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Hoy, trato de enlazar las palabras que con lágrimas salen de mi alma, palabras que en este momento no quisiera decir palabras que acompañaran ésta tristeza por una ausencia que no esperaba Hoy, la nostalgia me visita otra vez trayendo a la memoria recuerdos de esa gran mujer una mujer maravillosa, llena de fuerza, llena de vitalidad, llena de vida Hoy, parece que las palabras también se despiden de mí tengo tanto que decir pero su ausencia enmudece mi voz cautiva mi pensamiento y sencillamente no puedo. Abuela, esto te quiero decir, y sé que me escucharás porque no te has ido y nunca te irás porque estás en cada latido en cada lágrima en cada suspiro Ahora mismo estás, estás viva, pues tu esencia, tu espiritualidad, tu ancestralidad sigue, tu recuerdo, tu ejemplo, tu valor y tu esfuerzo han quedado plasmados en nuestra memoria y escritos con letras doradas en el corazón. Abuela amada, tus palabras vivirán en mi alma las recordaré cada mañana, ahora mismo la tristeza me quita la calma pero hago muy mío tu recuerdo, tus besos, tus abrazos son un tesoro interminable. Abuela, mujer admirable, no has muerto, y nunca lo harás porque no se muere cuando el corazón deja de latir se muere cuando en los recuerdos se deja de existir y tu estas presente, estas aquí, estas viva, para todos, para mí. Hoy hago memoria y percibo en cada parte de mi ser, todos los momentos felices que vivimos juntos ABUELA!!. Nunca antes, había podido dedicarte unas palabras, hoy quizás mi inspiración viene de Dios, y te siento tan cerca como cuando era niño, (Nombrar Recuerdos de tu niñez). Te marchaste dejando un vacío muy grande en mi corazón y en el de mi familia; sobretodo mi padre. No quiero ser egoísta y sé que si Dios te vino a buscar, es para estar junto a El, en un lugar mejor, junto a otros seres queridos por los que tantas lágrimas derramaste. Ellos estarán felices de disfrutarte ¡ya ves! Y nosotros nos quedamos con una gran

Hoy Abuela

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Page 1: Hoy Abuela

Hoy, trato de enlazar las palabras que con lágrimas salen de mi alma, palabras que en este momento no quisiera decir palabras que acompañaran ésta tristeza por una ausencia que no esperaba

Hoy, la nostalgia me visita otra vez trayendo a la memoria recuerdos de esa gran mujer una mujer maravillosa, llena de fuerza, llena de vitalidad, llena de vida

Hoy, parece que las palabras también se despiden de mí tengo tanto que decir pero su ausencia enmudece mi voz cautiva mi pensamiento y sencillamente no puedo.

Abuela, esto te quiero decir, y sé que me escucharás porque no te has ido y nunca te irás porque estás en cada latido en cada lágrima en cada suspiro

Ahora mismo estás, estás viva, pues tu esencia, tu espiritualidad, tu ancestralidad sigue, tu recuerdo, tu ejemplo, tu valor y tu esfuerzo han quedado plasmados en nuestra memoria y escritos con letras doradas en el corazón.

Abuela amada, tus palabras vivirán en mi alma las recordaré cada mañana, ahora mismo la tristeza me quita la calma pero hago muy mío tu recuerdo, tus besos, tus abrazos son un tesoro interminable.

Abuela, mujer admirable, no has muerto, y nunca lo harás porque no se muere cuando el corazón deja de latir se muere cuando en los recuerdos se deja de existir y tu estas presente, estas aquí, estas viva, para todos, para mí.

Hoy hago memoria y percibo en cada parte de mi ser, todos los momentos felices que vivimos juntos ABUELA!!.

Nunca antes, había podido dedicarte unas palabras, hoy quizás mi inspiración viene de Dios, y te siento tan cerca como cuando era niño, (Nombrar Recuerdos de tu niñez).

Te marchaste dejando un vacío muy grande en mi corazón y en el de mi familia; sobretodo mi padre. No quiero ser egoísta y sé que si Dios te vino a buscar, es para estar junto a El, en un lugar mejor, junto a otros seres queridos por los que tantas lágrimas derramaste. Ellos estarán felices de disfrutarte ¡ya ves! Y nosotros nos quedamos con una gran tristeza de haberte perdido y buscando la manera de hacer consciencia que somos una efímera estrella fugaz en el tiempo y no podemos detenernos por rencores ni odios, pues todos estamos en este camino del tiempo implacable pero maestro.

Te quiero abuela, te echo mucho de menos, y sino voy a visitarte al cementerio no es mas que porque me niego a creerlo, no acepto que te hayas ido de mi lado, para mí no estas muerta.

Las cosas, la casa, la vida ya no es lo mismo sin ti aquí, a nuestro lado, balanceando y equilibrándolo todo.

Cuánta razón tuviste... por algo Dios te concedió la bendición de vivir tus preciosos 78 años y ver pasar ante tus ojos tres generaciones y tener en tus brazos a tus biznietos. Solo lamento que no hayan podido conocerte un poquito más, aunque sé que te recordarán, nos encargaremos de que sepan que tuvieron una bisabuela maravillosa....

Gracias a la vida por tenerte, Te amo abuela, y cuando llegue a tu lado, enséñame a volar.