GijónSport 144

Foto: Gabino Jove

Número 144 / 09 de Abril de 2014

EL FÚTBOL EN LA SANGRE

IÑAKI ERAÑA

La derrota del pasado domingo ante el Córdoba ha vuelto a disparar todas las alarmas y ha generado de nuevo un clima de nerviosismo dentro del Sporting. El equipo ha vuelto a perder una gran oportunidad para acercar-se a la zona de ascenso directo y en cambio ha complicado su situación en la tabla. De pensar en alcanzar al Eibar se ha pasado a otro objetivo que ahora mismo resulta primordial; asegurar el playoff de ascenso.

Sin embargo, la derrota también ha generado otras dudas que en este caso tienen que ver con la figura del entrenador. José Ramón Sandoval pasa por su peor momento desde su llegada a Gijón y cada vez son más las voces que piden su salida del Spor-ting. Una circunstancia que el club no valora en este momento y que tiene un inconveniente principal; el aspecto económico.

Ignorando el tema monetario la pre-gunta resulta igualmente muy difícil de contestar. ¿Es el momento de des-tituir a Sandoval? ¿Quién sería la per-sona indicada para sustituirle? ¿Po-dría alguien arreglar la situación en la

GijónSport - Editorial

¿Y ahora qué?Edita:GijónSport S.L.

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que se encuentra el equipo? Como decíamos, cuestiones que tienen di-fícil respuesta pero que están estos días en la mente de muchos spor-tinguistas. Dudas que, por otro lado, tienen casi tantas respuestas como aficionados tiene el equipo. Cada uno vemos las cosas de una forma distin-ta y cada uno tendríamos por tanto una solución a lo que está ocurriendo.

Lo que debería prevalecer por enci-ma de todo esto, al margen de lo que pueda ocurrir de ahora en adelante es la unión. Unión con letras mayúsculas y casi de forma incondicional. Al final de la temporada llegará el momento de hacer cuentas, ver lo que ha ocu-rrido y poner nota a la temporada. Hasta entonces lo único que puede servir es apoyar a este equipo, estar con ellos y esperar que después de tanto sufrimiento el Sporting pueda darle la vuelta a esta situación.

“Esta semana se ha pasa-do de hacer cuentas para alcanzar el ascenso directo a mirar a los de abajo para asegurar el playoff”

12. Iñaki ErañaLlegó hace unos meses al Sporting para ofrecer un nuevo punto de vista. Habla-mos con él sobre sus expe-riencias en esta nueva etapa.

04. AnálisisRepasamos los detalles que no dejó el pasado domingo el Sporting-Córdoba.

10. GuerreroEl delantero rojiblanco volvió a encontrarse con el gol el pasado domingo. Todo en una temporada que no está siendo fácil para él.

24. C.E. SabadellConocemos de cerca al próximo rival del Sporting.

26. Axel TorresRodrigo Fáez calienta el partido del sábado con su compañero de redacción en Gol Televisión.

30. BalonmanoEntrevistamos a Emilio Valla-do, uno de los hombres más importantes en el vestuario del Juanfersa Grupo Fegar.

NÚMERO 144, 09 DE ABRIL DE 2014

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Especiales

C O N T E N I D O S

Otros temas

Y además...

04 26 30

El enfermo se nos va. Y lo peor es que se acaba el tiempo para encontrar un medicamento que le cure. El Sporting volvió a jugar un mal parti-do, fue incapaz de finiquitar a un rival herido y ni su ataque, lo único que ha dado verdaderas alegrías durante la temporada, parece funcionar ya.

Pero eso, como sucedió en Las Palmas, no es el único ni el mayor mal en el conjunto rojiblan-co. La involución de su juego vivió otro episodio contra el Córdoba. Volvieron los fallos individua-les que costaron goles, las dudas en el terreno de juego y en la grada, y también esa pizca de mala suerte que acaba por quebrantar la fe del sportinguismo en su equipo.

Porque el pasado domingo ni atacó, ni se de-fendió. Es verdad que Juan Carlos, el portero verdiblanco, tuvo que hacer un par de paradas de mérito en la primera mitad; pero poco (o nada) más… Al Córdoba, un equipo flojo dentro

de la mediocridad de esta categoría, le bastó con defenderse con un mínimo de orden para que, como es habitual en El Molinón, al Spor-ting se le apagasen las luces cuando cruzaban el círculo central.

“El Sporting firmó un mal partido y ni su ataque, lo

único que ha dado alegrías esta temporada, parece

funcionar ya”

El guion para el visitante en Gijón está escrito desde hace varios meses: esperar el error de-fensivo del Sporting, darle una clase práctica de cómo se defiende y jugar con el nerviosismo de los futbolistas rojiblancos y de su afición, que ya no pasa ni una. Y es que parece que todos los equipos que juegan en El Molinón saben lo que tienen que hacer… Todos, menos el Sporting.

ENTRE TODOS LOMATARON Y ÉL SOLO...

