Hoja Parroquial del 2 de junio de 2013

La Santa Misa

hojaparroquial2 de junio de 2013Nº 2.670 SemaNario de la dióceSiS de Segorbe-caStellóN

Ultima Cena de Jesús. Oleo y acrílicos sobre muro. Manuel Vivó (1984). Parroquia de San Cristóbal. Castellón

2 // Hoja Parroquial

Agenda DiocesanaLunes 3.* V Jornada de formación de catequistas en Castellón.

Martes 4.* 19h Confirmaciones en la parroquia Virgen del Carmen

de Onda.

Jueves 6.* 19h Confirmaciones en la parroquia de San José Obrero

de Castellón.

Viernes 7. Sagrado Corazón de Jesús.* 13h Clausura del Curso de Vida Ascendente.* 13h30 El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE.* 19h30 Confirmaciones en la parroquia de Ntra. Sra. de los

Ángeles de Bechí.

Sábado 8.* 12h Bautizo de Adultos en la S.I. Concatedral de Castellón.* 19h30 Concierto Benéfico de Rosa en el Teatro Principal

de Castellón.* 22h Vigilia diocesana de Espigas en la parroquia de Chil-

ches.Domingo 9.* 9h45 Iglesia Noticia en COPE.* 10h30 Eucaristía con ocasión del aniversario del Aposto-

lado de la Oración en Vila-real en la parroquia Arciprestal de San Jaime.

* Final de Curso de los ENS.* Convivencia Frater.* Convivencia Focolares.* 15h Encuentros, programa religioso de TV Popular del

Mediterráneo.

“Dadles vosotros de comer”Primera LecturaGén 14,18-20. En aquellos días, Melqui-sedec, rey de Salén, sacer-dote del Dios altísimo, sacó pan y vino y bendijo a Abran, diciendo: -«Ben-dito sea Abrahán por el Dios altísimo, creador de cielo y tierra; bendito sea el Dios altísimo, que te ha entregado tus enemigos.» Y Abran le dio un décimo de cada cosa. Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 109. R/. Tú eres sacerdote eterno según el rito de Melquise-dec.

Segunda Lectura1Cor 11,23-26.

EvangelioLc 9,11b-17. En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar al gentío del reino de Dios y curó a los que lo necesitaban. Caía la tarde, y los Doce se le acer-caron a decirle: -«Despide a la gente; que vayan a las aldeas y cortijos de alrede-dor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado.» Él les contestó: -«Dadles vosotros de comer.» Ellos replicaron: -«No tenemos más que cinco panes y dos peces; a no ser que vaya-mos a comprar de comer para todo este gentío.» Porque eran unos cinco

mil hombres. Jesús dijo a sus discípulos: -«Decidles que se echen en grupos de unos cincuenta.» Lo hicie-ron así, y todos se echaron. Él, tomando los cinco pa-nes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición sobre ellos, los partió y se los dio a los discípulos para que se los sirvieran a la gente. Co-mieron todos y se sacia-ron, y cogieron las sobras: doce cestos. Palabra del Señor.

Próxima semana: 1Re 17,17-24 / Sal 29 / Gál 1,11-19 / Lc 7,11-17

Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo (1ª Semana del Salterio)

El Evangelio del Domingo

Hoja Parroquial // 3

Fe en la presencia real y permanente de Cristo en la EucaristíaQueridos diocesanos: En la solemnidad del Corpus Christi celebramos y mos-tramos públicamente en la procesión nuestra fe en la presencia real, verdadera y permanente de Jesucristo en la Eucaristía. El presente Año de la Fe es por ello tam-bién “una ocasión propicia para intensificar la celebra-ción de la fe en la liturgia, y de modo particular en la Eucaristía” (Benedicto XVI, Porta fidei, 9), una ocasión para avivar y fortalecer nues-tra fe en la presencia de Jesu-cristo en la Eucaristía.

