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MÁS SOBRE LA GRAFOLOGÍA DE LA FIRMA Y LA RÚBRICA
J. TUTUSAUSBOLETÍN NÚMERO 21, Segundo semestre 1998
Este artículo pretende ser un complemento y una ampliación del publicado en nuestro Boletín nº 13, pág. 113, cuya lectura conjunta aconsejamos para un mejor aprovechamiento, pues aquí procuraremos mejorar interpretaciones anteriores.
Es una verdadera lástima que la grafología sea conocida por la masa o el vulgo (con perdón) tan solo como la "adivinación de cómo es uno mirando la firma", gracias a la desafortunada forma de actuar de algunos pseudografólogos, que aparecen en T.V. con un exhibicionismo que implica el preconocimiento de la firma del personaje a analizar siempre complacientemente. Lo más lamentable es que quienes debieran reaccionar enérgicamente en contra de tal simplificación y desnaturalización de la grafología se mantienen enfadados pero pasivos, lo cual perjudica la Grafología seria.
La grafología de la firma no es ni fácil ni simplista, sino todo lo contrario, por cuanto si bien es fácil hallar un número determinado de estereotipos y prototipos en número y especificidad bien determinada, ello se complica cuando se le une el espaciamiento por colocación (lugar del folio o distancia del texto) y la concordancia o discordancia de la firma con respecto a las constantes del imprescindible texto.
Lo antedicho pone de manifiesto, así nos lo parece, que la restricción relativa del número de prototipos específicos debe, sin duda denotar la existencia de un gran número de interpretaciones posibles por cada característica en virtud del "Principio de polivalencia del signo".
El significado general de la firma, expuesto por diversos autores, no queda claro del todo en su aspecto teórico, produciéndose muchas contradicciones. Ello es debido, especialmente, a que la firma expresa varios parámetros y no tan solo uno. A continuación exponemos aquello que la experiencia y el estudio del tema nos parece más coherente y nuclear. De todas formas, no se pueden aplicar a toda firma todos los principios que a continuación se enumeran:
Significado general de la firma1. Es un gesto automatizado, inconsciente o semiinconsciente elegido y trazado con mucha libertad tanto expresiva como representativa.
2. La firma implica y contiene el nivel, calidad y fuerza de las aspiraciones, motivaciones y ambiciones íntimas del sujeto; o sea, lo que quisiera ser o parecer, según sea la expresividad y representatividad aludidas en el punto precedente.
3. La firma contiene actitudes, ideales, potencialidades, recursos y proyectos que pugnan por exteriorizarse (ver firmas "plusvalorantes").
4. La firma provee indicaciones de cómo utilizar el potencial indicado en el texto (Molander).
5. La firma es una síntesis del pasado (Pulver) de la relación yo- familia, o sea que se trata de una síntesis o bosquejo autobiográfico condensado.
6. La firma expresa, asimismo, la relación íntima en relación con el Yo ideal como contrafigura del Yo real, así como la manifestación de otros "yoes" (integración o desintegración del Yo).
7. La firma expresa traumas y situaciones que afectan al autoconcepto íntimo acompañados de un proyecto vital o esperanza de futuro para su superación, compensación o sobrecompensación.
Significación general de la rúbricaLa rúbrica es la expresión de mecanismos de defensa y autoprotección, del grado de sencillez intencional y del grado de autonomía y adaptación versus la deficiente implicación en el compromiso por temor a perder la seguridad o la evasión o evitación de la vida social, la angustia, el sentimiento de culpa y la consciencia de la realidad.
Significado general de la colocación de la firmaColocación en el folio (centraje, colocación a izquierda o derecha, etc)
Implica nivel de espíritu de lucha, coraje y decisión para afrontar la vida: lo imprevisto y las dificultades. Es índice, pues de madurez, autonomía y confianza en sí para tomar iniciativas, afrontar el porvenir y evolucionar mediante la autorrealización y adaptación al ambiente social superando la excesiva introversión o el estado edípico.
Colocación respecto al texto que antecede
Grado o nivel de acercamiento por necesidad de apoyo, excesiva confianza o en los casos extremos, intromisión (¿perjudicial?) o de alejamiento del ambiente exterior por frialdad, necesidad de independencia o gustos elitistas o temor a que la intimidad personal sea invadida por un excesivo gregarismo, lo cual puede llevar a cierto desdén oculto y distante.
Firma situada a la izquierda
· Desaliento acompañado de falta de metas par el futuro. Conformismo.
· Decepción, pesimismo, descorazonamiento.
· Temores pueriles.
· Neurosis obsesiva.
· Autojustificación para no actuar.
· Hipertrofia de la afectividad, la cual mediante un corto-circuito imprevisto puede llevar al suicidio (Pulver).
Firma colocada en el centro
· Paréntesis a superar en el proceso de evolución, maduración o individuación.
· Ambivalencia por conflicto entre independencia y riesgo, versus prudencia y seguridad.
· Sociabilidad que se contenta con ser un espectador reservado o ejercer un autocontrol (rígido- obsesivo) para compensar sentimientos de inferioridad y/o abstenerse de cruzar el Rubicón.
· Dificultad para autorrealizarse; hay un paréntesis abierto pero no se sabe cuando se cerrará: acercamiento de la firma hacia la derecha del folio.
· Autosuficiencia, exhibicionismo, si "grande".
Congruencia y concordancia de la firma- texto
En este apartado resumimos, modificamos y sintetizamos, en lo posible lo dicho en nuestro Boletín nº 13.
Uno de los factores más indicativos respecto a la incongruencia firma- texto es la legibilidad (claridad) Ilegibilidad (confusión).
Firma legible igual que el texto
· Sentido de responsabilidad.
· El sujeto se manifiesta abiertamente.
· Transparencia para actuar con nobleza.
· Franqueza.
· Claridad intenciones y coherencia entre palabras y hechos.
Firma ilegible versus texto claro.
· Evasión de los compromisos.
· Represión de lo que siente.
· El sujeto no se muestra tal como es.
· Temor de no ser comprendido o aceptado como es.
· Franqueza aparente, pues guarda en secreto muchas facetas internas.
· Inestabilidad.Firma congruente con texto
· Personalidad integrada unitariamente.
· Coherencia en la relación con los demás.
· Aspiraciones íntimas coincidentes con las externas.
· Buena adaptación social.
· Buen autoconcepto.
· Naturalidad exteriorización.
· Formalidad.
· Autorrealización socio-laboral.
Firma incongruente con texto.
· Falta de nivel de integración e identificación.
· Ambivalencia.
· Diferencias en la forma de considerarse a sí mismo.
· Yo débil en conflicto con el Yo social.
· Compensación o sobrecompensación complejo inferioridad.
· Autoimagen tipo máscara.
· Conducta inconstante o incoherente.
· Insatisfacción profesional y difícil adaptación.
Gran distancia entre nombre y apellido
· Luchas éticas entre el bien y el mal.
· Situación de tensión entre el padre y la madre.
· Deseo ambivalente de ser niño y adulto a la vez.
(Esta situación produce reacciones coléricas contra la tensión y angustia generadas).
Valorización de la firma
Firma más grande que texto
· Deseo de alcanzar una meta ambiciosa. Deseo de ser alguien.
· Compensación posible sentimiento de inferioridad.
· Aptitudes puestas al servicio de la ambición de éxito y el afán de ganar.
· Necesidad de ocupar el centro del escenario.
· Fortificación de un Ego frágil. (Pinon).
· Autoconvencimiento del valor propio (se puede sentir héroe, líder infravalorando los obstáculos).
(La firma menor que el texto puede ser índice de descontento profesional o el repliegue orgulloso de un narcisismo herido).
Firma ascendente
· Entusiasmo que alimenta una ambición abnegada.
· Aspiraciones no siempre realistas.
· Insatisfacción por inconformismo.
Firma trepadora
· Ambición desmedida sin metas definidas. Deseos de cambiarlo y reformarlo todo como forma de superación personal.
· Insatisfacción permanente por imposibilidad realización de las utopías o por la insuficiencia de lo conseguido.
· Fuertes ambiciones en diversas direcciones y áreas (el sujeto actúa con cierta desorientación).
Otros elementos "valorizantes" podrían ser la presión, los lanzamientos, los rasgos cruciales, la rapidez, la claridad, la simplificación de la rúbrica, etc.
Firma abstracta (Monnot)
· Búsqueda evolutiva de originalidad. Creatividad.
· Orientación universalista hacia el porvenir.
· Sentido humanista del progreso.
· Deseo de edificar el futuro.
Firma en dos planos (nombre sobre apellido)
· Inconformismo anticonvencionalista.
· Deseo de ser el propio jefe de sí.
· El s. no admite imposiciones.
· Radicalismo; oposicionismo al padre.
· Rebelión que no le facilita hallar su lugar y propósito.
Punto tras la firma
· Puntualización mediante la última palabra dicha a causa de desconfianza.
· Puntualización de las obligaciones de los demás y las propias.
· Saber poner punto final en una conversación sin ser hiriente.
· Mecanismo de anulación de lo hecho o dicho no dando lugar a las críticas o réplicas ajenas.
· Deseo de acabar ¿suicidio?.
· Pesimismo que mueve al sujeto a tomar precauciones y hacer las cosas con cierto perfectismo.
(No hemos tenido ocasión de comprobar que este aditamento inútil de tipo obsesivoide se pueda interpretar como "actitud dictatorial como hemos visto afirmar en algún caso).
Sobre la rúbricaRúbrica que tacha la firma.· Inadaptación. Inmadurez.
· Insatisfacción y descontento de sí.
· Deseo de superar ciertos “handicaps”.
· Inseguridad; cree que lo que piensan los demás es superior.
· Incompatibilidad con el ambiente familiar que le aparta de los demás, ¿problemas con el padre?
· Descuido de sí mismo.
Rúbrica envolvente.
· Esta manifestación gráfica depende bastante de la personalidad clínica en que se de. Su valoración no es siempre fácil (simbólicamente presenta similitudes con los óvalos aplanados “dodues”):
· Aislamiento de los demás que no excluye la necesidad de afecto.
· Ansia de libertad frenada por la dependencia materna, la inseguridad y el egoísmo.
· Imposición de sus deseos de niño mimado en un ambiente íntimo.
· Conservación infantil de lo propio.
· No admisión de intromisiones ajenas. El sujeto pone barreras contra lo inesperado.
· Acusa a los demás porque no sabe quién puede perseguirle (Pulver).
Firma entre raíles, generalmente ascendente
· Espíritu de dominio (C.Jamin).
· Aislamiento de los inoportunos (R.Trillat). "Fortificación".
· Búsqueda de puntos de apoyo y barreras protectoras para no desviarse de sus propósitos y perseverar en ellos.
· Avance inflexible y egoísta hacia las metas.
Rúbrica en zig-zag "hacia abajo"
· Coraje.
· Réplicas fulgurantes. Buen humor.
Rubrica con trazo final descendente en vertical
· Defensa de ideas y realizaciones concretas.
· Capacidad de lucha y mando exigente.
· Coraje en las afirmaciones con capacidad de contrarréplica.
· Deseo de comunicar las convicciones.
Rúbrica que subraya en la parte superior
· Protección contra las ideas ajenas y ocultación de las propias.
· Protección contra alguna "fuerza superior temible".
Rúbrica que subraya por debajo de la firma
· Autocontrol de la instintividad.
· Compensación autoestima insuficiente.
· Deseo de ser notado
· Deseo de resaltar la personalidad.
Rúbrica con ángulos en la parte izquierda
· Autoagresión (descuido en lo que toma, bebe, etc)
· Autocrítica y fuerte responsabilización.
· Actuación en contra de sí mismo.
· Resentimiento manifestado astutamente.
· Problemática intrafamiliar (¿la madre?).
Firmas fetales
· ¿Esquizoidía?
· Búsqueda de seguridad.
· Dependencia. (posibilidad de aborto habido)
Firma en forma de "Bola o Balón" inicial básicamente
· Exageraciones insinceras. Promesas falaces.
· Charlatanismo. Estafa.
· Fatuidad. "Bluff".
(El sujeto habla mucho y trabaja poco).
La sobriedad en la rúbrica indica generalmente sencillez, seguridad, conciencia de la propia capacidad y presentación social natural (o desprejuiciada). El exceso de rúbrica implica cierta medida de intriga para convencer o entrometimiento lesivo.
Con esta aportación confiamos haber suplido las carencias de nuestro artículo del Boletín nº 13, proporcionando a nuestros alumnos, una visión más profunda de la riqueza interpretativa de la firma, con lo cual nos consideraríamos satisfechos.
EL EQUILIBRIO PSICOLÓGICO A TRAVÉS DE LA ESCRITURA
J. TUTUSAUS BOLETÍN NÚMERO 10, Primer semestre 1993
Los dos grandes de la Grafología, Crépieux-Jamin y Klages, introdujeron, respectivamente, las nociones de "Armonía" y "Nivel de forma" para la apreciación global de lo negativo, positivo y equilibrado en la escritura. Estas nociones son el resultado convergente de unas determinadas y reducidas características gráficas de valor cualitativo que, asimismo, podrían ser evaluadas individualmente. La apreciación de dichas nociones de "Armonía" y/o "Nivel de forma", utilísimas por cierto, tienen los siguientes inconvenientes: 1.Pretenden dar "negatividad" o "positividad" a todos los aspectos del grafismo en
sus interpretaciones. Se trata de alcanzar un sistema interpretativo totalitario. 2.Las escrituras "armónicas" o "rítmicas" (nivel alto de forma) o "inarmónicas" o
"arítmicas") no son tan frecuentes; queda un estrato amplísimo de escrituras que se hallan en el término medio, en el que parece hallarse mejor el equilibrio de la personalidad.
Respecto al primer punto, hay que añadir que los puntos fuertes o positivos pueden lograr la recuperación y superación de los puntos negativos o débiles, por tanto, la interpretación según el ambiente gráfico debe ser siempre muy matizada. Respecto al segundo punto, hay que convenir con Enrique Rojas que desde el punto de vista objetivo y científico la referencia más exacta al término normal o anormal es el promedio. No obstante, las escrituras "promedias", o sea que se hallan en la polaridad intermedia de "armonía-ritmo" adolece del defecto de cualquier generalización; así Maslow indica: "...Parece ciertamente cada vez más claro que aquello que en psicología calificamos de "normal", es en realidad una psicopatología del promedio, tan poco dramática y tan extendida, que ni siquiera nos damos cuenta de ella normalmente". Toda escritura presenta componentes gráficos mensurables y objetivables. Por todo ello, grafólogos notables de la "escuela italiana" no tienen necesidad de utilizar la noción de "armonía" o "ritmo" como entidades totalitarias, sino como características simples con diferentes matices. También los grafólogos alemanes modernos sustituyen el "ritmo de forma" por el grado de rigidez de Pophal o el ritmo de movimiento, forma y espacio de Heiss. Si bien estas nociones todavía son bastante globalistas, así autores como Mme. Peugeot y el propio Marchesan establecen las especies de "floja o enervada", "elástica" o "tensa", etc. Todavía se puede perfeccionar más la búsqueda del equilibrio o promedio de las escrituras utilizando parámetros objetivos, no globalistas, para evaluar la mayoría de las escrituras comunes que se presentan en la práctica grafológica cotidiana. Se trata de hallar un índice de estabilidad, normalidad y equilibrio tanto mental como caracterial en el orden grafológico. Los elementos gráficos promedios, interpolares o equilibrados no se inspiran en los módulos de la escritura caligráfica ni coinciden necesariamente con ellos. Los "módulos de equilibrio" que vamos a proponer son válidos para escrituras altamente personales y deben señalar la media. Por ejemplo, una escritura puede ser vertical, rectilínea, pausada y sobria, corresponden a una escritura promedia ya que no es
invertida, tortuosa, precipitada o complicada, por ejemplo. Un "módulo de equilibrio" se determina así: por ejemplo, entre una escritura lenta y otra precipitada existe el módulo de pausada. El conjunto de todos los módulos posibles, que se detallarán más adelante, proveen entre sí interpretaciones "inter-reforzante" ya que son, por otra parte, coherentes, homogéneas y virtualmente coincidentes entre sí. El conjunto de módulos de equilibrio hallados en una escritura determinada formarían la noción de "Equilibrio General" de fácil interpretación grafológica y, quizás, de más práctica utilización que las nociones de "Armonía" o "Nivel de forma". Hasta aquí hemos definido parcialmente la noción de equilibrio grafológico, por ello es necesario ver si armoniza con otras definiciones de equilibrio posibles. La Enciclopedia Larousse define el equilibrio como "un estado de reposo resultante de la actuación de fuerzas que se limitan, contrarrestan o moderan unas a otras". La noción de salud va ligada a la noción de equilibrio. Para Allport el motor del equilibrio es la personalidad que posee, dice, un empuje dinámico superior a la pálida función de equilibrio homeostático. El equilibrio, pues, no es estático, sino un estado tensional en el que se concilian los opuestos. Para Maslow, la salud se basa en un cierto estado de tensión y añade: "...es peligroso para la higiene mental dar por supuesto que lo que el hombre necesita ante todo es equilibrio homeostático, o sea, "un estado sin tensiones". El hombre necesita una dinámica espiritual dentro de un campo de tensión bipolar (subrayado nuestro) en el cual un polo viene representado por el significado que debe cumplirse y el otro polo por el hombre que debe cumplirlo". Así pues, el equilibrio no es estático, aunque el mejor equilibrio se gana, según Jung, cuando el hombre equilibra sus conflictos, estando por ello más cerca de la paz y la tranquilidad. La paz interna no es en modo alguno una situación estática. Es importante el estudio de la noción de salud/equilibrio ya que, hasta cierto punto es lógico que se dedique casi todo el interés en la enfermedad. En las obras completas de Freud se encuentran cuatrocientas referencias a la neurosis y ninguna a la salud. Abraham H. Maslow llegó a la conclusión de que los psicólogos deberían preocuparse del estudio de los seres humanos sanos y normales como en general hace el grafólogo. A continuación resulta interesante para el grafólogo seguir el pensamiento de los más prominentes grafólogos respecto al equilibrio cronológicamente. El abate Michon, creador del término "grafología" y primer grafólogo sistemático, dijo: "El alma humana, según el resultado de los estudios grafológicos, es una combinación de fuerzas. Toda fuerza es por sí ciega. La dirección dada a la fuerza es lo que hace al ser moral y responsable". "La fuerza contraria hace de contrapeso y sirve para mantener el equilibrio". El médico-grafólogo Streletski decía al respecto: "El equilibrio es la mezcla en proporciones convenientes de las diferentes disposiciones afectivas y de las diversas aptitudes intelectuales, que, al solidarizarse, se hacen mutuamente valer sin perjudicarse unas a las otras". Para Annia Teillard, el equilibrio es una sucesión constante de fuerzas negativas y positivas, o lo que es lo mismo, nuestra vida oscila entre dos polos: la progresión y la regresión de la líbido".
