Estudios y Ensayos. ¿El MAS es de izquierda?

8/6/2019 Estudios y Ensayos. ¿El MAS es de izquierda?

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Estudios & Ensayos

Cochabamba - Bolivia

¿EL MAS ES DE IZQUIERDA?

Elaborado por el Equipo Permanente de Reflexión Interdisciplinar

del Centro Cuarto Intermedio (EPRI-CCI)



Estudios & Ensayos

Primera edición, junio 2011Estudios & Ensayos, año IX, Nº 34

Depósito Legal:2-1-1360-11© Fundación Social Uramanta, 2011

©Cuarto Intermedio Editores, 2011

Autor:Centro Cuarto Intermedio - Área de Reflexión (EPRI-CCI)

EPRI-CCIMaría Teresa Zegada, Socióloga y Analista PolíticaGabriela Canedo, Socióloga y AntropólogaEdgar Dávalos, TeólogoJorge Komadina, Sociólogo

Alberto Ponce, EconomistaLuz Ordóñez, Socióloga y Comunicadora Social

Yuri Tórrez, Sociólogo y Comunicador Social Alejandro Carvajal, FilósofoSergio Montes, TeólogoDaniela Guzmán, Abogada y Pedagoga SocialCarlos Cabero, EconomistaElizabeth Vargas, Antropóloga e Ing. AgrónomaErnesto Sardán, Psicólogo

Asistente:Efraín Gómez

Producción:Centro Cuarto IntermedioCalle Ernesto Daza Nº 1814 - Zona Viña Muyurina

Teléfonos: 4232477 - 4121133 • Fax: 4539082Casilla [email protected] • web: wwww.uramanta.org

Diseño y edición: Área de Comunicación CCI

Impresión:

Live GraphicsTiraje:500 ejemplares

Cochabamba, Junio 2011

Reservados todos los derechos, de acuerdo a lo dispuesto en la ley 1302 de Derechos de Autor

Cochabamba - Bolivia



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CONTENIDO

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Presentación

La y las izquierdas del MAS

Una lectura del MAS a la luz de la izquierda boliviana de los setentaEntrevista a: Gustavo Rodríguez Ostria

Cuando los pututus suenan: ¿La emergencia de la “izquierdaindígena” en Bolivia?

Yuri F. TórrezLa descolonización en la “nueva izquierda”Gabriela Canedo V.

Funciones discursivas en el proceso de cambios

Efectos de frontera en el discurso del Movimiento Al SocialismoJorge Komadina Rimassa

“Socialismo Comunitarista” y “Proceso de Cambios”

como operadores ideológicos en el discurso del MASMaría Teresa Zegada

La sombra de la derecha en la expresión del MAS sobre la oposiciónDaniela Guzmán

La personalidad política de Evo MoralesErnesto Sardán

Fundamentos y cuestionamientos al discurso izquierdista del MAS

Las revelaciones del Vivir BienElizabeth Vargas

La izquierda frente a los mercados: Construcción de labase/estructuradel proceso de cambioCarlos Cabero y Alberto Ponce

¿Mandar obedeciendo?Alejandro Carvajal



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PRESENTACIÓNEn la actual coyuntura latinoamericana, y particularmente boliviana, no existe un conceptounívoco de “la izquierda”, ésta más bien responde a múltiples articulaciones yconnotaciones ligadas a contextos históricamente determinados.

En el caso boliviano, como se puede percibir en el actual documento, la articulacióndiscursiva de la “izquierda” aparece por una parte ligada al carácter indigenista delgobierno, en que adquiere una connotación descolonizadora; en otros casos respondeal horizonte político socialista tradicional anclado en el marxismo, y por último se defineen relación con el otro, con la “derecha” encarnada en actores concretos en base a larelación amigo-enemigo. En todo caso la evocación a la izquierda se construye y (de)construye fundamentalmente en el ámbito de las representaciones simbólicas ydiscursivas.

Por otra parte, la contrastación del discurso izquierdista del gobierno con las acciones ypolíticas asumidas durante la gestión, pone en el tapete de discusión el alcance y sentidode dicho discurso.

Estas y otras preocupaciones en torno a la construcción de la izquierda en Bolivia estánplanteadas en los artículos que contiene el presente número de Estudios y Ensayos. Hansido escritos por los miembros del Equipo Permanente de Reflexión Interdisciplinar del

Centro Cuarto Intermedio (EPRI-CCI) centrados en la motivación común de intentardesentrañar las características ideológicas y el horizonte al cual se dirige el actualproceso.

María Teresa Zegada

Coordinadora del EPRI-CCI.

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La y las izquierdas

del MAS



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Una lectura del MAS a la luz de laizquierda boliviana de los setenta

Entrevista a: Gustavo Rodríguez Ostria

- ¿Qué elementos caracterizaban al pensamiento de izquierda en la década de

los setenta, momento histórico de mayor visibilidad del discurso socialista en

confrontación no solo con el capitalismo sino también con la dictadura militar

de Banzer?

En los años setenta del siglo pasado no existió una sola izquierda, sino varias ycontrapuestas, aunque todas se reconocían en el marxismo como origendoctrinal. Todas empero proclamaban su lucha contra el capitalismo y luegocontra la dictadura militar, la diferencia radical estaba en el método y la estrategia.El Partido Comunista de Bolivia (PCB) por ejemplo no privilegiaba la lucha armadani una transición directa del capitalismo al socialismo en contraste con la radicalpostura del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Esta organización en cambiodesechaba la forma partido y la lucha desde organismos sindicales y acudía a la

confrontación armada. El Partido Obrero Revolucionario (POR) asumía que lapolítica debía conducir lo militar comandada desde una estructura centralizadaen partido leninista. La llamada nueva izquierda como el Partido Socialista (PS)y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) también creían en solucionesarmadas, aunque como resultado de la lucha de masas.

En el fondo, aunque no siempre lo admitieran, pensaban, fruto de la memoriahistórica, en una repetición tendencial de lo ocurrido en abril de 1952. Una luchaen las ciudades, de civiles armados y aliados con una parte del Ejército, contralas fuerzas del poder.

- ¿Cuál es el enemigo común en estos procesos? ¿Qué diferencia encuentras

entre el viejo imperialismo y el actual “imperio”, a que se refiere Negri 1 y es

retomado y enunciado por los actuales activistas de izquierda en Bolivia?

1 Antonio Negri. Filósofo y pensador post marxista Italiano.



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Negri actualiza el concepto de Imperialismo al introducir categorías como “trabajoinmaterial”, “capitalismo cognitivo” y “biopolítica”, para describir realidades queno existía en los albores del siglo XX, en 1916 para ser más precisos, cuandoLenin publicó “El imperialismo, fase superior del capitalismo”, que amamantó ala izquierda mundial y boliviana y donde postuló que el capital financiero domina

al industrial y comercial. El imperialismo seria un fenómeno típico de fines delsiglo XIX cuando el capitalismo alcanzó su madurez monopólica y sometió a lospaíses como Bolivia a su dominio en pos de materias primas y mercados.

En cambio autores como Wallerstein, Braudel y Arrighi, con el antecedente de laobra de André Gunder Frank publicada a fines de los sesenta de la centuriaprecedente, afirman que la economía-mundo existió desde el siglo XVIII y quepara los pueblos dominados el capitalismo tomó forma imperial desde laconquista. Enrique Dussel, que es influyente en los círculos gubernamentales,presenta la misma lectura, que permite unir la lucha antiimperialista con la

descolonización. Sin embargo Dussel y Walter Mignolo -ambos argentinos-,apelando a la “geopolítica del conocimiento” son críticos a Negri. Mignolo yDussel, junto a Katherine Walsh desde la universidad Andina de Quito, presentanuna corriente distinta, que influye en las autoridades del Ministerio de Culturas.Paradójicamente críticos del enfoque descolonizador del Movimiento alSocialismo (MAS), - algunas ex autoridades gubernamentales- también seapoyan en Mignolo o Walsh, de quienes han sido alumnos o alumnas. En suma,no creo que entre quienes formulen el pensamiento alternativo gubernamental,exista la misma apreciación de la obra Negri y Hardt.

Ahora bien, el internacionalismo y la creencia de la revolución mundial, hastaStalin y la exclusión y posterior asesinato de Trotsky en 1940, era una verdadincontrastable en la izquierda marxista. Fueron los cubanos en 1961 queretomaron esta dimensión continental y la apertura de varios frentes de lucha. ElMAS retoma, obviamente no los postulados de Trotsky, sino de lacontinentalización de confrontación, dada la implícita naturaleza mundial delcapitalismo. “La revolución- señala García Linera- tiene que irradiarse, respetandolas particularidades culturales de cada pueblo. La única manera de aislar alcapitalismo es irradiando, expandiendo, apoyando todo proceso de lucha

revolucionaria”.

- ¿Cuál era durante las décadas de los sesenta y setenta, y cuál es ahora la

contradicción fundamental?

Sigue siendo el capitalismo y el imperialismo; pero el centro de la crítica es elque ha cambiado. La izquierda de los setenta, siguiendo a Marx, se centraba en



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desentrañar la naturaleza interna del modo de producción capitalista y laexplotación obrera mediante la plusvalía; es decir la lógica de fábrica. Hoy encambio se invalida el capitalismo por sus manifestaciones externas –los comunesde los que hablan Hardt y Negri– por su impacto sobre su entorno. Se lo acusadel deterioro medio ambiental, de la discriminación racial, de la homogenización

étnica o de la patriarcalización y la discriminación de género. Una lectura derasgos culturales y ecologistas que no estaban presentes en la izquierda anterior,la cual solo usaba la clase como prisma para mirar la realidad. Fueron loskataristas quienes, en el Manifiesto de Tiwanaco (1973) y en los documentos dela Confederación Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, por primera vezhablaron de los dos ojos: clase y etnia. Años más tarde las feministas de clasemedia introdujeron la lectura de género, cuestionando el sexismo tradicional dela izquierda en todas sus vertientes.

Si los indígenas no consiguieron influir en la izquierda nacionalista ni marxista;

las mujeres tuvieron algo de mejor suerte. Esa izquierda era economicista yvanguardista. Todo lo que no correspondía a la lucha obrera, etnia y género,debía ser desechado e incluso combatido. El MAS es -y por propia definición-comunitarista. Esto es, “el capital como el reverso de la comunidad o, si seprefiere, la comunidad como lo no-capital, como el reverso del capitalismo”,como señala Álvaro García Linera. Al anticapitalismo el MAS suma elanticolonialismo, con mayor énfasis en el último ámbito.

- ¿Consideras que el MAS retoma aquella vertiente izquierdista histórica o

inaugura una izquierda de nuevo cuño?

En el MAS cohabitan tendencias que van desde el nacionalismo revolucionariohasta el indigenismo, pasando por el marxismo clásico, lo que conforma un mix.Sin embargo lo que las unifica es su apelación al movimiento indígena como unactor central del “proceso de cambio”. La izquierda setentista era férreamenteobrerista, y consideraba a los campesinos como simple aliados. Nunca sehablaba de indígenas o de pueblos originarios. Salvo los maoístas del PCBMarxista Leninista, que consideraban que la revolución vendría del campo a laciudad, el resto concentraba su reclutamiento y accionar en las ciudades o en las

concentraciones obreras, las mineras básicamente. También se distancia delnacionalismo revolucionario porque rompe y deconstruye el mestizaje como unavía alternativa a la construcción de la nación y el español como lengua franca;aunque en sus políticas culturales el MAS no ha avanzado hasta ahora más alládel folklorismo propio del nacionalismo.



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El MAS, por otra parte, no es un típico partido clásico de izquierda integrado porcuadros que hacen vida política centralizada, en su organización luce más biencomo una agregación de corrientes y movimientos que responden a unadirección altamente centralizada.

- ¿Estás de acuerdo con que el sujeto proletario de las décadas pasadas fue

sustituido por el sujeto indígena?

Si, totalmente. Al desechar la “crítica de la economía a política” el MAS sedesprende del sujeto obrero como único portador de un proyecto iluminista yutópico. Además el concepto de obrero no es equivalente al proletariadomarxista. Para Álvaro García Linera diversas formas laborales abigarradaspueden ser subsumidas dentro el capital. Usa, a mi juicio muy libremente lasubsunción formal y real, que señaló Marx en el Capítulo Inédito del Capital, quienempero se cuidaba de calificar como obreras a estas otras modalidades

productivas presentes en la periferia capitalista.

García Linera trabaja, basándose en René Zavaleta y pero tambiéndistanciándose de él, con el concepto de sociedad abigarrada y, por extensión,de masa insurgente. Zavaleta a su vez fue tributario del estructuralismo marxistafrancés y algunos marxistas italianos como Luporini. Sociedad abigarrada nostransporta más allá del modo de producción capitalista, objeto de análisis deMarx, hasta la formación social o modos de producción articulados para la égidadel capital. Al respecto hubo mucha discusión y producción teórica en los años70s del siglo pasado entre los marxistas latinoamericanos que trataba de dar

cuenta de sociedades más diversas de las que pintaba Marx mirando aInglaterra. A Bolivia estas ondas y debates llegaron poco, por el cerco tendidopor las dictaduras de Hugo Banzer y luego Luis García Meza y por el escasoaprecio de la izquierda boliviana por la teoría y la doctrina.

Paradójicamente fue la derrota obrera y su centralidad a mediados de los 80s(Decreto 21060), la que abrió espacio al movimiento indígena, secundarizadohasta entonces; salvo durante las grandes insurrecciones de 1781, 1899 y laposguerra del Chaco hasta 1953 cuando se decreta la Reforma Agraria. Citemos

a Raúl Prada: “Después del retiro descomunal de la centralidad minera, elproyecto hegemónico proletario se derrumba, las clases desposeídas quedaninermes ante la avalancha neoliberal. Sin embargo, este vacío político va a serllenado por otro sujeto, el sujeto indígena, que retoma la bandera anticolonial yel proyecto descolonizador, proyectando sus reivindicaciones territoriales yculturales en sentido anticapitalista”.



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La historia, decía Marx, avanza por el lado malo.

Además de la frecuente interpelación gubernamental a indígenas campesinos yoriginarios como su principal base social, se mostró con claridad la distancia enla interpelación utilizada durante el último conflicto con la COB. Se usó tonosdespectivos que nunca antes habían fluido desde un gobierno proclamado deizquierda. Se los presentó como una minoría egoísta. Se invocó al argumento delnúmero y de la población para descalificar el aporte obrero a la economíanacional y su rol en la escena política. Claro, y esto puede ser el correlato de la“desobrerización” de la sociedad boliviana, que ha estudiado Álvaro GarcíaLinera. En clave estrictamente marxista, se diría, desde los años setenta, que noes el número lo que determina la función y la proyección de una clase, sino surol en la producción, su conciencia política y su efecto de irradiación del quehablaba René Zavaleta. La nueva clase obrera empero no ha exhibido duranteel conflicto una proyección ni de reforma ni de revolución, sino de disputa por el

excedente, de defensa de las minas y de sus espacios de trabajo concordandocon sus patrones o confrontándose a las comunidades indígenas por la posesiónde recursos naturales. Entonces, a ojos del MAS, forman parte –potencialmente–de una falange sino adversaria al menos conservadora.

- ¿Qué te sugiere la idea de “socialismo comunitarista” enunciada por el actual

gobierno a la luz de una lectura histórica, o el enunciado de la “izquierda

indígena”?

En el siglo XIX, desde las elites de terratenientes, “comunista” se usaba para

(des)calificar a las comunidades indígenas de los Andes que defendían el derechoa la propiedad colectiva de la tierra frente a los intentos de su desestructuracióncon la Ley de Exvinculación de 1874 y su conversión fuese en colonos dehacienda o en campesinos parcelarios.

Digo esto porque me sirve de entrada para señalar que en la lectura del MAS loprimero que hay que subrayar en el socialismo comunitario sería su originalidad;es decir que es producto de la historia larga del país y no de una copia europeao asiática. El nudo estaría en elevar la resistencia al capitalismo desde las

comunidades al proyecto estatal. Las comunidades combatirían al capitalismoimpidiendo que se plasme y que los absorba. Resisten a la proletarización ydesde allí armarían el andamiaje del socialismo; en cambio la clase obrera superaal capitalismo redimiendo su condición proletaria.

Para entender este punto hay que recorrer el camino intelectual de Álvaro García,que viajó hasta Holanda al Instituto de Historia Social para leer los escritos



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etnológicos de Marx sobre las comunidades rusas y sus debates y cartas con Vera Zasulich, una populista rusa. Quizá allí y en su “Cuadernos de Cárcel” (verpor ejemplo Forma valor y forma multitud) empezó pergeñar la creencia que sepuede ir de la sociedad comunitaria al socialismo, sin pasar por el capitalismocomo señalaba el Marx que conocemos. O mejor para convertirlo en un prototipo

de un “nuevo” socialismo pues –y me parece correcto– no son formas “arcaicas”a ser desechadas como pretendía la vieja izquierda (al igual que la oligarquíaliberal) sino modalidades vivas e insurgentes.

Sin embargo, en la lectura histórica de García Linera, advierto una(re)construcción imaginada y ficcional del pasado indígena, que puede seraplicado a los ayllus andinos, pero que, por ejemplo, no sirve para explicar latrayectoria de los campesinos quechuas de los valles de Cochabamba. Aquí lademanda centenaria fue poseer una parcela de tierra a título individual y nocolectivo, como ocurre actualmente, salvando las diferencias, en las zonas de

colonizadores, rebautizadas eufemísticamente “comunidades interculturales”.Distintas lógicas de propiedad y uso de la tierra que están creando friccionesentre los colonizadores en proceso de expansión geográfica e indígenas detierras bajas como los Yuracarés, Guaraníes o Lecos, propietarios ancestralesde esas tierras.

- En consecuencia ¿se pueden asociar los enunciados discursivos de

“socialismo” y “descolonización”, que en esencia parece ser antagónicos?

Sí, siempre a condición de asumir que el socialismo del MÁS no es ni pudo ser

el socialismo europeo decimonónico en incluso el latinoamericano del siglo XIX;salvo el de José Carlos Mariátegui. El MAS lee y desecha al socialismo en claveeuropea, como una manifestación critica del industrialismo, pero que a su vezcreía en la industrialización y el progreso bajo nuevas formulas. Como decíaLenín: “Soviet más electrificación”. El marxismo es criticado por ser una filosofíade la historia, etapista, lineal e universalista y el socialismo “realmente existente”por centralizado y burocrático. Reproducirlos en Bolivia, a sus ojos, produciríafracturas con el proyecto de descolonización y de retorno simbólico a losorígenes milenarios. En la visión más extrema en el MAS, que sugestivamente no

siempre está apoyada ni acompañada por políticas públicas gubernamentales,implica descartar el industrialismo en pos del retorno a una relación armoniosacon la naturaleza, que nunca debió extraviarse. Para la izquierda de los sesentay setenta de la centuria pasada, en cambio, la naturaleza, vista como fuente delvalor de uso, debía ser dominada y sometida para permitir un socialismo de laabundancia material y de valores de cambio. Los soviéticos –y ahora los chinos–



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perpetraron varios crímenes contra el medio ambiente en base a estaperspectiva.

- ¿Qué te sugiere la idea de “socialismo democrático” como vía para llegar al

socialismo a diferencia de la vía armada que caracterizó a la izquierda de los

sesenta y setenta?

En los “años de plomo” del siglo XX, ya lo puntualicé, no toda la izquierda creíaque la toma del poder se haría de forma violenta, aunque la lucha armada, o lasupresión de la política a favor de las armas, solo era proclamada por el ELN2.Estas diferencias no eran óbice para que siguiendo a Marx y Lenin, se asumieraque la democracia calificada de “formal” o “burguesa” se considera un fetiche oun engaño. La igualdad de los ciudadanos: un hombre (o una mujer) igual a unvoto nunca garantizaría el triunfo popular y obrero y si este, excepcionalmente seprodujera, los grupos de poder y el imperio norteamericano se encargarían de

derrocar por la fuerza a un gobierno de izquierda, como ocurrió en el Chile deSalvador Allende.

Es interesante constatar que el vicepresidente García Linera proviene de unaorganización armada y que el presidente Morales, si hemos de creer a FilemónEscobar, tuvo una tentación similar, que pronto descartó para meterse en laslides electorales. El socialismo democrático, aunque es crítico a la democraciaparlamentaria revaloriza las formas electorales y parlamentarias como medio deacceso al gobierno y de gestión a la par que pregona el debate basista comofuente de poder (“mandar obedeciendo”), aunque en la práctica se lo usa poco.

Su hegemonía, en este punto, parece más leninista que gramsciana. Tambiénestá presente la idea de tomar el poder poco a poco, una estrategia que haceaños hubiera sido descartada por “reformista”, de cara a la orden entoncesimperante de “Tomar el cielo por asalto”. Creo, empero, que el MAS no descartala fuerza y su monopolio para mantenerse en el poder. Recordemos el “punto debifurcación” del que habló García Linera durante el momento más álgido de laconfrontación de la “Media Luna” y la Asamblea Constituyente en el 2007 y el2008.

Su proyecto económico se asemeja a la izquierda marxista o al nacionalismo.Pareciera que el MAS está recorriendo caminos ya trillados.

En efecto, el MAS es estatista, y trata de convertir a las empresas estatales y lainversión pública en el núcleo duro de la economía, un capitalismo de Estado, tal

2 Ejercito de Liberación Nacional



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como ocurrió luego de 1952. Pero hay diferencias. En primer lugar está el eje deintervención estatal. Desde 1952 se pretendió crear desde el Estado un actorcapitalista centrado en el Oriente; ahora en cambio se privilegia, al menosdiscursivamente, a la pequeña, mediana producción y la actividad comunal,acorde a su visón de una economía diversa.

Por otra parte, la izquierda marxista, con el POR3 en un extremo, anunciaba laabolición de la propiedad privada de los medios de producción y la expulsióntotal del capital extranjero. El MAS, siguiendo la línea del nacionalismorevolucionario, apuesta en cambio por la socialización y redistribución delexcedente sin tocar necesariamente las formas de propiedad. Incluso es menosradical que el socialismo a la Marcelo Quiroga. Se puede comparar, para ilustrareste punto, la confiscación de la Gulf Oil en 1969 con la reciente “nacionalización”las petroleras. Quiroga Santa Cruz actuaba en un mundo altamente polarizadopropio de la Guerra Fría y de la ruptura con al imperialismo como pregonaban las

corrientes de la “Teoría de la Dependencia”. Al MAS en cambio, le toca navegaren la compleja maraña de la globalización donde las posturas anticapitalistashan perdido peso. Incluso gobiernos llamados socialistas como Cuba y Chinaadmiten y convocan a las inversiones extranjeras. Sumándose con realismo aesta corriente el MAS ha preferido, en la mayoría de los casos, renegociarcontratos o pagar por las empresas nacionalizadas, pero no desechar de planoel capital extranjero con la cual busca más bien una nueva relación de fuerza(“Queremos socios, no patrones”).

3 Partido Obrero Revolucionario



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Cuando los pututus suenan:¿La emergencia de la “izquierda indígena”en Bolivia?

Yuri F. Tórrez

“ A Sísifo ganarle la carreraSigo intentando, mientras un cangrejo,

Con una roca, en el espejo espera”

Joaquín Sabina

El intelectual y hoy vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, al momento de delinearlos rasgos distintivos de la actual estructura partidaria gobernante: el Movimiento AlSocialismo (MAS), la calificó como una “izquierda indígena”. En todo caso, estadenominación entraña en sí misma una “paradoja conceptual” que complejiza encasillarel momento de transformación social que está viviendo actualmente Bolivia. Veamos.

Si bien muchos autores coinciden en que el actual proceso se inscribe en aquelladenominación de “giro a la izquierda” asumida por varios gobiernos progresistas en

América Latina; se hace dificultoso utilizar aquellos parámetros canónicos (marxistas)que sirvieron para analizar a los partidos de izquierda de otrora. Más aún en el caso

específico boliviano, donde la presencia de un indígena en la presidencia y el discurso entorno a la “descolonización” complejizan mucho más el análisis a sabiendas que elproceso de descolonización, dicho sea al paso, tiene como uno de sus fines lainterpelación a la “modernidad” y como todos sabemos “el marxismo” es una narrativade la modernidad.

Aquí radica uno de los nudos gordianos de la denominación “izquierda indígena”. Eldiscurso de la descolonización es una de las aristas ideológicas que enarbola el MAS,también es cierto que este discurso tiene que coexistir con otras interpelaciones

discursivas en las mismas entrañas del propio partido gobernante, como aquel de la“revolución” o el “socialismo comunitario” que ciertamente genera una “confusiónideológica” que no permite entrever claramente los “horizontes ideológicos” que marcanel rumbo del partido gobernante en Bolivia, y, por lo tanto, el mismo proceso societal.

* Los pututus son sonidos de instrumentos de viento, tradicionalmente usados para llamar a los pueblos aymaras a larebelión.



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Además si asumimos los planteamientos de Michel Foucault que el “discurso se plasmatambién en la propia práctica discursiva”4 tenemos un camino tortuoso para caracterizarideológicamente al MAS. Por una parte, comulgan con el discurso del Estado Plurinacionalque proviene como fuente discursiva de las organizaciones campesinas e indígenas de Boliviaen su afán de descolonizar el Estado boliviano y trastocar aquellas condiciones de explotación

y exclusión social a las que fue sometido secularmente el sector indígena. Por otro lado,están sectores intelectuales de la izquierda de viejo cuño internalizados en el gobierno,muchos de ellos, vinculados ideológicamente a aquellas premisas rectoras que orientaron apartidos de izquierda que en sus afanes teleológicos apuntan (o apuestan) por el “paraísocomunista”.

En este péndulo ideológico es donde se desplazan los principales planteamientos discursivosdel MAS pues en la práctica asumen decisiones particularmente económicas que buscan la“estabilidad”, que para muchos analistas es sola una continuidad del modelo neoliberal perocon rostro “social”. Ahora bien, es necesario analizar dónde radica el éxito electoral del MAS

en los últimos años, para desentrañar en su propia naturaleza los “sentidos discusivos” quesirven de convocatoria no solo electoral; sino también política.