San Pablo, en su primera carta a los Corintios, cuya fe en la Eucaristía se había de-bilitado, les recuerda la tradi-ción que procede del mismo Jesús y que Pablo mismo, les ha trasmitido: “Que el Señor Jesús, en la noche en que iban a entregarlo tomó pan… lo partió y dijo: esto es mi cuer-po... y lo mismo hizo con el cá-liz… diciendo. Este cáliz es la nueva alianza sellada con mi sangre”. A la vez, Jesús confía a su Apóstoles, sus sucesores, y a los sacerdotes: “Haced esto en memoria mía”; y aña-

de: “Cada vez que coméis de este pan y bebéis del cáliz, pro-clamáis la muerte del Señor, hasta que vuelva” (1 Co 11, 24-26). Por tanto cuando celebramos hoy la Eucaristía, hacemos lo que Jesús nos confió: el pan y el vino se convierten en su Cuerpo y en su Sangre, anunciamos su muerte redentora de Cristo y su resurrección salvadora: así se aviva la esperanza de nuestro encuentro definitivo con él. Conscientes de ello, después de la consagración, respondiendo a la invita-ción del Apóstol, aclama-mos: “Anunciamos tu muerte. Proclamamos tu resurrección. ¡Ven, Señor Jesús!”.

En la Eucaristía tenemos, pues, el signo visible y real de la entrega de Jesús hasta la muerte en la cruz por noso-tros; una entrega que se hace siempre actual, cada vez que celebramos la Misa. La Eu-caristía es un don y misterio de amor, en el que Cristo se nos da además como ali-

mento y prenda de la futura gloria. En la Eucaristía, Cristo Jesús se queda per-manentemente en-tre nosotros.

La Fiesta del Corpus nos invita a entrar en el cora-zón del misterio de la Eucaristía, para acogerlo con fe. En

la Eucaristía está Jesucristo, Dios y hombre verdade-ro; más aún: la Eucaristía es Jesucristo mismo, real y substancialmente presente bajo la apariencia del pan y del vino. En la Eucaristía, Dios mismo sale a nuestro encuentro y nos espera, se nos ofrece en comida para unirse con nosotros, pide y merece nuestra adoración, se queda con y entre nosotros y nos espera en el Sagrario. Por ello la adoración eucarística no es puro sentimiento vacío ni intimismo espiritual, sino expresión viva y vivida de la fe en el ‘misterio de la fe’, en la presencia real y permanen-te del Señor en la Eucaristía. Jesús se queda en la Eucaris-tía no sólo para ser llevado a

los enfermos, sino para estar y hablar con nosotros, para seguir derramando su amor y su vida. La Eucaristía con-tiene de un modo estable y admirable al mismo Dios, al Autor de la gracia, de la vida y de la salvación. El Costado abierto de Jesús es un ma-nantial inagotable de amor, del amor de Dios.

Avivemos y mostremos nuestra fe en la presencia real y permanente del Señor en la Eucaristía. ¿Cómo? Por ejemplo: Saludando al Señor al entrar en la iglesia mediante una genuflexión ante el Sagrario, poniéndose de rodillas y orar ante Cris-to-Eucaristía, participando con fe y devoción en la santa Misa, con visitas y momen-tos frecuentes de oración y adoración al Santísimo Sa-cramento para lo que es pre-ciso tener las iglesias abiertas más tiempo. Valoremos el gran tesoro de la Eucaristía, manantial permanente del Amor.

Con mi afecto y bendi-ción,(*) ObispO de segOrbe-Castellón

pOr Juan Manuel gil

La Eucaristía: Corpus ChristiUn seis del mes de Nisán judío, estalló la era del Amor al instituir Jesús la Eucaristía. Este año se celebra el dos de junio. Tres son los momen-tos básicos de la Eucaristía. La Palabra de Dios: anunciada en el Antiguo Testamento, realizada en el tiempo, y encarnada en Jesús para dar cum-plimiento a las Promesas, la actitud del creyente ante la Palabra de Dios es de alabanza por sus grandezas, y la aceptación de su mensaje. El Sacramento y el sacrificio: nos ofrece el miste-rio de Dios en Jesús, muerto y resucitado. En el núcleo del mensaje de nuestra fe. Implica un encuentro con la verdad de nuestro cristianismo, celebrado como fiesta salvadora. Compromiso: consecuencia necesaria, como coherencia de la vida del creyente. Dios se nos da, alimento que da vida para transmitirla a los hermanos.

