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SÍGUENOSEN
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Otoñode2015
KimJi-youngtienetreintaytresaños.Secasócuandoteníatreintaytuvouna
hija hace un año.Vive de alquiler en un apartamento de unos ochentametroscuadrados,dentrodeunmegacomplejodeedificiosresidencialesdelaperiferiadeSeúl,consumarido,JeongDae-hyeon,quetienetresañosmásqueella,ysuhija,JeongJi-won.Éltrabajaenunaempresatecnológicanomuygrandeyellarenunció al empleo que tenía en una pequeña agencia de relaciones públicascuandodioaluz.Élvuelvedeltrabajocasiamedianoche,einclusoacudealaoficinalosfinesdesemana,ensábadooendomingo.Ellaseencargadecuidarasuhija,sinnadiequelaayude,porquesussuegrosvivenenBusanysuspadresllevanun restaurante.Laniña,desdequecumplieseunañoelveranoanterior,acudealaguarderíaqueestáenlaprimeraplantadeledificiodondevivenysequedaallítodalamañana.EldíaenqueKimJi-youngmostróporprimeravezunaconductaanormalfue
el 8 de septiembre. Sumarido recuerda la fecha exacta porque erabaekno[1].Esedía,élestabadesayunandounastostadasylechecuandoderepenteellafuehaciaelbalcónyabriólaventana.Habíasuficientesol,perolaventanaabiertadejóentrarelairefríohastaelcomedor.Entoncesvolvióalamesaencogiendoloshombros,sesentóydijo:—Meparecióqueestosdíashabíaunvientofríoporlasmañanas,yhoyyaes
baekno.Losarrozalesdoradosdebendeestarcubiertosderocío.JeongDae-hyeonpensóquesuesposahablabacomounaancianayserio.—¿Quétepasa?Suenasigualquetumadre.—Yerno,llévatesiempreunachaqueta,queporlasmañanasyporlasnoches
refresca.Inclusoentoncescreyóquesumujerestababromeando.Lerecordabamuchoa
su suegra, quien al pedirle un favor o darle consejos guiñaba siempre el ojoderecho,oalargaba la«o»al llamarlo«yerno».Aunqueúltimamente teníaconfrecuencialamiradaperdidaollorabamientrasescuchabamúsica,quizáporlo
agotada que estaba de cuidar a la niña, su mujer era en esencia una personaalegreyjovialqueamenudoimitabaapersonajescómicosdelateleylohacíareír.Demaneraquenoledioimportanciaylaabrazóantesdeirseatrabajar.Esanoche,cuandoregresóacasa,sumujerysuhijadormíanacostadasunaal
ladode laotra.Ambas seestabanchupandoeldedopulgar.Lasmiróunbuenrato,sintiendoternurayperplejidadalmismotiempo,hastaquetirósuavementedelbrazodesuesposapararetirarleelpulgardelaboca.Ellasacólapuntadelalenguayselamióloslabioscomounbebé,perosiguiódurmiendo.Díasdespués,KimJi-youngdijode símismaqueeraChaSeung-yeon,una
compañeradelauniversidadquehabíafallecidounañoantes.Esaamigahabíacomenzadolosestudioselmismoañoquesumarido,osea,tresantesqueella.En realidad, aunque la pareja había asistido al mismo centro universitario yformado parte del mismo club de senderismo, Kim Ji-young y su marido nohabíancoincididoenlaépocaenqueeranestudiantes.JeongDae-hyeonqueríaseguir estudiando después de obtener la licenciatura, pero se resignó ante lasituación económica de su familia y decidió realizar el servicio militarobligatorioalterminareltercerañodecarrera.Trasfinalizarelserviciomilitar,interrumpiólosestudiosduranteunañoparaquedarseencasadesuspadresenBusanytrabajar.Fueentoncescuandoellaingresóenlauniversidadyseapuntóalclubdesenderismo.Kim Ji-young se hizo amiga de Cha Seung-yeon—siempre atenta con las
compañerasmenoresqueella—debidoenparteaqueningunadelasdosteníaen realidad afición por el senderismo. Incluso siguieron viéndose después degraduarse.KimJi-youngysumaridoseconocieronprecisamenteenlabodadeesa amiga común. Cha Seung-yeonmurió a causa de una embolia de líquidoamnióticoaldaraluzasusegundobebé.ElhechoafectóseriamenteaKimJi-young, que para colmo padecía en aquella época una depresión posparto quedificultabasuvidadiaria.Cuando,trasacostaralaniña,sesentaronjuntosalamesaporprimeravezen
mucho tiempo, después de acabarse la primera lata de cerveza,Kim Ji-youngtocóderepenteelhombrodesumaridoyledijo:—Oye, tuesposa, Ji-young,debedeestarpasandoporunmalmomento.Es
probablequeseestérecuperandofísicamente,perosienteunapresiónemocionaltremenda.Dilequeloestáhaciendomuybien,queentiendesloduroqueessermadre.Dalelasgraciasmásamenudo.
—¿Qué te pasa?—le preguntóDae-hyeon—. ¿Estás teniendo algún tipo deexperiencia extracorporal? Ay, sí, vale. Lo estás haciendo todo muy bien, Ji-young.Entiendoquedebedeserduroparati.Yteloagradezco.Tequiero.Pellizcó suavemente el cachete de su mujer en un gesto de cariño. Sin
embargo,ella sepusoseriaygolpeó lamanodesumaridoparaalejarladesumejilla.—¡Oye, tú! ¿Todavía te crees que soy la Seung-yeon que se te declaró
temblandoaquelverano?Jeong Dae-hyeon se quedó petrificado. Su mujer se refería a un hecho de
hacíacasiveinteaños.Unhechoquehabíatenidolugarunatardedesolradianteenplenoverano,enmitaddeuncampodedeportes,enelquenohabíalamásmínimasombra,nisiquieradeltamañodeunapalma.Norecordabacómohabíallegadoallugar,tansoloquesetopóallícasualmenteconChaSeung-yeonyellase le declaró. Le confesó su amor sudando, con labios temblorosos y entretitubeos.Peroenseguidaadvirtióqueélsesentíaincómodoyseresignó.—Ah,quenotegusto.Entiendo.Olvidemosloqueacabadesuceder.Nadade
estohapasado.Volveréatratarteigualqueantes.A continuación cruzó en diagonal el campo de deportes, con paso firme, y
desapareció. Desde ese día la muchacha se comportó como si nada hubieseocurridoyélacabóporpensarquequizánohabíasidomásqueunaalucinaciónprovocada por el exceso de calor. El caso es que en absoluto recordaba laanécdota,yahorasumujerestabahablandodeello,dealgosucedidoveinteañosatrásduranteunatardesoleadayquesoloélyladifuntaamigasabían.—Ji-young…Nopudodecirmás.Pronunciósunombreunastresvecesseguidas.—Oye,tío.Séqueeresunbuenmarido,perodejayadenombraratumujer.Esa era la forma de hablar de Cha Seung-yeon cuando estaba ebria: «Oye,
tío».AJeongDae-hyeonselepusieronlospelosdepuntaysintióunaespeciedepicorenelcuerocabelludo.Lepidióvariasvecesasumujerquenobromeara,altiempoquefingíaserenidad.Elladejólalatadecervezasobrelamesa,entróenelcuartosinsiquieracepillarselosdientesparaacostarsejuntoasuhijaycayódeinmediatoenunsueñoprofundo.Mientrastanto,élsacóotralatadecervezade la nevera y se la bebió de una sentada. ¿Había sido una broma? ¿Estaríaborracha?¿Oseríauncasodeposesión,comolosquesalíanenlatele?Alamañanasiguiente,KimJi-youngselevantófrotándoselassienes.Parecía
no recordar nadade lo sucedido la noche anterior.Sumarido concluyóque elculpablehabríasidoelexcesodealcoholysesintióaliviado.Esosí,pensaren
esasupuestaborracheraterribleledioescalofríos.Enrealidad,nosepodíacreerque sumujer se hubiera puesto como una cuba y hubiera sufrido una lagunamental.Tansolosehabíabebidounacerveza,pensaba.Losextrañossíntomascontinuaron.KimJi-youngempezóaenviarmensajes
llenosdeemoticonoscursis,cosaqueporlogeneralnohacía,yaprepararplatoscomocaldodehuesosofideosconverdurassazonadosconsalsadesoja,azúcary aceite de sésamo, que ni eran sus propias recetas ni le gustaban.Así, JeongDae-hyeon laveíacadavezmáscomoaunadesconocida.Yanoera lamismamujerconquienhabíavividodosañosdeapasionadonoviazgoyotros tresdematrimonio, ni la persona con la que había compartido conversacionesincontablescomogotasdelluviaycariciastansuavescomolanieve,nilamadredesuhija,queseparecíaaellayaélporigual.Pormuchoqueseesforzaba,nolaveíadelamismamanera.LabombaexplotócuandofueronacasadelossuegrosporChuseok[2].Jeong
Dae-hyeon pidió el viernes libre y la familia salió en coche a las siete de lamañanaparallegaraBusanencincohoras.Nadamásllegar,comieronconlossuegrosyél,cansadodeconducirdurantetantashoras,seechóunasiesta.Antes,cuandohacíanesosviajeslargos,laparejaseturnabaparaconducir.Perodesdeelnacimientodesuhijaélseencargabadelcochemientrassumujeratendíaalaniña,quellorabayseirritabaenesostrayectos,comosinosoportarapermanecerinmóvil en el asiento para niños. Lamadre la entretenía, le daba de comer ycalmabasuspataletas.Despuésdelavarlosplatos,KimJi-youngsetomóuncaféydescansóunrato.
LuegofuealmercadoconsusuegraparacomprarlonecesarioparalacomidadeChuseok.Por lanochepreparóel caldodehuesos,marinó la carne, limpió lasverduras, unas para hervir y sazonar y otras para guardar en el congelador yreservóotrasparacocinarlasconmariscoentortillasyfrituras.Tambiénsirviólacena,comió,recogiólamesaylavólosplatos.Al día siguiente, Kim Ji-young y su suegra estuvieron toda la jornada
trabajandoenlospreparativos.Hicieronlastortillas,frieronelmarisco,guisaronlacarnemarinada,amasaronpastelesdearrozrellenostípicosdeChuseoky,almismo tiempo, sirvieron el desayuno, el almuerzo y la cena. La familia pasómomentosagradablescompartiendolacomidareciénhecha.Laniñaseganóelamordesusabuelosalmostrarsecariñosayabrazarlossintimidez.EltercerdíaencasadelossuegroseraChuseok,peroapesardelafestividad
nohabíademasiadoajetreo,porquede laceremonia tradicionalenhonora losancestrosseencargabaunprimoquevivíaenSeúl.Todalafamiliadurmióhastatarde. Desayunaron parte de los platos preparados el día anterior y, cuandoestabanterminandodelimpiar,llególafamiliadesucuñadaSu-hyeon,dosañosmenorquesumaridoyunañomayorqueella.SucuñadavivíaenBusanconsumaridoysusdoshijos,al igualquesussuegros.ComoelsuegrodeSu-hyeoneraelprimogénitodelafamilia,ellaseestresabamuchísimodurantelasfiestaspor la gran cantidad de comida que había que preparar para recibir a tantosinvitados.Poreso,cuandollegóacasadesuspadres,cayómuertadecansancio.Entonces,KimJi-youngysusuegraprepararonunasopademalangaabasedecaldo de huesos, arroz, guarniciones de verduras y pescado frito para elalmuerzo.Después de la comida y de recoger la mesa, la cuñada de Kim Ji-young
desplegó una variedad de vestidos multicolores, horquillas, calcetines conencajesyuntutúparasusobrina.Ellamismaadornóelpelodelaniñaconunahorquilla y le puso los calcetines, al tiempo que aseguraba que ella tambiéndeseaba tener una hija y que las hijas eran lo mejor.Mientras tanto, Kim Ji-youngpelóy cortóunamanzanayunapera, pero todosdijeron estar llenosynadielastocó.Despuéslesofreciósongpyon,lospastelesdearroztípicosdelafiesta,ysolosucuñadacogióuno.—Mamá,¿hashechoestoencasa?—Porsupuesto.—Perotedijequenoprepararastantacomida.Nisiquieraelcaldodehuesos.
Puedes comprar las tortillas en elmercado, y los songpyon también. ¿Por quéhacertantacomidasisolosomosnosotros?Esdemasiadotrabajoparati,mamá,ytambiénparaJi-young.Poruninstante,latristezainvadióelrostrodelamadre.—¿Acasoestrabajoprepararcomidaparalafamilia?Lagraciadelasfiestas
es eso, reunirnos todos, preparar comida y compartirla —súbitamente, lepreguntóasunuera—:¿Paratihasidomuyduro?Las mejillas de Kim Ji-young se enrojecieron. La expresión de su cara se
suavizóysumiradasevolviómástierna.Sumaridotuvounmalpresentimiento.Sinembargo,antesdequepudieracambiareltemadeconversaciónodetenerasumujer,estacontestó:—Ay,consuegra,enrealidadmihijasiempreenfermadespuésdelasfiestas.Duranteunmomentonadierespiró.Fuecomosi lafamiliaenterasehubiera
quedadoinmóvilsobreunenormeglaciar.Su-hyeon,lacuñada,exhalóunlargo
suspiro.Elvahoblancosedispersó.—¿No, no…,no hay que cambiarle el pañal a la niña?—JeongDae-hyeon
tomóasumujerdelamano,peroellaloapartódeungolpe.—¡Yerno! No seas así. En las fiestas te quedas durante todo el puente en
Busanyenmicasasoloestásunascuantashoras.Esteañovenunpocoantes.Y,denuevo,guiñóelojoderecho.Enesemomento,elhijodeseisañosdela
cuñadadeKim Ji-young se cayódel sofámientras jugaba con suhermanitoyempezóallorar,peronadiepudoconsolarlo.Elniño,trasmirarasualrededorynotar la turbación de los mayores y el aire enrarecido del ambiente, dejó desollozar.Elsuegrogritó:—¿Quéestápasandoaquí?Ji-young,¿cómoesque tecomportasasídelante
de tus suegros?La familia solo se reúneunaspocasvecesal año…¿Acaso temolestapasarlasfiestasconnosotros?Dime.—Papá,noeseso…—contestóJeongDae-hyeon,endefensadesumujer.Sinembargo,nosabíacómoexplicarloqueestabaocurriendo.Entonces,ella
loapartóydijoconserenidad:—Señor,quizánomecorrespondaamídecirleesto,pero¿soloustedessonla
familia?Nosotrostambiéntenemosfamilia.Mishijostampocotienentiempodeversemásalládelasfiestas.Todosvivenocupados.Delmismomodoquesuhijavieneasucasa,deberíadejaralamíaestarconmigo.JeongDae-hyeon le tapó labocaasumujery lasacóaempujonesfuerade
casadesuspadres.—Estáenferma,papá.Mamá,papá,Su-hyeon,oslodigodeverdad.Noestá
bien.Osloexplicodespués—añadióalsalir.Así,laparejaysuhijasesubieronalcochesinnisiquierahabersecambiado
de ropa. Mientras su marido tenía la cabeza apoyada sobre el volante,desesperado,KimJi-younglecanturreabaalaniñacomositalcosa.Sussuegrosnosalieronadespedirse.Solosucuñadalossiguióylosayudóameterlascosasenelmaletero.—Tienerazón.Hemossidomuydesconsiderados.Notepeleesconella.Note
enfades.Muéstrateagradecidoydileloquesientes.¿Deacuerdo?—Mevoy.Hablaconpapápormí.Jeong Dae-hyeon no estaba enfadado. Estaba desconcertado, confundido,
asustado.Visitóaunpsiquiatra,élsolo,paraconsultarleacercadelestadodesuesposa
ybuscaralgúnremedio.Asumujer,quenoeraconscientedelossíntomasquemostraba, le recomendó acudir a la consulta, alegando que no dormía bien yestaba agobiada. Ella se lo agradeció. Confesó que en los últimos tiempos sesentía decaídayno tenía ganasdenada, pensabaquequizápadecía depresiónposparto.
1982-1994
KimJi-youngnacióel1deabrilde1982enunaclínicaginecológicadeSeúl:
midió 50 centímetros y pesó 2,9 kilos. Por aquel entonces su padre erafuncionariopúblicoysumadre,amadecasa.Teníaunahermanadosañosmayorqueella,ycincoañosdespuésnaciósuhermano.Lafamilia,deseismiembrosincluyendoasuabuela,vivíaenunacasadeunostreintametroscuadradoscondoshabitaciones,unasaladeestarconcocinaintegradayunbaño.ElrecuerdomásantiguoquetieneKimJi-youngeseldeellacomiéndosela
lecheenpolvodesuhermanito.Tendríacincooseisaños,dadoquele llevabacinco a su hermano. No era gran cosa, pero le parecía deliciosa la leche enpolvo;cadavezquesumadrelapreparaba,secomíalassobrasdelsuelo,conlosdedosmojadosensaliva,sentadaalladodeella.Aveces,sumadreleechabalacabezahaciaatrás,lehacíaabrirlabocaylevertíaunacucharadadeesepolvodulce y sabroso directamente sobre la lengua. Entonces, las partículas semezclabanysederretíancon lasalivapara luegoformaruncoáguloglutinososimilaralcarameloy,finalmente,sedeslizabanporlagargantaydesaparecían,dejándoleenlabocaunaextrañasensaciónquenoeranisecaniácida.Suabuela,sinembargo,detestabaqueellasecomieralalecheenpolvodesu
hermano. Si le pillaba haciéndolo, le pegaba tan fuerte en la espalda queterminabaporescupirlatodaporlabocaylanariz.Suhermana,queeradosañosmayor que ella, nunca había vuelto a comer leche en polvo después de lasregañinasdelaabuela.—¿Atinoteparecequeestáricalalecheenpolvo?—Síqueestárica.—Entonces,¿cómoesquenotelacomes?—Eshumillante.—¿Cómodices?—Eshumillante,poresonolacomo.Kim Ji-young no sabía exactamente qué significaba la palabra humillante,
perointuyócómosesentíasuhermana.Sabíaquesuabuelalaregañabanosoloporquenoestabaenedaddecomerlecheenpolvooporqueseterminabaloquele correspondía a su hermanito. Comprendía que todo lo que provenía de suabuela,desdesu tonodevoz, laposicióndesucabezaysushombroshasta larespiración,emitíaenconjuntounmensajeque,sibieneradifícildesintetizarenunasolafrase,lerecriminabaqueseatrevieraacodiciarloquepertenecíaasunietovarón.Suhermanoytodolosuyoeravaliosoy,portanto,noeraaccesiblea cualquiera; y Kim Ji-young se sentía menos que cualquiera. Igual que suhermana.Lareglaindiscutibleenlacasaeraservirelarrozreciénhechoasupadre,asu
hermanitoyasuabuela,siempreeneseorden;eltofu,lasempanadillasdecarneyverdurasylastortillasdecarneconsusformasperfectasibandirectamentealabocadesuhermano.Noerararoquelasniñassequedaransoloconlassobras.Tambiénerahabitualquesuhermanodisfrutaradeparesperfectosdepalillosyde calcetines, así como de juegos de ropa interior y carteras para la escuela,mientrasqueKimJi-youngysuhermanaseconformabanconloqueeradispar.Sihabíadosparaguas,unoerasiempreparasuhermanoyellasdebíancompartirelotro.Sihabíadosmantas,unaeraparasuhermanoylaotraparaellas.Ysilamerienda no daba para todos, la mitad se la comía su hermano y ellas serepartían el resto. En realidad, de niña, Kim Ji-young nunca pensó que suhermano recibieraun tratoespecialy jamás lo envidió.Enocasiones se sentíaalgo resentida, pero estaba acostumbrada a racionalizar la situación,convenciéndoseasímismadequeteníaquecederporqueeramayor,ydequecompartircosasconsuhermanaeralocorrectoporqueerandelmismosexo.Sumadresiempreelogiabaelhechodeque,quizáporqueteníanbastantemásedadque su hermano, no le tuvieran envidia y lo cuidaran bien. Pero ante esaspalabras,aKimJi-youngnolequedabamásremedioquereprimirsusquejasysuscelos,aunquelostuviera.ElpadredeKimJi-youngesel tercerodecuatrohermanos,de loscualesel
mayorfallecióenunaccidentedetráficoantesinclusodecasarseyelsegundosemarchóconsufamiliaaEstadosUnidosañosatrásyestáradicadoallí.Conelmenor la familia no mantiene contacto alguno, después de que se pelearan acausadeunaherenciaydequiéndeberíahacersecargodelaancianamadre.Loshermanoshabíannacidoycrecidoentiemposdifíciles,enunaépocaenla
quelagenteapenassobrevivía.Laspersonasmoríansinimportarsieranniñoso
mayores debido a la guerra, la enfermedad o el hambre, pero su madre—laabueladeKimJi-young—loscrioconempeño:trabajóaconcienciaparaotros,labrandotierrasajenasolimpiandocasas,altiempoqueseencargabadecuidaralafamiliaconlospocosrecursosdequedisponía.ElabuelodeKimJi-young,detez pálida, nunca se ensució sus tersas manos removiendo la tierra. Era unhombrequecarecíadelacapacidadolaintencióndemantenerasufamilia.Aunasí, sumujer nunca le reprochó nada. Creía sinceramente que había tenido lasuertedeencontrarunbuenmaridoporquenuncalahabíaengañadonigolpeado.Deloscuatrohijosquesacóadelanteenaquellascircunstancias,elúnicoqueenrealidad se comportaba como tal era el padre de Kim Ji-young, pero ella seconsolaba justificando la penosayvana situación en la que se encontraba conargumentosmuypocológicos.—Gracias a que tuve cuatro varones, ahora no me faltan comida y cama
caliente,puesunhijomelasda.Poresosiempresedebentener,almenos,cuatrohijosvarones.Su abuela solía repetir siempre lo mismo, pese a que quien preparaba la
comiday lacamaparaellanoera suhijo, sino sunuera, lamadredeKimJi-young.Laancianaeraunamujerrelativamentegenerosa,teniendoencuentalavidatanduraquehabíallevado,yeraunasuegraqueapreciabaasunuera,nocomootrasdesugeneración,porloquepensabasinceramenteenelbienestardeesta cuando repetía: «Debes tener hijos varones. Son indispensables. Debestener,almenos,dos».CuandonaciólahermanamayordeKimJi-young,lamadresedisculpóante
susuegraconlacriaturaenbrazos,agachandolacabezayllorando.Susuegralaconsolódulcemente:—Noimporta.Lapróximaveztendrásunvarón.Cuando nació Kim Ji-young, su madre se disculpó con el bebé en brazos,
agachandolacabezayllorando.Nuevamente,laancianalaconsoló:—Estábien.Laterceraveztendrásunvarón.Un año después del nacimiento de Kim Ji-young, sumadre quedó encinta.
Tuvo lacertezadequedaríaa luzunvarón tras soñarunanocheconun tigreenorme que se metía en su casa y saltaba sobre su falda. No obstante, laginecóloga,unaseñoramayorquelahabíaasistidotambiénenelpartodeKimJi-youngyeneldesuhermana,pusounacaracompungidaalverlaecografíaydijocondiscreción:—Esunacriaturatan…,tanlinda…Igualquesushermanas…Despuésdevolverde la clínica, lamadredeKimJi-youngvomitóde tanto
llorar.Susuegra,desdeelumbraldelbaño,lafelicitó:—No tuviste náuseas ni la primera ni la segunda vez, pero ahora estás
teniendounossíntomasmuy fuertes.Seguroque llevasahídentrounacriaturadistintaatushijas.LamadredeKimJi-youngnopodíaabandonarelbañoypermanecióallíun
buenrato,entrellantosyvómitos.Esanoche,mientrassushijasdormían,miróasumarido,queparecíanopoderconciliarelsueño,ylepreguntó:—Siacaso,ydigosiacaso,lacriaturaenmivientreresultaserdenuevouna
niña, ¿qué harás? —ella deseaba que su marido le respondiera que no teníasentidohaceresapreguntayque,fueraniñooniña,leibaadartodosuamor.Sinembargo,sumaridosemantuvoensilencio—.¿Qué?¿Quévasahacer?ElpadredeKimJi-youngsevolvióhacialaparedycontestó:—En boca cerrada no entran moscas. Así que duérmete y no llames a la
desgracia.Lamujer semordió el labio inferior y lloró toda la noche sin hacer ruido,
hasta empapar la almohada. A la mañana siguiente, sus labios estaban tanhinchadosquenopodíacerrarlabocanidejardesalivar.Poraquellostiemposelgobiernofomentabalaplanificaciónfamiliar,queno
eraotracosaqueunapolíticaantinatalista.Hacíayadiezañosquehabíansidolegalizadoslosabortosquirúrgicosconfinesmédicosy,comosigestarunaniñafuera una razón médica para recurrir a dicho método, las pruebas paradeterminar el sexo del feto y los abortos selectivos de niñas eran prácticasgeneralizadas.[3]Estatendenciaprevaleciódurantelosañosochentayprincipiosdeladécadasiguiente,cuandoeldesequilibriodegéneroentrelosreciénnacidosalcanzóunpuntorécord:elporcentajedebebésvaronesentercerosembarazosduplicabalaproporcióndelasniñas.[4]LamadredeKimJi-youngfuesolaaabortar.Enmodoalgunoerasudecisión,
perodecualquiermodoerasuresponsabilidad.Yasuladonohabíanadieparaconsolarla.Mientrasaullabacomounanimalquehubieraperdidoasucríaanteuna fiera, la ginecóloga le acarició lasmanosy le dijo: «Lo siento».Solo esoimpidióquesevolvieralocaallímismo.Lamujersequedódenuevoembarazadavariosañosdespués,yelbebé,un
niño,vinoalmundosincontratiempos.EsebebéeselhermanodeKimJi-young,cincoañosmenorqueella.Comofuncionariopúblico,elpadredeKimJi-youngteníauntrabajoestabley
unsalarioregular.Noobstante,loqueganabacomofuncionarioordinarionoeramucho. Apenas alcanzaba para mantener a una familia de seis miembros. Lacasa de dos habitaciones se les fue quedando pequeña amedida que los hijoscrecían,y lamadredeseabamudarseaunaviviendamayor,conundormitorioindependienteparasushijas,quedemomentodebíancompartirelespacioconsuabuela.Aunquenocontabaconuntrabajofijocomosuesposo,lamadredeKimJi-
young siempre estaba buscando un empleo que le permitiera ganar un dineroextra sin por ello tener que descuidar la crianza de sus hijos, la atención a suanciana suegra y los quehaceres domésticos. Muchas de sus vecinas, cuyasituacióneconómicaerasimilar, tambiénqueríanun trabajoasí.Eraunaépocaen la que abundaban los empleos por contratación indirecta, que se ofrecíansobretodoaamasdecasaquedeseabanobteneruningresoextrayenloscualesestas se desempeñaban como vendedoras de seguros, cosméticos, yogures,etcétera. Eran empleos precarios en los que la trabajadora debíaresponsabilizarsedetodo,aunencasodeconflictosconlosclientesotrassufriruna lesión.[5]LamadredeKim Ji-young, envista deque tenía tres hijosquecuidar,eligiórealizartrabajosmanualesencasa:armarcajasosobres,pelarajos,deshilvanar ropaoenrollarburletes.Había infinidadde laboresporel estiloy,cuando su madre se entregaba a ellas en casa, la pequeña Kim Ji-young laayudaba,recogiendolosrestosocontandolasunidadesterminadas.El trabajo más difícil era el de enrollar burletes, esas cintas para cerrar
herméticamentepuertasoventanas,hechasdeunmaterialesponjosoypegajosasporunlado.Uncamiónlastraíasueltasyhabíaqueenrollarlasdedosendosy,finalmente,metercadarolloenunapequeñabolsadeplástico.Elproblemaeraque,alsostenerligeramenteunextremodelosburletesentreelpulgaryeldedoíndicedelamanoizquierdayenrollarlosconlamanoderecha,comohabíaqueestirarlosparaquealcanzaranuna formacilíndricacompacta,era fácilcortarselosdedosconelpapelquecubríaelladopegajosodeesascintas.LasmanosdelamadredeKimJi-youngsangrabanaunquesepusieradosguantesencadauna.Sinembargo,nopodíadejarel trabajoporqueeraelmejorpagado,peseaquelosburletesocuparanmuchoespacio,generarangrancantidaddebasurayelolora pegamento le provocara dolor de cabeza.De hecho, trabajó cada vezmás ydurantemáshoras.Así,semultiplicaronlosdíasenlosquesumadreseguíaenrollandoburletes
aundespuésdequesupadreregresaradesujornadalaboral.KimJi-youngysuhermana, que eran estudiantes de primaria, hacían los deberes al lado de su
madre,cuandonolaayudabanojugabanporsucuenta,mientrasquesuhermanose entretenía desmenuzando las sobras de los burletes o arrancando bolsas deplástico.Cuandohabíamuchotrabajo,lafamiliacenabaalladodeunamontañadecintasesponjosasypegajosas.Undía,elpadrellegóacasamástardedelohabitual, tras trabajar horas extra, y vio a sus hijos revolcándose sobre losburletes.Entonces,porprimeravez,seloreprochóasumujer:—¿Siempre tienes que hacer este trabajo que huele tanmal y levanta tanto
polvo en presencia de los niños?—la mujer detuvo las manos, que las teníaocupadas, y los hombros, y empezó a recoger los burletes empaquetados y aordenarlosenunacaja.Él,entre tanto, searrodillóparameter los trozosdese-chados en una amplia bolsa de plástico y dijo—:Lamento darte una vida tandura.Suspiró.Porunmomento,unaoscurasombraaparecióydesapareciódetrásde
suespalda.Lamadrelevantóconfacilidadcajasquelasuperabanentamañoylastrasladóalasaladeestar.Elpadrebarrióelsueloconunaescoba.—Nome estás dandounavidadura.Estamos juntos en esto.Así queno te
apenes.Tampoco tequejescomosisostuvieras túsoloaesta familia.Nadie teobliga.Ylaverdad,noloestáshaciendobien.Encontradiccióncon las fríaspalabrasqueacababadepronunciar, lamadre
deKim Ji-young dejó de trabajar de inmediato. El camionero que le traía losburletes comentó con cierta decepción que era una lástima que renunciara lapersonaquemejorhacíaeltrabajo.—Peroloentiendo.Conlohábilqueesustedconlasmanos,esundesperdicio
queestéenrollandoburletes.Deberíaaprenderarteoartesanías.Creoqueseríaungenio.Lamadreseriosacudiendolasmanos,comosinegaracategóricamenteloque
acababadeescuchar.Dijoqueerademasiadomayorparaaprenderalgonuevo,aunquesoloteníatreintaycincoaños.Además,elcomentariodeesehombrelahabía impresionado, aunque lo negara. Poco después, empezó a asistir a uncentrodeformaciónprofesional, traspedirleasuhijamayorquecuidaradesuhermanitay,asusuegra,desuhijomenor.Peronofueaunaescueladearteodeartesanías, sino a una academia de peluquería. No se postuló para obtener undiplomaprofesional,puespensóquelaspersonascertificadasnoeranlasúnicasquepodíancortarleselcabelloalosdemás.Y,trasaprenderlastécnicasbásicasde cortes de pelo y permanentes, empezó a ofrecer servicios de peluquería adomicilioparaniñosyseñorasmayores.Losrumoressobreellacorrieronrápidamente.Resultóque lamadredeKim
Ji-young sí que tenía destreza manual. Además, era buena atendiendo a losclientes.Comoservicioadicional,ayudabaalasseñorasmayoresamaquillarsecon su propio lápiz labial y delineador después de hacerles la permanente y,cuandoibaacortarleelcabelloaunniño,seofrecíatambiénaarreglarleelpeloa su hermanopequeño si lo tenía o el flequillo a lamadre sin cobrar demás.Usaba químicos para permanentes más caros que los utilizados en laspeluqueríasdelbarrioylesleíaasusclientesladescripcióndelproductoenelenvase.—¿Love?Esunproductonuevoquenodaña el cuero cabelludo.Contiene
propiedadesderivadasdelginseng.Osea,nutresucabelloconginseng,queyonohetenidooportunidaddeprobarentodamivida.Lamadreempezóaacumularasídineroenefectivosinpagar impuestos.Si
bienladueñadelapeluqueríadelbarrioseenfrentóaellaylatomódelcabellocuandoempezóaperderclientela,ellallevabaañosviviendoenlazonayteníabuenareputación,porloquelamayoríadelosvecinoslaapoyó.Coneltiempo,la clientela se dividió adecuadamente y la peluquería y la madre de Kim Ji-youngselasarreglaronparacoexistirsininvadirterrenoajeno.LamadredeKimJi-youngteníadoshermanosmayores,unahermanamayor
yunhermanomenor,ytodoshabíanabandonadosupueblonatal.Sufamiliasehabíadedicadoalcultivodearrozyhabíavividosinmayoresdificultades.Noobstante, los tiempos cambiaron y Corea, cuya economía se basaba en laagricultura,seindustrializórápidamente.Yanoeraposiblevivirsolodelabrarlatierra.ElabuelomaternodeKimJi-youngmandóasushijosalaciudad,comotodos los de su generación hicieron entonces, aunque no tenía los recursossuficientes como para financiar los estudios o los sueños de tantos hijos. Losalquileresyel costede lavidaeranaltosen laciudad;y laeducación,muchomáscaratodavía.LamadredeKimJi-youngllegóaSeúlelañoquecumpliócatorce,después
depasaruntiempoayudandoencasayenloscamposdesufamiliatrasacabarlaprimaria.Sutía,dosañosmayor,trabajabaenunafábricatextil,dondesumadretambién entró como empleado. Empezaron a vivir juntas en un cuartucho deapenas siete metros cuadrados. Sus compañeras de trabajo eran jóvenes deedadessimilares.Teníanmásomenoselmismoniveldeeducacióny tambiéneran originarias de familias con similares condiciones económicas. Todascarecíandeexperienciay,poreso,creíanqueeranormaltrabajarlargashorassin
