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ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA MINISTERIO DE DESARROLLO RURAL Y TIERRAS INSTITUTO NACIONAL DE INNOVACIÓN AGROPECUARIA Y FORESTAL PROYECTO DE INNOVACIÓN Y SERVICIOS AGROPECUARIOS- FORESTALES PISA ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA

I INTRODUCCIÓNdocuments1.worldbank.org/curated/en/859211468208459997/E... · Web viewLa aplicación de plaguicidas debe ser realizada según un conjunto de reglas que contribuyan

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I INTRODUCCIÓN

(ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA)

(ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIAMINISTERIO DE DESARROLLO RURAL Y TIERRASINSTITUTO NACIONAL DE INNOVACIÓN AGROPECUARIA Y FORESTALPROYECTO DE INNOVACIÓN Y SERVICIOS AGROPECUARIOS-FORESTALESPISAPLAN DE MANEJO DE PLAGAS)

(La Paz Bolivia - Septiembre 2010)

(E2642V. 1)

“La Tierra no nos pertenece,

nosotros pertenecemos a la Tierra”

Evo Morales Ayma

Presidente del EstadoPlurinacional de Bolivia

En ocasión de la Declaración del

Día Internacional de la Madre Tierra

Asamblea General de la ONU

Nueva York, 22 de abril del 2009

ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA

Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras

Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria Y Forestal

INIAF

PROYECTO DE INNOVACIÓN Y SERVICIOS AGROPECUARIOS-FORESTALES

PISA

PLAN DE MANEJO DE PLAGAS

La Paz - Bolivia

2010

Evo Morales Ayma

PRESIDENTE DEL ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA

Nemesia Achacollo Tola

MINISTRA DE DESARROLLO RURAL Y TIERRAS

Víctor Hugo Vásquez Mamani

VICEMINISTRO DE DESARROLLO RURAL AGROPECUARIO

Erik Bernardo Murillo Fernández

DIRECTOR GENERAL EJECUTIVO – INIAF

© INIAF. 2010. Plan de Manejo de Plagas. Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal. Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras. Estado Plurinacional de Bolivia. La Paz, Bolivia.

Teléfonos y Fax 591-2-2441153/2-2441608/2-211 3629

www.iniaf.gob.bo - [email protected]

Casilla Postal 4793

Calle Capitán Ravelo Nº 2329

Edificio Excélsior – 3er Piso

Sopocachi

La Paz – Bolivia

(Plan de Manejo de Plagas)

CONTENIDO

1.ANTECEDENTES1

2.JUSTIFICACIÓN:2

3.ANÀLISIS DESCRIPTIVO DEL USO ACTUAL DE PESTICIDAS POR LOS PRODUCTORES AGRÍCOLAS3

4.PLAN DE MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS (MIP)4

4.1. OBJETIVOS5

4.2. Estrategias del plan-MIP6

1.Reconocimiento de plagas6

5.MÉTODOS ALTERNATIVOS DE MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS EN BOLIVIA70

6.MEDIDAS DE MITIGACION77

7.ACCIONES CONCRETAS PARA LA IMPLEMENTACION DE UN PLAN DE MANEJO DE PLAGAS80

8.EVALUACION DEL PROGRAMA DE MANEJO DE PLAGAS84

9.BIBLIOGRAFIA CONSULTADA87

(Plan de Manejo de Plagas)

(Plan de Manejo de Plagas)

(Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal)- ii -

(Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal)

- i -

ANTECEDENTES

El Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF), creado a través del Decreto Supremo Nº 29611 de 25 de junio de 2008, se constituye en un sistema público de investigación básica, aplicada y adaptativa, transferencia tecnológica y de asistencia técnica masiva y gratuita, articulando mecanismos de extensión rural, difusión y de comunicación para el desarrollo en beneficio del conjunto de los actores rurales, priorizando la seguridad y soberanía alimentaría.

Por lo que es la única instancia de investigación acreditada en actividades de intercambio científico y tecnológico a nivel nacional e internacional, relacionadas con temas agropecuarios y forestales. Asimismo, implementará, impulsará y articulará las políticas nacionales, departamentales, municipales y locales en el ámbito de la investigación e innovación agropecuaria y forestal. Donde el El Banco Mundial apoyará al INIAF con un préstamo bajo el “Proyecto de Innovación y Seguro Agrícola” (PISA) y por lo tanto El Banco Mundial requiere que el INIAF cuente con un Plan de Manejo Integrado de Plagas (MIP) para cerciorarse que el impacto de las actividades a iniciarse ocasionaran en el área de influencia del INIAF será el mínimo.

JUSTIFICACIÓN:

La posible reducción de la dependencia de plaguicidas sintéticos de alta toxicidad será la base más segura para el manejo de plagas entre los pequeños y medianos productores que coordinarán diferentes tareas con el INIAF.

Con un enfoque al Manejo Integrado de Plagas, holístico preventivo y de inducción hacia una agricultura ecológica y sostenible; que no excluya el uso de plaguicidas, pero si considere como la última alternativa para la reducción de poblaciones fitófagas. Por lo tanto el INIAF no promoverá el uso de cualquier sustancia o plaguicida no permitida por la legislación nacional, además de excluir los plaguicidas considerados bajo la categoría toxicológica IA, IB y II, y establecidos de acuerdo a las Normas de la Organización Mundial de la Salud y así de esta manera reducir los riesgos a su salud, la salud del consumidor y al ambiente

Para lograr la reducción de plaguicidas, es necesario que los productores (pequeños y medianos) puedan contar con conocimientos sólidos sobre la biología y el comportamiento de las plagas en los diferentes cultivos para tener una visión más amplia de la elección de diferentes opciones a emplear y de esta manera mantener las poblaciones de plagas bajo control; asimismo en caso de emplear plaguicidas tendrán la suficiente solvencia para una elección correcta del producto.

Por lo tanto, el presente PLAN de MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS, servirá como una guía para el INIAF, con lo que se pretende, coadyuvar en la reducción del uso de plaguicidas en base a la normativa nacional y la del Banco Mundial.

ANÀLISIS DESCRIPTIVO DEL USO ACTUAL DE PESTICIDAS POR LOS PRODUCTORES AGRÍCOLAS

Las plagas son organismos vivos que afectan la calidad de los productos e inciden en la producción y cosecha y en los sistemas de producción agrícola, en varias regiones del país el uso de plaguicidas sintéticos de alta toxicidad es la práctica más empleada para el control de plagas, cuyas aplicaciones causan riesgo a la salud humana y al medio ambiente contaminando agua, suelos debido a la residualidad de los mismos. Este uso indebido de plaguicidas se debe a una serie de factores como:

· Falta de conocimiento del agricultor sobre la dosificación y calibración de equipos.

· Ausencia de uso de equipos de protección personal

· Uso irracional de plaguicidas, aún donde no se justifica su aplicación.

· Desconocimiento del efecto residual de los plaguicidas en el aire, en la planta y en el suelo.

· Tendencia al uso de plaguicidas de etiqueta roja y amarilla (Organofosforados, Carbamatos y Piretroides

· Consideran la eliminación completa de la plaga y no así la reducción de las poblaciones fitófagas

· Uso unilateral de plaguicidas

· Expendio de plaguicidas sin control en ferias comunales

PLAN DE MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS (MIP)

Hoy en día se busca que todas las actividades productivas sean compatibles con el uso sostenible para una mejor conservación de los recursos naturales en función a la normativa nacional emanada por el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (SENASAG), Ley No. 2061, en su Reglamento para el Registro y Control de Plaguicidas, Fertilizantes y Sustancias Afines de Uso Agrícola de 2002, así como la contemplada en la Ley del Medio Ambiente 1333 (abril del 1997). La protección ambiental debe basarse en el compromiso de un manejo sostenible y de protección al medio ambiente cuyo compromiso final promueva la mejora de las condiciones de vida de los habitantes del área rural.

La sostenibilidad del desarrollo agrícola debe estar enfocado desde un punto de vista integral que incluya la diversificación agrícola, manejo de recursos naturales, la conservación de suelo/agua y la disminución de la contaminación ambiental y una de las alternativas para controlar a las plagas es mediante el Manejo Integrado de plagas (MIP), que es el uso inteligente de diversos métodos de control de manera equilibrada para mantener las poblaciones de plagas por debajo del nivel da daño económico.

El MIP está dirigido hacia una agricultura ecológica y sostenible, permite la incorporación de métodos tradicionales, recuperación de saberes ancestrales, uso de controladores naturales, recetas caseras, empleo de feromonas, recolección manual de insectos y como última alternativa el control químico. El MIP, puede ser incorporado de una manera preventiva y curativa, la alternancia de un tipo de control, se puede dar en cualquier momento y en función a las fases fenológicas del cultivo y se encuentra al alcance del productor.

Por lo tanto se presenta al Manejo Integrado de Plagas como la mejor alternativa para reducir el uso indiscriminado y unilateral de los plaguicidas.

OBJETIVOS

· Promover el Manejo Integrado de Plagas (MIP) en diferentes cultivos.

· Proteger la salud del productor y de otros actores secundarios.

· Minimizar el riesgo ambiental induciendo hacia una producción ecológica y sostenible.

· Incorporar métodos y sistemas de control de plagas que sean alternativos al uso de plaguicidas, accesibles, de bajo costo y de alcance al productor.

Estrategias del plan-MIP

El presente Plan, cuenta con instrumentos claros a ser aplicados a nivel nacional, sirviendo de guía para el establecimiento de asistencia técnica impartida y coordinada por los técnicos del INIAF.

Acciones iniciales

Reconocimiento, pronóstico y monitoreo de plagas:

1. Reconocimiento de plagas

Generalmente a las plagas se las reconoce en el cultivo cuando el daño se ha producido y por lo tanto es irreversible; por esto es necesario monitorear el cultivo antes de que esto ocurra. Sin embargo, muchas veces buscamos una plaga y no la encontramos, aún cuando efectivamente se encuentre entre las plantas, ya que es necesario “saber buscar” y “saber cuándo buscar”, a esto llamamos monitoreo.