El prestigioso erudito J. Ch. Gille del Canadá dice sobre el equilibrio: "El equilibrio armónico es el resultado de la acción de la inteligencia y de la voluntad conjuntas que penetran en el arca de los instintos a fin de dominarlos y utilizarlos como fuerza consciente". La malograda grafóloga alemana Roda Wieser expresaba: "El equilibrio, más que un estado, es un proceso o conducta fundamental que busca una dirección ascensional hacia el Agape". La salud y el equilibrio psíquico o mental podría definirse en las siguientes proposiciones, ya que otra forma de definición resulta poco concreta y asaz difícil por lo abstracta: Parámetros de la salud psíquica y mental. La normalidad 1.Percepción superior de la realidad. 2.Aceptación de sí, de los demás y de la naturaleza. 3.La plenitud de la libertad individual (Ey). 4.Espontaneidad creativa a través de la riqueza de reacción emocional. 5.Proporción entre sentimiento y estímulo (excitabilidad normal). 6.Equilibrio entre "querer" y "poder" o entre lo que se posee o ambiciona. 7.Integración de los impulsos físicos, emocionales e intelectuales. 8.Armonía de los elementos masculino-femenino. 9.Aptitud para experimentar reacciones afectivas con flexibilidad para evolucionar
los inevitables conflictos hacia soluciones aceptables. 10.Ausencia de rasgos psicopatológicos o anomalías psíquicas. 11.Armonía entre las instancias del aparato psíquico Ello, Eo, Super-Yo, que permite
el manejo adecuado de los diferentes procesos psíquicos conscientes. 12.Habilidad social para mostrarse adecuadamente sin agresividad y sin
inhibiciones (E. Rojas). 13.Equilibrio perfecto entre el poder de impulsión y poder de inhibición. 14.Aproximación entre Yo ideal y Yo personal para mejor adaptación a las
frustraciones. 15.Utilización de la supresión y libertad personal para volver la espalda al
inconsciente y preconsciente sin necesidad de la represión. 16.El interés social integrado en el estilo de vida y manifestado en forma de
cooperación, sentimiento de posesión y participación con los otros en el bien común.
17.Ambivalencia armónica entre a)La energía consciente e inconsciente dinámica, vital, espontánea y
progresiva, y b)La tendencia inhibidora, restrictiva y "racional" para permitir superar los
obstáculos en vez de ser una tendencia inhibidora obstaculizante que da lugar al pesimismo, los complejos y la introversión mórbida.
18.Control mutuo de la sensibilidad y la actividad que permiten generar voluntad o fuerza activa que vence con decisión las resistencias internas y externas.
19.Superación de la ambivalencia por elección del resultado positivo de las valoraciones contradictorias (el sujeto quiere menos lo malo y odia menos lo bueno).
20.Unificación de la vida interior que permite superar las dificultades externas para alcanzar la unificación con la vida social y las circunstancias exteriores.
21.Uso alternativo de frenos y aceleraciones que mantienen el esfuerzo y la dirección de las diversas iniciativas.
22.Interacción adecuada de las reacciones entre la energía vital sostenida y las presiones más o menos intensas del exterior.
23.Tensión normal que descarga una cantidad equivalente al doble de la energía retenida (K. Roman).
24.Metas y propósitos exteriores y objetivos que hacen converger todos los elementos dispares.
25.Adaptación flexible al principio de realidad y un dominio del principio de placer. 26.Campo de conciencia clarividente de amplitud necesaria que permite la
maduración afectiva, la disciplina, la firmeza moral, la constancia de propósitos, la reflexión, la lealtad, la iniciativa, la sinceridad y la capacidad de autocrítica y rectificación.
27.Compensación entre virtudes o defectos y las correspondientes anti-virtudes y anti-defectos (por ejemplo, autoritario-condescendiente, egoísta que sabe renunciar, vanidoso que no hace ostentación de lo que sabe) que dan lugar a los defectos de las virtudes y a las virtudes de los defectos.
28.Resistencia a las frustraciones obligadas de la vida real. 29.La capacidad de entrega oblativa y altruista hacia los demás, las causas
elevadas, humanistas, religiosas, científicas o culturales, etc. 30.Campo de conciencia de amplitud normal que permite la adecuada
concentración y dispersión de la atención, la suficiente visión de lo global y lo particular, la visión existencial que permite y facilita la adaptación flexible, el equilibrio entre exigencia y tolerancia y la capacidad de improvisación necesaria.
31. La capacidad del Yo para pasar de un mecanismo de defensa a otro (Freud). 32.Facilidad para interesarse en diversas esferas sin sobrevalorar las propias
posibilidades. 33.Contrapeso suficiente intelectual o cultural de las deficiencias vitales o
perturbaciones profundas de la personalidad. Desde un punto de vista fisiologista, hay que tomar en cuenta el cerebro como control de cualquier hecho psíquico. El cerebro humano se distingue del animal por el desarrollo de la zona prefrontal que hace que la relación humana sea profunda. La zona prefrontal está conectada con el autocontrol de sí mismo, el equilibrio del humor, el sentido de libertad y elección y la reflexión del comportamiento, el sentido del deber y la previsión del porvenir. Paul Chauchard va más lejos: "La neurofisiología confirma la necesidad de reflexionar acerca del valor humano de nuestros actos, demostrándonos que el amor al prójimo es la receta de un buen equilibrio cerebral, la mejor utilización del lóbulo frontal, ese supercerebro humano". "Las preocupaciones morales no son ajenas a la neurofisiología, porque ésta confirma la norma moral sobre la base del equilibrio cerebral". Chauchard viene a decir que la contención por decisión propia o moral que exige algún sacrificio no produce neurosis, sino que activa la función ética hacia valores que dan significado a la vida y dan lugar a la posesión de una "cosmovisión superior". También la psicología de la forma concuerda bastante con los puntos de vista de la grafología al definirse como la percepción de aspectos equilibrados, estructurados, según las leyes de armonía, regularidad, homogeneidad y sencillez. Estas formas que proceden de la naturaleza misma de las cosas y de las propiedades del espíritu se plasman en el grafismo escriptural. A continuación se presentan las principales polaridades, a efectos prácticos, que podrán ser analizados a través del estudio de los 29 "módulos de equilibrio" gráfico: CONSTRICCIÓN versus LIBERACIÓN
RETRACCIÓN " DILATACIÓN
INTROVERSIÓN " EXTROVERSIÓN
ANIMA " ANIMUS
INHIBICIÓN " IMPULSIÓN
PASIVIDAD " ACTIVIDAD
INESTABILIDAD " ESTABILIDAD
DESINTEGRACIÓN " INTEGRACIÓN
INTUICIÓN " PERCEPCIÓN
PENSAMIENTO " SENTIMIENTO
Finalmente, el equilibrio ideal entre las mencionadas polaridades conduce al estado de "individuación" de Jung, cuyas características principales son: sensación de plenitud interna, armonía consigo mismo y con los demás, objetivación valorativa de la realidad y energía creativa, etc. Para plasmar la noción que denominamos Equilibrio gráfico aportamos a continuación los 29 "módulos de equilibrio" que contienen la norma interpretativa para los demás elementos gráficos negativos o desequilibrantes. CUADRO ESQUEMÁTICO DE LOS "MÓDULOS DE EQUILIBRIO" Constricción EQUILIBRIO Liberación 01. MOVIMIENTO
Lenta. Retardada PAUSADA/CADENCIADA Rápida. Acelerada. Penosa. Estática. Inhibida. DEXTRÓGIRO/FLUIDA Precipitada. Agitada. Dinamó- Vacilante. Sacudida. Sus- gena. Impulsada. pendida. Retocada. Temblo- rosa. Sinistrógira. Monótona. Automática. MATIZADA Espontánea. Ágil. Rítmica. Inc. paralela. Cambios de OSCILANTE Inc. irregular. Incl. "contorsio- estilo. nada". Rígida-regular FLUCTUANTE Irregular. Discordante. 02. DIMENSIÓN DE PROFUNDIDAD
Pres. irregular. Desplazada FIRME/SUAVE Apoyada. Ligera. Punt. firme. Rígida. Tensa. NATURAL/ELÁSTICA Laxa, floja, enervada. Convexos a la izquierda. FLEXIBILIDAD/PALOTES Convexos a la derecha. 03. REGULARIDAD/PROPORCIÓN
Rígida de tamaño. REGULAR ZONA MEDIA Irregular Simetría. Hampas/jambas PROPORCIONADA Mayúsc. despropor. Hampas altas. cortas. Sobrealzada, jambas largas. Zona única. PROPORCIONADA Periféricos descompensados: pro- Z. M. pequeña TRIZONALMENTE longada.
Tildes, cortos, atrás. o TILDES Lanzada ausentes PROPORCIONADOS
Iniciales largos INICIALES Iniciales ausentes; ataque directo. BREVES/AUSENTES
Finales podados. FINALES/BREVES Finales largos; ascendentes o des- Finales gruesos o finos. cendentes. 04. DIMENSIÓN VERTICAL
Pequeña. Minuciosa. Empe- MEDIANA Grande. Creciente. queñecida. Gradiolada. Margen izq. ausente. ORDENADA Invasora. Margen der. ausente. Grandes márgenes. Margen Márgenes irreg. Compacta. der. ancho. "Isolée". Interlínea ancha o irreg. INTERLÍNEA JUSTA Interlínea estrecha. Confusa. 05. DIMENSIÓN HORIZONTAL
Óvalos estrechos y/o OVALIZADA Óvalos redondos o aplanados. abollados. Estrechada. ESPACIO INTERLETRAS Extendida. Adosada. JUSTO
Desligada. Fragmentada. AGRUPADA Combinada. Disociada (óvalos). Hiperligada. Roturas/empalmes. Invertida. "Contorsionada". VERTICAL Tumbada. Rectilínea rígida. RECTILÍNEA FLEXIBLE Líneas irregulares. Descendente. Ascendente. Puntuación y tildes cen- PUNTUACIÓN Y TILDES Puntuación y tildes irregulares u trados, precisos o inútiles. PRECISOS omitidos. Muy espaciada. Esp. irreg. AIREADA No espaciada interpalabras. 06. FORMA
Adornada/complicada. SENCILLA/SOBRIA Simplificada. "Maigre". Enroscada. Rebuscada. Clara lenta. CLARIDAD Imprecisa. Ilegible. Angulosa/seca. Arcada. SEMIANGULOSA Curva. Guirnalda. Escr. "en superficies". Caligráfica. Regular. ESTRUCTURADA/CILÍN- Filiforme. Inacabada. DRICA
Estereotipada. Constante. HOMOGÉNEA Inconstante. Polimorfa. MÓDULOS DE EQUILIBRIO
1. MOVIMIENTO
11. Pausada. Vaivén acompasado; perfiles y plenos cadenciados. Intelecto. Capacidad de observación que facilita la buena memoria y la precisión del
pensamiento. Actividad/voluntad. Actividad sostenida, metódica, precisa, clasificativa y paciente.. Constancia de sentimientos y deseos. Carácter . Comportamiento responsable y sereno. . Tolerancia hacia los demás. 12. Dextrógira/fluida. Escritura progresiva, impulsada hacia la derecha mo-deradamente con cierto dinamismo, sin descentrarse ni destruirse. Intelecto . Rapidez de la atención y del aprendizaje. . Confianza en los propios recursos. Actividad/voluntad. Rapidez decisiones y visión clara de los objetivos a alcanzar. . Dinamismo. Carácter . Adaptación social espontánea. Sentimientos . Expresividad fluida y oblativa de los sentimientos. 13. Matizada. Se trata de la escritura vibrante con desigualdades pequeñas, cualitativas y armónicas que se manifiestan preferentemente en zona media, en contraposición a la monotonía o regularidad automática. Son irregularidades matizadas de tamaño y forma. Intelecto. Variabilidad y versatilidad de aptitudes intelectuales y sentimentales.. Sensibilidad intelectual intuitiva para sentir profundamente variadas emociones,
renovar constantemente las ideas y captar los matices.. Asociación de ideas que permite la evocación imaginativa, la combinación de
imágenes y la creación de metáforas. Carácter. Adaptación a las situaciones variadas mediante la diversidad de reflejos psíquicos. . Comprensión empática y psicológica de los demás.
