7
NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco nos ha dejado físicamente, pero la semilla que ha sembrado a lo largo de años como pastor va a seguir dando abundante fruto. Es así porque ha vivido la experiencia de Dios en una síntesis perfecta entre fe, razón, filosofía y teología, espiritualidad y misticismo, por encima de dificultades, incomprensiones y críticas, que de todo ha habido en una Iglesia que no siempre le acogió… Tenemos la seguridad de que aunque pasen los años va a estar presente en el Instituto Superior de Pastoral, al que tanto ha querido y al que ha dedicado tanto tiempo. Los testimonios que recogemos en estas páginas muestran que ha sido sabio, profeta, maestro, bondadoso, delicado, cercano, amigo, humilde…, pero por encima de todo: un hombre de Dios NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 1

Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

  • Upload
    others

  • View
    3

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020

Juan, un hombre de DiosSe ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida.

Juan Martín Velasco nos ha dejado físicamente, pero la semilla que ha sembradoa lo largo de años como pastor va a seguir dando abundante fruto.

Es así porque ha vivido la experiencia de Dios en una síntesis perfecta entre fe, razón,filosofía y teología, espiritualidad y misticismo, por encima de dificultades,

incomprensiones y críticas, que de todo ha habido en una Iglesia que no siempre le acogió…Tenemos la seguridad de que aunque pasen los años va a estar presente

en el Instituto Superior de Pastoral, al que tanto ha queridoy al que ha dedicado tanto tiempo. Los testimonios que recogemos en estas páginas

muestran que ha sido sabio, profeta, maestro, bondadoso,delicado, cercano, amigo, humilde…,

pero por encima de todo: un hombre de Dios

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 1

Page 2: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

n ANTONIO ÁVILA CEDE EL TESTIGO A LORENZO DE SANTOS

Cambios en la dirección del Instituto

El Instituto Superior de Pastoralen su larga historia se ha carac-

terizado por su opción por lo comu-nitario, por la participación y lacorresponsabilidad en su modo deproceder, por generar espacios defraternidad, diálogo y cultura delencuentro en el contexto de unasociedad increyente. Esta opción leha llevado a encarar con serenidady creatividad dificultades que pare-cían insalvables cuando éstas hanido apareciendo y en esta tarea hansido fundamentales sus directores.En este curso, por razones de sujubilación, ha dejado de serloAntonio Ávila, cediendo el testigo aLorenzo de Santos Martín, quegenerosamente lo ha acogido.

Antonio empezó su tarea como pro-fesor en el curso 2000-2001 compa-ginándola siempre con la actividadpastoral en barriadas popularescomo Getafe o Aluche, entre otras.Su rica síntesis entre Teología yPsicología no lo es solo en el ámbitode los contenidos, sino que estáincorporada con gran profundidad asu persona, a la empatía y la hondu-ra que le caracterizan, tanto en eltrabajo docente como en el arte deacompañar, en el que es todo unmaestro.

Ha sido director del Instituto dosveces. La primera entre los años2006-2011, cuando cesó en estatarea José Luis Corzo. La segundaen 2015-2020, sustituyendo a JoséLuis Segovia. En su trabajo comodirector ha bregado con numerosasdificultades a la vez que ha sabidotambién captar las oportunidades,optando siempre por tender puen-tes, y buscar alternativa desde eldiálogo y el contraste con el profe-sorado y los alumnos/as.

Su empeño en la innovación deInstituto, la recepción y difusión delEspíritu de Evangeli Gaudium y ladoctrina del papa Francisco en la

Teología Pastoral, así como conse-guir la ampliación de los espaciosdel instituto, especialmente laBiblioteca y la estabilidad del perso-nal docente, han sido algunas desus contribuciones.

Lorenzo de Santos Martín, se incor-poró al Instituto como profesor invi-tado en el curso 2000-2001, pasan-do a ser encargado de cátedra en el2011-2012. Desde diciembre del2016 es el secretario y desde octu-bre del 2011 coordinador de labiblioteca. Sus esfuerzos porampliar la dotación de sus fondos,así como su organización y trasladoa la nueva biblioteca, a la que, juntocon Sandra, dedicó tantísimashoras y esfuerzos, ha sido una desus grandes aportaciones en estosaños.

Su hacer como biblista y pastoralis-ta identifica bien lo que según elpapa Francisco es la tarea del teólo-go: “no una disquisición catedráticasobre la vida, sino la encarnación dela fe en la vida”.

En febrero del 2020 aceptó congenerosidad la responsabilidad dela nueva dirección del Instituto. Su

cercanía con el profesorado y losalumnos, así como su gran capaci-dad de organización, su carácterresolutivo y empático y su templepara encontrar soluciones a los pro-blemas del día a día, ya sean detipo tecnológico, o de cualquier otrotema, son un aporte imprescindibleen esta familia-comunidad que es elInstituto Superior de Pastoral.

Gracias Antonio, gracias, Lorenzopor vuestra disponibilidad, generosi-dad y buen hacer. Gracias por man-tener siempre la puerta de vuestrodespacho abierta y una escuchadisponible.

Gracias por ser compañeros y“directores todo terreno”, que lomismo ayudáis a instalar un ordena-dor o un enchufe o hacéis unaponencia de apertura para un con-greso.

Gracias porque hacéis verdaderaslas palabras de Jesús: “no he veni-do a ser servido sino a servir” (Mt20, 17-28).

Pepa Torres Pérez

El título de las jornadas de refle-xión teológica del Instituto de

este año 2020, parecía desafiarnosante el “impasse” en el que seencuentra anclada buena parte de laIglesia católica y, en particular, loscentros de reflexión y proposicióncreativa de la fe en medio de la cul-tura actual.

