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EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA REPRESENTACiÓN GRÁFICA DEL RELIEVE Eduardo Martínez de Pisón Universidad Autónoma de Madrid Instituto del Paisaje (FDS) Juan Carlos Castañón Álvarez Univer sidad de Oviedo Desde mediados de l siglo XIX, con la preocupación por conocer e interpreta r los relieves de la Península Ibérica, crece también la necesidad de expresar gr áficamente sus formas y sus relaciones con las estruct uras. Así, a través de imágenes de ma yor o men or claridad conceptual y con mayor o menor acierto estético, los geógrafos y geólogos españoles en troncan con una tradición científico-artística q ue a comienzos del siglo XX ya estaba consolida da en centros científicos cua lific ado s fuera de nuestras fro ntera s. Es a partir de este m omento cuando pano ramas , croquis, d ibujos, cor tes, perfiles, modelos de relieve (maquetas) y bloques-diagrama comienzan a utilizarse con criterio metodológico en Es paña, bien de forma aislada o b ien como comp lemento de otros doc umen tos cartográfic os (e squemas , m apas geomorfológicos) y gráficos (fotografías). El exa men y cl asificación de algunos ejemp los significativos de tales represe ntaciones gráficas muestr an su doble valor artístico y científico y el admirable esfuerzo realizado por los geógrafos y geólogos, sobre todo de la primera m itad del siglo XX, p ara mostrar expresivamente y para divulgar el conocimient o de los relieves peninsulares. Pero no todos los medios de expresión gráfica ci tados son eq uiparable s en tre sí. La represent ac ión geográfic a de las formas de l relieve alcanza su más alto grado de con cep tuali zación en los mapas geo morfológicos, en los ll amados ma pas fisi ogr áfic os y en los bloq ues -diagrama, estos dos muy vincula dos entre en su concepción figurativa. Frente a ellos, los mapas geomorfológicos tien en el inconve niente de que para su lect ura, al menos pa ra una lect ura det allad a y un a in t erpretación prof un da , requ ieren conocimientos específicos, mien t ras que los m apas fisi ográficos y los bloques -dia g rama , sin dejar de tener un alto con tenido in te rpretativo, constit u yen un documento gráfico más fácilmente comprensible por un público no especializad o. Desde ese pu nto de vista, e stas igenes han constit uido hitos muy importantes en el conocimie nto geomorfológico del mundo y en su divulgació n. Nacen con las in terp retaciones m odernas del relieve, a pa rtir de la segunda mitad del siglo

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EVOLUCiOacuteN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA REPRESENTACiOacuteN GRAacuteFICA DEL RELIEVE

Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Universidad Autoacutenoma de Madrid Instituto del Paisaje (FDS) Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez Universidad de Oviedo

Desde mediados del siglo XIX con la preocupacioacuten por conocer e interpretar los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica crece tambieacuten la necesidad de expresar graacuteficamente sus formas y sus relaciones con las estructuras Asiacute a traveacutes de imaacutegenes de mayor o menor claridad conceptual y con mayor o menor acierto esteacutetico los geoacutegrafos y geoacutelogos espantildeoles entroncan con una tradicioacuten cien tiacutefico-artiacutestica que a comienzos del siglo XX ya estaba consolidada en centros cientiacuteficos cualificados fuera de nuestras fronteras Es a partir de este momento cuando panoramas croquis dibujos cortes perfiles modelos de relieve (maquetas) y bloques-diagrama comienzan a utilizarse con criterio metodoloacutegico en Espantildea bien de forma aislada o bien como complemento de otros documentos cartograacuteficos (esquemas mapas geomorfoloacutegicos) y graacuteficos (fotografiacuteas) El examen y clasificacioacuten de algunos ejemplos significativos de tales representaciones graacuteficas muestran su doble valor artiacutestico y cientiacutefico y el admirable esfuerzo realizado por los geoacutegrafos y geoacutelogos sobre todo de la primera mitad del siglo XX para mostrar expresivamente y para divulgar el conocimiento de los relieves peninsulares

Pero no todos los medios de expresioacuten graacutefica ci tados son equiparables entre siacute La representacioacuten geograacutefica de las formas del relieve alcanza su maacutes alto grado de concep tualizacioacuten en los mapas geomorfoloacutegicos en los llamados mapas fisiograacuteficos y en los bloques-diagrama estos dos muy vinculados entre siacute en su concepcioacuten figurativa Frente a ellos los mapas geomorfoloacutegicos tienen el inconveniente de que para su lectura al menos para una lectura detallada y una interpretacioacuten profunda requieren conocimientos especiacuteficos mientras que los mapas fisiograacuteficos y los bloques-diagrama sin dejar de tener un alto contenido interpretativo constituyen un documento graacutefico maacutes faacutec ilmente comprensible por un p uacuteblico no especializado Desde ese punto de vista estas imaacutegenes han constituido hitos muy importantes en el conocimiento geomorfoloacutegico del mundo y en su divulgacioacuten Nacen con las interpretaciones modernas del relieve a partir de la segunda mitad del siglo

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XIX Y adquieren loacutegicamente eacutenfasis en el cambio de centuria con William Morris Davis por la entidad cientiacutefica que eacuteste otorgoacute a la Geomorfologiacutea por la importancia que confirioacute a los bloques-diagrama para la expresioacuten de las formas y su evolucioacuten ciacuteclica y por la extensa y larga influencia que su contribucioacuten ha venido teniendo Se desarrollan estos tipos de graacuteficos considerablemente durante la primera mitad del XX pero su uso ha ido declinando sin embargo en las uacuteltimas deacutecadas del siglo pasado a la par que su ejecucioacuten se trivializaba con un abuso de las teacutecnicas informaacuteticas que si bien la han facilitado notablemente tambieacuten pueden llevar a una praacutectica poco esmerada y superficial de este tipo de representacioacuten graacutefica Pensamos en relacioacuten con ello que la recuperacioacuten sistemaacutetica de los bloques-diagrama que se han ido elaborando a lo largo del tiempo en el mundo y especialmente en Espantildea no soacutelo contribuiraacute a enriquecer nuestro conocimiento de la historia de la praacutectica y del pensamiento geograacutefico sino que podriacutea ser motivo de reflexioacuten sobre los principios de representacioacuten graacutefica del relieve y servir de guiacutea para la praacutectica fu tura

Asiacute pues en este trabajo abordamos preferentemente por su expresividad ilustrativa la evolucioacuten en el uso morfoloacutegico de los bloques-diagrama aunque en su loacutegico contexto graacutefico que va desde los croquis a los mapas y lo referimos especialmente a la expresioacuten de los relieves espantildeoles sin olvidar sus precedentes o coetaacuteneos in ternacionales Es evidente por otro lado que al abordar el estudio histoacuterico de los bloques-diagrama no podemos dejar de lado los otros modos de representacioacuten plaacutestica del relieve y de modo especial los maacutes directamente emparentados con los bloques es decir las vistas las panoraacutemicas y los modelos o maquetas de relieve puesto que de ellos nacen los primeros de modo muy progresivo y no sin titubeos De todas formas se debe tener en cuenta que maquetas y panoramas han tenido tradicionalmente entre otros tres destinos principales militar arquitectoacutenico y geograacutefico en un sentido amplio con sus enlaces diferencias parentescos y derivaciones Aquiacute nos referiremos solamente a su uso geograacutefico reciente

NACIMIENTO DESARROLLO Y APOGEO DEL BLOQUE-DIAGRAMA EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL

La necesidad de un nuevo modo de representacioacuten con el cambio en las ideas geoloacutegicas a finales del siglo XVIII

En los uacuteltimos antildeos del siglo XVID y en la primera mitad del XIX tienen lugar cambios importantes en las concepciones geoloacutegicas en los conocimien tos orograacuteficos y en relacioacuten con ello en las ideas que geoacutelogos y geoacutegrafos desarrollan acerca de la estructura del relieve terrestre De esta efervescencia de

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ideas deriva naturalmente una necesidad de expreslOn graacutefica -que no es satisfecha por los modos de representacioacuten tradicionales A tal necesidad hay que antildeadir la presencia creciente del movimiento paisajiacutestico dentro de la pintura europea en un proceso de aproximacioacuten a la realidad de la naturaleza y de abandono de los modelos estereotipados anteriores

Resulta por tanto natural que fuera en las Islas Britaacutenicas donde maacutes activo era el fermento de las nuevas ideas geoloacutegicas y donde aquel movimiento paisajiacutestico tenia un mayor empuje a finales del siglo XVIII el lugar en el que surgieran y conocieran un mayor impulso inicial los nuevos modos de representacioacuten Fue maacutes particularmente en Escocia donde emergieron con mayor fuerza los que consideramos primeros antecedentes de los nuevos modos de expresioacuten graacutefica del relieve estructural la panoraacutemica la vista con intencioacuten geoloacutegica-geograacutefica y el bloque-diagrama

El primero de estos modos de representacioacuten nace vinculado al mundo urbano con el intereacutes por incluir en una misma imagen todo lo que un observador situado en un punto de vista dominante podriacutea abarcar con la mirada Es concretamente el pintor Robert Barker quien con un meacutetodo patentado por eacutel mismo da a conocer en 1788 la primera vista en formato panoraacutemico estricto (Saule-Sorbeacute 1997 paacuteg 339) concebida para una vez dispuesta en una sala de planta circular crear en el espectador la ilusioacuten de encontrarse inmerso en el paisaje Dicha vista que representa la ciudad de Edimburgo da pie al auge de este tipo de imaacutegenes que pronto se aplicaraacuten al mundo de las montantildeas

Por los mismos antildeos y tambieacuten en Edimburgo otro artista escoceacutes John Clerk de Eldin acompantildea a James Hutton en sus excursiones por los alrededores de la ciudad y contribuye con sus dibujos y acuarelas a ilustrar sus novedosas ideas geoloacutegicas que rompen con las concepciones wernerianas hasta entonces dominantes poniendo de manifiesto la importancia de los fenoacutemenos plutoacutenicos y contradiciendo el caraacutecter primario de todas las rocas de ese origen (Craig et al 1978) El propio modo de representacioacuten resulta en algunos casos revolucionario en tres vistas en las que se pretende demostrar la posterioridad de las rocas plutoacutenicas a otras que se encuentran por encima de ellas John Clerk recurre a una imagen en perspectiva que en primer plano se complementa con un corte geoloacutegico ofreciendo de este modo un antecedente de lo que maacutes adelante se llamaraacute bloque-diagrama

Tambieacuten en la Europa continental se desarrollan a finales del XVIII y comienzos del XIX los modos de representacioacuten que permiten interpretar geoloacutegicamente el relieve Esos modos de rep resentacioacuten derivan de un impulso intelectual maacutes o menos abstracto como lo demuestran los textos de Goethe en los que eacuteste especula con la posibilidad de realizar un modelo geoloacutegico que sea capaz de mostrar las entrantildeas de la tierra por debajo de la apariencia externa del relieve (Schmid 1947 paacuteg125) El propio Goethe que

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reconoceraacute las grandes dificultades a las que se enfrenta y que se resignaraacute a no llevar a cabo su representacioacuten sontildeada recurriraacute en la mayor parte de los casos a imaacutegenes maacutes convencionales croquis y dibujos a laacutepiz o tinta que m uestran la evolucioacuten de los relieves graniacuteticos y su dependencia de la estructura de las rocas No obstante el esfuerzo de buacutesqueda es mayor en otras imaacutegenes perspectivas con un corte geoloacutegico de factura muy tosca pero que preludian un nuevo modo de representacioacuten precursora del bloque-d iagrama (Schmid 1949 laacutem XXXIII)

Figura 1 Semibloque-diagrama de Arthurs Seat y Salisbury Crags en los alrededores de Edimburgo En este dibujo de John Clerk de Eldin datado en torno a 1785 se m uestra la peculiar relacioacuten de aquellos relieves con una serie de rocas principalmente sedimentarias en las que claramente de modo posterior se han inyectado rocas magmaacuteticas (marcadas con los nuacutemeros 46 8 Y 13 en el corte del primer plano)

La progresiva ruptura con la tosquedad del estilo dieciochesco

Varios antildeos despueacutes en 1829 von Schwerin otro alemaacuten que habiacutea completado su formacioacuten geoloacutegica en Pariacutes con Brogniart daraacute otro paso maacutes en la realizacioacuten de aquel viejo suentildeo de Goethe al intentar plasmar las estructuras de varias regiones de Francia y Suiza en un libro titulado Geognostische Profile (Schwerin 1829) y lo haraacute en ciertos casos mediante una represen tacioacuten novedosa entonces anticipaacutendose asiacute en varios decenios seguacuten M Schuster (1954 paacuteg 162) a los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos se trata concretamente del inmediato antecedente de los bloques-diagrama lo que podriacuteamos llamar un semibloque una vista en cuyo primer plano se situacutea un corte geoloacutegico Pero el resultado es auacuten bastante rudimentario y la difusioacuten de esta obra parece haber sido muy limitada

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Figura 2 Vista del Glarnisch en los Alpes suizos realizada en mayo de 1794 por Hans Conrad Escher

En Suiza aunque sobre un tipo de representacioacuten menos avanzada conceptualmente los resultados habiacutean sido maacutes satisfactorios ya en el traacutensito del siglo XVIII al XIX En manos de un gran dibujante que al tiempo era notable geoacutelogo Hans Conrad Escher von der Linth adquiriraacute la imagen morfoestructural una calidad no alcanzada hasta entonces y que rompe con el esquematismo y la tosquedad dieciochescas defectos que pese a todo se prolongan con cierta frecuencia en los inicios del XIX y en Espantildea hasta la segunda mitad de este siglo Hans Conrad Escher con una coleccioacuten de vistas y panoraacutemicas que representan los relieves de buena parte de su paiacutes da un gran impulso a la representacioacuten graacutefica en Geologiacutea y Geografiacutea Fiacutesica poniendo los cimientos de una de las tradiciones maacutes soacutelidas a escala internacional Sin embargo tales vistas y panoraacutemicas no llegaron a ser publicadas sino 150 antildeos maacutes tarde (Solar y Hosli 1974) por lo que en la eacutepoca su difusioacuten debioacute quedar restringida principalmente a quienes teniacutean un trato maacutes d irecto con el autor de aquellos dibujos y acuarelas De ese modo su hijo Arnold Escher seraacute el inmediato continuador de aquella tradicioacuten logrando ya en los antildeos 1830 representaciones graacuteficas que si bien no alcanzan el nivel esteacutetico de las de su progenitor tienen el intereacutes antildeadido de reflejar la evolucioacuten de los conocimientos geoloacutegicos de los Alpes Son en particular vistas de relieves iluminadas a la acuarela con colores que representan la superficie

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ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

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Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

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aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

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finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

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El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

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Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

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Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

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de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

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FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

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simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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102 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

XIX Y adquieren loacutegicamente eacutenfasis en el cambio de centuria con William Morris Davis por la entidad cientiacutefica que eacuteste otorgoacute a la Geomorfologiacutea por la importancia que confirioacute a los bloques-diagrama para la expresioacuten de las formas y su evolucioacuten ciacuteclica y por la extensa y larga influencia que su contribucioacuten ha venido teniendo Se desarrollan estos tipos de graacuteficos considerablemente durante la primera mitad del XX pero su uso ha ido declinando sin embargo en las uacuteltimas deacutecadas del siglo pasado a la par que su ejecucioacuten se trivializaba con un abuso de las teacutecnicas informaacuteticas que si bien la han facilitado notablemente tambieacuten pueden llevar a una praacutectica poco esmerada y superficial de este tipo de representacioacuten graacutefica Pensamos en relacioacuten con ello que la recuperacioacuten sistemaacutetica de los bloques-diagrama que se han ido elaborando a lo largo del tiempo en el mundo y especialmente en Espantildea no soacutelo contribuiraacute a enriquecer nuestro conocimiento de la historia de la praacutectica y del pensamiento geograacutefico sino que podriacutea ser motivo de reflexioacuten sobre los principios de representacioacuten graacutefica del relieve y servir de guiacutea para la praacutectica fu tura

