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EVALUACIÓN DEL PROGRAMA
“TALLERES INTERCULTURALES SOBRE VIOLENCIA Y EQUIDAD DE GÉNERO EN COMUNIDADES INDIGENAS DE NAVOLATO”
Ilianne Castro Sánchez
José David Pérez Ramos
INDICIE
CAPITULO I: PROTOCOLO DE INVESTIGACION
1.1.-Antecedentes del programa
1.2-Hipótesis
1.3-Objetivo General
1.3.1-Objetivos Específicos
1.4-Preguntas de Investigación
1.4.1-Pregunta General
1.4.2-Preguntas Específicas
1.5 -Justificación.
1.6 -Planteamiento del Problema
CAPITULO II: MARCO TEORICO
2.1- Violencia ejercida contra la mujer
CAPITULO III. EL PROGRAMA TALLERES INTERCULTURALES SOBRE
VIOLENCIA Y EQUIDAD DE GÉNERO EN COMUNIDADES INDIGE NAS DE
NAVOLATO
3.1- Diseño con enfoque de género, de las temáticas a abordar en materia de
violencia contra las mujeres para los tres talleres
3.2.- Elaboración y síntesis de los núcleos temáticos a abordar
CAPITULO IV: TRABAJO DE CAMPO
4.1-Metodología de la encuesta
4.2-Diseño de cuestionario
CAPITULO V: RESULTADOS Y RECOMENDACIONES
5.1-Resultados arrojados por la encuesta
5.2-Recomendaciones y conclusiones
BIBLIOGRAFIA
ANEXOS
Introducción
La violencia hacia las mujeres se ha convertido en esta década en unos de los
temas que ha recibido considerable atención de parte de la sociedad civil y
gobierno a raíz de las demandas a lo largo de los años.
El avance en la materia ha permitido identificar la problemática, sus causas y
posibles soluciones, pero sobretodo la conformación de instancias que respalden
a las mujeres agredidas y facilite un crecimiento personal y sus familias. A esto se
suma la situación que viven las mujeres indígenas en poblaciones del país en
donde las condiciones de vida y la violación de sus derechos se ha disparado de
tal manera, que la intervención debe ser inmediata.
Este apartado, relativo al recuento y evaluación de metas del programa de
intervención en materia de violencia y equidad de género en comunidades
indígenas de Villa Benito Juárez, Navolato, Sin., por el Instituto Sinaloense de las
Mujeres (ISMUJERES) en coordinación con la Comisión Nacional para el
Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), está organizado en dos partes.
En la primera parte se ofrece un panorama general de los principales
acontecimientos e instituciones que han desarrollado propuestas de atención a la
violencia hacia la mujer, en este caso ISMUJERES, desde los inicios de la
intervención, así como las iniciativas más recientes; revisando las experiencias de
espacios gubernamentales y no gubernamentales. En la segunda parte se
presentan los resultados de la búsqueda sistemática que se realizó para identificar
los modelos de atención desarrollados para la atención a las víctimas de la
violencia, y los resultados que arroja.
La primera sección comprendida en esta evaluación, analiza los antecedentes del
tema, incluyendo de manera destacada los grupos de mujeres y hombres cuyas
experiencias le permitieron guiar un trabajo pionero en la atención de la
problemática de la violencia intrafamiliar, cuando todavía enfrentaban carencias
legislativas y demandaban además una respuesta clara del Estado.
El segundo apartado se refiere al planteamiento del problema por el cual se
considera de vital importancia el estudio y evaluación de esta política pública
orientada a la violencia de género a mujeres indígenas, organizada de forma
cronológica y temática. En el tercer y cuarto apartado se describe el objetivo
general y sus objetivos específicos, donde conoceremos los para qué de esta
investigación, mismos que serán valorados al momento de las conclusiones.
En el quinto apartado se describe la justificación de la realización de este
programa y para que evaluarla, determinando su pertinencia como política
gubernamental. Aquí se tomará en cuenta las organizaciones feministas para la
atención de mujeres maltratadas.
Al finar esta primer parte, el marco teórico permitirá conocer a detalle definiciones
y leyes específicas entorno a la violencia de género, consideraciones de
especialistas y la revisión del programa de gobierno instituido hacia las mujeres
indígenas.
La segunda etapa comprende la metodología de investigación, gráficos y
conclusiones, mismos que permitirán identificar si la implementación de la política
pública estudiada cumple con las metas establecidas en su formulación y plan de
trabajo.
Finalmente, el propósito de esta evaluación es conocer si las personas
beneficiadas han encontrado mejores mecanismos de trato en la sociedad,
facilitando la convivencia.
Por lo que con esta evaluación se cubren dos importantes apartados: identificar y
sistematizar información disponible sobre las intervenciones que gobierno y la
sociedad han desarrollado en el campo de la reeducación a víctimas.
CAPITULO I: PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
1.1 Antecedentes del programa
La violencia contra las mujeres, debido a su condición de género, se da en todos los
ámbitos constituyendo un fenómeno extendido con características y matices diferentes;
convirtiéndose en uno de los grandes obstáculos para la plena incorporación de las
mujeres a la vida productiva de nuestro país.
Durante mucho tiempo la violencia hacia la mujer por parte de la pareja fue considerada
como un problema individual, privativo del ambiente familiar, en múltiples ocasiones
minimizado, ocultado y hasta justificado; ante el cual la sociedad y los organismos e
instituciones públicas no tenían nada que decir o hacer. Actualmente, la violencia contra
las mujeres ha dejado de ser un asunto privado, para convertirse y ser ubicado como un
problema social y de prioridad en las agendas políticas.
Los esfuerzos para erradicar la violencia hacia las mujeres, por medio de campañas de
difusión, capacitación y evaluación, nos han permitido saber que una gran cantidad de
casos se suscitan en diversas comunidades indígenas, convirtiendo el tema de violencia y
equidad de género en un problema social de grandes dimensiones; al grado de ser
retomado por el consenso internacional y avalado por la Organización de las Naciones
Unidas (ONU), considerando fundamental la eliminación de la violencia contra la mujer
para lograr la igualdad, el desarrollo y la paz (INEGI,2010).
Como resultado de las acciones de la ONU en el año 2000, se realizó la cumbre del
Milenio, donde se emitió la declaratoria denominada “Las Metas del Milenio”, del 6 al 8 de
septiembre de 2000, en la sede de Naciones Unidas, en Nueva York; cual consta de ocho
objetivos generales de desarrollo, relacionados con la erradicación de la pobreza, del
hambre, mejoras en la educación, equidad de género, sustentabilidad del medio ambiente
y mejoras en la salud. (www.inmujeres.gob.mx) En dichas metas se contempla a las
comunidades indígenas y las acciones a seguir para el apoyo de sus miembros.