El proceso boliviano es muy similar al de otros procesos que se inscribe en esta dinámica delgiro a la izquierda en América Latina, ya que esas causas “coyunturales” asociadas a lacorrupción o el desprestigio de los partidos tradicionales que en su momento fueron afinesal “modelo neoliberal” generaron las condiciones propicias para que el discurso deinterpelación al neoliberalismo como a la propia democracia representativa tenga unareceptividad en la población. En el caso boliviano, estos factores coyunturales también se

articularon en una sola matriz discursiva con aquellos factores que tienen larga data, queinclusive se remontan a la misma colonia. La elección de Evo Morales como primerpresidente de Bolivia de origen indígena es consecuencia de estas condiciones estructurales,de allí el papel decisivo que jugaron los movimientos sociales, particularmente indígenas quedesde el año 2000 desplegando acciones políticas, ideológicas y epistémicas para revertir losrasgos constitutivos de un Estado culturalmente excluyente, políticamente elitista yeconómicamente inequitativo, profundizándose en los últimos 15 años por la implementacióndel modelo neoliberal, prototipo del proyecto moderno/occidental que recurrentementediscurrió en el horizonte colonial de la historia republicana de Bolivia. La acción socio/políticade los movimientos indígenas en Bolivia supuso, a la larga, una cruzada discursiva y política

dirigida a desconstruir el discurso hegemónico neoliberal que responde en sus fundamentosbásicos al colonialismo interno5: En lo que sigue intentaremos comprender la dimensión dela acción de los movimientos indígenas en la reciente historia política boliviana y ver si laetiqueta de “izquierda indígena” es oportuna para catalogar al actual proceso políticoboliviano.

4 Michel Foucault. El orden del discurso. Tusquets. Barcelona.1980: 43.5 Rivera, Silvia. Luchas campesinas contemporáneas en Bolivia: El movimiento “katarista”, 1970-1980”. En: Bolivia Hoy.México: Siglo XXI. 1987.



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Movimiento indígena en Bolivia y su efecto político

A pesar que el pensamiento indianista e indigenista data de la década de los añossesenta o setenta6; en los últimos años la cuestión de lo indígena, particularmenteaymara, se ha vigorizado localizándose en el debate político e ideológico. La ideología

aymara tiene su principal sustento discursivo en las condiciones de explotación secularde las masas indígenas/campesinas y en el fracaso de las políticas desarrollistas delEstado boliviano ancladas en lo que Aníbal Quijano denomina como la “colonialidad delpoder”7. En este sentido, el fundamento básico de la movilización indígena anida en laancestralidad andina, la misma está articulada, por ejemplo, a un concepto territorial entorno a la red organizativa de ayllu, para dar cuenta de su unidad cultural e histórica8.

Asimismo, la fuerza del movimiento indígena adquirida en la última época se tejediscursivamente en torno a la denominada “Nación Aymara” que tiene como su referente

más inmediato el bloqueo de caminos de octubre del 2000. En tal ocasión el líder aymaraFelipe Quispe que a través de su alusión a las “dos bolivias” condensaba el sustentoideológico del movimiento indígena. Las recientes revueltas campesinas en los Andesbolivianos son la expresión de la emergencia de un proyecto autonomista aymara quesupone, entre otras cosas, la redefinición misma del Estado-nación9. El tema de lasautonomías indígenas si bien no es reciente, se revela en los movimientos de protesta eneste último lustro que fueron protagonizados por los indígenas aymaras organizadosespecialmente por la Confederación Sindical Única de Trabajadores de Campesinos deBolivia (CSUTCB) en septiembre del año 2000 y en julio del 2001 con bloqueos decaminos y marchas masivas de campesinos e indígenas hacia la ciudad de La Paz. No

es casualidad que en este contexto Felipe Quispe afirme categóricamente: “No queremosrefundar el país, sino la reconstitución del Qullasuyo, la nación aymara”.

La emergencia indígena se la tiene que comprender a partir de la crisis del Estado-Nación, que en el caso boliviano, implicó una desarticulación de aquel dispositivo culturale ideológico como consecuencia de las insuficiencias de los procesos de modernizacióny, a su vez, como la descontrucción de la “comunidad imaginada” constituida por larevolución de 1952, cuyo núcleo duro era la integración política, social y cultural dedistintos sectores sociales en torno al Estado-Nación. O como diría Javier Sanjinés (2005)

el “espejismo del mestizaje”.

6 Op.cit .7 Quijano, Aníbal. “Colonialidad y Modernidad”. En: Los Conquistados. Quito: Ed. Heraclio Bonilla, Libri Mundi y Tercer Mundo.1993.8 Platt, Tristan. Estado boliviano y ayllu boli viano. Lima: Instituto de Estudios peruanos.1982.9 Zalles, Alberto. “De la revuelta campesina a la autonomía política: la crisis boliviana y la cuestión aymara”. En: Revista

Tinkasos Nº 13. La Paz: PIEB. 2002: 42.



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La pérdida de eficacia hegemónica del discurso del nacionalismo revolucionario produjoen el imaginario colectivo el menoscabo del sentido de lo “nacional”, visualizando, deesta manera, la emergencia de nuevas identidades culturales en Bolivia, particularmente,indígenas. Frente a esta reconfiguración pluridentitaria, la réplica estatal intentóvanamente recomponer el imaginario de la nación boliviana con una nueva narrativa

política y cultural, el multiculturalismo10

, dispositivo con el cual se intentó legitimar elnuevo orden cultural.

Las demandas en torno a la autonomía cuestionando la organización político-administrativa del país son una consecuencia socio/política de la pérdida identitarianacionalista. Particularmente desde las “naciones originarias/indígenas” argumentandosu carácter monoculturalista, y en consecuencia, colonialista, que se constituyó en laprincipal interpelación discursiva esgrimida para las reivindicaciones autonomistas decuño étnico/culturalista. En rigor, el tema de fondo es que Bolivia no ha logrado concluircon éxito la tarea de construir la nación (que fue asumida como tarea del Estado del 52),

por tanto reaparecen en el escenario político las “nacionalidades originarias/indígenas”que no se sienten representados por el actual Estado boliviano.

Ahora bien, la emergencia y desarrollo de posicionamientos críticos identitarios de baseétnica, ha cuestionado profundamente los fundamentos políticos, culturales y jurídicos delEstado y ha propuesto nuevas formas de construir e imaginar la nación. Estos procesoshan posibilitado el desarrollo de nuevas formas de acción colectiva (movimientos sociales)de corte étnico/culturalista. Asimismo, esta irrupción de identidades se da con diversosefectos en Bolivia. Por una parte, ha incidido en la erosión de una visión homogénea de la

nación, contribuyendo a la fragmentación de identidades culturales; y, por otra parte, ellase encuentra asociada con procesos de “reconversión” o diferencia colonial11 que hanpuesto en cuestión las tradicionales clasificaciones y prácticas culturales en el país. En estesentido, el planteamiento étnico/culturalista estriba en la reconstitución de autonomíasoriginarias que se fue propalando ideológicamente en los últimos tiempos para reconstruiruna “comunidad imaginaria” en este caso, la utopía de la autonomía aymara.

A propósito de la importancia de la presencia indígena/aymara en los conflictos deoctubre del año 200212 y la interpelación discursiva presente en el mismo, Álvaro GarcíaLinera, señala que:

10 Esta visión multiculturalista hace alusión a como las políticas neoliberales generados desde los centros del capitalismomutinacional van retomando el discurso estatal de la diversidad cultural para que los mismos sean incorporados en laspolíticas públicas del Tercer Mundo y de América Latina en particular (Zizek, 1998).11Mignolo, Walter. “Diferencia colonial y razón post occidental ”. En: Castro-Gómez, Santiago. Reestructuración de lasciencias sociales en América Latina. Bogotá: Centro Editorial Javeriano. 2000: 56.12 Con la revuelta campesina de septiembre del 2000 se inició un ciclo de protestas que recurriendo al bloqueo de caminoscomo su principal táctica para construir una lógica discursiva con el objetivo de interpelar al Estado, muchas de las marchasmisivas indígenas/campesinas se dirigieron hacia la ciudad de La Paz.



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Estudios & Ensayos

“El discurso indígena ha permitido otorgar el justificativo histórico y una razónde compromiso activo con la recuperación de los hidrocarburos a manos dela sociedad. A diferencia de lo que sucedía en los años 50 ó 60 cuando laconciencia sobre el control de los recursos naturales se asentaba en un tipo dediscurso ‘nacionalista revolucionario’ de corte movimientista, el actual

nacionalismo tiene bases indígenas […], es el de las comunidades, de losgremios, de los Kataris, de los aymaras, de los qheswas, que se han convertidoen la nueva matriz interpretativa y conductora de lo que los bolivianoshabremos entender por nación en las siguientes décadas”13 (2003: 8).

La matriz a la que aludía García Linera es la matriz descolonizadora que hoy marca lasacciones de los movimientos indígenas bolivianos. No debemos olvidar, que la matriz

colonizadora se funda en el horizonte cultural civilizadora de larga duración (Rivera, 2003),en este sentido, la matriz descolonizadora implicaría la interpelación de los principiosontológicos de esta visión homogénea de la violencia estructural de la colonialidad, para

pensar la realidad, especialmente de los países andinos, de manera distinta a la ópticailustrada y cosmopolita de la modernidad y de esta manera de pensar a los movimientossociales de otra manera.

En esta perspectiva, el accionar de “los movimientos sociales [especialmenteindígenas/aymaras] más recientes han dado la vuelta y puesto de cabeza, la imagen delmestizaje que […] viene desde los principios del siglo XX, y que, ciertamente, sostiene eldiscurso oficial de la Revolución del 52’” (Sanjinés, 2005: 24). Vale decir, la interpelaciónde los movimientos indígenas aymaras tiene su punto de quiebre con el concepto de

mestizaje ya que éste como constructo epistemológico no ha logrado visualizar aquelladiferencia colonial , es decir, la colonialidad del poder que es el eje que organizó y organizala diferencia colonial. En este sentido, apunta a la desconstrucción epistemológica, porparte de los movimientos indígenas, cuestionando los ethos o epístemes heredados dela colonia14 (Mignolo, 2000).

En suma, por las consideraciones apuntadas es muy difícil catalogar al proyecto políticoque abandera el MAS como una “izquierda indígena” ya que esta denominación tieneconnotaciones eurocéntricas, contrariamente el ala indígena del MAS interpela, a travésdel discurso de descolonización.

13 Álvaro García Linera Rebelión Aymara” En: Juguete Rabioso Nº 89. La Paz: 2003: 8-9.14 Op. Cit.



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La descolonización en la“nueva izquierda”

Gabriela Canedo V.

Desde la asunción de Evo Morales a la presidencia en el año 2006 el términodescolonización se ha convertido en uno de los ejes centrales del discurso político. Nocabe duda que fueron Evo Morales y David Choquehuanca quienes impulsaron dichodiscurso.

El cuestionamiento al colonialismo especialmente por la intelectualidad india data de

décadas atrás. Dicha intelectualidad, de manera retrospectiva analizaba que civilizar alindio fue la doctrina esgrimida por la colonia, con el fin de llevar a cabo la explotación dela riqueza. La república vio en el indio un problema y obstáculo para su realización. EnBolivia el etnocidio que se llevó a cabo por medio de la educación del indio para hacerloparte de la nación tenía como objetivo incluirlo, asimilarlo lo que devenía en borrar sutradición, su historia, aquella memoria colectiva, su identidad, su lengua, en definitivavarios rasgos. La revolución de 1952 fue el hito histórico que se propuso dichaasimilación por medio de diversas reformas y políticas aplicadas. Incluso se cambiaronlos términos y categorías, al indio se lo volvió campesino, en definitiva esto tambiénsuponía el cambio de la categoría nación por el de clase15.

Una de las transformaciones más trascendentales se dio con la escolarización y el usoobligado del idioma español, los indígenas se convertirían en obreros, es decir seproletarizarían y por ende se “civilizarían”. Este proyecto fue traducido en la fundación dela nación boliviana sintetizada en el mestizaje.

Para entender la descolonización se debe entender qué es el colonialismo internoalrededor del cual se ha escrito y debatido.

Colonialismo interno y colonialismo del poder

Para el tratamiento y entendimiento de la descolonización y sus efectos en nuestrasociedad es necesario tratar brevemente la discusión sobre el colonialismo interno y/odel poder. Asimismo se podrá desentrañar las prácticas que el gobierno está tomandoal respecto.

15 Para profundizar ver Rivera Cusicanqui, Silvia “La raíz: Colonizadores y colonizados.”. En: Xavier Albó y Raúl Barrios(Coord.) Violencias encubiertas en Bolivia. La Paz: Cipca – Aruwiyiri.1993.



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Retomaremos brevemente a tres de los exponentes de la discusión sobre esta temática:Silvia Rivera, Anibal Quijano y Pablo González Casanova.

La primera sostiene que el tema de las identidades culturales en el país es complejo deentenderlo por el abigarramiento de Bolivia. En tal sentido es difícil la articulación que sepueda dar entre los diversos horizontes del pasado colonial, liberal y populista. A esto sesuma el polifacético fenómeno del mestizaje y la articulación entre la dimensión étnica yclasista o ciudadana. Es así que en el país los diversos horizontes cultural-civilizatorioluchan por expresarse y que de hecho se expresan. A esto se suma el aporte de laemergencia de movimientos y movilizaciones de contenido étnico y anticolonial. Si bienla autora resalta las movilizaciones de la década de los noventa y la emergencia kataristade los años 70 (Rivera, 1993) nosotros, a la luz de los movimientos de la última décadapodríamos resaltar la guerra del agua, la del gas, la marcha de los pueblos del orientedemandando Asamblea Constituyente, la misma Asamblea Constituyente, que de unau otra manera tenían un discurso anticolonial y la necesidad de refundación del país.

Para Rivera es vital entonces comprender cómo la interacción colonial deviene en unhecho marcante y constitutivo de las identidades culturales de todos los sectoressociales, pues las contradicciones diacrónicas implicadas en la articulación de loshorizontes a los que ella denomina colonial, liberal y populista influyen en la constituciónde las identidades. Asimismo el mestizaje de acuerdo al análisis que realiza la autoraconduce a un reforzamiento de la estructura de castas, mediante mecanismos desegregación, exclusión y autoexclusión (Rivera, 1993)

Es así que el colonialismo interno que permea la sociedad boliviana es un conjunto de

contradicciones diacrónicas de diversa profundidad, que emergen a la superficie de lacontemporaneidad y cruzan las esferas coetáneas de los modos de producciones lossistemas políticos estatales y las ideologías ancladas en la homogeneidad cultural. Lo quese entiende que hoy en día opera subyacentemente un modo de dominación sustentadoen un horizonte colonial de larga duración al cual se han articulado los ciclos másrecientes del liberalismo y el populismo. Estos horizontes han refuncionalizado lasestructuras coloniales de larga duración, convirtiéndolas en modalidades de colonialismointerno que son cruciales a la hora de explicar la estratificación interna de la sociedadboliviana, los mecanismos de exclusión, segregación que caracterizan a la estructura

política, estatal del país y que están en la base de las formas de violencia estructural másprofundas y latentes. (Rivera, 1993: 27-31)

Por su parte Quijano habla de la colonialidad del poder, que se basa en la imposición dela idea de raza como instrumento de dominación y que se ha convertido en un factorlimitante de estos procesos de construcción del Estado-nación basados en el modelo



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eurocéntrico (2003: 238)16. Para este autor, La noción de colonialidad del poder fue eltérmino para caracterizar un patrón de dominación global propio del sistema-mundomoderno/capitalista originado con el colonialismo europeo a principios del siglo XVI(Quintero, 2010)17. Podría decirse, en tal sentido, que el poder es una relación social dedominación, explotación y conflicto por el control de cada uno de los ámbitos de la

experiencia social humana (Quijano 2001. En: Quintero 2010: 4).Por su parte Pablo González Casanova, define el colonialismo para explicar lascondiciones sobre las cuales se asienta el dominio y la explotación en el Méxicocontemporáneo donde la población indígena sufre la dominación de la sociedad nacionalblanco-mestiza. Lo relaciona con las formas que adoptan la explotación de clases y lasestructuras de poder, donde vive la población indígena. Para el autor, el problemaindígena es un problema de colonialismo interno18.

En los tres casos notamos que el colonialismo hace referencia a la existencia de

elementos fundamentales que determinan la clasificación socio-cultural y que influyenen el desarrollo propio de un país y a raíz de los cuales se dan contradicciones pues lasuperposición de horizontes de vida, hace que estos estén en permanente lucha. Ocomo señala De la Cadena, la colonialidad es una de las características que tiene susorígenes en los regímenes coloniales ibéricos de las Américas que perdura hasta laactualidad, articulando regímenes nacionales e incluso democracias. “Legitimada porcreencias en la (auto) declarada superioridad, la colonialidad consiste en el derecho y elpoder asignado por un grupo social privilegiado de imponer su imagen sobre aquellosque considera inferiores. En América Latina la colonialidad del poder fue posibilitada porlas creencias ibéricas en la superioridad absoluta de la cristiandad frente a las formas

indígenas de ser” (De la Cadena, 2006: 79)19.

El debate sobre descolonización

Cuando nos referimos al pensamiento descolonizador, el mismo se encuadra en la discusiónde la modernidad/colonialidad versus de-colonialidad. El mismo estaría ligado al tema de laidentidad y generación de pensamiento propio, pues este pensamiento esta intrínsecamenterelacionado a la formación de sujetos, […] en el sentido que Aníbal Quijano señala: ladescolonización debe ser una forma radical de distribución del poder (Yapu, 2006)20.

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16 Quijano, Aníbal. “Colonialidad del poder, eurocentrismo y América Latina”. En: Edgardo Lander (Comp.) La colonialidad del saber. Eurocentrismo y ciencias sociales. Perspectivas latinoamericanas. Buenos Aires: CLACSO. 2003.17 Quintero, Pablo “20 Notas sobre la teoría de la colonialidad del poder y la estructuración de la sociedad en América Latina”.En: Papeles de Trabajo Nº19-Junio: Centro de Estudios Interdisciplinarios en Etnolingüística y Antropología Socio-Cultural.2010.18 Para ampliar la lectura, ver González Casanova. “Colonialismo interno. Una redefinición”. En: Atilio Barón, J. Amadeoy Sabrina González (Comp.). La teoría marxista hoy. Problemas y perspectivas. Buenos Aires: CLACSO. 2006.19 De la Cadena, Marisol. ¿Son los mestizos híbridos? Las políticas conceptuales de las identidades andinas”. UniversitasHumanística, 061. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana. 2006:51-84.20 Yapu, Mario (Comp.) Modernidad y pensamiento descolonizador. Memoria del seminario internacional, La Paz: U-PIEB/IFEA. 2006.



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Algunos autores como Walsh, hablan acerca de la de-colonialidad que implica algo más

que “de-colonización” algo más que dejar de ser colonizado. Pues apuntaría a la noexistencia de inferioridad, las practicas estructurales e institucionales de racialización,subalternización y genero-ización que siguen posicionado algunos sujetos condeterminadas características (blancos, criollos y mestizos masculinos y letrados) y sus

conocimientos por encima de otros (indígenas, negros y femeninos). El propósitocontinúa Walsh no es la incorporación o la superación, tampoco simplemente laresistencia, sino la reconstrucción radical de seres, del poder y saberes, es decir lacreación de condiciones radicalmente diferentes de existencia, conocimiento y poderque podrían contribuir a la fabricación de sociedades justas (Walsh, 2006: 170)21.

Por su parte Silvia Rivera Cusicanqui, en su libro “oprimidos pero no vencidos” argumentaque el levantamiento katarista-indianista de 1979 planteó a Bolivia la necesidad de una“radical y profunda descolonización” en sus estructuras políticas, económicas y sobretodo mentales, es decir en sus modos de concebir el mundo (2006: 4)22.

Rivera sostiene que existen tres momentos históricos de la dominación en nuestro país(horizonte colonial, liberal, populista) que trastocaron ordenamientos legales yconstitucionales, pero a la vez reciclaron viejas prácticas de exclusión y discriminación.Se refiere a que desde el siglo XIX, las reformas liberales y modernizadoras en Boliviahabían dado lugar a una inclusión condicionada a una ciudadanía “de segunda”. Larecolonización, como llama la autora permitió reproducir modos de dominación señorialesy rentistas, que se asentaban en privilegios adscriptivos, otorgados por el centro delpoder colonial. En la actualidad la retórica de la igualdad y la ciudadanía se convierte enuna caricatura que encubre privilegios políticos y culturales tácitos, nociones de sentido

común que hacen tolerable la incongruencia y permiten reproducir las estructurascoloniales de opresión (Ibid.).

Asimismo Rivera afirma que la teoría de la descolonización debe ir de la mano con lapráctica descolonizadora. El discurso del multiculturalismo y el de la hibridez son lecturasesencialistas e historicistas de la cuestión indígena que no tocan los temas de fondo dela descolonización, antes bien encubren y renuevan prácticas efectivas de colonizacióny subalternización23 (2006:7). De esta manera su postura estriba en que se debe dar enBolivia una reforma cultural profunda en nuestra sociedad que implique la

21 Walsh, Catherine “De-colonialidad e interculturalidad: reflexiones (des) de proyectos político-epistémico” .En: Mario Yapu(comp) Modernidad y pensamiento descolonizador. Memoria del seminario internacional, La Paz: U-PIEB/IFEA. 2006.22 Rivera, Silvia “Chhxinakax utxiwa. Una reflexión sobre prácticas y discursos descolonizadores”. En: Mario Yapu (comp)Modernidad y pensamiento descolonizador. Memoria del seminario internacional. La Paz: U-PIEB/IFEA. 2006.23 Rivera señala que la función del discurso multicultural es la de suplantar a las poblaciones indígenas como sujetos dela historia, convertir sus luchas y demandas en ingredientes de una reingeniería cultural y estatal capaz de someterlas a suvoluntad neutralizadora. Un “cambiar para que nada cambie” que otorgue reconocimiento retóricos y subordineclientelarmente a los indios en funciones puramente emblemáticas y simbólicas, una suerte de “pongueaje cultural” alservicio del espectáculo multicultural del estado y de los médicos de comunicación masiva (1993: 7).



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descolonización de nuestros gestos, de nuestros actos y de la lengua con quenombramos el mundo. El retomar el bilingüismo como una práctica descolonizadorapermitirá crear un “nosotros” de interlocutores/as y productores/as de conocimiento,que puede posteriormente dialogar, de igual a igual, con otros focos de pensamiento ycorrientes en la academia de nuestra región y del mundo (2006: 11).

El tratamiento de la antigua izquierda sobre el temaindígena

Un documento de tesis –después de haber realizado una revisión exhaustiva de lasposiciones de la izquierda de la generación del Chaco respecto al problema del indio-llega a la conclusión de que dicha izquierda no pudo aclarar el problema del indio a pesarde contar con la voluntad de hacerlo. La autora señala que se ha visto que ante la crisisemanada desde el Estado a partir de la derrota del Chaco, la izquierda no solamentesurge como movimiento contestatario organizado a base de amplios conjuntos de

grupos homogéneos inconformes con el sistema tradicional, sino que se apropia de laresponsabilidad de responder a los problemas por los que la sociedad estabaatravesando y que no hallaban solución en el modelo político tradicional. Y con esto nosolamente se ha ocupado de construir nuevos enfoques de la realidad económica delpaís, sino que se propuso, quizás como la tarea más difícil, la incorporación del indio ala vida nacional (Arancibia, 2010).

Lo que se resalta es el surgimiento de la conciencia generalizada de la existencia de lapoblación indígena como aplastante mayoría, hasta entonces relegada a su labor agrícolay que la misma nace por iniciativa de la población indígena de conformar nuevos sistemasde lucha mediante la organización sindical, inspirada en el sindicato obrero pero tambiénen las formas ancestrales de organización. Si bien, como se ha dicho, la izquierda es laexpresión de la confusión conceptual generada por la actividad ideológica, también elindio se ve sometido a una construcción ideológica que cuestiona el sistema designificaciones bajo el cual se había visto sometido hasta ese entonces. La guerra nosolamente significa un encuentro de ciudadanos mestizos y blancos con el indio, sinosobre todo, del indio con sus opresores. (Idem)24.

Después de la Revolución Nacional del ’52, el MNR decía haber superado el “problema

del indio” otorgándole la propiedad individual de sus tierras y reconociendo su condiciónde ciudadano. En la década de los sesenta lo indígena subsumido en lo campesino y pormedio del pacto “militar-campesino”, secundando al gobierno de turno –del Gral.Barrientos- con la aceptación de acciones clientelistas. En la década de los setenta, lamasacre de Tolata y Epizana perpetrada por la dictadura del Gral. Banzer, fue

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24 Arancibia, Larissa. El “problema del indio” en el discurso de los partidos políticos de izquierda de la generación del chacoen Bolivia (1935-1952) Tesis para optar la licenciatura en Filosofía y Letras, Instituto Superior de Filosofía y HumanidadesLuis Espinal. Cochabamba. 2010.



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cuestionada por los kataristas quienes “al denunciar la alianza entre la víctima y elverdugo, los kataristas lograron penetrar y desmoronar toda la estructura del sindicalismopara-estatal oficialista, formulando un cuestionamiento que llegó a tener ampliasresonancias nacionales” (Rivera, 1993: 47).

Rivera continúa y destaca la influencia de los kataristas en el proceso organizativos decentros culturales y movimientos urbanos además de organizaciones políticas. De estamanera “la presencia de aymaras urbanos escolarizados y con acceso a la educaciónsuperior resulto ser un componente decisivo en la formación del perfil político de estasdiversas formas organizativas” (1993: 48) refiriéndose al Movimiento Revolucionario

Tupaq Katari y Movimiento Indio Tupaq Katari. Lo que queremos enfatizar es cómo sedio el tratamiento de la cuestión indígena en las décadas pos Revolución Nacional, enlas que las corrientes kataristas-indianistas tuvieron mucha influencia abrevando depensadores indianistas como Fausto Reinaga.