poder dormir, descansar o comer. Las sofocaba el calor que expulsaban lasmáquinastejedoras.Aunqueserecogieranlasfaldas,yadeporsícortas,elsudorlescaíaporloscodosylosmuslos.Derespirartantopolvoenlafábrica,muchassufrían enfermedades pulmonares. Y el miserable salario que cobraban trastrabajar día y noche—solían tomar pastillas para mantenerse despiertas— sedestinabaengranpartealosestudiosdesushermanosvarones.Erantiemposenlosquesecreíaqueloshijosvaronesdebíansosteneralafamiliayqueesoerasinónimodeéxitoy felicidad.Por lo tanto, lashijas se sacrificaban sin reparoporsushermanos.[6]El tío materno mayor de Kim Ji-young se graduó en Medicina en una
universidadnacionaly trabajó toda suvida enel hospital de la institución.Susegundotíosejubilócomojefedepolicíaregional.Sumadresesentíaorgullosayagradecidadequesushermanosfuerantanrectosydequehubieransidotanbuenos estudiantes.Estos apoyaron económicamente a su tíomenor en cuantoempezaron a tener ingresos, lo que le permitió estudiar en una universidad deEducaciónenSeúl.Eltíomayoreradescritocomoelprimogénitoejemplar,quehonróelapellidoymantuvoalafamilia.Enesemomento,lamadreylatíadeKimJi-youngsedieroncuentadequenuncatendríanoportunidaddeconvertirseenalguiensipermanecíanbajolaproteccióndesusamadosparientes.Poreso,decidieron tardíamente acudir a una escuela para obreros. Trabajaron de día yestudiarondenochehastaqueobtuvieroneldiplomadesecundaria.Noobstante,lamadredeKimJi-youngsiguióestudiandoysepresentóalexamendebachillerparapersonasnoescolarizadas.Loaprobóelmismoañoenelquesuhermanoempezóatrabajarcomoprofesorenunaescueladebachillerato.CuandoKimJi-youngestabaenprimaria,undíasumadresequedómirando
unanotaescritaporsumaestray,súbitamente,dijo:—Yo tambiénquise sermaestra—aKim Ji-young el comentario le pareció
absurdoyseechóareír,porqueparaellasumadreerasumadreynadamás—.De veras.Cuando estábamos en primaria, yo era lamejor estudiante de todosmishermanos.Inclusoeramejorquetutíomayor.—Entonces,¿porquénoteconvertisteenmaestra?—Porquetuvequeganardineroparapagarlosestudiosdetustíos.Pasabacon
todas.Asíeralavidadelasmujeresentonces.—Ahorapuedessermaestra.—Ahora tengo que ganar dinero para costear tu educación y la de tus
hermanos.Pasacontodas.Asíeslavidadelasmadreshoyendía.Claramentesearrepentíadeloquehabíahechoconsuvida,desucondición
demadre.Kim Ji-young imaginó una piedra pequeña pero pesada y dura quereteníalalargafaldadesumadre,ysesintiótristealidentificarseconesapiedra.Sumadre,percatándosedeello,acaricióconternurasucabellodespeinado.KimJi-youngfueaunagranescuelaprimariaalaquesepodíallegarandando
trascallejearduranteunosveinteminutos.Habíaunmínimodeonceclasesyunmáximo de quince por curso, y el número de alumnos por aula ascendía acincuenta. Inclusoenañosanteriores a su ingreso, las clasesdeestudiantesdecursosinferioressedividíanenlasdemañanaylasdetarde.ParaKimJi-young,quenohabíaidoalaguardería,laescuelasupusoelinicio
de su vida social. Comenzó de una manera relativamente satisfactoria y, alterminar el periodode adaptación, sumadredelegó en suhermana, que iba almismocolegio,eltrabajodellevarlaalaescuelaytraerladevueltaacasa.Así,suhermanaseencargabatodaslasmañanasdeordenarsus textosycuadernos,ademásdesacarlespuntaacuatrolápicesparameterlos,juntoconunagomadeborrar, en su estuche con el dibujo de unaprincesamágica.Cuando tenía quepreparar algúnmaterial, también su hermana le pedía dinero a sumadre paracomprarloenlapapeleríaquehabíafrentealcolegio.KimJi-youngibayveníadelaescuelasinperderseodesviarseporotroscaminos.Secomportababienenel aulaynunca seorinó encima.Escribía sin equivocarse en sus cuadernos loqueestabaenlapizarrayconfrecuenciasacabaciensobrecienenlosdictados.El primer gran problema en su vida escolar fueron las travesuras del
compañero conquien compartía pupitre, algoque todaniña experimenta en elcolegio. Sin embargo, aKim Ji-young le parecían excesivas y sufría por ello,porque para ella eran abusivas y violentas. Lamentablemente, no podía hacernada salvo quejarse ante sumadre o su hermana bañada en lágrimas, aunqueestasfueranincapacesdelibrarladeeseproblema.Dehecho,suhermanaledijoquenopodía hacermás que ignorar la conducta de su compañero, porque loschicos son traviesos e infantiles de nacimiento. Sumadre hasta la regañó porlloriquear por unas simples travesuras que su compañero hacía para intentarconvertirseensuamigo.Eseniñoempezóamolestarla sinningúnmotivoenparticular.Le tocabael
hombrocomoporcasualidadalsentarse,alcolocarseenlafilaoallevantarsumaletín.Si se topabaconella, se leacercabaapropósitoypasabapor su ladodándole un golpe bastante fuerte en el brazo. Tomaba prestada su goma deborrar,sureglaysuslápices,peronuncaselosdevolvíay,siellaselospedía,
lostirabaalsueloolosocultabadebajodesutrasero,siesquenoseponíatercoyalegabanohabérselos llevadonunca.Unavez,duranteunaclase, lamaestralos castigó a ambos por pelearse justamente por esa razón.Y cuandoKim Ji-young decidió no prestarle más sus cosas, él empezó a burlarse de cómo sevestíaodecómohablabayaescondersumaletín.Undíadeprincipiosdeverano,KimJi-youngsequitólaszapatillasenclase
porque tenía lospies sudorosos.De repente, sucompañeroestiró laspiernasypateó con fuerza una de ellas. Esta se deslizó entre lasmesas de los alumnoshastallegaralamaestra.Conlacararojadeira,laprofesoragolpeósuescritorioypreguntóalaclase:—¿Dequiénesesto?KimJi-youngnopudocontestar.Primero,tuvomiedo.Ysegundo,sibienera
su zapatilla, esperó a que su compañero confesara que había sido él quien lahabía pateado. Sin embargo, el chico tampoco abrió la boca, quizá porquetambiéntuvomiedo,ymantuvolacabezagacha.—¿Nadievaadecirnada?¿Tengoquerevisaroslaszapatillasatodos?KimJi-younggolpeóconelcodoasucompañeroy ledijoenvozbaja:«Si
hassidotú».Peroelchicoagachóaúnmáslacabezaylecontestó:«Peronoesmi zapatilla». La profesora golpeó de nuevo el escritorio. Entonces, Kim Ji-youngnotuvomásremedioquelevantarlamano.Avanzóhastalapizarrayfuereprendidadelantedetodos.Fuetachadadementirosapornohaberrespondidocuandolaprofesorahabíapreguntadoporprimeravezdequiéneralazapatilla.Tambiénfueetiquetadadeladrona,porquitarlesunpreciosotiempodeestudioasus compañeros. No pudo ni justificarse ni dar explicaciones, al estar yaempapadaenlágrimasymocos,peroenesemomentoalguien—laniñasentadaenelúltimoasientode la filadeal lado—dijoenvozmuybajaquenohabíasidoella.—Essuzapatilla,peronofueellaquienlapateó.Yolovi.Lamaestra,desconcertada,preguntó:—¿Quédices?Sinofueella,¿quiénfue?La niña se sintió incómoda y no pudo contestar. Solo miró la nuca del
culpable.Lasmiradasdelaprofesoraydelosdemáscompañerossecentraronenlamismapersonay,finalmente,elniñoconfesó.Lamaestraloamonestóconunavoz el doble de fuerte, durante un tiempo el doble de largo y con una cara eldoblederojaporelenfado.—La has estadomolestando todo el tiempo, ¿no?No te creas que no te he
visto. Te ordeno que para mañaname traigas una lista completa de todas las
cosasquelehashechoatucompañera.Estoyaltantodetodo,asíquenoomitasnada.Escribelalistacontumadre,quierosufirmaalpiedelalista.Elchicovolvióacasadecaído,diciendoquesumadre lo ibaamatarpor lo
ocurrido,mientras que la profesora le ordenó aKim Ji-young que se quedaradespuésdelaclase.La niña se puso nerviosa, imaginando que podrían regañarla otra vez. Sin
embargo, para su sorpresa, la profesora se disculpó con ella. Admitió haberlareprendidosinconocerexactamenteloshechos,conlasuposiciónprematuradequenopodíaserotracosaqueunatravesuradeladueñadelazapatilla.Tambiénreconociósufaltadeprudencia,altiempoqueleprometiótenermáscuidadodeahí en adelante y esforzarse para que situaciones similares no se volviesen arepetir. Kim Ji-young sintió alivio, pero al relajarse le saltaron de nuevo laslágrimas. Cuando la maestra le preguntó si tenía algomás que decir o pedir,aguantandoelllanto,contestó:—Quieroquemecambiedecompañero.Noquierovolverasentarmeconél
jamás.Laprofesoraleacaricióloshombroscomogestodeconsuelo.—Vaya,parecequenosabesalgoqueyosísé.Aesechicolegustas.Anteesaspalabrastanabsurdas,dejódellorar.—Meodia.Siustedacabadedecirquesabecómomehaestadomolestando.Laprofesoraserio.—Los chicos son así. Fastidian a las compañeras que les gustan. Semeten
másconellas.Meencargarédehablarconél,asíquenotecambiesdesitiosinresolverelmalentendido.Lomejorseríaqueoshicieraisamigosapartirdeesteincidente.¿Que le gusto? ¿Que me molesta porque le gusto? Kim Ji-young se sintió
confundida.Recordórápidamenteloquelehabíapasado,sinlograrentenderlaexplicación de lamaestra. Si a uno le gusta alguien, debe sermás cariñoso yamableconesapersona,yaseaunamigo,un familiaroelperrooelgatoqueunocría.EseeraelsentidocomúndelaKimJi-youngdeapenassieteaños.Suvidaenelcolegioeraundesastreporculpadeeseniño.Nopodíaevitarsentirsemolestaportodoloquehabíatenidoqueaguantar,yencimaeraunaniñamalaquemalinterpretabaasucompañero.Negóconlacabeza.—Noquiero.Noloaguanto.Aldíasiguientelacambiarondeasiento.Sesentóconelalumnomásaltode
suclase,quesiempresesentabasoloenlamesadeatrás.Nuncasepelearon.
Entercero,KimJi-youngalmorzabaenlaescueladosvecesalasemana.Pero
la hora de la comida era una tortura para ella, que comía despacio. Como sucolegio estaba incluido en el programa piloto de comida escolar, contó conserviciodealmuerzopara losestudiantesantesqueotrasescuelas.También seinstalaroncocinasycomedoreslimpiosyespaciosos.Cuandollegabalahoradelacomida,losalumnosacudíanenfilaalcomedor.Sinembargo,comonohabíasitioparatodos,losqueprimerosesentabanacomerdebíanterminarrápidoparacedersumesaalresto.ElcasoesqueKimJi-youngdebíaengullirelalmuerzomientrasotroschicos
yaestabanenelpatiocorreteandocomopotrillosdespuésdecomer.Yentercerosufriómuchomás,debidoaquetuvounaprofesoramuyestrictaquenopermitíaniquesusalumnosrecibieranpocacomidaniquesedejaranalgoenlabandeja.Inclusosepaseabademesaenmesa,cincominutosantesdequeseacabara lahora del almuerzo, para inspeccionar cuánto habían comido los estudiantes,regañando a los más lentos y golpeando sus bandejas con la cuchara parameterles prisa. Los recriminados sentían que se atragantaban con el arroz,mientrasque losmásnerviosos tragaban la comidaconaguacomosi tomaranpastillas.KimJi-youngera laalumnanúmero30desuclase.Losestudiantesvarones
teníanlosnúmerosentreel1yel27ylasniñasentreel28yel49,segúnsusfechas de nacimiento. En este sentido, era afortunada porque el almuerzo seservíaeneseordenyella,queteníaunodelosprimerosnúmerosentrelaschicaspor haber nacido en abril, podía comer en el primer turno. En cambio, suscompañerasdelfinaldelalistapodíansentarseenelcomedorsolocuandootrosniñosyniñasterminabandealmorzar.Poreso,siempreregañabanalasniñasporretrasarsealahoradecomer.Un día, la profesora estaba particularmentemalhumorada.Castigó a toda la
clase porque el encargado de limpiar la pizarra no lo había hecho como eradebido. Procedió, además, a un inesperado control de higiene yKim Ji-youngtuvo que cortarse las uñas con la tijera a escondidas, debajo del pupitre. Lasestudiantes que siempre eran las últimas en acabar de comer estabanespecialmente tensas.Ante ellas, lamaestra se enfadó y golpeó tan fuerte susbandejasqueelarrozylasanchoassecasqueleshabíanservidosaltaronasusrostros.Algunasempezarona llorar,aúncon laboca llena.Posteriormente, lasalumnas que habían almorzado como invitados no bienvenidos a una cena sereunieron espontáneamente durante la hora de limpieza después de clase y,
medianteintercambiosdemiradas,gestosypalabrassueltas,quedaronenversealasalidadelcolegio.Fueradelaescuela.Enelmercadodelbarrio.EnelpuestoderefrigeriosLaAbuelita.Reunidas,lasalumnassedesahogaron.—Hasidoundesquite.Estabademalhumordesdeporlamañanayregañaba
atodospornada.—Tienesrazón.—Oírtodoeltiempoquecomamásrápidonoayuda.—Si no lo hago a propósito. Ni estoy fingiendo. Como despacio desde
siempre,¿yqué?Lo mismo pensaba Kim Ji-young. Que no era correcto lo que hacía la
profesora.Aunquenopodíaprecisarquéestabamal,sentíaquenoerajusto.Noobstante, al no estar acostumbrada a expresar abiertamente lo que pensaba,tampoco podía exteriorizar su descontento. Escuchaba a sus compañeras yasentía solo con la cabeza a lo que decían. Entonces habló Yuna, que habíaestadosentadaensilencio,comoella.—Es injusto —y, tras una breve pausa, continuó con calma—: Es injusto
comer según el orden de nuestros nombres en la lista de clase. No es justo.Tendremosquepedirquecambienesaregla.¿Habrá querido decir que hay que plantearle esa propuesta a la profesora?
Pero¿puedenlosalumnosatreverseahacerletalpropuestaalamaestra?KimJi-youngpensóenellounmomento,peroenseguidaconcluyóqueYunasípodría,pueseraunabuenaestudianteysumadreeralapresidentadelaAsociacióndePadres y Docentes de la escuela. Efectivamente, el siguiente viernes la chicalevantólamano.—Creoqueelordendelosestudiantesparalacomidadebecambiar.Mirandodefrentealaprofesora,Yunadefendiófirmementesupostura.Que
laschicasqueestabanalfinaldelalistadeestudiantesrecibíantardeelalmuerzoy, por ende, terminaban de comer más tarde. Que ellas estarían siempre endesventajarespectoalosdemássisemanteníalaregladeservirlacomidasegúnel orden de los nombres en dicha lista. Que era necesario cambiarperiódicamenteelsistemaderepartodecomida.Laprofesorasonreía,sibiensuslabiosseestremecíansutilmente.Elairedentrodelaulaeratensocomounacintaelástica estiradaalmáximo.AKimJi-young le temblaban laspiernas comosifueseellalaqueestuvierahablando.Loqueaflojólatensiónfueelcomentariodelamaestra,queconunasonrisarespondióalapropuestadelosalumnos.—La próxima semana, el almuerzo será servido en primer lugar a la
estudiante número 49 y se seguirá en sentido inverso hasta el número 1. Ycambiaremoselordencadames.Laschicasqueestabanenlosnúmerosfinalesdelalistadeclasegritaronde
alegría.En todocaso,yaunqueelordenparaentraralcomedorcambió,no lohizoelambienteenaquellugar.Lamaestraseimpacientabaigualqueantesconquienes se quedaban comiendo hasta tarde y les metía prisa hasta causarlesindigestión, mientras que dos de las seis alumnas que habían estado en LaAbuelitaseguíanentrelasmáslentasdelahoradelalmuerzo.AunqueKimJi-youngnoacusódemasiadoelcambioporqueestabaenelmedio,tratódecomermás rápido. Se sentía derrotada cuando tardaba y se esforzó hasta que logróabandonarelclubdelosmáslentos.Laexperiencialepermitióvivirunasensacióndevictoria.Sehabíanrebelado
contra el poder absoluto y habían logrado cambiar algo que creían que erainjusto.FueunaexperienciavaliosaparaYuna,paraKimJi-youngyparatodaslasniñasdesuclase.Adquirieroncierto sentidocríticoyciertaautoconfianza;sin embargo, no cuestionaron por qué el número 1 de la lista era siempre unvarón o por qué los chicos estaban antes que las chicas. Tomaban como algonatural que ellos siempre estuvieran en primer lugar. Los chicos lideraban lasfilas,semovíanprimero,teníanprioridadparaparticiparenclaseysusdebereseranrevisadosantes.Mientrastanto,laschicas,entreelaburrimientoyelalivio,esperaban su turno con paciencia y sin extrañarse, del mismo modo en quemuchagente acepta como si nadaque el númerode identidadde los hombrescomienceporel1yeldelasmujeresporel2.Desdeelcuartocursodeprimaria,losalumnoselegíanaldelegadodelaclase
medianteelvoto.Laseleccionesserealizabanunavezporsemestre,porloquehasta elmomento de graduarse los estudiantes participaban en seis eleccionesdurantetresaños.EnelcasodelaclasedeKimJi-young,enlasseisocasiones,elelegidofueunchico.Muchosprofesoresescogíanacincooseisalumnasentrelasmáslistasparahacerlesencargoseinclusoparaencomendarleslarevisióndetareasodeexámenes.Decíansiemprequelaschicaseranmásinteligentesquelos chicos. Los propios estudiantes opinaban que las niñas estudiaban mejor,eranmásmadurasymásmeticulosas;noobstante,alahoradeelegiraldelegadodelosalumnos,siempreganabaunvarón.Suclasenoerauncasoexcepcional.En todos los colegios habíamuchosmás delegados varones. Poco después deque Kim Ji-young ingresara en secundaria, su madre comentó asombradamientrasleíaelperiódico:—Dicenquehaaumentadomuchísimoelnúmerodechicasquesondelegadas
declase.Informanaquíqueelporcentajesuperaelcuarentaporciento.[7]Quiénsabe,igualcuandovosotrasseáismayorestenemosaunamujerpresidenta.Eso significaba que cuando Kim Ji-young estaba en primaria, de todos los
estudiantes que eran delegados ni lamitad eran niñas, aunque esa proporciónsuponíaunenormeavancerespectoalpasado.Otrareglatácitaeraquelaschicasdesempeñabanelpapeldejefasdelimpiezayloschicoseldejefesdeportivos.No importaba que esos cargos fueran decididos por los profesores o que losestudiantesseofrecieranvoluntariamenteparaocuparlos.LafamiliadeKimJi-youngsemudócuandoellapasóaquintodeprimaria.
Su nuevo hogar era un piso ubicado en la tercera planta de una viviendamultifamiliarrecientementeconstruidaenlaavenidaprincipaldelbarrio.Teníatreshabitaciones,unasaladeestarconcocinaintegradayunbaño.Eradosvecesmásampliaquelacasaanteriorydiezvecesmáscómoda.Comprarlafueposiblegraciasalosahorrosylasinversionesquesehicieronconelsalariodesupadreylosingresosextradesumadre.Enparticular,sumadresupoinvertireldinerode la familia en los productos financierosmás rentables basándose en análisispropiossobrelasventajasylosinteresesacobrar.Tambiénreuníaavecinasdeconfianzapara juntardineroentre todasymanejarfondoscomunespara lograrbeneficiosporintereses,operaciónconlaqueobteníalasmayoresganancias.Sinembargo,rechazabatajantementelaideadehacerlomismoentrefamiliares.—Losmenosfiablesestánenlafamilia.Noquieroperderdineroyparientes
almismotiempo.Laantiguacasaeraunaextrañamezcladeloantiguoylomoderno,alhaber
sidosometidaapequeñosarreglosalolargodemuchotiempo.Lasala-cocina,creadatrascubrirconrevestimientosparaelsuelopartedeloqueanteriormenteera el patio, no contaba con sistema de calefacción, y el baño, de impecablesparedesdeazulejos,noteníanilavabonibañera,deahíquehubieraquereuniragua en un amplio recipiente para asearse y bañarse. El retrete estaba en otroespacio pequeño al lado de la puerta principal, alejado de los ambientesinteriores.Elnuevopiso,encambio,contabaconunsistemaquecalentabatodaslashabitaciones, lasaladeestarylacocina,y tantoelbañocomoelretreteseencontrabanenel interior,por loqueunavezencasanadie teníaquevolveraponerseloszapatosparairahacersusnecesidades.Perolamayornovedaderalahabitaciónparalasdoshermanas.Elcuartomás
grande loocuparon suspadresy suhermano, el segundomásamplio fuepara
Kim Ji-young y su hermana y elmás pequeño para su abuela. Su padre y suabuela insistieronenqueelhijovaróndebía tenerunahabitaciónpropiaysushermanas compartir cuarto con la abuela, como habían hecho antes, pero sumadre senegó en redondo.Sostuvoquenopodíadejar que su anciana suegrasiguieraenunmismodormitorio juntocon lasnietasyquehabíaquedarleunespacioparaquepudieraescucharcómodamentelaradio,leersolalasescriturasbudistasyecharseunasiestacuandolodeseara.—Un niño que todavía no va al colegio no necesita una habitación para él
solo. Además, cada noche vendrá a mi cuarto con su almohada. ¿Prefieresdormirsolooconmamá?Elmenor,deapenasseisaños,contestóquepornadadelmundorenunciabaa
dormirjuntoasumadreyquenonecesitabauncuartopropio.Así, talycomohabía planeado su madre, Kim Ji-young y su hermana por fin tuvieron unahabitaciónparaellas.Sumadrelesconfesóquehabíaahorradodinerosinquesupadrelosupieraparadecorarleselcuarto.Compródosescritoriosidénticosyloscolocóunoalladodelotro,alpiedelaventana,pordondeentrabamuchosol.También compró un nuevo armario que ubicó en otra pared junto con unaestanteríaparalibros,asícomonuevascolchas,mantasyalmohadas.Hastapegóunmapamundigrandeenotradelasparedes.—Mirad Seúl. Es un puntito. O sea, que estamos viviendo entre ajetreos
dentrode este pequeñopunto.Aunquenopodáis recorrer elmundo, almenostenedconcienciadecuángrandees.Asídeextenso.La abuela de Kim Ji-young falleció un año después y su habitación fue
ocupadapor suhermano.Sin embargo, durantebastante tiempoel niño siguióacudiendotodaslasnochesaldormitoriodesuspadres,abrazadoasualmohada,pararecostarsesobreelpechodesumadre.
1995-2000
KimJi-youngasistióauncentrodesecundariaquequedabaaquinceminutos
apiede su casa.Suhermanahabía ido a lamismaescuela, pero entonces eraexclusivamenteparaniñas.Hasta la década de 1990, Corea era un país con un agudo desequilibrio de
géneroenlatasadenatalidad.En1982nacieron106,7bebésvaronesporcada100niñas.Perolaproporcióndeniñoscrecióycrecióhastallegara116,5,muyporencimadeladiferenciaquenaturalmenteseda,entre103y107varonesporcada100niñas.[8]Esoindicabaquehabíayaunnúmeromásaltodeestudiantesde sexo masculino y que iban a hacer falta colegios para ellos, dado queseguiríanaumentandoennúmero.En loscolegiosmixtoshabíadosvecesmásclasesdechicosquedechicas;sinembargo,elproblemanosoloradicabaentaldesequilibrio dentro de unmismo instituto, sino en que los estudiantes fueranasignados según su género a colegios que quedaban lejos de donde vivían,aunquehubieseescuelasmáscercanas.ElañoenqueKimJi-youngingresóensecundaria, su colegio se volviómixto.A raíz de aquello, otros institutos queantañohabíansidofemeninosomasculinossufrieronlamismatransición.La escuela secundaria a la que asistía Kim Ji-young era un colegio como
cualquier otro. Tenía un patio pequeño, por lo que había que atravesarlo endiagonalparalascarrerasdecienmetros.Tambiéneraunaconstrucciónvieja,decuyasparedescaíanconstantementepedazosderevestimientodeteriorado.Paralosestudianteshabíaunestrictocódigodevestimenta,queeraparticularmenteinflexibleenelcasodelaschicas.SegúncuentalahermanadeKimJi-young,elreglamentoseendureciócuandoelcentroseconvirtióenuncolegiomixto.Lafalda del uniforme debía cubrir la rodilla y no debía insinuar la curva de lascaderasylosmuslos.Debajodelablusablancadeluniformedeverano,queerasemitransparente, tenían que ponerse obligatoriamente una prenda interiortambiénblancayconescoteredondo.Nopodíaserunacamisetadetirantes,niunacamisoladealgodónconmangas,niunaprendadecoloroconencajes.Yloque nunca debían hacer las estudiantes era llevar solo el sostén debajo de lablusa. En verano, debían asimismo ponerse pantis de color piel y calcetines
blancos por encima y, en invierno, solomedias negras opacas, sin calcetines.Tampocopodían usar zapatillas deportivas, sino zapatos.Y en invierno, llevarzapatosconmediasysincalcetinesdabaunfríodemuerte.Enelcasode losalumnosvarones, las reglaseranmuchomás flexibles.Lo
únicoquenopodíanhacereracambiarelanchodelospantalones.Poreso,habíachicosquedebajodelacamisadeluniformedeveranoseponíancamisetassinmangas,camisolasconmangas,inclusoprendasdecolorgrisonegro.Y,cuandotenían calor, se desabotonaban parcialmente la camisa, si es que no se laquitaban a la hora del almuerzo o durante los recreos. En cuanto al calzado,podíanusarlodetodotipo,desdezapatosyzapatillasdedeportehastazapatillasdetacosyparacorrer.Enunaocasión, una estudiante fue amonestada en lapuertadel colegiopor
llevarzapatillasdedeporte.Ellaprotestóporquesoloaloschicosselespermitíaponerseotrocalzadoycamisolasdebajodeluniforme.Elprofesor a cargodelcontrol de vestimenta le respondió que eso se debía a que los varonespracticabandeporteentodomomento.—Loschicosnopuedenestarquietosnidurantelosdiezminutosquedurael
recreo. Están jugando al fútbol, al béisbol, al baloncesto… y, si no estánhaciendodeporte,estánsaltandounosencimadeotros.Aellosnoselespuededecirquemantenganlacamisaabotonadahastaelcuelloyquellevenzapatos.—¿Y piensa que las chicas están quietas porque les gusta estar así? No
podemosmovernosporquenosincomodanlafalda,lasmediasyloszapatosquenosobliganausar.Enprimaria,yotambiénsalíaalpatioenlosrecreos,asaltaryajugaralapelota.Aquella alumna, al final, fuecastigadano soloporno respetar el códigode
vestimenta,sinotambiénporcontestaralprofesor,ytuvoquedarvariasvueltasalpatiodelcolegioencuclillas.Elprofesorleordenósujetarsebienlafaldaparaquenose leviera laropa interior,pero lachicanoobedeció.Yse leveíanlasbragasmientras avanzaba.El profesor la detuvodespués de la primera vuelta.Más tarde, otra chica que acudió a la sala de profesores por estar vestida demaneraindebidalepreguntóporquénosehabíasujetadolafalda.—Paraquevieraloincómodoqueesvestirseasí.Elreglamentonocambió,perolasestudiantesempezaronahacercasoomiso
del control de vestimenta sin que por ello se las amonestase, aunque llevarancamisolasdemangacortadebajodelablusaozapatillasdedeporte.
Por la zona donde se situaba la escuela de Kim Ji-young rondaba unpervertido conocido como Hombre Gabardina, porque vestía solo un abrigolargo encima de su cuerpo desnudo y se destapaba cuando pasaban niñas omujeres jóvenes a su lado, para ver sus reacciones. Era famoso en losalrededores y las alumnas sentían pavor cuando aparecía. A veces, en díasnublados, salía al espacio abierto frente a la escuela, que se veía directamentedesdelaventanadelaclase2-Hfemenina.KimJi-youngestabaenesaclasey,como ella, todas sus compañeras asignadas a esa aula se asustaban al verlo,aunquelasituacióntambiénleshacíagracia.Un día de primavera ocurrió un incidente, poco después de que hubiese
comenzado el año académico.Había llovido demadrugada y era unamañanaconniebla.Acababadeterminarlaterceraclasedeldíaylasestudiantesestabaneneldescansocuandolachicasentadaalfinaldelafiladelaventanamiróhaciaafueraygritó.Noestabaclarosigritabaamododecelebraciónoparamofarsede lo que estaba viendo. Las más atrevidas se acercaron a la ventana yempezaronagritartambién:«¡Guapo!¡Otra,otra!».Enseguidaaplaudieronyserieron a carcajadas.Kim Ji-young se quedó sentada en su asiento, lejos de laventana.Soloestiróelcuelloparaintentardescubrirloquepasaba,peronologróver nada. En realidad, semoría de curiosidad. Sin embargo, le dio vergüenzaacercarse a presenciar el espectáculo. No tuvo la valentía de verlo con suspropiosojos.UnaamigaquesesentabajuntoalaventanalecontóluegoquelaactuacióndelHombreGabardinahabíasuperadotodassusexpectativas,comosihubieraagradecidolaeufóricareaccióndelaschicas.Derepente,mientrasenelaulaseguíaelalboroto,entróelprofesoracargodel
controldisciplinario.—Lasqueestabaisgritandoenlaventana,salid.Todas.¡Ya!Las aludidas se colocaron frente a la pizarra. Le dijeron al profesor que se
habían quedado en sus respectivos asientos, que no habían gritado y quetampocohabíanmiradoporlaventana.Noobstante,elprofesorsellevóacincode ellas, a las que escogió arbitrariamente, a la sala de profesores. Allí lascastigaron y fueron obligadas a escribir cartas de disculpa.Regresaron apenascomenzadalahoradelalmuerzoylachicaquehabíavistoalHombreGabardinaescupióporlaventana,enojada.—¡Mierda!Nosotrasnohemoshechonadamalo.Laculpa la tieneese tipo.
Nohacennadaparapillaraesepervertidoyanosotrasnosdicenquecorrijamosnuestramalaconducta.¿Peroquémalaconducta?¿Acasohesidoyolaquesehadesnudado?
Las compañeras se rieron, pero la chicano se calmó fácilmente, ni siquieradespuésdeescupirvariasvecesmás.Lascincoalumnasqueesedíaestuvieronenlasaladeprofesoresnovolvieron
allegartardealcolegio.Yesoquesiempreeranlasúltimasenentrarenclase.Losprofesores,peseaquepresentíanqueestabantramandoalgo,nolespodíandecir nada porque no cometían ninguna falta de disciplina. Entonces sucedióalgo grande. Como si fueran enemigos que se encuentran en un callejón sinsalida,unamañanaunadelascincochicassetopóconelHombreGabardinaeinmediatamenteaparecieronlasotrascuatrodetrásdeella.Entretodassaltaronsobreelsujeto,loamarraronconcuerdasdeplásticoycinturonesyloarrastraronhastalaestacióndepolicía.Nadiesabequélepasóaaquelhombre.Elcasoesquenuncamásvolvióarondarporelvecindarioylascincoestudiantesfueronsuspendidas.Lassancionaronynopudieronacudiraclaseduranteunasemana.Cuandosereincorporaron,despuésdeescribirvariascartasdedisculpaylimpiarbañosyelpatiodelcolegiodurantedías,nohicieroncomentarioalgunosobreloocurrido.Perolosprofesoreslessolíangolpearsuavementeenlacabezacuandopasabanfrenteaellas.—Notenéisdecorocomomujeres.Soislavergüenzadelcolegio.Cuandosealejaban,unadelasalumnasmascullaba«¡Mierda!»yescupía.
