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Revista Sonorense de Psicología 1999, Vol. 13, No. 2, 30-46. Análisis de Comportamiento en Campo Abierto Behavior Analysis in and Open Field Juan José Irigoyen 1 , Miriam Yerith Jiménez, Alfonso López Corral y José Francisco Huerta Laboratorio de Aprendizaje y Dinámica Conductual Programa de Maestría en Psicología Universidad de Sonora El presente trabajo muestra la relevancia metodológica de una preparación de campo abierto en el análisis de comportamiento. Los resultados señalan que la localización espacio-temporal de los suje- tos experimentales, permite analizar el flujo conductual en categorías más comprensivas que la típica preparación operante. La preparación permite el establecimiento de líneas base conductuales estables y sensibles, sobre las cuales estudiar un amplio rango de variables (ecológicas, nutricionales, neuro- lógicas). DESCRIPTORES: Campo abierto, preparación operante, economía abierta, patrón de com- portamiento, localización espacio-temporal. The present paper shows the methodological relevance of an open field preparation for the behavioral analysis. The results shows that the space-temporal allocation of the experimental subjects, allows to analyze the behavioral stream in more understanding categories that the typical operant preparation. The preparation allows the establishment of behavioral base line stable and sensitive, on those which to study a wide range of variables (ecological, nutritional, neurological). KEY-WORDS: Open field, operant preparation, open economy, behavior pattern, space- temporal allocation. 1 Para comunicación con el autor puede dirigirse a: Laboratorio de Aprendizaje y Dinámica Conductual. Edificio 9- E. Universi- dad de Sonora. Blvd. Luis Encinas y Rosales s/n, CP. 83000. Hermosillo, Sonora. México. E-mail: irigoyen@kunkaak.psicom.uson.mx El estudio del comportamiento animal ha sido abordado tradicionalmente desde dos frentes. Uno, al que puede denominarse etológico, mismo que se ca- racteriza por efectuar observaciones sistemáticas no- perturbadoras en ambientes naturales. El otro, al que se denominará de laboratorio, se caracteriza por efec- tuar observaciones en ambientes controlados en los que se limita en forma experimental el efecto de cier- tas variables a fin de determinar con precisión el valor de otras. Los datos provistos por estos métodos se complementan: el de laboratorio genera eficientemente información cuantitativa y cualitativa de alta calidad siempre y cuando se mantengan o simulen las condi- ciones presentes en los ambientes naturales y a la vez, sólo es posible identificar tales condiciones mediante los estudios etológicos. Así, ambos métodos obtienen validez a partir de los resultados obtenidos por el otro (Lea, 1985; González-Burgos y Cuevas Álvarez, 1992; Gapenne, Simon y Lannou, 1990). El modelo de condicionamiento operante se ha utilizado sistemáticamente en el laboratorio para estudiar el efecto de factores ambientales sobre el establecimiento y mantenimiento de conducta aprendi- da (Skinner, 1975; Honig y Staddon, 1978), los efec- tos conductuales de agentes farmacológicos (Gilbert y Keehn, 1972), el funcionamiento de ciertas estructu- ras neurológicas (Brady, 1966). En un estudio típico, a un sujeto experimental (normalmente una rata o un pichón) se le reduce al 80% de su peso "ad libitum" mediante limitación impuesta a la ingesta de alimento o de agua. En sesiones diarias de aproximadamente una hora de duración, se le expone a un programa de re-

Irigoyen, Jiménez, López, Huerta. (1999). Análisis de Comportamiento en Campo Abierto

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Revista Sonorense de Psicología 1999, Vol. 13, No. 2, 30-46.

Análisis de Comportamiento en Campo Abierto

Behavior Analysis in and Open Field

Juan José Irigoyen 1, Miriam Yerith Jiménez, Alfonso López Corral y José Francisco Huerta

Laboratorio de Aprendizaje y Dinámica Conductual Programa de Maestría en Psicología

Universidad de Sonora

El presente trabajo muestra la relevancia metodológica de una preparación de campo abierto en el análisis de comportamiento. Los resultados señalan que la localización espacio-temporal de los suje-tos experimentales, permite analizar el flujo conductual en categorías más comprensivas que la típica preparación operante. La preparación permite el establecimiento de líneas base conductuales estables y sensibles, sobre las cuales estudiar un amplio rango de variables (ecológicas, nutricionales, neuro-lógicas).

DESCRIPTORES: Campo abierto, preparación operante, economía abierta, patrón de com-portamiento, localización espacio-temporal.

The present paper shows the methodological relevance of an open field preparation for the behavioral analysis. The results shows that the space-temporal allocation of the experimental subjects, allows to analyze the behavioral stream in more understanding categories that the typical operant preparation. The preparation allows the establishment of behavioral base line stable and sensitive, on those which to study a wide range of variables (ecological, nutritional, neurological).

KEY-WORDS: Open field, operant preparation, open economy, behavior pattern, space-temporal allocation.

