JOSÉ LUIS CANO

reportaje

Estas manos hacen milagros

Se llama Ángel y es como un ángel para todos los pilotos de motos. Por sus manos han

pasado casi un centenar de deportistas de alta competición. Villamor no sólo les cura y

les recompone los huesos hechos añicos. También les propone recuperaciones rápidas, casi milagrosas. Y además, es un apasionado

de las motos. Así es este mago del bisturí

ÁNGEL VILLAMOR, EL CIRUJANO DE LOS PILOTOS DE MOTOS

DIEGO G. SOUTO

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Se mueve con la misma soltura por el quirófano del Hospital Quirón San José de Madrid que por el ‘paddock’ del circuito de Jerez, al que acude año tras año para disfrutar del GP de España de ‘motos’. Se llama Ángel Villamor y es un auténtico ángel de la guarda para los pilotos de motociclismo. Por sus manos -y su bisturí- han pasado campeones de la ta-lla de Álvaro Bautista, Julián Simón, Nicky Hayden, Aleix Espargaró, Dany Torres, Fonsi Nieto, Toni Elías, Alex Crivillé y Sete Gibernau, entre otros. Estos deportistas acuden a él, sin pensárselo dos ve-ces, cuando oyen y sienten un ‘crack’ en alguna parte de su cuerpo. Villamor no sólo les promete que recompondrá sus huesos hechos añicos. También les garantiza que tendrán una recupera-ción rápida y que quedarán sin secuelas. ¿Magia? ¿Técnicas innovadoras? ¿Dedicación y esfuerzo? Sin duda, una mezcla de todo. El doctor Villamor recibe a Marca motor para explicarnos cómo es su día a día y cuál es el secreto de su éxito. “El deporte siempre me ha apasionado y he llevado moto desde que tenía unos ocho años”, señala. “Tras estudiar Medicina en la Autónoma -recuerda-, me especialicé en Traumatología deportiva, por lo que me tuve que ir a Barcelona a la Dexeus, con el doc-

tor Vilarrubias. Ahí fue cuando el ‘jefe’ comenzó a mandarme con la federación de Motociclismo a los circuitos”. “En el año 90 empecé en las carreras del campeonato de Europa -continúa- y en el 92 co-mencé a ir al Mundial. Estuve seis años asistiendo a los pilotos. Fueron temporadas muy duras porque tenía que viajar con ellos y luego volver para conti-nuar con el calendario de formación, haciendo guar-dias pendientes, viendo a los pacientes y volviendo a viajar con los pilotos”. Por aquel entonces, el Mundial de Motos no tenía los medios de ahora. No había un hospital en cada circuito. Sólo una peque-ña clínica móvil que no contaba, ni siquiera, con la posibilidad de hacer radiografías. “Esto me obligaba -señala el doctor- a llevar dos maletines bien grandes con material para curar heridas, infiltrar, vendar, es-cayolar o incluso para hacer pequeñas cirugías”. “Aquello era un poco medicina de campo -señala en-tre risas-. De hecho creo que me ayudó mucho el ha-ber hecho Medicina en las milicias como médico de campaña”. “Recuerdo también -continúa el doctor- la mano de Alex Crivillé que operé en Laguna Seca porque los médicos de allí no se atrevían a hacer na-da. Lo hice en una tienda de campaña dentro del cir-cuito”. A la hora de pedirle al doctor Villamor que re-

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Dany Torres Rotura de cúbito y radio, escafoides, menisco, luxación de codo... Dany y Ángel son ‘viejos’ conocidos. La última operación, en el Hospital Quirón San José, fue hace unos días. El piloto de Freestyle traía el astrágalo hecho añicos tras una caída. En dos meses Dany volverá a realizar sus espectaculares saltos.

Nicky Hayden El piloto de MotoGP es otro que ha sufrido el síndrome compartimental, una dolencia que

hace que los músculos estrangulen las venas y arterias provocando falta de sensibilidad y de fuerza en los brazos. Fue operado en 2009 y

un año más tarde volvió a pasar por el quirófa-no para someterse a una segunda cirugía.

Álvaro Bautista Operado de la clavícula en 2010, Álvaro se frac-turaba en el GP de Qatar de 2011 el fémur de la pierna izquierda. Y, como no contaban con un

avión medicalizado, fue operado en Doha -bajo la supervisión de Villamor-. Sin embargo, al final la cirugía se complicó y Ángel tuvo que volver a

operarle en Madrid unos días más tarde.