KimJi-youngtuvosuprimeramenstruaciónenelsegundoañodesecundaria.
Nolellegóniantesnidespuésqueasuscompañeras.Suhermanahabíatenidosu primera regla a la misma edad y ya venía intuyendo que ella tambiénempezaría a menstruar durante la secundaria, al ser ambas de similarconstituciónfísica,desimilaresgustosydesimilardesarrollo.Poresonoentróenpánico.Tomóunadelastoallassanitariasquesuhermanateníaenelprimercajóndesuescritorioylecontóqueestabamenstruando.—Setehaacabadolabuenavida—dijosuhermanasinmás.TambiénfueellalaqueselocontóasumadreenlugardeKimJi-young,que
noestabaseguradesidebíacontarleonoasufamiliaque lehabía llegadosuprimeraregla.Nopasónadaextraordinario.Supadre llamóparaavisardequeibaavolver tardeacasa,peroquedabapocoarroz,por loquesumadrey sushermanosdecidieroncenarfideosinstantáneos.ElhermanodeKimJi-youngsesirvióunabuenacantidaddefideosinmediatamentedespuésdequepusieranlamesa,perosuhermanamayorleregañóylediounligerogolpeenlacabeza.—Sitútellevastanto,¿quécomemosnosotras?¿Ycómoesquetesirvestú
primero?¿Acasonorespetasamamá?LahermanadeKimJi-younglesirvióasumadreunabuenaracióndefideos,
caldo y huevo, y luego tomó para ella lamitad de los fideos del plato de suhermano.Entonces,lamadrelecediólamitaddelossuyosalniño.LahermanadeKimJi-younggritóenfadada:—¡Mamá!Cometú.Ylapróximavezvamosausarunaollaporcadapaquete
defideosinstantáneos,paraquenadielequiteolecedacomidaanadie.—¿Desde cuándo eres tan considerada conmigo? Además, no sonmás que
fideos. Y eso de usar una olla por persona es demasiado. ¿Vas a lavar tú lasollas?—Sí.Soybuenalimpiandoylavandoplatos.Tambiéndoblolaropayalavada
ylaordeno,ylomismohaceJi-young.Enestacasasolohayunapersonaquenohacenada.LahermanadeKimJi-youngechóunamiradadereprocheasuhermanoysu
madreledijo,acariciándolelacabeza:—Sitodavíaesunniño.—¿Peroquéniño?Siyo,conapenasdiezaños,meencargabadeprepararmi
maletín para la escuela y también el de Ji-young. Hacía sola los deberes yrevisabalosdeella.Cuandonosotrasteníamossuedadyafregábamoselsuelo,tendíamoslaropaynoshacíamoslacomidasinayudadenadie,aunquefueranunossimplesfideosinstantáneosounhuevofrito.—Peroesqueeselbenjamíndelafamilia.—Noesporqueseaelmenor.Esporqueeselvarón.La hermana tiró los palillos sobre la mesa y se metió en su cuarto.
Confundida, la madre suspiró con la mirada clavada en la puerta de lahabitación,mientrasqueKimJi-youngsepreocupabaporlosfideos,queestabanempezando a ablandarse, si bien tampoco podía comer en ese ambiente tanincómodo.—Silaabuelaviviera,sehabríaenfadadoyellasehabríametidoenunbuen
lío—intervinosuhermano—.Habríadichoqueesinaceptablequeunamujerlepegueaunhombreenlacabeza.Porquejarsesinserconscientedeloocurrido,elchicorecibióotrogolpeenla
cabeza,estavezdeKimJi-young.Sumadrenofueaconsolarasuhijamayor.Tampocosedisgustó.Sololesirviómáscaldoasusegundahija.—Apartirdeahoratienesqueprocurarcomercalienteyabrigartebien.Entresusamigas,algunaspresumíandequehabíanrecibidoramosdeflores
desuspadresconmotivosuprimeramenstruación.Otras,dequelofestejaronen
familia,conpastelesytodo.Peroesaschicaseranminoría.Paralamayorparte,laprimerareglaeraunsecretoquesolopodíancompartirconsumadreoconsushermanas.Unsecretofastidioso,dolorosoyalgovergonzante.Esefue tambiénelcasodeKimJi-youngysufamilia.Sumadreevitómencionarlodirectamenteyse limitóa servirlemáscaldo,comosi lamenstruación fueraalgo indecentesobreloquesedebíacallar.Esa noche, acostada al lado de su hermana y pasando de la angustia al
malestar,KimJi-youngreflexionósobre loque lehabíapasadoduranteeldía.Pensóenlamenstruaciónylosfideosinstantáneos,enlosfideosinstantáneosyelhijovarón,enloshijosvaronesylashijas,enloshijosvarones,lashijasylastareasdelhogar.Unpardedíasdespués,suhermanaleregalóunestuchedetelaconcremallerayqueteníaeltamañodelapalmadeunamano.Dentrohabíaseiscompresashigiénicas.Las compresas ultraabsorbentes o con alas se volverían comunes mucho
después.Lasqueseusabanentonces,quehabíaquetraerdelatiendaescondidasenunabolsadeplásticodecolornegro,nosepegabanbienalaropainterior,asíque semovíany los extremos sedoblabanhacia el centro.Para colmo, teníanuna pésima capacidad de absorción. Pormucho que una se cerciorara de queestabanbienfijadas,confrecuenciamanchabanlaropaolasmantasdelacamadurantelanoche.Erapeorenverano,cuandoseusabaropamásligera.Algunasmañanas,aúnmediodormida,KimJi-youngseaseaba,desayunaba,entrabaalbaño,ibaalacocinayatravesabalasalacomosinada,ysumadreseleacercabayledabaunoscodazos.Cadavezquepasabaesto,ellaseescapabaasucuartocomosihubierahechoalgomaloysecambiaba.Más insoportable que esas incomodidades era el dolor menstrual. Había
anticipado cómo sería con arreglo a lo que le había contado su hermana; sinembargo,elsegundodíaaumentabaelsangrado,se lehinchabanelpechoyelabdomenyledolíanlacintura,lascaderas,lasnalgasyhastalosmuslos.Enelcolegio, si iba a la enfermería, ledabanunabolsa calentadorapara calmar losdolores.Peroesta,decolorrojoyllenadeaguacaliente,erademasiadograndeyolíaacaucho,porloquenoleconvencíalaideadeandarconesacosaencimaporque sentía que estaba anunciando que tenía la regla. Pero tampoco tomabapastillas,deesasquesepublicitabancomoelremedioparatodo,desdecefaleashasta dolores dentales y menstruales, porque la aturdían y le provocabannáuseas. Simplemente, se aguantaba. Al fin y al cabo, era algo habitual queveníacadamesydurabavariosdías.Pensabaciegamentequequizápodríasermaloparalasaluddependerdelosfármacoscadavezquemenstruaba.
Mientrashacíalosdeberes,acostadabocaabajoyagarrándoseelvientreconunamano, Kim Ji-young decía una y otra vez que no lograba entenderlo. Lamenstruaciónesalgoquetienelamitaddelahumanidad,remarcó,yagregóque,si una farmacéutica desarrollara un buen medicamento solo para los doloresmenstruales sin efectos secundarios, en vez de esas pastillas vagamenteclasificadascomoanalgésicoyqueencimaprovocabannáuseas,ganaríamuchodinero.Suhermana asintió al escucharla y le pasóunabotella deplástico conaguacalienteenvueltaenunatoalla.—Eso digo yo. Es increíble que hoy en día, cuando se cura el cáncer y se
trasplantan corazones, no haya unamedicina para los doloresmenstruales. Secreenquevaallegarelfindelmundosientraalgunadrogaenelútero.¿Esqueesunsantuariointocable?Su hermana señaló su vientre con el dedo y Kim Ji-young se rio, aun con
doloresylabotelladeplásticoentrelosbrazos.Al empezar el bachillerato, fue asignada a un instituto a quinceminutos en
autobús desde su casa. Empezó a ir a una famosa academia privada fuera delhorario lectivo que quedaba a treintaminutos en autobús desde donde vivía ytambiéncomenzóasalirconsusamigasporunazonauniversitariaqueestabaaunahoradedistancia.Sinembargo,alampliarsuvidasocialasí,derepente,sedio cuenta de que el mundo era enorme y estaba lleno de pervertidos a sualrededor. En el autobús o en el metro, no eran pocas las veces que manossospechosas le tocaban el trasero o le rozaban los senos. Incluso había otrosdegenerados que, sin tapujos, se pegaban a su espalda o presionaban laentrepierna contra sus muslos. Y, a pesar de que odiaba a los chicos de laacademia,alosdelaiglesiaoaesosquerecibíanclasesparticularesdealgunamateria, los cuales, sinmotivo, les colocaban lamano sobre los hombros, lesacariciaban el cuello o lesmiraban el escote que se formaba en las camisetasestiradas o entre los botones de sus blusas, las chicas comoKim Ji-young nopodíannisiquieragritar,solotratardeevitartalessituaciones.El colegio tampoco era una zona segura. Siempre había algún que otro
profesorquelesmetíalamanoporlamangaparapellizcarlapartemáscarnosadel brazode las estudiantes, que les tocaba las nalgas o que lesmanoseaba laespalda justo a la altura del sostén. Un profesor que tuvo en primer año, unhombre entrado en la cincuentena, llevaba siempre un puntero cuyo extremoteníaformademanoconeldedoíndicelevantado.Conelpretextoderevisarsi
las estudiantes tenían la placa con su nombre en el uniforme, les punzaba unpechoconesepalo;tambiénleslevantabalasfaldasconlaexcusadecomprobarsi cumplían con el reglamento de vestimenta.Undía, cuando el profesor dejópordescuidoelpunteroenelaula,lachicaque,portenerunbustomásgrandequelasdemás,másamenudoeraelblancodeesasrevisiones,selevantó,cogióelpuntero,lotiróalsueloylopisoteóconrabia,llorando.Laschicassentadasenlaprimerafilarecogieronlospedazosysumejoramigalaconsoló.En realidad, Kim Ji-young tenía suerte porque solo iba al colegio y a la
academia.Lasituacióneramuchopeorparaaquellasdesusamigasquehacíanalgúntrabajoatiempoparcial.Ellaseranvíctimasdeunosjefesquelasacosabany cuestionaban adrede su forma de vestir o su conducta en el trabajo, o declientesquecreíanquepagarporunproductotambiénlesotorgabaelderechoaacosarlas.Laschicas,porsuparte,acumulabanenlomásprofundodesuserdemanerainconscienteungrantemorydesencantohacialoshombres.Undía,KimJi-youngtuvoclasesextraenlaacademia.Eratardeybostezaba
mientrasesperabaelautobúscuandounchicolamiróalosojosylasaludó.Sucaralepareciófamiliar,peroeraundesconocido.Aunasíledevolvióelsaludo,unpoco incómoda,pensandoque talvezeraunestudiantede laacademiaqueiba a su clase. Entonces, el chico, que estaba a unos pasos de distancia, se leacercó.Y, después de que las personas que estaban en la parada semontarancadaunaensuautobús,sequedóasolasconella.—¿Enquéautobústevas?—¿Perdón?¿Porquélopreguntas?—Meparecióquequeríasqueteacompañarahastatucasa.—¿Yo?—Sí.—No,paranada.Notepreocupes.Quiso preguntar quién era y si la conocía, pero tuvo miedo de alargar la
conversación. Por ello, esquivó su mirada y se quedó quieta fijándose en laslucesdeloscochesquepasabanalolejos.Llegósuautobús,peroKimJi-youngfingió desinterés hasta el último segundo, cuando salió corriendo a montarseantes de que abandonara la parada. Entonces, el chico se subió rápidamentedetrásdeella.Unavezdentro,mirabadereojosureflejoenlaventanaunayotravez, y el solo hecho de pensar que ese chico también estuviese mirándola lavolvíaloca.
—Muchacha,¿estásbien?¿Tesientesmal?Siéntateaquí—ledijounamujeraKimJi-young,queestabapálidaysudandodelmiedo.Lamujer, con cara de fatiga, como si volviera a casa después de una larga
jornadalaboral,lecediósuasiento.KimJi-youngquisopedirleayuda.Leagarrólapuntadelosdedosytratódehablarleconlamirada.Perolamujer,sincaptarlasituación,lepreguntódenuevo:—¿Tesientesmuymal?¿Quieresquetelleveaunhospital?KimJi-youngnegóconlacabeza.Bajólamanoparaqueelchiconovieralo
que estaba haciendo y extendió el pulgar y el meñique para indicar quenecesitabausarelmóvil.Lamujermirólaexpresióndesucaraylaseñaquelehacía con la mano, pero siguió desconcertada hasta que, tras reflexionarbrevemente, sacó su móvil del bolso y se lo dio. Entonces ella mandó unmensaje de texto a su padre con la cabeza gacha: «Soy Ji-young. Ven arecogermealaparadadelautobús.Rápido.Porfavor».Mientraselautobússeacercabaasuparada,KimJi-youngmiródesesperada
porlaventana,esperandoquesupadreestuvieraallí.Noestaba.Cuandoseabriólapuertadelautobús,elchicoestabadepie,unpasodetrásdeella.Teníamiedode bajar, pero tampoco podía viajar tan tarde por barrios desconocidos en eseautobús. Por Dios, nome sigas. Nome sigas. Nome sigas. Rezando para símisma,KimJi-youngsebajódelautobús.Elchicolaimitó.Estabansolos.Nohabíanadieasualrededorenesaparada,ubicadaenunazonaapartada,yestabamásoscurodelohabitualdebidoaqueelalumbradoseencontrabaestropeado.Ellaestabapetrificadademiedoyelchicoseleacercódiciendoenvozbaja:—Perosisiempretesientasamilado.Mepasaslosapuntesdeclaseconuna
sonrisilla.Y dices «Me voy», siempre insinuándote. ¿Por qué ahorame tratascomoaunpervertido?Ella no entendía nada. No sabía quién se sentaba detrás, qué cara ponía al
pasar losapuntes,niquédecíaparapedirque sehicieranaun lado losque lecortabanelpasoenelpasillo.Enesemomento,elautobúsquehabíaarrancadosedetuvoylamujerdelmóvillegritó:—¡Oye!¡Muchacha!¡Tedejasesto!Lamujeracudióalacarrerasacudiendounabufanda,subufanda,laquehasta
entonces había llevado al cuello, una que claramente no le pegaba a unacolegialacomoKimJi-young.—Malditas—dijoelchico,ysealejó.En la parada del autobús, al lado de lamujer,Kim Ji-young se sentó en el
sueloyrompióallorar.Entoncesapareciósupadreporlasalidadeuncallejón,
jadeando.Ellalescontóbrevementeasupadreyalamujerloqueleacababadeocurrir.Queleparecíaqueeraunchicoqueibaalamismaclasequeellaenlaacademia,peroqueenningúncasoseacordabadeél.Queleparecíaqueélsehabíahechoalaideadequeellamostrabainterésporél.Lamujer,KimJi-youngysupadresesentaronenelbancodelaparadaaesperarelsiguienteautobús.Elpadre le dijo a lamujer que había salido de casa con lasmanos vacías por laprisaque tenía, sedisculpópornopoder siquierapagarleel taxiydijoqueseencontrabaendeudaconella.Lamujeragitólasmanoscomodiciendoquenopasabanada.—Los taxis son más peligrosos. Además, su hija se ha asustado mucho.
Cálmela.No obstante, ese díaKim Ji-young recibió una fuerte regañina de su padre,
que le recriminóque fueraaunaacademiaquequedaba tan lejos,quehablaracon cualquiera, que se pusiera faldas tan cortas…Que toda la vida le habíaninsistido en lo mismo. Que tuviera cuidado. Que se vistiera bien. Que secomportaracomoeradebido.Quesepreocuparaporevitarcaminos,horarioseindividuospeligrosos.Que laculpa la tenía lapersonaquenohabíamedidoelriesgonihabíasabidoevitarlo.LamadredeKimJi-youngllamóluegoalamujerdelautobús,ofreciéndoleel
importequelehabíacostadoregresardesdelaparadadelautobúsasucasaentaxiobienunobsequio,aunquefuerauncaféounabolsademandarinas,perolamujer lorechazótodo.KimJi-youngdecidiódarle lasgraciaspersonalmenteytambiénlallamó.Lamujerledijoquesealegrabadehablarconellaylesoltóderepente:«Laculpanoestuya».Aseguróqueenelmundohabíamuchoshombresextraños, que ellamismahabía sidovíctima algunavez, que el problema eranellos, no ella. Al escuchar esas palabras, Kim Ji-young no pudo contener laslágrimas. Ymientras no podía hacer comentario alguno porque no paraba dellorar,lamujeragregó:—Pero¿sabes?,enelmundohaymáshombresbuenosquemalos.Al final,KimJi-youngdejóde ira laacademiaydurantemucho tiempono
pudosiquieraaproximarsedespuésdelapuestadelsolaesaparadadeautobús.Borró la sonrisa de sus labios y evitó cruzarmiradas condesconocidos.Teníamiedodetodosloshombres.Undíainclusogritóaltoparseconsuhermanoenlas escaleras. En esosmomentos de pánico, se acordaba de las palabras de lamujerdelautobús.Queellanoeraculpabledenada.Queenelmundohabíamáshombresbuenosquemalos.Denoserporesaspalabras,durantemuchotiemponohabríapodidolibrarsedelmiedo.
LacrisisylaintervencióndelFondoMonetarioInternacionalenlaeconomía
delpaísafectarontambiénalhogardeKimJi-young,queparecíaestarlejosdeese tipodeproblemas.Lareestructuracióncomenzóenelsectorpúblico,enelquelosfuncionariossiemprehabíancreídotenertrabajodeporvida.Supadre,quesolíaalardeardequelosrecortesdepersonalolasjubilacionesanticipadaseransoloparalostrabajadoresdelsectorfinancieroodelasgrandesempresas,recibió la recomendaciónde retirarse.Sus colegas semantenían firmesenquepornadadelmundo ibana abandonar la funciónpública.ElpadredeKimJi-young coincidía con ellos, pero se sentía inseguro.Aunquenoganabamucho,estabaorgullosodeteneruntrabajoestableydemantenerconélasufamilia.Noobstante, al ver que la estabilidad de los suyos se veía amenazada pese aesforzarse por salir adelante, trabajar duro, no cometer errores como siemprehabíahechoypasarsusdíassinhacernadamalo,sudesconciertofueenormeymayoraúnsuconfusión.ElproblemaeraquelahermanadeKimJi-youngcursabaenesemomentosu
últimoañodebachilleratoy,aunquelafamiliaparecíaestarenlacuerdafloja,manteníacalificacionessatisfactoriassindejarseinfluirporlascircunstancias.Sibiennoeraunaestudiantesobresaliente,habíalogradomejorarpocoapocosusnotasdurante todoel tercerañodebachilleratoyobtenerunabuenanotaenlaselectividad.LamadredeKimJi-younglepropusoconcautelaasuhijamayoringresaren
unauniversidadpedagógicaregional.Losugiriódespuésdereflexionarmucho,considerando sobre todo cómo losmayores eran despedidos y los jóvenes noteníandóndetrabajar.Sumarido,dequiennadiehabíadudadoqueibaatrabajarhasta llegar a la edad de jubilación, podía quedar desempleado en cualquiermomento,yteníaotrahijayunhijoqueseguíanenelcolegio.Portodoeso,lamadre quería que su hijamayor fuera a la universidady estudiara una carreraque pudiera garantizarle estabilidad laboral; primero, por su propio bien, perotambién por el bien de la familia. Además, la matrícula costaba poco. Sinembargo, eran tiempos en los que los oficios de funcionario y profesor decolegioyaeranmáspopularesylacalificaciónmínimanecesariaparapostularsea universidades de Educación había subido a más no poder. Con la nota quehabíasacadoenselectividad, lahermanadeKimJi-youngpodíaaccederaunauniversidadenSeúl,peronoalaUniversidadNacionaldeEducación.Apesardeello,comoaspirabaaserproductoradetelevisión,decidióseguirla
carrera de Comunicación y, después de revisar las universidades en las quepodría ingresar con sus calificaciones, empezó a prepararse para la pruebaselectivaqueesoscentrosdeeducaciónsuperiororganizabancomoexamendeadmisióndenuevosestudiantes.Poreso,cuandosumadrelehablódeiraunauniversidadpedagógica,ellarechazólapropuestasintitubearniunsegundo.—Yonoquieroserprofesora.Miaspiraciónesotra.Además,¿porquédebo
dejarestacasaeirmeaestudiaraotraciudad?—Piensaenelfuturo.Paraunamujernohaymejorprofesiónqueladocencia—¿Cómoqueno?—Lajornadalaboralescorta.Disponesdevacaciones.Esfácilsolicitarbajas.
Nohaymejortrabajoqueeseparaunamujerquetienequecuidardesushijos.—Ciertamente,eseltrabajoperfectoparacompatibilizarconelcuidadodelos
hijos. Entonces, es un buen trabajo para todos, no solo para la mujer, ¿no?¿Acaso los hijos los tiene solo lamujer?Mamá, ¿vas a decirle lomismo a tuhijo?¿Aéltambiénlovasaenviaraunauniversidadpedagógica?Nunca nadie les había dicho a Kim Ji-young y a su hermana que debían
encontrarbuenospartidosycasarse,quedebíanserbuenasmadresoqueteníanqueserbuenascocineras.Porsupuesto,seencargarondesdeniñasdeunaparteconsiderable de los quehaceres domésticos, pero lo hacían para ayudar a suspadresydemostrarquepodíanvalerseporsímismas,noporquefueranmujeresydebieranacostumbrarseaesastareas.Cuandoyaeranrelativamentemayores,lasregañinasquerecibíandesuspadreserandedostipos.Porunlado,corregíansushábitos.Que se sentaran con la espalda recta.Quemantuvieranordenadossusescritorios.Quenoleyeranconpocaluz.Queprepararansusmaletinescontiempo.Quesaludaraneducadamentea losmayores…Elotro tipoderegañinaeraparadecirlesqueestudiaran.Los tiempos habían cambiado y ya no había padres que pensaran que no
importabaquelamujernoestudiaraoqueestudiarapoco.Desdehacíaañosseconsiderabanaturalquelasniñasfueranalcolegioconuniformeymaletín,ylaschicas se rompían la cabeza al igual que los chicos tratando de descubrir suverdaderavocación,planificandosuvidaprofesionalyesforzándoseportenerunfuturomejor.Esmás,eraunaépocaenlaqueaumentabanlasvocesdealientoydeapoyoqueproclamabanquenohabíanadaqueunamujernopudierallevaracabo.En1999,cuandolahermanadeKimJi-youngcumpliódiecinueveaños,sepromulgóuna leyqueprohibía ladiscriminacióndegéneroyen2001,cuandoKim Ji-young llegó a esa edad, se fundó el Ministerio de la Mujer.[9] Noobstante, en los momentos más decisivos, la etiqueta «mujer» se volvía
prominenteyaalgunaslascegaba,deteníalasmanosemprendedorasdeotrasyhacíaretrocederaotrasmuchas.Esogenerabamayorconfusiónydesconcierto.—Ni siquiera yo sé sime casaré o si tendré hijos.O puede quememuera
antes.¿Porquétengoquerenunciaraloquequieroserohacerporunfuturoquenosésillegaráono?Sumadre giró la cabeza y clavó lamirada en elmapamundi pegado en la
pared.Elmapaestabaalgodesgastadoenlasesquinasyenalgunaspartesteníapegatinas con forma de corazón de color verde y azul. Kim Ji-young habíarecibido laspegatinasdesuhermana.Esta lashabíacompradoparaadornarsuagenda,perolascompartióconellaylepropusousarlasparaindicarlospaísesalosquecadaunadeseabaviajar.KimJi-youngescogiódestinosconocidosydelosquehabíaoídohablarmuchasveces,comoEstadosUnidos,JapónyChina,mientras que su hermana puso las pegatinas sobre los países nórdicos, comoDinamarca, Suecia y Finlandia; y cuando Kim Ji-young le preguntó por quéqueríaviajaraesoslugares,ellarespondióqueporqueimaginabaqueallíhabríapocoscoreanos.Sumadreestabaaltantodelsignificadodeesaspegatinas.—Tienes razón. Me equivoqué. Fue una mala idea. Prepárate bien para la
pruebadeselección.Tras asentir con la cabeza, cuando estaba a punto de darse la vuelta, su
hermanalallamó:—Mamá.¿Esporquelamatrículaesmásbarata?¿Porquegarantizaencierta
medida un trabajo estable? ¿Porque permite ganar el dinero justo después degraduarse?¿Porquemishermanosseguiránnecesitandodineroparalosestudiosmientraspapánotengaaseguradosutrabajo?—Sí,esportodoeso.Perotambiéncreoque,enmuchossentidos,ladocencia
esunabuenaprofesión.Entodocaso,tedoylarazón.Lamadrefuesinceraysuhijanohizomáscomentarios.La hermana de Kim Ji-young leyó libros y documentos sobre educación
primaria,consultóvariasvecesalprofesordesucolegioencargadodelprogramade orientación vocacional y fue personalmente al campus de una universidadpedagógica regional para volver a casa con una solicitud de acceso. Esta veztambiénsumadreintentópersuadirla.Laentendíamejorquenadie,yaqueellamisma había tenido que renunciar a su sueño por el bien de su familia y sushermanos. En algún momento, su madre había dejado de verse con ellos. Elarrepentimiento y el resentimiento por aquel sacrificio involuntario eranprofundosypersistentes,tantoquealfinalarruinaronlarelaciónfamiliar.La hermana de Kim Ji-young afirmó que ese no era su caso. Confesó que
sobre laprofesióndeproductorde televisiónsolosentíameraadmiraciónynosabía bien cómo era ese trabajo. Que, en realidad, disfrutaba desde niñaleyéndoles a sus hermanos, ayudándolos a hacer los deberes, armando algojuntosopintandoentretodos.Quequizásuvocaciónfueraladocencia.—Como tú decías,mamá, es una buena profesión. Se trabajan pocas horas,
hay vacaciones y es estable. Sobre todo, me parece grandioso enseñar cosasnuevasalosniños,queestánfrescoscomolechugas.Claroquetambiéntendréquelevantarlavozconmásfrecuencia.LahermanadeKimJi-youngfueadmitidaenlauniversidadpedagógicacuyo
campus había visitado. También logró entrar en la residencia universitaria. Sumadre,trasacomodarlosmueblesfrenteaella,queeraincapazdeescondersuexaltaciónveinteañera,ydespuésdedarleconsejosqueno fueronescuchados,volvióacasaylloródurantelargoratosobreelescritoriovacíodeesahijaquehabíaabandonadoelnido.Lloróporquepensabaquehabíahechomalendejarlair tan lejos cuando aún era una niña.Que debía haberle dado la libertad paraescogerlacarreraquequisiera.Quenodebióhaberleimpuestounavidacomolasuya.PeronosabíaexactamentesillorabaporquesentíapenaporsuhijaoporsímismayKimJi-youngsolopudoconsolarasumadredeunamanera:—Ellaqueríaingresarenesauniversidad.Telodigodeverdad.Dormíatodas
lasnochesconelfolletoentrelosbrazos.¿Ves?Estátodoroto.Sumadre se calmóun poco al repasar el folleto de la universidad página a
página,que estaba desgastado y cuyas partes dobladas estaban a punto deromperse.—Vaya,estalcualdices.—¿Lahascriadoduranteveinteañosytodavíanolaconoces?¿Creesqueiba
ahaceralgoquenolegustase?Hatomadoesadecisiónporquehaquerido.Asíquenoteaflijastanto.Su madre salió del cuarto con mejor cara y menos preocupación. Tras
quedarsesola,KimJi-youngsesintióextraña,desorientada,pero tambiénfelizdenoteneryaquecompartiresahabitaciónconsuhermana;tantoquepensóquepodríadarunsaltohastaeltecho.Sepudoarodarporelsueloygritóeufórica.Era la primera vez que tenía un cuarto propio, enteramente para ella. Pensóentonces que podría deshacerse del escritorio de su hermana y comprar unacama, en lugar de dormir en el suelo.Siempre había deseado tener una cama.Así,elingresoenlauniversidaddelahermanadeKimJi-youngcontentóatodalafamilia.
El padre deKim Ji-young, finalmente, optó por la jubilación anticipada.Le
quedabanmuchosañosdevidapordelante,pero los tiemposhabíancambiadodrásticamente;ahorahabíaordenadoresentodoslosescritorios,mientrasqueélseguíatecleandosoloconlosíndices.Declaróqueibaaempezarunanuevavidaantesdequefuerademasiadotarde,puesyallevabasuficientetiempotrabajandocomo para recibir la pensión de funcionario. Además, si renunciaba en esemomento,podíapercibirunaindemnizaciónbastantecuantiosa.Aunasí,inclusoa Kim Ji-young, que no sabía nada de la vida, le pareció una decisión pocosensata y alejada de la realidad, considerando que su hermana apenas habíainiciadolosestudiosuniversitariosyqueellaysuhermanoseguíansuponiendounelevadogastoparalafamilia.Pero,adiferenciadelointranquilaqueestabaKim Ji-young, sumadre no protestó ante la decisión de su esposo, nimostrósíntomas de preocupación; tampoco intentó persuadirlo para que cambiara deparecer.Trascobrarlaliquidación,elpadredeKimJi-younganuncióasufamiliaque
ibaaponerenmarchaunnegocio.UncolegasuyoibaaemprenderunproyectocomercialconotrosamigosrelacionadoconChina,ylehabíapropuestotrabajarjuntos.Supadredijoque iba a invertir en ellogranpartede la indemnizaciónrecibida por la jubilación anticipada. Sin embargo, su madre se opusorotundamente.—Haspeladodurodurantetodoestetiempoparasosteneraestafamilia.Telo
agradecemos.Ahora tienes que descansar.Descansa, sinmás.No quiero oírtepronunciarnilaCdeChina.Siinvierteseneso,medivorciodeti.LospadresdeKimJi-young,sibieneranpersonasreservadas, ibandeviaje
juntos al menos una vez al año y a menudo salían solos de noche a ver unapelículaoatomarunascopas.Nuncahabíanprotagonizadounagranpeleafrenteasushijos.Cuandohabíaquetomarunadecisiónimportante,lamadreexponíasuopinióncuidandosuspalabrasyelpadre laseguía.La jubilaciónanticipadafuelaprimeradecisiónqueelpadretomóporcuentapropiaenveintitantosañosdematrimonioyquisoconese impulsoempezarunnegocio.Noobstante,esooriginóunagrietadifícildesalvarentresumujeryél.Un día, cuando aún el hielo se interponía entre ellos, su padre se estaba
preparando para salir y le preguntó a su esposa: «Oye, ¿dónde está eso?».Entonces,ellasacódeuncajónuncárdiganazulmarinoyselodio.«Yesaotracosa,¿dóndeestá?»,preguntó,yellalepasóunoscalcetinesnegros.Alatercerapregunta,ellalecolocóelrelojenlamuñeca.
—Teconozcomejorquetúmismo.Tútienesotrosdones.NoinsistasmásenesenegocioconChina.El padre deKim Ji-young renunció así al proyecto chino y dijo que quería
montar una tienda. La madre vendió a buen precio el apartamento que habíaadquiridoconunaoperaciónque(inteligentemente)involucrabaunacuerdoconuninquilinoyconesedinero,sumadoalaindemnizacióndesuesposo,compróunlocalenlaprimeraplantadeuncomplejocomercial-residencialmediovacío.Locompróaunpreciorelativamentealtoparaunlocalquenoestabasituadoenunaavenidagrande,sinoenunpuntopocoatractivo,peroellajuzgóquevalíalapenainvertireneseinmueble.Lasviejaszonasresidencialesdelosalrededoresestabantransformándoseenmodernosvecindariosdeedificiosdeapartamentosy,siqueríanponerunnegocio,eraindispensableposeerunlocal.Sumadreteníalateoríadequeposeerunlocal,aunquefueraenunedificiomediovacío,seríamás beneficioso que abonar un alquiler todos los meses o comprar a un altopreciounespacioenelqueyaoperabaunnegocio,pagandodemásporlafamaopopularidaddelatienda.El primer negocio quemontó el padre deKim Ji-young fue un restaurante.
