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Cuentos escritos por alumnos de 3º de Primaria.
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“IMAGINAMOS Y CREAMOS”
Dibujo: Antonio José Mancera
Cuentos creados por niños y niñas de 3º de primaria.
Curso:2011/2012
¡A BUSCAR LA PRINCESA!
En tiempos muy lejanos vivían tres hombres, uno se llamaba Maiquel,
otro, Daniel y el más pequeño , Lucas.
Maiquel vestía con una camiseta de color marrón, pantalones vaqueros y
botas de montar a caballo.
Daniel iba vestido con una camiseta negra, unos pantalones marrones y
unas botas de montar a caballo.
Lucas iba vestido con una camiseta marrón, una chaquetilla marrón,
pantalones negros y las botas marrones.
Vivían cerca de un prado, en una casita pequeña. El prado era verde, con
muchas mariposas y flores. Había un lago con una catarata, el agua estaba
limpia, allí habitaban muchos peces, alrededor del prado había un montón de
árboles grandes.
Un día los llamó el rey y les dijo:
-¡Chicos, han secuestrado a mis hijas!
-¿Cómo?-respondió Lucas.
-¿A Yesica?- dijo Daniel.
¡Sí, a ella!-respondió el rey.
¡Ya vamos! –dijo Maiquel.
Cogieron sus caballos y se pusieron a comprar armas. Maiquel compró un
escudo y una espada. Daniel compró un arco y Lucas, una barita mágica.
Enseguida consiguieron encontrar el castillo diabólico de Diablo del Mar.
Maiquel encontró a Diablo y le dio un espadazo en el cuelo. Daniel con el arco le
dio en el culo y Lucas con la barita mágica le dio en la cabeza y acabó su
aventura de una forma feliz.
AUTORA: Teresa Morejón Campos. (3º B)
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EL SOL Y EL ARCOIRIS
Erase una vez un arcoíris tan bonito con sus siete colores que todos lo admiraban. Un día salió
del río y conoció al Sol. Los dos charlaban tranquilamente y se hicieron buenos amigos.
Un día, un duende travieso y pequeño que vivía en una seta cerca del río, sintió mucha envidia
de esa amistad y preparó un hechizo para el arcoíris. Consiguió que dejara de tener siete colores y se
quedara sólo con seis .
El Sol, al ver lo que había pasado, dijo:
- ¡No te preocupes, yo te protegeré!
Sin que el duende se diera cuenta, el Sol se acercó a él y le dio mucho calor. Pero el duende de un
brinco consiguió quitarle al Sol su color amarillo y se puso de color naranja.
Eso hizo que el Sol se enfadase muchísimo y se quedó apagado y triste porque ese duende había
conseguido hacerle daño tanto al arcoíris como al Sol.
Esa misma tarde, un príncipe joven, inteligente
y fuerte que paseaba por la orilla del río vio a nuestros
amigos el Sol y el arcoíris pensativos y tristes.
El príncipe les dijo:
- ¿Qué os pasa?
El Sol le respondió:
- Que un duende travieso nos ha quitado unos
colores.
El arcoíris se levantó y le contó todo lo que había
sucedido.
Aquel príncipe les dijo que no se preocupasen por nada que él resolvería el problema.
Fue a la seta donde vivía el duende y cogiéndolo por la oreja lo sentó en una roca y le dijo:
- Si no les devuelves los colores inmediatamente, hablaré con el Duende Mayor para que te retire
todos los poderes que te concedió al nacer.
El duende, nervioso y asustado le respondió:
- ¡No, por favor, no le cuentes nada al Mago Mayor! Te prometo que les devolveré sus colores.
El príncipe se marchó y cuando llegó al lugar donde estaban el Sol y el arcoíris, ya habían recuperado
sus colores y brillaban con un resplandor enorme.
Desde aquel día el duende no volvió a aparecer y el reino fue muy feliz.
Autor: Eduardo Abad Reina (3ºB)
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LA GOMA Y EL LÁPIZ
Erase una vez una niña llamada Paula, que tiene 8 años y estudia en un colegio pequeño, pero
muy bonito, de su pueblo. Todos los días iba al colegio con mucha alegría. Le gustaba aprender y jugar
con todos sus compañeros.
Hace algún tiempo le ocurrió lo que os voy a contar:
Un día soleado se dirigió al colegio, como siempre, con muchas ganas de aprender. Estando en clase,
llegó la hora del recreo. Ella había terminado su trabajo y dejó el estuche bien cerrado sobre la mesa.
Cogió su bocadillo y se fue con sus amigos al recreo para descansar y jugar un poco.
Mientras estaba en el recreo ocurrió lo siguiente:
El estuche comenzó a moverse lentamente .Parecía como si dentro hubiese algo moviéndose. De
pronto, empezó a abrirse la cremallera hasta el final. Ya nada se movía.
Al momento se ve como la goma de borrar se ha puesto encima del estuche y se resbala por el lado
hasta llegar a la mesa. Mira el cuaderno y comienza a patinar sobre él, borrando todo lo que se
encuentra. De esta forma consiguió borrar todo el trabajo que había hecho Paula durante toda la
mañana.
Pero la goma, no se conformó con borrar sólo ese cuaderno, sino que fue de mesa en mesa haciendo lo
mismo con todos los cuadernos de clase.