Para atender nuestra realidad actualy llenarla de sentido teologal IzaskunSáez nos ofreció desde la primeraconferencia un análisis y reflexiónética transversal, con una perspecti-va teológica feminista. La culturaactual, ‘exculturada’, con paradigmasquebrados, líquidos, nos abremuchos espacios de perplejidad, allídonde la fe y la cultura se cuestionanmutuamente.

La primera tarde nos deparó unasabrosa mesa redonda donde varioscreyentes cruzaron sus vidas y sumirada a la sociedad desde ángulosdiferentes (periodismo, economía ypolítica), atalayas desde donde otearrespuestas a la extrañeza mutuaentre la fe y la cultura, y dentro de símismas. La diversidad aguijoneabondadosamente la espiritualidad.

Y precisamente desde estos momen-tos de extrañamiento y de asombrofue desde donde Pablo Nicolás nosbrindó unas coordenadas psicológi-cas como itinerario de búsqueda dela identidad humana y cultural, reco-nociendo que es compleja, con múl-tiples aristas y que fluye bidireccio-nalmente entre la persona y la socie-dad.

En la segunda jornada, Ximo nosayudó a contornear los dominios dela fe perpleja, sin temor. Lejos de seruna invitación a paralizarnos en laparadoja o el estupor, nos provocauna mirada abierta, de largo alcance,a los nuevos marcos culturales quenos sugiere nuestra época.

Nuestro desierto personal se trans-forma en espacio fecundo dondedescubrir lo esencial, la chispa deasombro bidireccional que la fe enJesús siempre guarda en la realidadhiriente. Además nos abrió tres ven-tanas por las que asomarnos a laperplejidad: desde las carencias,desde las posibilidades (capacida-des) y la mirada en red (reticular).

Diferente confesión

Después de ahondar la reflexiónmatinal en grupos, la tarde nos rega-ló una enjundiosa tertulia entre her-manos de diferente confesión cristia-na (bautista, reformada, ortodoxa ycatólica). Lidia, Pedro, Marius yPepa, respectivamente, nos propu-sieron desde sensibilidades diversasun camino compartido, donde supe-rar la perplejidad sostenidos por la feen el resucitado. Somos misióncomún, en salida hacia una realidadpoliédrica.

Y concluía la jornada José Mª PérezSoba, con una propuesta radicadaen el Concilio Vaticano II y cargadade misericordia: Superar comoIglesia el atrincheramiento cognitivo(origen de fundamentalismo y retro-pías) y la rendición cognitiva (origende una espiritualidad desencarna-da) para abrirnos al diálogo, a lasabiduría que nace de la búsquedacompartida.

Tras la vivencia de comunión cósmi-

ca en la Eucaristía dimos paso aMarta López que, desde la filosofía ylos cuidados sanitarios, nos invitó acombinar en nuestra mirada la sedde vida, que palpita en toda situacióndifícil o crítica, y la confianza quebrota inagotable del mismoEvangelio. En un precioso racimo deexperiencias y de textos bíblicos fueapuntalando algunas actitudes exis-tenciales imprescindibles para quenuestra práctica pastoral no apaguela ética cristiana.

En la última tarde, siguiendo a laasamblea de exalumnos y amigosdel ISP, el teólogo Carlos Mª Galli,nos regaló una bocanada de airefresco, mirando al futuro con la ale-gría original del Evangelio, de serIglesia sinodal en camino comparti-do, en salida (“credere in”, creer“hacia” Él, y hacia el mundo), la ale-gría de ser Pueblo.

¿Cómo no corresponderle a Jesúsque nos amó tanto para arriesgarsea caminar con nosotros, a fracasaren nosotros, para encender al menosuna pequeña luz en la noche?

En el bautismo hemos iniciado uncamino organizado y corresponsa-ble de servicio al mundo, cuya auto-ridad principal reside en el amor y lacomunión.

L.M. González(Alumnos del Bienio

de Teología Pastoral)

n XXXI SEMANA DE TEOLOGÍA PASTORAL

La perplejidad de la feante la cultura actual

2 3

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 2

Page 3: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

4 5

Habíamos aprendido más o menoseso de que la pastoral consistía

en ser Iglesia “hoy, aquí y con éstos”pero, nunca llegamos a imaginar queesas coordenadas pudieran volversetan caprichosas, raras y únicas en tanbreve espacio de tiempo. Y así, se fil-tró el cambio, imperceptible y despóti-co (como el virus) en nuestro hastaentonces tranquilo y sereno curso2019-2020 en el Instituto Superior dePastoral. Metidos en eso que dema-siado pronto aprendimos a llamar“estado de alarma” resultó que:• el “hoy” se llenó de lo raro, lo pre-

ocupante y lo nuevo, con cifras ynoticias de enfermedad, de muer-te, de miedo.

• el “aquí”, más paradójico quenunca, se vivía entre lo estrechísi-mo del confinamiento y lo anchísi-mo del mapa mundial de la pande-mia.

• y no podíamos no mirar, y por tantono compadecernos, “con éstos”…y con esos, y con aquellos otros,con su drama y el nuestro.

Pregunta obligada en nuestro ámbitode formación: ¿Había espacio para elestudio en tales circunstancias?Porque en contraste veíamos nuestroslibros, apuntes, trabajos pendientes yel tic-tac del reloj académico que conimpasible insistencia hacía su reclamosilencioso. Fue una ocasión pararecordar que “la nuestra era una teolo-gía que no se detenía ante la reali-dad”, que no cerraba los ojos a lamisma ni le torcía la mirada. No se tra-taba de concentrarse en un asépticocubículo intelectual, o de evadirse bur-guesamente sino de aplicar aquí yahora el tan conocido: ver, juzgar yactuar. Así descubrimos que elEspíritu nos estaba señalando a lavez: el curso y esta realidad inédita, enhermosa conjunción, y nos decía:“!Adelante! ¡Seguid!”. Y nosotros,

alumnos y profesores, sin esperar atenerlo todo claro… “seguimos”, nonos paramos.

