52
MARY W . SHELLEY Frankenstein www.puntodelectura.com

Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

  • Upload
    hadiep

  • View
    219

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

MARY W. SHELLEY

Frankenstein

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 3

www.puntodelectura.com

Page 2: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Título: FrankensteinTítulo original: Frankenstein© De la traducción: Manuel Serrat Crespo, 1981© Del prólogo: Jesús Ferrero© De esta edición: octubre 2008, Punto de Lectura, S.L.Torrelaguna, 60. 28043 Madrid (España) www.puntodelectura.com

ISBN: 978-84-663-2213-3Depósito legal: B-38.441-2008Impreso en España – Printed in Spain

Diseño de portada: Txomin Arrieta

Impreso por Litografía Rosés, S.A.

Todos los derechos reservados. Esta publicaciónno puede ser reproducida, ni en todo ni en parte,ni registrada en o transmitida por, un sistema derecuperación de información, en ninguna formani por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico,electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia,o cualquier otro, sin el permiso previo por escritode la editorial.

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 4

Page 3: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

MARY W. SHELLEY

FrankensteinTraducción y presentaciónde Manuel Serrat Crespo

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 5

Page 4: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 6

Page 5: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Prólogo

De novela mitológica a novela mítica

En la historia de la mitología y la literatura occiden-tales, Frankenstein conforma un capítulo más de una largahistoria en la que se concreta un fantasma muy antiguo: elde la maternidad masculina, expresión de la envidia quesentiría el hombre de las virtudes procreadoras de la mu-jer y que en términos psicoanalíticos sería el equivalentemasculino a la femenina y freudiana envidia del pene.

Ya desde la mitología griega, observamos dos tiposde procreación: la carnal derivada de la cópula, y la arti-ficial, que no necesita cópula porque la creación en cues-tión no pasa por el vientre de la hembra, no toca carne,toca otra materia: por ejemplo el metal.

Estas dos formas de creación, que con tanta claridadsupo definir y descodificar Nicole Loraux, son insepara-bles de la feminidad y la masculinidad, e inseparables desu lucha, pero de las dos, sólo una es un engendro pura-mente ideológico: me refiero a la que intenta «demostrar»que también el hombre puede ser madre en términos rea-les, es decir: físicos.

Hefaistos fue el creador de varias criaturas de metalque se comportaban como perfectos criados y que repre-sentaban algo así como la esclavitud ideal: eran con todo

7

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 7

Page 6: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

rigor autómatas y, en relación a ellos, Hefaistos era másuna madre que un «hacedor». ¿Tenían alma esos androi-des? A veces parecía que sí, si bien solía tratarse de un al-ma fría y cruel. Un buen ejemplo es el gigante de broncearticulado que, según un mito, protegía la ciudad de Cre-ta dando vueltas por la noche en torno a sus murallas.

El gigante tenía por costumbre introducirse en unahoguera hasta quedarse al rojo, y de esa manera abraza-ba a sus enemigos, mientras estallaba en risas sardónicas.Esas risas le salían evidentemente del alma y eran casihumanas. Seguro que Aquiles, que era un semidios, sereía también así.

De igual manera abundaban en la antigua Grecialos casos de estatuas vivientes o estatuas que cobrabanvida y que, a pesar de su naturaleza pétrea, sentían y pa-decían desenfrenadas pasiones que solían tener comovíctimas a seres de carne y hueso. Eran golems de piedray sus caricias podían ser más peligrosas que las de las es-finges (seres que, como el mismo Frankenstein, estabanhechos con piezas de diferente naturaleza, proceder queen nuestra cultura siempre ha estado vinculado a lamonstruosidad con mayor rigor que en Oriente).

Lo híbrido era para los griegos lo monstruoso. ¿Pa-ra nosotros también? La esfinge, el basilisco, el grifo,eran seres híbridos, y justamente por eso eran mons-truosos, como lo era el tirano (todo un problema para lafilosofía política griega) al ser un híbrido entre el hom-bre y la bestia.

Como vemos, la hibridez de la criatura concebidapor el doctor Frankenstein es bastante completa. Poruna parte padece la hibridez derivada de su naturaleza

8

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 8

Page 7: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

plural, al haber sido creado a partir de varios cadáveres,y por otra parte padece la hibridez del tirano, aunque nolo sea (ese atributo le corresponde más a su creador), porresultar una mezcla entre el hombre y la bestia.

Pero además de padecer esa hibridez duplicada,Frankenstein es una creación masculina de la que la mu-jer está rigurosamente excluida. La insistencia en estaexclusión (el doctor parece mucho más interesado por elmonstruo que por su novia) es una de las claves más tra-gicómicas de la novela.

Los antecesores más evidentes de Frankenstein, almargen de los hombres metálicos de los griegos y de losandroides de la Edad Media, son el mito judío del gólemy la leyenda española del hombre de palo.

Tanto la criatura de barro creada por el rabino dePraga como el autómata concebido con Juanelo Turria-no anticipan actitudes que más tarde van a ser propias deFrankenstein. Su torpeza manual, por ejemplo, y su hi-bridez fundamental, a medio camino entre el autómatay el animal vagamente racional.

Como personaje literario, la fortuna de Frankens-tein ha sido evidente y, en contra de lo que se cree, el ci-ne no le ha favorecido, pues divulgó desde el principiouna imagen muy empobrecida del personaje, que enparte negaba al de la novela, y que en realidad lo ente-rraba. De modo que bien puede decirse que Frankens-tein es una novela que se ha salvado a pesar del cine y nogracias a él.

Hablamos de personaje literario, pero en realidadtendríamos que hablar de personaje mítico, pues Fran-kenstein ha llegado, con el correr del tiempo, a convertirse

9

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 9

Page 8: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

en lo máximo en que se puede convertir una novela: enun mito.

Cuando de pronto una novela desborda el sistemade su propia ficción y su protagonista cobra una vida queestá mucho más allá de él, entonces el personaje pasa dela literatura a la mitología, y se convierte en un mythos,en una referencia común y compartida (y hasta hace po-sible una cierta comunión).

Es evidente que mucha gente ha comulgado y co-mulga con Frankenstein, y es evidente que ven en él unaimagen de la condición humana. Ya sólo por eso, la no-vela merece un enorme respeto.

Frankenstein es una historia muy rica en contradic-ciones, de ahí que estalle en las manos de cuantos seacercan a ella y por eso supone una continua caja de sor-presas para el lector ordinario y para el investigador.

Mientras vamos recorriendo sus páginas, vemosque Frankenstein (el monstruo) es una creación masculi-na, de naturaleza tosca y a la vez capaz de una ternura in-finita y de una infinita soledad. Es un hijo de un científi-co y de los cadáveres que sirvieron para configurarlo, loque viene a ser lo mismo que decir que es hijo de la am-bición, de la muerte, del pecado, y al mismo tiempo esprofundamente inocente, habría que decir rousseaunia-no, y su aprendizaje de la maldad va a ser lo mismo quesu iniciación a la humanidad.

Una criatura así va a tener muchos problemas. Elprimero va a ser el derivado de su diferencia. Si todos losque le rodean son hijos de la muerte tanto como de la vi-da, él lo va a ser más. Se puede pensar (como piensan losbudistas) que tras toda vida hay un montón de cadáveres,

10

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 10

Page 9: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

un montón de muerte. En el caso de la criatura concebidapor el doctor Frankenstein eso es evidente: su materia esmateria cadavérica. Otro de sus problemas va a ser de ín-dole moral en parte, y en parte de índole semántico. Lacriatura concebida por el doctor no entiende la ambiva-lencia, la ambigüedad, el doble sentido que caracteriza lacondición humana: su doble moral, que es prohibicióny que a la vez es incitación, que es negación y que a la vezes afirmación. Pero no captar el doble sentido es no llegaral estado humano, que también podría llamarse el estadoambiguo y hasta el estado fronterizo entre el bien y el mal.

