabilidad rotacional y la relación entre el
astigmatismo postquirúrgico y la posición del eje de 3 tipos de
lentes intraoculares monofocales pseudofáquicas tóricas con
distintas plataformas y un modelo de lente multifocal tórica.
5.2 Objetivos secundarios
o Desarrollar un sistema que permita conocer, de manera previa
a la cirugía, la posición postoperatoria que debe ocupar la lente
intraocular a implantar.
5. Hipótesis de trabajo
100
o Evaluar el momento más propenso para que se produzca la
rotación de la lente intraocular dentro del saco capsular en
función del diseño de la plataforma.
o Evaluar la relación entre el astigmatismo postquirúrgico y la
posición del eje de dos lentes con la misma plataforma, si bien
una es de diseño monofocal tórico y la otra de diseño difractivo
multifocal tórico.
6. Diseño del estudio
101
6. Diseño del estudio
"Si no lo puedes explicar con simplicidad, es que no lo entiendes bien”
Albert Einstein
102
6. Diseño del estudio
103
6 Diseño del Estudio
En el estudio prospectivo intervencional se incluyeron 91 ojos de 91
pacientes con una edad media de 71.65 ± 11.82 años (rango 27-95).
Figura 15. Distribución, por edades, de los individuos incluidos en el estudio
A los pacientes se les implantó una lente tórica en uno de sus ojos o
en los dos en el Instituto de Oftalmología Avanzada de Madrid. De manera
aleatoria, en los pacientes en los que se implantaron lentes tóricas en los
6. Diseño del estudio
104
dos ojos, se incluyó sólo un ojo en el presente estudio, distribuyéndose en
un 51.65% de ojos derechos y un 48.35% de ojos izquierdos (Figura 16).
Figura 16. Porcentaje de ojos derechos e izquierdos incluidos en el estudio
Todos los pacientes incluidos en este estudio aceptaron su inclusión
de manera voluntaria y tenían libertad para retirarse del estudio si lo
consideraban oportuno en cualquier etapa del proceso.
Todas las pruebas preoperatorias y postoperatorias fueron realizadas
por la misma persona (NGJ) y todas las cirugías fueron realizados por un
mismo cirujano con una alta experiencia tanto en cirugía de cataratas como
en este tipo de implante de lentes intraoculares (FPG).
6. Diseño del estudio
105
Este estudio siguió los principios éticos dictados por la Declaración de
Helsinki (Williams 2008) y fue aprobado por el Comité Etico del Instituto de
Oftalmología Avanzada .
6.1 Criterios de inclusión
Todos los pacientes incluidos en este estudio cumplieron una serie de
criterios de inclusión:
- La agudeza visual esperada tras la cirugía, en visión lejana, debía ser
superior a 0.5 (0.3 logMAR).
- El astigmatismo topográfico corneal anterior debía ser mayor a 1.00
D y el astigmatismo corneal total debía tener una diferencia menor
de 0.5 D respecto al de la cara anterior. El límite del astigmatismo se
situaba en el límite de la potencia astigmática que pudiese corregir la
lente intraocular tórica.
- El astigmatismo que presentaban los pacientes incluidos en el estudio
debía ser regular, si bien no había límite en cuanto a la posición de
los meridianos de mayor y menor potencia.
- No debía haber una diferencia mayor de 0.25 D o de 5º respecto a la
que se medía con el biómetro óptico y la que se obtenía con el
topógrafo corneal, tomando como referencia en el topógrafo el valor
del astigmatismo corneal anterior (SimK).
- El ratio entre la cara anterior y la cara posterior no debía desviarse
más de 1.5%, por arriba o por abajo, del 82% que se considera
6. Diseño del estudio
106
como valor normal. El objetivo de las cirugías era dejar al paciente
con el target lo más aproximado al deseado. En los pacientes con una
desviación respecto a la norma puede ser más complicado obtener
ese valor de target postoperatorio que se desea.
- Los pacientes no podían presentar ninguna cirugía ocular previa ni
ninguna anomalía o alteración a nivel retiniano u observable con el
biomicroscopio.
6.2 Criterios de exclusión
Se excluyeron del estudio a los pacientes en los que se produjo alguna
alteración en el proceso quirúrgico o en el postoperatorio así como a
aquellos a los que hubo que dar alguna sutura en el lugar de la incisión y
aquellos que no siguieron el protocolo postoperatorio marcado por el
Instituto de Oftalmología Avanzada.
6.3 Retirada y sustitución de sujetos
Se procedió a retirar a pacientes del estudio ante las siguientes
circunstancias:
- Por su propia solicitud.
- En caso de complicaciones intraoperatorias, como rotura de la
cápsula posterior o fuga de la rhexis, que el investigador
consideró relevantes para las variables de medida.
7. Demografía
107
-
7. Demografía
"Visión es el arte de ver las cosas invisibles”
Jonathan Swift
108
7. Demografía
109
7 Demografía
La caracterización demográfica de la población incluida en este
estudio se pueden ver en la Tabla 4.
En los tres grupos de lentes monofocales tóricas, la edad media se
situaba alrededor de los 75 años mientras que en el grupo de las
multifocales se situaba alrededor de los 65 años.
Figura 17. Edad media de los pacientes incluidos en el estudio en función del tipo
de lente
Este dato puede deberse a que la mayoría de los pacientes que
presentan una cirugía de la presbicia son pacientes con una alta actividad
laboral o social. En el grupo de las multifocales se incluyó además un
paciente de 27 años que presentaba una catarata congénita bilateral
7. Demografía
110
aunque sólo uno de los ojos se incluyó en el estudio como en el resto de
pacientes intervenidos bilateralmente.
En cuanto al porcentaje por sexos, era ligeramente mayor el
porcentaje de mujeres incluidas en el estudio que el de hombres (57.14%
mujeres y 42.86% hombres).
Figura 18. Distribución por sexo del grupo total de pacientes incluidos en el estudio
En cuanto a la refracción preoperatoria, se incluyeron pacientes tanto
miopes como hipermétropes.
Tanto en cuanto a rango, como en cuanto a potencia, el grupo de las
lentes multifocales correspondía a los pacientes que presentaban un defecto
refractivo menor si nos referimos al equivalente esférico (Figura 19).
7. Demografía
111
Figura 19. Equivalente esférico medio preoperatorio en función del tipo de lente
implantada y rangos
En cuanto al astigmatismo corneal anterior (Figura 21), el incluido en
esta tabla se corresponde con el medido mediante la biometría óptica. Se
incluyeron pacientes que presentaban un astigmatismo desde 1.00 D hasta
4.55 D. No se incluyeron pacientes con astigmatismo mayor ya que las
lentes elegidas para el estudio no permitían una corrección superior. La
media en todos los grupos se situaba ligeramente por debajo de las 2.00 D.
En cuanto a la visión preoperatoria, el grupo de pacientes que
solicitaba la corrección de la presbicia, era el grupo que obtenía una mejor
visión con la correspondiente corrección óptica.
7. Demografía
112
Figura 20. Distribución de AV con compensación, previo a la cirugía, en función de
la lente implantada. AV expresada en sistema decimal.
Respecto a la potencia de la lente intraocular, si nos referimos a la
potencia esférica el valor medio en todos los grupos se situaba alrededor de
las 20.0D mientras que el valor medio del cilindro implantado en cada grupo
se situaba alrededor de las 2.50D si bien el mayor rango se encontró en el
grupo de la Acrysof Toric monofocal y en el grupo de Lentis Toric ya que
eran las lentes que, en el momento del estudio, presentaban un mayor
rango de potencias cilíndricas disponibles.
Figura 21. Astigmatismo corneal, previo a la cirugía, medido con biómetro óptico
7. Demografía
113
Tabla 4. Caracterización demográfica de la población incluida en este estudio
114
8. Material y método
115
8. Materiales y métodos
"El éxito no se logra sólo con cualidades especiales. Es sobre todo un
trabajo de constancia, de método y de organización"
J.P. Sergent
116
8. Material y método
117
8 Materiales y métodos
8.1 Pruebas preoperatorias
Previo a la cirugía, las pruebas incluidas en el preoperatorio fueron las
siguientes:
- Refracción y medida de la agudeza visual en visión lejana con la
mejor refracción posible (CDVA). Se empleó el test ETDRS para 4
metros.
- Topografía. Se realizó topografía corneal con el topógrafo
Pentacam (Oculus; Wetzlar, Germany). Se empleó el mapa de
índices de Maeda al tratarse de una combinación de mapas que
aportan tanto la potencia como el eje del astigmatismo de la cara
anterior, del astigmatismo total y otros valores que ayudaban a
determinar el tipo de lente intraocular como la asfericidad corneal
o el ratio entre la cara anterior y la cara posterior.
- Biometría óptica. Para realizar la medida de los parámetros
oculares se empleó el biómetro óptico IOL Master (Carl Zeiss
Meditec; Jena, Germany). Con él se midió tanto la longitud axial
(AXL) como la queratometría (K), la profundidad de cámara
anterior (ACD) y el blanco-blanco (W-W).
8. Material y método
118
- Tomografía de Coherencia Óptica: Para descartar cualquier
alteración a nivel macular se realizó una tomografía de coherencia
óptica (OCT) empleando la plataforma Cirrus (Carl Zeiss
Medictec; Jena, Germany) y utilizando el protocolo de Volumen
Macular y el protocolo lineal HD.
Figura 22. Imagen de la captura de la medida del blanco-blanco con el biómetro
óptico IOL Master
Figura 23 . Captura de la imagen de una mácula sin alteraciones con el Tomógrafo
de Coherencia Óptica Cirrus (Carl Zeiss) con el protocolo lineal HD.
8. Material y método
119
- Biomicroscopía: Todos los pacientes fueron observados con el
biomicroscopio antes y después de la dilatación pupilar con el fin
de observar cualquier alteración en el segmento anterior. Se
evaluó también la dinámica pupilar porque resulta un parámetro
importante para la indicación de lentes multifocales.
- Presión intraocular: Se midió la presión intraocular empleando un
tonómetro Goldman.
- Fondo de ojo: Se observó el fondo de ojo mediante oftalmoscopio
binocular indirecto.
8.2 Lentes intraoculares
Las lentes intraoculares incluidas en este estudio han sido cuatro.
Tres de ellas eran lentes monofocales tóricas y una era multifocal tórica.
Todas las lentes eran de cámara posterior y se implantaron en el saco
capsular.
8.2.1 Lentis® LT,
La lente Lentis® LT (LU-313T; Oculentis, Berlin, Germany), es
distribuida en España por el laboratorio Topcon.
8. Material y método
120
Se trata de una lente intraocular de cámara posterior con
superficie asférica, para colocación en saco capsular.
Es monofocal, asférica neutra en su cara posterior, biconvexa,
con bordes cuadrados en los 360º, con un diseño monobloque de
plato. Se trata de una lente acrílica hidrofóbica creada a partir de un
copolímero denominado HydroSmart® si bien tiene una superficie
hidrófoba. El toro del astigmatismo se encuentra tallado en la cara
anterior.
El diámetro de su óptica es de 6.0 mm y su diámetro total es
de 11.0 mm. La angulación de los hápticos es de 0º.
Su índice de refracción es de 1.46.