GijónSport - Análisis

Si además, al mal juego, la mala suerte y los arbitrajes –que hacen que los rojiblancos pier-dan los papeles ante la más insignificante de las decisiones– le sumas la desidia,… Bien se le podría aplicar al Sporting eso de “entre todos le mataron y él sólo se murió”. Porque quedan nueve jornadas, o sea, 27 puntos en juego que en esta Segunda División tan igualada son un mundo, y la segunda parte del partido contra el Córdoba parecían los últimos minutos de un equipo desahuciado, sentenciado y destinado a un fatal desenlace.

La sensación que dio el Sporting, y que pue-de sentar un peligroso precedente, fue de una bajada absoluta de brazos. El equipo andaluz marcó dos goles –y gracias, porque pudo ser alguno más– porque el Sporting le invitó a ha-cerlo. Con sus pifias defensivas, sí; pero sobre todo, con su indolencia sobre el césped.

Las decisiones, vengan de donde vengan y afecten a quien afecten, hay que tomarlas ya. Para bien o para mal, acertadas o equivocadas; el tiempo lo dirá. La próxima semana, el enfermo se enfrenta a otra operación a vida o muerte. Y le quedarán otras ocho más. Pero, de momento, el Sporting sigue en la enfermería… Y la puerta grande queda demasiado lejos.

GijónSport - Análisis

Imágenes: www.ligaadelante.es

Foto: www.ligaadelante.es

LA FOTO DEL PARTIDO

Como el que no entiende muy bien lo que está viendo ante sus ojos, José Ramón

Sandoval se paseaba el domingo por la ban-da de El Molinón sin dar crédito a lo que es-taba ocurriendo. El equipo volvió a ir de más a menos y terminó perdiendo ante un rival que se sirvió de muy poco para llevarse los tres puntos. Por eso sería interesante saber qué le estaba pasando por la cabeza en ese momento a Sandoval. Es posible que el téc-nico se esté preguntando a sí mismo qué es lo que ha pasado con todo lo entrenado du-rante la semana. De hecho es de dominio público que a Sandoval y a su cuerpo téc-nico le gusta analizar al detalle a cada rival

para dar luego esa información a los suyos. Un método que, en teoría, debería funcionar pero que la práctica demuestra que no es así. El Córdoba hizo con el Sporting lo que quiso. Al igual que otros muchos rivales du-rante esta temporada, vino a Gijón a hacer su partido, a intentar aprovechar sus oportu-nidades y a ser duros en defensa. La jugada les salió bien y Ferrer y los suyos se llevaron el premio gordo de El Molinón. El problema ahora es que la temporada está en su fase más decisiva, en la que solo los que estén a un buen nivel van a lograr los objetivos. Solucionar eso es en lo que Sandoval debe centrar ahora sus pensamientos.

GijónSport - La foto

De Madrid al cieloPor Borja López

Capítulo XI

Otra oportunidad que se le vuelve a escapar al Sporting de engancharse a los puestos de as-censo directo. A partir de ahora apenas va a te-ner margen de error si quiere meterse en ellos. El domingo tuve la oportunidad de irme para Gi-jón por la mañana y de ir a El Molinón por la tar-de a ver al equipo. Era un partido que había que ganar y que todo el mundo lo esperaba pero no pudo ser asi. Ojalá el próximo fin de semana ha-gan un buen partido en Sabadell y consigan los tres puntos para seguir con las esperanzas.

Por otra parte, el Rayo ha vuelto a hacer un par-tido espectacular. Hemos ganado en Vallecas 3-0 al Celta, un equipo que juega muy bien al fútbol y que no es nada fácil ganarlos, y mucho menos por esa diferencia de goles.

Con la quinta amarilla que le sacaron a Gálvez, posiblemente pueda volver a entrar en el once titular la próxima semana para jugar en Cornellá El Prat contra el Español.

Así que esta semana a trabajar duro para ganar-me ese puesto. Si ganamos, puede ser el parti-do que certifique nuestra permanencia, ya que nos pondríamos con 39 puntos.

Por último, el Mónaco volvió a hacer los debe-res en casa, y se impuso por tres goles a uno al Nantes. Por lo que prácticamente se garantiza la segunda plaza, ya que quedan pocas jornadas de liga, aunque el Lille no se va a rendir mientras tenga opciones.

Un saludo desde Madrid.

GUERRERO AL RESCATE

Trafalgar, Waterloo, Vietnam,… Ha habido mu-chas guerras a lo largo de la historia; unas más duraderas, otras de apenas meses; algunas muy cruentas, y otras mucho más diplomáticas,… Lo que nadie se esperaba es que esta Segunda Di-visión con batallones como Deportivo, Mallorca, Zaragoza o Sporting; con un arsenal infinitamen-te superior –al menos sobre los mapas– al de los Éibar o Real Jaén, fuese a llegar a sus últimos dos meses con todo por decidir en el campo de batalla.