Estaban de moda las franquicias de restaurantes especializados en un tipo deguisodepolloconsalsadesojaysuestablecimientotambiénfueunéxitoenunprimer momento, tanto que se formaban largas colas frente a la puerta. Sinembargo, la popularidad fue efímera. El padre cerró el restaurante sin sufrirgrandes pérdidas, aunque tampoco obtuvo ganancias. El segundo negocio queabriófuetambiénunrestaurante,estavezdepollofrito.Contodo,noeratantounrestaurante,sinomásbienunacantina.Yelpadre,queestabaacostumbradoatrabajar jornadas fijasdesde lasnuevede lamañanahasta las seis de la tarde,envejeció rápidamente sirviendo mesas hasta altas horas de la noche. Cerrósúbitamenteelnegocioporrazonesdesalud.Luegoabrióunapanaderíaatravésdeunafranquicia.Peropocodespuésaparecieronestablecimientossimilaresenlazona.Inclusoinauguraronotrapanaderíapertenecientealamismafranquiciaalotro ladode lacalle.Pasadoun tiempo,algunasempezaronacerrary todaspresentabanseriosproblemasderentabilidad.ElpadredeKimJi-young,quenoteníaquepagaralquiler,aguantóunpocomás,peronotuvootraalternativaqueaceptarelfracasocuandollegóalbarriounamegapastelería.CuandoKimJi-youngcursabaeltercerañodebachillerato,elambienteenla
casa era pésimo, igual que cuando su hermana tenía su edad. Sus padres nopodían ocuparse bien de sus hijos, pues se veían obligados a sobrevivir comofueraycorrerdeaquíparaalláafindegarantizarlesunfuturomejor.Poreso,
KimJi-youngpasóelúltimoañodebachilleratoestudiandoyencargándosedelavar los uniformes, preparar la comida para llevar a la escuela y ayudar a suhermanoa irporelbuencaminoyconcentrarseenlosestudios.Naturalmente,huboinstantesenlosquesesentíaexhaustayleentrabanganasdedejarlotodo.Sin embargo, los comentarios de su hermana de que en la universidad iba aperder peso y conseguir novio, aunque repetitivos, fueron su motivación. Dehecho,suhermanahabíaadelgazadomuchísimoyhabíainiciadounromance,locualfueunestímuloparaella.KimJi-youngaprobósatisfactoriamentelaselectividad.Noobstante,apartir
deahíempezóapreocuparlequesuspadrespudieranfinanciardebidamentesusestudios universitarios.Undía, cuando sumadre estaba en casa preparando lacenaparaellayparasuhermano,KimJi-youngdejóescaparinadvertidamenteunoscomentariosllenosdepreocupaciónporlasituacióndellocal,lasaluddesupadreyelsaldoenlacuentafamiliar.Seangustiómuchodebidoalaposibilidadde que su madre se desmoronara y se pusiera a llorar, o que dijera que ellamismadeberíaocuparsedereunireldineropara lamatrículauniversitaria.Porsuerte,sumadreacabóconsuangustiaconcuatropalabras:—Primeroentra,preocúpateluego.KimJi-young ingresóen la facultaddeHumanidadesdeunauniversidaden
Seúl. Era el resultado de su propio esfuerzo, ya que ningún miembro de sufamilia podía darle apoyo o consejos, por lo que ella sola analizó susposibilidades y se preparó para la admisión. Pero a partir de ahí renació supreocupaciónporlacuestióneconómica.Sumadrefuesinceraalanticiparlequeteníasuficienteparapagarsololamatrículadelprimeraño.—Silasituaciónnomejoradeaquíaunaño,vendemoslacasaoellocal.Así
quenotepreocupes.Eldíaenelquesegraduódebachillerato,KimJi-youngseemborrachópor
primeravezensuvida.Suhermanalasllevóaellayadosdesusamigasaunbarylasinvitóabeber.Nuncahabíaprobadoelalcoholynoesperabaquefueratanricoydulce.Legustóybebióunacopatrasotrahastaquedarcompletamenteebria. Su hermana la cargó sobre la espalda y,medio arrastrándola, la llevó acasa. «Qué cosas le enseñas», le reprocharon sus padres a su hermana, pero aKimJi-youngnoledijeronnada.
2001-2011
Kim Ji-young se había propuesto estudiar duro en la universidad y obtener
alguna beca, pero se dio cuenta de que había sido demasiado ilusa. El primersemestrerecibióunpromediodemenosdetrespuntossobreuntotaldecuatroymedio, inclusosin faltaraningunadesusclases,entregando todas las tareasysin descuidar los estudios. En el colegio había mantenido calificacionesrelativamente altas y, aunque le hubiera idomal en algún examen, había sidocapazdemejorarsusnotasponiéndoselaspilasyenlasiguientepruebasacabaunbuenresultado.Lamentablemente,esonoeraposibleenlauniversidad,dondeseagrupabanestudiantesdenivel similary,porende, eradifícil sobresalir.Lopeoreraquenosabíacómoestudiarsin los librosdeapoyoni losmodelosdeexámenesescolaresdelosquesolíadisponerenelcolegio.Esodequelosuniversitarioseranunosvagoseracosadelpasado.Nohabía
jóvenes que salieran de fiesta, se pasaran con las copas y descuidaran susestudiosporcompleto.Lamayoríaestabanmuyocupados:estudiaban,aprendíaninglés,hacíanprácticas,participabanenconcursosytrabajabanatiempoparcial.«Esqueelmundoestá loco»,dijosuhermanaalescucharcomentaraKimJi-youngqueelromanticismohabíadesaparecidodelcampus.Muchasdesusamigasconfesabanqueelnegocio familiarhabíaquebradoo
que sus padres estaban desempleados. La economía nacional seguía mal y,aunquenisusamigasnilospadresdeestasteníantrabajosdecalidad,elpreciodelamatrículauniversitariasubíasinparar,comosiquisierarecuperareltiempoquesehabíamantenidocongeladodebidoalacrisis.Enladécadadelos2000,elaumento del coste de la matrícula de las universidades duplicó la tasa deinflación.[10]Lachicadelaquesehabíahechoamigaalentrarenlauniversidaddejó losestudios tras finalizar elprimeraño.Su familiavivíaenunaciudadaunas tres horas en autobús de Seúl y decía que había tratado por todos losmediosdeseradmitidaenunauniversidadde lacapitalparanoseguirbajo lasombra de sus padres. Aunque no eran amigas íntimas, a ella le daba laimpresión de que no recibía ningún apoyo económico de su familia, pues alinterrumpir sus estudios le había dicho que le era imposible costearse la
matrícula,loslibros,elalquilerylavida,pormuyduroquetrabajara.—Despuésdepasartodalatardedandoclasesenunaacademiaderedacción
deensayosacadémicosytrabajarporlanocheenunacafetería,regresoacasa,measeoyyasonlasdosdelamadrugada.Peroaesahoradebo,además,obienpreparar laclasede redaccióndeldía siguienteobien revisar las tareasde loschicosaquienesenseño.Terminadotodoesto,puedodormirunrato.Yyasabesqueenmitiempolibre,entreclaseyclasedelauniversidad,trabajoenlaoficinadeadministracióndelafacultad.Poresoestoycansadatodoeltiempo.Elsueñomevencecadavezquetengoqueestudiaryprestaratenciónenclase.Mividauniversitaria es un desastre, y también mis notas, por todo lo que tengo quetrabajarparamantenerla.Quévidatanmiserable.Dijoquesequedaríaensuciudadduranteunañoparaahorrar.KimJi-young
la escuchó sin hacer comentarios, porque pensó que nada la alentaría o lelevantaría el ánimo salvo el dinero. Su amiga, quemedía unmetro sesenta ytantos, le contóquehabíaperdidodocekilosdesdeque iba a launiversidadyqueapenasllegabaaloscuarenta.«Ydecíanqueadelgazaríaenlauniversidad»,dijoriéndoseyaplaudiendocomosihubierainventadouningeniosochiste.Lasmangas de su chaqueta gris estaban dadas de sí y por los agujeros de esasmangasseveíansusmuñecasesmirriadas.Kim Ji-young, en cambio, llevaba una vida universitaria bastante apacible,
puesvivíaencasade suspadresynohabía tenidoquepedirningúnpréstamoestudiantil. Incluso se ganaba un dinero extra gracias al trabajo que le habíaconseguido su madre como profesora particular para chicos de secundaria.Aunquesusnotasnoeranlasmejores,legustabasucarreray,comotodavíanotenía idea de qué hacer con su vida o en qué trabajar después de graduarse,husmeaba entre los diversos grupos de aficionados que existían en el campusparaprobarcualquieractividadquelepudieraservirdealgoenelfuturo,cuandole llegara el turno de buscar empleo.Esas actividades no provocaron cambiosinmediatos en ella. Desde luego no eran como las máquinas expendedoras,dondeunometía unasmonedasy enseguidapodía obtener algo a cambio.Sinembargo, tampoco fueron inservibles. Esas experiencias le abrieron los ojos.KimJi-youngsediocuentadeque,debidoalaspocasoportunidadesquehabíatenidodeexpresarsussentimientosydarsuopinión,habíacreídosiemprequeeraunapersonaintrovertida,peroenrealidaddisfrutabaderodearsedegenteydestacar. Así, tuvo su primer novio en organizaciones de senderismo paraestudiantesdelauniversidad.Ese primer novio era un estudiante de Pedagogía en educación física de su
misma edad. Sus compañeros del club los pusieron juntos para que el chicoayudaraaKimJi-young,que siempre sequedaba laúltimacuandosubíanunamontaña,yasí intimaron.Graciasaél,KimJi-youngfueporprimeravezaunpartidodebéisbolydefútbol.Noentendiólasreglas,perosedivirtió;esosí,nopudodiscernirsieraporquelegustabaelchicooporlaeuforiadelosestadios.Comoellanosabíanadadedeportes,sunovioleindicabaantesdelospartidosquiéneseran los jugadoresmás importantesycómoeran lasreglas,parapoderconcentrarseenteramenteeneljuegounavezqueestecomenzaba.Undía,KimJi-younglepreguntóporquénoleexplicabalasreglasduranteelpartido.—Cuando estamos en el cine, tú tampocome explicas cada diálogo o cada
escenadelapelícula.Además,esoshombresquedanexplicacionesalasmujeresentodomomentomientrasvenunpartidomeparecenpagadosdesímismos.Nollego a entender si están ahí para ver el partido o para alardear de susconocimientos.Enfin,quemecaenmal.Laparejatambiénibaamenudoalospasesgratuitosqueorganizabaelclub
universitariodecineysiempreeraKimJi-youngquienelegíalapelícula.Asunoviolegustabatodo,desdeelterrorylacienciaficciónhastalosmelodramasylaspelículasdeépoca.Sereíamásyllorabamásfuertequeella.Seponíacelososielladecíaqueelprotagonistaleparecíaguapo.Inclusomemorizabalostítulosde las películas de su agrado para descargar las bandas sonoras de internet yregalarleunCDconesascanciones.Siempreseveíanenelcampus.Estudiabanjuntosenlabiblioteca,hacíanlos
deberesen la salade informáticay, sino teníannadaquehacer, se sentabanacharlarenlasgradasdelcampodedeportesprincipaldelauniversidad.Comíanjuntosenelcomedoruniversitario,merendabanalgoquecomprabanenlanuevatienda del edificio del consejo estudiantil y tomaban café en la cafetería de allado.Devez en cuando, ahorrabandineropara celebrar alguna fecha especial,parairaunrestauranteeleganteodesushi,dondelosplatoseranporlogeneraldemasiado caros para una pareja de estudiantes. Su novio se entreteníaescuchandoaKimJi-youngcontarleelcontenidodealgúncómiconovelaquehabía leído cuando estaba en el colegio, o de alguna telenovela que estabaviendo en ese momento, y él, por su parte, le insistía en que debería hacerejercicio.LamadredeKimJi-youngobtuvodealgúnladolainformacióndequeenel
edificiosituadofrenteasulocalseinauguraríaunaclínicapediátrica.Entonces
convenció a su marido, que decía que ya no quería tener nada que ver confranquicias, para abrir un restaurante de gachas de arroz perteneciente a unacadena nacional. En efecto, en el edificio de enfrente empezó a operar unaclínica de pediatría que ocupaba desde el segundo hasta el octavo piso. Porsuerte y quizá porque la comida en esa clínica era mala, la clientela delrestaurante comenzó a aumentar; en su mayoría, se trataba de familiares depacientes internados que compraban gachas para llevar o gente que trataba desaciarelhambrerápidamenteentrelasentradasysalidasdelaclínica.Mientrastanto, también fueronhabitados los complejosdeedificios residencialesde losalrededores,por logeneralpormatrimonios jóvenes,paraquienescomer fueraeraalgohabitual.Inclusolosdíaslaborableserafácilencontrarfamiliasenterascenandoenrestaurantes.Lasqueteníanniñossevolvieronclientesregularesdelrestaurante de los padres de Kim Ji-young, ante la escasez de una ofertagastronómica que pudiera satisfacer a grandes y a chicos. Gracias a eso, losingresos familiares aumentaron en granmedida y llegaron a superar el sueldoquehabíarecibidoelpadredeKimJi-youngcuandoerafuncionario.Tiempodespués,lafamiliaseenteródequelamadredeKimJi-younghabía
comprado en preventa un apartamento ubicado dentro de un megacomplejoresidencial cerca del local. Había cumplido con los pagos parciales mediantepréstamos, pero el éxito del restaurante le había permitido saldar la deuda ycompletó el importe final de la adquisición con el dinero de la venta de lavivienda multifamiliar en la que vivían. Así, toda la familia —incluida lahermanadeKimJi-young,quehabía regresado trasgraduarse—semudóa lacasanueva.EllaaprobóelconcursopúblicodecontratacióndedocentesenSeúlyrenuncióalascondicionesfavorablesquehabríatenidoalpostularseparaunpuestodeprofesoraenotraregiónfueradelacapital.Unanoche,elpadredeKimJi-youngsalióaunareuniónconunosexcolegas
y volvió con alguna copa demás. Borracho y de buen humor, llamó a gritosdesdeelsalónasustreshijos,tanfuertequesuvozresonóportodalacasa.Elmenor, que no se había dado cuenta de la llegada de su padre porque estabaescuchando música por los auriculares de su iPhone, y sus hermanas, quellevaban un rato acostadas, salieron de sus habitaciones a saludar con ciertoretraso.Supadrelespusoenlasmanossutarjetadecréditoyvariosbilletes,sinsiquiera fijarseencuántodinero lesdaba.LamadredeKimJi-youngaparecióbostezandoylereprochósuconducta.—Hoyheconfirmadoque,entremisamigos,soyyoquienllevalamejorvida
—dijoél—.Justoconloquetengoahora,puedoafirmarquemividaesunéxito.
Hetrabajadoduro.Estoymásquesatisfecho.ElamigoquesehabíametidoenelnegocioconChinahabíaperdidotodasu
indemnización,yningunodesusexcolegasganabatanto,nielqueseguíaenlafunciónpúblicanieseotroquehabíamontadounnegociodespuésdejubilarse.Entreellos,elpadredeKimJi-youngeraelqueseencontrabaenmejorsituacióneconómicayelquevivíaenlacasamásgrande.Segúnsuspropiaspalabras,erala envidia de todos por tener una hija que era profesora de colegio, otra queestudiabaenunauniversidadcapitalinae,incluso,portenerunhijovarónconelque podía contar. Sin embargo, lamadre deKim Ji-young dibujó una sonrisaburlonaen los labioscon losbrazoscruzadosante sumarido,quemantenía lacabezaenaltosintiéndoseorgullosodesímismo.—Elrestaurantedegachasfueideamíayesteapartamentolocompréyo—le
señaló—. Los chicos crecieron bien por su cuenta. Es cierto que tu vida esrelativamente exitosa así como está, pero no es solo mérito tuyo. Nos debesmuchoanuestroshijosyamí.Yestanocheduermesenelsalón,quehuelesaalcohol.—Tienestodalarazón.Lamitaddelméritoestuyo,asíque,señoramía,yo
estarésiempreasuservicio.—¿Cómo que la mitad? La vida que tenemos ahora es gracias a mí en un
setentaporciento.Tucontribuciónapenashasidodeuntreinta.Lamadrediootro largobostezoy learrojóa sumarido sualmohadayuna
manta.Él quiso dormir con su único hijo varón, pero este también lo rechazóporqueapestabaaalcohol.Aunasí,noseofendióy,manteniendoelbuenhumor,setumbósinasearseyconlamantaenrolladaalrededordelcuerpoenmitaddelsalón.Pocodespuésempezóaroncar.ElnoviodeKimJi-youngacudióalserviciomilitarobligatorioalterminarel
segundoañodeuniversidad.Ellaconocióasuspadresyhastafueadespedirloalaentradadelcampodeentrenamientoalquehabíasidoasignado.Sinembargo,pocosmesesdespuéssintióunatremendasoledad.Leescribíacartas tanlargasque difícilmente cabían en un sobre regular, pero a veces se irritaba por lasituación y dejaba de contestar a sus llamadas. Su novio, que siempre habíatenidouncarácter tranquilo,nopodíaevitarsaltarcomounresortedebidoa latensiónacumuladaantecualquiercambiodeactitudoelmínimodesinterésporpartedeKimJi-young.Sedeprimía,seangustiabayseenojabapensandoenlaimproductividad de esos años, que consideraba que podrían ser los más
importantesdesuvida,peroqueestabadejandotranscurrirsinhacernada.Así,aunque se veían de vez en cuando, después de meses de estar separados, lapareja protagonizaba escenas entrañables en elmomento del reencuentro y sepasabaelrestodeltiempopeleando.Finalmente,fueKimJi-younglaquedecidiócortarlarelación.Sunovio,para
susorpresa,loaceptósinexaltarse.Sinembargo,cadavezqueteníavacacionesy salía de la base, la llamaba por teléfono una y otra vez, por la noche yborracho,ylemandabamensajesdetextodemadrugada,haciéndolelaabsurdapregunta de si estaba despierta a esas horas. Incluso había noches en las quevomitaba frente al restaurante de gachas de sus padres y se quedaba dormidoacuclilladojustoalladodelvómito.Entreloscomerciantescercanosallocaldesus padres se rumoreaba que la segunda hija del dueño del puesto de gachashabíatraicionadoasunoviomientrasélestabaenelserviciomilitar,porloqueesteveníaadesquitarsetrashaberdesertadodelabase.Frecuentarellocaldelclubdesenderismotambiénlaincomodaba.Asíytodo,
ibadevezencuandoparaapoyaraaquellasestudiantesmás jóvenesqueella.Eraungrupocompuestosobre todoporvaronesy laschicas,en lamayoríadeloscasos,dejabandeacudirdespuésdeaparecerunascuantasvecesporellocal,pues no lograban adaptarse al ambiente. En este sentido, Kim Ji-young habíatenidosuerteporque,cuandoellaentróalclub,estabaChaSeung-yeonallíparaayudarlaaadaptarse.Y,comoella,tambiénqueríaserunabuenacompañera.Losestudiantesvaronessereferíanalasintegrantesfemeninascomofloreso
comolasúnicasrosasentrelosyuyos,ylastratabancondeferencia.Pormuchoque las chicas insistieran en que estaban bien, no les dejaban cargar objetospesados,lesdabanaelegirprimeroquécomeryadóndeiratomaralgodespuésdeunaexcursiónylesreservabanlahabitaciónmásampliacuandolosmiembrosdelclubviajabanengrupo,aunqueeneseviajefuerasolounamujer.Luegoseenorgullecíandesímismos,ensalzabansucomportamientoydestacabanqueelclubsemanteníagraciasalosintegrantesmasculinos,queseencargabandelascosasquerequeríandefuerzafísicayaquienesnolesimportabadormirdondefuerayconquienfuera.Elpresidentedelcluberaunhombre,elvicepresidentetambiénydelascuentasseencargaba,asimismo,unmiembrovarón.Loschicosorganizabanactividadesconjuntasconclubesdeuniversidadesfemeninasy,porlo que Kim Ji-young supo más tarde, hasta tenían un grupo de licenciadosintegradosoloporhombres.ChaSeung-yeonsiempredecíaquelasmujeresnoquerían tratosespeciales,sino trabajar igualque loshombresydisponerde lasmismasoportunidades.Queloquequeríannoeraelegirelmenúdelalmuerzo,
sinodirigirelclub.Sinembargo,loshombresnolehacíancasoysetomabansuspalabrasa la ligera,especialmenteunoqueestabahaciendoundoctoradoenlaescueladeposgradoyqueeraelqueteníamayorparticipaciónenlasactividadesdelclubdesdehacíayanueveaños.Siemprehacíaelmismocomentario:—¿Cuántasvecestelotengoquedecir?Noesuntrabajoparamujeres.Pero
vuestrapresenciaenelclubnosanima.—Peroyonoestoyaquíparaanimarteniatinianadie.Sinecesitasfuerzas,
queterecetenunamedicinaoalgoquetedéenergía.Adecirverdad,hayvecesquequieroabandonarelclub,peroyaveréis,mevoyaquedarhastaverconmispropiosojosquesenombrapresidentaaunamujer.Lamentablemente,ningunamujerocupólapresidenciadelclubdesenderismo
antesdequeChaSeung-yeonsegraduaraytuvoquetranscurrirmuchotiempohasta que saltó la noticia de que una estudiante que había ingresado en launiversidad diez años después había sido elegida presidenta. «Mucho puedecambiarenunadécada»,remarcó,noobstante,ChaSeung-yeonsindemasiadaemocióncuandosucedióaquello.Por su parte, Kim Ji-young, que también eramiembro regular en todas las
actividadesdelclubdesenderismo,desistiódeseguirparticipandotraselviajeorganizadoparaotoñocuandoestabaenterceraño.Habíanreservadounacabañaenunbosquenomuylejosdelauniversidadparareunirseallídespuésdehacerel recorrido. En esa cabaña, mientras unos se entretenían con juegos, otroshacíandeporteyelrestosededicabaabeber,KimJi-youngsesintiómal.Selehabía destemplado el cuerpo como si tuviera gripe, por eso se refugió en elcuartoconcalefacción,dondeunoscompañerosestabanjugandoalascartas,ysemetiódebajodeunasmantasconlasquesecubrióhastalacabeza.Elsueloestabacalienteysintióquetodalatensiónabandonabasucuerpo,ylasvocesylasrisasdelosdemásestudianteslellegabancomounruidoremotoescuchadoen sueños. Así, se quedó dormida durante un rato. Despertó cuando alguienpronunciósunombre.—ParecequeKimJi-youngyahaterminadoconesechico,¿no?Enseguida escuchó varias voces. Se dirigían a la persona que había
mencionado el noviazgo de Kim Ji-young, le preguntaban si no había estadointeresado en ella desde siempre y le decían que, si quería, podían ayudarlo aacercarse. En un principio, Kim Ji-young creyó que estaba soñando. Peroinmediatamente recobró la conciencia y pudodiscernir quiénes estaban en esahabitaciónyquiéndecíaqué.Eranlosqueacababanderetomarlosestudiostrasfinalizarelserviciomilitaryqueunratoanteshabíanestadobebiendofuerade
lacabaña.KimJi-youngestabatotalmentedespiertayteníacalor.Sinembargo,mientrashubieraallígentehablandodeellanoibaapoderquitarselamantaquela envolvía por completo y salir. No tuvo más remedio que escuchar esabochornosaconversaciónaescondidas.Enesemomento,oyóaalguiendecir:—Déjalodeunavez.Nadiequiereprobarunchicleyamasticado.Erauncompañerofamosoporsucaballerosidad,aquienlegustababeberpero
quenuncapresionabaanadieparaquelohicierayquesolíainvitaraestudiantesmenoresqueélacomer,aunquepreferíanoacompañarlasparaevitarsituacionesincómodas.AKimJi-younglehabíacausadounabuenaimpresión,deahíquealcomienzohubieradudadodequesetratararealmentedeéleintentóidentificarmejoraquellavoz.Peseatodo,síeraél.Erasuvoz.Talvezsehabíapasadoconelalcohol, talvezeratímidoopuedequesehubieseexpresadoconesarudezapara impedir que sus amigos hicieran algo innecesario, trató de racionalizarlo,pero no pudo evitar sentirse humillada. Concluyó que incluso un hombre quehabitualmente mostraba un comportamiento relativamente racional y actuabaconciertagentilezahablabadeesamanerade lasmujeres, inclusode lamujerporlaqueteníainterés,yrepitióparasímisma:«Soyunchiclequealguienhamasticadoytirado».Aun con el cuerpo empapado de sudor y experimentando asfixia, Kim Ji-
youngtuvoquepermanecerdebajodelamanta.Irónicamente,teníamiedodeserdescubierta, como si fuera ella la culpable de esa situación. Horasmás tarde,cuandosepercatódequeelgrupodechicosabandonabalahabitaciónyvolvióelsilencio,pudolibrarsedelefectosaunadelamantaycambiarsedecuarto.Esa noche no pudo conciliar el sueño y, a la mañana siguiente, se topó
accidentalmenteconesecompañeromientrasdabaunpaseoporlosalrededoresdelacabaña.—Tieneslosojosrojos.¿Nohasdormidobien?Elchicousóuntonoamable,comosiempre.KimJi-youngquisocontestarle
queloschiclesmasticadosnoduermen,peroprefiriócallar.Nadamáscomenzarlasvacacionesdeinviernotrassusextosemestre,KimJi-
youngsededicódellenoalabúsquedadeempleo.Tratabademejorarsusnotas—paraello,asistíadenuevoa lasclasesen lasqueno lehabía idobienensuprimerañouniversitario—,asícomosupuntuaciónenelexameninternacionalde inglés TOEIC, pero la inseguridad prevalecía. Como quería trabajar en elámbito de las relaciones públicas y delmarketing, buscaba convocatorias de
prácticas o de concursos profesionales en las que pudiera participar.Elmayorobstáculoeraquelacarreraqueestudiabanoguardabarelacióncondichaáreaynopodíarecibirayudaalguna.Durante las vacaciones sematriculó en un centro cultural privado, no tanto
paraaprendercomoparaampliarsureddeamistades.Tuvosuertey formóungrupodeestudioconvariaspersonasqueconocióallíyconquienesnotardóensintonizar. Al principio eran tres, pero entre que alguien traía a una terceraamiga,esatraíaaotrayalgunadejabaelgrupo,quedaronsietemiembros.UnadelaschicasestudiabaAdministracióndeEmpresasenlamismauniversidadala que asistía Kim Ji-young. Se llamabaYunHye-jin. Aunque iban almismocurso,eraunañomayorqueKimJi-young,porquehabíarepetidoselectividad.Detodosmodos,hicieroncasoomisodeladiferenciadeedad.Las miembros de este grupo de estudio compartían información sobre
convocatorias de empleo y se ayudaban unas a otras para tener el mejorcurrículumposible.Participabanenprogramasdemonitoreodeproductosodepromoción comercial organizados por diferentes empresas para los estudiantesuniversitarios y se postulaban para realizar prácticas profesionales. Mientrastanto, Kim Ji-young formó equipo con Yun Hye-jin, compitieron en variosconcursosyobtuvieronalgúnqueotropremio.KimJi-youngnosepreocupómuchohastajustoantesdelanzarseseriamente
alabúsquedadeempleoyempezaraacudiraentrevistasdetrabajo.Noinsistíaentrabajarenunaempresagrande,puessilafilosofíadeladireccióncoincidíacon la suya y si podía conseguir el puesto al que aspiraba, no le importaríahacerlo para una organización pequeña. Su amiga era más pesimista, aunqueteníamejoresnotas,mejorpuntuaciónenelexamendeinglésymáscertificadosdeaptitudprofesional—comoeldemanejodeordenadoresodemáquinasdeescribirautomáticas—y,además,estudiabaunacarreramuchomásdemandada.Decíaque ibaa tenerdificultadespara conseguir trabajo, aunque fuera enunacompañíade reputacióndudosayen laqueni siquiera tendría la seguridadderecibirlapagamensualpuntualmente.—¿Porquédiceseso?—lepreguntóKimJi-young.—Porquenuestrauniversidadnoesdelasmejores.—Perositefijasenlosseminariosdeoportunidadesdetrabajo,haymuchos
licenciadosdenuestrauniversidadquetrabajanengrandesempresas.—Perosontodoshombres.¿Hasvistoaalgunamujerentreesoslicenciados?Elcomentariodesuamigalecayócomounmazazo.Elgolpequeladespertó.
Era exactamente como ella decía. Tras iniciar su séptimo semestre, acudió a
todoslosseminariossobreoportunidadesdetrabajoyconocióagraduadosquetrabajaban en las empresas organizadoras.Noobstante, enninguno encontró amujeresgraduadasdesuuniversidad.En2005,añoenelqueKimJi-youngsegraduó,latasadecontratacióndemujeresquedóenel29,6porciento,segúnlaencuesta efectuada a cien compañías por un sitioweb de información laboral.Basándose en tan pequeñoporcentaje, decían que era fuerte la incursión de lamujerenelmundolaboral.[11]Sinembargo,esemismoaño,enotrosondeo,el44 por ciento de los encargados de la gestión de recursos humanos de lascincuentamayores empresas del país contestó que prefería a candidatos antesqueacandidatassisatisfacíanensimilargradolosrequisitosexigidos,mientrasqueningunorespondióquecontrataríaamujeresantesqueahombres.[12]La amiga deKim Ji-young contaba que a la facultad deAdministración de
Empresas llegaban ofertas extraoficiales de trabajo por medio de laadministracióno algúnprofesor catedrático, pero que solo estudiantes varoneseran recomendadosenesoscasos.Que lasofertassehacíancon tal secretismoqueeradifícilsaberquiéneraelrecomendadoyporquérazoneslocontrataban,o qué empresa había hecho la oferta de trabajo en un principio, o si era launiversidad la que decidía recomendar únicamente a estudiantes varones o sieran los empleadores los quepedíande antemano solo candidatosmasculinos.Parailustrarlasituación,lehablódeunaestudiantequesehabíagraduadounosañosatrás.Lajoveneralamejorestudiantedesufacultad.Nolefaltabanada.Teníalas
mejoresnotasenidiomaextranjero,premiosobtenidosenvariosconcursos,unavasta experiencia en prácticas laborales, numerosos certificados de aptitudprofesionalyhastaunaactivaparticipaciónendiversosgruposestudiantilesyenprogramas de voluntariado. Había una empresa en particular en la que queríatrabajar, pero se enteródemasiado tardedeque esa firmahabía entrevistado acuatrocompañerossuyosrecomendadospor lafacultad.Losupograciasaunodeellos,quesehabíaquejadoante susamigos trasnosuperar laentrevistadetrabajo. Entonces, la joven acudió a su profesor consejero para exigir que serevelaran los criterios con arreglo a los cuales se habían hecho lasrecomendaciones y le advirtió de que, de no ser convincentes, los denunciaríapúblicamente.Tambiénfueahablarconotrosprofesores,inclusoconeldirectordelafacultad.Duranteeseproceso,losprofesoresledijeronquelaempresaleshabíadadoa entenderqueprefería aunvarónyque la recomendación eraunpremioparaaquellosestudiantesquehabíancumplidoelserviciomilitar,asíco-molagarantíaquenecesitabanparalavidaquetendríancomopadresyjefesde
familia.Enfin,ledieronunasexplicacionesqueellaconsideróinaceptables.Contodo,lapeorjustificaciónlaescuchódeldirectordelafacultad:—Unamujer demasiado inteligente es una complicación para una empresa.