El rango de dioptrías esféricas es desde +10.00D hasta
+35.00D en pasos de 0.5D y la potencia cilíndrica se clasifica en T1
(+1.50D), T2 (+2.25D), T3 (+3.00D), T4 (+3.75D), T5 (+4.50D) y
T6 (+5.25D).
Para su implantación se utilizó el cartucho Viscoject y se
introdujo por una incisión de 2.2 D.
8. Material y método
121
Figura 24. Modelo de lente tórica Lentis LT (Oculentis, Berlin, Germany),
8.2.2 EnVista®® toric
La lente EnVista®® toric (B&L, Rochester; USA) está fabricada
por Bausch & Lomb.
Su nombre técnico es MX60T y se trata de una lente
hidrofóbica acrílica con un diseño monobloque con hápticos en C-loop
que presenta una fenestración en la base del háptico para facilitar su
manejo a la hora de colocarla en la posición adecuada.
El tamaño de la zona óptica es de 6.00 mm y su tamaño total
es de 12.5 mm. Los bordes son cuadrados en los 360º.
El índice de refracción es de 1.54.
La implantación se hace a través del inyector Accuject por una
incisión de 2.2 mm.
8. Material y método
122
La potencia esférica de la lente va desde las +6.00D a las
+30.00D en pasos de 0.5D mientras que la potencia dióptrica
disponible, en el plano de la lente son 1.25D, 2.00D, 2.75D, 3.50D,
4.25D, 5.00D y +5.75D.
Figura 25. Modelo de lente tórica EnVista® (MX60T) (B&L, Rochester; USA)
Figura 26. Potencias disponibles a día de hoy del modelo EnVista® Tórica. En el
momento del estudio, sólo estaban disponibles las potencias de 1.25, 2.00, 2.75 y
3.50 dioptrías en el plano de lente.
8.2.3 Acrysof® IQ toric
La lente Acrysof® IQ toric (SN6A T3-T9; Alcon, Fort Worth, TX,
USA) es una lente asférica, tórica, biconvexa, con un tamaño de zona
8. Material y método
123
óptica de 6.00 mm y un diámetro total de 13.00 mm que tiene tallado
el toro cilíndrico en la cara posterior. El diseño es monobloque con
hápticos con un diseño patentado denominado Háptico L modificado
STABLEFORCE® y una angulación de 0º.
Las marcas de la lente forman una línea imaginaria que
representa el eje positivo del cilindro por lo que el meridiano curvo
del cilindro de la IOL se encuentra a 90º. A diferencia de las otras
lentes, las marcas son una sucesión de tres puntos mientras que en
las otras lentes monofocales tóricas incluidas en el estudio la marca
es una línea recta continua.
Su índice de refracción es de 1.55 y sus potencias esféricas van
de +6.00 a +30.00D.
Las potencias cilíndricas que podemos encontrar son, en plano
de lente, T3 (1.50D), T4 (2.25D), T5 (3.00D), T6 (3.75D), T7
(4.50D), T8 (5.25D) y T9 (6.00D).
Figura 27. Modelo de lente tórica Acrysof monofocal (Alcon, Fort Worth, TX, USA)
8. Material y método
124
Figura 28. Potencias disponibles del modelo Acrysof toric y sus equivalencias en
plano de lente, plano de córnea así como la recomendación del fabricante para la
elección en función del astigmatismo del paciente.
8.2.4 Acrysof® IQ Restor
La lente Acrysof® IQ Restor (SND1 T1-T5; Alcon, Fort Worth,
TX., USA) es la lente multifocal tórica incluida en este estudio.
La implantación de esta lente busca compensar tanto el defecto
refractivo esférico que presente el paciente, ya sea miopía o
hipermetropía, como el astigmatismo y la presbicia. La adición que
tiene el modelo implantado en el estudio es de +3.00D.
Tiene una óptica apodizada difractiva patentada y está
diseñada para proporcionar de forma óptima la energía luminosa a la
retina al distribuir la cantidad apropiada de luz en los puntos focales
cercanos y lejanos, independientemente de las condiciones de
iluminación.
La óptica asférica está diseñada con aberración esférica
negativa para compensar la aberración esférica positiva de la córnea
que podemos encontrar en la mayoría de los pacientes.
8. Material y método
125
La lente intraocular AcrySof® IQ ReSTOR® utiliza la misma
plataforma biomecánica/biomaterial que la AcrySof® de monofocal.
Las potencias disponibles son SND1T2 (+1.00D), SND1T3
(+1.50D), SND1T4 (+2.25D) y SND1T5 (+3.00D).
Figura 29. Esquema de la plataforma Acrysof y características técnicas de la lente.
Se muestran también la disponibilidad de potencias cilíndricas. (Alcon, Fort Worth,
TX, USA)
En la Tabla 5 se muestra un resumen de todos los detalles técnicos
de cada lente tórica incluida en este estudio.
8. Material y método
126
Tabla 5. Especificaciones de las lentes incluidas en el estudio
8. Material y método
127
Figura 30. Observación de las marcas que presenta cada lente empleada en el
estudio. (A) Lente enVista tórica, (B) Lentis LT, (C) Acrysof IQ Tórica y (D) Acrysof
IQ Restor tórica.
8.3 Cálculo de la potencia de la lente
Para calcular la potencia esférica de la lente intraocular, y una vez
medidos todos los parámetros oculares, se empleó la fórmula Holladay 2 en
todos los casos, si bien, en lugar de emplear la constante o Surgeon Factor
8. Material y método
128
proporcionado por el fabricante, se empleó la constante optimizada para ese
cirujano tras más de 50 implantes previos con cada plataforma de lente.
Un aspecto que se debe tener en cuenta cuando se calcula la potencia
de una lente tórica es el cambio que la técnica quirúrgica provocará en el
astigmatismo corneal. La posición en la que el cirujano haga la incisión y el
tamaño de la incisión son dos factores que hay que tener en cuenta a la
hora de hacer el cálculo de este tipo de lentes. Este astigmatismo, llamado
astigmatismo inducido quirúrgicamente, se debe incorporar en el cálculo
final para conocer el eje de implantación y la potencia tórica final de la
lente.
La localización de la incisión resulta fundamental porque las incisiones
pueden llevar a curvar o aplanar los meridianos principales por un efecto de
acoplamiento. Aunque la situación ideal sería hacer la incisión sobre el
meridiano más curvo (Tejedor and Murube 2005, Borasio, Mehta et al.
2006, Borasio, Mehta et al. 2006, Tejedor and Perez-Rodriguez 2009),
muchas veces esa opción no es posible por la situación que ocupa el
cirujano en el quirófano, por las diferentes situaciones que se producen en
cuanto a manejo de las manos en función de si es un ojo derecho o
izquierdo o incluso por otro condicionante como la anatomía de la cara del
paciente. El tamaño de la incisión también influirá en el astigmatismo
inducido ya que incisiones menores generalmente inducirán menos
astigmatismo (Oshika, Tsuboi et al. 1994, Kohnen, Dick et al. 1995, Masket
8. Material y método
129
and Tennen 1996, Oshika, Nagahara et al. 1998, Oshika, Sugita et al. 2000,
Masket, Wang et al. 2009).
Otros factores que pueden afectar al astigmatismo inducido, al igual
que en los otros tipos de incisiones corneales, son la edad del paciente, el
empleo o no de suturas corneales en el proceso quirúrgico o incluso la
cantidad de astigmatismo preoperatorio (Suzuki, Tanaka et al. 1992, Storr-
Paulsen, Madsen et al. 1999, Reddy, Raj et al. 2007, Norrby, Hirnschall et
al. 2013).
En todos los casos se introdujo tanto el lugar de la incisión como el
astigmatismo que inducía el cirujano en cada caso en función del ojo
intervenido y de la posición de la incisión.
Atendiendo a todos los puntos señalados anteriormente, se calculó
para todos los modelos de lentes la potencia esférica que correspondería, y
a continuación se empleó el calculador de cada laboratorio para conocer la
potencia del cilindro y el eje al que se debía implantar la lente intraocular
tórica.
Dada la variación de potencias dióptricas cilíndricas que ofrecían los
laboratorios, y teniendo en cuenta la disponibilidad que ofrecían en el
momento del estudio, (por ejemplo, en el momento del estudio, Bausch
sólo disponía de las 4 potencias cilíndricas más bajas para el modelo
8. Material y método
130
EnVista®) en los casos en los que había varios modelos disponibles se eligió
aleatoriamente el modelo a implantar. Como norma, en caso de que la
potencia cilíndrica de la LIO no coincidiese con el astigmatismo corneal,
siguiendo los criterios de Felipe (Felipe, Artigas et al. 2011) se ha elegido
siempre una potencia cilíndrica en LIO menor que el astigmatismo corneal
para no provocar un astigmatismo postoperatorio en el eje perpendicular al
preoperatorio.
La potencia efectiva de la potencia cilíndrica de la lente en el plano
corneal está en función de la posición efectiva de la lente y de la potencia
total. La potencia de la lente se debe calcular en los dos meridianos
principales. Después, la diferencia de potencia entre las dos lentes, en el
plano corneal, se empleará para elegir la potencia cilíndrica más próxima al
astigmatismo corneal del paciente (Novis 1997).
Atendiendo a estos cálculos, para corregir 2.00D de astigmatismo
corneal, se necesitaría una lente con un toro de 2.20D y un equivalente
esférico de 10.0D, o un toro de 2.40D y un equivalente esférico de 22.0D o
una potencia cilíndrica de 2.60D para un equivalente esférico de 30.0D.
La forma en que funciona exactamente cada calculador de lente tórica
no está publicada por los laboratorios. Lo que sí es común es la generación
de un gráfico que indica la posición en la que se debe realizar la incisión y el
eje en el que se debe colocar la lente.
8. Material y método
131
Figura 31. Imagen del calculador online que proporciona el laboratorio Alcon para el
cálculo de la potencia de sus lentes intraoculares tóricas. Calculador disponible en
http://www.acrysoftoriccalculator.com/
Figura 32. Gráfico que genera el calculador de Bausch & Lomb al calcular la
potencia de la lente tórica. Muestra la posición tanto de la incisión como del eje en
el que hay que colocar la lente.Calculador disponible en
https://envista.toriccalculator.com/
8. Material y método
132
8.4 Método de marcado
En el preoperatorio, unos minutos antes de que el paciente sea
intervenido, se le realizaron dos marcas con un fino rotulador de violeta de
genciana (Devon Skin Marker, Fine Tip 151) en el eje horizontal (0-180º) a
las 9 y a las 3 (Figura 33). A continuación, se tomó una fotografía con el
paciente situado a una distancia de al menos 2.5 m de la cámara fotográfica
(Figura 34). La cámara empleada fue una Coolpix P90 (Nikon), con un
objetivo de 26.0 – 624.0 mm, una CCD de 12.10 megapíxeles efectivos y
un zoom 24x (óptico) / 4x (digital) (Figura 35).
Figura 33. Con un rotulador de Violeta de genciana se pintan las marcas en el eje
0-180º (A). A continuación, se fotografía al paciente a una distancia mínima de
2.5m (B).
8. Material y método
133
Figura 34. La primera imagen muestra cómo se puede capturar la imagen del
paciente (A) y cómo el zoom permite ampliar la imagen hasta observar los puntos
marcados con violeta de genciana.