Y en esas, el ejército rojiblanco –uno de los más numerosos entre todos los contendientes– se ha encontrado con la pólvora mojada. En las últimas batallas, a sus dos mejores artilleros les ha fa-llado la puntería. Sus armas, mortales en otras fases de la guerra, han llegado al momento deci-sivo mal calibradas. No sería justo culpar de las derrotas a quienes más prisioneros han hecho en estos meses; y tampoco al centinela que, con sus paradas –muchas veces salvadoras– ha pro-tegido a la retaguardia sportinguista; aunque el pueblo es soberano para juzgar a su ejército, el que debe guiarle hacia la victoria final.

Por Marcos Martín Foto: Gabino Jove

GijónSport - Al detalle

Y precisamente, porque una guerra no se gana con dos buenos militares, por cuantiosos honores que tengan, muchos acusan al Capitán General del Ejército, José Ramón Sandoval, de no saber transmitir sus estrategias de guerra a sus combatientes; aun reco-nociendo que tiene un vasto conocimiento de su enemigo semanal.

Otros creen que el fracaso consumado en los últimos combates viene motivado por una mala gestión del Ministerio de la Guerra, de los que mandan y se encargan de conformar un ejército fiable antes de que estalle el conflicto. Y alguno también critica que los soldados capitulen tan fácil, incluso ante las armas de fogueo de los más débiles.

Mientras, en el campo de batalla, los ejércitos más ordenados, aunque aparentemente más débiles, se están llevando a su terreno una guerra de desgaste. Y el Sporting, aunque minado por los últi-mos acontecimientos, quiere sobrevivir e intentar un último avance hacia la ‘tierra prometida’, esa que te asegura la gloria cuando se firme el armisticio.

Y cuando todo parecía perdido, con un serbio luchando en un fren-te en el que sus habilidades se difuminan y el otro, el Panzer de Belgrado, en el hospital de campaña; ha vuelto un joven veterano de guerra que algunos habían olvidado. Un ‘Guerrero’ que ya se había ganado sus condecoraciones por sus méritos en otras gue-rras contra históricos enemigos.

Recuperado de sus heridas de guerra, su participación no fue su-ficiente en la última batalla, en la que el rival –que se había dejado muchos hombres en el camino, pero que ha contado con un infil-trado en el campamento rojiblanco durante varios meses– se llevó la victoria.

Toca diana en el Sporting. Comienza un nuevo día; y en el hori-zonte, se atisba una nueva batalla. El Capitán General será el que decida si es de la partida o no, pero Guerrero –ese artillero al que todo el pueblo aclamó hace no mucho- ha vuelto.

GijónSport - Al detalle

GijónSport - En portada

Por David González / Fotos: Gabino Jove

La vida en torno a un balón

Iñaki Eraña


Hijo de futbolista, exjugador, entrenador, directivo de la Asociación de Vetera-nos, responsable de un programa de intercambios futbolísticos con Estados Unidos y, desde hace unos meses, directivo del Sporting en su condición de asesor del consejo de administración. La vida de Iñaki Eraña ha ligado casi de forma permanente en torno a un balón. Ha llegado a un club en pleno pro-ceso de reestructuración para tratar de insuflar un aire nuevo y para tratar de aportar la opinión de alguien que ha vivido el deporte desde todas sus facetas.


Iñaki Eraña refleja a la perfección el espíritu que, al menos de pala-bra, el nuevo consejo de administración del Sporting quiere exhi-bir. Persona de consenso, de trato agradable, atenta a las críticas y con ganas de hacer cosas nuevas. Es una incógnita cómo le saldrá su aventura, pero su mensaje inicial, aquella frase de “yo soy Mareo” y esa apuesta por recuperar los valores grabados a sangre y fuego en la filosofía del club, ha sido acogido con agrado por un amplio sector del sportinguismo. Ahora, con tiempo sufi-ciente para aterrizar y conocer cómo se mueve el club por dentro, toca pasar a la acción.

El fútbol está en los genes de Iñaki Eraña. Su padre, Juan, viz-caíno de nacimiento, llegó a Gijón en 1962, imaginando que sería una muesca más en su carrera deportiva. No imaginaba que aquel acabaría siendo su lugar en el mundo. Jugó ocho años en el Spor-ting, siendo el quinto futbolista que más partidos disputó con la camiseta rojiblanca en Segunda. Al colgar las botas, se instaló definitivamente en Asturias, donde montó junto a su compañero Leixo (recientemente fallecido) la Ferretería San Lorenzo, en el ba-rrio de La Arena.

Cuentan que Juan Eraña tenía visión de negocio. Que con su pri-mer sueldo en el Athletic compró 250 gallinas, que acabarían sien-do mil. Que al llegar a Gijón vio una oportunidad en los garajes de coches. Una visión empresarial que acabaría inculcando a su hijo, asturiano de nacimiento, pero con nombre típicamente vas-co: Iñaki.

Nuestro protagonista no podrá tener muchos recuerdos de su pa-dre como jugador, porque cuando él colgó las botas, Iñaki tenía cinco años. Pero sí ha aprendido muchas lecciones del primer hombre que le inculcó la pasión por el fútbol. La más clara, dice, el mensaje de que “llegar a ser jugador de fútbol sólo depende de uno. Estoy convencido de ello. Alguien va apostar por ti si tú va-les, si tú lo demuestras. Es fácil justificarse en que no te han dado confianza. Obviamente hay muchas circunstancias, pero estoy se-guro de que llegar depende, principalmente, de cada uno”. Ahora lo aplica como dirigente y se lo repite a los jugadores con los que tiene que reunirse.