De esta manera constatamos que el tratamiento de la cuestión indígena ha sidopermanente en los últimos sesenta años. Es así que en un contexto de eflorescencia delas identidades, abordaremos las prácticas y discursos de descolonización que estáníntimamente relacionados al cuestionamiento de la presencia de instituciones, valores,creencias, repertorios culturales foráneos.

Prácticas y discursos de descolonización en el actualgobierno

Entre los discursos de los mandatarios, y funcionarios del gobierno, se encuentran la del

vicepresidente de la República, Álvaro García Linera, quien señaló que “gracias a laimplantación del modelo descolonizador en Bolivia muchos aspectos van cambiando enfavor de la igualdad de oportunidades para todos. Por ejemplo, García Linera recordó queantes del 2006, solo miembros de redes familiares, que por largos años habían ocupadoel poder, podían acceder a cargos y espacios dentro del Estado, como una suerte deherencia.

Mencionó que, en anteriores gobiernos, para que una persona asuma un Ministerio debíatener un aval familiar o una visa de la embajada de Estados Unidos. “¿Qué está pasando

ahora?, fíjense en los apellidos, en el origen social de las asambleas departamentales delas nueve regiones, en la composición de la Asamblea Plurinacional; nunca en Boliviahabíamos asistido a tanta presencia de sectores populares e indígenas que directamentese autopresentan en esas instancias o que lo hacen a través de mediadores”, ejemplificó.

Además añadió que; “ya no se necesita de esas élites familiares para acceder a espaciosen el Estado sino se requiere el aval de algún gremio, sindicato u organización social,campesina o indígena para que una persona ingrese a algún ministerio. Por ello, la



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descolonización se refleja en los “hechos, más allá de los libros. Eso es descolonizar”,aseveró25.

En ocasión de la promulgación de la ley de lucha contra el racismo y toda forma dediscriminación, el primer mandatario señaló que, la discriminación, la desigualdad y ladescolonización es un camino sin retorno que ha emprendido Bolivia en el marco delproceso de profundas transformaciones estructurales. Dijo que uno de esos objetivos esprecisamente erradicar el racismo y la discriminación que sometió a los pueblos indígenaspor cuestiones étnicas, económicas, sociales, culturales y de otra índole que impedíanla marcha de un Estado en el que prime la igualdad y la equidad para desarrollarse. Seremontó a 1492 como hito que marca la vivencia del racismo: “proviene desde el 12 deoctubre de 1492, fueron 500 años en los que Bolivia ha vivido con su población sometidaa la discriminación”. Morales aseveró que de los 185 años desde su fundación, “Boliviaha vivido 184 años de vida republicana y colonialista, mientras que en apenas un año deGobierno se pusieron en marcha Leyes contra ese mal para establecer la igualdad entre

todos”26

De esta manera, nos percatamos que en los discursos, la igualdad para todos a travésde medidas anticolonizadoras, es uno de los objetivos por lograrse. Asimismo existe uncomún denominador en las lecturas que consiste en la postergación de determinadosgrupos socioculturales que por su origen étnico terminaron en la marginación. Es así quelas distintas acciones del gobierno como la promulgación de leyes y decretos –que tienencomo eje la descolonización- se aplican aunque exista la resistencia y cuestionamientode determinados sectores, como sucedió con la ley de la Lucha Contra el Racismo y

Toda Forma de Discriminación.

La Whipala: símbolo nacional

Entre las muestras y prácticas de descolonización llevadas a cabo por el actual gobierno,la Asamblea Constituyente fue un hito de refundación del país y de descolonización deacuerdo a la visión del gobierno27. Asimismo la incorporación de determinadas materiasen la currícula de los institutos de enseñanza superior que se encuentran relacionadas alas culturas originarias indígenas, la utilización de la Wiphala en las instituciones públicasy en los uniformes castrenses, desde el punto de vista de algunos críticos, estasincorporaciones serían meramente “adornos folcklóricos funcionales al multiculturalismoneoliberal”28. Asimismo entre las prácticas descolonizadoras –de acuerdo a lafundamentación del gobierno- se ha promulgado la Ley Avelino Siñani y la Ley Contra el

25 En: (http://www.cambio.bo/noticia.php?fecha=2011-02-18&idn=39156).26 En: http://ukhamawa.wordpress.com/2010/10/25/evo-morales-lucha-contra-descolonizacion-es-camino-sin-retorno-nadie-parara-proceso-de-cambio/ 27 En: (http://www.rcci.net/globalizacion/2010/fg1033.htm).28 Especialmente la crítica fue hecha por José Luis Saavedra en publicaciones del periódico Pukara. En: (Emilio Hurtadoen http://descolonizacion.blogspot.com/)



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Racismo y Todo Forma de Discriminación que podrían constituirse en avances delproceso de descolonización, por ejemplo respecto a la wiphala se dice “la incorporaciónde símbolos como la Wiphala como emblema patrio, tienen un fuerte contenidodescolonizador. La Wiphala, siempre fue un emblema de la lucha de los pueblosindígenas, principalmente aymaras y quechuas, significa inclusión e igualdad. Con este

emblema marcharon nuestros pueblos indígenas reivindicando sus demandas socialesy políticas, este emblema fue pisoteado y quemado muchas veces por aquellos quedefendían el Estado colonial”29. De acuerdo a algunas opiniones, la “Wiphala no flameaen los edificios de las instituciones públicas o está en el uniforme de los policías y militarespor imposición unilateral de un gobierno, sino como resultado de un procesodescolonizador desde la sociedad, es el resultado de los logros populares como el restodel Estado plurinacional con todo lo que hoy es éste”. Sin embargo cabe matizar que lautilización de la Wiphala tuvo sus opiniones disidentes de quienes no estaban de acuerdoporque consideraban que no era un símbolo que representase a todos los bolivianos.

La eliminación de la conducta jerarquizante como muestrade descolonización

El Viceministerio de Descolonización proyecta eliminar la utilización de los gradosacadémicos para referirse a las personas en la administración pública. Es así quedesaparecerían apelativos como “licenciado”, “doctor” para referirse a las personas.

El Viceministro del área, Félix Cárdenas, señaló que los títulos obedecen a un contextode “comportamiento jerarquizante” que sugiere superioridad de unas personas sobre elresto, por lo cual el utilizarlos para identificar a determinados servidores públicos es unaacción que se eliminó de su Viceministerio, lo que ahora se quiere expandir al resto dela administración pública el próximo año.

“Se trata de generar conciencia de que ya no puede haber esos comportamientos jerarquizantes. El tema de ponerse hasta en los sellos doctor tal, como si el ser doctoro el ser licenciado le daría una condición diferente de superioridad frente al resto es lo quese debe cambiar”, dijo la autoridad. Cárdenas explicó que la descolonización, que esuno de los principios del Gobierno, significa erradicar este tipo de prácticas. (La Razón25 de diciembre 2010).

Descolonizar la educaciónSiguiendo con lo mencionado anteriormente la educación y su transformación es uno delos pilares del proceso de descolonización llevado adelante por el gobierno. Es así que

29 En: en (Emilio Hurtado en http://descolonizacion.blogspot.com/).



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como señala la prensa “En los próximos meses y años se pretende descolonizar laeducación, propugnando un nuevo modelo social, productivo y comunitario, incluyendouna educación liberadora, revolucionaria, antiimperialista, transformadora de lasestructuras económicas y sociales para contribuir al desarrollo integral de la sociedad enel marco del currículo base de los currículos regionalizados de acuerdo a su autonomía”30

Con la pretendida reingeniería educativa se pretende dejar de lado los más de 500 añosde sometimiento, explotación, racismo, humillación, proceso de emancipación, sinolvidarnos de la revolución del 10 de febrero de 1781 considerado como el primer gritolibertario de América, sublevación indígena anticolonial hasta el nacimiento de Bolivia yluego el ingreso del actual gobierno.

Continúa la declaración y señala “Como pueblo se pretende dejar el Estado Colonial,Republicano, Neoliberal, ahora estamos experimentando un nuevo Estado Pluricultural,cuyos resultados se verán en el futuro junto a la reforma educativa que propugna un

modelo social, comunitario y productivo” (ibíd.)Escuela de Gestión Pública para descolonizar el Estado

Otra de las acciones del gobierno fue la escuela para “descolonizar el Estado y laadministración pública”. Es así que el Gobierno creó, mediante el Decreto Supremo 212,la primera Escuela de Gestión Pública para “descolonizar” la administración de lasinstituciones del Estado. Esta nueva institución busca incorporar las prácticasinterculturales y comunitarias en la gerencia del aparato estatal.

La Escuela de Gestión Pública tiene como objetivo, según la norma que la originó,“contribuir a la construcción y consolidación de la nueva gestión del Estado, mediante laformación y capacitación de servidoras y servidores públicos”. El director general deNormas de Gestión Pública y ex constituyente del MAS, Raúl Prada, explicó que laEscuela es un cambio en la concepción de la administración estatal, pues descolonizasu naturaleza. La institución pretende consolidar el nuevo modelo de la gestión públicaplurinacional y comunitaria”. La malla curricular abarca: gestión comunitaria; decisionescolectivas; intra-interculturalidad y plurilingüismo; complementariedad y reciprocidad;equidad e igualdad; interrelación con la naturaleza; descolonización; transparencia;honestidad, y compromiso.

Asimismo de acuerdo a la CPE que dispone que todos los funcionarios deberán hablaral menos uno de los 36 idiomas. En la entidad se enseñará a hablar en otro idioma nativo(La Prensa 21 julio 2009).

30 En: http://www.lapatriaenlinea.com/?nota=64491 7/04/2011



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Descolonizar los lugares simbólicos

El primer mandatario una vez más mandó a descolonizar los lugares simbólicos.Cuestionando que aún existan escuelas, plazas, calles que llevan nombres de españolescolonizadores. Asimismo hizo un llamado a suplantar dichos nombres por los de líderes

indígenas que dieron su vida por el país.Es así que en esta práctica y discurso percibimos la intención de desmontar repertoriossimbólicos que constituyen subjetividades, lo que consideramos importante a niveldiscursivo y simbólico, ahora lo que resta es que el uso cotidiano que la gente tiene delos nombres de calles, plazas y escuelas –más desde el nivel práctico- se modifique paraaceptar los nuevos nombres, seguramente nos espera un largo proceso también paraello.

Consideraciones Finales

Hemos visto que en teoría, la descolonización debe implicar desmontar toda una cargay andamiaje de colonialismo que pesa sobre las instituciones pero sobre todo queimpregna las subjetividades de la gente. Si bien se están tomando medidas al respecto,-tanto así que hoy en día contamos con un Viceministerio de Descolonización- los efectosy resultados se verán en un mediano y largo plazo, al respecto destacamos dosaspectos. El primero la intención de iniciar el camino de la descolonización, partiendo delreconocimiento de que sufrimos un colonialismo interno que permea todos los ámbitosde la sociedad y de las relaciones sociales, políticas, culturales y económicas. Y segundo,que el reto se lo asuma desde el Estado, a través de la creación de un Viceministerio que

encabeza la tarea. Es así que la nueva izquierda de la que se habla tiene como uno delos pilares el proceso de descolonización.

Algunos reparos que lanzamos con la intención de generar debate son: si ladescolonización supone desarrollar políticas de potenciamiento cultural esta debe irdirigida al conjunto de la sociedad boliviana y no solo al sector indígena rural. De estemodo se debe inculcar valores y principios que fortalezcan la identidad local, étnica,nacional, evitando caer en la sola afirmación y vigorización de determinadas identidadesen detrimento de otras. El desafío es titánico pero la descolonización debe llevarnos aromper los modelos mentales alienados y socialmente impuestos que se caracterizanpor posturas y comportamientos individualistas, racistas que llevan a la intolerancia, a ladiscriminación y en consecuencia al marginamiento.

Por otro lado, consideramos que lo más difícil es cambiar la subjetividad de la gente,puesto que la sociedad se mueve a través de imaginarios y representaciones sociales,en este sentido la tarea de un abordaje cultural es vital para alcanzar la descolonización,



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sin embargo se debe entender que la cultura es una urdiembre de tejidos, de símbolos,signos y significados que se naturalizan y de los cuales perdemos la noción de que sonconstrucciones sociales que pueden ser transformadas y renovadas, en tal sentido, lalabor parte de sustituir dichos símbolos por otros que engloben a la diversidad quecompone Bolivia.

Por último, tener en cuenta que la promulgación de leyes y decretos en pos dedeterminados cumplimientos va acompañado y a la par de una concientización, de modoque se produzca una sensibilización en la sociedad para que ésta se mueva y cambie deactitud más por conciencia que por coerción y amenaza.

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Funciones discursivas

en el proceso

de cambios



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Efectos de fronteraen el discurso del MAS

Jorge Komadina Rimassa

Anacronismo y persistencia de un código político

Siempre me he preguntado por qué ha sobrevivido hasta nuestros días el código políticoizquierda/derecha. Se sabe que éste fue creado en Francia a fines del siglo XVIII, durantelos beaux jours de la Convención Nacional, para representar las diferencias entre lospartidarios del rey, situados en el lado derecho de la asamblea, y los partidarios del tercer

Estado, agrupados en el flanco izquierdo

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; se sabe, asimismo, que durante el siglo XIX y en buena parte del XX (el “siglo de las ideologías”, según Jean-Pierre Faye) este códigofue apropiado y efectivo para descifrar el mapa de las fuerzas políticas; pero, vistas suslimitaciones, ¿cómo se explica su contemporaneidad, su permanente reinvención?

La explicación convencional me parece limitada. Ella sostiene que las identidades deizquierda y derecha se despliegan en base a una suerte de hardcore ideológico definidocomo un conjunto estable –primordial- de ideas, actitudes y valores inconmensurablesy simétricamente opuestos. Así, mientras la derecha ha privilegiado una ideología basadaen la defensa de la tradición, la autoridad y la jerarquía, la izquierda ha reproducido las

ideas de cambio, emancipación e igualdad. Norberto Bobbio32 ha identificado elconcepto de igualdad como valor central y como utopía de la izquierda; la derecha, encambio, ha consagrado jerarquías sociales, intelectuales y étnicas: su núcleo esaristocrático. Estos “contenidos” se han completado y reforzado con otros rasgosideológicos: progreso/orden; elites/pueblo; racionalismo/irracionalismo, etc.33

Pero estas ideas y valores han cambiado con el tiempo. En su momento fundador yheroico, el socialismo revolucionario era por principio un movimiento internacionalistaopuesto al “nacional chauvinismo” de la burguesía. Después de la segunda guerramundial, el stalinismo consagró la tesis de “socialismo en un solo país” y los partidos de

31 Gauchet, Marcel “ La droite et la gauche“. En: Les Lieux de Mémoire (Pierre Nora, comp.), Gallimard: Paris.1992. En estetrabajo no sólo puede leerse la génesis histórica del esquema simbólico izquierda/derecha sino también una interpretaciónsobre su poderoso arraigo en la cultura política francesa. Según Marcel Gauchet, se trata, en el fondo, de un sustituto dela “inmemorial simbólica de la organicidad de la sociedad”, que permite representar artificialmente, es decir simbólicamente,el conflicto social.32 Bobbio, Norberto. Droite et Gauche. Essai sur une distinction politique. Éditions du Seuil: Paris. 1996.33 Komadina, Jorge “Ni izquierda ni derecha: todo lo contrario. Metáforas e instituciones de la política boliviana”. En: Atara la Rata, No, 12, año 2, Cochabamba. 2005.



izquierda, particularmente en los países coloniales y semi-coloniales, reivindicaron alEstado-nación frente al imperialismo, se volvieron nacionalistas. Valga otro ejemplo: ennuestro país, la izquierda nació a la sombra del movimiento obrero; en su discurso -compulsivamente obrerista- los campesinos e indígenas debían subordinarse a lahegemonía proletaria (ver la Tesis Política de la COB); hoy, esos actores secundarios son

una fuerza política protagónica, sus líderes ya no son dirigentes obreros o intelectualesde la clase media, son dirigentes campesinos.

El esquema binario se tornó complejo con la identificación de un centro porque añadióincontables puntos intermedios entre la derecha y la izquierda: extremo, ultra, centroizquierda, centro derecha. No obstante, la ampliación del espectro sólo reforzó la eficaciade la díada puesto que obligó a los actores políticos a tomar posiciones de proximidado distancia respecto a los polos.

No han faltado movimientos y partidos políticos que han cuestionamiento radicalmente

el código proponiendo otros polos antagónicos (patria vs. imperialismo), pero todos losintentos de negar la diferencia política (la heterogeneidad constitutiva de lo social diríaClaude Lefort) han propuesto visiones holistas u orgánicas de lo político y handenunciado el faccionalismo como una pérdida de vitalidad y unidad34.

Finalmente, otros pensadores de lo político han argumentado que las filtraciones yapropiaciones de tropos discursivos entre ambos polos y la emergencia de agendaspolíticas transversales (vg. la defensa del medio ambiente, la descentralización delEstado) ha vuelto obsoleta la alteridad radical entre izquierda y derecha35.

Pues bien, a pesar de esas mutaciones hay algo que no ha cambiado: el antagonismoentre ambos polos, la idea de frontera, la confrontación. Cierto, algunas ideas han sidoreformuladas, otras se han minimizado o han desaparecido por completo, pero laoposición entre ambas tradiciones políticas se ha mantenido: el esquema funciona entanto produzca fronteras entre los actores. En otras palabras, las identidades políticas seconstituyen siempre en función de un “otro constitutivo” y, por ende, los actores sedefinen en torno a un conflicto, buscan desestabilizar y devaluar la identidad deladversario/enemigo. Más aún: uno de los polos es dominante en un campo políticocuando demuestra poder para categorizar y estigmatizar a su adversario.

La persistencia de la díada izquierda/derecha (así como la emergencia de sistemas declasificación contrapuestos o complementarios) invita pues a pensar que su arraigo estávinculado con las estructuras simbólicas e imaginarias de lo político. En los regímenes

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34 Según Norberto Bobbio (idem), esta crítica ha desembocado en la necesidad de adjuntar un “tercero incluido”, definidopor la formula ni-ni. Este sería el caso del MNR que en su momento hegemónico recusó tanto a la izquierda marxista comoal liberalismo, tratando de situarse más allá de los extremos. Pero la existencia de ese centro imaginario no sólo no poneen cuestión la presencia de los mundos simbólicos de la derecha y la izquierda, en el fondo los afirma y legitima.35 Anthony Giddens, Beyond Left and Right, the Future of Radical Politics, Stanford Univ. Press: California. 2001.



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democráticos, estas parecen tener una doble inscripción: Primero, la representación delpoder como un “espacio vacío”, hostil a toda identidad fundamentalista; segundo, lafiguración del conflicto y del antagonismo entre los colectivos sociales es el fundamentoúltimo de lo político y se expresa en la construcción permanente de fronteras políticas:amigo/enemigo, nosotros/ellos36. Estas ideas no son poco bondadosas para analizar la

rica experiencia política del MAS-IPSP.Un movimiento político ascendente

Los argumentos expuestos son útiles para discutir la identidad política del MAS-IPSP. Ensu momento ascendente (2000-2006), el movimiento político ha trazado tres fronteraspolíticas37. La primera frontera separa al enemigo externo, el imperialismo norteamericanoo imperio, de la “Nación” y el pueblo boliviano. Esta oposición es visible en dos demandassociales: la defensa de la hoja de coca y la nacionalización de los hidrocarburos; enambos casos se defiende la soberanía de los bolivianos). Se reconocerá aquí el zócalo

discursivo del nacionalismo revolucionario, profundamente enraizado en el imaginariopolítico boliviano desde la guerra del Chaco. La oposición entre la nación y la antinacióntiene un efecto interpelativo importante porque permite dilatar el Nosotros hacia unconjunto de sectores sociales que no se reducen a la plebe, el grupo más empobrecidode la población, sino que incluyen a los campesinos, las clases medias e incluso asectores de empresarios “patriotas”: sólo la oligarquía, la “rosca”, queda en situación deexterioridad, justamente para permitir el antagonismo o la “ruptura populista”.

La segunda frontera trazada por el MAS separa a los pueblos indígenas y originarios dela república neocolonial de los k’aras. Aquí se ha introducido una visión étnica y cultural

de los procesos políticos que proviene tanto del discurso katarista como de lasorganizaciones indígenas de tierras bajas. Por lo tanto, se producido un desplazamientode las significaciones propias del nacionalismo revolucionario (constituidas en torno a lasequivalencia pueblo=nación/oligarquía=anti-nación) que consagra el clivaje entre elmundo indígena y el mundo no-indígena.

La tercera frontera corresponde a la distinción entre el neoliberalismo y sus operadores,los partidos políticos « sistémicos » o tradicionales, respecto de los movimientos socialesy en particular del MAS. A nuestro juicio, este es el punto axial, la clasificación dicotómicaprincipal, que aparece frecuentemente en el primer plano puesto que permitió articular

las demandas de distintos grupos sociales afectados por la política económica y por laexclusión política puesta en obra por el neoliberalismo.

36 Desde un enfoque posmarxista, Ernesto Laclau y Chantal Mouffe han cuestionado la interpretación de los elementosde una ideología “como tal” y han propuesto su consideración como “significantes flotantes” cuya estabilidad depende desu articulación hegemónica caracterizada a) por los efectos de frontera (amigo/enemigo) y b) por la articulación virtuosa dedemandas enarboladas por distintos grupos sociales. Ernesto Laclau y Chantal Mouffe (2004), Hegemonía y estrategiasocialista [1985], FCE: Buenos Aires.37 Komadina, Jorge y Geffroy, Céline. El poder del movimiento político. Estrategia, tramas organizativas e identidad del MASen Cochabamba (1999-2005). La Paz: CESU, DICYT-UMSS, Fundación PIEB. 2007.



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Ahora bien, como puede verse, el MAS-IPSP ha renovado los tradicionales ejessemánticos de la “vieja” izquierda boliviana y ha producido una nueva y complejaconfiguración discursiva cuya eficacia no radica en una pretendida síntesis dialécticaentre el marxismo, el indianismo y el nacionalismo, sino en los efectos de frontera deldiscurso (aislamiento de las elites como tradicionales, antinacionales, racistas yneoliberales) y en la combinación de una diversidad de demandas y representaciones. Eltránsito entre una y otra frontera es modulada conforme a una lectura de la correlaciónde fuerzas en el campo político.

El MAS en el poder y las fronteras izquierda/derecha38

Los indisputables éxitos electorales logrados por el MAS desde el 2005 y su no menosexitosa estrategia de ocupación del Estado han reconfigurado su proyecto político, sudiscurso, su organización y su modo de “hacer política”. Un acontecimiento decisivo hasido la aprobación de la nueva Constitución (enero de 2009), con ella el discurso delMAS ha ocupado el centro del campo político y se ha convertido en un discurso estatal;

es decir, ha dejado de ser un discurso en concurrencia con los otros –el discurso de unactor político partidario, y ha producido lo que Jean Pierre Faye39 llamó “efecto de loreal”: el discurso se convierte en acontecimiento, en acción narrada. Ese acontecimientoinaugura un momento hegemónico en el cual se produce una nueva configuración de losenunciados políticos centrales que circularon vertiginosamente en el periodo 2005-2008.

No obstante, en el campo del discurso, el MAS no ha logrado desplegar una hegemoníaen sentido estricto por tres razones40. Primero, salvo la demanda autonómica, el MAS haprescindido o ignorado las demandas y representaciones de varios grupos sociales,incluyendo en ellos a sus aliados. Segundo, los ejes discursivos consagrados por elgobierno y el instrumento político han tendido una circulación restringida entre otrosactores políticos. Tercero, antes que una lógica de “persuasión” discursiva, el MAS haprivilegiado la lógica del antagonismo que permite que los actores se reconozcan comoadversarios o aliados, como amigos y enemigos, desde y por medio del discurso. Estarepresentación se elabora como una topografía que instituye las distancias con relaciónal centro o los extremos del campo, trazando una línea de señales a partir del ejeconvencional izquierda/derecha o desde sistemas de oposición: indígenas vs. K’aras;liberalismo-anti-neoliberalismo, etc. Se trata pues de un discurso que gira en torno a lapura representación de las fuerzas políticas en un campo delimitado41.

38 Los materiales hemerográficos de esta sección (así como su interpretación) son parte de un trabajo más extenso,auspiciado por el PNUD, sobre el campo político en Cochabamba.39 Faye, Jean-Pierre (2004) [1972], Languages totalitaires. Paris, Hermann.40 René Zavaleta Mercado (1983: 30) habló de una “hegemonía incompleta” para caracterizar la influencia obrera en elproceso revolucionario de 1952, el cual “está bajo la dirección práctica de la clase obrera aunque dentro de los límites deuna hegemonía incompleta. La clase obrera es todavía incapaz de su propio proyecto o alcance hegemónico pero no hayun solo proyecto democrático que pueda plantearse al margen de la clase obrera”. Zavaleta Mercado, René (1983) Las

masas en noviembre Editorial “Juventud”: La Paz.41 Corten, André “Discours et representation du politique2. versión originale en français de « Discurso e representaçao doPolitico”. In Indursky, Freda, Leondro Ferreira, María Christina (eds.), O multiplo territorio da analise do discurso. Porto

Alegre: Editora Sagra Luzzatto. 1999:37-52.



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El MAS-IPSP ha “construido” a sus enemigos políticos, situándolos en las zonas dederecha o incluso en la “extrema derecha” del campo, a través un discurso que hatrazado una rígida frontera entre dos polos políticos, y cuya versión extrema ha asumidola fórmula “masistas o fascistas”, enunciada por el presidente Evo Morales en marzo de2007: “Quiero decirles a los dirigentes sindicales que si no son oficialistas, entonces son

de la oposición, son de la derecha, son racistas y fascistas (…) eres masista o eresfascista, no hay otro camino” (Los Tiempos 27/03/2007). Curiosamente, en el discursomasista no hay sino excepcionales alusiones a la “extrema” o “ultra” izquierda, los grupostrotskistas, por ejemplo, son siempre ubicados en la casilla de la derecha42. De hecho,podría pensarse que el MAS ocupa una posición de izquierda radical pero dilatada haciael centro, sin fronteras hacia la izquierda.