Posteriormente en 2007, a través de la Resolución 61/29 el 10 de Diciembre la Asamblea
General de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, aprobó el
documento que especifica los derechos de los pueblos indígenas, donde se establece,
entre otras cosas, que las poblaciones indígenas tienen los mismos derechos que el resto
de la población, sin dejar de reconocer sus diferencias.
México como integrante y participe de las resoluciones de Naciones Unidas, impulsa
desde el gobierno federal políticas que incluyan el tema de la equidad de género y
sobretodo, el erradicar la violencia hacia las mujeres de mano del Instituto Nacional de las
Mujeres.
Dicha respuesta del gobierno mexicano contribuye al cumplimiento de esta demanda de
información generando y divulgando estadísticas con enfoque de género, para apoyar la
planeación y estructuración de programas que conduzcan hacia la equidad entre hombres
y mujeres, en los ámbitos sociales, económicos, políticos y culturales (Sitio Oficial
Instituto Nacional de las Mujeres).
Por su parte, el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 considera a los pueblos y
comunidades indígenas un grupo de atención prioritaria y expresa la necesidad de
focalizar acciones e instrumentar programas con el propósito de abatir los principales
rezagos sociales, particularmente en materia de alimentación, salud, educación y empleo.
www.pnd.presidencia.gob.mx
El Instituto Nacional de las Mujeres es la encargada de dichas acciones en coordinación
con la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, mismas que
articularán políticas públicas que faciliten la formación y apoyo a recursos humanos
indígenas en materia de detección, prevención y atención a la violencia familiar y de
género.
A través de la Dirección de Capacitación y Profesionalización del Instituto, se ha
coordinado a los Estados para que trabajen en proyectos de formación acorde a las
necesidades de los mismos, y tomando en cuenta el contexto de cada una de las zonas
con la problemática.
La Violencia de Género constituye un serio problema que tiene un alto costo económico y
social para el Estado, e impide el desarrollo pleno de los individuos. Actualmente en el
estado de Sinaloa no se cuenta con información estadísticas para cuantificar la
problemática sobre la violencia en contra de la población indígena femenina, con lo que
es necesario implementar proyectos de atención a este sector de la población que en
primer instancia permitan estimar y ubicar a la población indígena en la entidad para
conocer la magnitud de la violencia de género que presenta.
Con lo anterior, se facilitará formular acciones de prevención y atención de la violencia en
contra de la mujer indígena, a lo que el Instituto Sinaloense de las Mujeres será la
instancia encargada de diseñar, proponer y efectuar dichas acciones.
El Instituto Sinaloense de las Mujeres (ISMujeres) es un organismo público
descentralizado del Gobierno del Estado, con personalidad jurídica y patrimonio propios,
que tienen como objetivo establecer, coordinar y ejecutar las políticas públicas y acciones
provistas en el Programa Estatal de las Mujeres, mismas que propicien y faciliten la no
discriminación, la igualdad de oportunidades y el logro de una real equidad entre los
géneros; con la plena incorporación de las mujeres en la vida económica, política, social y
cultural, alentando su participación en todos los niveles y ámbitos de decisión y,
promoviendo ante las autoridades e instancias competentes los mecanismos necesarios
para la protección, observancia y promoción de los derechos de las mujeres
(www.ismujeres.gob.mx).
A través de su Departamento de Investigación y Capacitación el Instituto realiza una serie
de estudios sobre las comunidades indígenas y la problemática que viven, en particular la
violencia intrafamiliar.
El municipio de Navolato se consideró uno de los lugares con mayor problema en
violencia hacia la mujer, ya que de 1, 391,5601 (INEGI, Censo de población y vivienda
2010) mujeres que viven en el Estado a 2010, 67,210 se encuentran en este municipio.
Pero más importante aún es que del total de población de mujeres indígenas en el Estado
que corresponde al 1.1 porciento del total antes señalado, el 3.3 se encuentran en
Navolato2.
Por lo anterior, el Instituto Sinaloense de las Mujeres, y la Comisión Nacional para el
Desarrollo de los Pueblos Indígenas, desarrollaron los “Talleres interculturales sobre
violencia y equidad de género en comunidades indígenas de Navolato”, con metodología
de experiencias previas considerada en la Guía Sobre los Derechos de la Mujer Indígena
bajo la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación Contra la Mujer, permitiendo la elaboración de estrategias para las
problemáticas específicas de las mujeres indígenas en el municipio, recogiendo aportes
valiosas de experiencias previas que pudieran enriquecer la implementación de los
talleres.
Estos talleres fueron programados para su realización en la sindicatura de Villa Benito
Juárez, en el municipio de Navolato, Sinaloa; a razón de que el Instituto Sinaloense de las
Mujeres tiene como obligación el realizar labores preventiva y de conocimiento de la Ley
General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia; y porque dicha zona
está conformado por poblaciones indígenas provenientes de diversas Estados o
“población flotante”.
A la par, existe una cantidad elevada de casos de violencia intrafamiliar considerados por
CEPAVI (Consejo Estatal para la Prevención y Atención de la Violencia Intrafamiliar)
como tal, a raíz de las denuncias que llegan a sus instalaciones, sindicaturas y
comisarias.
Dichos talleres son consideraros como parte de la dinámica de atención y prevención de
la violencia en contra de la mujer, así como el establecimiento de políticas públicas que
refuercen los derechos de las mujeres y sus oportunidades de acceso a una vida digna,
en la cual puedan construirse como sujetos autónomos, constructores de un proyecto
individual y colectivo entorno a una sociedad sin discriminación y equitativa.
1.2 Hipótesis
Las Comunidades indígenas del municipio de Navolato, cuentan con los
conocimientos necesarios para afrontar problemas de violencia y equidad de
género a raíz de los módulos impartidos en las comunidades agrícolas de la
sindicatura de Villa Juárez, Navolato durante el 2009, además se encuentran con
la disposición de seguir tomando cursos sobre el tema.
1.3 Objetivo general
Evaluar los resultados en las metas de los talleres interculturales sobre violencia y
equidad de género impartido en poblaciones indígenas de Villa Benito Juárez, Navolato,
Sinaloa por el Instituto Sinaloense de las Mujeres en coordinación por la Comisión para el
Desarrollo de los Pueblos Indígenas.
Identificar si dichos talleres facilitan la orientación referente al fenómeno de la violencia de
género entre los habitantes hablantes de lengua indígena, y si cumplen con su propósito.
1.3.1 Objeticos específicos
1.1- Identificar el impacto de los talleres en el capacitado, principalmente su utilidad de
manera individual, familiar y social.
1.2-Estudiar el contenido educativo de los talleres, y determinar si dicha información es
aplicable en la vida cotidiana del participante.
1.4 Preguntas de investigación
1.4.1 Pregunta general de investigación
¿Se cumplieron en tiempo y forma en base a las metas establecidas en el
programa los tres módulos que se prepararon?