Figura 35. La cámara empleada fue una Coolpix P90 (Nikon), con un objetivo de
26.0 – 624.0 mm, una CCD de 12.10 megapíxeles efectivos y un zoom 24x (óptico)
/ 4x (digital).
La cámara se colocaba en un trípode y se adosaba a una burbuja de
nivel para asegurar que la fotografía se tomaba perfectamente alineada. El
objetivo se situaba a la altura de los ojos del paciente a una distancia
superior a los 2.5m como hemos mencionado anteriormente.
La opción del zoom óptico nos permitía tomar la fotografía de los dos
ojos a la vez. La cabeza del paciente estaba en su posición normal sin
necesidad de usar una mentonera o cualquier otro soporte.
8. Material y método
134
A continuación, la fotografía se exportaba a un ordenador equipado
con el software Scale 2.0 package (Software R. Sgrillo©, Brazil) que
permitía medir de manera precisa la posición real de las dos marcas que se
habían realizado a la altura del limbo (Figura 36).
En la fotografía, se medía el ángulo real en el que se situaban las
marcas, tanto la posicionada a las 3 como la posicionada a las 9. Para ello
se utilizaba la línea horizontal que atravesaba el reflejo corneal (Figuras 37B
y 37C).
Figura 36. Imagen de la exportación al ordenador. Una vez exportada la imagen se
activa el software Scale 2.0. Para facilitar el desarrollo en quirófano, se coloca la
imagen del ojo invertida ya que resulta más cómodo para que coincida esa imagen
con la que luego observa el cirujano en el microscopio.
8. Material y método
135
Figura 37 (A, B, C): La Figura A muestras las dos marcas sobre el limbo en el eje
horizontal (0-180º) a las 3 y a las 9 realizadas en la lámpara de hendidura. Las
Figuras B y C muestran la posición exacta de las marcas y su diferencia angular
con respecto al meridiano de 0-180º. En este ejemplo, una de las marcas estaba a
175º en lugar de 180º y la otra a 349º (-16º) en lugar de a 0º.
A continuación, cuando el paciente ya estaba tumbado en la camilla
quirúrgica, se posicionaba el anillo de Méndez tomando como referencia las
marcas previas y marcando el eje en el que se debía implantar la lente
tórica intraocular considerando la diferencia angular observada en las
fotografías.
Después, la imagen preoperatoria y la imagen del último fotograma
obtenido del video de la cirugía en el que se observaba la lente intraocular y
las marcas (Figura 30) de posición del eje, se comparaban para calcular el
misalignment debido al método de marcado.
8.5 Proceso quirúrgico
Como hemos mencionado anteriormente, todas las cirugías las realizó
el mismo cirujano.
8. Material y método
136
Todas las cirugías se realizaron mediante facoemulsificación, con
rhexis continuas y circulares de 5.5 mm aproximadamente y con incisiones
de 2.2 mm en córnea clara en el meridiano elegido previamente e
introducido en el calculador de la potencia de cada lente que proporciona
cada laboratorio.
Las cirugías se realizaron bajo anestesia tópica y con el paciente
monitorizado bajo la supervisión de un anestesista. En ningún caso fue
necesario ampliar el tamaño de la incisión para introducir la lente.
Para proteger el endotelio se empleó un sistema en escudo formado
por un viscoelástico dispersivo (Viscoat®, Alcon; Forth Worth, TX, USA) que
se introdujo en la cámara anterior para, seguidamente, introducir un
viscoelástico cohesivo (AmviscTM Plus, B&L; Rochester, USA). Ninguna
incisión se suturó y no hubo que ocluir ningún ojo.
8.6 Pruebas postoperatorias
Las visitas postoperatorias se realizaron al día siguiente de la
intervención, a la semana y al mes del proceso quirúrgico.
8. Material y método
137
Las pruebas realizadas en estas visitas postquirúrgicas se detallan a
continuación:
- Refracción y medida de la agudeza visual en visión lejana tanto
sin corrección (UDVA) como con la mejor corrección posible
(CDVA). Se empleó el test ETDRS para visión lejana y el test
Radner-Vissum para visión próxima.
- Topografía. Se realizó topografía corneal con el topógrafo
Pentacam (Oculus; Wetzlar, Germany) y se empleó el protocolo
de Maeda para confirmar que no se había producido un
astigmatismo distinto del deseado en la intervención.
- Presión intraocular: Se midió la presión intraocular empleando un
tonómetro Goldman.
- Biomicroscopía: Todos los pacientes fueron observados con el
biomicrosopio. Con la cámara fotográfica incorporada en el
biomicroscopio, (Modelo Topcon DC1, resolución 2048x1536) se
realizó en todas la visitas una fotografía, una vez el paciente
estaba dilatado, en la que se pudiesen observar las marcas
características de cada modelo de lente intraocular tórica y que
indican el eje en el que se ha implantado la potencia astigmática.
La imagen se tomó con 10x, con retroiluminación.
8. Material y método
138
8.7 Análisis estadístico
Todos los datos fueron analizados mediante el Software SPSS versión
17.0 para Windows (SPSS, Inc., Chicago, IL, USA). Los valores presentados
son la media ± SD de los valores obtenidos. Para la normalidad de la
distribución se empleó el test Kolmogorov-Smirnov. Para evaluar la
rotación de las lentes durante las visitas postoperatorias se utilizó la medida
one-way repetidas Anova (RM)-ANOVA. La prueba t de Student se empleó
para comparar la posición de la lente nada más terminar la cirugía con la
posición ideal obtenida con el calculador de potencia y posición de la lente.
Para la correlación de la rotación (valores absolutos) a los 30 días y
los valores de misalignment con la UDVA y la potencia del astigmatismo
postoperatorio se empleó el coeficiente de correlación bivariada de Pearson.
Se consideró estadísticamente significativo cuando p<0.05.
9. Resultados
139
9. Resultados
"Un científico es un hombre tan endeble y humano como cualquiera; sin
embargo, la búsqueda científica puede ennoblecerle, incluso en contra de su
voluntad”
Isaac Asimov
140
9. Resultados
141
9 Resultados
Se implantaron las siguientes lentes intraoculares tóricas: La lente
Acrysof® IQ toric se implantó en 28 pacientes, el modelo EnVista®® toric
se implantó en 21 pacientes, la lente Lentis® LT se colocó en 14 pacientes
y, por último, la lente Acrysof® IQ Restor se implantó en 28 pacientes.
9.1 Agudeza visual y refracción postoperatoria
Todos los resultados postoperatorios relativos a la agudeza visual, la
refracción y el equivalente esférico se muestran en la tabla 6.
Tabla 6.Datos post-operatorios de agudeza visual, refracción y equivalente esférico
con los distintos modelos de lentes implantados
La UDVA post cirugía fue de 0.1 LogMAR (20/25 Snellen) o mejor en
el 64.6% de los ojos en los que se implantó una lente monofocal tórica y en
9. Resultados
142
el 46.4% de los ojos en los que se implantó una lente multifocal tórica. El
81% de los ojos con lente monofocal tórica y el 78.6% de los ojos con lente
multifocal tórica, alcanzaron una UDVA de 0.2 logMAR (20/32 Snellen) o
mejor (Figura 38).
Figura 38. UDVA post cirugía en función de si las lentes eran monofocales tóricas o
multifocales tóricas
En cuanto a las lentes monofocales tóricas, la lente EnVista®® toric
mostró la mejor UDVA al compararla con las otras, con un 81% de los ojos
con una agudeza visual de 0.1 logMAR (20/25 Snellen) o mejor (Figura
39). Los pacientes que alcanzaron una UDVA de 0.0 logMAR (20/20 Snellen)
fueron un 38% de los pacientes con lente EnVista®, el 29% de los
pacientes con Lentis y el 25% de los pacientes con implante de Acrysof. En
cuanto a la lente multifocal tórica, el 32% de los pacientes alcanzó una
UDVA de 0.0 logMAR (20/20 Snellen).
9. Resultados
143
El valor medio de la CDVA mostró un incremento estadísticamente
significativo tras el implante de las lentes en todos los modelos estudiados.
La CDVA media preoperatoria fue de 0.19 ± 0.17 (rango 0.01 a 0.82)
mientras que la media CDVA postoperatoria se situó en 0.02 ± 0.05 (rango
0.00 a 0.30) (p<0.05; Test t de Student).
Figura 39. UDVA acumuladas en las lentes tóricas evaluadas
El valor medio de equivalente esférico (SE) para todos los pacientes
disminuyó tras la cirugía a -0.10 ± 0.51 D (rango -1.25 a 2.38) y fue
estadísticamente significativo al compararlo con el valor de SE
preoperatorio (p<0.05; Test t de Student). No se encontraron diferencias
con el valor medio del target de SE deseado, que fue de -0.03 ± 0.40 D
(rango -1.95 a 0.75).
9. Resultados
144
La diferencia media entre el target del SE y el valor medio final
obtenido de SE al mes de la cirugía, fue de -0.07 ± 0.46 D. No se
encontraron diferencias estadísticamente significativas.
La lente Acrysof® IQ Restor toric presentaba el valor más bajo de SE
tras la cirugía, lo que se justifica porque al ser una lente multifocal, siempre
se buscaba un target lo más próximo a cero para evitar los fenómenos
asociados a defectos refractivos postoperatorios como fenómenos fotópicos
o problemas en las distintas distancias de trabajo. En cuanto al SE no se
encontraron diferencias estadísticamente significativas al comparar las
lentes entre sí.
Se hace la comparativa al mes de la cirugía ya que se considera que
es en este momento cuando la refracción del paciente ya es estable, sin
presentarse la inflamación o edemas característicos de los primeros días
tras la intervención.
El valor medio del cilindro disminuyó en todos los pacientes desde
2.03 ± 0.86 D hasta 0.61 ± 0.57 D tras la cirugía, encontrándose
diferencias estadísticamente significativas para todas las lentes estudiadas
(p<0.05; Test t de Student).
9. Resultados
145
El cilindro postoperatorio hasta 0.50D se encontró en el 73.3% y
43.9% de los pacientes con lente monofocal tórica o multifocal tórica
respectivamente (Figura 40).
El porcentaje de ojos con un cilindro hasta 1.00 D llegaba hasta el
89% en monofocales tóricas y el 83% en multifocales tóricas (Figura 40).
Figura 40. Astigmatismo postoperatorio refractivo, al mes de la intervención, en
función de si la lente era monofocal ó multifocal
La lente EnVista® mostró más ojos con un cilindro postoperatorio
hasta 0.50D frente a las otras lentes estudiadas, con el 85% de los ojos
dentro de este rango (Figura 41).
9. Resultados
146
Figura 41. Astigmatismo refractivo postoperatorio, al mes de la intervención, para
los tres modelos de lentes monofocales tóricas
Los pacientes que tuvieron un astigmatismo menor o igual de 0.25D
fueron más del 40% tanto para el modelo EnVista® como para el modelo
Acrysof monofocal tórico. Para la lente Acrysof multifocal tórica, el
porcentaje de pacientes que presentaban un astigmatismo igual o menor a
0.25D se situaba en el 36%.
9.2 Sistema de marcaje y rotación de las lentes
Un nuevo sistema de marcaje se ha evaluado también en este estudio
y a continuación se muestran los resultados relacionados con él.