1 Para comunicación con el autor puede dirigirse a: Laboratorio de Aprendizaje y Dinámica Conductual. Edificio 9- E. Universi-

dad de Sonora. Blvd. Luis Encinas y Rosales s/n, CP. 83000. Hermosillo, Sonora. México. E-mail: [email protected]

El estudio del comportamiento animal ha sido abordado tradicionalmente desde dos frentes. Uno, al que puede denominarse etológico, mismo que se ca-racteriza por efectuar observaciones sistemáticas no-perturbadoras en ambientes naturales. El otro, al que se denominará de laboratorio, se caracteriza por efec-tuar observaciones en ambientes controlados en los que se limita en forma experimental el efecto de cier-tas variables a fin de determinar con precisión el valor de otras. Los datos provistos por estos métodos se complementan: el de laboratorio genera eficientemente información cuantitativa y cualitativa de alta calidad siempre y cuando se mantengan o simulen las condi-ciones presentes en los ambientes naturales y a la vez, sólo es posible identificar tales condiciones mediante los estudios etológicos. Así, ambos métodos obtienen

validez a partir de los resultados obtenidos por el otro (Lea, 1985; González-Burgos y Cuevas Álvarez, 1992; Gapenne, Simon y Lannou, 1990).

El modelo de condicionamiento operante se ha utilizado sistemáticamente en el laboratorio para estudiar el efecto de factores ambientales sobre el establecimiento y mantenimiento de conducta aprendi-da (Skinner, 1975; Honig y Staddon, 1978), los efec-tos conductuales de agentes farmacológicos (Gilbert y Keehn, 1972), el funcionamiento de ciertas estructu-ras neurológicas (Brady, 1966). En un estudio típico, a un sujeto experimental (normalmente una rata o un pichón) se le reduce al 80% de su peso "ad libitum" mediante limitación impuesta a la ingesta de alimento o de agua. En sesiones diarias de aproximadamente una hora de duración, se le expone a un programa de re-

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forzamiento en relación a una respuesta como la pre-sión de una palanca o el picoteo de una tecla. Cuando la tasa de respuestas se estabiliza, se introduce la va-riable independiente y se observan sus efectos sobre la línea base. Con esta metodología simple y elegante se han establecido principios fundamentales del compor-tamiento animal y humano (Catania, 1968; Rachlin, 1976).

Sin embargo, actualmente se plantean dudas sobre la validez ecológica de algunos elementos de la preparación operante típica (Dow y Lea, 1987; Shet-tleworth, 1983, 1984, 1987). Específicamente se cuestiona el efecto de todos aquellos elementos de la preparación que se han mantenido constantes a lo largo de un sinnúmero de estudios (Robles, 1991). Entre estas constantes se encuentran, entre otras:

a. Un espacio experimental reducido y pobre. b. La selección de una sola respuesta arbitraria. c. Las operaciones de privación. d. La duración de las sesiones experimentales. e. La eliminación de los patrones naturales. f. El uso de programas de reforzamiento.

La tecnología de un ambiente de campo abier-to (Hall, 1934), en el que es posible muestrear siste-máticamente la localización del sujeto experimental en tiempo real permite eliminar la mayor parte de las restricciones operacionales impuestas por la cámara de condicionamiento operante y promete producir información complementaria y potencialmente útil al estudio del comportamiento (Robles, 1990a, 1990b).

A su vez, de esta información se derivan me-didas que describen cuantitativamente patrones de actividad, exploración, desplazamiento, anidación y alimentación, entre otros. El ambiente es substancial-mente mayor que el de las cámaras operantes y puede ser enriquecido con subdivisiones, fuentes de estimu-lación y operandos de diversos tipos. No es indispen-sable establecer respuestas a priori, ni implementar operaciones de privación o programas de reforzamien-to a fin de obtener registros confiables del comporta-miento. Además, es posible conducir observaciones en condiciones sociales más complejas, durante pe-ríodos prolongados, sin alterar los patrones circádi-cos, lo que lo hace ecológicamente relevante.

El objetivo principal del presente trabajo es presentar la relevancia metodológica de la tecnología citada, así como determinar en forma paramétrica los

patrones de interacción del organismo en una prepara-ción de menor intrusividad, explorando parámetros de segmentación espacio-temporales diferentes (y com-plementarios) a los utilizados en la metodología ope-rante que permitan un grano más fino (mayor poder de resolución) al análisis de patrones de comporta-miento. Se considera que esta información será de gran utilidad y permitirá establecer categorías más comprensivas para el estudio del comportamiento, modelos cuantitativos de los patrones de comporta-miento estudiados, línea base conductuales estables y sensibles sobre las cuales estudiar un amplio rango de variables ambientales, neurológicas, nutricionales, etc.

Los resultados obtenidos y las categorías ana-lizadas en el presente estudio, serán presentados como casos. Los datos presentados en las fases 1 y 2 (Caso 1), se relacionan con la descripción y determinación de patrones de actividad, exploración, anidamiento, desplazamiento, actividad, forrajeo y patrones de ubi-cación espacial.

Las fases 3 y 4 (Caso 2), describen la deter-minación de ajustes de las diferentes categorías ya señaladas, adicionando la categoría de elección. Cen-trando el análisis respecto a los ajustes del comporta-miento a variaciones de disponibilidad y condicionali-dad en una economía abierta2 (Zeiler, 1991; Cohen, Furman, Crouse y Kroner, 1990).

Las categorías analizadas fueron: Ubicación espacial. Frecuencia relativa de la ubicación del sujeto en el área de la cámara experi-mental durante la sesión de registro. Anidamiento. Ubicación espacial de mayor frecuencia del sujeto en el área de la cámara experi-mental durante la sesión de registro.

Actividad. Cambio de ubicación espacial du-rante la sesión experimental. Exploración. Frecuencia de diferentes áreas visitadas durante la sesión.