2. Pronóstico de la ocurrencia y desarrollo de las plagas

El pronóstico confiable permite con anticipación las ESTRATEGIAS y MÉTODOS de represión de plagas, también se debe considerar factores físicos y biológicos que determinan la aparición y tasa de represión. Si existen datos meteorológicos de años anteriores, sirve bastante para realizar el DIAGNOSTICO y conocer las causas de la presencia de plagas, sin embargo es muy limitado el dato climático para Enemigos Naturales.

a) El monitoreo según el pronóstico

Todas las plagas, no se presentan en la parcela de manera rápida y repentina en el cultivo, más bien ellas ya están presentes, durante un tiempo atrás, sin embargo debido al poco daño económico no se identifica como un problema serio.

Por ello se considera importante que antes de planificar el control de una plaga, se inicie un monitoreo que este en relación a las plagas y a la fase fenológica del cultivo.

Una vez realizado el monitoreo a campo, con todos los datos recabados y conociendo la biología de cada especie; es el momento de tomar las decisiones técnicas que resulten necesarias.

Además de lo dicho, el reconocimiento de plagas es esencial ya que toda parcela o cultivo es un sistema biológico vivo en donde será posible encontrar insectos que no dañan el cultivo sino que controlan las plagas dañinas. La protección de estos enemigos naturales implica tanto beneficios económicos como medioambientales.

En un proceso convencional de explotación agrícola, se observa una serie de fases típicas que enmarcan la secuencia de aparición de plagas y los mecanismos de control normalmente aplicados.

b) Identificación del principal problema fitosanitario

La búsqueda de plagas debe planificarse planteando un monitoreo acorde con el cultivo y su fenología. El monitoreo debe ser frecuente en concordancia con el estado fenológico; debe orientarse no sólo a reconocer la plaga presente sino que debe atender también a reconocer el estado más susceptible de las plantas y de las plagas, para efectuar las acciones de control de manera eficiente y con menor impacto ambiental y económico.

c) Planificación del Monitoreo

Es importante considerar que para la elección de las tácticas correctas dentro de un paquete MIP, el monitoreo debe ser anticipado incluso a la aparición del problema fitosanitario. Ejemplo para cultivos anuales.

Acciones de implementación del MIP

Incorporación de tácticas de manejo integrado de plagas

Numerosos factores ecológicos y biológicos, influyen en la relación entre las plagas y sus huéspedes. Por lo tanto la elección de las diferentes tácticas que se pueden elegir para mantener a las plagas por debajo del nivel de daño económico, es importante. Es por ello que las tácticas pueden ser fácilmente combinadas incluyendo el uso de agroquímicos, tomando en cuenta sobre todo el ecosistema, así como el riesgo ambiental, las características del cultivo, las fases fenológicas, por lo que es importante comprender las plagas, su relación con el huésped y el ecosistema.

a. Estrategias y tácticas en manejo integrado

Se entiende por estrategia la elaboración de un plan para controlar la plaga. La importancia de la plaga viene determinada por las características propias del insecto y por el cultivo. La estrategia puede consistir, por tanto, en introducir modificaciones sobre el insecto, sobre el cultivo o sobre ambos. Los tipos de estrategias pueden ser los siguientes:

1 No tomar medidas (no hacer nada).

2 Reducir la densidad poblacional del fitófago.

3 Reducir la susceptibilidad de la planta.

4 Combinar las dos anteriores.

Por su parte, los métodos utilizados para hacer efectiva la estrategia se llaman tácticas.

b. Tácticas de manejo integrado de plagas

Se presentan algunas alternativas para incorporar dentro de los nuevos lineamientos de trabajo del INIAF.

1. Control cultural

El control cultural es una alteración no química de una o más factores ambientales de la forma de las plagas, y por tanto, que estas encuentren el entorno inadecuado o inaccesible. Consiste en la recolección y destrucción de los frutos con sospecha de ataque y frutos que pudiesen haber quedado en la planta desde el ciclo anterior y sirven para hospedar a la plaga en el invierno, por ejemplo realizar las siguientes actividades:

· Rotación de cultivos

· Múltiples cultivos

· Cultivos intercalados

· Cultivo en bordes

· Cultivos trampa

· Uso de plantas y/o semillas certificadas

· Siembra y cultivo en época adecuada.

· Uso de sustrato cobertor o mulch.      

· Riego

· Fertilización

· Pastoreo

· Cosecha y almacenamiento eficiente

2. Control mediante enemigos naturales

Este método consiste en la utilización de los enemigos naturales de las plagas para mantenerlas por debajo del umbral de daño económico. Se presenta como alternativa al uso exclusivo de productos agroquímicos. Se ha logrado los siguientes avances:

· Con organismos: predadores, parasitoides o patógenos de plagas.

· Biocontrol natural: favoreciendo el control natural

· Liberación de organismos: existentes en el agroecosistema.

· Liberación inundativa: liberación de alta cantidad de organismos.

· Liberación de inóculo estacional

· Control Biológico: Introducción de organismo no nativo

· Herbívoros: Control de malezas, semillas.

Los siguientes ejemplos ilustran la gama de posibilidades de controlar las plagas con sus enemigos naturales:

· Los coccidos, presentes en varios cultivos del trópico, altiplano y valle, están controlados mediante mariquitas, que se alimentan de ellos en su estado larval y adulto.

· Varias orugas han sido controladas con avispas parásitas.

· Los escarabajos se controlan en parte con la bacteria Bacillus thuringiensis (Bt),que produce cristales tóxicos cuando el suelo que los contiene es ingerido por las larvas.

· Muchas avispas parasitan a los coccidos.

· La polilla de la papa, es controlada por el Virus entomopatógeno como los denominados Baculovirus.

3. Control químico natural

Como en los humanos y otros animales, cada estado de desarrollo de los insectos está gobernado por hormonas, sustancias químicas que produce el organismo y que envía señales que controla los procesos de crecimiento y las funciones metabólicas. Los insectos, además de producir feromonas, producen otras sustancias, que secretadas por un individuo, influye el comportamiento de otro de la misma especie.

Los científicos han descubierto que la cristalización de la oruga, es iniciada por una mengua en las concentraciones de una sustancia llamada hormona juvenil. Hoy se cuenta con bioinsecticidas con el ingrediente activo de una hormona, como el bioinsecticida SUCCESS, de venta en el país.

4. Control con barreras Físicas

Se refiere al uso de algunas condiciones climáticas manipulables para afectar el desarrollo de la plaga o su eliminación, así se realiza por ejemplo:

· Remoción o destrucción directa.

· Laboreo del suelo apropiado

· Barreras físicas

· Uso de temperaturas altas y bajas

· Manejo de humedad controlada

· Agua

· Aire

5. Control Autocida o Etológico

Consiste en la utilización de insectos para controlarse a sí mismos, es decir se aprovecha de sus propias sustancias ya sea de alimentación o de reproducción, donde el hombre a logrado sintetizar dichas sustancias conocidas como feromonas de alimentación /o segregación.

En Bolivia se usa con frecuencia para las polillas de papa y del tomate, con un éxito muy interesante, debido a la alta compatibilidad con el medio ambiente y por la facilidad de su uso, además del bajo costo.

6. Estrategias de la biotecnología

Hace poco la biotecnología, ha multiplicado las posibilidades del control genético. Más complicada que la reproducción selectiva básica, la ingeniería genética introduce en las plantas de cultivo genes de diversas fuentes: otras especies vegetales, bacterias y virus. Una estrategia promisoria consiste en incorporar la membrana proteica de un virus en la propia planta que ataca. Cuando la planta elabora la membrana, impide la infección del virus real.

7. Control Legal

Se refiere a todas las normativas emanadas de autoridad competente en la cual se sustentan las actividades de control. En Bolivia este rol es cumplido por el SENASAG, mediante sus diversos programas de control y manejo de plagas.

8. Manejo Integrado de Plagas (MIP)

El método conocido como Manejo Integral de Plagas pretende disminuir el uso de pesticidas orgánicos, sintéticos, sin poner en peligro los cultivos. Esto es posible tomando en cuenta todos los aspectos sociológicos, económicos y ecológicos relaciones con la protección de las siembras, asimismo, el Manejo Integral de las Plagas y Cultivos, considera a estas como parte de un ecosistema dinámico; la meta no es erradicar las plagas sino que el daño a los cultivos quede por debajo del umbral económico.

El Manejo Integrado de Plagas es un “sistema de manejo de plagas que, en el contexto del medio ambiente y la dinámica poblacional de las distintas especies plaga, utiliza herramientas de tipo CULTURALES, FÍSICAS, GENÉTICAS, BIOLÓGICAS Y QUÍMICAS con el objeto de mantener las poblaciones de plagas por debajo del umbral de daño económico y con el mínimo riesgo o impacto para las personas, animales y medio ambiente.”  Código Internacional de Conducta FAO sobre Distribución y Uso de plaguicidas (Artículo2). En palabras simples “Mantener las poblaciones plaga a un nivel bajo para que hagan menos daño”.

El MIP permite a los productores, y a demás personas involucradas, controlar enfermedades, insectos, malezas y otras plagas de una manera más efectiva en términos de costos, amigable con el medio ambiente y la salud.

Este sistema cumple los requerimientos del desarrollo sustentable y de la agricultura sostenible. Es uno de los componentes del Manejo Integrado de Cultivos (MIC) que ha sido desarrollado como un sistema agrícola para satisfacer los requisitos de sustentabilidad en el largo plazo.

El manejo integrado de plagas implica, por tanto, la consideración simultánea de tres niveles del ecosistema agrícola: 1) el propio cultivo, 2) las plagas asociadas a ese cultivo, y 3) los organismos antagonistas de las plagas, es decir, sus enemigos naturales, formados principalmente por lo que se llama la fauna útil o fauna auxiliar. A nivel práctico, se hace necesario para una correcta aplicación de este sistema, un mayor soporte técnico basado en estudios completos de los diferentes parámetros de la zona en cuestión o su adaptación a la misma.

Los fundamentos que definen el Manejo Integrado son:

1. Además de considerar la plaga objetivo a tratar, es preciso plantearse como influyen nuestras actuaciones en el agroecosistema, es decir, tiene en cuenta el medio ambiente.

2 .No pretende eliminar la plaga sino mantenerla por debajo de umbrales de tolerancia previamente fijados.

