Introducción.

En una hospitalaria tierra al este del estado de Oaxaca, limitando con tierras al sur de Veracruz, se encuentra una región que en los años 50´s con tierras fértiles, montañosas, inhabitables por lo menos por civilizaciones modernas, grandes regiones inexplotadas, incomunicadas, ricas en reservas naturales como ríos, arroyos, lagunas, maderas finas, animales salvajes, pesca, tierras laborables, fertilizadas por la naturaleza, ahí está un risueño pueblito de quien en éste trabajo vamos a hablar un poco, para conocer su historia, saber cómo vivieron desde un principio, los que de alguna manera tuvieron la suerte o el infortunio de ser ellos los que se arriesgaron a llegar y sufrir las consecuencias de lo que hasta alguna época fuera tierra inhóspita para la civilización.

No se sabe a ciencia cierta qué tribus habitaron la zona, ni en qué tiempo lo hicieron, los vestigios que ellos dejaron nos demuestran sin lugar a dudas que existieron culturas post o prehispánicas; como objetos de barro y piedra en los que demuestran su grado de avance cultural que desarrollaban. Hay una posibilidad, aunque hipotética, de que esos pobladores hayan dejado sus tierras acosados por los conquistadores españoles y eso motivó que se fueran a tierras altas a lo que hoy son los Mixes. Otra de las posibles razones del abandono de estas tierras es que hacendados ambiciosos les fueron despojando de sus posesiones hasta replegarlos en las altas serranías o que alguna epidemia haya acabado con los pobladores; pero lo real es que cuando estas tierras fueron descubiertas estaban en poder de una compañía que se llamaba Mexicalán Fraccionadora que era representada por el señor Francisco Hurtado, que al perder el amparo, las tierras quedaron libres de problemas jurídicos.