Asiacute pues en este trabajo abordamos preferentemente por su expresividad ilustrativa la evolucioacuten en el uso morfoloacutegico de los bloques-diagrama aunque en su loacutegico contexto graacutefico que va desde los croquis a los mapas y lo referimos especialmente a la expresioacuten de los relieves espantildeoles sin olvidar sus precedentes o coetaacuteneos in ternacionales Es evidente por otro lado que al abordar el estudio histoacuterico de los bloques-diagrama no podemos dejar de lado los otros modos de representacioacuten plaacutestica del relieve y de modo especial los maacutes directamente emparentados con los bloques es decir las vistas las panoraacutemicas y los modelos o maquetas de relieve puesto que de ellos nacen los primeros de modo muy progresivo y no sin titubeos De todas formas se debe tener en cuenta que maquetas y panoramas han tenido tradicionalmente entre otros tres destinos principales militar arquitectoacutenico y geograacutefico en un sentido amplio con sus enlaces diferencias parentescos y derivaciones Aquiacute nos referiremos solamente a su uso geograacutefico reciente

NACIMIENTO DESARROLLO Y APOGEO DEL BLOQUE-DIAGRAMA EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL

La necesidad de un nuevo modo de representacioacuten con el cambio en las ideas geoloacutegicas a finales del siglo XVIII

En los uacuteltimos antildeos del siglo XVID y en la primera mitad del XIX tienen lugar cambios importantes en las concepciones geoloacutegicas en los conocimien tos orograacuteficos y en relacioacuten con ello en las ideas que geoacutelogos y geoacutegrafos desarrollan acerca de la estructura del relieve terrestre De esta efervescencia de

103 Imaacutegenes del Paisaje

ideas deriva naturalmente una necesidad de expreslOn graacutefica -que no es satisfecha por los modos de representacioacuten tradicionales A tal necesidad hay que antildeadir la presencia creciente del movimiento paisajiacutestico dentro de la pintura europea en un proceso de aproximacioacuten a la realidad de la naturaleza y de abandono de los modelos estereotipados anteriores

Resulta por tanto natural que fuera en las Islas Britaacutenicas donde maacutes activo era el fermento de las nuevas ideas geoloacutegicas y donde aquel movimiento paisajiacutestico tenia un mayor empuje a finales del siglo XVIII el lugar en el que surgieran y conocieran un mayor impulso inicial los nuevos modos de representacioacuten Fue maacutes particularmente en Escocia donde emergieron con mayor fuerza los que consideramos primeros antecedentes de los nuevos modos de expresioacuten graacutefica del relieve estructural la panoraacutemica la vista con intencioacuten geoloacutegica-geograacutefica y el bloque-diagrama

El primero de estos modos de representacioacuten nace vinculado al mundo urbano con el intereacutes por incluir en una misma imagen todo lo que un observador situado en un punto de vista dominante podriacutea abarcar con la mirada Es concretamente el pintor Robert Barker quien con un meacutetodo patentado por eacutel mismo da a conocer en 1788 la primera vista en formato panoraacutemico estricto (Saule-Sorbeacute 1997 paacuteg 339) concebida para una vez dispuesta en una sala de planta circular crear en el espectador la ilusioacuten de encontrarse inmerso en el paisaje Dicha vista que representa la ciudad de Edimburgo da pie al auge de este tipo de imaacutegenes que pronto se aplicaraacuten al mundo de las montantildeas

Por los mismos antildeos y tambieacuten en Edimburgo otro artista escoceacutes John Clerk de Eldin acompantildea a James Hutton en sus excursiones por los alrededores de la ciudad y contribuye con sus dibujos y acuarelas a ilustrar sus novedosas ideas geoloacutegicas que rompen con las concepciones wernerianas hasta entonces dominantes poniendo de manifiesto la importancia de los fenoacutemenos plutoacutenicos y contradiciendo el caraacutecter primario de todas las rocas de ese origen (Craig et al 1978) El propio modo de representacioacuten resulta en algunos casos revolucionario en tres vistas en las que se pretende demostrar la posterioridad de las rocas plutoacutenicas a otras que se encuentran por encima de ellas John Clerk recurre a una imagen en perspectiva que en primer plano se complementa con un corte geoloacutegico ofreciendo de este modo un antecedente de lo que maacutes adelante se llamaraacute bloque-diagrama

Tambieacuten en la Europa continental se desarrollan a finales del XVIII y comienzos del XIX los modos de representacioacuten que permiten interpretar geoloacutegicamente el relieve Esos modos de rep resentacioacuten derivan de un impulso intelectual maacutes o menos abstracto como lo demuestran los textos de Goethe en los que eacuteste especula con la posibilidad de realizar un modelo geoloacutegico que sea capaz de mostrar las entrantildeas de la tierra por debajo de la apariencia externa del relieve (Schmid 1947 paacuteg125) El propio Goethe que

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reconoceraacute las grandes dificultades a las que se enfrenta y que se resignaraacute a no llevar a cabo su representacioacuten sontildeada recurriraacute en la mayor parte de los casos a imaacutegenes maacutes convencionales croquis y dibujos a laacutepiz o tinta que m uestran la evolucioacuten de los relieves graniacuteticos y su dependencia de la estructura de las rocas No obstante el esfuerzo de buacutesqueda es mayor en otras imaacutegenes perspectivas con un corte geoloacutegico de factura muy tosca pero que preludian un nuevo modo de representacioacuten precursora del bloque-d iagrama (Schmid 1949 laacutem XXXIII)

Figura 1 Semibloque-diagrama de Arthurs Seat y Salisbury Crags en los alrededores de Edimburgo En este dibujo de John Clerk de Eldin datado en torno a 1785 se m uestra la peculiar relacioacuten de aquellos relieves con una serie de rocas principalmente sedimentarias en las que claramente de modo posterior se han inyectado rocas magmaacuteticas (marcadas con los nuacutemeros 46 8 Y 13 en el corte del primer plano)

La progresiva ruptura con la tosquedad del estilo dieciochesco

Varios antildeos despueacutes en 1829 von Schwerin otro alemaacuten que habiacutea completado su formacioacuten geoloacutegica en Pariacutes con Brogniart daraacute otro paso maacutes en la realizacioacuten de aquel viejo suentildeo de Goethe al intentar plasmar las estructuras de varias regiones de Francia y Suiza en un libro titulado Geognostische Profile (Schwerin 1829) y lo haraacute en ciertos casos mediante una represen tacioacuten novedosa entonces anticipaacutendose asiacute en varios decenios seguacuten M Schuster (1954 paacuteg 162) a los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos se trata concretamente del inmediato antecedente de los bloques-diagrama lo que podriacuteamos llamar un semibloque una vista en cuyo primer plano se situacutea un corte geoloacutegico Pero el resultado es auacuten bastante rudimentario y la difusioacuten de esta obra parece haber sido muy limitada

105 Imaacutegenes del Paisaje

Figura 2 Vista del Glarnisch en los Alpes suizos realizada en mayo de 1794 por Hans Conrad Escher

En Suiza aunque sobre un tipo de representacioacuten menos avanzada conceptualmente los resultados habiacutean sido maacutes satisfactorios ya en el traacutensito del siglo XVIII al XIX En manos de un gran dibujante que al tiempo era notable geoacutelogo Hans Conrad Escher von der Linth adquiriraacute la imagen morfoestructural una calidad no alcanzada hasta entonces y que rompe con el esquematismo y la tosquedad dieciochescas defectos que pese a todo se prolongan con cierta frecuencia en los inicios del XIX y en Espantildea hasta la segunda mitad de este siglo Hans Conrad Escher con una coleccioacuten de vistas y panoraacutemicas que representan los relieves de buena parte de su paiacutes da un gran impulso a la representacioacuten graacutefica en Geologiacutea y Geografiacutea Fiacutesica poniendo los cimientos de una de las tradiciones maacutes soacutelidas a escala internacional Sin embargo tales vistas y panoraacutemicas no llegaron a ser publicadas sino 150 antildeos maacutes tarde (Solar y Hosli 1974) por lo que en la eacutepoca su difusioacuten debioacute quedar restringida principalmente a quienes teniacutean un trato maacutes d irecto con el autor de aquellos dibujos y acuarelas De ese modo su hijo Arnold Escher seraacute el inmediato continuador de aquella tradicioacuten logrando ya en los antildeos 1830 representaciones graacuteficas que si bien no alcanzan el nivel esteacutetico de las de su progenitor tienen el intereacutes antildeadido de reflejar la evolucioacuten de los conocimientos geoloacutegicos de los Alpes Son en particular vistas de relieves iluminadas a la acuarela con colores que representan la superficie

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ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

107 Imaacutegenes del Paisaje

Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

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finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

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Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

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FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 3: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

103 Imaacutegenes del Paisaje

ideas deriva naturalmente una necesidad de expreslOn graacutefica -que no es satisfecha por los modos de representacioacuten tradicionales A tal necesidad hay que antildeadir la presencia creciente del movimiento paisajiacutestico dentro de la pintura europea en un proceso de aproximacioacuten a la realidad de la naturaleza y de abandono de los modelos estereotipados anteriores

Resulta por tanto natural que fuera en las Islas Britaacutenicas donde maacutes activo era el fermento de las nuevas ideas geoloacutegicas y donde aquel movimiento paisajiacutestico tenia un mayor empuje a finales del siglo XVIII el lugar en el que surgieran y conocieran un mayor impulso inicial los nuevos modos de representacioacuten Fue maacutes particularmente en Escocia donde emergieron con mayor fuerza los que consideramos primeros antecedentes de los nuevos modos de expresioacuten graacutefica del relieve estructural la panoraacutemica la vista con intencioacuten geoloacutegica-geograacutefica y el bloque-diagrama

El primero de estos modos de representacioacuten nace vinculado al mundo urbano con el intereacutes por incluir en una misma imagen todo lo que un observador situado en un punto de vista dominante podriacutea abarcar con la mirada Es concretamente el pintor Robert Barker quien con un meacutetodo patentado por eacutel mismo da a conocer en 1788 la primera vista en formato panoraacutemico estricto (Saule-Sorbeacute 1997 paacuteg 339) concebida para una vez dispuesta en una sala de planta circular crear en el espectador la ilusioacuten de encontrarse inmerso en el paisaje Dicha vista que representa la ciudad de Edimburgo da pie al auge de este tipo de imaacutegenes que pronto se aplicaraacuten al mundo de las montantildeas

Por los mismos antildeos y tambieacuten en Edimburgo otro artista escoceacutes John Clerk de Eldin acompantildea a James Hutton en sus excursiones por los alrededores de la ciudad y contribuye con sus dibujos y acuarelas a ilustrar sus novedosas ideas geoloacutegicas que rompen con las concepciones wernerianas hasta entonces dominantes poniendo de manifiesto la importancia de los fenoacutemenos plutoacutenicos y contradiciendo el caraacutecter primario de todas las rocas de ese origen (Craig et al 1978) El propio modo de representacioacuten resulta en algunos casos revolucionario en tres vistas en las que se pretende demostrar la posterioridad de las rocas plutoacutenicas a otras que se encuentran por encima de ellas John Clerk recurre a una imagen en perspectiva que en primer plano se complementa con un corte geoloacutegico ofreciendo de este modo un antecedente de lo que maacutes adelante se llamaraacute bloque-diagrama

Tambieacuten en la Europa continental se desarrollan a finales del XVIII y comienzos del XIX los modos de representacioacuten que permiten interpretar geoloacutegicamente el relieve Esos modos de rep resentacioacuten derivan de un impulso intelectual maacutes o menos abstracto como lo demuestran los textos de Goethe en los que eacuteste especula con la posibilidad de realizar un modelo geoloacutegico que sea capaz de mostrar las entrantildeas de la tierra por debajo de la apariencia externa del relieve (Schmid 1947 paacuteg125) El propio Goethe que

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reconoceraacute las grandes dificultades a las que se enfrenta y que se resignaraacute a no llevar a cabo su representacioacuten sontildeada recurriraacute en la mayor parte de los casos a imaacutegenes maacutes convencionales croquis y dibujos a laacutepiz o tinta que m uestran la evolucioacuten de los relieves graniacuteticos y su dependencia de la estructura de las rocas No obstante el esfuerzo de buacutesqueda es mayor en otras imaacutegenes perspectivas con un corte geoloacutegico de factura muy tosca pero que preludian un nuevo modo de representacioacuten precursora del bloque-d iagrama (Schmid 1949 laacutem XXXIII)

Figura 1 Semibloque-diagrama de Arthurs Seat y Salisbury Crags en los alrededores de Edimburgo En este dibujo de John Clerk de Eldin datado en torno a 1785 se m uestra la peculiar relacioacuten de aquellos relieves con una serie de rocas principalmente sedimentarias en las que claramente de modo posterior se han inyectado rocas magmaacuteticas (marcadas con los nuacutemeros 46 8 Y 13 en el corte del primer plano)

La progresiva ruptura con la tosquedad del estilo dieciochesco

Varios antildeos despueacutes en 1829 von Schwerin otro alemaacuten que habiacutea completado su formacioacuten geoloacutegica en Pariacutes con Brogniart daraacute otro paso maacutes en la realizacioacuten de aquel viejo suentildeo de Goethe al intentar plasmar las estructuras de varias regiones de Francia y Suiza en un libro titulado Geognostische Profile (Schwerin 1829) y lo haraacute en ciertos casos mediante una represen tacioacuten novedosa entonces anticipaacutendose asiacute en varios decenios seguacuten M Schuster (1954 paacuteg 162) a los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos se trata concretamente del inmediato antecedente de los bloques-diagrama lo que podriacuteamos llamar un semibloque una vista en cuyo primer plano se situacutea un corte geoloacutegico Pero el resultado es auacuten bastante rudimentario y la difusioacuten de esta obra parece haber sido muy limitada

105 Imaacutegenes del Paisaje

Figura 2 Vista del Glarnisch en los Alpes suizos realizada en mayo de 1794 por Hans Conrad Escher

En Suiza aunque sobre un tipo de representacioacuten menos avanzada conceptualmente los resultados habiacutean sido maacutes satisfactorios ya en el traacutensito del siglo XVIII al XIX En manos de un gran dibujante que al tiempo era notable geoacutelogo Hans Conrad Escher von der Linth adquiriraacute la imagen morfoestructural una calidad no alcanzada hasta entonces y que rompe con el esquematismo y la tosquedad dieciochescas defectos que pese a todo se prolongan con cierta frecuencia en los inicios del XIX y en Espantildea hasta la segunda mitad de este siglo Hans Conrad Escher con una coleccioacuten de vistas y panoraacutemicas que representan los relieves de buena parte de su paiacutes da un gran impulso a la representacioacuten graacutefica en Geologiacutea y Geografiacutea Fiacutesica poniendo los cimientos de una de las tradiciones maacutes soacutelidas a escala internacional Sin embargo tales vistas y panoraacutemicas no llegaron a ser publicadas sino 150 antildeos maacutes tarde (Solar y Hosli 1974) por lo que en la eacutepoca su difusioacuten debioacute quedar restringida principalmente a quienes teniacutean un trato maacutes d irecto con el autor de aquellos dibujos y acuarelas De ese modo su hijo Arnold Escher seraacute el inmediato continuador de aquella tradicioacuten logrando ya en los antildeos 1830 representaciones graacuteficas que si bien no alcanzan el nivel esteacutetico de las de su progenitor tienen el intereacutes antildeadido de reflejar la evolucioacuten de los conocimientos geoloacutegicos de los Alpes Son en particular vistas de relieves iluminadas a la acuarela con colores que representan la superficie

