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2 de diciembre de 2012 Nº 2.644 María, mujer de fe Semanario de la Diócesis de Segorbe-Castellón hoja parroquial La Purísima. Imagen de la Congregación de Hijas de María Inmaculada de Villarreal

Hoja Parroquial del 2 de diciembre de 2012

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María, mujer de fe. Mons. López Llorente: "María, madre y modelo de fe". Fallece D. Herminio Pérez. Acción católica y trabajo. Visita pastoral a Burriana. Celebraciones de la Purísima. Entrevista con Gemma Arrufat, presidente de la junta de Purissimeres de Vila-real

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2 de diciembre de 2012Nº 2.644

María, mujer de feSemanario de la Diócesis de Segorbe-Castellón

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La Purísima. Imagen de la Congregación de Hijas de María Inmaculada de Villarreal

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María, «Modelo de Fe» e «Imagen de la Iglesia»El Santo Padre, nos invi-ta a vivir el «Año de la Fe» de la mano de la Purísima Virgen María, «Modelo de Fe» e «Imagen de la Iglesia», a la que le confía este tiem-po de gracia. San Agustín, en el siglo V, refiriéndose a la fe de María afirma que Ella es grande, no porque concibiera al Hijo de Dios en su vientre, sino porque lo concibió primero en su corazón con la fe. Esto hizo de María Inmaculada la primera creyente, la pri-mera discípula de Jesús, la primera cristiana. Y así lo registró el evangelio, con la inspirada exclamación de Isabel: «Feliz tu por haber creído» (Lc 1, 45).

La fe es la nota más característica de la actitud espiritual de María, que la abrió a la acción de Dios y permitió que el proyec-to de Dios se realizara en Ella y, por medio de Ella, en todos nosotros. Cristo es esencialmente el fruto de esa fe, que es don y con-quista al mismo tiempo. No ha existido criatura al-guna que se pueda compa-rar a la fe de Nuestra Ma-dre Inmaculada, ya que su vida requirió de su corazón una fe paradójica y heroica capaz de poder responder en plenitud al misterio al cual se le llamó y en el cual siempre viviría.

Toda su vida terrena fue una «peregrinación de fe» (cf. Lumen Gentium, 58). Porque caminó, como nosotros, entre sombras y esperó en lo invisible. Co-noció las mismas contra-dicciones de nuestra vida terrena. Se le prometió que a su Hijo se le daría el tro-no de David, pero cuando nació no hubo lugar para Él ni en la posada. Y María

siguió creyendo. El ángel le dijo que su Hijo sería lla-mado Hijo de Dios y que su Reino no tendría fin, pero lo vio calumniado, traicionado, condenado, y abandonado a morir en la cruz como un maldito. A pesar de ello, creyó María «que se cumplirían las pala-bras de Dios», y que «nada hay imposible para Dios».

Esta Mujer de fe, Ma-ría Inmaculada, Madre de Dios, se nos ha dado por modelo en nuestra peregri-nación de fe. Aún siendo Inmaculada y toda Santa, María es una persona ple-namente humana, mujer sencilla, humilde, pobre, servicial. Es una mujer ex-cepcional, pero susceptible de imitar. La Purísima Vir-

gen, tuvo una fe ejemplar. De María aprendemos a aceptar la voluntad de Dios en todas las cosas. De Ma-ría aprendemos a confiar también cuando parece ha-berse eclipsado toda espe-ranza. De María aprende-mos a amar a Cristo, Hijo suyo e Hijo de Dios.

Don y tarea en la fe de María

María no sólo recibió la fe como un don, fue tam-bién una mujer abierta a un largo, difícil y sufrido aprendizaje como discípula de Jesús. En el drama del Calvario, la fe de María permanece intacta y alcan-za su máxima expresión. Al decir que María estaba de pie junto a la Cruz, el evan-

gelista san Juan (cf. Jn 19, 25) nos da a entender que María se mantuvo llena de valentía y dignidad en ese momento dramático. Cier-tamente, fue la fase más dura de su «peregrinación de fe» (cf. LG, 58). Pero Ella pudo estar de pie por-que su fe se conservó firme. En la prueba, María siguió creyendo contra toda espe-ranza, que Jesús era el Hijo de Dios y que, con su sacri-ficio, transformaría el des-tino de la humanidad.