“Al retirarme, desconecté totalmente del fútbol durante un par de años. Pero lo pasé mal. Lo llevaba en la sangre, así que volví a picar”

La vida de Iñaki Eraña ha estado casi siempre cen-trada en el fútbol. Casi siempre. Al colgar las bo-tas, después de una larga carrera que le hizo ves-tir las camisetas del Sporting, Recreativo, Murcia, Logroñés, Compostela, Extremadura y Numancia, Iñaki decidió respirar y alejarse completamente del deporte que le había tenido tan absorbido durante toda su vida anterior.

“Traté de desconectar durante un par de años. Fue mucho tiempo metido en la misma dinámica, los úl-timos años habían sido un poco difíciles y siempre tuve claro que cuando acabara mi trayectoria depor-tiva quería alejarme un poco. Hasta aquel momento nunca me había seducido la idea de ser entrenador. Pero lo pasé mal durante aquel tiempo. Me sentí raro. Al final noté que llevaba el fútbol en la sangre. Y volví a picar”. Su mujer, asiente. “Fue una deci-sión poco lógica, pero él lo necesitaba. Había vivido dos años muy duros, con descensos, la salida en Diciembre del Extremadura”, recuerda Ana. “No fue muy racional”, reconoce Iñaki.

Ya como futbolista, Eraña tenía inquietudes. Le atraía la ingeniería, aunque no pudo acabar la carrera. Su heredada inquietud hacia el mundo empresarial le llevó a invertir sus ahorros en diversas propiedades. Surgió entonces la posibilidad de hacer el curso de entrenador, que se brinda a los exfutbolistas. Era-ña decidió apuntarse. Se sacó el título y ejerció de entrenador durante una etapa muy agradable en el Veriña. Pero le atraía otro aspecto del fútbol: la ges-tión deportiva. Le sedujo la posibilidad de trabajar en el proyecto U.S.E. América, un programa de be-cas para jóvenes futbolistas en universidades esta-dounidenses.


“Al retirarme, desconecté totalmente del fútbol durante un par de años. Pero lo pasé mal. Lo llevaba en la sangre, así que volví a picar”


“Soy un miembro más del consejo. Participo en todas las decisiones y aporto mi visión especialmente en la parcela deportiva, que es donde yo creo que puedo aportar más”

Y cuando repartía su tiempo entre sus negocios, los entrenamientos con el Veriña, los partidos con los veteranos rojiblancos y a la gestión de las becas, llegó la llamada del Sporting. Javier Fernández le proponía entrar en el consejo de administración para que en este se escuchara una voz del fútbol, de un profesional del balón en todas sus vertientes.

Iñaki no respondió en ese momento. Posible-mente en su fuero interno sabía que diría que sí, pero quiso valorarlo consigo mismo y con su familia. Sabía que era un paso, atractivo pero también arriesgado, por la responsabilidad, la exposición pública. “Siempre fui sportinguista, pero nunca imaginas que te puedan ofrecer una labor de tal importancia. Para mí, muchísima”. Por eso lo tuvo que meditar. Mantuvo varias re-uniones con quienes trataban de ‘ficharle’, les expuso sus ideas y acordó con su familia que daría el paso. Quien no tuvo ningún miedo fue su padre. Juan Eraña se tomó el anuncio de su hijo con entusiasmo. “No se lo esperaba y se sintió orgulloso. Eso fue lo que me transmitió”. ¿En qué consiste la labor de Iñaki Eraña? “Soy un miembro más del consejo de administración, aunque la denominación del puesto sea el de asesor. Participo en todas las decisiones que se toman en el consejo y aporto mi visión especial-mente centrada en la parcela deportiva, que es

donde yo creo que puedo aportar más”. Trabaja codo con codo con el director deportivo Raúl Lozano y con el nuevo responsable de Mareo, Manolo Sánchez Murias, un ‘fichaje’ del que se le nota especialmente orgulloso tras la salida por voluntad propia de Javier Vidales. “Es un hombre muy preparado, muy capacitado y en el que todo el mundo dentro de la casa tiene una enorme confianza”.

Lo dijo en sus primeras apariciones públicas tras ser nombrado asesor del consejo. “Yo soy Mareo”. Cuando se le recuerda aquel discurso pone cara de póker. Su apuesta por una filosofía de cantera no era más que un axioma rojiblan-co, si quieren una ‘perogrullada’, pero en los tiempos actuales siempre hay quien se lo toma como una afrenta. Pero ningún sportinguista de-bería sorprenderse ni discutir la filosofía que ex-pone, de palabra, Iñaki Eraña: un Sporting con el mayor número posible de jugadores forma-dos en Mareo y complementado con aquellos que, viniendo de fuera, puedan subir el nivel. “No es una ley, ni un dogma. Siempre ha habi-do gente de fuera que ha aportado muchísimo a este club. Y Mareo lleva muchos años funcio-nando y bien. Pero hay que seguir fortalecién-dolo. La situación de la entidad es la que es, no es precisamente boyante, pero hay que trabajar en un club que sea capaz de mantenerse por sí mismo. Y eso tiene que ser a través de Mareo”.


