Habitar En La Presencia Del Señor (III Parte) (La Adoración) Anciano Fernando Álvarez Guatemala, 25 de noviembre del Año De La Abundancia

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1

Los últimos cantos que hemos aprendido en la congregación, han sido de mucha bendición porque hablan de la palabra del Señor, por ejemplo el canto que dice que Dios se ha acordado de los olvidados, tal como lo hizo con aquel hombre, Mefiboset de la casa de Saúl, olvidado por todos, a quien el rey David llama para hacerle misericordia, para bendecirlo, devolverle todo aquello que le había sido quitado y para que fuera a vivir con él al palacio. De igual manera, el Señor esta llamando a aquellos que se sienten olvidados para mostrarles misericordia, bendecirlos y devolverles lo que les fue robado. No importan la circunstancias y las condiciones en que nos encontremos, pues también vemos a aquella mujer de Sarepta que solo tenia provisión para hacer un par de tortas, para ella y para su hijo, y luego esperaría morir; el Señor le pide que haga comida para el profeta, Dios le pide que sea obediente a la palabra y a partir de este día, ella tuvo abundancia en su casa, no faltó la palabra y la unción, y pudo compartir con todos los necesitados una palabra de bendición. Aquella mujer que iba a ser apedreada, que estaba a punto de morir, pero el Señor Jesucristo decretó que ese no era el fin de su vida, si no que le preguntó ¿dónde están los que te acusan?. A muchos el Señor nos dice hoy que no nos acusa y que no estarán más aquellos que nos acusan, pues Él nos ha vindicado. Salmos 91:1-2 LBLA El que habita al abrigo del Altísimo morará a la sombra del Omnipotente. 2 Diré yo al SEÑOR: Refugio mío y fortaleza mía, mi Dios, en quien confío. Psalms 91:1 KJV He that dwellethH3427 in the secret placeH5643 of the most HighH5945 shall abideH3885 under the shadowH6738 of the Almighty.H7706 La palabra abrigo es H5643 séter que significa cubierta, escondedero, esconder, ocultamente, en inglés está traducido “lugar secreto”, lo que nos da a entender que el Señor quiere que estemos en su presencia, en el lugar secreto de su habitación, lugar destinado para el Esposo y Su amada, el lugar de amores. Salmos 27:4-5 LBLA Una cosa he pedido al SEÑOR, y ésa buscaré: que habite yo en la casa del SEÑOR todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura del SEÑOR, y para meditar en su templo. 5 Porque en el día de la angustia me esconderá en su tabernáculo; en lo secreto de su tienda me ocultará; sobre una roca me pondrá en alto. Estos versículos muestran lo que el salmista, el rey David, anhela y nos comparte. Vemos que hay dos pares de palabras importantes en este pasaje, he pedido y buscaré; y contemplar y meditar. Contemplar es ver algo fijamente; meditar o inquirir, es ver algún objeto o cosa, y sacar conclusiones al respecto de ello. Ahora bien, para contemplar y meditar sobre la casa del Señor o sobre el templo, debemos estar allí. Esto implica no solo el hecho de pedir, buscarlo y contemplarlo, sino movernos y estar allí.

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En el antiguo pacto, solo los sacerdotes podían llegar al lugar santo, pero por medio del sacrificio del Señor Jesucristo, nosotros tenemos la oportunidad de entrar al lugar santo y luego al lugar santísimo y de poder estar allí toda la vida si así lo creemos y queremos.

Al entrar al lugar santo estaban los panes de la proposición, el candelabro y el altar del incienso. Ahora bien, si contemplamos lo que hay dentro del templo, podemos ver que los panes significan el sustento, figura de la palabra, los cuales estaban en dos filas de 6 panes cada una, que hacer referencia al número de libros que tiene la Biblia, que son 66. Nos queda pues, inquirir en la Palabra del Señor, donde encontraremos promesas que al agregarles fe, se pueden hacer vida en nosotros.