La estrategia de polarización discursiva fue particularmente intensa y virulenta entre elbloque masista y ex-prefecto de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, estigmatizado comorepresentante de la “derecha dura”, la “nueva derecha”, la “extrema derecha” y la

“derecha racista”: “Manfred Reyes fue como candidato de la derecha racista […]” (EvoMorales 10 diciembre 2009). “Manfred y Leopoldo son una derecha autoritaria y violenta”(Álvaro García Linera. En: Los Tiempos 09 de septiembre 2009).

Las posiciones en el campo discursivo no son inmutables, se reconfiguranpermanentemente y con ellas se cristalizan nuevas representación de los actores. “En miprimer periodo de Gobierno, Tuto Quiroga era el líder de la derecha. Después Tuto fuesustituido por Manfred Reyes Villa. Ahora Manfred huyó y Juan Del Granado lo sustituye.Es el líder de la derecha”. (Evo Morales. En: La Prensa 25 de septiembre 2010).Recordemos que Juan del Granado, líder del MSM, fue aliado del gobierno a lo largo dela primera gestión de presidente Morales. Durante la última marcha de la Central dePueblos Indígenas del Oriente Boliviano (CIDOB), en junio de 2010, el vicepresidenteubicó a los dirigentes indígenas en la “extrema derecha”.

Durante el conflicto entre el gobierno y la COB, en febrero de 2011, el presidente afirmóque “algunos dirigentes” de la COB “son la avanzada política de la derecha, son de laextrema derecha” (Los Tiempos 9 de febrero 2011). En la misma vena, el ministro decomunicaciones, Iván Canelas, declaró que en los últimos tiempos “La COB ha perdidola visión y manejado un discurso de extrema derecha”. Aún más explícito, Álvaro García

Linera indicó que la COB era parte de la “derecha reaccionaria, fascista”, el eje de un“bloque de derecha restaurador” (Álvaro García Linera. En: Los Tiempos 02 de abril2011).

42 Según Pablo Stefanoni las fuerzas políticas que se reclaman de la izquierda “socialista”, la COB entre ellas, no constituyen unaalternativa real al gobierno del MAS porque carecen de una estrategia y un proyecto político viable. Por lo tanto, dice acertadamente,“no hay vida a la izquierda del “evismo” (Pablo Stefanoni, http://www.rebelion.org/noticias/2011/5/128350.pdf



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El campo político no puede pensarse pues sin la presencia de un “Otro constitutivo”, elenemigo, la referencia negativa que permite discriminar la frontera exterior/interior. Estosignifica la construcción de mojones políticos -la discriminación de un “Nosotros” enoposición a los “Otros”, constituye el fundamento de las prácticas políticas y reinstaurala primacía del conflicto y la identidad en el campo político. Las dinámicas de auto y

hetero identificación tienen como referencia, siempre, a sistemas simbólicos deoposición. En el caso del MAS, la identificación obsesiva, paroxística, del enemigo y porende la permanente apelación a la confrontación, han jugado un papel decisivo en laemergencia del movimiento político porque ha redefinido y renovado las fronteraspolíticas.

La ausencia de enemigos externos es problemática porque las “contradicciones internas”emergen con gran fuerza y amenazan la estabilidad del bloque político. Paraneutralizarlas, el MAS recurre a la estigmatización de los “traidores” e “invitados”,estableciendo así una continuidad entre el enemigo externo y el enemigo interno. Esta

representación es frecuente en momentos de crisis política cuando es necesario “blindar”la imagen del presidente desplazando la responsabilidad de las decisiones a otraspersonas, los traidores. “Estoy rodeado de traidores”, dijo el presidente Evo Morales ensu discurso en la sesión de honor de la Asamblea Legislativa de Cochabamba, añadiendoque ellos están embozados pero que finalmente “serán reconocidos”. (Evo Morales. En:Los Tiempos 15 de septiembre 2010).

Consideraciones finales

La vitalidad del clivaje izquierda/derecha (más allá de las transformaciones en las ideas

y creencias de ambos polos) se explica por la eficacia de la representación simbólica eimaginaria de la política como un campo de fuerzas. El esquema izquierda/derecha noha sobrevivido por su capacidad de representar un complejo espectro político, su eficaciaderiva de la fuerza y simplicidad con la cual figura (representa) el antagonismo político.De hecho, el clivaje izquierda/derecha está enraizada en los usos lingüísticos cotidianosbajo la forma de estereotipos que son empleados para descifrar (y simplificar) escenariospolíticos complejos.

Pero la diada izquierda/derecha es también una estrategia discursiva. Ella ha sido utilizada

por el MAS-IPSP para producir “efectos de frontera”, es decir para estigmatizar a losadversarios y confinarlos en el límite derecho del campo político, una zona improbablede emisión discursiva. Sin embargo, cabe preguntarse si el énfasis en el discurso delantagonismo, en detrimento de un discurso basado en la “persuasión”, no es el índiceelocuente de una “hegemonía incompleta”.

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“Socialismo Comunitarista” y

“Proceso de Cambios” comooperadores ideológicos en eldiscurso del MAS

María Teresa Zegada Claure

El discurso del Movimiento al Socialismo es caracterizado, en general, como un discursode izquierda, más específicamente como “izquierda indigenista” o “nacionalismoindigenista” (Stefanoni, 2006)43, o “etnonacionalismo de corte indígena”, porque habríacanjeado la lucha de clases por el choque de civilizaciones” (Archondo, 2005)44, encualquier caso, el MAS contiene en su andamiaje ideológico al menos tres tradicionesdiscursivas que pueden ser percibidas como complementarias y representativas de ladiversidad boliviana, pero que en sí mismas encierran tensiones y contradicciones: elindianismo, el socialismo y el nacionalismo.

En términos discursivos parece primar un discurso indigenista, mientras las políticasgubernamentales dan cuenta de una tendencia fuertemente nacionalista. Pero, ¿quésucede con el discurso socialista? ¿Cuál es su capacidad de interpelación? ¿Qué lugarocupa en el discurso gubernamental? ¿Cómo se vincula con la reiterada invocación al“proceso de cambios”?

Es preciso partir de un mínimo acuerdo conceptual respecto al significado de la“izquierda” en el siglo XXI, pues sin duda, aquellos elementos que constituían a la o lasizquierdas hace tres o cuatro décadas (60 o 70s) como la lucha de clases, la vanguardiaproletaria, la centralidad estatal, la identificación del imperialismo norteamericano como

el enemigo común, o la guerra de guerrillas como método, se relativizan con las nuevascondiciones internacionales marcadas por la caída del muro de Berlín, la globalización,la discusión sobre la inviabilidad de los Estados-nación, la emergencia de expresionespolíticas alternativas con componentes culturales, medio ambientales, de género, así

43 Stefanoni, Pablo. La izquierda indigenista en el poder . OSAL, Año VI, No. 19, Buenos Aires: CLACSO. 2006.44 Archondo, Rafael “Izquierda boliviana y etnonacionalismo”. En: Barataria. Juguete Rabioso Año 1, No. 2. La Paz: 2005



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como la dilución de la polaridad ideológica izquierda–derecha como ejes de configuraciónde las fuerzas políticas.

En todo caso, un criterio general de diferenciación política y de caracterización de lanueva izquierda podría circunscribirse al siguiente enunciado: una alternativa contrahegemónica basada en principios que cuestionan el orden económico neoliberal,propenden hacia una redistribución más justa de la riqueza y el fin de los privilegios, unamayor participación social en las decisiones y a la incorporación de la diversidad sociocultural que propenden a la construcción de un Estado más representativo de lasfracturas sociales.

Benjamín Arditi45 propone una definición de izquierda basada tanto en criteriosconceptuales como prácticos, en el primer caso “busca cambiar el status quo, impulsala igualdad y la solidaridad y que el significado de éstos debe ser verificado a través deun desacuerdo….el segundo conjunto de criterios, se centra en praxis de las

agrupaciones de izquierda… y se refiere a que la identidad de estas agrupaciones se vamodificando de acuerdo con los aciertos y fracasos de sus proyectos, los distintosadversarios con los que deben enfrentarse y las representaciones que se hacen de sí mismas”.

En este artículo nos concentraremos precisamente en analizar la manera en que operael discurso izquierdista del socialismo comunitarista en el actual gobierno, y el reiteradoenunciado al proceso de cambios, en el marco de su eficacia discursiva y capacidad deinterpelación.

El contenido del socialismo comunitaristaEl Presidente Morales, suele referirse al socialismo tanto para identificar al horizonte alcual se dirige el gobierno como a las contradicciones ideológicas entre socialismo ycapitalismo. “En algunos institutos militares siguen enseñando a los nuevos oficiales delas Fuerzas Armadas que el enemigo es el socialismo. Hay que cambiar eso, el verdaderoenemigo es el capitalismo, no es el socialismo, y tenemos que tener nuevos oficiales conorientación ideológica”, dijo en una alocución (La Razón 23 de octubre 2010).

Sin embargo, el presidente parece encontrar mayor sentido al socialismo cuando lo

articula a las raíces comunitaristas ancladas en la memoria boliviana, cuando reafirmaque: “El país está encaminado en un proceso socialista comunitario”, (Mensaje a lanación y ante la Asamblea Legislativa Plurinacional (La Razón 23 de octubre 2010). EvoMorales también proclamó el “socialismo comunitario”, en el momento de lapromulgación de la nueva CPE, en febrero del 2009, levantando un ejemplar de la nuevaConstitución en las manos ante 200.000 personas: “ahora pueden matarme”, concluyó.

45 Arditi, Benjamín. El giro a la izquierda en América Latina ¿Una política post-neoliberal? México: UNAM. 2009.



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De igual manera, se ha encargado de irradiar este discurso a nivel internacional, cuandoen ocasión de rendir homenaje a Benito Juárez en la ciudad de México frente a su tumba,convocó a implantar el socialismo comunitario en Latinoamérica. “En Latinoamérica, elsocialismo comunitario va a imponerse al capitalismo; de eso estoy convencido”, afirmóante al menos 10.000 personas reunidas en Plaza Hidalgo, en el distrito urbano de

Coyoacán, y subrayó que los pueblos indígenas de México y Bolivia han luchado “por laliberación, la independencia, la soberanía y la dignidad” de América Latina. Lo mismosucedió en Venezuela cuando reivindicó el socialismo y abogó por ampliar el bloquecontinental pidiendo que más países se sumen a cruzada antiimperialista en el acto decelebración de los 12 años de la revolución bolivariana de Venezuela: “Estoy seguro deque el mejor homenaje que podemos hacer a Venezuela en sus 12 años de revoluciónes que otros países sigan sumándose con gobiernos y presidentes antiimperialistas yanticapitalistas en Latinoamérica”, abogó.

En ese evento, como en otros en los que se juega su imagen internacional, el presidente

adopta una postura muy radical respecto de los “enemigos” del proceso, por ejemplocuando denunció que Estados Unidos y sectores de derecha despliegan acciones paradividir a los gobiernos de izquierda: “no van a enfrentarnos a presidentes con cualquierpretexto, como con las revelaciones de wikileaks”, añadió el mandatario, refiriéndose adeclaraciones que realizaron organismos como la OEA “una vez dije delante delPresidente de EEUU (Barack Obama), yo me declaro país comunista, socialista, marxista,leninista; ahora expúlsenme de la Organización de Estados Americanos (OEA), y no nosexpulsan”, (La Razón 03 de febrero 2011).

Esta veta discursiva internacional se articula, en palabras del vice presidente a su visiónanti imperialista46 involucrando a otras naciones del mundo: “No hay revolución quetriunfe si no tiene la solidaridad y tiene el apoyo y apoya a otras naciones. El imperio esun demonio global, planetario. La única manera de derrotar al imperio es con otraglobalización, sino el imperio se impone. Es tiempo de globalización, pero deglobalización de los pueblos, del poder de los pueblos”, reflexionó García Linera. (LaRazón, Edición Digital, 26 de enero de 2010). También abogó “porque los pueblos delmundo aprovechen la decadencia del imperio de Norteamérica” para reproducir losmodelos socialistas. “El movimiento popular planetario (tiene que) reproducirse,solidarizarse y ser una cadena de apoyos mutuos que resista los embates cada vez más

agresivos del imperialismo”. También señalaba “La revolución tiene que irradiarse,respetando las particularidades culturales de cada pueblo. La única manera de aislar alcapitalismo es irradiando, expandiendo, apoyando todo proceso de lucha revolucionaria”(La Jornada.net. 8 de febrero 2010).

46 Apelando al concepto de nuevo cuño de imperio utilizado por Antonio Negri.



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Por otra parte, el vicepresidente Álvaro García Linera, explica en qué consiste elsocialismo comunitarista; “El socialismo es bienestar, es comunitarizar la riqueza, es loque hacían nuestros antepasados en una escala mayor, con tecnología y modernidadproductiva”. (Discurso de posesión en su segundo mandato, 22 de febrero 2010). Y almismo tiempo, revela las dificultades que comporta dicho objetivo: “alcanzar el modelo

del socialismo no será fácil, quizá tardemos décadas, quizás cueste siglos, pero estáclaro que los movimientos sociales no pueden ser poder sin plantearse un horizontesocialista y comunitario”, reflexionó.

En el mismo discurso explicó que el horizonte socialista necesita cinco requisitosindispensables: la unidad de los pueblos, la movilización democrática para enfrentar lasadversidades, derrotar las adversidades internas, el faccionalismo, la corrupción y laambición, irradiar poder económico y cultural, solidaridad y apoyo.

Desde su perspectiva, la base del enunciado está anclada en la contradicción principal

y no así en las secundarias: “persisten dos tipos de tensiones que son el motor de lahistoria: las contradicciones fundamentales y antagónicas, y las secundarias y noantagónicas. Entre los años 2000 y 2009 una contradicción fundamental y antagónicaenfrentó al pueblo con el imperio y con un conjunto de alianzas de terratenientes ysectores de la burguesía alineados con el “colonialismo depredador”, la cual fue resueltacon métodos revolucionarios. En el mismo periodo surgieron contradiccionessecundarias y no antagónicas entre el campo y la ciudad, empresariado patriota y nopatriota, y entre indígenas y no indígenas, las cuales fueron superadas mediante métodosdemocráticos de la persuasión y el diálogo y acuerdos sociales que garantizaron launidad del pueblo.

Desde su punto de vista, una vez instaurado el Estado Plurinacional, surge el mismo tipode contradicción fundamental antagónica entre el pueblo y el imperialismo, ycontradicciones principales que enfrentaron al pueblo con los residuos del colonialismoopuestos a la unidad y a la industrialización nacional, pero reconoce la emergencia detensiones secundarias y no antagónicas en el seno del pueblo y que tienen que ver conel “debate fructífero respecto a la velocidad y profundidad del proceso de cambio”. Según

Álvaro García, se trata de tensiones “dialécticas creativas y necesarias que impulsannuestra revolución y que son resueltas con el debate democrático, la crítica y la

autocrítica fraterna”. Estas tensiones de alguna manera encuentran su punto deresolución en el concepto de “estado integral” emitido por el Vicepresidente que a largoplazo se disolverá en la sociedad.

Por último aclara que el nacionalismo indígena del MAS no busca restaurar el viejocapitalismo de Estado: “ese es un falso debate… capitalismo es el usufructo del trabajoajeno y capitalismo de Estado es el uso de las empresas del Estado para beneficio y



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acumulación de riqueza de una élite…en cambio lo que estamos haciendo nosotros espotenciar el Estado para beneficio de los más pobres”, en esa ocasión explicó que losplanes de industrialización del Estado Plurinacional generan y distribuyen riqueza, ypriorizan el valor de uso por encima del valor de cambio, y por tanto no reproducen elcapitalismo de Estado.

En sus apelaciones al socialismo del siglo XXI también establecen su estrategia y justificansu actual ubicación en el poder: “Aquí en Bolivia estamos trabajando y apostando por unavía democrática al socialismo. Es posible [...] porque el socialismo es en el fondo unademocracia radical. No se tiene que llegar necesariamente mediante la fuerza”47. Elvicepresidente sostiene que, pese a que en otras partes del mundo se ha intentado llegaral socialismo mediante la lucha armada, Bolivia apuesta por el trabajo para alcanzar elsistema, dijo que se emplean todas las energías para que el tránsito “del capitalismo alsocialismo comunitario” sea democrático. Concluyó su alocución señalando que elproceso de transformación estructural “es largo y las tareas gigantescas” pero

“asumimos esa responsabilidad... no tenemos miedo a la lucha” (La Razón 8 de febrero2010).

En todo caso, no se puede desligar el discurso del socialismo del indigenismo. Así, lairrupción del nuevo topo48 en Bolivia viene de la mano del indigenismo y del socialismo.Según García Linera (op.cit.), el indianismo sería el núcleo discursivo y organizativo de lanueva izquierda en Bolivia, que se combina con el marxismo, por lo que define el proyectocomo “indianista de izquierda”. De acuerdo con el mismo, se habría producido unareconciliación entre el que marxismo y el indianismo, en que el sujeto indígena-originariose convertiría en la nueva vanguardia del proceso.

Uno de los aspectos más débiles del gobierno es la ausencia, o si se quiere indefiniciónde un proyecto político histórico que trascienda la ambigüedad coyuntural del enunciado“proceso de cambios” y el rechazo al modelo neoliberal y oligárquico; como señala unode sus altos dirigentes, lo que falta en el MAS es un amplio debate sobre el proyectopolítico y el plan de gobierno, un debate entre el MAS y las organizaciones que loacompañan, que ahora priorizan la deuda histórica relacionada con los beneficios delacceso al poder49.

47 Discurso de Álvaro García Linera en su posesión por segunda vez como vicepresidente del Estado. En: La Razón 03de marzo de 2010.48 Expresión recogida por Emir Sader a partir del viejo topo, con el que Marx explicaba los procesos de construcciónsubterránea de las condiciones de posibilidad de un momento de ruptura o revelación de las contradicciones sociales. En:Sader, Emir. El nuevo topo. Argentina: Ed. Siglo XXI. 200949 Entrevista a Rafael Puente, realizada en octubre 2009 en el marco de una investigación del programa de becas deCLACSO, dirigida por María T. Zegada.



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Las proyecciones de un gobierno socialista, son alimentadas por intelectuales ligados alproyecto de MAS como Raúl Prada, en un texto en el que se refiere al proyecto del MAS,lo define como un proyecto anticapitalista y descolonizador en el que el sujeto proletariohabría sido sustituido por el sujeto indígena logrando hegemonía y centralidad como la“nueva izquierda”50.

Sin embargo, estos discursos no están exentos de confusiones y contradicciones ensus propios enunciadores. Es el caso del propio García Linera cuando antes de negar lanoción de capitalismo en el actual gobierno, posicionó la idea del “capitalismo andino-amazónico” en el marco de un nuevo modelo económico propiciado por el gobierno de“izquierda indígena”. Sostenía que los desafíos de la izquierda en la gestión seencaminarían fundamentalmente a la puesta en marcha de un nuevo modelo económicodenominado por él mismo, provisoriamente, “capitalismo andino-amazónico” entendidocomo la construcción de un Estado fuerte, que regule la expansión de la economíaindustrial, extraiga sus excedentes y los transfiera al ámbito comunitario para potenciar

formas de auto organización y de desarrollo mercantil propiamente andino y amazónico.

En el mismo documento afirmaba que el MAS tendría la posibilidad de transformarradicalmente la sociedad y el Estado, pero no en el corto plazo, porque no existían lascondiciones necesarias y suficientes, y explicaba: “Actualmente hay dos razones que nopermiten visualizar la posibilidad de un régimen socialista en nuestro país. Por un ladoexiste un proletariado minoritario demográficamente e inexistente políticamente; y no seconstruye socialismo sin proletariado. Segundo: el potencial comunitarista agrario yurbano está muy debilitado. En los últimos 60 años se ve un retroceso de la actividadcomunitaria productiva y una erosión de los lazos comunitarios... por tanto, el potencialcomunitario que vislumbraría la posibilidad de un régimen comunitarista socialista, pasaen todo caso, por potenciar las pequeñas redes comunitaristas que aún perviven yenriquecerlas. Esto permitiría, en 20 o 30 años, poder pensar en una utopía socialista.”51.

El discurso del socialismo comunitarista emitido por los representantes del gobierno eintelectuales afines, si bien tiene un contenido bien delineado es escasamente utilizadoy reproducido por los sectores sociales afines al MAS, y es usualmente invisibilizado porotros referentes discursivos como el indigenismo o el nacionalismo y por prioridades enla gestión pública, o en la confrontación política con el otro.

50 Prada Alcoreza, Raúl. Deslindes históricos y Políticos, Diferencias con la izquierda tradicional.51 Álvaro García Linera. LMD ed. Cono Sur.



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El proceso de cambios como interpelación discursivaefectiva

El reiteradamente enunciado “proceso de cambios”, se ha convertido en uno de losdispositivos más utilizados por el actual gobierno. Se podría decir que alrededor de este

enunciado se ha creado un sistema simbólico, un conjunto de sistemas de percepcióny acción que provienen tanto de la propia subjetividad como de su relación con elcontexto y que ha logrado consolidar una gran legitimidad, constituye como diríaFoucault; un régimen de verdad, o bien una estructura de sentidos, que fluyenaturalmente en la sociedad, no es cuestionada y cuyo orden simbólico convoca a unamovilización afectiva52. De él se pueden inferir varias derivaciones como la defensa delEstado Plurinacional y la sepultura del Estado colonial, la nueva composición política enla estructura de poder, la permanente referencia a un pasado al que no se quiere retornar,y por último, la separación de la sociedad entre quienes amenazan y quienes apoyan el

proceso.En relación con el Estado, se afirma: “Hay un Estado colonial que murió y (hay) un Estadoplurinacional que nació”, en el cual se insiste para establecer la importancia de la nuevaConstitución Política del Estado y los cambios institucionales que operan en el país. Almismo tiempo se exhorta a romper con el momento inmediatamente anterior signado porel neoliberalismo decretando su defunción, como en el momento en que se decidió“enterrar el 21060” con un gran acto simbólico realizado en un centro minero el día deltrabajador, cinco años después de la llegada del MAS al poder (La Razón 02 de mayo2011). También se asocia el proceso de cambios al quiebre con los viejos partidos

políticos y sus líderes calificados como corruptos que aprovecharon del poder en funcióna sus propios intereses, y sobre los cuales se intenta iniciar procesos de juzgamientopor actos cometidos durante sus respectivos gobiernos.

Del mismo modo, el proceso de cambios se asocia al protagonismo de ciertos sujetoscomo los movimientos sociales o los indígena originario campesinos versus losrepresentantes de la oligarquía cruceña o antinacional, sectores del empresariado, losmedios de comunicación, en su momento también la iglesia, caracterizados comoaliados o afines al imperio, grupo al que se suman cada vez más adversarios, por ejemploel “trotskismo de derecha” encaramado en el magisterio, algunos dirigentes de la COB,empleados públicos que promueven movilizaciones contra el gobierno y tienden adesestabilizar la gestión pública (La Razón 13 abril 2011).

52 Remy, Hiernaux, Servais. En: Suarez, Hugo José “El modelo de catolicismo socioreligioso. Análisis de una entrevista a partir del método estructural”. En: Pluralidades epistemológicas. La Paz: CLACSO, Muela delDiablo. 2009.



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El discurso del proceso de cambios a diferencia del socialismo comunitarista espermanentemente invocado por los sectores sociales afines al MAS en sus alocucionesrespecto al actual gobierno. Sin embargo, también funciona para diferenciar elposicionamiento de los sujetos frente al proceso y al gobierno. Por una parte, están lasorganizaciones con tendencia crítica al gobierno que han introducido una variante en el

sentido genérico de la frase, y se refieren a la necesidad de “reconducir el proceso decambios”, “reencaminar o reorientar el proceso” denotando una falta de satisfacción conla manera en que se está administrando desde las esferas gubernamentales y se alejade sus expectativas y objetivos iniciales, sobre todo aparece en circunstancias en quese producen decisiones estatales contrarias a sus intereses o cuando no son escuchadosen sus reivindicaciones y demandas sectoriales. Y por otro están aquellas organizacionesque se autodenominan defensoras y vigilantes incondicionales del proceso de cambioscomo los cocaleros, sectores de campesinos, regantes, bartolinas, ex colonizadores, yotros.

En consecuencia, el denominado proceso de cambios, funciona como operadordiscursivo para dividir de manera casi maniqueísta las aguas entre quienes apoyan alproceso y son defensores del mismo, y quienes constituyen una amenaza, en la lógicaschmidtiana de amigo/enemigo: o eres “amigo” o eres “enemigo” del proceso decambios. De esta manera se constituye en una gramática discursiva sin un contenidopreciso o con un contenido demasiado amplio y ambiguo –que para el caso es lo mismo-pero que construye como un sistema simbólico con una gran capacidad de interpelacióny eficacia discursiva.


El MAS en este momento representa un alternativa de izquierda porque instala un nuevouniverso simbólico en el imaginario boliviano, basado en exitosas interpelacionesdiscursivas como: la defensa del proceso de cambios, la inclusión étnico-cultural, laigualdad social, la lucha contra la pobreza, la nacionalización de los recursos naturales,la defensa del medio ambiente y la madre tierra, el horizonte del socialismo comunitario,entre otras, no exento de contradicciones y ambigüedades.

Un factor que complejiza la gestión de la “nueva izquierda en el poder” es la relación que

establece tanto con las organizaciones sociales afines como con la sociedad en suconjunto a través de distintos discursos, o con distintos énfasis, que priorizan uno u otroaspecto del proceso como el nacionalismo, el indigenismo, el desarrollo, laindustrialización, el pachamamismo, el socialismo comunitarista, o el proceso de cambiosdenotando la amplitud y al mismo tiempo la diversidad de identidades y visiones políticas.



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En el caso del socialismo comunitarista, se trata de un discurso argumentativo con unalto contenido político y social, porque traza un horizonte al decurso del gobierno, yposiciona ideológicamente al MAS ante la sociedad nacional y el mundo internacional,pero cuya emisión está circunscrita a ciertas élites dirigenciales e intelectuales afines algobierno, y tiene poca capacidad interpelatoria.