La Eucaristía tiene un trasfondo trinitario. Es el centro y cumbre de toda la vida y liturgia cristiana, de ella manan y confluyen todos los

demás sacramentos. Es el ejercicio del Sacerdo-cio de Cristo. Implica la reunión de todos los cristiano ante el Padre para proclamar sus gran-dezas y agradecer sus dones: prefacio. También hay la dimensión de la comunión con Cristo por el don de su vida, memoria de Jesús, fiesta de su Amor: anamnesis. Pasión, muerte y re-surrección: presencia pascual, surgimiento de la Iglesia. Y en tercer lugar está la invocación al Espíritu Santo: su vida de amor transformante. Transubstanciación del pan y vino en el Cuerpo y Sangre de Cristo. Se invoca al Espíritu Santo como suscitador de la Iglesia: epíclesis.

Pasado, presente y futuro de Jesús. La Eu-caristía recuerda el pasado de Jesús histórico, sus gestos, el poder de sus palabras, su modo de vida. La Eucaristía celebra su presencia pascual, es el resucitado; su presencia personal: encarna-do; presenta como sangre derramada: sacrificio; presenta como Pan dado: sacramento. La Eu-

caristía anticipa el futuro de Jesús; anunciaba el Reino, y como signo ofreció el perdón, la gracia, los milagros. Es misterio de esperanza; los fieles proclamamos ¡Ven Señor Jesús! Estamos ya invi-tados a la Cena del Señor.

Presencia de Cristo. Los signos del vino y del pan. Oración sacrificial: fiesta del vino. Sacrifi-cio: ofrenda que los hombres presentan a Dios. En Jesús fue un gesto de obediencia radical y en-trega a la voluntad del Padre. Oración: diálogo que entablan los cristianos con su Dios. La mis-ma vida de Jesús es oración al entregarse en ma-nos de Dios. En el signo de vida compartiendo, bendiciendo y celebrando, Jesús se hace presente entre sus fieles como Sangre derramada. Jesús ofrece todo el desgarrón de su existencia a fin de cumplir la voluntad de Dios. También los hom-bres regalan su existencia, donde pierden la vida por los otros. Solo en este fondo comprendemos el misterio de Dios, como amor que da la Vida.

MOns. CasiMirO lópez llOrente *

Tribuna


La Santa Misa

2. Liturgia de la Palabra

1. Ritos iniciales de apertura

2. Liturgia de la PalabraPara recibir fructuosamente a Cristo en la comunión eucarística, hemos de recibirle antes en la proclama-ción de la Palabra, acogiéndola con fe ya que nos revela el misterio de Cristo y su salvación. La asamblea está sentada, excepto durante la proclamación del Evange-lio, el Credo y la Oración Universal.• Primera lectura. Está tomada del Antiguo Testa-mento, excepto en Pascua que es de los Hechos de los Apóstoles.

• Salmo responsorial. Siempre es un salmo (o equiva-lente) de un texto bíblico. El salmo viene a interio-rizar y revivir los sentimientos que la Palabra quiere provocar en los oyentes. Se llama responsorial porque constituye un primer modo de respuesta por parte de la asamblea celebrante al Dios que habla en la procla-mación de la Palabra.

• Segunda lectura. Se toma de las Cartas o del Apoca-lipsis.

• Evangelio. Su lectura completa la proclamación de la Palabra de Dios y es el punto culminante de esta liturgia. Su especial dignidad viene de que el Evange-lio es la culminación de la Palabra de Dios, al hacerse revelación del mismo Jesucristo. Por eso su proclama-ción está precedida (excepto en Cuaresma) por una aclamación jubilosa: el canto del Aleluya que signifi ca “alabad al Señor” en hebreo. El evangelio es procla-mado por un ministro ordenado (sacerdote o diáco-

no), solemnizado por un saludo, el signo de la cruz, una aclamación fi nal propia, y si se quiere incienso y cirios. Los evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas) están distribuidos en tres ciclos (A, B y C, res-pectivamente), reservando el de Juan para Cuaresma y Pascua, y para completar el ciclo B, ya que el texto de Marcos es mucho más corto que el resto.

• Homilía. Es un acto litúrgico que consiste funda-mentalmente en el comentario actualizador de la Pa-labra de Dios proclamada en las lecturas, en orden a que la asamblea comprenda y viva mejor su mensaje, tanto en la celebración como en la vida.

• La Profesión de Fe. Los domingos y solemnidades se recita la Profesión de Fe o Credo, con la que la asam-blea expresa su adhesión y asentimiento a la Palabra escuchada. Recitar el Credo es confesar que se cree en Dios, es decir, confi arse y abandonarse en él, progre-sando en el camino de su seguimiento.