2 La localización en espacio y tiempo describe ade-

cuadamente a la conducta en situaciones de respuesta simple y múltiple. De manera general el método describe cómo la locali-zación espacio-temporal del sujeto experimental en campo abierto permite describir categorías de comportamiento tanto etológicas como operantes.

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Desplazamiento. Distancia que el sujeto expe-rimental recorre durante la sesión.

Forrajeo. Frecuencia de ubicación en el es-pacio relacionado con áreas de comedero y agua.

Elección. Frecuencia relativa de localización correspondiente al área de comederos disponibles, con ubicaciones Norte (N) o Sur (S).

Patrón de actividad. Relación de las frecuen-cias relativas de los comportamientos (forrajeo, des-plazamiento, exploración y anidamiento) más sig-nificativos del sujeto en la cámara de campo abierto.

Patrón de ubicación espacial. Total de las frecuencias relativas de la ubicación del sujeto en el área de la cámara experimental durante todo el expe-rimento

Caso 1. Localización espacio-temporal.

Fase 1. Sujetos

Los sujetos experimentales fueron 2 ratas Wistar machos de 120 días de edad al inicio del expe-rimento. Aparatos

Se utilizó una cámara de campo abierto cua-drada con superficie de 1.00 m de largo, 1.00 m de ancho y 60.66 cm de alto. La superficie de la cámara está dividida, para motivos de registro, en 16 celdas (ver Figura 1). Cada 10 segundos se muestrea la loca-lización espacial del sujeto experimental a través de

videotape y las observaciones se registran de forma tal que puedan describirse como pares de coordenadas x, y. Procedimiento

Sujeto 1. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante una hora, durante 5 días consecutivos. Cada 10 segundos fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento y agua estuvieron disponibles de manera libre.

Sujeto 2. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante 6 horas, por 5 días consecutivos. Cada 10 segundos, de los primeros 10 minutos de cada hora, fue tomada una lectura de la ubic ación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento y agua estuvieron dis-ponibles de manera libre.

Fase 2. Procedimiento

Sujeto 1. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante una hora, por 5 días consecutivos. Cada 10 segundos fue toma-da una lectura de la ubicación espacial del sujeto ex-presada en coordenadas x, y. El alimento fue restrin-gido en la caja hogar al 50 % de la ración promedio diaria calculada sin restricción y estuvo disponible solamente de manera libre en la situación experimen-tal. El agua estuvo disponible de manera permanente.

Figura 1. Representación de la superficie de la cámara experimental fraccionada

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Sujeto 2. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante 6 horas, por 5 días consecutivos. Cada 10 segundos, de los primeros 10 minutos de cada hora, fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento fue restringido en la caja hogar al 50% de la ración promedio diaria calcu-lada sin restricción y estuvo disponible solamente de manera libre en la situación experimental. El agua estuvo disponible de manera permanente.

Resultados y Discusión

Fase 1. Las categorías analizadas en la presente fase fueron:

Ubicación espacial. Para el sujeto 1, la fre-cuencia relativa de ubicación espacial por celda en la cámara experimental fluctúo de manera significativa en dos de ellas D1 y D4, a su vez, puede observarse una ligera elevación en la celda A3, misma que está asociada con comedero y agua. (ver Figura 2). Para el sujeto 2, la frecuencia relativa de ubicación espacial fue significativa para las celdas D1, A1 y en una pro-porción mayor al sujeto 1 la celda A3 (ver Figura 3).

Figura 2. Presenta la ubicación espacial del sujeto 1 en la cámara expe-rimental durante la fase 1.

Figura 3. Presenta la ubicación espacial del sujeto 2 en la cáma-ra experimental durante la fase 1.

A

B

C

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Frecuencia relativa de Ubicación Espacial por celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 1. Sujeto 2.

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A

B

C

D

"Y"

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Frecuencia relat iva de Ubicación

Espacial por celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 1. Sujeto 1.

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Anidamiento. El comportamiento en relación a esta categoría es similar en ambos sujetos, sin em-bargo el sujeto 2 mostró mayor variabilidad (ver Figu-ra 4).

Actividad. Ambos sujetos presentan mayor cambio de ubicación espacial durante los primeros 15 minutos de cada sesión experimental, con la misma tendencia de sesión a sesión (ver Figura 5).

Exploración. Para esta categoría los datos muestran mayor variación durante los primeros 10 minutos de cada sesión en ambos sujetos y tiende a decrementar durante el resto de la sesión. A excepción del sujeto 1 en la sesión 3 que presenta una tendencia contraria, en el sentido de que la exploración incre-menta los últimos 15 minutos de la sesión. De sesión a sesión puede observarse mayor estabilidad en el com-

portamiento del sujeto 1 en comparación con el sujeto 2 (ver Figura 6).

Desplazamiento. Para ambos sujetos en esta categoría los primeros 10 minutos de cada sesión presentan mayor espacio recorrido en la cámara expe-rimental, a excepción del sujeto 1 en la sesión 3. De la misma manera, puede observarse que el desplazamien-to fue mayor para las sesiones 1 y 5 de ambos sujetos (ver Figura 7), mostrando una tendencia bipolar.

Forrajeo. Se observa para esta categoría que el comportamiento exhibido por los sujetos es relati-vamente constante y bajo, salvo la sesión 4 del sujeto 2, en donde se presenta una frecuencia mayor de con-tacto con el área de comedero y agua (ver Figura 8).