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ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

107 Imaacutegenes del Paisaje

Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

bull

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

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finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

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El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

bull

bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

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Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

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Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

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FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

bull

En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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reconoceraacute las grandes dificultades a las que se enfrenta y que se resignaraacute a no llevar a cabo su representacioacuten sontildeada recurriraacute en la mayor parte de los casos a imaacutegenes maacutes convencionales croquis y dibujos a laacutepiz o tinta que m uestran la evolucioacuten de los relieves graniacuteticos y su dependencia de la estructura de las rocas No obstante el esfuerzo de buacutesqueda es mayor en otras imaacutegenes perspectivas con un corte geoloacutegico de factura muy tosca pero que preludian un nuevo modo de representacioacuten precursora del bloque-d iagrama (Schmid 1949 laacutem XXXIII)

Figura 1 Semibloque-diagrama de Arthurs Seat y Salisbury Crags en los alrededores de Edimburgo En este dibujo de John Clerk de Eldin datado en torno a 1785 se m uestra la peculiar relacioacuten de aquellos relieves con una serie de rocas principalmente sedimentarias en las que claramente de modo posterior se han inyectado rocas magmaacuteticas (marcadas con los nuacutemeros 46 8 Y 13 en el corte del primer plano)

La progresiva ruptura con la tosquedad del estilo dieciochesco

Varios antildeos despueacutes en 1829 von Schwerin otro alemaacuten que habiacutea completado su formacioacuten geoloacutegica en Pariacutes con Brogniart daraacute otro paso maacutes en la realizacioacuten de aquel viejo suentildeo de Goethe al intentar plasmar las estructuras de varias regiones de Francia y Suiza en un libro titulado Geognostische Profile (Schwerin 1829) y lo haraacute en ciertos casos mediante una represen tacioacuten novedosa entonces anticipaacutendose asiacute en varios decenios seguacuten M Schuster (1954 paacuteg 162) a los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos se trata concretamente del inmediato antecedente de los bloques-diagrama lo que podriacuteamos llamar un semibloque una vista en cuyo primer plano se situacutea un corte geoloacutegico Pero el resultado es auacuten bastante rudimentario y la difusioacuten de esta obra parece haber sido muy limitada

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Figura 2 Vista del Glarnisch en los Alpes suizos realizada en mayo de 1794 por Hans Conrad Escher

En Suiza aunque sobre un tipo de representacioacuten menos avanzada conceptualmente los resultados habiacutean sido maacutes satisfactorios ya en el traacutensito del siglo XVIII al XIX En manos de un gran dibujante que al tiempo era notable geoacutelogo Hans Conrad Escher von der Linth adquiriraacute la imagen morfoestructural una calidad no alcanzada hasta entonces y que rompe con el esquematismo y la tosquedad dieciochescas defectos que pese a todo se prolongan con cierta frecuencia en los inicios del XIX y en Espantildea hasta la segunda mitad de este siglo Hans Conrad Escher con una coleccioacuten de vistas y panoraacutemicas que representan los relieves de buena parte de su paiacutes da un gran impulso a la representacioacuten graacutefica en Geologiacutea y Geografiacutea Fiacutesica poniendo los cimientos de una de las tradiciones maacutes soacutelidas a escala internacional Sin embargo tales vistas y panoraacutemicas no llegaron a ser publicadas sino 150 antildeos maacutes tarde (Solar y Hosli 1974) por lo que en la eacutepoca su difusioacuten debioacute quedar restringida principalmente a quienes teniacutean un trato maacutes d irecto con el autor de aquellos dibujos y acuarelas De ese modo su hijo Arnold Escher seraacute el inmediato continuador de aquella tradicioacuten logrando ya en los antildeos 1830 representaciones graacuteficas que si bien no alcanzan el nivel esteacutetico de las de su progenitor tienen el intereacutes antildeadido de reflejar la evolucioacuten de los conocimientos geoloacutegicos de los Alpes Son en particular vistas de relieves iluminadas a la acuarela con colores que representan la superficie

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ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

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Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

I

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

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aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

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finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

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Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

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Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

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Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

iexcl Serra L~hiH To~mfS

Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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147 Imaacutegenes del Paisaje

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Wagner G (1961) Herstellung von Blockbildern Schmiden Sttutgart 11 pp

Page 5: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

105 Imaacutegenes del Paisaje

Figura 2 Vista del Glarnisch en los Alpes suizos realizada en mayo de 1794 por Hans Conrad Escher

En Suiza aunque sobre un tipo de representacioacuten menos avanzada conceptualmente los resultados habiacutean sido maacutes satisfactorios ya en el traacutensito del siglo XVIII al XIX En manos de un gran dibujante que al tiempo era notable geoacutelogo Hans Conrad Escher von der Linth adquiriraacute la imagen morfoestructural una calidad no alcanzada hasta entonces y que rompe con el esquematismo y la tosquedad dieciochescas defectos que pese a todo se prolongan con cierta frecuencia en los inicios del XIX y en Espantildea hasta la segunda mitad de este siglo Hans Conrad Escher con una coleccioacuten de vistas y panoraacutemicas que representan los relieves de buena parte de su paiacutes da un gran impulso a la representacioacuten graacutefica en Geologiacutea y Geografiacutea Fiacutesica poniendo los cimientos de una de las tradiciones maacutes soacutelidas a escala internacional Sin embargo tales vistas y panoraacutemicas no llegaron a ser publicadas sino 150 antildeos maacutes tarde (Solar y Hosli 1974) por lo que en la eacutepoca su difusioacuten debioacute quedar restringida principalmente a quienes teniacutean un trato maacutes d irecto con el autor de aquellos dibujos y acuarelas De ese modo su hijo Arnold Escher seraacute el inmediato continuador de aquella tradicioacuten logrando ya en los antildeos 1830 representaciones graacuteficas que si bien no alcanzan el nivel esteacutetico de las de su progenitor tienen el intereacutes antildeadido de reflejar la evolucioacuten de los conocimientos geoloacutegicos de los Alpes Son en particular vistas de relieves iluminadas a la acuarela con colores que representan la superficie

106 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

107 Imaacutegenes del Paisaje

Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

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finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

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Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

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simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

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Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

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FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

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Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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~I~ampaI~

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 6: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

106 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

ocupada por los distintos tipos de rocas y que ponen de manifiesto los contactos anoacutemalos entre eacutestas que maacutes tarde habraacuten de ser explicados por la existencia de grandes mantos de corrimiento (Escher1839) Con estas aportaciones en Suiza se inicia un capiacutetulo propio y significativo en la representacioacuten graacutefica de los relieves de montantildea caracterizado por su personalidad precisioacuten esmero y belleza y que se convierte sin duda en una escuela muy asociada tanto al mapa como al paisaje

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Figura 3 Dos vistas del OberIand berneacutes realizadas e interpretadas geoloacutegicamente por Arnold Escher (1839) arriba el Wetterhorn y el Mettemberg desde el Oeste abajo el Plaffenkof y el Laubstock desde el Norte

La praacutectica de las vistas coloreadas tendraacute por los mismos antildeos cultivadores en diversos paiacuteses europeos y especialmente en Francia Cabe destacar las vistas realizadas por Puillon-Boblaye en la expedicioacuten francesa al Peloponeso (Puillon-Boblaye 1833) muy pulcras y de aspecto maacutes moderno que las de Arnold Escher y las que el ingeniero de minas espantildeol Fernando Cutoli adapta en 1841 para la traduccioacuten en los Anales de M inas del estudio geognoacutestico que Freacutederic Le Play habiacutea realizado en 1834 sobre Extremadura y el norte de Andaluciacutea Estas uacuteltimas acompantildeadas de una curiosa panoraacutemica circular tienen sin embargo un aspecto bastante maacutes tosco que las de Puillon

107 Imaacutegenes del Paisaje

Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

110 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

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Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

11

131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

141 Imaacutegenes del Paisaje

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107 Imaacutegenes del Paisaje

Pero es Henry T De la Beche de nuevo en el aacutembito britaacutenico quien habriacutea de ejercer una mayor influencia a traveacutes de una obra cuya primera edicioacuten se publica en 1851 The geological observer en la que sistematiza los criterios para la praacutectica de la geologiacutea sobre el terreno y lo que es maacutes importante para nosotros los criterios de representacioacuten graacutefica del relieve en relacioacuten con su estructura En esta obra ya se encuentran aunque muy esquematizados y con tamantildeo muy reducido algunos de los primeros bloques diagrama especialmente aplicados al modelado de las gargantas fluviales

Los antildeos 70 y 80 del siglo XIX decisivos en la evolucioacuten de las formas de representacioacuten

De este modo en Norteameacuterica la difusioacuten de los nuevos modos de representacioacuten la llevaraacuten a cabo los geoacutelogos britaacutenicos que tendraacuten un papel fundamental en la praacutectica de sus colegas estadounidenses Seguacuten Ruumlsewald (1925 paacuteg 12) el libro de De la Beche debioacute formar parte decisiva de su equipaje y en esa medida ejercer una importante influencia en la praacutectica graacutefica de aquellos cientiacuteficos exploradores del Oeste americano

A traveacutes de los sucesivos informes anuales del US Geological Survey se puede seguir etapa por etapa tal y como hace el citado Ruumlsewald (1925 paacutegs 17-28) la evolucioacuten en las representaciones graacuteficas llevadas a cabo por los grupos de geoacutelogos norteamericanos y por los artistas que en ocasiones viajaban con ellos Uno de estos artistas de formacioacuten geograacutefica y que acaboacute convirtieacutendose eacutel mismo en geoacutelogo y arqueoacutelogo es William Henry Holmes quien alcanza las maacutes altas cotas en la representacioacuten del relieve del Oeste americano aunando en sus dibujos de modo magistral la calidad y fuerza esteacuteticas con una densa carga interpretativa de caraacutecter geomorfoloacutegico A sus ya claacutesicas vistas y panoraacutemicas del gran Cantildeoacuten del Colorado publicadas en 1883 como parte del atlas de la Tertiary History of the Colorado del capitaacuten Dutton hay que antildeadir decenas de dibujos de intereacutes geomorfoloacutegico entre los cuales se encuentran algunos antecedentes del bloque diagrama publicados en los informes de la deacutecada de 1870

De forma relativamente autoacutenoma parece haber evolucionado la laquoescuela suizaraquo que como ha quedado dicho contaba ya con una soacutelida tradicioacuten Un disciacutepulo del citado Arnold Escher el geoacutelogo Albert Heim se habiacutea

Por esta misma eacutepoca se publican tambieacuten algunos manuales en lengua alemana en los que aparecen bloques-diagrama muy estilizados en un intento de tipificar geomeacutetricamente las d istintas formas del relieve terrestre (Cybulz 1861 paacutegs 3-8 Y Cybulz1862 paacutegs 9-22) No parece sin embargo que estos libros hayan tenido una difusioacuten comparable al de De la Beche que aquiacute aludimos

I

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Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

bull

~ ~ t

Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

110 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

bull

Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

bull

bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

bull

Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

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F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

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FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 8: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

108 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 4 Vista hacia el Este del gran cantildeoacuten del Colorado al pie del Toroweap publicada por Holmes en 1883 dentro del Atlas de la Tertiary History of tite Colorado del capitaacuten Dutton

distinguido ya desde los antildeos 70 como autor de vistas y panoraacutemicas retomando desde edad muy temprana otra tradicioacuten emparentada que habiacutea echado raiacuteces a finales del s XVIII en Suiza la elaboracioacuten de maquetas de relieve (Brockmann-Jerosch 1952 paacuteg 138) Un alumno de Heim en la Universidad Politeacutectica de Zurich sobresaldraacute pronto en la elaboracioacuten de estos modelos de relieve y sobre todo en la de los panoramas Xavier Irnfeld Sus trabajos y los de otros muchos geoacutelogos y geoacutegrafos encontraraacuten raacutepida y eficaz difusioacuten en el anuario del Club Alpino Suizo Dicho anuario que iniciaraacute su andadura en 1864 y serviraacute de modelo al del Club Alpino Franceacutes fundado un decenio maacutes tarde (1874) refleja perfectamente el espiacuteritu de aquel club que se constituiraacute en auteacutentica sociedad geograacutefica y llevaraacute a cabo un sistemaacutetico reconocimiento de los Alpes suizos desde un punto de vista geograacutefico y naturalista en el que los mapas y las demaacutes ilustraciones alcanzaraacuten una calidad esteacutetica y cientiacutefica raras veces igualadas en otras publicaciones de la eacutepoca Hay que tener en cuenta no obstante que en el

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

bull

~ ~ t

Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

110 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

bull

Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

bull

Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

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F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

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FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 9: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

109 Imaacutegenes del Paisaje

aspecto turiacutestico las guiacuteas Baededker incluyen tambieacuten de modo temprano excelentes panoramas alguno con la firma de Imfeld2

bull

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Figura 5 Detalle del panorama desde el Eggishorn (Alpes suizos) publicado por Xavier lrnfeld en 1888 en el suplemento cartograacutefico del Anuario del Club Alpino Suizo

Mientras la ilustracioacuten geoloacutegica mejora gradualmente en su capacidad de representacioacuten cientiacutefica y realista los ejemplos alpinos tienen clara personalidad y desarrollan recursos caracteriacutesticos como la sobreimposicioacuten de las litologiacuteas y estructuras a los escarpes orograacuteficos particularmente a las formas rocosas verticales de un dibujo en perspectiva con un resultado paisajiacutestico patente

Son en suma diversas las aproximaciones graacuteficas que suman un expliacutecito lado artiacutestico al cientiacutefico Aparte de los ejemplos hasta ahora mencionados como el de Holmes en Norteameacuterica son igualmente brillantes los de otros observadores destacados en ambos conocimientos y destrezas que dan pautas de representacioacuten como ocurre con Ruskin o Le Duc en los Alpes y con Schrader en los Pirineos

En las paacuteginas del anuario del Club Alpino Franceacutes es patente y expliacutecita la admiracioacuten de este uacuteltimo pirineiacutesta Franz Schrader por el modelo suizo Con sus magniacuteficos dibujos el geoacutegrafo franceacutes contribuye de modo decisivo a

2 Del contenido de los panoramas alpinos es suficientemente expresivo el libro Augenreisen Das Panorama in der Schweiz editado como contribucioacuten al Antildeo Internacional de las Montantildeas 2002 por el Museo Alpino Suizo y el Club Alpino Suizo que recopila un bello e interesante conjun to de imaacutegenes panoraacutemicas histoacutericas y recientes Sean como vista circular en forma de friso o como panorama estricto es decir una representacioacuten perspectiva de un lugar dado con un aacutengulo entre los 90deg y 360deg colocan al espectador en el centro del paisaje y buscan producir un efecto de realidad lo maacutes fielmente posible In tereses cientiacuteficos artiacutesticos o viajeros son el variado motor de estos estimables trabajos A su valor directo pictoacuterico geograacutefico se antildeade en numerosos casos un caraacutecter testimonial del estado de los paisajes por ejemplo glaciares y de un modo de mirar influyente incluso en el turismo de montantildea Sin duda siguen manteniendo ambos valores como denota auacuten cierta inclinacioacuten a su dibujo o a su expresioacuten informaacutetica observable en algunas publicaciones geograacuteficas montantildeeras y divulgativas

110 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

bull

Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

bull

Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

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FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 10: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