• La oración universal o de los fi eles. Re-unido y re-hecho por la escucha de la Palabra, el pueblo de Dios, que es pueblo sacerdotal, actúa como tal en ese mo-mento y ruega por todos los hombres, por las necesi-dades de la Iglesia entera y por la salvación de todo el mundo. Normalmente deberían estar presentes estas grandes series de intenciones: La Iglesia universal con sus pastores y eventos, el mundo y sus gobernantes, los que sufren y la comunidad local.

1. Ritos iniciales de aperturaTienen una gran importancia para conseguir la ade-cuada disposición de los presentes y su activa y fruc-tuosa participación a lo largo de la celebración. Du-rante esta primera parte, los fi eles están de pie.• Canto de Entrada. Inicia la celebración como ac-ción comunitaria y festiva del Pueblo de Dios.

• Señal de la cruz. Recuerda el bautismo que nos fue conferido en nombre de las tres divinas personas y nos incorporó a Cristo en la Iglesia.

• Saludo del Presidente y monición. El sacerdote re-conoce en la asamblea la presencia del Resucitado, y los fi eles ven delante de ella al que preside visible-mente en nombre del Señor.

• Acto penitencial. Por este rito se reconoce una do-ble realidad: la de nuestro pecado y la de la gracia de Cristo. Reconociendo la propia indignidad ante el Señor, nos preparamos al encuentro con Cristo en su Palabra y en el Pan eucarístico. Se concluye con el Señor ten piedad o Kyrie, eleison.

• Gloria. Es un antiquísimo y venerable himno con que la Iglesia, congregada en el Espíritu Santo, glori-fi ca a Dios Padre y al Cordero y le presenta sus súpli-cas. Se recita o canta los domingos y solemnidades.

• Oración colecta. Concluye los ritos iniciales unifi -cando y haciendo oración de la Iglesia la plegaria que hacen los fi eles reunidos.

Reportaje



La Santa Misa3. Liturgia eucarística

4. Rito de despedida

3. Liturgia eucarísticaEl encuentro salvador con Jesucristo que tiene lugar ya en la proclamación de la Palabra, alcanza plenitud en la celebración del sacramento. Se celebra la muerte y resurrección del Señor repitiendo los gestos y palabras de Jesús en la última cena, según su mandato: “Haced esto en conmemoración mía”.• Preparación del altar. La liturgia eucarística inicia un cambio de lugar o de escenario en la celebración: al concluir la liturgia de la Palabra, se prepara el altar, y se colocarán encima el corporal, el purifi cador, el cáliz y el Misal.

• Procesión de ofrendas y colecta. Se trata de ofren-das eucarísticas y de caridad. Algunos fi eles, en repre-sentación de los demás, acercan los dones al altar, es decir, el pan y el vino para la eucaristía, y ofrendas para ayudar a las necesidades de los pobres y de la Iglesia, recogidas en la colecta. El sacerdote presenta el pan y el vino (que mezcla con agua como signo de unión con Cristo, como ya explicaba San Cipriano en el siglo III), y realiza el gesto del lavatorio de las manos como signo de purifi cación interior. Concluye pidiendo a Dios que acepte con bondad las ofrendas que le presenta la Iglesia, y que realice en ellas el mis-terio eucarístico.

• Plegaria eucarística. Se toca aquí el centro y se al-canza la cumbre de la celebración. Con la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II, se han añadido a la plegaria del Canon Romano tres más, una muy breve y sencilla, otra de mediana extensión, y la IV al estilo de las anáforas orientales. En 1970 se incluyeron otras seis plegarias más, por ejemplo adaptadas a misas con niños.• Acción de gracias. Manifi esta el elemento más espe-

cífi co de la Plegaria eucarística.• Sanctus. Momento importante de la participación

del pueblo en la anáfora, expresando su adhesión a la alabanza y acción de gracias que en nombre de todos eleva el que preside. Es la aclamación más im-portante de la Plegaria Eucarística, la única cantada o recitada conjuntamente por toda la asamblea.

• Relato de la institución eucarística. Resume y con-tiene todo el actuar salvador de Dios a favor de los hombres, e incluye las palabras de la consagración. El pueblo sigue esta oración de pie o de rodillas.

