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La idea será presentar la caricatura como arte, influenciado por las vanguardias para crear un estilo, con un criterio artístico propio, donde poco se ha reconocido la apropiación hecha por “artistas autodidactas” del academicismo, el costumbrismo, el surrealismo en otros movimientos propiamente de los países de América Latina. DESDE FINALES DEL SIGLO XIX HASTA LOS PRIMEROS 20 AÑOS DEL SIGLO XX.
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ARTE LATINOAMERICANO: LA CIUDAD Y EL PÚBLICO.
LA CARICATURA COMO PRÁCTICA ESTÉTICA, DESDE FINALES DEL
SIGLO XIX HASTA LOS PRIMEROS 20 AÑOS DEL SIGLO XX.
México. José Guadalupe Posada.
Antonio Vanegas Arroyo
Cuba. Víctor M. Landaluze.
Ricardo de la Torriente
Rafael Blanco
Conrado Massaguer
Puerto Rico. Mario Brau Zuzuárregui.
Colombia. Alfredo Greñas.
Carlos C. Molina.
Alberto Urdaneta.
Pepe Gómez.
Ecuador. F. G. Queirolo.
PolicarpoVentorrillo.
Francisco Nugué
Perú. Pedro Challe.
Países y caricaturistas
Brasil. J. Carlos de Brito e Cunha
Angelo Agostini.
Rafael Augusto Bordalo
Preste Pinheiro.
Uruguay. Orestes.
J. Olivella.
Argentina. Henry Meyer.
Enrique Stein.
Jose M. Cao Luaces
Chile. Juan Rafael Allende.
Luís Fernando Rojas
Santiago Pulgar. Perengano
Julio Bozo. Moustache.
Subercaseux Errázuriz. Lustig.
Juan F. Gonzalez. Huelén.
Escogimos estas dos componentes porque a la hora de dar un reconocimiento a los grabados, diseño gráfico y caricaturas, se hace visible el papel de los medios de comunicación, especialmente de la prensa, los folletines y las revistas, como síntoma de una sociedad que se urbaniza, la ciudad pasa de simple para convertirse en compleja, y como consecuencia pululan las formas para expresar las diferencias entre los grupos sociales.
Lo del público se enlaza a través de esa necesidad de comunicar que nombramos a medida que la ciudad se expande, es decir, lo publico aparecerá aquí en las formas en que la caricatura se extrapola de la escritura y crea una imagen “popular”, que retrata el sentido común, la opinión general o la historia de un pueblo: actitudes políticas, costumbres, fiestas, animales, entre otros.
La idea será presentar la caricatura como arte, influenciado por las vanguardias para crear un estilo, con un criterio artístico propio, donde poco se ha reconocido la apropiación hecha por “artistas autodidactas” del academicismo, el costumbrismo, el surrealismo en otros movimientos propiamente de los países de América Latina
“A diferencia de las ciudades europeas que sirvieron de soporte a la constitución de los Estados y que se forjaron más bien por vía de las migraciones, las nuestras son conglomerados que nacen como efecto de la constitución de nacionalidades (llámese reino, provincia o país). Para convertirse así en auténticos laboratorios de nuestra historia. Hemos construido nuestras ciudades, como hemos construido nuestras nacionalidades: a punta de identidades forjadas más bien por la lógica de la colonización que para definir un territorio utiliza los más variados mecanismos de exclusión”
El crecimiento demográfico, la migración de la gente del campo a la ciudad y tanto la transformación física y urbana de la ciudad. Estos tres fenómenos son los que confluyen en el acelerado proceso en que se imbrican la técnica y la producción de periódicos, revistas, folletines
Los grabadores, ilustradores y caricaturistas de Latinoamérica
son hombres modernos que vivieron en urbes donde todavía
prima la mentalidad campesina y el horizonte de la aldea.
La ciudad deviene en los periódicos, los medios nos crean a
través de los gráficos una representación de la realidad sin
anular la vida cotidiana. La imagen impresa y la desacralización
de la imagen porque habla de los productos, los sucesos, los
ciudadanos, los políticos, la mezcla de la vida privada, en la
modernidad, de lo público
La disposición de estas imágenes o caricaturas la valoramos y
reconocemos como practica estética, es decir, como producción
de unos significados que revitalizan los pensamientos políticos,
económicos y sociales, universalizándolos m ( que aún tenga
para nosotros la validez a pesar de su particularidad): con una
imagen síntesis, figurativa, academicista, creativa, artística o
grotesca.
La caricatura es un esteriotipo de significación codificada, acostumbrando al público a un meta – lenguaje icónico, donde las imágenes dirigen la conciencia y las acciones de muchos ciudadanos; es decir, la imagen caricatural pretende traspasar a las clases medias y burguesas como público para llegar a las clases medias y populares, pues su objetivo es partir desde los modelos públicos para captar el interés público y así nacer la opinión pública. La idea que se tratara de soportar es la caricatura como práctica artística. Para ello se parte de la reflexión hecha por Baudelaire sobre un personaje, litografo, el cual lo que realiza es afiches, folletines y diseños de los mismos, la ligazón del arte con la disposición, con la serialización y su desacralización por no ser trascendente, sino repetitivo, además, es la muestra más clara de la inserción de lo gráfico y lo escrito, paralelo al crecimiento de la ciudad; a la vez que esta es el punto de partida de cualquier practica estética
Muy relacionada con la producción de periódicos, revistas, folletos, manifiestos y otros: la caricatura es la manera en que más inmediatamente se apropia o se universalizan los pensamientos sobre el qué hacer artísticos la opinión pública y por tanto el público como el lugar de donde viene y se interpreta la obra, en tanto práctica artística dentro de unas prácticas humanas.
Es a través de las representaciones que se hacen en los medios, ilustraciones, diseños y grabados, aparte de la hipérbole, la sátira y el realismo, es decir; la caricatura - entre el academicismo y costumbrismo -como estrategia que denota el imaginario en general, el cual en la mayoría de las veces es negativo o crítico, frente a personajes de la política, las situaciones de fiesta y los desastres, entre tantas imágenes creadas para recrear los sucesos que se le daban relevancia.
El papel dado a la prensa y sus gráficos se relaciona en la hibridación con el arte decorativo, art noveau y el dadaismo, a través de una imagen de la realidad que sólo se lee con los códigos de contexto. Estos códigos son muy móviles, demostrando que los elementos de identificación o el habitus de la cultura latinoamericana, construye paulatinamente un criterio, el cual desencadenará en unos movimientos que tienen como punto de partida el sujeto, la historia, lo moderno, a la vez que lo cómico, lo desconocido, lo intimo que revela crítica a lo público y las prácticas místicas o religiosas, las prácticas políticas y culturales.
México.Durante el Porfiriato, pese a la dictadura del general Díaz,
resalta la actividad crítica de dibujantes como Gaitán, Lira, Daniel Cabrera Fígaro, Jesús Martínez Carrión y Álvaro Pruneda en los periódicos La Cantárida, El Quixote y La Patria Festiva (1879); El Hijo del Ahuizote (1885-1903), El Ahuizote Jacobino (1904-05) y El Colmillo Público (1903-06).
En la última década del siglo XIX destaca
la presencia del gran grabador José
Guadalupe Posada, quien, siguiendo la
escuela de Manuel Manilla y su hábil
disfraz de “reportero de nota roja” en
hojas volantes y cuadernillos callejeros,
se suma a la imparable corriente crítica de
los caricaturistas mexicanos. Lo hace
también en periódicos como Gil Blas
Cómico (1895-1897) y El Diablito Rojo
(1906-10).
En 1916 y 1917, con la aparición
de los periódicos El Universal y
Excélsior, se fortalece la
presencia de diarios de gran
formato y aparecen historietas
satíricas como El Chupamirto, de
Jesús Acosta Cabrera.
José Guadalupe Posada. MéxicoEse fenómeno plástico tan importante por sus valores
intrínsecos y por la enorme influencia que ejerció- el muralismo-, tuvo como antecedente directo la notable obra del grabador José Guadalupe Posada (1851-1913), quien supo condensar lo más incisivo del arte popular de su país, especialmente como ilustrador y caricaturista político de periódicos opositores al régimen paternalista y autoritario de Porfirio Díaz, (…) Su mordaz sentido del humor, su rica fantasía y muy especialmente sus compromisos con el hombre mexicano así como sus profundas inquietudes político-sociales, constituyeron lecciones y legados que fueron recogidos y enriquecidos por los grandes muralistas, algunos años más tarde.