110 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

finales de los antildeos 1870 y a lo largo de la deacutecada de 1880 al descubrimiento de la vertiente espantildeola de los Pirineos (Saule-Sorbeacute 2004) creando imaacutegenes que en ocasiones recuerdan inevitablemente los relieves del Oeste americano Esta evocacioacuten es expresa en algunos de los escritos publicados por Schrader en aquellos antildeos en los que eacuteste defiende la superioridad en caraacutecter pintoresco de los abruptos relieves pirenaicos espantildeoles pero ademaacutes se hace graacuteficamente patente cuando Ernmanuel de Margerie el gran difusor en Europa del trabajo de los geoacutelogos americanos da a conocer en las paacuteginas del Anuario de 1883 las espectaculares ilustraciones del cantildeoacuten del Colorado realizadas por Holmes y al antildeo siguiente Schrader publica en la misma revista la no menos bella imagen creada por eacutel mismo sobre el cantildeoacuten de Cotatuero3

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Figura 6 El cantildeoacuten de Cotatuero (Pirineo aragoneacutes) obra de Franz Schrader publicada en el Annuaire du Club Alpin Franrais del antildeo 1884

ASIacute por su dedicacioacuten a los paisajes del Pirineo espantildeol adquiere la contribucioacuten de Franz Schrader un caraacutecter particular para nuestra geografiacutea Sus aportaciones graacuteficas de calidad pertenecen ademaacutes tanto a la pintura de alta montantildea como al grabado al panorama la maqueta y la cartografiacutea original siempre a partir de una observacioacuten meticulosa de la naturaleza montantildeosa Del anaacutelisis directo y completo de eacutesta - lo que requeriacutea notable esfuerzo ingenio y pulcritud- se alcanza con calidad la representacioacuten precisa y la similitud paisajiacutestica

3 Estaba previsto que la acuarela de Franz Schrader acompantildease el artiacuteculo de Ernmanuel de Margerie a propoacutesito del Cantildeoacuten del Colorado en el anuario de 1883 pero por falta de tiempo aqueacutella hubo de incluirse en el del antildeo siguiente junto con una breve nota explicativa del propio Schrader

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

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bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

11

131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

141 Imaacutegenes del Paisaje

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Page 11: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

111 Imaacutegenes del Paisaje

El nacimiento del bloque-diagrama y la difusioacuten de la Geomorfologiacutea davisiana en Europa

Pero en ninguacuten paiacutes europeo se da el paso decisivo para la creacioacuten de una fonna de representacioacuten que revolucionaraacute la comprensioacuten cientiacutefica del relieve terrestre el bloque-diagrama Desde un principio eacuteste nace vinculado en la geologiacutea norteamericana a una visioacuten dinaacutemica a una representacioacuten evolutiva como lo muestran el primer bloque-diagrama en ser realizado el del Mount Ellsworth ejecutado por Peale en 1872 (Schuster1954 paacutegs 192-193) y el de Vinta que poco despueacutes en 1876 dibujoacute Gilbert con una concepcioacuten muy similar (Powel1 1876)

Figura 7 Bloque d iagrama de Uinta publicado en 1876 por GK Gilbert para el Geological and Geographical Survey of the Territories dirigido por John Wesley Powell

Tales imaacutegenes indican el alto grado de perfeccionamiento teacutecnico y el acertado criterio esteacutetico que habiacutean adquirido los autores de estas representaciones ya antes de 1880 Asiacute que cuando poco despueacutes el famoso geoacutegrafo William Morris Davis comienza a trabajar en el Servicio Geoloacutegico de EEVV no hace sino bantildearse en una tradicioacuten artiacutestico-cientiacutefica muy consolidada haciendo suya aquella visioacuten dinaacutemica de los bloques-diagrama que adquiere un papel protagonista en la conceptuacioacuten de su teoriacutea del ciclo geograacutefico teoriacutea que como es sabido contribuiraacute de modo determinante a formalizar cientiacuteficamente el estudio del relieve terrestre4

bull

bull Davis tambieacuten auspicia en la Universidad de Harvard la construccioacuten de modelos de relieve aunque en esta actividad los geoacutegrafos y geoacutelogos norteamericanos no alcanzaraacuten el nivel de los suizos Por otro lado Davis tambieacuten tiene preferencia en este terreno por los modelos ideales maacutes que por las represenshytaciones de paisajes reales concretos tomando como referencia las maquetas que sobre diferentes tipos de relieves habiacutea realizado y comercializado en Europa Albert Heim (Davis 1897 paacuteg 87)

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

bull

Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

bull

En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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~I~ampaI~

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 12: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

112 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Como Davis ejercioacute un indudable amplio y mantenido magisterio no soacutelo en el estudio del relieve sino tambieacuten en el de su representacioacuten graacutefica sobre todo en los bloques-diagrama y en su expresioacuten secuencial eacutestos han dado lugar a una escuela que llega hasta hoy y que se prolonga con vinculaciones muy directas a veces con seguimiento de sus hipoacutetesis ciacuteclicas y en otras con independencia de ellas manifestaacutendose tanto en la investigacioacuten como sobre todo en las obras didaacutecticas Los asuntos representados los estilos y teacutecnicas de expresioacuten se repiten se reproducen o se imitan a partir de Davis con notable frecuencia La perfeccioacuten teacutecnica de la representacioacuten su expresividad escolar y su atractivo como dibujo contribuyen por siacute mismos a este eacutexito aparte del seguimiento de su sistema explicativo Hay muacuteltiples ejemplos como las formas en estructuras plegadas la evolucioacuten del modelado glaciar fluvial costero volcaacutenico etc

Figura 8 Interpretacioacuten de las montantildeas formadas por bloques fallados en el estadio de madushyrez bloque-diagrama publicado por Davis en su Die erkiirende Beschreibllng der uacutemdformen (1912)

En Francia aparte de algunos esbozos de semibloques-diagrama publicados a muy comienzos de siglo (Barreacute 1903) la de Davis tambieacuten es la liacutenea seguida inmediatamente por Emmanuel de Martonne quien con cierta independencia de criterio y de estilo despliega en sus publicaciones un arco de representaciones que va desde el apunte sobre el terreno al trabajo de investigacioacuten y a la obra de ensentildeanza Los bloques y otros graacuteficos realizados por este geoacutegrafo para su Traiteacute

5 Una prueba conocida aparece en los graacuteficos todaviacutea netamente davisianos de Strahler de ortodoxo planteamiento de pulcra confeccioacuten y capacidad d idaacutectica indudable En la Geografiacutea Fiacutesica de este autor aparecen alternantes o en colaboracioacuten con los tambieacuten expresivos de Raisz admirados igualmente por los cartoacutegrafos como modos de expresioacuten canoacutenicos de distintas topogra fiacuteas En estos casos se trata adeshymaacutes de ilustraciones expresamente geomorfoloacutegicas

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

iexcl Serra L~hiH To~mfS

Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Seidlitz E von (1931) Geographie t JI Europa (ohne Deutschland) Ferdinand Hirt Breslau 1196 pp

147 Imaacutegenes del Paisaje

Solar G Y Hosli J (ed ) (1974) Hans Conrad Escher von Linth Ansichten und Panoramen der Schweiz Die Ansichten 1780-1822 Atlantis Zuumlrich 367 pp

Soleacute Sabariacutes L (1952) Geografiacutea Fiacutesica El Relieve En Teraacuten M de (1952) Geografiacutea de Espantildea y Portugal Tomo l Montaner y Simoacuten Barcelona 500 pp

Vidal Box C (1936) Contribucioacuten al conocimiento morfoloacutegico del segmento occidental de la Sierra de Gredos Museo Nacional de Ciencias Naturales Madrid 56 pp

Vidal Box C (1944) La nueva sala de Geografiacutea Fiacutesica del Museo Nacional de Ciencias Naturales Bol R S Esp H ist Nat XLII pp 477-486

Vidal Box C (1946) Una sugerencia y anteproyecto en favor de la creacioacuten de un Museo Nacional de Geografiacutea Estudios Geograacuteficos Ndeg 24 pp 411-418

Wagner G y Koch A (1961) Raumbilder zur Erd- un Landschaftsgeschichte Suumldwestdeutschlandsschmiden Stuttgart 33 pp

Wagner G (1961) Herstellung von Blockbildern Schmiden Sttutgart 11 pp

Page 13: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

113 Imaacutegenes del Paisaje

de Geacuteographie Physique (1909) con frecuencia seguidores del modo de presentar las expresivas secuencias davisianas son muestras excelentes del uso didaacutectico que en morfologiacutea puede tener el bloque diagrama ideal

Figura 9 Evolucioacuten del relieve en una regioacuten plegada seguacuten De Martonne (bloques-diagrashyma publicados originalmente en 1909 en el Traiteacute de Geacuteograpuacutee Physique y maacutes tarde en el Abregeacute de Geographie Physique)

El propio Davis contribuye de forma muy directa a la difusioacuten del bloqueshydiagrama en Europa pues es sorprendentemente en Alemania donde aparece en 1912 el libro que contiene la coleccioacuten maacutes completa de bloques-diagrama realizados por el geoacutegrafo norteamericano y que lleva por tiacutetulo Die erkliirende

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

bull

En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 14: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

114 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Beschreiacutebung der Landformen Se trata de la traduccioacuten al alemaacuten de las clases por eacutel dictadas en la Universidad de Berliacuten donde se encuentra como profesor invitado en el curso 1908-1909 Tales bloques diagrama son en una proporcioacuten muy importante representaciones idealizadas que maacutes que reflejar las caracteriacutesticas geomorfoloacutegicas concretas de una regioacuten determinada buscan la transmisioacuten de las ideas esenciales de la teoriacutea del ciclo entre los geoacutegrafos de habla germana algo que como es sabido apenas logroacute Davis

No obstante lo que siacute lograron las clases pronunciadas en Berliacuten y la obra que de ellas resultoacute es la d ifusioacuten en Alemania del bloque-diagrama corno representacioacuten graacutefica esencial en el estudio del relieve seguacuten antildeos maacutes tarde reconoceriacutea quien fuera el maacutes digno continuador de su obra graacutefica en Alemania Fritz HOlzel (Bosse y H61zel 1975 paacuteg 27) Este cartoacutegrafo habiacutea sido alumno de otro geoacutegrafo alemaacuten Erwin Scheu que a su vez habiacutea asistido a las clases impartidas por Davis en Berliacuten y que como inmediata consecuencia de este contacto directo con el maestro norteamericano ya habiacutea recurrido tempranamente al uso del bloque-diagrama en su tesis sobre el Jura suavo (Scheu 1909) Erwin Scheu desarrolloacute en los antildeos veinte una notable actividad viajera por Europa y las obras de geografiacutea regional que resultaron de sus recorridos por Cerdentildea Francia y Espantildea fueron ilustradas por su disciacutepulo H6lzel con bloques-diagrama realizados a partir de los mapas de la eacutepoca y sobre todo de los datos y fotografiacuteas obtenidos sobre el terreno por Scheu En lo que respecta a la Peniacutensula hay que destacar el trabajo realizado por este geoacutegrafo alemaacuten sobre la Cordillera Cantaacutebrica (Scheu 1930) ricamente ilustrado con 25 bloques diagrama de H61zel repartidos de un modo bastante sisteacutematico entre Asturias y el Paiacutes Vasco y que ofrecen una imagen representativa de los relieves estructurales y de algunos modelados caracteriacutesticos de las montantildeas cantaacutebricas (rasas litorales relieves glaciares terrazas fluviales etc) Este trabajo que pese a contar con el apoyo material de Joaquiacuten Goacutemez de Llarena parece haber tenido una difusioacuten muy escasa en nuestro paiacutes6

no es el uacutenico que incluye bloques-diagrama de H61zel referidos a la Peniacutensula en la Geografiacutea de Europa publicada en los antildeos treinta por Seidlitz aparecen tambieacuten algunos otros sobre el Nordeste peninsular (Pirineos y Sierra de la Demanda) (Seidlitz 1931)

Los antildeos de entreguerras son tambieacuten fundamentales desde el punto de vista de la normalizacioacuten del bloque-diagrama a la que contribuye de modo decisivo la publicacioacuten de los primeros libros en los que se ofrecen datos sobre la historia

Has ta tiempos muy recientes Espantildea parece haberse mantenido al margen tan to de la trad icioacuten graacutefica suiza como de la alemana Asiacute podriacutea explicarse el escaso eco en nuestro paiacutes de la labor graacutefica de Hans Cloos cuyas Conversaciones con la Tierra fueron traducidas sin embargo al castellano Cloos formado in icialmente como arquitecto aunque dedicado luego en exclusiva a la Geologiacutea es autor de importantes trabajos geoloacutegicos (cuyo contenido tuvo mucha mayor influencia en sus colegas

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

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Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

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F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

11

131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

141 Imaacutegenes del Paisaje

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Page 15: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

115 Imaacutegenes del Paisaje

de este tipo de representacioacuten y en los que se explican maacutes o menos detalladamente las teacutecnicas para su realizacioacuten (Ruumlsewald 1925 y sobre todo Lobeck 1924) Incluso en el difundido manual de ensentildeanza de la Geografiacutea (Metodologiacutea de la Geografiacutea) publicado por Pedro Chico en 1931 aparecen los bloques diagrama y las panoraacutemicas como un recurso didaacutectico de primer orden7

bull

Figura 10 Contexto de los yacimientos de hierro de los alrededores de Bilbao y evolucioacuten morfoloacutegica de los alrededores de esta ciudad seguacuten interpretacioacuten de Scheu (1930) sobre un bloque diagrama de Fritz Holzel

Pero es evidente que aquella normalizacioacuten de la praacutectica del bloqueshydiagrama viene sobre todo de la proliferacioacuten de ejemplos concretos en los trabajos geomorfoloacutegicos publicados a lo largo de los antildeos 20 y 30 Asiacute a las representaciones realizadas por Davis hay que antildeadir las que son obra de sus disciacutepulos directos como por ejemplo Erwin Raisz que dibuja para Douglas Johnson los conocidiacutesimos y magniacuteficos bloques que muestran la evolucioacuten de los Apalaches centrales (Johnson 1932)

espantildeoles) y logroacute en los antildeos 40 y 50 un estilo de representacioacuten graacutefica del relieve estructural muy personal y de gran expresividad en la que creemos ver las huellas de su formacioacuten arquitectoacutenica Su obra graacutefica estaacute en el origen de una escuela germana de la que son destacados representantes Wagner y Koch (1961) au tores de un espectacular atlas de bloques-diagrama sobre los relieves estructurales y el modelado del Sur de Alemania Entroncando con la misma trad icioacuten auacuten se pueden encontrar representantes maacutes recientes en el paiacutes germano entre ellos el conjwlto de bloques diagramas seriados que cubren la tota lidad de la Peniacutensula Ibeacuterica elaborado por Feldmann y al que se haraacute mencioacuten maacutes adelante

El propio geoacutegrafo espantildeol es el autor de una acuarela panoraacutemica del Sistema Ibeacuterico que aparece reproducida como dibujo a tinta en la citada obra y de cuyo original no tenemos maacutes noticias 1

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

bull

En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

iexcl Serra L~hiH To~mfS

Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

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FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

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Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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147 Imaacutegenes del Paisaje

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Page 16: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

116 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

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Figura 11 Ilustracioacuten sobre un modo de elaborar el bloque-diagrama directamente a partir del mapa topograacutefico incluida en el manual de Lobeck (1924)

