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Jesus en El Antiguo Testamento

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EL MESAS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO A LA LUZ DE LOS ESCRITOS RABNICOS

EL MESAS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO A L A LUZ DE LOS ESCRITOS RABNICOS

Risto Santala

Traducido del ingls por

Darrell Clingan

Copyright 1992 por Risto Santala Kaivokatu 2 A 5, 18100 Heinola, Finland.

La traduccin al espaol se ha hecho del equivalente en ingls. El libro Las Races del Cristianismo fue escrito originalmente en hebreo y publicado en 1980 por Keren Ahvah Meshihit en Jerusaln. Prohibida la reproduccin total o parcial de esta obra sin la autorizacin escrita de los editores.

Al lector hispano, Este estudio ha visto ya ocho ediciones en hebreo en Israel. Un considerable nmero de cartas de lectores judos ha expresado sus reacciones positivas. Dicen: Es un libro muy realista. He disfrutado cada captulo del libro con sus explicaciones asombrosamente claras. Despus de este tomo, escrib tambin en Hebreo acerca del Mesas en el Nuevo Testamento a la Luz de los Escritos Rabnicos." Luego segu con el estudio sobre Pablo, el Hombre y el Maestro a la Luz de las Fuentes Judas. Los tres libros han sido publicados tambin en ingls, ruso y chino. Nos preguntamos cul ser la razn de tan amplio inters en este tema. Poco tiempo despus de la primera edicin en hebreo recib dos cartas de parte del arzobispo de Sion, Jacob J. Barcley. l representa a la Iglesia de Oriente y es eminente erudito del hebreo y arameo. Primeramente escribi que posiblemente yo no comprenda la inmensa importancia y magnificencia de mi libro. Dijo tambin que existe una necesidad urgente de que est disponible en ingls y en espaol. En la segunda carta expres que estos libros deban tambin haberse publicado en rabe, el idioma de Oriente, y que semejante contenido jams se haba condensado en una presentacin tan sucinta como esta. Parece existir una necesidad ecumnica en Occidente y en Oriente de encontrar las races comunes de la fe cristiana. Esto explica la amabilidad y el entusiasmo del arzobispo. Segn la opinin de l, el idioma espaol tena prioridad sobre otros idiomas dominantes. Que Dios ayude a los lectores hispanos a encontrar al Mesas en estos genuinos escritos antiguos. Heinola, Finlandia, a 28 de octubre de 2001. Risto Santala

CONTENIDO

INTRODUCCIN EL MESAS EN LA INVESTIGACIN CIENTFICALa controversia sobre la Teologa del Cumplimiento La postura tradicional del judasmo Fuentes judas estudiadas por cristianos Nuestro legado comn

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LA ELECCIN DEL MTODO APROPIADO DE ESTUDIOLa diferencia entre la mentalidad Bblica y la de occidente La diferencia entre la naturaleza de las ciencias naturales y las humanidades Mtodo y eleccin de fuentes de informacin apropiadas

EL MESAS EN EL PENTATEUCOEl espritu del Mesas en el relato de la creacin El proto evangelio El Mesas que derribar el vallado alrededor de la ley El Mesas que gobernar a las naciones El Mesas como segundo Moiss El Mesas como el ltimo Salvador Comparaciones entre Moiss y Jess Naturaleza de la revelacin de Dios a Moiss El nombre del Seor como seal de salvacin Crea Moiss en un Dios de venganza o en un Dios de misericordia? El Profeta que ser concebido por el Espritu Santo

La Torah de Moiss y del Mesas La Torah del Mesas y el futuro de la Ley La Torah interpretado por el Falso Mesas Sabbatai Tsvi La base para la interpretacin paulina de la Torah El Mesas, Prncipe del Rostro Jacob ve el rostro de Dios Cristo como el Prncipe del rostro El Mesas, la Mimra o Palabra de Dios El mensaje de consejo espiritual asociado con Peniel El tiempo de la venida de Cristo El Cristo visto desde lejos La primera venida de Cristo Lo que piensan los eruditos judos sobre el Mesas que ha de venir La destruccin de Jerusaln y del Templo como seal de la venida del Mesas

69 70 73 76 84 85 86 88 93 95 96 98 100 104 108 110 111 117 117 123 128 133 140 146 148 150 150 153 154 155 156

EL MESAS EN LOS SALMOSLo que dicen los Salmos acerca de Cristo Los judos ven al Mesas en los Salmos Salmo 2 y Salmo 110 El tono mesinico del segundo Salmo La descripcin en el Salmo 110 del que est sentado a la diestra de Dios El Salmo 22 como intrprete del Mesas sufrido El Salmo 118 y la piedra que los edificadores rechazaron El Salmo 102 y el regreso del Mesas en su gloria

EL MESAS EN LOS PROFETASLa naturaleza general de la funcin de Mesas en los profetas Los profetas del Reino del Norte, Israel El profeta Ams El profeta Oseas El profeta Jons Los profetas del Reino del Sur, Jud La visin de Abdas

El mensaje Mesinico de Joel Sofonas El profeta Habacuc El profeta Miqueas El profeta Isaas Jeremas Profetas que fueron activos durante el exilio Mensaje Mesinico de Ezequiel Daniel Profetas que aparecieron despus del exilio Hageo Zacaras El libro de Malaquas

157 159 160 162 164 172 175 180 184 184 185 187 190 200 212 219 227

EL NACIMIENTO Y LA NATURALEZA DEL MESAS EL MESAS SUFRIDO EN LOS PROFETAS QU PUES DIREMOS A ESTO? OBRAS CONSULTADAS NDICE DE CITAS BBLICAS

INTRODUCCINUna de las obras ms famosos de nuestro siglo es el libro RACES de Alex Haley. Ha sido traducido a muchos idiomas e incluso se ha hecho una pelcula. En este libro un norteamericano negro investiga sus orgenes, terminando en una remota aldea en el con- tinente africano. Semejante investigacin genealgica nos puede ayudar tanto a entender nuestras propias inclinaciones y nuestro legado, como a apreciar lo logrado por generaciones anteriores; incluso puede ayudarnos a entendernos a nosotros mismos. La iglesia cristiana tambin hara bien con estudiar sus propias races, contenidas en el Antiguo y Nuevo Testamento. Sin embargo, ambos tienen sus orgenes en tierras lejanas, cuya topografa e idioma es ajena para nosotros hoy. El mensaje bsico de la Biblia es bastante claro. La Biblia misma nos dice: Buscad en el libro del SEOR, y leed: As dice el SEOR: Paraos en los caminos y mirad, y preguntad por los senderos antiguos cul es el buen camino, y andad por l; y hallaris descanso para vuestras almas.1 El camino que generaciones pasadas han descubierto como bueno, tiende a ser olvidado. Dicen los rabes que, El camino es ms sabio que el hombre. Los fundamentos de la fe cristiana frecuentemente han sido atacados con violencia. El mensaje sencillo de la Biblia se basta a s mismo, sin que necesariamente requiera de todos sus expositores. Pero precisamente este hecho, de que nos hemos distanciado cada vez ms de las races de nuestra fe, provee una buena razn para emprender nuestra propia bsqueda de nuestra genealoga espiritual. Aun cuando la Biblia, tal cual es, habla de las realidades sencillas de la vida, algunas de sus verdades slo pueden ser apreciadas aNota del traductor: En este libro se han utilizado las versiones de la Biblia: Reina Valera, Reina Valera Actualizada y la Biblia de las Amricas.

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1. Is. 34:16 y Jer. 6:16

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travs de los ojos de la fe. Al hablar de stas el Nuevo Testamento usa la palabra griega mysterion, misterioel misterio del reino de los cielos, el misterio del evangelio, el misterio de Dios, e incluso el misterio de la fe. De estos el ms frecuentemente mencionado es el misterio de Cristo. Este misterio del Mesas est estrechamente ligado a las profecas del Antiguo Testamento, cuya naturaleza y trasfondo en muchos casos ignoramos. All, como en ninguna otra parte, nos parecen pertinentes las palabras de Pedro cuando dice que: Ninguna profeca de la Escritura es asunto de interpretacin personal . . . sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espritu Santo.2 As como Alex Haley, en nuestro esfuerzo por explorar el misterio de Cristo, nos veremos obligados a cruzar el amplio ocano de la historia y viajar hasta tiempos remotos. Ser necesario que mane- jemos documentos antiguos cuyos conceptos, modo de presenta- cin y patrones de razonamiento son diferentes a los nuestros. Sin embargo, las races ms antiguas de nuestra fe se remontan a la poca de Jess mismo y ejemplifican una forma de interpretacin vigente en el tiempo en que naci la fe cristiana. Este es el reto que enfrentamos juntos. Este estudio de RACES se basa en dos libros mos, originalmente escritos en hebreo, Cristo en el Antiguo Testamento y Cristo en el Nuevo TestamentoA la Luz de la Literatura Rabnica. Son resultado de un inters especial que naci hace ms de 35 aos como fruto de trabajo prctico cuando estaba en contacto con eruditos judos. Siendo as, puedo asegurar que no contienen mera teologa de aficionado. Adems de fuentes hebraicas especiali- zadas, ms de 300 obrassegn mis archivosen diversos idiomas, que versan exclusivamente con la idea mesinica, han dejado su huella sobre la creacin del trasfondo. En mi libro original hebreo sobre el Antiguo Testamento, me refiero al relato de la tradicin hebrea acerca de Nasn, segn el cual un hombre de ese nombre fue el primero en saltar al Mar Rojo cuando los israelitas cruzaron por orden de Moiss seguido luego por los dems. Este estudio de RACES es un salto de fe de2. II Pedro 1:2021

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naturaleza similar hacia un campo que es al mismo tiempo muy amplio y comparativamente desconocido. Al mismo tiempo, estoy consciente de que estoy aventurndome hacia el foso de los leones de los rabinos y hacia el horno de fuego de los telogos liberales pero, para usar un tropo bien entendido entre judos instruidos, un cuarto est a mi lado, y los entendidos comprendern.3 Sin embargo, este libro no est escrito nicamente para los eruditos. Procuraremos escribir de tal manera que el no especialista tambin lo pueda leer con provecho. La erudicin no tiene que ser necesariamente desconcertante para ser cientfica. Si el lector deseara profundizar en algunos de los detalles, encontrar referencias precisas en las notas de pie de pgina. Seguiremos procedimientos peculiares de la literatura rabnica, mtodos que se comentarn desde el inicio, y que pudieran parecer muy extraos. Sin embargo, el Nuevo Testamento mismo fue escrito mientras estaban vigentes reglas de naturaleza similar. Parte de esta tradicin consiste en que las personas cuyos dichos se citan siempre se mencionan por nombre, permitiendo as que el lector atribuya los argumentos a la fuente correcta. Esto mismo bien pudiera ser una piedra de tropiezo para quienes son hipersensibles en un sentido incorrecto. San Pablo dice: Si todava agradara a los hombres, no sera siervo de Cristo.4 Haba aprendido esta actitud de su Maestro, quien exclam: Cmo podis vosotros creer, pues recibs gloria los unos de los otros?5 En la actualidad la iglesia pasa por una crisis severa de doctrina, y la nica manera de sanear la situacin es mediante la adopcin de una postura firme en un sentido o en otro. Con demasiada frecuencia pesamos muy cuidadosamente lo que hemos de decir para no decir lo que pensamos. De esta manera evadimos las contradicciones y las dejamos para que otros las resuelvan. De muchas cosas se ha acusado a la iglesia de hoy, pero difcilmente podemos culparla de ser demasiado franca o de tomar una postura demasiado firme. La teologa, por su parte, suele refugiarse en la discusin de temas tan rebuscados que

3. Daniel 3:25, sobre los tres hombres en el horno de fuego, nos dice que tambin haba un cuarto cuyo aspecto era semejante a hijo de los dioses. Vase tambin Daniel 12:10. 4. Glatas 1:10. 5. Juan 5:44 y 12:43.