“Chiringuito online”

Pero, ¿y cómo había qué seguir?pues como tantas cosas de esos díasy del hoy: ONLINE. Sí, lo virtual jugóentonces un papel que bien podría-mos llamar “soteriológico” porque…¡nos salvó el curso!, un curso en elque seguíamos poniendo ilusión, yque a la vez nos salvaría del pesoemocional de días tan malos. Al fin yal cabo tantas cosas de la vida sehabían filtrado ya en lo virtual que, lasclases del Instituto no podían ser laexcepción: “¿aulas virtuales? ¡puesvamos a por ello!”, y en pocos díasestuvo montado “el chiringuito online”.Así, obviando molestias, reparos ydudas nos vimos todos demasiadopronto acostumbrados a eso de links,micros y cámaras, entrar y salir, silen-ciar, chatear, compartir presentacio-nes, grabar y escuchar en diferido. Nosabemos si fue necesidad lo que creóel órgano, o si fue más bien la ilusión,o la terquedad, o un poco de todo, la

cosa es que “seguimos online”, no nosparamos.

Ha sido un curso inimaginable y quedará a luz muchas reflexiones.Quedan como testigos privilegiadosnuestra misma vivencia, cargadoscomo nos vimos de fuertes y variadossentimientos esos días; quedan testi-monios escritos que van más allá deartículos como éste, me refiero anuestros trabajos de fin de curso.Sería interesante un estudio conjuntode tales escritos con el fin de descu-brir la presencia espontánea de lostemas que dominaban nuestra menteesos días, y que todavía hoy en granparte nos acompañan: pandemia y vir-tualidad.

Estas dos palabras fueron, y siguensiendo, signos de una realidad queintentamos iluminar a la luz de laBuena Nueva y de la pastoral. Perosólo podremos iluminar dicha realidadsi aceptamos abrazarla como es, contoda su unicidad e incluso su rareza.

Juan Camilo Valbuena

No voy a hablar de Juan comofenomenólogo o filósofo, de eso

ya se ha encargado gente más exper-ta que yo.

Me cuesta mucho, pero quiero deciralgo de una persona con la que heconvivido durante 40 años, los dosúltimos visitándole en su último hogar,‘La Casa del Clero’.

En el Instituto, cuando era director ytenía su despacho, casi siempre veníaa mi cuartito de la biblioteca, que eramucho más pequeño, pero más aco-gedor y donde podía estar en contactocon profesores y alumnos. Durante supermanencia en el Centro creó, entreotras muchas cosas, el curso deFormación Permanente, la Semanade Teología y la Asociación deAntiguos Alumnos.

Más que un jefe fue un amigo, uncompañero de viaje. Me esperabapara llevarme a casa, ya que vivíamoscerca. Éramos paisanos y ¡hablamosde tantas cosas que no tenían que vercon la teología...!

Me ayudó muchoen un momentoque mi maridoestuvo hospitali-zado, también enalguna dificultadde trabajo.

En las comidasdel Centro tenía-mos mucha com-plicidad y él sedejaba guiar pormi criterio a lahora de seleccio-nar el plato, inten-taba sentarse casisiempre con nos-otros, aunque aveces el protocolono se lo permitía.

En su pueblo natal –Santa Cruz delValle (Ávila)- pusieron su nombre a laCasa de Cultura. Le acompañamosun grupo del Centro y disfrutamosmucho junto a su familia que nos aco-gió y agasajó opíparamente.

La última vez que hablé con él fue eldía de su cumpleaños, casi un mesantes de su muerte y ha sido muy tris-te no poder acompañarlo en su falleci-miento.Podría decir muchas cosas deJuan, pero quede este pequeñohomenaje.

Sandra Sánchez

También nos dejaron…

En estos meses de pandemia también han muerto personasqueridas en el Instituto de Pastoral, entre ellas Ana MaríaArzallus y Juan Bayona.

Ana María Arzallus Merino, alumna del curso de FormaciónPermanente desde casi sus inicios, comenzó en el Curso 1995-96.Laica y funcionaria del Estado, pues sacó una oposición para elMinisterio de Gobernación, con plaza en el Gobierno Civil de Ávila. Allídesempeñó sus funciones durante 18 años. Después pidió su trasla-do a Madrid, al Ministerio de Asuntos Exteriores, y así acompañar asu padre, viudo.Al margen de su actividad profesional, siempre se entregó a losdemás: impartió clases particulares de refuerzo en un colegio, cate-quesis en la parroquia, y colaboró con un sacerdote en Villaverde enun centro para la integración de inmigrantes.No sólo ha sido alumna, también ha colaborado en las actividades dela Asociación de Amigos del Instituto. Ha sido miembro y secretariaencargada de elaborar las actas de las reuniones, tarea que hacíacon una gran generosidad, disponibilidad y rigor. Desgraciadamente la hemos perdido el día 11 de abril, y, como con

tanto otros, no hemos podido acompañarla. Su hermana, que vivíacon ella, sí ha estado a su lado. Asegura que se siente afortunada ycon mucha paz.