«La fe es la garantía de los bienes que se esperan, la certeza de las realida-des que no se ven» (Heb. 11,1). Y se activa por la caridad que nos conduce a la práctica de las obras de misericordia. Tres pilares sostuvieron el Corazón de María al pie de la Cruz: su fe inconmovible, su firme esperanza y su amor pro-fundamente sacrificial. De la Purísima Virgen, María Inmaculada, aprendemos a vivir en fe, esperanza y caridad en nuestras propias cruces.

+ Texto elaborado a par-tir del artículo de la re-vista “La Mensajera”, Vila-real 2012

FCO. JOSÉ CORTÉS BLASCO.

Reportaje

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María, madre y modelo de la feQueridos diocesanos: Nos disponemos a entrar en el Adviento, el tiempo que nos prepara para el encuentro con Cristo Jesús, el Hijo de Dios, que viene y se nos da en la Navidad. Siempre y más aún en el Año de la fe, María nos acompaña en este tiempo como madre y mo-delo de fe en Dios. En ella podemos contemplar que la fe es un regalo de Dios, fruto de su gracia, y, a la vez, una adhesión confiada a Dios.

Dentro del Adviento ce-lebramos a María en la fiesta de su Inmaculada Concep-ción, en la que recordamos la preparación radical a la ve-nida del Salvador al encuen-tro con toda la humanidad. En la Inmaculada recorda-mos que María, por haber sido elegida para ser la Ma-dre del Salvador, ha sido a la vez agraciada por Dios con dones a la medida de su mi-sión de ser la Madre del Hijo de Dios. En nuestra Señora, Dios obra maravillas: es lla-mada a la existencia llena de la gracia y del amor de Dios, libre del pecado original.

Dios toma siem-pre la iniciativa y sale al encuentro del ser humano. La Inmaculada nos muestra el verdade-ro rostro de Dios: Dios es amor, crea por amor y para la vida eterna en su amor. Dios busca al ser humano, alejado de él por el pecado, para llenarle de su gracia, vida y amor. Lo primero que hace Dios es saludar. ‘Alégrate’, dice el Angel a María; un saludo que llama a la alegría y que pone de manifiesto la alegría misma de Dios al entrar en relación con nosotros, una relación que trae la salud verdadera, la salvación. En la Virgen María se manifiesta por vez primera el plan di-vino de Salvación trazado por el amor misericordioso de Dios “antes de la creación del mundo” para todos.

María responde al amor de Dios con una fe confiada y con una total disponibili-dad y entrega de su persona a Dios. “He aquí la esclava del

Señor, hágase en mi según palabra” (Lc 1,38). María vive toda su existencia desde la verdad de su persona, que sólo está en Dios y en su amor. La Virgen sabe muy bien que, sin el amor de Dios, ella es nada, y que,

sin Dios, toda vida huma-na sólo produce vacío exis-tencial. María sabe que está hecha para acoger el amor de Dios y para darse por amor. Por ello vivirá siempre en Dios y para Dios. María, aceptando su pequeñez, se llena de Dios, y se convierte así en madre de la libertad y de la dicha.

Por su fe, María es la ma-dre y modelo de todos los creyentes. Dichosa por ha-ber creído, María nos mues-tra que la fe y la vida en Dios es nuestra dicha y nuestra victoria, porque “todo es posi-ble al que cree” (Mc 9, 23). La Virgen es además la primicia de la humanidad redimi-da. La “plenitud de gracia”, que para María es el punto

de partida, es la meta para todos los hombres, que aco-gen con fe el amor de Dios ofrecido en Cristo. Dios nos ha creado “para que seamos santos e inmaculados ante él” (Ef 1, 4). En la Virgen, Dios, dador de amor y de vida, irrumpe en la historia hu-mana. Dios no deja a la hu-manidad aislada y en el te-mor. Dios busca al hombre y le ofrece vida y salvación; Dios lo ama de modo per-sonal, sólo quiere su bien y lo busca con un designio de gracia y misericordia. En un mundo egoísta y desespe-ranzado, la Inmaculada nos ofrece un mensaje de amor y de esperanza. En un contex-to que invita a prescindir y suplantar a Dios, María nos invita a abrirnos al misterio de Dios y a acogerlo con fe. Solo en Dios y en su amor está la verdad del hombre. Sólo en Dios lograremos de-sarrollar lo mejor que hay en nosotros.