Emocionalidad. Regulación de las emociones, impulsos y frenos mediante la liberación natural y la
fluctuación fluida de las energías. . Vivacidad en la expresión e interiorización de las emociones. 14. Oscilante. Se trata de una vibración y desigualdades matizadas en la inclinación del eje central de la escritura. Son suaves e imperceptibles oscilaciones. Intelecto. Observación atenta de los matices que facilita los juicios imparciales.. Ductilidad mental para comprender todo tipo de relaciones, percibir los estímulos y
la fluctuación entre ideación y realización. Voluntad. Capacidad para decidir flexiblemente captando las ventajas e inconvenientes. Carácter. Comprensión de las intenciones ajenas que permite evitar los choques y buscar la
concordia con los demás.. Habilidad para convencer o lograr la colaboración ajena, aconsejar o estimular. . Adaptación a lo nuevo por captar todos los aspectos del problema. 15. Fluctuante. Vibrante en la base letras en las palabras. Se parece a la especie "scattante" de la escuela italiana. Intelecto. Vivacidad en el pasaje de una idea a otra y de un sentimiento a otro.. Reacción rápida de las percepciones, asociaciones de ideas y del sentimiento que
facilita una expresividad espontánea y rápida de ideas fecundas. 2. DIMENSIÓN DE PROFUNDIDAD
21. Presión firme-suave. Es una presión de intensidad normal, rítmica entre plenos y perfiles, sin irregularidades (mazas, aceramientos, engrosamientos o desplazamientos). Actividad/voluntad. Capacidad productiva por liberación constante y gasto regular de una producción de
energía vital sostenida.. Voluntad firme, constante y regular. Reactividad. Satisfacción afectiva por sublimación de los conflictos entre líbido y emociones.. Reacción equilibrada a causa de la proporción entre causa y efecto, la reflexión y
acción entre espíritu y materia y rudeza y delicadeza. Carácter. Autocontrol por socialización (sentido de conciencia colectiva) adecuada de la
reactividad, tensiones, excitaciones, apresividad e instintividad.. Resistencia a la impresionabilidad o sugestionabilidad ambiental.. Autenticidad, confianza y seguridad en sí mismo. 3. TENSIÓN
31. Natural/elástica. Es una escritura ágil, distendida, sin rigideces ni precipitación, laxitud o imprecisión. Se corresponde con el grado III de Pophal. Intelecto. Fácil funcionamiento de los mecanismos de aprendizaje. Actividad. Actividad concentrada a la vez que libre, mediante una equilibrada utilización de
energías. Emocionabilidad. Estabilidad emocional.. Normal desenvolvimiento de las emociones y reacciones: reactividad psiconerviosa
adecuada.. Resistencia a la fatiga, la frustración y a las influencias negativas.. Rapidez liberación del sentimiento sin tensiones, ansiedad y temor. Carácter. Adaptación razonable, no exenta de firmeza a los problemas nuevos o imprevistos.. Firmeza para resistir o impulsar los deseos y decisiones.. Exteriorización animada y natural, sin conflictos con el entorno.. Confianza en sí mismo, en los demás y en la vida.. Campo de conciencia ancho; tolerancia y convicciones no absolutas (armonía entre
deber formal y tolerancia).. Armonía entre razón y sentimiento, resistencia y adaptación y entre deber formal y
tolerancia. 32. Flexibilidad palotes. Los palotes de la zona media o inferior se doblan formando concavidad en la parte derecha. Intelecto. Ductilidad mental para aceptar las ideas ajenas. Carácter. Adaptación fácil al ambiente (sumisión, obediencia).. Tolerancia, condescendencia y facilidad de reconciliación.. Confidencialidad activa y pasiva.. Sentido de responsabilidad. 4. REGULARIDAD Y PROPORCIÓN
41. Regular zona media. Se trata de una regularidad normal, no forzada; ni rígida ni monótona. Actividad. Actividad ordenada, metódica y responsable. Emotividad. Autocontrol sobre la emotividad, la impresionabilidad de las percepciones, los
impulsos y la imaginación.. Estabilidad emocionalidad.. Afectividad sometida a la exigencia de los principios, la razón y la voluntad. Voluntad. Constancia hábitos, deseos y propósitos.
Carácter. Resistencia a la frustración y los choques afectivos, superando las dificultades y
obstáculos.. Coherencia entre palabras, principios y hechos.. Fidelidad a los principios éticos.. Autoconcepto estable.. Disciplina y autoexigencia que transciende a los demás.. Búsqueda y conservación de la seguridad.. Integración del pensamiento, la imaginación y la acción por la canalización
adecuada de la vida afectiva.. Adaptación mediante la sujeción y respeto a las reglas, convencionalismos,
principios y normas al "establecimiento".. Super-Yo adecuado que controla y canaliza las fuerzas inconscientes hacia objetivos
prácticos, sociales, artísticos o éticos. 42. Proporcionada. Mayúsculas proporcionadas respecto a las minúsculas y a sí mismas. Ausencia de sobrealzamientos, etc. Intelecto. Juicios objetivos sobre la realidad.. Valoración legítima del Yo, las propias posibilidades y aspiraciones. Carácter. Compensación adecuada de los complejos de inferioridad mediante la mobilización
de energías dinámicas auto-realizadoras.. Adaptación a las responsabilidades, el orden y a la dependencia de los demás.. Autocrítica y autocorrección adecuadas.. Equilibrio funcional entre las emociones y afectos.. Proporción entre las motivaciones y la realización. Voluntad. Estabilidad de la voluntad mediante el control de las pasiones. 43. Proporcionada trizonalmente. La proporción entre hampas, zona media y las jambas se estima en la proporción 2-1-2. Esta proporción implica que tanto las hampas como las jambas no sean demasiado largas o cortas en relación con la zona media y entre sí. Intelecto. Armonía entre intereses intelectuales ideales, socio-afectivos realistas y materiales
o prácticos.. Imaginación equilibrada por la realidad concreta y objetiva (realismo teórico-
práctico).. Objetividad global (material y espiritual). Adaptación. Adaptación de las aspiraciones al potencial, solidez y estructuración del Yo.. Adaptación a las realidades ideales, concretas y psico-físicas mediante la limitación
realista de aspiraciones y ambiciones (impulsos de "querer ser") por el conocimiento de los propios límites (super-Yo normal y equilibrio autoestimativo).
. Integración suficiente para organizar la vida cotidiana y superar las dificultades y responsabilidades, concentrando la actividad con perseverancia.
. Armonía entre el deseo ideal y el instinto que permite la productividad en los planos intelectivos y relacionales.
. Confianza en sí mismo, tranquilidad interna y satisfacción autoafirmativa.
. Dominio de las impulsiones y canalización de la energía en pro de las necesidades centrales, sociales, afectivas y cotidianas.
44. Tildes proporcionados. Barras "t" de longitud normal, no cortas o hipertrofiadas ni excesivamente largas. Intelecto. Valoración adecuada de las propias ideas.. Objetividad de las proyecciones volitivas.. Capacidad para comunicar el propio pensamiento.. Seguridad intelectiva que facilita el aprendizaje. Reactividad. Autocontrol de la verbalidad, la impaciencia, la fogosidad y la ansiedad (paciencia). Voluntad. Confianza en las decisiones y propósitos por poseer fuerza e iniciativa para vencer
el temor a los obstáculos.. Capacidad suficiente de mando, lucha y defensa. 45. Iniciales breves o ausentes Carácter. Sencillez en la intencionalidad y comunicación.. Ambiciones comedidas.. Independencia y desapego del círculo familiar, los recuerdos del pasado y de
principios de educación rígidos.. Decisión o iniciativa sin ataduras o apriorismos.. Seguridad en sí mismo.. Liberación del narcisismo infantil. 46. Finales breves Intelecto. Juicios objetivos en el modo de pensar por temor a equivocarse. Reactividad. Autocontrol de la expresión, la espontaneidad y los impulsos. Carácter. Mesura, consideración y tacto en los modales y costumbres.. Sentido común de la economía.. Prudencia en las decisiones.. Fidelidad interpretativa mediante la concisión y precisión de los conceptos. 5. DIMENSIÓN VERTICAL
51. Tamaño mediano. Se trata del tamaño (altura) del cilindro de la zona media (calibre), cuya altura puede ser de 2,5 mms. alrededor. Intelecto. Imaginación controlada.. Realismo objetivo en las observaciones y valoraciones de los eventos y los aspectos
más sobresalientes y substanciales de las cosas.
Reactividad. Respuestas y reacciones proporcionadas al estímulo.. Ponderación entre sensaciones y emociones y entre ideas y acciones. Voluntad. Querer y poder concordantes. Carácter. Valoración justa de sí mismo por el conocimiento de las propias limitaciones.. Sentido del Yo justo al considerar las propias posibilidades y los derechos a que es
acreedor. 52. Ordenada. Márgenes izquierdos ordenados y regulares, buena disposición general de la página y espacios internos regulares. Intelecto. Criterios evolucionados y/o amplitud de miras. Reactividad. Estabilidad y autodisciplina de las emociones (hábitos ordenados).. Autocontrol y reflexión consciente en las decisiones (prudencia). Actividad. Sentido del orden, la puntualidad, la previsión y la organización del pensamiento y la
acción. Carácter. Confianza en sí mismo.. Comportamiento considerado.. Sentido del deber y la responsabilidad.. Autonomía personal por independencia del círculo íntimo con capacidad para vivir y
trabajar en grupo.. Adaptación al orden social establecido. 53. Espacio interlíneas justo o suficiente Carácter. Sentido de la selectividad moderada para admitir a los demás en la propia
conversación o amistad.. Sentido ético en el acercamiento hacia lo moralmente sujeto a reparos por causa del
Super-Yo crítico.. Adaptación sin involucrarse en el gregarismo, los gustos comunes y la fácil
concesión de confianza. 6. DIMENSIÓN HORIZONTAL (anchura y proyección hacia la derecha) 61. Ovalizada. Se trata de óvalos algo más altos que anchos, sin resultar ni estrechos ni aplanados. Intelecto
. Equilibrio entre la capacidad de profundizar todos los aspectos internos y la comprensión instintiva y unilateral de las cuestiones.
. Equilibrio entre la capacidad científica y la actividad práctica y concreta.
. Asimilación con interés afectivo de lo concreto y actual. Actividad. Equilibrio entre el máximo de gasto de energía propulsiva y un mínimo de dispersión
(eficiencia). Carácter. Vida afectiva plena acompañada de sentido de responsabilidad.. Confianza en sí mismo. 62. Espacio interlíneas justo. El espacio es normal cuando su ancho equivale a un óvalo promedio de altura entre letras. Intelecto. Juicios mesurados, realistas y objetivos.. Aceptación discriminada de la opinión e ideas de los demás (equilibrio entre
escepticismo y credulidad).. Valoración ecuánime y objetiva de las razones ajenas. Carácter. Valoración ecuánime y objetiva de las exigencias y derechos propios con respecto a
los ajenos y viceversa.. Sentido de la equidad y la justicia en las relaciones personales o afectiva.. Intereses personales equitativos por equilibrio entre avaricia y liberalidad.. Armonía entre el amor a la compañía numerosa y la familia. 63. Espaciada entre palabras. El espacio mínimo entre palabras, que puede considerarse normal, es el equivalente al ancho horizontal de 2,5/3 óvalos promedios. Por debajo de esta anchura el espacio es insuficiente, principalmente si hay dinamismo en la escritura. A partir de 6 o más óvalos, principalmente si la escritura es tranquila, traduce una inhibición morbosa. Intelecto. Juicio que valora objetivamente los actos propios mediante la actividad crítica y
autocrítica previa y automática.. Visión de conjunto de la realidad en un marco de resistencias y consecuencias.. Sentido crítico y autocrítico para considerar y aminorar las sospechas, insidias y
desconfianzas y aliviar la problemática interna, las emociones dolorosas y los estados ansioso-depresivos.
Reactividad. Responsabilidad, prudencia y sentido de la previsión de las consecuencias de los
actos propios y ajenos.. Autocontrol, reflexión racional y visión panorámica preventiva que permiten
controlar la espontaneidad, la impulsividad, la impresionabilidad y las asociaciones desordenadas de la imaginación, así como las perturbaciones anímicas.
64. Agrupada. Semiligada con cisuras de enlace (perfiles) cada 2/3 letras. Intelecto. Inteligencia ecléctica y lógico-abstracta que pasa del análisis a la síntesis y
viceversa.
. Juicios matizados e independientes y pensamientos que pasan de la teoría a la práctica y de la creación a la realización alternativamente.
. Coordinación entre ideas preconcebidas y aprendidas y las ideas concebidas inconscientemente.
. Pensamiento adaptado a los métodos, valores absolutos o ideas actuales que no excluyen el pensamiento autónomo que descubre hechos nuevos o elabora hipótesis.
Actividad. Actividad retenida que se reserva para fines menos inmediatos en pro de la
independencia. Actividad teórico-práctica. Carácter. Adaptación y tolerancia social, intelectual y laboral flexible.. Moderación de la extroversión mediante inhibiciones adecuadas del impulso y
equilibrio entre la vida interior y la vida exterior. 65. Vertical. Se trata de la inclinación de los ejes superior e inferior. Intelecto. Juicio ponderado en la evaluación de los pros y los contras en las elecciones o
rechazos y en la valoración de personas o cosas.. Juicios firmes neutrales y consecuentemente mantenidos.. Moderada percepción de los fenómenos senso-perceptivos. Afectividad. Autocontrol de la sensibilidad o excitación nerviosa y de las manifestaciones
afectivas o verbales (moderada delectación de los sentidos).. Independencia o distanciamiento de lo afectivo/sensorial.. Integración armónica de la afectividad con la razón y la voluntad. 66. Rectilínea. Los renglones son rectos aunque exentos de rigidez o tortuosidad. No debe confundirse con la alineación de letras en las palabras. Voluntad. Resistencia a las influencias externas sobre el ánimo.. Realismo por acogimiento de las ideas realistas y rechazo de las tentaciones de las
ideas innovadoras o que se separan de la realidad, así como de las ideas que conducen al desánimo.
. Autodisciplina para llevar a cabo los propósitos y ser fiel a los principios, leal y responsable.
. Perseverancia de la voluntad en una actividad sostenida. 67. Tildes y puntuación precisa. Puntuación y barras "t" bien colocadas y bien centradas. Intelecto. Atención concentrada y aplicada.. Detallismo preciso que provee una memoria precisa.. Observación precisa de la realidad concreta.. Deliberaciones y decisiones reflexivas. Actividad. Sentido de responsabilidad por la exactitud, verificación, puntualidad, meticulosidad
y previsión.
. Conciencia profesional en los actos conscientes aislados realizados perseverantemente.
. Autocorrección y autocrítica adecuadas.
. Tranquilidad psíquica y autocontrol reflexivo sobre las emociones negativas (impaciencia, agitación, intolerancia, etc.).
7. FORMA
71. Sencilla o sobria. Implica una cierta simplificación y ausencia de adornos, complicaciones o gestos inútiles. Intelecto. Reflexión lógico-abstracta que controla el sentimiento, la imaginación y la
instintividad.. Expresividad concisa y clara. Actividad. Actividad eficiente limitada a lo útil y esencial.. Aprovechamiento del tiempo y eliminación de lo accesorio.. Precisión que evita la dispersión respecto a los fines propuestos. Carácter. Autenticidad, naturalidad y modestia.. Sentido del deber, fidelidad a las instrucciones y cumplimiento de lo debido.. Sobriedad e ideales éticos que limitan las aspiraciones y facilitan el renunciamiento
y hábitos regulares. 72. Claridad. Se trata de una escritura legible en un alto porcentaje de letras sin mezcla de imprecisiones y rasgos confusos o negligidos. Intelecto. Juicios equitativos y objetivos. Actividad. Actividad ordenada, metódica y exacta. Carácter. Claridad de conciencia (escrupulosa). Comunicación y expresión sencilla, precisa y espontánea que evita dudas y
confusiones (sinceridad).. Lealtad a los principios y compromisos.. Calma y serenidad interiores.. Sencillez que rechaza lo complicado, equívoco e incorrecto. 73. Semiangulosa. Se trata de una escritura semicurva con ángulos discretos, poco marcados o frecuentes con alternancia de curvas. Carácter. Adaptación razonable con firmeza y flexibilidad alternadas.. Resistencia moderada a la influenciabilidad o pretensiones injustas de los demás.. Resentimiento bien regulado para evitar contrastes.. Seguridad determinaciones y tenacidad.. Autoexigencia y exigencia (dotes de mando). Intelecto
. Actividad creativa (C. Jamin). 74. Estructurada. Escritura con zona media bien construida o cilíndrica, cuidada, sin omisiones y con formas precisas (se excluye falta de claridad). Intelecto. Atención precisa mediante el control de la razón sobre la imaginación.. Pensamiento concreto y particularizante.. Expresión precisa y apropiada de los conceptos. Voluntad y actividad. Método, orden, hábitos regulares y sentido práctico.. Voluntad disciplinada y responsable para seguir las normas.. Paciencia realizadora para la actividad realista, sistemática y concentrada. Carácter. Formalidad y consistencia entre las palabras y los hechos.. Resistencia a la frustración y a las emociones "débiles" y desproporcionadas (causa-
efecto; querer y poder).. Autoconvicción ética.. Autoafirmación sólida.. Seguridad en sí y en las propias elecciones y decisiones.. Adaptación a la realidad. 75. Homogénea. Es una escritura constante en todos los manuscritos, en el mismo escrito y entre firma y texto. Intelecto. Atención disciplinada y objetiva. Voluntad. Constancia objetivos perseguidos. Actividad. Acción inspirada en el sentido del deber. Carácter. Humor uniforme.. Estabilidad de tendencias y hábitos.. Constancia objetivos perseguidos.. Armonía de la vida íntima con la vida socio-profesional.. Superación de los choques afectivos sin ser profundamente afectado (Müller-
Enskat).. Comportamiento coherente, sin contradicciones. Del examen de los expuestos "módulos de equilibrio" se deduce un equilibrio psicológico predominantemente coincidente en las interpretaciones individualizadas de cada módulo. En otras palabras, un módulo de equilibrio contiene términos grafo-psicológicos parecidos a los de los demás. Por ello, y para mejor constatación, se resumen a continuación las características principales de equilibrio personal cuando en una escritura concurren un cierto número de los mencionados "módulos equilibrantes", cuya síntesis es como sigue: 1. Autocontrol tendencias y expresividad.