Juan Bayona, oriundo de Manresa, llegó a un pueblo cerca dePedraza en 1981.Trabajó incansablemente con los vecinos, acompa-ñándolos con su coche a hospitales y otras necesidades. Alentaba alos jóvenes con su guitarra en la participación de las ceremonias reli-giosas. Pedraza le nombró hijo adoptivo.Siempre quiso ir a misiones y después del fallecimiento de suspadres, su sueño se convirtió en realidad partiendo a Cuba. Allí noayudaba, allí lo daba todo hasta que enfermó y volvió a su entrañableSegoviaVino al Instituto en el año 2010 para hacer Actualización TeológicoPastoral y más tarde en el curso 2014-2015 comenzó el Bienio,haciendo un par de asignaturas por curso, dado su estado de salud.Su poca movilidad no le ha impedido seguir activo, como ser profesorde lengua para un alumno extranjero que está en el Instituto.

Falleció el pasado 28 de marzo.

n QUEDAN COMO TESTIGOS NUESTRAS VIVENCIAS Y TRABAJOS

Un curso entre pandemiay virtualidad

Un compañerode viaje

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 4

Page 4: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

76

Una presencia inolvidable

Comienzo esta brevesemblanza con unas

líneas que escribí al saberde su fallecimiento. Decíaentonces que, en el silen-cio que imponía la amena-za de pandemia y con ladiscreción que le caracteri-zaba, había muerto “ungrande llamativamentehumilde, que ha escritomuchas páginas que sontodo un legado para la teo-logía, la espiritualidad y lapastoral de nuestro tiem-po. De la calidad humanay creyente de este profe-sor, sacerdote y amigo,que ahora descansa en elMisterio (el de Dios) comole gustaba decir, queda unrecuerdo imborrable quese refleja en los numero-sos artículos salidos en laprensa de estos días”.Creo que la emoción del momentono restaba objetividad a estas pala-bras.

Juan no era dado a reconocimientossolemnes ni a otro tratamiento queno fuera el de su nombre de pila. Elvolumen-homenaje publicado en2005 con motivo de su jubilación serefiere desde el título: Nostalgia deinfinito, al fondo de sus aportacionestanto a la fenomenología de la reli-gión como a la teología pastoral o laespiritualidad. La bibliografía reuni-da hasta entonces ocupaba ya 39páginas. Y el número de títulos haido en aumento, pues sólo el des-gaste de los meses finales de suvida mermó su capacidad de decir yde escribir con la justeza de un cas-tellano al que nos ha tenido acos-tumbrados.

Tan solo “aprendiendo a ser creyen-te” se consideraba, aunque pocospudieran sustituirle al tratar del

hecho religioso, de la situación de lafe hoy, de la oración o del fenómenomístico. Como de sus obras y de sutalante personal otros han escrito yseguirán haciéndolo ampliamente,me limitaré a recordar algo de lo vivi-do en el Instituto de Pastoral duranteel tiempo en que Juan MartínVelasco ha sido director y compañe-ro en la docencia. Algo que se sumeal reconocimiento que merecen lapersona y la tarea de un profesor alque muchos lectores de estas pági-nas han conocido y tratado. Y aun-que lo que puedo añadir tiene bas-tante de historia personal, esperoque contribuya a mantener vivo elrecuerdo de alguien que ha sidodecisivo en la andadura del Institutoque le dedica las páginas de esteBoletín.

Consejo y amistadEn los años -ay, lejanos– en que yo

preparaba una tesis sobre el cono-cer por experiencia y sin saber másque de oídas de su autor, encontréla primera edición de El encuentrocon Dios y un artículo de la revistaSurge dedicado a la actitud orante.Un tema sobre el que él ha vueltouna y otra vez, tratado de un modoque me llamó la atención. Desdeentonces, sus libros y artículos hanestado, invariablemente, entre losmás leídos/subrayados de mi biblio-teca personal. En decenios sucesi-vos, y desde luego en la tarea deaprender/enseñar que ha sido lamía, he podido contar con la ayudaimpagable de su consejo y su amis-tad.

En el curso 1988-89, de acuerdo conlos “veteranos” que habían dirigidoantes el Instituto: Casiano Floristán yLuis Maldonado, y con otros profe-sores del equipo, me invitó a formarparte del grupo en sustitución de

n JUNTO A LA FENOMENOLOGÍA DE LA RELIGIÓN, DEJA TODO UN LEGADO PARA LA TEOLOGÍA, LA ESPIRTUALIDAD Y LA PASTORAL DE NUESTRO TIEMPO

Miguel Benzo. Yo venía coincidien-do con Juan en algunos encuentrosy, desde poco antes, en los cursosde la tarde que ofrecía la actualUniversidad Eclesiástica y enton-ces Seminario de Madrid, del quefue rector durante un decenio. Lainvitación suponía proponer laentrada de una mujer en el claustrode la también veterana Facultad deTeología de la Pontificia deSalamanca, de la que este centrode pastoral forma parte. Más ade-lante me encargué también de lasecretaría, en sustitución de JulioLópez Sáinz de Rozas, una vozincreíble que llenaba las celebra-ciones, como recordarán quienesparticiparon en ellas.

En sucesivos mandatos Juan ha lle-vado la dirección con formas sua-ves, respetuosas para con lospareceres –bien distintos a veces-de profesores y alumnos. Pero sindesistir de sus convicciones hondasy del empeño en atender a la reali-dad pastoral en tiempos de cambioacelerado. Con él se inauguraronlas Semanas de Teología Pastoral,que han convocado anualmente acentenares de amigos, alumnos yantiguos alumnos para abordarcuestiones candentes en la socie-dad y en la Iglesia.