La expansioacuten de la ilustracioacuten morfoloacutegica mediante el bloque diagrama en la primera mitad del siglo XX prosigue en los dos decenios siguientes y abarca desde la siacutentesis regional expresiva al anaacutelisis tridimensional de detalle incluyendo ambos las reconstrucciones paleogeograacuteficas Incluso en glaciologiacutea se establecen relaciones entre superficie y profundidad o se proponen hipoacutetesis sobre fenoacutemenos que requieren tal combinacioacuten en graacuteficos maacutes o menos abstractos o realistas La utilidad didaacutectica de esos graacuteficos indica su capacidad expresiva Entre las destrezas del geoacutegrafo y del geoacutelogo se incluyoacute con distinto eacutexito el aprendizaje en la confeccioacuten del bloque diagrama como instrumento particularmente expresivo para los estudios de tectoacutenica de estratigrafiacutea de paisaje etc y para explicar una secuencia espacial o temporal de una estructura o de un relieve con sentido de la animacioacuten de los procesos y de la simplificacioacuten de las formas Los manuales particularmente utilizaron este modo de expresioacuten complementario Pero hay investigadores que por muacuteltiples lugares usan los bloques como herramientas de expresividad naturalista (caso de Monod 1937 en el Saacutehara) del paisaje (por ejemplo

117 Imaacutegenes del Paisaje

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F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

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FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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117 Imaacutegenes del Paisaje

FICUH l-Rejuveoilted Appalachian in pott-Newark time

FI GURt 2-The FaU looe peneplain

F ICUU 4-J rching af FIn Zone peneplain and i tl Coatal PIin coer regionatluperpoaition oiacute lOutncut ward-flowing Itreams

YIOualt 5-1Oc Schooley pe~plain

FIOUU 6-Arcnillg ol Schoolcy peneplain

FI CURE 3-Encroachment of Ceetaceoul KA and deposiacutelion of Coallal Plllin ~

FICUAE 7- Dilection of Schooley peneptain lnd dcveloprncnt ol )-brriburiexcl peneplain 00 belu 01 noore5istlnl roek

FICUta 8-tJplirt and di ecUon of Harrilburg peneplain and devdopmcot af Somerville pencplain 00 the weakest roce belu

Figura 12 La evolucioacuten del relieve de los Apalaches centrales seguacuten bloques realizados por Erwin Raisz para Douglas Johnson (1932)

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

bull

En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

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teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

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persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

iexcl Serra L~hiH To~mfS

Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

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FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

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Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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147 Imaacutegenes del Paisaje

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Vidal Box C (1946) Una sugerencia y anteproyecto en favor de la creacioacuten de un Museo Nacional de Geografiacutea Estudios Geograacuteficos Ndeg 24 pp 411-418

Wagner G y Koch A (1961) Raumbilder zur Erd- un Landschaftsgeschichte Suumldwestdeutschlandsschmiden Stuttgart 33 pp

Wagner G (1961) Herstellung von Blockbildern Schmiden Sttutgart 11 pp

Page 18: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

118 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Chevalier 1928 en Cataluntildea) o como imagen fisiograacutefica de conjunto por ejemplo en la Expedicioacuten Yale al Peruacute en 1911 dirigida por el famoso Hiram Bingham (Bowman 1938) mostrando entre otros la aplicacioacuten de los modelos davisianos o los martonnianos secuenciales y sinteacuteticos seguacuten aacutereas de influencia No desaparecioacute tampoco el croquis sobre el terreno como siacutentesis seleccioacuten y aportacioacuten de autor en el trabajo geograacutefico paisajista como es el caso ejemplar de Deffontaines

Es importante resentildear que en la eacutepoca tambieacuten llegan a utilizarse los bloques-diagrama como recurso graacutefico sistemaacutetico en diversos atlas geoloacutegicos o geograacuteficos (p ej Lobeck 1932) e incluso en la parte geomorfoloacutegica de un atlas nacional el de Dinamarca por obra de un geoacutegrafo daneacutes especialmente interesado en esta teacutecnica de representacioacuten (Schou 1949) que llegaraacute a publicar algunos antildeos maacutes tarde un pequentildeo manual sobre este asunto (Schou 1962) Igualmente ven la luz guiacuteas de viaje que emplean los bloques y los mapas fisiograacuteficos como hilo conductor desde el punto de vista graacutefico como la realizada por Lobeck (1933) para ilustrar el trayecto entre las costas este y oeste de los Estados Unidos

Tambieacuten tiene un especial intereacutes geomorfoloacutegico el Atlas des formes du relief editado por el IGN franceacutes en 1956 pero en este caso no por sus bloques sino por sus anaglifos En esta publicacioacuten que marcoacute un nivel de calidad profesoral colaboraron entre otros Cholley Birot y Chardonnet mezclaacutendose en ella las vistas verticales en relieve con mapas topograacuteficos fotos aeacutereas y cortes morfoestructurales Estaba pensada esta obra como un compendio de praacutecticas para estudiantes de geografiacutea y su resultado didaacutectico fue espectacular Su revisioacuten hace ver lo conveniente que seriacutea hoy una aportacioacuten con similar eficacia aunque puesta al diacutea en conceptos ejemplos y teacutecnicas de representacioacuten8

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En cualquier caso como hemos indicado cualquiera que use los documentos cartograacuteficos geoloacutegicos y geograacuteficos suizos conoceraacute su calidad graacutefica muy cuidada siempre de antantildeo a hoy Incluso sabraacute la difusioacuten que esta escuela ha tenido en la confeccioacuten de documentos similares por otras cordilleras del mundo La relacioacuten entre dibujo pintura escultura y mapas de montantildea no soacutelo es proacutexima sino directa y frecuentemente lo es en un mismo autor que domina todas estas manifestaciones dentro de la tradicioacuten de una alta perfeccioacuten teacutecnica un serio conocimiento cientiacutefico y una elevada capacidad de expresioacuten esteacutetica puede ponerse como ejemplo de todo ello a Edouard Imhof (Imhof 1951) La expresioacuten graacutefica de los rasgos geoloacutegicos sigue siendo antildeadida con

Curiosamente el Servicio Geograacutefico del Ejeacutercito editoacute en Madrid en 1989 un Atlas de Anaglifos de un sector de la Peniacutensula Ibeacuterica real izado por L Sandoval que no ha tenido apenas d ifusioacuten aunque su utishylidad selectiva y comparativa en la ensentildeanza geograacutefica del relieve es bastante evidente

119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

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vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

11

131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

141 Imaacutegenes del Paisaje

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119 Imaacutegenes del Paisaje

sentido de escuela a un soporte paisajista Y esa potenciacioacuten del soporte resaltado por las individualidades marcadas del relieve montantildeoso y por su belleza plaacutestica permite una tradicioacuten en la confeccioacuten de maquetas de relieve exactas corno reproducciones de voluacutemenes y de texturas de rocas y glaciares Maestros en la geografiacutea en la cartografiacutea y en la geologiacutea alpinas los suizos han proporcionado a tales maquetas un elevado contenido morfoloacutegico esteacutetico y didaacutectico La presencia de investigadores alpinos en expediciones cientiacuteficas tempranas en otras grandes cordilleras extendioacute sus propios modelos de representacioacuten cartograacutefica geoloacutegica etc a otras montantildeas alejadas (p ej Gansser 1964)

Figura 13 Kreuzberge (Macizo del Santis) dibujo a laacutepiz realizado en 1946 por Edouard Irnhof y p ublicado en su Terrain el carte (1951)

LIacuteNEAS GEN ERALES DE LA EVOLUCIOacuteN D E LAS REPRESENTACIONES ESPANtilde OLAS

En la evolucioacuten de las representaciones graacuteficas del relieve espantildeol se pueden sentildealar algunos pasos bien definidos Podernos partir de unas primeras representaciones en momentos relativamente recientes corno expresiones

120 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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simplificadas en lo geograacutefico -puede ser el caso del perfil orograacutefico del paso del Guadarrama publicado por Laborde en 1809- o en lo geoloacutegico -el ejemplo de los tempranos cortes alpinos de Gimbernat en 1803 es significativo- claramente anteriores a una mirada realmente geomorfoloacutegica Incluso con una atencioacuten mayor al dibujo del relieve los perfiles y planos de las Torcas de Cuenca realizados por Cortaacutezar ya en 1874 (Alonso 1986) no dejan de ser descriptivos y esquemaacuteticos Si bien las representaciones que aquiacute nos interesan son de inicios maacutes tardiacuteos que las internacionales antes resentildeadas y en tales comienzos algo toscas tambieacuten hay precedentes como antes indicamos que destacan por su temprana calidad Por ejemplo las laacuteminas pan oraacutemicas de intencioacuten geoloacutegica que acompantildean la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donaire (1873) o tambieacuten las que aparecen en la de Avila (Martiacuten Donaire 1879) Buena parte de tales ilustraciones son fruto del trabajo de dibujantes al servicio de la Comisioacuten9

como JCebriaacuten o Joseacute Vallejo profesor de dibujo en la Escuela de Minas de Madrid y a quien se deben las dos bellas vistas y la magniacutefica panoraacutemica de Alhama de Aragoacuten que ilustran la citada descripcioacuten geoloacutegica de Zaragoza en todas las cuales se pone de manifiesto la relacioacuten del relieve con la estructura de las rocas Otros geoacutelogos espantildeoles son sin embargo relativamente autoacutenomos en este sentido como Ezquerra del Bayo formado pictoacutericamente con Antonio Loacutepez en la Academia de San Fernando y autor de una bonita vista del relieve volcaacutenico de Castelfollit o como Botella autor de d iversas vistas geoloacutegicas (Frochoso y Sierra 2004 paacuteg 231) Y algunos de cuyos dibujos auacuten siguen reproducieacutendose en los manuales de historia natural hasta entrado el siglo XX (por ejemplo los dibujos de relieves caacutersticos incluidos en el libro de Boliacutevar y Calderoacuten 1909)

Figura 14 Detalle de la panoraacutemica de los alrededores de Alhama de Aragoacuten dibujada por Joseacute Vallejo para la Descripcioacuten Fiacutesica y Geoloacutegica de la Provincia de Zaragoza de Martiacuten Donayre (1876)

9 Otros casos hay como en las laacuteminas del Compendio de Geologiacutea de Vilanova en 1872 en los que se recushyrre a copias de ilustraciones y a dibujantes profesionales

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

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horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

iexcl Serra L~hiH To~mfS

Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

126 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

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El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

128 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

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de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

133 Imaacutegenes del Paisaje

Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

134 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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147 Imaacutegenes del Paisaje

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Page 21: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

121 Imaacutegenes del Paisaje

Sin embargo otras ilustraciones geoloacutegicas de la segunda mitad del XIX corno en las memorias referidas a Santander a Segovia o a Madrid son poco resaltables o incluso algo primarias

Los esquemas de formas de relieve en la Pedriza de Manzanares de Casiano de Prado (1864) son de d ibujo muy elemental Algunos de ellos corno el del Canto Cochino o el del Carro del Diablo siguen los perfiles considerados pintorescos ya recogidos en un grabado de Brambilla sobre El Escorial en 1825 Estos modelos de figuras de determinada fisonomiacutea de piedra caballera tienen no obstante una singular persistencia repitieacutendose corno forma tiacutepica en Coacutemez de Llarena aplicado a los Montes de Toledo en 1916 o hasta en recientes publicaciones corno asentados siacutembolos guadarramentildeos en folletos oficiales en curso o incluso tal vez en relacioacuten maacutes o menos inconsciente con esta tradicioacuten corno caracteriacutestico ejemplo geomorfoloacutegico graniacutetico en un trabajo de uno de nosotros

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Figura 15 Relieves de piedras caballeras dibujados por Brambilla (El Escorial 1825) Casiano de Prado (1864) y Goacutemez de Llarena (1916)

Pero tambieacuten estaacute presente en la segunda mitad del XIX alguacuten otro tipo de representacioacuten especialmente cuidada e incluso sorpresas maacutes exoacuteticas referencias lejanas particularmente expresivas y atractivas en la ciencia colonial como en el caso de los volcanes de Ameacuterica en los apuntes de Jirneacutenez de la Espada en 1865 o del volcaacuten filipino de Albay por Abella en 1882 En cualquier caso hay que resaltar que en nuestra produccioacuten graacutefica maacutes habitual domina siempre una voluntad evidentemente loacutegica de incorporacioacuten a unos modelos a unos meacutetodos unas teacutecnicas y un estilo que procediacutean de fuera donde estaban asentados y elaborados Un ejemplo entre tantos otros podriacutea ser la tardiacutea y aislada incorporacioacuten que hizo Prast en 1929 de una vista circular del Circo de Credos alrededor de su laguna siguiendo la pauta de los panoramas de montantildeas circundantes con su perspectiva tomada desde un lago central que se habiacutean realizado en Suiza desde inicios del siglo XVIII y maacutes cercanamente del Lago Leacuteman en 1924 Es eacutesta una tradicioacuten emparentada con vistas similares de ciudades o con las realizadas desde un frecuentado punto de vista turiacutestico en el siglo XIX como el Rigi e incluso auacuten maacutes con los giros de

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

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129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

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Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

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Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

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llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

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geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

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~I~ampaI~

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

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terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

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Page 22: EVOLUCiÓN DEL EMPLEO DE LOS BLOQUES-DIAGRAMA EN LA

122 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

horizonte en montantildeas como el realizado por Bourrit en los Alpes en 1779 o los de Schrader en el Pirineo hacia 1880

Tambieacuten hay renovaciones y reutilizaciones de materiales e incluso coincidencias en la buacutesqueda de expresividad Una de eacutestas especialmente marcada tanto por la forma de expresioacuten utilizada como por su salto en el tiempo que va de los oriacutegenes a la actualidad es el dibujo mixto entre mapa fisiograacutefico en perspectiva y bloque-diagrama compuesto con un sistema de cortes geoloacutegicos diagonales que ha realizado Feldmann para toda la Peniacutensula Ibeacuterica y Baleares (1988-2003) y que se emparenta con el graacutefico de Macpherson (1888) de la estructura de conjunto de la Peniacutensula expresada a traveacutes de una serie de cortes igualmente diagonales sobre un mapa En el caso de Macpherson los cortes van de NE a SW mientras en el de Feldmann van preferentemente de NW a SE buscando su mejor expresividad salvo en el Ebro (NE-SW) y en los bordes de Portugal y de Valencia (E-W) Esta coincidencia indica el sentido de un tratamiento de conjunto de la Peniacutensula la expresividad de los cortes diagonales perpendiculares a las estructuras y la idoneidad del meacutetodo graacutefico empleado Entrar en lo propiamente geograacutefico y geoloacutegico de estos documentos separados en el tiempo seriacutea tambieacuten revelador pero no es nuestro propoacutesito de momento

Asiacute pues no es sino tras varios decenios de titubeos cuando en el siglo XX se afianzan en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid unas series de publicaciones que cuidan la expresion graacutefica dentro de modelos bien definidos Las formas arquetiacutepicas plasmad as por de Prado o las influencias inmediatas del estilo de trabajo de Obermaier y maacutes remotas pero muy trascendentales de Davis operan con mayor o menor consciencia en los elementos escogidos en las liacuteneas de trabajo preferidas y en los estilos y teacutecnicas utilizados El bloque diagrama se usa en este sentido con calishydad sea con sentido de representacioacuten regional secuencial o de formas especiacuteficas

La raacutepida adopcioacuten y la continuidad inicial del bloque-diagrama en Espantildea Juan Carandell y Carlos Vidal Box

Tras los inicios esquemaacuteticos de representacioacuten del Sistema Central que van de 1864 con Casiano de Prado en su descripcioacuten de Madrid a 1891 con Cortaacutezar en la de Segovia Carandell vino a abrir desde 1914 10 que podriacuteamos llamar la escuela graacutefica propia del Museo Nacional de Ciencias Naturales con sus representaciones iniciales de esos mismos sectores en las que el bloqueshyd iagrama adquiere clara entidad