Con mi afecto y bendi-ción,

Tribuna

(*) Obispo de Segorbe-Castellón

por Juan Manuel Gil¿Dónde ha quedado la doctrina de la inmortalidad del alma?La meta de la vida no se consigue a través de la fuerza de la vida misma, ni mediante la purificación, sino a través del diálogo con el Creador. Por eso se puede hablar, según Ratzinger, de una inmortalidad dialogal. Ya que el Crea-dor no solamente ama al alma, sino también al hombre, tiene que llamar-se “resurrección de los muertos igual a resurrección de los hombres. Esta in-mortalidad dialogal corresponde a cada hombre concreto. Y esto significa ser el que dialoga con Dios, y que el hombre es aquel ser, que está abierto a Dios.

Entonces no queremos que se hable sencillamente de la inmortalidad del alma, a no ser que uno añada inmedia-tamente que el alma no es distinta del cuerpo. Y que tener un alma espiritual significa ser amado como hombre por

Dios, ser llamado a un diálogo eterno. Y que en ese diálogo eterno, Dios no cesa de hablar al hombre. Y sobre la base de esta palabra creadora de Dios, el hombre no se pierde en la muerte. La inmortalidad por tanto es la salvación del hombre cuando responde libre-mente y con amor a la llamada de Dios.

Si el concepto de inmortalidad del alma que hemos explicado, inmor-talidad dialogal, se refiere al hombre como un todo, entonces este concepto implica también lo que se quiere decir con resurrección de los muertos, o re-surrección de la muerte. Pero Ratzinger exige una materialidad de la resurrec-ción y con ello en el fondo no recla-ma ninguna referencia al cadáver. Esa materialidad que reclama Ratzinger, esa corporalidad, tiene una referencia

con aquella materialidad que pertene-ce a corporeidad del hombre como un todo, que se ha explicado anteriormen-te.

En la resurrección de todos los hombres, es decir, la salvación de la hu-manidad como un todo, queda perfec-cionada la resurrección de los muertos. Y esto se fundamenta en el concepto bíblico de que Jesucristo resucitado es el Adán de los tiempos finales, repre-sentando la Cabeza de la nueva huma-nidad.

Ha comenzado la creación nueva en Él y a través de Él. Importante: la exigencia de una materialidad de la re-surrección, como hemos explicado más arriba, pretende mantener despierta la esperanza en el futuro de la creación entera, y no solo del hombre.

Mons. Casimiro López Llorente *

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Vida Diocesana

La Acción Católica General promueve la solidaridad laboral

La Acción Católica Gene-ral ha estado manteniendo durante dos años grupos de trabajo y reflexión sobre el desempleo. Como conclu-siones, proponen cambios estructurales para manifestar la solidaridad en el medio laboral, como “el reparto del trabajo estructural, mediante las reducciones de jornada, jubilaciones tempranas que conlleven empleo juvenil o pactos inter-generacionales que superen los agravios comparativos”.

El 17 de noviembre, ex-puso sus conclusiones en un acto público en el que parti-ciparon 300 personas y que se celebró en Castellón, en una acción coordinada con el resto de diócesis españo-

las. El gesto que resumía las conclusiones estuvo vincula-do al símbolo de las manos: manos de personas concretas que están en el paro y que piden ayuda, y manos exten-didas para ayudar desde la visión que ofrece la doctrina de la Iglesia y el compromiso concreto.

En el manifiesto conclu-sivo, se defiende el carácter de dignidad humana y de aportación al bien común

del trabajo por encima de in-tereses meramente económi-cos o especulativos. También se constatan las consecuen-cias que el paro inflige tanto a personas como a familias. Al mismo tiempo, reclaman a los poderes públicos que aseguren a todos los habi-tantes los mínimos básicos, universalizando el derecho a la sanidad y la educación, y hacen un llamamiento a adoptar un estilo de vida

más sencillo y moderado en el consumo, de modo que sea más “justo para el hom-bre y para la naturaleza”.

La Acción Católica, que incluye tanto adultos como jóvenes y niños, manifiesta su compromiso para colabo-rar a cambiar la percepción del desempleo, de modo que se den respuestas colectivas a problemas personales. Tam-bién reivindican una ciuda-danía activa, que participe en “estructuras de decisión (sindicatos, partidos políti-cos, instituciones públicas), en coherencia con nuestro ser Iglesia, con el fin de que estas estructuras de poder estén al servicio del ser hu-mano, dentro de su medio social y natural, y teniendo la luz del Evangelio como guía”.