Avaló -y lo anoto porque son expre-siones de su apertura- los primeroscursos sobre la historia y la situa-ción de las mujeres en el cristianis-mo; las dos jornadas de prepara-ción de los tiempos litúrgicos, losseminarios abiertos a quienes tra-bajan en parroquias de la diócesis,los dedicados a la pastoral en cár-celes y hospitales, además de losexpresamente pensados para laoración o la música en la liturgia.Las agendas académicas delInstituto ofrecen, ya desde los años60 del pasado siglo, una larga

secuencia de los cursos impartidospor el profesor excepcional que hasido Juan M. Velasco, a juicio desus muchos alumnos y asistentesocasionales.

Sencillez y serenidadBuena parte de lo que ha ido ense-ñando ha quedado recogido en suspublicaciones, conocidas y tantasveces citadas. Porque, asombrosa-mente, Juan lograba encontrar untiempo para escribir a pesar de lacarga docente, las conferencias, los

viajes y la atención pastoral que“encajaba” en su día a día. Todoello con sencillez, con una sereni-dad que se traslucía en su personay que facilitaba la colaboración dequienes trabajábamos a su lado.

En 2017, a modo de entrevistapara la revista Crítica, preparé unaspreguntas sobre sus intereses ybúsquedas. Poco antes se habíanpublicado tres de sus últimos libros:‘Ojalá oigáis su voz’, ‘Vivir la fe a laintemperie’ y ‘Creo en la Iglesia’.Del tercero dice que es “el resulta-do de mis esfuerzos por mantener,a la vez, firme y viva la confesión demi adhesión a la Iglesia y ofrecerpistas para dotarla de significativi-dad en la sociedad actual”. Advertíentonces que, pese a los años, sulucidez no había mermado en abso-luto -lo muestran las repuestas, que

se corresponden con su agudeza alanalizar cuestiones y situaciones-pero que su ritmo de trabajo ibacediendo. Al reeditarla con motivode su muerte, me he atrevido a afir-mar -antes el entrevistado no lohubiera consentido- lo que he ano-tado al comienzo: que nos ha deja-do en herencia, junto a su testimo-nio de vida, un saber profundo, fiela la realidad y esperanzado; el quesólo llegan a trasmitir “los mejores”de entre nosotros.

Muchas cosas quedarán sin regis-tro, aunque duran en el fondo de lamemoria. Porque no es posibleresumir tantos momentos vividosen los que la cercanía, la amistad yel mejor compañerismo han salidoal paso de las dificultades que tam-bién ha conocido la pequeña histo-ria del Instituto.

Añadiré, como último recuerdo, quecuando el decaimiento se acentua-ba en él, en la pasada cuaresma,agradeció vivamente que le llevarala partitura y grabación de un temaque habíamos ensayado en la jor-nada preparatoria de la Pascua: “Yotambién quiero resucitar”, de JuanjoElezkano, alumno del Instituto añosatrás. Con el sentido musical quetambién era notable en él, cantócon cierta emoción los versos quele señalé como mis preferidos:

“Yo también quiero resucitar/ serfeliz toda la eternidad/ y vivir conlos que tanto amé/ una paz que noterminará”

Espero, en el claroscuro de mi“pequeña esperanza”, que esedeseo se haya visto felizmentecumplido. Y que desde esa paz nosacompañe con su presencia.

Felisa Elizondo

Juan ha llevadola dirección con formassuaves, respetuosapara con los pareceres

–bien distintos a veces-de profesores y alumnos.Pero sin desistirde sus conviccioneshondas.

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 6

Page 5: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

98

En el Instituto se han recibidodecenas de muestras depesar y de profunda admira-

ción por Juan Martín Velasco.Alumnos, exalumnos y participantesen la Semana de Teología han testi-moniado la huella que les ha dejadoen su vida como profesor y comopersona. La falta de espacio no nospermite recoger todo lo escritosobre Juan, pero aquí exponemosun muestrario de admiración yagradecimiento.

¡Que grande perdida! Su legadopermanecerá intacto porque lasemilla sembrada por él seguirádando fruto. Me siento afortuna-do de haberle conocido en per-sona. Gracias Juan!

Sevo AgostinhoDamos gracias a Dios por suvida, su obra, su persona, poreste hermano en la fe que ahoraya goza de la nueva vida delResucitado.

Encarnación CuencaLo siento mucho. Coincidí con élsolamente en un descansodurante la Semana de Teologíadel Curso 2018-2019 y me pare-ció que irradiaba bondad y luz.

Clara López ArranzHe sido alumna suya bastantesaños y recuerdo con gran afectosu sabiduría y su gran humani-dad.

Berta Marco StiefelDirigió mi tesina en 1990. Suinterioridad, su vida de comu-nión y de relación con Dios, sudelicadeza y profundidad huma-na, además de su gran prepara-ción en Fenomenología de laReligión, tal vez el mejor en laIglesia europea, enriquecieronmi vida y siempre lo he recorda-do con mucha gratitud y cariño.

Javier NegroDoy Gracias a Dios por tantobien recibido a través de susconferencias y escritos. Hizomucho por acercarnos a una

actualización de la Teología delConcilio Vaticano II.

María José LaínezFue mi profesor. Un hombreexcepcional, un hombre de Dios

Gema CastilloSigo en Francia, pero necesita-ba daros el abrazo que tantasveces di a mi maestro.

Irene Vega... Lo vivo como mi maestro en elInstituto.

Maria da Luz FreireMe uno al agradecimiento por sumaestría teológica y vital. Dios loabraza por la eternidad.

Juan Carlos Moya, ofm¡Generó tanta Vida aquí! quenecesariamente continua gozán-dola y derramándola desde laotra orilla con el Resucitado. Miagradecimiento y el de muchasoblatas que lo conocimos.

Mª Cruz Ciordia (Oblata)Me parecía un sabio, un sabiode Dios que tanto necesitamoshoy. Gracias Juan Martín, tedeseo que vivas ahora lo quetan bonitamente nos enseñabas,pues sin duda lo vivías.