José Guadalupe PosadaMéxico 1852-1913.A pesar de que en su tiempo fue considerado un mero artesano, la obra de Posada hoy en día es reconocida internacionalmente. Sus grabados, realizados a modo de ilustración de periódicos locales representan una completa crónica de la sociedad de la época: Accidentes, crímenes, religión, humor, política, amor, fiestas, pero sobre todo, siempre será conocido por sus calaveras para el día de los muertos.
Fue considerado por Diego Rivera como el prototipo del artista del pueblo y su defensor más aguerrido. También es considerado precursor del movimiento nacionalista mexicano de artes plásticas. Célebre por sus dibujos y grabados sobre la muerte. Apasionado de dibujar caricatura política. Desarrolló nuevas técnicas de impresión. Trabajó y fundó periódicos importantes. Consolidó la fiesta del día de los muertos, por sus interpretaciones de la vida cotidiana y actitudes del mexicano por medio de calaveras actuando como gente común.
Las obras van del chisme cómico a la noticia trágica, del suceso real a la narración fantástica. Ilustró corridos, historias de crímenes y pasiones, de aparecidos y milagros. Retrató y caricaturizó a todo tipo de personajes: revolucionarios, políticos, fusilados, borrachos, militares, bandoleros, catrines, damas elegantes, charros, toreros y obreros.
José Guadalupe Posada (México) artista costumbrista que recoge la vida y el ambiente de Latinoamérica reflejando las costumbres de sus pueblos, con sus dibujos, grabados, litografías y xilografías de calaveras -o calacas-y esqueletos utilizados como caricaturas y sátiras de la vida social y política mexicana en alusión a los abusos del gobierno y las intrigas políticas,.
Asesinato de la Malagueña
Estos grabados Y CARICATURAS de José Guadalupe Posada, tienen la finalidad de ejemplificar el sentido dramático pero irónico con el que representó a la muerte, característica siempre presente en la cultura mexicana.Posada fue un excelente grabador en metal, en su fructífera vida creadora fue perseguido y atacado, debido a que siempre enfatizó su temática haciendo crítica y denuncia de atrocidades e injusticias cometidas por los regímenes que gobernaban el país.Se considera que dejó una obra aproximada de veinte mil grabados. La gran mayoría de ellos los realizó gracias al trabajo conjunto que emprendió con el también célebre impresor Antonio Vanegas Arroyo, sería casi imposible concebir el trabajo de uno sin el otro.Si es indiscutible lo que dijo Augusto Renoir: que la obra de arte se caracteriza por ser "indefinible e inimitable," podemos decir que la obra de Posada es la obra de arte por excelencia. Ninguno imitará a Posada; ninguno definirá a Posada. Su obra, por su forma, es toda la plástica; por su contenido es toda la vida, cosas que no pueden encerrarse dentro de la miserable gaveta de una definición.
Ver: http://elibrary.unm.edu/cswr/posada/
CUBA. En esta etapa se
destacó por su actividad como
dibujante costumbrista, Víctor
Patricio Landaluze. A él debemos la
creación del tipo representativo del
pueblo cubano, el cual tomó
después Ricardo de la Torriente
para bautizar con el nombre de
Liborio
Conflicto lateo. 1900. La Torriente.Víctor Landaluze. 1888. Cuba.
Víctor P. Landaluze
De ellos, uno de los más conocidos por su
actividad como dibujante costumbrista fue
Landaluze. Las caricaturas personales que
hizo Landaluze se agrupan en su Museo de
curiosidades; es trascendente más por
significar la obra de un precursor que por
cualquier otra marca de validez formal.
El Mambi. Primer personaje cubano
Los CASELEROS eran por lo general negros de estatura pequeña; su tesoro residía en la juventud, pues transcurrida ésta debían retirarse del oficio. No vivían agrupados en azoteas, traspatios o entresuelos
–como el resto de la servidumbre–, sino en las dependencias adyacentes.Aunque sus deberes consistían en bañar y alimentar a las bestias, conducir y mantener la calesa reluciente, muchos sobrepasaban esos límites, involucrándose en las aventuras y amoríos del señor. El calesero era el aristócrata de los esclavos, y costaba trabajo poseer uno, porque era prenda de inestimable valor. «Quien tenía un buen calesero jamás se deshacía de él»,
Amén de estos privilegios, su elemento diferenciador por excelencia fue el uniforme, pues mientras los demás esclavos usaban ropa sencilla, de baja calidad y pobre colorido, el negro más valorado de la casa hacía derroche de oro y plata, adornos comunes de su atuendo de trabajo.
En 1898 Cuba pasó a ser neocolonia norteamericana. Por ese entonces, Ricardo de la Torriente creó el primer representante del pueblo cubano, Liborio, cuya vida abarcará todo el primer cuarto de siglo, fue el símbolo aceptado del pueblo cubano en esta época al denunciar los males de la república mediatizada. Este personaje abordó el aspecto económico, se declaró contrario a los empréstitos y condenó la penetración norteamericana en la economía
Ricardo de la Torriente.Nace en Matanzas en 1869. Es el
creador del personaje Liborio. Publica sus primeras caricaturas en 1887, a los 18 años de edad, en "El Album", editado en Matanzas por Nicolás Heredia.
Entre 1897 y 1898 Torriente se encuentra en Nueva York colaborando con publicaciones de la emigración, primeramente en "Cuba y América" y luego en "Cacarajícara", donde incluye por primera vez la figura del Tío Sam como símbolo de los Estados Unidoss.
Torriente funda "La Política Cómica" en
1905, la cual se publica hasta 1931, aunque
desde la década de 1920 su labor como
dibujante va disminuyendo. En su comienzo
el semanario se presentaba como de
Torriente y González-Muñoz. En mayo de
1906 aparece Torriente solo como Director-
propietario. Torriente ha sido el único caso
de caricaturista político con órgano propio
Es el símbolo que acepta el pueblo cubano de su época:
narizón y con patillas, testigo socarrón de la primera etapa
republicana. A través de sus vicisitudes se reflejan los
vaivenes de la política y, más aún, de la politiquería nacional,
en un juego siempre dominado por los intereses
norteamericanos. Con este personaje se resume y da voz y
figura a la opinión pública, creando muchos de los símbolos
del choteo, mecanismo de escape a la frustración.
LIBORIO
Rafael Blanco.
Estudia en la escuela San Alejandro. Participa en numerosos salones y expone en el Ateneo de La Habana y en la Academia de Artes y Letras. En 1918 es pensionado por el estado cubano para realizar estudios en Nueva York; posteriormente viaja a México. Crítica aguda e intensa del contexto social, su amplia producción –que abarca pintura, dibujo, dibujo humorístico y caricatura- se caracteriza por una modernidad renovadora en los dos primeros decenios del siglo XX, por lo que se considera una figura precursora del movimiento de arte nuevo que se desarrolla a partir del segundo lustro de los años 20 en Cuba
RAFAEL BLANCO (1885-1955). Estilo muy personal, síntesis de recursos expresivos: sólo líneas. Aunque no profundiza en la psicología del individuo se hace evidente la presencia del modelo en sus obras.
Escena callejera. 1911.
El profesor Altamirano. 1910.
E. Palma.
Leopoldo Rosa.
1911.
De quien yo no soy ni la sombra
1911
Divaldo Salon. 1910
El Hombre de las Burras. 1911
Maestro Bovi. 1911
Enrique Corzo
E. H. Miyares
Hace varios años se murmuró en los corrillos del Ateneo y junto a las mesas de los cafés, el nombre de un caricaturista joven que alardeaba de un estilo independiente, acaso no muy comprensible para los aficionados a las heroínas de Willette. Nuestra pobre actualidad artística le rindió agasajo. Los periódicos se poblaron de dibujos firmados por aquél. Y el público se detuvo frente a la rudeza de los contrastes que simplificaban la concepción fisonómica de los personajes caricaturados. Días después, le conocí en la redacción de El Fígaro.
Portada. Rafael Blanco. 1911
Fernández de
Castro y
Lanuza
Giberga. 1912
Gral. Menocal García
Maria Barrientos.
1913.Maria Guerrero. 1913.
Negocio redondo. 1911.
Jorobados. 1913.
Auto-caricatura. 1913
BLANCO.