Llamamos misalignment a la diferencia entre la posición ideal de la
lente obtenida con los distintos calculadores y la posición de la lente justo al
acabar la cirugía. El valor medio total de misalignment en todos los grupos
9. Resultados
147
estudiado fue de 0.07º ± 0.60 grados (rango -2.00º a 3.00º). La Tabla 7
muestra el valor de misalignment para las distintas lentes estudiadas.
Tabla 7. Datos post-operatorios de misalignment y rotación con los distintos
modelos de lentes implantados
No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre el
valor de la posición calculada y el valor de la posición final tras el proceso
quirúrgico en ninguna de las lentes incluidas en este estudio (p< 0.05; Test
t de Student).
La rotación de las lentes se midió a la hora, a las 24 horas, a los 7
días y a los 30 días de la cirugía. Si bien hay que destacar que en los cuatro
modelos de lentes estudiadas, la mayor rotación se produjo en las primeras
24 horas tras producirse el implante. Tras ese período, los cambios eran
mínimos en las posiciones de las lentes.
9. Resultados
148
La Figura 42 muestra gráficamente los valores de rotación en las
diferentes visitas postoperatorias para las lentes monofocales tóricas y
multifocal tórica.
Una hora tras la cirugía, la lente que mostró mayor rotación fue la
lente que tenía un diseño de plato (Lentis LT). La lente enVista® se mostró
como la más estable y la única que mostró un sentido de rotación
antihorario mientras que en las otras lentes el sentido de giro
mayoritariamente fue horario.
Figura 42. Valores de rotación a lo largo de las visitas postoperatorias para los
cuatro modelos de lentes evaluadas
9. Resultados
149
No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre las
distintas visitas para ninguno de los modelos de lentes estudiadas (p>0.05;
One-way (RM) ANOVA).
En la visita del mes tras la intervención, el 69.6% de las lentes
monofocales y el 67.9% de las lentes multifocales, mostraron una rotación
menor de 5º. Al mes de la intervención, el 90.5% de los ojos con implante
de lente enVista® tórica mostraron una rotación menor de 5º mientras que
para la lente AcrySof IQ y Lentis LT, ese valor correspondió al 64.3% y
64.6% de los ojos respectivamente.
Se observaron más de 10º de rotación en el 21.4% de las lentes
AcrySof toric, en el 9.5% de la lente enVista® toric y en el 14.28% de la
lente Lentis LT. Con la lente multifocal tórica el 17.8% mostró una rotación
mayor de 10º.
Una lente del modelo EnVista® tórica rotó más de 20º en la primera
hora y una vez ocupó esa posición se mantuvo estable en todas las visitas
posteriores. Las máximas rotaciones que se produjeron en la hora posterior
al implante fueron de 13º para el modelo Acrysof monofocal, 18º para el
modelo Lentis y 18º para el modelo Acrysof multifocal tórico, si bien,
ninguna de las lentes volvió a rotar a partir de ese momento más de 10º.
En todos los grupos, sólo fue una lente la que rotó en esa cantidad.
9. Resultados
150
Dos lentes EnVista (9.5%) rotaron más de 10º. Una lo hizo 22 grados
y otra lo hizo 18º. La lente que rotó 18º tenía una potencia cilíndrica de
2.75D lo que dejó un cilindro refractivo de -1.75D por lo se decidió rotar en
una segunda intervención para posicionarla en el eje correcto. La otra lente
había rotado 22º pero el paciente decidió no someterse al segundo proceso
quirúrgico ya que su visión era satisfactoria.
Una de las lentes Lentis LT rotó 17º. El ojo tenía una longitud
axial superior a 25 mm. Cuando se realizó la rotación en el segundo acto
quirúrgico buscando la posición ideal la lente tendía a recuperar la posición
que había ocupado anteriormente por lo que no se consiguió la mejoría. El
cilindro refractivo que presentaba el paciente era de 1.75D por lo que
meses después se le realizó una PRK para compensar el defecto refractivo.
Ninguna de las lentes Acrysof® IQ Toric requirió ser rotada ya que las
visiones alcanzadas por los pacientes eran satisfactorias. En el modelo
Acrysof® Restor Toric, tampoco fue necesario rotar ninguna lente. La lente
que más roto lo hizo en 18º si bien tenía una potencia cilíndrica T3 (1D en
plano corneal) por lo que no afectaba a la visión del paciente de manera
significativa.
9. Resultados
151
Figura 43. Rotación con los distintos modelos de lentes evaluadas
9.3 Correlaciones entre agudeza visual y astigmatismo
residual
En cuanto a la correlación de los distintos factores, hubo una
correlación entre los valores de UDVA postoperatorios y la potencia
cilíndrica tras la implantación tanto en las lentes monofocales tóricas como
en las multifocales tóricas (r=0.807, p < 0.001 y r=0.631, p< 0.001
respectivamente), entre la UDVA postoperatoria y la rotación de las lentes
multifocales tóricas al mes de la intervención (r=0.787, p= 0.001), y entre
la UDVA postoperatoria y la rotación de las lentes en los ojos implantados
con lentes monofocales tóricas al mes de la intervención (r=0.439,
p=0.011).
9. Resultados
152
Al evaluar las dos lentes que presentaban la misma plataforma, la
Acrysof IQ monofocal tórica, y la Acrysof IQ Restor tórica, había una
correlación entre la UDVA postoperatoria y la rotación que había sufrido la
LIO respecto a la posición ideal (r= 0.434, p < 0.023 y r=0.787, p=0.001).
Esa correlación es más fuerte en el grupo de las lentes multifocales.
9.4 Cálculo del valor de SIA quirúrgico
Para finalizar el capítulo, si bien no se incluyen los siguientes
resultados en esta tesis como tal, sí que se han empleado a la hora de
calcular la potencia de las lentes tóricas. Nos referimos al valor de
astigmatismo que inducía el cirujano con cada modelo de lente y en cada
ojo. Para hacer el análisis se utilizó el Software Assort
(http://www.assort.com), diseñado por Alpins y que realiza un análisis
vectorial.
El análisis se hizo con 180 lentes que presentaban la misma
plataforma que las lentes incluidas en este estudio. Para evaluar el
astigmatismo inducido en los modelos Acrysof se empleó la lente Acrysof
monofocal esférica SN60WF. Para evaluar el modelo enVista toric se
emplearon los resultados obtenidos con la lente enVista pero en su versión
monofocal (MX60). Por último, para evaluar el modelo Lentis LT se empleó
9. Resultados
153
la lente Lentis Mplus que tiene el mismo diseño en cuanto a plataforma y
tamaño aunque se trata de una lente multifocal refractiva.
Se incluyeron en la evaluación 60 lentes de cada modelo que a su vez
se dividieron en dos grupos con 30 lentes cada uno: Ojo derecho (OD) y ojo
izquierdo (OI). En todos los ojos derechos la incisión se realizó a 180º
(temporal) en córnea clara mientras que en los ojos izquierdos la incisión se
hizo a 90º, con una desviación de ± 30º si el meridiano de máxima
curvatura se encontraba en esa posición (entre 60º y 120º). Todas las
incisiones se hicieron con cuchillete de diamante con un tamaño de 2.2 mm
y valvuladas. Se excluyeron de este estudio aquellos ojos en los que la
incisión fuese irregular o hubiese que haber puesto alguna sutura para
completar su cierre.
Los resultados de SIA obtenidos se muestran en la tabla 7. No hubo
diferencias estadísticamente significativas entre las tres plataformas
evaluadas por lo que en el cálculo de la lentes empleadas en esta
investigación se usó un SIA de 0.1D en los ojos derechos intervenidos y un
SIA de 0.2D cuando el ojo intervenido era el izquierdo.
9. Resultados
154
Grupo 1: Ojo
derecho (OD)
Grupo 2: Ojo
izquierdo (OI)
Plataforma
Acrysof
0.08 ± 0.08
(Rango 0.00 a
0.16)
0.18 ± 0.10
(Rango 0.09 a
0.26)
Plataforma
EnVista
0.10 ± 0.07
(Rango 0.01 a
0.15)
0.21 ± 0.10
(Rango 0.10 a
0.25)
Plataforma Lentis
0.11 ± 0.08
(Rango 0.04 a
0.17)
0.23 ± 0.11
(Rango 0.10 a
0.31)
Tabla 8. Astigmatismo inducido (SIA) por el cirujano (FPG) en función de la lente
implantada y el ojo intervenido
Figura 44. Captura del cálculo de uno de los ojos evaluados con el Software Assort
para evaluar el astigmatismo inducido. En este caso se trata de un ojo derecho.
10. Discusión
155
10. Discusión
"El objeto de toda discusión no debe ser el triunfo, sino el progreso”
Joseph Joubert
156
10. Discusión
157
10 Discusión
Minimizar el desalineamiento o misalignment y la rotación de las
lentes tóricas en la cirugía de cataratas es primordial si queremos evitar la
aparición de astigmatismos postoperatorios residuales y alcanzar una buena
UDVA.
Hay varios métodos para marcar la posición de la lente intraocular
tórica pero ninguno de los presentados hasta el momento de realizar este
estudio, tenía en cuenta la ciclotorsión monocular que se puede producir y
la convergencia en condiciones binoculares de proximidad (Viestenz, Seitz
et al. 2005, Alvarez de Rementeria 2008, Ma and Tseng 2008, Mendicute,
Irigoyen et al. 2008, Graether 2009, Cha, Kang et al. 2011, Visser,
Berendschot et al. 2011, Roumeliotis and Hutnik 2012, Jain, Gupta et al.
2013).
Por otro lado, ya están disponibles distintas plataformas que permiten
posicionar la lente tórica en el eje adecuado sin la necesidad de realizar
ninguna marca, como el sistema Verion (Alcon, Fort Worth, TX, USA), el
sistema Callisto (Carl Zeiss Meditec; Jena, Germany) o el sistema ORA
(Alcon, Fort Worth, TX, USA), pero los tres son muy caros si los
comparamos con cualquier otro sistema de marcaje. Además, nuestra
experiencia en lo últimos meses trabajando con la plataforma Cataract Suite
10. Discusión
158
Markerless, que incluye el sistema Callisto, también puede ser una fuente
de error si el sistema no detecta de manera correcta el ojo del paciente,
pudiendo provocar errores tanto en el implante de la lente tórica como en el
posicionamiento de las incisiones.
En este estudio, se propone un nuevo sistema de marcado que
minimiza estos errores al tener al paciente sentado o de pie adoptando la
posición normal de su cabeza.
Desde hace años, sistemas como el Eyecode (Essilor, París, Francia)
permiten conocer la posición exacta que debe ocupar el centro óptico de la
lente oftálmica en la montura elegida por el paciente, tras realizar una toma
de medidas fisiológicas avanzadas gracias a la cual conocemos la posición
exacta del Centro de Rotación del Ojo (CRO) con respecto a la
lente oftálmica y la postura que adopta el paciente en situaciones
habituales, no forzadas. Sin embargo, hasta hoy en día, no hay ningún
sistema que haya permitido un proceso similar para la implantación precisa
y, por qué no decirlo, altamente personalizada, de lentes intraoculares.
Con el sistema que proponemos, las marcas se captan mediante una
fotografía a una distancia en la que no debería existir convergencia en
condiciones bilaterales y evitando la posible ciclotorsión monocular que se
produce al ocluir uno de los dos ojos.