Por descontado que la criatura acabará entendien-do la ambigüedad en la que se mueve la especie humana,pero ya para entonces será un pozo de melancolía impo-sible de llenar: un alma de una desolación tan inmensaque sólo va a hallar consuelo en el país de los hielos, quepara los griegos fue el país de los dioses.

Jesús Ferrero

11

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 11

Page 10: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 12

Page 11: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Presentación

La herencia de un siglo

El siglo XVIII, «el siglo de las luces», del racionalis-mo a ultranza, el siglo que combatió la superstición y di-vinizó la ciencia, ha muerto por fin. Los hombres hansalido de él más frustrados, reprimidos e inexplicablesque nunca. El hombre, «el ser racional compuesto deetcétera... », echa una mirada a su alrededor y no entien-de nada, sólo sabe que sufre.

Habrán de transcurrir todavía muchos años paraque Freud escriba una de sus más estremecedoras frases,«la felicidad no es un valor cultural», pero a medida quela «civilización» avanza el hombre se siente cada vez másalejado de sí mismo y experimenta en su propia carneaquella «infelicidad» que el médico austríaco creía patri-monio del progreso. Encerrado en las estrechas fronte-ras de una razón utilitaria y conformista, hecha a la me-dida de una burguesía que ve consolidar sus posiciones yque mide las conquistas humanas usando el patrón de subolsillo, oprimido por todo tipo de convenciones socia-les, religiosas o morales, el hombre siente cómo en su in-terior sigue abierto el pozo, cada vez más profundo, de lainsatisfacción y el desasosiego.

13

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 13

Page 12: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Y la rebelión estalla. La juventud, nacida con el re-ciente siglo XIX en el seno de las mejores familias, enarbo-la la bandera de lo irracional y se lanza a la creación deuna de las reacciones vitales que más fecunda ha sido en elcampo artístico y literario. De la ciencia esclerotizada y lamezquina razón dieciochesca nacen el monstruo idealista,los suicidios precoces y el culto al mal, a las más oscurastendencias humanas, que informan el romanticismo.

¿Un paso atrás en el devenir histórico? Aquellos sa-pientes y barbudos individuos dedicados con furor a latarea de ordenar, clasificar y legalizarlo todo, aquellossacrificados mártires de la ciencia empeñados en encon-trar explicaciones racionales a todos los fenómenos y,por un perfecto mecanismo de defensa, en negar, ridicu-lizar o tachar de fantástico o inexistente lo que escapabaa su comprensión; aquellos severos moralistas que se re-focilaron en una bacanal de leyes y códigos, divinos o hu-manos, dan paso a una generación que escupe su despre-cio por las reglas, que maldice la «normalidad» y «lasbuenas costumbres», lanzándose con pasión a explorarlo insólito, lo irracional y lo increíble.

Pasión versus razón. ¿Es ésta la disyuntiva? Tal vez,pero, en todo caso, razón que engendra pasión, porque elhombre, «el ser racional», descubre que han convertidosu cerebro en una cárcel.

Ciertamente, el tránsito del siglo XVIII al XIX es, almismo tiempo, un paso de lo real a lo fantástico, de lo de-ducido a lo imaginado, de lo pensado a lo sentido, porqueel hombre comienza a experimentar en sí mismo que loreal, lo deducido y lo pensado pueden ser, en resumidascuentas, unas magníficas orejeras que le fuercen a mirar

14

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 14

Page 13: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

en una sola dirección, en la más conveniente—¿paraquién?—, mientras le impiden la visión de regiones im-prescindibles, sus propias regiones, los oscuros recovecosde su espíritu (¿por qué no decir espíritu?) que un largoperiodo de tabúes y restricciones ha ido poblando de te-larañas y monstruos.

Naturalmente no es así en todos los estratos socia-les; la burguesía en esplendor asienta sus privilegios so-bre un proletariado sin posibles romanticismos. Las her-mosas ideas, las rebeliones estéticas y literarias, precisanel fecundo abono de un estómago bien cebado y la revo-lución obrera tiene objetivos mucho más primarios.Carlos Marx no puede ser Lord Byron, Marat y Sadenunca llegaron a encontrarse pese a que ambos estabanluchando por el mismo hombre. Frente al héroe román-tico, ávido de aventuras insólitas, hambriento de mal co-mo suprema libertad, existe el proletario de la «revolu-ción industrial», ávido de pan, hambriento en el másestricto sentido del vocablo.

Frente al Vampiro de Polidori se levantan los vam-piros de las fábricas, los comercios y las bancas. Losmonstruos revisten sus levitas de buen paño y sus colmi-llos no crecen empujados por el deseo de sangre, comomáximo admiten la elegante remoción de un recubri-miento dorado.

Al llegar aquí, todo se confunde y debemos cerrarel libro de lo sobrenatural. Sí, Goya estaba en lo ciertoy «el sueño de la razón produce monstruos» porque, li-berados de la vigilancia de su dormido carcelero, losmonstruos abandonan los secretos rincones de nuestra hu-manidad para, fugazmente, dejarse entrever; pero, y esto

15

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 15

Page 14: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Goya no lo dijo aunque sus magníficos pinceles lo expre-saron muy claramente, los monstruos más terroríficos,los únicos verdaderamente terroríficos, son los que crea,despierta y bien despierta, esta razón ridícula y estrechaque siglos de cuidadosa castración han ido depositandosobre nuestras espaldas.

Enfrentada con la terrible realidad de su tiempo, nohay duda de que la rebelión romántica fue una rebeliónde «señoritos», pero en su protesta —tan honesta queles lleva a menudo, al suicidio—, en su avidez de mal e,incluso, en su dandysmo (de claras reminiscencias satáni-cas) existe un germen de verdadera vida, de auténticocambio, que no debe ser despreciado.

Razón y pasión, realidad e imaginación son los dostérminos antitéticos de una dialéctica todavía en vigor:«L’imagination au pouvoir» (la imaginación al poder),exigía un cartel mural durante la revolución de mayo enParís. Y los monstruos tienen algo que decir en esta dia-léctica, esos monstruos que se cargan de las más oscuraspotencias humanas, esos monstruos que —los jóvenesrománticos lo intuyeron y Freud lo descubrió más tar-de— todos nosotros llevamos dentro.

Mister Godwin crea un monstruo

William Godwin —el gruñón abuelito del doctorFrankenstein— era un hombre de su tiempo. Nacidocuando el siglo XVIII estaba en todo su apogeo (1756), suvida, asombrosamente contradictoria, posee la semilla deaquella fuerza que desembocará en la hoguera romántica.

16

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 16

Page 15: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

El socialismo es un ideal naciente —un hermoso ideallleno de palabras, de sueños y de utopías— muy alejadotodavía del «materialismo dialéctico», del «socialismocientífico» que Carlos Marx elaboraría un siglo más tar-de y Godwin —hijo de un predicador protestante y pas-tor él mismo— se lanza, movido por sus lecturas y, so-bre todo, por la conmoción íntima que le produjo laRevolución Francesa, al difícil camino de regenerar consus palabras una sociedad que no era de su gusto. Paraello tuvo que abandonar su ministerio, pero eso no leimporta: la fe calvinista heredada de su padre se ha de-rrumbado bajo los embates poderosos de Rousseau,Mably y Helvetius.

En 1793, Godwin, en el apogeo de una gloria y unainfluencia conseguidas gracias a sus avanzadas ideas «iz-quierdistas», publica An enquiry concerning political justiceand its influence on general virtue and hapinessl, donde susocialismo se revela primo hermano de un anarquismoencendido, lo que le vale los ataques furibundos de susenemigos2, pero le granjea la simpatía de la juventuduniversitaria. Tres poetas, Southey, Coleridge y Words-worth, proyectan en 1794 partir hacia el nuevo conti-nente, la dorada tierra americana, para realizar en algu-no de sus rincones la sociedad godwiniana. El socialismoy la poesía, el romanticismo y la justicia social, descu-bren que sus caminos se cruzan y vuelven a cruzarse; la

17

1 «Una investigación sobre la justicia, la política y su influenciaen la virtud y la felicidad general.»

