NUESTRO PERSONAJE ================ CONVERSACiÓN CON

HERBERT

HOH _ Gloria Ortega Mufloz' - Francisco La Roche 8rier"

(·Conservadora de Entomología del Museo de Ciencias Naturales de Tenerlfe ... Miembro de la Asociación)

¿ Có mo empezó tu interés por Canarias?

La primera vez que oí hablar de Ca narias fue hacia el año 1962, cuando era un joven estudiante de Biología en la Uni versidad de Marburgo (Alemani a). Yo

era a lumno del Dr. Reinhard Remanc, espec ialista en chinches, que en aquella époe.. partic ipaba en un proyec to para estu,diar la fauna del archipiélago . Me asombraba el gran conocimiento que tenía

sobre los insectos y un día, al preguntarle cómo podia difercnciar a tantas cspecies diferentes. me respondió: ¿cómo recono­ces a tu abuelo?

al caso de las islas Gal<ipagos. Así encon­tré un tcma importante de mi estudio y, creo que también, el tema principal de la biología: la evo lución de los organismos .

Unos 20 años después, le o frecieron a Bárbara. mi mujer, un trabajo en el Colegio Alemán de Santa Cruz de Tencrifc e inmediatamcn te me su rg ió la idea de aprovechar la ocasió n para estudiar la fauna de abejas y avispas de Canarias. que eran los insectos que más me interesaban y a los que me había dedicado antes en otros lugares de l mundo.

¿Cómo nació tu interés por la nat u-

Fue RC!1lt1nc qu ien me habló de lo inte- raleza? resan te que cran los cndemismos de Mi in terés por la bio logía se remonta a Canarias y de [a importancia de estas islas mi niñez, en un peq ueño pueblo a lemán para el estudi o de la evolución, se mejante entre Marburgo y Kasscl (llamado

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NUESTRO PERSONAJE r::::::=============== Nassencrrurth) que es tá rodeado de coli~ el Übersee-Museum (Museo de Ultrama r)

nas y bosques, tenía un lago, pantanos y de Brcmen. un museo con los departamen­cié nagas, un río con anuentes, donde no tos de Historia Natura l, Etno logía y

pude evitar relac ionarme co n lodo tipo de Comercio, con casi lOO em plea dos.

plontas y animales. Al principio obscrva-ba animales acuáticos, y utilizaba unos recipientes grandes de crista l (origi nal­

mente para dulces que vend ía mi tío en su tienda pequeii.a) como acuarios, no tanto

para peces sin o para in sectos y aIras an i­malitos acuáticos. Yo no sabía los nom­

bres científi cos de los grupos pero pude

distinguir y es tud ia r [as distintas espe­cies. su co mporlmnien lo, có mo se comen

entre sí, y así adquirí mis primeros cono­

cimientos dc la eco logía.

lA los II OllaS, por la sugere ncJa

'Ji. de un artícu lo en una revi!iUl

loca l, forme ulla " Asociación

panl la Conservación de la Naturaleza en

Nassenerfurth" , con dos amigos. Nuestra

tarea principa l era la alim entación de los

pájaros en el invierno, que ad emás nO!i

daba muchas ocasiones de observación. El

amor a los pajaros me quedó desde enton­

ces, y luego , de adulto, orga nicé muchas

excu rsiones para enseñar los páj aros y sus

cantos a otros aficionados. Muy temprano

decidí que quería estudi ar Cienc ias

Natural es, así que estud ié bio logía en la

Univer!iidad de Marburgo, donde acabe

rea lizando mi Tesis Doctora l. que versaba

sobre la comun icac ión en la Abeja de la

Mie l. La comunicación entre organismos

e!i otro tema - al lado de la evo lución­

que me ha fascinado toda mi vi da .

¿Qué tr a baj o rea liza bas en el

Musco'?

Al pri ncipio mi cargo era Conservado r

(Curalor) de Insectos, encargado de la

conservac ión e incremento de las colec­

ciones, realización de exposic iones e

investigación. Luego fui jefe del departa­

men to de His toria Natural. El Musco tiene

una superficie de casi 12.000 m' de expo­

s ic iones sobre todos los contine ntes.