¡Mírate!¿Tedascuentadelocomplicadaqueeres?Entonces,¿qué?¿Suspenderánaunamujerporserdemasiadocapaz?¿Porno
serlosuficientementecapaz?¿Oporquedarseenlamedia?Enesemomento,lajovenreconocióqueerainútilpelearydejódeprotestar.Mesesdespués,superóconéxitolaconvocatoriaoficialparalacontratacióndenuevostrabajadoresquehabíaorganizadolamismaempresaafindeaño.—Brillante,lachica.¿Yahoralevabienenesaempresa?—No.Dicenquerenuncióapenasseismesesdespués.Loquehabíavistolajoveneneseentornolaboraleraqueenlasoficinasno
habíacasimujeresenpuestosderesponsabilidadyque,cuandoellalespreguntóalrespecto,todaslasquecompartíanmesaconellaenelcomedordeempleados,sin importar el rango que tuvieran en la empresa, contestaron no haber tenidonoticiadequemujeralgunahubierapedidoelpermisodematernidad.Lehabíasurgidoelinterrogantetrasveraunaembarazadadurantelahoradelacomida.Lajovennopudoimaginarcómoseríasuvidadeahíadiezañossiseguíaenesaempresa y, tras una larga reflexión, presentó su renuncia. Su decisión fuecriticadacontonoburlón.Dijeronqueeraelclaroejemplodelaslimitacionesdela mujer, pero ella respondió rotundamente a tales críticas diciendo que esaslimitaciones no eran propias del género femenino, sino que le habían sidoimpuestasporotros.Laproporcióndemujeresquetrabajabanyquepedíanlabajapormaternidad
apenas superó el veintepor ciento en2003y el cincuentapor ciento en2009,aunquecuatrodecadadiezmujeresteníanunascondicioneslaboralesquenolespermitíanaccederaesaprestación.[13]Porsupuesto,existíatambiénunelevadonúmero de mujeres que ni siquiera formaba parte de la muestra estadísticaporque ya de por sí habían renunciado al trabajo al casarse, quedarseembarazadasyentrarenlamaternidad.Encuantoalaproporcióndemujeresenpuestosadministrativos,mostróentre2006y2014unlentoascenso,sibiennoalcanzabaelveinteporciento.[14]—Entonces,¿esachicaquéhace?—Aprobó el año pasado el examen nacional para la función judicial. Fue
noticiaporquese tratóde laprimeravezenañosqueunagraduadadenuestrauniversidadsuperabaesaprueba.Colgaronpancartasytodoparafelicitarla.—Ahora que lo dices, me acuerdo de aquello. También en aquel entonces
penséqueeraunachicabrillante.—Pero es un chiste, ¿no te parece? Después de acusarla de ser una mujer
difícil porque era demasiado inteligente, querían presumir de que habíaestudiadoenestauniversidad.Yesoquesepreparóparaeseexamenporcuentapropia,sinayudadenadie,muchomenosdelauniversidadodesusprofesores.KimJi-youngtuvolasensacióndeencontrarseenuncallejónllenodeniebla
y, cuando comenzó la época de las convocatorias de empleo, sintió que esaniebla se transformabaendensasgotasde lluviaque impactaban sobre supieldesnuda.KimJi-youngaspirabaatrabajarenunaempresaalimenticia,perosepresentó
comocandidataatodaslasofertasdeempleoqueencontrósinimportarel tipode trabajo ni si la empresa contratante era relativamente grande. Entregó sucurrículumencuarentay trescompañíasy todas la rechazaron.Comosegundaopción, acudió como candidata a las convocatorias de empleo de dieciochoempresaspequeñasperoconsolidadas.Tampocotuvoéxito.Esmás,nisiquierale dieron la oportunidad de tener una entrevista. Su amiga Yun Hye-jin, encambio, sí pasaba a menudo a la segunda fase del proceso de selección denuevos trabajadores. Incluso tuvo varias entrevistas, aunque no logró sercontratada.Así,ambasempezaronaenviarsuscurrículosindiscriminadamenteyKim Ji-young cometió el error de mandar a una empresa la misma carta depresentación que había usado para presentarse a una convocatoria de empleoprevia,sinactualizarlanicambiarelnombredelacompañíaalaquesedirigía.Irónicamente,recibióporprimeravezelavisodeacudiraunaentrevista.A partir de ese momento se puso a investigar qué clase de empresa era
aquella. Básicamente producía juguetes, artículos escolares y objetos de usodiario; sin embargo, no hacía mucho tiempo que había empezado a fabricarartículospromocionalesparaartistasydemáscelebridadesencolaboraciónconagencias de representación artística, un negocio que le había resultado muyrentable y gracias al cual creció rápidamente. Así vendía a altos preciosproductossinmuchautilidad,comomuñecos,diarios íntimosy tazas.Enotraspalabras, era una empresa que hacía dinero vaciando el bolsillo de niños yadolescentes.KimJi-youngestabaperpleja.Nosesintióentusiasmadamientrasesperaba a que le hicieran la entrevista, pero extrañamente aquella fue solo alcomienzo,puesamedidaqueseacercabaeldíalenacióciertasimpatíahacialaempresayalfinaldeseabafervientementeconseguirelpuesto.
El día antes de la entrevista ensayó hasta tarde con su hermana cómoresponderalaspreguntas.Seacostódespuésdelaunadelamadrugadaconunacapagenerosadecremahumectanteenlacara,peronopudoconciliarelsueño.No podía moverse libremente por miedo a dejar manchas de crema en lassábanasyasí,completamenteinmóvilsobrelacamasalvoporelmovimientodesus párpados, logró dormirse poco antes del amanecer. Tuvo varios sueñosinconclusos y por lamañana estaba cansada amás no poder. Elmaquillaje lequedó fatal. Para colmo, se durmió en el autobús y tuvo que bajarse en otraparada.Aunquenollegabatarde,tomóuntaxiparanoimpacientarseenundíatanimportante.Eltaxista,unseñormayorconelpelopeinadohaciaatrás,sefijóenellaporelespejoretrovisory lepreguntósi ibaaunaentrevistade trabajo.KimJi-youngcontestóconunsimplesí.—Eres mi primera pasajera del día, pero yo no suelo empezar mi jornada
llevandoaunamujerenmitaxi.Estavezhehechounaexcepciónyhedecididoayudarteporquetuaparienciayactitudgritanqueestásyendoaunaentrevistadetrabajo.¿Dice que ha decidido ayudarme? Por un instante creyó que el taxista se
estabaofreciendoahacerelviajesincobrar.Noobstante,enseguidacaptóloquequería decir. ¿Acaso pretende que le dé las gracias aunque le pague lo quecorresponde por la carrera? Era uno de esos individuos que a la mínima semuestrandescorteses,puesasumenqueestánhaciéndoles favoresa losdemás.Kim Ji-young cerró los ojos, no quería discutir con el taxista.Tampoco podíamedirdesdedóndeyhastaquépuntodebíaquejarse.La entrevista de trabajo se desarrolló en grupos de tres. Kim Ji-young se
presentó frente a los entrevistadores junto con otras dos chicas, ambas de unaedad similar a la suya. Las tres tenían un aspecto muy parecido, como si lohubieranacordadodeantemano,conelcabellocortadopordebajodelasorejas,loslabiospintadosderosaytrajesdecolorgrisoscuro.Elcuestionariobásicosecentraba en lo que habían escrito en sus respectivos currículos y cartas depresentación,conalgunaspreguntasadicionalessobrecómohabíasidosuépocade estudiantes y las experiencias tanto personales como laborales que habíantenido.Luego,losentrevistadoreslespidieronsuopiniónrespectoalaempresa,alsectoralquepertenecíayalasposiblesestrategiasdemarketing.Hastaahílaentrevistasiguióuncursototalmentepredecibley,portanto,lastrescandidatasrespondieron satisfactoriamente a todas las preguntas. El imprevisto ocurriócuando el hombre sentado a un extremo del escritorio, que no hacíamás quemover la cabeza en un gesto de afirmación sin abrir la boca, planteó una
situaciónhipotética:—Estáisenunareuniónconuncliente,peroesteclienteseosinsinúa.Incluso
entabla contacto físico, masajeándoos los hombros y tocándoos las piernasdisimuladamente.Entendéislasituación,¿verdad?¿Cómoreaccionaríais?Ustedprimero,señoritaKimJi-young.KimJi-youngquisodar la respuestaquecreyómásacordecon la situación,
teniendo en cuenta que iba a perder puntos tanto simostraba confusión y unaactituddemasiadopasivacomosiactuabacondemasiadarigurosidad.—Trataría de esquivar la situación de la manera más natural; por ejemplo,
yendoalbañoosaliendodeeselugarconelpretextodetraerunospapelesparalareunión.Lasegundajovenenfatizóquesetratabadeunevidentecasodeacososexual,
por lo que ahímismo le haría una advertencia a esa persona y, si aun así nocorregía su conducta, adoptaría acciones legales. El entrevistador que habíahecholapreguntafruncióelceñoyescribióunasnotasensucarpeta,perofueKimJi-younglaqueantetalcomportamientoseencogiódemiedo.Finalmentehablólaúltimacandidata,quehabíatenidomástiempoqueelrestoparapensarcuálpodíaserlarespuestaejemplarqueesperabanlosentrevistadores.—Primero, reflexionaría si esa situación no ha sido de alguna manera
provocadapormímisma,yaseadebidoamivestimentaoamiconductay, siefectivamente fuera una falta mía la causa del comportamiento indebido delcliente,trataríaderectificarla.Lasegundacandidatadiounfuertesuspiro,exteriorizandosufastidioantetal
absurdo.KimJi-young tambiénsintióunsaboramargoen labocaalpensar lobajo que había que caer para conseguir un trabajo. Pero, almismo tiempo, searrepintiódenohaberdadounarespuestacomoaquella—quedesdeelpuntodevista de los entrevistadores podía ser la acertada, según su criterio— y, alpercatarsedetalarrepentimiento,pensódesímismaqueerapatética.Varios días después, le comunicaron por correo electrónico que no había
conseguido el trabajo. ¿Habría sido por aquella última respuesta? Al final nopudo con la intriga y llamó a la empresa para preguntar por qué no la habíancontratado.EldeRecursosHumanoslecontestóquenodebíadehabersidoporuna respuesta en particular. Que era importante que empatizara con losentrevistadores.Quequizánoestuvieradestinadaatrabajarenesaempresa.Sucontestación,sibienparecíasacadadeunmanual,latranquilizó.Comosesentíamejor,KimJi-youngpreguntóporlasotrasdoscandidatasquehabíanhecholaentrevista con ella.El responsabledeRecursosHumanos titubeó al oírla decir
quenoteníaotrasintenciones,quesoloqueríatenereldatocomoreferenciaparasusfuturasentrevistasdetrabajo.—Ayúdeme.Estoydesesperada.Entonces, la voz al otro lado de la línea le aclaró que esas dos tampoco
estabanenlalistadelosaceptados.«Entiendo»,dijoKimJi-young,desanimada.Pensó que habría sido mejor decir todo lo que hubiera querido si, de todosmodos,noibaaconseguireltrabajo.—Aesetipodepervertidoshayquepararleslospies.Yustedtampocohace
bien.Plantearpreguntascomoesaenunaentrevistadetrabajoesacososexual.¿Acasolespreguntaesotambiénaloscandidatosvarones?Sacólaspalabrasqueteníaatragantadasenvozalta,frentealespejo.Aunasí,
nosesintiódeltododesahogada.Seacalorabaderabiainclusocuandoestabaenla cama y pataleaba sin poder dormir. Después de esa experiencia, acudió amuchas más entrevistas de trabajo y en varias fue víctima de comentariosvulgaressobresuaparienciaosuformadevestir,demiradasdepravadashaciaciertaspartesdesucuerpoydecontactosfísicosinnecesarios.Perofracasóynoencontró un empleo. Valoró si debía postergar su graduación, hacer un alto einterrumpir el semestre o irse a un país extranjero a estudiar inglés ante lainfructuosabúsquedadetrabajo.Yasíterminóelotoño,improductivo,sinquelequedaraotracosamásalládelagraduación.Tanto su hermana como su madre le decían que no se apresurara. Sin
embargo, sus consejos no le sirvierondemucho.Su amigaYunHye-jin habíaempezado a prepararse para trabajar en el sector público y le propuso seguirjuntas ese camino. Kim Ji-young no lograba decidirse. En primer lugar, lasoposicionesnoeransufuerteyteníamiedodesuspenderlas.Entoncessíquenotendríamásopciones,porquehabríaperdidotiempopreparándoseyacumularíaaún más años sin experiencia profesional. Por eso, bajó cada vez más susestándaresy siguióenviado sucurrículoaofertasde trabajo.Enmediodeesaetapadedesesperación,inicióunarelación.Sololehablódeelloasuhermana,peroestalamiróynegóconlacabezacomogestodedesaprobación.—¿Cómoseteocurremeterteenesoenestasituación?¿Cómopuedestener
ahoraesetipodesentimientos?Anda,quetútambién…KimJi-youngserioanteesecomentario.Eraciertoquesehabíaenamorado
enunmomentoenelquecualquierotrapersonapondríafinaunnoviazgoparanodesconcentrarsey,porende,nosabíacómoreaccionar.Vioqueempezabana
caercoposdenievealotroladodelaventanayseacordódeunpoemaquehabíaleídotiempoatrás:Noseignoralasoledadporqueseseapobre.Enelcallejóncubiertodenieveporelquevuelvotrasdespedirmedeti,sederramalaluzazuldelaluna…ElnuevonoviodeKimJi-youngeraunamigodelainfanciadeYunHye-jin.
Eraunañomayorqueellayaúnestabaestudiando,despuésdehaberfinalizadoel servicio militar. Entendía mejor que nadie su situación. No expresaba unoptimismociego.Tampocoleofrecíapalabrasdeconsueloirresponsables,comoquenadapasabaporretrasarseunpocoenlabúsquedadetrabajo.Muchomenoslerecriminabasuinsuficientepreparación.Semanteníaasuladosinopinar,paraayudaren loquefueranecesarioe invitarlaaunascopassisuesfuerzonoerarecompensadoconelresultadoqueesperaba.A falta de dos días para la graduación, toda la familia deKim Ji-young se
sentóalamesaadesayunar.Asupadre,quedudabaentrecerrarelrestauranteeldíadelagraduacióndesusegundahijayabrirlosoloporlanoche,KimJi-youngleaclaróquenoibaaacudiralaceremonia.Elpadrevertiósobreellatodaclasedereprochesycriticósuactitud,pero,extrañamente,suspalabrasnolahirieron.Enaquellaépocanadalainquietaba,sololapalabrarechazo.Entonces,alnotarquesuhijanomostrabaniunmínimodedisgustoantesusreproches,supadreagregóunúltimocomentario:—Tú,pórtatebienycásate.Nolehabíaimportadoescucharinsultosocomentariospeores,perodepronto
KimJi-youngnopudosoportaresaspalabras.Sostuvoenvertical lacucharaytrató de respirar hondo al sentir que la comida se le atascaba en la garganta.Súbitamenteseescuchóunruidocomoelqueproducíaunarocaalpartirse.Erasumadre, que había golpeado lamesa con la cuchara. Su cara estaba roja defuria.—¿Cómodicesalgo tananticuadoenunaépocacomoesta? Ji-young,no te
portesbien.Atréveteahacercosas,¡correriesgos!¿Meentiendes?Al notar la exaltación de su madre, trató de calmarla expresando que en
verdadestabadeacuerdoconellayasintiórápidamenteconlacabezaaloqueacababadeescuchar.Asupadre,del susto, lediohipo.Adecirverdad, fue laúnicavezquelafamiliavioalpadretenerhipo.KimJi-youngrecordóquehacíatiempo,unanochedeinvierno,cuandolafamiliaestabareunidaycomíabatatasconkimchi,sehabíanreídoporqueleshabíadadohipoatodos,exceptoalpadre.IgualquelaSirenitaquepierdelavoz,peroacambiovetransformarsesucolaenpiernas,¿seráqueloshombres,cuandosehacenmayores,pierdenelhipoy
adquierenideasanticuadas?KimJi-youngseacordóporunmomentodelabrujadel cuento. Su padre había dejado los comentarios impertinentes y habíarecuperadoelhipograciasalafuriadesumadre.Ese mismo día, avanzada la tarde, Kim Ji-young recibió la noticia de que
había sido aceptada en una agencia de relaciones públicas. Su angustia, suimpotenciay suhumillación eran comoel aguaque llenaunvasode cristal yaguantasinderramarsegraciasalatensiónsuperficial,ylapalabraaceptadafuela gota que colmó el vaso.Kim Ji-young lloró sin parar. La persona quemásfelizsepusoalrecibirlanoticiafuesunovio.KimJi-youngysuspadresacudieronalcampusaliviados,ytambiénlohizo
su novio. En otras palabras, era una ocasión para presentarles a sus padres alchico con quien estaba saliendo. Los cuatro, como no planeaban entrar alauditoriodondeseestabadesarrollandolaceremoniadegraduación,recorrieronel campus, se sacaron fotos y se sentaron en la cafetería para tomar algo ydescansar. Había gentío y bullicio en todas partes, y la cafetería no era laexcepción.Sunovioordenócasiagritoscuatrotiposdiferentesdecafé,lostrajoa lamesayal ladode la tazadecafécon lechede lamadredeKimJi-youngcolocó una servilleta que dobló formando un triángulo perfecto. Su padre lepreguntóconcaraseriaquéestudiaba,dóndevivíaytambiénporsufamilia,yelnoviorespondióconrespeto.AKimJi-young,sinembargo,lasituaciónlehizogracia,porloquetuvoqueagacharlacabezaymorderseloslabiosparanoreír.Sinnadamásdequehablar, loscuatroguardaronsilencioporunmomento,
hastaqueelpadrepropuso iracomer.Lamadresedirigióaély ledijoalgo,murmurandoy haciéndole señas con lamirada.Entonces el padre se aclaró lagarganta,sacólatarjetadecrédito,selapasóasuhijay,vigilandolareaccióndesumujer,ledijoaKimJi-youngqueélteníaquevolverasurestaurante,quesefueraacomerconsunovio.Justoalacabardehablar,lamadretomólasmanosdelnoviodeKimJi-youngentrelassuyas.—Hasidounplacerconocerte.Hoylodejamosaquí.Idlosdosacomeralgo
rico,alcineyadisfrutardeldía.Lapróximavez,venanuestrorestaurante.Lamadre deKim Ji-young agarró a sumarido del brazo y se retiraron. El
novio se despidió de ellos. Hizo varias reverencias hacia las espaldas de lospadres,doblandotanto lacinturaqueparecíaquequisiera tocarelsuelocon lacabeza.KimJi-youngseechóareír.—¿Noestiernamimadre?Haarregladolasituaciónparaquenotesintieras
incómodo.—Losé.Pero¿quéeslomásricodelrestaurantedetuspadres?—Todo, porque mi madre no prepara nada, es mala cocinera, pero yo he
crecidofuerteysanagraciasalacomidacompradaotraídadelrestaurante.Como los alrededores del campus estaban abarrotados de gente debido a la
graduación,ambosfueronalcentroenmetro.Talycomoleshabíaaconsejadosumadre,comieronalgorico,vieronunapelículaycadaunosecompróunlibro.ElnoviodeKimJi-youngnoestabasegurodesiestababienpagarelsuyoconlatarjetadecréditodelpadredesunovia,peroellalotranquilizó,afirmandoqueasupadrelegustabaquecompraranlibros.Entonces,escogióunlibroquedeotromodonohabríapodidoadquirirporqueerademasiadocaro.Cuandosalierondela librería, felices, cada uno con un libro tan grueso y pesado como unaenciclopedia,vieronqueestabanevando.Bajoelcieloensombrecido,lanievecaíaaunritmopausadoperouniforme,
comounobsequioquefueraigualparatodos,sibienaratossoplabaelvientoydispersabadesordenadamente loscopos.ElnoviodeKimJi-youngalargabasubrazoentodasdireccionesporquedecíaquecogerconlamanolanievequecaehacequesecumplanlosdeseos,peronotuvoéxito.Alcabodevariosintentos,uncopograndedenievecon formahexagonal seposó sobre sudedo índiceyellapreguntóquédeseohabíapedido.—Quetevayabieneneltrabajo.Quenotengasdificultadesnipenasyqueno
tecansesdemasiado.Quedesarrollestuvidaprofesionalyquemeinvitesaalgoricocuandocobreselsueldo.KimJi-youngsintióquesucorazónsellenabadesuavescoposdenieve.Fue
una sensaciónmixta: entre satisfacción, vacío interior, calidez y frío a la vez.Consideró que debería tratar de pasar menos dificultades, sufrir menos y nocansarse demasiado, como deseaba su novio, pero también actuar con másaudaciaysentidodeaventura,comolehabíaaconsejadosumadre.A lahoradelalmuerzo, ibaacomerconsu tarjetade identificacióncolgada
del cuello. Puede que otros la llevaran de esa manera para no molestarse enbuscarla cada dos por tres, peroKim Ji-young se la colgaba adrede como uncollar. En las zonas de oficinas solía ver amuchas personas que llevaban lascredenciales de identificación de la empresa para la que trabajaban, con sunombre bien visible y dentro de unos colgantes plásticos y transparentes, y lesolían provocar envidia. Siempre había querido estar entre esa gente, caminar
por las calles con una credencial en el cuello y su cartera y sumóvil en unamano,preguntándosequécomeresedía.Laagenciaderelacionespúblicasenlaqueempezóatrabajareraunaempresa
deunoscincuentaempleados,bastanteimportantedentrodesuárea.Aunquelaproporción de hombres entre los cargos ejecutivos era mucho más alta, engeneral había más trabajadoras mujeres. El ambiente laboral era bueno y loscolegas eran relativamente racionales y no demasiado individualistas. Noobstante, la carga de trabajo era pesada y eran habituales las horas extra nopagadas después de la jornada laboral o durante los fines de semana. Habíacuatro nuevos empleados, incluyendo a Kim Ji-young: dos mujeres y doshombres,yellaeralamásjoven,pueshabíaempezadoatrabajarjustodespuésdegraduarse,sininterrumpirniunsemestresusestudiosuniversitarios.Todaslasmañanas,KimJi-youngpreparabacafésparasuscompañerossegún
elgustodecadaunoyloscolocabasobresusescritorios.Cuandosalíanacomer,poníaloscubiertosdetodossobreunaservilletay,cuandoteníanquecomerenlaoficina,seencargabade tomarnotade loquequeríanyhacerelpedidoporteléfono.Tambiéneralaprimeraenrecogerlosplatos.Comoeralapersonamásjoven de su equipo, su trabajo consistía en revisar los diarios por lamañana,recopilar noticias y reportajes relacionados con sus clientes y reunirlos en uninformeconunosbrevescomentarios.Undía,lajefadesuequipolallamótrasleersuinforme.KimEun-sil era laúnicamujer entre loscuatro jefesdeequipocon losque
contabalaagencia.Teníaunahijaqueibaaprimaria,perodecuidaralaniñaymantenerlacasaseencargabasumadreparaqueellapudieraconcentrarseporentero en su carrera.Unos decíanque era unamujer envidiable, otros que eradura,mientrasquealgunoselogiaban,sinfundamento,asumarido.Comentabanque el hombre, aunque no lo conocían, debía de ser una muy buena personaporquevivíaconsusuegraenunaépocaenlaqueeramásdifícillaconvivenciacon los padres de la mujer que con los padres del marido y eran másproblemáticaslasrelacionesentresuegrayyernoquelasexistentesentresuegrasynueras.KimJi-youngpensóensumadre,quehabíavividoconsusuegraylahabíaatendidodurantediecisieteaños.Suabuelacuidabadesuhermanomenorsolo durante el tiempo que sumadre trabajaba como peluquera. Excepto eso,nuncacontribuyóalcuidadodelosniños,puesjamásseencargódedardecomera sus nietos, de bañarlos o de acostarlos. Tampoco hizo en vida otras tareasdomésticas.Comíaloquepreparabasunuera,sevestíaconlaropaquesunueralavabaydormíaenlahabitaciónquesunueralimpiaba.Peronadiesereferíaa
sumadrecomounaexcelentepersona.La jefa la felicitó mientras le devolvía el informe. Le dijo que seguía con
atención su trabajo, que tenía buen ojo para seleccionar los reportajes másapropiados y que sus comentarios eran certeros. La alentó a que continuaraesforzándose.FueelprimerreconocimientoqueKimJi-youngrecibióenaqueltrabajoypresintióqueesaspalabrasleibanadarfuerzascadavezquesetopasecon un obstáculo en su vida profesional. Agradeció el comentario y se sintióorgullosadesímisma,perosindelatardemasiadosusatisfacción.Sujefaledijosonriente:—De ahora en adelante, amí nome prepares café. Tampoco coloquesmis
cubiertosenlosrestaurantesnirecojasmisplatos.—Perdonesilaheincomodado.—No,noesporeso.Esporqueesenoestutrabajo.Durantemuchosañosme
hefijadoenlosnuevostrabajadoresquelleganalaoficinaymehedadocuentade que las chicas, sobre todo sin son más jóvenes que el resto, asumen esastareasquenadiequierehacerporiniciativapropia.Loshombres,no.Aunqueseael menor de todos y sea nuevo en la oficina, un trabajador varón ni siquierapiensa en hacer esas tareas, a menos que alguien se lo ordene. ¿Por qué lasmujeressí?Lajefalecontóquetrabajabaenlaagenciadesdequesolohabíatrespersonas
en ella. Y que, al ver cómo crecía la empresa y maduraban los trabajadores,había cultivado dentro de sí la autoconfianza y el orgullo por su trabajo.Remarcóqueloscompañerosvaronesquehabíanempezadoatrabajarasuladohabíanllegadoaserjefesdeequipo,comoella,sinosehabíanidoaladirecciónde relaciones públicas de alguna compañía más grande o abierto sus propiasagencias.Quetodosseguíantrabajandoactivamente.Delasmujeres,encambio,noquedabanadie.Paraqueotrosnolaevaluaransoloporsucondiciónfemenina,lajefaerala
última en abandonar las cenas de trabajadores después de la jornada laboral.Siempre hacía horas extra y se ofrecía para ir a los viajes de trabajo. Inclusovolvió a la oficina apenas un mes después de dar a luz. Al principio estuvoorgullosa de símisma.Luego se sintió confundida al ver que sus compañerasrenunciabanuna trasotra.Ahora,decíaquesesentíaapenada.Lascenasfueradelhorariolaboralnoeranobligatoriasylashorasextra,eltrabajoduranteelfinde semana y los frecuentes viajes de trabajo eran un problema que debía sersolucionado con una mejor gestión de recursos humanos. Las bajas pormaternidadyparacuidardeloshijoseranunderecho.Perosucomportamiento,
de alguna manera, les había arrebatado sus derechos a las trabajadoras quellegarondespuésqueella.Cuando lapromocionaronaunpuestoconrangodeadministrador, loprimeroquehizo fue eliminar todas las cenas, excursionesoviajesfueradelhorariodetrabajoquecreyóinnecesarios.Tambiéngarantizóelaccesodetodoempleado,mujerovarón,alospermisosdebajapormaternidad,paternidad o cuidado de los hijos. Aún recordaba la emoción vivida desde lafundacióndelaempresaalcolocarunramodefloressobreelescritoriodeesasubordinada suya, la primera que había pedido un año entero de baja pormaternidadyquehabíacuidadodesushijos,parafelicitarlaporsuregresoalaoficina.—¿Quiénes?—Dejóeltrabajoalospocosmesesdevolver.La jefanopudo resolver lashorasextray las jornadas laboralesdurante los
fines de semana y, al final, aquella subordinada renunció después de andarbuscandoconquiéndejaralniño,degastargranpartedesusalarioenniñeras,depelearcontinuamenteporteléfonoconsumaridoycomorematedeaparecerun fin de semana, en la oficina con el niño. La jefa no pudo decirle nada aaquellaempleada,quenohacíamásquerepetirquelosentía.Kim Ji-young empezó su primer proyecto oficial. Tenía que escribir un
comunicadodeprensaapartirdelosresultadosdeunanálisisrealizadoporunacompañíade ropadecamaecológicasobre loscontaminantesexistentesen lassábanasusadasenloshogares.Quisohacerelmejortrabajoposible,porloquesepasódosnochesseguidasenvelaparaescribiruncomunicadodeprensadedospáginas.Lajefadijoqueestababienescrito.Noobstante,comentóqueteníaun tono demasiado periodístico, que lo que necesitaba no era un reportaje deprensa,sinountextoqueestimularaalosperiodistasarealizarunreportaje,ylemandóreescribirlo.KimJi-youngsepasóotranocheenvela.Estavezlajefalafelicitósinceramente.Elcomunicadodeprensafuedistribuidoalosmediossinmuchoretoqueylosdiarios, lasrevistasfemeninasyhasta los informativosdeimportantescanalesdetelevisióndifundieronreportajesbasándoseenesetexto.KimJi-youngyanopreparabacaféporlasmañanasnicolocabaloscubiertosnitraíavasosparaotros,ynadiedecíanada.Disfrutabadesutrabajoysellevababienconsuscompañeros.Loúnicoque
lecausabadificultadeincomodidaderaeltratoconlaprensa,conlosclientesyconlosequiposderelacionespúblicasdeotrasempresas.Ladistanciaentreellos
noseacortóconelpasodeltiemponitampococonalgomásdeexperienciaenesecampo.Paraunaagenciaderelacionespúblicas,elloseransiemprelosquemandaban.Laspersonasconquienesteníaquetratarerancasisiemprehombresmayores que ocupaban cargos importantes. Se caracterizaban por tener unsentidodehumormuypeculiar.Contabanlospeoreschistesdelmundoyellanoadivinabaenquémomentodebíareírsenicómoreaccionar.Sisereía,loschistesnoterminabannuncay,sinosereía,lepreguntabaninsistentementesilepasabaalgo.Enun restaurantedecomida tradicionaladondeacudióparaunalmuerzode
trabajo,cuandoKimJi-youngpidiógangdoenjang[15],elgerentedelaempresa,clientedelaagencia,dijo:—¿Siendotanjovensabescomergangdoenjang?¿LaseñoritaKimestambién
unachicadoenjang?[16]Jajaja.«Chicadoenjang»eraunaexpresiónsatíricaquesereferíaalasmujeresque,
comodependíandesuspadresodeunhombre,sedabantodaclasedelujos.Eraunode losnumerososneologismosque se inventaronentoncesparaburlarseodenigraralasmujeres.KimJi-youngnosabíasilohabíadichoenbromaosiseestababurlandodeella.Sepreguntabasiconoceríaelverdaderosignificadodeesaexpresión.Comoelgerentereía,suempleadotambiénrio,mientrasqueKimJi-youngy lacompañeraqueestabaconella tratarondecambiarel temade laconversación mostrando una sonrisa incómoda, al no poder ponerse seriasporqueelclienteseestabariendo.Peroesopasabasiempre.En una ocasión, el equipo de relaciones públicas de una empresa bastante
conocida invitó a Kim Ji-young y a su jefa a cenar. Las invitaron paraagradecerleselbuentrabajoquehabíanrealizadoalencargarsedelasactividadesconmemorativasdelaniversariodelacompañía,desdelaplanificaciónhastalaorganizaciónyladistribucióndecomunicadosdeprensa.Enelviajeentaxiallugardelacena,enunazonauniversitaria,lajefamanifestóclaramentequenoqueríair.—Si están tan agradecidos, nos deberían pagar más o enviarnos algún
obsequio. ¿Acaso no es obvio por qué nos invitan, aun cuando saben quesituacionescomoestanosincomodan?Loquepretendenesdejarclarounavezmásquiénessonlosquemandan.Odioesto,peroloaguantaréunaúltimavez.De la empresa que había contratado los servicios de la agencia deKim Ji-
younghabíanacudidoalacenaeldirectordelequipoderelacionespúblicas,unhombreentradoen lacincuentena; el subdirector,unhombredeunoscuarentaaños; el gerente, un treintañero; y tres trabajadoras veinteañeras sin cargo. En
total,eranseis.Mientrastanto,delaagenciadeKimJi-youngacudieronsujefa,unodesuscompañerosvaronesyella.Eldirector,queyateníalacararojaporelalcohol, actuó con excesiva alegría al ver a Kim Ji-young, y el gerente, queestabasentadoalladodeél,selevantó,sellevóconsigosuvasoysuscubiertos,y lecediósu lugar,dándole indicacionescon lamiradaparaquesesentara.Eldirector rio elogiando la sagacidad de su subordinado, pero Kim Ji-young nosupobienquéhacer.Sesentíahumilladaypornadadelmundoqueríasentarseasu lado.Exteriorizósu rechazovariasvecese insistióenquemejor se sentabacon su jefa y su compañero. Sin embargo, de nada sirvió. El subdirector y elgerentelallevaronadondeestabaeldirector.Sucompañerosequedómirándolanervioso, sin hacer nada, y su jefa, que había ido al baño, regresó a lamesacuandotodoesealborotoyahabíaterminado.Alfinal,KimJi-youngsesentóallado del director, levantó su copa cada vez que este le servía cerveza y bebióvariasvecesseguidasporobligación.El director, que decía que había sido transferido desde el departamento de
desarrollodeproductosalequipoderelacionespúblicashacíaunostresmeses,noparódedarconsejossobreeltrabajoderelacionespúblicasymarketingconarregloasuexperiencia.ComentóqueKimJi-youngteníaunrostrofinoyunanarizestilizada,porloquesolonecesitaríaunacirugíaplásticaparatenerdoblepárpadoyagrandarlosojos,quiénsabesilohizoparaelogiarsubellezaodarleconsejossobreestética.Tambiénlepreguntósiteníanovio.Entonceslanzóunoschistes subidos de tono, diciendo que sonmás excitantes los goles si uno losmeteenunaporteríaconporterooquepuedehabermujeresquenuncalohayanhecho,peroningunaquelohayahechosolounavez.Lopeor,sinembargo,eraquea ella le imponíabeber constantemente.Pormuchoqueelladijeraqueyahabíabebidodemasiado,queelcaminohastasucasaerapeligrosoyqueyanoquería beber más, el director insistía, diciendo que con tantos hombres a sualrededor no tenía por qué preocuparse. «El problema sois vosotros», quisocontestar,perosetragósuspalabrasyechódisimuladamentesucervezaenotrovasooenalgúnrecipientevacío.Pasadalamedianoche,eldirectorllenóelvasodeKimJi-youngdecervezay
selevantótambaleándose.Hablóporteléfonoconalguienquehabíacontratadomedianteunserviciodechóferesparapersonasquenoestánencondicionesdeconducirylohizoenvoztanaltaqueresonóentodoelrestaurante.Luegolesdijoalresto:—Mi hija estudia en la universidad que queda aquí cerca.Ahora está en la
bibliotecaymeestápidiendoquevayaarecogerla,queledamiedoregresarsola
acasa.Asíque,convuestropermiso,yomeretiro.SeñoritaKimJi-young,tienequebebersetodoloquetieneensuvaso.KimJi-youngsintióquelacuerdaqueaduraspenasestabasujetandoporfin
serompía.Tutanpreciadahijapasaráporloqueyoestoypasandoahoradeaquíaunos años si sigues tratándomeasí, dijopara sus adentros.De repente, se lesubióelalcoholalacabezayleenvióasunoviounmensajedetextoparaquelavinieraarecoger,peronoobtuvorespuesta.Yasineldirectorpresente,elambientedelacenaseapagó.Unosconversaban
decosasprivadasyotrossalíanafumar,mientrasqueaunadelasmujeresdelequipode relacionespúblicasnose laveíaallíquiénsabedesdehacíacuánto.Algunos querían seguir bebiendo en otro lugar, pero la jefa de Kim Ji-youngrechazólapropuesta.Graciasaella,pudierondespedirsealfindeesagente.Lajefacogióuntaxienprimerlugaryleexplicóquedebíaregresarrápidoacasaporque su madre estaba enferma. Después, Kim Ji-young y su compañero sesentaronatomarcaféenunamesaexteriorconsombrilladeunatiendaabiertaveinticuatrohoras.Fueellaquiensugiriótomarcaféfrío,creyendoqueasíseleibaapasarelefectodelalcohol.Sinembargo,noocurriócomoellaesperaba,talvez porque ya la situación incómoda había terminado y no estaba ni tensa ninerviosa.Soloteníasueño.Entoncessequedódormidasobrelamesa,queestabacubiertademanchasdecomida,ynilosinsultosnilaspatadasdesucompañeroladespertaron.En ese momento, la llamó su novio. Estaba profundamente dormida y su
compañero contestó el teléfono, con la sola intención de pedirle que viniera arecogerla;peroesefuesugranerror.—Eh…¿Hola?SoyuncompañerodetrabajodeJi-young.—Yella…,¿dóndeestá?—Ah.Esqueestádormidayyoheatendidolallamadaporella.—¿Queestádormida?¿Quiéndiabloserestú?—No,no,noes loquepiensa.Creoqueestámalinterpretando lascosas.Es
queellahabebido…—Quierohablarconella,¡ahora!Su novio la cargó en la espalda y la llevó a casa sana y salva. Pero su
noviazgonoquedóindemnedespuésdeaquello.Para su fortuna, en el trabajo se encontró con gente buena yKim Ji-young
llevabaunavidalaboralmuchomejordeloimaginado,sinpasardificultadeso
penasysincansarsedemasiado.Confrecuenciainvitabaacomerasunovio.Lecomprabacosas,comomaletines, ropa,unacartera…Hasta lepagabael taxiaveces. Sin embargo, eran más frecuentes los días en los que su novio debíaesperarla.Esperabaaquesalieradeltrabajo,aquellegarandíasfestivosyaqueella tuviera vacaciones. El problema era que Kim Ji-young no podía tomardecisiones sobre su propio horario; por ende, su novio tenía que esperar paraconfirmar las citas entre ambos. También esperaba sus llamadas y mensajes.Desde que ella había empezado a trabajar, la frecuencia de las llamadas y losmensajesde texto entre lapareja sehabía reducidoabruptamente.Sunovio lereprochó que no pudiera dedicar un par de minutos para enviarle un cortomensajedetextoenelmetrodurantelosviajesaltrabajo,enelbaño,alahoradelalmuerzoodespuésdecomer.KimJi-youngledijoqueloquelefaltabanoeratiempo,sinotranquilidad.Similareralasituacióndeotrasparejasenlasqueunade laspartes trabajabay laotra seguía siendoestudiante.No importaba siquientrabajabaeralamujeroelhombre.Enrealidad,KimJi-youngyasesentíamalpornopoderapoyarasunovio,
queestabaenelúltimoañodeestudiosuniversitariosyempezabaaprepararseparalabúsquedadeempleo.Seacordababiendecómoélhabíaestadoasulado,alentándola, cuando ella estaba en esa misma situación. Esos recuerdos lallenaban de ternura. No obstante, en esemomento su vida también era comoestar en un campo de batalla y no podía prestar atención al bienestar de otrapersona cuandounamínimadistracciónpodía dejarle heridas sangrientas.Así,entreambosseacumulólainsatisfaccióntannaturalmentecomolohaceelpolvosobreelrefrigeradoroelestantedelbaño,queunonotaperonolimpia,sindarlemucha importancia. De esta manera, se fueron distanciando lentamente hastaque,unanoche,tuvieronunafuertediscusiónporaquellacenaconlosclientes.Su novio era consciente de que ella nunca bebía tanto como para
emborracharse,dequeesanochehabíabebidodemásporquelahabíanforzadoydequeesecompañeroquehabíacontestadosullamadanoteníanadaconella.Lo sabíamuy bien, pero eso era lo demenos. Una chispa había salpicado elpolvosecoquecubríalasemocionesenvejecidasy,debidoaesachispa,labelleépoquede lapareja sedesvanecióde forma fútil entre llamasy trasde sí solodejócenizas.Despuésdeesenoviazgo,KimJi-youngtuvotresocuatrocitasaciegas.De
loshombresalosqueconoció,conunosalióunpardevecesmás:fueronalcineycenaronjuntos.Todosesoshombreseranmuchomayoresqueella,ocupabancargos más importantes que ella y seguramente cobrarían mejores salarios.