Ramón Eguiluz (Bogotá)Estamos seguros de que yagoza del Señor. Nos deja susonrisa y su saber cristiano..

Josefa Malo Hervás

Un santo, un místico y unsabio... ¡cuánto nos enseño consu vida y su ciencia!

Francisco Perna de DiosJuan, místico y maestro en elcamino de la fe, persona siem-pre cercana y apreciada. Hasido una suerte haberlo conoci-do y escuchado…

Antonio García (Palencia)

En nombre de muchas herma-nas que se han enriquecido nosolo de su docencia sino tam-bién su vida y profetismo,… ysabemos que sigue en el cami-

nar del Instituto fortaleciendosus pasos.

M. Nieves Báez(Misioneras Dominicasde la Sagrada Familia)

Como alumna, doy fe de su grantestimonio de cristiano y profe-ta…Él ha colaborado para hacerel Reino y ahora está viviendo elverdadero Reino, el de Jesús, elCristo. Su paz nos Ilumine elcamino que tenemos que reco-rrer

Mercedes Carrizosa… se ha ido un santo y un sabioa quien echaremos de menos.Desde el Cielo verá nuestrocorazón apenado y a Dios lepedirá que nos consuele....

Teresa Fernández MorenoDomingo de pasión que antece-de al triunfo de la vida. Unidosen la tristeza de este momentopor la muerte de quien ha sidoun referente para todos nos-otros, pido que desde el Misterioen el que con tanta pasión creyóy que ahora contempla congozo, siga unido a nosotros consu intercesión. Se fue comovivió, con la humildad del após-tol que se hace compañero decamino de la humanidad en susmomentos más frágiles.

PascualSaorín Camacho (Japón)

… Ha sido un hombre de fe, muysencillo, un gran teólogo, unexcelente maestro, coherente ypor todo eso ejemplar... Mi fecristiana me hace creer que seencuentra entre los brazos delPadre, con Cristo resucitado, enla gloria eterna.

José Javier Remiro ArbiolRecibiendo la noticia de la muer-te de Juan Martín Velasco doygracias por su vida y toda suentrega para la Iglesia y sucausa. Pedimos a Dios que sumemoria sea de inspiración paracontinuar el testigo que nosentrega para seguir actualizando

la salvación que vino a proponerJesús de Nazareth.

Pablo Modesto González.Obispo de Guasdualito

(Venezuela)Os traslado mi pena por el falle-cimiento y mi agradecimiento alSeñor por su vida, su sabiduríay su fe. Fue una gran suerteconocerle…

Alicia Ramos(Ciudad Rodrigo)

…Siempre quedará en mirecuerdo su sencillez, su dedica-ción al otro y su sonrisa cariñosay acogedora.

Emilio García Ortíz…Nuestro pésame a todos losque formáis este Instituto queJuan tanto quiso y al que dedicótantos esfuerzos.

Carmen MayolLo siento mucho por este granhombre de Dios.

Tino Migliaccio… hay que aceptar que se vaya a

la luz plena que en su vida tras-parentó…Era una lección vivade Evangelio… Yo no era capazde tratarlo de tú por la venera-ción que me inspiraba y recuer-do que una vez me dijo: ¡"De tú,que somos de la misma quinta"!Como hombre, encantador,como sabio y santo, admirable.

Conchita PedrosaPérez-Dávila

Gracias por el anuncio gloriosode su glorificación regresando alseno del Dios Padre-Madre, alque tanto amó y derramó por latierra, presentándolo como elPadre del misterio revelado ensu Hijo y hermano nuestroJesucristo. Dios sea alabado yglorificado en este hijo tan queri-do por muchos y poco apreciadopor otros.

Ricardo Pancorbo

Un hombre con un corazón queentendía la vida y con un enten-

dimiento vinculado al corazón ya la misericordia.

Javier Barbero…intelectual, profesor y un hom-bre de dotes humanas extraordi-narias descanse en paz el profe-sor Martín Velasco. Pérdida gran-de para el Instituto de Pastoral.

José Omar Pareja ParejaLes agradezco la participación dela triste noticia y les expreso micondolencias a profesores, estu-diantes, empleados, exalumnos yamigos del ISP.Murió el maestro que más admiréen vida, en la honesta síntesisentre fe, razón, filosofía y teolo-gía, espiritualidad y misticismo.Murió el humilde intelectualsanto, que marcó vida, pensa-miento y ministerio de tantasgeneraciones de estudiantes deISP, como yo.Dios tiene a Juan de Dios en elreposo y la luz que siempre espe-ró y creyó.

Helder Fonseca Mendes (Vicario General

de las Islas Azores)Os acompaño el sentimiento detan santo y sabio sacerdote y pro-fesor. Como adoratriz le agradez-co su sabia enseñanza y lo ligadoque ha estado a muchas adora-

trices. Hermana Milena Toffoli.

Oramos por él. Esperamos que elSeñor lo ha acogido con su infinitoamor y le damos gracias por todo elbien que de su palabra y enseñan-zas hemos recibido.

Mª Luisa. GuerediainUn recuerdo, cariñoso y esperanza-do para Juan, a quien siempreagradeceré su amistad tan gratuitaque me brindó, su sabiduría llenade sencillez y "santidad" evangéli-cas, y su tenaz fe en medio detodas las tormentas.

Jesús Lapresa…Soy una de las muchas personasque nos hemos beneficiado de susabiduría y generosidad para com-partir sus conocimientos y forma deser… Recuerdo haberle invitado aser uno de los conferenciantes enlas Jornadas que organizaba anual-mente el Club Serra (por FrayJunípero Serra). Cuando le invité air a Jerez en la década de 1980 mepreguntó: “¿Vd. sabe como pien-so?” Y le contesté: “Por supuesto.Vd. puede manifestarse con totallibertad, lo que vendrá muy bien auna audiencia de carácter marca-damente conservador". Se despla-zó y tuvo una muy buena acogida.