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carecen de toda aplicacin al mundo en general, evitando as la necesidad de definir la postura que uno sostiene frente a los fundamentos de la fe. Pero, cules son pues esos fundamentos? La respuesta que dio Lutero fue que hemos de promover a Cristo; es decir, Cristo debe ser el centro de toda nuestra enseanza y predicacin. En teologa eso nos conducir al estudio de las races de la Cristologa, o sea al estudio de las profecas mesinicas. En la prctica, el evangelio no es ms que quin es Cristo y qu ha hecho l por nosotros. Aun el Apocalipsis de Juan nos recuerda que el testimonio de Jess es el espritu de la profeca.6 Volvamos pues, juntos, a las races de nuestra fe. El rbol recibe sustento de sus races. Lo mantienen firmemente anclado en medio de la tormenta. Entre ms profundamente penetren en el suelo, mejores posibilidades tiene el rbol de resistir los vientos. Seguramente podremos realizar nuestro propio salto de Nasn juntos, aun cuando requiera de algo de esfuerzo de nuestra parte. El Apstol Pablo, en su carta a los Colosenses, habla de Cristo, en quien estn escondidos todos los tesoros de la sabidura y del conocimiento. Por esta razn nos exhorta adems con las palabras: De la manera que habis recibido al Seor Jesucristo, andad en l; arraigados y sobreedificados en l, y confirmados en la fe . . .7 Esto deseo para mis lectores. Kukkila, 22 de enero de 1992 RISTO SANTALA

6. Apocalipsis 19:10. 7. Colosenses 2:3, 67.

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EL MESAS EN LA INVESTIGACIN CIENTFICAEl concepto del Mesas ha sido tanto un factor unificador como factor de divisin entre el cristianismo y el judasmo. Los cristianos lo ven como asunto de cumplimiento de profecas, mientras los judos intentan anular la interpretacin mesinica de la iglesia. Siendo as, por lo menos debemos intentar escucharnos unos a otros, para dialogar sobre las races comunes a nuestras respectivas tradiciones. De hecho, semejante dilogo ya ha sido celebrado. En octubre de 1976 representantes de las iglesias evanglicas y de las sinagogas se reunieron en Berln para un dilogo, del cual surgi una declaracin pblica oficial. Esto ha motivado a los cristianos a dar a conocer a los judos los fundamentos de su fe, y viceversa. Se consideraba que esta clase de intercambio poda promover el entendimiento mutuo. Sin embargo, al comentar estas cosas no estamos hablando en un vaco: tras de nosotros tenemos una historia de casi dos mil aos de controversia. El cisma entre las religiones madre e hija cre un conflicto de proporciones trgicas que an contina. Con todo, una comparacin de los orgenes judos y cristianos mostrar a ambas partes el camino hacia un mejor entendimiento de las races de sus respectivas persuasiones.

LA CONTROVERSIA SOBRE LA TEOLOGA DEL CUMPLIMIENTOLa iglesia cristiana tradicionalmente ha considerado a Cristo como el cumplimiento de las profecas del Antiguo Testamento. Sin embargo, uno de los resultados del debate religioso de nuestra poca es que algunos telogos cristianos, en particular aquellos que representa la postura muy liberal, han cuestionado esta clase de interpretacin, en parte porque de esta manera se puede eliminar uno de los principales obstculos para el dilogo judeo/cristiano.16

En el otoo de 1981 cierto Dr. John Pawlikowski de Chicago estuvo en Israel y dio una conferencia a un auditorio judo, negando esta teologa del cumplimiento, y ofreciendo en su lugar la idea de una revelacin en continua evolucin. El papel mesinico de Jess, segn sostena l, se basaba principalmente sobre su propia conciencia de su vocacin. En mi remota tierra natal de Finlandia un artculo tpico en una revista religiosa afirmaba que este asunto Bblico es una llaga que supura en el corazn de la iglesia madre. El autor consideraba que el problema era especficamente las profecas mesinicas, que juegan un papel central en el Nuevo Testamento, porque los escritores del Nuevo Testamento ven el Antiguo Testamento como un libro que constantemente haca referencia a la salvacin que se experimenta en Cristo. Sin embargo, no se necesita ser un gran exegeta para ver que tales puentes entre un testamento y otro son, sin excepcin, artificiales y que no convencen a aquellos que piensan de manera racional.8 Declara, igualmente, que el nacimiento virginal, por ejemplo, y la doctrina de la Trinidad han sido puestos en tela de duda como resultado de estudios bblicos crticos. Estos y otros pensamientos similares han resonado en muchos tratados teolgicos. Sostienen que estos asuntos han sido aclarados en los ltimos doscientos aos, y que son propiedad comn de investigaciones perma- nentes e internacionalmente aprobadas. Uno de estos eruditos cristaliza su argumento diciendo que: Ningn estudioso del Antiguo Testamento afirma, ni podra afirmar sobre ninguna base, que Isaas captulos 9 y 53 y el Salmo 22 se refieren a Jess. Los judos, generaliza l, no aceptan a Jess como Mesas. Ellos ven en el sufrido Siervo del Seor, primariamente a la nacin de Israel. 9 En la discusin continua internacional se han hecho afirmaciones similares. Pero, ser cierto? Obvio es que nadie puede exigir que aparezca el nombre de Jess en las profecas del Antiguo Testamento antes de que puedan ser aplicadas a l. Entendemos perfectamente lo que quiso decir8. El Dr. Timo Veijola en Pappisliiton Jsenlehti. 9. Prof. Risto Lauha.

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Jess cuando afirm que Moiss habl de l. An despus de la resurreccin se reporta que habl acerca de Moiss y de todos los profetas, explicando lo que estaba escrito de l en todas las Escrituras. Jess se conduca de una manera que era entendida por sus contemporneos, y toda la exgesis juda desde el tiempo de Jess hasta la Edad Media, incluso hasta la actualidad, se basa en el mismo mtodo. Precisamente debido a este hecho, de que los fundamentos de la teologa del cumplimiento empiezan a desaparecer, intentaremos en lo que sigue hablar de las races de nuestra fe.

LA POSTURA TRADICIONAL DEL JUDASMOEl concepto del Mesas ha sido totalmente descuidado en el judasmo, quedando como menos que un hijastro. Al recorrer las bibliotecas judas, slo espordicamente aparecer un delgado tomo sobre la esperanza Mesinica entre la vasta literatura sobre la Torah, la ley juda. La interpretacin Halakha10 ha ocupado completamente la posicin de guardin de la vida religiosa del judo y la Torah ha venido a ser un substituto para la idea bblica de salvacin. Franz Delitzsch, quiz el ms profundo experto sobre judasmo de su poca, asever que los judos ya no crean en el Mesas. En su lugar existe una expectativa general de que, para ellos, la liberacin se efectuar sin una figura Mesinica. Junto con este estrechamiento nacionalista el judasmo tambin ha perdido su carcter universal. 11 En general, los eruditos judos han escrito sobre el concepto del Mesas slo en sus obras apologticas. Sobresale entre stas la obra de Rab David Qimh. i Book of the Covenant, the Polemics of RaDaQ 12 with the Christians (Libro del Pacto, la Polmica de RaDaQ con los Cristianos) de fines del siglo XII, y Strengthening of the Faith

10. La palabra Halakha significa decisin, norma, precepto legal sistematizado. Es una palabra rabnica que se deriva de halakh, caminar. Es parte del Mishna, la interpretacin de la ley. 11. Franz De litz sch , Me ssianisc he Weissagunge n in ge schic htliche r Folge, Leipzig 1890, p 11, 102. 12. En la literatura rabnica los nombres de los sabios se escriben con estas formas abreviadas, i.e. Rab David Qimh. i.

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(El Fortalecimiento de la Fe) de Rab Isaac Ben Abraham Troki de la secta Karaim13 en el siglo XVI. La creencia Mesinica juda se tipifica en las obras del erudito medieval Moiss Maimnides (RaMBaM Rab Moiss Ben Maimon), de quien se dijo que desde Moiss hasta Moiss no ha surgido ninguno como Moiss. En su libro Ordenanzas de los Reyes, comprime todo lo que tiene que decir acerca del Mesas en seis pginas: El Mesas Rey ser ante todo un maestro de la Torah; reinstalar los severos castigos de la ley de Moiss y elabo- rar sus propias leyes, que el pueblo luego se ver obligado a observar; primero iniciar el milh. emet mitsvah, la guerra de ordenanzas, y slo entonces derrocar a los poderes dominantes, y tambin edificar el Templo. Al mencionar a Jess, RaMBaM habla con respeto, usando la forma completa de su nombre Ysha. , salvador.14 Segn el calumnioso tratado medieval Toldth Yeshu, las letras de la versin ms corta y ms ampliamente usada del nombre, Yeshu, eran una abreviatura de: Que su nombre y todo recuerdo de l sean borrados. RaMBaM afirma en su folleto que: Jess el Nazareno, quien pareca ser el Mesas, fue muerto por rdenes de la Gran Sinagoga, y que: las enseanzas de Jess el Nazareno y de ese ismaelita (Mahoma) que vino despus de l intentaban enderezar el camino para el Mesas Rey y restaurar a todo el mundo para que unido sirviera a Dios. Esta referencia favorable hace recordar la palabra utilizada por Josef Klausner en su libro Jess de Nazaret. Para l Jess era como un pionero del Reino de Dios.15 James Parks declara en su libro The Conflict of the Church and the Synagogue (El Conflicto de la Iglesia y la Sinagoga) que, Antes de la destruccin de Jerusaln los primeros cristianos huyeron a la ribera oriental del Jordn y los fariseos a Jamnia es por eso que en la ausencia del Templo, el13. La secta Karaim, que el judasmo oficial no acepta, basa su exgesis exclusivamente sobre el AT y no sobre la tradicin juda. Los libros mencionados estn en hebreo. 14. RaMBaM, Hilchot Melachim, 11:4. 15. J. Klausner, Jesus von Nazareth, Jerusaln 1952, p 574.

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pueblo judo contaba nicamente con la Torah como fundamento de su existencia espiritual.16 El colmo de la desilusin para ellos fue cuando Rab Aqiba proclam como Mesas a Simon Bar-Kokhba. El desastre militar subsecuente los alej completamente del pensamiento Mesinico y condujo a un judasmo halakha simplificado en el cual los estatutos hebreos se volvieron axiomticos. No obstante, veremos que las fuentes ms tempranas de la Sinagoga an hablaban mucho acerca del Mesas, refirindose a un conjunto de informtica an ms extenso que la iglesia cristiana. En realidad no fue sino hasta fines del siglo pasado que empez a crecer el inters en el Mesas. Desde all en adelante el tema ha sido estudiado por los escritores judos conocidos: Leo Baeck, C.G. Montefiore, Martn Buber, Gershom Scholem, Josef Klausner, David Flusser, Schalom Ben-Chorin y otros menos conocidos.17 Los prejuicios anteriores han disminuido al grado de que actualmente se imparten conferencias sobre el Nuevo Testamento en la Universidad Hebrea de Jerusaln e incluso se ensean extractos seleccionados en las escuelas.