CONRADO WALTER MASSAGUER
Nació el 3 de marzo de 1889 en la ciudad de Cárdenas, en la provincia de Matanzas. En 1892 la familia se estableció en La Habana En 1905, de nuevo en La Habana, realizó estudios en el colegio “La Gran Antilla” con vistas a prepararse para estudiar la carrera de arquitectura, que no concluyó, y comenzó a visitar el estudio de un reconocido caricaturista cubano: Ricardo de la Torriente. Fue su discípulo en la Escuela de San Alejandro Colaboró con sus trabajos al pincel en Cuba y América, El Tiempo, El Hogar, Letras y El Fígaro. En esta última revista compartió con otro gran caricaturista cubano, Rafael Blanco. Hacia 1910 ya era uno de los directivos del Ateneo de La Habana y en el propio año abrió, junto con Laureano Rodríguez Castells, una agencia de anuncios que se llamó “Mercurio”.
Cuenta que a finales de 1915 “me lancé a la calle con un formato de
Social bajo el brazo [...] Yo veía queEl Hogar, Bohemia, El Fígaro y Letras vivían agónicamente. El
público cubano, ya conocedor de las excelentes publicaciones
neoyorquinas se resistía a pagar 25 centavos por esas revistas que eran literarias pero nada artísticas y sólo con una extensa crónica social. En enero de 1916 “me lancé en la más
bella aventura de mi vida periodística: Social [...] Desde el primer número el mensuario se
presentó con un lujo que La Habana jamás había visto
Por su parte Socialintrodujo el método de la fotolitografía, por lo que Cuba se convirtió en el primer país de América Latina que contó con una planta impresora de este tipo, y contó con un elemento esencial: tener un director artístico, que a lo largo de su existencia estuvo en manos de Alfredo T. Quílez, Rafael Angel Surís y del propio Massaguer.
Tira cómica de Massaguer
El Fígaro Aunque no mostró una línea homogénea en relación con la ilustración, como siempre mantuvo igual formato, con énfasis en la cubierta, la artística utilización de la fotografía y la tipografía le otorgan una unidad artística de indiscutible valor, todo ello sustentado en una línea art nouveau. Por su parte Socialintrodujo el método de la fotolitografía, por lo que Cuba se convirtió en el primer país de América Latina que contó con una planta impresora de este tipo, y contó con un elemento esencial: tener un director artístico,
la publicación borra de sus portadas y diseños interiores las borlas y las imágenes pictóricas para dar paso a estructuras de colores contrastantes, de planos recortados en un espacio donde impera la dinámica del diseño
Todos los elementos gráficos de Social, desde la portada hasta los anuncios comerciales, pasando por la composición de los sumarios resumen gusto estético y son el resultado de inquietudes estéticas y búsquedas constantes por parte de los artistas que la hicieron posible. La armonía del diseño, la correcta y artística utilización de los espacios en blanco, la legibilidad de los textos, el buen uso del color y en particular de la cuatrimetría, o sea, cuatro valores de la escala tonal
Números 10
y 11. Vol. II.
Oct – Nov.
1917
En 1919 junto con su
hermano Oscar,
vinculado a la
administración de
Social –ambos
formaron la entidad
Massaguer Brothers–
fundó la revista
Carteles, dirigida por
otro socio suyo en
Social, Antonio T.
Quílez,
Hijo del prócer Salvador Brau, Mario Brau Zuzuárregui (1871-1941)
sobresalió como un fino y dedicado dibujante e ilustrador puertorriqueño.
Ilustró la Historia de Puerto Rico (escrita por su padre) y la Crónica de la
Guerra Hispanoamericana de Ángel Rivero. Esta colección recoge dibujos de
su obra como caricaturista, la cual satiriza la vida político-social del Puerto
Rico de su época, en periódicos como Puerto Rico Ilustrado y en los libros
Castigat ridendo (1903) y Trazos (1915).
Esta colección, la cual comprende unas 200 piezas, recoge su obra como
caricaturista sobre la vida social y política de Puerto Rico de principios del
siglo XX. Los dibujos fueron publicadas entre 1898 y 1923
Puerto Rico
La valoración y le reconocimiento que se ha dado a estas imágenes pretende ser una crítica a las mismas desde la estética, teniendo en cuenta los valores que se le atribuyen a su carácter documental, indefinible y diverso; entendido lo fáctico como la posibilidad que abre al análisis de problemas contenidos en sí mismas, la muestra de sensibilidad del artista y sus objetivos implícitos en la obra, la apertura de nuevas vías para imaginar el pasado y ubicarnos en un tiempo y un espacio histórico determinado, como una idea de las representaciones políticas, sociales y religiosas pertenecientes a determinado contexto y, finalmente, como una totalidad, como un testimonio histórico, artístico y estético que puede ir más allá de lo que nos dice un documento escrito. Se sabe que es indecible con palabras exactas lo que se ve.
Adolfo Greñas. Colombia. La caricatura se consolidó solo a finales del siglo XIX. Ya existe una conciencia de su valor como arma: mientras efectivamente se luchaba en los campos, se imprimieron periódicos de caricatura destinados a la guerra mordaz entre los partidos. Greñas será propietario y grabador de un periódico jocoso
La claridad sobre el propósito de este tipo de publicaciones se hizo obvia con la gran cantidad de ellas: El Alcanfor (1877), de José Manuel Lleras; El Mochuelo(1877), de Alberto Urdaneta; El Amolador (1878), de Lázaro Escobar; El Fígaro (1882), del venezolano Salvador Presas; y particularmente El Loco (1890), El Zancudo(1890-91), El Barbero (1892) y una veintena más de periódicos del bumangués Alfredo Greñas
Mi retrato (Alfredo Greñas como "El Zancudo ")Alfredo Greñas"El Zancudo", septiembre 6 de 1891.Xilografía, 17 e 24.4 cms."Palo aquí, palo allá, pero no a ciegas, sino bien asentados y a donde deber ser; que así como así no aprendió de balde el oficio y mediante Dios no lo ha de abandonar, aun cuando le lastimen los codos, hasta no dar en tierra con los últimos malsines (sic) de esta ralea de oligarcas radicalescos que tan sendos tragos de saliva nos hacen pasar".
Viñeta de "El Zancudo"
Alfredo Greñas
"El Zancudo", febrero 22 de 1891.
Xilografía, 4 x 6.5 cms.
Alfredo Greñas, uno de los más sobresalientes caricaturistas dentro de la historia de este género en Colombia, nació en Bucaramanga el 9 de mayo de 1857. Dentro de su anhelo de aprender el grabado para ilustrar los periódicos en defensa de sus ideales políticos, ingresó en 1881 a la escuela de grabado fundada por Alberto Urdaneta y colaboró con el papel periódico ilustrado
20 de julio de 1891. El Zancudo.
Alumbrado, aseo y vigilancia
Discurso sobre la luz eléctrica
El acueducto
Los servicios.
Discurso de Alberto Urdaneta
El chivazo providencial
¡Qué chubasco!
Alfredo Greñas, seudónimos Brusqin
Brocharrecia pintor, Mozuelo Rajatablas
grabador, (1857 1949).
"El Barbero, diciembre 11 de 1892
Xilografía, 28 x 23.5 cms.
Recibiendo este furioso Tequendama en las
espaldas aparece la niña Colombita",
acompañada por la alegoría del gobierno de
Caro, la "comadre Regenerada".
Los Vampiros
Alfredo Greñas
"El Zancudo", mayo 31 de 1891.
Xilografía, 17 x 21 cms.
"El grabado con que obsequiamos hoy a
los lectores de El Zancudo represento una
de tantas escenas en que predomina el
amor a la libertad"; entre otros aparecen
Rafael Núñez, Carlos Holguín, Marceliano
Vélez, Felipe Angula y Santiago Pérez.
El Angulo más saliente de la regeneración
El árbol de la regeneración
El escudo de la regeneración
El
Jumento
Culto
El
sapo
El último Bobaldi.
Litografía de Carlos C. 1874.
Greñas enarboló la caricatura como instrumento de lucha contra el gobierno de Rafael Núñez y su proyecto político de la regeneración, denunciando sobre todo los ultrajes a las libertades del ciudadano y la censura de prensa. Esto lo llevó a la cárcel, de donde salió para trabajar incansablemente en periódicos también fundados por él, como El Zancudo, El Barbero y el Demócrata entre otros. Finalmente fue exiliado en 1893 por sus constantes críticas al gobierno regenerador; se refugió en San José de Costa Rica, y allí murió en 1949, siendo considerado fundador de la prensa de ese país.
La gallera política. 1 y 2 parte.