3. Utiliza una serie de técnicas culturales, varietales, mecánicas, químicas y sobre todo biológicas, dando prioridad siempre a los procedimientos no químicos.

4. Sólo se justifica la aplicación de medios de control cuando el nivel de plaga sobrepasa un umbral de tolerancia económica.

5. Los medios de lucha empleados no deben impedir, dentro de lo posible, la acción de los factores naturales de mortalidad de la plaga.

6. El método de lucha debe proteger adecuadamente el cultivo y permitir la obtención de cosechas rentables.

 Bajo la denominación de Manejo Integrado se llevan a cabo, muchas veces, programas que no cumplen totalmente los principios del mismo, aunque sí realizan una primera fase: desarrollar planes de lucha química dirigida o racionalizada (cuya finalidad es reducir los tratamientos en un 50% o utilizar productos selectivos) y no hacen hincapié en métodos de lucha biológica o aquellos derivados del manejo del cultivo.

El sistema en el que se basa el Manejo Integrado consiste en una estimación de riesgos, de acuerdo con el estado de desarrollo del cultivo y del período crítico de daños. La estimación del riesgo se debe realizar a nivel de parcela o unidad cultural común, con lo que se evalúa el riesgo real de daños.

Cuestiones socio-económicas del Manejo de Plagas

a) Presiones para usar pesticidas

· Con cualquier método de control, es importante recordar que una especie se convierte en plaga sólo cuando su población se multiplica al punto de causar daños.

· En general, los controles naturales están destinados a mantener esas poblaciones reducidas, no erradicarlas.

· Con ello evitan daños significativos a la vez que preservan la integridad y el equilibrio de los ecosistemas.

· Los daños se juzgarán importantes solo si las perdidas económicas que originan, superan con mucho el costo de aplicar un pesticida.

· Este punto se llama umbral económico, si no hay tales de daños es que ya hay controles naturales y tal vez lo mejor sea dejar la situación como esta.

· Es más que probable que la aplicación en este momento de agentes químicos sintéticos trastorne el equilibrio natural y haga los resurgimientos empeore la situación.

· Tiene poca importancia que la amenaza de perdida por la infestación de una plaga sea real o imaginaria, inminente o remota.

· Lo que cuenta es que como la percibe el agricultor.

· Aun así no hay pruebas de daños inmediatos por la plaga, es probable que el agricultor que piense que sus plantaciones estén en riesgo acude al rociado de seguridad, al uso de los pesticidas “ sólo para estar seguros”.

b) Cultivos orgánicos de alimentos

· Con frecuencia la opinión pública manifiesta fuertes sentimientos en contra del uso de pesticidas químicos.

· Lo innecesario rociados cosméticos o de cualquier otro tipo persiste en la buena parte por que los consumidores desconocen las clases o los montos de los pesticidas aplicados.

· La experiencia muestra que cuando los consumidores están informados muchos abandonan la actitud de blanca nieve.

· Vienen apareciendo puntos de ventas que expenden alimentos cultivados orgánicamente (produciendo sin pesticidas ni fertilizantes químicos), si bien los productos no tienen apariencia perfecta y suelen costar mas que los tratados con agentes químicos se tiene la ventaja de contar con productos libres de tóxicos, por lo que la tendencia debe ser no solo de reducir el uso de plaguicidas sino también de fomentar la producción orgánica.

9. Control Químico

La agricultura moderna ha permitido al hombre simplificar muchas actividades agrícolas, donde el manejo de plagas mediante los agrotóxicos han querido reemplazar a los controladores naturales de poblaciones de malezas, insectos y patógenos; y como que la manipulación genética reemplace a los procesos naturales de evolución y selección natural de la planta; sin duda este sistema artificial ha provocado que los agroecosistemas modernos sean muy frágiles.

El milagro tecnológico, llamado así a la aparición de los primeros plaguicidas sintéticos, donde el objetivo principal era erradicar a las plagas del mundo, por lo que actualmente la industria agroquímica produce y comercializa grandes cantidades de plaguicidas a nivel mundial.

Sin embargo como menciona Gomero L. (1991); las grandes promesas del combate químico se han transformado en grandes problemas; se presentan envenenamientos agudos y crónicos entre los campesinos, agricultores y sus familiares; se establece la correlación entre el uso y el consumo de plaguicidas con enfermedades como el cáncer, afecciones hepáticas y trastornos nerviosos; y se produce la contaminación generalizada de los ecosistemas.

Como consecuencia de este uso masivo de agroquímicos se estima que alrededor de un millón y medio de personas se envenenan anualmente con estos productos en todo el mundo.

El Control Químico de las plagas es la represión de sus poblaciones o la prevención de su desarrollo mediante producción química, a estos se los llaman “PESTICIDAS”, “PLAGUICIDAS”, “AGROTOXICOS”, “FITOTOXICOS”, “AGROQUIMICOS”, etc.

El éxito del Control químico depende de tres elementos que son muy importantes:

a. Que producto usar

b. En que forma aplicar

c. En que momento ejecutar

1. Problemas a causa del mal uso y manejo de plaguicidas.

Por el gran impulso que se dio a los plaguicidas, estas sustancias pasaron a ser parte de recetas rígidas en el control de plagas, donde el mal uso y abuso de estas sustancias es la principal característica. Como respuesta a esta situación a partir de los años 50 se fueron presentando algunos problemas como ser:

i. La aparición de plagas resistentes, siendo uno de los primeros casos y quizás el más conocido el del picudo del algodón Anthonomus grandis, un otro ejemplo es el caso de la Plutella xylostellaque es resistente a la Deltametrina tal como nos muestra un estudio realizado en 1997 por Hruska, Vanegas, Pérez.

ii. La aparición de plagas secundarias, que son aquellos organismos que en un principio no eran consideradas como plagas agrícolas pero con el paso del tiempo se transformaron en tales, esto al eliminarse o reducirse los organismos benéficos que actuaban como controladores naturales.

iii. En la segunda mitad del siglo XX, el hombre comienza a preocuparse seriamente por el medio ambiente y es a partir de aquí que se puede evidenciar problemas de contaminación en el medio ambiente causada por el lavado de residuos de plaguicidas a ríos, lagunas y aguas subterráneas, la biomagnificación de los plaguicidas en las cadenas tróficas, y el efecto sobre organismos no objetivo.

iv. Posteriormente surgen los problemas en la salud humana (intoxicaciones agudas y crónicas) principalmente en los sectores de menores niveles educativos, a esto hay que añadir otra preocupación al detectarse residuos de plaguicidas, en los alimentos para el consumo que estaban por encima de los Límites Máximos Permisibles, establecidos en el CÓDEX ALIMENTARIO. Refiriéndonos a los daños en la salud de las personas estos se deben a que los plaguicidas entran al cuerpo humano a través cuatro puntos de entrada: piel (dérmico), boca (ingestión), nariz (inhalación) y los ojos. Una vez en contacto con tejidos sensibles, un ingrediente activo del plaguicida puede tener uno o más efectos tóxicos que pueden ser a corto plazo (agudos) y a largo plazo (crónicos).

v. Los efectos agudos o inmediatos son los que causan daño inmediato a la salud después de una o varias exposiciones de corta duración. Los efectos agudos incluyen muerte, náusea y vómitos, mareos y dolor de cabeza severo, y erupciones en la piel. La toxicidad aguda es el efecto más fácilmente medido en animales de laboratorio y por tanto es la usada más a menudo para describir el riesgo para la salud humana de un plaguicida dado.

vi. Los efectos crónicos de los plaguicidas son los que aparecen mucho tiempo después de la exposición a los mismos, entre los principales efectos tenemos esterilidad, daños en el hígado y pulmones, daños neurológicos. Debido a que los efectos en las personas pueden ocurrir a muchos años en el futuro, ha sido difícil conectarlos definitivamente con exposiciones a plaguicidas.

vii. Finalmente aunque no menos importante, se ve un incremento en los costos de producción debido al elevado número de aplicaciones que se requiere para el control de un mayor número de plagas y que además muchas de ellas son resistentes. Los plaguicidas participan con un 20% – 50% del total de los costos de producción.

viii. Como hemos visto, los problemas a causa del uso de plaguicidas son muchos y además pueden ser irreversibles, por tal motivo es necesario poder manejarlos de forma responsable, para esto primero debemos conocer más acerca de estos insumos además de tomar en cuenta con un conjunto de normas y/o procedimientos que nos ayudarán a minimizar los riesgos a los cuales no solo productores y consumidores están expuestos sino también el medio ambiente.

2. Información técnica de los plaguicidas.

Concepto de plaguicida.- El Código Internacional de Conducta para la distribución y Utilización de Plaguicidas de la FAO (2003), define a un plaguicida como:

“Cualquier sustancia o mezcla de sustancias destinadas a prevenir, destruir o controlar cualquier plaga, incluyendo los vectores de enfermedades humanas o de los animales, las especies de plantas o animales indeseables que causan perjuicio o que interfieren de cualquier otra forma en la producción, elaboración, almacenamiento, transporte o comercialización de alimentos, productos agrícolas, productos de madera o alimentos para animales, o que pueden administrarse a los animales para combatir insectos, arácnidos u otras plagas en o sobre sus cuerpos”.

Un plaguicida está compuesto básicamente por: El ingrediente activo (i.a), que es la parte biológicamente activa del plaguicida en una formulación, Coadyuvantes, que son sustancias que mejoran las propiedades físicas y químicas del plaguicida, Aditivos, que son sustancias que se incorporan al plaguicida con el objeto de brindar señales de advertencia y/o como agentes de seguridad e Impurezas, que son subproductos de fabricación o los que surgen durante el almacenamiento de un plaguicida, pueden ser relevantes o irrelevantes.

3. Clasificación de los plaguicida.- Los plaguicidas pueden clasificarse de muchas maneras, pero comúnmente ellos se clasifican de acuerdo a:

Tabla 5. Clasificación de la OMS de plaguicidas según su toxicidad aguda.