Figura 4. Presenta la secuencia de anidamiento de los sujetos 1 y 2 du-rante las fases del experimento.

Figura 5. Presenta la secuencia del cambio de ubicación espacial de los sujetos 1 y 2 durante las fases del experimento.

Anidamiento. Fases 1, 2 y 3. Sujeto 1 y 2.

0

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l por

cel

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Sujeto 1

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Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

Actividad.Fases 1, 2 y 3. Sujeto 1 y 2.

0

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120

180

240

300

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Frec

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Sujeto 1

Sujeto 2

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

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Figura 6. Presenta la frecuencia de celdas visitadas de los sujetos 1 y 2 durante las fases del experimento.

Figura 7. Presenta la secuencia de la distancia recorrida expresada en metros de los sujetos 1 y 2 durante las fases del experimento.

Figura 8. Presenta la secuencia de la frecuencia de ubicación en comederos y agua de los sujetos 1 y 2, durante las fases del experimento.

Exploración.Fases 1, 2 y 3. Sujeto 1 y 2.

0

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Frec

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Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

Desplazamiento.Fases 1, 2 y 3. Sujetos 1 y 2.

0

50

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Dis

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Sujeto 1

Sujeto 2

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Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

Forrajeo.Fases 1, 2 y 3. Sujeto 1 y 2.

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Frec

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Sujeto 2

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

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Patrón de actividad. Para ambos sujetos, se observa que predomina el anidamiento sobre los de-más comportamientos posibles, mientras que las de-más categorías se comportan de manera similar, con mayores frecuencias en las sesiones 1 y tendiendo a decrementar en las subsiguientes (ver Figuras 9 y 10). Para el sujeto 1, de la sesión 1 a la 2, se observa que mientras que forrajeo, actividad y desplazamiento decrementan, anidamiento incrementa. De la sesión 2 a la 3, anidamiento, forrajeo, actividad y desplaza-miento disminuyen, mientras que de la 3 a la 4 estas categorías incrementan, observándose una relación inversa nuevamente entre anidamiento y forrajeo, actividad y desplazamiento de la sesión 4 a la 5. En el caso de exploración, ésta se mantiene constante de sesión a sesión (ver Figura 9). En el caso del sujeto 2, se observa que de la sesión de 1 a la 2, forrajeo, acti-

vidad, exploración y desplazamiento disminuyen en frecuencia, mientras que anidamiento incrementa. Se observa esta tendencia en las sesiones 2 a la 3 y de las sesiones 3 a la 4, incrementan exploración, forra-jeo, actividad y desplazamiento, disminuyen en fre-cuencia, mientras que anidamiento incrementa. Se observa esta tendencia en las sesiones 2 a la 3 y de las sesiones 3 a la 4, incrementan exploración, forra-jeo, actividad y desplazamiento, mientras que anida-miento tiende a disminuir a la frecuencia presentada durante la sesión 1. En la sesión 4, la frecuencia de forrajeo predomina sobre exploración, actividad y desplazamiento. De las sesiones 4 a la 5, se observa que exploración, actividad y desplazamiento se man-tienen relativamente estables, mientras que anidamien-to incrementa al valor presentado en la sesión 3 (ver Figura 10).

Figura 9. Presenta el Patrón de actividad del sujeto 1 durante las fases del experimento.

Figura 10. Presenta el Patrón de actividad del sujeto 2 durante las fases del experimento.

Patrón de actividad.Fases 1, 2 y 3. Sujeto 1.

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Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

Patrón de actividad.Fases 1, 2 y 3. Sujeto 2.

0

60

120

180

240

300

360

Fre

cuen

cia

Anidamiento

ActividadExploraciónDesplazamiento

Forrajeo

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20

Sesiones

Fase 1 Fase 2 Fase 3

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Patrón de ubicación espacial. Para ambos sujetos se observa el mismo patrón de ubicación es-pacial en el área de la cámara experimental (ver figura 2 y 3). En el caso del sujeto 2, se observa una mayor frecuencia en la celda A3 (ver Figura 3), relacionada con el aumento en la frecuencia de forrajeo descrita en el párrafo anterior (patrón de actividad). Fase 2. Las categorías analizadas en la presente fase fueron:

Ubicación espacial. Para el sujeto 1, la fre-cuencia relativa de ubicación espacial por celda en la cámara experimental fluctúo de manera significativa en dos de ellas D4 (4 sesiones) y D1 (una sesión). A su vez, puede observarse una significativa elevación en la celda A3, misma que está asociada con comede-ro y agua (ver Figura 11). Para el sujeto 2, los cam-bios de ubicación espacial fueron más significativos en variación, predominando las celdas D1, D2, D3 y D4, A1, A4 (ver Figura 12).

Figura 11. Presenta la ubicación espacial del sujeto 1 en la cámara expe-rimental durante la fase 2.

Figura 12. Presenta la ubicación espacial del sujeto 2 en la cámara expe-rimental durante la fase 2.

A

B

C

D

"Y"

0

20

40

60

80

100

Frecuencia relativa de Ubicación Espacial por celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 2. Sujeto 1.

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A

B

C

D

"Y"

0

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4 0

6 0

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Frecuencia relativa de Ubicación Espacial por

celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 2. Sujeto 2.

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Anidamiento. El comportamiento en relación a esta categoría para el sujeto 1 es relativamente esta-ble, mientras que el sujeto 2 mostró variabilidad de sesión a sesión (ver Figura 4).