Miguel Ángel Lanza

n DEJA UNA PROFUNDA HUELLA EN ALUMNOS, EXALUMNOS Y PARTICIPANTES EN LA SEMANA DE TEOLOGÍA

Un ser humano sabio, maestro, profeta, sencillo, lección viva del Evangelio…

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 8

Page 6: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

1110

Grandeza y humildad ohumildad en la grandeza:fue rasgo destacado en la

personalidad y en la vida deJuan. Solo una gran personapodía ser tan humilde. Solo sugran humildad pudo construir tangran persona.

Humilde en su presencia física.Juan no “inclinaba la cabezacomo un junco”, expresión queutiliza el profeta para definir lafalsa humildad. Tampoco laerguía en un gesto de autosufi-ciencia. Juan solo tenía erguidasu dignidad. La cabeza la inclina-ba siempre en un gesto de respe-to y veneración al otro, para faci-litar el encuentro, el diálogo, laconversación distendida.

Humilde en su palabra. No levan-taba la voz cuando conversaba,cuando predicaba, cuando ense-ñaba. No levantaba la voz paraimponer su magisterio con autori-dad. Más bien, mientras hablaba,predicaba o enseñaba, daba lasensación de estar ahondandoen su pensamiento, en su refle-xión, de estar buscando la pro-fundidad, el humus, la tierrahumilde… a la caza de la sabidu-ría.

Humilde en la verdad. Fielseguidor de Santa Teresa, Juansupo ajustar la verdad y lahumildad. Siempre tuvo lavalentía para ir con la verdadpor delante, para defender laverdad delante de cualquiera. Ylo hizo con gran humildad,sabiendo que muchas vecesarriesgaba su imagen, su buennombre, su “buena” fama. Teníala humildad suficiente paradefender la verdad con toda la

libertad, sin pretender quedarbien ante los demás.

Comprensión con no creyentes

Humilde en su experiencia reli-giosa. No se cansaba de recono-cer las zonas no evangélicas desu propia vida, las regiones nocreyentes de su alma, los huecosno convertidos de su existencia.Desde esta humilde experienciapudo entrar en comprensión,compasión y comunión con nocreyentes, agnósticos, ateos…,hasta hablar de “su parentescocon ellos”. Su humildad intelec-tual y evangélica le permitió sinto-nizar a fondo con la cultura de laincreencia, con la cultura de lasecularidad.

Humilde en la evaluación de lapropia vida y milagros. Porsupuesto que él no solía contarsus éxitos y milagros. Pero cuan-

do alguien se los contaba, eracapaz de relativizarlos con sucaracterístico sentido del humor.En Juan su timidez adquiría laforma de humor. Y el humor seconvertía en un remedio eficazcontra toda tentación de soberbiao de orgullo. Una especie de son-risa infantil era capaz de desha-cer cualquier halago o adulación.¡Singular forma de humildad!

Humilde en la vida y humilde enla muerte. Juan se fue en silen-cio, rehuyendo todo homenaje.Llevaba muy mal los homenajes.Sufría cuando tenía que recibir-los. Prefería el humilde silencio.Así le gustó vivir. Así le gustómorir. Tan grande como humilde.Su muerte fue la última lecciónmagistral de la humildad de Juan.

Felicísimo Martínez, O.P

Suspendida la Semana de Teología

Dadas las circunstancias provocadas por la pandemia Covid-19 se ha decididosuspender la XXXII Semana de Teología Pastoral, que se iba a celebrar la última semana

de enero. Esperamos que en 2022 podamos retomar tan importante acontecimiento.

Asimismo, tampoco se van a celebrar las Jornadas de preparación litúrgicade Adviento y Cuaresma.

Lecturas recomendadas

Desde una perspectiva cristiana, se puede mantener que la compasiónes la auténtica, universal y definitiva manifestación del Dios cristiano.

En este libro, el sacerdote y pastoralista José Ramón Pascual consiguesacar la pastoral de la sacristía y del templo, y la lleva a la calle, dondela mayoría de las personas tienen que jugarse la vida, la identidad, lamisión. También saca la teología de su ensimismamiento y la pone a dia-logar con lo más honesto y exigente de la filosofía moderna y de la culturasecular. “Ya era hora. ¡Qué acierto!”, subraya en el prólogo el dominicoFelicísimo Martínez.

Autor: José Ramón Pascual García.Título: El principio compasión. Vivir desde una ética samaritana.Editorial: PPC, 2020. 304 Páginas

Un doble enigma, tanto universal como cristiano, provoca estaspáginas: ¿en serio valoran la sociedad y los políticos nuestro des-

arrollo personal durante la infancia, la adolescencia y la primera juven-tud en la escuela obligatoria? ¿Y por qué no se llega de una vez al tancacareado Pacto Educativo? ¿Y a la Iglesia también le preocupantodos o solo los suyos y en sus colegios? Hoy la escuela, más que un“lugar privilegiado para la promoción de la persona […], necesita unaurgente autocrítica”, ha dicho el papa Francisco, en referencia a todaslas escuelas, no solo a las ‘católicas’.

Autor: José Luis Corzo.Título: Con la escuela hemos topado.Y unas notas de teología de la educación.Editorial: PPC, 2020.