2 Malthus escribe para combatirle su célebre Essay on the Prin-ciple of Population.

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 17

Page 16: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

nueva sociedad, la libertad humana, son metas caras a losteóricos del socialismo utópico (también, naturalmente,al anarquizante Godwin) y chispas que encienden los ar-dores románticos.

Shelley, cuya íntima relación con Godwin veremosmás adelante, plasma en encendidos versos las ideas deAn enquiry concerning… La poesía de Hellas y PrometheusUnbound (Prometeo desencadenado) encuentra su inspiraciónen una prosaica investigación sobre la justicia política.3

Pero la honestidad intelectual es una ardua tarea enuna sociedad como la inglesa —como la occidental— tanpreñada de convencionalismos e hipocresías, tan rígida-mente dominada por el principio de la «respetabilidad»burguesa y la moral aristocrática. William Godwin, ya lohemos dicho, es un hombre de su tiempo (educado, porañadidura, en las severas reglas de comportamiento cal-vinistas) y sus ideas, que tan ardorosamente expone depalabra o con la pluma en la mano, encuentran la hormade su zapato cuando se ven obligadas a superar la teoríapara ser puestas en práctica.

¿Cómo hacer coincidir la respetable relación con unamujer honesta y el desprecio al matrimonio que brilla ensus escritos? La tentación es demasiado fuerte para poderresistirla y Godwin, el encendido anarquista, el detractor

18

3 Recordemos al respecto que Frankenstein lleva como subtítu-lo la frase: El moderno Prometeo. Prometeo, la rebeldía del hombrecontra lo que le oprime (sean dioses o tabúes, códigos o policía), esuna idea —¿una pasión?— que no abandonará al romanticismo. Noes una coincidencia que la revista de André Breton se llamara El su-rrealismo al servicio de la revolución.

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 18

Page 17: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

de cualquier autoridad y cualquier vínculo, el hombreque, pese a su utopismo, tiene como lema la frase: «Manis a rational being» («El hombre es un ser racional»), co-mete la suprema sinrazón, se casa en secreto con MaryWollstonecraft pese a su teórica oposición al matrimonioy su desprecio por los convencionalismos sociales.

Sin embargo, esta contradicción no hace sino refle-jar otra más profunda, mucho más profunda, que aleteaen toda su obra. La libertad godwiniana, su curiosoanarquismo, oprime al hombre más que liberarlo. Comoafirma Henry Avon en L’Anarchisme4: «No es al individuototal a quien Godwin libera de sus ataduras, sino al indi-viduo en la medida que personifica la razón; un indivi-duo, por lo tanto, que reprime sus instintos y se somete,por ende, al dictado de la razón».

¡Un anarquismo racionalista!, cosas veredes, MíoCid, que farán fablar las piedras. El siglo XVIII y el XIX

combaten en el interior de un hombre y, tanto su obracomo aquellos que le rodean, serán víctimas de esta lu-cha. Él mismo no podrá nunca superarla y morirá (¡co-mo modesto empleado del Estado!) despreciado y en lasoledad.

El doctor Frankenstein tuvo un curioso abuelito. Separecían tanto el uno al otro que es imposible dejar deobservar su parentesco; incluso en su lucha interna, en elcombate íntimo de sus respectivos espíritus —libertadcontra convención, progreso contra tradición, prejuicio

19

4 Publicada por Presses Universitaires de France en la colec-cion Que sais je?

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 19

Page 18: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

contra afán de redimir a la humanidad—, el doctorFrankenstein y mister William Godwin se asemejan.

Tan sólo el monstruo les separa, tan sólo falta la víc-tima. ¿Falta en realidad?

De su secreto y negador matrimonio con MaryWollstonecraft, el exaltado pensador tuvo una hija que(¡no faltaba más!) se llamó como su madre.

Mary, la joven Mary, fue algo más afortunada que elengendro de Frankenstein. Como mínimo tenía unnombre.

Pero, como el monstruo que ella más tarde engen-draría, la hija de William Godwin fue lanzada al mundopor un ser que la hizo a su imagen y semejanza (al menosen cuanto a sus creencias y pensamientos) para luego,cuando su obra actuó, cuando su obra cobró vida propia,renunciar, negar en la práctica aquellos presupuestosque habían ayudado a engendrarla y expulsarla de su la-do. El monstruo tuvo, en esto, más fortuna que Mary; sucreador no intentó beneficiarse de él, no intentó vivir a sucosta.

Una noche en Ginebra

Dejemos transcurrir los años. Es de noche, algomuy importante cuando de monstruos se trata, la nochedel 15 de junio de 1816, y en villa Diodati, situada en losalrededores de Ginebra, está teniendo lugar una curiosa(e importante para nuestra historia) reunión.

Alrededor de los troncos ardientes, unos jóvenes,aburridos porque el mal tiempo les impide gozar de sus

20

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 20

Page 19: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

vacaciones, se cuentan, para entretener el ocio, consejasterroríficas del folklore alemán. Espíritus aulladores,aparecidos y fantasmas pueblan el aire y, aun sin querer,los reunidos sienten que, en ocasiones, un estremeci-miento les recorre.

Lo sobrenatural, lo insólito, parece haberse apode-rado del ambiente y esto no puede menos que gustar a losjóvenes narradores. Todos forman parte de esa juventuddistinguida —¡hasta hay un «lord» entre ellos!— que serebela contra el racionalismo, todos ellos son románticos,héroes románticos, artistas románticos. Son los prototiposque inspiraron a Baudelaire sus poemas, sus angustiasy sus pasiones. Algunos dejarán su huella de fuego y mal,de vida y aventura, en la historia y la literatura.

Serán monstruos, monstruos sagrados (con perdón),que llenarán páginas y páginas con la reproducción desus obras y con los estudios a ellos dedicados.

Allí está Lord Byron, el diabólico, de quien Barrésescribió que «su cerebro, formidable, superior, dicen, alde Cuvier, era una masa horrible puesta en ebulliciónpor el alcohol, el opio, cierta tara física y todos los abu-sos destructivos: una cloaca. Tenía una emotividad formi-dable, una personalidad extraordinaria para todas lasfuerzas con que la vida nos conmueve. Hizo sufrir, tortu-ró a todo el mundo a su alrededor pero supo expresar lasideas más nobles y ser naturalmente sensible a ellas»5.Lord Byron, cuyo genio satánico es el más representati-vo ejemplo de la vocación romántica, que se adentra en

21

5 Citado por Bergamín en sus Fronteras infernales de la poesía.

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 21

Page 20: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

los abismos del mal, que se introduce en las bases másoscuras e inexplicables de la humanidad, buscando unalibertad que sólo obtendrá con el conocimiento de símismo, por el entero conocimiento de sí mismo, y que,sorprendentemente, coincide con el mal en todo lo queéste tiene de vida, de movimiento, frente a la quietud y lamuerte de una sociedad comme il faut. Coincide con el malen su liberación de las pasiones y los instintos, en subusca del placer, puesto que en estas pasiones, instintosy placeres se halla la antítesis, todo lo contrario, de aque-lla sociedad estructurada, monolítica, moral y rígida queles aleja cada vez más de su realización, de su felicidad; laantítesis de aquella sociedad en la que la felicidad no es unvalor cultural.

Allí está también Shelley, el hombre que hace poesíacon las ideas sociales de Godwin y que, junto con Byron,llenará un brillante capítulo de las letras británicas, e, in-quieto, nervioso, admirando y odiando, torturado por eljoven y disoluto «lord» al que sirve de secretario, estáJohn William Polidori, padre de los vampiros literarios,tan semejantes, según parece, al propio Byron.

Con ellos una mujer, la amante de Shelley —luegoserá su esposa—, en cuyo rostro encontramos los rasgosde un contradictorio anarquista inglés. Una mujer que,por ser consecuente con sus ideas y las de su padre, ha si-do repudiada por éste; una mujer que no puede entrar encasa de su progenitor, de William Godwin, porque éste,con su social-anarquismo, con su amor a la libertad y sudesprecio por la moral y los prejuicios, le ha prohibido laentrada en nombre de la honorabilidad, la respetabilidady todos los convencionalismos de una ética victoriana.