Mientras que el enunciado proceso de cambios se ha convertido en el principal operadorideológico del gobierno de Evo Morales y funciona como una estructura de sentido tantopara interpelar de manera eficaz a los sectores afines al proyecto reforzando actitudesde apoyo y agregación político-ideológica, como para denunciar a aquellos detractoresque se constituyen en una amenaza o son “enemigos” de dicho proceso, reproduciendouna polarización funcional a los intereses políticos del gobierno en que el MAS aparececomo conductor del proceso de cambios y los enemigos –diversos y cada vez másamplios– se sitúan en contra del mismo. Este enunciado, que está dotado de una granfuerza discursiva carece de un contenido en sí mismo o en su caso encierra múltiples

significados.

Aparentemente el gobierno se despoja de sus intereses particulares y de su personalidadpolítica y aparece diluido en el proceso de cambios emprendido. Como respuesta,mientras un parte de las organizaciones sociales cierra filas detrás de este enunciado,otros sectores, más críticos demandan su reconducción, con todo, permite la cohesiónsimplista de todos detrás de este sistema simbólico dotado de legitimidad.



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La sombra de la derecha en la

expresión del MAS sobre laoposición

Daniela Guzmán Rivero

Se debe gobernar con la oposición y no a pesar de ella.Ortega y Gasset

Ser político y hacer política en cualquier tiempo, tiene que ver con las convicciones yvisiones que se tiene de la vida, de la sociedad y de ciertos valores como la igualdad, lalibertad, el respeto y la democracia. Es decir, manifiesta una ideología, una actitud política,un discurso desde donde partir. También señala una opción que lleva implícita la defensade principios e ideas concretas, una identidad que tradicionalmente podía limitarse a serde derecha o de izquierda.

Ambos términos “derecha e izquierda” hacen referencia a grandes ideologías que hanestado presentes en el último siglo como formas de identificación política y de producciónde identidad, que se han construido en base a un conjunto primordial de ideas, valoresy actitudes opuestas, una en función a la otra.53

La derecha ha estado vinculada con la tradición (herencia), la jerarquía (aristocracia) y laautoridad, fomento a las jerarquías sociales, la conservación de las elites, el discursodemocrático y la tradición vinculada al autoritarismo militar; la conservación de valores,estructuras e instituciones. Mientras que la izquierda ha estado vinculada al cambio y laemancipación para transformar la realidad, y a la igualdad. Siendo este último su valorcentral, su utopía, que le permitirá conseguir personas y sociedades en condiciones

materiales de vida similares que guarden relación con la dignidad que se proclama al serhumano.

53 En: Komadina, Jorge. Ni izquierda ni derecha: Todo lo contrario. Instituciones y metáforas de la política boliviana”. Dondeplantea que las identidades de izquierda y derecha se han construido en base a un hardcore, un conjunto de ideas, actitudesy valores inconmensurables y simétricamente opuestos, que muestra lo difícil que resulta definir las diferencias entre amboscampos.



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Para Norberto Bobbio, los términos “izquierdos y derechos” tienen un significadodescriptivo y valorativo:54 Descriptivamente, alude a dos contrapuestas posiciones y auna diferencia objetiva en pensamiento y acción política. Valorativamente, el uso positivode uno de los términos implica necesariamente la connotación negativa del otro.

Siguiendo con Bobbio, señalamos cinco criterios de distinción entre la derecha eizquierda que retoma de Revelli para distinguir dos partes contrapuestas del universopolítico, dos grandes dicotomías:55 Según el tiempo (progreso–conservación), respectoal espacio (igualdad–desigualdad), respecto a los sujetos (autodirección–heterodirección),respecto a la función (clases inferiores–clases superiores), respecto al modelo deconocimiento (racionalismo–irracionalismo). De donde se concluye que la izquierda valoramás la igualdad que el desarrollo y la democracia más que el orden, mientras que laderecha tiende a dar prioridad al desarrollo por encima de la igualdad y al orden porsobre la democracia.

Sin embargo, en los últimos 30 años con la vigencia del capitalismo, el neoliberalismo yla democracia se ha generado una crisis de identidad sobre el significado de la izquierday de la derecha, que no ha tenido que ver solo con circunstancias políticas sino convaloraciones e intereses nuevos de las sociedades.

Una caracterización de la izquierda podría ser la propuesta por María Teresa Zegada“una alternativa hegemónica basada en principios que cuestionan el orden económico

neoliberal, propende hacia una redistribución más justa de la riqueza y el fin de los

privilegios, una mayor participación social en las decisiones y la incorporación de la

diversidad sociocultural que permite la construcción de un Estado más representativo de

las fracturas sociales”56 concepto que retoma la razón de ser de la izquierda pero dentroel contexto neoliberal actual.

En Bolivia el discurso de la izquierda ha variado a lo largo del tiempo. Inicialmente seinteresa por la condición de los campesinos, luego por la defensa de los intereses de laclase obrera, y actualmente por la inclusión de los indígenas como factor decisivo parala superación del Estado colonial y la vigencia del régimen democrático. Probablemente,el problema de la izquierda en Bolivia, no sea la identificación de diferentes actores encada época, sino la problematización de su realidad que le permita la emancipación para

el cambio y la transformación. Pensamiento que la actual derecha retoma para estarvigente y asumir una postura democrática.

54 Para profundizar ver: Bobbio, Norberto Diccionario de Política. México, Siglo Veintiuno - Vol. 2, 1988.55 Bobbio, Norberto. Derecha e Izquierda. Razones y significados de una distinción política . México: Taurus. 1994.56 En: Zegada, María Teresa. Los nuevos contornos de la izquierda boliviana. CLACSO. 2011.



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Ya no es la derecha del siglo pasado que consideraba la desigualdad como un factorinherente a la condición humana, es la derecha demócrata que reconoce el rolprotagónico del Estado y que se siente preocupada por reducir la pobreza y ladesigualdad, más allá de su rol opositor.

La oposición y su relación con la democracia

La oposición representa un rasgo constitutivo de la democracia, toda vez que promuevelos derechos políticos que tienen las minorías de alcanzar algún día la mayoría. No puedehablarse de democracia si se tiene suprimida la soberanía del pueblo, es decir si sesuprime a la oposición, la conciencia de que en un régimen democrático deben existiruno o más partidos políticos de oposición que establezcan equilibrio a las fuerzas delgobierno y sean al mismo tiempo poderosos mecanismos de contrapeso frente a latendencia de los gobiernos de volverse regímenes autoritarios.

Para Robert Dahl “el derecho a la participación se ve profundamente desvirtuado sinoincluye el derecho a la oposición como expresión de intereses y valores distintos, que nosolo disputan el acceso al poder, sino que discuten con él las soluciones políticas a losrequerimientos sociales”57.

Es decir, el desempeño de la oposición como sujeto político debe estar integrado alfuncionamiento normal del gobierno; a asegurar la autenticidad del poder; a limitar,controlar e impedir la perpetuidad del gobierno; a desarrollar la crítica constructiva y lalabor de fiscalización política de la acción del gobierno; a participar e intervenir encuestiones de interés público relevante; a insistir en la participación de otros actores; a

canalizar el descontento ciudadano y finalmente a disponer de un programa de gobiernoque le permita estar en la capacidad de sustituir al partido en el poder.

Es preciso indicar que la oposición se funda en los principios de la soberanía popular, ladivisión de poderes, el sistema de partidos, el régimen electoral y la protección

jurisdiccional del derecho a la oposición.

Lamentablemente, en el caso de Bolivia la oposición ha estado reducida y visibilizadaúnicamente en expresiones de insatisfacción, descontento y exacerbación de susdiferencias; mas allá de su autentico rol como promotora del disenso y la participación;

como impulsora del debate de ideas, propuestas y soluciones que plantean losciudadanos, los grupos y las organizaciones en la sociedad plural, independiente de losresultados que se obtengan en las elecciones.

57 Dahl, Robert. La poliarquía: participación y oposición. México: Rei.1996.



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La identidad del MAS en referencia a la oposición

Ya sabemos que la oposición no se define por ser de izquierda o derecha, ya que su rolestá más allá del sistema de gobierno de turno. Sin embargo, en el actual “proceso decambio” el MAS ha recurrido a un discurso en el que califica a la oposición como derecha,

para de esta manera legitimarse como un gobierno de izquierda y profundizar su procesode construcción hegemónica.

La izquierda que plantea el MAS y Evo Morales desde su victoria electoral no es una solani ha sido la misma, es un proyecto que día a día va reconceptualizándose de acuerdoa la práctica política.

“Nosotros no hablamos de un solo socialismo, porque son varios” decía Evo Morales58. Y con ello plantea la posibilidad de la coexistencia de distintas expresiones de laizquierda, por ejemplo el socialismo del Siglo XXI, la izquierda indígena, el socialismo

comunitario y últimamente el capitalismo andino amazónico.Es decir, la identidad del MAS parte de una izquierda que retoma la cuestión originaria yla descolonización del Estado como lucha imprescindible para revertir la historia bolivianacargada de injusticias y de segregación de los pueblos indígenas, a partir de laexperiencia comunitaria de los pueblos y las naciones indígenas originarias que valoranla reciprocidad, la rotación y la redistribución en sus formas de organización política,económica y cultural.

Es una izquierda que se identifica y retoma la lucha por la igualdad y la equidad, ya que

aspira a derrumbar la estructura de clases para dar paso a una sociedad con igualdadpara todos. Es una lucha por la justicia y la libertad, para transformar el sistema degobierno, el sistema político y el sistema judicial y propende a una profundización de lademocracia participativa.

Bajo estos argumentos, entre otros, el presidente Evo Morales identifica a su gobiernocomo un gobierno de izquierda que reivindica el socialismo. “Estoy seguro de que elmejor homenaje que podemos hacer a Venezuela en sus 12 años de revolución es queotros países sigan sumándose con gobiernos y presidentes antiimperialistas yanticapitalistas en Latinoamérica”59, agrego el mandatario.

Con esta identidad socialista, el MAS ubica a la oposición en la derecha, paradescalificarla y desprestigiarla. “Yo siento que la derecha no tiene liderazgo, no tieneprograma”60, sostuvo el presidente, ligándola al pasado y descartando sus argumentosy la posibilidad de ubicarse en el centro o a la izquierda.

58 La Razón, Edición Digital, 23 de enero de 2007.59 La Razón, Edición Digital, 3 de febrero de 2011.60 El Nacional , Edición Digital, 17 de Septiembre de 2010.



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El MAS y su relación con la derecha

Para el Movimiento al Socialismo los partidos políticos de derecha serian Unidad Nacional(UN) y el Movimiento Sin Miedo (MSM).

En el pasado cercano algunas instituciones de la sociedad civil de derecha eran losComités Cívicos, los Medios de Comunicación, las Federaciones de EmpresariosPrivados y algunas instituciones que pretendían “dividir Bolivia” como la CAINCO“institución empresarial boliviana comprometida con acciones de desestabilización delgobierno, de la democracia y la división de Bolivia”61, según el mandatario.

La “derecha racista”62 le correspondería a Manfred Reyes Villa, mientras que la “derechacavernaria y fascista”63 la ocuparían los dirigentes de la COB.

La “intromisión del imperialismo para desgastar la democracia”64 representan algunos

funcionarios de la embajada norteamericana, y “la OEA el instrumento del imperialismoestadounidense”65en opinión del mandatario.

La “extrema derecha” actualmente la ocuparía la COB y algunos dirigentes trotskistas deorganizaciones sindicales como el magisterio. “Criticamos la actitud de algunos dirigentesque son de extrema derecha, porque toda su vida han buscado tumbar un Gobiernopopular, son mentirosos y provocadores”66, aseguró García Linera.

En el primer periodo de gobierno, el líder de la oposición era Tuto Quiroga y más adelantefue sustituido por Manfred Reyes Villa, que se escapó; ahora Juan del Granado sustituye

a Reyes Villa para ser oposición al proceso de cambio”67. Actualmente, el “líder de laderecha” seria Juan del Granado “[…] Felizmente la derecha ahora tiene una cabezavisible que es Juan del Granado, y así quiero conversar con la derecha, con la oposición;ojalá para escuchar sus propuestas” expresaba el mandatario.

La relación que el MAS ha establecido con la derecha (oposición) a lo largo de estosaños, muestra algunas estrategias a las que ha recurrido para posicionarse. La primeraque reduce el discurso a “estas con Evo o contra Evo”, como una forma habilidosa delgobierno para señalar que todos los que están en su contra son de derecha y

61 Agencia Boliviana de Noticias ABI, Edición Digital, 19 de Mayo de 2010.62 A propósito de las elecciones nacionales y los cargos con la justicia que el binomio Manfred – Leopoldo tiene con la

justicia boliviana. En: EJU, Edición Digital, 10 de Diciembre de 2009.63 La Razón, Edición Digital, 8 de mayo de 2010.64 América política y sociedad , Edición Digital, 20 de octubre del 2007.65 La voz del soberano, Edición Digital, 29 de julio del 2010.66 La Razón, Edición Digital, 19 de febrero del 2011.67 El País, Edición Digital, 25 de septiembre de 2010.



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representan lo que él llama “cachorros de la dictadura”68. Posteriormente, la“construcción de una imagen negativa de la oposición”. Una imagen de enemigo interno,que solo obstruye y está sujeto a intereses particulares. Una imagen de una oposiciónfragmentada sin representación, sin legitimidad y sin visión estratégica. La invocaciónpermanente de la unidad nacional. “Mi obligación como Jefe de Gobierno de Bolivia es

defender la democracia y la unidad nacional”. Circunstancia que coarta los mecanismosde contrapeso y de generación de alternativas que solo la oposición puede llevar adelantedentro de una democracia.

Otra forma de relacionarse es a través de “mecanismos de criminalización de laoposición” que ha impedido la conformación de partidos políticos sólidos. El presidenteEvo Morales llamó “cobardes”69 a sus adversarios políticos que enfrentan procesos

judiciales, porque atribuyen su situación jurídica a una persecución política. “Qué culpatengo si la mayoría de los corruptos son de la derecha. Si el jefe del Movimiento SinMiedo también está metido en la corrupción, ¿qué culpa tengo? Ése es un problema de

ellos (acusados), que se defiendan ante la justicia, sin usar ni al pueblo ni a los electores”,afirmó. Situación que es vista por la opinión pública como una persecución judicial encontra de todos los que se opongan a su régimen.


La actual oposición, tanto por su propia debilidad como por la falta de adecuadosmecanismos jurídicos e institucionales, no está en la posibilidad de ser una alternativaseria para el actual proceso de cambio, ya que muchas veces, su forma de relacionarsecon el gobierno ha estado limitada a actitudes de confrontación y demagogia.

Por ello, es fundamental en Bolivia desarrollar una cultura política que afirme el derechoa participar que tienen los ciudadanos y las organizaciones para apoyar o para resistir yprotestar, y que además reconozca el derecho a la oposición y a la alternancia políticacomo garantía de estabilidad del régimen democrático.

68 Alfonso Gumucio (2007) “Bolivia de la historia a la anécdota”. Obtenido el 28 de abril del 2011 desdehttp://www.eldiariointernacional.com/losmasleídos. A propósito de que uno puede ser de izquierda y no estar de acuerdocon Evo.69 En: “Morales llama cobardes a los opositores”, La Razón, Edición Digital, 23 de diciembre de 2010.



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La personalidad política

de Evo Morales Ernesto Sardán

Uno de los elementos referenciales para intentar esclarecer y comprender la tendenciao identidad política del Movimiento Al Socialismo, tanto en el plano discursivo como enel ejecutivo, es la personalidad política de su líder. El retrato político de Evo Moralesprobablemente puede explicar muchos de los logros, pero también de las ambivalenciase indeterminaciones del actual partido en el gobierno y su difuso proyecto de país.

Para empezar, es evidente que la tendencia ideológica de Evo Morales es izquierdista,pero su ubicación en esta línea obedece principalmente a un principio de diferenciacióno rechazo hacia los atributos y personajes vinculados a la derecha, y a la simpatía quele generan algunos personajes y atributos asociados a la izquierda, por lo que nonecesariamente se trata de una identificación ideológica profunda o exquisitamentecompleja. A Evo Morales le seducen algunos principios relacionados con la izquierdacomo la búsqueda de la igualdad social, la distribución equitativa de las riquezas, lavaloración del bien común y otras cualidades similares que se aúnan con su admiraciónpor personajes como el Che Guevara, Fidel Castro o Marcelo Quiroga Santa Cruz, pero

las implicancias de una transformación económica coherente con estas cualidades no esalgo que desvele sus noches, y es que si deseamos acercarnos un poco más a lapersonalidad de Evo Morales, tendríamos que señalar como un primer rasgo, que setrata de un político esencialmente práctico.

Sus cavilaciones giran en torno a sus procedimientos (o a su método) y nonecesariamente se encuentran en función de una “coherencia” filosófica con losprincipios de una corriente política determinada. La absorción del pensamiento depersonajes capitales en su andar político han alimentado mas sus herramientasestratégicas que sus elucubraciones teóricas, por ello resulta complicado descifrar sus

tendencias doctrinales y establecer su configuración ideológica con una mayor precisión,aunque ello ha dado lugar a variadas interpretaciones de políticos y analistassimpatizantes y opositores.

Por ejemplo, Roberto Laserna70 dirá que Evo Morales es populista y que es esta latendencia que predomina en el gobierno, que además convive con indianistas (a la

70 Laserna, Roberto. El caudillismo fragmentado. En: Nueva Sociedad Nº 209, mayo-junio. 2007



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cabeza de Choquehuanca), con un discurso simbólico y estatistas (a la cabeza de GarcíaLinera) gestionando la economía y las políticas gubernamentales. De esta manera criticala fragmentación del MAS en el manejo del poder, que solo mantiene un débil grado decohesión bajo la figura caudillista del presidente. De manera un tanto similar opinan otroscríticos y observadores sociales con leves matices.

El propio García Linera71, al iniciar la primera gestión del actual gobierno, confirmaría enparte tales planteamientos al señalar que en la composición ideológica del Evismo

(nombre con el que bautiza a la “práctica política” del MAS), confluirían el indianismo, lonacional- popular, el marxismo y el sindicalismo, reconociendo que este último más queuna ideología se constituiría en una disciplina de organización y movilización efectiva.

En lo concreto, Evo Morales actúa desde una lógica pragmática, la misma que le hapermitido subir a la máxima instancia de gobierno y mantenerse en él. El pragmatismopolítico de Evo Morales, se ve reflejado en variados momentos de su lucha sindical previa,

en la etapa electoral y en su actual posición de gobernante. No le atraen las explicacionesabstractas, sino el rédito concreto que conllevan72. Lo demostró desde el principio;cuando era dirigente del movimiento campesino y necesitaba entrar en la arenadecisional, justamente para ello crearon el Instrumento Político por la Soberanía de losPueblos (IPSP), este denominativo de “instrumento” no era casual. Era algo que usarían

para llegar a consolidar sus propósitos. La vía armada era una posibilidad que había sidodescartada, porque no había muchas perspectivas de éxito, no porque creyeranfervientemente en una opción pacifista73. De esta manera, al optar por la carrera electoral,se apoyó en un discurso indigenista simbólico de reivindicación cultural, nacionalista ypopular, que le permitiera aglutinar a la mayor cantidad de movimientos sociales posibles

y renunció a cualquier tipo de vinculación partidaria porque la clave era la auto-representación. Retomando a Komadina y Gefroy, se trataba de un movimiento socialque se consolidaría como movimiento político más que como un partido político ensentido estricto74.

Ya en el gobierno, expresó un comportamiento político dual, que se expresó en un doblediscurso para continuar aglutinando diferentes tendencias entre los movimientos socialesque constituían su base social: uno de tipo conciliador que denotaría una suerte de

71 García Linera, Álvaro, “El Evismo: lo nacional-popular en acción”. En: publicación OSAL, Observatorio Social de AméricaLatina, Año VI, Nº 19, CLACSO, Julio 2006.72 Martín Sivak, en su obra Jefazo. Biografía íntima de Evo Morales, relata varios pasajes cotidianos en este sentido, porejemplo cuando solicita mayor concreción a sus allegados “Ejemplos concretos, jefazo” le dirá a Carlos Villegas al hablarde economía.73 Sivak, en la obra ya citada, relatará que según Filemón Escobar existía una línea “fierrera” de los cocaleros que contabancon carabinas y entrenamiento militar (en el cuartel). Rafael Archondo, igualmente señalará que “la reacción del movimientococalero carecía de poder de fuego para tornarse violenta; debía entonces limitarse a ser política” aludiendo a que era unaopción que se había considerado.74 Komadina, Jorge, Geffroy, Céline. El Poder del Movimiento político, estrategia, tramas organizativas e identidad del MASen Cochabamba (1999-2005.) Cochabamba: CESU-UMSS, PIEB, DICYT. 2007



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opción por el diálogo (“somos de la cultura del diálogo”), y otro más agresivo, en el queplatean que las medidas se implementarán de todas maneras y que –cualquiera que estéen contra- es neoliberal, antinacional pro yanqui, etc.

Según Rafael Archondo, este discurso se encontraría alimentado por dos personajespolíticos centrales: Filemón Escobar de la línea reformista de la izquierda boliviana, quehabría influido en él en su etapa inicial, y Álvaro García Linera como uno de los máximosexponentes de la línea insurreccional una vez que subió al podio presidencial75.

En ese mismo sentido, tiene discursos radicales pero sus medidas son graduales, empleala “cultura del diálogo” pero también se maneja en situaciones de confrontación, esvisceral y sensitivo pero se ha mostrado bastante racional ante situaciones críticas, enciertos momentos ha pasado por ingenuo pero en otros se ha portado claramente astutomuy cerca del maquiavelismo76. Su practicidad y éste discurso ambivalente, ha producidoque las diferentes lecturas sobre sus acciones que se realizan aquí, allá y mas allá se

contradigan y se entrecrucen, se complementen y se repelen.Esta peculiar personalidad política de Evo Morales tiene como trasfondo una fuerte dosisde emotividad la misma que ha alimentado muchas de sus decisiones intuitivas muchasveces impulsivas. Este trasfondo emocional se ha ido estructurando a través de lasdiferentes experiencias que le ha tocado vivir desde su niñez, pasando por suadolescencia, sus inicios como dirigente sindical y su actual investidura como presidente.

Veamos algunos de los elementos más sobresalientes de su trayectoria.

Durante su niñez, tal como relatan todas sus biografías, en la comunidad de Isallavi

perteneciente al cantón de Orinoca en Oruro, Evo Morales conoció la precariedad de la vidaen el campo desde su nacimiento77. Las caminatas de cinco kilómetros para llegar a suescuela por caminos de herradura, las casas de adobe con piso de tierra y techo de paja,la escasa comida y otras características serían elementos cotidianos y comunes entre losniños de su pueblo que cobrarían importancia en su comportamiento político muchotiempo después, cuando tomaría conciencia de la situación de aislamiento y olvido en que

75 Rafael Archondo, en su artículo Breve Biografía Política de Evo Morales de Septiembre 2009, en la revista Umbrales Nº 19:Bolivia y el contexto político actual, señalará que “En síntesis, desde 1988, Evo construyó un discurso alimentado por dosproveedores ideológicos principales. El primero fue Filemón Escobar, quien le ofreció un indianismo empalmado con las corrienteseuropeas pacifistas y ecologistas, generalmente adversas a la industrialización y al paradigma de progreso, entendido comoacumulación. Es un discurso que habla de la existencia de dos civilizaciones que deben convivir armoniosa y complementariamente.

Sus fuentes de inspiración han sido los textos de Javier Medina, Franz Hinkelammert y Dominique Temple. La otra fuente es lacorriente insurreccional ya aludida, que enriqueció la filosofía del Ché con las experiencias nicaragüense y salvadoreña”.76 Como nos recuerda Rafael Archondo en la obra previamente nombrada, es conocida la estrategia que Evo Morales habríaempleado para desplazar a Alejo Veliz en su pugna por el liderato de la ASP (Asamblea por la Soberanía de los Pueblos) al aceptarque Veliz vaya como presidenciable y candidato plurinominal por Cochabamba, en las elecciones de 1997 quedándose Moralescomo candidato uninominal por la circunscripción 27. Mediante voto cruzado Veliz obtendría una votación mínima y Evo Moralesganaría su diputación de manera notable.77 Retomaremos aquí la descriptiva afirmación de Martín Sivak en la obra ya citada Jefazo. Biografía íntima de Evo Morales: “Evoquedó con la marca del sobreviviente. Además, cuatro de sus siete hermanos murieron: uno al nacer y los otro tres –Luis, Eduvéy Reina- de enfermedades curables.



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comunidades como la suya, se encuentran respecto del Estado y los gobernantes de turno,formulando así la necesidad de realizar una reconversión de este estado de cosas.

Muchas veces Evo Morales rememora aquellos días alimentando su discursoreivindicativo de los sectores postergados pero no en un sentido figurativo –como suelepasar con buena parte de los políticos de las últimas décadas -sino desde la propiavivencia de una cruda realidad, lo cual le otorga legitimidad entre sus electores y aúnentre sus detractores.

Algunos biógrafos tratan de identificar en su capacidad de organizar y luego dirigir un equipode fútbol (entre sus 13 y 16 años) los gérmenes de su capacidad de liderazgo; lo cual puedeser bastante discutible pero lo cierto es que fue este deporte el que le terminó vinculandoloa su primera labor dirigencial a sus 23 años, cuando es elegido como secretario de deportesy de actas del sindicato “San Francisco” en El Chapare, lugar donde emigra con su familiadespués de cumplir con su servicio militar. A partir de este rol, seis años después, en 1988,

llegaría a ser secretario ejecutivo de la Federación del trópico de Cochabamba, solo un añodespués de que se promulgara la ley 1008, hecho que se constituía -de mano de laembajada norteamericana- en una declaratoria estatal de guerra contra el Chapare, y en unaoportunidad para apuntalar el liderazgo sindical de Evo Morales78.

En ese momento, confluyeron una serie de elementos que configuraron los primerosrasgos de la personalidad política de Evo Morales. En primer lugar, la situación actual lehabía puesto al frente de un movimiento sindical que estaba siendo frontalmente agredidopor su propio Estado que -bajo la presión y auspicio del gobierno de EEUU- incriminabaa los productores de coca asociándoles con el narcotráfico. Ese año se produjo la

Masacre de Villa Tunari en la que once cocaleros murieron en manos de la UMOPAR yla DEA, según sus pobladores.