A final de temporada tocará analizar muchas cosas. Eraña cruza los de-dos para que ese análisis crítico sea en Primera División. Pero asegura que un ascenso deseado y casi obligado para la estabilización del club no debería tampoco eludir esa reflexión. Pese a las dudas que han ido salpicando al equipo durante el curso, mantiene que “el trabajo de la dirección deportiva ha sido bueno”, cree que era necesario “remodelar un vestuario que no era fácil” y cree que existe “una plantilla equilibra-da para hacer una buena temporada”. Recuerda que no es fácil hacer un equipo prácticamente nuevo y que salga bien a la primera. Admite que hay cosas que se deben hacer mejor y que llegará el momento de tomar decisiones, pero intenta mirar más allá de los resultados puntua-les. “En Agosto se apostó por una línea de trabajo que creíamos que era la buena y lo seguimos creyendo. El tiempo nos lo dirá”, explica.

Admirador de Schuster, un auténtico referente para Eraña por su pues-to en el terreno de juego, admite que también le impresionó ‘La Quinta del Buitre’, especialmente Martín Vázquez y Manolo Sanchís. “Yo había jugado con ellos en categorías inferiores, y verles llegar tan arriba me impresionó”. Recuerda con especial cariño a un entrenador: el argen-tino Carlos Aimar, que durante dos años en el Logroñés fue quien más apostó por él. Ahora él apuesta por Mareo y, sobre todo, por el Spor-ting. Y apuesta por el fútbol, el deporte que le ha dado casi todo.


“La apuesta por Mareo no es una ley, ni un dogma. Siempre ha habido gente de fuera que ha aportado mucho. Pero es

nuestra obligación cuidar al máximo nuestra cantera”


“La apuesta por Mareo no es una ley, ni un dogma. Siempre ha habido gente de fuera que ha aportado mucho. Pero es

nuestra obligación cuidar al máximo nuestra cantera”

GijónSport - Opinión

El Sporting flaquea. El Sporting duda. Y el Spor-ting pierde. Quedan nueve jornadas y el equipoestá a seis puntos (que son siete) de los puestos de ascenso directo. Con sólo dos ya de colchón respecto al cierre del grupo de plazas que da acceso a la promoción. Y el público, en su gran mayoría, salió triste y enfadado de El Molinón, tras perder el pasado domingo, ante el Córdoba (1-2) en un mal partido del equipo de la capital de la Costa Verde.

La afición está preocupada. Pero quedan nueve jornadas. Nueve exámenes que pueden dejar la nota final en un suspenso, si, finalmente, hay que volver a repetir curso; en un sobresaliente, si se asciende a través de una -seguramente no apta para cardíacos- promoción; o en una Matrícula de honor, si se sube de forma directa.

Yo confío en estos jugadores, que deben echar el resto en el tramo final y demostrar que sí, que se merecen jugar la próxima temporada en Primera. Que tienen la calidad y - sobre todo, ahora- el temple para lograr sus objetivos. Unas

metas que coinciden con los de la ciudad a la que representan, con los de la gran Asturias roji-blanca y con los de todos los sportinguistas dis-persos por España y el resto del planeta. Que vinculan con total entrega el destino de este club al suyo propio.

Y confío en que Sandoval, el capitán de la nave, transmita la serenidad y el optimismo indispen-sables para afrontar el decisivo tramo final con garantías.

No queda mucho margen. Hay que ganar en Sa-badell y recuperar a la afición en los siguientesdos partidos, en casa, ante Murcia y Lugo: con-vertir de nuevo El Molinón en un feudo inexpug-nable. Aún creo en el ascenso directo, porque es posible. Pero, antes que nada, hay que regresar este sábado, con tres puntos, de tierras cata-lanas. Donde pitará Santos Paragaña, motivo suficiente para encomendarse a la Virgen de Covadonga.

Toca sufrir, porque el sufrimiento es consustan-cial a la condición de sportinguista. Pero bien-venido sea todo el dolor del mundo, si al final llega el alivio del retorno a la categoría de honor. Yo no me borro. Será, seguramente, con algún vendaje más. Pero el final de curso tiene que ser con fiesta. Gijón es de Primera.

Repetir curso, sacar sobresaliente o matrícula de honor

Adrián HúberPeriodista@AdrianRHuber

Yo confío en estos jugadores, que deben

echar el resto en el tramo final y demos-

trar que merecen subir a Primera

C.E. Sabadell

El Sporting se enfrenta este sábado a un rival que suele empezar con intensidad los par-tidos, especialmente en casa, donde tiene unos números muy buenos. La Nova Creu Alta es el estadio donde menos puntos se han escapado a lo largo de la temporada.

