Habermas

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Filosofia

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TRES MODELOS DE DEMOCRACIASOBRE EL CONCEPTO DE UNA POLITICA DELIBERATIVA

Modelo Liberal

Conforme a la concepcin liberal, el estatus del ciudadano se corresponde en sus principioscon el ideal de constitucin del individualismo burgus. Esta clase de modelo est estrechamente vinculado con el sentido de la libertad burguesa: libertad personal, propiedad privada, libertad de contratacin, libertad de industria y comercio, etc. El ciudadano dentro de este modelo se encuentra definido por los derechos subjetivos que las personas tienen frente al Estado y los dems ciudadanos. El Estado aparece como el servidor, rigurosamente controlado, de la sociedad. Como portadores de derechos subjetivos los ciudadanos gozan de la proteccin del Estado mientras persiguen sus intereses privados dentro de los lmites de las leyes. El Estado queda sometido con esto a un sistema cerrado de normas jurdicas o, sencillamente identificadas con ese sistema de normas en la medida en que la formacin democrtica de la voluntad comn de ciudadanos atentos solo a sus propios intereses, solo puede ser un elemento dentro de una constitucin que ha de disciplinar al poder de Estado mediante dispositivos normativosque desarticulen el trafico social autnomo de las personas privadas. De esta forma, los derechos polticos dan al ciudadano la posibilidad de hacer valer sus intereses privados de modo que estos puedan al cabo (a travs de las elecciones, de la composicin del parlamento y del gobierno) agregarse con otros ingresosprivadoshasta formar una voluntad poltica que seacapaz de ejercer una fuerte influencia frente a la administracin. Dentro de este modelo liberal los ciudadanos actan como actores particulares que operan como variables independientes en los procesos de poder, los cuales discurren de forma ciega debido principalmente a que en los actos individuales no puede haber obviamente decisiones colectivas tomadas de forma consciente.

El modelo liberalconsidera que el orden jurdico se construye a partir de los derechos subjetivos. En la media en que se considera a la persona jurdica como portadora de derechos subjetivos es posible atender o determinar en cada caso particular que derechos asisten a tal o cual individuo.

Para la concepcin liberal la naturaleza del proceso poltico vendra a ser no ms queuna lucha o competencia de los actores polticos por aquellos cargos en los que se puede disponer del poder administrativo. En la medida en que la concepcin liberal considera a la poltica como la competicin entre actores colectivos que actan estratgicamente con el fin de conservar sus posposiciones de poder o hacerse con tales posiciones, los partidos polticos para entrar en la dinmica de la competencia electoral, se ven en la necesidad de equiparse de una organizacin centralizada y burocratizada que cumpla la funcin de mantener una continua presencia del partido en el mercado poltico. Las decisiones de los ciudadanos mediante el vototienen bajo este modelo de democracia, la misma estructura que los actos de eleccin de quienes participan en un mercado orientndose a obtener el mayor provecho posible. En ltimas, lo que exige este modelo de participacin poltica a los votantes es noconsiderar otro inters que el propio de cada uno.

Modelo Republicano

El estatus del ciudadano dentro de la concepcin republicana est definido, al contrario que el del modelo liberal, por un esquema de libertades polticas que garantizan laparticipacin de los ciudadanos en los asuntos pblicos, en los asuntos que conciernen a todos en la comunidad. Mientras que en la concepcin liberal el ciudadano solo participa (a travs de la eleccin de representantes polticos) de una forma indirectaen las decisiones polticas, en la concepcin republicana el ciudadano participa de una forma directa en los asuntos pblicos, el ciudadano es participe de un proceso inclusivo de formacin de la opinin y la voluntad poltica. En la concepcin republicana el ejercicio de la ciudadana no se reduce solamente al control de la actividad del Estado en la proteccin de los derechos subjetivos privados, en la proteccin de los ciudadanos contra el abuso del poder poltico, sino que se manifiesta en la formacin de sujetos polticamente responsables de una comunidad de libres e iguales que buscan legitimar las decisiones poltica en el marco de una sociedad que garantice los derechos de la participacin y comunicacin poltica. Dentro de este modelo republicano la ciudadana, el conjunto de los ciudadanos es considerado como un actor colectivo.

El modelo republicano por su parte considera que tales derechos subjetivos se deben ms bien a un orden jurdico objetivo que posibilita a la vez que garantiza laintegridad de una connivencia en donde todos se respetan y se consideran. La legitimidad de este orden jurdico objetivo radica para la concepcin republicana, en el procedimiento democrtico que garantiza la participacin de todos los interesados en lacreacin de las leyes. Mediante esta auto organizacin poltica de la sociedad, los ciudadanos constituyen el medio a travs del cual la sociedad se constituye como un todo, se torna consciente de s misma como totalidad.

Para la concepcin republicanalos espacios de deliberacin publica de los asuntos polticos en donde se da la formacin de la opinin y la voluntad comn, ni obedecen a las estructura de los procesos de mercado, ni mucho menos se pueden reducir a espacios en donde se da una competenciao lucha de los diferentes actores polticos por el poder. Ms bien son espacios en donde se da una comunicacin pblica orientada al entendimiento. La poltica vista desde esta perspectiva dialgica se convierte en un proceso de razn dirigido principalmente a la consecucin de un acuerdo referente a la forma de ordenar aquellos aspectos de la vida que se refieren a la relaciones sociales de las personas; la deliberacin se convierte en el medio por el cual se llega a un consenso de fondo entre los ciudadanos que se basa en la comn pertenencia a una misma cultura y que se renueva en los rituales en que se hace memoria de algo as como de un acto de fundacin republicana. De esta forma, la comunicacin poltica hace posible la forma de un consenso sin coerciones y el tipo de intersubjetividad que legitima el uso del poder administrativo bajo la base de polticas que surgen del proceso democrtico deliberativo.