De esta raacutepida ad opcioacuten del bloque-diagrama fisiograacutefico y morfoloacutegico en nuestro paiacutes y del origen davisiano del modelo graacutefico es viva imagen el

123 Imaacutegenes del Paisaje

teacutermino que aparece en algunos de los trabajos de Carandell al pie de esas representaciones block diagrama Lo son tambieacuten evidentemente el estilo y la doctrina Los principales de estos bloques los publicaraacute Carandell en las deacutecadas de 1910 y 1920 en relacioacuten con la orografiacutea de la Sierra de Guadarrama (Obermaier y Carandell 1917) con los relieves de Andaluciacutea y con los trabajos que sobre el glaciarismo de Espantildea realizoacute con Hugo Obermaier (bloques de Gredos por ejemplo en Obermaier y Carandell 1916a) Sus vistas combinadas frecuentemente con las fotografiacuteas que les sirven de base y publicadas en los mismos trabajos alcanzan tambieacuten una notable calidad en especial las realizadas sobre Sierra Nevada (Obermaier y Carandell 1916b) en las que se reconstruye la extensioacuten del glaciarismo cuaternario y en cuya continuidad tendraacute una especial importancia la obra realizada por Vidal Box en los antildeos 30

Un artiacuteculo de Carandell publicado en el Boletiacuten de la Sociedad Espai10la de Historia Natural en 1924 laquoLos bloques diagramas Algunos sencillos consejos para su trazado seguacuten AK Lobeckraquo con 15 figuras aparece el m ismo antildeo de publicacioacuten del manual de Lobeck lo que da idea de lo al tanto que estaba Carandell de lo que se haciacutea en este campo en EEUU Pese a las claras reminiscencias davisianas en el modo de representacioacuten Carandell se diferencia no obstante del maestro norteamericano no soacutelo por sus objetos de estudio sino por su frecuente desconexioacuten de una voluntad demostrativa de la teoriacutea del ciclo tal y como se comprueba en sus bloques y vistas que sirven para ilustrar lugares concretos y que no suelen tener una concepcioacuten evolutiva La formacioacuten de Carandell estaba loacutegicamente tambieacuten vinculada al estilo de los trabajos del Museo Nacional de Ciencias Naturales y en concreto al magisterio d irecto de Hugo Obermaier En cualquier caso si el estilo inducido por Obermaier fue influyente en varios aspectos desde el tema de trabajo a la forma de representar (por ejemplo mediante croquis fisiograacutefico y geomorfoloacutegico junto a fotografiacutea y a partir de ella mediante bloque diagrama que resalta la forma de modelado y hace igualmente de croquis fisiograacutefico mediante bloque que revela la base morfoestructural y mediante cartografiacutea) el peso de Davis y su escuela es igualmente muy manifiesto en fondo y forma

Por otro lado es conocida la amplia produccioacuten graacutefica de Carandell referida especiacuteficamen te a Andaluciacutea d onde desarrolloacute una cualificada y maacutes independiente labor Estos trabajos han sido recientemente repasados y clasificados en estudios sobre la obra andaluza de Carandell y dentro de un trabajo maacutes general sobre el Archivo de paisaje de Andaluciacutea (Loacutepez Ontiveros 1999 y Naranjo y Ramiacuterez 2005) y muestran lo significativo del mantenimiento del recurso del bloque-diagrama en Carandell con objetivos morfoestructurales y de expresioacuten del modelado tanto en estilo propio como en fidelidad a sus oriacutegenes formativos centrados regionalmente a lo largo de su

124 Eduardo Martmez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

vida profesional Tambieacuten se exponen en otro capiacutetulo de este libro En este trabajo sin teacutetico soacutelo nos cabe mencionarlos y remitimos por ello a los autores citados para obtener una maacutes extensa informacioacuten y la perspectiva de una mirada convergente Lo mismo ocurre con otros morfoacutelogos que nombramos con amplia obra graacutefica de aportacioacuten local in teresante concentrada o dispersa que recomendamos seguir al lector como informacioacuten y como disfrute pero que aquiacute no puede ser recogida

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Figura 16 La Sierra de Guadarrama bloque-diagrama de Juan Carandell (1915)

En cualquier caso como ya ha quedado apuntado la obra de Carandell es ademaacutes importante por otro motivo suplementario inaugura una tradicioacuten graacutefica que se consolidaraacute en los antildeos treinta y cuarenta tanto en el citado Museo como de modo maacutes extenso Inmediata prueba de esta activa aunque minoritaria escuela madrilentildea es la representacioacuten realizada por Goacutemez de Llarena en 1923 del proceso de encajamiento del Tajo en Toledo por el mismo meacutetodo del bloque consagrado por Davis y de Martonne

Por su particular expresividad en esta evolucioacuten debe resaltarse de nuevo el ejemplo de estas representaciones en el Sistema Central espantildeol Desde los mencionados trabajos de inicios del siglo xx en las publicaciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales se observa un decidido incremento del intereacutes por la buena expresioacuten graacutefica seguacuten los modelos criterios y teacutecnicas de la eacutepoca En este marco y en el de su conexioacuten con la caacutetedra de Geografiacutea Fiacutesica en la Universidad de Madrid se explica la aparicioacuten de una segunda fase de representaciones graacuteficas del relieve efectuadas con calidad igualmente por una

125 Imaacutegenes del Paisaje

persona capacitada para ello Vidal Box Cuando en los antildeos treinta Vidal Box trabaja en el macizo de Gredas sigue la misma liacutenea de investigacioacuten glaciar los mismos lugares y no poco del estilo de trabajo que incluye representaciones al estilo de las que habiacutea realizado Obermaier en colaboracioacuten con Carandell (Vidal Box 1936) Vidal Box teniacutea una clara capacidad para el dibujo y su aportacioacuten marca una etapa brillante en las representaciones graacuteficas de nuestro relieve

Por otro lado en los bloques y vistas que ilustran varios de los artiacuteculos publicados por Vidal Box en los antildeos 30 Y 40 asiacute como en los realizados para trabajos de otros autores la huella de Davis es indudable no soacutelo en cuanto a los conceptos evolutivos del relieve sino sobre todo en la concepcioacuten graacutefica de bloques y vistas Estos presentan en ocasiones sorprendentes coincidencias con algunos de los realizados por el maestro norteamericano lo cual es especialmente patente en la vista de la Paramera y en el bloque-diagrama aplicado a Gredos asiacute como en los que dibujoacute para el conocido trabajo de Francisco Hemaacutendez-Pacheco sobre los volcanes del Campo de Calatrava entre los que destaca el ya claacutesico que muestra la evolucioacuten del volcaacuten de Fuentilleja (Hemaacutendez-Pacheco 1932)

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Figura 17 Bloque-diagrashyma de la Sierra de Gredos (Vidal Box 1936)

Pero hay tambieacuten otro aspecto del trabajo de Vidal Box que resulta de gran intereacutes la elaboracioacuten de modelos de relieve Su solvencia en esta praacutectica y la existencia de otros maquetistas lograron que el Museo mencionado incluyera en los antildeos cuarenta una Sala de Geomorfologiacutea dotada de unas maquetas -hoy por desgracia arrumbadas- muy expresivas (Vidal Box 1944 y 1946) Eran en total unas 50 realizadas en escayola policromada y en madera entre 1942 y 1945 e ilustraban las formas de relieve maacutes caracteriacutesticas de la Espantildea peninsular e insular asiacute como de antiguos territorios espantildeoles (Filipinas) y de otras regiones del globo Destaca entre ellas una de Pentildealara con sus formas glaciares que auacuten conserva alto intereacutes didaacutectico En los museos hay hoy una tendencia a otras formas de expresioacuten y comunicacioacuten con el visitante seguacuten las teacutecnicas informaacuteticas pero la capacidad de ensentildeanza de una buena maqueta sigue siendo muy superior en materias de relieve y de paisaje

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Figura 18- Fotografiacutea de la sala de Geomorfologiacutea del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Vid al Box 1944) En ella se observa en uacutel timo plano un oacuteleo del Cantildeoacuten del Colorado (clashyram ente inspirado en las vistas de Holrnes) y por delante de eacutel entre otras maquetas dos que representan el Tre Cime del Lavaredo (Dolomitas) y el propio Cantildeoacuten del Colorado

Esa sala de modelos de relieve revela la intencioacuten pedagoacutegica ademaacutes de la investigadora de Vidal Box Los antildeos cuarenta fueron de hecho un momento de eacutexito en la concepcioacuten de maquetas como mostroacute tambieacuten la exposicioacuten sobre el Guadarrama organizada en 1942 por el Club Alpino Espantildeol (Prast 1942) con obras de Francisco Carreras Luis Caballero Joseacute Gil A Nuacutentildeez Losada del Laboratorio de Geografiacutea Fiacutesica de la Universidad de Madrid del Instituto Joseacute de Acosta y del Instituto Geograacutefico y Catastral 10

10 Las maquetas de montantildea recientes en Espantildea estaacuten poco interesadas por las cuestiones geomorfoloacutegicas pese a su aprop iada expresividad en este sentido Son escasas y si las hay tienen maacutes bien intencioacuten ornashymental o montantildeera o de didaacutectica soacutelo orograacutefica o de informacioacuten turiacutestica y estaacuten resueltas con distinto acierto Es incluso habitual oiacuter o leer que determinados recursos informaacuteticos han pospuesto definitivamenshyte el papel informativo de las maquetas pero esto se debe probablemente maacutes a los extendidos deslumbrashymientos profanos por estos tratamientos teacutecnicos que a una reflexioacuten profesional ponderada La maqueta maacutes recientemente expuesta en Espantildea tiene un claro fin turiacutestico como elemento de un parshyque temaacutetico y es una reprod uccioacuten parcial del Pirineo aragoneacutes con amplias dimensiones instalada a la intemperie en el Pirenarium de Sabintildeaacutenigo (Huesca) Se trata de una red uccioacuten de voluacutemenes topograacuteshyficos desnudos con loacutegica exageracioacuten de la escala vertical sin referencias paisajiacutesticas con muy escasa informacioacuten geograacutefica y sin tratamiento de calidad esteacutetica en los materiales y elementos representados Claro estaacute carece tambieacuten de referencias geomorfoloacutegicas Incluso su funcioacuten en un espacio de ocio estaacute indefinida Entre las viejas maquetas arrumbadas y el desaprovechamiento de las nuevas el uso y destishyno de estos modelos de relieves presenta todos los sintomas de un declive poco alentador

127 Imaacutegenes del Paisaje

El apogeo del bloque-diagrama en Espantildea de los antildeos 40 a los 60 del siglo XX

Las aportaciones de Vidal Box se adentran ya en la que podemos considerar como fase de maacuteximo auge del bloque-diagrama en Espantildea entre el final de la guerra civil y los antildeos 60 cuando la tradicioacuten fuera de nuestras fronteras estaacute ya plenamente consolidada

A la referencia constituida por las propias obras de Davis hay que antildeadir los trabajos de De Martonne publicados con posterioridad a la primera edicioacuten de su manual de Geografiacutea Fiacutesica el librito de Geografiacutea de los Alpes (Martonne 1926) traducido en 1955 al espantildeol por la editorial Juventud el Abregeacute de Geographie Physique (Martonne 1922) y el tomo de Geografiacutea Fiacutesica de Francia (Martonne 1942) que forma parte de la Geografiacutea Universal de Vidal de la Blache y Gallois son obras que conocieron una notable d ifusioacuten en nuestro paiacutes Unas y otras referencias son fundamentales para entender la consolidacioacuten de esta teacutecnica de representacioacuten en la geografiacutea espantildeola

l La cuenca de sedImentacIoacuten en el meRozoleo - A Caenca aatdrlca B Oaenoa cantllbrlca

11 Morloetruatnra actual - 1 Bloque oant4brleo l middot Bloque litoral 8 Bloque de 1amp8 erranias Interlore bull Bloque de la Bnreba

Figura 19 La evolucioacuten morfoloacutegica de la Cordillera Cantaacutebrica a partir de la cuenca sedishymentaria mesozoica bloques-diagrama d ibujados por Llopis y publicados en el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

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Sobre el modelo por ellas establecido Noel Llopis Lladoacute realiza entre comienzos de los antildeos 40 y el antildeo de su muerte 1968 gran cantidad de bloques buena parte de ellos referidos a sus terrenos principales de investigacioacuten Asturias por un lado y Cataluntildea por otro con particular atencioacuten a sus caracteres morfoestructurales (por ejemplo Llopis 1942 1954) La formacioacuten francesa de Llopis tal vez incluso un estilo realista martonniano en el tratamiento de la roca y su relacioacuten cientiacutefica con Soleacute Sabariacutes enmarcan estos trabajos pero la calidad y cantidad de su produccioacuten graacutefica son valores particulares que merecen ser destacados La neta claridad de los graacuteficos de Llopis sin renuncia a la complejidad del fenoacutemeno mostrado y su oportunidad como ejemplo son constantes en sus graacuteficos Sin duda se basaban ambas capacidades en un profundo conocimiento en su diacutea innovador de la geologiacutea peninsular Su solvencia como dibujante es evidente y era conocida por su facilidad de plasmacioacuten ya directamente en el terreno La abundancia de sus trabajos indica tanto su amplia dedicacioacuten como su competencia

Las aportaciones graacuteficas geoloacutegicas y geomorfoloacutegicas adquirieron al mediar el siglo XX en el tomo 1de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal dirigida por Teraacuten el caraacutecter de un verdadero album de bloques-diagrama geomorfoloacutegicos indicador de la alta d isponibilidad de estas representaciones por su praacutectica habitual

Menos abundantes que los bloques pero no menos significativos son en esta misma obra los dos mapas fisiograacuteficos en vista oblicua que ilustran respectivamente los relieves de la Peniacutensula Ibeacuterica y los de la isla de Mallorca a los que hay que antildeadir el tambieacuten referido a Mallorca de Carandell Responden todos e llos de forma expresa a un modelo desarrollado sistemaacuteticamente en EEUU en tre los antildeos 20 y 40 por Armin Kohl Lobeck y por Erwin Raisz y se prop onen la representacioacuten sinteacutetica de las p rincipales unidades del relieve de un modo esquemaacutetico aunque m uy expresivo ll

Como comp lemento de tales m apas es tambieacuten destacable la expresividad y particular belleza graacutefica de un dibujo en perspectiva que muestra la incidencia de la estructura de la Tramontana en el paisaje realizado por Colom Todo ello sugiere una liacutenea de expresioacuten graacutefica en morfologiacutea d eliberada y perfeccionada un instrumento cientiacutefico en alza metodoshyloacutegicamente ortodoxo y depurado Destacan en el p rimer tomo de la Geografiacutea de Teraacuten p or tanto numerosos graacuteficos p or su expresividad y por

En uno de los contados estudios de tipo colonial que se produjeron en Espantildea en la primera mitad del siglo XX tambieacuten se recurrioacute eventualmente al bloque diagrama fisiograacutefico se trata de la siacutentesis regioshynal que Aliacutea publica en 1945 sobre el Sahara entonces espantildeol

11

129 Imaacutegenes del Paisaje

el uso del bloque como sistema instituido de representacioacuten cientiacutefica y didaacutectica el mapa al estilo de Lobeck los bloques del macizo galaico de Sierra Morena de la Cordillera Cantaacutebrica de Montserrat del Valleacutes del Bajo Ebro o de la Cordillera Prelitoral son casos donde se expone un entendimiento sin ambiguumledad y con faacutecil comunicabilidad su conjunto es una imagen de la idea morfoloacutegica de Espantildea en su fecha sumamente apreciable