2. Sentido de responsabilidad y del deber. 3. Estabilidad y serenidad emocional, afectiva y volitiva. 4. Confianza vital, en sí y en los demás. 5. Adaptación e integración al ambiente. 6. Equilibrio facultades y funciones psíquicas. 7. Actividad sostenida, concentrada y metódica. 8. Socialización de tendencias. 9. Sociabilidad. 10. Autenticidad y naturalidad. 11. Autovaloración realista de sí. 12. Sensibilidad intelectual, sentimental y creativa. 13. Capacidad exteriorización y expresión adecuadas. Así pues, cada escritura-tipo o signo expuestas en el cuadro constituye en sí un elemento de sub-equilibrio que tiene que interaccionar con otros módulos de equilibrio para establecer el núcleo de Equilibrio que matizará los aspectos menos equilibrados o desequilibrados. De esta forma, se puede sintetizar un resultado en directa relación con los ítems básicos expuestos arriba. Todo ello obedece al principio de que en la medida en que la escritura guarda su justo medio y se mantiene en cada "género" (velocidad, presión, etc.), a igual distancia de los extremos su fisonomía se asemeja a los trazos tranquilos, sencillos y ágiles, directos y efectivos del hombre sano manifestados en la escritura por gestos conscientes, reguladores, orientados, concentrados y constructivos. En síntesis, sólo resta citar la noción de equilibrio grafológico expuesta por dos eminentes grafólogos de su tiempo: "El equilibrio de la rapidez y la presión manifiesta el dinamismo profundo y la maduración afectiva" (Robert Olivaux). "La dinamogenia combinada con la inhibición cualitativa representa el equilibrio general del sujeto" (André Lecerf). Si a los "módulos de equilibrio" expuestos se añaden las siguientes características gráficas, hallaremos el máximo exponente de la oblatividad, bondad, tolerancia y demás virtudes denominadas cristianas: combinada (M. Enskat), guirnalda o semiangulosa, extendida, rítmica, ligada (incl. mayúsculas), finales en guirnalda (más bien largos sin presión), margen izquierdo existente (ligeramente creciente), nutrida, mayúsculas sencillas, jambas "sublimadas" (dextrógiras) e identidad de firma-texto, clara y sencilla.
[1] Tomado del libro en preparación titulado Grafología Psicopatológica.
EL ESTRES Y EL EUESTRES
J. Tutusaus
La falta de resistencia, superación y "resilience" (resistencia a las dificultades) produce una serie de repercusiones psicosomáticas. Así que el trabajar en exceso, a ritmo demasiado rápido, tener mucha responsabilidad pero poco reconocimiento, ganar poco dinero en un empleo inseguro, etc., en personalidades en las que "per se" tienen:
· Poco potencial psicofísico
· Dificultades de adaptación
· Inestabilidad
· Falta de motivación
· Falta de confianza en sí mismo
· Agitación; irritación,
(registran, por lo general, una baja tolerancia a la presión estresante del ambiente).
Las personas que resisten bien el estrés = estrés positivo, son más bien:
· Amantes de los retos
· Leales al equipo
· Inteligentes emocionalmente
· Empáticos, capaces de comprender a otros
· Tienen sentido del éxito, etc.
Hemos observado que las características gráficas de las personas propensas a la intolerancia a las situaciones estresantes, coinciden con características propuestas en algunos artículos grafológicos sobre el tema que se circunscriben a presentar síndromes propios de la falta de eficiencia en las cualidades exigidas para el trabajo en general y para la mayoría de los perfiles específicos exigidos.
Fragmentariamente, se presentan como causas psicográficas "signos" tales como:
· Baja presión, variable, etc.
· Estrechez escritura
· Arcadas
· Irregularidad
· Margen regresivo
· Inclinación invertida
· Barras y finales cortos
· Inestabilidad gráfica (inclinación, tamaño, líneas)
· Rigidez; sacudidas; etc.
En realidad no se necesitan muchas comprobaciones estadísticas para discernir "a golpe de ojo" las escrituras que presentan un estrés positivo o un estrés negativo. Los cuadros de signos agrupados en negativos y positivos con respecto al nivel de madurez, adaptación, sentido ético-moral, potencial psicofísico, "performance/handicap", autocontrol, voluntad perseverativa, decisión, sociabilidad, automotivación, competitividad, comunicatividad, etc. muestran una coincidencia abrumadora tanto en su existencia óptima como en su carencia deficiente. Una muestra de ello es nuestro cuadro adjunto que sintetiza y recoge de la manera más completa posible los elementos de tolerancia al estrés (lado izquierdo) así como los elementos de falta de resistencia al estrés (lado derecho).
Además del mencionado cuadro, del que recabamos la autoría como síntesis de diversas "tipologías" propuestas, nos place hacer una síntesis, a continuación, de:
ITEMS "ADULTO" DE GOBINEAU-PERRON
· Formas personales
· Buena estructuración
· Equilibrio forma/movto
· Armonía (sobria, semiang., proporc.)
· Evolucionada (simplif., polimorfa, combinada, desorg.,clara)
· Articulada (aireada entre pals. e interlíneas)
· Dextrógira
· Firme
· Relieve
· Ausencia de ganchos y buclajes
TIPOS "SANOS" DEL ENEAGRAMA
· Z.M- plena, mediana, regular
· Espontánea/movida/fluida; pausada
· Armonía (propor., sencilla, firma congruente
· Evolucionada (guirnalda/semiángulo, formas ovoides, jambas "sublimadas", progres.)
· Espaciamiento logrado. Buena "invasión"
· Dinamogeniada. Inclinada + ligada
· Relieve, aterciopelada, nutrida
· Gestos "en recul.", arpones, etc.
En resumen, las formas convencionales mal estructuradas, inarmónicas, mal espaciadas interiormente y exteriormente, sinixtrógiras, irregulares, estáticas, fluidez perturbada, floja o rígida, etc. son exponentes de propensión a experimentar estrés negativo con las consiguientes e implícitas somatizaciones, distintas en cada caso y difíciles de precisar grafológicamente porque no existe el signo único específico que denote estrés, sino que normalmente se trata de síndromes de signos que muestran una vulnerabilidad gráfica (inarmonía por exceso o defecto).
EL GESTO ACERADO VERTICAL Y EL MUNDO PARANOIDE
El gesto acerado vertical consiste en el trazado de los palotes verticales en forma
afilada terminando en punta, ya sea en la base donde reposa el renglón o en la parte
inferior de la escritura, principalmente en las letras "p", "q", "j", etc.
Francisco Lacueva en su libro "La Clave de la Grafología" clasifica la escritura
llamada acerada por su parecido a las agujas o cuchillos como "gesto-tipo". En
Grafología los gestos-tipo son reveladores de ciertas características singularizadas
que evolucionan hacia canalizaciones propias. Es lógico considerar al gesto acerado
como un gesto-tipo porque, en cierto modo, es lo opuesto gráficamente al gesto en
forma de maza.
Este gesto-tipo es extraordinariamente importante, y en cuanto a su valoración
grafopsicológica, cabe tener en cuen- ta l0 que dice lolax Pulver: "Un impulso puede
formar la dominante de un carácter". Parecerá excesivo para algunos que un rasgo o
característica gráfica puede revelar un carácter más o menos completo, pero hay que
tener presente que todo signo gráfico es polivalente y multidimensional porqué en la
consecución de una expresión participan siempre varias capas del ser. El que
considera la escritura desde un solo punto de vista encuentra solamente un solo
aspecto que puede ser acertado, pero no comprende la verdad completa y la plenitud
del ser total.
Por ello es simplista la simple indicación de que el gesto acerado indica "irritabilidad",
"impaciencia", "incisividad", "maldad", etc., cosas que son ciertas pero expresan
solamente un aspecto externo, precisamente el más peyorativo. El contenido de la
escritura es mucho más grande que los adeptos y adversarios de la Grafología
puedan sospechar.
Crépieux-Jamin hablando de la escritura afilada en su libro "A B C de la
Graphologie", aparecido en l930, dice lo siguiente: "La escritura afilada no puede ser
un signo grafológico cualitativo, ya que no corresponde a algo que en ello pueda
registrarse siempre. Por ejemplo: la punta aguda es difícilmente posible en los rasgos
descendentes, que son los esenciales, los básicos de nuestra escritura; sólo los
trazos horizontales se prestan a una brusca salida disparada de la pluma".
Parece chocante que un extraordinario experto como Crépieux-Jamin que llegó a
examinar y clasificar miles de escrituras dijera en su época que: "la punta aguda es
difícilmente posible en los rasgos descendentes". Esto puede llevarnos a una
conclusión bastante probable de que en otro tiempo alejado al actual el "gesto
acerado vertical" no era por lo menos tan frecuente.
Desde hace algunos años se observa una gran profusión de escrituras con dicho tipo
de afilamiento. En las tareas de preselección de personal se observan más de un
25% de cartas con dichas características. Es por esto que estimamos conveniente
estudiar esta cuestión por el interés que puede tener principalmente en la selección
de personal.
Sirva como botón de muestra un caso altamente expresivo Con objeto de cubrir tres
puestos concretos una prestigiosa empresa de selección de personal clasificó a 54
candidatos por la puntuación obtenida mediante la aplicación de tests para medir la
capacidad lógico-abstracta. La clasificación se hizo estableciendo un "ranking" de
mayor a menor puntuación. De esta forma, teóricamente, se establecía una
preselección basada en el máximo potencial intelectual... Al tener que realizar una
clasificación preselectiva en base a las características de personalidad más idóneas,
mediante la utilización grafológica de las cartas-solicitud, se observaron dos cosas
altamente indicativas:
Que entre los ó primeros candidatos "más inteligentes", 5 de ellos tenían el gesto
afilado vertical en forma acusada, lo cual en principio les eliminaba como candidatos.
Además de la característica precedente, se observaron cinco características gráficas
concomitantes coincidentes en mayor o menor grado en 4 de ellos, lo cual provee
una preciosa indicación sobre "inteligencia" y "Grafología".
La característica gráfica que nos ocupa en su aspecto formal se plasma en el
grafismo debido a las siguientes manifestaciones expresivas:
-Retracción repentina
-Pérdida de energía o impulso
-Agudización penetrante
Más adelante se irá explicando el significado e interpretación del afilamiento, pero
como avance hay que decir que está comprobado que los aceramientos verticales,
que aparecen principalmente en los finales y en las barras de la letra "t", son de
intensidad más leve que en los de orientación vertical. Siempre que hay
aceramientos verticales aparecen los aceramientos horizontales; siempre que
aparecen los aceramientos horizontales no aparecen ne- cesariamente los
afilamientos verticales.
Max Pulver en su obra "Instinto y crimen" describe este gesto tipo afilado en los
siguientes términos grafopsicológicos:
"...todo reposa sobre agujas finísimas que causan un efecto de sensibilidad y
tormento".
"...en estos trazos descendentes delgados hay una falta de energía del gesto gráfico
una paralización contínua de energía mal empleada". ,
"...expresa una voluntad débil; la reducción fina y aguda de los trazos descendentes
revela al mismo tiempo la sensibilidad del escritor".
"El filo del trazo proviene siempre de una actitud aguda que se manifiesta en cuanto
a la inteligencia como perspicacia y penetración o negativamente como maldad y
malicia".
"...en cuanto al dominio de los instintos o impulsos es un signo de agresión".
"Implica la reducción de la "libido sexualis" y f su lugar l0 ocupan tendencias de
autoconservación que intentan reemplazar por medio de la inteligencia la falta de
energía, manifestada en el carácter por una escasa intensidad de sentimiento (?)".
Marco Marchesan, quien en su propia escritura acusa intensamente la existencia de
dicho signo y, por tanto, se supone que conoce bien su origen e interpretación, dice
al respecto lo siguiente:
"El afilamiento es producido por el instinto profundamente primordial de conservación
el cual reduce repentinamente las dimensiones de la persona física para disminuir la
exposición a las amenazas presuntas o reales".
Para Marchesan es el reflejo psiconervioso de un estremecimiento, sobresalto o
movimiento de encogimiento. Es como la retracción de los brazos hacia el cuerpo en
actitud defensiva. Es un movimiento reflejo, potente, al margen de la voluntad y la
conciencia que tiende a reducir el blanco ofrecido a la agresión del enemigo.
Sólo el hipersensible posee un instinto de conservación tan agudizado; es decir,
morboso.
La presión vertical firme, tanto en los plenos como en los trazos descendentes
(también denominados "jambas") es lo normal, o debiera serlo. Este tipo de presión
es el exponente de la posición autoafirmativa de las tendencias del sujeto y del
dominio del medio ambiente. Es la manifestación de tendencias volitivas que
imprimen su huella sobre los demás y que confieren al sujeto seguridad y confianza
en sí mismo.
En el hipersensible se produce, morbosamente, como producto de la angustia
psíquica un estremecimiento defensivo. La angustia psíquica aparece en segundo
lugar casi inmediatamente.
La disminución del trazo vertical produce un trasvase de energías volitivas (presión
vertical) hacia el campo del sentimiento, exacerbando la sensibilidad. El
estremecimiento que es un sentimiento, se refleja a través de un rasgo que debe
expresar la fuerza impositiva. Se trata, pues, de una posición parasitaria que cierra
las posibilidades de acción y de dominio del ambiente de la persona. Le confiere ¿ tal
sensibilidad que le cuesta tanto someter a los demás (capacidad de mando), como
someterse a la voluntad ajena, sin conflictos.
Según sea la amplitud, claridad y percepción del campo de la conciencia, la
hipersensibilidad puede ser mejor o peor discernida por el sujeto y, por tanto, se
puede
pasar de una impresionabilidad o una sensibilidad más o me- nos aguda a una grave
paranoia.
Para nuestros fines, utilizaremos el término paranoidismo, personalidad paranoide o
síndrome paranoide, para describir el fenómeno de personas que podríamos llamar
normales pero que su forma de pensar y sentir es típico y especial. El hipersensible
en el pleno sentido que usamos este término presenta un síndrome idéntico al
síndrome paranoide, exceptuando la patología del delirio y de las ideas grandiosas.
El paranoidismo o condición paranoide ha sido conside- rado por algunos como un
síntoma. Miller lo considera como un "continuum" o síndrome cuya expresividad
alcanza toda la gama de intensidades en cuanto a agudeza y gravedad y for- mando
parte, en su caso, de los más variados transtornos psíquicos. En el mismo orden de
ideas nuestro Dr. Obiols dice que hay que identificar la paranoia y considerarla como
una forma de reaccionar o un mecanismo de defensa.
Como sea que el gesto acerado (vertical u horizontal) también es un "continuum",
como hemos dicho, puede muy bien establecerse un paralelismo entre este signo y el
síndrome paranoide de las personas, que sin sufrir transtornos psicóticos declarados,
se comportan en todas las esferas de la vida (trabajo, religión, arte, ciencias, política,
leyes, etc.) de una forma peculiar con importante transcendencia social.
La Hipersensibilidad
Esta tendencia, según Marco Marchesan, se atribuye a traumas educativos, e incluso
a estados angustiosos de la madre durante el embarazo. No obstante al íinal de este
artículo se especiíicarán sus posibles causas.
Para la insigne grafóloga Rosaline Crépy la Hipersensibilidad se origina en una
"instintividad debilitada que produce fatiga al incrementar sobreesfuerzos para
compensar un sentimiento de impotencia mal aceptado", de ahí que estos sujetos se
engañen a sí mismos y a los demás respecto a sus posibilidades. Manifiestan un
dinamismo aparente.
Para Augusto Vels se trata de una debilidad para hacer frente a la realidad y a los
problemas prácticos y vitales y una falta de control frente a las contrariedades y
frustraciones. El paranoide niega que se halle en un estado de impotencia. El estado
de impotencia le aterroriza y por ello tiende a una aíirmación inauténtica de sus
posibilidades. Son personas que no es íácil promocionarlas porque son dócilmente
sobrepasados por los más seguros de sí mismos y que poseen un dinamismo
auténtico.
La hipersensibilidad se origina en una combinación de delicadeza e inseguridad que
implica, consecuentemente, un aumento de la sensibilidad respecto a lo que atañe a
uno mismo y una disminución simultánea de la sensibilidad respecto a los demás;
son "mimosas que al menor roce cierran las hojas"... Son intocables; no se sabe lo
que está permitido decir o hacer en su presencia. Pasan ante nosotros en íorma
"suírida" o con ganas de atacar. Se hieren por doquier porque les parece percibir
humillaciones y ataques por juzgar erróneamente las motivaciones de los demás.
Incluso perciben amenazas de su propia agresividad potencial. Ven lo que
supuestamente otros olvidan o ignoran.