Modelo Deliberativo

Habermas destaca del modelo republicano la importancia que le da ala autocomprensin de los grupos sociales que se produce por medio de una comunicacin o dialogo no coaccionado de todos con todos delcual se deriva el modelo de una identidad recprocamente formada del yo y la idea de una armona social verdadera. Peroencuentra desventajas en este modelo que tienen que ver, por una parte, con la idea demasiado idealista de hacer depender el proceso democrtico solamente de las virtudes de los ciudadanos orientados al bien comn; y por la otra, con el estrechamiento tico de los discursos polticos que se da en este modelo, al intentar reducir los temas de inters pblico a los temas relacionados con la identidad colectiva y la autocomprensin de una comunidad de hombres que conviven y hablan entre s. Para Habermas aunque estos temas relacionados con la autocomprensin tica de aquellas comunidades que buscan determinar su identidad colectiva son importantes dentro de los temas pblicos, existen intereses y orientacionesvalorativas que en ningn modo son elementos constitutivos de la identidad de la comunidad en su conjunto, son intereses que a pesar de que no se encuentra dentro de los objetivos polticamente relevantes para la gran mayora de la comunidad social, exigen un tratamiento o acuerdo que no puede, por sunaturaleza netamente jurdica, reducirse a un acuerdo o un compromiso que pueda alcanzarse mediante discursos ticos.Siel derecho polticamente establecido bajo este contexto quiere demostrar su legitimidad, debe, segn Habermas, estar en conformidad con principios morales que pretenden validez general ms all de los lmites de una comunidad jurdica concreta.

Ahora bien, como la formacin de estos compromisos vienen precedidos por un conflicto de intereses que no se puede resolver en el plano de los discursos ticos, el acuerdo a que se llegue no se llevara a cabo, segn Habermas, en la forma de un discurso racional que neutralice el poder y excluya la accin estratgica. La formacin informal de la opinin puede desembocar para Habermas endecisiones electorales institucionalizadas y en resoluciones legislativas por las que el poder producido comunicativamente se transforma en poder utilizable administrativamente. Por lo que la configuracin de una voluntad comn no slo debe lograrse pormedio de la autocomprensin tica, sino tambin mediante acuerdos de intereses y compromisos, mediante la eleccin racional de medios en relacin a un fin: tanto la poltica dialgica como la poltica instrumental pueden entrelazarse en el medio que representan las deliberaciones siempre y cuando estn suficientemente institucionalizadas las correspondientes condiciones de comunicacin.

Debido a que dentro de la perspectiva de la elaboracin de una teora de la accin comunicativa aplicada a la democracia,la lengua cumple la funcin de la integracin social o coordinacin de planes de diversos actores en la interaccin social, el tercer modelo de democracia deliberativa que Habermas propone se ve obligado a enfrentarse al problema de cmo se da la relacinde los que participan en los procesos comunicativos orientados a un acuerdo poltico, se ve obligado a preguntarse por las condiciones de comunicacin bajo las cuales el proceso poltico le otorga a la forma institucionalizada de la opinin su fuerza legitimadora.

Adems de lo anteriormente mencionado, el modelo deliberativo de Habermas se caracteriza porque toma elementos tanto del modelo liberal como del modelo republicano de democracia y los articula de una manera distinta. Del modelo republicanocoincide en colocar como eje central de los asuntos pblicos el problema referente a la formacin discursiva de la voluntad y de la opinin poltica, pero dndole a su vez un trato importante a la constitucin en trminos de Estado de derecho. Al considerar que la poltica deliberativa no puede hacerse depender exclusivamente de las virtudes de los ciudadanos orientados al bien comn, como bien lo hace el modelo republicano, los derechos fundamentales y los principios del Estado de derecho, constituyen unasolucin consecuente que muestran la forma en la que pueden ser institucionalizados los exigentes presupuestos comunicativos del procedimiento democrtico.

De esta manera, la teora discursiva para Habermas no hace depender la realizacin de una polticadeliberativa de una ciudadana capaz de actuar colectivamente, sino de la institucionalizacin de los procedimientos democrtico que se obtiene mediante un acuerdo que es producto de la deliberacin de los distintos actores polticos interesados. El modelo deliberativo de democraciaya no opera, como hace el modelo Republicano, con el concepto de una totalidad social centrada en el Estado, que pudiera representarse como un macro sujeto que acta orientado por fines. Tampoco la teora discursiva localiza aesa totalidad en un sistema de normas constitucionales que regulen de manera inconsciente el equilibrio de poderes e intereses segn el modelo desarrollado por el trfico mercantil como ocurre de hecho en el modelo liberal. Pero al igual que ocurre con elmodelo liberal, en el modelo deliberativo se respetan los lmites entre el Estado y la sociedad, pero aqu la sociedad civil, como base social de una esfera pblica autnoma, se diferencia tanto del sistema econmico de accin como de la administracin pblica.

Con lo anterior el modelo deliberativo de democracia de Habermas logra establecer un tipo de relacin distinta entre los tres tipos de recursos (el dinero, el poder administrativo y la solidaridad) a los que nuestras sociedades tienen que recurrir para satisfacer sus necesidades de integracin normativa y de regulacin sistemtica. Mientras las implicaciones normativas del modelo deliberativo se reflejan en la institucionalizacin de los procedimientos democrtico que se obtiene mediante un acuerdo que es producto de la deliberacin de los distintosactores polticos interesados. el poder de la solidaridad que, para Habermas, debera poder afirmarse frente a los otros dos poderes, el dinero y el poder administrativo, se manifiesta en la integracin social que se da en los proceso de formacin de la voluntad comn como en los mismos presupuestos comunicativos del procedimiento democrtico de corte deliberativo.