22

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 22

Page 21: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Con ellos Mary, que comienza a ser fecundada porel germen diabólico que la preñará de Frankenstein,piensa en su padre, repasa una a una las ofensas y de-cepciones que de él ha recibido. Aquellos ideales que supodespertar en ella son, para él, simples palabras; la reali-dad es muy otra. Godwin, el detractor del matrimonio,se ha casado (por dos veces) en secreto. Godwin, el hom-bre que maldecía todos los vínculos conyugales, expulsade su casa a la hija que —siguiendo sus ideas— vive conun hombre al que ama sin ligarse a él en matrimonio.Y, además, intenta medrar a expensas del amante.

Mary, aquella noche, en Ginebra, concibe un doc-tor que se parece a su padre. Concibe un monstruo sinnombre que muy bien hubiera podido llamarse Mary.

¿Cuentos terroríficos alemanes? ¿Ectoplasmas sur-gidos ya de otras bocas? Demasiado corriente para ungrupo como el de villa Diodati. Ellos crearán sus propiosmonstruos. La decisión está tomada.

Es una apuesta.

El teológico doctor Frankenstein

Pero cuando Mary Shelley hubo vencido a sus ro-mánticos compañeros y su cuento estuvo ya listo, la au-tora quiere hacer algunas precisiones. «A medida que laobra iba tomando forma —dice—, otros motivos fueronañadiéndose a los iniciales.»

Otros motivos fueron añadiéndose a los iniciales... Enefecto, dejando al margen las consideraciones sobre lacalidad literaria de Frankenstein, aspecto este que ha

23

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 23

Page 22: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

motivado juicios contradictorios6, la novela tiene unconjunto de detalles y sugerencias suficientes para de-mostrar que la ambición de la Shelley no fue, tan sólo,escribir un cuento terrorífico.

El monstruo ha nacido y su creador, horrorizadopor el espantoso aspecto del ser que ha salido de sus ma-nos, huye del laboratorio donde el cadavérico ensamblajecomienza a cobrar vida, es ya algo que piensa y siente. Sudeseo de contribuir al progreso humano, tan semejante aldel compañero de sus últimos momentos, el capitán Ro-bert Walton, su infinita fe en la ciencia se ha disipado enun instante; ahora el doctor Frankenstein, arrepentido yaterrorizado, maldice el momento en que se le ocurriósuplantar a Dios para que de sus manos saliera una criatu-ra humana. El cuadro está completo y los miopes puedenlanzar al aire sus gritos escandalizados: El Frankenstein deMary Shelley es una novela reaccionaria en la que la cienciacae, al final, en un final moralizante, vencida por el casti-go divino al orgullo y la soberbia humanos.

Seamos justos, la apreciación es simplista, sin dudaalguna, superficial pero no injustificada. Está todavía

24

6 El novelista Walter Scott —contemporáneo de MaryShelley— escribió en el Blackwood’s Edimburgh Magazine: «Es, ami entender, un mérito notable que la novela esté escrita en uninglés simple y directo, desprovisto de los germanismos habi-tuales en este tipo de historias».

Por el contrario, Michel Boujout, ha opinado que «la re-dacción de la novela desfallece a menudo, su construcción, puerily apresurada, adolece de excesivas repeticiones y de lentitud».(Citado por Jacques Bergier en el prólogo a la edición francesa—Marabout— de Frankenstein.)

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 24

Page 23: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

muy reciente el tiempo en que argumentos semejanteseran utilizados (¿lo son todavía?) como moraleja aleccio-nadora para fundamentar historias torpes y ridículas7.

Sin embargo, el supuesto carácter reaccionario de lanovela de Mary Shelley proviene de una falta de penetra-ción sintomática. ¿Una moraleja edificante en la pluma deuna mujer que se mueve en el círculo byroniano? ¿Un ro-manticismo predicador del conformismo humano? Nonos detengamos tan pronto, adentrémonos en la novelapara darnos cuenta de que su único protagonista es elmonstruo; esto no podía ser de otro modo, puesto que esen la horrible criatura donde su autora se refleja en princi-pio. En la terrible odisea del ser inocente y cándido, llenode amor, que desde su nacimiento se encuentra con el re-chazo de quien le ha creado, en la aventura desoladoraque supone un gesto de simpatía y de afecto —un gestopuro y natural— cuando éste produce horror, podemosseguir la historia de las relaciones entre Mary Shelleyy Mr. William Godwin.

¿Es esto todo? ¿La frustración de un complejo de Edi-po? Pudo serlo, como mínimo; pero cuando la corriente

25

7 Hay que reconocer el papel predominante que en tal apre-ciación juegan las adaptaciones cinematográficas que a lo largode su historia ha sufrido el Frankenstein, adaptaciones que, comotantas otras veces, deforman y mutilan la figura del doctor y de suengendro. De cualquier forma, y para terminar de una vez con el«reaccionarismo» de Frankenstein, recordemos que las últimaspalabras del doctor, antes de su muerte, desautorizan los consejosconservadores que acaba de dirigir a Walton y concluye: «Notengo derecho a hablarle así. Es posible que, allí donde yo fracasé,otro logre alzarse con el triunfo».

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 25

Page 24: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

eléctrica dota de alma al rompecabezas hecho de cadáveres,éste hace algo más que huir del laboratorio para buscar su vi-da, comienza a moverse también en la bullente imaginaciónde su autora, hasta salir de los cauces que le habían sido asig-nados (otros motivos fueron añadiéndose a los iniciales...).

La relación de una criatura con su creador ofrece de-masiadas sugerencias como para que éstas puedan pasarinadvertidas; Dios está allí y, con Él, la mística del mal. Lamisma autora nos lo insinúa en el prólogo de su obra, «nodebe —escribe— extraerse de estas páginas ninguna con-clusión que pueda perjudicar cualquier doctrina filosófica» (elsubrayado es mío). No seamos ingenuos, también Baude-laire tuvo que defender sus Flores del Mal y Panizza suConcilio de Amor; ambas obras están ahí, existen y no de-ben preocuparnos demasiado los ardides de que se valie-ran sus autores para frustrar la labor de jueces y censores.

El odio que el monstruo siente despertar dentro desí, la persecución y muerte de su creador, tienen muchosparalelos en la literatura romántica. El Maldoror de Lau-tréamont lucha y vence a la divinidad. En Moby Dick, delnorteamericano Herman Melville, el capitán Achab per-sigue con saña satánica a una extraña (y teológica) ballenablanca.

Es la muerte de Dios lo que se busca, la muerte deun Dios inflexible en sus designios, que puede dominaral hombre porque éste cree que sólo de Él depende sufelicidad.

La muerte de Dios, el principio de toda libertad, pe-ro también el mal perfecto, redondo, acabado. El MAL in-superable. La muerte de Dios, el sueño más digno de unhéroe romántico.

26

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 26

Page 25: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

¿Y luego? Luego ya no importa; Dios ha muerto, elhombre ha terminado su misión. Pero su requiescat in pacees un canto encendido de victoria; sin Dios, el hombre,que no fue dueño de su nacimiento, será, por fin, el úni-co propietario de su muerte y, en consecuencia, el únicodueño de su vida.

Prometeo ha vuelto a robar el fuego divino pero es-ta vez el hurto tiene carácter definitivo.

El juego se ha hecho; no va más: Byron muere a lostreinta y seis años luchando por la liberación de los grie-gos. Polidori se suicida a los veintiséis. Shelley se ahoga,a los treinta, en el golfo de La Spezzia. Villa Diodati haquedado desierta, sólo sus fantasmas llegan a nosotros.

¡Bienvenidos!El juego se ha hecho y un héroe romántico no pue-

de morir en la cama. Es dueño de su muerte y elige lahora; sólo esta convicción liberará su vida. Y cuando loha hecho, cuando el ajusticiamiento de Dios le sume enla libertad definitiva, entona su canto satánico a la vida:

«Pronto se extinguirá el fuego que me atormenta.Ascenderé, triunfante, a mi pira y exultaré de júbilo en latortura de las llamas. Lentamente su brillo se irá apagan-do y el viento esparcerá mis cenizas por el mar.»