Intenta tener el control del partido a través de la posesión, pero le cuesta tener tranquilidad y pausa para realizar posesiones largas. Cuando no ven pase claro, buscan el balón largo hacia Aníbal. Sus jugadores de banda son rápidos y verticales. Suele llegar mucha gente a zonas de remate. Cuestiones que el Sporting debe tener en cuenta para sumar una victoria muy necesa-ria y seguir vivo en la lucha por el ascenso. Los rojiblancos tienen este sábado una salida com-plicada pero en la que solo vale ganar.

Entrenador: Miquel OlmoEstadio: Nova Creu AltaCapacidad: 11.981Puesto en la clasificación: 12º (44 puntos)

GijónSport - El rival

Últimos resultados

PORTERONauzet: Portero muy rápido de movimientos y ágil bajo palos. Juega muy adelantado y arries-ga mucho en las salidas aéreas.

DEFENSACristian: Lateral derecho muy ofensivo que tie-ne un buen trato de balón y mucho recorrido. Defendiendo es un poco blando en ocasiones. Puede jugar de interior también.

Clerc: Lateral izquierdo muy corpulento. Desta-ca por su fuerza y su contundencia. Defiende bien, siendo difícil de superar y golpea con po-tencia el balón. No se incorpora tanto al ataque como Cristian.

Carlos Hernández: Central que domina bien el juego aéreo y es contundente en la disputa. No es excesivamente rápido en sus acciones. Se precipita bastante a la hora de jugar el balón desde atrás.

Kiko Olivas: El ex del Villareal y del Córdoba está teniendo continuidad en el eje de la defen-sa. Domina el juego aéreo y dispone de una ve-locidad aceptable, lo que le permite arriesgar en sus acciones. Se anticipa bien al delantero. Con el balón en los pies no está del todo cómodo y abusa del desplazamiento en largo.

MEDIOCórcoles: De los jugadores del mediocampo es el que más aguanta la posición y no pierde el sitio con frecuencia, muy disciplinado tácti-camente, siempre se encuentra en condiciones de jugar el balón apoyando al compañero o de cortar el avance rival. No arriesga con el balón en los pies.

Hidalgo: El veterano jugador está demostrando un gran nivel de juego, lo que le ha permitido re-novar su contrato una temporada con el cuadro arlequinado. Destaca por su trabajo incansable en el campo y su gran dosis de esfuerzo. Tiene fuerza y potencia con el balón, remata bien de cabeza y es muy peligroso llegando a la frontal del área sin balón por sorpresa.

Longás: Jugador muy técnico, con movilidad, se ofrece constantemente para recibir el balón. Buena visión de juego para meter pases entre líneas y con habilidad y tranquilidad con el balón en los pies.

Collantes: Jugador muy rápido y muy vertical. Puede jugar por cualquiera de las dos bandas. Con espacios es difícil de parar. No es excesi-vamente técnico. A veces peca de individualis-ta conduciendo en exceso el balón. Defensiva-mente no es muy disciplinado.

Tanabe: Jugador de banda japonés que a pe-sar de ser diestro se encuentra más cómodo jugando por la izquierda. Técnico y habilidoso en el dominio del balón. Demasiado frío en sus acciones.

DELANTEROSAníbal: Clara referencia ofensiva del equipo. Juega bien de espaldas y utiliza de forma inteli-gente su cuerpo para sacar ventaja al defensa. En el área se revuelve rápido y tiene facilidad para encontrar zonas de remate. Domina el jue-go aéreo y busca portería desde cualquier lado.

Gato: Jugador rápido y habilidoso. Intenso en las acciones tanto ofensivas como defensivas. El ex del Alcoyano puede actuar en la media-punta o como extremo. Busca la espalda de los defensas para explotar su velocidad. Vertical y con clara vocación ofensiva.

GijónSport - El rival

GijónSport - Entrevista

Rodrigo Fáez habla con...

Axel TorresEn la previa del partido que va a jugar esta semana el Sporting ante el Sabadell, Rodrigo Fáez ha querido invitar a su sección a su compañero de trabajo en Gol Televisión. Con Axel Torres, experto en fútbol internacional y aficionado al Saba-dell hablamos esta semana sobre el encuentro de la Nova Creu Alta.



Tras narrar juntos un Holanda-Argentina del Mundial de 1974 nos quedamos en la redacción y seguimos hablando de fútbol. Es compañero, sabe de fútbol y es del Sabadell. Por eso nos peleamos un rato para ver quién llega mejor al sábado.

Otra vez frente a frente.Aquí estamos

El sábado toca el Sabadell-Sporting, ¿quién es el favorito?Los que tenéis que ganar sois vosotros. Si no ganáis tendréis un problema, vuestro entrena-dor tendrá un problema y vuestros jugadores tendrán un problema. Tenéis mucho que perder.

Ya empezáis con esa vitola de victimistas.No es así, pero es verdad lo que te he dicho. Sólo hace falta ver cuánta gente va a vuestro campo y cuánta gente viene al nuestro. Mira a quiénes ficháis vosotros y mira nuestras posi-bilidades. Antes de empezar la temporada no cuentas con ganar este tipo de partidos.