10. Discusión
159
El principal error de los métodos publicados hasta la fecha, más allá
de las plataformas mencionadas anteriormente, se refiere al considerar que
las marcas que se realizan en el meridiano de 0-180º se encuentran
realmente en ese meridiano. Pero resulta casi imposible evitar el acto
reflejo del paciente cuando ve acercarse el rotulador o cualquier tipo de
marcador a su ojo, lo que lleva a movimientos de ojo, giro de cabeza o
incluso cerrar los ojos provocando que las marcas finales puedan ser
imprecisas, borrosas, inexactas o poco nítidas. En nuestra práctica hemos
observado que estos movimientos pueden generar errores de hasta 15º lo
cual afectará, inevitablemente, al resultado final del proceso quirúrgico en lo
que se refiere a visión sin compensación y a refracción.
Figura 45. Situación real de algunas de las marcas realizadas con violeta de
genciana. La marca (A) que debería estar a 0º, se encontraba a 3º. Las marcas B,
C y D, que debían estar a 180º, realmente estaban situadas a 187º, 188º y 194º
respectivamente.
Antes de comenzar a realizar este estudio, realizamos en 20
pacientes, consecutivos, que se iban a operar de cataratas, el marcaje de
los puntos a 0-180º, con rotulador quirúrgico, con precaución de que esos
puntos estuviesen situados en la posición deseada. Cuando se midió la
posición real de esos puntos, de los 20 puntos que debían estar situados a
10. Discusión
160
180º sólo dos estaban en esa posición, oscilando el rango entre los 174º y
los 195º. Respecto a los puntos que debían estar situados a 0º, tres de
ellos se encontraban en la posición correcta mientras que el resto oscilaba
entre los 10º y los -9º. En estos pacientes la posición de las marcas no
resultaba primordial ya que se les implantaron lentes esféricas, pero esta
situación muestra cómo el marcaje que muchos autores dan como válido
puede no serlo tanto.
La principal ventaja del sistema de marcaje que se describe en este
estudio comparado con los existentes en la literatura es que permite
conocer la posición real de las marcas realizadas con el violeta de genciana,
lo que aporta una exactitud y conocimientos del eje real en el que se
necesita implantar la lente a partir de la posición relativa de las marcas.
El 75% de los pacientes no presentó misalignment y sólo 3 ojos de
91 presentaron 2 ó más grados de misalignment. Al comparar estos
resultados con la posición teórica que debía ocupar la lente (obtenida
mediante el calculador) no se encontraron diferencias estadísticamente
significativas. Estos resultados muestran la efectividad de este sistema de
marcaje, reduciendo claramente el misalignment que se puede producir
durante la cirugía.
Hay otros estudios acerca de la rotación de las lentes tóricas
(Mendicute, Irigoyen et al. 2008, Buckhurst, Wolffsohn et al. 2010,
10. Discusión
161
Wolffsohn and Buckhurst 2010, Prinz, Neumayer et al. 2011, Chatrchyan,
Khachatryan et al. 2012, Bachernegg, Ruckl et al. 2013) pero hasta donde
hemos podido saber, este es el primer estudio que compara la estabilidad
rotacional de diversas lentes monofocales y multifocales con distintas
plataformas. Además, todas las cirugías fueron realizadas por el mismo
cirujano y las pruebas pre-op y post-op realizadas por el mismo
optometrista lo que redujo significativamente algunas fuentes de error
habituales en este tipo de estudios.
La rotación de las lentes tóricas, una vez implantadas, puede deberse
a diversos mecanismos. Algunos de los factores que pueden inducir a esta
rotación incluyen variaciones de la presión intraocular postoperatoria
(Pereira, Milverton et al. 2010), una fricción reducida ente los hápticos y el
saco capsular producido a veces por una incompleta eliminación del
viscoelástico utilizado en la cirugía (Chang 2003), un tamaño capsular
normalmente más grande de lo habitual (Ohmi 1993), el diseño de las
lentes o incluso el material con el que están fabricadas (Prinz, Neumayer et
al. 2011) y una compresión de la lente intraocular cuando se produce la
contracción de la cápsula (Ohmi, Tanaka et al. 1999).
Los resultados que presentamos muestran que la rotación de las
lentes ocurre principalmente durante la primera hora tras la intervención y
después se mantiene estable en el saco capsular durante, al menos, el
primer mes que es donde se hace el último seguimiento de las lentes
implantadas. Estos resultados concuerdan con otros que demuestran que la
10. Discusión
162
rotación ocurre dentro de las primeras horas que siguen al implante (Prinz,
Neumayer et al. 2011).
El hecho de que las rotaciones tengan lugar tan rápidamente, sugiere
que pueda ser consecuencia de una pobre ficción entre los hápticos y el
saco capsular debido a una incompleta eliminación del viscoelástico como se
ha mencionado anteriormente.
También podría deberse a una diferencia de tamaño entre el saco
capsular y el tamaño total de la lente. Un tamaño grande de la lente con
respecto a la cápsula produciría mayor fricción y se reduciría el riesgo de
rotación pero también podría provocar una distorsión en la forma del saco
capsular y de la zónula. No obstante, es importante tener en cuenta que es
complicado saber el tamaño de la cápsula en las pruebas preoperatorias y
no existe una relación clara entre parámetros como el diámetro corneal y el
saco capsular (Khng and Osher 2008).
Cuando se comparó la rotación media entre las distintas lentes
monofocales tóricas, los modelos Acrysof IQ toric y enVista® mostraron
menos rotación que la lente Lentis LT, aunque en ninguna de las lentes
hubo una rotación media mayor de 5º. Tanto la lente Acrysof IQ toric como
la EnVista® son lentes con hápticos loop-abiertos, mientras que la lente
Lentis LT tiene un diseño de plato. Estas características pueden ser la razón
10. Discusión
163
por las que se producen estas diferencias entre las distintas lentes
estudiadas.
Stephenson (Stephenson 2013) reportó que el 9% de los pacientes
con implante de lente enVista® toric mostraban una rotación mayor de 5º.
Estos resultados son similares a los logrados en el presente estudio.
Nuestro resultados fueron ligeramente peores que los obtenidos por Chua
(Chatrchyan, Khachatryan et al. 2012) con respecto a la lente Acrysof
monofocal tórica. No hemos encontrado en la literatura estudios sobre la
rotación del modelo Lentis LT. Con respecto a la lente Acrysof multifocal
tórica, nuestros resultados contrastan con otros estudios(Ferreira, Marques
et al. 2013) que muestran una rotación menor de 10º; en nuestro estudio,
el 17.68% de los pacientes mostró una rotación al menos de 10º.
Como se ha mencionado en los resultados, dos de las lentes incluidas
en este estudio requirieron ser rotada para posicionarla correctamente en
una segunda intervención para mejorar la UDVA de los pacientes. Para
calcular la rotación necesaria utilizamos dos métodos de forma que nos
permitía verificar el giro que se debía hacer.
Por un lado utilizamos un análisis vectorial del astigmatismo a partir
del astigmatismo refractivo preoperatorio y el postoperatorio. Para ello
empleamos la plataforma www.recalculatortoric.com desarrollada por el
Instituto de Oftalmología Avanzada (NGJ y FPG) (Garzón 2012, Garzón
10. Discusión
164
2014). Cuando este valor sea positivo, nos indicará que el giro se debe
realizar en sentido horario. Por el contrario, si el valor es negativo nos
estará indicando que el movimiento de giro debe ser antihorario. Este
método requiere una graduación precisa, con un ajuste fino tanto del eje
como del cilindro refractivo.
Como segundo método empleamos la medida directa de la posición
que ocupaba la lente tal y como se han medido todas las lentes en este
estudio.
Para rotar la lente en un segundo proceso quirúrgico, el método más
eficaz es el posicionamiento relativo, puesto que de esta manera,
eliminaremos nuevas fuentes de error. Una vez comprobado el giro a
realizar (grados y sentido), comenzaremos señalando la posición actual de
la lente, prolongando el eje de las marcas de toricicidad de la misma sobre
el limbo esclerocorneal. Utilizando un marcador de Méndez u otro
transportador de ángulos similar, marcaremos la nueva posición de la lente,
eso sí, utilizando una señal diferente a la primera, para evitar confusiones.
A continuación, a través de la paracentesis se debe inyectar un
viscoelástico cohesivo de baja densidad, sobre la lente, teniendo buen
cuidado de que no pase bajo la misma, pues la presencia de dicho material
bajo la lente, la hace más inestable y es difícil su extracción. De esta forma
se llevará la lente a su nueva posición, traccionando de la unión háptico-
10. Discusión
165
óptica con un gancho de Sinskey siendo aconsejable realizar un giro de al
menos 180º para evitar la memoria de posición de la lente dentro de un
saco capsular que probablemente ha comenzado a ajustarse sobre la
misma. Seguidamente se debe proceder a retirar el material viscoelástico,
utilizando la cánula de infusión/aspiración, presionando suavemente sobre
la lente, para evitar que pueda moverse e hidratar la incisión, tratando de
no presurizar excesivamente el ojo, lo que puede provocar nuevos
movimientos de la lente por la distensión de saco capsular.
En ojos con sospecha de saco grande, en caso de rotación de la lente
es aconsejable rotarla a partir de la segunda semana de implantación de
modo que ya se haya producido una contracción capsular que aumente la
fricción de la lente con la cápsula. Sin embargo, en los diseños de plato,
probablemente debido a la forma de la lente y a las fuerzas que se
producen, la lente, una vez rotada, tiende a posicionarse en el lugar que
ocupó los primeros días lo que nos lleva a suponer que se produce una
deformación del saco tras la contracción lo que hace que la lente busque la
posición en la que se encuentra más estable. El resultado que obtuvimos
con la lente Lentis LT y nuestra experiencia en el día a día con otras lentes
con este mismo diseño nos confirma esta teoría en las lentes de plato,
especialmente en ojos con sacos grandes.
No obstante, es importante indicar que estos resultados no
concuerdan con otros que describen Patel y col. (Patel, Ormonde et al.
1999), ya que ellos describieron que las lentes de plato son más estables en
10. Discusión
166
términos de rotación que las lentes de hápticos en loop-abiertos.
Curiosamente, Prinz et al. (Prinz, Neumayer et al. 2011) encontraron un
comportamiento similar en lo que se refería a los dos diseños de lentes.
Sorprendentemente, el diseño multifocal de la plataforma Acrysof
toric mostró 2 grados más de rotación que el diseño monofocal tórico. No
está claro si sólo el diseño del háptico juega un papel importante en la
rotación de la lente y de ahí la controversia sobre qué diseño de háptico es
mejor para lograr una estabilidad rotacional. Se requieren más estudios
para poder clarificar este punto.
Diversos estudios realizados en el Instituto de Oftalmología
Avanzada, donde se comparaban resultados de lentes tóricas monofocales y
multifocales con la misma plataforma nos han mostrado que la forma de
fabricación de las lentes también influye en su estabilidad (Poyales 2014,
Garzón 2015).
El estudio se realizó junto con el laboratorio Physiol (Lieja, Bélgica),
para evaluar la estabilidad de la lente POD Finevision Toric (POD FT), una
lente trifocal difractiva, con diseño de hápticos en doble Y tal y como
muestra la Figura 46. La otra lente que se evaluó fue la lente Ankoris,
también del laboratorio Physiol. Las dos lentes presentaban la misma
plataforma, medidas y diseño de hápticos si bien la lente Ankoris era
monofocal mientras que la lente POD FT era trifocal.