• Intercesiones y conmemoración de los santos. Pueden ser consideradas como una prolongación de la pe-tición del Espíritu Santo sobre los fi eles que se hace justo antes, y que se explicita y desarrolla en una oración universal por la Iglesia y por la familia hu-mana.

• Doxología fi na con elevación de los dones. La eleva-ción del pan y vino eucarísticos subraya el punto álgido de la celebración, y el pueblo concluye con el amén que expresa la ratifi cación y adhesión a la plegaria dicha en plural, en nombre de todos, por el que presiden.

• Rito de comunión. Está compuesto por tres partes: la preparación con la oración del Padre Nuestro, el rito de la paz y la fracción del pan, la de realización que es la comunión, y la de asimilación y reconocimiento.• El Padre Nuestro. La forma de rezarlo deberá ser

pausada y serena, diferenciando las distintas frases y procurando ir todos a una con el sacerdote, que lo reza como una oración que comparte con toda la asamblea.

• El rito de la paz. La comunión eucarística reclama comunión fraterna; No podemos comulgar con el Señor si no estamos dispuestos a comulgar (recon-ciliarnos, solidarizarnos, compartir) con los herma-nos.

4. Rito de despedidaLa Misa, como acto ritual, tiene su comienzo y su fi -nal. Pero la despedida se torna envío. La Eucaristía ritual debe hacerse Eucaristía existencial. Y esa no termina en el templo, sino que se realiza en los lugares de la existencia cotidiana y ha de durar, de Eucaristía en Eucaristía, toda la semana y toda la vida. Toda la celebración eucarística, en sus diversos aspectos o momentos, está requiriendo un quehacer cotidiano congruente con lo celebrado.• Saludo. Desea, como mejor fruto de la Eucaristía, la permanencia al Señor con aquellos que, participando

en la celebración, se han encontrado con él, le han con-fesado y recibido.

• Bendición. Con la invocación del Padre, del Hijos y del Espíritu Santo y el trazado del signo glorioso de la cruz redentora, es el elemento central del rito de despe-dida.

• Despedida. La respuesta del pueblo -Demos gracias a Dios- expresa muy bien lo sentimientos que deben tener los que han participado en la celebración: gozo, confi anza, agradecimiento al Dios de amor eterno.



Redes sociales al servicio de un proyecto misionero en Burkina FasoLa Delegación Dioce-sana de Misiones acoge una campaña de apoyo a un orfanato en Burkina Faso por las redes sociales. Se trata de la institución Sainte Cécile de las Her-manas de la Inmaculada Concepción, una congre-gación religiosa autócto-na del país africano y con pocos recursos para llevar adelante su misión a fa-vor de los más necesitados del país. El centro acoge a un centenar de huérfanos y niños abandonados, y

ahora quiere desarrollar una plantación frutícola que mejore las condiciones y ayude a autofinanciarse.

Hace dos años ya hubo una iniciativa para finan-ciar el mantenimiento del comedor de una escuela

en Dédougou que, como en esta ocasión, aprove-chó la difusión por las redes sociales. Los dona-tivos, que gozan de des-gravación fiscal, se pue-den hacer en la cuenta de la Delegación indicando el concepto “Orfanato”: Delegación Diocesana de Misiones de Segorbe-Castellón nº: 2038 9939 96 3001239791 de BAN-KIA. La acción está coor-dinada por el sacerdote Salvador Prades, párroco de Ayodar y Vilamalur, que irá ampliando detalles del proyecto en Facebook.

El programa Caminos de María, producido por el equipo de Castellón de Ra-dio María, ha llegado a las 100 ediciones. Este espacio radiofónico presenta las di-versas advocaciones de la Virgen, y en los capítulos hechos ya han aparecido las de la Cueva Santa, Lledó, la Misericordia y la de Gracia. Desde la Diócesis también se realiza una emisión llama-do Caminos de Santidad, en los que se divulgan vidas de santos. A finales de mayo comenzará una serie sobre San Pascual Baylón, y se está

preparando otra sobre Santa Genoveva Torres, la santa de Almenara.

Caminos de María se emite los lunes a las cuatro de la mañana, y Caminos de Santidad el domingo a la una de la madrugada. Sin embargo es posible pedir los

programas y los guiones por escrito en [email protected]. Desde diversas comunidades reli-giosas y parroquiales de la Diócesis también se retrans-miten a menudo el rezo de laudes o vísperas.