Tú sabes que el fútbol es cuestión de rachas y ahora sois el mejor equipo local.Somos un equipo con mucho espíritu y estamos muy cómodos en casa. Quizá la falta de gente nos libere de presión y nos viene bien, no lo sé.

¿La clave es que vosotros tenéis un entrena-dor reconocido por su gente y nosotros no?No he seguido al Sporting lo suficiente como para emitir un juicio respecto a vuestro entre-nador.

No te mojas nunca con Sandoval.En el Rayo en Primera tuvo buena fama.

¿Y con el Sporting en Segunda?No lo sé, en teoría es un proyecto para ascen-der.

¿Lo ficharías para el banquillo arlequinado?No creo que llegáramos a sus parámetros eco-nómicos

¿Te seguirías llevando a Scepovic a un Saba-dell si el equipo fuera tuyo?Claro. Marca muchos goles.

Y la última. Quiénes somos más pesados en Twitter, ¿la caverna sportinguista o la arlequi-nada?Nosotros no somos caverna.

Venga yaNo me considero parte de una caverna.

Ojalá perdáis, AxelOjalá lo hagáis vosotros (risas).


GijónSport - Balonmano

Por Marta Tejerina / Fotos: Cris Valle

Vallado para todoLlegó para ser el portero titular la temporada que nació el Gijón Jovellanos. Desde entonces han pasado cinco años y las cosas han cambiado mucho. El equipo vivió dos ascensos en los que su aportación fue fundamental, no sólo bajo palos sino también como fisioterapeuta. Emilio Vallado es, además, el animador del vestuario y hoy vive su suplencia en Asobal con la ilusión de ayudar y sumar desde los múltiples roles que desempeña en el Juanfersa Grupo Fegar.



El Palacio de los Deportes aguardaba el inicio de un choque trascendental. Un duelo directo por la permanencia en Asobal que el Juanfersa necesitaba ganar para respirar después de dos derrotas consecutivas. Enfrente el histórico Va-lladolid, venido a menos, pero con el riesgo que siempre entraña un rival que lucha por lo mis-mo que tú. Convencidos de que la victoria se quedaría en casa, los jugadores salieron extra motivados, aunque la igualdad fue una constan-te a lo largo de todo el encuentro. Adam Savic, indiscutible bajo palos, no estaba teniendo una de sus mejores noches. Así que Alberto Suárez cedió al portero más veterano de la plantilla la responsabilidad de interponerse ante el lanza-dor desde los siete metros por dos veces con-secutivas. Emilio Vallado no falló. Y el Juanfersa ganó el partido.

Con su gesto de rabia en la celebración de las dos paradas lo dijo todo sin decir nada. En ese momento pasaron por su cabeza muchos re-cuerdos, momentos inolvidables a los que acu-de cuando, a veces, se pregunta si esto vale la pena. La respuesta siempre es sí. “Entrenas durante meses, cada día, pero ves que la opor-tunidad no llega, que no tienes minutos… Y de pronto, en un partido como ese, en un momen-to clave, te toca salir y respondes. Fue una ale-gría tremenda. Reviví el ascenso en Sarriá, el de Asobal contra Puente Genil… Exploté”.

Emilio Vallado (Gijón, 1983), es uno de los ju-gadores que forman parte del Gijón Jovellanos

desde su primer día de historia. Una temporada antes, la situación le había obligado a marchar-se a Torrelavega para seguir haciendo lo que más le gustaba, jugar a balonmano. Cuando re-cibió la llamada que le permitía regresar a casa no se lo pensó. Junto a Juan Gamallo, Emilio vivió unos años inolvidables en los que su porte-ría fue una de las menos goleadas de la catego-ría. “No me gusta hablar de porteros titulares y reservas en balonmano. Gamallo y yo hablába-mos entre nosotros y decidíamos quien jugaba, nos cambiábamos durante el partido según las sensaciones que teníamos… Había muy buen rollo, un feeling que dio sus frutos”.

Vallado siempre quiso ser portero. Desde que tenía siete años y empezó a jugar a balonma-no en el colegio Río Piles y preguntó cuál era la posición en la que había que correr menos y le colocaron bajo palos. “Por aquel entonces no me gustaba nada correr, era un poco vago”, bromea. Lo que no le faltó nunca fue ese punto de locura que, según confirma, debe tener todo el que se planta ante los lanzadores a recibir golpes. “Si te paras a pensar a lo que te expo-nes... Tener delante a esas bestias de jugadores que tiran con toda su fuerza y tratar de que te pegue el balón, no reaccionar de forma natural intentando esquivarlo…Hay que estar un poco loco, no pensar en las consecuencias porque si no te apartarías. Me he llevado muchos golpes, no hace falta que te diga donde duele más…”, explica riendo.