Las libertades
La libertad de conciencia en llamas
Presin de un tornillo por
pensar libremente
Libertad unas
tenazas
Libertad de
industria
. El tranvía de Bogotá a Chapinero
Alfredo Greñas, seudónimos caricaturista
Roff, grabador Riff (1857- 1949).
"El Zancudo", marzo22 de 1890.
Xilografía, El mal servicio, el pésimo estado
de los vehículos, las penurias de los
pasajeros y los continuos descarrilamientos
del tranvías sirven a Greñas para hacer un
símil gobierno "regenerador" de Caro. Sin
embargo, según cita que hace Germán
Arciniegas de papeles de Greñas, "al otro
día publicada esta crítica, el gerente de la
Empresa, con un ejemplar del periódico se
fue a Estados Unidos a hacer mejorar lo
existente"
la Paz en Colombia
Alfredo Gredas
"El Zancudo", abril 3 de
1890,
xilografía, 11.5 x 10 6 cms.
Colombia lleva casi un siglo
de guerras civiles, y la
caricatura recuerdo tal
estado de violencia
. El último pago. Alfredo greñas. “el zancudo” 1891
"Verdadero facsímile
de la situación que
Colombia ha
alcanzado con la
confusión de ideas y
la paz económico-
científica de la
Regeneración
fundamental".
Un penitente
Alfredo Greñas
"El Barbero", abril 24 de
1891.
Xilografía, 10.5 x 16.6 cms.
"Plancha de la caricatura
que se tenía preparada el
domingo pasado (...) una
caricatura del señor Holguín
al salir de los ejercicios
espirituales (...) El sábado
16 el señor Prefecto nos
comunicó una resolución
del señor Secretaria del
Gobierno del Departamento
por la cual se nos prohíbe,
baja penas severas, la
publicación de caricaturas ".
Colombia Libre- Colombia regenegadora
Alfredo Greñas."El Loco" , octubre 9 de 1890.
. Cabezote de "El Barbero"
Alfredo Greñas,
"El Barbero", marzo 27 de 1892.
Xilografía, 10 x 29 cms.
"Medio mundo se ríe Del otro
medio: "El Barbero" se ríe Del
mundo entero"
Los carceleros
de la Libertad
Monumento
que exhibe
hoy lo
regeneración
colombiana.
Alfredo
Greñas,
"El Barbero",
abril 14 de
1892
El primer periódico de caricaturas conocido en Santander se llama "El Banano'' y data de 1909. El nombre está dedicado al General Reyes, quien en ese año dejó la presidencia. El bautizo de Reyes con tal nombre obedece a una relación entre su gestión presidencial y la explotación de la fruta en gran escala. Se afirma también que Reyes tenía una gran debilidad por El Banano. Es clara en este periódico la vigencia de su lema que afirma que "La Caricatura es el impuesto que la malicia cobra sobre el ridículo poderoso".
Labor congresista
Juan de J. Martínez
Carvajalito (atrib.)
"El Banano", octubre 2 de
1909.
. Sin título
Juan de J. Martínez
Carvajalito (atrib.)
"El Banano", octubre 9
de 1909
El conservatismo se ha
propuesto transformar la
lucha ideológica en una
lucha religiosa.
Onomástico
Juan de 1. Martínez
Carvajalino (atrib.)
"El Banano",
octubre 23 de 1909
Mala fe Contra Santa Fe.
José "Pepe" Gómez (1892
- 1936).
"Bogotá Cómica", 1918.
litografía, 14.5 x 18.8 cms.
La Prensa, como se ve de
una manera precisa ha
salvado a Santa Fe de
manos de los le querían
quitar la camisa. Mas creo
que al cabo verá aquel que
su bolsa llene del oro de
Bogotá, que lo que por
agua viene también por
agua se va". Dentro de los
periodistas que han evitado
los desfalcos figura
Eduardo Sontos, desde "El
Tiempo".
¡Pobre pueblo!
José Pepe Gómez (1892- 1936).
"Bogotá Cómico, noviembre 2 de
1918.
Xilografía, 21.5 x 16.5 cms.
Los cuatro jinetes del
Apocalipsis, encabezados por la
peste y el hambre, amenazan a
los bogotanos mientras duermen
las autoridades civiles y
eclesiásticas: la gripo se
convierte en epidemia durante
los meses de octubre y
noviembre de 1918, debido a las
deficientes condiciones de
higiene de la ciudad. Al fondo
aparece el perfil de Bogotá, la
catedral aun lado y las
chimeneas de la fábrica de
Bavaria al otro
Ecuador.(1892-1895), la prensa satírico-burlesca vivió un
verdadero boom en Guayaquil. En estos años se consolida el espacio para la caricatura en la prensa local, convertida en una vigorosa arma de lucha y enfrentamiento ideológico.
F. G. Queirolo, "Pavo de pascuas", El
Látigo, Guayaquil, 1895
Policarpo Ventorrillo Opinionitis, "Lo que debe
hacerse", El Cáustico, Guayaquil, 1895
Los editores de estos
periódicos estaban
interesados en
acrecentar la base social
del liberalismo,
introduciendo una forma
de hacer política
relacionada con la
formación de ciudadanos
pensantes y actuantes
en la esfera de lo
público. Y el trabajo de
los caricaturistas era
elemento clave en el
proceso de lucha
ideológica, con un
discurso centrado en la
propagación de ideas de
libertad, arte e
interpretación,
consonantes del
dadaismo
En 1908, Víctor Emilio Estrada, director de la revista
Patria de Guayaquil, contrata al dibujante español
Francisco Nugué (1870-1936) para que se encargue de
la “página cómica”. En esta “Revista Quincenal Ilustrada”
-que luego se convirtió en semanal-, se publicaban
poemas, artículos de variedades, noticias de actualidad,
etc. La labor de Nugué consistía en ilustrar las crónicas
históricas de Gabriel Pino Roca y reseñar
humorísticamente de las principales noticias de la ciudad
y el país. Para ello, desarrollaba secuencias narrativas
de planos gráficos, convirtiéndose en uno de los
primeros dibujantes que trabajaron el cómic en el
Ecuador.
Este humorista-cronista del Guayaquil cotidiano y vital trabaja en
Patria durante un año, pero reaparece en la revista Brochazos, en
1911, publicando caricaturas a color, algunas de corte antimperialista,
en rechazo a las “negociaciones” del presidente Emilio Estrada
Carmona con el gobierno de los Estados Unidos, sobre el pretendido
arrendamiento de las islas Galápagos.
El colorido e ingenio de Nugué hacen de Brochazos (1911) una revista única, pues, ubica a las caricaturas en el mismo nivel de las noticias de actualidad, preparando el camino para la aparición de revistas exclusivamente dedicadas al género, como Caricatura (1918-1924), Caricaturas (1922), Zumbambico (1932), Cocoricó (1932-1934), entre otras.
Francisco Nugué, portada de
la Revista Brochazos,
Guayaquil, 1911
Entre finales del siglo XIX e inicios del siglo XX, la caricatura contribuyó decisivamente a la conformación de un espacio para la opinión pública, donde se libraron acérrimas batallas para el establecimiento de las libertades individuales; y se convirtió en un influyente medio de propagación de nuestra modernidad artística, gracias al legado de estos precursores del humor gráfico.
Caricatura.
Perú. 1890.
Perú La existencia en aquel entonces de diversas revistas y diarios
favoreció su desarrollo y trabajo: Actualidades, Mundial, Don Lunes, Fray Kbezón, Fray, El Mosquito, Monos y Monadas,
Gil Blas, El Fígaro, El Hombre de la Calle, ¿Está usted bien?, Variedades, y periódicos como El Comercio, La Prensa y La
Crónica. Todas, tribunas de crítica política para grandes humoristas gráficos como Pedro Challe, Holguín Lavalle,
Marcoz o Julio Málaga Grenet. Incluso Abraham Valdelomar participó en sus inicios como caricaturista.
la caricatura "es un arma de combate ideológico que tiene la sociedad civil". En ese sentido, se sostiene que los caricaturistas
políticos son una conciencia crítica contra el poder. "Grafican símbolos del poder para desmitificarlos, incluso ridiculizarlos",
De Pedro Challe, uno de
nuestros primeros
historietistas –de quien se
dice descubrió su vocación
tras dilapidar una herencia
viajando por todo el mundo–
una pequeña revisión de sus
monos abecedáricos en el
tan personal Diccionario de
la Lengua Castellana, y las
nerviosas agresividades
(propias de un posterior Tex
Avery, claro que, salvando
distancias entre la animación
y el dibujo) que nos podían
acontecer caminando
alegremente por las calles de
Lima allá en los años 20.