Para Josef Rattner los hipersensibles componen y reclutan un ejército de nerviosos,
depresivos, intranquilos y miedosos. Ciertamente esto es así porque los afilamientos
inferiores de la escritura de los hipersensibles son muy frecuentes en las escrituras
de psicasténicos (acompañado, claro está, de rasgos obsesivos, compulsivos y
paroxísticos) con toda su corte de: agotamiento nervioso, irritabilidad, angustia que
puede dar lugar a accidentes paroxísticos, dudas, abulia e impotencia psíquica.
A mayor abundamiento, Karl Menniger sostiene que la paranoia es una respuesta
sintomática a tensiones frente a las cuales se ponen en marcha mecanismos
reguladores que gastan cierta cantidad de energía y que al no conseguir el
mantenimiento de un "balance vital" de la misma, se precisan mecanismos de lucha y
defensa para alcanzar la mejor adaptación posible y un mínimo malestar.
Los psiquiatras Swanson, Bonhert y Smith en su exhaustiva obra "El mundo
paranoide" sostienen que "los individuos con un enfoque paranoide generalmente
son hipersensibles".
Quien mejor describe la relación entre la hipersensi- bilidad y el paranoidismo en su
forma menos agresiva es Kretschmer. Henry Ey, en su Tratado de Psiquiatría,
describe el que denomina "delirio sensitivo de relación" como sigue:
"...el carácter sensitivo descrito por Kretschmer se acerca más al de Dupré
designado como hiperemo- tivo. Son sujetos sensibles, a menudo ansiosos y
psicasténicos...son sensibles a las reacciones de los demás, inhiben fuertemente sus
pulsiones...los "complejos de frustración y de inferioridad" son manifiestos porque
están poco compensados. Sobre este "terreno", sobre este fondo de sensibilidad
fácilmente impresionable y vulnerable, la acumulación de circunstancias
penosas...pueden desencadenar la psicosis. A veces, una gota de agua hace
desbordar el vaso, y es a raíz de una discusión o de una humillación cuando estalla
el delirio. Fuera de Francia se emplea el término delirio de referencia para explicar la
experiencia fundamental vivida por estos enfermos, que es la de ser objeto de un
interés, de una indicación o de una malevolencia particular, enojosa o humillante.
Esta "paranoia sensitiva" se desarrolla, por lo general, con angustia y tensión
conflictiva."
Factores perceptuales
El hipersensible amplifica la intensidad percibida ante los estímulos aferentes; de ahí
su reacción exagerada ante los mismos. Las percepciones son agudas; reacciona
excesivamente ante los ruidos inesperados (oye tan bien que le molesta el que otro
levante sensiblemente el tono de voz). De consiguiente, los mecanismos de alerta
tienden a la hipervigilancia e hiperagudeza para detectar los sentimientos ajenos.
El sujeto extrae sus "ideas paranoides" de percepciones realmente experimentadas
según Shakow y cree que su perspicacia es superior a la de los demás.
Se sostiene que dichos mecanismos de alerta excesiva pueden ser el resultado de
experiencias infantiles que producen sobrecarga o distorsión sensorial.
El Test de Rorschach muestra en estos sujetos una excesiva atención a las
respuestas de pequeño detalle l0 cual refleja la búsqueda paranoide. Ciertamente
poseen gran facilidad para el detallismo y la prolijitud; su hiperaler- ta les capacita
para acumular muchos conocimientos con gran detalle.
Vulnerabilidad interna
El diccionario ideológico de Julio Casares define el término vulnerabilidad en la
siguiente forma: "Vulnerable Que puede ser herido o dañado física o moralmente". El
vulnerable se siente como tal y es proclive a pensar que puede ser dañado
moralmente como mínimo.
Los términos "hipersensibilidad" y "vulnerabilidad" son intercambiables. tanto
grafológica como psiquiátricamente puesto que van íntimamente unidos; uno es
causa y efecto del otro.
El afilamiento de los rasgos (principalmente los descendentes) consiste en un
descenso gradual de la presión del instrumento inscriptor sobre el papel con mayor o
menor rapidez. A mayor adelgazamiento del trazo o ductus. más sensibilidad; se
pasa por todas las gradaciones de la sensibilidad hasta alcanzar la agudeza
dolorosísima de la hipersensibilidad.
Para comprender mejor lo dicho basta tomar en consideración la llamada escritura
fina o de presión ligera.
Sobre la escritura ligera Augusto Vels en su "Diccionario Grafológico" dice lo
siguiente: "Los trazos débiles acentuan la impresionabilidad y la debilidad de los
instintos y de las fuerzas vitales del sujeto. lo hacen vulnerable. permeable a los
choques con el ambiente. sensible y frágil a cualquier cambio inesperado en la
actitud de los demás..."
Palaferri en su "Dizionario grafologico" indica. entre otras cosas. lo siguiente sobre la
escritura ligera: "...alta receptividad nerviosa a los estímulos débiles. fuerte
receptividad y sensibilidad que recoge todos los matices... desazón frente a todo tipo
de roce...sufrimiento desproporcionado por la indelicadeza de los demás. larga
resonancia de las actitudes negativas de los demás. fragilidad psicofísica.etc."
Muller y Enskat. además de lo dicho anteriormente añaden: "susceptibilidad.
perturbabilidad. esteticismo. irresolución. agotamiento..."
El gesto afilado que nos ocupa implica que el que lo realiza sigue toda la gama de
resortes. tonos. matices. policromía, perceptibles por la sensibilidad en su riqueza de
impresiones. Por ello, es frecuente observar la escri- tura afilada en grandes genios
de la pintura como Dalí y Picasso, o bien de la literatura como Alberti. A dicho rasgo
se unen en estos casos la originalidad, la variedad y la espontaneidad en el grafismo.
Su hipersensibilidad les permite captar las más ínfimas particularidades del matiz y
del tono. En la literatura se ponen de manifiesto las características de penetración,
incisividad y agudeza expresivas.
Respecto al origen o causa de la hipersensibilidad o vulnerabilidad cabe citar a
Langfeldt de su obra "The hipersensitive mind" (l95l) quien relaciona la fatiga y fases
biológicas especiales como pubertad, climaterio, etc. con la coexistencia de una
hiperemotividad frente a ruidos que puede provocar explosiones coléricas. A este
respecto, Kretschmer sugiere que el paranoide tendría una débil dotación sexual
puesta de manifiesto en la inseguridad de las fuerzas instintivas y que esta estructura
del carácter activaría factores precipitantes como la fatiga y la tensión psicológica.
Para Schwartz la vulnerabilidad se basa en la cantidad de fuerza del Yo que el
individuo reune como respuesta defensiva frente a una tensión concreta.
El vulnerable no se enfrenta con las dificultades de la vida de un modo realista
(conocer lo peor de la vida y sacar de ello el mejor partido) mediante el uso de
mecanismos integrativos distintos a los defensivos (Allport). El vulnerable erige en su
entorno una coraza protectora. En otras palabras, coloca un sistema de defensas
alrededor del sentimiento de vulnerabilidad y se siente seguro ante la hostilidad real o
imaginaria adoptando actitudes antagó- nicas o atacando primero. El sujeto se da por
aludido aún sin ser culpable; por tanto está expuesto a la exageración de las
amenazas exteriores.
El mecanismo de proyección
La hipersensibilidad y la consiguiente vulnerabilidad interna explicarían por sí mismas
el síndrome paranoide, pero a esto hay que añadir el mecanismo de proyección que
suele acompañar a dichas tendencias, agravándolas.
La proyección consiste en la búsqueda de adaptación mediante una maniobra
restitutiva para hacer frente al mundo y evitar una retirada autística o esquizoide
(Schwartz). El paranoide maneja los mecanismos de proyección-introyección
inadecuadamente. El paranoide introyecta menor sentimiento de culpa que el
depresivo y manifiesta una actitud más proyectiva.
El mecanismo de proyección consiste en echar en cara los defectos como forma de
denunciar a los demás los propios. Ello produce una actitud hipercrítica en
compensación a la hipersensibilidad ante las supuestas críticas ajenas. El sujeto
proyecta sus sentimientos de culpabilidad a los otros para hacerles sentir igualmente
culpables.
La proyección es atribuir a los demás la culpa del propio displacer o la reacción de
defensa frente a la propia inferioridad o insuficiencia; (los demás tienen la culpa de
que no tenga éxito).
Erikson considera la proyección como uno de los mecanismos de defensa más
profundos y peligrosos por medio del cual dotamos a los demás de la "maldad" que
está en nosotros...
En el afilamiento de los rasgos descendentes está presente el sentimiento de
inferioridad y así el sujeto puede razonar de la siguiente forma: "soy inferior, por
tanto, no gustaré a la gente y no puedo estar seguro frente a ella". "No es que hay
algo en mí, sino que me hacen algo”: "lo cual explica lo que esta gente me hace".
El sentimiento de inferioridad paraliza las reacciones coléricas ante personas de
voluntad segura o ante la sola idea de enfrentarse con ellas.
Forma de pensar errónea del paranoide
El paranoide tiene una forma de pensar equivocada, fruto de una cosmovisión falsa,
bastante distorsionada.
Como hemos visto al tratar de la proyección,el sujeto tiende a adjudicar a los demás
motivos enemistosos aunque se trate de las mejores intenciones, porqué el sujeto es
incapaz de distinguir entre su tensión interna (producto de temores crecientes) y las
presiones externas, mal inter- pretando, en consecuencia, su sensación de
incomodidad interior; percibe su tensión interior actuando desde fuera de sí mismo.
Su lógica pesimista le induce a considerar el ambiente como fuente de dolor y
hostilidad, por lo que sus relaciones con los demás se convierten en "pugilato en las
sombras" (dudas, alarmas y defensas). Tiene conciencia de ,que las cosas están
llenas de significados siniestros y busca signos que le confirmen en este error
prejudicial.
La duda y la sospecha son las constantes como conse- cuencia de la forma de
pensar errónea del paranoide.
La excesiva percepción de los detalles y matices le hacen dudar todavía más
respecto a las motivaciones ajenas; lo inconcreto y lo enigmático le hacen concebir
motivos ocultos, todo lo cual le inquieta y le envuelve en incerti- dumbres e
indecisiones, para librarse de las cuales tiene que gastar mucha energía en sus
investigaciones para saber lo que sucede alrededor de sí y espiar a todos,
informándo- se de las cosas hábilmente.
La actitud de desconfianza previa frente al ambiente, le lleva a confirmar las
sospechas. El exceso de sospecha hace ver ofensas en preparación incluso donde
no existen y ofensas actuales en hechos inofensivos. La sospecha es una señal de
alarma que funciona mal y pone en marcha mecanismos de autoprotección
innecesarios.
El paranoide selecciona sus "enemigos" sobre una base poco lógica determinada por
acontecimientos internos y por coincidencias. Es, pues, una consecuencia de la
hipersensibilidad proyectiva.
Miedo, angustia y ansiedad
Para Dejean el"choque emotivo" se presenta como un "extravío mental" y un "pánico
orgánico". Además,cadi emoción tiene una originalidad diferencial y una unidad típica
que expresan la relación del sujeto. con seres y cosas. Con respecto al "pánico
orgánico" hay que hacer notar que el "gesto acerado vertical" llega hasta lo más
profundo de la fisiología...
Para Augusto Vels el miedo es "una emoción desagradable por una situación de
peligro real o imaginaria seguida de una retracción del cuerpo", definición que tiene
mucha afinidad con el tema que estamos tratando. El mismo autor desarrolla un
análisis de las emociones primarias: cólera, pánico, afecto, alegría y displacer, y
concretamente para las emociones de pánico y displacer efectúa el siguiente
desarrollo: Pánico Displacer
Instinto de defensa Pesimismo
Paralización Vida sexual insuficiente Ansiedad Colilplejo de inferioridad Angustia
Fracaso del Yo ante la realidad Inseguridad Recelo Ansiedad Dudas Angustia
Tendencia a pensar mal
De este desarrollo se desprende que las emociones primarias del hipersensible o
vulnerable son las de pánico y displacer y sus aludidas tendencias satélites.
En el estudio efectuado por Bidoli en Italia sobre el I.P.A.T. de Cattell se ha
comprobado que el rasgo más frecuente de la ansiedad en la escritura es el
aceramiento, seguido de la escritura agitada o precipitada, descendente, buclada,
márgenes excesivos, rígida y otras modalidades secundarias, lo cual es exponente
de que la grafología puede controlar bien la baja autoestima, la debilidad del Yo, la
suspicacia, el sentimiento de culpa y la tensión
Cuando la situación se hace inestable para el sujeto, este entra en un estado de
ansiedad porque teme consecuencias dolorosas en las amenazas al Yo. Cuando la
situación entra en crisis, sufre una angustia excesiva, tal vez peor que la muerte. La
mente trabaja hasta el paroxismo en todas
las direcciones posibles pasando de reacciones de fuerza a conceptos de astucia. La
angustia extingue la iniciativa, produce abandono de las empresas, depresión
general y pérdida gravísima de productividad y de ingenio (Marchesan).
La angustia, como indica Marco Marchesan, es prácticamente la única forma de dolor
psíquico.
Dolor psíquico o moral
El dolor psíquico de los hipersensibles se origina al apreciar en forma agigantada las
sensaciones dolorosas. El sujeto contempla el dolor con una notable desproporción
entre la causa y el efecto. El sujeto comprueba que sus contactos con el ambiente
son insoportables; el hecho doloroso es percibido como a través de una lente de
aumento, según sea la frecuencia y la agudeza de los adelgazamientos
grafoescriturales.
La interiorización dolorosísima, maniática y obsesiva de las ofensas y detalles
"incorrectos" de los demás, produce una acumulación de dolor tras dolor hasta
alcanzar un sufrimiento agudísimo, insoportable; El sujeto paranoide no puede creer
que lo que le desagrada sean concomitancias habituales de los contactos
interhumanos. Las exagera de tal manera que tienen un significado que "sólopuede
ser dañino" (Swanson).
El sujeto hipersensible una vez ha experimentado la crisis en perjuicio suyo, renuncia
absurdamente, pierde energía, cae en la abulia y abandona, aunque esté a punto de
tener éxito.
Cólera y agresividad
Según Maslow "la persona normal manifiesta una ira reactiva a una situación actual
en vez de ser un depósito caracterológico provinente del pasado". Cuando la
agresividad se dirige no contra el origen de la deprivación sino contra otro objeto
menos complejo, existe el transtorno paranoide.
La agudización en espiral del dolor moral por apreciación exorbitada del mismo
determina explosiones enormes en relación con causas fútiles. Son explosiones
colérico-agresivas que no hallan posibilidad de desahogo indirecto previo, salvo que
una amplia comprensión introspectiva y autocrítica de las consecuencias de las
propias reacciones mitiguen parcialmente el dolor moral acumulado e insoportable,
como veremos más adelante.
La cólera se produce, pues, por la apreciación morbosa de los hechos. Es una cólera
intensa y persistente, acompañada de un sentido total de justificación: tan grande es
el dolor soportado que exige una justiciera y equivalente compensación...
Swanson, Bonhert y Smith en su libro: "El mundo paranoide" explican las
características de la cólera paranoide como sigue:
"La ira de la persona paranoide en alguna manera tiende a mostrar que es una
persona colérica, pero mayor- mente el grado de ira varía inversamente a la
vulnerabilidad del sistema defensivo paranoide: cuanto más vulnerable es su sistema
defensivo más irascible es, o sea, esta cólera es secundaria a un ataque amenazante
sobre el sistema defensivo que protege el malestar intolerable. La ira "mostrada"
aleja el peligro de sus defensas”.
El gesto acerado significa para algunos una buena medida de energía agresiva
orientada hacia el propio sujeto en sentido masoquista. El psiquiatra Nydes postula
que los rasgos paranoides y los masoquistas están íntimamente relacionados y
describe, en consecuencia el carácter paranoide-masoquista.
El sujeto paranoide dimite dramáticamente llegando a alcanzar un cierto grado de
mártir. La primera línea de defensa del paranoide es buscar la invulnerabilidad; si
fracasa retrocede a un papel pasivo a la segunda línea de defensa básicamente
masoquista. El suicidio mismo se puede considerar como un gesto impulsivo de
defensa.
Aunque el homicidio y el suicidio indistintamente pueden ser los resultados finales y
más graves de la cólera pa- ranoide, como veremos más adelante, su conflictividad
suele acabar en situaciones de resentimiento por alimentar y recordar vivamente los
hechos tristes acaecidos y las ofensas contra él coleccionadas.