Clasificación

DL50 Oral

DL50 Cutáneo

Sólidos*

Líquidos*

Sólidos*

Líquidos*

Ia Extremadamente tóxicos

6 o menos

20 o menos

10 o menos

40 o menos

Ib Altamente tóxicos

6-60

20-200

10-100

40-400

II Moderadamente tóxicos

60-600

200-2000

00-1000

1400-4000

Ligeramente tóxicos

>600

>2000

>1000

>4000

*Estado físico del ingrediente o formulación clasificada.

El destino.- Esta clasificación se refiere al tipo de plaga que controla el plaguicida, pueden ser:

· Insecticidas, para el control de insectos.

· Fungicidas, para el control de hongos.

· Acaricidas, para el control de ácaros

· Herbicidas, para el control de malezas.

· Molusquicidas, para el control de moluscos.

· Nematicidas, para el control de nematodos.

· Ovicidas, para el control de huevos de insectos y ácaros.

· Rodenticidas para el control de roedores.

· Reguladores de crecimiento modifica el desarrollo fisiológico del organismo.

4. Clasificación por estructura química del ingrediente activo:

Organoclorados Son insecticidas que contienen carbono, hidrógeno, y cloro. También se los conoce con otros nombres: hidrocarburos clorados, orgánicos clorados, insecticidas clorados, y sintéticos clorados. La mayoría son muy persistentes en el medio ambiente y se biomagnifican en la cadena alimenticia dado que se almacenan en los tejidos adiposos. La mayor parte de los organoclorados son insecticidas con toxicidad aguda baja pero tienen efectos crónicos conocidos. Entre algunos OC, se encuentran: DDT, heptacloro, mirex, clordano, endosulfán y el lindano son organoclorados. Todos los OC, se encuentran fuera de vigencia y bajo ningún concepto deben ser empleados.

Organofosforados: son derivados de uno de los ácidos del fósforo, y como clase generalmente son los más tóxicos de todos los pesticidas para los vertebrados. Debido a la similitud de la estructura química de los OPs con la de los "gases nerviosos," sus modos de acción también son similares. Se degradan relativamente rápido en el medio ambiente, sin embargo han sido encontrados con frecuencia en estudios de agua subterránea. Los organofosforados inhiben la actividad de la acetilcolinesterasa, la enzima que se requiere para el funcionamiento de los nervios. Entre los OF más comunes se tienen Malatión, Parathion, clorpirifos y metamidofos monocrotophos. Algunos organofosoforados son extremadamente tóxicos y están prohibidos.

Carbamatos Los insecticidas carbamatos son derivados del ácido carbámico (de la misma manera que los OPs son derivados del ácido fosfórico). Y de igual manera que los OPs, su modo de acción es la inhibición de la vital enzima colinesterasa (ChE).Tienen baja persistencia ambiental pero toxicidad aguda relativamente alta. Son muy tóxicos para las abejas y avispas parasitoides. Los carbamatos actúan sobre los transmisores nerviosos de la misma forma que lo hacen los organofosforados, pero su efecto es menos persistente. Entre los más comunes se tiene al carbofuran, aldicarb, thiodicarb, metomil y pirimicarb.

Piretroides Originalmente fueron llamados piretroides sintéticos. Actualmente la mejor nomenclatura simplemente es piretroides. Éstos son estables en presencia de luz solar y generalmente son efectivos contra la mayoría de los insectos plagas de la agricultura y se usan a dosis muy tienen una persistencia muy baja en el ambiente. Su toxicidad para los seres humanos es generalmente baja, Los ejemplos incluyen cipermetrina, deltametrina y permetrina.

Spinosinas Las spinosinas están entre las más nuevas clases de insecticidas, y están representadas por el spinosad  (Success®, Tracer®, Naturalyte®). Spinosad es un metabolito de la fermentación del actinomiceto Saccharopolyspora spinosa, un microorganismo que habita el suelo. Tiene una novedosa estructura molecular y también el modo de acción que brinda una excelente protección a los cultivos, que se asocia típicamente con insecticidas sintéticos.

Ditiocarbamatos son en su mayoría fungicidas, incluyendo tiram, maneb y zineb. Tienen una toxicidad aguda de moderada a baja. Se sospecha que algunos son carcinógenos.

Bipiridilos son herbicidas ampliamente usados que son muy solubles en agua.

Químicamente están clasificados como compuestos catiónicos del amoníaco cuaternario de la molécula piridina. Los bipiridilos más conocidos son el paraquat y el diquat.

Triazinas son herbicidas. Los compuestos más conocidos son la atrazina y la simazina. Las triazinas tienen una toxicidad sistémica baja pero son contaminantes importantes de agua subterránea.

Tiocloroalquilos son fungicidas e incluyen captan, captafol y folpet. Otro miembro, la talidomida, es un conocido teratógeno o sustancia que causa deformidad.

5. El modo de acción.- Esta clasificación se refiere a la forma en que los plaguicidas actúan o atacan a la plaga, pueden ser:

· De contacto: actúan por contacto directo, con este tipo de plaguicidas es muy importante lograr una buena cobertura de las áreas a tratar durante la aplicación.

· Sistémicos: actúan mediante movimiento a través de las plantas tratadas (traslocación).

A parte de los ya mencionados también pueden ser de Inhalación, Ingestión, Translaminares y de Acción repelente.

6. El grupo químico.- Esta clasificación se refiere a como el ingrediente activo se agrupa de acuerdo a su origen, pueden ser:

· Inorgánicos.- Son aquellos que no contienen carbono en su estructura química y generalmente provienen de minerales extraídos de la tierra. Los compuestos inorgánicos como el azufre fueron algunos de los primeros plaguicidas usados por el hombre, como por ejemplo el oxicloruro de cobre, producto que todavía se sigue utilizando.

· Orgánicos.- Son aquellos que contiene carbono en su estructura química, la mayoría de ellos son sintetizados o fabricados a partir de compuestos químicos derivados del petróleo aunque algunos son derivados de plantas. A su vez estos, pueden clasificarse en grupos o familias con estructuras químicas similares entre los que podemos citar: Organoclorados, Organofosforados, Carbamatos, Piretroides, Triazoles, Ditiocarbamatos, Bencimidazol, Fosfito, Sulfonil urea, Fenoxiacéticos, Bipiridilos y Triazinas, cada uno de estos productos tienen usos, características y particulares diferentes.

· Biológicos.- Los plaguicidas biológicos contienen organismos, microorganismos o sustancias producidas por estos. Una característica de este tipo de plaguicidas es que típicamente sólo son tóxicos para determinados insectos.

· Botánicos.- Son plaguicidas preparados en base a extractos vegetales por ejemplo tenemos a los producidos en base al Neem, a la rotenona a partir del timbo y al piretro a partir del crisantemo.

7. El grado de toxicidad

Esta clasificación se refiere al riesgo que representa el uso de un determinado producto para la salud de las personas, esta clasificación se basa en criterios que fueron establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), criterios que toman en cuenta su toxicidad aguda, oral y dermal, con estas consideraciones pueden ser:

Tabla 1 Grado toxicológico

COLOR DE ETIQUETA

GRADO TOXICOLOGICO

PELIGROSIDAD

DL50 en mg/kg

ROJO

Ia

Extremadamente peligroso

1-50

ROJO

Ib

Extremadamente peligroso

50- o menos

AMARILLO

II

Altamente peligroso

50 a 500

AZUL

III

Moderadamente peligroso

500 a 5000

VERDE

IV

Ligeramente peligroso

mayor a 5000

8. La época de aplicación.- Esta clasificación se refiere a la época en la cual se aplica a los cultivos o al suelo, por ejemplo los herbicidas pueden aplicarse:

· Presiembra o pretrasplante.- El producto es incorporado al suelo con el último laboreo previo a la siembra o trasplante.

· Preemergencia.- El producto es aplicado después de la siembra, pero antes de la emergencia del cultivo y las malezas.

· Postemergencia.- El producto es aplicado después de que las malezas hayan emergido del suelo o después de realizado el trasplante.

9. Tipos de Formulaciones

1. Formulaciones o preparados sólidos

1.1. Polvos para espolvoreo.- Estos formulados se aplican directamente sobre las plantas empleando maquinaria adecuada. La materia activa se encuentra dispersada es un vehículo inerte sólido (talco, arcillas, etc.) y si es preciso se añaden al mismo agentes de fluidez y estabilizantes. Las concentraciones en materia activa de tales productos son variables, pero generalmente bajas (del 1 al 20%), aunque en determinados casos bien justificados se emplean concentraciones mayores como ocurre con el HCH, el azufre y otros productos.

En un producto para espolvoreo no interesa el que todas sus partículas (por lo menos las activas) sean de igual tamaño; la nube de polvo formada viaja un trecho para caer sobre las plantas, ocurriendo entonces que las partículas más pesadas caen en la zona más próxima y las más ligeras sobre las plantas más lejanas. Por ello conviene que exista una gradación adecuada del tamaño de partícula, de modo que al lado de partículas muy pequeñas y livianas (que se arrastran hasta lejos por el aire producido en el espolvoreo.

1.2. Polvos solubles.- Son relativamente pocos los preparados que se presentan bajo la forma de polvo soluble (algunos insecticidas y acaricidas, ciertos herbicidas, etc.)Pueden ser definidos como productos sólidos pulverulentos, que al ser añadidos al agua forman con ella verdaderas soluciones, transparentes o translúcidas; naturalmente, la sustancia activa presente en estas formulaciones es un producto soluble en agua.

1.3. Polvos mojables.- Esta clase de formulados se presenta en forma de un polvo capaz de ser mojado y mantenerse en suspensión en agua durante un tiempo más o menos largo. El principio activo (generalmente insoluble o muy poco soluble en agua) está dispersado en una materia inerte, y a la formulación se añaden coadyuvantes tales como humectantes (para conseguir buena mojabilidad y esparcimiento del producto en las superficies tratadas), agentes de suspensión (para ayudar a mantenerlos suspendidos en el agua), adherentes (para impartir resistencia a la lluvia) y cuando es necesario estabilizantes para impedir descomposiciones cuando están almacenados, y tamponadores de pH, para evitar su hidrólisis; todos estos coadyuvantes están destinados a conseguir la mejor eficacia del producto una vez empleado.

2. Formulaciones granuladas.- Este grupo de formulaciones sólidas se aplica directamente a las plantas o al suelo, pero en su denominación “granulado”.