Blake tenía razón: el cielo y el infierno se han unidoen matrimonio. Y el monstruo, muerto Frankenstein, sepierde entre los témpanos helados.

Ha cumplido.

Barcelona, marzo 1969

Manuel Serrat Crespo

27

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 27

Page 26: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 28

Page 27: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 29

Page 28: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 30

Page 29: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Prólogo

El hecho que fundamenta esta narración imaginariaha sido considerado por el doctor Darwin* y por otrosescritores científicos alemanes como perteneciente, has-ta cierto punto, al campo de lo posible. No deseo quepueda creerse que me adhiero, por completo, a esta hi-pótesis; sin embargo, al basar mi narración sobre estepunto de partida no pienso haber creado, tan sólo, unencadenamiento de hechos terroríficos concernientespor entero al orden sobrenatural.

El acontecimiento que da interés a esta historia notiene las desventajas inherentes a las narraciones que tra-tan de espíritus o magia. Me sedujo por lo nuevo de lassituaciones que podía llegar a provocar, puesto que, sibien es físicamente imposible, otorga a la imaginación laposibilidad de adentrarse en las pasiones humanas conmás comprensión y autoridad de las que ofrece el simplerelato de hechos estrictamente reales.

31

* Mary W. Shelley hace referencia al doctor Erasmus Darwin,excéntrico investigador y abuelo del famoso Carlos Darwin, autorde El origen de las especies e iniciador de las teorías evolucionistas.(N. del T.)

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 31

Page 30: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Me esforcé, pues, en conservar su adecuación a losprincipios elementales de la naturaleza humana; no du-dé, sin embargo, cuando se trató de crear innovacionesen las posibles síntesis que admitieran tales principios.Esta norma se halla ya en la Ilíada, el poema épico de laantigua Grecia, en La tempestad y El sueño de una noche deverano, de Shakespeare y, con más claridad todavía, en Elparaíso perdido, de Milton. No es, por lo tanto, excesivapresunción, ni siquiera para un humilde novelista quesólo desea distraer al lector o conseguir una satisfacciónpersonal, emplear en sus escritos una licencia o, mejor,una regla que ha hecho surgir las páginas más bellas de lapoesía y sublimes combinaciones de afectos humanos.

El fundamento de mi relato me fue sugerido poruna simple conversación. Comencé a escribir tanto paradistraerme como porque me brindaba un medio deejercitar las posibilidades que albergaba mi espíritu. Pe-ro, a medida que la obra iba tomando forma, otros mo-tivos fueron añadiéndose a los iniciales. No me es deninguna manera indiferente la reacción del lector frentea las creencias morales que expresan mis personajes. Noobstante, mi primera preocupación en este campo ha si-do evitar los perniciosos efectos de las novelas actuales ypresentar la bondad del amor familiar, así como las exce-lencias de la virtud universal. Las opiniones de los pro-tagonistas vienen influidas, es lógico, por su carácterparticular y por la situación en que se hallan; no han deser consideradas por lo tanto como las mías propias.Del mismo modo no debe extraerse de estas páginasninguna conclusión que pueda llegar a perjudicar doc-trina filosófica alguna.

32

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 32

Page 31: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

La autora ha puesto gran interés en la redacción deesta novela, ya que comenzó a escribirla en el escenariograndioso donde tiene lugar la parte más importante dela acción y, por añadidura, en unión de compañeros a losque le sería muy difícil olvidar.

En efecto, pasé el verano de 1816 en los aledaños deGinebra. La estación fue fría y lluviosa aquel año y, noso-tros nos reuníamos noche tras noche en torno al hogardonde ardía un gran fuego de leños, divirtiéndonos en re-latarnos, unos a otros, historias alemanas de espíritusy fantasmas, que habíamos aprendido en nuestras corre-rías. Estos cuentos nos sugirieron la idea de escribir algu-nos por nuestra cuenta con el mero fin de distraernos.

Dos amigos —uno de los cuales ha escrito, cierta-mente, una historia mucho más digna de agradar al pú-blico que todo lo que pueda imaginar mi cerebro— y yomisma decidimos, por lo tanto, escribir cada uno unahistoria basada en manifestaciones de lo sobrenatural.

Pero el tiempo mejoró súbitamente y mis amigosme abandonaron para emprender una gira por los Alpes.Los magníficos panoramas que se ofrecían a sus ojospronto les hicieron olvidar el menor atisbo de sus evoca-ciones espectrales. Esta narración es, por ende, la únicaque ha logrado verse terminada*.

Marlow, septiembre 1817

33

* Ciertamente, cuando Mary W. Shelley redactó este prólo-go, sus palabras podían considerarse ciertas. Pero dos años mástarde —1819— aparece The Vampire, de John William Polodori—atribuida inicialmente a Lord Byron—, otra de las historias quese gestaron en las veladas nocturnas de Villa Diodati. (N. del T.)

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 33

Page 32: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 34

Page 33: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Primera carta

A la señora de Saville. Inglaterra.

San Petersburgo, 11 de diciembre de 17...

Te alegrará saber que ningún contratiempo ha ensom-brecido el inicio de la aventura acerca de la que tú abrigabastan negros presagios.

Llegué ayer y mi primer deseo es tranquilizar a mi que-rida hermana y expresarle que mi confianza en el éxito delproyecto es cada vez mayor.

Estoy ya muy al norte de Londres, y paseando por las ca-lles de San Petersburgo siento cómo sopla sobre mi rostro unaire gélido que vivifica mis nervios y me llena de satisfacción.¿No es cierto que comprendes lo que experimento? Esta brisa,procedente de las regiones hacia las que me dirijo, me trae elaliento de su clima glacial. Arrulladas por este viento agorero,las esperanzas que albergo son ya más palpables y fervientes.Quiero inútilmente convencerme de que el polo es un parajefrío y desolado, pero, una vez tras otra, aparece en mi imagi-nación como un lugar lleno de hermosura y delicias. Allí,Margaret, jamás se pone el sol y su enorme disco no hacemás que acariciar el horizonte, luciendo en eterno esplendor.

35

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 35

Page 34: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Allí —pues con tu permiso, hermana mía, quiero dar algúncrédito a las palabras de quienes me han precedido— el hieloy la nieve desaparecen. Incluso es posible que, navegando sobreel calmado océano, seamos conducidos hacia una costa que so-brepase, en hermosura y encanto, a todos los países descubiertoshasta hoy en las partes habitadas del globo. Es posible que susrecursos y sus paisajes sean incomparables. Los secretos de lasestrellas deben, sin duda, hallarse explicados en estas inexplo-radas tierras. ¿Qué podría extrañarnos de una región en laque el sol brilla sin cesar? Quizá descubra la sorprendente fuer-za que mueve la aguja de la brújula. Quizá pueda probar unmillar de observaciones celestes que sólo esperaban esta aventurapara aclarar, por fin, los aparentes caprichos de los astros. Satis-faré mi ardiente curiosidad hollando una parte del mundo quejamás ha sido explorada, y probablemente caminaré sobre unatierra en la que nunca se ha posado la planta humana. Es eso loque me atrae y bastaría, por sí solo, para impulsarme a vencerél miedo al peligro y a la muerte, acuciándome a emprendereste difícil viaje con la alegría del niño que se embarca en unbote, junto a sus camaradas, para explorar las riberas cerca-nas. Y aun en el caso de que todas esas conjeturas fueran erróneas,no puedes negar el beneficio inestimable que procuraré a la hu-manidad descubriendo, en las cercanías del polo, una ruta pormar hacia esos países a los que tantos meses tardamos en llegar,o desvelando el secreto de la fuerza magnética que sólo puedeser descubierto —si es que existe algún modo de hacerlo— gra-cias a una aventura como la mía.