Tuvimos que rea lizar una renovación

co mpleta, con un co ncepto nuevo que

intentó integrar los aspectos de cultura y

natu ralezn para cada una de las grandes

regiones de la Tierra . Plasmamos Ins ideas

en un libro, a partir del cual se rea lizó el

di seño de las exposiciones. Yo contribuí

en la parte de la Hi storia Natural. Además

de las exposiciones proyecté y realicé

otras muchas, entre ellas una sobre la evo­

lución desde el " Big Bang" hasta la actua­

lidad , co n los grandes pasos y fenómenos

más interesantes de la evolución y los fac­

tores que determinaban su curso.

¡,Nos puedes conta r tu s vi aj es por di stinta s pa rtes del mundo?

Mi primer viaje profes iona l fue en

1971 a Costa Rica con tres colegas del

M useo de Bremen y otTaS dos personas

que se costearon el viaje; una de ellas era

Bárbara, mi mujer, que también es bióloga.

El Museo eumplin 75 ailos y por esta razón

Después de la tesis conseguí trabajo en se organizó el viaje, con el objetivo de

10 ----------" MAKARONESIA L' ---------­BokIiln de ," AsociacI6n Amigos 00, MllSOO de C",ncius Nmure,e" de Tonen!o

I

================= HERBERT HOHMANN

incrementar la co lccción de piedras y rósi­

les. plantas. in sectos y Olros animales.

lf) o, aquel t;empo cont ;nunbn "a­baja ndo en e l lema de mi Tes is

Doc toral sobre la comunica­

ción en la Abeja de In Miel. Me pregun­¡aba cómo IJ egllTon ¡¡ adquirir un "len­

guaje" lan avanzado, trabajando con sí m­

bolos abs tractos como nosotros. Es dec ir. me interesaba la evo lución de aq uel len­

guaje. De estudios de olros co legas sab ía

que en los trópicos existen parientes de la

Aheja de la Miel. abeja s socia les si n

agu ijón (Mel iponi nae) en cuya co muni­

clIción no interviene la danza si no ot ros métodos. Mi objetivo era es tudiar éstos e

invest igar s i existían estados intermedios

de comunicación hasta la danza de la Abeja de la Miel. Así que en Costa Rica

empecé mis est udios sob re la cOllluni co­

ción de las Me liponinae. que cominuc un

oño mas tard e en Papúa Nucva Guinca ,

junto con mi muj er.

Aprovechamos un Congreso fnl er­

nocional de Entomologío que se celebraba

en Australio. donde además conoc imos

especialistas interesantes de abejas, y co le­

gas de Nueva Gu in ea que me ayudaron

posteriormente en el estudio de las abejas.

Tenia entonces 32 aflos y pasamos en

Nueva Guinea un aiio enlero. Desde mi

niñez tenía el deseo de ver este país mi ste­

rioso e interesantí simo, y este deseo se

reforzó en mi Musco, que se dedicaba a las

cult uras y la naturaleza de paises lejanos.

De Nueva Gui nea el Musco tiene casas

enteras. canoas. tambores y otros in stru-

mentos de mús ica, mascaras y muchos

Olros objetos impresionantes, espec ial­

mente de lu región del río Sépik. des tino

de nuestro viaje.

Buse:íbamos un lugar con selva vi rgen

para estudiar los abejas soc iales y ulti

encontramos el lugar idóneo. accesible en

canoa y con gente muy amable. Nos ayu­

duron mucho. por ejempl o en la büsqueda

de los nidos de abejas en la selva. y s iem­

pre quedabamos impresionados de cómo

se podían orientar sin que existi eran ca mi ­

llas vis ibles para nosotros. Cuando éramos

nosotros los que encabcz:íbamos la fila.

nos perdíamos rápidamente, lo que motivó

bromas de nuestros amigos indígenas. El

pueblo don de hici mos el es tudio de la s

abejas se llamaba Wagu y estaba situado a

1 lerocrt con su mujer l1órnarn en Nueya Guinea.