Este tipo de pesticidas se emplea mucho en tratamientos de suelos (termitas, hormigas, tijeretas, gusanos del suelo, etc.). esparciéndolos al voleo; tienen la ventaja de no formar polvo y evitar así atmósferas tóxicas al operador.

3. Otras formulaciones.- Hay otros tipos de formulados que respondena exigencias específicas, como por ejemplo:

3.1. Mezclas de fertilizantes + Insecticidas. En estas mezclas se busca que al realizar el abonado normal del campo se consiga también una lucha eficaz contra insectos del suelo.

3.2 Cebos preparados. Al lado del principio activo, contiene un atrayente para la plaga.

3.3. Fumigantes.El principio activo se emplea en forma de gas o vapor.

3.4 Desinfectantes de suelos: En general estos productos presentan gran polivalencia de acción (nematicidas, insecticidas, fungicidas, herbicidas, etc. De modo más o menos simultáneo).

3.5. Nematicidas. Se emplean sin dilución alguna y también por inyección directa al suelo.

3.6. Concentrados LV y ULV. Son productos para usar en “Bajo volumen” y Ultra bajo volumen”. Se emplea normalmente el producto puro, o un formulado no emulsionable, a elevada concentración y adicionado de algunos coadyuvantes que reducen su viscosidad. La aplicación de estos productos requiere equipos adecuados tanto si se emplea el tratamiento aéreo (que es lo usual) como la aplicación terrestre.

4. Formulaciones líquidas

4.1. Líquidos solubles. Estas formulaciones están constituidas por un principio activo soluble en agua y por disolventes adecuados, generalmente también miscibles en medio acuoso. Usualmente se emplean disolventes de carácter polar, como alcoholes, cetonas, etc., y las formulaciones diluidas en agua dan una verdadera solución transparente o translúcida.

4.2. Líquidos emulsionables. Las formulaciones “emulsionable” denominadas también “concentrados emulsionables” constan de la materia activa disuelta en u n disolvente apropiado, al que acompañan los coadyuvantes necesarios (emulsionantes, dispersantes, adherentes, etc.) En tales productos su dilución en agua produce emulsiones, formadas por finas gotitas de la formulación dispersas en el agua (vehículo de uso) y el conjunto posee aspecto más o menos opca y lechoso.

5. Aceites plaguicidas. Aceites minerales

5.1. Los aceites minerales figuran entre los insecticidas clásicos y a pesar de los muchos avances realizados, ostentan a un carácter único y preponderante en muchas aplicaciones. Su utilidad principal es la lucha contra cochinillas.

Las cochinillas pueden ser con caparazón que recubre el cuerpo, sin caparazón y algodonosas. Así los aceites actúan recubriendo el cuerpo del insecto, cuya muerte provocan al impedir los intercambios atmosféricos, es preciso dejar transcurrir un lapso prudencial (3-4 semanas) antes de cualquier comprobación de eficiencia del producto.

Los aceites minerales se dividen en dos clases principales:

a) Aceites estivales o de uso de verano, y que se aplican sobre árboles en plena vegetación; son los tipos empleados en cítricos, ornamentales y frutales en vegetación.

b) Aceites invernales, para usar en invierno en periodo durmiente en frutales de hoja caduca, cuando están sin hojas, flores ni frutos.

5.2. Constitución química. Todos los aceites minerales están constituidos por mezclas de hidrocarburos que se obtienen a partir de crudos petrolíferos y que se dividen, a su vez, en cuatro clases distintas: Parafínicos, olefínicos, nafténicos y aromáticos.

5.3. Formulaciones. Las formulaciones empleadas corresponden a dos tipos diferentes: La denominada “mayonesa” y la de “aceite transparente” o “aceite miscible”. La primera es en realidad una emulsión propiamente dicha del aceite en agua, emulsión “preformada” con aspecto de pasta blanca más o menos consistente a lo que alude su denominación de “mayonesa”; tales emulsiones preformadas acostumbran contener 80-87% de aceite y son fácilmente diluibles en agua. En cambio , los llamados “ aceites transparentes” o “miscibles” son fórmulas líquidas, claras y transparentes, constituidas por 90% o más de aceite, constituyendo el resto en emulsionables y coadyuvantes.

Ambas formulaciones son eficaces, aunque se ha dicho que las de tipo “mayonesa” son más seguras en su aplicación y de resultado más uniforme, diferenciándose además en sus dosis de empleo también distintas.

10. Uso y manejo responsable de plaguicidas

Hay que reconocer que el uso de plaguicidas en los programas de protección vegetal han contribuido de manera significativa dentro el desarrollo de la actividad agrícola, pero también es cierto que son la causa para que se presenten daños en la salud de las personas (productores y consumidores) como en el medio ambiente especialmente en países como el nuestro, por lo que se hace necesario usarlos de forma adecuada y racional.

La aplicación de plaguicidas debe ser realizada según un conjunto de reglas que contribuyan en la reducción de la contaminación del hombre y del ambiente, para esto se tiene algunas pautas importantes a considerar, mismas que serán descritos a continuación.

11. Etiquetas de plaguicidas

La función de la etiqueta es dar a conocer al usuario toda la información necesaria para el uso y manejo responsable del plaguicida, de este modo la lectura de la etiqueta del producto reviste gran importancia.

Existen cuatro situaciones en la que se debería leer una etiqueta, estas son: 1) Antes de comprar un plaguicida, 2) Antes de usar una plaguicidas, 3) Antes de almacenar un plaguicidas y 4) Antes de eliminar los envases vacíos de un plaguicida.

El buen uso de un plaguicida depende directamente de la información que se posea de él, por ello la etiqueta que lleva el envase es el elemento principal y a veces el único que dispone el usuario para obtener esta información. Por esta razón la etiqueta generalmente consta de tres partes que son:

Tabla 2 Precauciones y advertencias para uso de plaguicidas

Precauciones y advertencias

Identificación del producto

Recomendaciones de uso

Esta sección contiene informaciones sobre las precauciones de seguridad, tales como:

Esta sección contiene informaciones básicas sobre el producto, tales como:

Esta sección contiene informaciones sobre cómo y cuánto usar, tales como:

· Uso de ropa de protección.

· Cómo almacenar y descartar el envase.

· Primeros auxilios

· Tratamiento en caso de intoxicaciones

· Algo por resaltar es que el borde inferior la etiqueta lleva impresa una franja de color, la cual indica la categoría toxicológica a la que pertenece el plaguicida.

· Nombre comercial.

· Nombre común.

· Formulaciones.

· Concentración.

· La cantidad de producto en el envase.

· Fecha de vencimiento (a veces está en la tapa).Número de registro.

· Cómo mezclar el producto.

· Dosis de aplicación.

· Momentos de aplicación.

· Plagas que controla.

· Tiempo de carencia.

· Intervalo entre aplicaciones.

· Volumen de aplicación.

12. Equipos de aplicación de plaguicidas

Existe una amplia variedad de equipos para la aplicación de plaguicidas, estos pueden ser simples como los aerosoles que se sostienen con la mano o complejos tales como los pulverizadores a presión de múltiples picos de todos estos se deberá escoger el que mejor se acomode a las condiciones de trabajo, teniendo en cuenta que estos sean de buena calidad para ahorrar dinero, proteger sus cultivos y cuidar su salud así como también el medio ambiente. La selección de los equipos depende de muchos factores. Entre los principales tenemos:

· La mano de obra disponible.- El proceso de aplicación de plaguicidas requiere de operadores calificados y responsables.

· Asistencia técnica y manutención.- De nada sirve contar con el mejor equipo si no contamos con asistencia técnica de forma inmediata.

· Adecuación a la tarea deseada.- Existen cultivos que exigen determinados tipos de equipos.

· Disponibilidad de agua en el local.- Esto determina por ejemplo si no hay suficiente agua o las distancias son largas la adquisición de equipos que operan con bajos volúmenes de agua.

13. Recomendaciones y/o medidas de precaución para la reducción del riesgo.

Estas medidas se inician desde el momento de la compra del plaguicida y van hasta la finalización de la aplicación, entre los cuidados que debemos tener tomando en cuenta a los grupos más expuestos tenemos:

Para el vendedor:

· No debe almacenar el plaguicida con alimentos en los mismos estantes y depósitos.

· Evitar derrames dentro su local.

· Tomar medidas de precaución cuando los plaguicidas son almacenados en depósitos cerrados.

· No almacenar en forma mezclada.

· No fumar ni comer cuando está vendiendo.

· Lavarse con agua y jabón después de haber manipulado un envase.

· Al finalizar su trabajo bañarse bien con agua y jabón y cambiarse de ropa.

Para el comprador:

· Selección del plaguicida adecuado y/o indicado.

· Comprar plaguicidas en sus envases originales.

· No transportarlos junto con alimentos ni cerca de las personas.

· Almacenarlos en lugares adecuados, fuera de las viviendas y del alcance de los niños.

· Guardarlos en sus envases originales.

Para el aplicador:

· ANTES DE USAR PLAGUICIDAS

· Alimentarte bien, para poder aguantar toda la jornada de trabajo.

· Leer y tomar en cuenta todas las recomendaciones que da la etiqueta.

· Revisar tu equipo de fumigación (mochila y boquilla), para garantizar su buen funcionamiento.

· Abastecerte con la suficiente cantidad de agua para la preparación y aplicación del caldo.

· Ponerte toda la ropa de protección para evitar accidentes al preparar el caldo.

· Preparar el caldo en un lugar ventilado cerca al cultivo y lejos de tu vivienda.

· Guardar el balde, la cuchara y los otros utensilios utilizados para la preparación del caldo en el depósito de plaguicidas.

· AL MOMENTO DE USAR PLAGUICIDAS

· Con toda la ropa de protección puesta realizar la aplicación en horas de la mañana o al atardecer, nunca cuando el sol esté fuerte o haga mucho viento.

· Realizar la aplicación de cara al viento para evitar que el caldo llegue a tu cuerpo y te envenene.

· Aplicar el caldo a la planta lo más uniforme posible, para evitar que este caiga al suelo.

· Cuando se tape la boquilla utiliza una espina o paja para destaparla, nunca la destapes con la boca ni con algún objeto duro (alambre, aguja).