La caricatura trata de sintetizar en una imagen la multiplicidad del acontecimiento. De alguna manera es un principio de no exclusión entre un público homogéneo, burgués y un público privado.
La prensa es para las castas burguesas que refinan sus gustos para diferenciarse; aunque hay que entender que se hacía lecturas en las plazas para la mayoría que no sabia leer.
Nuestra cultura no propicia la contemplación en términos estéticos, así la caricatura pone en crisis la idea de contemplación como fundamento del juicio estético. “La puesta en crisis de la idea de contemplación estética proviene de un territorio más amplio de lo estético y lo artístico. Aludo a la creciente problematización de la esfera intima, a la superposición de lo público y lo privado cada vez más aguda de nuestro mundo, en le universo de la cultura y las comunicaciones de masas”.
La dimensión publicista y comunicativa se convierte así en algo esencial, en la determinación de lo que es o no es “arte”
Brasil. No Brasil, a caricatura apareceu no Segundo Reinado, em 1837, mas encontrou grande expression com a obra de J.Carlos, que soube observar com ironia a sociedade carioca da primeira metade do siculo XX e seus tipos caracteristicos. Entre outros caricaturistas brasileiros esto: Antonio Gabriel Nassara, o caricaturista do samba, Kalixto, Lan, caricaturista de personalidades da vida social e politica e tambiem Ziraldo, Chico Caruso e Borjalo. Nair foi a primeira cartunista brasileira.
José Carlos de Brito e Cunha, conhecido como J. Carlos, (Rio de Janeiro, 18 de junho de 1884 — Rio de Janeiro, 2 de outubro de 1950) foi um chargista, ilustrador e designer grafico brasileiro. J. Carlos também fez esculturas, foi autor de teatro de revista, letrista de samba, e é considerado um dos maiores representantes do estilo Art Déco no design gráfico brasileiro.
Seu primeiro trabalho foi publicado em 1902, na revista Tagarela, com uma legenda explicando ser aquele o desenho de um principiante, mas, em seguida, passa a colaborar regularmente com a revista e em abril do ano seguinte já desenha a capa da publicação. J. Carlos colaborou com seus trabalhos na melhores revistas do seu tempo; O Malho, O Tico Tico, Fon-Fon, Careta, A Cigarra, Vida Moderna, Eu Sei Tudo, Revista da Semana e O Cruzeiro.
J. Carlos de Brito e Cunha
. Muitas das figuras da época, em particular o
Barão do Rio Branco, o Marechal Hermes,
Nilo Peçanha, Epitácio Pessoa, estão mais
vivos e verdadeiros nas charges que lhes
dedicou do que e qualquer biografia que lhes
escreveu os historiadores, focalizando os
tipos com máximo de precisão fisionômica,
interpretações psicológicas que resultaram
mais verdadeiros do que a mais ambiciosa
fotografia.
Trabalhando a maior parte da
sua vida na Careta, J. Carlos
a tornou a crônica mais exata
da realidade política do seu
tempo
Revista O omalho. O Malho foi
uma revista humorística
brasileira criada por Crispim
do Amaral em 1902. Sua
especialidade era satirizar
fatos políticos, e entre seus
desenhistas e caricaturistas
destacaram-se J.Carlos,
Angelo Agostini,
A revista O Tico Tico, lançada pelo
jornalista Luís Bartolomeu de Souza e
Silva, foi a primeira a publicar histórias
em quadrinhos no Brasil. Sua primeira
edição saiu no dia 11 de outubro de
1905, uma quarta-feira e não uma quinta
como dizia a capa. O modelo que a Tico
Tico seguia era o da revista francesa La
Semaine de Suzette, personagem que
foi publicada pela revista com o nome de
Felismina. Era publicada em dois tipos
de papel, com quatro páginas coloridas e
as restantes usavam ao invés do preto e
branco habitual uma combinação de
branco com vermelho, verde ou azul. O
primeiro exemplar custava 200 réis e
como não havia inflação na época a
revista permanesceu com esse preço até
a década de 1920.
Revista da Semana foi um semanário brasileiro editado de 1900 a
1962 Com enfoque político, nele colaboraram alguns dos principais
intelectuais e artistas da época
Angelo Agostini
As Aventuras de Nhô-Quim & Zé
Caipora: os primeiros quadrinhos
brasileiros 1869-1883 traz na íntegra as
histórias dos personagens criados por
Angelo Agostini, reunindo o que foi
publicado nas revistas Vida
Fluminense, O Malho e Don Quixote
(Vercell, Italia,
1843 - Río de
Janeiro, 1910).
Caricaturista,
ilustrador,
dibujante, crítico
de arte y pintor
A Carioca
A noite e os genios
A batalha do Avaí
ilustraciones 1873 – 1884.
Grabados y caricaturas de 1885 - 1888
Publicada originalmente en: Revista
Ilustrada ano 10, nº 415, 28/07/1885.
Estado da Questão Militar , 1887
Esta es la revista
Ilustrada en que se
publicaron las
caricaturas anteriores
de Angelo Agostini
En 1876 el artista funda la Revista
Ilustrada. Esa publicación, hito en la
prensa nacional, es una de las primeras
en ejercer concretamente la autonomía
de la prensa en el Segundo Reinado. No
acepta patrocinios y se mantiene con la
venta de su tirada. En ella, Agostini
publica su célebre serie de caricaturas
del emperador Don Pedro II (1825 -
1891). En ese momento su trazo
profundiza el realismo. Pese a las
situaciones satíricas, el artista busca una
verosimilitud casi fotográfica - en
algunas materias, el uso de la imagen
pretendía dar una explicación visual a su
contenido
En 1868 se traslada a Río de Janeiro, donde se sirve de esas convenciones académicas para crear lo que sería el primer cómic de Brasil: As Aventuras de Nhô-Quim & Zé Caipora. Las historias de esos aldeanos se publican en las revistas Vida Fluminense, O Malho y Dom Quixote. Los personajes son pueblerinos recién-llegados a la ciudad, que conviven, a la vez, con un mundo que se estructura al margen de la corte y con toda suerte de entidades de la mitología rural brasileña.
En 1888 el artista, tras conseguir la ciudadanía brasileña, tuvo una hija ilegítima con su alumna Abigail de Andrade (1864 - s.f.), lo que fue considerado un escándalo. El alboroto lo obliga a trasladarse a Francia y a apartarse de la edición de la Revista Ilustrada. En su regreso a Brasil, en el inicio de la década de 1890, el dibujante vende su parte en la Revista, que sigue publicando esporádicamente sus trabajos hasta 1898. Enseguida, funda la revista Dom Quixote, en la que también publica As Aventuras de Nhô-Quim & Zé Caipora. Con el paso de los años, se dedica cada vez más a los cómics. Colabora como dibujante de cómics en O Malho desde 1902. En 1905 el artista hace el letrero de la revista O Tico -Tico, para la que escribe historias infantiles, como A História do Pai João, publicada en 1906
Zé Caipora em apuros, no traço expressivo de Angelo Agostini
Nhô-Quim podia se
caipira, mas de bobo não
tinha nada
Drama de
um caipira
na cidade
grande:
Nhô-Quim
briga com o
próprio
reflexo no
espelho
Página de Zé
Caipora, com
diagramação
ousada para
a época.
La importancia del humor gráfico en la prensa de Brasil llega relativamente pronto. En 1896, en la Gaceta de Noticias, se inicia la publicación de
portraits-charges de políticos y hombres de letras. En 1898, en el Jornal de Brasil, caricaturas semanales. Poco después, en 1901, el Correlo da Manha y 0 País. Lo que para el periodismo traía, lo apunta Herman
Lima: «una nota leve, espiritosa y atrayente, quebrando la monotonía de las grandes hojas (...)» La charge política alcanzaría en los años 20, bajo el
modelo portrait-charge, un elevado nivel con Guevara y Figueroa. Antes y después de ellos,
Bordalo Pinheiro, Mendes Fradique, Vanzolino y Belmonte.
Bordalo
pinhiero
Raphael Augusto Bordallo
Prestes Pinheiro nasceu a
21 de Março de 1846 no nº
47 da Rua da Fé, em
Lisboa. Raphael foi um
cómico incomparável, mais
propriamente um
descobridor e orquestrador
de motivos risíveis, do que
um denunciador de
ridículos" "
Ze provinho
ZÉ POVINHO
O sucesso obtido foi tal que Bordalo acabou por recriar no barro, em tinteiros, cinzeiros e apitos, a figura-símbolo do povo português ao lado da inseparável Maria da Paciência, velha alfacinha alcoviteira.
