Guía sobre juego y estimulación para niños hasta 3 años · PDF fileo cuentos de tela. - Juguetes que ayuden a descubrir el propio cuerpo: mordedores, ... Los niños aprenden jugando

Guía sobre juego y estimulación para niños hasta 3 años

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Guía sobre juego y estimulación

para niños hasta 3 años

1. Introducción

2. Guía de estimulación y juguetes recomendados por edad

a. 0-6 meses

b. 6 - 9 meses

c. 9 - 12 meses

d. 12 - 18 meses

e. 13 - 18 meses

f. 18 -24 meses

g. 24 - 36 meses

3. 10 consejos a la hora de elegir un juguete

4. Juegos y actividades para hacer con tu bebé.

a. 0-3 meses

b. 3- 6 meses

c. 6- 9 meses

d. 9-12 meses

e. 12- 18 meses

f. 18-24 meses

g. 24-30 meses

h. 30-36 meses



La estimulación ayuda al desarrollo creativo de nuestros bebés y, con ello, su

autoestima, su personalidad y la capacidad para solucionar situaciones

relevantes.

Para favorecer la estimulación conviene que trabajemos aspectos tan

importantes como la cognición, la motricidad, el lenguaje, la creatividad y la

inteligencia socioemocional. Además, todas estas habilidades se pueden

desarrollar a través de los juegos.

Teniendo en cuenta que cada bebé se desarrolla a su ritmo, existe una pauta,

que antes o después van cumpliendo todos los niños.

Desde que nacen, los bebés ya empiezan a mostrar sus rasgos de

personalidad y su particular forma de comunicarse y adaptarse al mundo.

A través de este documento iremos viendo una pauta en el desarrollo de los

bebés, conociendo su evolución y aprendiendo a estimularles y fomentar su

desarrollo, a través de pautas, consejos, y actividades propuestas.

Ana Molleda y Teresa Marín



Guía de estimulación y juguetes recomendados por edad:

Bebés 0-6 meses:

En los primeros meses del bebé, hacia la cuarta semana de vida, ya es capaz

de fijar la vista unos instantes en rostros u objetos, a unos 30 cm de distancia.

Por eso, a esta edad ya puedes empezar a enseñarles ciertas imágenes, libros,

o sonajeros de colgar adaptados a estas edades.

Al término del primer trimestre, el bebé ya será capaz de sostener ciertos

objetos en las manos y llevárselos a la boca; por eso en esta edad es bueno

jugar con el bebé con sonajeros que emitan algún sonido o que sean de

plástico o tela para que los pueda tocar y chupar.

Durante el siguiente trimestre, hasta los 6 meses, el bebé va ganado habilidad

en las manos, aumenta notablemente su capacidad visual, comienza a

vocalizar, es el momento de mostrarle su propia imagen en el espejo, le

divertirá mucho.

Se recomienda:

- Juguetes que estimulen los sentidos: con colores, texturas y sonidos

diferentes, como alfombras con actividades, sonajeros, móviles de cuna

o cuentos de tela.

- Juguetes que ayuden a descubrir el propio cuerpo: mordedores,

muñecos de goma.



Bebés de 6-12 meses:

Llegando al término del 6º mes el bebé ya es capaz de mantenerse sentado

apoyado entre cojines, parlotea y ya puede coger solo la cuchara, ya que su

destreza manual se ha desarrollado bastante.

Para poder seguir estimulando estas habilidades del bebé y fomentándolas,

podemos jugar con ellos con Cubos de plástico de distintos colores, pelotas o

formas que rueden, espejos y juguetes para el baño.

Hasta los 9 meses, el bebé aprenderá a girarse, descubrirá la sensación de

morder (ya que por esta época le saldrán sus primero dientes), le empiezan a

llamar la atención la diversidad de sonidos y músicas, ya es capaz de soltar un

objeto para coger otro por sí mismo y le gusta dejar caer los juguetes. En esta

etapa es cuando suele desarrollar un afecto particular hacia un peluche, un

juguete o una manta.

Los niños aprenden jugando en esta etapa, para jugar con ellos, podemos

utilizar cubos apilables, que se puedan meter unos dentro de otros, juguetes

con ruedas, cuentos de texturas, con diferentes dibujos...

Durante el último trimestre de su primer año de vida, el bebé comenzará a

gatear hacia delante, y a intentar ponerse de pie apoyado en algún sitio. Se

abren, ante él, un sin fin de posibilidades.