El lápiz, al escuchar ese ruido, se asomó por lo alto del estuche y comprobó lo que había hecho la goma
y le dijo:
- ¿Qué has hecho? ¿Cómo has podido hacerle eso a los niños y niñas de clase?
La goma, enfadada, le respondió:
- ¡Es que estoy cansada de que cuando borran conmigo no me limpian después! ¡No me cuidan y
además, hay algunos que me muerden o me abandonan en cualquier lugar!
De pronto escucharon el sonido de la sirena que anunciaba el final del recreo. Los dos salieron
corriendo, se metieron en el estuche y cerraron la cremallera desde dentro.
Cuando entraron los alumnos, el maestro les pidió los cuadernos para ver su trabajo, todos se llevaron
una desagradable sorpresa.¡ Todo había desaparecido como por arte de magia! Nadie sabía explicar lo
que había sucedido.
Pero Paula se dio cuenta que todo su estuche estaba manchado de restos de goma y pensó:
- Quien haya sido ha utilizado mi estuche y mi goma. ¿Quién habrá sido?
Al día siguiente, cuando salieron al recreo, ella se quedó escondida en clase, detrás del abrigo del
maestro.
De pronto empezó a ocurrir lo mismo, el estuche comenzó a moverse, la cremallera se empieza a abrir
y… ¡Zas!, la goma sale del interior.
En ese momento la niña dio un salto y se plantó delante de la goma.
-¿Qué haces?, ¿dónde vas?
La goma no sabía que decir. Se quedó callada, agachó la cabeza y le contó por qué estaba enfadada.
Paula comprendió las explicaciones que le dio pero le pidió que se disculpara. Así lo hizo.
Pero la goma, como estaba muy arrepentida de lo que había hecho, reunió a todos los lápices de la
clase y les rogó, por favor, que volviesen a escribir lo que ella había borrado y a cambio ella no volvería a
hacerlo jamás y desde ahora en adelante sólo borraría lo que los niños quisiesen y además con mucho
cuidado.
Desde aquel día, ningún niño mordió más las gomas ni las dejaba abandonadas.
Paula comprendió que hay que cuidar y valorar todo lo que se tiene porque quizás algún día nos falte y
ya no podremos recuperarlo.
Y colorín colorado, la goma y el lápiz, ya nunca más se han enfadado.
AUTORA: María Luisa de la Hera Ortiz (3ºB)
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“LA NIÑA Y EL MUÑECO”
Erase una vez una niña que se llama Irene. Tiene 10 años, mide 1,50 m, es rubia y viste muy
bien. Vive en Cantillana y su casa es muy grande. Esta niña tiene un problema, que le daba miedo
jugar con el videojuego porque le salía un muñeco.
Un día llegué y me puse a jugar con ella. Cuando estábamos jugando, ella miró al muñeco y
exclamó en voz alta:
- ¡Me está mirando este muñeco!, ¡mamá!
La madre estaba en la cocina preparando la comida y al escuchar los gritos de su hija, le dijo:
- ¡Hija! ¿Qué te pasa?
Y la niña, muy nerviosa, le respondió:
- ¡Mamá, ese muñeco no para de mirarme y me da mucho miedo!
La madre, para tranquilizarla, se puso a jugar con ella. Al tiempo de estar jugando le dijo
que aquello que había pasado sería un defecto de la máquina. Así que no debía preocuparse.
Nosotras seguimos jugando y el muñeco empezó a mirarnos de una forma muy extraña y
comenzó a reírse señalándonos con el dedo. Rápidamente apagamos el juego y nos deshicimos de
él escondiéndolo en el jardín de la casa en un sitio donde nadie pueda cogerlo nunca.
AUTORA: Pastora María Reina Blanco (3º B)
“LA PRINCESA ERICA”
Erase un país muy lejano en el que vivía una joven princesa que era una chica
normal.
Vive en un castillo. El lugar es muy bonito, las habitaciones son de color rosa
al igual que las camas y todo lo demás.
Un hada madrina fue a verla y no creía que estuviera guapa. El segundo día
fue otra vez y la princesa le dijo:
- Concédeme un deseo, por favor.
La hada madrina le contestó:
- Yo voy a hacer lo que tú me digas.
Y le concedió su deseo. Hizo un arcoíris con los nuevos poderes mágicos. Y al
final la princesa se casó con un príncipe y vivieron felices y comieron perdices para
siempre jamás.
AUTORA: Ana María Campos Núñez. (3º B)
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“LA TORTUGA VELOZ
Erase una vez una tortuga que quería correr más rápido pero no podía. Se
entrenó noche y día para nada. Fue a una escuela de pequeños guepardos para
correr.
En el camino se vio con un zorro y le preguntó.
-¿Qué te pasa?
Y la tortuga le dijo:
-Quiero correr, por eso voy a la escuela de guepardos para correr.
Le dijeron :
-¡Adiós!
Fue a la escuela y el profesor le dijo:
- ¡Tú no eres guepardo! ¡Eres una tortuga!
Los otros guepardos de la escuela se rieron, menos uno que le dijo:
- Tengo en mi casa un truco para correr .Te lo enseñaré. Ahora vete.
Acabaron las clases y le dijo:
-Tú eres una tortuga, así que te voy a enseñar el truco para las tortugas:
. Primero, te imaginas que estás en el agua.
. Segundo, empieza cerrando el caparazón.
. Tercero, te deslizas.
La tortuga lo probó y le salió. Desde entonces se conoce como la tortuga
veloz.