· Nunca comas, bebas, fumes o pijches cuando estés fumigando.

· Si piensas consumir algún alimento debes lavarte tus manos, brazos y cara con abundante agua y jabón.

· DESPUÉS DE USAR PLAGUICIDAS

· Con toda la ropa de protección puesta lavar cuidadosamente tu mochila.

· Inmediatamente después de lavar tu mochila debes bañarte con abundante agua y jabón.

· Lavar la ropa de protección con abundante agua y jabón.

· Guardar todo el equipo, ropa de protección, utensilios y los envases de plaguicidas en el depósito.

· Avisar a tus vecinos que has fumigado tu parcela.

14. Legislación respecto a plaguicidas de uso agrícola

La legislación que regula el uso de plaguicidas es la siguiente: Ley No 2061 de 16/03/ 2000; D.S. No 25729 de 17/04/2000, Reglamento a la Ley No 2061; SENASAG R.A. No 011/2001; R.A. No 055 de 17 de abril de 2002; R.A. No 063/2003; y tiene por objetivo proteger la salud de las personas (productores y consumidores) y el medio ambiente, además de asegurar al usuario la eficacia del producto. Actualmente la normativa nacional para el registro, control y uso de plaguicidas se encuentra en revisión.

Tabla 3 Plaguicidas prohibidos en Bolivia

NOMBRE DE LA SUSTANCIA

TIPO DE DECISIÓN

NORMA LEGAL

RAZONES PARA SU ADOPCIÓN

Chlodimeform

No consentido

PIC

-----------------

Dinoseb y sales de Dinoseb

No consentido

PIC

-----------------

Dibromuro de Etileno

No consentido

PIC

-----------------

Fluoroacetamida

No consentido

PIC

-----------------

Bromuro de Metileno.

Restringido

Resolución Administrativa No 065/2004

Autorización de Importación para la utilización exclusiva en tratamientos cuarentenarios de fumigación de fibra de algodón sin peinar ni cardar, con destino a mercados de exportación del Perú y otros

Aldrin

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Clordano

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001/2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

DDT

Restringido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Dieldrin

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Endrin

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Toxafeno

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Mirex

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

Dicloro Defenil Tricloroetano

Prohibido

Resolución Administrativa No 021/2005

De acuerdo al informe técnico CI/SENASAG/JNSVIARIA - 00001 / 2005, emitido por el encargando Nacional del área de Registro de Insumos Agrícolas, del SENASAG en el cual se menciona el riego y daño que puede provocar el uso de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP”s), en el Medio Ambiente y por ende en la salud humana

15. Clasificación de los Plaguicidas

El SENASAG, cuenta con una referencia en cuanto a la vigencia de plaguicidas. A continuación se presenta la lista de plaguicidas positivos y negativos, vigentes en el país:

Lista Negativa de productos plaguicidas Categoría Ib (Altamente Toxico) El registro de plaguicidas altamente tóxicos, alcanza a 79 productos, donde el número más alto con 73 productos, o sea el 92% corresponde a Insecticidas. Cada uno de estos productos a pesar de su alta toxicidad cuenta con el respectivo registro en el SENASAG. Pero que, por recomendaciones de las Políticas Operacionales del BM y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), estos productos no deben ser empleados bajo ninguna circunstancia, mucho más aún si el control de plagas se encuentra dentro de un Manejo Racional de Plagas.

Tabla 4 Lista negativa de plaguicidas categoría Ib

Clase

Cantidad

Acaricida

1

Insecticida – Fungicida

1

Herbicida

4

Insecticida

73

Figura 1 Relación de la lista negativa de plaguicidas

Lista negativa de productos plaguicidas, registrados en el SENASAG

Categoría ii- moderadamente tóxico etiqueta amarilla

Del total de 230 productos, se tienen registrados 100 insecticidas, que corresponde al 43%, por lo que se puede observar es un número elevado con relación a otros tipos de plaguicidas.

Tabla 5 Lista negativa de plaguicidas categoría II

Clase

Cantidad

Acaricida - Insecticida

1

Molusquicida

1

Preservante de Madera

1

Regulador de Ph

1

Insecticida - Acaricida

2

Insecticida - Fungicida

2

Coadyuvante

3

Fungicida

28

Herbicida

91

Insecticida

100

Figura 2 relación de la lista negativa de plaguicidad Categoría II

Lista positiva de productos, Registrados en el SENASAG a noviembre del 2009, Categoría iii – ligeramente tóxico – etiqueta azul

De acuerdo a las recomendaciones técnicas y a las Políticas Operacionales del BM y de la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como las disposiciones del SENASAG, los productos de categoría III, son poco tóxicos para los humanos y a los animales, permanecen en el ambiente poco tiempo y controlan rápidamente a la plaga.

Tabla 6 Lista positiva de plaguicidas Categoría iii

Clase

Cantidad

Coadyuvante

1

Desinfectante

1

Insecticida - Fungicida

1

Acaricida

2

Insecticida

24

Fungicida

32

Herbicida

50

Figura 3 Relación del listado positivo de plaguicidas Categoría III

Lista positivo de productos, categoría IV- Precaución – etiqueta verde

En este grupo de plaguicidas, se encuentran todos aquellos que son de baja toxicidad, productos de última generación, son poco tóxicos para los humanos y los animales, permanecen en el ambiente poco tiempo y controlan rápidamente a la plaga, muy recomendados para ser empleados en Programas de Manejo Integral de Plagas.

Tabla 7 Lista positivo de productos, categoría IV

Clase

Cantidad

Acaricida

1

Bioinsecticida

1

Coady- Humec- Adheren

1

Enmienda Organica

1

Fungicida + Bactericida

1

Humectante

1

Insecticida Biológico

1

Nematicida - Biológico

1

Protector Bact. Rhizobium

1

Adherente

2

Bactericida

2

Bioestimulante

3

Inoculante

3

Regulador Fisiológico

3

Regulador Crecimiento

4

Insecticida

24

Coadyuvante

41

Fungicida

80

Herbicida

134

Fertilizante

166

Figura 4 Relación de la lista de plaguicidas positivos categoría IV

De acuerdo a la publicación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), titulada “Clasificación recomendada de pesticidas por Hazard y guia linea de clasificación” los plaguicidas responden a la siguiente clasificación

Tabla 8 Clasificación recomendada de pesticidas

Categoría toxicológica

Grado de Toxicidad

Color de Etiqueta

Denominación

Ia

Extremadamente peligrosos

ROJA

Plaguicidas NEGATIVOS

Ib

Extremadamente peligrosos

ROJ A

Plaguicidas NEGATIVOS

II

Altamente peligroso

AMARILLA

Plaguicidas NEGATIVOS

III

Moderadamente peligroso

AAZULAAAA

Plaguicidas POSITIVOS

IV

Ligeramente peligroso

VERDE

Plaguicidas POSITIVOS

Categoría Ia: Se encuentran dentro de esta categoría, los productos denominados “DOCENA SUCIA”, que incluye a los siguientes:

Tabla 9 Lista negativa Ia

NOMBRE DEL PRODUCTO

MATERIA ACTIVA

NOMBRE COMERCIAL

DDT

DDT, MATADOR

ENDRIN

ENDRIN

ALDRIN

ALDRIN

MIREX

MIREX

DIELDRIN

DIELDRIN

LINDANO

LINDANO, GAMMA, BHC

HEPTACLORO

HEPTACLORO, CLORAHEP

METOXICLORO

METOXICLORO, MARLATE

HEXACLOROBENCENO

BHC

PENTACLOROFENOL

PENTACLOROFENIL, DOWCIDE

TOXAFENO

TOXAFENO

CLORDANO

CLORDANO

HEPTACLORO

HEPTACLORO

Ninguno de estos productos en la actualidad cuentan con registro en el SENASAG, sin embargo aún se encuentran en el mercado local (vía contrabando) y a precio muy bajo.

Categoría Ib: Son considerados productos Altamente tóxicos, con etiqueta de color ROJO, el SENASAG, aún registra productos de esta categoría, pero de acuerdo a recomendaciones internacionales, no deben ser incluidos para uso agrícola, forman parte de la lista de PLAGUICIDAS NEGATIVOS.

Categoría II: Denominados Moderadamente tóxicos, etiqueta de color AMARILLO, registrados en el SENASAG, que por recomendaciones internacionales, son considerados PLAGUICIDAS NEGATIVOS deben ser excluidos de la recomendación para productos agrícolas.

Categoría III: Ligeramente tóxicos, etiqueta de color AZUL, denominados dentro de la lista de PLAGUICIDAS POSITIVOS, productos que por su baja toxicidad, se encuentran autorizados para uso agrícola, respetando las recomendaciones de uso, manipuleo.

Categoría IV: Precaución, etiqueta VERDE, son productos menos tóxicos y pueden ser empleados en la agricultura, respetando las normas de uso y manejo de plaguicidas, los productos de esta línea son considerados PLAGUICIDAS POSITIVOS.

16. Equipos y Técnicas de Aplicación

1. Objetivos y eficacia de los tratamientos fitosanitarios. Los principales objetivos que se persiguen cuando se realiza un tratamiento fitosanitario son los siguientes:  

- Aprovechar al máximo los productos aplicados, con el fin de reducir tanto los costos como el impacto medioambiental, ya que son caros y en algunos casos tóxicos.     

- Maximizar el rendimiento del trabajo, entendido como superficie tratada por unidad de tiempo, por razones principalmente de carácter económico.      

- Conseguir la máxima eficacia posible, desde los puntos de vista económico y agronómico, para lo cual se requiere una distribución uniforme

Para alcanzar este último objetivo hay que tener en cuenta las siguientes recomendaciones:  

- Las materias activas empleadas deben ser eficaces contra la plaga o agente patógeno y debe considerarse su peligrosidad para la salud y el ambiente, así como sus efectos secundarios sobre la fauna auxiliar.      

- Para conseguir los resultados esperados, la dosificación debe ser correcta, de forma que la planta quede cubierta homogéneamente. Para ello es necesario elegir la maquinaria adecuada, d acuerdo con el producto a emplear y la plaga o enfermedad a combatir.     