Estos pensamientos han disipado la agitación que sentíaal comenzar mi carta y mi corazón está lleno de un entusias-mo que me transporta, ya que nada ayuda tanto a apaciguarel espíritu como un objetivo claro, una meta sobre la que fijar

36

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 36

Page 35: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

los ojos del alma. Este viaje cumple un sueño que he acariciadodesde mi más tierna infancia. He leído con apasionada frui-ción el relato de diversos viajes cuyo objetivo era llegar al nor-te del océano Pacífico atravesando los mares que circundan elpolo. Debes recordar que la biblioteca de tío Thomas estabaformada tan sólo por volúmenes que narraban viajes y explo-raciones. Mi educación dejó bastante que desear, pero, pese a to-do, me apasionaba la lectura. Día y noche estudié esos volúme-nes y, conforme los iba conociendo, aumentaba la tristeza quesentí en mi infancia cuando me dijeron que papá, cercana yasu muerte, había prohibido a mi tío el autorizarme a seguir lacarrera de marino.

Esta amargura desapareció cuando por vez primera trabéconocimiento con la obra de los poetas cuyos versos llenaron mialma y la elevaron casi hasta las regiones celestes. Me convertíen poeta y durante un año viví en el edén que yo mismo habíacreado. Imaginaba que también a mí me sería dado conseguirun lugar en el templo donde se veneran los nombres de Homeroy Shakespeare. Tú conoces mi fracaso y sabes lo doloroso que fuepara mí aquel desengaño. Pero precisamente en aquel tiempoheredé la fortuna de mi primo y mis pensamientos volvierona tomar el rumbo que habían seguido anteriormente.

Seis años han transcurrido desde que resolví realizar es-te viaje. Comencé por fortalecerme físicamente. Acompañé alos balleneros en varias de sus expediciones al mar del Norte;por mi propia voluntad he soportado el hambre y el frío, la sedy la falta de sueño; a menudo trabajaba durante la jornadacon más dureza que cualquier marinero, mientras dedicabamis noches al estudio de las matemáticas, de la medicina y deaquellas partes de la física que más necesarias podían ser a unaventurero del mar. Por dos veces me enrolé como segundo de

37

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 37

Page 36: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

a bordo en un ballenero groenlandés y salí airosamente de laprueba. Me sentí, es cierto, orgulloso cuando el capitán me su-plicó insistentemente que permaneciera en su barco, ya queconsideraba insustituibles mis servicios.

¿No crees, Margaret, que merezco ya emprender la granaventura? Mi vida pudo estar rodeada de comodidades y lujos,pero he preferido la gloria a todos los placeres que la fortuname brindaba. ¡Con qué placer escucharía una voz amistosaque respondiese con una afirmación a mi pregunta! Mi valory mi decisión son inamovibles, pero mis esperanzas experimen-tan ciertos altibajos y con frecuencia me siento desalentado. Es-toy dispuesto a lanzarme al largo y penoso viaje cuyas vicisitu-des reclamarán todo mi coraje. No sólo tendré que reavivar elánimo de los demás, sino también conservar mi moral cuandolos otros la hayan perdido.

Es ésta la época más favorable para viajar por Rusia. Lostrineos vuelan prácticamente sobre la nieve y su movimientoes, para mí, mucho más cómodo que el de las diligencias ingle-sas. No sientes demasiado el frío siempre que te envuelvas enpieles, abrigo que ya he adoptado, pues existe una notoria dife-rencia entre pasear por el puente de un navío y permanecersentado, inmóvil durante horas, de manera que ningún es-fuerzo impida que la sangre se hiele en las venas. No deseo enabsoluto perder la vida en la ruta postal que une San Peters-burgo y Arkangel. Dentro de dos o tres semanas tengo previs-to salir hacia esta última ciudad, fletar allí un navío, lo queme será fácil pagando al contado el seguro del armador, y con-tratar de inmediato, eligiéndolos entre los hombres duchos enla caza de la ballena, a aquellos marinos que me parezcan ne-cesarios. Espero levar anclas antes del mes de junio; pero¿cuándo estaré de regreso? Me es imposible responder a esta

38

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 38

Page 37: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

pregunta, hermana mía. Si la fortuna me sonríe, pasaránmuchos, muchos meses, incluso años tal vez, antes de que tú y yopodamos volver a vernos. Si fracaso, muy pronto estaremosjuntos o jamás nos reuniremos.

Adiós, mi admirada y querida Margaret. Quiera el cielobendecirte y protegerme para que me sea posible, todavía, dar-te pruebas de mi gratitud por todo tu cariño y por tu bondad.

Tu hermano que te ama ROBERT WALTON

39

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 39

Page 38: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 40

Page 39: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Segunda carta

A la señora de Saville. Inglaterra.

Arkangel, 26 de marzo de 17...

¡Qué despacio pasan aquí los días mientras estoy rodeadode hielo y nieve! No obstante, he avanzado ya un poco hacia elcumplimiento de mis deseos. He logrado fletar un barco y, aho-ra, me dedico a reunir la tripulación. Los marineros a quieneshe contratado parecen hombres de toda confianza y poseen sinninguna duda un valor a toda prueba.

Tan sólo no he podido satisfacer todavía uno de mis deseosy esta falla es, para mí, muy lamentable. Necesito un camara-da, Margaret; cuando el éxito me llene de alegría nadie lacompartirá conmigo y nadie me animará, tampoco, cuando meembargue el desaliento. Sí es cierto, podré confiar mis senti-mientos al papel, pero éste es muy pobre confidente para comu-nicarle lo que experimentamos. Necesito la amistad de unhombre por el que me sienta atraído; un hombre cuya miradapueda corresponder a la mía. Pensarás, sin duda, que soy unromántico, querida hermana, pero me afecta sinceramente es-ta ausencia. No tengo conmigo a nadie que sea a un tiempoamable y valeroso, comprensivo y culto; a nadie cuyos gustos se

41

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 41

Page 40: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

parezcan a los míos y que pueda aprobar mis proyectos o ayu-darme a modificarlos. ¿Pero cómo un hombre semejante, auncreyendo en su existencia, sería capaz de reparar los errores detu pobre hermano? Soy impulsivo en exceso cuando se trata de larealización de mis planes y me domina la impaciencia cuandoaparece algún problema; sin embargo, lo que más me ha per-judicado es la educación que me he dado a mí mismo. Duran-te los catorce primeros años de mi vida no hice otra cosa que co-rrer por los campos comunales y mis lecturas se limitaron a loslibros de viajes de tío Thomas. Luego conocí las obras de nues-tros más famosos poetas y tan sólo cuando era ya demasiadotarde experimenté la necesidad de aprender lenguas extranje-ras. Ahora tengo veintiocho años y soy menos culto que unmuchacho de quince. Ciertamente reflexiono con más profun-didad y mis sueños son más ambiciosos, pero les falta el equili-brio, como diría un pintor. Sí, me es imprescindible un amigolo bastante comprensivo como para no burlarse de mi roman-ticismo y que pueda, con su afecto, mitigar mis impulsivos sen-timientos.

En fin, nada conseguiré lamentándome. No será en la sole-dad del inmenso océano donde halle a un compañero, ni tampocoaquí, en Arkangel, entre mercaderes y marinos. Con todo, estoshombres sencillos poseen, aunque en estado muy rudimentario,los sentimientos más nobles de la naturaleza humana. Mi se-gundo, por ejemplo, está lleno de coraje e iniciativa, todo losubordina al deseo de gloria o, para ser más precisos, de ascen-so en su profesión. Es inglés —esto halaga el amor que sientopor mi patria— y pese a su ruda condición conserva intactaspreciosas cualidades humanas. Le conocí aquí, a bordo de unballenero, y en cuanto me dijeron que no tenía trabajo le con-traté para que me ayude a llevar a cabo mi empresa.