NUESTRO PERSONAJE

"

"

"

• •

cuatro horas en canoa de ai ro poblado

mayor (Alllbunl i) en

el Distrito del Sépik

Oriental. Los pobla­

dos allá están situa­

dos en un sistema de

ríos y pantanos y la

conexión entre ellos

es bastante dific il.

Por eso en los pue­

blos tenían la costum­

bre de dejar lIna casa

libre para los huéspe­des y nos alojamos en

una de ellas. No tuv i­

mos que pagar nada

por nuCS lm estanc ia ,

pero comprábam os

fru ta, pescado y otra comida, y el combus­

tible para la canoa.

La gen te del pueb lo c¡lsi no ten ia dinero ni

lo necesi taba para

vivir; ac tuaban !TIU­

cho con trueque. Nos impactaron muchís i­

mo lus impresiones

que tuvimos en Nue­

va Guinea y que nos

influyeron después en

Mariposas de Callarias dihujadas por Ileroen Ilohnmnn.

la vida ¿normal? en Alemania. Casi no ha Borneo, Belicc, Perú, Islandi a Costa Rica

pasado un día en que no recordemos algo de nuevo y otros más), s iempre en viajes

de aquel año. privados. aunque recolectando material

para el Museo. A Bárbara y a mi siempre Posteriormen te viaje y co lecte insectos nos atrajeron lugares con selva a nu estras

e hice estudios de abejas en otros

(Baleares, Marruecos. Kenia.

lugares

Nepa l.

es paldas y arrecires de cora l delante. ya

que éstos pueden co nsiderarse como las

12 --------~, MAKARONESIA L' --------­

SOII!lln da lRASo<:iación Am~ d<'l Muw<> da CI<>r.da. N"lural ... "" T8tIMife

================= HERBERT HOHMANN

"selvas" del mundo manno por la gran biodiversidad que albergan y además por­que nos gusta mucho bucear.

¿Có mo surgió la idea de ve nir a Canarias'!

Después de l trabajo que le ofrecieron a Bárbara en el Co legio Alemán de Santa Cruz en 1981 , surgió para mí la posibili­

dad de estudiar en estas Islas los dos lemas que siempre me interesaron : las abejas y la evolución, a través de los ende­mismos canarios. Solicité una excedencia de tres años y nos vinimos a Tenerifc. Una de las primeras cosas que hice fue co ntac­tar con el Museo de Ciencias Natura les

para conocer a algún especiali sta en abe­jas y avispas, y me encontré con un grupo

de colegas que me brindaron una hospita­lidad que nun ca o lvidaré. especialmente Gloria Ortega, que en esa época estaba rellli zllndo su Tesis Doctoflll sobre un grupo de taxones de avispas parásita s y

que me puso en contacto con Paco La Rache. Entre todos acabamos reali zando

el primer estudio global sobre las abejas y avispas de Canarias y su relac ión con la nora. al que acabó uniéndose Jac into Barquin con sus investigaciones sobre las honn igas. En la realización de estos estu­

dios fuimos los pioneros en la apli cac ión

luc ión biológ ica. Si en 1832 Cha rl es Darwin, al reca lar en Canarias con el " Seag!c", hubiera desembarcado en

Tenerifc, probablemente habria sido en ¡liS Canarias y no en las Galápagos donde hubiera sentado la base de su teoría evolu­tiva , ya que en Canarias ex iste un elevado numero de especies, tanto animales como

vegetales, exclusivas de este archip iélago y que al igual que en Ga lápagos derivaron de las que en su dia llegaron más allá de los mares. La gran variedad de altitudes, superficies, orografias, suelos. historia s geológicas, condiciones climáticas, y dis­

tintas distancias al continente africano ha influido en la historia del poblamiento y en el proceso evo lutivo posterior relacionado con e l aislamiento de las pob laciones.

Como consecuencia de estas peculiarida­des ambientales. muchos laxones se dife­renciaron de un ancestro común y dicron lugar a multitud de formas in sulares.

Nuestro trabajo de las abejas y avispas de Canarias ha podido establecer que más de la mitad son endémicas, así como multitud de relaciones con la Flora Canaria; este trabajo ha sido la base para que Olros investigadores profundicen en la compleja trama de la evo lución de la que todavía

conocemos muy poco.

de la cartografía digital. ¿Cómo ves el im pacto del turismo sob re la ra un a de avispas y abejas?