1.4.2 Preguntas especificas de investigación
A) ¿Se sensibilizo y capacito a la población hablante de lengua indígena,
acerca de las posibles manifestaciones de violencia de género?
B) ¿Se sensibilizó a la población hablante de lengua indígena de los tipos y
modalidades de violencia que la Ley General de Acceso de las Mujeres a
una Vida Libre de Violencia?
C) ¿Logro la población objetivo conocer que instancias visitar en caso de tener
un problema de violencia de género?
D) ¿Se realizaron los 3 módulos del Taller en tiempo y forma?
1.5 Justificación
Hacer frente a la falta de cobertura que las comunidades indígenas sufren, en su acceso a
servicios de formación, capacitación o sensibilización en materia de violencia intrafamiliar
y de género, requiere de la implementación de estrategias enfocadas a combatir la alta
marginación que presentan los pueblos indígenas en dicho rubro.
En ese sentido, y específicamente en cuestiones de género, es necesario establecer
mecanismos culturalmente sensibles, que permitan acercar los beneficios de convivir bajo
condiciones equitativas tanto a hombres como a mujeres indígenas, las cuales
constituyen un segmento altamente vulnerable de la sociedad en cuestiones de salud
pública, particularmente en el tema de violencia de género.
Si se toma en cuenta que el acceso a una vida libre de violencia, constituye por su
naturaleza un eje fundamental para el pleno desarrollo de las personas, se vuelve una
cuestión primordial acercar programas de sensibilización en dicho tema, a las mujeres
dentro de los pueblos indígenas debido a su doble vulnerabilidad: su marginación dentro
de la sociedad mexicana por ser indígena y la marginación en distintos ámbitos por ser
mujer.
La cuestión de la violencia de género en el plano situacional específico de las mujeres
indígenas, necesita una aproximación multidisciplinaria e intercultural, que alcance a
abarcar todas las implicaciones que tiene el hecho de acercarse a los pueblos indígenas
en el trasfondo de su universo cultural, y de los usos y costumbres que los caracterizan.
Ello responde, no solo a la necesidad de una metodología adecuada para entender los
rasgos específicos que marcan y bajo los que tienen lugar los casos de violencia en
contra de las mujeres; o de la correcta planeación de estrategias para realizar acciones
encaminadas a reducir la brecha de marginalidad y abandono de estos pueblos. Sino que
también es pertinente abrir espacio destinados a reconocer a los pueblos indígenas
respetando su proyecto cultural en toda la amplitud: desde la forma de recolectar su
historia hasta los trazos que como colectivo marcan en su futuro.
De lo anterior surge una cuestión más a seguir, aquella que se refiere a los criterios que
se deben tomar en cuenta, en el contexto de la violencia de género, para evaluar la
magnitud de dicho fenómeno. Debe tenerse en cuenta que las formas de “ser mujer” y de
“ser hombre” pueden atender a diferentes valores en las comunidades indígenas, y de ello
surge la problemática de si es valido juzgar bajo los mismos criterios a personas que se
rigen por parámetros culturales diferentes.
Dicha dificultad encuentra respuesta si se observa que no hay razón suficiente para
legitimar la violencia de género, ni al arbitrio de ninguna voluntad individual ni a la
apelación a normas de conducta o costumbres arraigadas con el tiempo como prácticas
comunes de convivencia. Tal como lo señala el informe complementario al estudio sobre
violencia contra las mujeres del Secretario General de de las Naciones Unidas, Mairin
Iwanka Raya: Mujeres Indígenas Confrontan la Violencia, los actos de violencia en
nombre de la tradición no constituyen bajo ninguna circunstancia un justificante para la
violencia en contra de las mujeres.
Los diversos tratados internacionales que México ha firmado en materia de género y
derechos humanos, tales como el CEDAW (Comité para la eliminación de la
discriminación contra la mujer) y la Convención de Bélem Do Pará ratifican el derecho de
las mujeres a tener acceso a una vida libre de violencia. Fruto de dichos instrumentos
jurídicos internacionales es la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia vigente desde el año 2007 y que tipifica los tipos y modalidades en que se
puede presentar la violencia hacia las mujeres.
A su vez, los diversos tratados y convenios internacionales que existen en materia
indígena, particularmente en referencia al convenio 169 de la OIT sobre Pueblos
Indígenas y Tribales en Países Independientes, exigen a los pueblos indígenas observar y
respetar los acuerdos alcanzados en materia de derechos humanos, tal como lo estipula
el Art. 8 de dicho convenio:
“… dichos pueblos deberán tener el derecho de conservar sus costumbres e instituciones
propias, siempre que estas no sean incompatibles con los derechos fundamentales
definidos en el sistema jurídico nacional ni con los derechos humanos internacionales
reconocidos. Siempre que sea necesario, deberán establecerse procedimientos para
solucionar los conflictos que puedan surgir en la aplicación de este principio.”
Hay que puntualizar que los derechos de los pueblos indígenas, son un tema de primer
orden en el desarrollo de una sociedad democrática, de carácter incluyente y justa.
Constituyen también, un asunto de derechos humanos el cual es impostergable y no debe
tratarse de manera unidireccional desde un enfoque totalizador. En vez de ello, la
sociedad mexicana debe entender que son los propios pueblos indígenas los que deben
constituir su proyecto y el modo en el que debe vincularse con el resto de la sociedad.
Es necesario buscar el adelanto de las mujeres indígenas desde sus comunidades,
proyectando esa incorporación a otros ámbitos de la sociedad; pero es necesario hacerlo
desde su óptica, respetando las formas en las que construyen y dan sentido a su vida.
Teniendo en cuenta todo lo que se ha venido mencionando, los talleres interculturales
sobre violencia y equidad de género en comunidades indígenas de Navolato encuentran
su justificación en la necesidad de difundir entre las comunidades indígenas, La Ley
General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en su calidad de
instrumento jurídico principal en materia de género dentro de la legislación mexicana.
Todo ello debe realizarse teniendo la particularidad cultural y la riqueza de las tradiciones
de los pueblos indígenas en Sinaloa. En esa idea, debe respetarse el horizonte cultural
bajo el que toma sentido y se representan así mismas las comunidades indígenas de la
entidad.
1.6 Planteamiento del Problema
La violencia intrafamiliar se ha convertido en un problema social de grandes dimensiones
en el mundo, y México no es la excepción. Organizaciones como Naciones Unidas (ONU),
han considerado fundamental la eliminación de la violencia contra la mujer para lograr la
igualdad, el desarrollo y la paz.
El tema de la violencia de pareja ha adquirido prioridad en las agendas de los gobiernos,
consecuencia de años de trabajo, sea de cabildeo o de provisión de servicios directos por
parte de los grupos de mujeres y feministas que definieron este tipo de violencia como un
problema de salud pública y una violación de los derechos humanos.