10. Discusión
167
Figura 46. Lente POD FT, trifocal tórica, diseñada por el laboratorio Physiol, con
hápticos en doble Y.
Los resultados obtenidos mostraron una estabilidad rotacional de la
lente POD FT, con rangos de giro mínimos, mientras que el comportamiento
de la lente Ankoris era muy inestable, con giros durante los primeros días
algunas veces superiores a los 20º.
A pesar de ser lentes con plataformas similares, la inestabilidad del
diseño monofocal se debía a que durante la fabricación de ambos diseños
había ligeras diferencias como que el modelo Ankoris era pulido, lo que
hacía que tuviese una flacidez que la hacía inestable dentro del saco.
Tras estos resultados, el laboratorio Physiol modificó estos pequeños
cambios en la fabricación logrando que la lente Ankoris sea, a día de hoy,
10. Discusión
168
una de las lentes tóricas más estables que podemos encontrar en el
mercado del mismo modo que lo es la lente POD FT.
Con la intención de conocer si existían diferencias en la fabricación de
sus modelos tóricos monofocal y multifocal que pudiesen esclarecer porqué
el diseño multifocal es ligeramente más inestable, contactamos con el
laboratorio Alcon, del que no obtuvimos dicha información.
En cuanto a la UDVA post cirugía, fue similar en todas las lentes
monofocales tóricas y también cuando se compararon monofocales y
multifocales tóricas entre sí.
Los resultados que se presentan aquí confirman lo que describieron
otros autores indicando que el uso de lentes intraoculares tóricas permite a
los pacientes alcanzar una buena UDVA tras la cirugía (Visser, Bauer et al.
2013, Alfonso, Knorz et al. 2014).
Con respecto a la UDVA, 0.1logMAR (20/25 Snellen) o mejor se
alcanzó en el 66.4% de las lentes monofocales tóricas y el 46.4% de las
multifocales tóricas. Otros estudios con lentes monofocales tóricas han
obtenido resultados similares con el modelo Acrysof (Mendicute, Irigoyen et
al. 2008, Dardzhikova, Shah et al. 2009, Tsinopoulos, Tsaousis et al. 2010)
y el modelo enVista® (Stephenson 2013). Tampoco hemos encontrado
estudios al respecto para el modelo Lentis LT con los que podamos
10. Discusión
169
comparar nuestros resultados. Sobre la Acrysof multifocal tórica, los
resultados reportados (Ferreira, Marques et al. 2013) son similares a los
nuestros.
La razón principal de incluir en el estudio sólo pacientes en los que no
existiese una diferencia significativa entre el astigmatismo corneal anterior
y el astigmatismo corneal total se debe a que los las fórmulas actuales de
cálculo de potencia, y las fórmulas que usan calculadores de los laboratorios
estiman la constante de la lente en función del astigmatismo corneal
anterior (Fam and Lim 2009, Ho, Tsai et al. 2009), considerando además
que el índice de la córnea es 1.3375, algo que se aproxima a la realidad
cuando el ratio entre cara anterior y cara posterior se encuentra alrededor
del 82%. Diversos estudios (Ho, Tsai et al. 2009, Koch, Ali et al. 2012,
Koch, Jenkins et al. 2013, Zhang, Sy et al. 2015) han mostrado que el
empleo del astigmatismo de cara anterior para el cálculo de lentes tóricas
puede tender a sobrecorregir los astigmatismos a favor de la regla y a
infracorregir los astigmatismos en contra de la regla. Esta tendencia se hace
más acusada cuanto más influye la cara posterior en el astigmatismo
corneal total. Por ello, una de las recomendaciones de los estudios
mencionados anteriormente es la de seleccionar la primera lente por debajo
de la potencia astigmática calculada para el target deseado en córneas en
las cuales el astigmatismo de cara posterior coincide en forma con el
astigmatismo anterior y tiene una magnitud significativa mientras que en
casos en los que el astigmatismo posterior tiene una posición contraria al
de la cara anterior de magnitud significativa, la lente indicada sería la
siguiente en potencia cilíndrica más alta al target elegido.
10. Discusión
170
Otro de los objetivos de este estudio era mostrar como la rotación de
la lente intraocular tórica afecta a la UDVA con diferentes diseños y
comparando los resultados de las lentes monofocales y multifocales. Se
encontró una correlación entre la UDVA y la rotación tanto en monofocales
como en multifocales, que era más fuerte en el caso de las lentes
multifocales tóricas. La correlación fue positiva en ambos casos, indicando
que a mayor rotación, mayor era el valor que se obtenía de logMAR UDVA
y, por consiguiente, peor era la agudeza visual que lograba el paciente. Era
esperable que la agudeza visual de los pacientes se viera más afectada por
las mayores rotaciones de las lentes multifocales. A este respecto, a la
imagen desenfocada causada por el astigmatismo residual debido a la
rotación había que añadirle la pérdida de calidad visual debido al diseño
difractivo apodizado de la lente multifocal tórica. Aun así, la UDVA
alcanzada por los pacientes con lentes multifocales tóricas era comparable a
la obtenida por los pacientes con lentes monofocales tóricas.
11. Conclusiones
171
11. Conclusiones
"Todo concluye, pero nada perece”
Séneca
172
11. Conclusiones
173
11 Conclusiones
Las conclusiones obtenidas en esta investigación son las que se
enumeran a continuación:
1. El nuevo método de marcaje empleado en esta investigación para
alinear las lentes tóricas en el eje correcto es efectivo y no se ve
influido por la convergencia y/o la ciclotorsión que pueda
presentar el paciente.
2. Las lentes con un diseño de hápticos en C-loop presentan una
rotación menor, y por lo tanto mayor estabilidad, que las lentes
con un diseño de plato.
3. El momento más propenso para que se produzca la rotación de la
lente intraocular se encuentra dentro de las primeras 24 horas
tras producirse el implante en el saco capsular.
4. Una vez se produce la rotación en las primeras horas, ésta se
mantiene estable durante el primer mes.
11. Conclusiones
174
5. Los ojos con longitudes axiales largas y sacos grandes son más
propensos para que las lentes intraoculares implantadas roten
desde la posición original.
6. Lentes con la misma plataforma pero distinto diseño en su zona
óptica pueden presentar diferencias en cuanto al grado de
rotación, probablemente provocados por diferencias en el proceso
de fabricación.
7. La UDVA postquirúrgica fue similar en todas las lentes
monofocales tóricas evaluadas.
8. La UDVA alcanzada por los pacientes con lentes multifocales
tóricas es comparable a la obtenida por los pacientes con lentes
monofocales tóricas en visión lejana.
9. Existe una correlación, tanto en lentes monofocales tóricas como
en lentes multifocales tóricas, entre los valores de UDVA
postoperatorios y la potencia cilíndrica tras la implantación.
10. Existe una correlación entre la UDVA postoperatoria y la rotación
de las lentes monofocales tóricas al mes de la intervención.
11. Existe una correlación entre la UDVA postoperatoria y la rotación
de las lentes multifocales tóricas al mes de la intervención.
11. Conclusiones
175
12. La correlación es más fuerte, cuando se evalúan lentes con la
misma plataforma, en diseños multifocales tóricos que en diseños
monofocales tóricos.
13. En todos los casos las correlaciones son positivas, por lo que a
mayor rotación, menor será la UDVA alcanzada por el paciente.
14. Resulta más difícil recolocar, en una intervención secundaria, las
lentes de diseño de plato frente a las lentes con hápticos en C-
loop.
15. La rotación, en una intervención secundaria, resulta eficaz una
vez se ha producido la contracción del saco capsular.
176
12. Trabajo futuro
177
12. Trabajo futuro
"El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para
los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad.”
Víctor Hugo
178
12. Trabajo futuro
179
12 Trabajo futuro
La memoria de tesis doctoral presentada abre nuevas líneas de
investigación que se detallan seguidamente.
12.1 Desarrollo sistema de medida de posición de lentes
tóricas
Como hemos visto en esta tesis doctoral, la medida de la posición de
la lente tórica implantada resulta compleja. En la actualidad, sistemas
como el Callisto Eye (Carl Zeiss Meditec AG, Jena, Germany) ó el
VERION Digital Marker (Alcon Laboratories, Ft. Worth, USA) permiten
implantar la lente en el eje correcto a partir de una imagen tomada
antes de la intervención mediante el reconocimiento de vasos limbares,
estructuras del iris u otros parámetros oculares y que permiten evitar
los errores que se puedan producir, por ejemplo, por la ciclotorsión que
se puede producir cuando el paciente está tumbado (Pérez 2015). Sin
embargo, a día de hoy, una vez implantada la lente no hay ningún
sistema de reconocimiento automático que permita conocer la posición
de la lente respecto a los meridianos principales.
12. Trabajo futuro
180
En la actualidad, hemos abierto una línea de investigación junto con
el Departamento de Electrónica de la Universidad de Alcalá para
desarrollar un sistema que permita, a partir de una imagen adquirida en
el momento del implante, la comparación con cualquier otra fotografía
adquirida en el postoperatorio de modo que, a partir de la toma de
referencias fijas como puede ser un cruce de venas conjuntivales, vasos
limbares o rasgos iridianos, permitan conocer la cantidad de rotación y
sentido de rotación de la lente implantada de manera precisa y sencilla.
12.2 Desarrollo sistema optimizado rotación giro lente
tórica en cirugía secundaria
En 2012 desarrollamos una plataforma online, de libre acceso,
(www.recalculatortoric.com) que permite el cálculo del giro que se debía
dar a una lente tórica basada en el cálculo vectorial, de modo que a
partir de la refracción prequirúrgica y de la refracción postquirúrgica,
nos informase de la cantidad y sentido del giro que se debe dar a una
lente tórica implantada, ya sea fáquica o pseudofáquica (Garzón 2012,
Garzón 2014).
En la actualidad, como consecuencia de esta investigación, hemos
empezado a desarrollar una plataforma que tenga en cuenta no sólo los
valores de refracción sino también el cambio en el astigmatismo corneal
que se haya podido producir a consecuencia de la intervención, la AV sin
12. Trabajo futuro
181
refracción y la AV obtenida con compensación óptica así como la
posición que ocupa la lente para informar sobre cuál sería la posición
óptima que debería ocupar la lente intraocular para obtener la mejor AV
sin compensación.
182
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13. Bibliografía
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outcomes, and complications." J Cataract Refract Surg 39(4): 624-637.
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of the AcrySof SA60TT toric intraocular lenses: a cohort study." BMC Ophthalmol 8: 8.
208
14. Anexos
209
14. Anexos
210
14. Anexos
211
14 Anexos
14.1 Aportaciones científicas resultado de la tesis doctoral
Publicaciones (en revistas de alto índice de impacto)
1. Garzón N, Poyales F, de Zárate BO, Ruiz-García JL, Quiroga JA.
Evaluation of rotation and visual outcomes after implantation of
monofocal and multifocal toric intraocular lenses. J Refract Surg. 2015
Feb;31(2):90-7
Congresos internacionales
1. Garzón N. Cálculo del giro de las lentes intraoculares tóricas a partir del
defecto refractivo residual. OPTOM 2012 (22 Congreso Internacional de
Optometría, Contactología y Óptica Oftálmica). Comunicación Oral. Marzo
2012. Madrid.
2. Poyales F, Garzón N. Post-implant Rotation of Acrysof. European Society
of Cataract & Refractive Surgeons. Comunicación Oral. Septiembre 2012.