El sacerdote D. Hermi-nio Pérez Güémez falle-ció el 18 de noviembre a los 89 años. El pasado mes de abril, recibió el título de Prelado de Su Santi-dad, en reconocimiento a los servicios prestados a la Iglesia diocesana durante largos años. Mons. Casimi-ro López Llorente presidió la misa exequial en la S.I. Catedral de Segorbe, con-celebrando también Mons. Juan Antonio Reig Pla, an-terior obispo de la Diócesis. Por voluntad propia, fue enterrado en el panteón de los sacerdotes de su querida parroquia de Bechí.

D. Herminio nació en 1923 en Camarena de la Sierra (Teruel). Ingresó en el Seminario de Zaragoza en 1934, siendo ordena-

do sacerdote en 1947 en Teruel. Obtuvo la licencia-tura en Teología Dogmáti-ca en la Universidad Ponti-ficia de Comillas. En 1954 fue nombrado párroco de Bechí, que en aquel tiempo pertenecía a la Diócesis de Teruel. Tras ser incorpora-da a la Diócesis de Tortosa, fue a partir de 1960 cuan-do pasó a formar parte de Segorbe-Castellón. A partir de 1961 se traslada a Segor-

be, donde ejercerá diferen-tes ministerios pastorales en la Curia diocesana: Canci-ller-Secretario de Cámara, Notario Mayor, Pro-vicario General, Agente de Preces, Delegado de Estadística, Delegado Diocesano de Medios de Comunicación, Delegado adjunto de Apos-tolado Seglar, y Profesor del Seminario de Segorbe.

Todas estas tareas las asumió con gran dedica-

ción y esfuerzo para poner en marcha la nueva curia diocesana. Además asumió otras tareas: Director del Boletín Oficial del Obis-pado, Juez Prosinodal, responsable de las Casas Abadías, Vicario Episcopal de la zona de Plana Sur y Secretario del Consejo de Gobierno, Canónigo arci-preste de la S. I. Catedral, Vicario General, miembro del Colegio de Consulto-res, Juez diocesano y, por último, Canciller-Secre-tario General y Delegado de Asuntos Matrimonia-les. Todos los servicios los ejerció con generosidad, prudencia, celo pastoral y amor a la Iglesia, ganándo-se la consideración y afecto de sacerdotes, religiosos y laicos, que le trataron en el desempeño de sus respon-sabilidades.

REDACCIÓN. CASTELLÓN.

REDACCIÓN. SEGORBE.

Fallece el sacerdote D. Herminio Pérez, prelado de honor del Papa

PATRONA DE AMÉRICA

18h en la Parroquia de la Sagrada Familia(Ronda Magdalena, 45 – Castellón)

9 de diciembre

Ntra. Sra. de GUADALUPE

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Vida Diocesana

Con el cambio de mes, la visita pastoral al arcipres-tazgo de Burriana, que está bajo la advocación de la Vir-gen de la Misericordia, llega a su ecuador. Comenzó el 4 de noviembre y se realizará hasta vísperas de Navidad, concluyéndose el 23 de di-ciembre. Hasta la fecha, el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, ha visitado las parroquias del Salvador, la de Nuestra Señora del Niño Perdido y la Parroquia del Carmen.

La Visita se inauguró con una Eucaristía solemne en la Parroquia del Salvador en la que participaron todos los sacerdotes y religiosos del ar-ciprestazgo y muchos fieles de las distintas parroquias.

A partir de ese día el Obispo ha ido visitando las distintas comunidades parroquiales. En cada una de ellas ha te-nido un encuentro con la comunidad presidiendo la Eucaristía y reuniéndose con los grupos que existen en las parroquias.

Enfermos y niñosMomentos intensos de

la visita son el encuentro del

Obispo con los enfermos y con los niños de catequesis y de confirmación. Él ha ido a las casas donde están los impedidos o enfermos y les ha administrado el sa-cramento de la Unción de enfermos y les ha dado la Comunión Mons. López Llorente también ha visita-do los colegios que existen en la demarcación de cada parroquia, teniendo uno o

varios encuentros con los alumnos a los que les explicó el sentido de la Visita a par-tir de los signos distintivos del Obispo: báculo, solideo, cruz pectoral.

Dentro de las visitas a las realidades que constituyen la Iglesia diocesana en este arciprestazgo, el Obispo se encontró con las hermanas carmelitas del convento de las Alquerías del Niño Per-dido, rezó por los difuntos en el cementerio, y visitó la Residencia de Caritas, la Caritas Interparroquial, y las ermitas. Dentro de los contactos de la Visita Pas-toral, mons. López Llorente saludó a las autoridades de Burriana y a los empleados del ayuntamiento en el con-sistorio donde firmó en el libro de honor.