En la actualidad existe gran cantidad de evidencias y experiencias en relación con el
trabajo enfocado en la violencia de pareja, per aún con huecos notorios en las acciones y
la documentación de ellas. En muchos casos, las experiencias directas sobre la concesión
de servicios a víctimas y agresores toman en cuenta las especificidades socioculturales
que influyen o incluso determinan el éxito o el fracaso de un programa.
México es un país caracterizado por poseer una gran riqueza histórica cultural y una
diversidad poblacional; en buena medida, la población indígena confiere estas
características, tanto por su trayectoria histórica, como por su contrastante situación
socioeconómica.
En el caso de Sinaloa, la población hablante de lengua indígena está presente en todos
los municipios de la entidad; distribuidos en cinco estratos conformados de acuerdo con
el porcentaje que representa el número de hablantes, con respecto al total de población
de 5 y más años de cada uno de ellos, publicado por el Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática (INEGI, 2005)
Los municipios de Elota y Navolato forman el primer estrato; en éstos se presentan las
mayores proporciones con 13.6 y 7.0%, respectivamente; la mayor parte de esta
población proviene de otras entidades y llegan para emplearse de manera primordial en
actividades agrícolas, las cuales tienen gran importancia en esta región del país.
En el 2000 la distribución geográfica de la población hablante de lengua indígena de
Sinaloa, de acuerdo con la participación porcentual de los municipios sobre el total
Estatal, revela que, de las 49 mil 744 personas que constituyen este segmento
poblacional 26.3% residen en Culiacán y 17.9% en Navolato; ubicados en el primer
estrato, ambos municipios reúnen en conjunto a 44.2% de los hablantes; además, cabe
destacar que en estos mismos habitan más del 60% de los que dominan las lenguas
mixtecas.
En estas poblaciones de indígenas en el Estado, se han suscitado una cantidad
importante de situaciones de violencia, y Navolato en uno con mayor índice. Aún cuando
CEPAVI (Consejo Estatal para la Prevención y Atención de la Violencia Intrafamiliar), no
tenga una cifra exacta de los mismos, organismos como el Instituto Sinaloense de las
Mujeres pretende llevar acciones de prevención a estas zonas, mas aún cuando Navolato
no contaba con este tipo de programas.
El problema de violencia hacia la mujer, en particular indígena se encuentra con mayor
rezago, primeramente porque no se cuentan con estadísticas y evaluaciones que faciliten
en poder estudiar el tema, los programas destinamos a las poblaciones indígenas cuentan
con objetivos ambiguos y no hay un seguimiento documentado de casos de violencia
hacia mujeres indígenas.
Esta revisión servirá en la formulación de propuestas de evaluación para programas
destinados al sector, en materia de resultados, motivo de este documento, para que
cuente con un sólido soporte basado en la evidencia sobre las intervenciones efectivas,
además de identificar aquellas que son susceptibles de aplicarse.
CAPITULO II: MARCO TEORICO
2.1 Violencia ejercida contra la mujer
La violencia ejercida contra la mujer es un elemento que contribuye a la desigualdad de
género. Como una consecuencia de las diversas manifestaciones sociales que convierten
a la violencia de género, a principios del decenio de 1990 organismos internacionales
como la Organización de Estados Americanos y la Organización de las Naciones Unidas
la incluyeron como tema primordial en sus agendas de trabajo. Por su parte, la
Organización Panamericana de la Salud definió la violencia familiar como un problema de
salud pública que limita el desarrollo social y económico de las sociedades.
Más adelante, la Organización Mundial de la Salud, en su Reporte Mundial sobre
Violencia y Salud, dedicó un capítulo completo al tema de la violencia doméstica hacia las
mujeres y, además, el documento dejaba en claro los aportes de la salud pública en el
campo de la violencia en general. De esta manera, organismos internacionales,
institucionales de investigación y la sociedad civil organizada iniciaron desde sus propios
espacios de acción exploraciones para entender y atender el problema de la violencia
hacia la mujer.
En esa misma década, tanto en el contexto nacional como en el internacional, se
propagaron nuevos espacios de atención a la violencia desde diferentes ángulos. Este
periodo se caracterizó por la aparición de nuevos actores sociales, entre los cuales
figuran los esfuerzos de los sectores judicial, legislativo, académico y de salud (Hijar,
2008:11).
En México la coordinación entre la federación, los Estados y municipios para prevenir,
sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, ha permitido concretar políticas
públicas, mismas que ha sido partícipe de adecuaciones y evaluaciones de desempeño.
Para conocer a detalle como surgen estas propuestas es importante identificar su objetivo
y como se constituyen; a lo que podemos añadir como lo señala Luis Aguilar Villanueva,
“la política es un resultado de enfrentamientos y compromisos, de competiciones y
coaliciones de conflictos y transacciones convenientes” (Villanueva,2003).
Después de la Segunda Guerra Mundial fue espontáneo y lógico llamar “análisis de
políticas”, a la actividad de mejorar las decisiones de política mediante la incorporación
sistemática de teoría y método científico. Logrando así una nueva forma de ver y estudiar
las políticas. Esto da como resultado que generalmente entendamos como política pública
a los programas que un gobierno, cualquiera que sea, desarrolla en función de un
problema o situación determinada.
Pallares señala: las Políticas Públicas deben ser consideradas como un “procesos
decisional”, un conjunto de decisiones que se llevan a cabo a lo largo de un plazo de
tiempo. El estudio de las políticas públicas que plantea, debe realizarse, bajo tres
cuestiones: “Qué políticas desarrolla el Estado en los diferentes ámbitos de su actividad,
cómo se elaboran y desarrollan y cómo se evalúan y cambian” (López, 2003).
Las políticas públicas deben estar diseñadas para cada situación en particular, mismas
que servirán para erradicar un problema social, como se comentaba con anterioridad. En
lo que compete a la violencia de género hacia la mujer indígena existen enfoques teóricos
que ha merecido una amplia gama de estudios dedicados a los diversos aspectos de este
fenómeno, desde la inserción de los inmigrantes en el mercado laboral hasta la recreación
de algunas prácticas culturales y formas organizativas propias que favorecen la
conservación de la identidad étnica.
Para Cardoso de Oliveira, la identidad étnica es un tipo de identidad social que se
transmite sobre todo mediante mecanismos ideológicos y se expresa y renueva de forma
permanente en el nivel de la vida cotidiana (Oliveira, 1971:923). En este proceso la
identidad individual se articula con la identidad del grupo de pertenencia que transmite al
individuo la memoria histórica, la visión del mundo y la vida y su ubicación dentro de ellos
(Oliveira,1971).