Veamos ahora lo referente a la adoración, en cuanto a las ofrendas en el templo, solo la sangre entraba hasta el lugar santísimo, pero había elementos y utensilios que entraban hasta el lugar santo. Levítico 16:12-13 LBLA Y tomará un incensario lleno de brasas de fuego de sobre el altar que está delante del SEÑOR, y dos puñados de incienso aromático molido, y lo llevará detrás del velo. 13 Pondrá el incienso sobre el fuego delante del SEÑOR, para que la nube del incienso cubra el propiciatorio que está sobre el arca del testimonio, no sea que Aarón muera. Uno de los utensilios básicos del sacerdocio era el incensario, podemos ver en el siguiente pasaje su función en el oficio sacerdotal. Números 16:36-39 LBLA Entonces habló el SEÑOR a Moisés, diciendo: 37 Di a Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que levante los incensarios de en medio de la hoguera, pues son santos; y esparce allí las brasas. 38 En cuanto a los incensarios de estos que han pecado a costa de sus vidas, que se hagan de ellos láminas batidas para cubrir el altar, puesto que los presentaron ante el SEÑOR y son santos; y serán por señal a los hijos de Israel. 39 El sacerdote Eleazar tomó los incensarios de bronce que habían presentado los que fueron quemados, y a martillo los hicieron una cubierta para el altar, El contexto de este pasaje es la rebelión de Coré, en donde prevaleció el sacerdocio de Aarón, pero el énfasis que queremos hacer, es que los incensarios eran instrumentos santos, instrumentos en las manos del Señor, que si están en manos equivocadas pueden provocar condenación. Podemos decir entonces que, somos como incensarios declarados instrumentos santos del Señor, quien subió al cielo para ministrar delante de la presencia de Dios; siendo Él el Sumo Sacerdote, y aún con todas las malas ministraciones que pudimos recibir antes de venir a Él,

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nos considera santos. Esto aplica también para los padres que hemos dedicado nuestros hijos al Señor, atándolos al altar, pues aunque ahora estén descarriados y lejos de las promesas, regresaran al Señor a cumplir el propósito por el cual vinieron a esta tierra, pues han sido dedicados y declarados santos. En el libro de Hebreos, existe una constante declaración sobre que el Señor Jesucristo es nuestro Sumo Sacerdote, dándonos una ventaja en el pacto que nos fue dado, pues la Palabra dice que es un pacto mejor que el antiguo. Hebreos 2:17 LBLA Por tanto, tenía que ser hecho semejante a sus hermanos en todo, a fin de que llegara a ser un misericordioso y fiel sumo sacerdote en las cosas que a Dios atañen, para hacer propiciación por los pecados del pueblo. Hebreos 4:15 LBLA Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros , pero sin pecado. Hebreos 5:10 LBLA siendo constituido por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec. El hecho de que el Señor haya sido tentado en todo, lo hace misericordioso hacia nosotros, porque habiendo pasado por tentación, nos entiende cuando nosotros pasamos por ella, pero esto no significa que tengamos permiso para pecar continuamente, sino que debemos tener presente que Él ya pasó por este camino, sin pecar. En este nuevo pacto, nuestro Señor, habiendo pagado el precio de nuestra redención, quiere que seamos instrumentos útiles en sus manos, instrumentos de alabanza y adoración para nuestro Dios, lo cual se puede apreciar en los siguientes versículos: 2 Timoteo 2:20-21 LBLA Ahora bien, en una casa grande no solamente hay vasos de oro y de plata, sino también de madera y de barro, y unos para honra y otros para deshonra. 21 Por tanto, si alguno se limpia de estas cosas , será un vaso para honra, santificado, útil para el Señor, preparado para toda buena obra. Existen entonces dos clasificaciones de los vasos o instrumentos, una atendiendo el material del que fueron creados, y otra atendiendo el propósito o fin para el cual fueron hechos. Ahora bien, el Señor quiere que seamos preparados para ser vasos de honra y para hacer buenas obras, pero para poder llegar a esto debemos limpiarnos, refiriéndose a limpiarnos del pecado. Tal es el caso de aquella mujer que hizo una buena obra, al ungir al Señor antes de su muerte, dice la Biblia que ella derramo perfume y limpió los pies del Señor con sus cabellos y fue limpia de sus pecados, amaba mucho porque le había sido perdonado mucho y no le importó lo que pensaran de ella.