También pagaban la comida, compraban ellos las entradas al cine o a losconciertosy lehacían regalos.Peroaninguno lepermitióacercarsemásde lodebido.En laagenciadonde trabajabadecíanquese ibaacrearunnuevoequipode
planificación.Básicamente,laagenciapromocionabasusserviciosderelacionespúblicas para ampliar su red de clientes y recibir encargos. Ahora bien, laintención era cambiar este proceso e idear un proyecto y proponérselo a otrasempresas, que serían sus potenciales socios. Por supuesto, los proyectos noserían campañas organizadas solo una vez, sino empresas a largo plazo. Lapropuesta se planteaba en un momento en el que el trabajo presentaba seriaslimitaciones,alestarunaagenciaderelacionespúblicassiempresujetaaloquepidierauordenaraelclientequecontratabaesosserviciosyal ser sus labores,porende, casimecánicas.Elpronósticoeraque, aunquenoproporcionaseunarentabilidadinmediata,siesaformadetrabajoseconsolidaba,podríagarantizarunas ganancias estables, así como el crecimiento de la compañía sin dependertantodelosclientes.Lamayoríadelostrabajadores—incluidaKimJi-young—consideraba la propuesta muy atractiva. En este ambiente, su jefa asumió ladirección del equipo de planificación y Kim Ji-young manifestó ante ella suvoluntaddeformarpartedeesenuevoequipo.—Sí,creoqueharíasunbuentrabajo.La respuesta de la jefa fue positiva, pero Kim Ji-young al final quedó
excluida. Los escogidos fueron tres colegas con rango de gerente —y conreputación de ser de los más competentes de todo el personal— y dostrabajadoresvaronesquehabíanentradoenlaagenciajuntoaella.Dentrodelaempresa, ese equipoera reconocidocomoelmáscapaze importante.Por eso,KimJi-youngylamujerquehabíaentradoatrabajarconellasesintieronmásque derrotadas. En realidad, lasmujeres teníanmejores evaluaciones. Esmás,muchos bromeaban diciendo que por qué los hombres iban tan retrasados sihabían superado la misma convocatoria que las mujeres y bajo los mismoscriterios. Ciertamente, los hombres, si bien no eran pésimos en el trabajo,siempreseencargabandelosclientesconlosqueresultabamásfáciltratar.KimJi-young,sucompañeraysusdoscompañerosvarones,porhaberentrado
en la agencia al mismo tiempo, eran inseparables. Se llevaban bien y no sepeleaban, aun cuando tenían personalidadesmuy diferentes. Sin embargo, unaextraña distancia comenzó a abrirse entre ellos después de que solo los dos
hombresfueran transferidosalequipodeplanificación.Elchatquemantenían,inclusoenhorasdetrabajo,seinterrumpió.Lomismopasóconlahoradelcaféquecompartíanaratos,paranoserreprendidosporsusjefes,lasreunionesdelalmuerzo y las salidas después de la jornada laboral. Si alguna vez seencontrabanenlospasillos,esquivabanlamiradahastapasaralladodelotroyse saludaban simplemente con los ojos. Cuando no pudo soportar más lasituación, su compañera, que era lamayor de los cuatro, sugirió tomar juntosunascopasdespuésdeltrabajo.Bebieron hasta tarde, pero nadie se emborrachó. Si antes hacían bromas
infantiles,sequejabandeloduroqueeraeltrabajoycontabanchismessobresusotroscompañeros,esedía todosestuvieronseriosdesdeelcomienzo,debidoaque la compañera de Kim Ji-young confesó haber tenido una relaciónsentimentalconalguiendelaagencia.—Peroseacabó.Asíquenomepreguntéisquiénes.Noos imaginéiscosas
rarasyospidoquenohabléisdeestoenotrolugaroconotrapersona.Enfin,sientoquehehechomal.Necesitoconsuelo.AKimJi-younglevinieronalamentelosnombresdelospocossolterosque
había en la agencia, hasta que de súbito pensó que podría no haber sido unhombrequeestuvierasoltero.Entonceslediounfuertedolordecabeza.Losdoscompañerossebebieronsuscervezasdeuntrago.Derepente,unodeellosdijoestar preocupadopor su hermano, que seguía sin encontrar trabajo después dehaberse graduado el año anterior. Aludió al préstamo estudiantil que habíarecibido y que todavía no había logrado saldar, y expresó dudas sobre si suhermanopodríaalgúndíalibrarsedeladeuda,pueshabíasolicitadounimportemuygrande para cubrir sus gastos académicos.El otro compañero se rascó lanucaconincomodidad.—¿Eslahoradelasconfesiones?¿Tambiényotengoquerevelaralgo?Pues
creoquenosirvoparaelequipodeplanificación.Esa noche, Kim Ji-young se enteró de muchas cosas. Se enteró de que la
composicióndelequipohabíareflejadoalcienporcienlavoluntadylaopinióndelpresidentedelaempresa,dequelainclusióndelostresgerentesfamososporsucompetenciaprofesionalfueparaqueelnuevoequiposeconsolidaramejorymásrápido,ydequefueronescogidossolovaronesporqueelequiporealizaríaproyectosalargoplazo.Elpresidentedelaempresaaseverabaque,debidoalaintensidadyal tipode trabajo,eradurocompatibilizar laactividadprofesionalcon lavidamatrimonialyaúnpeorconelcuidadode loshijos,deahíquenoconsiderarancolegasduraderasalasmujeres,perotampocoplaneabainvertiren
mejorar las prestaciones a los trabajadores. Así, alegaba que ayudar adesarrollarseaaquellosquefuesenaaguantarensupuestoeramáseficazquepropiciar las condiciones necesarias para ayudar a aquellas que en algúnmomento ibana renunciaraseguir trabajando.Esaera también la razónpor laquedelegabaeltratoconclientesdifícilesaKimJi-youngyasucompañera.Noeraporqueconfiaramásenellas,sinoporquenoqueríafatigaralosempleadosvaronesconquienesdebíatrabajartantotiempo.Kim Ji-young tuvo la sensación de estar en un laberinto. Intentó hallar la
salidaconcalmayrespetandolasreglas,perolaalertarondequeese laberintoestabalisayllanamentecerradoynoteníasalida.Entoncessedeprimióyotrosledijeronqueteníaqueesforzarsemás.Elobjetivodetodoempresarioesganardinero,porloquenoselepuedecriticarportratardesacarelmayorprovechode sus inversiones. Sin embargo, ¿será justo priorizar en todo momento laeficacia inmediatamente visible? ¿Qué quedará al final en unmundo injusto?¿Seránfelicesquienespermanezcanallí?Asimismo,seenteródequesuscompañeroscobrabanmásquelasmujeresya
desde que empezaban a trabajar. No obstante, esa información no le impactótanto, quizá porque ya había usado toda la reserva de conmoción y decepciónque tenía para esa noche. No estaba segura de si podría concentrarse en eltrabajoyseguirconfiandoenelpresidentedelaagenciayensusjefes.Aunasí,alamañanasiguientefuealaoficinacomodecostumbre,despuésdetomaralgoparalaresacayderecuperarlalucidez.Cumpliócontodoloqueteníaquehacer,como siempre. Pese a ello, su pasión y su confianza habían quedadomortalmenteheridas.Corea del Sur es la nación con la mayor brecha salarial entre hombres y
mujeresdentrodelaOCDE.Segúnlasestadísticasde2014,sielsalariomediodeloshombresfuerade1.000dólares,eldelasmujeresdelosestadosmiembrosdeesaorganizacióninternacionalseríade844,ydeapenas635enelcasodelassurcoreanas.[17]La revista británicaTheEconomist ha informado, además, dequeCoreadelSurpresentaunodelosmásaltosíndicesdetechodecristalenelmundo, lo que lo convierte en uno de los países en los que las mujerestrabajadorassetopanconmayoresdificultades.[18]
2012-2015
Lospadresde ambos sevieronpara concertar losdetallesde laboda enun
restaurante de comida tradicional en el barrio de Gangnam, al sur de Seúl.Intercambiaronsaludosformales,diciéndose«muchogusto»ypreguntandosinohabíasidodifícilelviajehastalacapital.Luegosehizounlargosilencio.Quienrompió el silencio fue lamadre de JeongDae-hyeon, que empezó a alabar laconductadeKimJi-young,aquienhabíavistosolounpardeveces.Dijoqueleparecíaunachicaserena,sociableyperspicaz.Recordócómosehabíaacordadodequeellanotomabacaféylehabíacompradotélasegundavezquesevieron,y tambiénde lo rápidoquesepercatódeque teníagripe soloconescuchar suvoz.Ignorabaqueeltéhabíasidounarecomendaciónhechaporunaempleadadelcentrocomercial,considerandoelpresupuestodisponible,yquelapreguntadesiteníagripelahabíahechosoloporqueeraépocadecambiodeestaciónynoporquenotaraalgo raroensuvoz.Alpensarquecomportamientos sin sentidopodían ser interpretados de tan diversas maneras, Kim Ji-young se sintiópresionada. Pero su madre rio con orgullo, contenta de escuchar a su futuraconsuegra.—Lasobrevalora.Paralaedadquetiene,esunaniña.Nosabehacernada.Lamadre de Kim Ji-young hizo bromas que sonaron como justificaciones:
«Nosabehacernadaporqueyonosoportodejarcosaspendientesy,poreso,meencargo de todo antes que los demás», «Por eso mis hijos no tuvieronoportunidaddeayudarmeconlosquehaceresdelacasa»,«Peroalgoharán,oalmenos cocerán arroz, si no quieren pasar hambre». La madre de su noviocoincidió con ella. Los chicos de hoy son todos así, recalcó.Ambas hablarondurante un buen rato sobre cómo sus hijas estudiaban y trabajabancómodamente,hastaquelamadredeJeongDae-hyeondijoalfinal:—Nadie puede hacerlo todo bien desde el principio. Todos aprenden con
tiempoyexperiencia.Suhijatambiénaprenderá.No,suegra,yonoestaríatansegura.Lastareasdomésticaslashacemejorsu
hijo, que ya tiene experiencia viviendo solo y prometió encargarse de esosquehaceres también después de casarnos. Kim Ji-young se guardó todas esas
cosasdentro,callóysonrió.Lomismohizosunovio.La pareja juntó el depósito del alquiler del pequeño apartamento en el que
estaba viviendo Jeong Dae-hyeon, los ahorros de ambos y el dinero de unpréstamoquepidieronparaarrendarunpisodeunosochentametroscuadrados,comprarlosmueblesyotrascosasquenecesitarían,yparacosteartantolabodacomo el viaje de luna de miel. Así, gracias al dinero del depósito, que erabastantecuantioso,y losahorrosqueamboshabíanacumuladoconesfuerzoysin despilfarrar, pudieron casarse sin pedir ayuda a sus padres.Ambos habíanempezadoatrabajarcasiporlamismaépoca.Sinembargo,élteníamásahorrosque ella, que vivía con sus padres y por ende no tenía gastos extra, porqueganaba más. La empresa en la que trabajaba era mucho mayor. Aunconsiderandolascondicioneslaboralestanprecariasdelsectoralquepertenecía,KimJi-youngnuncaimaginóqueladiferenciadesalariosfuesetangrande.Sesintióuntantofrustrada.Lavidaenparejaeramejordeloprevisto.Sibienhabíamuchosdíasenlos
quenocompartíansiquieraunacomida,puesambossalíantardedeltrabajoyamenudoteníanqueiralaoficinalosfinesdesemana,avecesibanalcineaveruna película de la sesión demedianoche o se quedaban en casa y encargabancomidaadomicilio.Siun findesemanano teníanque trabajar,dormíanhastatarde y desayunaban las tostadas que preparaba JeongDae-hyeon,mientras sereíanconelprogramadecinequedabanenlatelevisióntodoslosdomingosporlamañana. Era como una prolongación del noviazgo o como jugar a papás ymamás.Sucedióunmiércoles,aproximadamenteunmesdespuésdelaboda.KimJi-
youngregresóacasaenelúltimometrodelanochetrashaberestadotrabajandohorasextra.Sumarido,despuésdevolveracasa,habíapreparadounos fideosinstantáneos,habíalavadolosplatosyhabíaordenadoelrefrigerador.Luegosequedó esperándola,mirando la televisión y doblando la ropa limpia. Sobre lamesa había un papel: la solicitud de inscripción de matrimonio. Lo habíaimprimidoenlaoficinayeldocumentoyateníalasfirmasdedostestigos:doscolegassuyos.AKimJi-youngseleescaparonunasrisas.—¿Aquésedebelaprisa?Yahemostenidonuestrabodayestamosviviendo
juntos.Novaacambiarnadaconunpapel.—Cambiaráelgradodecompromiso.Aellanoledisgustabaquesumaridosedieraprisaconlainscripcióndesu
matrimonio.Lealegrabayesperanzabay,poreso,sentíacomosiunaireligerohincharasuspulmones,suestómagooquiénsabequé,hastaquelarespuestadesu marido, como una aguja corta y afilada, creó un pequeño agujero en sucorazón.Lossentimientosquesehabíaninfladosedesinflaronlentamente.KimJi-youngnocreíaqueceremoniascomolabodaoprocedimientoslegalescomolainscripcióndelmatrimoniomodificasenlaactitudolamaneradepensardelagente.¿Erasumarido,quealegabaqueelgradodecompromisocambiabaconlainscripción del matrimonio, un hombre responsable? ¿O acaso era ella unapersona constante al afirmar que sus sentimientos no cambiarían, con o sinpapeles? Kim Ji-young, aunque sentía una profunda confianza en su pareja,percibióqueexistíaciertadistanciaentreambos.Losdossesentaronjuntosalamesafrentealordenadorportátilyrellenaron
lasolicitud.JeongDae-hyeonsefijóenloquemostrabalapantalla,intentandonoequivocarsealescribirencaractereschinoselnombredelpueblodelqueeraoriginariosuapellido.Hacíaunprimertrazoymirabalapantalla,otrotrazoydenuevo levantaba lamiradahacia elordenador,y asíunavez trasotra.KimJi-younghizolomismo.Leparecióqueeralaprimeravezensuvidaqueescribíaelorigendesuapellido.Rellenarlasotraspartesdelasolicitudfuemásfácil.Sumaridoseencargódeverificarlosnúmerosdeidentidaddelospadresdeambosyrellenólosespaciosvacíosparaesosdatos.Llegaronasíalquintoespacioenblanco de la solicitud:¿Se han puesto de acuerdo sobre si dar a los hijos elapellidodelamadre?—¿Cómoloquiereshacer?—preguntóKimJi-young.—¿Elqué?—Estaparte.Elespacionúmerocinco.JeongDae-hyeonleyólapreguntacincoenvozalta.Miróasumujerydijoa
laligera,comosinofueragrancosa:—MeparecequeJeongestábien…Afinalesde ladécadade losnoventaseabrióde llenoenelpaísundebate
sobreelsistemadefamiliapatriarcal,enelquetantolosvínculosmatrimonialescomo la filiación estaban bajo la autoridad ejercida por un cabeza de familiavarón. Aparecieron grupos que abogaban por la abolición de dicho sistema.Algunas personas empezaron a usar simultáneamente los apellidos paterno ymaterno, mientras que hubo también famosos que confesaban lo mucho quehabían sufrido de niños al tener un padrastro y no llevar su apellido. En esaépocaadquiriópopularidadunatelenovelasobreunamujerqueestáapuntodeperderasuhijodespuésdehaberlocriadoellasola,cuandoaparecederepenteel
padredelniño.Graciasaesaserie,KimJi-youngentendióloirracionalqueerael sistema de familia patriarcal. Claro está, había también gente que defendíaque,abolidoesesistema,laspersonasseríancomoanimalesquenoreconocenniasuspadresniasushermanosyqueenelpaísreinaríalainmoralidad.Alfinal,elsistemadefamiliapatriarcalquedóabolido.Enfebrerode2005,la
CorteConstitucionaldictaminó la inconstitucionalidaddeesesistemayafirmóquetransgredíaelprincipiodeigualdaddegénero,estipuladoenlaCartaMagna.Enseguida se promulgó el Código Civil revisado con modificaciones en lascláusulasrelacionadasconlaabolicióndelpatriarcado,queentróenvigorel1deenerode2008.Enlaactualidad,yanoexistetalsistema.Enlugardefigurarenel registro civil bajounpatriarca, ahora cadaquien aparecepor separado.Loshijosnoestánobligadosarecibirelapellidopaternoy,silospadresloacuerdanensusolicituddeinscripcióndematrimonio,aquellospuedenllevarelapellidode lamadre.Las leyes así lopermiten.Sin embargo,despuésde los sesentaycincocasosdeusodelapellidomaternoquehuboen2008,cuandofueabolidoelsistemadefamiliapatriarcal,ahorasedanapenasunosdoscientoscadaaño.—Lagranmayoríasigueusandoelapellidodelpadre.Lagentepensaráque
algo pasa si ve que una persona lleva el apellido materno. Y habrá que darexplicacionesyestarrectificandodatoscontinuamente.Tras el comentario de Kim Ji-young, su marido expresó su aprobación
asintiendo con la cabeza, y ella sintió un gran vacío en su interior. Elmundohabía cambiado muchísimo, pero las pequeñas reglas, los pactos y lascostumbresseguíansinactualizarse.Enconclusión,elmundonohabíacambiadotanto.KimJi-youngreflexionónuevamentesobreloquehabíadichosumarido,que el gradode compromisovaría con el papel de inscripcióndematrimonio.¿Sería que las leyes y los marcos institucionales regulaban los valores de laspersonas?¿Oseríanlosvaloreslosqueguiabanlasleyesylasinstituciones?Lospadresdeambosestabanalaesperade«buenasnoticias».Estos,además
deotrosfamiliares, llamabanaKimJi-youngparapreguntarlesisesentíabiencada vez que tenían sueños extraños. Así pasaron varios meses y luegoempezaronapreocuparseporsusalud.Para el cumpleaños de su suegro, el primero después de la boda, parientes
cercanos de su marido, que vivían en Busan, se reunieron aprovechando laocasión de saludar a los recién casados. Mientras preparaban la comida,almorzaban y recogían los platos, a Kim Ji-young le preguntaron si no teníanoticias,porquénolasteníayquéesfuerzoshacíaparatenerlas.Contestóqueaún no planeaba tener hijos, pero no la escucharon. A pesar de su respuesta,
dieron por sentado que la pareja tenía dificultades y empezaron a analizar lasposibles causas. Decían que a ella ya se le había pasado la edad ideal paraquedarse embarazada, que estaba demasiado delgada, que era posible que notuvierabuenacirculación—porquesiempre tenía lasmanosfrías—,quepuedeque tuviera problemas en el útero —por el grano que le había salido en labarbilla—…Enfin,elproblemaeraella.Entonces,latíapaternadeJeongDae-hyeonledijoalamadredeeste:—¿Y tú te has quedado así sin hacer nada, siendo la suegra?Encarga unas
medicinas orientales para ayudar a tu nuera a concebir.Ha debido de sentirsedesatendidadurantetodoestetiempo.Ni mucho menos se sentía así. Lo que no soportaba era esa clase de
situaciones.Gozabadebuenasaludynonecesitabaningúnmedicamento.Teníaganasdegritarqueloquedeseabaerahacerunaplanificaciónfamiliar,peronocon todos ellos, sino con sumarido. Sin embargo, lo único que dijo fue queestababien.KimJi-youngysumaridofuerondiscutiendodurantetodoelviajeencoche
deBusanaSeúl.Ellaestabadecepcionadaporquesumaridosehabíaquedadocalladomientras la tratabancomosi fueraunapersona físicamentedefectuosa.Él,mientrastanto,alegóquehabíapreferidonohablarparaevitardisgustaralosmayoresaqueelproblemasehiciesemásgrande.Noobstante,aellalepareciócarente de lógica lo que decía sumarido y a él, que sumujer era demasiadoquisquillosa. Lo de «quisquillosa» hirió nuevamente aKim Ji-young.Así, lospretextosy las justificacionesgeneraronuna reacciónencadenay ladiscusiónempezóadarvueltassobresímisma.No pararon en ningún área de descanso y, sin detener el coche, fueron
directamentealgarajequehabíaensuedificio.Despuésdeaparcarydeguardarsilencioduranteunbuenrato,JeongDae-hyeonabriólaboca:—Lohepensadodurantetodoelviajeycreoquelocorrectoesqueyodéla
cara por ti cuando te encuentres en una situación incómoda o desagradabledelantedemifamilia,porquesoyyoquienpuedehablarconmáslibertad.Porelcontrario, si ocurre algo similar conmigo y tu familia, te encargas tú dearreglarlo. En eso quedamos. Por lo que ha pasado hoy, te pido disculpas.Perdóname—anteaquello,KimJi-youngnopudoseguirenfadada.Aunquenohabía hecho nadamalo, se inhibió y dijo que entendía lo que decía—. Y, dehecho —señaló su marido—, hay una manera de no aguantar más esoscomentariosincómodos…—¿Cuáles?
—Tengamosunhijo.Sidetodasformaslovamosateneralgúndía,¿porquénointentarloahorayasíhacemosquenosdejenenpaz?Tengámosloahora,quesomosjóvenes.Hablabamuyalaligera,comosileestuvieraproponiendoasumujercomprar
caballasdeorigennoruegoocolgarunrompecabezasdeunapinturadeKlimt.Almenos esa fue la impresión que tuvoKim Ji-young.Aunque nunca habíanhabladosobreplanesdefamiliaosobrecuándoseríaelmejormomentodetenerunhijo,ella,comosumarido,eradeesaspersonasqueopinabanquetodaparejacasada debía tener hijos. Además, su marido tenía razón. Aun así, no pudodecidirse.Suhermana,quesehabíacasadounañoantesqueella,tampocoteníahijos.Y
como lamayoríadesusamigasestabanatrasadasen todo loque teníaqueverconelmatrimonioylacrianzadelosniños,nuncahabíaconocidoaunamujerembarazadaoaunreciénnacido.Nopodíaanticiparloscambiosquesufriríasucuerponisiseríanmuydrásticos,perosobretodonoteníalaseguridaddepodercompatibilizarsucarreraconelcuidadodeunniño.Asu juicio,era imposiblehacerloúnicamentedependiendodelaguarderíaodelasniñerasy,además,tantoella como su esposo trabajaban hasta tarde y no era raro que acudieran a laoficina también los fines de semana. Para colmo, sus padres no estaban encondiciones de ayudarla. De pronto, la abrumó un sentimiento de culpa queempezóacrecerenella,aldarsecuentadequeestababuscandolasmanerasdedejarleaotrapersonaunniñoquenisiquieraestabaensuvientre.¿Porquéibaadesear un niño frente al cual se iba a sentir mal al pensar que no estaríacumpliendoconsuroldemadreyalquenisiquierapodríacriarellamisma?Aloírsusfuertessuspiros,sumaridointentóanimarlaacariciándoleloshombros.—Prometo ayudarte en todo. Voy a cambiarle los pañales, le voy a dar el
biberónylavarésuropita.Kim Ji-young se esmeró en explicar con el mayor detalle posible sus
emociones,suangustiasobresipodríaseguirtrabajandodespuésdeconvertirseenmadreylaculpabilidadquesentíaporestardesdeyapreocupándoseporesascosas. Su marido la escuchó con atención y, oportunamente, asintió con lacabeza.—Peropiensanosoloenloqueperderás,sinoenloqueganarás.Serpadres
esalgomaravillosoymuysignificativo.Yaunquenoencontremosanadiequepuedacuidardelniñoyenelpeordeloscasostengasquedejartutrabajo,noteangustiestanto.Yomeharécargodetodo.Notepediréquesalgasycontribuyasalaeconomíafamiliar.