En segundo lugar, se encontraba el pasado relativamente inmediato: en 1984, trescampesinos habían sido asesinados en un bloqueo y otros cinco en 1987 en una protestacontra el Plan Trienal.

Otros hechos también marcaron su vida. En 1978 durante el cuartel había participado deuna represión contra algunos cocaleros de Coripata, que tuvo como saldo un muerto,tres años después, ya en el Chapare, se dio un hecho que algunos señalan como

fundacional 79 en la acción política de Evo Morales, cuando un campesino que no quisoauto incriminarse, fue quemado vivo por un grupo de militares borrachos.

78 Tal como señala Rafael Archondo, “ Aunque el éxito político le llegó de forma repentina e insuficientemente explicada, no podía haber llegado al cargo en un momento más oportuno. Un año antes de su instalación como secretario ejecutivo,el Congreso Nacional de Bolivia ponía en vigencia la Ley 1.008, esa herramienta legal que proscribía el cultivo de coca enel Chapare. Era la declaratoria formal de guerra contra la región”.79 Sivak, Martín, (Op. Cit.)



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Estos acontecimientos marcarían no solo su emotividad política sino que estructuraríanotro rasgo importante y claramente típico de Evo Morales: Su antiimperialismo. Esterasgo antiimperialista poco tenía que ver con una lectura de la realidad a partir de unareflexión sustentada teóricamente. Su rechazo al imperio norteamericano surge enprincipio como una reacción visceral, claramente comprensible por los hechos

previamente citados, pero poco a poco cobraría mucho más sentido y se asentaría demanera más depurada bajo la tutela de sus asesores político ideológicos.

A este su antiimperialismo, Archondo añadiría otros tres elementos de la “conciencia deEvo Morales”, a saber: Su mirada planetaria, el empleo “instrumentalista” de laselecciones combinando la legalidad y la movilización en las calles80. La mirada planetariahace referencia a que mucho antes de ser presidente, justamente este antiimperialismole habría procurado conocer otros países y ganar aliados internacionales, que la daríanun respaldo principalmente desde su triunfo presidencial. El empleo de las eleccionescomo un instrumento probado de acumulación de poder político, es algo que de alguna

manera ya hemos descrito líneas arriba, y el empleo combinado de la legalidad y lamovilización en las calles apuntala a su método de “gobernabilidad” que todavíamantiene: en situación de gobierno, plantea legalmente diferentes políticas, pero si seencuentran con algún sector social adverso, instruye la movilización en las calles. Este

modus operandi , en los últimos conflictos protagonizados ha mostrado claros declivesante todo desde el mentado gasolinazo, una radical medida sobre la que tuvo queretroceder.

Para concluir, es necesario tomar en cuenta un rasgo final de Evo Morales: el“caudillismo”. Este rasgo fue construyéndose progresivamente y a la vez con algunos“saltos”81 cualitativos coyunturales. En esta construcción se resalta su rasgoantiimperialista ya citado, su identificación con los sectores pobres y populares y laincorporación clave del componente étnico indigenista, entre otros elementos. Todo esto

80 Rafael Archondo. La ruta de Evo Morales”. En: Revista NUEVA SOCIEDAD No 209, mayo-junio de 2007. Nombraría así los cuatro elementos de la conciencia de Evo Morales:

Su AntiimperialismoSu mirada planetariaLa probada utilidad de las eleccionesLa legalidad, aunque indispensable, no es suficiente

81 En principio, su liderazgo carismático le permitió consolidarse en seis años de dirigencia sindical como secretario general

de la Federación del Trópico Cochabambino pero su figura solo podía ser identificada con el Chapare. Sin embargo, sudeclarado antiimperialismo le permitiría descollar a escala nacional y aún mundial (como ya se ha señalado previamente).Esto le permitiría disputar el control de la ASP (sin llegar a ser secretario general del movimiento campesino), lo cual consiguiócuando un grueso de las bases se alineara a él bajo la sigla del MAS, luego de su triunfo contundente como diputadouninominal en 1997, y la bochornosa “derrota” de Alejo Veliz como presidenciable, que se quedaría con una disminuidafracción bajo la sigla del PC. Su antiimperialismo, igualmente le permitirían dar otro salto en las elecciones del 2002, cuandoManuel Rocha, embajador entonces de Estados Unidos, le haría un grueso favor -mucho más allá de sus cálculos- alamenazar al pueblo de que perderían privilegios si acaso votaban por “dirigentes vinculados al narcotráfico y al terrorismo”.Finalmente, en las elecciones de 2005, con un sistema partidista diezmado, Evo Morales sería el único candidato capazde conglomerar el voto de la mayoría del pueblo boliviano.



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permite que una “masa” electoral de una naturaleza tan diversa y “abigarrada” comodiría Zavaleta, se pudiera identificar desde distintos ángulos con Evo Morales.Principalmente en los dos momentos eleccionarios que le tocó protagonizar, se pudoconstatar este fenómeno. El campesinado votó por él, por su origen rural y supertenencia sindical, aspecto con el que otros movimientos sociales sindicalizados

también se identificarían, un grueso de la población universitaria probablemente se veríanatraídos por su antiimperialismo y su discurso cultural - simbólico, sectores intelectualesy proletarios de izquierda verían la emergencia de una nueva izquierda, gran parte de lossectores urbanos es posible que vieran en él una opción diferente a la anterior yexpresaran un voto castigo a los partidos tradicionales, en fin, todos votando por elmismo personaje pero desde operadores identitarios y simbólicos distintos.



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Fundamentos ycuestionamientos al discurso

izquierdista del MAS



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Las revelaciones del Vivir Bien

Elizabeth Vargas

El triunfo del Movimiento al Socialismo (MAS) se produce en un contexto de pérdida decredibilidad de los partidos tradicionales de derecha y la aplicación de un modeloneoliberal basado en el libre mercado, el cual dio lugar a la crisis política del 2003 quederivó en la renuncia del entonces presidente Gonzalo Sánchez de Lozada. Ese triunfosignificó también el posicionamiento de nuevos discursos y líneas políticas que revelanel cambio prometido por la nueva gestión gubernamental; uno de esos discursos era el

Vivir Bien, el cual se plasmó explícitamente en el “Plan Nacional de Desarrollo…para Vivir

Bien” (2006-2010), presentado por el gobierno el año 2006.El triunfo del MAS sin embargo no sólo fue producto de la crisis de partidos políticos dederecha, sino también de la izquierda tradicional la cual en realidad había tenido su picode descenso desde el fracaso del gobierno populista de la Unión Democrática y Popular(UDP) de Hernán Siles Suazo con la hiperinflación de 1984; y la relocalización mineraque debilitó a la Central Obrera Boliviana (COB). Como señala Prada82, esa crisis de laizquierda tradicional dejó un vacío político por parte del sujeto de la gesta revolucionaria:el sector obrero, el cual fue sustituido por otro sujeto: el indígena, principalmente a partirde la marcha indígena por “el Territorio y la Dignidad” de 1990.

En ese sentido, desde el ascenso al poder del Movimiento Al Socialismo, empiezan areivindicarse y posicionarse nuevos discursos y líneas políticas coherentes con la imagende un Gobierno que se mostraba propulsor de la defensa y reivindicación de los derechosde los pueblos indígenas originarios campesinos. En esa línea, uno de los discursos quese presenta como central, es el “Vivir Bien”. Se trata de un fundamento filosófico de lanueva concepción de desarrollo que presenta el actual Gobierno, como alternativa almodelo de desarrollo capitalista que -se dice- se mantuvo durante los llamadosgobiernos neoliberales de gestiones anteriores. El planteamiento del Vivir Bien comoalternativa frente a un modelo capitalista, genera reacciones que se muestran contrariasno tanto a esta concepción como tal, sino a las políticas y acciones realizadas por elgobierno, que algunos actores sociales la consideran contradictorias a los postulados del

Vivir Bien.

82 Prada, Raúl (s/a). Deslindes históricos y políticos, diferencias con la izquierda tradicional .



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En ese sentido, en el presente artículo hacemos una revisión de algunos discursosgubernamentales en torno al Vivir Bien, tomando el caso de la Conferencia Mundial delos Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra; revisamostambién algunas reacciones que genera este discurso en el contexto de la mismaconferencia, para luego aproximarnos a una caracterización del actual gobierno en

relación al izquierdismo, en el marco del concepto de la “nueva” izquierda, en el contextoactual en el que nos encontramos.

La nueva izquierda

La izquierda o las izquierdas siempre han estado vinculadas, como señala Komadina; alcambio, la emancipación y la igualdad; la derecha en cambio a la tradición, la autoridady la jerarquía. Como bien complementan Bobbio y Arditi83 el concepto de izquierda tienecomo valor central la igualdad, la solidaridad y busca cambiar el status quo; la derechaen cambio que lleva connotaciones de jerarquías sociales y aristocracia; en cierto sentido

prefiere el mantenimiento de un status quo que es favorable a sectores dominantes dela sociedad. Tomando en cuenta que el concepto de izquierda no es un conceptoinmutable y que en realidad nunca hubo una sola izquierda, se comparte el criterio de quela izquierda actual difiere de la izquierda de los años 60´s y 70s. En esos años, locaracterístico era “la lucha de clases, la vanguardia proletaria, los parámetros heredadosdel socialismo soviético, la identificación del imperialismo norteamericano como únicoenemigo común, o la guerra de guerrillas como método…” (Zegada, 2010)84. Seconsidera que en la actualidad el sujeto político que lidera el proceso emancipatorio yano es el obrero sino el indígena; esta característica junto a otras, hace ver que nosencontramos en el contexto de una “nueva” izquierda con características que difierende la izquierda tradicional.

La “nueva” izquierda, ya no contiene elementos que eran característicos en los años70´s, y más bien – tratando de arribar a un concepto mínimo- se la caracteriza como“una alternativa contra hegemónica basada en principios que cuestionan el ordeneconómico neoliberal, propenden hacia una redistribución más justa de la riqueza y el finde los privilegios, una mayor participación social en las decisiones y la incorporación dela diversidad socio cultural en las distintas dimensiones de la vida social, económica ypolítica” (2010). Para Suárez85 los sucesos ocurridos en Bolivia desde los años 90s con

la Marcha por el Territorio y la Dignidad, el surgimiento de la Asamblea por la Soberaníade los Pueblos (ASP) que luego se convierte en el Movimiento al Socialismo (MAS),asimismo los sucesos de los años 2000 y 2003 con la Guerra del Agua y del Gasrespectivamente, influyeron en el surgimiento de la nueva izquierda en Bolivia cuyas

83 Bobbio y Arditi. En: Zegada. Los nuevos contornos de la izquierda boliviana. CLACSO. 2010.84 Zegada, María Teresa. Los nuevos contornos de la izquierda boliviana. CLACSO. 201085 Suárez, Hugo José (s.a.). Bolivia el nacimiento de una nueva izquierda.



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características se relacionan a: La vinculación sindical y comunitaria, el surgimiento denuevos actores con capacidad de movilización y cuyos líderes son de origen indígena opopular - ya no urbano burgués-, un discurso que gira alrededor de demandas culturales,económicas, de soberanía respecto de los recursos naturales, participación política y laoposición al neoliberalismo.

Por otro lado, el gobierno del MAS es un movimiento que aglutina en su seno, comoseñala Zegada, al menos tres tendencias discursivas, como son: Indianismo, socialismoy el nacionalismo. El indianismo es la tendencia quizá más radical, pero al mismo tiempocentral en el discurso del actual gobierno que permea las otras tendencias discursivas;plantea la “indianización de la estructura del poder político y quienes más bien deberíannegociar son los mestizos en calidad de minorías”. En el indianismo se evocan otroshorizontes que ya no se relacionan tanto con las clases sociales sino “con la etnia, cultura,la tierra, el colectivismo”. Plantea la revitalización de los valores y formas de organizacióny producción indígena; “ve en la recuperación (simbólica) del pasado un medio para

proyectarse utópicamente hacia el futuro” (Mires 1991. En: Hoffmeyer 1993)86; el VivirBien se enmarca en esta tendencia discursiva, que pretende recoger la concepción dedesarrollo de pueblos y culturas que difieren de la concepción de desarrollo de corteoccidental.

El socialismo que se plantea busca alejarse del socialismo de matices europeos paradar paso a un socialismo propio, al que se accede por la vía democrática, respetandocomo diría el Vicepresidente de la República, las particularidades culturales de cadapueblo, por ello se habla del socialismo comunitario, que en el fondo intenta combinar(y reconciliar) el marxismo y el indianismo donde el sujeto indígena se convierte, comoindicado anteriormente, en la vanguardia del proceso (Zegada 2010). Respecto al

nacionalismo, éste se expresa en el papel protagónico que juega el Estado en laeconomía nacional – en los sectores denominados estratégicos como Hidrocarburos yMinería- para cambiar el actual modelo primario exportador, según plantea en el PlanNacional de Desarrollo 2006-2010. Ese papel protagónico del Estado se tradujo en losprocesos de nacionalización junto con la orientación de políticas basadas en elextractivismo y la industrialización para así lograr una orientación social y redistributiva dela riqueza en nuestro país.

Esta combinación de las diferentes tendencias discursivas no está exenta decontradicciones o desencuentros entre el discurso y la práctica, aspecto que escuestionado por algunos actores sociales, incluso por aquellos que se identifican con elllamado “proceso de cambio”. Esto mismo pasa con el planteamiento del Vivir Bien, elcual examinamos a continuación.

86 Hoffmeyer, Hans. Etnicidad y Desarrollo. Mimeo. Págs. 1-16. 1993.





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Dado el sentido del Vivir Bien, en cuyo centro no está lo individual sino lo comunitario yla naturaleza, no está la acumulación desmedida sino el equilibrio entre lo material yespiritual; esta concepción se presenta como alternativa frente al modelo capitalista,considerado como el causante de la crisis ambiental y climática. Ese fue el mensajecentral en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los

Derechos de la Madre Tierra (CMPCC) realizada en Cochabamba en abril de 201091

; fueun espacio para reafirmar la concepción del Vivir Bien como contraria al capitalismo ycomo la única vía para “salvar a la Madre Tierra” (del cambio climático).

Para avanzar en esa nueva concepción de desarrollo que implica buscar la armoníainterna (con uno mismo) y externa (con los otros y la naturaleza), desde el discursogubernamental, se debe recuperar las formas de vida de los pueblos indígenas que

justamente promueven esos valores comunitarios y ambientales. La recuperación deesos valores comunitarios, permitirán avanzar en el equilibrio y la interacción armónicacon la Madre Tierra, en suma permitirá avanzar hacia un verdadero desarrollo con

identidad propia. Por tanto las formas de vida de los pueblos indígenas originarios seconstituyen en el referente, porque para ellos la madre tierra no es un objeto sino un ser,se consideran parte de ella y la han protegido durante siglos. “Planteamos a los pueblosdel mundo la recuperación, revalorización y fortalecimiento de los conocimientos,sabidurías y prácticas ancestrales de los Pueblos Indígenas, afirmados en la vivencia ypropuesta de “Vivir Bien”, reconociendo a la Madre Tierra como un ser vivo, con el cualtenemos una relación indivisible, interdependiente, complementaria y espiritual” (Acuerdode los Pueblos En: la CMPCC., abril de 2010).

“…Por eso hermanas, hermanos, estamos reunidos acá para recuperar,revalorizar la vivencia de los movimientos sociales del mundo, peroespecialmente el movimiento indígena originario, como una verdaderaalternativa a los modelos de desarrollo. Como vengo de este sectorimportante quiero aprovechar la vivencia de nuestros antepasados, suexperiencia sobre la vida, la tierra, más conocida en Bolivia comoPachamama, o por científicos, historiadores, sociólogos, antropólogoscomo el Planeta Tierra. Para el mundo occidental el hombre está sobrela tierra y tiene que dominarla y someterla; mientras para el mundoindígena el hombre, la mujer son parte de la tierra, de ella venimos y a

ella volvemos cuando morimos; por eso no se puede vender la tierra.”(Discurso del Presidente Evo Morales Ayma obtenido el 12 de abril 2011desde http://www.ellibertadorenlinea.com.ar)

91 En el Acuerdo de las Partes número 15 (COP 15) sobre el cambio climático, realizado en Copenhague el diciembre 2009,EEUU y China influyeron en la realización de un acuerdo de reducciones de GEI mínimos y no vinculantes; esto generóinsatisfacción en todos los países asistentes; sin embargo sólo Cuba, Venezuela, Nicaragua, Sudán y Bolivia rechazaronel mismo y más bien se convocaron a una Cumbre de los pueblos, el cual dio lugar a la CMPCC realizado en Bolivia enabril 2010.



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Frente a este discurso de protección de la Madre Tierra y la construcción de un nuevomodelo de desarrollo en armonía con la naturaleza, surgieron voces críticas señalandola falta de coherencia del discurso y la práctica del Gobierno con respecto a los bosquesy recursos naturales. En tal sentido, surgió el planteamiento de que en la CMPCC,también se analice y debata sobre los conflictos socio-ambientales pendientes a resolver

en nuestro país y la rectificación de políticas que aseguren la protección de la Madre Tierra.

Así, se instaló la llamada “mesa 18” o “mesa rebelde”- considerando que ya habían17 mesas de trabajo en la CMPCC-; esta mesa se instaló durante el evento, bajo elliderazgo del Consejo de Ayllus y Markas del Qollasuyu CONAMAQ. Los discursos yconclusiones, coincidían con las 17 mesas, respecto de la condena del capitalismopor ser causante de los actuales problemas ambientales y la necesidad de proteger ala madre tierra en el marco de un modelo social y comunitario. Su posición se alejabade las conclusiones de las 17 mesas de la Conferencia, al insinuar que el actual

gobierno mantiene políticas y lógicas “desarrollistas” de anteriores gobiernos que seexpresan en la persistencia de un modelo extractivista de los recursos naturales y lapresencia de transnacionales; pretendiendo mostrar una evidente contradicción delGobierno entre su discurso Pachamamista y su práctica. Según conclusiones de laMesa 18, esa lógica depredadora, calificada neo-extractivista, se expresa en proyectosde industrialización, exploración petrolera, minera, construcción de caminos, entreotros, que fomentan la extracción de los recursos naturales, vulnerando además elderecho a la consulta previa a los pueblos indígenas para la realización de proyectosen sus territorios.

“Asumimos la responsabilidad de cuestionar a los regímeneslatinoamericanos denominados populares y a la lógica depredadoray consumista, la lógica de la muerte del desarrollismo y delneoextractivismo […] con el propósito de definir las bases para laimplementación del Nuevo Modelo de Gestión de los RecursosNaturales para revertir el Modelo de Producción Capitalista aúnimperante en Latinoamérica, que radica en el desarrollo industrial yla consolidación de las transnacionales fundado en la propiedadprivada, el lucro individual y el consumismo, aspectos que han sido

puestos en tela de juicio por las naciones y pueblos de AméricaLatina. Los planes de desarrollo de estos gobiernos, entre ellos elboliviano, sólo reproducen el esquema desarrollista del pasado”(Extracto las conclusiones de la “Mesa 18” en la CMPCC, abril2010).



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Una de las denuncias mencionadas en esta mesa fue el caso del proyecto deconstrucción la carretera Villa Tunari (Cochabamba)-San Ignacio de Moxos (Beni)92 quedividiría en dos el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS); proyectoque es rechazado por los pueblos indígenas que habitan en este territorio.

El conflicto en el TIPNIS sobre la construcción de unacarretera

El año 2006, mediante ley Nº 3477, se aprobó el estudio a diseño final para laconstrucción de la carretera Cochabamba–Beni93; el año 2009, el Presidente Evo Moralesy su homólogo Brasilero Lula Da Silva, firmaron el protocolo de financiamiento de lacarretera por la suma de 332 millones de dólares – considerando que el total de la obracostaría 415 millones de dólares-. Según Crespo (2010), esta carretera es parte delconocido proyecto IIRSA (Iniciativa para la Integración de la Infraestructura RegionalSuramericana) por ello el interés de apoyo a esta iniciativa por parte del gobiernobrasilero; nuestro país jugaría un rol de tránsito para la conexión del Brasil al OcéanoPacífico que posibilite el traslado de sus bienes y servicios.

La carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, no sólo partirá en dos al TIPNIS, sinoque conlleva riesgos para la existencia de los pueblos indígenas yuracarés, moxeños ychimanes –algunas de ellas con escaso contacto con el mundo externo– y el ecosistemade alta biodiversidad del TIPNIS94; esta carretera también favorecerá el ingreso decolonos, madereros, empresas petroleras e incluso el narcotráfico según denuncianinvestigadores de este ecosistema. “…al abrirse esta carretera se presenta una amenaza

a la vida de los pueblos que habitamos en el TIPNIS, por la pérdida de los recursosnaturales y toda la biodiversidad sobre la cual se sustenta la cultura y vida de losMoxeños, Yuracarés y Chimanes, que hemos vivido y seguiremos viviendo en nuestroterritorio desde antes de la creación del país” (Resolución 001/2010 en el XXIX encuentroextraordinario del TIPNIS, realizado en mayo 2010).

Frente a esta situación, la posición de los pueblos indígenas que habitan el TIPNIS esclara, “rechazar contundente e innegociablemente la construcción de la carretera Villa

Tunari-San Ignacio de Moxos o todo trazo carretero que afecte nuestro territorio,nuestra casa grande” (Artículo 1 de la Resolución 001/2010 del TIPNIS) y piden

92 En el artículo Octavo de las conclusiones de la “mesa 18”, reclaman la vulneración de derechos colectivos en conflictosambientales persistentes como: Corocoro, Jacha Suyu Pakajaqi, Lliquimuni, Pueblo Indígena Mosetén, San Cristóbal,Chiquitanía, Pantanal, TIPNIS, Represa Río Madera en Brasil y Bolivia, entre otros.93 Esta descripción sobre la problemática sobre la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos se basaen Carlos Crespo (2010) “El Estado contra los comunes en el TIPNIS” obtenido el 12 de abril desdehttp://www.isiborosecure.com94 Por ejemplo se estima que estarán en riesgo las 438 especies de aves encontradas en este territorio (de las 470 queexisten en el departamento, la cual representa el 34% del potencial nacional) (Arrázola. 2010. En: Crespo, 2010).



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además que el Gobierno sea “coherente y consecuente con su la defensa de losderechos de la Madre Tierra y los Pueblos Indígenas” (Artículo 2 de la mismaresolución). Los indígenas del TIPNIS son considerados minorías (10.000 habitantesrepartidos en 64 comunidades) frente a este proyecto considerado estratégico parael país, por ello han recibido presiones por parte del Gobierno y líderes cocaleros para

aceptar la construcción de esta carretera. “[…] desde que sacamos una posición firmede no permitir el avance de la carretera […] los colonos nos bloquearon y prohibierona las tiendas vendernos artículos de primera necesidad” (Adolfo Moye, dirigente de lasubcentral indígena del TIPNIS). Para el Gobierno sin embargo, esa posiciónexpresada por los indígenas del TIPNIS, no parece tener mayor relevancia,recientemente ya se aprobó la Ley Nº 0345 que ratifica el contrato de colaboraciónfinanciera entre Bolivia y el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico y Social(BNDES) de la República Federal del Brasil por el monto de 332 millones de dólares(Los Tiempos 10 de mayo 2011), con lo cual ya se concreta el avance de esteproyecto de construcción de la carretera anunciada.

Desde inicios de la gestión del gobierno de Evo Morales, estaba clara la política demantener e impulsar los sectores Hidrocarburos y Minería considerados estratégicospara la economía nacional95; de hecho, según el Vicepresidente Álvaro García Linera,el 50% del valor total de las exportaciones se basa en el gas y petróleo “y lo seguirásiendo en los siguientes años. Con todo, viviremos en una economía fuertementevinculada a los mercados externos” 96. Para garantizar la aplicación de esta política,el potenciamiento del sector Hidrocarburos y Minería, no sólo se debe garantizarinversiones, sino brindar las condiciones para asegurar la exploración y explotación de

estos recursos naturales no renovables, en tal sentido no es rara la posición delGobierno de mantenerse firme en el impulso de proyectos como la exploraciónpetrolera, construcción de carreteras en áreas protegidas, como es el caso del TIPNIS.Recordemos además que los hidrocarburos son los que financian la política desubsidios del actual gobierno, así lo afirmaba el propio Presidente Evo Morales, segúndescribe Crespo (2010), en un discurso criticando la oposición a la explotaciónpetrolera en áreas protegidas y territorios indígenas: “Están diciendo, en otraspalabras, que el pueblo boliviano no tenga plata, que no haya IDH, que no hayaregalías, pero también van diciendo que no haya (el bono) Juancito Pinto, ni la RentaDignidad, ni el bono Juana Azurduy”.

95 El Plan Nacional de Desarrollo (2006-2011:91) planteaba la conformación de la matriz productiva para cambiar el patrónprimario exportador. La matriz productiva está compuesta por: El sector estratégico, generador de excedentes y el sectorgenerador de empleo e ingresos. En el sector estratégico generador de excedentes estaban: Hidrocarburos, Minería,Electricidad y Recursos Ambientales. El Estado debía jugar un rol activo en los sectores estratégicos impulsando laindustrialización, para asegurar la maximización de ganancias y la distribución equitativa de las mismas.96 Álvaro García Linera) “El Papel del Estado en el Modelo Nacional Productivo”. En: Revista Discursos y Ponencias del Vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Año 2, Número 6. La Paz. 2009:18.



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Ser de izquierda a la luz del Vivir Bien

El discurso del Vivir Bien y las reacciones que esta ha generado según los casosrevisados, evidencian los desencuentros entre las tendencias discursivas presentes enel actual gobierno. Las tendencias discursivas del indianismo – expresado en el

paradigma del Vivir Bien- junto al socialismo comunitario no logran puntos de encuentrocon el nacionalismo ni siquiera en el plano discursivo y mucho menos en la prácticacuando de economía nacional se trata. El indianismo enarbola aspectos de recuperaciónde valores culturales y de protección de la Madre Tierra; el socialismo comunitario,aspectos de justicia social donde también resalta aspectos culturales y valorescomunitarios para brindar condiciones de justicia e igualdad. Al nacionalismo le interesala intervención del Estado en la economía para la distribución equitativa de la riqueza, yno parece prestar mucha atención a aspectos de protección de la Madre Tierra y quizátampoco a los valores culturales. Esas diferenciaciones nos muestran también que en elnacionalismo parece seguir vigente el concepto de “lucha de clases” –cuando se buscaque el Estado garantice la re-distribución de la riqueza que evite la formación o vigenciade sectores ricos privilegiados–; en el indianismo, sobresale los conceptos “etnia ycultura”; y en el socialismo comunitario, la combinación de ambos –clase y etnia–.