FUENTES JUDAS ESTUDIADAS POR CRISTIANOSEn las primeras dcadas de este siglo hubo un revuelo de inters en la literatura rabnica entre crculos cristianos. Esto dio origen a muchas obras sobresalientes que iluminaron el trasfondo judo del concepto Mesinico, los ms famosos de las cuales son las obras de Hugo Gressmann, Moritz Zobel, S. Mowinckel, Eugen Hhn y L. Drr. Estas obras y los estudios correspondientes que establecieron los cimientos para los libros de Joseph Klausner, intentan explicar histrico-crticamente la expectativa Mesinica, mientras ignora su naturaleza explcitamente religiosa.18 Posiblemente la naturaleza especialmente judaica del concepto16. p 77. 17. cf Bibliografa. 18. cf Bibliografa.

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Mesinico se haya entendido ms a fondo en el siglo XIX por Alfred Edersheim y por E. W. Hengstenberg, y en nuestra propia poca por Gsta Lindeskog, por ejemplo. La presentacin general de las profecas Mesinicas por el renombrado Franz Delitzsch, antes mencionado, tampoco tiene rival.19 Podramos decir que hace un siglo los telogos cristianos tomaban las fuentes rabnicas ms seriamente que en la actualidad. Dignos de mencin entre los apologistas cristianos cuyo objetivo era defender su fe y que utilizaron la literatura rabnica estn: Alexander McCaul, A. Lukyn Williams y Bernhard Pick. El Dr. McCaul compar las doctrinas del Talmud con las del Nuevo Testamento. Sus libros han aparecido en ingls, alemn e incluso en el manuscrito hebreo RaSHI.20 A. Lukyn Williams respondi a la controvertida obra de Troki Strengthening of the Faith (El Fortalecimiento de la Fe), en una obra que llevaba un prefacio por Strack.21 Bien vale la pena familiarizarse con la amplia obra que hombres eruditos han realizado para aclarar las races del concepto Mesinico. La investigacin histrico-crtica intenta socavar la naturaleza Mesinica especfica de la Biblia porque una expectativa similar de salvacin ha sido encontrada entre otros pueblos; escritores judos, como resultado de su propia desilusin, tienden a negar un Mesas personal - y la mayor parte de los eruditos de la actualidad tienden a limitar la Esperanza Mesinica a lo que son, segn la opinin de ellos, las escasas profecas bblicas en las que se pudiera fundamentar.

NUESTRO LEGADO COMNTendemos a olvidar que tanto los judos como los cristianos devo- tos s tienen un punto de partida exegtico comn para estudios sobre la Biblia. En las oraciones diarias llamadas en hebreo Sidr, existe un largo segmento de hermosas oraciones matutinas.19. cf Bibliografa para ver obras principales. 20. Manuscrito RaSHI. 21. cf Bibliografa.

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Incluye Trece principios de la fe, que se han de repetir cada da. All leemos lo siguiente: clusula 6: Creo con perfecta fe que todas las palabras de los profetas son ciertas. clusula 7: Creo con perfecta fe que la profeca de Moiss nuestro maestro, la paz sea sobre l, era cierta, y que l era el mayor de los profetas, tanto de los que le precedieron como de los que le siguieron. clusula 12: Creo con perfecta fe en la venida del Mesas, y, aunque demore, esperar diariamente su venida. clusula 13: Creo con perfecta fe que habr una resurrec- cin de los muertos, en el tiempo que le plazca al Creador, bendito sea su nombre. . .22 Todo miembro de la comunidad juda est obligado a aceptar estas palabras compuestas por el famoso Moiss Maimnides RaMBaM (11351204). Se parecen a las palabras de Lucas 24:44 y de Hechos 28:33, segn las cules el proceder de los cristianos se basaba en las profecas encontradas en la Ley de Moiss, los profetas y los Salmos. Esta interpretacin Mesinica no es un puente artificial. Todo esto nos obliga a preguntarnos qu otras fuentes deben ser utilizadas para derramar luz sobre las races de nuestra Cristologa. Desde el punto de vista cientfico debe ser posible aprobar como justificadores de una interpretacin Mesinica, aquellos pasajes del Antiguo Testamento para los cuales los comentarios judos sobre el Antiguo Testamento, preceptivos y generalmente aceptados, han visto el concepto Mesinico, y aquellas interpretaciones que el Nuevo Testamento ha entendido como Mesinicas. Entre ms antigua la tradicin de la interpretacin, mayor el peso relativo que se le puede asignar a la fuente como exponente original del concepto Mesinico. Por supuesto que se debe tener presente que el Nuevo Testamento habla del misterio de Cristo.23 Ligados a este misterio Mesinico existen rasgos histricos y csmicos, temporales y22. Daily Prayers (Oraciones Diarias), Una nueva edicin revisada por el Dr. M. Stern, New York 1928. 23. eg Efesios 3:4 y Colosenses 2:2.

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espirituales que no deben ser diluidos. Esto se vuelve aparente particularmente en las fuentes judas antiguas. Quiz sea imposible estudiar fenmenos espirituales o los que pertenecen a la historia de las ideas, mediante una metodologa puramente histrico-crtica. Se dice que cuando la manzana cay sobre la cabeza de Isaac Newton, ste descubri la ley de la gravedad. Si desmenuzramos esta manzana no encontraramos la ley en la manzanatampoco es probable que un cirujano la hubiera encontrado en la cabeza de Newton: se encontraba en alguna parte entre la manzana y la cabeza. Los fenmenos espirituales no se pueden disecar; han de ser asimilados. Esto es aplicable tambin al misterio Mesinico. Si estudiamos cuidadosamente la Biblia y la literatura rabnica no podremos dejar de asombrarnos de la abundancia de interpretacin Mesinica en las obras ms antiguas que conocemos. Un antiguo proverbio hebreo dice: No busqu, por tanto no encontrluego busqu, y encontr! Otro dice: Cuando mostramos la palma de la mano, otras dos palmas an permanecen ocultasen otras palabras, cuando investigamos un asunto, detrs de l existen dos retos nuevos que no hubiramos podido ver sin analizar el primero. Y el Talmud afirma inequvocamente: Todos los profetas profeti- zaron nicamente para los das del Mesas.24

24. Berakoth 34b.

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LA ELECCIN DEL MTODO ADECUADO DE ESTUDIOCul es la manera correcta de sondear el misterio Mesinico? Cmo podremos encontrar la misma voz, la ipsissima vox, que explique la Biblia en el espritu de la Biblia? Formalmente, espera- mos que la verdadera erudicin observe ciertos mtodos predeter- minados. Cierto es que muchas de las llamadas profecas Mesinicas a las cuales se refiere el NT pueden ser interpretadas en el contexto de las etapas primitivas de la historia de Israel. Y, cien- tficamente hablando, este trasfondo histrico es el nico modelo de interpretacin legtimo y correcto que tenga algo que ver con el asunto. No obstante, los escritores del NT entendieron los textos profticamente y les dieron una interpretacin Cristolgica. Esto significa que no procedieron histrico-crticamente ni estricta- mente cientficamente, como quisieran los telogos modernos que lo hubieran hecho: para los crticos de hoy tales formas de inter- pretacin son artificiales. Por tanto debemos preguntarnos: La perspectiva suprahistrica del NT refleja las caractersticas centrales de la interpretacin Mesinica tal como se presentaba en la antigedad? Y si es as, el crtico moderno deber encontrar mto- dos que pongan de manifiesto, tan obviamente como en el tiempo de su origen, todas las implicaciones y la congruencia interna de la materia que est estudiando. Si hasta el momento no se ha tenido xito en este rengln, existen buenas razones para buscar un mto- do que sea ms adecuado para la materia. Podramos definir la diferencia entre la homiltica y la investigacin teolgica, diciendo que la teologa se esfuerza por explicar lo que cada palabra de la Biblia significaba en el tiempo en que fue escrita, mientras que la homiltica busca primariamente lo que el hombre de hoy puede sacar de provecho. Podra decirse que los estudios histrico-crticos han sido incapaces o indispuestos a entender la Cristologa del NT y sus bases. Por eso es necesario encontrar herramientas que nos permitan cavar ms profundamente en las races de la idea Mesinica. Difcilmente hemos de encontrar una piedra filosofal que resuelva24

todos estos problemas, pero existen tres factores que nos ayudarn a acercarnos a la mdula de nuestro problema. 1. Necesitamos determinar qu formas de pensamiento y de presentacin dominaban entre el Antiguo y Nuevo Testamento, el crisol en que fue formado el cristianismo. 2. De igual modo, debe resolverse el problema de cmo una disciplina no considerada entre las ciencias exactas puede encontrar la integridad interna de su materia sin violentar las verdaderas intenciones de las personas estudiadas. 3. Adems, en la eleccin de un mtodo de estudio debemos siempre determinar cules fuentes son ms capaces de derramar luz sobre las maneras de pensar que prevalecan en la poca en estudio.

LA DIFERENCIA ENTRE LA MENTALIDAD BBLICA Y LA DE OCCIDENTEEn uno de sus libros, el muy conocido escritor judo Schalom Ben-Chorin describe las diferencias esenciales entre la erudicin griega y el pensamiento bblico.1 El mundo griego se esforz por encontrar reglas ordenadas; mtodo que prevaleci desde Aristteles hasta Hegel. Los detalles luego se acomodaban para integrar unidades ms amplias y se imponan a estructuras preformadas. Por otra parte, el pensamiento hebreo procede de los detalles a los principios, de las observaciones concretas a los ideales. De modo que la Biblia no conoce ni de dogma ni de sistema como tal. Ms bien muestra dos objetivos bsicos tpicos: narracin y una ley que sirva como gua para la vida. El Pentateuco, los Salmos y los Profetas relatan vez tras vez las grandes obras de Dios. As, los hechos histricos se conservan sin alteracin, aun cuando su interpretacin reciba un nuevo matiz segn los requerimientos de cada poca. Tampoco la ley sagrada, tal como se revela en los mandamientos, cambia con las modas variables. En lugar de la fascinacin griega con sistematizacin, la Biblia manifiesta un razonamiento asociativo en el que cada

1. Schalom Ben-Chorin, Jdischer Glaube, pginas 1721.

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detalle tiene relacin inmediata con el todo y cada una de las partes son interdependientes. Este mismo principio asociativo se encuentra en toda la literatura rabnica incluso hasta nuestros tiempos. Recientemente el NT tambin ha sido estudiado como especie de Midrash; como una creacin similar a la predicacin exegtica de la sinagoga, observando las leyes judas de interpretacin bblica. Uno de los fundamentos de este mtodo es el axioma que establece que cada detalle de la revelacin de Dios, la Torah, debe exponerse y explicarse, tanto en relacin con el tema bajo consideracin y como entidad independiente, porque la palabra de Dios nunca pierde su sentido literal. Adems, cada argumento ha de ser respaldado con una palabra de la Escritura porque las opiniones de los hombres carecen de valor por s mismas. El Midrash repite con frecuencia el dicho arameo: H b-h tal, Esto depende de esto, formando puentes internos dentro del mensaje de la misma Biblia. Una y otra vez se nos dice que tal o cual sabio ha dicho en el nombre de este o aquel otro sabio, como est escrito, va-gomer... (y as sucesivamente...). En seguida se dan slo las primeras palabras de la cita bblica y el lector, conociendo de memoria las Escrituras, recita lo dems en silencio para s mismo. Este uso del AT proporciona cierta comprensibilidad a toda la presentacin y evita el filosofar en forma demasiado subjetiva. Aun un Midrash corto pudiera contener cientos de citas del AT y los nombres de cientos de rabinos. De tal suerte que la totalidad de la presentacin est anclada en la historia y en la tradicin de la sinagoga. Podemos ver este mismo principio operando en el NT que, segn el registro griego de Nestl, contiene 993 referencias individuales al AT. Adems del principio asociativo la Sinagoga Antigua usaba diver- sas expresiones que, fuera de su propia literatura, aparecen nica- mente en el NT. Los llamados middth o medidasmaneras de interpretar, de las cuales existen 7, 13, 32 o hasta 70ayudan en la revisin de las conexiones internas del texto, tomando en cuenta el sentido literal, Peshat; la insinuacin o cita, Remez; la homiltica o mensaje espiritual, Drashah; y el misterio, Sd.26

Estas cuatro palabras hebreas forman la mnemotecnia PaRDeS o paraso, con el que suele compararse la Biblia. Tanto en la enseanza de Jess como en la de Pablo encontramos aqu y all ciertos artificios estilsticos como al tiqr, no se lea as, sino as; tartei mashma, la palabra tiene otro sentido; muqdam umeuhar, observe lo anterior y posterior; el cambio de races de palabras, y diversas formas de expresin ejemplificadas en la literatura Midrash.2 Todas surgen de patrones de pensamiento judos. Ningn estudio serio del NT ni del AT se puede llevar a cabo si se ignora la naturaleza especial del pensamiento hebreo y el suelo en el que tuvieron su origen el NT y el AT.