—¿Ytúquépierdes?—¿Yo?—Meestásdiciendoquenopiensesoloenloquevoyaperder.Peroesque
realmente puedo quedarme sin nada. Puede que no conserve la juventud quetengo ahora, ni la salud, ni el trabajo, ni la vida social que llevo con miscompañerasymisamigas.Puedequetengaquerenunciaratodosmisplanes,amifuturo.Tengorazonesparapensarsoloenloquevoyaperder.Perotú,¿quéperderías?—Yo…Umm…Yotampocopodrévivircomoahora.Voyatenerquevolver
acasatemprano,asíquenopodréveramisamigosfrecuentementeymesentiréincómodoen las cenas conmis colegaso trabajandohasta tarde en la oficina.Además,estarécansadoporquetendréqueayudarconlosquehaceresdelacasaaundespuésdeterminarlajornadalaboral.Ycomoelhombredelacasa…,¡sí!,llevarélacargademantenerteatiyanuestrohijo.Laresponsabilidadsobremíserátremenda.KimJi-youngtratódetomarselaspalabrasdesumaridoconobjetividad,sin
exaltarse, talycomosonaban,peronopudo.Encomparacióncon loscambiostantrascendentalesqueibanatenerlugarensuvidayquelaibanaredirigirporcompleto,lalistadesumaridoleparecíatrivial.—Ya.Entiendoqueserádifíciltambiénparati.Perotenencuentaqueyono
trabajo porque túme hayas pedido que contribuya a la economía familiar. Lohagoporquemegusta,tantotrabajarcomopercibiruningresopropio.Nodeseabaquelascosasfueranasí,peronopodíadejardepensarquetodo
aquelloeramuyinjusto.Unfindesemanafueronapasearaunjardínbotánicoquequedabacercade
sucasa.Ellugarestabarepletodeunasplantasdecolorblancoquedesconocían.Sumaridolepreguntósialgunavezhabíavistounaplantadecolorblancoyellarespondióquepodríaserunaclasedehierbaaromática.Asíquecaminaronporese campo blanco pisando suavemente esas hierbas. Al cabo de una largacaminata,vieronenmediodelcampounacosaredondayverde,deltamañodelacabezadeunniño,queseerigíaentrelasplantas.Seacercaronyvieronqueeraun rábano blanco. Ahí estaba. Un rábano grande y brillante. Lamitad estabaenterradaylaotramitadsobresalíadelatierra.KimJi-youngestirólosbrazosylolevantó.Entonces,elrábanosaliólimpio,casisintierrasobresusuperficie.El marido de Kim Ji-young le preguntó si aquello no era como un cuento
infantilquehabíaleídosobreunrábanogiganteyserio,diciendoquenopodríaexistir un sueño más extraño. Para su sorpresa, ese sueño del rábano fue elpresagiodelembarazodesumujer.KimJi-youngpadeciólaspeoresnáuseasposiblesdurantetodoelperiodode
gestación incluso hasta el últimomes y sentía ganas de vomitar con tan soloinhalarairealbostezar.Peronosufriódoloresnihinchazonesnimareos.Esosí,síntomascomomaladigestión,pesadezdeestómagoyestreñimiento,asícomopunzadasenlacintura,eranpermanentes.Entodocaso,lomásdurodeaguantareranlafatigayelsueño.Ensutrabajohabíaunareglaexcepcionalparalastrabajadorasembarazadasy
eraquepodían llegara laoficina treintaminutosmás tarderespectoalhorarioestablecido. Por eso, cuandoKim Ji-young avisó de que estaba esperando unbebé,uncompañerocomentó:—¡Quéenvidia!Ahorapuedeslevantartemástarde.Quiso hablarle acerca de las náuseas interminables, de los dolores, del
cansancio,delsueñoydeeseestadotanincómodoenelqueunayanopuedenicomer ni hacer de vientre, pero se guardó las palabras para sí. Aunque elcomentario la hirió por no proyectar ni unmínimode consideración sobre lasincomodidades y los sufrimientos que implica el embarazo, se resignó alconvencersedequealguienajenoaella,quenofueranisumaridoniunparientesuyo, nunca lo entendería. Ante su silencio, otro compañero le reprochó sucomentario:—Oye.Vendrátreintaminutostarde,perotambiénsesevaairacasatreinta
minutosdespuésqueelresto.¿Porquétecomportasasísi todostrabajamoslomismo?—Peroaquílamayoríasequedahastadespuésdelhorarioestablecido,asíque
esamediahoraesunpremioquehaobtenidoacambiodenada.Indignada,KimJi-youngdijoimpulsivamentequenopensaballegartardeala
oficina. Que iba a respetar el horario laboral y que trabajaría tanto como losdemás.Que no disfrutaría ni de unminutomás que el resto porque estuvieraembarazada. Sin embargo, a los pocos días empezó a arrepentirse de haberdeclaradoaquellosinreflexionar,yhacíaeltrayectoaltrabajounahoraantesdelo habitual porque no podía soportar elmetro atiborrado de gente durante lashoraspunta.Seplanteóquequizá lesestabaarrebatandoa suscompañeras losderechosquelescorrespondían.Seencontrabaenundilema,envirtuddelcualotrastantastrabajadorasquesehallabanensumismasituaciónerantildadasdecaradurassihacíanvalersusderechosodebíantrabajarmásduroquenuncasi
noqueríanserobjetodecríticasasí.Cuandoteníaquesalirdelaoficinapormotivosdetrabajooparaacudiralas
consultasginecológicas,amenudolecedíanelasientoenelmetro.Peroesocasinunca sucedía en las horas punta. Y cada vez que se colocaba lamano en lacintura por los fuertes dolores que sentía, racionalizaba la situaciónargumentando que no era porque la gente fuera desconsiderada, sino porquetodos estabandemasiado cansados de la vida comoparamostrar una pizca degenerosidad.Noobstante,sisetopabaconpersonasqueexpresabandisgustoorepudioconsoloverladepiefrenteaellas,seacongojaba.Unanochesaliódeltrabajounpocomástardedelonormal.Nohabíaasientos
vacíos en el metro, ni espacios libres cerca de los pasamanos. Apenas pudoencontrarunrincónparaquedarsedepiealladodeunadelaspuertasdelvagón,cuandounaseñoraqueparecía tenerpocomásdecincuentaañosse fijóensuvientre y le preguntó de cuántosmeses estaba.Kim Ji-young no quería ser elfocodeatención,porloqueesbozóunasonrisamuypoconaturalynodiounarespuestaclara.Lamujerlepreguntóentoncessisalíadeltrabajo,aloqueellacontestó que sí, asintiendo con la cabeza, para inmediatamente esquivar lamirada.—Ya empieza a dolerte la cintura, ¿verdad? Y también las rodillas y los
tobillos. Te confieso que yo me hice daño en el tobillo la semana pasadasubiendounamontañaymedueleaunquenohaganada.Sinofueraporeso,tecederíamiasiento.Seríabuenoquealguienlohiciera.Estáscansada,¿verdad?Lamujermiróalaspersonasasualrededorsinningúndisimulo.Incomodaba
atodosymásaKimJi-young,quereiteradamenteledecíaqueestababien.Peronoparecíaescucharla,demodoquepensóenirseaotrolugar.Enesemomento,lachicaqueestabasentadaalladodelamujer,vestidaconunachaquetaconlainsignia de una universidad, se levantó con cara de fastidio y, rozándole elhombro,dijo:—¿Cómopiensacuidardeunhijounamujerquetienequetrabajary,encima,
irenmetro?AKimJi-youngselesaltaronlaslágrimas.Yosoydeesaspersonasquevana
trabajarenmetroinclusoconestatripa,pensó.Sinpoderocultarlaslágrimasodejar de llorar, se bajó con prisa en la siguiente estación.Después de sollozarduranteunbuen rato sentadaenunbancoenelandén,decidió salir a lacalle.Todavíalequedabamuchoparallegaracasayestabaenunbarriocuyascallesnoreconocía.Aunasí,salió.Viounafiladetaxisjuntoalaveredaysesubióalprimero.Nohabíanadademaloenllorarenelmetrosinohabíaallígentequela
conociera, pensó. Si bien había escogido bajar del vagón, aturdida, siemprepodríahabertomadoelsiguientetren.Perosesubióauntaxi.Esedíalodecidióasíypunto.La ginecóloga, cuyo vientre era mayor que el de Kim Ji-young, le dijo
amablemente que preparara ropa de bebé de color rosa. La pareja no teníapreferenciasencuantoalsexodelbebé,peroeramásqueobvioquelosabuelosdeseaban un varón. Por eso, cuando se enteró de que la criatura dentro de suvientreeraunaniña,KimJi-youngsintióciertopesaralpresentirquetendríaquepasarporsituacionesestresantes.Sumadrelesoltó,asísinmás,queelsegundopodríaserunniño,mientrasquesusuegraledijoquenosepreocupara,quetodoestababien.Perosabíaquenadaestababien.No solo era la gente mayor la que hacía ese tipo de comentarios. Incluso
mujeres de la edad de Kim Ji-young contaban como si nada que, después detenerunaniña,sehabíansentidonerviosasdurantesusegundoembarazohastaconocer el sexo del bebé.También le dijeron que habíanmantenido la cabezaaltafrenteasussuegrostrastenerunhijovarónoquesehabíandadoellujodecomerlosmanjaresmáscarosalenterarsedequeensuvientrellevabanunniño.KimJi-youngquisoproclamarqueellatambiénmanteníalacabezaenalto,quecomía todo loque leapetecíayqueesono teníanadaqueverconel sexodelbebé, pero se calló pormiedo a que el resto concluyera que actuaba así paraocultarsucomplejodeinferioridad.Peseaacercarselafechaprobabledeparto,KimJi-youngseguíaindecisayno
podíaelegirentrepedirsoloelpermisodebajapormaternidadoeldebajaporcuidadode los hijos, que eramás largo, o bien renunciar al trabajo.Lamejoropciónparaellaerasolicitarprimeroelpermisodebajaporcuidadodeloshijosytantearlasposibilidadesdearmonizarsuvidaprofesionalysuvidademadre,aunque al final fuera a renunciar. Sin embargo, esa no era la mejor solucióndesdeelpuntodevistadelaempresaydesuscolegas.KimJi-youngconversómuchoconsumarido.Intercambiaronopinionessobre
quiénseencargaríadelcuidadodelaniña,cuántosgastosadicionalestendríanycuáles serían los pros y contras, planteando tres situaciones hipotéticas: laprimera, regreso inmediato deKim Ji-young al trabajo después de la baja pormaternidad;lasegunda,queellapidieraelpermisodematernidaddeunaño,yla
tercera, su renuncia definitiva.Amenos que la pareja cambiara de trabajo, nohabíaotraalternativaquedejaralaniñaacargodelossuegrosdeKimJi-youngenBusanocontrataraunaniñeraatiempocompleto.Lamentablemente,laopcióndepedirasussuegrosquecuidarandelaniñano
eraviable.Aunqueseofrecieronaencargarsedeella,erandemasiadomayoresy,paracolmo,asusuegralahabíanoperadorecientementedeunadislocacióndelasvértebras.Laideadetenerunaniñeraatiempocompletotampococonvencióalapareja,puesesapersona,alpermanecerensucasa,noseríameramenteunaniñera, sino alguien con quien tendrían que compartir su tiempo, su espacio ytambién su vida diaria. Entonces fuemás que obvia su duda sobre si podríanconseguir una persona con quien disfrutar de una convivencia satisfactoria,mientrasqueencontrarunaniñerayadeporsínoeratareafácil.Yaunquedieranconesapersona, elgasto seríaenorme.Además, ¿hastacuándopodrían seguirconesavida,teniendoaunaniñeraencasa?¿Aquéedadpodríasuniñairsolaalcolegioyprepararselacena?¿Cuántadesesperación,cuántasangustiasycuántosentimientodeculpaexperimentaríandurantetodoesetiempo?Alfinal,llegaronalaconclusióndequeunodelosdosdebíadejardetrabajarparahacersecargoenteramentedelcuidadode suhijayesapersonaseríaKimJi-young.Nosoloporque sumarido tenía un trabajomás estable y mejor pagado, sino tambiénporque lo aceptado socialmente era que el hombre trabajase y la mujer sequedaseencasacuidandodeestaydeloshijos.Fueunaconclusióntotalmenteprevisible.Aunasí,KimJi-youngsedeprimió.
Sumaridotratódeanimarla.—Cuando la niña sea un pocomayor, contrataremos a una niñera a tiempo
parcialylallevaremosalaguardería.Mientras,podrásestudiaroconseguirunnuevo trabajo. ¡Sí! ¡Eso! Podrías aprovechar esta ocasión para empezar unanuevacarrera.Yoteayudaré.Sumarido lo decía con total sinceridad.No obstante,Kim Ji-young, pese a
conocersuintención,seenfadó.—¿Nopuedesdejardedecirquemevasaayudar?Mehablasdeayudarenlas
tareasdelacasa,enelcuidadodelaniñaeinclusoenmiposiblenuevotrabajo.Pero¿estanoes también tucasa?Laniña, ¿acasonoes también tuhija?Ysitrabajo, ¿gasto yo sola el dinero que gano? ¿Por qué hablas como si meestuvierashaciendounfavor?KimJi-youngsintióunpocodepenaalenfadarsedespuésdehaber tomado
unadecisióndifícil.Poresosedisculpóconsumarido,quetitubeabaynosabíaquéhacer.Estecontestóquenopasabanada.
Kim Ji-young no lloró cuando le notificó su renuncia al presidente de laagencia en la que llevaba años trabajando.Tampoco cuando su jefamanifestóquelegustaríavolveratrabajarconellaalgúndía.Nollorócuandopocoapocofue trasladando sus pertenencias de la oficina a la casa, ni cuando suscompañeros leorganizaronunafiestadedespedida,niensuúltima tardeeneltrabajo.Aldíasiguiente,suprimerdíaencasa,calentólecheparasumarido,quese iba al trabajo, se despidió de él, semetió de nuevo en la cama y se quedódormida hasta las nueve de la mañana. Pensó en desayunar unas tostadas decamino al metro, tomar una sopa de soja molida a la hora de comer en unrestaurantedelqueeraclientahabitual,verunapelículasilograbasalirtempranodeltrabajoyretirareldinerodelplandeahorroscuyoplazohabíaexpirado.Sinembargo,deprontosediocuentadequeyanoteníaqueiralaoficina.Suvidahabíacambiadoeintuíaque,hastaqueseadaptaraalcambio,ibaaserimposiblehacerprevisionesyplanes.Soloentoncesseechóallorar.Habíasidosuprimertrabajo.Habíadadoallísusprimerospasosenelmundo.
Le dijeron que el mundo era una jungla y que las verdaderas amistades nollegaríandespuésdelaépocaestudiantil,peroesoresultóserciertosoloenparte.Leparecíaqueese trabajo,peseaque lehabíahechovivirmás injusticiasquealegríasyrecibirrecompensasdemasiadopobresrespectoalesfuerzoempeñado,había sido un refugio seguro, máxime porque ella ya no pertenecía a ningúnlugar.Tuvomáscompañerosbuenosquemalos. Inclusoconalgunoscongeniómejorqueconsusamigasdelcolegioodelauniversidad,alcompartirconellosintereses y gustos similares. Aunque no era un trabajo que le reportara altosingresos,que lepermitiera alzar suvozenelmundoocreargrandes cosas, lehabíaproporcionadosatisfacción.Habíaexperimentadouna sensacióndeéxitomientras cumplía con su cometido y obtenía promociones. Sobre todo, habíasentidounaprofundasatisfacciónalllevarunavidaindependientegraciasaélysentirsedueñadesupropiodestino.PerotodoesosehabíaacabadonoporqueKim Ji-young fuera incompetente o poco diligente. Del mismo modo en quedejar a los niños con otras personas para poder trabajar no era una prueba defalta de amor, renunciar al trabajo para dedicarse al cuidado de los niñostampocoeraunapruebadefaltadeprofesionalidadopasión.Kim Ji-young dejó de trabajar en 2014. Ese año, una de cada diezmujeres
casadasdeCoreadelSurrenuncióasupuestodetrabajo.Losmotivosfueronelmatrimonio,elembarazo,lamaternidad,elcuidadoylaeducacióndeloshijos.[19] La participación de las mujeres surcoreanas en la economía caedrásticamentehaciaeliniciodelamaternidad.Esmás,estatasadeparticipación
económica, que ronda el 63,8 por ciento en lasmujeres entre los veinte y losveintinueveaños,desciendeal58porcientoenlapoblaciónfemeninaentrelostreintaylostreintaynueveaños,paraaumentardenuevoal66,7porcientoenlasmujeresmayoresdecuarenta.[20]Kim Ji-youngno tuvo contracciones aunpasada la fechaprobable de parto.
Entoncesdecidieronrecurriralpartoinducido,máximeporqueelfetonodejabadecreceryel líquidoamnióticoempezabaadisminuir.Lanocheanteriora suhospitalización,ellaysumaridocomieroncuatroracionesdecarnedecerdoconarrozparacenaryseacostarontemprano.Ellanopudoconciliarelsueño.Sentíamiedoycuriosidadalavez.Tambiénseacordódealgunasanécdotasdelpasado,comocuandosuhermanahacíalosdeberesdeartesplásticas,ocuandosumadrelepreparócomidaparaunaexcursiónyolvidóelingredienteesencial,ocuandounacompañeradetrabajolecomprógalletasdearrozporquehabíavistoloquesufría por las náuseas del embarazo. Esos recuerdos le vinieron a la cabezasúbitamente, permitiéndole revivir las sensaciones y las emociones que habíatenidocuandoocurrieronaquellasanécdotas.Sequedódormidademadrugada.Durmió poco, pero tuvo varias veces el mismo sueño en el que entraba enprocesodeparto.Kim Ji-young fue al hospital a primera hora de lamañana y se cambió.Le
administraron un enema, le pusieron un sensor de movimiento para fetosalrededor del vientre y la acostaron en una cama de la sala de espera parainyectarle suero e inducir el parto. El sueño la invadió en esemomento, perocada poco aparecían dos enfermeras y una doctora mientras dormitaba parachequearcuántohabíadilatadoyladespertaban.Elchequeoeratanagresivoquedabalaimpresióndequequeríansacaralfetoconlosdedos,algomuydiferentede las revisiones que solían hacerle durante el embarazo, y cada vez que lasometíana él tenía la sensacióndequeunhuracán,un terremotoo algúnotrodesastre natural de ese tipo se producía dentro de su cuerpo. Lentamenteempezaron los dolores desde la columna vertebral y se intensificaron con lascontracciones,queseibanacortando,yKimJi-youngentregritoscasiarrancabalascosturasdelaalmohada.Losdoloresempeorabanenlacintura,comosifueraellaunmuñecodeLegoyalguienestuvieratratandodesepararleeltorsodelaspiernas,peroaunasínohabíadilatadolosuficienteylaniñanodabaseñalesdequerersalir.Trascomenzarlascontraccionesmásfuertes,repitiósolounacosa:«Quieroanestesia.Anestesia,porfavor.Porfavor…».LaanestesialesdioaKim
Ji-youngyasumaridounasdoshorasymediadepaz.Noobstante,losdoloresque la atacaron después de ese descanso fueron mucho más intensos que losanteriores.La niña nació a las cuatro de la madrugada. Al ver lo bonita que era la
criatura,KimJi-youngllorómásqueconlascontracciones.Sinembargo,labebéllorabadíaynochesinolateníaenbrazos,yKimJi-youngteníaquehacerlastareasdomésticas,iralbañoydormirllevándolaacuestas.Tambiéndebíadarlede mamar cada dos horas —por lo que no podía dormir más de dos horasseguidas—, además de dejar la casamás limpia que antes, lavar la ropa y lastoallas de la bebé y alimentarse bien ellamisma para que no se le acabara lalechematerna.Mientrashacíaesastareas,llorómásfuertequenunca.Másquenada,ledolíatodoelcuerpo.Yanopodíamoverlasmuñecas.Porello,unsábadoporlamañanadejóala
niña con sumaridoy fue al ortopedista al queunavezhabía acudidoporunalesióndetobillo.Elmédico,unseñormayor,leexplicóque,sibienlasmuñecasestaban inflamadas,noeraalgoserioy lepreguntósi realizaba trabajosen losquenecesitarausarlasmucho.KimJi-youngcontestóquehabíadadoaluzhacíapocoyelortopedistaasintió,dandoaentenderquelacomprendía.—Es natural que las articulaciones se debiliten tras el parto. Pero si estás
dando de mamar, no puedo recetarte muchos medicamentos. ¿Puedes venir afisioterapia?KimJi-youngnegóconlacabeza.—Nousesmucholasmuñecasytratadedescansar.Nohayotroremedio.—Peroes imposiblequenouse lasmuñecas.Si tengoquecuidara laniña,
lavarlaropaylimpiar…Antesussilenciosasquejas,elmédicolanzóunarisaburlona.—Enelpasadolavabanlaropaamano.Inclusopreparabanfuegoparahervir
la ropa blanca y limpiaban en cuclillas. Ahora todas tienen lavadoras yaspiradoras.Lasmujeresdehoysequejanpornada.Laropasucianoentracaminandoalalavadoraniseechaaguaydetergente
sola,nisalelimpiadelamáquinanisecolocasolasobreeltendedero.Tampocola aspiradora anda automáticamente ni lleva tras de sí un trapo mojado parafregarelsuelo.¿Sabríaesehombreusarlalavadoraolaaspiradora?Después de revisar sus antecedentes médicos, el doctor le indicó que le
recetaría medicamentos que podría tomar durante la lactancia e hizo unoscuantosclicsensuordenadorparaemitirlaprescripción.Nadiedecíaalaligeraque los doctores de antaño escribían a mano todo lo relacionado con los
pacientesysuhistorialmédico,yquelosdeahorasequejabansinrazóndequesu trabajo era duro. Tampoco que los asalariados lo tenían todo muy fácil,mientrasqueenelpasadoteníanquepresentarinformesenpapeleirdedirectoren director para obtener su visto bueno; o que los agricultores protestabandemasiadosinrecordarqueanteshabíaquesembrarsemillasycortarespigasdearroz a mano. En todos los campos, la tecnología avanzaba y la demanda demanodeobrafísicadisminuía.Peroenloquesereferíaalastareasdelhogar,nomuchos reconocían ese cambio.Desde que había asumido el papel de ama decasa,KimJi-youngpensabaquelaactituddelagentehaciaelcuidadodelhogarerauntantoambivalente.Unasvecesloinfravalorabanyacusabanalasamasdecasa de quedarse en casa sin hacer nada productivo, y otras, en cambio, loalababanylodescribíancomountrabajoquesalvavidas,sibienseguíansiendoreaciosacuantificarloendineroparaquenadietuvieraquepagarsuprecio.LamadredeKimJi-youngnopudocuidardesuhijaduranteelperiododel
posparto.Elrestaurantedegachasnomarchabacomoantesporladiversidaddeofertasquehabíayaenlazonay,parareducirelcostedepersonal,sumadresehabía puesto a trabajar en él. Así, el negocio se mantenía como paraproporcionar a sus padres lo suficiente para financiar los estudios de su únicohijovarón.Lamadre,cadavezqueteníatiempo,letraíacomidadelrestaurante.—¿Cómopuedeserque,siendotanflaquita,hayastenidounbebé,ladesde
mamar y la cuides? Estoy muy orgullosa de ti. La fuerza de una madre esgrandiosa.—Mamá, ¿cómo hiciste tú para criarme a mí y a mis hermanos? ¿No fue
duro?¿Notearrepentistedetenernos?¿Tanfuerteeres?—Nimepreguntessobreeso.Debebé,tuhermanallorabatantocomoahora.
Chillaba día y noche.Nime acuerdo de cuántas veces tuve que ir al hospitalporque no paraba de llorar. Además, erais tres. Pero tu padre ni siquieracambiabalospañalesyyodebíaservirleatuabuelalastrescomidasdeldíaalahoraexacta.Enfin,entrequeteníasueñoymedolíatodoelcuerpo,teníaotrasmilcosas.Vivíuninfierno.Sifuetandurasuvida,¿porquémamánuncahabrádichoquefuedemasiado
para ella? Pero no era solo sumadre.Ni los parientes ni otrasmujeres ni susamigaslehabíancontadoaKimJi-youngconexactitudquéimplicabatenerunhijo y criarlo. La televisión o las películas solo mostraban a niños bonitos ytiernos,einsistíanenqueunamadreesbellaygrandiosa.Porsupuesto,KimJi-
youngibaacriarasuniñaconresponsabilidadyamor.Sinembargo,pornadadelmundoqueríaescucharalagentedecirlequeestabanorgullososdeellaoqueeraestupenda.Considerabaquecumplidoscomoesosleimpediríanexpresarquelamaternidadleparecíademasiadodura.Elañoenelquesecasó,enlatelevisiónhabíanpasadoundocumentalsobre
partos humanizados. A partir de ello se publicaron varios libros relacionados,generando una cierta tendencia a preferir ese tipo de partos. La intención eraprivilegiarlavoluntaddelamujer,favorecerlamínimaintervenciónyprocurarqueel parto sedesarrollarade lamaneramásnaturalposible.Sin embargo, elnacimiento seguía siendo un proceso difícil en el que se ponían en juego lasvidasdedospersonas.Poreso,KimJi-youngoptópordaraluzenelhospital,con intervencióny ayudadeprofesionalesmédicos, pues juzgóque así estaríamás segura. Estaba convencida, además, de que esa elección dependíaenteramentedelosvaloresylascondicionesdelospadres,deahíquenofueracuestióndequémétodoeramejorycuálpeor.Apesardetodo,nopocosmediosde prensa sembraban en las mujeres un sentimiento de culpa y angustia.Advertían que los tratamientos y las drogas que les administraban a lasparturientas en los hospitales podían afectar al bebé. Gente que se tragabapastillas por un leve dolor de cabeza y que pedía anestesia hasta para quitarlunares estaba presionando a lasmadres de estemundo para que aceptaran eldolor,porquetodassufrenigual,yparaquevencieranelmiedo.Hablabancomosiesofueraamordemadre.¿Seríaaquellounareligión?¡Creedenelamordeunamadre!¡Osacercaráalcielo!—Gracias por todo, mamá. Si no fuera por ti, yo ya me habría muerto de
hambre.KimJi-youngselimitóadarlelasgraciasasumadre.Nadamáspudodecira
esasalturas.Una excolega suya la visitó un día.Dijo que se había cogido el día libre y
llegóconropaparalaniña,unpaquetedepañalesyunbrillodelabios.—¿Yestebrillodelabios?—Eselmismoqueelquetengopuesto.Bonitocolor,¿no?Comotenemosun
tonodepielsimilar,nosvaairbienalasdos—KimJi-youngagradecióquenodijera que la maternidad no eliminaba su condición de mujer y que debíaarreglarse un poco—.Lo he escogido porque pensé que te quedaría bien—ledijo.Esofuetodo.Asídesimple.Kim Ji-young se sintió feliz y en ese mismo instante se probó el brillo de
labios.Realmentelequedababien,porloquesepusoaúnmáscontenta.
Pidieroncomidachinaadomicilioyconversaronsobremuchascosas.Entretanto,KimJi-youngamamantóalaniña,lediodecomer,lecambiólospañales,se levantóconellaenbrazos,caminópor toda lacasaparacalmarsu llantoy,finalmente,ladurmió.Suexcompañeranohabíaqueridonitocaralbebé.Decíaqueteníamiedo.Sinembargo,laayudóacalentarlacomidaenelmicroondas,ledio los pañales y recogió los platos vacíos.Mientrasmiraba a la niña dormir,remarcó:—Estantiernaytanlinda…Peronolodigoporquequierateneruna.—Sí,estiernaylinda.Perotampocolodigoparasugerirtequelatengas.De
verdad.De todosmodos, si llegas a tener un bebé, te prometo pasarte la ropausadademiniña,lavadaytodo.—¿Ysiesunniño?—Notienesideadelocaraquees laropaparabebé.Sialguienteofrecelo
usadoporsubebé,lovasaquerersinimportartequesearosaodecualquierotrocolor.La excolega rio a carcajadas. Kim Ji-young le preguntó por qué se había
tomadoeldíalibre.Quisosabersinoteníamuchotrabajo,ylaexcompañeralehablódelescándaloquesehabíadesatadoaldescubrirsequehabíaunacámaraocultaenelbañodemujeresenfrentedesuoficina.Elresponsablehabíasidounveinteañero, miembro del equipo de seguridad. Unos dos años atrás, losinquilinosdeledificiohabíancontratadounanuevaempresadeseguridadyloshombresmayoresquevigilabanlasentradasfueronreemplazadosensutotalidadpor agentesmuchomás jóvenes.Unos expresaron sentirsemás seguros; otros,que les parecían más peligrosos esos hombres jóvenes y fornidos que losladrones.KimJi-young,porunmomento,sepreguntóadóndehabríanidotodosesosviejosvigilantes.La partemás repugnante fue cómo se descubrió la existencia de la cámara
oculta.Elagentedeseguridadquelahabíainstaladosubíalasimágenestomadasaunawebparaadultos,contanmalasuertequeungerentedelantiguotrabajodeKimJi-young,suscritoaesapáginaweb,lasvio.Algerenteleresultófamiliartantoeldiseño interiordelbañocomola formadevestirde lasmujeresen lasfotos,ypocodespuéssediocuentadequeesasmujereseransuscompañerasdetrabajo.Sinembargo,envezdeavisaralapolicíaoalasvíctimas,compartiólasfotos con sus colegas varones. Y no se sabía aún qué fotos habían sidocompartidas, cuántos las habían visto, durante cuánto tiempo habían estadointercambiándoselasyquétipodeconversacioneshabíantenido.Elcasoesqueun empleado, que también había visto esas fotos, le insistió a su novia—que
trabajabaenlamismaoficina—enquedebíausarlosbañosdeotrasplantas.Lamujer,sospechandoquehabíaalgomás,loatosigóconpreguntashastaenterarsede lo que sucedía. Pero ella tampoco pudo denunciarlo en público, porquemanteníasunoviazgoensecreto.Alfinal,nopudoguardarselaverdadpormástiempo y se la contó a una compañera de confianza. Esta compañera erajustamentelaexcolegaquelehabíahecholavisitaaKimJi-young.—Yoavisé a todas lasmujeres. Fuimos al baño, encontramos la cámara, lo
denunciamos a la policía y ahora el depravado de ese agente de seguridad ytodos los pervertidos en la empresa que vieron las fotos están siendoinvestigados.—¡Quéguarros!Sonunoscerdos.Kim Ji-young no pudo decir más. ¿Habrán sacado también fotos mías?, se
preguntó de pronto. ¿Habrán visto fotos mías mis excolegas? ¿Estarán eninternet? En ese momento, como si le estuviera leyendo el pensamiento, suexcompañera leaclaróque lacámarahabíasido instaladaeseverano,esdecir,despuésdequeellarenunciara.—Laverdadesqueestoyyendoaterapia.Mecomportocomosinadahubiera
pasado.Ríomás fuerteque antespara fingir quenomeafecta, peromeestoyvolviendoloca.Consolocruzarcasualmentelamiradaconundesconocido,mepreguntosiesehombrehabrávistofotosmíasy,sialguienseríe,sientoqueseestá riendodemí.Tengo la sensacióndeque todo elmundome reconoce.Lamayoríadelasmujeresenlaoficinaestánbajomedicación,siesquenovanaterapia.Inclusounafueaemergenciastrastomarunossomníferosyotrascuatrorenunciaron.Si hubiera seguido en el trabajo, Kim Ji-young también habría sido una
víctima.Estaría angustiada como sus excolegas, yendo a terapia, y finalmentehabría dejado el puesto. Nunca imaginó que personas normales y corrientespodíancorrerelriesgodequeeninternethubierafotossuyastanreveladorastanfácilmentesinsiquieraenterarsedeello.Unhombreinstalaunacámaraocultaenun baño de mujeres y otros tantos comparten las fotos tomadas allí… Laexcompañera de Kim Ji-young confesó que ya no podría confiar en ningúnhombre.—Elcolmoesqueloscompañerosinterrogadosnoshanacusadoanosotrasde
ser demasiado duras. Dicen que los hemos tratado como a unos delincuentessexuales, cuando no habían sido ellos quienes instalaron la cámara, y que loúnicoquehicieronfueverunasfotosqueestabanexpuestasenunsitiodelibreacceso.¡Perosiinstigaronundelitoalcompartiresasfotos!Nosonconscientes
dequeesoestámal.La exjefa de Kim Ji-young, junto con otras mujeres aún en estado
psicológicamenteestable,empezóatomarmedidasconelasesoramientodeunaorganizaciónfeministayseestabapreparandoparadejarlaagenciaymontarunapropia. Era el recurso que les quedaba tras exigir una disculpa pública, lapromesa de que nunca más volvería a ocurrir algo similar y sanciones a losresponsables;exigencias,porotrolado,queelpresidentedelaempresarechazóconlasolapretensióndetaparelcaso.Preguntóquépasaríaconlaagenciasielescándalo saliera a la luz. ¿Estarían satisfechas al arruinarle la vida a suscompañeros, que son también maridos, padres e hijos? ¿No sería igualmentemalo para ellas que la gente se enterara de que hay fotos reveladoras suyascirculandopor internet?Era increíblequeunhombrequeaparentaba tenerunamentemuchomásmodernaquesuscontemporáneosescupieracomentariostananticuadosoegoístas.LaexjefadeKimJi-youngexplotó:—Sucondicióndemaridos,padresehijosnoesunarazónparaperdonarlos.