Crescido, Zé Povinho correspondeu perfeitamente às esperanças que n'elle depositaram os solicitos poderes do reino. "Seu Zé Povinho" tomou forma, através do lápis de Rafael Bordalo Pinheiro, pela primeira vez em 12 de Junho de 1875, surgindo no exemplar número 5 d'A Lanterna Mágica, no mesmo ano em que RBP, com 29 anos, abraçava os ideias da Maçonaria
Como ilustrador Rafael Bordalo
Pinheiro, surpreende-nos uma vez
mais. Para além de ilustrar as suas
próprias publicações e de colaborar em
tantas outras, quer nacionais quer
estrangeiras, surge-nos
simultaneamente com excelência como
ilustrador de várias obras de literatura
que, constituíram um marco da época.
Estudios. 1890
Satanaz
Retórica parlamentaria
Joao Rosa
Auto caricatura
JUSTICIAFidermas
Princesa Arat. 1880
Formiga
General
Almacedo
Diseños
Calendário
para 1896
Aguarela s/
papel
1896
Jerónimo
Martins &
Filho
Litografia
colorida
1896
Belmonte, Vanzolini y Guevara Benedito Bastos Barreto (São Paulo, en el
estado de São Paulo, 1897 - ídem, 1947). Caricaturista, dibujante, pintor, escritor, periodista e historiador. Comienza su carrera en 1912, con la publicación de sus primeras caricaturas en la revista Rio Branco, de São Paulo, al mismo tiempo en que colabora en la revista carioca D. Quixote. Durante sus primeros años de trabajo publica en diferentes periódicos de São Paulo y empieza a trabajar en el recién-inaugurado periódico Folha da Noite en 1921, substituyendo a Voltolino (1884 - 1926).
Benedito Barros Barreto, Belmonte, es uno de los más importantes caricaturistas en
actividad en São Paulo en la primera mitad del siglo XX. De su trazo nace una de las
figuras más populares de la historia de la prensa de São Paulo: el personaje Juca Pato. El autodidacta, Belmonte, comienza pronto
en la actividad de ilustrador. Su primer dibujo es publicado en la Revista Rio Branco en 1912. Al año siguiente se convierte en uno de los principales colaboradores de la revista
Alvorada, firmando las ilustraciones como Barreto, y de otras publicaciones como
Miscellanea, Radium, Cosmos, Revista da Semana, Dom Quixote, Fon-Fon!. Pese a su
relativa notoriedad a finales de los años 1910, su dibujo se muestra bastante influenciado
por el gran caricaturista J. Carlos (1884 - 1950), a quien reconoce como maestro y de quien
nunca se liberta completamente.
Civilizao
LAS TRES RAZAS
Ze Provinho. Belmonte
Vanzolini
Dos bandeirantes
Auto retrato
Guevara
Payaso
A volta du paseo de varsovia
Pintor, caricaturista, ilustrador de libros y
revistas, y diseñador de periódicos, se inició en
la actividad artística siendo todavía un
adolescente, hacia 1920. Poco después se
trasladó a Buenos Aires donde se radicó y
realizó su labor como caricaturista y diseñador,
teniendo al cubismo como patrón de su
producción.
En Buenos Aires trabajó en varios periódicos
importantes, como Crónica y Clarín; en este
último desde su fundación, y fue el
responsable del diseño de su conocido
logotipo
Dibujo publicado
en una revista
brasileña, muestra
a Hitler
Mujeres de mi Tierra
“ A la vez, a partir de la segunda mitad del siglo XIX se produce una modificación profundísima de las condiciones de vida, en cuya raíz esta la expansión de la técnica y del auge de la industria. Este fenómeno llevará al desplazamiento a las ciudades de grandes masas de población necesarias como mano de obra. En pocos años se produjo una autentica revolución urbana, con los nuevos trazados abiertos, destinados a facilitar los transportes y las comunicaciones. Las grandes ciudades se convirtieron en el escenario principal de la cultura de las artes, yen ella hicieron aparición a la vez como sujeto y objeto las multitudes, un agregado social animo, sin identidad, abigarrado”.
Caras y Caretas: semanario festivo, decano de los periódicos ilustrados, fue sin duda uno de los mejores y más importantes periódicos del genero satírico político publicados en el Uruguay. Su colección comprende 153 números la que empezó el 20 de julio de 1890 y terminó el 28 de febrero de 1897.
El director del semanario fue desde su fundación hasta el número 144, Eustaquio Pillecer, quien después se radicó en Buenos Aires, en donde le dio a luz a un semanario de noticias en el mismo nombre.
Muchos dibujantes y caricaturistas dejaron su talento y su ingenio en las páginas del semanario, entre otros, el parisiense Shulz y el español Juan Sanuy, que firmó con el seudónimo de Juan Bellver. Pero desde 1986 las caricaturas salieron del lápiz de Wilplane II, en la vida civil Aurelio Giménez.
URUGUAY
El negro Timoteo.
Ilustrador Orestes
Semanario político, satírico y burlesco. Es sin lugar a dudas, el mejor exponente del periodismo satírico uruguayo. Tuvo larga duración, aunque a trechos interrumpida a causa de medidas de fuerza policial. Conoció 4 épocas: la primera desde el 29 de febrero de 1876 hasta el 25 de febrero de 1887; la segunda de 1895 hasta el 29 de noviembre de 1896, con el número 48 la tercera etapa comienza el 5 de junio de 1898 y termina el 29 de enero de 1899; la cuarta es muy breve: corre entre el 1 y 6 de agosto de 1901. En esta última apareció como diario
Caricatura contra los gobiernos de
turno: Cuestas y Battle.
La Alborada, nacio como un semanario politico afecto a la causa blanco nacionalista, en esa orientacion se mantuvo desde el numero 1 del 5 de julio de 1896, al número 145 del 23 de diciembre de 1900 (…) desde el número 146 del 1 de enero de 1901 hasta el número 302 del 1 de enero de 1904, la Alborada dejó de ser una publicación política, para transformarse en un semanario festivo, literario, artístico y de actualidades. En esta nueva orientación períodistica el semanario se ocupó de dar a conocer a sus lectores las principales noticias y sucesos ocurridos durante la semana en el país y en el mundo entero.
Estas caricaturas se debieron al lápiz ingenios de J. Olivella. Dirigió el semanario desde su fundación hasta el número 254 del 25 de enero de 1903, el períodista y escritor Constancio C. Vigil, y desde esa fecha hasta el número 302 del 1 de enero de 1904 en el que desapareció la mencionada publicación, la dirigió Arturo Salom.
J. Olivella, ilustrador y caricaturista de la Alborada
Periódicos de Montevideo. 1890 -1910
Los nombres de algunos de los grabadores, ilustradores y caricaturistas de los periódicos mostrados son: Emilio Frugoni, Hermenegildo Sabat, Wilpllane II (Aurelio Giménez) y Souflet.
La cultura popular no entra a analizar la caricatura como una forma que aporta, desde la alusión al público, a la construcción de una cultura urbana y de masas. Quizás porque la caricatura busca generar mofa, sátira y risa sobre los asuntos de la vida diaria y la identificación de los personajes públicos, los políticos; éstos son la imagen de la nacientes republicas nación.
La caricatura no viene de la cultura popular pero retoma la imagen como elemento educativo y condensador de sentido, la cual se vulgariza más rápidamente, el ejemplo seria que a estos protohombres los vuelve humanos, los pone en la situaciones más comunes del cuerpo exuberante: amando, embriagados, en formas de animales. Ya que el objetivo que se persigue es generar la formación del público, de la opinión pública y del público, como la categoría fundamental de la práctica artística y estética
Argentina A principios de este siglo el periodismo argentino contaba
con un importante elemento que lentamente había llegado a la plenitud de su expresión: la caricatura. Herederos de una tradición que grandes publicaciones satíricas del siglo XIX –como El mosquito y Don Quijote- practicaron, los caricaturistas eran codiciados por diarios y revistas. Su trabajo se consideraba de manera singular, ya que a través de sus trazos ellos podían decir, con imágenes, lo que las palabras muchas veces no alcanzaban –o no podían-expresar.
En 1863 apareció el diario El Mosquito y con él la caricatura política en Argentina. Eduardo Wilde fue uno de los jefes de redacción y sobresalieron como caricaturistas de este periódico los franceses Henry Meyer y Enrique Stein.