Aleix Espargaró En septiembre de 2009 el doctor Villamor operó a Aleix del síndrome compartimental en el ante-brazo derecho. Esta lesión consiste en que los músculos del antebrazo se expanden de tal manera que impiden un correcto flujo sanguí-neo. Se corrige mediante una cirugía sencilla.

Julián Simón El piloto de Villacañas está muy agradecido a Villamor. Sobre todo después de ver el estado de su maltrecha pierna derecha, con doble fractura de tibia y peroné, tras ser embestido por el checo Sofuoglu en el GP de Cataluña de 2011. Este accidente obligó a Simón a pasar por el quirófano al menos en tres ocasiones.

Alex Crivillé fue operado en el circuito de Laguna Seca porque los médicos de EE.UU. no se atrevían a tratar las lesiones que tenía en la mano. Charlie Giró fue uno de los primeros pilotos que trató. Tenía cuatro metatarsianos

fracturados en el pie. Elena Rossell, la primera española en realizar el Mundial de Moto2, se fracturó el omóplato derecho en una prueba del CEV. Héctor Faubel se puso en manos del médico madrileño para que le revisara el

clavo insertado en un hombro. Iván Cervantes, campeón mundial de enduro, ha sido tratado por Villamor de una rotura en el ligamento cruzado de la rodilla izquierda y de síndromes compartimentales en los dos antebrazos.

Sete Gibernau recurrió al médico madrileño para recuperarse de su fractura en el quinto metacarpiano de la mano derecha y del deterioro de las placas en su clavícula. Otros pilotos que han sido tratados por Ángel Villamor han

sido: ‘Aspar’, Julián Miralles, Luis D’Antin, Toni Elías y Johny Hernandez...

FONSI NIETO

OTROS PILOTOS QUE HAN PASADO POR SUS MANOS

El caso de Fonsi es especial. Todo comenzó con una operación de astrálago practicada por los médicos del

Hospital Metodista de Indianápolis en el GP de 2010. Inicialmente la operación tenía que durar 2 horas, pero

se complicó. Duró 6 y acabó con una parada cardio-rrespiratoria por la noche. Al final el doctor Villamor

tuvo que tomar las riendas y guió a los médicos esta-dounidenses desde Madrid. ¿Su decisión? Volver a

abrir el tobillo de Fonsi para que drenara. Esta orden fue la que le salvó al piloto madrileño de una amputa-

ción de pie. Una vez en Madrid volvió a ser operado aunque sus lesiones le obligaron a dejar la competición.

Con parada cardiorrespiratoria y a punto de perder el pie izquierdo

Pablo Nieto Pablo ha sido otro de los Nieto que ha sido

operado por Ángel Villamor. Fue en 2006. Una caída en los entrenamientos del Gran Premio

de Australia le provocó una fractura de la cla-vícula izquierda. Fue estabilizado y trasladado

a Madrid para pasar por el quirófano en el Hospital San José unos días después.

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Reportaje gráfico: Photographers Business Services, S.L.

ÁNGEL VILLAMOR, EL CIRUJANO DE LOS PILOTOS DE MOTOS

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cordara qué lesión de un piloto le ha impactado más, este especialista lo tiene claro: “Lo más grave que he vivido -aunque no pude hacer nada- fue con Wayne Rainey. Era el director médico del GP de Italia de 1993 en Misano. Acudí al accidente y allí fue cuando Wayne dijo que no sentía las piernas. Respiraba muy mal y él ya nos dijo que se había ro-to la columna. No pude hacer nada, únicamente lo estabilicé, lo coloqué en la camilla y nada más. Fue un momento muy duro”. Han pasado 20 años de aquello y al doctor Villamor todavía se le entrecor-ta la voz cuando recuerda este accidente. Y es que si hay algo que él ama -al igual que la Medicina- es la pasión por la moto y los pilotos. De hecho Ángel es un auténtico admirador de todos ellos y los defien-de al 100% cuando surge la polémica de si aquel pi-loto se ha subido muy pronto a la moto tras una le-