¿Q ué ce pa rece especia lmente intere- Como muchas espec ies de abejas y sa nCe de la Faun a Ca na ria? avispas necesitan zonas so leadas y areno-

Como ya mencioné. uno de los ¡ntere- sas para vi vir y nidificar, por supuesto ses constantes a lo largo de mi vida ha sido existe una compelencia con los curistas, a

el lema de la evolución. En particular las los qu e le s gustan las mi smas cosas. islas Canarias son un laboratorio de la evo- Aunque parece claro qui én va a ganar esta ~

--------~i MAKARONESIA I~-------­Boieiln de lA AIocIIoc:I/lrO Amigoo del Museo de CieI'IcIas NIturain oe T~

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NUESTRO PERSONAJE c::=============== lucha de intereses. me parece necesario que ¿Qué haces a hora e n tu ti emp o

se respete la vida de estos animales con libre? independencia de los intereses económicos Me gusta ha cer cosas nuevas que no

y rcserVllf o proteger algunas zonas para hacía anles. Practi ca mos un poco la agri-

esta parle importante de la Fauna Canaria. cultura y la apicultura y producimos parle del alimento que nos comemos.

¿ Has notarlo ca mbios ell la isla desde haciendo un camino corto de la comida a qu e \'iniste por primera vez'! la boca y viendo de forma gratifi canlc

Sí. muchísimos. sobre lodo en las carre- cómo crece lo que culti vamos. Pero en

teras y en la construcción. La gente aún no olras ocas iones se pierde la cosecha por parece muy mentalizada sobre la conserva- los fuertes vie ntos o por acción de la s dón y defensa de la naturaleza. Pero no plagas. En este último caso, lo que hago oc urre só lo aquí; también en Alemania, es aba ndona r por un tiempo el cultivo donde participé en movimi entos eco logis- dañado y dedicar el terreno a olro objeti ­

ta s para la defensa y educación eco lógicas. va. Hace dos años. por ejemplo. la plaga Un logro. por ejemplo, fue conseguir salvar de una mariposa afec tó la cosecha de un bosque cercano a donde viv iamos. papas que tenía y dejé que el terreno También participé en la lucha cont ra de la fuera invadido por sonajas (EchiulII p /lIl1 -

instalación de una planta nuclear cerca de IlIgilleulII) para que libara n las abejas, Brcnlen, si n obtener éxito alguno (aunque obteniendo una miel riquisima. luego en Alemania han cesado de construir nuevaS centra les nucleares).

¿Q ué te impulsó a don ar tu colección de abejas y Musco de Tcnerifc?

avispas de Canarias al Ciencias Natural es d e

Ya desde el inicio de los trabajos en

Canarias tenia claro que al final una parte del materia l reco lectado se quedaría en el museo de Brelllen y la otra parte nuis importante. con los especimenes tipos. en Tenerife. Estoy convencido de que este material debe estar en un Museo público. En Aleman ia he

conocido colecc iones particulares muy importantes realizadas con esmero, rigor y dedicación por sus dueños, que tras su falle­cimiento han terminado desapareciendo debido al descu ido de sus herederos.

g Ira cosa que oc upa pacte de mi t iempo es e l dibujo de insectos . Primero rea li zo los

dibujos a mano , a continuación los escaneo y les doy los co lo res adecu a­

dos por o rdenador.

¿Qué insec tos pintas? He acabado e l conjunto de mariposas

diurnas de Ca naria s pero también he pin­tado mariposas exóticas, sólo por la bel le­za de las formas y colores. Para mi lam­bién es un modo de estudiar la diversidad

de especies. formas y co lores, que al mi smo tiem po me perm ite es lud iar y admirar la evoluc ió n. Es una forma de homenaje a la biodivcrsidad y a la belleza

que la evolución ha creado. •

14 ----------~, MAKARONESIA ". ---------­l!oIlrm ÓIt la Asoo;w;i¡)n AmiOOI del Muse<> <II! CIII!ldas NalU.¡oIes de TIIfII!<1f1!