- La plaga o agente patógeno debe encontrarse en la fase más sensible al plaguicida.   

- Las condiciones climáticas deben ser lo más favorables posibles con respecto al tipo de producto a emplear.

2. Principales métodos de aplicación de plaguicidas. La clasificación de los métodos de aplicación de plaguicidas se realiza en función del vehículo que soporta al producto, que puede ser sólido, líquido o gaseoso:

- Espolvoreo. Consiste en la distribución del fitosanitario en forma de polvo, mediante al aplicación de una corriente de aire, que a su paso por el depósito de tratamiento arrastra parte del producto.

Tabla 10 Ventajas e inconvenientes del espolvoreo

Ventajas

Inconvenientes

Mayor penetración de los productos en la masa vegetal

Barrera de protección poco segura

Permite los tratamientos fitosanitarios en lugares con escasez de agua

Poca adherencia de los productos a la planta

Mayor rapidez de ejecución

Falta de homogeneidad en la distribución

 

Hay que manejar mucho volumen de producto para la misma cantidad de materia activa

 

Problemas de almacenaje (higroscopicidad)

 

Apelmazamiento del polvo con la humedad

 

Tratamiento incontrolado en días de viento, con la consiguiente invasión del producto a ligares próximos.

Fuente: López et al. (1997).

- Pulverización. Mediante este método la distribución de los plaguicidas se realiza en forma de líquido, que se deposita sobre las plantas en forma de pequeñas gotas. Los factores que influyen en la pulverización son:

1. Lugar a tratar: suelo desnudo, cultivos bajos, entre líneas de cultivo, cultivos arbóreos, etc.   

2. Cantidad de producto: volumen normal, reducido o ultrabajo.

3. Clase de producto: plaguicidas (herbicidas, insecticidas, etc.), fitorreguladores (aceleradores y retardadores del crecimiento, aclareo químico), fertilizantes líquidos (soluciones nitrogenadas, complejos claros y complejos en suspensión).

4. Características del producto: densidad, viscosidad, tensión superficial, agresividad, composición química, abrasividad, forma de absorción). 

5. Agentes externos: temperatura, humedad relativa, viento, presión atmosférica.  

· Fumigación. Consiste en la aplicación del producto en forma de gas y requiere la intervención de personal especializado, autorizado al efecto.

· Aplicación de Cebos. Colocación de determinados preparados para atraer o repeler agentes nocivos (ej: roedores, etc.).   

· Tratamientos vía riego. Es un sistema de aplicación muy frecuente en plantaciones con sistema de riego localizado.  

· Aplicación en el suelo. Consiste en la incorporación al suelo del plaguicida sólido en forma de gránulos, que una vez enterrados desprenden gases que se mezclan con el aire del suelo.

3. Maquinaría de aplicación de plaguicidas

3.1. Máquinas Espolvoreadoras. Se emplean para distribuir el formulado en forma de polvo a través de la corriente de aire. Esta corriente es producida por un ventilador y entra en el depósito, arrastrando el polvo y distribuyéndolo de forma más o menos homogénea sobre el vegetal.

El gasto (número de kilogramos distribuidos en un minuto) de un aparato espolvoreador a través de las boquillas o mangueras de reparto puede ser regulado de varias formas:

-Abriendo o cerrando la abertura del regulador de salida del polvo.

-Variando las revoluciones del ventilador.

-Regulando la entrada de aire en el depósito.

Las principales características a tener en cuenta en un espolvoreador son el tamaño de la partícula y el caudal de aire del ventilador.

3.2. Máquinas pulverizadoras. Las máquinas pulverizadoras están constituidas por un depósito con agitadores que mantienen en íntima unión el producto y el agua, y por una bomba que obliga al agua a salir a través de las boquillas, fragmentándola en gotas de diámetro variable y dispersándolas sobre el terreno o plantas. A menor tamaño de las gotas, mayor es la superficie cubierta. Así mismo, es muy importante la regularidad del tamaño de las gotas; con un tamaño pequeño de gotas y una gran uniformidad se consigue mejorar la eficacia del tratamiento, disminuir el volumen de caldo por unidad de superficie y, por tanto, una reducción en los costes. El gasto en estos tratamientos oscila entre 500 y 1.300 litros/Ha, dependiendo del producto, densidad de la plantación, etc.

Tabla 11 Tamaño de la gota según aplicación

Tipo de producto

Tamaño de la gota

Objetivo de la pulverización

Funguicidas

10-15 micras

Recubrir perfectamente la planta para eliminar al patógeno

Insecticidas-acaricidas

10-300 micras

Conseguir gran número de impactos para alcanzar individuos pequeños y escondidos

Herbicidas

300-1.000 micras

Evitar la deriva

Abonos

> 1.500 micras

Evitar la deriva y facilitar la absorción

       

Tabla 12 Número de gotas recomendado para un buen tratamiento

Número de gotas/cm2

Tipo de producto

20-30

Sistémicos

50-60

De contacto

10

Productos por inhalación

Fuente: López et al. (1997).

     

Los factores que influyen en la pulverización ya han sido descritos y dan una idea de la complejidad de esta técnica, por lo que es necesario que el agricultor aprenda a manejarla o se asesore correctamente.

La maquinaria de uso más extendido es el pulverizador hidráulico, mediante el cual la pulverización se realiza por presión del líquido impulsado por una bomba. El paso del líquido a presión a través de la boquilla de pulverización produce gotas de diámetros diferentes, según la presión de trabajo y el tipo de boquilla que se utilice y oscila entre 250 y 1.00 micras.

Los atomizadores realizan lo que se conoce como pulverización hidroneumática, dando gotas de similar tamaño (100-500 micras) que los pulverizadores hidroneumáticos, con la diferencia de que incorporan un ventilador. Se consigue una gran penetración, aunque una escasa homogeneidad.

Los nebulizadores son pulverizadores neumáticos que se caracterizan por producir gotas muy finas, similares a la niebla. Constan de una turbina que produce aire a gran velocidad (80-160 m/s), en cuya corriente se deposita el líquido que es micronizado al chocar con la corriente de aire que lo transporta así hasta el vegetal. El tamaño de la gota está comprendido entre 20 y 150 micras, según sea la velocidad del aire. Se consigue una gran penetración en el vegetal.

La pulverización centrífuga produce gotas gracias a la fuerza centrífuga que se origina cuando se hace pasar el líquido a uno o varios discos que giran a gran velocidad. Los elementos fundamentales en estos equipos son las boquillas, las cuales constan de un disco que es accionado por un motor eléctrico, a pilas en los equipos manuales. El tamaño de la gota varia en función de la velocidad de giro del disco y normalmente está comprendido entre 150 y 300 micras, aunque se pueden obtener tamaños más pequeños, llegando a tratamientos de ultrabajo volumen (U.L.V.). Los equipos más difundidos son los manuales, con capacidades de trabajo de 5 litros de caldo.

La pulverización térmica resulta de la unión de la pulverización neumática y el aporte de calor, produciendo tamaños de gota muy pequeños (10-50 micras). Estos equipos constan básicamente de: un depósito para el producto, un depósito de combustible, motor y tubo de escape en forma de emisor de niebla. El plaguicida es inyectado en forma líquida en el extremo del tubo de escape, mediante una boquilla similar a las utilizadas en pulverización neumática; al ser arrastrado por los gases de escape se produce la formación de gotas, que son calentadas, llegando a evaporarse; y cuando salen al exterior se condensan en forma de niebla, depositándose sobre los vegetales.

17. Normas Generales de Manejo y Aplicación de Productos Fitosanitarios

1. Introducción. El manejo y la aplicación adecuados de productos fitosanitarios, implica la reducción de los riesgos de toxicidad tanto para el personal manipulador como para el consumidor, así como la reducción del impacto sobre las distintas faunas y el medio ambiente y el aumento de la eficacia contra la plaga o enfermedad que se desea combatir. Para ello es necesario seguir de forma general una serie de normas de salud, seguridad y condiciones de trabajo, si no se especifica lo contrario:

1. La decisión de tratar y la elección del producto deben ser llevadas a cabo por personal cualificado, teniendo en cuenta los aspectos mencionados en el apartado anterior, así como cualquier otro criterio técnico que racionalice el empleo de productos fitosanitarios.

2. Normas relacionadas con la compra y el transporte:

- No se deben comprar productos que no estén envasados o con envases deteriorados. Dicho envase además debe estar precintado y debidamente etiquetado en la lengua oficial del país.

- Leer atentamente la etiqueta para comprobar si se adecua a nuestro problema, teniendo en cuenta las precauciones para su correcto uso.

- Comprobar la existencia de un número de registro oficial, ya que el uso de productos no autorizados es un riesgo para todos.

- El transporte debe realizarse separado de pasajeros y mercancías de consumo.

3. Normas relacionadas con el almacenamiento:

- Guarde los productos en lugar seguro, lejos de fuentes de calor y de la luz solar y debidamente ventilado, fuera del alcance de los niños, personas inexpertas y animales.

- No almacenar los plaguicidas con alimentos o piensos, ni fuera de su envase.

- No apilar los envases, con el fin de evitar su caída con posibles derramamientos o daños.

4. Normas a seguir en la preparación del caldo de tratamiento:

- En primer lugar debe comprobarse el correcto funcionamiento del equipo de aplicación.

- Leer detenidamente la etiqueta del producto, eligiendo la dosis correcta.

- Extremar las precauciones al manejar el producto concentrado, utilizando  el equipo de protección adecuado y evitando el contacto del producto con la piel y ojos.

- Preparar cuidadosamente el caldo en un lugar abierto, de espaldas al viento, con agua limpia y jabón al alcance.

- Disponer de los instrumentos de medida y vaciado necesarios (jarras, pesos, embudos, etc.), que deben ser lavados después de su utilización  y de uso exclusivo para dicho fin.

- Emplear agua limpia para el tratamiento.

- Calcular el volumen de caldo en función de la superficie a tratar y del estado de desarrollo del cultivo, evitando que sobre.

- En el caso de sólidos solubles, disolverlos en un cubo antes de echarlos al tanque de tratamiento y hacerlo uno por uno en el caso de mezclas. Los productos líquidos pueden echarse directamente al tanque de tratamiento cuando el nivel de agua alcance la mitad del volumen necesario.