Actividad. En ambos sujetos el cambio de ubicación espacial es relativamente constante, aunque en el desarrollo de la sesión se intercalan períodos de no actividad. Comparando ambos sujetos en esta ca-tegoría, se observa mayor cambio de ubicación para el sujeto 1 (ver Figura 5).

Exploración. Para esta categoría los datos muestran mayor variación durante los primeros 10 minutos de cada sesión en ambos sujetos y tiende a decrementar durante el resto de la sesión. De sesión a sesión puede observarse estabilidad en el comporta-miento de ambos sujetos (ver Figura 6).

Desplazamiento. Para ambos sujetos en esta categoría durante el desarrollo de la sesión se muestra una tendencia acelerada positiva, intercalando perío-dos sin desplazamiento, manteniéndose esta tendencia de sesión a sesión. Se observa mayor desplazamiento en el sujeto 1, en comparación con el sujeto 2. El comportamiento exhibido durante las sesiones para ambos sujetos se presenta constante (ver Figura 7).

Forrajeo. Se observa para esta categoría que el comportamiento exhibido por los sujetos es relati-vamente constante y bajo (ver Figura 8).

Patrón de actividad. Para el sujeto 1, el com-portamiento de las diferentes categorías fue relativa-mente constante y bajo en relación a las diferentes categorías, sin embargo se pueden señalar ajustes relevantes en relación con las categorías anidamiento, desplazamiento y forrajeo. La dinámica de estas cate-gorías para las sesiones 1 a 2, presentan una baja en desplazamiento, un incremento en forrajeo, mante-niéndose anidamiento constante. De las sesiones 2 a 3, incrementa el anidamiento, bajando el forrajeo y el desplazamiento. De las sesiones 3 a 4, anidamiento y forrajeo se mantienen constantes, mientras que des-plazamiento incrementa ligeramente y de las sesiones 4 a 5, desplazamiento se incrementa y forrajeo y ani-damiento tienden a incrementar (ver Figura 9). Para el sujeto 2, la dinámica en el comportamiento de las categorías actividad, exploración y forrajeo es similar y constante, a excepción de anidamiento que presenta mayor variabilidad de sesión a sesión (ver Figura 10).

Patrón de ubicación espacial. Para el sujeto 1, la distribución espacial se presenta con mayor dis-tribución en las diferentes celdas de la cámara, mien-tras que el sujeto 2 mantiene de manera consistente su ubicación en el espacio de la cámara en las celdas D1, D2, D3 y D4, todas correspondientes al sector Oeste (ver Figuras 11 y 12).

Los resultados correspondientes a las fases 1 y 2, señalan aspectos relevantes relacionados con los ajustes que en la distribución espacial del comporta-miento de los sujetos se presentan en función de la restricción impuesta en la cámara experimental con respecto a la disponibilidad de alimento.

Un primer aspecto se refiere al ajuste de una mayor distribución en el espacio de la cámara experi-mental. Este se observa con una tendencia a decre-mentar el anidamiento y a un incremento en la tenden-cia de las categorías relacionadas con actividad, ex-ploración, desplazamiento y forrajeo (ver Figuras 9 y 10).

Un segundo aspecto refiere al ajuste en la es-tabilidad que las diferentes categorías presentan en el desarrollo de las diferentes sesiones que constituyen la fase 2 (ver Figuras 9 y 10).

Caso 2. Economías en Campo Abierto.

Esta sección explorará el efecto de una eco-nomía abierta en los diferentes patrones (desplaza-miento, exploración, anidamiento, forrajeo y ubic ación espacial), relaciones de condicionalidad y disponibili-dad en la cámara de campo abierto. Fase 3. Procedimiento

Sujeto 1. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante una hora, durante 10 días consecutivos. Cada 10 segundos fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento fue res-tringido en la caja hogar y estuvo disponible solamente en la situación experimental. El agua estuvo disponible de manera libre.

Fueron colocados y se pusieron en operación dos dispensadores de pellets en los puntos correspon-dientes al Norte (N) y Sur (S) de la cámara de campo (ver Figura 13). En este experimento la cámara expe-

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rimental fue dividida para motivos de conteo en área Norte (N) y Sur (S), comprendiendo cada una de estas áreas el 50 % del área total de la cámara. Duran-te las primeras 5 sesiones (sesiones 1 a 5), cada minu-to se entregaba alimento (pellets, 45 mg) en propor-ción de 2 (S) a 1 (N) independientemente del compor-tamiento exhibido por el sujeto experimental. Para las siguientes 5 sesiones (6 a 10) se invirtió la relación de proporcionalidad en la entrega.

Sujeto 2. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante 6 horas, durante 10 días consecutivos. Cada 10 segundos, de los primeros 10 minutos de cada hora, fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento fue restringido en la caja hogar y estuvo disponible solamente en la situa-ción experimental. El agua estuvo disponible de mane-ra libre.

Fueron colocados y se pusieron en operación dos dispensadores de pellets en los puntos correspon-dientes al Norte (N) y Sur (S) de la cámara de campo (ver Figura 13). En este experimento la cámara expe-rimental fue dividida para motivos de conteo en área Norte (N) y Sur (S), comprendiendo cada una de estas áreas el 50 % del área total de la cámara. Duran-te las primeras 5 sesiones (sesiones 1 a 5), cada minu-to se entregaba alimento (pellets, 45 mg) en propor-ción de

Figura 13. Representación de la superficie de la cámara ex-perimental, señalando áreas Sur (S) y Norte (N).