Durante este mes de di-ciembre se llevan a cabo diversas iniciativas de soli-dad cristiana en forma de hogares fraternos y mercadi-llos. Como ya está llevando a cabo desde hace años, la Delegación Diocesana de Enseñanza abre un espacio en el que se puede adquirir ropa, objetos del hogar y otros productos a buenos precios para ayudar a perso-

nas y familias con necesida-des. El Hogar Fraterno está situado en la calle Goberna-dor, 2 y su horario es de lu-nes a jueves de 10h a 13h, y de 17 a 19h. El viernes abre solo por la mañana.

Por su parte, Manos Unidas inauguró la semana pasada su mercadillo solida-rio que este año responde al lema de la campaña anual: “La salud, derecho de to-dos: actúa”. La iniciativa estará abierta hasta el 9 de

diciembre en la Sala de Ex-posiciones de la Fundación Dávalos Fletcher, (c/ Isaac Peral, 12-14, Castellón) con un horario de 11 a 14h y de 18 a 21h. La recaudación irá destinada al desarrollo y pro-moción de la mujer tribal en Coda (India).

La tercera propuesta se realizará en Atzeneta del Maestrat con motivo de la Feria de la Inmaculada, y sus beneficios se destinarán al Hospital de Kabinda, en la

República Democrática del Congo. Se trata del proyecto paradigmático de la Asocia-ción Alliances Internationa-les, ONG de la Comunidad de las Bienaventuranzas, que desde los años 80 atiende a un territorio de 225.000 km2 con una población de 600.000 personas. Por la cercanía a la ciudad de Goma, al este del país, y a causa de la guerra en la zona, corre el riesgo de quedar des-bordado.

REDACCIÓN. BURRIANA.

REDACCIÓN. CASTELLÓN / ATZENETA.Iniciativas de solidaridad cristiana

La visita pastoral al arciprestazgo de Burriana llega a su ecuador

Delegación de Enseñanza, Manos Unidas y Bienaventuranzas

Visita del Obispo a los enfermos

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Segorbe. Día 8 de Diciembre. - S.I. Catedral. 19’00. Vísperas y Pontifical pre-sidido por el Obispo de la Diócesis. La Purísima es patrona de la Ciudad de Segorbe.

Castellón.Día 8 de Diciembre. - S.I.Concatedral. Fiesta del Portal de la Purísi-ma y Calle de Enmedio. 12’00. Misa de la Inma-culada, cantada por la “Coral Veus de Lledó” y procesión hasta la casa de los Clavarios

- Basílica del Lledó. 11’00. Misa Solemne, cantada por la “Coral dels barreros” de la Vir-gen. Damas de María Inma-culada de Infantería. 12’00. Misa de las, pre-sidida por el Obispo de la Diócesis.

- Iglesia de S. Agustín y S. Marcos. Hijas de Ma-ría Inmaculada. 17’00. Misa y Procesión.

Albocácer.- Parroquia de la Asun-

ción. Día 7 de diciembre. 23’00, “Cant de les Car-tes a la Immaculada” por los Quintos, en la puerta de la parroquia. Día 8 de diciembre. 11’00. Misa Solemne.

Almazora.- Parroquia de la Nati-

vidad. Cofradía de las Hijas de María Inmacu-lada.Día 8 de diciembre. 18’00. Misa solemne y Procesión.

Burriana.- Parroquia del Salva-

dor. Archicofradía de las Hijas de María Inmacu-lada y Santa Teresa de Jesús. Día 7 de diciem-bre. 20’30. Vigilia de la Inmaculada. Día 8 de diciembre. 18’00. Misa Solemne y Procesión.

Chilches.- Parroquia de la Asun-

ción. Cofradía de Hijas de María Inmaculada. Día 8 de diciembre. 18’00. Misa Solemne. 19’30. Procesión.

Nules.- Iglesia de la Inmacula-

da. Día 8 de diciembre. 11’30. Misa con la par-ticipación de todos los niños de la Catequesis parroquial.

Onda.- Parroquia de la Asun-

ción. Congregación de Hijas de María Inmacu-lada, San Luís Gonzaga y San Juan Berchman. Día 7 de diciembre. 22’00 . Vigilia de la Inmaculada.