LA DIFERENCIA ENTRE LA NATURALEZA DE LAS CIENCIAS NATURALES Y LAS HUMANIDADESSe considera que los mtodos de investigacin de las ciencias naturales y de las humanidades son fundamentalmente diferentes unas de las otras. El estudio de la religin, la tica y la esttica frecuentemente tienen que contentarse con interpretacin narrativa y hermenutica. El estudio del mtodo distingue entre lo nomottico o la bsqueda de leyes generales (griego nomos) y lo ideogrfico, es decir, disciplinas que se ocupan de ideas y hechos individuales.3 Aristteles cre la topika (de topos lugar) segn la cual, en la retrica y en el estudio de problemas jurdicos, los filsofos intentaban encontrar los temas principalesposteriormente fue desarrollado por Giovanni Batista Vico, a quien se considera fun2. Vase e.g. M. Gertner, Midrashim in the New Testament; Addison G. Wright, The Literary Genre Midrash ; e I. L. Seeligmann, Voraussetzungen der Midraschexegese ; cf Bibliografa. 3. Vase e.g. Wilhelm Dilthey, Der Aufbau der geschichtlichen Welt in den Geisteswissenschaften. Ges. Werke, Band 7.

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dador de la historia de la filosofa. 4 Por esta razn las humanidades deben revisar todo el campo del pensamiento humano y poner en su lugar los aspectos importantes. Slo desde una base de comparacin temticacasi podra decirse topogrficams amplia podr apreciarse la importancia del cuadro completo. La teologa es una de estas disciplinas ideogrficas que se han de estudiar a la luz de sus propias leyes especiales. Si se pasa por alto esta autonoma teolgica, se violar todo el objeto de los estudios. Con el fin de que entendamos cuan fundamental es el asunto bajo consideracin, vale la pena considerar la evaluacin que Yeh. ezkel Koifman hace de la condicin de la teologa actual.5 En su obra de cuatro tomos, The Religious History of Israel from ancient times to the end of the Second Temple (La Historia Religiosa de Israel desde tiempos antiguos hasta el final del Segundo Templo), describe cmo Israel tuvo su propia revelacin espiritual, con su sello personal, que no se presta al anlisis por la crtica histrica comn. No es posible, por ejemplo, pensar en la religin de Israel como procedente del culto cananeo que Israel destruy, porque en aquellas reas donde ese culto permaneci, no se desarroll ninguna correspondiente religin de revelacin. El profesor Koifman recalca que: Los estudios bblicos en nuestra poca enfrentan una situacin algo extraa: est atada por el mtodo dominante a pesar de que nadie sabe exactamente por qu este mtodo domina la investigacin. En las humanidades a veces sucede que alguna tesis o principio que en su origen estaba fundado sobre axiomas definidos de aceptacin general, sostiene una existencia artificial an despus de que esos axiomas han sido desacreditados. En nuestros tiempos esta ha sucedido tambin con estudios sobre la Biblia... Las pruebas crticas de Wellhausen y otros liberales han desaparecido tiempo atrs... En el nterin esos axiomas han sido retractados y se han desintegrado... y los protagonistas de esa escuela han4. Lothar Bornscheuer, Topik, Zur Struktur der gesellschaftlichen Einbildungskraft, Fr. am Main 1976 pginas 2627. 5. Citaremos el nombre en su forma hebrea y seguiremos la caracterizacin de la introduccin a su obra hebrea.

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tenido que reconocer que en su mayora, sus pruebas y no pueden sostenerse frente a la crtica. Pero an se niegan a retractarse de sus conclusiones, especialmente de las que tienen que ver con la crtica literaria. El profesor Kaufmann sostiene que la verdad histrica se encuentra cristalizada en el mensaje bblico en un grado mucho mayor que el reconocido por la escuela Wellhausen. Sobre el Pentateuco dice que: En la actualidad se puede demostrar que aun cuando hubiera sido ordenado y compilado despus del tiempo de Moiss, sus fuentes son muy antiguas, no slo en parte o en su tono general, sino en su totalidad, en su contenido, su lenguaje e incluso en sus mismas letras. Por esta razn el investigador debe aplicar su actitud crtica tambin al estudio de la crtica.

MTODO Y ELECCIN DE FUENTES DE INFORMACIN APROPIADAS

La tradicin juda contiene muchas ancdotas acerca de los Sabios Jvenes de Jerusaln. Alguna vez alguien pregunt a uno de ellos por el camino a cierta aldea. El joven contest: Quiere el camino corto largo o el camino largo corto? Un atajo pudiera tener obstculos que slo se cruzan o se rodean a expensas de mucho tiempo. De modo que un camino que a primera vista parece largo, pudiera resultar el ms corto. As, la introduccin anterior con informacin respecto al mtodo ha servido como la clave de lo que sigue. En nuestro intento por encontrar las races de nuestra fe cristiana ser importante, al tratar con el AT y el NT, seleccionar fuentes que definan lo ms tempranamente posible un entendimiento de la Biblia y la mentalidad del pueblo que estaremos estudiando. La eleccin de fuentes de informacin apropiadas siempre formar parte de la investigacin. Aun cuando el concepto Mesinico en el judasmo hoy ha sufrido cierta medida de maltrato, al principio de nuestra era an gozaba de una importancia central. La obra mayor de la legislacin

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judaica, el Talmud, compilado a lo largo de tres siglos partiendo de alrededor del ao 200, y que rene 60 tratados diferentes en 13 gruesos tomos, afirma sencillamente que: Ningn profeta profe- tizaba sino de los das del Mesas. El mundo no fue creado para otra cosa sino para el Mesas.6 Estas aseveraciones establecen el fundamento para todo el dilogo entre el judasmo y el cristianismo. Durante los aos de su formacin el Talmud fue sometido a su propia censura interna. Sus eruditos conscientemente evitaban toda mencin de la fe cristiana y de ciertas profecas Mesinicas que se consideraban temas delicados. Adems de esto, el catolicismo en la Edad Media presion a los judos para que quitaran del Talmud ciertos pasajes que desde una perspectiva cristiana se consideraban ofensivasincluso fueron conservados en un folleto separado, el cual obra en mi poder. Este gran silencio, como a veces lo describen los eruditos, y la doble censura han producido como resultado que la iglesia cristiana pocas veces ha recibido ayuda de parte de los judos en la investigacin de sus propias races. En la parte principal del libro comentaremos sobre las fechas y la importancia de las diversas obras que han servido como fuentes. Sin embargo, aun en esta etapa, conviene que sealemos dos fuentes primariasel Midrash y el Targumque no han sufrido la misma censura estricta que ha acaecido al Talmud. El MIDRASH o exposicin, la literatura homiltica de la sina- goga, que se apega a cierta forma, con frecuencia estrictamente definida, data en sus seis secciones Midrash ms antiguas, desde el siglo II d. de Cristo, aun cuando recibieron su forma definitiva escrita en el siglo V o VI. En ellas no se observa la censura carac- terstica de la sinagoga, y su tradicin frecuentemente se puede rastrear hasta antes de los tiempos de Cristo. Adems, existen otras treinta o ms obras de Midrash ms tardas que tambin espordica- mente derraman alguna luz sobre el concepto Mesinico.7 Los TARGUMES son versiones explicativas del AT en arameo. Tal como son, tambin brindan apoyo a los expositores judos de6. Berakoth 34.b, San. 99a, San. 98b. 7. Vase Encyclopedia JUDAICA. Tomo 11

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la Torah. El Talmud declara que: La Torah en su totalidad est en hebreo, pero ciertas cosas del Targum tambin le pertenecen.8 nicamente el Targum de Onquelos ha recibido la aprobacin oficial de la sinagoga. Contiene material expositivo sobre la totalidad del Pentateuco y data desde el s. II d. de C. Los Targumes que llevan el nombre de Jonathan Ben U. zziel fueron escritos en fecha posterior, basados sobre la tradicin transmitida de generacin en generacin, aunque Jonatn mismo vivi muy cerca del tiempo de Jess. El Targum de Jonatn tambin contiene material que segn algunos data hasta del s. II a. de C. Tal como sucede en la literatura Midrash, la mano del censor no es obvia en los Targumes. Esto lo demuestra adicionalmente el hecho de que, segn algunas cuentas, 72 pasajes del AT se explican en los Targumes como aplicables al Mesas. Ms que en otros Targumes, la tradicin asociada con el nombre de Jonatn resalta el concepto Mesinico, y por esta razn lo describiremos a la luz del Talmud. Jonatn fue el ms clebre alumno del anciano Hillel antes de la destruccin del Templo. Un relato tradicional refiere que Hillel tena 80 alumnos: Cuarenta de ellos merecieron que el Espritu Santo descendiera sobre ellos, lo mismo que Moiss; treinta, que el sol se detuviera sobre ellos, como en los das de Josu, hijo de Nun; veinte eran regulares; pero el mayor de ellos era Jonatn Ben U. zziel, y el menor Johanan Ben Zakkai. ...y recurdese que este ltimo fue el creador del renacimiento de la Torah en Jamnia inmediatamente despus de la destruccin del Templo.9 Jonatn tradujo los profetas al arameo, acompaado con breves explicaciones. Su trabajo, por supuesto, despert oposicin por parte de los eruditos de su poca, porque ellos sentan que de esta manera sera olvidado el original hebreo. Pero, en sus propias palabras, Jonatn prosigui para que las discusiones doctrinales8. Masechet Sopherim 1. 9. Pgina 518 en la obra de consulta en hebreo de Mordechai Margalioth sobre los sabios del Talmud.

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no se multiplicaran en Israel. Es admirable que la sinagoga haya aceptado la obra de Onquelos a pesar de que era proslito. El nfasis especficamente Mesinico de Jonatn era una de las razones por las que su traduccin no fue aceptada. La expectativa Mesinica primitiva entre los judos tambin se refleja por la literatura conocida como Zohar (luminosidad o brillantez), que generalmente se asocia con el nombre de Shimeon Ben Joh. ai del siglo II. Esta obra esotrica en arameo, que consta de miles de pginas, se basa en el Pentateuco y se ocupa con el ser de Dios. Alcanz aprobacin general, junto con el Talmud, tanto en las academias de oriente como de occidente. Aun cuando no fue vertida en forma escrita hasta los siglos VIII y IX, refleja una tradicin muy antigua. Contiene, por ejemplo, descripciones del Mesas Sufrido, de la Trinidad, y del Mesas como Hijo de Dios, los orgenes de los cuales son difciles de identificar. El Zohar tambin se puede considerar como parte de las fuentes judas normativas. En cuanto a nuestras propias fuentes, conviene tambin que haga- mos referencia a la exposicin bblica juda medieval, ya que ciertos rabinos como el ms famoso exegeta del judasmo, RaSHI (Shalomon Jarchi, m.1105), con frecuencia se apoyaban en los Midrashim y en los Targumes. Del mismo modo, los Rollos del Mar Muerto y la antigua literatura juda de sabidura pudiera proporcionar cierto apoyo secundario al comentar nuestro material. En la actualidad se da cada vez ms importancia al hecho de que, tanto en estudios del AT como del NT, estas fuentes son indispensables. Esto lo confirman eruditos recientes como John Bowker, S. H. Levey, David Daube y W. D. Davies, adems de los menos recientes H. L. Strack y B. Pick.10 Conforme busquemos las races de la fe cristiana descubriremos que hemos desembarcado en un continente extrao y desconocido.