2 (S) a 1 (N) independientemente del comportamiento exhibido por el sujeto experimental. Para las siguientes 5 sesiones (6 a 10) se invirtió la relación de propor-cionalidad en la entrega.

Fase 4.

Procedimiento Sujeto 1. El sujeto experimental era colocado

en el campo abierto y fue observado durante una hora, durante 30 días consecutivos. Cada 10 segundos fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento fue res-tringido en la caja hogar y estuvo disponible solamente en la situación experimental. El agua estuvo disponible de manera libre.

Fueron colocados y se pusieron en operación dos dispensadores de pellets en los puntos correspon-dientes al Norte (N) y Sur (S) de la cámara de campo (ver Figura 13). Durante las primeras 15 sesiones (sesiones 1 a 15), cada minuto se entregaba alimento (pellets, 45 mg) en proporción de 2 (N) a 1 (S), solo si el sujeto experimental se ubicaba dentro de un área restringida a la zona del dispensador (N) o (S) en el tiempo en que el alimento estuviera disponible (ver Figura 14). Para las siguientes 15 sesiones (16 a 30) se invirtió la relación de proporcionalidad en la entre-ga.

Figura 14. Representación de la superficie de la cámara ex-perimental, señalando el área restringida a la zona del dispensador.

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Irigoyen, Jiménez, López y Huerta

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Sujeto 2. El sujeto experimental era colocado en el campo abierto y fue observado durante una hora, durante 30 días consecutivos. Cada 10 segundos fue tomada una lectura de la ubicación espacial del sujeto expresada en coordenadas x, y. El alimento fue res-tringido en la caja hogar y estuvo disponible solamente en la situación experimental. El agua estuvo disponible de manera libre.

Fueron colocados y se pusieron en operación dos dispensadores de pellets en los puntos correspondien-tes al Norte (N) y Sur (S) de la cámara de campo (Figura 13). Durante las primeras 15 sesiones (sesio-nes 1 a 15), cada minuto se entregaba alimento (pe-llets, 45 mg) en proporción de 2 (S) a 1 (N), sólo si el sujeto experimental se ubicaba dentro de un área res-tringida a la zona del dispensador (N) o (S) en el tiempo en que el alimento estuviera disponible (Figura 14). Para las siguientes 15 sesiones (16 a 30) se invir-tió la relación de proporcionalidad en la entrega.

Resultados y discusión

Las categorías analizadas en las fases 3 y 4

fueron: Ubicación espacial. Para el sujeto 1, se ob-

serva que durante las primeras 3 sesiones predomina la ubicación del sujeto en una celda de la cámara (D4). A partir de la sesión 4, se observan cambios en la

dinámica de la distribución de manera significativa en el espacio de la cámara relacionado con las celdas A4, B4, C4, B1 y C1 (ver Figura 15). Para el sujeto 2, la distribución en el espacio total de la cámara se man-tiene durante las diferentes sesiones, predominando las celdas B1, C1, B4, C4, A3 (asociadas con dispensado-res activos y agua) D1 y D4 (ver Figura 16).

Anidamiento. Para ambos sujetos el anida-miento presenta una tendencia similar en términos de disminución en su frecuencia. En el caso del sujeto 1, esta tendencia se presenta con mayor variabilidad, siendo mas uniforme (ver Figura 4).

Exploración. En ambos sujetos esta categoría se mantiene alta en frecuencia y estable, siendo duran-te los primeros 10 minutos de las diferentes sesiones donde se observa el incremento mayor (ver Figura 6).

Actividad. Se observa que ambos sujetos presentan una tendencia similar en cuanto al incre-mento de la frecuencia en actividad, que se mantiene durante el desarrollo de las sesiones posteriores (ver Figura 5).

Desplazamiento. Para ambos sujetos la ten-dencia es ascendente y gradual, tanto hacia el desarro-llo de cada sesión individual, como de sesión a sesión (ver Figura 7).

Figura 15. Presenta el Patrón de ubicación espacial del sujeto 1 en la cá-mara experimental durante la fase 3.

A

B

C

D

"Y"

0

20

40

60

80

100

Frecuencia relativa de Ubicación Espacial por

celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 3. Sujeto 1.

12

34

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Figura 16. Presenta el Patrón de ubicación espacial del sujeto 2 en la cá-mara experimental durante la fase 3.

Forrajeo. Para ambos sujetos en esta catego-

ría, la tendencia es ascendente y gradual, tanto hacia el desarrollo de cada sesión individual, como de sesión a sesión. Se observan cambios en la frecuencia de forrajeo relacionadas con la disponibilidad diferencial de alimento para ambos sujetos, así como variaciones significativas asociadas con el cambio de condición, respecto a la disponibilidad en proporcionalidad del alimento (ver Figura 8).

Elección. Para el sujeto 1, la relación entre proporcionalidad de alimento y ubicación espacial en área de comedero fue directamente proporcional, aunque se observa que para las sesiones 1 y 6 (inicio y modificación de la proporcionalidad respectivamen-te) esta condición presenta una relación inversa. En el caso del sujeto 2, se mantiene una relación directa y proporcional entre disponibilidad de alimento y ubic a-ción espacial en área de comedero (ver Figuras 17 y 18).