Día 8 de diciembre. 6’00 de la madrugada “Co-pletes”. 7’30.“Processó de l’Ave” con la imagen de la Inmaculada. 8’30. Misa Solemne.

Vall de Uxó.- Parroquia del Santo

Ángel. Venerable Monte de Piedad de los XXIV de la Inmaculada. Día 8 de diciembre: 11’00. Misa solemne.18’30. Fe-licitación Sabatina y Pro-cesión.

Vila-real.- Iglesia Arciprestal de

San Jaime. Congrega-ción de Hijas de María Inmaculada.Día 6 de diciembre. 21’00. Vigilia a la Inma-culada. Día 8 de diciem-bre. 10’00. Misa solem-ne y procesión claustral. Ofrenda de alimentos para Cáritas durante todo el día de la Inma-culada. 19’00. Paso de los niños por el manto y besamanos de la Purí-sima en su templete. A continuación, Serenata a la Virgen a cargo de la Escolanía de Nuestra se-ñora de la Soledad de San Agustín, Cuenca.Día 9 de diciembre. Fies-ta Principal de la Con-gregación. 10’30. MisaSolemne de las Congre-gantes. 19’30. Procesión solemne.

Villavieja.- Parroquia de la Sagrada

Familia. Congregación de Hijas de María Inma-culada.Día 8 de diciembre: 11’00 Misa Solemne y mascletá en la plaza de la Inmaculada. 20’00. Pro-cesión.

Celebraciones en honor de la Inmaculada Concepción

Vida Diocesana

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Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 7

El Evangelio del Domingo

“Estad siempre despiertos”Primera LecturaJer 33,14-16. «Mirad que llegan días -oráculo del Señor- en que cumpliré la promesa que hice a la casa de Israel y a la casa de Judá. En aquellos días y en aquella hora, sus-citaré a David un vástago legítimo, que hará justi-cia y derecho en la tierra. En aquellos días se salvará Judá, y en Jerusalén vivirán tranquilos, y la llamarán así: “Señor-nuestra-justi-cia”.» Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 24. R/. A ti, Señor, levanto mi alma.

Segunda Lectura1Tes 3,12-4,2. Hermanos:Que el Señor os colme y os haga rebosar de amor mutuo y de amor a todos, lo mismo que nosotros os amamos. Y que así os for-talezca internamente, para que, cuando Jesús, nuestro Señor, vuelva acompañado de todos sus santos, os pre-sentéis santos e irreprensi-bles ante Dios, nuestro Pa-dre. En fin, hermanos, por Cristo Jesús os rogamos y exhortamos: Habéis apren-dido de nosotros cómo pro-ceder para agradar a Dios; pues proceded así y seguid adelante. Ya conocéis las

instrucciones que os dimos, en nombre del Señor Jesús. Palabra de Dios.

EvangelioLc 21,25-28.34-36. En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: -«Habrá signos en el sol y la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, en-loquecidas por el estruen-do del mar y el oleaje. Los hombres quedarán sin aliento por el miedo y la an-siedad ante lo que se le vie-ne encima al mundo, pues los astros se tambalearán. Entonces verán al Hijo del hombre venir en una nube, con gran poder y majestad.

Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la ca-beza: se acerca vuestra libe-ración. Tened cuidado: no se os embote la mente con el vicio, la bebida y los agobios de la vida, y se os eche en-cima de repente aquel día; porque caerá como un lazo sobre todos los habitantes de la tierra. Estad siempre despiertos, pidiendo fuerza para escapar de todo lo que está por venir y manteneros en pie ante el Hijo del hom-bre.» Palabra del Señor.

Próxima semana: Domingo II de Adviento Bar 5,1-9 / Sal 125 / Flp 1,4-6.8-11 / Lc 3,1-6

I Domingo de Adviento (1ª Semana del Salterio)

Año de la FeEL HOMBRE, IMAGEN DE DIOS355 El hombre ocupa un lugar único en la creación: “está hecho a imagen de Dios” (I); en su propia naturaleza une el mundo espiritual y el mundo mate-rial (II); es creado “hombre y mujer” (III); Dios lo estableció en la amistad con él (IV).356 De todas las criaturas visibles sólo el hombre es “capaz de conocer y amar a su Creador” (GS 12,3); es la “úni-ca criatura en la tierra a la que Dios ha amado por sí misma” (GS 24,3); sólo él está llamado a participar, por el conocimiento y el amor, en la vida de Dios. Para este fin ha sido creado

y ésta es la razón fundamental de su dignidad.357 Por haber sido hecho a imagen de Dios, el ser humano tiene la dignidad de persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de conocerse, de po-seerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas; y es lla-mado, por la gracia, a una alianza con su Creador, a ofrecerle una respuesta de fe y de amor que ningún otro ser puede dar en su lugar.358 Dios creó todo para el hombre (cf. GS 12,1; 24,3; 39,1), pero el hombre fue creado para servir y amar a Dios y para ofrecerle toda la creación.