PAG 139 la identidad indígena también está constituida por la definición impuesta por “los
otros” y se percibe como una condición social inferiorizada y estigmatizada, lo que implica
comportamientos y actitudes específicos tanto de los indígenas, portadores del estigma,
como de los otros hacia ellos (Goffman, 1980).
Lo que comenta Cardoso de Oliveira se refleja en la falta de estudios sobre las temáticas
de los pueblos indígenas, y la problemática social entorno a ellos. Existe una
vulnerabilidad que atenta a los derechos humanos de las mujeres indígenas, como lo
comenta
Rodolfo Stavenhagen, cuando describe que hasta hace veinte años, no se hablaba de los
indígenas, porque “nuestras teorías, nuestra visión de nosotros mismos, nuestros
enfoques sociológico, político y jurídico estaban cerrados y herméticos a los problemas de
los pueblos indígenas” (Stavenhagen, 2003:15).
Aun cuando el Artículo 2° de la Constitución Gener al de la República -Página oficial del
Congreso de la Unión- señala la obligación de impulsar el desarrollo de las zonas
indígenas, fortalecer las economías locales y mejorar sus condiciones de vida,
impulsando el respeto y conocimiento de las diversas culturas existentes en la nación;
en el caso de México, el Comité sobre la Eliminación de todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, ha expresado su preocupación acerca de “los elevados
niveles de pobreza y analfabetismo y las múltiples formas de discriminación que sufren las
mujeres indígenas” e insta al gobierno de México “a asegurar que todos los programas y
políticas de erradicación de la pobreza traten de manera explícita la naturaleza estructural
y las diversas dimensiones de la pobreza y la discriminación a que se enfrentan las
mujeres indígenas” (Castañeda, 2008:6).
La mayor parte de los pueblos indígenas viven en condiciones de extrema pobreza; y
aunque en los últimos años ha habido avances en la definición de la problemática
indígena en la conciencia nacional e internacional ( Psacharopoulos, 1994), aun existe –
de acuerdo con el propio Stavenhagen- mucha confusión en la opinión pública y las
disciplinas académicas “no han aprendido todavía a tratar sistemáticamente esta
problemática de la realidad en sus enfoques teóricos y disciplinarios”
(Psacharopoulos,1994:16).
Estos enfoques y disciplinas deben reflejarse en las políticas diseñadas, y en lo que
concierne a la violencia de género hacia la mujer indígena podemos puntualizar que
existe poca evidencia científica publicada acerca de las experiencias de intervenciones
realizadas en México y, en consecuencia, buena parte del material analizado y
presentado corresponde a publicaciones, entre las que destacan los manuales de
atención para víctimas y agresores; pero no especifica los resultados de evaluaciones a
políticas públicas implementadas hacia dicha problemática.
Toda política pública debe constar de un periodo de evaluación para conocer los aportes
de la misma, esto facilita en un sentido de aprendizaje, la detección de fallas, el
cuestionamiento de orientaciones la determinación del uso de recursos, pero sobretodo
de una transformación que buscamos se produzca y nos exige analizar si los esfuerzos
realmente están generando los resultados buscados (Lara, 2003:10).
Esta acción pública corresponde a una respuesta a una situación “socialmente
problemática”, la evaluación tiene como fin la verificación de cómo esta respuesta puede
ser juzgada como satisfactoria, lo cual implica considerar: los objetivos, los medios, el
funcionamiento de los sistemas relacionados, la naturaleza de las relaciones de los
servidores vinculados, las reacciones de los usuarios externos o de los beneficiarios
finales.
Por lo tanto, la evaluación consiste en el proceso necesario para medir el grado que están
alcanzando las finalidades deseadas, y sugerir los cambios que puedan situar las
realizaciones de la política más en la línea de espera. Este paso nos permite realmente
ver desde el comienzo algunas fallas o las que se vayan dando en el transcurso de la
implementación.
En esta evaluación realizada a los talleres interculturales sobre violencia y equidad de
género en comunidades indígenas de Navolato, se busca descubrir y seleccionar los
objetivos que son de interés público e identificar mejores sistemas para comprobar si las
alternativas seleccionadas se llevan a la práctica de forma eficaz y eficiente.
Dicha evaluación también esta motivada por la búsqueda de una identificación del
impacto directo sobre las decisiones públicas (Lara, 2003:11).Lo más típico es disponer
de una evaluación a posteriori para identificar si se fue eficaz en una política de acuerdo a
las decisiones tomadas y los instrumentos utilizados. Por lo que este proyecto contará con
una evaluación de metas con una evaluación ex post.
La evaluación ex post, también se conoce como evaluación terminal o evaluación a
posteriori, o bien de impacto y se concentra en observar si se obtuvieron los resultados
previstos y los efectos, tanto buscados como colaterales, atribuibles a las acciones o
proyectos instrumentados. Así la evaluación puede ser entendida como parte o asimilada,
a la planeación, como un sistema de seguimiento y como un control de las acciones y
recursos o un juicio sobre los mismos (Lara, 2003:17).
Respecto a la implementación valoraremos el concepto introducido por Barret y Fudge en
1981 (López, 2003) consideran la implementación “como un continum de elaboración y
acción en el cual tiene lugar un proceso negociador entre aquellos que quieren llevar la
política a la práctica y aquellos de los que depende la acción.”
Finalmente el enfoque utilizado será el tradicional dando énfasis fiscalizador y la
construcción de modelos genéricos de evaluación que presenten una serie de
limitaciones, pues tienden a establecer una visión lineal y mecánica de las dinámicas y
causales sociales (Lara, 2003:18) Además existe una limitada transparencia de sus
resultados y una escasa utilización para reformular políticas sociales.
Por lo anterior contribuiremos a lo establecido en la “Ley de Acceso de las mujeres a
una vida libre de violencia para el Estado de Sinaloa”, en su Artículo 38:
“Organizar, instalar, operar y mantener actualizado el Banco Estatal de Datos e
Información sobre los casos de violencia contra las Mujeres en el Estado de Sinaloa, las
investigaciones realizadas por los sectores público, social y privado sobre las causas,
características y consecuencias de la violencia, las medidas de prevención, atención y
erradicación adoptadas en esta materia y las evaluaciones de las mismas, así como la
información que generen las instituciones encargadas de promover en el Estado los
Derechos Humanos de las Mujeres”.
CAPITULO III. EL PROGRAMA TALLERES INTERCULTURALES SOBRE
VIOLENCIA Y EQUIDAD DE GÉNERO EN COMUNIDADES INDIGE NAS DE
NAVOLATO
3.1 Diseño con enfoque de género, de las temáticas abordadas en materia de
violencia contra las mujeres para los tres talleres .