Además, ya va comprendiendo conceptos sencillos como dentro y fuera, le

gusta jugar a meter y sacar cosas, aprenderá a despedirse, le gusta jugar a la

pelota y ya es capaz de devolverla cuando juegan con él, va perfeccionando

el lenguaje hablado.



Se recomienda:

- Juguetes que estimulen la exploración de objetos: pelotas, cuentos de

tela y de cartón y cualquier juguete que pueda agarrar y explorar.

- Juguetes que estimulen el movimiento: fáciles de agarrar, balancines,

estimuladores del gateo.

- Juguetes que estimulen la afectividad: peluches, muñequitos de trapo.

Bebés de 13-18 meses:

A partir de los 13 meses, al bebé cada vez le gustará más ir por su cuenta y se

revelará con frecuencia, así que hay que marcarle límites claros.

Aunque aún suele perder el equilibrio, para el niño, la posibilidad de

levantarse, caminar, detenerse, ponerse de rodillas… representa la mejor de

las distracciones.

Durante estos meses el niño descubre también lo divertido que puede ser

empujar las cosas. Las sillas, mesas pequeñas, cualquier objeto que le sirva de

apoyo le viene bien para intentar empujarlo y llevarlo de un lugar a otro. Es

recomendable ofrecerle alguna silla o mueble que no sea ni muy pesada ni

muy endeble, ya que este ejercicio le ayudará a desarrollar el tono muscular.

Gracias al control de la motricidad fina el niño ya puede coger el lápiz y

realizar sus primeros trazos.

También es capaz de identificar y recordar las ilustraciones de los libros, si le

enseñas a nombrar los personajes de los cuentos, preferiblemente animales, los



empezará a nombrar y reconocerá.

Se recomienda:

- Juguetes que inviten a recorrer el espacio: las bicicletas con ruedas y los

cochecitos.

- Juguetes que les permita experimentar con las propiedades de los

objetos: los cubos para encajar y apilar, pinturas, plastilina, puzles

sencillos…

- Juguetes que estimulen el lenguaje: cuentos, música.

- Juguetes para enhebrar y encajar piezas algo más pequeñas.

Bebés de 18- 24 meses:

En esta etapa al niño le gusta probar sus capacidades motrices, como bailar,

saltar sobre ambos pies, hacer giros y jugar al balón con toda libertad.

Sus adelantos con respecto a la coordinación motriz le permiten una mayor

destreza manual. Es el momento de comenzar a utilizar la muñeca junto con el

antebrazo para abrir y cerrar puertas. Le resulta más sencillo vestirse y pasar las

páginas de los libros.

También es capaz de identificar y nombrar varias partes de su cuerpo, sus

juguetes cotidianos, los objetos familiares, los personajes de sus cuentos.

Es el momento en el que los niños disfrutan también mucho de las actividades

para desarrollar la motricidad fina, como pueden ser juegos de armar, levantar

torres o pequeñas construcciones, puzles de formas grandes y sencillas,

experimentar con sus dibujos de garabatos y manipular plastilina.



Generalmente, en esta edad, se comportan de diferente forma en casa y en

la guardería. Todavía no sabe cómo jugar con otros niños, no sabe compartir:

es la época del mío.

Se recomienda:

- Juguetes que permitan relacionar hechos: de causa-efecto, para

golpear, lanzar, meter y sacar, experimentar con el agua y la tierra.

- Juguetes que estimulen la imitación de acciones simples y uso de

lenguaje: animales y muñecos pequeños, teléfono, coches.

- Juguetes que permitan desarrollar su habilidad manual y creativa:

pinturas, pizarras, plastilina (con supervisión).

Bebés de 2-3 años:

En esta edad los niños aprenden a subir y bajar la cremallera cuando se visten

y saben usar los botones, también son capaces de ponerse los zapatos, pero

sin cordones.

Su nivel de comprensión alcanza el nivel suficiente como para conocer el

significado de las imágenes de sus cuentos, reconocer y nombrar colores,

aprender y conocer canciones infantiles que más le gustan, incluso ya será

capaz de contar hasta 10.

Durante este año, el niño aprende a controlar los esfínteres, comprende

claramente lo que tiene que hacer y avisa a su madre cuando tiene

necesidad de ir a lavabo.

Sigue perfeccionando sus trazos y esta actividad le favorece tanto el desarrollo

de sus habilidades manuales como la coordinación visual-motriz.