Capacidad de responsabilidad de la consecuencia de los propios actos
El dolor moral tiende a reducir el campo de conciencia y a excluir otras
manifestaciones psíquicas, de ahí que el paranoide necesite la corrección de la
limitación de las fronteras del sí mismo para alcanzar un sentido de proporción
interpretativa correcto para comprender las motivaciones e intenciones de los demás.
El paranoide no aplaza sus interpretaciones provisionales; sus conclusiones sólo son
válidas en el marco de su propio pensamiento.
El síndrome paranoide derivado de la hipersensibilidad puede ser más grave o más
leve según sea la anchura del campo perceptivo de la conciencia como experiencia
sensible inmediata del presente representado (Ey), la claridad de conciencia en su
forma mediata o refleja (Delay) , el grado de conciencia con sus corolarios de poder
de inhibición, posibilidad de reflexión o poder moderador (Porot) o la fuerza inhibitoria
de la conciencia del Yo (Maslow).
La conciencia esta trastornada si los cambios de amplitud y flexibilidad son
estorbados o retardados sin po- der alcanzar niveles superiores que permitan la
apreciación lúcida de la situación, el gobierno de los instintos, las presiones afectivas'
inconscientes y los automatismos, lo cual es tanto como decir el funcionamiento
correcto de la voluntad auténtica y libre en el sentido que la describe J. M. Sutter: "La
voluntad es ante todo una conducta racional, una expansión del campo de la
conciencia, una anticipación positiva al nivel más elevado".
Las nociones de conciencia, juicio claro, voluntad responsable y visión de conjunto
arrojan luz sobre la capacidad de reflexión de los actos propios. A estas nociones
corresponde con indubitable correspondencia grafopsicológica la noción espacial
entre las palabras o distancia media comparativa existente entre palabra y palabra
escrita.
El célebre grafólogo Max Pulver en su libro "Instinto y Crimen" atribuye al
espaciamiento amplio entre palabras (ai- reación) el "juicio claro para asimilar la
realidad Que organiza y distingue la conciencia de los actos, la visión de conjunto..."
etc.
No obstante, no es hasta la aparición de los notables grafólogos Moretti y Marchesan
en Italia Que esta importante cuestión grafológica ha Quedado dilucidada en forma
muy satisfactoria. Estos grafólogos consideran que la distancia máxima promedia
entre palabras constatada dentro de los términos de normalidad es la de ocho óvalos
consecutivos.
Moretti y sus discípulos consideran que la distancia mornal es la de 4 óvalos, o sea la
proporción 5/10 décimas.
Marchesan matiza afirmando que la distancia tope mínima es la de 2 y medio óvalos
entre palabras, considerando a una escritura que tiene este espaciamiento como
"estrecha entre palabras" y añade que cuanto más dinámica, rápida, impulsiva,
violenta o vulnerable sea una persona mayor distancia entre palabras se requiere; es
decir, necesita según sus palabras, una mayor provisión de "visión panorámica
inmediata".
Para dicho autor el psiquismo del Yo es lo que hasta ahora hemos denominado
conciencia. Considera que el psiquismo del Yo utiliza energía libre en "momentos" de
recogimiento y exploración de la realidad interna represen- tada para reaccionar
desde el punto de vista ético-práctico a fin de perpetuar o aumentar el disfrute o
corregir los elementos de la realidad que le producen dolor psíquico o físico. Es una
exploración del ambiente sólo a efectos informativos con el fin de dar a las sucesivas
acciones el máximo de realismo posible. Es pues una visión inmediata panorámica y
preventiva de las circunstancias que permite detenerse ante cualquier posibilidad de
hacer o decir.
Un espaciamiento de 6/7 óvalos permite una fácil reconducción al realismo de los
impulsos dolorosos, depresivos y coléricos del paranoide. La visión panorámica de
una conciencia ancha apaga el resentimiento y la explosividad mediante la correcta
autocrítica selectiva, la prudencia y la autopersuasión. El sujeto ve venir las cosas de
lejos al propio tiempo que le permite autoobservarse (Maslow).
Si el hipersensible tiene una "visión panorámica estrecha" (menos de 3/4 óvalos)
puede sufrir obnuvilaciones debidas al dolor psíquico insoportable y cometer
homicidio o suicidio a la vez. Se trata en este caso de una auténtica paranoia con sus
fatales consecuencias.
Una escritura "estrecha entre palabras" acusa la falta de equilibrio entre las
emociones y reacciones sentimentales y la racionalización por defecto de ésta y el
sujeto, por tanto, resulta acrítico y sugestionable.
En el caso de un sujeto "maníaco-depresivo" (locura circular) los aceramientos son
generalmente horizontales y la escritura va acompañada de un cortejo muy expresivo
de características típicas, pero la falta de espacio entre palabras, cubierta a veces
por largos finales expresa la hiperemnesia o flujo incoercible de recuerdos, la fuga de
ideas, la asociación de ideas perturbada y la absorción del pasado y del porvenir en
el presente; es decir la falta de selectividad, previsión autocontrol y claridad de lo que
piensa y lo que dice.
En los artistas, amén de la hipersensibilidad del gesto afilado, se observa también la
falta de espaciamiento entre palabras propia de una imaginación y un entusiasmo
fértiles.
Una conciencia o visión panorámica adecuada a cada sujeto ejerce una positiva
acción sobre las emociones dolorosas, los sentimientos negativos, las ideas de
persecución, los estímulos ambientales y las asociaciones espontáneas de la
imaginación. Por ejemplo, frena el utopismo, suaviza el resentimiento, apaga la
explosividad, empequeñece el dolor de la vulnerabilidad interna, aclara la realidad del
objeto angustiante y actúa de linitivo del dolor moral.
Un exceso de espaciamiento entre palabras conduciría a la hiperautocrítica, al
sentido de aislamiento y a la claustrofobia. Si se trata de un individuo quieto y no
hipersensible un espaciamiento de 5 óvalos sería algo excesivo.
La noción de espaciamiento determinada por los grafólogos italianos con tanta
lucidez tiene un valor extraordinario tanto en psiquiatría como en medicina legal para
determinar el grado de responsabilidad del sujeto.
No quisiéramos terminar este apartado sin reflejar la coincidencia de la noción de
"visión panorámica preventiva inmediata" con la de "conciencia" de Sutter: "La
conciencia en buena parte depende de la anticipación (previsión, preparación, temor)
y de todo lo que el sujeto está dispuesto a vivir en un futuro próximo y remoto, ordena
para él la experiencia presente, y determina su lugar y su papel en lasituación actual,
siempre vivida como un preludio perpétuo".
Paranoia
Si a la vulnerabilidad interna y la falta de "visión panorámica preventiva" se añaden
presión imperiosa hacia los demás y complejos de inferioridad sobrecompensada
entonces tendremos la proyección de una situación cerebral gravemente perturbada
que ocasiona estremecimientos espasmó- dicos y una val0ración agigantada del
color moral con deseos de descarga furiosa y brutal. El sujeto agudiza intensamente
las vivencias personales hasta el delirio ofuscándose la inteligencia por el incremento
desproporcionado de las ideas dolorosas. Si el sujeto se deprime y cae en la abulia,
disminuye la violencia pero el aislamiento momentáneo refuerza los mecanismos
paranoides fundamentales, recuperando energías para recurrir a la beligerancia
(defensa y ataque).
La fuerte presión vertical denota necesidad de dominio imperioso y la impulsividad
como la describe Porot, a saber: "La impulsión es un deseo imperioso, a veces
irresistible que surge bruscamente y empuja a la comisión de actos brutales o
peligrosos". Este tipo de presión, que suele darse en la epilepsia y el alcoholismo
hereditario, si se une al adelgazamiento final del trazo da como resultado tendencias
funestas.
Factores educacionales
Sin duda los factores educacionales pueden influir poderosamente en creación de
hábitos y tendencias paranoides si bien persiste igualmente la pugna entre el
innatismo o -
herencia y el ambientalismo como en otras áreas de la psico- logía y el
comportamiento humanos.
El niño que observa a su propio padre responder con ira incontrolable y con
irresponsabilidad ante las exigen- cias que plantea el hogar, le resulta accesible
configurar
un patrón de conducta de características paranoides, centrado en las acusaciones de
los demás. Tal comportamiento por parte del padre origina en el niño sentimeintos de
desconfianza y miedo. El niño a causa de un deficiente aprendizaje social es incapaz
de comprender las motivaciones e intenciones de los demás, dando lugar a una
conducta expectante y a una sensación de hallarse en terreno enemigo que cuando
cambia a una conducta de participación suele llevar al suje- to a un conflicto con el
medio (Swanson, Bonhert y Smith).
Sullivan con respecto al paranoidismo dice que "el niño manifieseta la necesidad de
ternura, se siente herido o burlado y experimenta entonces ansiedad. El niño aprende
que es desventajoso ser tierno; sustituye su actitud por una básicamente hostil,
compatible con el concepto de que vive entre enemigos, a fin de reducir la ansiedad.
Piensa que si no es premiado por los demás es porqué están equivocados".
Factores bioquímicos
La doctora sueca Marie Asberg explicó en el I Congreso de la Sociedad Española de
Psiquiatría Biológica celebrado en Barcelona en Octubre de l984 que tras 10 años de
investigaciones en un hospital de Karolinska Instituted de Estocolmo ha descubierto
que las personas con perturbaciones, alteraciones o baja concentración de
seratonina, elemento químico que asegura la transmisión de información entre las
neuronas del cerebro, poseen tendencias suicidas y comportamientos violentos. Esta
carencia no es siempre un hecho patológico, dice, puesto que puede sufrirla también
gente completamente normal. Para que se dé esta conducta violenta es necesario,
además un estímulo exterior (problemas afectivos, trabajo, etc.). Si no lo hay, la
persona será más sensible... Hay que considerar que una hipersensibilidad no
siempre es negativa para el sujeto. A veces, por ejemplo, puede ser muy deseable
para su capacidad creativa, dice la mencionada doctora Asberg.
Factores sociológicos
Es Abraham Maslow quien describe admirablemente la posible consecuencia
frustrante de nuestra sociedad que produce tantos hipersensibles y paranoidismo.
Este factor parece ser la competencia y la rivalidad. Maslow desarrolla su concepto
de la "sigergia social" en los siguientes términos:
"La sinergia trasciende la dicotomía entre egoísmo y generosidad e incluye a ambos
bajo un único concepto de orden superior; se trata 'de la trascendencia de la
competitividad, de los juegos del todo o nada, del ganar o perder. Ciertas medidas
sociales necesariamente enfrentan a las personas entre sí; otras en cambio, logran
que el que persigue su pro- pio interés ayude necesariamente a otros, sea que lo
desee o no; por el contrario el que busca ser altruísta y ayudar a otros cosechará
inevitablemente beneficios propios". Se pueden crear condiciones sociales de modo
que lo que es ventajoso para una persona lo sea para otra en lugar de ser una
desventaja.
Las sociedades manifiestamente no agresivas tienen dispositivos sociales mediante
los cuales el individuo sirve, con el mismo acto y al mismo tiempo, a su propio
beneficio y al del grupo (Benedict). Existe un alto grado de sinergia cuando las
instituciones aseguran el beneficio mútuo de las empresas. En estas sociedades la
virtud rinde, y asimismo disponen de técnicas para eliminar la humillación.
En una sociedad con bajo grado de sinergia se da más al que tiene y se le quita al
que no tiene; la pobreza engendra más pobreza (Maslow). Nuestras instituciones
fomentan una situación en la que se desarrolla la envidia, el resenti- miento, la
humillación y, por último una verdadera enemistad.
En el orden de la política las consecuencias del paranoidismo pueden ser muy
graves por cuanto que el transtorno psiquiátrico no impide la obtención del liderazgo
y por otra parte no existe ningún camino práctico para determinar si las
personalidades políticas sobresalientes presentan alteraciones de tipo paranoide
(Swanson, Bonhert y Smith). Los políticos debieran comprender este tipo de
conducta desviada para poder reconocer a los individuos cuyo pensar paranoide
interfiera con 'los métodos racionales del gobierno.
La hostilidad de ciertos líderes y la capacidad de cul- par a los demás puede atraer a
los jóvenes más impresionables. Las minorías paranoides llegan a contaminar a los
133 grupos con objetivos constructivos.
Los superpatriotas de la actualidad y los extremismos políticos tienen todos un
enfoque paranoide y por lo general unos grupos minoritarios extremistas atribuyen a
otros de igual radicalismo todos los males habidos y por haber.
El peligro del político paranoide se observa por el augurio que efectúa de los medios
violentos que utilizará en última instancia.
En el mundo laboral la inserción del paranoide es problemática ya que puede
cometer errores de táctica y tomar decisiones desconsideradas por la complejidad de
los acosamientos consiguientes a la hipersensibilidad.
El paranoide no se deja controlar demasiado bien por los superiores, cree que
siempre le buscan defectos, está siempre celoso de sus "rivales" pues puede incluso
interpretar una expresión de buena voluntad como un intento de postergarle, o los
logros de los demás como una amenaza y sus sospechas se convierten en el miedo
de muchos y en la creación de grupos que se enfrenten entre sí, volviéndose
improductivos.
El empleado u obrero paranoide pretende que le maltratan y que dudan de su
capacidad y, en consecuencia, siembra semilla de discordia entre sus compañeros
de trabajo.
En EE. UU. se ha comprobado que la "anamnesis laboral" de los sujetos paranoides
presenta frecuentes cambios de trabajo tras ó meses o l año de haberlos
desempeñado.
Son personas a las que no se las puede promocio na r para cargos para los que se
creen capaces, porque o se hunden o crean conflictos, o son sobrepasados por sus
compañeros. No son aptos para puestos de mando. Les conviene un trabajo en el
que tengan pocos compañeros o se sientan relativamente independientes.
La mayoría de los conflictos sociales que promueven las personalidades paranoides
finalizan sólo con el resen- timiento o el pleito reivindicativo.
Grafología y Test en la detección del paranoidismo
Podríamos decir bastante más sobre el síndrome paranoide desde el punto de vista
de la escritura del sujeto.
En cuanto a los Tests para detectar tales anomalías, nos limitamos a recoger lo que
Swanson, Bonhert y Smith relatan respecto a un caso concreto:
"Las pruebas psicológicas raramente consiguen descu- brir graves transtornos
psicopatológicos en cualquiera de los cónyuges, pero dichos tests pueden ayudar a
determinar quien es el más perturbado bajo las rígidas defensas y aspecto de
normalidad presentado por tales pacientes. Cuando se administró el test M.M.P.I.. a
14 esposas paranoides, sólo una presentaba índice de paranoidismo superior al
normal. Las técnicas proyectivas se muestran también' infructuosas en este tipo de
pacientes. Incluso psicólogos de gran experiencia no logran descubrir a menudo
ninguna desintegración grave de la personalidad."
De todo ello se infiere la importancia que posee la grafología y la utilidad social que
puede derivarse de una aplicación científica de la misma.
EL PERFIL DEL TRAZO
Segundo Semestre 2002 (...) Nuestro extenso trabajo que versa bajo el epígrafe Manual de clasificación grafológica en el que se establecen las bases para una clasificación de 17 cuadros cuya exposición empieza en el Boletín nº 24 y termina en el reciente nº 28, siendo la base bilateral como sigue:
CONSTRICCIÓN vs. LIBERACIÓN
INHIBICIÓN vs. EXPANSIÓN
RETRACCIÓN vs. EXALTACIÓN
TENSIÓN vs. DISTENSIÓN
y así sucesivamente.
Se trata inevitablemente de continuums que van de menor a mayor tanto en calidad como en cantidad.
En el Boletín nº 26 se presenta el cuadro nº 08: Profundidad (3ª dimensión) en la página 77 desarrollando bajo la estructura anterior los siguientes esquemas básicos:
81. Control de Presión de apoyo o de frote.
82. Gradación de la presión.
83. Cadencia presión entre plenos y perfiles.
84. Floqueo del borde del ductus.
85. Espesor trazo (presión aparente).
86. Presión barras <<t>> y finales (81/82).
87. Presión de la puntuación.
Las 17 tablas en su totalidad han sido retocadas, reelaboradas y rectificadas por tres veces y aún pensamos en mejorarlas antes de darles una publicidad en forma de pequeño tratado desarrollado en base a las tablas finales y a niveles de interpretación.
En el Boletín nº 27 págs. 56/57 presentamos un cuadro producto del estudio de 23 términos usados por Augusto Vels en relación con el Trazo y la Presión en su obra Grafología de la A a la Z. (...)