Patrón de actividad. El patrón de actividad para ambos sujetos presenta una disminución signifi-cativa en la frecuencia de anidamiento y un incremen-to en las categorías de actividad, desplazamiento y forrajeo. La categoría de exploración, se mantiene estable durante todas las sesiones. Los cambios de

mayor significancia se dieron en las categorías de actividad, desplazamiento y forrajeo en ambos sujetos. Es clara la interrelación que se observa entre las cate-gorías, donde se manifiesta la dinámica del compor-tamiento expresada como sistema (ver Figuras 9 y 10).

Patrón de ubicación espacial. Para ambos sujetos se observa que la distribución en el espacio de la cámara experimental se expresa con mayor unifor-midad en las diferentes áreas, señalando el incremento en celdas asociadas con comedero activo y agua (ver Figura 15 y 16).

Estos ajustes en la distribución espacial se asocian con mayor actividad, desplazamiento y forra-jeo de los sujetos en el área de la cámara experimental. Esta mayor variabilidad y dinámica de las diferentes categorías expresa el ajuste a las diferentes relaciones de condicionalidad impuestas en el campo.

En la fase 4 se analizaron adicionalmente las siguientes categorías:

Forrajeo. Para ambos sujetos en esta catego-ría la tendencia es similar, estable y consistente en tendencia de sesión en sesión. Se observan cambios en la frecuencia de forrajeo relacionadas con la dispo-nibilidad diferencial de alimento para ambos suje-

A

B

C

D

"Y"

0

20

40

60

80

100

Frecuencia relativa de Ubicación Espacial por

celda

Patrón de ubicación espacial. Fase 3. Sujeto 2.

12 3

4

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Irigoyen, Jiménez, López y Huerta

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Figura 17. Presenta la frecuencia relativa de ubicación espacial correspon-diente al área de comederos activos Norte (N) y Sur (S), del sujeto 1 durante la fase 3.

Figura 18. Presenta la frecuencia relativa de ubicación espacial correspondien-te al área de comederos activos Norte (N) y Sur (S), del sujeto 2 durante la fase 3.

tos, así como variaciones significativas asociadas con el cambio de condición, respecto a la disponibilidad en proporcionalidad del alimento (ver Figura 19).

Elección. Para el sujeto 1, la relación entre proporcionalidad de alimento y ubicación espacial en área de comedero fue directamente proporcional du-rante 27 sesiones, aunque se observa que para las

sesiones 19, 20 y 22 esta condición presenta una rela-ción inversa (ver Figura 20). En el caso del sujeto 2, se mantiene una relación directa y proporcional entre disponibilidad de alimento y ubicación espacial en área de comedero para 24 sesiones, no cumpliéndose con esta relación en las sesiones 14, 17, 18, 19, 20 y 21 (ver Figura 21).

Elección. Fase 3. Sujeto 2.

0

20

40

60

80

100

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Sesiones

Frec

uenc

ia re

lativ

a ár

eas

N y

S

Comedero Sur

Comedero Norte

S=2N=1

S=1N=2

Elección. Fase 3. Sujeto 1.

0

20

40

60

80

100

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Sesiones

Frec

uenc

ia re

lativ

a ár

eas

N y

SComedero Sur

Comedero Norte

S=2N=1

S=1N=2

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Figura 19. Presenta la frecuencia de ubicación correspondiente al área de come-deros activos de los sujetos 1 y 2 durante la fase 4.

Figura 20. Presenta la frecuencia relativa de ubicación espacial correspondiente al área de comederos activos.

Figura 21. Presenta la frecuencia relativa de ubicación espacial correspondiente al área de comederos activos

Elección. Fase 4. Sujeto 2.

0

2 0

4 0

6 0

8 0

1 0 0

1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 0 1 1 1 2 1 3 1 4 1 5 1 6 1 7 1 8 1 9 2 0 2 1 2 2 2 3 2 4 2 5 2 6 2 7 2 8 2 9 3 0

S e s i o n e s

Fre

cuen

cia

rela

tiva

área

s N

y S

C o m e d e r o N o r t e

C o m e d e r o S u r

N = 2S = 1

S = 2

N = 1

Elecc ión . F a s e 4 . S u j e t o 1 .

0

2 0

4 0

6 0

8 0

100

1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 0 1 1 1 2 1 3 1 4 1 5 1 6 1 7 1 8 1 9 2 0 2 1 2 2 2 3 2 4 2 5 2 6 2 7 2 8 2 9 3 0

S e s i o n e s

Fre

cuen

cia

rela

tiva

área

s N

y S

Comedero Nor te

Comedero Su r

N = 2

S = 1

S = 2

N = 1

Forrajeo. Fase 4. Sujetos 1 y 2

0

20

40

60

80

100

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30

Sesiones

Fre

cuen

cia

de u

bica

ción

en

com

eder

o y

agua

Sujeto 1

Sujeto 2

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Irigoyen, Jiménez, López y Huerta

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Los resultados correspondientes a las fases 3 y 4, nos señalan ajustes en las diferentes categorías con respecto a las restricciones impuestas en el cam-po. Este efecto queda de manifiesto en la interdepen-dencia de las diferentes categorías como elementos de un patrón de comportamiento, a su vez que señala que los cambios tienden a ajustarse de manera simétrica con los requerimientos impuestos en el campo. Considerando la secuencia de las fases (1, 2 y 3 particularmente), las categorías directamente rela-cionadas con las restricciones impuestas, presentan mayor viabilidad y tendencia al ajuste. Por ejemplo, anidamiento tiende a bajar en frecuencia (ver Figura 4), exploración se mantiene constante (Figura 6) mientras que las otras categorías (actividad desplaza-miento, forrajeo), tienden a presentar una dirección ascendente (ver Figuras 5, 7 y 8). Se corrieron análisis de regresión lineal para confirmar el grado de relación entre las categorías que presentaron tendencias ascendentes encontrándose que hay un mayor ajuste a la línea de regresión entre las categorías de desplazamiento-forrajeo en ambos sujetos (R2=0.81 y 0.86), presentando mayor disper-sión la relación entre las categorías exploración-desplazamiento (R2=0.60 y 0.65) y exploración-forra-jeo (R2=0.34 y 0.48).