Se recomienda:

- Juguetes para el aire libre: triciclo, pelotas, cubos, palas...

- Juguetes para construir, encajar y mejorar su habilidad manual y

creativa: construcciones, puzzles, pinturas, papel de color, pegatinas,

plastilina (con supervisión)….

- Juguetes para imitar escenas familiares y profesionales: muñecos, títeres,

teléfonos, cocinita, comercios, enseres de médico, coches...



10 consejos a la hora de elegir un juguete:

1. Debe ser deseado por el niño.

2. Que sea seguro. Confeccionado con materiales que no se sean cortantes si

se rompen. Los colores han de ser sólidos y no tóxicos. Cuanto más

pequeño es el niño, más grandes deben ser los juguetes y sus piezas.

3. Debemos comprarlos adecuados a su edad y personalidad pensando en

la finalidad y actitudes que desarrollan en nuestros hijos, respetando su

ritmo de aprendizaje y procurando que disfruten.

4. Tengamos en cuenta su personalidad: un niño retraído necesitará juegos

socializadores (varios jugadores); y a un niño, juegos de atención, artísticos,

etcétera.

5. Que sea simple. Esto aumentará los usos que se pueden hacer con él,

desarrollando su fantasía y su capacidad simbólica.

6. No comprarlos para satisfacer un capricho momentáneo del niño.

7. No deben ser utilizados para premiar o castigar a un niño.

8. Debemos tener en cuenta que el exceso de juguetes mata la fantasía y

produce aburrimiento. Se puede guardar parte de los juguetes y volver a

sacarlos unos meses más tarde.

9. Tomar en cuenta que el niño siente la necesidad de estar acompañado

por sus padres, especialmente cuando son pequeños. Hay que equilibrar

esa necesidad con la estimulación de su autonomía y sociabilización. Para

aprender el funcionamiento de varios juegos y de disfrutar jugando con

ellos, requerirá de la presencia de los adultos.

10. En ocasiones, el niño se divierte más con cualquier objeto que encuentra

que con un juguete. Esto demuestra que está trabajando con su

imaginación y el objeto le despierta curiosidad para explorarlo.



Juegos y actividades para realizar con tu bebé.

0-3 meses: Baño de espuma

Aunque a algunos bebes no les gusta el agua, para la mayoría la hora del

baño es todo un placer. En cualquier caso, con un poco de espuma puedes

hacer que el baño resulte mucho más divertido.

Con este juego conseguiremos que el bebé conozca su cuerpo, desarrolle el

lenguaje, aumente su capacidad de atención y le estimularemos

sensorialmente.

Qué necesitamos:

· Una toalla suave para secarlo

· Una toalla para la bañera

· Una bañera de plástico

· Jabón líquido infantil

Cómo se hace:

Ante todo, el bebé tiene que disfrutar con el baño: preocúpate de que se

sienta seguro en todo momento: no dejes que resbale o se meta bajo el agua

y que el agua esté siempre tibia.



1. Pon la toalla en el fondo de la bañera de plástico para evitar que el bebé se

resbale.

2. Llena la bañera con agua templada y añade un poco de jabón líquido.

3. Mete a tu hijo en la bañera, sujetándole bien en todo momento para que

confíe en ti.

1. Siéntale para que pueda chapotear y jugar con la espuma sin ningún

riesgo. No lo dejes sólo en el agua en ningún momento.

5. Lávale mientras cantas o le explicas que vas haciendo:

Así es como nos lavamos la cara,

Lavamos la cara, lavamos la cara.

Así es como nos lavamos la cara

(Nombre del bebe) y mami.

Repite la canción nombrando las distintas zonas del cuerpo: el cuello, el

pecho, la espalda, los brazos, las piernas, los dedos…

Otra opción es meterte con el bebé en la bañera grande y báñate con él. Pon

dentro algunos juguetes de plástico o utiliza una esponja con la forma de un

animal.



De 3 a 6 meses: Locomotora

Ahora que tu hijo se sostiene sentado podéis jugar a la locomotora y hacer un

pequeño viaje para que disfrute con el paseo y con el paisaje. Lo único que

necesitas es una caja de cartón.

Con este juego desarrollaremos el equilibrio del bebé, favoreceremos el

control del cuello y la cabeza y estimularemos su seguimiento visual.