42

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 42

Page 41: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Es un muchacho de excelente carácter, célebre por la ha-bilidad y templanza con que se hace obedecer. Precisamente poresta causa, y también por su valor y honestidad, he queridocontar con sus servicios. Mi juventud solitaria, los años mejo-res de mi existencia pasados bajo tu influencia dulce y femeni-na, han modelado mi espíritu hasta el punto de que no me esposible vencer la repugnancia que me causa la brutalidad rei-nante, por lo general, a bordo de los barcos. Nunca la he creídonecesaria y, en cuanto me informaron de que existía un patrónestimado por su buen talante y por el respeto y la obedienciaque sabía despertar en sus marineros, me consideré afortunadopor estar en condiciones de contratarle.

Me habló por primera vez de él, de forma casi novelesca,una dama rusa que le debe su actual felicidad. Ésta es, pocomás o menos, su historia:

Este hombre amaba, hace algún tiempo, a una muchachade humilde condición y, como él había conseguido ya una fortu-na considerable merced a su maestría en la profesión, el padre dela joven autorizó el matrimonio. Pero cuando el pretendienteexpresó a la joven sus sentimientos, ésta prorrumpió en llantoy, arrojándose a sus pies, le rogó que quisiera ahorrarle tan do-loroso trance, ya que amaba a otro hombre, joven sin fortuna,razón por la que su padre se negaba a consentir en su unión.

El generoso marino consoló a la apenada dama y, encuanto supo por ella el nombre de su amado, puso término algalanteo. Él había comprado ya una granja, con la intenciónde pasar en ella lo que le quedara de vida, pero se la cedió a surival, añadiendo, además, toda su fortuna para que aquél pu-diera adquirir algunas reses, e incluso fue, él mismo, a solici-tar del padre de su amada el consentimiento imprescindiblepara la celebración de las nupcias.

43

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 43

Page 42: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

El anciano, sin embargo, creyendo comprometido su ho-nor, respondió con una categórica negativa y, dolido por lairreductible actitud de aquel hombre, el marino abandonó elpaís volviendo únicamente cuando tuvo noticias de que la mu-chacha había contraído matrimonio de acuerdo con sus deseos.

«¡Qué nobleza de carácter!», pensarás con toda razón.Pero lo cierto es que este hombre está desprovisto por completode cultura, es más silencioso que un pez y se observa en él unaespecie de ignorante negligencia que, al unirse a su comporta-miento un tanto extraño algunas veces, desmerece el interésy la simpatía que es digno de suscitar. No creas, sobre todo, queestoy arrepentido de mi decisión tan sólo porque me lamenteun poco o, incluso, porque quiera imaginar el consuelo de unatristeza que, es muy posible, jamás conoceré. Estoy tan firmey decidido como el mismo destino. Mi aventura ha sufrido al-gún retraso tan sólo mientras aguardo un tiempo más favora-ble. El invierno ha sido muy duro, pero la primavera comienzaa anunciarse y todo parece indicar que será más precoz que decostumbre. Es posible, pues, que, pese a todo, levemos anclasantes de lo previsto; pero no me arriesgaré en exceso, me cono-ces y sabes que puedes confiar en mi prudencia y moderaciónsiempre que la seguridad de otros está en mis manos.

Mis proyectos están a punto de realizarse ahora y soy in-capaz de explicar lo que siento. ¿Podrás comprender la impa-ciencia, mezcla de gozo y de temor, que me embarga mientrasdispongo la partida? Me dirijo a regiones aún vírgenes, «alpaís de la niebla y la nieve», pero yo no cazaré albatros. No su-fras, pues, por mi vida ni temas verme regresar, exhausto y mi-serable, como el «Ancient Mariner». Te imagino sonriendoante esta alusión al poema de Coleridge. Quiero, a este respec-to, revelarte un secreto; a menudo he atribuido a las obras de

44

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 44

Page 43: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

este poeta, el más imaginativo de la literatura moderna, lacausa de mi pasión por el mar y el entusiasmo que sus misteriosdespiertan en mí. Algo inexplicable se remueve en mi corazón.Soy, en el fondo, un hombre eminentemente práctico, un arte-sano acostumbrado a trabajar con dureza y perseverancia; pe-ro existe también en mí un amor a lo maravilloso, una fe enlo insólito que se une a todos mis proyectos y me fuerza a des-preciar los senderos trillados para empujarme a afrontar esteocéano indómito y estos países desconocidos que me dispongo adescubrir.

Volvamos, no obstante, a las cosas que me son más queri-das. ¿Te veré de nuevo, después de haber cruzado la inmensi-dad de los mares, hasta regresar por el extremo más meridio-nal de América o África? No me atrevo a esperar tantafortuna, pero no puedo ni siquiera soportar el pensamiento deque fracase en mi empresa.

De momento sigue escribiéndome siempre que te sea posi-ble, porque tus cartas pueden serme necesarias para fortalecermi valor. Te amo con todo mi corazón. Recuérdame con afectoen caso de que nunca vuelvas a recibir noticias mías.

Tu hermano que te quiere ROBERT WALTON

45

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 45

Page 44: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 46

Page 45: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Tercera carta

A la señora de Saville. Inglaterra.

7 de julio de 17...

Querida hermana:Te escribo a vuela pluma estas escasas líneas para comuni-

carte que todo marcha bien y que mi aventura está ya en buencamino. Mi carta llegará a Inglaterra gracias a un marino queregresa desde Arkangel; envidio su suerte, ya que pueden trans-currir muchos años antes de que contemple de nuevo mi país na-tal. Pese a ello me siento de inmejorable humor; mis hombresestán llenos de fuerza y, según parece, dispuestos a seguir adelan-te. No se atemorizan ante los bloques de hielo que desfilan sincesar a uno y otro lado del buque, presagiando los riesgos quedeberemos correr en la región hacia la que navegamos; estamosya a una elevada latitud, pero como nos hallamos en pleno ve-rano, y pese a que la estación no es tan calurosa aquí como enInglaterra, los vientos del sur que nos empujan con rapidez ha-cia las riberas que con tanta ansiedad deseo alcanzar nos traenuna templanza tonificante que jamás hubiera podido prever.

Hasta hoy no se ha producido ningún incidente que me-rezca ser contado; un par de fuertes tormentas y el hallazgo de

47

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 47

Page 46: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

una brecha en el casco del navío son cosas que no inquietan a unnavegante experimentado tanto como para que resulten dignasde mención. Podría sentirme satisfecho si, a lo largo del viaje,no sufriéramos más graves percances.

Adiós, querida Margaret. Ten el convencimiento de que,tanto por tu bien como por el mío, no afrontaré innecesaria-mente el peligro. Seré perseverante, prudente y sereno.

Estoy seguro de que el éxito vendrá a coronar mis esfuer-zos. ¿Por qué no ha de ser así? Hasta ahora he ido trazando conseguridad mi ruta a través del océano y son sólo las estrellas tes-tigos de mis triunfos. No existe motivo alguno para retrocederante esas olas indómitas, pero, sin embargo, sumisas. Nadapuede detener un corazón audaz y una voluntad decidida.

He dejado, sin proponérmelo, que mi espíritu se expan-sionase, y es preciso terminar. Que el cielo te bendiga, queridahermana.

ROBERT WALTON

48

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 48

Page 47: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Cuarta carta

A la señora de Saville. Inglaterra.

5 de agosto de 17...

Ha ocurrido algo tan extraordinario que no puedo dejarde comunicártelo, aunque es muy posible que podamos vernosantes de que estos papeles lleguen a tus manos.

El pasado lunes (31 de julio) nos hallábamos casi entera-mente rodeados por el hielo que se estrechaba a nuestra alrede-dor, dejando apenas lugar para que nuestro barco continuara aflote. La situación era cada vez más peligrosa, puesto que nosenvolvía una espesa niebla. En consecuencia, nos vimos obliga-dos a permanecer al pairo aguardando un cambio favorable enlas condiciones atmosféricas.

Poco más o menos a las dos del mediodía, la bruma co-menzó a disiparse y pudimos contemplar, extendiéndose hastael infinito, una helada llanura de quebrada superficie. Algu-nos de mis hombres empezaron a lamentarse e incluso yo mis-mo fui presa de inquietud cuando, de improviso, un insólitoespectáculo nos llamó la atención distrayendo nuestros pensa-mientos de la desagradable situación a la que nos veíamosabocados.