Esta situación evidencia por tanto que en el actual Gobierno, en realidad co-existen variastendencias de izquierda, con encuentros y (des)encuentros entre sí tanto en el planodiscursivo como en el práctico. Sin embargo unas se imponen en el plano discursivo yotras en el plano práctico; el indianismo es central en el discurso pero se muestramarginal en la práctica gubernamental; el nacionalismo es importante en el discurso y se

impone en la práctica gubernamental, sobre todo cuando se abordan temaseconómicos. El discurso del Vivir Bien y el indianismo en general son centrales porqueayudan a mantener una imagen de un gobierno que representa al sector campesinoindígena y que es promotor del “proceso de cambio”. El discurso del Vivir Bien, ayudatambién a posicionarse – sobre todo a nivel mundial– como gobierno indígena defensorde la Madre Tierra por el hecho de promover la recuperación de valores culturales deconvivencia armónica con la naturaleza. Ya en el plano práctico y de aplicación depolíticas, la corriente indianista, encuentra sus dificultades, eso se pudo evidenciar en elcaso analizado sobre las reacciones por parte del CONAMAQ y el TIPNIS frente aldiscurso de protección de la Madre Tierra y las prácticas del actual gobierno97.

Cuando se abordan temas económicos que son claves para mantener la legitimidad delgobierno, es la tendencia nacionalista la que sale a la palestra, puesto que se trata de laintervención del Estado en sectores llamados estratégicos –Hidrocarburos y minería–

97 Algo similar ocurre por ejemplo cuando se abordan temas como: economía comunitaria o empresas comunitarias; nilos mismos personeros de gobierno tienen muy claro el significado y la aplicación práctica de esos términos.



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que son la base de la economía de nuestro país98. Desde el planteamientogubernamental, estos sectores aseguran la generación de excedentes y también lamantención de políticas como los subsidios y la re-distribución de la riqueza. En esesentido, no es raro que el reclamo sobre la construcción de la carretera en el TIPNIS porparte de pueblos indígenas llegue a un “saco roto”, aunque sean indígenas –supuestos

vanguardia de la nueva izquierda– los que rechazan esa iniciativa. En la práctica ya primanotros intereses considerados estratégicos para el país, que son la base de la economíaactual.

Esa convivencia con encuentros y (des) encuentros de tendencias de izquierda, es quizála característica de esa “nueva izquierda” en el actual gobierno boliviano, aspecto que,dada la realidad actual –de una economía basada en el extractivismo en un contextoglobalizado–, permite incluso la convivencia, no deseada pero inevitable, con modeloscapitalistas o neoliberales como lo acusan sectores indígenas contestarios. Esaacusación quizá es evidente, por ello resultó difícil abolir en términos reales el famoso

decreto –neoliberal– 21060, como parece difícil evitar negociar con empresariosagroindustriales –que siguen modelos capitalistas– cuando se abordan temas de crisisalimentaria99.

Si bien se puede hablar de la presencia de una “nueva izquierda” en el actual gobierno,esta nueva izquierda no deja de tener contradicciones internas porque por un ladoexpresa una clara postura anti-neoliberal y anticapitalista, pero al mismo tiempo se ve enla necesidad de convivir –sin aceptarlo– con esos modelos rechazados; quizá porque almomento no hay otro camino dada la realidad económica actual. Una nueva izquierdaque, si bien enarbola al sector indígena y sus valores culturales, al mismo tiempo ignoralas voces y demandas de este sector como se ve en el caso del conflicto en el TIPNIS.

98 El 80% de la economía nacional se basa en Hidrocarburos y Minería (Nordgren, 2010).99 El actual gobierno, tanto en el Plan Nacional de Desarrollo como en el Plan de Desarrollo Sectorial Agropecuariopresentado el año 2007, mostraba una clara postura de favorecer a los productores campesino indígenas más que alsector agroindustrial o empresarial. En la reciente escasez de alimentos ocurrida en nuestro país se puso en discusiónsobre los sectores que se constituyen en garantes de la provisión de alimentos y luego se veía a este mismo gobierno volcarsu mirada al sector empresarial más que al sector campesino. El sector campesino provee cerca del 40% de los alimentosen el país, el restante lo provee el sector agroindustrial y las importaciones (CEDLA 2010).



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La izquierda frente a los mercados:

Construcción de la base/estructuradel proceso de cambio

Carlos Cabero y Alberto Ponce

El recorrido histórico del Movimiento Al Socialismo (MAS) en función de gobierno, desdesu asunción hasta el presente, se ha caracterizado por la aplicación de un conjunto depolíticas orientadas a “transformar” el Estado de forma “radical”. Fundamentado en una

concepción político-doctrinaria de fuertes raíces indígena-originarias y marxistas, hapropuesto y ejecutado (en algunos casos) importantes cambios en la dinámicaeconómica del país, destacando el papel protagónico que se le ha asignado al Estado.

Las vicisitudes en la construcción de un modelo económicode “cambio”

Un ejercicio de valoración sobre el “sentido” de las políticas aplicadas, en el ámbitoeconómico, exige la consideración ineludible, a nuestro entender, de dos documentos: elPlan Nacional de Desarrollo: Bolivia digna, soberana, productiva y democrática para Vivir

Bien y la Constitución Política del Estado que dio origen al Estado Plurinacional de Bolivia.

El Plan Nacional de Desarrollo

Se podría afirmar que las primeras “señales” de los objetivos orientadores del proyectohistórico del MAS se encuentran expresados en el Plan Nacional de Desarrollo (PND)100.Entre los más importantes se encontraban: el cambio del patrón de desarrollo, eldesmontaje del colonialismo neoliberal y la descolonización del Estado.101

Asimismo, el documento expresa que “la convocatoria a la Asamblea Constituyente, la

Nacionalización de los Hidrocarburos y otras medidas…son parte del propósito y loscaminos orientados a consolidar” el periodo de transformaciones.

100 “Las propuestas y orientaciones del Plan Nacional de Desarrollo (PND) son la base de la transición que iniciará eldesmontaje del colonialismo y neoliberalismo, y servirán para construir un Estado multinacional y comunitario que permitael empoderamiento de los movimientos sociales y pueblos indígenas emergentes. Su principal aspiración es que losbolivianos y bolivianas vivamos bien.”(2006)101 “El cambio del patrón de desarrollo se inicia con la conformación de la matriz productiva nacional; el desmontaje delcolonialismo neoliberal; la descolonización del Estado y la construcción de la nueva identidad boliviana, basada en lainstitucionalidad multinacional con enfoque comunitario.” (PND: 2006)



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Todos estos objetivos se subordinaban al objetivo (estratégico) de remover “desde susraíces, la profunda desigualdad social y la inhumana exclusión que oprimen a la mayoríade la población boliviana, particularmente la de origen indígena.”102

A partir de estos objetivos, en el ámbito económico del Plan, en el capítulo “Boliviaproductiva”, propugna la construcción de una nueva matriz productiva, que cambie elpatrón primario exportador, sustentado en dos sectores: “1) el estratégico generador deexcedentes, compuesto por hidrocarburos, minería, electricidad y recursos ambientales;y 2) el generador de empleo e ingresos “conformado por actividades privadas en susdiversas formas de organización y escala: micro, pequeña, mediana y gran empresa,cooperativas y artesanías en el ámbito urbano; grandes, medianas y pequeñas empresas,organizaciones económicas campesinas (OECAS), comunidades campesinas, pueblosindígenas, cooperativas y artesanos en el área rural”. (PND, 2006: 93)

Basados en estas premisas, el sector estratégico debería constituirse con un activo y

protagónico papel del Estado, involucrándose de forma directa en el ámbito de laproducción; en cambio, el segundo sector constituiría un escenario de “sana convivencia”entre las diversas formas de organización productiva.103

En el ínterin, entre la ejecución del PND y la aprobación de la nueva “Constitución Políticadel Estado”, el gobierno aprobó un conjunto de disposiciones orientadas a operar lastransformaciones previstas.

El 1º de mayo de 2006, mediante Decreto Supremo Nº 28701, el gobierno nacionaliza“los recursos naturales hidrocarburíferos del país. El Estado recupera la propiedad, la

posesión y el control total y absoluto de estos recursos”, determinando el controlmonopólico del sector por parte de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)104.

102 Este objetivo central requiere del cambio del patrón de desarrollo primario exportador, que se caracteriza por la explotacióny exportación de recursos naturales sin valor agregado, y de la constitución de un nuevo patrón de desarrollo integral y diversificado,que consiste en la agregación de valor y la industrialización de los recursos naturales renovables y no renovables…” (PND: 2006)103 Todo esto, orientado a establecer las base materiales que permitan alcanzar el objetivo central del “vivir bien”, consideradocomo “… la expresión cultural que condensa la forma de entender la satisfacción compartida de las necesidades humanas másallá del ámbito de lo material y económico, porque incluye la afectividad, el reconocimiento y prestigio social, a diferencia delconcepto occidental de ‘bienestar’ que está limitado al acceso y a la acumulación de bienes materiales”. (PND, 2006: 10)104 El Decreto expresa:“Artículo 2. I. A partir del 1 de mayo del 2006, las empresas petroleras que actualmente realizan actividades de producción de gasy petróleo en el territorio nacional, están obligadas a entregar en propiedad a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos YPFB,

toda la producción de hidrocarburos.II. YPFB, a nombre y en representación del Estado, en ejercicio pleno de la propiedad de todos los hidrocarburos producidos enel país, asume su comercialización, definiendo las condiciones, volúmenes y precios tanto para el mercado interno, como para laexportación y la industrialización.

ARTICULO 3. I. Sólo podrán seguir operando en el país las compañías que acaten inmediatamente las disposiciones del presenteDecreto Supremo, hasta que en un plazo no mayor a 180 días desde su promulgación, se regularice su actividad, mediantecontratos, que cumplan las condiciones y requisitos legales y constitucionales. Al término de este plazo, las compañías que nohayan firmado contratos no podrán seguir operando en el país.II. Para garantizar la continuidad de la producción, YPFB, de acuerdo a directivas del Ministerio de Hidrocarburos y Energía, tomaráa su cargo la operación de los campos de las compañías que se nieguen a acatar o impidan el cumplimiento de lo dispuesto enel presente Decreto Supremo.”



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Respecto del tema agrario, la propuesta de cambio consignada en el PND tiene ladenominación de “revolución diversificada e integrada basada en el trabajo y elconocimiento” y se planteaba la tarea de encarar una Transformación Estructural Agraria(TEA) para superar de manera permanente y sostenible, los problemas de pobreza de laspoblaciones originarias e indígenas, comenzando por transformar la estructura de tenenciay de acceso a la tierra, favorecer el desarrollo de innovaciones tecnológicas, y delconocimiento, aumentar la cobertura de riego, ampliar el acceso al financiamiento, dinamizarmercados de productos agropecuarios e inserción en nuevos mercados, cambiar la matrizenergética de la producción agroindustrial, orientándose hacia la agricultura ecológica,priorizando a las unidades pequeñas y medianas en integración vertical con la agroindustriay complementando agricultura con otras actividades no agropecuarias como turismo,manufacturas, artesanías, servicios, procesos de preindustrialización, que permitandesarrollar procesos de desarrollo local.105

Dentro este marco, y como respuesta a la demanda expresada por la CIDOB y el Bloque

Oriente, el 28 de noviembre se aprobó la Ley Nº 3545, de Reconducción Agraria, como unimportante avance de lo que el gobierno denominó “revolución agraria”106. En el ámbitosocial, se aprobaron la otorgación de la “Renta Dignidad”107 y la del “Bono Juancito Pinto”108.

105 Mediante las siguientes acciones: Transformación de la estructura de tenencia y de acceso a la tierra.Dinamización de las capacidades de nuevas comunidades y territorios, mediante asentamientos humanos asistidos en tierrasfiscales y gestión territorial, que incluye el fomento de la autogestión indígena de sus Tierras Comunitarias de Origen (TCOs) y elfomento del desarrollo económico social de comunidades campesinas, pueblos indígenas y originarios.

Afianzamiento del ejercicio de derechos de los Pueblos Indígenas y Originarios” para implementar un marco normativo e institucionalfavorable al ejercicio pleno de sus derechos.Desarrollo Tecnológico de la producción Agraria”, para impulsar la investigación, inventariar y validar tecnologías nativas, apropiartecnologías externas y promover la adopción participativa del conocimiento tecnológico con modalidades de aprender haciendo,escuelas de campo y de campesino a campesino.Producción para la soberanía alimentaria, a objeto de alcanzar la autosuficiencia alimentaria, priorizando la recuperación deproductos locales orgánicos con alto valor nutritivo que han sido desplazados por alimentos foráneos, fomentando la agriculturaecológica en sus diferentes componentes.106 “La ´revolución agraria` proclamada por el gobierno no es un aspecto aislado dentro de la nueva reconfiguración del Estado.Es un tema central que refleja las demandas de los sectores indígenas y campesinos y que forma parte prioritaria del proceso decambio que se vive en el país. No obstante, un balance de los alcances logrados hasta hoy dan cuenta que –a pesar de losavances en la titulación de los territorios indígenas o TCO- queda mucho camino por recorrer y que el latifundio en Bolivia no hasido afectado significativamente.” (Urioste, 2009: 10)107 La Renta Dignidad se empezó a pagar a partir de 1 de febrero de 2008 a todos los bolivianos y bolivianas mayores de 60años que viven en el país. El monto de este beneficio asciende a 2.400 Bs. anual si la persona no recibe ningún tipo de pensióndel Estado, en cambio si cobra una jubilación o algún tipo de renta recibe 1.800 Bs. anualmente.La renta se puede cobrar cada mes, es decir si uno recibe 2.400 Bs. por año, cada mes puede cobrar 200 Bs. o si uno recibe1.800 Bs. por año puede cobrar 150 Bs. mensualmente.108 Mediante Decreto Supremo N° 29321 de 24 de octubre de 2007, se establecen el marco institucional y los mecanismos técnicosoperativos, administrativos y financieros para la entrega del Bono “Juancito Pinto”, instituido como un subsidio de incentivo a lapermanencia escolar en 2006. La medida se inscribe en el marco de la Política de Protección Social y Desarrollo Integral Comunitariodel Plan Nacional de Desarrollo, y es definida en consideración a que “las tasas de inasistencia y abandono escolar no se han reducidode manera significativa, afectando la permanencia escolar y el cumplimiento de los Objetivos del Milenio”.El monto del bono alcanza a 200 Bolivianos, siendo los beneficiarios niños y niñas del nivel primario hasta 6° grado, así como alumnosde educación especial y de educación juvenil alternativa.En 2007 se incorporó al beneficio a los escolares de séptimo de primaria y en la gestión 2008 se amplió el pago para los alumnosde octavo de primaria.



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La Constitución Política del Estado Plurinacional

La Constitución Política del Estado (CPE), en su Parte Cuarta, Estructura y Organizacióndel Estado, Título I, Organización Económica del Estado, en su Artículo 306 expresa:

El modelo económico boliviano es plural y está orientado a mejorar la calidadde vida y el vivir bien de todas las bolivianas y los bolivianos.

La economía plural está constituida por las formas de organización económicacomunitaria, estatal, privada y social cooperativa.

La economía plural articula las diferentes formas de organización económicasobre los principios de complementariedad, reciprocidad, solidaridad,redistribución, igualdad, seguridad jurídica, sustentabilidad, equilibrio, justiciay transparencia. La economía social y comunitaria complementará el interésindividual con el vivir bien colectivo.

Las formas de organización económica reconocidas en esta Constituciónpodrán constituir empresas mixtas.

El estado tiene como máximo valor al ser humano y asegurará el desarrollomediante la redistribución equitativa de los excedentes económicos en políticassociales, de salud, educación, cultura y en la reinversión en desarrolloeconómico productivo.

Respecto del papel del Estado, el Artículo 316 del Capítulo Segundo, Función del Estado

en la Economía, expresa, de forma detallada, el papel central que “juega” el Estado enla actividad económica, tanto en el ámbito de la producción como de la distribución dela “riqueza”109.

109 Conducir el proceso de planificación económica y social, con participación y consulta ciudadana. La ley establecerá un sistemade planificación integral estatal, que incorporará a todas las entidades territoriales.Dirigir la economía y regular, conforme con los principios establecidos en esta Constitución, los procesos de producción, distribucióny comercialización de bienes y servicios.Ejercer la dirección y el control de los sectores estratégicos de la economía.Participar directamente en la economía mediante el incentivo y la producción de bienes y servicios económicos y sociales parapromover la equidad económica y social, e impulsar el desarrollo, evitando el control oligopólico de la economía.Promover la integración de las diferentes formas económicas de producción, con el objeto de lograr el desarrollo económico y social.Promover prioritariamente la industrialización de los recursos naturales renovables y no renovables, en el marco del respeto y

protección del medio ambiente, para garantizar la generación de empleo y de insumos económicos y sociales para la población.Promover políticas de distribución equitativa de la riqueza y de los recursos económicos del país, con el objeto de evitar ladesigualdad, la exclusión social y económica, y erradicar la pobreza en sus múltiples dimensiones.Determinar el monopolio estatal de las actividades productivas y comerciales que se consideren imprescindibles en caso denecesidad pública.Formular periódicamente, con participación y consulta ciudadana, el plan general de desarrollo, cuya ejecución es obligatoria paratodas las formas de organización económica.Gestionar recursos económicos para la investigación, la asistencia técnica y la transferencia de tecnologías para promoveractividades productivas y de industrialización.Regular la actividad aeronáutica en el espacio aéreo del país.



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El debate en torno al carácter del Estado desde unaperspectiva económica.

La política de “nacionalización” y el “exacerbado” intervencionismo del Estado en laeconomía (criticado por representar la reedición del “Capitalismo de Estado” de los años

50), a la luz de los proyectos de izquierda del siglo pasado, constituirían elementosprogramáticos fundamentales en la “lucha por la liberación” y la necesidad de construirel Estado-nación. En los años setenta, el principal artífice de la última nacionalización delos hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, expresaba que “la actitud frente a los recursosnaturales define la naturaleza de los gobiernos”110 y a partir de su control emprender elproceso de industrialización.

Hoy no sólo estas tareas se encuentran en debate, sino también el carácter plural de laeconomía, que consagra la CPE. Las voces críticas se expresan desde los sectores dela oposición hasta las de algunos ideólogos del proceso de cambio; los primeroscuestionando el excesivo intervencionismo del Estado y los segundos demandando laprofundización del “proceso cambio” que permita ingresar “a la forma de socialismocomunitario”, socialismo que “recoge las banderas socialistas por la igualdad y la justicia,en un proceso de radicalización de la democracia, combinándolas con el proyecto dereconstitución de las comunidades y de las naciones y pueblos indígenas originarios”.111

A diferencia de una lectura legal sobre las organizaciones económicas que conforman laeconomía plural, que no haría más que reconocer las distintas formas de propiedad delas unidades económicas, en la concepción de Raúl Prada la economía plural “significa

el reconocimiento de distintas estrategias y lógicas económicas, con lo que se rompe lapretensión insostenible de una absoluta omnipresencia lineal del desarrollo y la revoluciónindustrial, quebrando también la pretensión universal de la modernidad, abriéndose másbien a una heterogeneidad civilizatoria y cultural, además de heterogéneos recorridosalternativos al desarrollo y a la modernidad, proponiendo composiciones ycombinaciones singulares entre revolución tecnológica, recuperación de tecnologíastradicionales, reconstitución de la economía comunitaria, desenvolvimiento deemprendimientos sociales, en el contexto jurídico-político donde el pueblo boliviano seconvierte en el propietario absoluto de las riquezas naturales, convirtiéndose el Estadoen un mero administrador.”112

110 Título de su exposición en el Foro-Debate: Gas, Petróleo y Miseria, organizado por la Federación Universitaria Local(FUL) de la Universidad Mayor de San Simón-UMSS. 1978.111 Prada, Raúl: ¿Qué es el socialismo comunitario? En: Periódico Cambio 01 de marzo 2010.112 Prada, Raúl. Más allá del capitalismo y la modernidad.



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Por tanto, en este proceso de transición, se concibe “un Estado interventor, un Estadoregulador y un Estado encargado de promover un modelo productivo a través de laindustrialización de los recursos naturales.”113

En base a estos elementos, el “sentido” del conjunto de políticas aplicadas por elgobierno del MAS, hasta el presente, parecen trascender las concepciones propias dela izquierda “tradicional”, como la “lucha” anti-imperialista, la construcción del Estado-Nación y la transformación productiva basada en la industrialización de los recursosnaturales, centrando sus esfuerzos teóricos- doctrinarios en el “Vivir Bien” (VB)114

Sin embargo, a pesar de existir grandes avances interpretativos sobre el “Vivir Bien”, enlo económico, las reflexiones y exploraciones sobre la estructura que lo sustente, soninsuficientes, a lo sumo, se encuentran en estado germinal.

Una visión crítica sobre el “Proceso de Cambio”Muy bien podríamos comenzar esta aproximación al estudio de los arreglosinstitucionales y la organización de la economía nacional, cuestionando si es que existealgo en toda problemática económica-social115 que no esté centrado alrededor deconflictos. Sin embargo, este razonamiento, bien pronto da lugar a una observaciónmucho más importante, y es que de alguna manera se puede afirmar, que todos losesfuerzos de los gobiernos y en consecuencia de los ciudadanos están dirigidos a laresolución de conflictos. Esta continua necesidad de resolución de antagonismos, implica

una búsqueda y diseño de fórmulas o mecanismos, mediante las cuales lasanimosidades e intereses contrarios, dentro los agregados sociales116 pueden sercontenidos y controlados.

113 Lo complejo del modelo económico de la Constitución Política del Estado es su proceso de transición transformadora,parte de una economía plural, atraviesa la transición a un modelo productivo mediante la intervención del Estado, apuntaa un horizonte definido como economía social comunitaria, donde hay que potenciar la economía comunitaria comoalternativa; por otra parte, el modelo no concluye ahí, pues avanza a códigos que trascienden el economicismodesplazándose a una concepción ecológica, proponiendo un modelo ecológico que va más allá de la economía social ycomunitaria. El modelo ecológico se articula plenamente con el modelo civilizatorio y cultural de “vivir bien”.114 “En tanto lo común del discurso del Vivir Bien afirma la defensa de la vida en comunidad y en armonía con la naturaleza–bajo principios de reciprocidad, complementariedad, solidaridad, relacionalidad–, el desafío es cómo lograrlo en el contexto

de estructuras económicas, políticas y culturales plurales y de heterogéneas y hasta contradictorias racionalidades, sinriesgo de quedar en territorialidades acotadas. Además, el discurso del Vivir Bien debe rebasar su condición de “tipo idealde sociedad” y transformarse en una “posición y fórmula política” que enfrente adicionalmente la desigualdad y exclusiónsocial global, y también el daño real a la naturaleza (Spedding, 2010). El subrayado es nuestro.115 “Cuestión Social”, complejidad de problemas que derivan de la cooperación y convivencia de clases, estratos yestamentos sociales distintos, que forman una misma sociedad, pero están separados por hábitos, por su ideología yvisión del mundo. En: Tonnies, Ferdinand. Desarrollo de la Cuestión Social.116 “ Agregado Social” cuerpo organizado de individuos, que en determinadas circunstancias de tiempo, modo y lugar, luchapor la vida con otros grupos sociales, y se caracteriza por cierta homogeneidad de intereses, de creencias y de aspiraciones.



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La descripción de los tipos de decisiones a seguir, implican la exigencia de unaasignación de recursos escasos, potencialmente capaces de satisfacer necesidadesalternativas. A la interrogante de cuáles son los criterios de decisión con respecto a estaasignación, se trata de responder con referencia a la racionalidad, la misma que a su vezsupone la consideración de fines y medios. La significación de los conceptos dependen

de juicios de valor, siendo que esta búsqueda de racionalidad implica conocer primeroque efectos tiene la actividad económica, los resultados del proceso productivo, enrelación a la satisfacción de necesidades y, luego si ese efecto es controlado o controlablepor el gobierno, o resulta de un mecanismo independiente a su voluntad.

El sistema económico boliviano, como cualquier otro sistema, está sustentado porinstituciones políticas y económicas, donde los actores sociales se desenvuelven dentrode estas estructuras y, tienen comportamientos interdependientes, es decir, las accionesde unos influyen en el comportamiento de los otros, siendo que los mecanismos político-económicos que dispone la administración pública para enfrentar el presente y el futuro,

son abstracciones que se concentran en factores económicos, políticos, sociales,culturales, y legales que constituyen la base de la organización de la sociedad.

El nuevo “Modelo Económico”

Uno de los problemas esenciales que enfrentan las sociedades actuales y particularmentela sociedad boliviana, es encontrar una forma de organización económica que sea, a lavez, las más eficiente en la producción y la más justa en la distribución del ingreso y lariqueza. Con el término “Sistema o Modelo Económico” hacemos referencia a la formaparticular de arreglos institucionales con sus respectivos mecanismos de coordinación

–Mercado o Estado– que puede ser utilizado por una sociedad para organizar el procesode producción, distribución y consumo.