- Las mezclas de productos sólo se realizarán en caso necesario y siempre después de asegurarse de que no suponen ningún riesgo para las personas, el cultivo y el medio ambiente.

- En caso de terminarse el producto debe enjuagarse bien el envase, al menos 3 veces y añadir esa agua al tanque de tratamiento.

- Emplear el caldo lo antes posible (antes de que transcurra un día) para evitar la pérdida de sus propiedades.

2. Cómo pueden penetran las sustancias peligrosas en el cuerpo

 

1.

Figura 5 Utilización sin riesgos de pulverizadores de mochila gracias al mejoramiento de¡ diseño y de las medidas técnicas de control

2. Normas para la ejecución del tratamiento:

- Los tratamientos deben ser realizados por personal suficientemente capacitado, para evitar riesgos y conseguir una buena eficacia.

- Utilizar el equipo de protección adecuado.

- Mantener alejados a los niños, embarazadas y a toda persona que no esté debidamente protegida.

- Asegurarse de que otras personas no realizan tareas en el lugar donde se va realizar el tratamiento.

- No fumar, ni comer, ni beber, ni ir al servicio, durante el tratamiento sin lavarse debidamente.

- Tener en cuenta las condiciones climáticas antes de realizar el tratamiento.

- El aplicador debe evitar que la nube de tratamiento caiga sobre él.

- La distribución del producto debe ser uniforme en toda la zona tratada, ajustando la velocidad de avance y el caudal de salida por las boquillas, evitando el goteo de caldo al suelo.

- En caso de obstrucción de las boquillas o filtros, sustituirlos o desatascarlos con aire o agua a presión, pero no nunca deben limpiarse soplando con la boca.

- No es conveniente que una misma persona esté tratando durante mucho tiempo seguido. En caso de sentir alguna molestia, debe abandonarse el cultivo y tomar una ducha.

- Al finalizar el tratamiento debe limpiarse cuidadosamente el equipo de aplicación; los envases vacíos deben destruirse y llevarse a contenedores específicos después de ser lavados. El aplicador debe tomar una ducha, lavar las ropas y el equipo de protección separadamente del resto de la ropa, cada vez que los utiliza y guardarlos en un lugar adecuado. En el caso de cultivos protegidos, deben dejarse transcurrir al menos 24 horas desde la aplicación antes de volver a entrar en el área tratada. Respetar el plazo de seguridad para recolectar.

Figura 6 Los recipientes y los desechos deben enterrarse a una profundidad de 1 metro

Figura 7 Lavado minucioso de las partes expuestas del cuerpo

 Figura 8 La ropa de protección personal se debe lavar después de utilizarse

18. Sintomatologìa y Primeros Auxilios

1. La capacidad de penetración de un plaguicida: Los Plaguicidas, pueden penetrar al cuerpo por diferentes partes, como se puede apreciar en la siguiente figura; por ello se deben tomar en cuenta además del tipo de plaguicida la vía de ingreso de intoxicación por plaguicida para proceder a la desintoxicación respectiva.

 

PSIQUIATRICOS

OJOS, OIDOS, NARIZ Y GARGANTA

CORAZON Y CARDIOVASCULAR

HIGADO

HEMATOLOGICOS E INMUNE

MUSCULO-ESQUELETICO

------------------------------------

NERVIOSO CENTRAL Y AUTONOMICO

ENDOCRINO

PULMONARES

GASTROINTESTINAL

URINARIO Y REPRODUCTIVO

PIEL

Figura 9 Síntomas de envenenamiento con plaguicidas

2. Normas a seguir en caso de intoxicación:

-Acudir a un médico, mostrándole las etiquetas a ser posible o indicándole los nombres de los plaguicidas usados recientemente. Cualquiera de los siguientes síntomas puede deberse a una intoxicación: extremada sensibilidad, sudoración excesiva, irritación, ardor o manchas en la piel, visión borrosa, picor o ardor en los ojos, vómitos, dolor abdominal, salivación abundante, dolor de cabeza, confusión, contracciones musculares, habla balbuceante, tos, dolor en el pecho, dificultad respiratoria, etc.

-Si debe atender  a algún intoxicado, consiga asistencia médica o traslade al paciente al lugar más próximo donde pueda conseguirla. En caso de no ser posible el traslado urgente o en espera de la ayuda médica deben seguirse los siguientes pasos: 

1. Aparte a la persona del lugar del accidente.

2. Mantenga la respiración del paciente. Limpie cualquier resto de vómito o de plaguicida de la boca del paciente. Mantenga la mandíbula hacia delante y la cabeza hacia atrás. Efectúe a ser posible la respiración “boca a boca” en caso necesario.

3. Quite las ropas contaminadas rápida y completamente, incluido el calzado y limpie al paciente con abundante agua. En ausencia de agua, limpie suavemente todo el cuerpo con una esponja o papel, que deberán ser destruidos inmediatamente.

4. Coloque al paciente de costado, con la cabeza más baja que el resto del cuerpo. Si el paciente está inconsciente, mantenga la mandíbula sujeta hacia delante y la cabeza inclinada hacia atrás, para asegurar y facilitar la respiración.

5. Controlar la temperatura del paciente, de forma que si es muy elevada  y la sudoración es excesiva, debe refrescarlo, pasando una esponja con agua fría. Si tiene frío, abríguele con una manta para mantener la temperatura normal.

6. Nunca provoque el vómito al menos que se indique expresamente en la etiqueta.

7. Si se presentan convulsiones, coloque un separador almohadillado entre los dientes.

8. El paciente no puede fumar, ni tomar alguna bebida alcohólica. No debe suministrársele leche.

3. Recomendaciones.

Después de haber sufrido una intoxicación por plaguicidas deben seguirse las siguientes recomendaciones:

- Evite cualquier posibilidad de nuevo contacto con el plaguicida.

- No entre en ningún área o campo tratado ni en sus inmediaciones, hasta que el producto esté seco o asentado.

- Evite permanecer en locales, vehículos, etc., que contengan o estén manipulando estos productos.

- No utilice la misma ropa u otros objetos que se habían empleado durante las aplicaciones de plaguicidas, aunque antes hayan sido utilizados convenientemente.

- Seguir el tratamiento y los consejos médicos específicos dados al respecto.

Figura 10 Cerciórese de que el paciente está inconsciente

Figura 11 En un sujeto inconsciente, la lengua puede obstruir la garganta e impedir la respiración

Figura 12 Para mantener expedita la tráquea, empuje la frente del paciente hacia atrás y con la otra mano levántele el mentón

Figura 13 Compruebe si e paciente respira observando y tocando el vientre y el pecho para ver si se mueve

Figura 14 Lave el ojo durante 15-20 minutos para eliminar la sustancia química

Figura 15 Si no dispone de agua corriente, utilice cubos de agua para eliminar la sustancia química de la piel

4. Tipos de toxicidad

Se distinguen dos formas de toxicidad: La toxicidad aguda y la toxicidad crónica. *La toxicidad aguda es producida por dosis relativamente altas de insecticidas que causan efectos rápidos. *La toxicidad crónica es consecuencia de una serie de dosis pequeñas, cuyos efectos son muy difíciles de medir ya que normalmente debe transcurrir un tiempo prolongado para manifestarse. Estos efectos son considerados en la actualidad con creciente interés. Un producto insecticida a las dosis de uso normal no debe afectar la reproducción de los mamíferos; no debe producir malformaciones en la descendencia (efectos teratogénicos), ni tener efectos cancerígenos u oncogénicos.

Cualquiera de estos efectos inhabilita el uso del producto.

Los casos de intoxicaciones agudas generalmente son consecuencia de algún accidente en la manipulación del insecticida, por descuido o ignorancia. Las advertencias señaladas en las etiquetas de los envases deben ser acatadas estrictamente.

Se distinguen las siguientes modalidades de intoxicaciones:

a) Por contacto del insecticida con la piel; toxicidad cutánea o termal, La toxicidad dermal resulta del contacto con el insecticida por equipo de aplicación defectuosa o inadecuada protección del operario, como falta de calzado, ropa o protector impermeable.

Figura 16 Absorción cutánea

b) Por ingestión, o toxicidad oral, La toxicidad oral suele ser estrictamente accidental al confundir un insecticida con un alimento o por ingerir vegetales recién tratados.

 Figura 17 Ingestión

c) Por inhalación, o toxicidad pulmonar, La toxicidad por inhalación resulta de la exposición a los vapores tóxicos o a las neblinas de aplicación.

Para evitar este efecto debe usarse máscaras con filtros apropiados; debe evitarse el manejo de concentrados en locales cerrados; y en el campo, al manipular o aplicar los insecticidas, el operador debe ubicarse contra el sentido del viento protegiéndose de los vapores y neblinas insecticidas. Terminada la aplicación de los insecticidas, los obreros deben bañarse o por lo menos lavarse las manos y otras partes expuestas del cuerpo, sobre todo antes de comer o fumar.

Figura 18 Inhalación

5. Precauciones contra las intoxicaciones

Por disposiciones legales, en la etiqueta de los envases se indica en forma permanente y legible al grado de toxicidad, las precauciones que deben tomarse, el antídoto y su modo de administración en casos de intoxicaciones. Hay una tendencia a internacionalizar el grado del peligro mediante el color de las etiquetas, símbolos gráficos (pictogramas) y palabras. La FAO y la Organización Mundial de la Salud han publicado una serie de boletines sobre directrices para el registro y control de plaguicidas (1985), para su etiquetado (1985) y su utilización (1984). A pesar de ello es alarmante la falta de conciencia sobre los peligros de los insecticidas, no solamente entre los operarios sino también entre el personal técnico que dirige las operaciones agrícolas. Haciendo más crítica la situación, muchos médicos incluyendo los de zonas rurales, no están familiarizados con las propiedades tóxicas y farmacológicas de los insecticidas modernos, con su sintomatología o con los antídotos, para atender casos urgentes. Klimer (1967) presenta un interesante manual sobre la toxicología, síntomas y terapia de las intoxicaciones.

La exposición del operador durante la aplicación de insecticidas depende de la forma de aplicación y del equipo que se usa. En la aplicación manual