10. John Bowker, The Targums & Rabbinic Literature. An Introduction to Jewish Interpretation of Scripture. Cambridge 1969; S. H. Levey, The Messiah, An Aramaic Interpretation. The Messianic Exegesis of the Targum, Cincinnati 1974; H. L. Strack, Introduction to the Talmud and Midrash, 1st ed. Berlin 1887; B. Pick, Old Testament

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Passages Messianically Applied by the Ancient Synagogue, Hebraica 188588.

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No obstante, vamos por el camino correcto. Si alguno quisiera familiarizarse con la mentalidad china, hara bien en hacer un viaje al lejano oriente. En ocasiones casi se requiere la habilidad de un agente secreto para llegar al corazn del problema. Sin embargo, por el camino haremos muchas observaciones emocionantes y extremadamente cautivadoras que slo pueden servir para fortalecer las bases de nuestra fe. Uno de los mejores ejemplos para ilustrar la bsqueda de las races de uno mismo se encuentra en mi librero. En cierta ocasin tuve la oportunidad de comprar en Israel, de las propiedades de un judo cristiano, un libro publicado en Helmstadt en 1609. El autor, un erudito judo de nombre Christianum Gerson, relata que l compr por ocho chelines, de una pobre ancianita cristiana, un Nuevo Testamento en la traduccin de Lutero. Junto con sus dos cuados lo empez a estudiar para descubrir cmo fue posible que este grave error conquistara cientos de miles de corazones. El mensaje del evangelio lo conmovi de tal manera que tuvo que seguir leyndolo a solas, en secreto. Compar su mensaje con la del AT y con sus propias fuentes judas y de esta manera, segn su prefacio, por medio de esta palabra escrita lleg a una fe personal en Jess. Al principio su familia y sus amistades lo rechazaron. Para describir esto toma las palabras del Salmo 27:10: Porque aunque mi padre y mi madre me hayan abandonado, el SEOR me recoger. Sin embargo, muy pronto su esposa y sus hijos siguieron los pasos de su padre. Para demostrar a sus amigos las bases de su decisin escribi este tratado de 700 pginas sobre la fe cristiana, en la que compara la enseanza del NT y la del Talmud entre s. Aun cuando Gerson compara las races del cristianismo principalmente con el AT, cientos de citas del Talmud y docenas de referencias al Midrash comunican la sensacin de encontrarse en las races mismas de la fe cristiana. En su poca Lutero dijo que: Christus universae scripturae scopus est, que libremente traducido significa: Cristo es la verdadera11. Christianum Gerson, Der Juden Thalmud, Frnembster Inhalt und Widerlegung, zum andernmal gedruckt in Helmstadt 1609. 700 pginas.

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perspectiva de todas las Escrituras.11 La totalidad de este libro de Races se basa en ese fundamento.

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EL MESAS EN EL PENTATEUCOLos rabinos frecuentemente se refieren al Gnesis como El Libro de la Creacin. All vemos todo como debi haber sido en el principioel mundo, la humanidad, los diversos pueblos, la tribu hebrea, el caos ocasionado por la Cada, y las primeras evidencias de la salvacin que Dios prometi a la humanidad. Todo se encuentra an en estado naciente, as que no podemos esperar encontrar all el concepto del Mesas plenamente desarrollado. No obstante, la antigua literatura juda, aun en el relato de la creacin, encuentra el tema Mesinico.

EL ESPRITU DEL MESAS EN EL RELATO DE LA CREACINGnesis empieza con la creacin del cielo y de la tierra: la tierra estaba desordenada y vaca. Aun en esta descripcin los sabios del Talmud olfateaban los inicios del plan de salvacin para la humanidad: La tradicin de Elas ensea que el mundo ha de existir por seis mil aos; En los primeros dos mil habra desolacin; en los dos mil siguientes prosperar la Torah y los siguientes dos mil son los das del Mesas, pero a causa de nuestros pecados, que fueron grandes, salieron las cosas como salieron.1 Para esta expectativa tradicional era esencial que la soberana de la Torahla Ley de Moissdurara 2000 aos, lo mismo que la duracin del periodo Mesinico. En la misma exposicin de largo alcance de la que procede la cita anterior, encontramos como explicacin, que:

1. Sanhedrin 97a.

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El sptimo milenio ser de guerra, y al final del milenio vendr el Hijo de David. En el comentario que sigue a esto se hace mencin de: la guerra de Gog y Magog, y el periodo restante ser la era Mesinica, en la que el Santo, bendito sea, restaurar su mundo slo cuando haya terminado el sptimo milenio.2 Esta llamada Tradicin Elas, que representa la interpretacin de la mayora de los sabios, nos recuerda la enseanza de la corriente principal del cristianismo respecto a los das postreros y el reino milenario. Cuando hayan pasado seis milenios seguir, segn algunos, un sbado, shabaton, de mil aos. Esta pudiera ser la era Mesinica despus de la cual el mundo sera renovado. El ao 1985 de nuestra era corresponde al ao 5745 en el calendario judo, lo cual significa que el Mesas ya debi haber venido. Algo parece haber salido mal con este plan de salvacin. La oracin matutina oficial de la sinagoga trae esto a la memoria continua- mente con las palabras: Debido a nuestros pecados el Templo ha sido destruido y se han suspendido los sacrificios perpetuos, ni tampoco tenemos un sacerdote consagrado. Es necesario sealar que los rabinos no son unnimes en su doctrina sobre los tiempos Mesinicos, pero el plan de salvacin para ellos, s inicia en la misma creacin. Cuando la Biblia hace mencin de que el Espritu de Dios se mova sobre la superficie de las aguas, ellos ven una referencia al Mesas. El Midrash Rabbah dice en este contexto, que este era el espritu del Mesas, como est escrito en Isaas 11:2, Y reposar sobre l el Espritu del Seor.3 Un par de escritos ms tambin mencionan que esto se refiere al rey ungido. 4 Esta clase de insinuacin es comprensible cuando recordamos el punto de vista de los rabinos, de que hasta los nombres del Mesas fueron determinados antes de la creacin del mundo. Las primeras palabras de Dios en la Biblia son: Sea la luz! Y hubo luz. Y vio Dios que la luz era buena.2. Sanhedrin 97b. 3. Midrash Bereshith Rabbah 1:2 y Yalqut, Mechiri del Salmo 139:12. 4. Pesikhta Rabbati 33 y Yalqut.

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Cuando estudiamos detenidamente el relato de la creacin observamos que no fue sino hasta el cuarto da que Dios cre las dos grandes lumbreras, el sol y la luna. Los sabios vean en esto tam- bin una alusin al Mesas, de tal suerte que el Midrash conocido como Pesikhta Rabbah, que se lea del siglo IX en delante en relacin con los das de fiesta, pregunta: De Quin es esta luz que cae sobre la congregacin del Seor? Y contesta: Es la luz del Mesas.5 El Yalqut Shimo. ni, que consta de una concatenacin de pasajes redactadas en los siglos XII y XIII, agrega esta reflexin a la exposicin del versculo: Esta es la luz del Mesas, como est escrito en el Salmo 36:9, En tu luz vemos la luz.6 Los Rabinos consideraban que la palabra aramea Nehora, luz, era uno de los nombres secretos del Mesas, porque leemos en la parte aramea del libro de Daniel que, El conoce lo que est en tinieblas, y con l mora la luz (2:22). Adems, con el apoyo de las profecas de Isaas 42:6 y 60:13, el Mesas es visto como la luz de los gentiles. No anunci Jess que l mismo era la luz del mundo, y que el que me sigue no andar en tinieblas? El Midrash entiende las palabras de Daniel captulo 2 en sentido Mesinico: Y con l mora Nehora. Este es el Mesas Rey, pues escrito est: Levntate, resplandece; porque ha venido tu luz (Isaas 60:1). Por lo anterior podemos ver que el mtodo asociativo judo descubre alusiones Mesinicas en lugares donde los cristianos no los han discernido. El apstol Pablo dice que este misterio de Cristo haba estado oculto desde los siglos y edades (Colosenses 1:26). Ser posible que con estas palabras Pablo se estuviera refiriendo a la tradicin juda? No es improbable, ya que encontramos expresiones similares en los rollos del Mar Muerto.7

5. Pesikhta Rabbati 62,1. 6. Yalqut Shimo. ni 56. 7. Megillath haSerachim 8:11.

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EL PROTO EVANGELIOParte de la interpretacin Mesinica de la iglesia ha sido heredada directamente del judasmo. Gnesis 3:15, frecuentemente llamado el proto evangelio, se encuentra acompaada de una explica- cin cristiana slo desde el tiempo de Irineo en el siglo II. El NT no se refiere a este pasaje directamente e incluso algunos eruditos han aseverado que no contiene ningn asomo de Mesianismo. No obstante, la tradicin del Targum arameo encuentra una profe- ca Mesinica clave aun aqu.8 El Proto evangelio dice as: Y pondr enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; sta te herir en la cabeza, y t le herirs en el calcaar. El pasaje habla primeramente de la enemistado lo que sera una mejor traduccin del hebreo odioque se introdujo en el mundo como consecuencia del pecado. Fue rota la comunin con Dios, y el hombre empez a huir para tratar de esconderse de la presencia de Dios. Las consecuencias de la Cada fueron: pecado, enfermedad y muerte. La Biblia habla de la personificacin del mal en el diablo, y Sabidura de Salomn, un libro apcrifo del segundo siglo a. de C., dice que, Por la envidia del diablo entr la muerte en el mundo.9 Una de las tareas del Mesas es precisamente conquistar la muerte. Dado que el estilo de la exposicin del Midrash es, como lo hemos visto, tratar de dilucidar todos y cada uno de los detalles de la Torah, vale la pena analizar el mensaje completo del proto evangelio usando ms o menos el mismo mtodo. Segn los rabinos el Mesas llevar a cabo una reparacin, tiqun ha-O. lam, en el mundo. Los telogos de hoy han empezado a comentar sobre el concepto de rehabilitacin. Cuando Cristo expi nuestros pecados, llev nuestras enfermedades, y conquist la muerte, rectific las consecuencias de la Cada. Daniel 9:24 describe esta encomienda Mesinica ms breve y claramente8. Este tema ha sido tratado por Eugen Hhn en su libro Die Messianischen Weissagungenbis zu den Targumim, Leipzig 1899, pgina 135.

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9. Sabidura de Salomn 2:24.