En la programación de

Radio María se puede seguir el ritmo de la liturgia de las horas, además de la santa Misa, el rosario y el ángelus cada día. Además hay espa-cios dedicados a la forma-ción y divulgación de temas tan variados como el catecis-mo, la liturgia, la doctrina social, la familia, la espiri-tualidad o la juventud. Des-de el año pasado el director nacional es el sacerdote de Madrid Luis Fernando de Prada, en sustitución de Es-teban Munilla. En Segorbe-Castellón se puede escuchar en la frecuencia 107.5 de la FM en la Plana y 97.2 en el interior o por la TDT.

Completando el reporta-je sobre los repartidores de Hoja Parroquial en varias parroquias de la Diócesis (nº 2667), hay que incluir las 22 personas que realizan este servicio en la Asunción de Onda. Precisamente la semana pasada llegó a la re-dacción de Hoja Parroquial

un correo electrónico de María Rosario García, que compartía su experiencia desde 600 km de distancia: “Acabo de leer el artículo sobre los repartidores de la Hoja Parroquial. Hasta los 22 años viví en Onda y du-rante más de diez años me dediqué a repartir la HP en mi barrio, muy próximo a la parroquia de la Asun-

ción. Era una tarea que me gustaba, normalmente los vecinos la recibían agrade-cidos, yo sentía que hacía algo bueno y tenía la oca-sión de contactar con mu-chos de ellos, la mayoría gente anciana que se ale-graba de recibirla y charlar con la portadora, ¡alguna vez hasta me invitaron a algún dulce! Cuando lleva-

ba a la parroquia la recau-dación anual me sentía de sobra recompensada con un calendario del nuevo año. ¡Qué recuerdos! Hace más de 25 años que dejé de vivir allí, ya no tengo con-tacto con nadie de la parro-quia y, aunque nos separan más de 600 km, me sigo acordando. Un cariñoso saludo”.

REDACCIÓN.

Cien programas sobre la Virgen en Radio María producidos por el equipo de Castellón

Repartidores de Hoja Parroquial a 600 km de Onda

REDACCIÓN. caStellóN.

REDACCIÓN. oNda.

Vida Diocesana


El domingo de Pentecos-tés los fieles de El Salvador conocieron que su parro-quia tiene a partir de aho-ra la categoría de Basílica Menor. Así lo anunciaba el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, al Párro-co, Vicario parroquial, a la Comunidad de la parro-quia de El Salvador de Bu-rriana y a todos los fieles católicos de la Ciudad de Burriana en un escrito con fecha del 17 de mayo, fies-ta de San Pascual Baylón y patrón de la Diócesis. Por este título se estable-ce un peculiar vínculo de la misma con la Iglesia de Roma y el Sumo Pontífice con diversas prerrogativas, tareas y obligaciones.

El hecho de ser Basí-lica menor implica una especial responsabilidad en promover la formación litúrgica de los fieles así como el estudio y divul-gación de los documentos de los Sumos Pontífices y de la Santa Sede, princi-palmente de aquellos que traten sobre la sagrada Li-turgia. Así mismo se han

de preparar y oficiar con gran esmero las diversas celebraciones del año li-túrgico, especialmente en el tiempo de Adviento, Navidad, Cuaresma y Pas-cua, y la Palabra de Dios ha de ser anunciada con verdadero celo en las ho-milías y en predicaciones extraordinarias.

Igualmente ha de pro-moverse la participación activa de los fieles tanto en la celebración eucarística como en la celebración de la Liturgia de las Horas, especialmente en los Lau-des y Vísperas, el canto de los fieles en los actos litúr-gicos y la digna celebra-ción de las formas de pie-dad aprobadas. Para poner de manifiesto el particular vínculo de comunión con el cual se unen la Basílica Menor y la Sede de Pedro, se han de celebrar todos los años la fiesta de la Cá-tedra de San Pedro (día 22 de febrero), la solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo (día 29 de junio) y el aniversario de la elección o el inicio del su-premo ministerio pastoral del Sumo Pontífice.