El hecho de no estar presente en esta obra el archipieacutelago canario por centildeirse sus autores en una seleccioacuten cuestionable a la Espantildea penin sular y a las Baleares no deberiacutea llevar a pensar que por entonces no tuvieran aquellas islas estudios ni representaciones graacuteficas de sus paisajes y hasta de sus llamativos relieves Al contrario la tradicioacuten de observaciones en las islas y particularmente en El Teide sobre todo desde fines del siglo XVIII dio lugar a una numerosa bibliografiacutea y a una nutrida coleccioacuten graacutefica naturalista y especiacuteficamente vulcanoloacutegica incluso en alguacuten caso de la actividad eruptiva h istoacuterica Desde Humboldt a hoy la expresioacuten graacutefica de la naturaleza insular ha ido paralela a su divulgacioacuten artiacutestica Desde la pionera vista imaginaria del Teide realizada por el cartoacutegrafo Romein de Hooge o incluso del mapa con casi efecto de relieve de Tomaacutes Loacutepez o los perfiles de Tenerife de Baudin y Bory de Saint-Vincent a los de Von Buch y Berthelot o al panorama del Teide muy al estilo europeo de un trabajo de Hartung en 1867 complementan con intencioacuten m aacutes geograacutefica la repetida serie de apuntes grabados y pinturas de viajeros maacutes o menos artistas Sin duda hay tambieacuten muestras maacutes recientes del u so concreto del bloqueshydiagrama por ejemplo desde los trabajos claacutesicos de T Bravo (tubos volcaacutenicos) a los modernos de Grandiacuteo (orograacuteficos) y de C Romero (erupciones histoacutericas) entre otros

En cualquier caso como antes sentildealamos el p rimer volumen de la Geografiacutea de Espantildea dirigida por Teraacuten al reunir toda una labor graacutefica de la geomorfologiacutea peninsular en la p rimera mitad del siglo posee muchas claves para un momento crucial de su entendimiento y se ha vuelto el album por excelencia donde se muestra su compilacioacuten Soleacute Sabariacutes fue el responsable con Llopis de la gran recopilacioacuten morfoloacutegica en ese volumen editado en 1952 Para eacutel habiacutea realizado Soleacute un bloque diagrama secuencial un bloque evolutivo muacuteltiple del Sistema Central que constituye la famosa figura 70 de ese tomo 1 No tanto por su originalidad como por su eacutexito no por el mantenimiento de su hipoacutetesis evolutiva sino por su expresividad lograda pese a su dificultad y por la difusioacuten que obtuvo tal bloque se convirtioacute en la manifestacioacuten del punto clave de nuestras representaciones morfoloacutegicas mediante bloques-diagrama alcanzado al mediar el siglo XX Por ello ha sido tan influyente y se ha repetido numerosas veces como modelo de plasmacioacuten graacutefica secuencial y como patroacuten de entendimiento

130 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

de formacioacuten de estas montantildeas incluso cuando otros caacutenones mejorados lo habiacutean corregido12 Por todas estas razones p ued e decirse que esta coleccioacutenbull

de bloques de Soleacute constituye el graacute fico clave en la historia de nuestra morfologiacutea y puede considerarse la representacioacuten morfoloacutegica axial en el libro igualmente axial de la Geografiacutea espantildeola El hecho de que se eligiera este bloque como motivo simboacutelico para su reprod uccion en la cubierta del libro homenaje que la Universidad de Barcelona y el CSIC dedicaron a Soleacute en 1982 es una prueba del sentido alegoacuterico que habiacutea adquirido

Hay que pensar tambieacuten en la labor realizada en la misma eacutepoca por los geoacutegrafos franceses influyentes en la Geografiacutea fiacutesica espantildeola Pierre Birot ya habiacutea incluido en su tesis sobre los Pirineos Orientales (1937) algunos bloquesshydiagrama entre los que el destaca el realizado por Jacques Bertin sobre el Sobrepuny pero seraacute sobre tod o en los antildeos 50 cuando este geomorfoacutelogo en colaboracioacuten con Luis Soleacute Sabariacutes realice sus conocidos estudios del Sistema Central en los que con un caracteriacutestico esquema no carente de simplificacioacuten aplica los p rincip ios de la interpretacioacuten d avisiana al Sistema Central (1954) En los graacuteficos y bloques acompantildeantes de factura sinteacutetica o proacutexima a los esbozos de campo p ueden deducirse los estilos de cada autor siendo los bloques atribuibles a Soleacute

Con un a visioacuten maacutes allaacute de lo meramente acadeacutemico y una mano haacutebil Pierre Barrere es autor de los magniacuteficos bloques-diagrama que muestran la evolucioacuten de las sierras exteriores del Pirineo oscense (Barrere 1951a) en las que es innegable la huella de la tradicioacuten iniciada por De Martonne en el paiacutes vecino Ademaacutes de sus aportaciones al conocimiento geomorfoloacutegico regional entre 1950 y 1975 este au tor contribuiraacute al momento de auge de los b loquesshydiagrama en la Espantildea de los antildeos 50 con la p ublicacioacuten casi uacutenica en su propoacutesito de su folleto Technique et theacuteorie du bloc-diagramme editado en Espantildea por el CSIC (Barrere 1951b) Pero esta obra no debioacute tener mucha repercusioacuten en el fomento de esta actividad a tenor de lo que se observa en la praacutectica posterior de otros trabajos a la que en teoriacutea iba dirigida aquella edicioacuten

Se da incluso el caso de que tales bloques-diagrama han sido empleados por Gladfelter (1971) para comparar en una doble paacutegina de su obra sobre el relieve de la meseta la teoriacutea evolutiva de Soleacute con la de Julius Schwenzner incluyendo en el primer caso la totalidad de los bloques y seleccionando en el segundo soacutelo aqueacutellos que se corresponden con las fases que habiacutean sido previamente reconocidas por el geomorfoacutelogo alemaacuten Como Gladfelter no indica la procedencia inicial de uno u otro autor de la secuencia de bloques y apenas modifica los dibujos originales (soacutelo borra dos flechas del dibujo de Soleacute que indican un movimiento tectoacutenico y antildeade al graacutefico roacutetulos que se corresponden con las denominashyciones dadas por Schwenzner a las principales superficies de erosioacuten) deja algo confusa la autoriacutea inicial de los bloques Pero en cualquier caso dado que todo indica que el dibujo original es el de Soleacute esta utishylizacioacuten refuerza la idea de que tal imagen pasoacute a constituir desde el momento de su publicacioacuten un modelo canoacutenico

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131 Imaacutegenes del Paisaje

~~ r7iexcl3 1- cr~ cciquest

FIO 70-Evolucioacuten morfoloacutegica de1a Cordillera Central 1 Al 60amp1 del OUloceno lomedlatameute dupnuacute de l paroxtlmo Se pliega l cobertera y le ellboM la oDda l c joacuteraquo del OordUla Cenira l y de 1amp8 80encae okll anbullbull -11 Fractura postenorea al plegamiento a medSado de MJooeoo S todlvtdOampllu l obre todo la gran falla q ue lepara lbullbull deprelloD eII uetellanae 1 el bloque de 1 COTdlshyllera OBotral mil o meno traetnmo - III Emplea 1 oolmauctoacuten d e lu depreaonel outel1anu con loe mt1erlalea rrancadobullbull loe bloquea emergido cuyo relieve pierde v igor -IV La penlllanuramp raquo On1181118 eoDIO tinal del alclo Hdimentamprio BID las lgOD se sedimentan lu CAlina de lo para moa - V ReJ uvenfctmlellto del reUeve a cooaampeoeDcla de la elevaoloacuten provocada por el p legamiento rOO 6n loo Deformacioacuten de la penWantlramp y p legamiento del Mioceno de )01 bordea de l depreeioacutell - VI F ormacIoacuten de JI penUlanura pl1odnJoa CaD pedimento y relieve de mOQua tal s- VII Rejuvenee1mlen to po t)l ) loc~DJeo y eneajamJento de la ud b1drorrjflca

actoampl noavact6D de 101 pramoa El aoacutec l0 p leozolco en rayampdo La cobertera formada pOr Cret4ceo 1 Paleoacutegeoo plegadol Encima 1 d lacorclaote

el Mioceno oorooampdo por la u Uza de )01 piramol

Figura 20 La evolucioacuten geomorfoloacutegiacuteca del Sistema Central seguacuten los bloques-diagrama dibujados por Soleacute para el primer tomo de la Geografiacutea de Espantildea y Portugal (Soleacute 1952)

132 Eduardo Mar tiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Figura 21 Geacutenesis del relieve de las sierras oscenses seguacuten Pierre Barrere (1951a)

Los antildeos 50 tienen en resumidas cuentas una importancia trascendental tanto en la consolidacioacuten del bloque-diagrama en nuestro paiacutes como en el hecho de que este modo de representacioacuten queda definitivamente normalizado fuera de nuestras fronteras lo cual se refleja en la publicacioacuten de diversos manuales e incluso en la adopcioacuten del bloque como elemento fundamental en los meacutetodos de anaacutelisis del medio fiacutesico Pensamos especialmente en el meacutetodo desarrollado a partir de finales de los antildeos 40 en el CSIRO australiano sobre la base de una tradicioacuten geomorfoloacutegica en la que este modo de representacioacuten ya habiacutea echado raiacuteces particularmente con los trabajos del neozelandeacutes C A Cotton disciacutepulo directo de Davis y uno de sus continuadores maacutes fervientes No es raro por consiguiente que en el CSIRO siga pesando mucho la conceptuacioacuten davisiana Se inicia no obstante una nueva fase en la que el bloque diagrama deja de ser una representacioacuten exclusivamente geomorfoloacutegica y pasa a convertirse en el marco para una representacioacuten del medio natural no tardando mucho en liberarse del estricto marco conceptual davisiano en aquellos paiacuteses en los que como en el nuestro dicho marco auacuten limitaba en exceso el conocimiento del relieve Por otro lado la expresividad de las representaciones tridimensionales permite utilizar el bloque en distintas d isciplinas como la Tectoacutenica la Estratigrafiacutea en siacutentesis naturalistas etc

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Los bloques-diagrama modernos nuevos conceptos nuevas teacutecnicas y la necesaria mirada al pasado

A partir de los antildeos 70 no obstante la frecuencia con la que se recurre al bloque-diagrama en los trabajos geograacuteficos desciende notablemente A ello no debe ser ajena la laboriosidad del procedimiento tradicional ya que las teacutecnicas para su realizacioacuten auacuten tienen caraacutecter artesanal Pero tambieacuten las consideraciones conceptuales y metodoloacutegicas sobre el trabajo geograacutefico pudieron contribuir a un desintereacutes por las formas y el paisaje visible En Geomorfologiacutea la deriva hacia el anaacutelisis de procesos y un relativo abandono del estudio de las formas de relieve hacen pasar a un segundo plano la utilidad del bloque-diagrama

Ello no impide que este tipo de ilustraciones prosigan en trabajos acadeacutemicos dentro de esa misma liacutenea y pasen a ser esenciales en algunos de los manuales que los geoacutegrafos espantildeoles publican a partir de esos antildeos especialmente como es loacutegico cuando aquellos manuales versan sobre materias de la Geografiacutea fiacutesica (Geomorfologiacutea General de Julio Muntildeoz por ejemplo) Por otra parte en el Sistema Central se ha mantenido hasta hoy el meacutetodo de representacioacuten mediante el bloque-diagrama con innovaciones de destacada importancia como las introducidas por C Sanz en su anaacutelisis morfotectoacutenico del Guadarrama central desde 1977 y por M Herrero en las sierras de Aacutevila entre 1992 y 2005 que han vuelto a potenciar el nuevo uso de este tipo de graacuteficos como instrumento de anaacutelisis y de comunicacioacuten en geomorfologiacutea En tesis doctorales morfoloacutegicas realizadas en el aacutembito de la Geografiacutea fiacutesica son repetidos los usos expresivos recientes del bloque diagrama como instrumento de plasmacioacuten y de comunicacioacuten utilizado con nuevas perspectivas cientiacuteficas nuevas teacutecnicas de dibujo nuevos estilos graacuteficos y nuevo sentido de insercioacuten en los textos (por ejemplo entre otros Arozena Criado Poblete Romero Serrano en los antildeos 80 y 90) Tambieacuten han sido expresivamente utilizados por Frochoso Palacios y Pellicer entre otros en artiacuteculos de investigacioacuten y en obras de divulgacioacuten Los autores de este trabajo no han sido ajenos por aportacioacuten directa o por direccioacuten de investigacioacuten a estos hechos e incluso han intentado la confeccioacuten de exposiciones morfoloacutegicas conducidas por dibujos de relieves

En los mismos antildeos setenta reaparece significativamente el uso de los bloques como instrumentos de divulgacioacuten del relieve en publicaciones geograacuteficas para puacuteblico amplio fundamentalmente profano Por ejemplo para explicar la evolucioacuten glaciar en Ordesa Los Picos de Europa o Sanabria Incluso dieron lugar a la formacioacuten de un modelo en el caso de los Mallos de Riglos que se ha repetido varias veces El esquema de su formacioacuten a modo de bloque seriado por fases realizado por Mensua en 1975 sirvioacute aparentemente a Benito en 1986 de patroacuten para exponer graacuteficamente su esquema perfeccionado de evolucioacuten de los Mallos y eacuteste a Agudo para lo mismo con motivo de una

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reuruon cientiacutefica en 2005 en este caso con mayor fidelidad y mediante tratamiento informaacutetico El camino ha ido pues en este caso - no es el uacutenicoshyde la d ivulgacioacuten al especialismo

Figura 22 Bloque diagrama de Miguel Herrero (1992) que representa el relieve interior de Gredos

Tambieacuten hay un itinerario desde la investigacioacuten a la ensentildeanza maacutes habitual en la praacutectica que puede quedar expresado en publicaciones geograacuteficas de los ochenta como las Praacutecticas de Geografiacutea Fiacutesica (1981) de editorial privada con un apartado dedicado al uso biogeograacutefico del bloqueshydiagrama o en el Archivo del profesor sobre el medio fiacutesico (1988) en edicioacuten oficial donde se hizo uso del bloque ideal como expresioacuten maacutes acertada para la transmisioacuten didaacutectica de los elementos baacutesicos del relieve

Mencioacuten aparte merecen las publicaciones geoloacutegicas En nuestro paiacutes aunque de una forma maacutes anecdoacutetica y con menor referencia al relieve propiamente dicho vuelven a resurgir tambieacuten en los antildeos 70 los bloques diagrama geoloacutegicos en los que tomando como modelo los estereogramas realizados a comienzos del siglo XX por los geoacutelogos suizos (Lugeon Argand) se representa la estructura sin referencia a las formas de relieve propiamente dichas (veacutease p ej los trabajos de Julivert y Marcos sobre las estructuras de la

135 Imaacutegenes del Paisaje

Zona Cantaacutebrica Julivert y Marcos 1973) Pero hay tambieacuten trabajos de divulgacioacuten realizados por geoacutelogos en los que el bloque-diagrama propiamente geomorfoloacutegico vuelve a cobrar un gran protagonismo En Francia y particularmente en la Universidad de Montpellier a las destacables ilustraciones de Mattauer (1989) que gracias a su equilibrio entre esquematismo y detalle adquieren un elevado valor didaacutectico (maacutes apreciable incluso por la escasez de tal recurso graacutefico en este tipo de publicaciones) hay que antildeadir las de otros geoacutelogos de generaciones maacutes recientes (Bousquet 1997) Tambieacuten a partir de los antildeos ochenta algunos geoacutelogos espantildeoles buscan de nuevo en nuestro paiacutes la expresioacuten morfoloacutegica en los bloques-diagrama por ejemplo Martiacuten-Serrano (Gutierrez Elorza 1994 paacuteg 49)