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diciendo: Poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la justicia perdurable. De esta manera la simiente de la mujer ha de aplastar la cabeza de la serpiente. Estos aspectos del proto evan- gelio se manejan en forma figurada, tanto en la exgesis juda como en la cristiana. El Targum de Jonatn Ben U. zziel afirma aqu que si la descen- dencia de la mujer cumple la ley, estarn en una posicin que les permita aplastar la cabeza de la serpiente: Y finalmente harn la paz en los das del Mesas Rey. El Targum hace un juego con las palabras a. qev, calcaar, e .iqvah, fin. El Targum de Jerusaln seala los ltimos tiempos al interpretar el versculo as: Harn la paz al final, al cierre de los das postreros, en los das del Mesas Rey. La palabra aramea para hacer la paz, shefiyuta, se parece a la palabra hebrea para aplastar, yeshufchah, y algunos eruditos del arameo aceptaran la traduccin: Finalmente, en los das del Mesas Rey, l ser herido en el calcaar. Esto concuerda con el versculo 16 el Salmo 22, que segn la exgesis cristiana se entiende como tipo del Mesas. En muchos idiomas este versculo se ha traducido, segn la interpretacin ms probable del original: Me horadaron las manos y los pies. De manera semejante Zacaras 13:6 en el hebreo dice: Qu son esas heridas entre tus manos? Y l responder: Con ellas fui herido en casa de mis amigos. La interpretacin ms comn de este versculo entre los rabinos se ilustra por la llamada interpretacin de Jonatn: Sanarn (de la mordida de la serpiente) significa que recibirn un antdoto; Hacer paz significa paz y seguridad; y l ser su sanador en el futuro, en los das del Mesas, que habr paz y descanso.10 La serpiente tambin desde tiempos antiguos ha ocupado su propio lugar en la exgesis de la esperanza de liberacin Mesinica, como veremos al llegar a la bendicin de Jacob. Durante su pere10. Explicacin que los rabinos dan de Jonatn. Esta interpretacin tambin corresponde a lo que entiende S. H. Levey segn su libro The Messianic Exegesis of the Targum, en relacin con Gnesis 3:15.

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grinar por el desierto Moiss hizo una serpiente de bronce, con la cual el pueblo fue sanado de sus mordeduras de serpiente, al mirarla. II Reyes 18:4 refiere cmo Ezequas destruy este talismn que se haba convertido en substituto de la verdadera religin: Hizo pedazos la serpiente de bronce que haba hecho Moiss, porque hasta entonces le quemaban incienso los hijos de Israel; y la llam Neh. ustn. [pedazo de bronce]. Tal es la naturaleza humana que un objeto inanimado puede llegar a ser objeto de un culto falso. Recuerdo una agradable conversacin que sostuve en un negocio llamado Neh. ustn que venda conductores de cobre, y cuyos dueos eran judos devotos. Le coment al distinguido caballero que estaba tras del mostrador: Tienen ustedes un buen nombre Bblico. El hombre me conoca y saba hacia donde iba. Le pregunt medio en serio si l saba a qu se refera el nombre de la tienda. Asinti con la cabeza y a su vez pregunt: Sabe usted lo que RaSHi (R. Salomn Ben Yitshak) dice acerca de eso? Promet investigarlo y le lanc otro reto a cambio. Sabe usted cmo interpreta Neh. ustn la Sabidura de Salomn? l no saba, as que le cit del captulo 16 de ese libro, que data desde antes del tiempo de Cristo: Pero les diste una seal de salvacin, para que recordaran los mandatos de tu ley. Quien se volva hacia aquella seal, se salvaba, no en virtud de la seal misma que vea, sino gracias a ti, salvador de todos... T nos bajas al reino de la muerte, y nos sacas de l.11 Al regresar a casa consult la exposicin de RaSHi sobre la materia, y encontr lo siguiente: Se le denominaba Neh. ustn, lo cual es un trmino despectivo y se entiende que significa, Qu necesidad tenemos de esto? Esto no es ms que una serpiente de bronce!12 RaSHi, un erudito medieval ha de haber conocido las palabras de Jess acerca de ser levantado as como Moiss levant la serpiente en el desierto. Bien pudiera ser que el piadoso comerciante tambin estuviera consciente de esto. Segn nuestra fe cristiana,11. Sabidura de Salomn 16:78 y 13. 12. RaSHI sobre II Reyes 18:4.

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la cruz fue dada como una seal de salvacin. Jess descendi al Hades y resucit, quitando la enemistad y trayendo la paz. Los Targumes recalcan que el Mesas vendr en los tiempos del fin. El trmino arameo en el fin, be-I. qva, se parece al concepto I. qvoth meshih. a, que significa las huellas del Mesas. El Talmud contiene un extenso comentario sobre estas huellas Mesinicas, seales de los tiempos del fin, a las cuales volveremos en la seccin sobre el NT. Para los rabinos todo lo que tenga algo que ver con los Tiempos del Fin tiene un sabor Mesinico. RaDaQ, Rab David Qimh. ide quien se dijo que Sin l no encontraremos la manera correcta de interpretar las Escriturasdice en relacin con Isaas 2:2 que dondequiera que se mencionen los das postreros, se hace referencia a los das del Mesas.13 Esto se puede ver tanto en la interpretacin del proto evangelio como en aquellas profecas del AT que contienen algn trmino que se refiera a los das postreros. Pero, quin es esta simiente de la mujer? Por qu se usa el pronombre personal h, l, para referirse a la simiente? Simiente ha de considerarse sustantivo singular o colectivo? El Targum definitivamente asocia l con el Mesas Rey. Pero, el concepto de simiente tendr implicaciones Mesinicas en otros contextos tambin? Efectivamente lo tiene: los rabinos comentan ampliamente este mismo asunto. En Gnesis 4:25 leemos (en el hebreo y en la Antigua Versin de Reina Valera): Dios me ha dado otra simiente en lugar de Abel. Rab Tanh. umade quien se dijo que era el sello de los Midrashimmenciona que aqu se trata de otra simiente que procede de otro lugar. Y, quin es? Es el Mesas Rey.14 Rab H. una dice que Dios prepar otra simiente de otro lugar, y l es el Mesas Rey.15 La promesa de simiente para Abraham en Gnesis 22:18, que ocupa un lugar central en la teologa cristiana, tambin se ve en los Midrashim al referirse al Mesas: Y mediante tu simiente sern benditas todas las naciones de la tierra , por cuanto t has obedecido mi voz. Midrash Rabbah comenta el tema ampliamente y declara que en los das del Mesas, Israel ser compa43

13. Mikraoth Gedoloth en relacin con Isaas 2:2. 14. Bereshith Rabbah 23. 15. Ruth Rabbah 8.

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rada a la arena del mar.16 Pablo, en Glatas 3:16, entenda el significado de simiente de Abraham de manera similar: A Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo. Aqu Pablo usa la frmula al tiqra tpica del Midrash, No se lea as, sino asuna promesa dada en singular se toma como referencia a Cristo el Mesas. Podramos agregar que aun Midrash Ruth asocia la simiente con el concepto del Mesas cuando habla del pariente redentor en Ruth 4:8. El Midrash resalta a Fares, conocido por la genealoga en Mateo 1:3 y el relato de Gnesis captulo 38. La frase otra simiente de otro lugar se usa de nuevo, aqu refirindose a Fares. Precisamente en relacin con Fares se hace la observacin de que el Mesas corregir los estragos ocasionados por la Cada. El Midrash mismo menciona esto como un ejemplo de entendimiento profundo. El Midrash Rabbah describe de la siguiente manera la fase nueva que inici con Fares: Esta es la historia de Fares y tiene una importancia profunda. . . . Cuando el Santo cre su mundo an no haba ngel de Muerte. . . Pero cuando Adn y Eva cayeron en pecado, todas las generaciones se contaminaron. Con el nacimiento de Fares la historia empez a cumplirse por l, porque de l saldra el Mesas, y en sus das el Santo hara que la muerte fuera consumida, como est escrito: Destruir a la muerte para siempre (Isaas 25:8.)17 Difcilmente se podra encontrar en fuentes judas una mejor con- vergencia con los comentarios de Pablo en relacin con Cristo como conquistador de la muerte. En Romanos 5:12 leemos: Por tanto, como el pecado entr en el mundo por un hombre, y por el

16. Bamidbar Rabbah 2. 17. Shemoth Rabbah 30. B. Pick en su amplia serie de artculos Old Testament Passages Messianically Applied , (Hebraica 1885 p. 31) interpreta este Midrash de la misma manera.

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pecado la muerte, as la muerte pas a todos los hombres. I Corintios 15:22 aade: Porque as como en Adn todos mueren, tambin en Cristo todos sern vivificados. Las races de este misterio de la historia de la salvacin se remontan hasta el relato de la cada de la humanidad. El profesor Gottlieb Klein escribi a principios de este siglo que por medio del mtodo conocido como notarikon, un aspecto del cual consideraba a cada letra de una palabra como la letra inicial de otra palabra, las tres letras hebreas de la palabra Adn se interpretaban como referencias a Adn, David y el Mesas.18 De esta manera Cristo corregir la cada de Adn. Posiblemente todo esto sean meras tonteras fantasiosas, pero se desprende de la expectativa Mesinica de creyentes que vivieron en la antigedad. La prominencia concedida por los Targumes al Mesas Reyque l traer la paz en lugar de la enemistad de proto evangeliose refleja en la carta de Pablo a los Efesios, aunque es altamente improbable que existe conexin intrnseca alguna. En el captulo 2:1416 leemos: Porque l es nuestra PAZ, que . . . aboliendo . . . las ENEMISTADES . . . para crear en s mismo de los dos UN SOLO Y NUEVO HOMBRE, HACIENDO LA PAZ, y mediante la cruz . . . matando . . . las ENEMISTADES. Y vino y anunci las buenas nuevas de PAZ . . . Aun cuando el NT no cita directamente el proto evangelio, se puede apreciar alguna huella de ella en el saludo de Romanos 16:20: Y el Dios de paz aplastar en breve a Satans bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Seor Jesucristo sea con vosotros.

EL MESAS QUE DERRIBAR EL VALLADO ALREDEDOR DE LA LEYLa bsqueda de las races de la fe cristiana en el AT es en algo semejante a la bsqueda de perlas en las profundidades del ocano. El pescador de perlas primeramente saca una gran canti-

18. G. Klein, Bildrag till Israels Religionshistoria, Stockholm 1898, p. 11.

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dad de conchas del fondo del mar y las extiende en la playa. El observador ve nicamente estas cubiertas externas hasta que las conchas se abren. En ese momento algunas pudieran revelar una preciosa perla oculta en su interior. La lectura de la antigua literatura juda puede ser muy desesperante porque en su mayor parte se ocupa con la exposicin de la ley religiosa ritual, que realmente tiene inters slo para el judo ortodoxo. Las dimensiones espiri- tuales y psicolgicas tan caractersticas de los profetas del AT brillan por su ausencia casi total. Sin embargo, con cierta frecuencia, la concha fuertemente cerrada pudiera soltar una rara perla. Aunque los rabinos encuentran misterios en el AT en mayor abundancia de la que est acostumbrada la iglesia cristiana, an as recalcan con frecuencia las palabras de Deuteronomio 29:29: Las cosas secretas pertenecen al SEOR nuestro Dios, mas las cosas re- veladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre. Los conceptos mentales y espirituales, por su misma naturaleza, tienen que describirse en forma figurada. No podemos, por ejemplo, explicar precisamente qu es fe, esperanza, o amor. De igual modo, el misterio Mesinico ha creado, por as decir, su propia clave secreta que ha de ser descifrada antes de que se pueda entender. Una de las claves ms difciles es Gnesis 38:29 sobre el hijo de Jud y Tamar: Qu brecha te has abierto! Y llam su nombre Fares. Ya hemos visto los comentarios relacionados con el nombre de Fares, referentes al Mesas como conquistador de la muerte. Ben Parets, hijo de Fares realmente es uno de los apelativos Mesinicos velados mejor conocidos. En la genealoga de Jess en Mateo el nombre aparece como Fares: Jud engendr de Tamar a Fares. (Mateo 1:3) Por tanto Jess fue, en cierto sentido, hijo de Fares. El Sello de los Midrashim, R. Tanh. uma Bar Abba, habla vez tras vez del Mesas en relacin con Fares. l es el salvador supremo, el Mesas Rey. Tanh. uma afirma que hay pecadores que por sus cadas han sufrido grandes prdidas, y otros que se han beneficiado con sus infracciones. As Jud se benefici, porque de l vino Fares y Esrom de quienes descienden David y el Mesas Rey, el que salvar47