La parroquia de Santia-go Apóstolo de Monta-nejos, en colaboración con la ONG Ameafrica, organiza la segunda edi-ción de la “Montanejos English Summer School”. Esta iniciativa tiene por objetivo facilitar a los ni-ños y jóvenes que mejoren su nivel de inglés en un marco de fe, naturaleza

y solidaridad. Las fechas son del 1 al 13 de julio, se puede participar en ré-gimen interno o externo, y los padres tienen opción de acompañar a sus hijos. Ameafrica también ha or-ganizado intercambios ya que el inglés es necesario para su labor humanitaria. Para información se pue-de llamar al tlf 626 048 217 o escribir a [email protected]

En el encuentro sacerdo-tal con motivo de la fies-ta de su patrón, San Juan de Ávila, el presbítero de Jaén, Javier Díaz Lorite, impartió una conferen-cia en la que insistió en la importancia de difundir entre los seglares las ense-ñanzas de este Doctor de la Iglesia. Entre las carac-terísticas que lo hacen ac-

tual, están el ser un hom-bre de Dios, su búsqueda de la voluntad divina, la predicación del Padre de misericordia, manifestado en la Cruz Gloriosa, y del Espíritu Santo, la Palabra de Dios, la eclesialidad y la Caridad pastoral, la evan-gelización, el fomento de la Eucaristía y el amor a la Virgen María, la forma-ción continua y la reforma de la Iglesia desde dentro.

REDACCIÓN. moNtaNeJoS.REDACCIÓN. caStellóN.

Fe, naturaleza y solidaridad para aprender inglés

Divulgación de la doctrina deSan Juan de Ávila

REDACCIÓN. bUrriaNa.

La parroquia del Salvador de Burriana recibe el título de Basílica menor

Vida Diocesana

Javier Francés Flor, ha recibido la primera comunión este año

dep. legal: cS 97-1960Suplemento del b.o. del obispado

edita: Obispado de Segorbe-Castellón director: Juan Manuel Gil coordinador: Josep Miquel Francés redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / [email protected] / [email protected] / www.obsegorbecastellon.es

impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. ind. Fadrell, nave 75. 12005 castellón / teléfono 964 255 100

hojaparroquial

“La Misa es como ir de fiesta con un amigo”El día de la Primera Comunión no es un día cualquiera. Así lo ha vi-vido Javier Francés Flor, de 8 años, que el domin-go 12 de mayo comulgó por primera vez con el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Tampoco es un hecho singular. Durante dos años se ha preparado en la catequesis, y aho-ra está decidido a seguir participando en la misa porque ayuda a querer y respetar, y a imitar a Je-sús. También sabe cómo invitar a sus amigos que no practican: ¡la Misa es como una fiesta!

¿Durante cuánto tiempo te has preparado con la catequesis para hacer la primera comunión?He estado dos años prepa-rándome en la parroquia de Ntra. Sra. de la Espe-ranza.

¿Qué es lo que has apren-dido en la catequesis?Muchas cosas, pero sobre-todo que Dios es nuestro Padre, que Jesús es mi amigo, que todos somos hijos de Dios, y que por eso tenemos que querer-nos y respetarnos.

Define qué es la Eucaris-tía.Es el cuerpo y la sangre de Jesús una vez consagrado por el sacerdote, pero que está como escondido en el pan y el vino. En la Euca-ristía recibimos el cuerpo de Jesús a través de la Co-munión.

¿Por qué es importante

hacer la primera comu-nión?Es importante porque re-cibimos por primera vez a Jesús en nuestro corazón.

El recuerdo más bonito del día de tu primera co-munión.Fue compartir con mis familiares y con mis ami-gos este día tan impor-

tante para mí. También me acordé de los niños que no tienen lo que yo tengo, y de mi hermano, el tete Jordi, que está en el Cielo.

¿Por qué es importante seguir yendo a misa des-pués de la primera comu-nión?Para saber más de la vida de Jesús, y porque he des-cubierto que Él nos acom-paña en la Iglesia.

¿A qué te ayuda ir a misa y comulgar?A ser más buena persona, a querer y respetar a todos por igual, a imitar a Jesús en todo lo que pueda.

¿Qué es lo que más te gusta de la Misa?Cuando nos damos todos la Paz; Es muy bonito por-que todos somos hijos de Dios y, sin conocernos de nada, nos damos la mano. También cuando comul-gamos, porque recibimos al mismo Jesús.

¿Cómo invitarías a un amigo a que vaya a misa?Le diría que es muy boni-to, que no es aburrido y que se lo pasará muy bien. Es como ir de fiesta con un amigo.

REDACCIÓN. caStellóN.

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Hoja Parroquial del 2 de junio de 2013