Los núcleos temáticos a tratar en los talleres se detallaron en tres vertientes: la
perspectiva de género, violencia contra las mujeres y derechos humanos de las
mujeres. Establecer estos tres referentes de acción, permite construir un hilo
secuencial que sirva de guía y proporcione coherencia a los talleres a lo largo de
su implementación. De ese modo, con la perspectiva de género que significa y
reflexión y busca principalmente desnaturalizar, comprender como las diferencias
biológicas funciona como base para justificar las desigualdades sociales,
identificar vías para modificar la desigualdad de género y visibilizar experiencia de
los hombres. Género es una categoría de análisis. Estereotipos de feminidad y
masculinidad como se manifiestas u operan.
Concluida la exposición de los puntos centrales que detallaron la perspectiva de
género, se abre la oportunidad de que dicho enfoque sea reapropiado por las
personas hablantes de lengua indígena desde su propia perspectiva, con la
intención de que aporta un nuevo criterio de análisis con el que se vuelven visibles
las prácticas que justifican la desigualdad social entre hombres y mujeres. Este
objetivo a su vez sienta las bases para abordar la segunda temática de los
talleres: la violencia contra las mujeres. Esta fase de los talleres, tuvo por objetivo
identificar las diferentes formas de violencia contra las mujeres así como generar
la toma de conciencia respecto a las posibles acciones que se pueden realizar
individual y colectivamente para erradicar los actos que pudieran constituir
violencia de género en contra de las mujeres. Todo ello tuvo por finalidad, poner
de manifiesto que la violencia contra las mujeres no es justificable en nombre de la
tradición de determinada cultura y constituye un acto de violación a los derechos
humanos de las mujeres. Para identificar las diferentes formas de violencia de
género, se recurrió a los tipos y modalidades que la Ley General de Acceso de las
Mujeres a una Vida Libre de Violencia tipifica y que sirven como criterio evaluativo
para situar las formas y ámbitos en que las mujeres son violentadas. De esa forma
puede entenderse como es que operan, con el fin de erradicarlos, diferentes
discursos que naturalizan actos violentos con implicaciones de género desde el
espacio familiar, laboral y docente, comunitario, institucional.
Una vez abordados los dos puntos anteriores, se crearon las condiciones
necesarias para que la cuestión de la violencia de género, fuera conceptualizada
como una práctica que violenta los derechos universales e inalienables de las
mujeres, imposibilitando que construyan un plan de vida que les garantice un
desarrollo pleno como personas. Ello cumple la tarea de plantear como
impostergable el reconocimiento de la importancia de los derechos humanos de
las mujeres. En este contexto, se busco informar del marco jurídico que sustenta
los derechos de las mujeres y las instancias de mujeres a las que pueden asistir
en su comunidad. Con esta línea secuencial, se proyecta abarcar de manera
amplia pero sin dejar de ser claras y precisas, las cuestiones centrales referentes
a la violencia contra las mujeres. Ello tuvo el objetivo de propiciar que los
contenidos sirvan como un elemento base para la reformulación de la forma en
que es concebida socialmente la violencia de género; De esa manera, la
percepción que se tiene de las desigualdades sociales partiendo de las diferencias
biológicas, es sometida a juicio bajo la reapropiación de estos nuevos criterios,
reformulados en el contexto cultural propio de las personas hablantes de lengua
indígena, lo que puede generar un cambio encaminado a erradicar las prácticas
discriminatorias hacia las mujeres que antes eran naturalizadas.
3.2 Elaboración y síntesis de los núcleos temáticos a abordar
Concretando lo señalado anteriormente, los núcleos temáticos correspondientes
fueron sintetizados de la siguiente forma:
I.- perspectiva de género:
� Género como construcción cultural
� La función de la perspectiva de género: desnaturalizar, comprender e
identificar
� Mitos y prejuicios sobre la perspectiva de género
� Instituciones que reproducen lo Femenino/masculino
� Costumbres y tradiciones
� Ventajas de la igualdad entre hombres y mujeres
II.- Violencia contra las mujeres:
� Violencia de género y violencia contra las mujeres
� Tipos y modalidades de la violencia de género
� Ciclo de la violencia
III.- Derechos humanos de las mujeres
� importancia de reconocer los derechos de las mujeres
� convenciones y acuerdos internacionales que rigen sobre la legislación de
género en el país.
� Legislación nacional y estatal en materia de género
� Instancias de mujeres en la entidad a las cuales acudir en caso de violencia
CAPITULO IV: TRABAJO DE CAMPO
4.1 Metodología de la evaluación
Para la evaluación del programa “Talleres interculturales sobre violencia y equidad
de género en comunidades indígenas de Navolato”. Se diseñaron una serie de
herramientas para la recolección de datos aplicando instrumentos como
entrevistas de manera oral debido a la falta de comprensión en lectura y redacción
del idioma español por parte de la población objetivo de este proyecto. La cuestión
de la violencia de género en el plano situacional específico de las mujeres
indígenas, necesita una aproximación multidisciplinaria e intercultural, que alcance
a abarcar todas las implicaciones que tiene el hecho de acercarse a los pueblos
indígenas en el trasfondo de su universo cultural, y de los usos y costumbres que
los caracterizan.
Dentro de las principales variables operativas del proyecto encontramos:
1.-La comprobación de si en verdad existe un problema violencia de equidad de
genero en la población indígena en la sindicatura de Villa Juárez Navolato,
2.-Si tienen conocimiento de que existe una Ley General de Acceso de las
Mujeres a una Vida Libre de Violencia
3.-Si se sienten sensibilizadas con el tema de la violencia de equidad de genero
después de haber tomado el taller.
4.- Si se tiene conocimiento de la existencia de la instancia municipal de atención
para mujeres víctimas de violencia a la que pueden acudir.
5.-Si identifican los tipos y modalidades de violencia de género que se presentan
en los hogares y comunidades indígenas.
Para ello, el universo de trabajo a investigar se concentrara en personas que
hayan tomado el taller. Para el soporte de la investigación se realizó un
cuestionario con la finalidad de recolectar información sobre los resultados del
programa aplicándolo en la población objetivo del programa a evaluar, dicha
muestra de la encuesta será aplicada en las agrícolas con las cuales existió
coordinación en la implementación del proyecto como: El chaparral, Agrícola
Campaña y Agrícola Gotsis. Lugares con mayor afluencia de indígenas en el
municipio de Navolato en la Sindicatura de Villa Juárez, buscando entrevistar a 5
hombres y a 5 mujeres.
Como instrumento fundamental para llevar a cabo la muestra se propone realizar
un cuestionario basado en los objetivos específicos del programa, es decir verificar
que el fin de dichos objetivos hallan sido aterrizados en la población sensibilizada
así como también elaborando un análisis comparativo con la evaluación interna
realizada concentrada solo en el cumplimiento de tiempo y forma del programa.