El Trazo es primariamente la fibra o trozo de hilo en su expresión mínima, o sea la primera materia que en su conducta ("ductus"), extensión o camino seguido da lugar al:
Trazado, rasgo, traza, línea o ringorrango (enrollarse y desenrollarse) que es algo muy distinto, ya que el Trazo en sí ha devenido en Forma (longitud, continuidad, sentido, orientación, etc.).
En otras palabras, el Trazo es el "alma" y el recorrido es el "cuerpo". El Trazo es la hebra y el Trazado tiende a ser objeto de examen morfológico. El Trazo es textura ("alma") y el Trazado ya es UN ELEMENTO TRAZADO. Por tanto, la unión de ambas manifestaciones escriturales (la primera materia y el fundamento de la construcción gráfica) no debe hacerse por ser elementos diferenciados. La mezcla conduce a la unión por confusión de términos y metodología.
Además de lo dicho, hemos de hacer patente que el trazado o rasgo es, con frecuencia difícil de delimitar en cuanto a extensión (longitud, tamaño, etc.) (...). Hay que evitar a fines metodológicos y de terminología el confundir la naturaleza del trazo con el desarrollo del trazo, configurando la onda gráfica.
A continuación, exponemos un cuadro mejorado, pues en el Boletín nº 27, págs. 56/57 exponemos el término "Tonalidad" en vez de "Tonicidad". (...) Nuestro cuadro no pretendía una perfección absoluta, pero creemos necesario renovarlo a continuación, incorporando elementos de Pophal (...).
CUADRO SÍNTESIS DEL TRAZO FUNDAMENTAL
Con todo, hay que tener presente que en el trazo estricto (en sentido lato sería trazado) hay que tomar en cuenta el lugar, zona, elemento o rasgo que se elige para el análisis y estudio de la contextura, naturaleza, características y cualidades del Trazo.
A) LUGARES O TOPOGRAFÍA DEL PROPIO TRAZADO DONDE EVALUAR EL TRAZO.
1. Inicial de letras, signos, palabras (nacimiento del trazo).
2. Final de idem. idem. (fin del trazo)
3. Plenos y perfiles } (dirección)
4. Palotes y perfiles } idem.
5. Lugares de convergencia o desviación plenos y perfiles (ZM, ZI,ZS).
B) ESTRUCTURA Y CONTEXTURA DEL TRAZO FUNDAMENTAL (Dinámica del Trazo)
1. PROFUNDIDAD (Intensidad de presión de frote)
Incluye los abultamientos y las "irregularidades" de presión, aceramiento, etc.
Es exponente del uso eficiente de la energía.
2. TONICIDAD (Vigor psiconervioso según Marchesan).
3. TENSION (Voluntad de resistencia).
Va desde la hipotensión hasta la hipertensión gráfica: dureza/suavidad, crispación/firmeza, etc. Flexibilidad.
4. CONTRASTE (Relieve funcional).
Esta apreciación surge de la comparación de la parte observada respecto a su alelo: p.e. diferenciación plenos-perfiles, o sea apoyado normal (relieve, plenos más gruesos que perfiles), plenos < que perfiles (desviación, etc.) plenos y/o perfiles indiferenciados, apoyados o ligeros, etc.
5. GROSOR (Espesor, presión aparente, "calibre").
Es la anchura o grueso del Trazo, aparte de la Presión o Profundidad.
6. RAPIDEZ
Se trata de la velocidad absoluta y su incidencia en la cualidad del Trazo. No confundir con el Ritmo que se considera en cuanto a su Estructura u Homogeneidad.
7. FLUIDEZ
La rapidez y la tensión suelen dar origen a la fluidez. La F. implica "deslizamiento" y continuidad sin trabas, cortes, vacilaciones, temblores, etc. Contiene el ritmo/monotonía. También implica destreza.
8. FLOQUEO BORDES
Implica la existencia o ausencia de pastosidad, aterciopelados, etc..., en uno o dos de los bordes. Se contrapone a la "Nitidez" o "Limpidez".
9. LIMPIDEZ
Ausencia o presencia de empastamientos, entintados, etc. Neta/límpida.
10. COLORIDO
Implica la nutrición, la tonalidad, etc., p.e. escritura "negra", "desteñida", etc.
11. HOMOGENEIDAD
Trazo liso, granulado, regular o irregular. Implica solidez y autenticidad.
De W. Hegar no hemos consignado ni la presión ni la forma, sino sólo el grado de pastosidad y la rapidez. Se han excluido los elementos que afectan al trazado o rasgo elemental, si cabe.
En la práctica, los 11 ítems o características expuestos no son siempre aplicables, pues depende del instrumento inscriptor y del soporte utilizado. LOS ÍTEMS DINÁMICOS SON LOS MÁS IDENTIFICATORIOS en materia de pericia de escrituras.
Sólo la experiencia del grafólogo o experto puede proceder a la estimación aproximada de intensidades. La métrica es tan sólo una utopía en la práctica.
LA APLICACIÓN DE LA GRAFOLOGÍA A LOS RECURSOS HUMANOS * Cuestionario formulado por la periodista Tortajada a Francisco Viñals Carrera, Coordinador de la Especialidad de Peritaje Grafopsicológico, Escola de Postgrau (UAB) (El entrevistado es autor con MªLuz Puente del libro más buscado en orientación y selección de personal: Análisis de escritos y documentos en los servicios secretos, Ed. Herder, Barcelona, 2003) 1. ¿Desde cuando se emplea la Grafología en Recursos Humanos, y cual es su aplicación? ¿Permiten apreciar rasgos básicos y concretos que se buscan en un candidato o ofrecen una “Fotografia” completa? La Grafología es tan antigua como la psicología, de hecho el primer Grafólogo fue el médico y escritor español Juan Huarte de San Juan (1575), también patrón de los psicólogos. La Grafología sirve en la primera fase de selección para descartar las cartas o cuestionarios con grafismos muy negativos (desproporciones significativas, gran desorden o confusión entre palabras y líneas, excesiva artificiosidad o complicaciones, etc.) Normalmente se tiende al retrato de personalidad global, para no descartar a personas normales que podrían suplir alguna deficiencia por el interés o vocación y experiencia aportada al puesto, pero es cierto que tampoco se va a sugerir a un candidato muy tímido para un puesto comercial o un candidato que necesite mucho movimiento para un cargo rutinario de despacho, todo ello es detectable y debe considerarse por el perito grafólogo. 2.- Los datos del análisis grafológico ¿cómo se utilizan?, ¿cómo un filtro previo de candidatos o como complemento de otras pruebas del proceso de selección (entrevista, tests psicotécnicos...)? Ya hemos hablado del análisis en primera fase, donde se acostumbra a realizar lo que llamamos un A,B,C, esto es, la clasificación de manuscritos en varios grupos, los aceptables, los aceptables con reservas y los no aconsejables, pero en la fase final, cada vez más se
procede a una comparativa entre los resultados de la entrevista y posibles pruebas o test junto con el informe grafológico de los finalistas, en algunos casos se reúne el equipo multidisciplinar para contrastar resultados y tomar una decisión. 3.- ¿En la práctica sucede que un candidato a un puesto de trabajo que ha superado otras pruebas sea descartado por su análisis grafológico? ¿Es justo que sea así? Hay muchos estudios correlativos entre test y grafología por lo tanto es normal la coincidencia entre ambos tipos de técnicas, ahora bien, la grafología al igual que los test proyectivos tiene la ventaja de que es difícil de falsear, existen en el mercado muchos textos, incluso cursillos de preparación para entrenarse a solucionar test, ello significa que los candidatos entrenados quedan habitualmente muy por encima de los que no se han entrenado, ésta sería una de las razones por las que, ante la divergencia de resultados, se confíe en el análisis grafológico, siempre que se realice por un profesional suficientemente acreditado. 4.- ¿Qué margen de error hay en los análisis grafológicos? Es una ciencia humana, por lo tanto no podemos hablar de un cien por cien de acierto, y no exageraríamos si habláramos de un veinte por ciento de margen para el error. La mente humana es demasiado plástica como para encasillarla, la grafología es una buena herramienta de diagnóstico, pero resultaría osado utilizarla para pronóstico. 5.- ¿Cuales son las competencias laborales que se pueden reconocer más fácilmente con la grafología, capacidad de liderazgo, de trabajo en equipo, adaptabilidad, etc? ¿Y como se reconocen, algún ejemplo concreto? Con el retrato de personalidad que confeccionamos en un Grafoanálisis, podemos obtener la predominante de temperamento (fuerza y vitalidad para el desarrollo de la actividad, expansión) Combinación caracterológica (construcción del carácter, tipología combinada del Análisis Transaccional, Eneagrama, Heymans – Le Senne) y tipo de inteligencia (concreta, abstracta, etc.) Con ello podemos destacar si una persona reúne elementos elevados o bajos por ejemplo en Seguridad personal (escritura con firmeza, presión, eje vertical, angulosidad) Sociabilidad (escritura curvilínea, extendida o expansiva, dinámica, guirnalda), Eficiencia (rápida simplificada con equilibrio de zonas), Rebeldía (trazos en diagonal ascendente), Sumisión (curva floja, blanda, caída), manipulación (exceso de regresiones y bucles o lazos, artificios, arcada con bucle), etc. 6.- ¿ Está muy extendido el uso de la grafología en Selección de Personal? ¿Tiene muchos consultores de recursos humanos que solicitan vuestros servicios? Cada vez se utiliza más, pero también cabe decir que es una técnica bastante selecta, normalmente se utiliza con cierta discreción sobre
todo en lo referente a altos cargos donde las garantías de confidencialidad deben ser absolutas y al propio tiempo no puede molestarse al candidato con pruebas psicotécnicas.
7.- ¿Que ventajas y/o diferencias existen entre la grafologia y los tests de personalidad? La Grafología adopta una metodología de tipo clínico, con la ventaja primero de no tener al examinado delante, con la consiguiente situación tensa que le pudiera producir, por otra parte refleja no solo aspectos de tipo mental sino también psicofísico y caracterológico, es por ello que reúne tantas especialidades: Grafología médica, Grafología evolutiva, Grafopatologia, Grafología judicial, Grafología social, etc. y entre los titulados que se especializan en grafología tenemos a médicos, psicólogos, antropólogos, criminólogos, directores de recursos humanos, miembros de la policía científica, etc. 8. - ¿Es posible “disfrazar” la personalidad, modificando la escritura para que dé una mejor imagen de uno mismo?. Por ejemplo, cambiar la inclinación o la rúbrica de la firma.... La escritura forzada es detectable y una de las razones por las que existe la especialidad de Pericia Caligráfica o Grafística que deriva también de la Grafología. Una cosa es intentar hacer un currículum o carta de presentación ordenada, limpia sin tachones, pero otra es modificar la propia escritura. Si realmente la persona no ha cambiado los trazos, se observarán los frenazos, las irregularidades propias de un imitador, no de un auténtico autor. 9.- Tengo entendido que la Grafología se usa mucho en Europa continental, especialmente en Francia, y, en cambio, en el Reino Unido y los Estados Unidos casi no se emplea. ¿Es así? ¿Por qué? Efectivamente, la Grafología se utiliza mucho en Francia para selección de personal, en Italia para orientación familiar (Alemania e Italia son pioneras en la Grafología Universitaria), en España cada vez se utiliza también más en Recursos Humanos igual que en otros países europeos (también en España la Grafología se estudia en la Universidad, en este caso a nivel de postgraduados). En los países anglosajones ha costado más su introducción, ya que su desarrollo es propio de Europa, eso no significa que actualmente se estén poniendo al día, la Academia Británica de Grafología está realizando verdaderos esfuerzos y su reconocimiento oficial ha significado un impulso decisivo para la aceptación americana, sin dejar de recordar que en EEUU cada Departamento de Estado tiene su propio Gabinete Grafológico.
El Grafoanálisis en Recursos Humanos
Francisco Viñals Carrera – Mª Luz Puente Balsells
Coordinadores de Peritaje Grafopsicológico, E. Postgrau (UAB) (año 2004)
El resultado negativo de ciertos métodos de selección, por ejemplo: los clásicos
Test de Inteligencia, más preocupados por el "Cociente Intelectual" (C.I..) que por
la verdadera capacidad, disposición, adaptabilidad y objetivos de trabajo, es una de
las causas por la que muchos candidatos procuren por todos los medios
"entrenarse" en superar este tipo de selecciones.
Sorprende descubrir que en la mayoría de ocasiones han sido psicólogos
experimentados en selección, los que se han pasado al otro bando y han impartido
cursillos de formación para que el futuro seleccionado conociera a fondo no solo la
manera de "venderse mejor" sino lo que debe responder en las entrevistas y las
pruebas a que sería sometido como candidato a un puesto en el que se precisan
determinadas condiciones.
Existen en el mercado auténticos manuales con títulos como por ejemplo: "Cómo
superar una selección de personal" donde se explican los test y el significado de las
respuestas, a nivel asequible para el profano en la materia.
Ello significa que actualmente no pueden darse por válidas muchas de la
selecciones de personal. Antes fallaban las selecciones porque se atendía más al
C.l. que a la Inteligencia Emocional, a la vocación, a la creatividad, incluso a la
ética, pero ahora nos encontramos con que la conpetitividad es muy importante
como la necesidad de imagen, que "vale todo en la guerra por el puesto" y luego
vemos tristes consecuencias como la persona que no solo ha inflado el currículum
sino que ha llegado a inventarlo y la actuación directiva de algunos casos propios
de psicópata, ha producido perjuicios irreparables en la empresa.
El Grafoanalista y el Consultor en Seguridad e Investigación como colaboradores
indispensables en RRHH, no solo descubren estos peligrosos casos con antelación
a que pueda ser demasiado tarde, sino que también corroboran a los verdaderos
profesionales y personas que actúan de buena fe. El Grafoanálisis y el Informe Pre-
laboral son un sello de garantía y calidad al servicio de la difícil labor de RR.HH.
Los test de personalidad superan a los de inteligencia, pero en general (salvo los
proyectivos y gráfico-proyectivos), quedan muy limitados por dos grandes
problemas, el primero es que tienen corta vida ya que el cambio de mentalidad de
la población los convierte en inoperantes por desfase y segundo que el examinado
en un elevado tanto por ciento, contesta lo que piensa puede ser más idóneo
(teniendo en cuenta que estamos en la época de la imagen) por lo que quedan
distorsionados en la mayoría de los casos (p.e.: En un 16-PF distorsionado, sus
respuestas ya no nos dicen nada, ya no sirve).
La misma preocupación actual por la imagen, ésta tendencia a la apariencia de
perfeccionismo, es la que propicia el "maquillado" de los currículums, que en
algunos casos alcanzan el grado delictivo.
Si habíamos hablado de textos que facilitan todas las soluciones a los test e incluso
ayudan a su entrenamiento ¿Qué vamos a decir de la entrevista? aquí no solo
existe una amplia gama bibliográfica sino que continuamente aparecen artículos
en las revistas, como el de: "Cómo responder a las 10 preguntas más difíciles en la
entrevista de selección".
En criminología está comprobado que los estafadores son los que por su
cordialidad de trato, simpatía y facilidad de manipulación delante del Juez, reciben
los menores castigos en relación a cualquier otro tipo de delincuentes.
Con la implantación del jurado popular muchos abogados decidieron asistir a
clases de teatro para "prepararse adecuadamente"
¿Quién puede asegurar que lo que está diciendo el candidato es verdad, o su
simpatía y su imagen no es más que una fachada que esconde secretos
inconfesables?
En cuanto a los test o pruebas proyectivas, no es que no se puedan también
falsear, pero cuesta mucho más ¿Por qué? pues porque aquí el que trabaja a fondo
es el analista; para tergiversar un test proyectivo o gráfico-proyectivo el
examinado debería tener unos profundos conocimientos a este nivel, debería ser
un auténtico especialista en técnicas proyectivas ya que no se examina un solo
rasgo o respuesta sino todas las complejas partes o detalles del conjunto y los
intentos de falsear quedan patentes, y, dentro de este tipo de test el más efectivo
de todos es el Grafoanálisis (Grafología científica).
Sólo con el manuscrito de una página es suficiente para emitir un amplio
diagnóstico de personalidad, y, por su espontaneidad, es más fiable que los
resultados producto del esfuerzo obligado y condicionado de los tests de
inteligencia y otras pruebas que no se basan en la expresión libre.
En selección de personal la Grafología básica ayuda en una primera fase para
poder separar los escritos que muestran un buen nivel general, una cierta armo-
nía, equilibrio, respecto a los escritos que presentan un nivel negativo, -por
ejemplo: rasgos exagerados, desproporciones o rasgos muy vulgares que pudieran
demostrar demasiado subjetivismo y vanidad, juicio enfermizo o personalidades
infantiles o inarmónicas.