“Si puedo ayudar a un chaval más joven, que juega más, y gracias a mi consejo lo hace mejor en la pista, yo me siento partícipe de eso”




Por su personalidad, extrovertido y enérgico, Vallado se convirtió, sin apenas darse cuenta, en el líder del vestuario. Desde un primer mo-mento él asumió ese rol de aglutinar a todos los jugadores, de convertir el equipo en una piña, en un grupo de amigos que compartían la ilu-sión de llevar a ese conjunto recién nacido a lo más alto. Lo consiguieron. “Ahora uno ya anima menos, porque llegas a los entrenamientos can-sado de trabajar y te da un poco de pereza po-nerte a hacer bromas. Pero siempre intento que haya buen rollo. Organizar cenas, comidas, que tengamos ese buen ambiente tan importante. Quizás en años anteriores éramos más bloque, ahora cada uno va un poco más a lo suyo. Pero es lógico: muchos trabajamos, otros estudian, los extranjeros hablan otro idioma… Es difícil compaginar todo eso. Seguimos llevándonos muy bien pero quizás ya no es lo que era cuan-do empezó todo”.

Las cosas han cambiado bastante para Emilio Vallado desde que comenzó esta aventura hace cinco años. De ser el dueño de la portería, ha pasado a repartirse algunos minutos con Nacho Fernández las pocas ocasiones en las que el in-discutible Adam Savic es sustituído por Alberto Suárez. La llegada del bosnio, cuyo rendimiento está siendo espectacular, ha obligado a Vallado a replantearse su papel en el equipo. “Nacho y yo tenemos que ayudar, para eso estamos. En-trenamos todos los días con ilusión. Es cierto

que antes mi responsabilidad era mayor, tenía más minutos, pero hay que saber adaptarse a las circunstancias. El deporte es así y uno siem-pre debe saber cómo aportar su granito de are-na”.

Los minutos previos a un partido, en cualquier deporte, tienen algo de litúrgico, responden a una especie de ritual que varía según el esce-nario, pero que se repite semana a semana. Los jugadores salen del túnel de vestuarios, reali-zan los últimos ejercicios de calentamiento y se concentran para lo que vendrá después. Emilio Vallado sale a la pista junto al resto de jugadores y comienza a prepararse para el partido: estira-mientos, flexiones… Pero la soledad del portero en su caso no existe. No han pasado apenas unos minutos cuando ya le reclaman desde el otro lado de la pista para vendar o dar el último masaje a un compañero. “Otro rol más…”, ríe. “Desde que llegué al equipo he trabajado tam-bién como fisioterapeuta. Siendo un compañe-ro más siempre es más fácil que los jugadores tengan confianza contigo para contarte qué les pasa, qué les duele… Yo les ayudo, intento so-lucionarlo de alguna manera. A veces es com-plicado, porque mientras los demás están con-centrándose para el partido tú tienes que estar preocupándote de otras cosas, y luego también te tienes que preparar para jugar. Pero es algo que me gusta, y siempre lo he hecho, así que estoy acostumbrado”.



Portero, fisioterapeuta, animador del vestua-rio… y encargado de elegir las películas para los largos viajes en autobús por toda la geogra-fía española. Sus gustos cinematográficos no siempre casan con los del resto del equipo y, siempre, haga lo que haga, generan bromas y críticas del personal. “¡Es Hollywood! Si se hace cine malo, yo pongo cine malo, qué le voy a ha-cer…(risas). Luego si elijo alguna comedia ro-mántica se meten conmigo, así que la siguiente que pongo es una de tiros, para compensar”.

Si tuviera que quedarse con alguno de los mu-chos momentos que ha vivido con el Juanfersa tendría muy claro cuáles escoger. “Los dos as-censos, claro, pero por encima de todo el día de mi debut en Asobal. Llevas desde los siete años jugando a balonmano, soñando con eso, con llegar a lo más alto... Mis primeros minu-tos en la máxima categoría, con el equipo de mi ciudad, en casa, parando un penalti… Otro grito de rabia enorme. Eso no se olvida, me quedará para siempre”.

Emilio Vallado es una pieza fundamental en el engranaje del Juanfersa. Más allá de los minutos de competición, su trabajo como fisioterapeuta y su labor de veterano al frente del vestuario le convierten en un jugador clave para este equipo. Ante el Valladolid, demostró que está preparado para ayudar en los momentos más necesarios. “Yo siempre intento reivindicarme, demostrar que pueden confiar en mí porque siempre estoy preparado. Entreno para ello cada día y cuando llega la oportunidad trato de aprovecharla”.

Pero más allá de jugar o no, Vallado define así su actual rol en el equipo. “Mucha gente joven viene y me pregunta cosas. Cómo actuar ante una situación determinada, qué hacer… Creo que es lo que aporto y debo aportar: veteranía, experiencia. Si puedo ayudar a un chaval más joven, que juega más, y gracias a mi consejo lo hace mejor en la pista, yo me siento partícipe de eso. Somos un equipo y todos sumamos para lograr el objetivo. Estoy seguro de que el Juan-fersa seguirá en Asobal la próxima temporada y eso será gracias al trabajo de todos.”

“Yo siempre intento reivindicarme, demostrar que pueden confiar en mí porque siempre estoy preparado”

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