359 El misterio del hombre sólo se esclarece en el misterio del Verbo en-carnado (GS 22,1).360 Debido a la comunidad de ori-gen, el género humano forma una uni-dad.361 Esta ley de solidaridad humana y de caridad (ibíd.), sin excluir la rica variedad de las personas, las culturas y los pueblos, nos asegura que todos los hombres son verdaderamente herma-nos.

(*) La numeración al inicio de cada pá-rrafo corresponde al artículo del Catecis-mo de la Iglesia Católica.

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Gemma Arrufat, Presidenta de la Junta de la Congregación de Hijas de María Inmaculada

Dep. Legal: CS 97-1960Suplemento del B.O. del Obispado

Edita: Obispado de Segorbe-Castellón Director: Juan Manuel Gil Coordinador: Josep Miquel Francés Redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: Teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / [email protected] / [email protected] / www.obsegorbecastellon.es

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“Durante la Vigilia, todos los jóvenes estamos alrededor de María, y Ella está entre nosotros”Gemma Arrufat (Vila-real, 1986) dice que se siente un poco impresio-nada porque es la primera vez que la entrevistan. Pero cuando se trata de explicar la labor evangelizadora de las ‘Purissimeres’ de Vila-real, después de reflexionar un momento, no le tiembla la voz. Hay 6.000 chicas y mujeres que han revestido la medalla, pero su influen-cia llega a los centenares de niños y niñas que partici-pan en las actividades del centro social y en los cam-pamentos, sin contar la la-bor con los monitores.

- ¿Cómo preparáis en la Congregación la fiesta que se celebrará dentro del Año de la fe y en una tonalidad de evangeliza-ción?

- Participamos en las charlas formativas que con motivo del Año de la Fe se organizan en la Arciprestal. Por otra parte, en la Con-gregación también estamos dando charlas de formación a un grupo de pre-monito-res para realizar mejor su función y ser buenos cris-tianos.

- ¿Por qué María es

maestra de la fe para no-sotros?

- Siempre tenemos a María como un ejemplo a la hora de vivir y de actuar, y eso es lo que queremos transmitir cuando tratamos con gente joven: que vean, con nuestros medios, sien-do jóvenes, la manera en que Ella nos enseña y vivió, siendo una mujer humilde, sencilla…

- Al llevar el título de ‘Purísima’, ¿no queda muy lejana de nuestra

vida?- Para nosotros es cerca-

na. Un momento que me gusta mucho, es la Vigilia a la Mare de Déu; es un momento en el que todos los jóvenes nos ponemos a su alrededor, cantamos, ex-plicamos narraciones sobre María, y Ella está entre no-sotros. Sí, es Purísima, pero esta característica no la hace lejana, porque siempre que la necesitas la tienes ahí.

- En las múltiples ac-tividades que realizáis las

Purissimeres con niños y jóvenes, ¿cómo dais testi-monio de la fe?

- Creo que por los va-lores que transmitimos e intentamos que sean los que María transmitía: el respeto, no burlarse, ser humildes, compañerismo, quererse entre nosotros y en la familia... Por eso en los campamentos siempre programamos actividades para que los jóvenes re-flexionen a través de cuen-tos, historias o testimonios de personas.

- ¿En qué se nota que una purissimera vive una intimidad con María y con Jesús?

- Yo me considero puris-simera todo el año, no solo para la fiesta, y el ser pu-rissimera, o el ser cristiano, es intentar en el día a día aplicar los valores que nos enseña la Iglesia. María y Jesús son un modelo en la vida, una persona de refe-rencia, que sabemos cómo han vivido. Son personas vivas que siempre están ahí cuando las necesitas y con los que te puedes comuni-car rezando; puedes sentirse solo en un momento, pero siempre puedes hablar con ellos.

G. FARRÉ. VILA-REAL.