El modelo económico “irresuelto” del Movimiento al Socialismo, parte del supuesto de laherencia maldita del neoliberalismo, incapaz de eliminar o atenuar la pobreza, atacar lacorrupción y solucionar los problemas ancestrales y recurrentes del país. El conjunto dereformas económicas intentadas durante la administración del presidente Morales en losúltimos años ha tenido objetivos variables. Aunque el año de 2006, puede considerarsecomo el punto de partida de la administración del MAS, no es hasta el 2009 con la

aprobación de la nueva Constitución Política del Estado, que las nuevas institucionesque dan sustento al sistema político-económico están comenzando a conformarse117. Alprincipio, la reforma trataba de desmantelar las instituciones del modelo neoliberal,

117 La “Estructura Política Económica” hace referencia al marco institucional en el que se desenvuelven tanto el bloquedominante como los demás actores de la sociedad, subordinados e independientes. Los grupos dominantes o actoresprincipales del sistema boliviano son: los movimientos sociales organizados, el gobierno y el sector privado; en cuanto alcapital internacional representado por las empresas transnacionales que operan en Bolivia, se considera que sus interesescoinciden con los grupos empresariales nacionales.



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reemplazando la explotación de los recursos naturales por relaciones contractuales conlas empresas transnacionales mediante la llamada “nacionalización” o “migración decontratos”, que dada la coyuntura internacional de los altos precios de las materiasprimas, le resultó al Estado boliviano, bastante favorable en la apropiación de losexcedentes generados.

En esta etapa, el modelo era una noción confusa de algo radicalmente nuevo, el“capitalismo andino-amazónico”, expresión acuñada por el vicepresidente Álvaro GarcíaLinera, que fue inmediatamente criticada: el capitalismo es el capitalismo basado en elmercado y el interés propio. Está claro que sólo el ambiente institucional en el que operanlos mercados, y las políticas seguidas por los gobiernos, pueden estar orientadas afacilitar la iniciativa privada, en contraposición a la intervención del Estado en la economía,

justificada a partir de los valores socialistas tales como los de igualdad, consumo socialy seguridad social. Posteriormente García Linera ratificaba que el “nuevo ciclo estatal”necesariamente tendría su desenlace final en un “socialismo comunitario”, como

alternativa en la búsqueda de un diseño económico no articulado en torno a políticas“retrógradas” de acumulación y consumo compulsivo, que de alguna manera tratan demantener el status quo, es decir el nuevo orden se da como una respuesta integral yalternativa al capitalismo, cuyo orden social se convierte en un riesgo que amenaza lasubsistencia humana y a la naturaleza.

En esta lógica, según el vicepresidente, para alcanzar estos objetivos, es imprescindiblela “conquista del poder total”, que permitiría fortalecer al proceso de cambio y así crearuna nueva sociedad en lo económico, político y cultural, basada en un nuevo modo depensar y concebir el mundo, donde se prioriza la justicia social sobre el orden político;además de defender la intervención del Estado en la economía para corregir los fallos delmercado. La hegemonía se asentará en el sujeto indígena-originario-campesino, siendoindispensable para controlar esta hegemonía, la intervención del Estado en la educaciónmediante una pedagogía revolucionaria, y el control y fiscalización de la información –opinión, a través de los medios masivos de comunicación, constituyéndose el MAS enel gran unificador hegemónico.

De la ideología a la práctica

Un recorrido de los hechos acaecidos en el país, muestran al grupo de los movimientossociales con una participación política creciente, pero a su vez se ve que el gobierno haadoptado, decisiones de política económica contra los intereses del capital privado, loque ha provocado fuertes disputas entre los grupos empresariales y el gobierno. Sesupone que el gobierno tiene objetivos económicos propios, que con frecuencia tratande favorecer a los intereses de los movimientos sociales, sin embargo, al surgircompromisos del sistema capitalista de producción, y de su necesidad de legitimarse



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ante los movimientos sociales se generan conflictos. El problema surge de laresponsabilidad asumida por el gobierno de garantizar el bienestar social. Al haber sidolas demandas de los movimientos sociales el instrumento que facilitó y legitimó la llegadadel MAS a la presidencia, el gobierno adquirió la obligación de crear un aparato estatalbenefactor, para lo cual necesita incrementar sus ingresos fiscales para conseguir los

suficientes recursos, y así sostener sus políticas sociales de subsidios y bonos, sinembargo, el intento de incrementar el precio de los hidrocarburos en diciembre el añopasado, afectó directamente a los precios de los bines y servicios, particularmente de losalimentos desatando un proceso inflacionario, con el consiguiente malestar de lapoblación en general.

La dependencia del Estado boliviano de los intereses económicos internacionales, y elinterés del gobierno para crear una economía moderna e industrial muchas veces secontraponen, y no han permitido la creación de una economía diversificada de basesólida. Por un lado, cuando los trabajadores organizados exigen salarios mayores o

nacionalizaciones, arriesgan sus fuentes de empleo al reducir el rendimiento de lasinversiones o aumentar la inseguridad jurídica, lo cual desincentiva futuras inversiones enel país. Por el otro lado, mayores transferencias del sector público mediante subsidios enlos precios de alimentos e insumos, significa la descapitalización del erario nacional, quegeneran déficits públicos y, la disminución de la posibilidades de inversión pública, unode los objetivos de la actual administración, comprometido con la reactivación productivay desarrollo industrial.

El subdesarrollo y las formas de superarlo no constituyen en rigor, solo un problemainterno del país, razón por la cual, cualquier consideración sobre este fenómeno debebasarse sobre un análisis crítico de las relaciones del sistema económico mundial. Elmismo concepto de “subdesarrollo” así como los de desarrollo autónomo, nacional olatinoamericano, que se esgrimen hoy con insistencia, encuentran en este marco suinterpretación más cuestionada. ¿Qué significa desarrollo autónomo? ¿Es un procesono influido por lo externo? ¿Es la preservación de los valores propios? ¿Es elconfinamiento de los capitales extranjeros a un papel secundario? ¿Es suficiente lasoberanía nacional, como un proceso que surge del interior de la sociedad, y controladopor ella, como un impulso hacia el crecimiento económico basado en la explotación delos recursos naturales y sus energías humanas?

El desarrollo desigual entre campo y ciudad, tiene naturalmente fuertes implicacionessobre la estructura social y política de la sociedad boliviana. La delimitación de lo“moderno” y lo “tradicional” se superpone y avasalla las clasificaciones por grupossociales. Los intereses de los trabajadores del sector urbano- industrial, tienden a ser mássolidarios en lo político con los empresarios del sector moderno que con los campesinosy población marginada del resto del sistema. Dentro de este sector, las luchas sindicales



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devienen cada vez más en una reivindicación económica para obtener mayores salarios,dejando de lado todo impulso real a favor de un cambio profundo. Sobre estas bases,se produce un debilitamiento del potencial del cambio, y la transformación nacionalpodría acaso derivar en el futuro en términos de una reacción del sector campesinooriginario y los movimientos sociales, que rechazan consciente o instintivamente la visión

inmediatista de mayor bienestar, resultado de las demandas salariales, lo que conduceal resquebrajamiento del concepto de nación.

De cualquier manera, algunos de los condicionantes internos sufren directamente lainfluencia externa distorsionadora. Lo más auténtico de la sociedad boliviana es suestructura agraria con la preservación de la cultura rural indígena. El latifundio comoestructura agraria creo el marco propicio para el desarrollo excluyente, siendo que lospolos exportadores facilitaron la concentración del crecimiento urbano, con lasdenominadas islas de modernidad, edificadas sobre la marginación de la mayoría de lapoblación. La desigual distribución del ingreso encuentra en esa estructura económica

real su explicación más segura. La existencia de un “sector no moderno”, alimentadopor la desocupación, la saturación rural, los subempleos urbanos y la concentración dela propiedad agrícola. A su vez, esa distribución desigual del ingreso es el sustento delas “islas de modernidad”, cuya expansión exige la diversidad creciente del consumo dereducidos grupos.

La capacidad de movilización de recursos financieros, es un factor fundamental paradinamizar el proceso de desarrollo. Esta capacidad de movilización requiere métodos yformas diferentes, que deben ser aplicados en sectores productivos de los hidrocarburosy la minería, con la posibilidad cierta de industrialización de las materias primas, situaciónque plantea la necesidad de buscar formulas para incorporar al sector privado al procesoeconómico a través de la movilización de capitales financieros.


En el primer período de los años 2006 y 2010, la administración del MAS entendió quela mejor manera de reducir la pobreza era mediante la inversión en infraestructura, larápida industrialización, la substitución de importaciones, asignándole un rolpreponderante al Estado como promotor y actor principal de las acciones del desarrollo

y el crecimiento económico dando lugar a un “Capitalismo de Estado”.En la actualidad, en vista de las dificultades macroeconómicas e incremento de la deudapública, se está prestando especial atención a las medidas de política económicaencaminadas a restablecer el crecimiento económico, de donde surgen corrientesopuestas al estatismo, como una respuesta viable al subdesarrollo. Sin embargo, esimportante resaltar que ya durante el primer periodo, se comenzó a destacar la



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importancia de la protección al medio ambiente (madre tierra) y del papel preponderantede los sectores originarios campesinos en la lucha contra la pobreza, tratando deaminorar la pobreza mediante el apoyo a los proyectos de desarrollo rural integrado(riego) y de urbanización (prestación de servicios básicos).

Después de seis años de intentos enérgicos pero confusos de implantar una reformaeconómica, el país ha entrado en un periodo extraordinario de tensiones políticascaracterizadas por un desequilibrio económico. Los cambios parece que no han alteradoel paradigma productivo nacional, siendo que la destrucción de la institucionalidadneoliberal ha sido exitosa, pero todavía no se vislumbra la instauración de un sistemaeconómico viable. Al comenzar este 2011, el desarrollo económico, político y social enBolivia, no es diferente de aquellos países donde ya se ha consolidado la democracia, almismo tiempo que constatamos que las reformas económicas se han quedado cortasfrente a las promesas del modelo. Los hechos, nos muestran que el país está inmersoen una economía de libre mercado y que la mayoría de sus habitantes son pobres. Estas

son las condiciones que nosotros lo bolivianos compartimos con mucha gente en todoel mundo, las que también sueñan con prosperidad y democracia, por tal motivo, sepuede esperar que nosotros también enfrentemos todos los problemas normales de laeconomía, la política y la cultura del capitalismo pobre. Las crisis sociales no surgen dela nada, y algunas se pueden evitar con mucho esfuerzo y algo de suerte. En los añosrecientes muy poco se ha hecho para mejorar las cosas, lo que ha sido una pérdida detiempo, la población en general debe lidiar con servicios desactualizados e ineficientesy particularmente con la falta de empleo.

Para concluir, ante la pregunta, si el gobierno del MAS, es un gobierno de “Izquierda”, sepodría caracterizar a la actual administración con cualidades de la denominada izquierdanacionalista y populista, cuya veta se remonta a los años 30 del siglo pasado, que en sumarco conceptual, oponían a la nación con la anti nación, oligarquía versus movimientossociales. Su nacionalismo se nutre de su posición anti empresas transnacionales y losimperios que las respaldan, con la consiguiente postura en contra de la globalización,especialmente opuesta al libre comercio, ya que este se constituye en el mecanismo dedominación.

Una característica de este nacionalismo, es la búsqueda del control de las rentas

asociadas a los recursos naturales y una rápida industrialización, siendo el Estado elresponsable del cambio económico-social, para impulsar la justicia social, aunque estosignifique sacrificar la institucionalidad política, disfrazada de legitimidad democráticaformal, con responsabilidad fiscal en el manejo económico, en contraposición a la versióncontemporánea de la social democracia o “centro izquierda”, que acepta sin rodeos lademocracia representativa, con intervenciones puntuales en la economía a través de uncomponente social en sus políticas públicas.



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¿Mandar obedeciendo? Alejandro Carvajal Guzmán

El título que encabeza este artículo pertenece a una frase del presidente Evo Moralesutilizada varias veces, pero principalmente, cuando tuvo que retroceder derogando eldecreto que autorizaba la subida del precio de los combustibles el 31 de diciembre de2010, a horas del inicio de un nuevo año. La razón para este retroceso estuvobásicamente anclada en la presión callejera que ejercieron los movimientos socialesexpresando que aquella medida era de corte neoliberal.

A partir de ello, algunos nos preguntamos cuánto iba a durar el MAS en el poder cuandosus bases se encontraban en la calle gritando a los cuatro vientos: “Evo y Goni la mismaporquería”. Para quienes estamos dedicados a reflexionar los procesos sociales ypolíticos surgía una pregunta: ¿Cómo se puede definir el gobierno actual observandomedidas, acciones y discursos tan diversos?

En este artículo, se problematizará las condiciones actuales del Estado a partir de laslecciones que el socialismo nos dejó a lo largo de la historia. De esta manera, noscentraremos en “el mandar obedeciendo” desde la problematización de la abstraccióndel Estado, lo que Jorge Viaña rescata de la lectura de Marx respecto de la “fesupersticiosa en el Estado”. Dicha problematización se genera de la distancia creada por

la política respecto de lo social, cuando se olvida que el Estado es una producción socialy el mismo se convierte en una razón a defender “en sí misma”, lejos del mandarobedeciendo.

El problema revolucionario

La revolución del proletariado, para algunos, significaba la toma del poder y como mediose priorizaba la de instauración del Estado socialista caracterizado en la propiedad socialde los medios de producción, el cual buscaba como fin el establecimiento futuro de uncomunismo donde el mismo Estado fuera innecesario. El proceso histórico concluyó

demostrando que la disolución del Estado era imposible.

Es bueno recordar las tendencias socialistas, cuando se trataba de defender, potenciary sostener un Estado capaz de garantizar la propiedad social. Uno de los másimportantes líderes como de la revolución rusa como Stalin optó por el fortalecimiento delEstado al grado de justificar el sistema centralizado y totalitario para enfrentarse a losenemigos del socialismo soviético, en ese contexto el socialismo se transformó en un fin



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y no en un medio para llegar al comunismo (el estado de cosas donde todo perteneceríaa la comunidad y no habría la necesidad de un poder estatal). Por ello, la marcha haciael comunismo, intención de Marx y Engels, poco importaba. Estos hechos implicaron elcrecimiento del Estado y ello condujo a la consolidación de una nueva élite burocratizada,la cual fue llamada la “Nomenklatura”.

Del mismo modo, el problema de la burocracia de los estados socialistas se reprodujoen países como Yugoslavia, donde el presidente Tito tuvo que hacer frente a dos líneas:potenciar al Estado en contra de la propuesta de consejos obreros que participarían enlos beneficios y distribución de salarios –postura de los reformistas–, y quienesconsideraban que la participación debería ser gradual –postura de los tradicionalistas–.

Aunque luego se dio cuenta de los excesos del Estado y su burocracia iniciando “laRevolución Cultural”.

Mao, un líder por naturaleza, también trató de luchar contra el burocratismo, en este

propósito creo la “Comuna” para transferirle poder, democracia al estilo de los “soviet”,y de esa manera “reducir las tres grandes diferencias: entre el campo y la ciudad; entrela industria y la agricultura; y entre el trabajo intelectual y el manual”118

El problema central está en la “fe ciega” que postula: “el Estado es necesario paraconsolidar el socialismo. ¿Cuándo desaparecerá este Estado para Lenin? El Estadopodrá desaparecer completamente cuando la sociedad pueda aplicar la norma: Paracada uno según su capacidad y de cada quién según sus necesidades”119. Al respectoes bueno citar en extenso la siguiente reflexión:

No es tan fácil, como creen los pragmáticos estatalistas, “utilizar” alEstado como herramienta de emancipación. No ha sido diseñado paraeso, todo lo contrario, fue diseñado y perfeccionado como herramientade opresión y sólo si se “demuele” (Marx) el Estado –junto con lasrelaciones sociales y de propiedad que defiende sistemáticamente– sepuede pensar excepcional y provisionalmente en la construcción de untipo de estructura, de un semi-estado comuna que se vayaautodisolviendo bajo las formas de autogobierno social. La pregunta es¿cómo avanzar en esta perspectiva, sin perder el principio de realidad?

Sencillamente hoy, o se olvida el horizonte estratégico emancipativo yse practica un pragmatismo conservador, o se pierde el principio derealidad y se empieza a hacer crítica abstracta y casi siempre malintencionada. El riesgo más grande del periodo que vivimos es quepuede empezar a ocurrir que, creyendo que hemos “tomado el Estado”,

118 Quezada, Miró, Francisco. Manual de Ciencia Política. Lima: Editorial Libros y Publicaciones. 2001.119 Quezada, Miro (Op. cit)





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del cambio constitucional. En este punto nos parece necesario rescatar otro discurso, enel cual se subrayan ambos términos dentro del bagaje vicepresidencial:

¿Dónde nos dirigimos ahora? ¿Dónde se dirige este proceso? Permítanme demanera muy breve introducir otro concepto. El concepto de Estado aparente yde Estado integral. El concepto de Estado aparente es un concepto de Marxque lo utiliza un gran sociólogo boliviano ya fallecido, René Zabaleta Mercado, yel concepto de Estado integral lo utiliza Gramsci. Llamamos Estado aparente –llama Marx, y Zabaleta- aquel tipo de institucionalidad territorial política que nosintetiza ni resume a la totalidad de las clases sociales de un país, sino querepresenta solamente a un pedazo de la estructura social, dejando al margen dela representación a una inmensa mayoría. En términos de la sociología política,podemos hablar de la inexistencia de un óptimo Estado-sociedad civil. El Estadoaparece entonces como un Estado patrimonial que representa y que aparececomo propiedad de un pedazo de la sociedad en tanto que le resto de la

sociedad (indígenas, campesinos y obreros) aparecen al margen del Estado sinninguna posibilidad de mediación ni de representación. Ese es el Estadoaparente.

Estado integral llama Gramsci a varias cosas en su reflexión, pero en particulara un óptimo entre cuerpo político estadual y sociedad civil. Y a una crecientepérdida de las funciones monopólicas del Estado para convertirse meramente enfunciones administrativas y de gestión de lo público. A esta lógica le llamaGramsci Estado integral121.

Al respecto también se puede rescatar el informe “El estado del Estado” publicado porel PNUD en Bolivia, donde los autores comparaban al Estado Boliviano como un quesosuizo cuyos agujeros representaban los vacíos presentes en diversos espacios sociales.Pero, lo que nos tiene que llamar la atención, en el último discurso, es el carácter de lafunción administrativa y de gestión que le otorga al Estado.

Para reflexionar este asunto citemos in extenso a Silvia de Alarcón quien afirma:

Una vez más polemizando con la izquierda estalinista y trotskysta, García Lineraasume que la revolución no se hace para elevar la productividad y la técnica,bajo el argumento de la condición de un país atrasado que caracteriza a Bolivia;esa es la tarea que le compete a la burguesía, no a las fuerzas revolucionariasdel trabajo. Aquí emergen varias falsificaciones que podrían muy puntualmenteser sintetizadas de la siguiente manera:

121 Álvaro García Linera. Discurso emitido el 9 de Abril de 2010. Facultad de Derecho UBA. En:http://www.taringa.net/posts/info/6804576/Discurso-De-Alvaro-Garcia-Linera-En-Derecho-UBA.html



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La característica del Estado socialista es ser un Estado en extinción, no un Estado quese perpetúa como espacio de poder de una burocracia estatal sobre el mundo deltrabajo, menos que expropia la voluntad colectiva pero se erige sobre ella “en nombre detodos”.

La tarea del Estado socialista es potenciar las luchas que conduzcan a la transformaciónde las relaciones sociales de producción, lo que implica la transformación del proceso detrabajo inmediato y la construcción de nuevas relaciones. En ese ámbito, la estatizaciónde los medios de producción puede ser –no lo es de hecho, en sí misma– una forma queasuma la propiedad socialista, pero únicamente ella va acompañada de larevolucionarización del proceso de trabajo inmediato, condición necesaria de ladesaparición de las antiguas relaciones y la aparición de otras nuevas que posibilitan lasuperación de la enajenación.

En cuanto a la planificación, ella sólo tiene sentido si es el resultado de un proceso de

apropiación que desarrollan los trabajadores sobre el proceso productivo y, con ello,sobre su destino. Pero, además, la planificación sólo adquiere un carácter revolucionariocuando permite ir superando la clásica separación entre el trabajo manual y trabajointelectual122.

Las condiciones y salidas iníciales A partir de lo expuesto es necesario verificar qué es lo que ocurre con las políticaspúblicas en nuestro país. Bajo el supuesto de que este es un gobierno socialista habríaque demostrar cuál es su relación y enfoque respecto al problema del Estado.

Como ya lo dijimos la disociación entre la esfera política y la social es difícil de unificar, elplanteamiento de la toma de poder no es posible vía urnas, el enunciado discursivo queapeló a la Revolución Democrática no desmantelo el sistema representativo. La crítica eneste sentido quizás vaya al cuoteamiento que se ha realizado para la elección dediputados y senadores como al saqueo de las instituciones públicas para cubrir lasdeudas. Ya lo advirtió el presidente Evo Morales en muchos de sus discursos, “existendirigentes que piensan que el apoyo al gobierno depende de las posibles pegas ypuestos en el aparato estatal”.

En reacción a este discurso algunos representantes de los movimientos socialesmanifestaron que el gobierno se estaba llenando de gente ajena al proceso de cambio,criticaron la burocratización y buscaron el pasado político de varias autoridades yfuncionarios públicos alegando que el proceso se tergiversaba.

122 Alarcon, Silvya de, Socialismo Comunitario en Debate sobre el Cambio. La Paz: Vicepresidencia del Estado Plurinacionaly FBDM. 2011:433-434



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En esta crítica al comportamiento gubernamental surgen posturas oficialistas queintentan defender el proceso. Una de las principales actividades de la vicepresidenciadurante los últimos cuatro años ha sido construir un marco teórico que defina y defiendasus acciones, en este marco se invitó a intelectuales reconocidos tales como Boaventurade Souza, Michael Hardt, Giuseppe Cocco, Hugo Zemelman, Gayatri Spivak, entre otros.

Una de las últimas visitas fue la del esloveno Slavoj Zizek, quien desde su postura lee concuidado a los anteriores invitados. En medio de las disputas, su visita quizás tuvo unadoble finalidad, la primera estaría relacionada con dar un empujón teórico alfortalecimiento del Estado central, ya que Zizek ve como ilusos los proyectoscomunitaristas; por otro lado, tampoco ve con buenos ojos la intervención de diversosactores en este fortalecimiento del Estado.

Por otro lado, existe una lectura crítica de los pensadores bolivianos que acompañaronel proceso desde la producción intelectual, ya resulta evidente el distanciamiento del

grupo comuna frente a uno de sus integrantes –Álvaro García Linera–. Como ejemplopodemos citar la postura de uno de sus pilares fundamentales, Luis Tapia:

… la nueva Constitución Política boliviana básicamente sigue las pautasdesarrolladas por la forma de reconocimiento político multicultural […] estaprimacía constitucional consiste en organizar el núcleo del gobierno centralsegún los criterios de diseño y construcción de instituciones propias del Estadomoderno y con base en la doctrina jurídica del derecho positivo, que tienen laspretensiones de universalidad y validez general para todos los territorios delpaís, a pesar de que durante las últimas décadas se ha criticado más o menos

extensamente su origen eurocéntrico y, cada vez más, también anglosajón. Eneste sentido, la primacía constitucional implica una reorganización del Estadoen torno al núcleo neocolonial, es decir, en torno a instituciones eurocéntricas123.

Lecturas como la ofrecida son continuas dentro del grupo comuna, quienes observancon sospecha el estatismo al que se ha adscrito el proceso de cambio quesupuestamente transformaría las relaciones de la esfera política y social, incrustada y“abigarrada” por una diversidad cultural y social. Bajo esa misma lógica se pueden leerlas críticas esbozadas por Raúl Prada u Oscar Vega124.

123 Tapia, Luis. Consideraciones sobre el Estado Plurinacional en Debate sobre el Cambio. La Paz: Vicepresidencia delEstado Plurinacional y FBDM. 2011:156-157.124 Para obtener mayor información se pueden leer sus artículos dentro de Debate sobre el Cambio, Vicepresidencia delEstado Plurinacional y FBDM. 2011.



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Se puede afirmar que la actual construcción y fortalecimiento del Estado pertenece auna postura socialista, lo que no se tendría claro es qué tipo de socialismo se quiereconstruir. Los condicionamientos internos que tiene el MAS devienen de expectativas

diversas, lo cual se puede verificar en las constantes dificultades en unir el discurso y lapolítica pública, las posturas desarrollistas e industrialistas se enfrentan con la vertienteindigenista, en tanto que también existen pugnas por la toma del poder estatal a travésde la delegación dirigencial de los movimientos sociales y la postura tecnocrática que sevisualiza en la designación de algunas autoridades. Respecto de los condicionamientosexternos, el sueño de un Estado socialista requeriría, en el actual contexto, de la suficientecapacidad estatal para convertirse en un capitalismo de Estado lo cual es posible enparte pero no absolutamente, esto se puede visualizar en la necesidad de inversiónextranjera y las negociaciones con transnacionales, postura que además esexplícitamente negada por el vicepresidente.

Lo que sí podemos asegurar es que el potenciamiento del Estado es fundamental parala línea gubernamental que tiene el mando, aunque esto signifique tener divergenciascon los movimientos sociales y los pueblos indígenas. El proyecto de un Estado integralestá puesto sobre la mesa, con la condición de quien pone los cubiertos, organiza lossitios y dirige la charla, o sea un gobierno central dirigido por una cúpula.



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NÚMEROS

ANTERIORESNº 2 Ética y Política

Nº 4 Globalización

Nº 5 Ampliación de la Representación Política

Nº 7 Justicia comunitaria

Nº 21 La construcción de la ciudadanía en Bolivia

Nº 22 Los movimientos sociales en Bolivia

Nº 23 Crisis y Reforma Estatal: Elementos para el debate

Nº 24 La gestión de la riqueza hidrocarburífera y los desafíos del desarrollo

Nº 25 Inflación: razones y reflexionesNº 26 Dilemas de la propuesta Constitucional

Nº 27 Racismo en Bolivia: discursos y contra discursos

Nº 28 CORRUPCIÓN Y PODER. Cultura, habitus y recorridos en Bolivia

Nº 29 Posibilidades de la interculturalidad

Nº 31 Entre la historiografía Cochabambina y la descolonización

Nº 32 AUTONOMÍA: ¿Espejismo político o realidad?

Nº 33 Una lectura crítica a la Ley contra el racismo y toda forma dediscriminación





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Estudios y Ensayos. ¿El MAS es de izquierda?