a Israel. Mirad cun grandes las dificultades dispuestas por

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el Santo hasta que levantara de Jud al Mesas Rey, aqul de quien se escribi: Y el Espritu del Seor ser sobre l.19 El Midrash Rabbah comenta ms ampliamente este versculo. Primero observa, medio en broma, que: Jud se afanaba buscando mujer, mientras el Santo, bendito sea, estaba creando la luz del Mesas.20 Una de las obras rabnicas expositivas conocida como El Don Sacerdotal dice de esto que: El ltimo Salvador es el Mesas, el Hijo de David, que desciende de Fares, hijo de Jud, y la parte del Midrash contina: Este es el Mesas Rey; como est escrito, Brotar un retoo del tronco de Isa y El SEOR extender desde Sion tu poderoso cetro. (Is. 11:1 y Sal. 110:2) La explicacin de los rabinos agrega: Este es el Mesas quien pronto aparecer, porque est escrito de l que: Subir el que abre caminos [hebreo porets, de la misma raz que Fares] delante de ellos. (Miqueas 2:13) Es importante tomar nota de los pasajes Bblicos ya mencionados. Ilustran el mtodo mediante el cual las profecas Mesinicas de fundamento dbil se colocan en un contexto ms amplio. Vemos adems que los Targumes y los Midrashim generalmente hablan del Mesas Rey, y no tanto de algn nebuloso concepto Mesinico. RaMBaN (R. Moiss Ben Nah. man), quien vivi hacia fines del s. XIII, describe as el nacimiento de Fares: Estaba rodeado por un cerco, y encerrado dentro de l. Por eso dice: As has roto el cerco para salir de all. Fares fue el primognito, El primognito por el poder del Altsimo, como est escrito, Yo le dar un hijo primognito. Esto fue escrito acerca de la persona santa que ha de venir, David, el Rey de Israelsiempre viva. Los que

19. Midrash Tanh. uma, Bereshith va-Yeshev. Isaas 61:13. 20. Midrash Bereshith Rabbah, par. 85.

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son sabios entendern.21 Qu sera lo que entenderan los que son sabios? y, qu significa que rompera el cerco para salir? Histricamente esto bien describe lo que sucedi cuando el cristianismo se escap del molde judaico, como podemos ver por lo siguiente: Los rabinos hablan con frecuencia acerca del cerco de la Ley. Glatas 4:45 dice que Jess naci bajo la ley y redimi a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibisemos la adopcin de hijos. Pablo contina: Es para libertad que Cristo nos ha hecho libres. Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estis otra vez sujetos al yugo de esclavitud (5:1). Si sois guiados por el Espritu, no estis bajo la ley (5:18). Despus de ser un don, la Ley en el judasmo puede convertirse en un yugo esclavizante. En el judasmo de hoy existen oficialmente 613 mandamientos y prohibiciones. Parecera que la transformacin en una religin de ley ocurri en una etapa muy temprana. El profeta Isaas escribi cerca de 700 aos antes de Cristo, que en lugar de una palabra de reposo, la religin se haba convertido en una exigencia: Mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, rengln tras rengln, lnea sobre lnea, un poquito all, otro poquito all hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos (28:1013), y que el temor de Dios no era ms que mandamientos de hombres (29:13). El Targum de Jonatn explica que Dios hizo al hombre de 248 huesos y 365 tendones, el nmero de das en el ao solar (juntos = 613). Adems de estos mandamientos de hars y no hars haba un grupo adicional de mandamientos auxiliares que constituan el vallado alrededor de la Ley. Dentro de la proteccin de este redil tena que vivir el judo devoto. En su enseanza, Jess se vio obligado a hablar de este mismo error de aplicacin. Refirindose a las palabras de Isaas anteriormente citadas, l agreg que: En vano me honran, enseando como doctrinas, mandamientos de hombres . . . Entonces acercndose sus discpulos, le dijeron: Sabes que los fariseos se ofendieron21. Mikraoth Gedoloth, seccin correspondiente.

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cuando oyeron esta palabra? l contest: Toda planta que no plant mi Padre celestial ser desarraigada. Dejadlos (Mateo 15:814). De esta manera Jess realmente abri brecha en el cerco de la Ley. Moiss, al instituir los mandamientos, dijo al pueblo: Oh Israel, oye los estatutos y decretos que yo os enseo...No aadiris a la palabra que yo os mando, ni disminuiris de ella!22 Por supuesto los eruditos judos han intentado darle al taryag, los 613 preceptos, un fundamento en el Pentateuco, pero tanto en estos como en los seyag, las reglas auxiliares, existen elementos que los rabinos mismos reconoceran carecen de base en la ley escrita. Precisamente estos halakha o preceptos tradicionales son uno de los problemas internos ms serios de Israel moderno. Pablo habl acerca de este vallado alrededor de la Ley en Efesios 2:1415; Porque l es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, DERRIBANDO LA PARED INTERMEDIA de separacin, ABOLIENDO en su carne las enemistades, la LEY DE LOS MANDAMIENTOS expresados en ORDENANZAS, para crear en s mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz. Lo nico que podemos entender por pared intermedia y ley de los mandamientos expresados en ordenanzas es el vallado alrededor de la ley. Cristo, mediante el sacrificio de su muerte, lo ha derribado. Y los que son sabios entendern, afirma RaMBaN. Isaas 8:14, que el Talmud interpreta como una referencia al Mesas, Hijo de David,23 describe este misma penetracin rela- cionada con la ilustracin de Fares: l ser por santuario; pero a las dos casas de Israel, por piedra para tropezar, y por tropezadero para caer, y por lazo y por red al morador de Jerusaln. Todos estos rasgos bien se pueden aplicar a Jess: l fue el primo- gnito por el poder del Altsimo, involuntariamente cre una brecha entre la religin madre y la hija, y l lleg a ser la piedra22. Vase Deuteronomio 4:12, Proverbios 31:6 y Josu 1:7.

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23. Sanhedrn 38a.

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que los edificadores rechazaron. Midrash Rabbah relaciona la ilustracin del Mesas Ben Fares con la profeca de Miqueas 2:13: El que abre brecha subir delante de ellos...y el SEOR a su cabeza. RaSHI, Rab Shlomo Yitsh. ak (10401105), quien expuso en sus escritos todo el Talmud y el AT, dijo de Fares que l es su salvador, el que abrir brecha. RaDaQ, Rab David Qimh. i, declara que el que abre el camino es Elas, y su rey es el Renuevo, el Hijo de David. La referencia de Miqueas al concepto de uno que abrir el camino es natural considerando que la palabra hebrea para esto, porets, se deriva de la misma raz que Fares. Sin duda el cristiano entender bien esta referencia constante en mucha de la literatura hebrea al heraldo del Mesas que preparara el camino para l. El Metsudat David, una popular exposicin juda del siglo XVII sobre los libros profticos e histricos, explica que la profeca de Miqueas se refiere a que: Elas vendr antes del tiempo de la salvacin para volver los corazones de Israel hacia su Padre Celestial, con el fin de ser un heraldo de salvacin para ellos . . . pero lo de rey se refiere al Mesas-Rey, y el Seor vendr antes de todos ellos, porque entonces tambin devolver su Espritu Santo a Sion.24 Es asombroso ver que en los escritos de los exegetas judos ms ampliamente reconocidos, existen pensamientos relacionados con el nombre de Fares que nos pueden ayudar a entender el Plan de Salvacin y algunas de las enseanzas ms difciles de Pablo. Sin embargo, con mucha frecuencia, estas perlas se encuentran sepultadas en lo profundo del ocano de la tradicin, ocultas dentro de una capa protectora.

24. Mikraoth Gedoloth sobre Miqueas 2:13.

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EL MESAS QUE GOBERNAR A LAS NACIONESLos eruditos cristianos con frecuencia han recalcado que la ciencia crtica slo admite como Mesinicos, dos textos preprofticos de la literatura del AT. El primero de estos es la bendicin de Jacob. La exgesis cristiana se conforma aqu con la afirmacin general en el sentido de que el Mesas es de la raz de la tribu de Jud. La antigua interpretacin juda ve una referencia Mesinica en las primeras palabras de esa bendicin, que hablan acerca de el fin de los das. Como ya lo hemos visto bajo el nombre de Rab Qimh. i, Dondequiera que se hace mencin de los das postreros, se hace referencia a los das del Mesas. La expresin: el fin de los das aparece por primera vez en la Biblia en la bendicin de Jacob, en Gnesis 49:1: Entonces Jacob llam a sus hijos y les dijo: Reunos, y os declarar lo que os ha de acontecer en los das postreros. La bendicin que recibi Jud habla del Mesas como gobernante de las naciones. Todas las obras expositivas de los rabinos, comenzando con los Targumes y los Midrashim, ven aqu una clara profeca Mesinica. Los diversos matices de expectativa Mesinica se deja ver en sus interpretaciones, casi como si se reflejara en un prisma. Los versculos 10 y 11 dicen: El cetro no ser quitado de Jud, ni la vara de autoridad de entre sus pies, hasta que venga Siloh; y le obedecern los pueblos. Atando a la vid su borriquillo y a la cepa la cra de su asna, lava en vino su vestidura y en sangre de uvas su manto. En la teologa cristiana y en el judasmo, se ha intentado negar por completo la doctrina de los postreros tiempos. Martn Buber, un catedrtico judo considerado como erudito en dilogo religioso, me relat en cierta ocasin en una conversacin privada, una antigua ancdota referente a la bendicin de Jacob: El Espritu Santo se apart de Jacob, segn se cuenta, cuando mencion los postreros das. Personalmente, explic Buber, yo rechazo totalmente la escatologa [la doctrina de los postreros tiempos]. La escatologa no es historia, ni la historia es escatologa. Los profetas no eran adivinos; ellos deseaban revelar54

lo que era necesario y pertinente para su propia poca, as como Dios desea revelarse en cada poca segn nuestras necesidades. Bien puedo comprender la actitud de Buber. Me recuerda las palabras que se encuentran en los Rollos del Mar Muerto, que los profetas registraban de las visiones que reciban, nicamente aquello que es necesario para la Humanidad. 25 An el Midrash Rabbah sostiene que, Jacob quiso revelar los postreros tiempos, pero se le ocultaron.26 Pero, podremos demostrar cosa alguna respecto al trasfondo histrico de esta bendicin? Ser posible que realmente tuvo su origen en tiempos de Jacob, o es posterior? Los relatos patriarcales son meros cuentos, como algunos exegetas modernos a veces afirman abiertamente? Qu reportan los Targumes, Midrash y la literatura rabnica acerca de su naturaleza Mesinica? El arquelogo W. F. Albright ha hecho algunas observaciones interesantes sobre la bendicin de Jacob. l afirma que por supuesto, no fue escrito antes del siglo XI a. de C, sin embargo, se deriva de una tradicin mucho ms antigua.27 Actualmente sabemos de los llamados textos Mari de Mesopotamia, grabados en ms de 20,000 tablas de barro.28 Albright muestra por medio de las descrip- ciones de sacrificios de mulas en el texto Mari, que las mismas tres palabras para cra de asna en la bendicin de Jacob, se encuentran en el norte de Mesopotamia, incluso en el mismo orden. Igualmente la frase, sangre de uvas imita una antigua expresin Ugartica sangre de rbol que se aplicaba al vino. Siendo as, la bendicin de Jacob se basa en una tradicin muy antigua. Si tomamos en cuenta el hecho de que el rey Hammurabi de Babilonia conquist y destruy la ciudad de Mari en 1759 a. de C. segn clculos promedios, o en 1695 a. de C. segn la estimacin tarda, no hay ninguna razn para dudar que, desde un punta de vista lingstico, la bendicin de Jacob data del tiempo del mismo Jacob. El muy conocido orientalista E. W. Hengstenberg menciona los poetas arbigos Lebid y Hareth, el25. Masechet Megilah 14a. 26. Midrash Bereshith Rabbah par 98.