Milán. Italia.
14. Anexos
212
3. Poyales F, Garzón N. Lens stability and visual outcome following the
implant of the EnVista® (Bausch & Lomb) monofocal intraocular lens.
European Society of Cataract & Refractive Surgeons. Comunicación Oral.
Septiembre 2012. Milán. Italia.
4. Garzón N, Poyales F. Lens stability and vision quality following EnVista®
Toric (Bausch & Lomb) intraocular lens placement. European Society of
Cataract & Refractive Surgeons. Comunicación Oral. Octubre 2013.
Amsterdam. Holanda.
5. Cálculo del giro de rotación de lentes tóricas. FacoElche. Comunicación
Oral. Febrero 2014. Elche. España.
6. Poyales F, Garzón N. Comparison of two IOLs with the same optics, two
designs, two materials. European Society of Cataract & Refractive
Surgeons. Comunicación Oral. Septiembre 2014. Londres. Reino Unido.
7. Garzón N, Poyales F. Stability of a Novel IOL Design - Comparison of Two
Trifocal toric IOLs. European Society of Cataract & Refractive Surgeons.
Comunicación Oral. Septiembre 2015. Barcelona. España. (Aceptado)
8. Pérez R, Poyales F, Garzón N. Astigmatism correction outcomes:
Comparing manual marking method versus Callisto system for alignment
in Toric Intraocular Lenses. European Society of Cataract & Refractive
Surgeons. Comunicación Oral. Septiembre 2015. Barcelona. España.
(Aceptado)
14. Anexos
213
Software generado
1. Recalculator toric
a. Calculador del giro que se debe realizar en las lentes tóricas
que han rotado o han sido mal posicionadas en el acto
quirúrgico.
b. Software de libre acceso disponible tanto en español como en
inglés y que se utiliza tanto en Europa, Estados Unidos,
Sudamérica y Australia.
c. Disponible en español y en inglés en:
www.recalculatortoric.com
Figura 47. Gráfico en el que se muestran los cálculos realizados a través del software
recalculatortoric desde Mayo de 2014 a Mayo de 2015 y los países en los que se ha empleado.
14. Anexos
214
14.2 Proyectos en los que se ha colaborado durante la realización
de esta tesis doctoral
En este apartado se recogen los proyectos de investigación que constituyen la
fuente de financiación de este trabajo.
1. A Multi-Center, Open-Label, Post-Market, Investigation of Clinical
Outcomes in Eyes implanted with enVista® Toric Intraocular Lens
TIPO DE PROYECTO: Contrato acorde al Real Decreto 1432/2003
ENTIDAD FINANCIADOR: Bausch & Lomb (Nueva York, USA).
ENTIDADES PARTICIPANTES: Instituto de Oftalmología Avanzada y 4 centros
más a nivel internacional
DURACIÓN: Marzo 2013-Marzo 2014
INVESTIGADOR PRINCIPAL: Francisco Poyales Galán
El objetivo de este estudio era evaluar la estabilidad rotacional de la lente
EnVista tórica. El estudio estaba coordinado desde Bausch & Lomb USA y en él
participaban una clínica de Estados Unidos, otra en Filipinas y 2 en Europa. La
inclusión de lentes debía restringirse a lentes con una elevada toricidad.
14. Anexos
215
2. Estudio de la relación entre el astigmatismo postquirúrgico y la
posición del eje de la LIO
TIPO DE PROYECTO: Contrato acorde al Real Decreto 1432/2003
ENTIDAD FINANCIADOR: Bausch & Lomb (Nueva York, USA).
ENTIDADES PARTICIPANTES: Instituto de Oftalmología Avanzada
DURACIÓN: Marzo 2013-Marzo 2014
INVESTIGADOR PRINCIPAL: Francisco Poyales Galán
El objetivo de este estudio era evaluar cómo afectaba al modelo EnVista tórica
pequeñas rotaciones tras el implante. Además, se evaluaba la posible aparición
de glistening y la calidad visual obtenida con esta lente.
3. Estudio de la estabilidad de un diseño de lente intraocular no
comercializado y su comparativa con otra lente intraocular con la
misma óptica pero distinto diseño de hápticos y distinto material
TIPO DE CONTRATO: Contrato acorde al Real Decreto 1432/2003
ENTIDAD FINANCIADOR: Physiol (Lieja, Bélgica).
ENTIDADES PARTICIPANTES: Instituto de Oftalmología Avanzada
DURACIÓN: Marzo 2013-Actualidad
14. Anexos
216
INVESTIGADOR PRINCIPAL: Francisco Poyales Galán
El objetivo de este estudio era evaluar la estabilidad rotacional de dos lentes
que compartían el mismo diseño en la zona óptica pero distinto en los hápticos.
Uno de los diseños presenta un diseño en doble C-Loop abiertos en Y y el otro
diseño presenta 4 hápticos cerrados. Actualmente, además de la estabilidad
rotacional estamos evaluando si el cambio de material afecta a la calidad visual
observada por el paciente.
14. Anexos
217
14.3 Hoja de información para el paciente
ESTUDIO PARA EVALUAR LA ROTACION DE LENTES
INTRAOCULARES TÓRICAS
Hoja de información para el paciente
Le invitamos a participar en un estudio clínico con alrededor de 100 pacientes intervenidos en el Instituto de Oftalmología Avanzada de Madrid. Antes de que
decida, es importante que entienda el motivo de esta investigación y sus consecuencias. Tómese el tiempo necesario para leer detenidamente la siguiente información y coméntelo con sus familiares y amigos si lo desea.
No dude en preguntar a su médico si tiene alguna duda o si desea obtener más información. Tómese su tiempo para decidir si desea participar o no.
¿Cuál es el propósito del estudio?
Información previa Tiene una catarata que ha empeorado su visión y la única manera de tratarla es
mediante una intervención quirúrgica en la que se retirará la lente natural con la catarata y se insertará una lente intraocular (o implante) en su ojo. Normalmente esta intervención no requiere hospitalización y se realiza con anestesia local o
anestesia general breve. Las lentes intraoculares (LIO) para cirugía de cataratas se introdujeron en la década
de los cincuenta. Durante años se ha realizado un proceso de investigación y desarrollo para conseguir LIO más fáciles y seguras de implantar y para mejorar la
calidad de visión tras la intervención. La mayoría de ellas se implantan en el ojo mediante un inyector (como, por ejemplo, una jeringa), que evita el contacto con la parte exterior del ojo.
También tiene astigmatismo. El astigmatismo es un error óptico del ojo que se debe a la forma de la córnea, cuya forma es más ovalada (como un balón de rugby) que
redonda (como un balón de fútbol). Esto hace que la luz se centre en más de un punto del ojo, lo que provoca visión borrosa de lejos o de cerca. Existe una lente intraocular tórica diseñada para corregir el astigmatismo que con
las lentes intraoculares comunes debería corregirse con gafas tras la cirugía de cataratas.
¿Cuál es el objetivo del estudio?
14. Anexos
218
El objetivo de este estudio es recopilar y evaluar los resultados clínicos obtenidos de
pacientes a los que se les implante una LIO tórica como parte de una operación
convencional de cataratas para reducir los efectos del astigmatismo corneal
preoperatorio en la refracción posoperatoria.
¿Por qué me invitan a participar?
Le invitan a participar en el estudio porque tiene una catarata que debe ser retirada
para mejorar su visión y porque tiene astigmatismo que provoca visión borrosa. El oftalmólogo que ha visitado recientemente en el Instituto de Oftalmología
Avanzada ha determinado que no tiene ningún otro problema ocular aparte de la catarata, por lo que es un buen candidato para este estudio.
¿Debo aceptar participar en este estudio?
No, su participación en este estudio es voluntaria y, naturalmente, tiene derecho a negarse. Si decide participar en este estudio, deberá firmar un formulario de consentimiento.
Recibirá una copia de esta información, la cual deberá conservar. Si cambia de opinión, podrá retirarse en cualquier momento sin tener que dar explicaciones.
Aunque decida no participar en el estudio, deberá someterse a la cirugía de cataratas rutinaria con la debida atención. La decisión de no tomar parte en este estudio, o de retirarse en cualquier momento, no influirá en la atención que recibirá.
¿Qué me ocurrirá si decido participar?
Su experiencia será muy similar a la de los pacientes que se someten a una cirugía
de cataratas rutinaria. Será intervenido por su médico, el Dr. Francisco Poyales un
cirujano especialista en cataratas.
Las diferencias serán las siguientes:
En comparación con una cirugía de cataratas rutinaria, deberá acudir las mismas
veces que los pacientes no incluídos en este estudio tal y como están protocolizadas las visitas en este centro.
En cada visita se evaluará su visión de forma más detallada y exhaustiva de lo
habitualmente necesario. Las pruebas tendrán una duración de aproximadamente una hora por visita. El programa se llevará a cabo de la siguiente manera:
Antes de la intervención (consulta 1)
14. Anexos
219
Un oftalmólogo y un optometrista le realizará un historial médico, examinará sus
ojos rigurosamente, comprobará su visión y tomará las medidas oportunas. Este es
el procedimiento habitual antes de una cirugía de cataratas.
Intervención (consulta 2)
Será intervenido por el Dr. Poyales para retirar la catarata e implantar la lente.
Volverá a casa el mismo día, al igual que en una cirugía de cataratas estándar. En
términos prácticos, la cirugía, la duración del tratamiento y el tiempo de
hospitalización no variarán respecto a la cirugía de cataratas estándar.
Tras la intervención se le realizará una fotografía para que quede reflejada la
posición de la lente intraocular que le acaban de implantar.
Después de la intervención
Para poder evaluar su ojo y su agudeza visual, deberá acudir a las siguientes visitas
postoperatorias:
24 horas después de la intervención (consulta 3)
Entre siete y ocho días después de la intervención (consulta 4)
Entre 26 y 34 días después de la intervención (consulta 5)
Durante estas visitas, será necesario examinar tanto su ojo como el implante
meticulosamente. Un oftalmólogo y un optometrista examinarán su ojo de acuerdo al procedimiento estándar, que incluye: medición de la agudeza visual con y sin gafas correctoras, medición de la presión ocular, y evaluación del estado del ojo y la
lente intraocular mediante un biomicroscopio. Se realizarán pruebas adicionales a través de modernas técnicas de imágenes
digitales para ver el implante dentro del ojo. En cada visita, se tomarán fotografías
del ojo y del implante, pero no podrá identificársele en ninguna de ellas. Para poder
realizar estos exámenes, habrá que aplicar colirios que dilaten las pupilas
(agrandándolas) para poder apreciar claramente el implante dentro del ojo. Dilatar
la pupila puede provocar visión borrosa, la cual puede persistir durante algunas
14. Anexos
220
horas después de haber aplicado el colirio. Por esta razón, no debe acudir
conduciendo solo a sus citas.
Todos los exámenes son indoloros y para poder llevarlos a cabo deberá permanecer
sentado.
Durante el estudio, a no ser que se trate de una emergencia médica, cualquier tratamiento o procedimiento planificado o recomendado para el ojo que tiene
implantada la lente objeto de estudio deberá ser llevado a cabo por o bajo la dirección del cirujano responsable de su cirugía y no por cualquier otro facultativo
médico
¿Qué debo hacer?