Paseo triunfal en la calle Florida de un candidato á
la Presidencia por indios hechos prisioneros por
otros…que el. 12 de diciembre de1878.
Gran Consejo de Guerra
celebrado por los caciques del
desierto y algunos de Buenos
Aires. 3 de noviembre de1878
El Mosquito
Diplomacia Telegráfica
…Sarmiento: ¡Astchium!
…Errazuris: ¿Jesús!. 28 de julio de
1872, año X, n° 498. Sarmiento y la
obsesión por las telecomunicaciones.
Ahí está su
programa, General.
20 de enero. 1878.
El mosquito
El periódico Don Quijote es un órgano partidario opositor al gobierno nacional, de un grupo político "el radicalismo" que, a partir de 1890, surge como voz disidente que intentaba proponerse como una alternativa a la hegemonía de los partidos conservadores.
En octubre de 1898 aparece otra revista humorística que se llama "Caras y Caretas", que venía del Uruguay, en donde el español Eustaquio Pellicer la había iniciado en 1890 como semanario festivo, literario, artístico y de actualidades. Una vez llegada a Buenos Aires Pellicer renuncia y tomaron su lugar como directores J.S. Alvarez (Fray Mocho) y el dibujante español Manuel Mayol.
Don Quijote. 1884 -1903
Caras y Caretas fue un semanario
argentino que se publicó entre 1898 y
1941. Fue fundado por Eustaquio Pellicer,
y fue muy popular sobre todo en la primera
época, dirigido por José S. Álvarez (Fray
Mocho). En su diseño sobresalían las
imágenes de gran calidad y en sus textos
combinaba el humor con el periodismo
más serio.
Entre los caricaturistas de la revista
destacó José María Cao Luaces (1862-
1918), nacido en españa (en la localidad
gallega de Santa María de Cervo),
considerado el padre de la caricatura
argentina.
Eustaquio Pellicer (1859-1937). Nació en Burgos, España. En 1886
llega al Río de la Plata donde trabaja en publicaciones como "La
unión Gallega" y "Ferrocarril". Su humor mordaz y picaresco alcanzó
notoriedad en las dos revistas que fundo: "Caras y Careta”, y PBT.
Fue primero en Caras y
Caretas, que contaba con una
envidiable impresión, luego
en P.B.T., Última hora y
Crítica por último, donde la
caricatura señoreó –durante
las dos primeras décadas de
este siglo- en lo que quizá
pueda llamarse su época de
oro en la Argentina. No sólo
los equipos gobernantes eran
satirizados sin miramientos:
los dibujantes mantenían una
distancia crítica frente a la
sociedad en general, y ponían
su imaginación al servicio del
esclarecimiento de las
distintas conductas humanas
Otra creación del español Eustaquio Pellicer se impone en 1904 entre los semanarios de Buenos Aires: PBT. Su formato era pequeño pero original (13 por 23 centímetros) y sus caricaturas tenían gran potencia y singularidad. Por su contenido de crítica política y de actualidad llegó a superar en un momento a su slogan, "semanario infantil ilustrado para niños de 6 a 80 años". Sus fotos e ilustraciones, con sus respectivos epígrafes en verso, retrataron toda una época describiendo tendencias y costumbres de la ciudad y el país.
No me deje pasar á blancos ni colorados.
¿Y si son negros?
-Tampoco; porque también es gente que
pasa…de castaño oscuro.
José María Cao Luaces, nació en el Pueblo
de Santa María de Cervo, consello de
Viveiro, Provincia de Lugo, el 13 de
diciembre de 1862. Milita en el partido
Republicano Federal, liderado por Pi i
Margall. El fracaso de la Primera República y
la represión posterior le llevan a la
emigración a Buenos Aires (1886) donde
trabaja como caricaturista en revistas y
periódicos. Desde uno de estos periódicos,
"El Eco de Galicia", Cao alentó la creación
del Centro Gallego de Buenos Aires, que se
funda en 1879 para disolverse en 1892. De
nuevo estimula la refundación de dicha
organización el 14 de agosto de 1893.
Organiza y dirige también en el "Orfeón
Gallego"
Crea la revista "Caras y Caretas" donde se
consagra como dibujante satírico.
Cao Luaces muere en Lanús Argentina en
1918. Perteneció a la masonería argentina
José María Cao
Luaces
Revista P.B.T. Pellicer sentía que la época era propicia
para una publicación satírica, alegre e incisiva... Cuando se dio a preparar su revista lo primero que se le ocurrió fue dotarla de un nombre que estuviera de acuerdo con ese espíritu juvenil, inquieto y travieso que quería darle. Y entonces surgió P.B.T., expresión en ese entonces muy popular y común en España, pero todavía sin arraigo entre nosotros.
El segundo problema que se planteó fue el del tamaño de la revista. Optó por reducirla a una dimensión no usada todavía entre nosotros con la preconcebida intención de que resultara una revista "de bolsillo... para que lo acompañara al lector a cualquier parte..."
Pellicer EUSTAQUIO PELLICER había nacido en Burgos, España, el 3 de
setiembre de 1859. Realizó sus estudios de bachiller en su ciudad natal. En 1886 llegó al Río de la Plata. De inmediato se entregó a las actividades periodísticas, formando parte de las redacciones de la Unión Gallega de Montevideo y el ferrocarril. Sus versos cómicos y sus dibujos le dieron notoriedad. Trasladado después a Montevideo, fundó en esa capital el semanario humorístico La Pillecerina y después se incorporó como uno de los pilares de Caras y Caretas. Volvió a Buenos Aires en 1892. Perteneció al personal de cronistas de La Nación. Desde allí ideó la continuación de Caras y Caretas en compañía de Bartolomé Mitre, que se retiró pronto y la revista continuó en manos de Pellicer, Mayol, Fray Mocho. En esa revista su "sinfonía" fue siempre una nota expresiva y crítica que testimonia su agudeza y su don de observación. Fundó P.B.T. en 1904 y continuó desde allí su obra propia y la de sus colaboradores. Finalmente se retira en 1910 pero sigue de cerca el desarrollo de la revista. Fallece en Buenos Aires el 23 de diciembre de 1937.
P.B.T., junto con Caras y
Caretas, presentó las
primeras historietas que
se conocen en las revistas
argentinas.
Una de ellas es "El
esqueleto rematado", del
dibujante Pedro de Rojas.
La actualidad de la misma
se mantendrá por todo el
siglo xx : se trata de un
esqueleto y su adquirente
en un remate, quienes
dialogan sobre temas de
actualidad en su recorrido.
Primera historieta secuenciada de Manuel Redondo.
1912
Chile.La caricatura, del latín caricare, cargar, subrayar, exagerar, recién hizo su aparición como tal en "El Correo Literario", redactado por don José Antonio Torres. Dicho periódico se autodefine como político, literario e industrial. Su primer número apareció el 18 de julio de 1858, durante el gobierno de don Manuel Montt. La declaración de principios de periódico señalaba: "El objeto de la caricatura es corregir las costumbres y defectos, es satirizar, poner en ridículo, si requiere, aquello que se manifiesta ridículo, para procurar su corrección". Los dibujantes eran Antonio Smith, el primer caricaturista chileno y Benito Basterrica, ambos discípulos del conocido pintor Alejandro Cicarelli.
Luego de la Guerra del Pacífico,
se funda "El Padre Padilla", que
circuló entre 1884 y 1896,
periódico de caricaturas que da
importancia a los problemas
sociales, a la intervención
económica y a las malas
prácticas políticas. Juan Rafael
Allende Astorga, llamado "El
Voltaire Chileno", nació en
Santiago el 24 de octubre de
1848 y murió, pobre y olvidado, el
20 de julio de 1909.
Luis Fernando Rojas fue, además, el
propietario, junto a Ricardo
Fernández y luego Julio Vicuña, de
"La Revista Cómica", periódico
semanal ilustrado y literario, de 4
páginas. Rojas hacía las portadas y
dibujaba dos páginas de viñetas de
humor, incluido el humor negro y la
caricatura política. La revista circuló
desde el 4 de agosto 1895, fecha que
(con la indicación de sólo el año) don
Manuel Alcides Jofré, en su libro
"Publicaciones infantiles y revistas de
historietas en Chile: 1895-1973", cifra
el punto inicial de la historia de la
historieta en Chile. La revista fue
continuada en 1915 por "La Lira
Ilustrada", donde Rojas continuó
dibujando.