Por otro lado en los bloques que se realizan en aquellos antildeos se hace patente en Espantildea su intereacutes para el anaacutelisis integrado del paisaje Como ejemplo podemos recordar por su caraacutecter sistemaacutetico y por su vinculacioacuten con el meacutetodo del CSIRO autraliano los bloques que ilustran el trabajo que sobre las unidades naturales de Segovia Avila Toledo y Caacuteceres llevoacute a cabo en 1977 un equipo de geoacutegrafos de la Universidad Complutense de Madrid dirigido por uno de nosotros (Martinez de Pisoacuten 1977) El bloque-diagrama se revela asiacute como un instrumento idoacuteneo para la expresioacuten graacutefica del paisaje por su posibilidad de combinacioacuten entre formas de relieve y distribucioacuten de la vegetacioacuten Su posible utilizacioacuten mostrando fases evolutivas o estados comparativos abre sus ofertas instrumentales La propuesta de la geografiacutea claacutesica alemana de atender a las relaciones verticales entre factores componentes y lugares en las unidades de paisaje relaciones ecoloacutegicas que van y vienen de la atmoacutesfera a la litosfera entendidas abstractamente como en un sistema de cilindros vecinos y secantes situacutea la decantacioacuten formal de la superficie terrestre la morfoesfera justamente en el contacto La manifestacioacuten graacutefica de tal estado del paisaje tiene un modo de expresioacuten particularmente adecuado aunque parcial en el bloque-diagrama

Ademaacutes por esta razoacuten tanto los perfiles de vegetacioacuten desde Soulavie en el uacuteltimo cuarto del siglo XVIII como los graacuteficos de grandes montantildeas de Humboldt plagados de nombres de plantas o incluso los bloques-diagrama maacutes modernos han tenido un uso conocido en geobotaacutenica Los bloques concretamente en obras recientes de autores espantildeoles como los de Costa et al (1990) y de Rivas et al (1984) asiacute lo manifiestan

De este modo los bloques-diagrama han estado estrechamente relacionados con la geografiacutea del paisaje de forma casi contiacutenua Por ejemplo los graacuteficos de este tipo que sobre las Villuercas realizaron Del Riacuteo y Redondo en 1977 (Martiacutenez de Pisoacuten 1977) y Delgado en 1988 -dando tradicioacuten y continuidad al meacutetodo- indican la conveniencia de su uso paisajista la claridad de lo que exponen y la capacidad de comunicacioacuten que entablan con el lector incluso no experto sin perder calidades para el que siacute lo es

136 Ed uardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

Claro estaacute hay otros objetivos divulgativos excursionistas turiacutesticos o simplemente no geomorfoloacutegicos que pretenden maacutes bien una figuracioacuten esceacutenica como imaacutegenes tridimensionales en ciertos mapas montantildeeros recientes por ejemplo en el de M Angula de Benasque en el antildeo 2000 o expresivamente en los bloques pirenaicos de Gil y Diacuteez en 1995 insertos en fichas de visitas a lugares dirigidas a hipoteacuteticos caminantes naturalistas

Con la introduccioacuten paulatina de las teacutecnicas informaacuteticas en los antildeos 80 los bloques-diagrama cambian primero de forma parcial pues el uso del ordenador no sirve inicialmente maacutes que para definir un emejado sobre el que ha de dibujarse y sombrearse el relieve enseguida ese cambio se tom a esencial en el aspecto teacutecnico porque su confeccioacuten mecaacutenica su precisioacuten y su capacidad de proliferacioacuten modificaron la situacioacuten artesanal previa Pero sobre todo tal cambio se hace maacutes trascendental cuando se abre la posibilidad de superponer a los modelos digitales del terreno imaacutegenes de sateacutelite o fotos aeacutereas Eso implica en primer lugar la posibilidad de analizar sobre los bloques todo tipo de detalles sean estos naturales o efecto de la accioacuten humana ofreciendo a un tiempo una imagen real del paisaje que se puede comparar faacutecilmente con otros documentos fotograacuteficos (fotos aeacutereas oblicuas p ej) En segun do lugar tal praacutectica permite superponer sobre visiones perspectivas anaacutelogas sendas imaacutegenes o fotos correspondientes a fechas sucesivas siempre y cuando se respeten ciertos principios teacutecnicos

Comenzamos hace muchos antildeos a hacer bloques-diagrama con paciente labor manual sobre papel milimetrado con conocimiento geomorfoloacutegico que intentaba ser directo y cierto p lacer en su dibujo empezamos a utilizar curvas y redes extraiacutedas de coordenadas cartograacuteficas cuando los primeros programas informaacuteticos nos lo permitieron por los antildeos ochenta Hemos entrado en el uso de imaacutegenes aeacutereas en el momen to en que fue posible Valoramos el avance que supone disponer de opciones complementarias con las nuevas fuen tes e instrumentos por ejemplo median te figuras que representan el relieve estricto directamente relacionables con su preciso vestido topograacutefico y con su expresivo tapiz de paisajes visuales Valoramos auacuten maacutes la capacidad de utilizacioacuten de todas estas imaacutegenes como base del relieve y del paisaje de sentido maacutes cientiacutefico elaborados por el estudio geograacutefico Pero para ello vuelve a ser necesario antildeadir informacioacuten y retrabajar las figuras con precisioacuten con capacidad interpretativa y con mano diestra Las aportaciones en este sentido de Miguel Herrero entre 1995 y 2005 son al sumar formacioacuten de escuela cartograacutefica y dotes de dibujo artiacutestico una muestra de lo que significa renovacioacuten junto a mantenimiento de las calidades tradicionales Conviene tal vez antildead ir que pese al avance de la confeccioacuten material por ordenador de panoramas perspectivas y bloquesshydiagrama las antiguas teacutecnicas requeriacutean una fijacioacuten del autor en todos los detalles como el dibujante o el pintor en su anaacutelisis visual del paisaje que estaacute

137 Imaacutegenes del Paisaje

llevando al papel o al lienzo que no significaba un esfuerzo negativo Ademaacutes la mano del autor selecciona la informacioacuten adecuada y estiliza su presentacioacuten

Hoy el bloque-diagrama sigue siendo una uacutetil herramienta de campo un eficaz instrumento didaacutectico una concentrada expresioacuten graacutefica de relieves con intencioacuten geograacutefica mediante su siacutentesis o anaacutelisis tridimensional y una posibilidad abierta de uso geograacutefico amplio Si se pretende llegar aun sin perder rigor a un lector no exclusivamente geomorfoacutelogo seraacute difiacutecil encontrar otro modo maacutes conveniente para lograrlo

En realidad prosigue la vieja expresividad con nuevas teacutecnicas Tambieacuten nuevas necesidades cientiacuteficas requieren su uso Por ejemplo desde los antildeos setenta casi todas las explicaciones sobre tectoacutenica de placas van sobre el soporte didaacutectico de un bloque-diagrama y asiacute lo utilizoacute ya en 1975 Ortega Cantero para razonar a un puacuteblico geograacutefico espantildeol las nuevas ideas de la estructura terrestre en un conjunto dinaacutemico El entendimiento de la tectoacutenica profunda de los Alpes o el de las complejas deformaciones del paleozoico cantaacutebrico se facilitan o encuentran su mejor expresioacuten mediante graacuteficos tridimensionales Igualmente la d ivulgacioacuten geograacutefica y geoloacutegica requiere las nuevas teacutecnicas o u sa su faacutecil puesta en praacutectica para mostrar sinteacuteticamente determinados fenoacutemenos terrestres Son teacutecnicas que permiten plasmaciones de mapas perspectivas y bloques que remiten los unos a los otros que van de la difusioacuten popular a la expresioacuten esteacutetica a la aplicacioacuten o la necesidad cientiacutefica que pueden ser estaacuteticas secuenciales o en movimiento con un uso muacuteltiple y convergente Pero es cierto que en ocasiones soacutelo renuevan con teacutecnica maacutes faacutecil y precisa propoacutesitos relativamente antiguos Es el caso del bloque panoraacutemico que Carandell realizoacute manual y laboriosamente en 1915 sobre el aacuterea serrana madrilentildea similar en localizacioacuten e intencioacuten al panorama que sin conocer aqueacutel ha elaborado informaacuteticamente en 2005 con gran pulcritud y comunicabilidad la Direccioacuten General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid Lo importante es que tal renovacioacuten mantiene su sentido y ello habla a favor de la perduracioacuten de la validez de estos modos emparentados de expresioacuten graacutefica en geomorfologiacutea en geografiacutea fiacutesica y en toda la disciplina

Sin embargo nuestra propia praacutectica en este terreno nos ha ensentildeado que el uso de las teacutecnicas informaacuteticas tambieacuten encierra ciertos riesgos ante todo existe el peligro de ofrecer una imagen poco selectiva sobre todo si el documento digital que se superpone al modelo de terreno no tiene la suficiente calidad y contraste pero en cualquier caso por el exceso de informacioacuten inherente a las fotografiacuteas Por otro lado estas teacutecnicas pueden llevar a una trivializacioacuten del bloque-diagrama como ilustracioacuten ornamental de la que no se extrae la suficiente informacioacuten No hace falta seguir argumentando para darse cuenta de que en definitiva hablamos de los mismos peligros que acechan al uso

138 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

geograacutefico de cualquier tipo de fotografiacutea De lo anterior resulta que el bloque-diagrama con imagen digital

sup erpuesta complementa pero no sustituye al realizado mediante dibujo aunque facilite enormemente su realizacioacuten De ahiacute la utilidad de conocer los ejemplos tradicionales de este tipo de representacioacuten graacutefica que ademaacutes de mostrar las loacutegicas de sus usos a nuestro juicio deberiacutean seguir siendo fuente de inspiracioacuten para la p raacutectica futura Con ello retomamos el espiacuteritu de los tratados que sobre este geacutenero de representaciones graacuteficas se p ublicaron en la p rimera mitad del s XX y que soliacutean incluir un repertorio de ejemplos claacutesicos debidamente analizados y situados en su contexto histoacuterico (p ej Lobeck 1924 o sobre todo Schuster 1953)

Hay alguacuten bloque-diagrama antiguo de Davis realizado auacuten en el XIX y anterior a su fase maacutes instrumental y esquemaacutetica que representa realmente paisajes sobre su fundamento morfoloacutegico Es este mism o concepto y sen tido aunque necesariam en te renovad o el que h ace que sigan vigentes las muacuteltiples posibilidades expresivas del bloque-d iagrama en Geografiacutea Esas aptitudes estaacuten hoy liberadas por un lado del canon ciacuteclico gracias a las nuevas h ipoacutetesis sobre el modelado y por otro del farragoso trabajo de su concepcioacuten manual gracias a los ordenad ores Tal vez no necesitan obligatoriamente de mano experta para que la obra se concluya de modo apropiado Todas sus ap titudes siguen abier tas para mostrar relaciones combinaciones localizaciones rugosidad altitud perspectivas aacuten gulos ejemplos aislados o seriados y estados secuenciales o comparativos de relieves y paisajes Para transmitir graacuteficamente en suma una siacutentesis geograacutefica faacutecilmente descifrable

Las facilidades d adas por los ordenadores modificaron asiacute en los ochenta n uestras posibilidades de realizacioacuten de graacuteficos morfoloacutegicos no soacutelo en mapas sino en perfiles en cortes y en bloques d iagramas La adaptacioacuten a la ilustracioacuten dibujada a mano y su convivencia con ella permitieron un uso menos esquemaacutetico del que proporcionaba el entramado producido por los programas al uso La posibilidad de manejo de bases propias para estos fines permitioacute la aplicacioacuten de estas teacutecnicas a nuestro territorio sea directamente o vestidas con informacioacuten superpuesta Podemos poner como ejemplo un trabajo que en este sentido hemos realizado nosotros buscando su expresividad consiste en yuxtaponer graacuteficos en relieve de un aacuterea glaciar pirenaica realizados con ideacutentica perspectiva a partir de fotos aeacutereas de diversas fechas para observar la evolucioacuten de la superficie del hielo en sus resaltes y concavidades reales La reconstruccioacuten de situaciones geograacuteficas anteriores a la informacioacuten d irecta de la foto aeacuterea deducidas a partir de los datos morfoloacutegicos es tambieacuten posible con la condicioacuten de volver al uso del dibujo manual que reconstruye y superpone un estado del paisaje al dato graacutefico

139 Imaacutegenes del Paisaje

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-Figura 23 Variaciones en la extensioacuten del glaciar del Aneto desde la Pequentildea Edad del Hielo hasta 1983

Por otro lado los vuelos interactivos que se pueden crear por procedimientos informaacuteticos sobre modelos d igitales del terreno tienen muacuteltiples aplicaciones como las territoriales turiacutesticas y ambientales Han sido editados por algunas instituciones e incluso por editoriales privadas para fines especiacuteficos como es el caso de los CD del laquoMapa Guiacutea Excursionista 3Draquo de la Editorial Alpina y aunque todas esas modalidades son expresivas y contribuyen a una mejora informativa en la expresividad del terreno no todas presentan el mismo grado de intereacutes ni de logro teacutecnico de la imagen Mencioacuten especial merece en este sentido el que sin duda es uno de los mayores avances proporcionados por Internet en los uacuteltimos antildeos la posibilidad de visualizacioacuten de imaacutegenes que en dos o en tres dimensiones se p ueden crear con el programa Google Earth en conexioacuten con Internet Sea superponiendo las imaacutegenes de sateacutelite o las fotografiacuteas aeacutereas suministradas por el fabricante o sea mediante la superposicioacuten de imaacutegenes digitales por parte del usuario del programa Google Earth facilita la visualizacioacuten de todo tipo de materiales digitales (imaacutegenes de sateacutelite fotos aeacutereas mapas temaacuteticos) con capacidad para crear perspectivas y desplazamientos por cualquier regioacuten de la superficie

140 Eduardo Martiacutenez de Pisoacuten I Juan Carlos Castantildeoacuten Aacutelvarez

terrestre Las posibilidades de desarrollo futuro de este programa lo pueden convertir en un medio valiosiacutesimo para la investigacioacuten y la ensentildeanza geograacuteficas

Siguen pues conviviendo teacutecnicas antiguas y modernas mejoraacutendose mutuamente Incluso las teacutecnicas actuales tienen recursos para imitar los estilos tradicionales Por ejemplo el claacutesico y consagrado dibujo a plumilla de los relieves alpinos al que guiacuteas montantildeeras y trabajos morfoloacutegicos han sido voluntariamente fieles puede ser realizado con recursos del ordenador sin necesidad de dotes de dibujante por parte del usuario Es una aceptacioacuten de valores pero no es sino una imitacioacuten mecaacutenica Cada vez valdraacute maacutes en cambio por rara la aportacioacuten personal Claro estaacute si queda algo que intente ir maacutes allaacute del mero producto en serie sea informaacutetico o de otro tipo Escribiacutea Baroja que la habilidad basada en un exceso de teacutecnica y de precisioacuten mecaacutenica es de lo que maacutes cansa en literatura y en el arte Si lo que aquiacute comentamos ha de tener algo de arte conviene que revele incluso hasta algo de imperfeccioacuten Y contaba la aneacutecdota de un haacutebil cantor del que se deciacutea que pese a ello era tan vulgar que ni siquiera sabiacutea desafinar

Este trabajo se ha realizado dentro del Proyecto de Investigacioacuten SEJ2004shy03777 financiado por el Ministerio de Educacioacuten y Ciencia y el FEDER

141 Imaacutegenes del Paisaje

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