Esunarazónparanocomportarsedeesamanera.Loprimero,deberíacambiarustedsumaneradepensar.Siseaferraaesosvalores,aunqueselibredeesta,sevaaenfrentaraotrosescándalossimilaresenelfuturo.Esconscientedequenoimpartióentresupersonalunadebidaeducaciónsobreabusosexual,¿no?Enrealidad,laexjefadeKimJi-youngteníamiedoyestabaexhausta.Como
ella,lasotrasvíctimasinvolucradasdeseabancerrarprontoelcasoyvolveralanormalidad.Mientraslosagresoressemortificabanytemíansufrirunapequeñapérdida,lasvíctimasdebíanlucharasumiendoquepodríanperderlotodo.Despuésdequesuhijacumplieraunaño,KimJi-youngempezóallevarlaala
guardería.Parasusorpresa,laniñaseadaptababien.Ladejabaenlaguarderíaalasnueveymediadelamañanaylarecogíaantesdelaunadelatarde,despuésdequelapequeñadesayunaraymerendaraallí.Entonceslabañabaylaacostabaparaqueseecharaunasiesta.Apartedeltiempoquesetomabaparallevaralaniñaalaguarderíaytraerladevuelta,disponíadetreshoraslibres.Sinembargo,no podía aprovechar ese tiempo solo para ella, pues debía lavar la ropa y losplatos,limpiarlacasayprepararlacomidaparasuhija.Muyrarasvecespodíatomarsesiquieraunatazadecafé.Enrealidad,eltiempolibredelasmujeresquesededicanatiempocompleto
alcuidadodehijosmenoresdedosañosesdeaproximadamentecuatrohorasydiezminutosaldía,mientrasqueeldelasmujeresquedejanasushijosacargo
deinstitucionesdecuidadoinfantilesdecuatrohorasyveinticincominutos.Enotraspalabras,hayunadiferenciamuyreducidadeapenasquinceminutos.Estosignificaquelamujer,aunquedependadeunainstitucióndecuidadoinfantil,nopuededescansar,yaquesusopcionessonsolodos:realizarlastareasdelhogarconelniñoosinél.[21]Porsupuesto,KimJi-youngseconformabaconpoderconcentrarseenlosquehaceresdomésticossinotraspreocupaciones.La maestra de la guardería le comentó que su hija se adaptaba bien y era
tranquila, por lo que podría quedarse hasta después de la siesta. PeroKim Ji-young le contestó que por un tiempo prefería dejarla solo hasta después delalmuerzo,sibienyaempezabaatenerganasdehaceralgoporsímisma,unavezquelaniñasequedaraenlaguarderíahastaporlatarde.Antes de tener a su hija,Kim Ji-young y sumarido habían saldado, con lo
ahorrado gracias a los ingresos de ambos, el préstamo recibido para cubrir elcuantiosodepósitodealquilerquenecesitabanparaarrendarunaviviendaconuncontratodealojamientosinpagosmensuales.Sinembargo,alvencerelcontratodespuésdedosaños,eldueñodelapartamentolespidióunasubidaconsiderabledeldepósitoylaparejatuvoquerecurriraotropréstamo.Comosolounodelosdostrabajaba,nopodíananticiparcuándoibanapodertenercasapropia,dondelafamilianotendríaquepreocuparseporeldinerooportenerquemudarse.Aellohabíaquesumarquelosgastosaumentaríanamedidaquecrecieralaniñayempezaraairaescuelasprivadas.Entonceslesseríamásdifícilcostearlos.Poreso, Kim Ji-young sentía la presión de trabajar. Mientras la vivienda se ibahaciendomás cara, los precios subían y los gastos de educación aumentaban,todosvivían justosdedinero, salvoque tuvieranaccesoaunagranherenciaopertenecieranalaselectaminoríadeprofesionalesconaltosingresos.Alrededor de Kim Ji-young también había muchas mujeres que se
reincorporabanaltrabajoencuantopodíandejarasushijoseninstitucionesdecuidado infantil.Había casos demujeres que se volvían autónomasdentro delsectorenelquehabíantrabajandoanteriormente.Otrasentrabanenelmercadodeserviciosdeeducaciónprivadaeimpartíanclasesparticularesoenacademias,pero la mayoría realizaba trabajos a tiempo parcial como cajeras, camareras,agentesdemantenimientodepurificadoresdeaguaadomicilioyrecepcionistasdetelemarketing.Larealidaderaquelamitaddelasmujeresquerenunciabanasutrabajosequedabanmásdecincoañossinconseguirempleo.Y,si lograbansercontratadas,porlogeneralconseguíantrabajosmenoscualificados,asícomodemenorcalidadque losqueantañohabían tenido.Dehecho, lacomparacióndelantesyeldespuésdelainterrupcióndelaactividadlaboralilustrabaquela
proporciónde empleos precarios en establecimientosminoristas conmenos decuatroempleadosseduplicabaentrelasmujerestrasretomareltrabajo.Además,era clara la disminución de mujeres en trabajos administrativos o del sectormanufacturero,mientrasquelasempleadasparaventasyserviciosdehoteleríayrestaurantesaumentaban.Pornohablardelnivelremunerativo.[22]Tras implementarse la prestación universal del permiso de maternidad, la
gente empezó a criticar que las madres jóvenes dejaran a sus hijos en lasguarderíasyseentretuvieranencafeterías,ensalonesdemanicurayencentroscomerciales. No obstante, entre las madres de treinta y tantos años, solo unapequeñaminoríapodíadisfrutardeese tipodevida.Lamayoríaservíacomidaen restaurantes, arreglaba las uñas a otras mujeres y trabajaba vendiendo ensupermercados o centros comerciales a cambio de una remuneración que nosuperabaelsalariomínimo.Despuésdetenerasuhija,cadavezquesetopabacontrabajadorasdesuedad,sepreguntabasitendríanhijos,decuántosañosyaquiénse losdejarían.Nomuchagenteaceptaba la irrefutableverdaddeque lacrisis,lainflación,lasmalascondicioneslaboralesytodasaquellasdificultadesque plantea la vida afectaban indiscriminadamente a todo el mundo,independientementedelgénero.Unamañana, Kim Ji-young dejó a su hija en la guardería y fue a hacer la
compra,yenlaheladeríaubicadaalaentradadelsupermercadovioelanunciodequeestabanbuscandopersonal.Seindicabaqueelhorariodetrabajoeradediez de lamañana a cuatro de la tarde y que el sueldo era de 5.600wones lahora,ademásdequelasamasdecasaeranbienvenidas.Leinteresólaofertayleparecióquelamujerqueservíaheladoenesemomentotambiéneraamadecasa.Entróallocalysecompróunheladoparapreguntarporelanuncio.Laempleadadelatiendalerespondióconamabilidad.Lecontóqueeramadrededoshijosyque llevaba trabajandocasi cuatroañosmientras losniños ibana laguardería,peroquenopodíaseguirporqueelmayoribaaempezarenprimaria.—Alestarenelinteriordeunedificio,entresemananohaymuchaclientelay
menoscuandoempiezaelfrío.Alprincipio,servirconelsacabolasmeproducíadolor en el brazo, pero aprendí a usarlo correctamente y no he tenido másproblemas.—Pero¿loscontratostemporalesnodeberíanconvertirseenindefinidossiun
empleadomantieneelmismotrabajodurantemásdedosaños?—Quédices. ¿Enquémundovives?Trabajos a tiempoparcial concontrato
formalyconseguro laboralnoexisten.Tedicen:«Empiezasmañana»,y listo.Enesoquedanverbalmenteytehacenunatransferenciaatucuentabancariaoa
lade tuesposo.Enmicaso, tengosuerteporquemevanapagarunapequeñaliquidaciónportodoslosañosqueheestadotrabajandoaquí.La mujer parecía preocupada por Kim Ji-young, quizá porque ambas eran
madresoporqueestaparecíademasiadoingenua.Lepidióquelaavisaraloantesposible si quería el trabajo y le dijo que retiraría el anuncio hasta que tuvieranoticiasdeella.Insistióenquenohabíamuchostrabajosqueunamujerpudierarealizarmientrasteníaaloshijosenlaguarderíayqueeseeraelmásapropiado.KimJi-younglerespondióqueloconsultaríaconsumarido.Pero,cuandoestabaapuntodesalir,lamujerledijo:—¿Sabes?Yotambiénestudiéenlauniversidad.Ante ese comentario tan inesperado, Kim Ji-young sintió de pronto una
profunda tristeza. Las palabras de esa mujer resonaban en su cabeza. Por lanoche,cuandosumaridollegóacasa,lepreguntóquéopinaba.Estelecontestóconotrapregunta:—¿Esalgoquequiereshacer?Adecirverdad,aKimJi-youngnolegustabanloshelados.Noteníaelmenor
interésenellos.Tampococreíaqueporese trabajosepondríaaestudiarsobreheladería o a trabajar en algún sector relacionado. Y por muy bien quedesempeñara su labor, no iba a obtener un contrato fijo, y mucho menos laascenderíanagerentedellocalolatransferiríanaldepartamentoquequisiera.Elsueldoaumentaríajustoloquesubieseelsalariomínimolegalcadaaño.Enfin,noleprometíaunfuturobrillante.Esosí,conocíalosbeneficiosinmediatosquetendría. Para empezar, no era nada despreciable un ingreso extra de 700.000wonesparasufamilia,quesemanteníasoloconelsueldodesumarido.Luego,aunquetrabajara,nonecesitaríacontrataraunaniñerayademáspodríaconciliarel cuidado de la niña con el empleo. Sin embargo, no lograba llegar a unadecisión.—¿Es algo que quieres hacer?—ante la insistencia de su marido, Kim Ji-
youngrespondióqueno—.Unonopuedevivirhaciendosololoqueleapetece—dijoél—.Peroyotengountrabajoquerealmentemegusta.Entonces,yonopuedoimponertealgoquenoquiereshacer,porqueyateimpedíhaceralgoquerealmentedeseabas.Demomento,estaesmipostura.Despuésdediezaños,KimJi-youngestabadenuevosumergidaenundilema
sobre su vida. Una década atrás, lo más importante eran su vocación y susintereses. Pero esta vez debía considerar muchos otros aspectos. La mayorprioridaderaelcuidadodesuhija.Debíapodertrabajardejandoalaniñaenlaguardería,sincontrataraotrapersonaquelaayudaraconella.
A pesar de haber trabajado en una agencia de relaciones públicas, siemprehabíaqueridoserperiodista.Sabíaqueaccederaconvocatoriasparaperiodistasenmediosdeprensaconsolidadosleseríadifícil,ymuchomássuperarlas.Peropensó que podía trabajar como periodista o columnista autónoma. La idea laentusiasmóporprimeravezenmuchotiempo.Primero,investigóloscursosdeformaciónalosquepodríaapuntarse.Lasclasesseimpartían,porlogeneral,porla noche, a una hora ideal para que las personas que trabajaban fueran allídespuésde terminarsu jornada.Aesahora laguarderíayanoestabaabiertayellallegaríatarde,pasadalamitaddelaclase,auncuandosumaridoregresaraacasapuntualmente.Tanteólaposibilidaddecontrataraunaniñerasoloparaesashoras. Sin embargo, era más complicado encontrar niñeras por unas cuantashorasyporunperiodolimitadoqueparaelhorarioestándar.Secansóyaanteelhecho mismo de tener que contratar a una niñera no para trabajar, sino paraacudiraunasclasesparaformarseparatrabajar.Además,losgastosadicionalesquelegeneraríanelcursoylaniñeraladejaronintranquila.Los cursos abiertos de día eran, en gran parte, para aficionados o de
preparación para obtener certificados profesionales relacionados con laenseñanzainfantil,comoeldedarguíasdelecturaoeldeprofesoraparticularderedacciónydehistoria.¿Estabansugiriendoalosqueteníandinerodisfrutardesusaficionesyalosqueno,enseñaraniños,yafueransuyosodeotros?Cuandovolvióalaheladería,yateníanunanuevaempleada.KimJi-youngsejuróasímisma que la próxima vez que viera una oferta de trabajo no titubearía,independientementedecuálfuera.El calor había remitidopor completo y se sucedieronunos días típicamente
otoñales.KimJi-youngrecogióasuhijadelaguarderíaylapusoensucarrito.Mientrasempujabaelcarritoparaquedisfrutaradelsolyde labrisaantesdeliniciodelaépocadelfrío,laniñasequedódormida.Porunmomentoconsideróregresaracasa,perodecidióseguircaminandoalverlobonitoqueestabaeldía.En la cafetería de la primera planta del edificio frente al parque ofrecíandescuentosporlainauguración.Entró,pidióuncaféparallevarysesentóenunbancodelparque.Laniñadormíababeandoyelcafé,queKimJi-youngseestaba tomandoal
airelibreporprimeravezenmuchotiempo,lesabíaagloria.Enelbancodealladohabíaungrupodeoficinistasdeunos treintaaños.Seestaban tomandoelmismo café que ella. Aun conociendo la asfixia, el cansancio y el estrés del
trabajo, los envidió y se quedó mirándolos. En ese momento, uno de losmiembrosdelgrupolamiródereojoehizouncomentarioasuscolegasenvozbaja.Kim Ji-youngnopodía entenderlo todo, pero sí captaó algunas palabras.«Yotambiénquerríahacerelvagoytomarmeuncaféenelparqueconeldineroqueganamipareja…»,«Quévidaladeestasmadresparásitas…»,«Yoconunacoreananomevoyacasar…».Kim Ji-young se apresuró a abandonar el lugar. Con las prisas hasta se
derramóelcafécalientesobrelamano.Nosediocuentadequelaniñasehabíadespertadoyestaballorando.Empujóelcarritocontodassusfuerzashastacasa.Sepasótodalatardeatontada.Ledioasuhijasopasincalentaryseolvidódeponerleelpañal,demodoqueestamojótodoloqueteníapuesto.Noseacordóde que tenía ropa dentro de la lavadora y tuvo que tenderla toda arrugadamientraslaniñadormía.Sumaridovolvióacasapasadalamedianochedebidoauna cena que había tenido con algunos compañeros. Al llegar, puso sobre lamesaunabolsaconpastelesenformadepescadoyrellenosconunapastadulcede judías rojas. Y entoncesKim Ji-young recordó que no había almorzado nicenado. Cuando le contó que no había comido en todo el día, su marido lepreguntósilepasabaalgo.—Lagentemellamamadreparásita.Alescucharsucomentario,sumaridoreaccionóconunlargosuspiro.—Soncosasquedicenlosniñosdeprimariaporinternet.Asíhablanenlared,
noenlavidareal.Nadiehablaasíenrealidad.—No, te equivocas. Me lo han dicho a mí. Ahí, en el parque que está
cruzandolacalle.Unoshombresadultos,vestidoscontrajeytodo.KimJi-younglecontóasumarido loque lehabíaocurridopor la tarde.En
ese momento solo había querido escapar de la situación, abrumada por elimpacto que le produjo la expresión y por la humillación recibida, pero alrecordarloallí,encasa,sepusorojayempezaronatemblarlelasmanos.—Paguémilquinientoswonesporesecafé.Yesostiposlosabíanporquese
estabantomandolomismo.¿Esquenotengoderechosiquieraatomaruncafédeeseprecio?Yaunquecostaraunmillóndewones,esasuntomíocómogastoeldineroqueganamimarido.Yonoteherobadoeldinero.Hetenidounahijaaguantando unos dolores que casimematan y he renunciado ami vida, amitrabajo, a mi sueño y a mí misma para cuidarla. Y eso me convierte en unaparásita.¿Quédebohacerahora?Sumaridolaabrazósuavemente.Nosabíaquédecirle,poresosololeacarició
laespalda,repitiendoquenopensaramáseneso.
De vez en cuando, Kim Ji-young se comportaba como otra persona. Unas
vecesactuabacomounapersonaqueseguíaconvida;otras,comounapersonaya fallecida.Pero lapersonapor laque sehacíapasar era todas lasvecesunamujeralaqueconocía.Noparecíaestarbromeando,nifingiendo.Realmenteeraesapersona.
2016
Hasta aquí la historia vital de Kim Ji-young, resumida a grandes rasgos a
partirdesusdeclaracionesylasdesumarido.KimJi-youngvienealaconsultadosvecesalasemanaycadasesiónduracuarentaycincominutos.Lossíntomasse han hecho menos frecuentes, pero no han desaparecido del todo. Le herecetadoantidepresivosysomníferosparaayudarlaacontrolarsudepresiónysuansiedad.Cuandoporprimeravezescuchéhablarasumaridosobresuestado,sospeché
quepodríatratarsedeuntrastornodeidentidaddisociativa,unaenfermedaddelaquesolosabíaloquehabíaleído.Sinembargo,trasconversarconellalleguéalaconclusióndequeelsuyoesuntípicocasodedepresiónpospartoseguidodeotradepresiónmaterna.Ahoraquelassesionescontinúan,noestoymuyseguro.Nomerefieroaque lapacienteseaunadeesasqueseencierraensímismaomuestra reacciones de rechazo.Ella nodice inmediatamente que está dolida oque ha sufrido una injusticia. Tampoco rememora sus traumas de la infancia.Aunquenosueletomarlapalabra,unavezqueempieza,sacahastaloqueteníaoculto en lomás profundo de su ser con expresiones claras y coherentes, sinexaltarse. Frente a los episodios de su vida que ella misma ha escogidoconfiarme,mehedadocuentadequehabíahechoundiagnósticoprematuro.Loque no quiere decir que estuviera equivocado, sino que vi que había todo unmundoquenoconocía.Sihubierasidouncuarentóncualquiera,nomehabríapercatadodeello.Yo
fui testigo de cómomi propiamujer, una oftalmóloga licenciada en lamismafacultadqueyo,queeramejorestudiantequeyoyqueteníagrandesambiciones,renunciaba a la cátedra universitaria, trabajaba en una clínica privada y,finalmente, abandonaba sucarrera.A su lado,vi lodifícil queesvivir enestepaís siendo mujer, más si se tienen hijos. Pero es obvio que los hombres loignoranporquenosonresponsablesdelcuidadodeestos;amenosque,comoyo,tenganexperienciasextraordinarias.
ConlossuegrosenotraciudadysuspadresenEstadosUnidos,mimujertuvoquesoportar la rutinadiariadedejaralniñoen laguarderíaycon lasniñeras,que tenía que sustituir cada tanto por varias razones.Cuando por fin entró enprimaria,elniñosequedabaenlaescuelahastaporlatardegraciasalserviciodecuidado extraescolar.Luego, lo recogían de la academia de taekwondo, dondeaprendíaasaltaralacuerdayesperabaaquesumadrelovinieraabuscar.Mimujerdecíaporentoncesquesesentíaunpocoaliviada.Noobstante,antesdeque finalizara el semestre recibió una llamada de la dirección del colegio. Elniñolehabíaclavadounlápizenlamanoauncompañerodeclase.Le dijeron que el niño no se estaba quieto y que andaba por toda el aula
durante las clases.Que escupía en la sopa y luego se la comía.Que les dabapatadasasuscompañeroseinsultabaasusprofesores.Mimujersesorprendió.Aunque él pataleaba porque no quería ir a la guardería y lloraba a menudo,pidiéndoleaellaquenofueraatrabajar,noeraunniñoproblemático.Esmás,mimujer jamás se había preocupado porque tuviera un carácter agresivo, pues sibienvolvíaacasacongolpesqueledabansuscompañeros,élnuncaleshabíapegado. Lamaestra le dijo que el niño podría padecer trastorno de déficit deatención con hiperactividad. Yo le remarqué que no, pero mi mujer no quisohacermecaso.—Yosoypsiquiatra—insistí—.¿Nomecrees?Despuésdemirarmeenfurecida,elladijo:—Los psiquiatras dan su diagnóstico después de conversar con el paciente,
mirándoloalosojos.¿Perotúquévasasaber?Sinopasasnidiezminutosconelniñoentodoeldía.Esmás,nienesosdiezminutosqueestásconélleprestasatención,soloestásmirandoelmóvil.¿Puedessabercómoestásoloconverloenla cama dormido? ¿Solo con escuchar su respiración? ¿Acaso eres adivino?¿Eresvidenteenvezdepsiquiatra?En aquel entonces, yo tenía mucho trabajo porque la clínica se había
trasladado a un lugar más amplio. Por el móvil intercambiaba correoselectrónicosymensajesrelacionadosconel trabajoy,depaso, leía lasnoticiaseninternet.Peronuncameentreteníaconvideojuegosoconversacionestriviales.Detodosmodos,loquealegabamimujereraciertoyyonopodíacontradecirla.Peseanoexistirunacorrelacióndirectaentreeldéficitdeatencióndelniñoylacondicióndemujer trabajadoradelamadre, lamaestra leaconsejóamimujerencargarsedelniñoatiempocompleto;almenos,durantelosañosinicialesdelaprimaria.Mimujerdecidióinterrumpirsucarrera.Aunasí,teníaquelevantarsemás tempranoquecuando ibaal trabajoparapreparareldesayuno, levantaral
niño, lavarlo, darle de comer, vestirlo y llevarlo al colegio. Terminadas lasclases,ibaarecogerloy,unavezencasa,recibíaalasprofesorasqueveníanadarlealniñoclasesdearteydepiano.Porlanoche,seacostabaenlacamadelpequeño. Repetía que en cuanto se pusiera mejor volvería al trabajo, que unamigodelauniversidadleteníaaseguradounpuesto.Pocodespués,alverqueelniñonomostrabaseñalesdemejoría, llamóaeseamigoparadecirlequenolaesperaramás.Fueelúltimodíadelaño.Amiregresoacasadespuésdeunareunióndefin
de año con unos amigos del colegio, encontré amimujer sentada a lamesa,escribiendo.Mefijébienyviqueestabaresolviendolosproblemasdeunlibrodeejerciciosmatemáticosdelniño.Unlibrocoloridoqueteníamásilustracionesyfotosquenúmeros.—¿Porquéestáshaciendotúlosdeberesdelniño?—Estamosdevacacionesyhoyendía losestudiantesdeprimariano tienen
quehacerdeberesdurantelasvacaciones,aunque,claro,túnotehasenterado.—Entonces,¿quéhaces?—Estoyresolviendolosproblemasporquemegustahacerlo.Lasmatemáticas
queenseñanahorasontotalmentediferentesalasqueaprendíamosnosotrosdeniños.Esdifícil,peromeentretiene.Miraesto.EselcuadroconlosnúmerosdelosautobusesurbanosdeSeúl.Comparandoestecuadroconelmapaylaredderutas, uno debe descifrar qué número corresponde a qué autobús. ¿No esingenioso?Adecirverdad,nomeparecióquefueratandivertidocomopararenunciaral
descanso.Perolecontestéquesísinprestaratención,porquenoqueríadiscutiryyameestabaentrandosueño.Unfindesemana,mientrasseparabalabasura,encontréunmontóndelibros
de ejercicios de matemáticas de primaria. Todos los había resuelto mi mujer.Hasta esemomento,yo creíaque los librosde ejerciciosqueencontraba en lacajadedesechosparareciclarloshabíautilizadomihijo,peroresultóquenoeraasí. Podría haber concluido que se trataba de un peculiar pasatiempo de mimujer, peromi inquietud no desapareció.Mimujer había sido una estudiantesobresalienteenmatemáticas.Cuandoestabaenelcolegio,ganabatodaclasedeconcursosmatemáticos,yenelúltimoañodebachilleratosacóciensobrecienentodoslosexámenesdeesaasignatura,yenlaselectividadseequivocóentansolo una pregunta. Yo no podía entender por qué una persona con esosantecedentesseempecinabaenresolverlosproblemasmatemáticosdesuhijodeprimaria.Cuandolepregunté,simplementemecontestóquelohacíaporquele
divertía.—¿Cómotevanadivertirproblemasdeesenivel?Sondechiste.—Mediviertenymucho,porqueaestasalturassonloúnicoquepuedohacer
amimanera.Mi mujer sigue resolviendo los problemas de esos libros de ejercicios de
matemáticasyyodeseodecorazónquepuedaencontrarcosasmásentretenidasparaella.Actividadesenlasquepuedadestacaryconlasquerealmentedisfrute.No algo de lo que deba ocuparse porque no hay otro remedio, sino algo querealmentequierahacer.Deseo tambiénqueKimJi-youngpuedaencontrarunaactividadasí.Miro la foto de mi familia sobre mi escritorio. Una foto que nos sacamos
cuandocelebramoselprimercumpleañosdelniño.Unafotoen laqueaparecenuestrohijotanpequeñoqueesirreconocible,yenlaquenosotrosestamoscasiigualqueahora.Laúltimafotofamiliarquenostomamos.Depronto,meinvadeun sentimientodeculpa.Tocana lapuertademiconsulta.Parecequealguienmássehaquedadoenlaoficina.Quien entra cuidadosamente es una de las asistentes de la clínica.Una vez
dentro, coloca una maceta con un cactus en la ventana y me da las gracias.También se disculpa y dice que algún día, si se da la oportunidad, le gustaríatrabajarnuevamenteconmigo.Yolecontestoqueesunapenaquesevayayleagradezcoelesfuerzorealizado.Añadoalgosinsentirlo:«Vuelvemásadelantepara trabajar otra vez en nuestra clínica». Es el último día de trabajo de estaasistente.Si la ginecóloga le ha recomendadoguardar reposo, ¿quéhará hastatantardeenlaoficina?—Mehequedadoparaordenarlassolicitudesdetransferenciadepacientes.Yonolehabíapreguntadonada,peroellaaclarólarazóndesupresencia.Tal
veznotóqueestabaperplejo.Hacíaunañoqueesaasistentehabíaempezadoatrabajarenlaclínica,porrecomendacióndeldirector.Despuésdellevarcasadaseis años, se había quedado por fin embarazada, pero le habían dicho que suestado era delicado.Como había sufrido varios abortos espontáneos, no quisoarriesgarseydecidiódejarel trabajo.Cuandomeavisódeque ibaarenunciar,me enfadé. No pude entender por qué tenía que renunciar, si unos meses dedescansopodríansersuficientes.Sinembargo,penséenelvacíoqueibaadejarenelpersonalcuandopidieralabajapormaternidadyenlosreiteradospermisosquefueseasolicitarparaausentarseosalirtempranodelaoficina,porqueestaba
indispuesta,porqueelniñoestabaenfermo…Enconclusión,noestanhorriblequedejeahoraeltrabajo,puesesoevitarálassituacionesincómodasquepodríanproducirsemásadelante.Peroeraunapersonacompetente.Teníaunaspectopresentable,sevestíabien,
teníabuencarácteryeraperspicaz.Inclusohabíadíasenlosquellegabaconunataza de café que pedía para mí en mi cafetería favorita, pues conocíaexactamentequétipodecafémegustabaycómodefuerte lo tomaba.Eraunapersonaquealegrabaelambiente,saludabaconunasonrisaysedirigíaatodoscon amabilidad. Por eso, su repentina renuncia hizo que algunos pacientesdecidieran ser transferidos, peromuchosmás dejaron de venir amis sesiones.Desdeelpuntodevistadelaclínica,esunapérdidaenorme.Estáclaroquenoesconveniente contratar amujeres, pormuy competentes y buenas personas quesean, amenosque tengan solucionado lodel cuidadode loshijos.Tendréqueprocurarquelanuevaasistenteestésoltera.
NotadelaautoraA menudo pienso que Kim Ji-young podría ser alguien de mi alrededor,
alguien que vive en algún lugar cercano. Y es que todas—mis amigas, miscolegas e incluso yo misma— nos parecemos a Kim Ji-young. Confieso quemientras escribía esta novela me mortificaba la situación del personaje y mecompadecía de ella. Pero sé muy bien que la forma en que fue criada y elambiente en que creció no le permitieron vivir de otramanera.Mi vida no esmuydiferentedelasuya.MialegatoensudefensaesqueKimJi-young,prudenteysinceraaltomarsus
decisiones y consciente de la responsabilidad que debe asumir de sus actos,merece una recompensa, así como el aliento de todas y todos. Merece tenermejoresoportunidadesyopcionesdevidamásdiversas.YosoymadredeunaniñacincoañosmayorquelahijadeKimJi-young.Ella
dicequedemayorquiere serastronauta,científicayescritora.Cuandomihijacrezcaelmundodebeserunlugarmejorparavivir.Confíoenqueseaasíyenquemitrabajoconsistaentratardecambiarloparabien,paraquetodaslashijasdeestemundopuedan lograrunmayorcrecimiento, llegarmásaltoyalcanzarsueñosmásgrandiosos.
ChoNam-joo,otoñode2016
Notas[1] Es la decimoquinta de las veinticuatro divisiones del año que tradicionalmente se usan en Corea.Coincideconelcomienzodelotoño.Eltérminobaeknosignificaliteralmente«rocíoblanco»eindicaqueenesaépocadelañolatemperaturanocturnadesciendepordebajodelpuntoderocío.(N.delaT.)[2]UnadelasmayoresfestividadesdeCorea,quecoincideconel15deagostosegúnelcalendariolunar.Enelcalendariogregoriano,caegeneralmenteenseptiembreo,amástardar,acomienzosdeoctubre.(N.delaT.)[3]ParkJae-heonetal.,확률가족(Familiadeprobabilidades),MatiBooks,2015,pp.57-58;«여성혐오의뿌리는?»(«¿Cuálessonlasraícesdelamisoginia?»),SisaInMagazine,n.º417.[4]«출산순위별출생성비»(«Diferenciadegéneroennacimientos»),OficinaNacionaldeEstadística.[5]KimSi-hyeongetal.,기록되지않은노동(Trabajonoregistrado),Samchang,2016,pp.21-29.[6]ParkJae-heonetal.,확률가족(Familiadeprobabilidades),MatiBooks,2015,p.61.[7]«¿Acasoporsermujernopuedoserpresidentadelconsejoestudiantil?»,diarioHankyoreh,4demayode1995.[8] «Dinámica demográfica y cambios en las tasas de dinámica poblacional», Oficina Nacional deEstadística.[9]PáginawebdelMinisteriodeIgualdaddeGéneroyFamilia.[10]«Inquietanteluchaporlamatrículauniversitaria»,AgenciaYonhap,6deabrilde2011.[11]«Clavesdelmercadolaboral2005»,diarioDongA,14dediciembrede2005.[12]«Prevaleceladiscriminaciónporgéneroyaparienciaenelempleo»,AgenciaYonhap,11dejuliode2005.[13]YunJeong-hye,«Usoactualdelpermisodebajaporcuidadodeloshijoseimplicaciones»,InformedeActualidaddelEmpleo,juliode2015.[14]Libroblancodetrabajoyempleo2015,MinisteriodeTrabajo,pp.83-84.[15]Salsatradicionaldelagastronomíacoreanahechaconpastadesojafermentadayhervidaconunpocodecaldo,verdurasyalgúntipodeproteína,comocarnederesyalmejas.(N.delaT.)[16]Pastadesojafermentada,unodeloscondimentosesencialesdelacocinacoreana.(N.delaT.)[17]«Genderwagegap»,OCDE,2014.[18] Página web de The Economist, 3 de marzo de 2016(http://www.economist.com/blogs/graphicdetail/2016/03/daily-chart-0).[19]Informe«Lavidadelamujersegúnlasestadísticas,2015»,OficinaNacionaldeEstadística.[20]«ChoiMin-jeong:Actualidadytareasdelaspolíticasdeapoyoamujeresconcarrerasinterrumpidas»,ForosobreSaludyBienestar,septiembrede2015,p.63.[21]«Elfindelasamasdecasaatiempocompleto»,revistaHankyoreh21,edición948.[22]KimYeong-ok,«Actualidaddelasmujeresconcarrerasinterrumpidasytareaspolíticas»,AnálisisdelMercadoLaboralKEIS2015.
SunombreesKimJi-young.Tiene33añosyelnombremáscomúndeCorea.SuhistoriahaincendiadoAsiaentera.
«Nisiquierayosésimecasaréosi tendréhijos.Opuedequememuera antes. ¿Por qué tengo que renunciar a lo que quiero ser ohacerporunfuturoquenosésillegaráono?»
Estanovelahapasadodeserlabrevehistoriadeunajovencoreanaa convertirse en un terremoto que ha sacudido a las mujeres demediomundo.KimJi-young(quellevaelnombremáscomúnentre
las mujeres coreanas nacidas en 1982) es aparentemente una mujer comocualquierotra,conunajuventudsinpenanigloria,siemprealasombra.Todoseretuercecuando,derepente,Kimempiezaahablarconlasvocesdesumadre,deuna amiga desaparecida, de otrasmuchasmujeres. Lo que parecía una bromaadquiereeltonodeunarespuesta,deunainsurreccióny,paralosdemás,eltonodeunaenfermedad.
Este libro ha sido una embestida para el panorama literario de todos lospaíses en los que se ha publicado. Bajo su aparente sencillez, hay unasensacióndepeligroquepalpita a lo largode todas sus páginas y quehaabiertounagrietaenlosestándaresdelaliteraturacontemporánea.
Reseñas:«Estanovelahaayudadoatraerlaspreocupacionesdelasmujeresalaprimeralíneadeldebatepúblico.»TheKoreaHerald
«Esextrañoquesemellenaranlosojosdelágrimas,porqueestahistorianomeresultaparanadaextraña.Esmihistoriaytambiénladeinnumerablesmujeresde la misma generación que crecimos bajo una discriminación y violenciasutiles.»ChoeJieun,
«Loquemásme impresionó es que, quizámásqueun librodelmomento, enmuchossentidosmehaparecidounlibrointemporal.Eslahistoriadeunamujercorrienteque,apesardeserunproductode lasociedadcoreanadefinalesdelsigloXXyprincipiosdelXXI,entérminosemocionalespodríahabersalidodelas páginas de Henry James o de Jean Rhys, por su vulnerabilidad y susufrimiento. Y, por supuesto, qué vamos a decir del final, excepto que es ungolpemaestroextraordinario,quedejaráunamarcaindelebleencualquieraqueloleayqueparaelfuturoleaseguraaestelibrounpuestocomoclásicodelaliteratura.»ChrisWhite,editordeScribner
«Publicada sin hacer mucho ruido, sus ventas crecieron de manera repentinagracias a lo que los lectores decían de ella y ahora es la obra de ficciónmásvendida.[…]Unfenómenosocial.»HankookDaily
SobrelaautoraChoNam-joonacióenSeúlen1978.SelicencióenSociologíayhatrabajadodurante diez años como guionista de televisión. Sus dos primeras novelas,Cuando escuchas con atención (2011) y Para Comaneci (2016), lograron laaclamacióndelacríticayrecibieronmúltiplespremios.KimJi-young,nacidaen1982,quesehaconvertidoenunfenómenoentre las lectorasy los lectoresdeAsia,eslaprimeraquesetraducealespañol.
Títulooriginal:82 (PalsipYiNyeonSaengKimJiyeong)©2016,ChoNam-joo( )PublicadooriginalmenteporMinumsaPublishingCo.,Ltd.,Seúl.Cho Nam-joo c/oMinumsa Publishing Co., Ltd., en colaboración con The Grayhawk Agency Ltd. y atravésdeInternationalEditors’Co.©2019,JooHasun,porlatraducción©2019,PenguinRandomHouseGrupoEditorial,S.A.U.TravesseradeGràcia,47-49.08021BarcelonaEstelibrohasidopublicadoconlaayudadeLiteratureTranslationInstituteofKorea(LTIKorea).ISBNebook:978-84-204-3793-4Imagendecubierta:©PaulyPholwises/TrevillionImagesDiseñodeinterioresrealizadoporAlfaguara,basadoenunproyectodeEnricSatuéConversiónebook:MTColor&Diseño,S.L.www.mtcolor.esPenguinRandomHouseGrupoEditorialapoyalaproteccióndelcopyright.Elcopyright estimula la creatividad, defiende la diversidad en el ámbito de las ideas y el conocimiento,promuevelalibreexpresiónyfavoreceunaculturaviva.Graciasporcomprarunaediciónautorizadadeestelibroyporrespetarlasleyesdelcopyrightalnoreproducir,escanearnidistribuirningunapartedeestaobrapor ningún medio sin permiso. Al hacerlo está respaldando a los autores y permitiendo que PRHGEcontinúe publicando libros para todos los lectores. Diríjase a CEDRO (Centro Español de DerechosReprográficos,http://www.cedro.org)sinecesitafotocopiaroescanearalgúnfragmentodeestaobra.www.megustaleer.com
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