Ahora bien, entrando ya en Grafoanálisis (valoraciones tipológicas en percentiles)
la clasificación hipocrática de los cuatro temperamentos por la adaptación
actualizada Vels-Periot, resulta una clave básica para el Grafoanalista, tienen
asimismo relación con las Funciones Psíquicas de Jung (linfático: percibir;
sanguíneo: sentir; bilioso: pensar; nervioso: intuir). Con estos primeros datos
tenemos ya una información psicofísica que nos orienta antes de entrar en lo más
profundo de la personalidad. Muy esquemáticamente, la correspondencia
grafológica de las tendencias psicobiológicas la detectamos en, el temperamento
linfático: por la melodía gráfica, estabilidad y uniformidad, junto con la lentitud y
sensación de peso en el trazo principalmente redondeado; en el temperamento
sanguíneo: por el movimiento armónico que dilata, inclina, engrandece o
expansiona pero a la vez suaviza con grandes curvas los trazos y le imprime
relieve; en el temperamento Bilioso: por el autodominio gráfico que regula el
ritmo, con su sobriedad, simplificación, orden y concentración; en el
temperamento Nervioso: por su combinación variable de las anteriores,
caracterizando la desigualdad o inestabilidad del grafismo que aligera el
movimiento.
Con la combinación de los temperamentos disponemos asimismo de una base para
identificar los caracteres (Hermans - Le Senne):
SANGUINEO-NERVIOSO-BILIOSO = predisposición a COLÉRICO (EAP-emotivo-
activo-primario-)
BILIOSO-NERVIOSO-SANGUINEO = " APASIONADO (EAS-emotivo-
activo-secundario-)
NERVIOSO-BILIOSO-LINFATICO = " SENTIMENTAL(EnAS-
emotivo-no activo-secundario)
NERVIOSO-SANGUINEO-BILIOSO = " NERVIOSO (EnAP-emotivo-
no activo-primario)
SANGUINEO-LINFATICO-BILIOSO = " REALISTA (nEAP-no
emotivo-activo-primario)
BILIOSO-LINFATICO-NERVIOSO = " FLEMÁTICO (nEAS-no
emotivo-activo-secundario)
LINFATICO-NERVIOSO-SANGUINEO = " AMORFO (nEnAP-no
emotivo -no activo-primario)
NERVIOSO-LINFATICO-BILIOSO = " APÁTICO (nEnAS-no
emotivo-no activo-secundario)
Además de una larga experiencia profesional, la investigación socio-antropológica
demuestra que la predominante temperamental favorece determinadas directrices
profesionales, así pues:
En el temperamento Linfático, exponente de calma y constancia, nos encontramos
principalmente con aptitudes de tipo administrativo y contable o de adaptación a la
mecánica instrumental.
En el temperamento Sanguíneo (expansión-instinto social) a profesiones en que se
requiere constante dominio del movimiento, p.e: pilotos, y, especialmente la
relación social, p.e.: comerciales.
En el temperamento Bilioso con su búsqueda de "controlar la situación": funciones
directivas, ejecutivas y técnicas.
En el temperamento Nervioso es habitual que aparezcan condiciones artísticas,
también la creatividad, intuición y curiosidad puede favorecer a publicistas,
periodistas e investigadores.
Es fácil que en directivos nos encontremos con combinaciones del temperamento
Bilioso con otros: en Dirección Comercial nos podemos encontrar con una
combinación de temperamentos Sanguíneo, Linfático y Bilioso (SLB); y en
Dirección Administrativa Contable o Financiera es fácil una combinación de
temperamentos Bilioso, Linfático y Nervioso (BLN), ó bien, Flemático.
Salvo lo anterior, en general la combinación más habitual que refleja un directivo
es la del Bilioso, Nervioso y Sanguíneo (BNS) que corresponde al carácter
Apasionado (EAS).
Desde otro punto de vista del Grafoanálisis, y dentro de la Psicología Profunda,
concretamente en Análisis Transaccional (AT de E. Berne) -derivación avanzada
del psicoanálisis integrando la psicología humanista y conductista-, donde salvado
las distancias podría sustituirse: «Super Yo» «Yo» y «Ello» por «PADRE»
(Exteropsiquis) «ADULTO» (Neopsiquis) «NIñO» (Arqueopsiquis)-, hemos podido
comprobar después de una suficiente estadística que, la manifestación de los
sistemas del “Ego” se produce en una serie de exteriorizaciones de cada uno de los
Estados del Yo a modo de tipología psicoanalítica, que se identifican por
Grafoanálisis de la siguiente forma:
- «PADRE» (Regularidad): Podría desarrollarse una aptitud para trabajos como
Juez, Notario, Secretario Judicial, Registrador. Escritura del -P-: se detecta por
estabilidad de la onda gráfica, uniformidad, orden y precisión.
-«PADRE CRITICO» (Imposición): aptitud para trabajos que requieran una actitud
dominante o de mando, una necesidad de afirmación, profesionales, capataces y
mandos en trabajos en que no pueda permitirse la debilidad, la transigencia por la
dureza, peligrosidad o trascendencia de los mismos. También Suboficiales o
Instructores de las Fuerzas Armadas y Cuerpos Especiales. Escritura del -PC-:
Predominio de la rigidez gráfica, eje y presión vertical, sobrealzada y barras de
«t» altas.
-«PADRE NUTRITIVO» (Atracción vinculante, protección): aptitud para trabajos de
protección social o humanitaria (orientación Asistencia Social y Sanidad,
Magisterio, Jardin de Infancia, Monitores, Educación Especial). Escritura del -PN-:
Organizada, proporcionada, simplificada, agrupada, rápida.
-«ADULTO» (Eficacia, eficiencia): aptitud para trabajos de organización y lógica
deductiva (Consultor, Ejecutivo, Analista, Psiquiatra-Psicoanalista-Psicólogo,
Técnico-científico).. Escritura del -A-: Sobria, simplificada, vertical, proporcionada,
rápida).
-«PEQUEÑO PROFESOR» (Camuflaje, perspicacia): en la versión más femenina,
aptitud para los trabajos que requieran capacidad creativa1 representativa y
manipulación, convencer o persuadir (Comercial, Intermediario y Diplomático). En
cambio, en la versión más masculina, aptitud para la intuición y para descubrir sin
descubrirse (inventor, investigador y agente secreto). Escritura del -pp-: bucles,
arcos, plena, lazos y filiforme.
-«NIÑO ADAPTADO»: en versión «REBELDE» (refracción o contra-adaptación) las
aptitudes de Niño Rebelde son todas negativas, actividades que requieran una
motivación refractaria o de contraposición o reivindicación sistemática (Merce-
nario, cargo de oposición, ó crítica, escritor reivindicativo). Escritura del -NAR-:
angulosa-apretada y pequeña, invertida, trazos en diagonal ascendente. En versión
«SUMISO» (Blandura) actividades sin iniciativa ni responsabilidad, en que se
precise ser dirigido por otros (copia, reproducción, ayudantes). Escritura del -
NAS-: floja-blanda, lenta, descendente.
-«NIÑO LIBRE» (Libertad sin censura): actividades en que el sentimiento pueda
expansionarse sin coacciones. (Actividades artísticas). Escritura del -NL-:
fusiforme, jambas redondas, movida, descuidada, confusa, fluctuante.
Las tipologías renovadas están totalmente en boga, resultan de un gran valor
orientativo en relación a las predisposiciones profesionales del individuo, si bien
nos encontramos en ocasiones que una persona con una –predisposición- natural
para determinado tipo de actividad ha triunfado en otra completamente distinta,
por ello debemos ser flexibles y dar asimismo la suficiente importancia a la
vocación propia, interés específico; el éxito que ha ido asimilando el sujeto en una
actividad. Puede a veces resultar más importante la Psicología Profunda o Guión
Psicológico que la predisposición más Psico-biológica.
En una comparación pedagógica con vehículos, el temperamento sería como el
modelo entre furgoneta (Linfático), deportivo (Sanguíneo), turismo (Bilioso) o moto
(Nervioso), y la personalidad profunda (-AT- como derivación avanzada del
Psicoanálisis) nos indicaría en qué forma se conduce dicho vehículo; gracias a las
increíbles variedades, oportunidades y circunstancias de la vida hacen que un
coche utilitario pueda en ocasiones ganar a un deportivo, o que una moto pueda
realizar un trabajo más pesado que un camión, etc...
El Grafoanálisis resulta el vínculo más preciso que disponemos actualmente entre
la Psicología Periférica o Biológica y la Psicología Profunda, pues es la Técnica
Psicofísica por excelencia. Actualmente disponemos ya de cuadros de valoración
estadísticos para valorar con gran exactitud las combinaciones ya no solo de los
temperamentos y del carácter (Vels) sino también de las exteriorizaciones de los
Estados del Yo (AT) con su equivalencia con otras clasificaciones de moda en
EEUU como el "ENEAGRAMA" y la detección de la "INTELIGENCIA EMOCIONAL"
a través del "Adulto Integrado" (AT). No en vano las más importantes consultorías
de Recursos Humanos como p.ejem. "IOR" cuentan con un equipo de psicólogos
especializados en Grafoanálisis.
Definitivamente, entre los métodos más aconsejables en selección contamos con el
Grafoanálisis, el cual, además de corroborar sobre la veracidad expresada o sobre
el posible engaño en la forma de presentarse de los candidatos, nos orientará en
sus predisposiciones profesionales y ello unido al examen vocacional o de interés,
así como la oportuna investigación relativa al currículum, podremos determinar la
viabilidad de los finalistas para desempeñar un trabajo positivamente.
BIBLIOGRAFIA:
VIÑALS CARRERA, Francisco y PUENTE BALSELLS, Mª Luz: PSICODIAGNÓSTICO POR LA ESCRITURA, Grafoanálisis Transaccional, Ed. Herder, 1999
VIÑALS CARRERA, Francisco y PUENTE BALSELLS, Mª Luz: ANÁLISIS DE ESCRITOS Y DOCUMENTOS EN LOS SERVICIOS SECRETOS, Ed. Herder, 2003
LA ESCRITURA DEL JUGADOR PATOLÓGICO
J. Tutusaus BOLETÍN NÚMERO 28, Primer Semestre 2002 Para la elaboración del presente artículo, amén de las consideraciones psicológicas comúnmente conocidas, se ha utilizado una muestra de 25 escrituras de ludópatas en tratamiento y el artículo titulado “Gambling, its Psychology and Expresión in Handwriting” (1971) de Rudolph Hearns cuyas breves citas se reflejarán entre comillas.
En general, los jugadores compulsivos han tenido infancias infelices, caracterizadas por la soledad y el rechazo. Con frecuencia son hijos de padres divorciados o meramente huérfanos.
Gran parte de los jugadores tratan de llenar el vacío con la sensación de poder que sólo el juego puede proporcionar. Muchos de ellos son hipersensibles y su necesidad de jugar se aumenta en periodos de estrés y los propios problemas económicos del juego (dinero, trabajo y familia) intensifican la conducta de jugar.
Freud califica a los jugadores, de neuróticos, y subraya el papel de los conflictos de Edipo.
A los depresivos el juego les puede aliviar. El sujeto fracasa en resistir un impulso o tentación a llevar a cabo lo que es peligroso para sí. Antes de jugar, el jugador experimenta una tensión previa
que se aligera en el momento de llevar a cabo el acto. El juego le permite soñar despierto, aluciando capacidades y situaciones ideales. “Desconecta” con facilidad de la realidad.
Los ludópatas son dependientes de personas cuya pérdida ha sido traumática. Asimismo son inseguros, narcisistas, tremendamente manipulativos y expertos mentirosos, pues el sujeto se ve forzado a mentir para obtener dinero ocultando la magnitud del juego. De ahí que pueda caer en conductas delictivas como la apropiación indebida o la asociación con grupos clandestinos.
Experimenta sentimientos de culpa auténticos y puede caer en el suicidio.
El jugador es un neurótico con el “inconsciente deseo de perder”. Está impulsado por fuerzas sobre las cuales, el ludópata no puede ejercer ningún control; nunca se detiene cuando gana, ni aprende cuando pierde.
“El sujeto sufre un inconsciente deseo de ser castigado”. ¿Por qué, aparte de las numerosas posibilidades del placer masoquista, eligen el juego?
El ludópata tiende a la protesta contra la realidad buscando placer; se rebela contra las normas de conducta convencionales al igual que el toxicómano. Aunque por una parte existe un consciente deseo de experimentar el poder de ganar, por otra, el perder satisface la pulsión psico-masoquista. La anticipación de la derrota provee una emoción fuerte y la necesidad de una tensión constante; desean un éxito continuo, pues están aburridos de la vida diaria, deprimidos y frustrados sexualmente, todo lo cual constituye las causas más frecuentes del juego compulsivo.
Rasgos más frecuentes de la escritura del ludópata
No existen signos gráficos específicos que permitan detectar inconfundiblemente esta adicción, ni ninguna otra. Tampoco existe un prototipo de personalidad muy definido que nos muestre un estereotipo de la escritura del ludópata, en general.
En todo caso, aparecen “signos“ frecuentes que dan indicaciones carecterológicas o de conflictos internos, permitiendo hacer un “retrato” pero sin poder llegar fácilmente a ningún tipo de diagnóstico grafológico-clínico-diferencial. Es cierto, no obstante, que se pueden hallar ciertas disposiciones morales inherentes al propio comportamiento complejo del ludópata para satisfacer su adicción.
En este estudio sólo se presentarán los “signos dominantes” más específicos:
1.- Desconexión fácil de la realidad, soñando despierto para experimentar sensación de poder y nuevas emociones.
· Hampas “f”, “p” altas o ex_normales y /o infladas con jamba corta estrechada, corta y reseguida en zona media pequeña.
· Omisión puntos “i” o barra “t”.
· Puntuación alta.
· Letra “o” abierta en parte superior.
Las mayúsculas discordantes y las barras de “t” descendentes o, bajas y/o muy cortas, unido a las hampas y jambas descompensadas tiene que ver con un complejo de inferioridad descompensado.
La zona superior alta junto con zona inferior atrofiada también indica:
Miedo a ser abandonado por quién le ama.
Rechazo a ideas ajenas
Exploración insegura de la realidad
Dificultad para superar problemas aunque se muestre independiente poniendo la barrera del “no”
2. -Tendencias manipulativas exacerbadas.
· Líneas tortuosas (palabras ondulantes) = 64% casos.
· Reseguimientos (arcadas / guirnaldas)
· Finales reentrantes (ocultantes según Marchesan)
El fenómeno gráfico de las líneas tortuosas tiene, básicamente las siguientes interpretaciones:
Fuga sin ser visto ante las dificultades.
Tácticas electivas oscurecidas por la impresionabilidad.
Insinceridad a causa de las contradicciones de las convicciones.
Pase al acto con facilidad.
Reacción oportunista inesperada
Ausencia de rectitud
Adaptación simulada que procede astutamente, librándose fácilmente de lo que estorba.
Propósitos indefinidos porque sigue diversas direcciones según los intereses inmediatos.
Abuso de las debilidades del otro, maquinando insidias.
Acción caprichosa.
3. -Tendencias masoquistas.
· Óvalos pinchados
· Barras “t” declinantes o bajas, o triangulares
· Letra “q” con tilde cruzada
· Pequeña
Estos signos encierran intrapunición, sentimientos de culpa y autocrítica.
Las barras “t” declinantes son muy frecuentes e indican:
Pesimismo destructivo
Dificultad para recuperarse de la depresión.
Autocrítica a quién le duelen mucho las críticas ajenas.
Resistencia sorda o negativismo para defenderse de los reproches.
4.- Frustración sexual
· Jambas cortas, débiles, reseguidas o en forma de “pala de pelotari”
· Letra “q” con tilde.
Las jambas cortas son expresión de un complejo de Edipo de inseguridad.
5.- Dependencia
· Margen izquierdo ausente (60% de casos)
Esta ausencia de margen implica:
Necesidad de ayuda, tendencia al stress, sentimiento de culpa, inseguridad, dificultad de lucha contra obstáculos
y/ o dependencia materna o familiar.
Hemos consignado las características gráficas más frecuentes en escrituras de ludópata y puede comprobarse que casi todos los signos tienden a solaparse y a reconfirmarse entre sí en sus interpretaciones, contribuyendo a poner de manifiesto las cinco tendencias que caracterizan más frecuentemente al jugador empedernido.