Este programa propone dinámicas a implementar en los cursos de sensibilización
que bien pudieran aplicarse a otro universo poblacional, sin ver afectado el
objetivo de concientizar a las personas de las prácticas discriminatorias que
suelen sufrir las mujeres. Aborda estrategias y recomendaciones para llevar a
cabo para transmitir los aspectos centrales de la perspectiva de género, así como
nociones de derechos humanos y criterios eficaces para identificar situaciones en
las que pudieran presentarse casos de violencia con implicaciones de género. Por
ello en base a los núcleos temáticos abordados en el programa se realizaron
visitas realizando encuestas sobre la población beneficiada como: la construcción
cultural, mitos y prejuicios sobre la perspectiva de género, costumbres y
tradiciones, tipos de violencia de género así como los ciclos del mismo, de igual
manera la sensibilización sobre los derechos de las mujeres. Para llevar a cabo el
componente de evaluación de enfoque tradicional basándose en los resultados de
las metas e impactos del proyecto se vio necesario de apoyarse en traductores.
En un contexto de percepción sobre la vida cotidiana enfocados al rubro de la
equidad de genero para a su vez analizar los datos arrojados por la encuesta y se
lleve a cabo un análisis comparativo entre el genero hombre y mujer con la
información obtenida dela investigación de campo. Los procedimientos a seguir
serán estandarizados de interrogación con el fin de conseguir mediciones
cuantitativas sobre una gran cantidad de características objetivas y subjetivas de
la población. El cuestionario será focalizado de manera personal y con preguntas
categorizadas. El contenido del cuestionario identificara sexo y edad así como
algunas preguntas de acción e indagación de tal manera que nos lleve a concluir
si en verdad se logro sensibilizar a la población con dicho programa para obtener
la percepción tanto de hombres como mujeres de las comunidades indígenas. En
base a las respuestas se comprobara si fue cumplido tanto el objetivo general
como los objetivos específicos del programa.
4.2 Cuestionario
SEXO____________
EDAD____________
1.- ¿Los instrumentos de apoyos y temas explicados durante el taller fueron
suficientemente claros?
SI NO
2.- ¿Después de haber tomado el taller “Talleres interculturales sobre violencia y equidad de género” se siente usted preparado y capacitado para enfrentar las manifestaciones de un problema de violencia de género?
SI NO
3.- ¿Conoce usted la instancia a la que se debe de dirigir en caso de sufrir algún tipo de violencia de género?
SI NO
¿Cuál?____________
4.- ¿Sabía usted que existía la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia?
SI NO
5.- ¿Conoce los tipos y modalidades de violencia que marca la “Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”?
SI NO
6.- ¿Estaría dispuesto(a) a denunciar algún tipo de violencia que marca la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia ante las autoridades correspondientes?
SI NO NOSE
7.- ¿Estaría usted dispuesto (a) a seguir tomando talleres de capacitación sobre la temática de violencia en equidad de genero?
SI NO
8.- ¿Conoce usted alguna política o programas de gobierno que proporcione información o brinde atención sobre el rubro de violencia y equidad de género?
SI NO NOSE
CAPITULO V: RESULTADOS Y RECOMENDACIONES
5.1 Resultados arrojados de la encuesta:
La encuesta consistió en un cuestionario de ocho preguntas las cuales hicieron énfasis sobre la
aplicación del programa, buscando comprobar cual fue el impacto de la impartición de talleres
en la vida social de la población objetivo. Para ello la encuesta fue aplicada directamente a la
población objetivo escogiendo a 10 hombres y 10 mujeres que recibieron el taller en la agrícola:
El Chaparral y la Agrícola Campaña, escogiendo 5 hombres y 5 mujeres de cada una de las
agrícolas de la sindicatura de Villa Juárez, Navolato, Sinaloa. A continuación se hace un análisis
de los datos arrojados de la misma:
Del total de las 20 personas
encuestadas sobre si los temas
fueron suficientemente claros 19
afirmaron que la exposición fue la
adecuada a excepción de 1 persona
que no le fueron bastante claros los
temas.
El 100 por ciento de las personas
encuestadas entre hombres y
mujeres, dijeron sentirse
capacitados para enfrentar
cualquier situación sobre violencia
en equidad de género después de
haber sido sensibilizados con el
programa mediante la aplicación de
los buenos valores sociales.
16 personas de las 20 entrevistadas
afirmaron conocer la instancia a la
cual acudir en caso de tener
conocimiento de algún tipo de
violencia de equidad de genero en
sus vidas, por otro lado 4 dijeron
no conocer a que lugar acudir.
Dentro de las personas que
asintieron conocer el lugar al cual
acudir 12 dijeron CEPAVI y 4 dijeron
que el ISMUJERES.
El total de las 20
personas encuestadas
dijeron conocer en su
totalidad la existencia de
la Ley de Acceso de las
Mujeres a una Vida Libre
de Violencia después de
haber tomado el taller.
El 65% de las personas dijeron
conocer algunos de los tipos y
modalidades de violencia que
ejerce La Ley contra el 35% que
dijeron desconocer en su totalidad
modalidad o tipo alguno.
El 70% de los entrevistados dijeron
estar dispuestos a denunciar ante
las autoridades competentes en
caso del conocimiento de una
situación de violencia en equidad
de género, otro 20% dijo sentirse
dudoso en caso de conocer contra
el 10% que dijo que no denunciaría.
5.2 Recomendaciones y Conclusiones
Durante el desarrollo del programa Talleres Interculturales sobre Violencia y
Equidad de Género en Comunidades Indígenas de Navolato se verifico que se
cumplieron al 100 por ciento metas que se tenían establecidas de manera interna
dentro del programa como: Seleccionar al personal del equipo de trabajo, con el
perfil necesario seleccionando a 5 personas para conformar el equipo
multidisciplinario e intercultural: 1 Coordinador de proyecto (personal ISMujeres),
1 asesora de proyecto, 1 asesor asistente de proyecto, 1 traductor (lengua mixteca
alta y baja), 1 tallerista hablante de lengua indígena, además de Capacitar al
El 100 por ciento de la población
encuestada dijo sentirse dispuesta
a seguir tomando este tipo de
capacitaciones sobre el tema ya
que es una situación que se vive en
sociedad hoy en día y es bueno
sentirse preparado para poder
enfrentar cualquier situación sobre
violencia en equidad de genero.
El 65% de los entrevistados dijo
desconocer de la existencia de
políticas de gobierno encaminadas
a resolver problemas sobre
violencia de equidad de género,
otro 25% dijo no saber la existencia
de las mismas contra un 10% que
asintió conocer algunas de ellas.
personal en temáticas de comunicación intercultural y en temáticas relacionadas
con población indígena realizando una compilación bibliográfica de obras
relacionadas a la temática de violencia de género en comunidades indígenas, por
otro lado Se elaboraron y sintetizaron los núcleos temáticos a abordar durante los
talleres elaborando una exposición audiovisual, con textos traducidos a lenguas
indígenas (lengua mixteca alta y baja), con la temática central dela violencia de
género detallada en tres aspectos: la perspectiva de género, violencia contra las
mujeres y derechos humanos de las mujeres.