sión grave. “Tienen una vida profesional muy corta y en muchos casos caprichosa ya que cuando pier-den una temporada se han quedado sin patrocina-dores de por vida y todos los años que llevan hechos están perdidos”, señala. “De manera que nosotros (los médicos) debemos ser también conscientes de ello. No puedes dejar de operar y que la lesión con-solide en tres o cuatro meses porque hundes su ca-rrera. Son deportistas entregados y necesitados de una recuperación absoluta y lo más rápida posible. De ahí que ellos mismos se prestan a hacer algún tratamiento novedoso”, afirma. “Para mí esto ha si-do una suerte, porque en Medicina es difícil inves-tigar ya que no puedes experimentar con los pacien-tes. Sin embargo con ellos hemos podido desarrollar técnicas quirúrgicas y protocolos de recuperación que no habríamos podido ensayar con otros. Hemos podido dar pasos en traumatología que no habría-mos conseguido de otra manera y de los que efecti-vamente también se aprovechan los pacientes de a pie”. Y respecto a si estos pilotos quedan con más se-cuelas por estar multioperados, el doctor Villamor responde: “es un tópico cuando dicen que van a quedar con más secuelas por no guardar el reposo

suficiente. Las cosas las hacemos con sensatez. Es verdad que lesiones que podías esperar a que conso-liden solas, las metes en quirófano -que es un ries-go asociado- para acelerar el proceso de curación. Pero siempre miramos que la curación sea total. No puedes dejarlo a medio curar cuanto antes, porque ellos más que nosotros necesitan una precisión ab-soluta en cada movimiento y cada gesto con la mo-to”. “Ponemos en el equipo mucho amor -continúa-y esa pulcritud en el detalle es el éxito en todas las artesanías”. Buena muestra de ello es el último pilo-to que Ángel ha operado. Se trata de Dany Torres, que se hizo pedazos el astrágalo. A Dany le hicieron escáneres (con reconstrucciones tridimensionales), estudiaron toda una tarde cómo estaban los frag-mentos, cómo debían abordarlos... para luego entrar en el quirófano con toda la tarde y noche por delan-te y sin horarios. De eso hace ya algunos días. Hoy, Dany ya se recupera en su casa de Arahal (Sevilla). Una vez más el ángel ha desplegado sus alas...

“Lo más grave que he vivido en un circuito ha sido con el accidente de Rainey. Cuando lle-

gué no pude hacer nada. Sólo le puse en la ca-milla y lo estabilicé. Wayne ya sabía que se

había roto la columna”, señala Ángel VillamorHa operado al Monarca de la rodilla, el tendón de Aquiles y ambas caderas

CIRUJANO DEL REY Y DE OTROS FAMOSOS

SU SECRETO

En total son cuatro las operaciones que ha reali-zado Villamor al Rey. La primera fue en junio de 2011 para implantar una prótesis en una rodilla. Tres meses después, el Rey volvía al hospital para que le reparasen el tendón de Aquiles del pie izquierdo. La tercera operación fue de ur-gencia en abril de 2012. Durante un viaje privado a Botsuana el Rey sufrió una triple fractura de su cadera derecha. Unos días después, esa misma cadera se luxaba, lo que le obligaría a pa-

sar otra vez por el quirófano. La última interven-ción que dirigió fue a finales de 2012 para colo-car una nueva prótesis en su cadera izquierda. Asimismo, Villamor también ha participado en la última intervención realizada al Rey hace unos días, debido a una infección en una de sus pró-tesis. Junto al Rey y a los pilotos de motos, Ángel también ha operado a muchos otros ‘fa-mosos’. Este es el caso de Cayetano Rivera, José Tomás y Pedro J. Ramírez, entre otros.Dormir poco, estudiar mucho, investigar más,

el seno de una familia de médicos, un abuelo ebanista que le enseñó la pulcritud en el deta-lle, un maestro como José María Vilarrubias del Instituto Dexeus que, tras seis horas de opera-ción, aún tenía fuerzas para empezar otra vez desde cero e infundir ánimos a todo el equi-

po... Estos son algunos de los secretos que han forjado la profesionalidad y el buen hacer de Ángel Villamor. A ellos se une la innovación. El cirujano madrileño, que recibió a Marca mo-tor en el Hospital Quirón San José, utiliza unas técnicas vanguardistas que permiten a los de-portistas recuperaciones en tiempo récord.

Innovación para unas recuperaciones en tiempo récord

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