Qué necesitamos:

· Una caja de cartón de 60 x 45 cm de ancho y 30 cm de alto

· Manta suave o toallas

· un trozo de cuerda de unos 2 m

Cómo se hace:

1. Pinta la caja de modo que parezca una locomotora. O un avión,

un coche, un barco o cualquier otro vehículo.

2. Busca una caja en la que tu hijo quepa sentado y corta la parte

superior de forma que pueda apoyarse y ver por encima.

3. Haz dos agujeros en la parte frontal de la caja, uno a cada lado.



4. Pasa la cuerda por los agujeros y haz unos nudos en los extremos.

5. Forra la caja con mantas o toallas para que el niño este

protegido y cómodo.

6. Coge la cuerda y arrastra a tu hijo por toda la casa o por el jardín

en su pequeña locomotora. Arrastra la caja despacio para que no se

haga daño en el cuello y no se asuste con ningún movimiento brusco.

Evita las escaleras y otras superficies irregulares.

6 a 9 meses: Tambor

Los niños tienen mucho ritmo, y desde que son pequeños les gusta dar golpes y

hacer ruidos. Aprovecha esta capacidad para convertir a tu hijo en un

percusionista amateur.

Con este juego aprenderá la relación causa-efecto, estimularás su capacidad

auditiva y desarrollaremos su ritmo y coordinación.

Qué se necesita:

· Una trona

· Una cuchara de madera, una escobilla y otros palillos

· Objetos para golpear: papel de aluminio, un cuenco de plástico,

un molde de pasteles, papel de periódico, etc…

Cómo se hace:

1. Sienta al niño en la trona o en el suelo.

2. Dale una cuchara de madera y enséñale a golpear con ella la

bandeja.



3. A continuación dale la escobilla y el resto de los palillos, uno

cada vez.

4. Después dale diferentes objetos para que de golpes en ellos:

papel de aluminio, un cazo, un cuenco de plástico, un molde de

pasteles, una hoja de periódico… Vigila a tu bebe para que no se haga

daño con los palillos.

5. Ponte algodón en los oídos para que no te duela la cabeza (es

una broma).

De 9 a 12 meses: Tirar-empujar

Dale a tu hijo juguetes para empujar y tirar para que pueda apoyarse en algo

mientras aprende a controlar las piernas. Estará tan concentrado en ellos que

se mantendrá en pie y andará solo sin darse cuenta.

Con este juego aprenderá la relación causa-efecto, desarrollaremos la

motricidad gruesa y comenzará su camino de la exploración y la

independencia.

Qué necesitamos:

· Para empujar: una segadora de juguete, un carrito de la compra

pequeño, un coche de muñecas…

· Para tirar: un carrito, un juguete móvil con una cuerda o un

animal de peluche con correa…

· Una zona despejada

Cómo se juega:



1. Busca varios juguetes para que tú bebé los empuje o tire de ellos.

Puedes comprarlos o hacerlos tú mismo con un poco de ingenio.

2. Despeja una zona amplia, a ser posible sin alfombras para que no

haya obstáculos.

3. Puesto que empujar es más fácil que tirar, dale primero un

juguete para que lo empuje. Ponle las manos en las asas y ayúdale un

poco hasta que pueda hacerlo solo. Si tu hijo no sabe andar todavía,

ponle las manos en las asas de los juguetes y muévete con él.

4. Cuando haya jugado un rato con los juguetes de empujar dale

los otros para que tire de ellos. Si aún se apoya en los muebles para

andar, ponle el asa del juguete en la mano y enséñale a moverse

apoyándose en los muebles o en ti. Si todavía no camina, átale una

cuerda alrededor de la cintura, sujeta un muñeco de peluche en el otro

extremo y deja que lo arrastre mientras gatea.

De 12 a 18 meses: Sonidos ocultos

Ayuda a tu hijo a desarrollar su capacidad auditiva con este apasionante

juego. Cuantos más sonidos haya mejor se lo pasara intentando averiguar cuál

es su origen.

Con este juego aprenderá la relación causa-efecto, desarrollará la capacidad

auditiva y aprenderá a resolver problemas.

Qué necesitamos:

- Varios objetos que hagan ruido: un cascabel, un sonajero, una bocina,

un palito, un muñeco que hable… No utilices objetos con sonidos fuertes

para que tu bebe no se asuste.

- Una manta pequeña

Cómo jugamos:



1. Pon los objetos sonoros en fila en el suelo.

2. Tápalos con una manta para que tu hijo no pueda verlos.

3. Sienta al niño en el suelo junto a la manta.

4. Quita la manta y haz que suenen todos los objetos, uno detrás de

otro.