Con respecto a la categoría de elección, en-contramos que ésta se comporta en términos de la predicho en la Ley de Igualación de Herrnstein (1961, 1970), cuando se consideran únicamente las frecuen-cias relativas asociadas a las áreas de comedero acti-vas (ver Figuras 17, 18, 20 y 21). Sin embargo, al considerar las diferentes categorías que se presentan en el campo, la proporcionalidad que dicha relación expresa, no se cumple (ver Figuras 9 y 10). Queda por considerar en la descripción de estos datos otras opciones (Rachlin y Laibson, 1997; Goldshmidt, Lattal y Fantino, 1998) que se aplican a restricciones im-puestas como las señaladas en estos experimentos para preparaciones utilizando criterios concurrentes.

La preparación de análisis que proponemos, presupone conceptualizar al organismo y al contexto de interacción como continuos y la necesidad de eva-luar las dimensiones espacio-temporales de la interac-ción.

Cualquier fenómeno bajo investigación debe ser visto en términos de su relación con otros fenó-

menos, incluyendo la perspectiva del científico (Kan-tor, 1990). El organismo como sistema interactuante debe ser visto en términos de su totalidad como pro-ceso. Debemos considerar todas las dimensiones or-ganísmicas en relación con los contextos de interac-ción bajo consideración. El concepto tradicional de control, con referencia a las variables independientes, debe ser reemplazado por una aproximación descripti-va de la dinámica del proceso y del poder de resolu-ción temporal de nuestras observaciones.

Todas las interacciones llevadas a cabo por un organismo son interdependientes por naturaleza y por lo tanto debieran ser estudiadas necesariamente de manera concurrente. La estructura del comportamien-to es un proceso dinámico cuya secuencia, frecuencia e integración, afectan directamente el análisis funcio-nal del mismo.

La preparación entonces nos permite entender los complejos mecanismos conductuales y su dinámi-ca, a través de la descripción precisa de los factores espacio-temporales, como eventos que conforman a las manifestaciones conductuales mismas. Requiere que nuestros análisis sean hechos en situaciones eco-lógicas de relevancia para los organismos en cuestión, y que el establecimiento de nuestras categorías de análisis se deriven de manera inductiva, de tal forma que nos permita minimizar el uso de conceptos teóri-cos no afines. No obstante, contamos con informa-ción pertinente que nos permite establecer modelos a priori o deductivos de relaciones entre un organismo y su medio, los cuales podrían ser complementados con la información resultante de esta aproximación ecológica.

Algunas de las características definitorias de la preparación presentada son: • Puntualiza la continuidad y reciprocidad de los

intercambios organismo-contexto. • Remarca la correspondencia entre múltiples mo-

dos de conducta; es decir, las dimensiones con-ductuales, como modos que tienen variaciones en su frecuencia, extensión temporal y patrones de correspondencia.

• Puntualiza las situaciones disposicionales, tanto del organismo, como del contexto.

• Puntualiza las interacciones organismo-contexto, en términos de las características espacio-temporales.

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Es notorio que en los análisis experimentales del comportamiento con otras preparaciones, se pier-de de vista la espacialidad y temporalidad de las inter-acciones. Muchos eventos o interacciones se desarro-llan a lo largo de períodos extensos ocupando poco espacio, mientras que otros requieren una corta dura-ción y pueden requerir espacios extendidos. Es nece-sario entonces seleccionar puntos de referencia tanto espaciales como temporales, que reflejen la espaciali-dad o temporalidad adecuada del fenómeno o manifes-tación bajo estudio, elaborando las categorías descrip-tivas adecuadas.

La idea de que el espacio posea una estructu-ra puede resultar extraña, ya que por lo general con-cebimos al espacio como una especie de nada, preci-samente la ausencia de todo tipo de estructura, la vacuidad misma dentro de un ámbito igualmente va-cío, como si constituyera el telón de fondo pasivo para los cambios que se producen en el mundo mate-rial. Sin embargo, resulta que este supuesto telón de fondo, la nada que por todo se extiende, no es pasiva en modo alguno. Esta nada presenta una arquitectura que tiene requerimientos reales con respecto a los cuerpos que la ocupan. Cada forma, cada diseño, cada objeto ha de pagar un precio por el mero hecho de existir, el cual consiste en adaptarse a los dictados estructurales del espacio (Stevens, 1986, p. 3).

Cuando algunas de las restricciones impues-tas por el típico procedimiento operante son cambia-das, cuando no son usadas operaciones de privación, cuando las duraciones de las sesiones se extienden, cuando se registra mas de una clase de conducta y no se requieren operanda, se dispone la oportunidad para la emergencia de un conjunto amplio y quizá ecológi-camente más válido y representativo de las interaccio-nes conductuales.

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