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27. W.F. Albright, The Biblical Period from Abraham to Ezra, New York 1963, p12. 28. A. Malamat, Mari and the Bible. A Collection of Studies, Jerusalem 1977 artculos en hebreo y en ingls.

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primero de los cuales compuso una poesa en su lecho de muerte a la edad de 157 aos, y el ltimo recitaba poesa cuando tena 135 aos de edaduna edad muy avanzada, an cuando resultaba haber alguna exageracin en cuanto a su longevidad. Con el incremento en la capacidad de la humanidad para leer y escribir, se ha presentado una correspondiente disminucin en la capacidad para la memorizacin. La bendicin de Jacob no se presta para ser disecada por los mtodos modernos de crtica.29 La exgesis cristiana ha considerado desde los tiempos de Justo Mrtir, a mediados del siglo II, que la bendicin de Jacob es Mesinica. El entendimiento judo Mesinico de este texto se basa en material ms antiguo. Targum Onquelos dice sobre el cetro de Jud, que no se apartar hasta que venga el Mesas, el que tiene poder para reinar. Targum Jonatn asegura que el ver- sculo se refiere a la poca del Mesas-Rey, el Rey que vendr como el menor de sus hijos. Targum Yerushalmi habla del tiem- po cuando vendr el Mesas-Rey. La literatura Midrash asigna a la bendicin rasgos adicionales basados en la naturaleza del idioma hebreo. Midrash Rabbath afirma que: El cetro no se apartar de Jud...hasta que venga (l) Siloh, este es el Mesas-Rey...el cetro de Jud significa la Gran Sinagoga, el Sanhedrn, el cual fue golpeado y cay...hasta que venga Siloh. En relacin con esto, los Sabios comentan asuntos como la genealoga del clebre Rab Hillel, y declaran que, Se encontr una tabla genealgica en Jerusaln que deca que l descenda de David. l atar su borriquillo a la vid, contina el Midrash, significa la ciudad que l ha escogido [la extraa palabra . yroh usada aqu para asna o cra de asna suena igual a . yr su ciu- dad, i.e. Jerusaln]. Luego sigue una observacin aterradora: Rab H. anin dijo que Israel no necesitar de la enseanza del Mesas-Rey, porque en Isaas 11:10 est escrito: En aquel da los Gentiles buscarn a la raz de Isa, pero no Israel. Si esto es as, para qu vendr el Mesas-Rey?, y

29. E.W. Hengstenberg, Cristologa del Antiguo Testamento, p28.

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qu har? Har volver a Israel de su dispersin y les dar 30 preceptos [nuevos].30 El comentario conocido como El Regalo Sacerdotal explica lo que esto significa desde la perspectiva de la Torah o Ley: El Mesas-Rey claramente les explicar la Torah y los errores en los que han cado hasta ahora...Los 30 preceptos son ordenanzas que las naciones del mundo debern observar.31 Cabe sealar que el Midrash duda que Israel reciba las enseanzas del Mesas. Al mismo tiempo se contempla la posibilidad de que los rabinos pudieran haberse equivocado. Generalmente se sostiene estrictamente que aun las palabras de los discpulos de un rabino son dadas por el Espritu Santo y que el temor de un rabino es lo mismo que el temor de Dios. Esto se concatena psicolgicamente con la relacin del hijo con los padres: As como se le ordena al hombre que respete y tema a su padre, as debe respetar y temer a su rabino ms que a su padre.32 Este es el punto que indirectamente se enfoca en Marcos 7:913, donde vemos que Jess se opone a la costumbre rabnica de liberar a la persona de sus deberes para con sus padres si da una ofrenda Corbn para el Templo. De esta manera se invalidaba la Palabra de Dios por las tradiciones de los hombres. El Midrash llega hasta el extremo de aseverar que: ...todas las decisiones que en el futuro se emitan por los eminentes eruditos, ya existan y fueron comunicados como ley a Moiss desde el Sina.33 Midrash Tanh. uma propone lo siguiente en su comentario sobre la porcin de Jud en la bendicin de Jacob: Por qu te alaban tus hermanos, Jud [v.8]? Porque todo Israel sera llamado judos por ti; y no slo por esa razn, sino tambin porque el Mesas ser tu descendiente, el que salvar a Israel; como est escrito: Un retoo brotar del tronco de Isa (Is. 11:1).34 Y, en efecto, en todo rincn de la tierra donde encontramos30. Midrash Bereshith Rabbah par. 98. 31. Matanoth Kehuna, seccin correspondiente. 32. Hilchot Talmud Torah 10:5. 33. Midrash Qoheleth Rabbati 1. 34. Midrash Tanh. uma, Bereshith vayehi, 64.

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judos, encontramos en ellos un pueblo que fue llamado para dar a conocer la venida de Cristo y su obra redentora. El Midrash Rabbah sobre Lamentaciones, uno de los seis Midrash ms antiguos, habla de Israel como una virgen, la hija de Jud. Adjunta a esto un largo comentario, que tambin aparece en el Talmud, sobre el nombre del Mesas y termina con la palabra Siloh de la bendicin de Jacob. Lamentaciones 1:1517 dice: Como lagar ha hollado el Seor a la virgen hija de Jud. Por esta causa lloro...Se alej de m el consolador...Sion extendi sus manos; no tiene quien la consuele. El Midrash ampla sobre estas palabras como sigue: Mis ojos rebosan con lgrimas, pues no hay quien me consuele, nadie que restaure mi espritu, as se le llama a Israel ojo del Santo...El consolador que restaurar mi espritu est lejos de m; y cul es el nombre del MesasRey?...El SEOR es su nombre, porque Jeremas 23:6 dice: Y este es su nombre por el cual ser llamado: El SEOR, jus- ticia nuestra...El RENUEVO es su nombre, porque Zac. 6:12 declara: He aqu un hombre cuyo nombre es Renuevo, porque l brotar del lugar donde est... CONSOLADOR es su nombre porque est escrito: El consolador est lejos de m. Luego el Midrash introduce tambin el nombre LBANO, que se refiere al Templo, porque Is. 10:34 dice: El Lbano caer con estruendo. SILOH es su nombre, porque est escrito en Gnesis 49:10: Hasta que venga Siloh... CLEMENCIA es su nombre, porque Jer. 16:13 dice: Porque no os mostrar clemencia... YINNON es su nombre, como dice el Salmo 72:17: Antes de que fuera el sol, su nombre era Yinnon. (Es decir, que brote)35 El nombre del Mesas, sostienen los rabinos, es una de las siete

35. Midrash Rabbah De-elcha 1:16. Vase tambin Sanhedrn 98b. 36. Pesah. im 54a y Nedarim 39b.

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cosas que fueron ordenadas antes de la creacin.36 Estos nombres describen la naturaleza de la misin del Mesas. Si no tomamos en cuenta la mentalidad Bblica detrs de estos conceptos, bien pudiramos concluir, como cierto crtico, que son enigmticos o medio-humorstico.37 No obstante, es precisamente aqu donde podemos ver toda la gama de la expectativa Mesinica juda ms temprana. Pero, qu significa la frase hasta que venga Siloh? Los eruditos judos encuentran significados para la palabra hebrea Siloh que son desconocidas para la teologa cristiana. Algunos ven en ella la raz shlv que significa pacfico, y de esa se puede derivar shlva, paz. En otras palabras el Mesas es el Prncipe de Paz. Algunos eruditos sostienen que siloh en su forma original era moshl, su gobernante, haciendo del Mesas el Gobernante de Naciones. RaSHIel principal exegeta del AT y del Talmud en la Edad Media, quien tambin tuvo un afecto particular por los Targumesdice de Siloh, que: l es el Mesas-Rey y su (shelo) es poder soberano. As entendi el asunto Onquelos. El Midrash lo explica con las palabras shai loh, regalos para l, porque el Salmo 76:11 dice: Traigan ofrendas al Temible.38 De modo que el concepto de el que ha de ser temido, MORAH, tambin vino a ser un apelativo para el Mesas. Los evangelios nos dicen ac y all, que los que escucharon a Jess tuvieron gran temor.39 Cuando los rabinos empiezan a descifrar las pistas secretas de la Biblia, los remazim, desean al mismo tiempo reforzar ideas que ya existen en la sinagoga. En uno de estos mtodos de interpretacin, conocido como gematria, el valor numrico de las letras de las palabras se contaban y luego se comparaban con otras palabras que tuvieran el mismo valor. Este mtodo se basa en la afirmacin de Sabidura de Salomn 11:22: Dios ha preparado todo conforme a medida, nmero y peso.

37. S. Mowinckel, He That Cometh, p293enigmtico o medio humorstico. 38. Mikraoth Gedoloth, seccin correspondiente. 39. Lucas 5:26, 7:16: 8:25 y 37.

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Pero, qu descubrieron los sabios respecto a la idea de Siloh con la ayuda de su gematria? El valor numrico de que venga Siloh, yav shilh, es 358, que corresponde exactamente al de mashiah. , Mesas. El valor gematria de nah. ash, serpiente, tam- bin es 358. Gottlieb Klein escribi que en trminos del Qabbalah mstico judo, esto significaba que el Mesas haba de aplastar la cabeza de la serpiente.40 Semejantes observaciones no tienen ninguna base cientfica, pero ilustran el entendimiento que los rabinos tenan de que el Mesas conquistara la corrup- cin del pecado. Esta misma expectativa se refleja en I Juan 3:8: Para esto apareci el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. Qu importancia tienen las imgenes de la Asna y la Vid? El Talmud y el Midrash Tanh. uma han dedicado particular aten- cin a los smbolos del asna y la vid en la bendicin de Jacob. Generalmente se entiende que la vid representa a Israel, y la extraa palabra para asna, . yrh, a su ciudad (heb. ciudad = . yr, su ciudad = . yr), en otras palabras Jerusaln, a donde ha de llegar el Mesas. Ambas palabras tambin se entienden en su sentido primario. Al comentar sobre el asna, se hace referencia a Moiss, quien tom a su esposa y a sus hijos y los puso sobre un asna (Ex. 4:20) e igualmente al segundo Moiss, el Mesas, humilde, y cabalgando sobre un asno, sobre un pollino hijo de asna (Zac. 9:9). As se humillar el Mesas.41 Nuestro Rab Abdas describe la bendicin de Jacob de la siguiente manera:42 El Mesas no vendr sobre un caballo de guerra, pues es el Rey de Paz...Por otra parte, atar su pollino a una vid, dando a entender que su reino de paz gobernar en Israel, que se compara con una vid...Y cuando se de a conocer que viene en paz, entonces las naciones le obedecern...Y los

40. Gottlieb Klein, Sex fredrag, p113.

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41. Vase ej. Strack-Billerbeck 1, pp842-3. 42. Mikraoth Gedoloth, Sipureinu, la explicacin de Nuestro Rab Abdas.

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dbiles que hayan quedado atrs, le oirn y volvern a l. En el Talmud se dice que si alguien sue