5. Vuelve a taparlos.

6. Levanta un poco la manta y haz sonar uno de los objetos.

7. Luego destápalos todos para que tu hijo descubra cual ha

sonado. Si tiene dudas haz que suenen todos otra vez para ayudarle a

reconocer el sonido. Felicítale cuando lo consiga.

8. Tapa los objetos para jugar de nuevo.

Una vez que el niño haya jugado se intercambian los papeles: él deberá hacer

sonar los objetos y el adulto adivinarlos.

De 18 a 24 meses: Bebé Bailón

Tu hijo tiene mucho ritmo. Lo único que tienes que hacer es poner la música

para que comience a bailar. Únete a él y veras que bien os lo pasáis.

Con esta actividad aprenderá coordinación y equilibrio, reforzará control

motriz y la interacción social y estimularás su capacidad auditiva.

Qué necesitamos:

· Un CD

· Música de baile

· Una zona despejada. Asegúrate de que el suelo no resbala para

que el niño no se caiga.

Cómo se juega:



1. Haz una selección de diferentes tipos de música: clásica, pop,

rock and roll, hip-hop, salsa.

2. Lleva al niño a la “pista de baile” y conecta el aparato. Deja que

baile como quiera siguiendo el ritmo de la música.

3. Cambia de música y observa cómo cambia de movimientos

para adaptarse a la nueva melodía.

4. Al cabo de un rato explícale que cuando apagues la música os

debéis quedar paralizados. Luego vuelve a ponerla para seguir

bailando. Apaga la música de vez en cuando para adoptar posturas

divertidas.

5. Continuad bailando con distintos tipos de música e inventando

pasos originales.

De 24 a 30 meses: ¿Puedo, mami?

A medida que tu hijo desarrolle su capacidad verbal aprenderá a responder

de manera adecuada a las preguntas, los comentarios y las órdenes que

reciba. Ayúdale con este juego que servirá para desarrollar su motricidad

gruesa, el lenguaje, la capacidad auditiva y le ayudará en la interacción

social.

Qué necesitamos:

· Una cuerda o cinta adhesiva

· Una zona despejada

Cómo se juega:

1. Pon una tira de cuerda o de cinta adhesiva en un lado de la habitación y

traza una línea paralela a varios metros para marcar la línea de llegada.



2. Coloca al niño detrás de una de las líneas y dile que espere tus instrucciones.

3. Sitúale en la línea de llegada.

4. Explícale a tu hijo que antes de hacer lo que le indiques debe pedir permiso

y decir ¿Puedo, mami?

5. Dile por ejemplo que de tres pasos.

6. Espera a que pregunte ¿Puedo, mami? Y respóndele “Si o No”. Si le das

permiso, espera a que de tres pasos y luego dale otra orden.

7. Si se le olvida decir ¿Puedo, mami?, deberá volver al punto de partida y

comenzar de nuevo.

8. Cuando consiga cruzar la línea de llegada intercambiad los papeles.

De 30 a 36 meses: ¿Qué ha pasado?

Con este juego ayudaras a tu hijo a desarrollar su capacidad para pensar y

resolver problemas. Y te sorprenderá con sus repuestas.

Desarrollará su capacidad mental-cognitiva, el lenguaje, la resolución de

problemas y ayudaras a su interacción social.

Qué necesitamos:

- Fotografías de situaciones emotivas o curiosas: un gato subido a

un árbol, un niño llorando, una bebida derramada, un niño

sorprendido, un juguete roto, un plato con poca comida

- Unas tijeras

- Cartulina

- Pegamento



Instrucciones:

1. Busca varias fotografías que representen situaciones que den que pensar,

como las que se describen en la lista de materiales.

2. Recorta las fotos y pégalas en trozos de cartulina para manejarlas con más

facilidad.

3. Siéntate en el suelo con tu hijo y coge una fotografía.

4. Pregúntale ¿Qué ha pasado? Poniendo cara de sorpresa y encogiendo los

hombros. No utilices fotografías que puedan poner nervioso a tu hijo o sean

muy complicadas. El juego debe ser fácil y ameno.

5. Déjale tiempo para pensar y dar una respuesta. Si necesita ayuda dale

pistas.

6. Cuando se imagine lo que ha ocurrido, pídele que te ayude a resolverlo,

pregúntale ¿Qué podemos hacer?, y pasa a la siguiente fotografía.

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