¿Quién se salva? ¿Cuándo nos salvamos? ¿La salvación llegaexclusivamente después de la muerte? ¿Nos juzgará un Dios

severo o uno misericordioso? ¿Es todo tan sencillo como nos enseña-ron en la catequesis? ¿O necesitamos dar una vuelta al tema de la sal-vación? Sin dogmatismos y en diálogo con la sociedad actual, el padreFelicísimo Martínez ahonda en el tema de la salvación. Un texto paracreyentes, pero también para aquellos que se hacen las mismas pre-guntas desde los márgenes de la fe.

Autor: Felicísimo MartínezTítulo: La salvaciónEditorial: San Pablo, 2019. 344 páginas

TesisFormación para los bau-tizados laicos. Factor decorresponsabilidady renovación pastoral.Alumno: Juan CarlosGuerrero UgaldeDirector: FelicísimoMartínez Díez

TesinasPastoral del duelo: unsigno de los tiempos enla Iglesia.Alumno: FranklinFuentes HuatangariDirector: Antonio ÁvilaBlancoCo-director: José CarlosBermejo Higuera

Pertenencia,modalidades e implica-ciones de la incultura-ción en Benín hoyAlumno: Skyland EucherAdounkpeDirector: Antonio ÁvilaBlanco

Propuesta de una pasto-ral de la reconciliaciónante la situación actualvenezolana en la dióce-sis de “El Vigía SanCarlos de Zulia”Alumno: José NatalinoRendo AbrilDirector: Ignacio MaríaFernández de Torres

n SIEMPRE TUVO LA VALENTÍA DE IR CON LA VERDAD POR DELANTE

Juan: tan grande como humilde

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 10

Page 7: Juan, un hombre de Dios · 2021. 2. 11. · NÚMERO 36 - NOVIEMBRE 2020 Juan, un hombre de Dios Se ha ido con la discreción y sencillez que mostró toda su vida. Juan Martín Velasco

12

Hay personas que nos marcan enla vida, no por imposición sino

por ósmosis. Juan de Dios, desdeque lo conocí me impactó por su sen-cillez y a la vez por la profundidad desu pensamiento y de su vivenciasacerdotal. Los mejores maestrosson los que empapan sin mojar, esdecir, sin imponer. En la sencillez desu porte se traslucía que había unapiedra preciosa dentro que refulgíade profundidad cristiana.

Agradezco haberlo conocido apenasllegué al Instituto a comenzar el doc-torado. De entonces a acá ha trans-currido mucho tiempo, más de cuatrodécadas en la que se decantó unaadmiración cada vez mayor de miparte. Creo, sin exageración, haberleído mucho, pero mucho de lo abun-dante y bueno que salió de la plumay del hondón de su ciencia y de suexperiencia cristiana. Todo rezumaespiritualidad que se transmite conagrado y facilidad.

Tuvimos la dicha de contar con supresencia en la ciudad de Mérida, laandina, en un seminario para losdoctorandos de Antropología de laUniversidad de los Andes. Quedarontodos admirados de su sapiencia,pero sobre todo de su visión ampliade un tema que muchos lo estimanlejano y hasta contrario al auténticopensamiento cristiano. Fue fuente

abundante para algunas de las tesisde grado de los asistentes. Abrióventanas a un pensamiento más uni-versal e interdisciplinar, algo no muycorriente en algunas aulas del saberuniversitario.

No dudo que el pensamiento y laobra de Juan de Dios Martín Velascollenan una página importante en elpensamiento teológico hispano pos-tconciliar y tienen un sello particularque hace del Instituto Superior dePastoral, una casa abierta, siemprependiente de las periferias comoalgo connatural con la reflexión teo-lógica práctica.

Juan de Dios se me antoja un místicode nuestro tiempo. La manera comoasimiló y trasmitió el pensamiento yla vivencia de los grandes místicos

hace cercana la experiencia de unDios, mejor de un Jesús de carne yhueso que nos eleva a la trascen-dencia con los pies en la cotidiani-dad.

Memoria agradecidaSu partida de este mundo, en elsilencio de esta plaga pandémica, enel silencio y la casi ausencia de quie-nes hubiéramos querido estar a sulado, es un reclamo a que en algúnmomento hagamos memoria agrade-cida de su vida y testimonio perennede lo que cada uno de nosotros debeser. Cristiano auténtico, sacerdoteejemplar, investigador acucioso, hijoverdadero de una Iglesia que nosiempre lo acogió, pero de la quenunca se sintió lejano ni excluido.

Agradezco haber bebido en su pozo,haber gozado de su amistad y habercompartido tantos momentos a lolargo de mi vida sacerdotal y episco-pal, que no me queda más que dargracias a mi Dios de haber tocado lavirtud y el bien en su persona. Elsello de su paso por el Instituto debequedar plasmado con su nombre enalguna de sus salas, para perpetuamemoria de las actuales y futurasgeneraciones

Baltazar PorrasCardenal-arzobispo de Mérida

(Venezuela)

n HIJO VERDADERO DE UNA IGLESIA QUE NO SIEMPRE LO ACOGI

Un místicode nuestro tiempo

Edita: Asociación de Antiguos Alumnos, Amigos y Amigas del I.S.P.Dirección: Instituto Superior de Pastoral, Paseo de Juan XXIII, nº 3.

28040 Madrid. Teléfono: 915141700. Fax: 915340983. Correo electrónico: [email protected]

Coordinan: J. Ignacio Igartua y la Asociación de Amigos y Amigas del ISPComp. e impresión: Cobo print. Tel 91 778 54 35. Dep. Legal. Madrid: M.-34479-2003

VISITAD NUESTRAPÁGINA WEB

Si deseáis más informaciónsobre el

Instituto Superior de Pastoral,visitad nuestra página web

www.amigosdelisp.org

NUM.33-2020-2 renglones_Amigos16.qxd 16/11/2020 11:53 Página 12