49

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 49

Page 48: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Observamos, a media milla de distancia, un trineo tira-do por perros que corría en dirección norte; en el vehículo, su-jetando las bridas, viajaba una figura de forma humana, perode gigantescas proporciones. Con nuestros catalejos pudimos se-guir durante largo rato su rápido desplazamiento, hasta quese ocultó en la lejanía, tras los montículos de hielo.

Esta visión nos llenó de un asombro sin límites. Segúnnuestros cálculos habíamos viajado cientos de millas y nos en-contrábamos muy lejos de cualquier tierra conocida; sin em-bargo, la aparición del trineo parecía demostrar que no noshabíamos alejado tanto como en principio creímos. Por otraparte, prisioneros de los hielos, no pudimos seguir tras las hue-llas de aquel hombre.

Dos horas más tarde, sentimos agitarse el agua bajo nues-tra quilla y, antes de anochecer, los hielos se quebraron liberandoel navío. Pese a ello permanecimos en el mismo lugar, ya que noqueríamos arriesgarnos en la oscuridad a sortear los terroríficosbloques que flotan en libertad cuando el hielo se rompe. Esto mepermitió descansar algunas horas durante el resto de la noche.

A la mañana siguiente, tan pronto comenzó a amanecer,subí al puente donde encontré a mis marineros asomados a unade las bordas y hablando, según me pareció, con alguien que sehallaba en el exterior. Efectivamente, un vehículo muy pareci-do al que habíamos visto la víspera, se había detenido juntoa nuestro costado. Flotando sobre un témpano, había derivadodurante toda la noche hasta llegar a nosotros. Sólo uno de susperros seguía viviendo, y en su interior viajaba un ser huma-no a quien mis hombres intentaban persuadir para que subiesea bordo. Al contrario que el viajero divisado la noche anterior,no era un ser salvaje, habitante de una isla inexplorada toda-vía, sino un europeo. Oí gritar a mi segundo:

50

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 50

Page 49: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

—¡Ahora viene el capitán! Él no le permitirá suicidarsede ese modo.

Al verme, el hombre me habló en inglés, aunque concierto acento extranjero.

—Antes de subir a bordo de la nave —dijo—, hágame elfavor de indicarme hacia dónde se dirigen.

Puedes imaginar mi sorpresa al escuchar tales palabrasen labios de un hombre condenado a una muerte segura y que,lógicamente, debiera ver en mi barco algo más precioso que to-dos los tesoros del orbe. Le respondí, no obstante, que realizá-bamos un viaje de exploración hacia el polo Norte, cosa que pa-reció satisfacerle, pues consintió en ser izado a bordo. ¡Diossanto, Margaret! Si hubieses visto al hombre que ponía condi-ciones a su salvación, tu sorpresa no hubiera tenido límites.Sus miembros casi se habían helado y su cuerpo estaba horri-blemente demacrado por el cansancio y las privaciones. Nuncaantes había visto un ser en tan lastimoso estado.

Intentamos instalarle en el interior, pero, en cuanto le fal-tó el aire frío, perdió el conocimiento. Le trasladamos de nuevoal puente y quisimos reanimarle dándole fricciones con coñac,del que también le hicimos beber unos sorbos. Tan pronto comocomenzó a recuperarse, le abrigamos con unas mantas y le colo-camos en la cocina cerca del fogón; gracias a ello fue poco a pocovolviendo en sí y tomó un poco de sopa que le hizo mucho bien.

Sólo al cabo de dos días estuvo en disposición de hablary durante un tiempo creí que las penalidades sufridas le ha-bían hecho enloquecer. Cuando comenzó a reponerse ordenéque le llevaran a mi camarote y cuidé de él tanto como misocupaciones me lo permitieron. Nunca antes había conocido yoa nadie más interesante. Una luz exaltada, casi demencial, bri-llaba algunas veces en sus pupilas. Pero si se le hacía un favor, si

51

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 51

Page 50: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

se le prestaba el más mínimo servicio, sus facciones se ilumina-ban con una expresión de dicha y dulzura que no he hallado enningún otro hombre. Pese a ello, la mayor parte del tiempo es-taba triste e incluso desesperado; de vez en cuando apretaba losdientes como si no le fuera posible soportar por más tiempo elpeso de los infortunios que le oprimían.

A medida que su salud iba mejorando puse gran atenciónen mantener alejados a mis hombres, que querían hacerle algu-nas preguntas. No quise permitir que le atormentaran inútil-mente con su curiosidad, pues estaba claro que, en el deplorableestado, tanto físico como moral, en que se hallaba, tan sólo el máscompleto reposo podría restablecerle y devolverle a la normali-dad. Cierta tarde, pese a todo, mi lugarteniente le preguntó:

—¿Cómo ha llegado usted tan lejos viajando en tan ex-traño vehículo?

Su expresión mostró, inmediatamente, los rasgos de lamás profunda tristeza. Respondió:

—Intentaba alcanzar a alguien que huía de mí. Mi segundo insistió: —¿Viajaba este hombre de la misma manera? —Sí.—Siendo así, me parece que le vimos, pues, la víspera del

día que le encontramos, divisamos sobre el hielo a un hombreque viajaba en un trineo tirado por perros.

Esto interesó a nuestro huésped que comenzó a formularnumerosas preguntas encaminadas, principalmente, a saber ladirección seguida por aquel «diablo».

Cuando estuve a solas con él, murmuró: —Sin duda he debido despertar su curiosidad y la de sus

bravos muchachos, y creo que es usted demasiado discreto comopara interrogarme al respecto.

52

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 52

Page 51: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

—Ciertamente —respondí— daría muestras de una inhu-mana impertinencia atormentándole con una curiosidad que es-tá fuera de lugar.

—Y, sin embargo —prosiguió—, me ha librado usted deuna extraña y delicada situación; me ha salvado generosa-mente la vida.

Algo más tarde quiso saber si creía que el hielo, al rom-perse, habría hecho desaparecer el otro trineo; le respondí queno era posible afirmarlo con certeza, puesto que el hielo se ha-bía roto hacia la medianoche y, por lo tanto, el hombre habíatenido tiempo suficiente para llegar a un lugar seguro. No eraposible asegurar nada al respecto.

A partir de entonces una mayor vivacidad animó su cuer-po exhausto. Mostraba grandes deseos de hallarse de nuevo enel puente para poder acechar en persona la posible aparición deltrineo que divisamos en primer lugar. Pude convencerle, pese atodo, de que permaneciera en su camarote, pues seguía aún de-masiado débil como para soportar sin peligro el empuje delviento. Pero tuve que prometerle constante vigilancia y que, sialgo aparecía sobre el hielo, se lo comunicaría en seguida.

He anotado, así, en mi diario, los insólitos sucesos de estosúltimos días. Mi huésped va mejorando lentamente, pero per-manece muy silencioso y da muestras de enojo cuando alguienque no soy yo penetra en su camarote. Pese a ello, sus modalesson tan agradables y dulces que toda la tripulación se preocupapor él, aunque no se muestra muy locuaz con nadie. En lo quea mí respecta, comienzo a quererle como a un hermano, como aun ser muy cercano a mi corazón, y su perenne e inmensa pe-sadumbre despierta mi simpatía y mi piedad. En estado nor-mal debe de ser un hombre muy notable para mostrarse, en suactual decaimiento, tan amable y atractivo.

53

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 53

Page 52: Frankenstein - leelibros.com las primeras paginas de...de su propia ficción y su protagonista cobra una vida que está mucho más allá de él, entonces el personaje pasa de la literatura

Te decía en una de mis cartas, querida Margaret, que nohallaría ningún compañero en las soledades oceánicas. Sin em-bargo, he encontrado un amigo al que me haría feliz conside-rar un hermano, antes de que el dolor aniquile su vitalidad.

Seguiré hablando de ese extraño huésped en mi diariocuando ocurra algún suceso digno de mención que esté relacio-nado con él.

54

Frankenstein.qxd 1/8/08 13:32 Página 54