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A veces las malas ministraciones, del mundo, de los padres y de las congregaciones, hacen que nos consideremos inútiles, pero en la palabra vemos el caso de un hombre que fue ministrado y reengendrado por el apóstol Pablo, Onésimo, un hombre que se consideraba inútil y al recibir la ministración adecuada, se convierte en un instrumento útil para la obra de Dios. Este ejemplo nos dice que dentro de las funciones de los verdaderos apóstoles, está el restituir y convertir lo que no era, en lo que debe ser. Adicionalmente, el hecho de no reconocer un ministerio apostólico solamente nos privaría de una herramienta de edificación poderosa. Todos hemos sido llamados a ser instrumentos útiles en las manos del Dios, y no importa las ministraciones que recibimos en el pasado, Él nos ve por medio del Señor Jesucristo y nos quiere trasladar a una nueva dimensión para hacernos útiles en sus manos, para que podamos alabarle y adorarle. Levítico 16:12 LBLA Y tomará un incensario lleno de brasas de fuego de sobre el altar que está delante del SEÑOR, y dos puñados de incienso aromático molido, y lo llevará detrás del velo. Este versículo nos indica que la adoración es el incienso aromático molido que podemos llevar al lugar santísimo, debe ir acompañada del fuego de Dios, manifiesto en nuestras vidas. Levítico 10:1-2 LBLA Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron sus respectivos incensarios, y después de poner fuego en ellos y echar incienso sobre él, ofrecieron delante del SEÑOR fuego extraño, que El no les había ordenado. 2 Y de la presencia del SEÑOR salió fuego que los consumió, y murieron delante del SEÑOR. Podemos ver en la Palabra, que hubo algunos que quisieron ofrecer fuego extraño, en nuestro caso, esto puede ser el tratar de utilizar los métodos del mundo en la alabanza y la adoración, cosa que el Señor abomina; y la consecuencia fue, en el caso de estos hombres, que fueron consumidos por el fuego del Señor. Un principio es entonces, que debemos ser llenos del Espíritu Santo, es decir, del fuego de Dios, para poder ofrecer una alabanza y adoración genuinas, pues el Espíritu nos conduce a toda verdad. Éxodo 30:34-36 LBLA Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Toma especias, estacte, uña aromática y gálbano, especias con incienso puro; que haya de cada una igual peso. 35 Con ello harás incienso, un perfume, obra de perfumador, sazonado, puro y santo. 36 Y molerás parte de él muy fino, y pondrás una parte delante del testimonio en el tabernáculo de reunión donde yo me encontraré contigo; santísimo será para vosotros. Veremos ahora los elementos mencionados en este pasaje: Estacte H5198, se puede traducir gota, del H5197 que se traduce “hablar por revelación”, lo cual significa que en el lugar santísimo, es decir, en la presencia de Dios, se habla por revelación, que es también una de las características que debe tener la adoración verdadera, es decir, que debe ser revelada por el Espíritu Santo.

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La uña aromática H7827, aparentemente este elemento se extrae de la concha de un molusco; que para nosotros podría ser en todo caso, el corazón transformado, pues esta concha la debían triturar hasta hacerla polvo, esto nos indica un verdadero arrepentimiento. Gálbano H2464 de la raíz H2459 que se puede traducir como grosura, lo cual nos habla de abundancia. Este componente del incienso aromático, que significa adoración, nos indica que nuestra boca va a hablar de la abundancia que hay en nuestro corazón. El cuarto componente es el incienso puro, que son las oraciones de los justos. La composición del incienso aromático nos muestra que, de lo que hay en nuestro corazón, de eso hablamos en la adoración, palabra revelada, por guianza del Espíritu Santo. No debemos preocuparnos entonces a la hora de elevar un cántico nuevo, pues si hemos inquirido en las Escrituras y en la oración, el Espíritu Santo sacará lo que hemos escudriñado para cantarlo como una adoración verdadera. Números 4:16-17 LBLA Pero la responsabilidad de Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, será el aceite para el alumbrado, el incienso aromático, la ofrenda continua de cereal y el aceite para ungir. Tendrá la responsabilidad de todo el tabernáculo y de todo lo que en él hay, con el santuario y sus enseres. 17 Después el SEÑOR habló a Moisés y a Aarón, diciendo: La palabra responsabilidad se traduce también visitación, el nombre Eleazar significa ayudador, por lo cual podemos decir que la visitación del ayudador se manifiesta en el incienso aromático que es la adoración. Una de las características de los verdaderos cristianos es que por medio de la visitación constante del Señor a nuestras vidas, Él terminará la buena obra que ha iniciado, dándonos el fuego que transforma, para poder convertirnos en vasos útiles en sus manos.