La asistencia a los talleres, se vio afectada debido a las condiciones económicas
poco favorables presentes en el país, por lo que las empresas agrícolas de la
región tomaron la decisión de aplazar y reducir el periodo de contratación para los
trabajadores en campos agrícolas, ello provocó una menor afluencia de personas
indígenas, lo que redujó a su vez, los beneficiarios totales de los talleres. A pesar
de ello, se logró sensibilizar a 105 personas hablantes de lengua indígena que
tienen conocimiento de las instancias de mujeres a las que pueden asistir, así
como los elementos fundamentales para comprender la perspectiva de género
como enfoque ético para construir relaciones interpersonales a partir de la equidad
y el respeto. Otro aspecto a destacar es que el taller posibilito, la capacitación de
tres personas hablantes de lengua indígena para que puedan multiplicar mediante
ponencias, la perspectiva de género.
Es importante en toda evaluación conocer los efectos que ha tenido determinada
política o programa, establecer en qué medida el proyecto logra mejorar las
situación en la población objetivo; la magnitud de dichos cambios y qué
segmentos de la población objetivo afectaron y en qué medida. Por ello podemos
destacar que durante la presente evaluación se encontró que durante la
evaluación interna del programa mismo, solo se focalizaron a establecer sus
metas al cumplimiento de tiempo y forma las actividades programas así como al
realce de la exposición de las temáticas abordadas durante los módulos del taller,
mediante ello, dejando fuera el numero de personas a sensibilizar, es decir la
cobertura o alcance del programa no fue un objetivo fundamental dentro del
programa, así como el numero de personas de habla indígena integradas al
proyecto buscando dar un efecto multiplicador realizando ponencias es muy
limitado, ya que tan solo se cuenta con tres ante la cada día mas creciente
población indígena en el estado de Sinaloa. Por otro lado, no se capacito a las
comunidades indígenas del municipio de Navolato, sino a población flotante que
constantemente se encuentra migrando de un estado a otro, por lo que el
programa debería de identificar las verdaderas comunidades residentes y llevar a
cabo el programa en dichas zonas.
Por otro lado es muy difícil identificar a la población indígena debido a que no
existen parámetros para medir si verdaderamente es indígena (color de piel,
dialecto, fisonomía, entre otros), por ello el programa puede cambiar fácilmente su
población objetivo que son las comunidades indígenas a simplemente una
población altamente marginada y de escasos recursos de origen indígena que se
encuentran desinformadas sobre el tema de violencia y equidad de genero. Fuera
de ello las personas entrevistas en base a la lista de asistencia en el programa
dieron signos positivos sobre la sensibilización en cuanto al tema, además de
establecer que se encuentran debidamente informados en cuanto a la existencia
de la Ley de Acceso de Las Mujeres a Una Vida Libre de Violencia así como
también a la instancia a la que se deben de dirigir en caso de sufrir esta
problemática. Así mismo en su mayoría los entrevistados dijeron sentirse con la
voluntad de denunciar cualquier tipo de violencia vivida dentro de su vida social lo
cual se convierte en un aspecto positivo en las zonas donde ha sido aplicado el
programa.
Es necesario realizar una planeación en caso de que se lleve a cabo una segunda
etapa de este proyecto de identifique verdaderamente a las comunidades
indígenas existentes en el estado y en si al municipio al cual será aplicado.
Además de extender la cobertura en cuanto al numero de personas sensibilizadas
con el tema. Para ello es necesario que con anterioridad se busque capacitar a
más personas que hablen los distintos tipos de dialectos con mayor presencia en
los municipios para que se busque un efecto multiplicador mayor al que se le ha
buscado. Aunado a todo esto el los materiales y el recurso humano para aplicar
este programa se encuentran altamente calificados para su implementación pero
se debe buscar evaluar de manera externa el programa para que los lleve a una
mejor retroalimentación del mismo.
BIBLIOGRAFIA
1-Aguilar Villanueva, Luis. El estudio de las políticas públicas, Porrúa.
2-Cardoso de Oliveira, Roberto, “Identidad étnica, identificación y manipulación”, en
América Indígena, vol. XXXI, núm. 4, México, Instituto Indigenista Interamericano, 1971,
pp. 923-953, en Romer, Marta, Algunos enfoques teóricos para el estudio de la identidad
étnica individual en el medio urbano, Dimensión Antropológica, Año 13, Vol. 37,
Mayo/Agosto,2006., pág. 138.
3-Castañeda de la Mora, Citlali, Vulnerabilidad y derechos humanos de las mujeres
indígenas migrantes, Oficial de Programa en Derechos Humanos UNESCO México, 2008,
pág. 6.
4-Goffman, Erwin, Estigma. La identidad deteriorada, 1980, en Romer, Marta, Algunos
enfoques teóricos para el estudio de la identidad étnica individual en el medio urbano,
Dimensión Antropológica, Año 13, Vol. 37, Mayo/Agosto,2006., pág. 139.
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violencia de pareja y con agresores. Experiencia internacional y mexicana, Instituto
Nacional de Salud Pública, México DF, Diciembre de 2008, primer edición, pág. 11.
6-Mejía Lara, José, La evaluación de la gestión y las políticas públicas, Porrúa, México
DF, Septiembre de 2003, pág .10-18
7-Psacharopoulos, G. y Patrinos, H; “Los pueblos indígenas y la pobreza en América
Latina: un análisis empírico”, Estudios sociodemográficos de pueblos indígenas, Serie E,
No. 40, Santiago de Chile, Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (CELADE)
División de Población de la CEPAL, 1994.
8-Ruiz López, Domingo y Carlos Ediardo Cárdenas, ¿Qué es una política pública?, 2003.
9-Stavenhagen, Rodolfo; “¿Por qué los derechos indígenas” en Los derechos de los
pueblos indígenas, Fascículo I, Comisión Nacional de los Derechos Humanos, México,
2003, pp. 15-16.
Páginas de internet visitadas
Universidad Latina de América.
www.unla.edu.mx
Honorable Congreso de la Unión
www.diputados.gob.mx
Congreso del Estado de Sinaloa
www.sinaloa.gob.mx
Wikipedia
www.wikipedia.com
Instituto Sinaloense de las Mujeres
www.ismujeres.gob.mx
Instituto Mexicano de las Mujeres
www.inmujer.gob.mx
ANEXOS
Personas sensibilizadas con el programa
2431
29
5
8
8
0
5
10
15
20
25
30
35
Primer taller Segundo taller Tercer taller
Personas sensibilizadas
MUJERES
HOMBRES