Al acceder a participar en este estudio, accede a proporcionar información precisa al personal que realiza la investigación, así como a seguir las directrices indicadas por
el investigador y asistir a todas las visitas del estudio.
¿Cuáles son los posibles beneficios de participar en el estudio?
Es posible que participar en este estudio no le aporte ningún beneficio médico directo más que el que le aportaría una cirugía de cataratas rutinaria con cualquier
otra lente intraocular tórica. Este estudio puede ayudar a que los cirujanos escojan en un futuro los implantes más adecuados para los pacientes que se sometan a una cirugía de cataratas.
¿Y si hay un problema? Nos gustaría conocer cualquier problema que pudiera experimentar, para poder
resolverlos tan pronto como sea posible. Pueden ser problemas con las citas, su ojo o relativos a su estancia en el hospital o la clínica oftalmológica.
Si tiene alguna inquietud sobre el estudio en este aspecto, consúltelo primero con su oftalmólogo, Dr. Francisco Poyales, que se esforzará por responder lo mejor posible a sus preguntas y hacer los preparativos necesarios (Tf. 91535 35 70). Además, el
día de la intervención se le proporcionará un teléfono donde podrá contactar con el Dr Poyales las 24h del día.
En caso de que ocurriese alguna complicación relacionada con el procedimiento le trataremos con la debida atención, como a cualquier paciente que se haya sometido
a una cirugía de cataratas. La mayoría de las complicaciones se resuelven sin consecuencias para su visión. Sin embargo, tal vez necesite consultas adicionales,
un tratamiento específico y, en algunos casos, otra intervención quirúrgica.
¿Será confidencial mi participación en este estudio?
14. Anexos
221
Sí. Si decide tomar parte en el estudio, personal autorizado del Instituto de
Oftalmología analizará partes determinadas de su historial médico y de los datos recogidos para el estudio. Todos ellos tienen el deber de guardar la confidencialidad de sus datos como participante de un estudio y no se revelará ningún detalle que
pudiera identificarle fuera del estudio. La información médica recopilada, incluidos sus datos personales (por ejemplo,
fecha de nacimiento, estado de salud, historial médico previo), que se utilizará para los resultados del estudio, permanecerá confidencial y en el más estricto anonimato.
¿Qué ocurrirá si aparece nueva información relevante?
A veces, durante el transcurso de un estudio, aparece información nueva sobre el
tratamiento objeto de estudio. Dicha información puede surgir del grupo de estudio en el que esté implicado o de otros investigadores que realicen un trabajo similar.
Será informado si aparece nueva información sobre este estudio que pueda influir en su disposición a participar. La nueva información podría dar como resultado cambios
en el programa del estudio, tratamientos adicionales o incluso la finalización del estudio. Se le explicará detalladamente cualquier cambio y, para continuar con el estudio, le pediremos que firme un formulario de consentimiento actualizado.
Si el estudio concluye por cualquier razón, o si decide no continuar tras los cambios realizados, se dispondrá su atención continuada y su atención estándar no se verá
afectada.
¿Qué ocurrirá si no deseo seguir con el estudio?
La participación en este estudio es voluntaria y puede retirarse en cualquier
momento sin necesidad de dar explicaciones. La decisión de abandonar el estudio no disminuirá el nivel de la asistencia recibida, y se realizarán todas las gestiones necesarias para que pueda recibir atención fuera del estudio.
A pesar de que decida abandonar el estudio, necesitaremos utilizar los datos recogidos antes de dicho abandono. No podrá ser identificado a partir de estos
datos.
¿Qué ocurrirá con los resultados del estudio?
El Instituto de Oftalmología Avanzada analizará de forma anónima la información recogida en sus citas programadas. Los resultados se publicarán en revistas científicas, congresos o tesis doctorales y no podrá ser identificado en ningún
informe ni publicación.
Detalles de contacto Si tiene más dudas acerca del estudio, o alguna inquietud durante el mismo,
póngase en contacto con: Dr. Francisco Poyales Tf. 915353570
Le agradecemos el tiempo dedicado a leer esta información.
14. Anexos
222
No dude en realizarnos cualquier pregunta.
Si decide participar en este estudio, deberá firmar el formulario de consentimiento adjunto. Recibirá una copia de este documento.
14. Anexos
223
FORMULARIO DE CONSENTIMIENTO
ESTUDIO PARA EVALUAR LA ROTACION DE LENTES INTRAOCULARES TORICAS
1. Confirmo que he leído y comprendido la Hoja de información con fecha
……………………. sobre el estudio arriba mencionado. He tenido la oportunidad de considerar la información y obtener respuestas satisfactorias a las preguntas que he formulado.
2. Entiendo que mi participación será voluntaria y que podré retirarme en cualquier momento sin dar ninguna razón y sin que esto influya en
mi atención médica o derechos legales.
3. Entiendo que las secciones relevantes de mi historial médico y de los
datos recopilados podrán ser examinados por personas responsables del Instituto de Oftalmología Avanzada, autoridades reguladoras u
otras autoridades sanitarias, en los casos en que mi participación en la investigación sea relevante. Autorizo a dichas personas a acceder a mis registros.
4. Autorizo a que se tomen fotografías de mi ojo y a que se grabe mi intervención en vídeo.
5. Accedo a participar en el ensayo arriba mencionado.
______________________ _____________ ________________
Nombre del paciente Fecha Firma
He tratado la información pertinente sobre esta investigación con el paciente (y/o su representante autorizado legalmente) mediante un
lenguaje que pueda entender. Creo que he informado completamente a este sujeto acerca de la naturaleza de la investigación y sus posibles beneficios y riesgos, y creo que el sujeto ha comprendido esta explicación.
________________ _______________ _______________
Nombre de la persona que Fecha Firma
recibe el consentimiento
________________ _______________ _______________
Investigador Fecha Firma
14. Anexos
224
14.4 Consentimiento informado
CONSENTIMIENTO INFORMADO. CIRUGÍA DE CATARATAS.
ANESTESIA TÓPICA
Articulo 11 Ley General de Sanidad 41/2002 Básica reguladora de la autonomía del
paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación
clínica (BOE 15-11-02)
DIAGNOSTICO: La catarata es la pérdida de transparencia del cristalino
(lente natural, situada inmediatamente detrás de la pupila) y que conlleva
una pérdida progresiva de visión, llegando a ser total en algunos casos.
Su tratamiento es quirúrgico y consiste en la extracción del cristalino opaco
y la implantación en su lugar de una lente para corregir el defecto de
refracción que se produciría al retirar el cristalino. Para su sustitución,
pueden utilizarse lentes monofocales (tradicionales) con lo que tras la
cirugía es necesario utilizar gafas de cerca y posiblemente de lejos, o bien
lentes que incluyan la corrección de los defectos previos que tratan de
optimizar la visión lejana o lentes multifocales para eliminar la dependencia
de las gafas tanto de lejos como de cerca.
Beneficios: eliminar la opacidad que produce la catarata y/o corregir los
defectos de graduacion. En cualquier caso pueden existir circunstancias, en
las que el paciente necesite una corrección óptica (gafas) más o menos
ocasional.
La técnica quirúrgica empleada es la FACOEMULSIFICACION, que permite
una mínima incisión y que conlleva una rápida recuperación funcional.
PRONOSTICO: La cirugía de cataratas es un procedimiento bastante seguro
tanto para el ojo como para el organismo en general. RIESGOS: Los riesgos
vienen dados por el tipo de anestesia, por la propia cirugía o por las
enfermedades previas.
En su caso el procedimiento se va a realizar con ANESTESIA TÓPICA
(Gotas) que no presenta más riesgos que reacciones tóxico-alérgicas frente
al medicamento anestésico y requiere una mayor colaboración por parte del
paciente que otros tipos de anestesia (Local o General). El beneficio de la
anetesia Tópica es evitar todas las complicaciones de la anetesia local o
retrobulbar (hemorragias, puncion inadvertida del globo, etc)
14. Anexos
225
Como toda cirugía no está exenta de complicaciones, las más graves son la
hemorragia expulsiva y las infecciones intraoculares que en menos del 0.14
por 1.000 pacientes podrían llevar a la pérdida del ojo de forma inmediata,
en días, semanas o meses.
Otras complicaciones son el desprendimiento de retina, aumento de presión
intraocular, hemorragias intraoculares, alteración de la trasparencia de la
cornea, dehiscencias de suturas (en caso de requerir sutura), edema
macular, opacidad de cápsula posterior, deformidad pupilar, dislocación de
la lente, que pueden ocurrir en menos de un 0.2% de los casos y que
requieren una nueva intervención. Si la catarata es total, la falta de
transparencia impide ver el estado de la retina y del nervio óptico previo a
la cirugía por lo que, en estos casos, el resultado de visual de la misma no
puede garantizarse.
Existen descritas otras complicaciones infrecuentes no incluidas en este
texto dada su extensión, que podrán ser comentadas por su oftalmólogo si
usted lo desea.
ALTERNATIVA: No existen alternativas al tratamiento de la catarata. En
caso de no operarse la opacidad continua a un ritmo que depende de cada
paciente y que a priori no se puede determinar.
Manifiesto que estoy conforme con la intervención que se me ha propuesto. He leído y comprendido la información anterior. He podido preguntar y
aclarar todas mis dudas. Por eso he tomado consciente y libremente la decisión de autorizarla. Por todo ello;
Doy mi consentimiento para que se me realice la Cirugía de CATARATA CON ANESTESIA TÓPICA así como las maniobras u operaciones que sean
necesarias durante la intervención quirúrgica. Doy mi consentimiento para que se me administre la anestesia que se
considere adecuada para la operación, así como las medidas complementarias oportunas.
Doy mi consentimiento para que en la intervención participen médicos en formación y pueda asistir personal autorizado.
Doy mi consentimiento para que se puedan realizar fotografías y/o grabar la intervención quirúrgica así como su utilización con fines didácticos o científicos. Nunca se identificará el nombre del paciente o sus familiares en
las grabaciones.
He informado al médico oftalmólogo de mis enfermedades generales y oculares, para la valoración de las posibles contraindicaciones. Puedo retirar la autorización para la cirugía si lo estimo oportuno, sin que
ello repercuta en los cuidados médicos.
Soy consciente que no existen garantías absolutas de que el resultado de la cirugía sea el más satisfactorio.
14. Anexos
226
Firma del Paciente Firma del cirujano Firma del anestesiólogo
Fecha y DNI Nº colegiado Nº Colegiado
TUTOR LEGAL O FAMILIAR: Debido a que el paciente ha sido considerado no capacitado para aceptar o rechazar la cirugía descrita, por todo ello YO:
D/Dña ................................................................................ D.N.I. .................................................... como ........................................................................ doy mi consentimiento
para que se realice la operación, asumiendo los riesgos y complicaciones que puedan aparecer. Puedo retirar este consentimiento cuando en bien del
paciente lo estime oportuno. Firma del tutor o familiar
NO DESEO SER OPERADO: Con fecha ........................................... revoco
el consentimiento prestado para ser intervenido
Firma del paciente Firma del médico
Firma del representante legal en caso de incapacidad del paciente con
indicación del carácter con el que interviene (padre, madre, tutor, etc,)
D.N.I.
227