En 1905, entre junio y agosto, Rojas publica "El hermano Jacinto", periódico de caricaturas. Ya a comienzos del siglo XX, en 1911, fue reconocido por don Enrique Blanchard-Chessi, director de "El Peneca", donde Rojas colaboraba, como uno de los grandes artistas chilenos. Coke lo menciona como el decano de los caricaturistas chilenos, señalando que con el seudónimo "Marius" trabajó, además de en "El Peneca", en las revistas "Zig-Zag" y "Sucesos". En sus últimos años realizó cuadros patrióticos, ilustraciones por encargo. lo llaman "precursor de ilustradores, caricaturistas y reporteros gráficos" y piden una pensión de gracia para él. Rojas muere en 1942, sin el merecido reconocimiento
Libro de las leyendas de la abuelita
El 31 de marzo 1902 se comienza a publicar "El Diario Ilustrado", que significó un importante aporte a los dibujantes, pues inició la práctica de publicar una caricatura en la primera página en la que participaron los principales caricaturistas de la de la época. A partir del 19 de mayo de 1902, Perengano, seudónimo del español Santiago Pulgar, realiza algunos dibujos Le seguiría Nataniel Cox Menéndez, desde el 4 de agosto de 1902, con la tira "La Semana Cómica". Era muy joven y son sus primeros trabajos, pero ya se vislumbra el gran caricaturista que llegaría a ser. Firmará con sus iniciales al principio y luego usará el pseudónimo de Tom Pouce o Blitini. En 1906, se irá definitivamente a revista "Zig-Zag".
Portada N° 1
de revista
Zig Zag
"Zig-Zag" fue el más conocido
de los semanarios, su reinado
duraría casi 60 años y 3.102
números. Dirigido por muchos
años por el escritor Joaquín
Díaz Garcés, reunió un
selecto grupo de ilustradores,
caricaturistas y dibujantes. Es
en esta publicación en la que
aparecen las primeras
historietas. Sus autores más
importantes fueron Julio
Bozo, que por sus gruesos
bigotes firmaba como
"Moustache", y el famoso y
futuro Fray, don Pedro
Subercaseaux Errázuriz, cuyo
seudónimo era "Lustig
En sus primeros años,
Editorial Zig-Zag realiza
una amplia obra
editorial que incluye "El
Mercurio Ilustrado", en
1905, y la revista
"Corre Vuela", a
principios de 1908.
También inició la
revista de historietas
de más larga y
recordada trayectoria,
"El Peneca", en 1908,
así como "Selecta,
revista de arte" en
1909, "Pacífico
Magazine", en 1913, y
muchas revistas más.
Julio Bozo, el célebre Moustache, dibujante humorístico de la
revista "Zig-Zag", también hacia las portadas del semanario
"Corre Vuela" y campañas publicitarias de gran éxito, como la
del alimento Tisphorine. Realizó, además, notables retratos
humorísticos de la vida citadina y provinciana de las primeras
décadas del siglo XX. Casi nunca trata temas políticos, pero
sí se burla de la burocracia
Von Pilsener y su perro Dudelsackpfeifergeselle
(que significa "El acompañante pipador de
gaita"... más o menos).º
Las aventuras o desventuras de "Von
Pilsener" aparecen irregularmente en
la revista entre 1906 y 1907, para
luego emigrar a otras publicaciones.
Su autor pretende, según aclara él
mismo en sus memorias, "resaltar, en
forma humorística, nuestros propios
defectos, exponiéndolos a la crítica de
un imaginario observador europeo", lo
que logra con fino humorismo y ácida
crítica a las costumbres. Von Pilsener
transformará, a Pedro Subercaseaux,
en el primer dibujante nacional de
historietas en crear un personaje
Pedro
Subercaseaux
Errázuriz, Lustig
Revista parte de la labor
editorial de Zig - Zag
Revista de Juan Francisco
Gonzáles Ramírez. Huelén
Juan Francisco González Ramírez es el
digno hijo de un gran pintor. Firmaba
Huelén para diferenciarse de su famoso
padre, una de las cumbres de la pintura
chilena, sino que no lo abandono nunca.
Nació en Valparaíso en 1894 o 1895 y
murió en 1976.
Se desempeñó desde muy joven en las
más diversas revistas de la primera mitad
del siglo XX, como en la famosa revista de
actualidad llamada “Sucesos”, de la
Imprenta y Litografía Universo, de
Valparaíso, donde firmaba “Pelerín”, por lo
que no es muy reconocido. Además,
dibujó en otra revista porteña, que circuló
entre 1910 y 1922, llamada “Monos y
Monadas”, de carácter infantil.
Respecto de los diarios nacionales,
colaboró con “La Nación” y “El Diario
Ilustrado”
La caricatura sugiere que el servicio del
Ferro Carril Urbano no siempre fue
satisfactorio. El carro #23 nuevamente.
(Sucesos, V, 29/7/1904)
Para muchos de nosotros, seguidores de los caricaturistas chilenos,
su nombre se asocia a la caricatura política, ya que fue uno de los
grandes y permanentes colaboradores de Jorge Délano, Coke, en la
revista “Topaze”, siendo un dibujante secundario, ante elementos de
la talla de Coke, Pepo, Lugoze, Lukas, Vicar y tantos otros que
pasaron por la revista en sus casi cuarenta años de vida.
El Peneca (1908-1960) El surgimiento del periodismo
moderno en Chile, a comienzos del siglo XX, vio el nacimiento de una serie de revistas especializadas dirigidas a distintos segmentos de la sociedad. Uno de estos segmentos fue el público infantil, para el que se publicaron varias revistas tales como la Revista de los Niños (1905), Chicos y Grandes (1908) y El Peneca (1908), con el fin de entretener y educar. De estas tres, El Peneca, creada por la editorial Zig-Zag, fue la única capaz de mantenerse vigente, tanto por la calidad de sus contenidos, como por la relación cercana que mantuvo con sus pequeños lectores
Los primeros tres años de El Peneca, bajo la dirección de Enrique
Blanchard-Chessi, se caracterizaron por tener pequeños artículos sobre
diversos temas de interés general y una gran cantidad de
colaboraciones de lectores. Esto último marcó uno de los atractivos
más importantes de la revista; la capacidad de integrar a su público en
la creación de la misma.
Se pretendió analizar someramente algunos representantes de esta práctica, relacionada con la mediación y la construcción del imaginario colectivo, vinculando de esta manera la caricatura como fuente visual para la historia de la cultura desde una perspectiva menos institucional, en tanto que menos oficializado.
Se buscó conocer periódicos y sujetos de todos los países al final del siglo XIX y principios del siglo XX -los primeros 20-. Se encontró sobre México, Cuba, Puerto Rico, Colombia, Brasil, Uruguay, Argentina y Chile, para rescatar elementos comunes, personajes construidos como imagen nacional, de las imágenes y las diferencias de cada publicación – deacuerdo a sus intereses y especificidad nacional- con respecto a los temas que se presentan y las situaciones que son la inspiración; dado que el sentimiento es afirmar más allá de un aislamiento en la construcción de la propaganda y la publicidad, los periódicos y revistas, la entrada del diseño y lo visual como parte inherente de ellas en Latinoamérica como la forma que desarrolla, casi a la par –con Europa- unos problemas, unas soluciones y una visión de mundo que se forma constantemente, nos diferencia de lo otro, narrándonos una historia compartida. Así se desmitifica la idea de que la modernidad llégó por la pintura y la arquitectura, es la impresión, los medios de comunicación y su auge con la ciudad, en su afán de llegar a las masas la creadora del componente del Público y la opinión Pública como referencia de cualquier obra que se llame estética.
Se puede concluir que la categoria inmediata a la que remite cunado pensamos, vemos y hablamos de caricatura es al autor, el cual sólo es un trasmisor de una realidad a través de una condensación estética y compleja, que interpreta y cohabita con los pensamientos, es decir el Público.
BibliografíaArticulo. Entre la hibridación y la yuxtaposición de las
memorias citadinas. Jairo Escobar.
Articulo. La metrópoli y la comunicación gráfica. Carlos Arturo Acosta de Greiff.
Articulo. El contexto urbano en el arte latinoamericano contemporáneo. Ivonne Pini.
Articulo. El Museo en el tercer milenio. Umberto Eco.
Contribución a la historia de la Sátira Política en Uruguay: 1987 -1904. Alfonso Cerda Catalán
Arte es todo lo que los hombres llaman arte. Cáp: I, IV, V. José Jiménez.
En Busca de lo Propio. 1920 – 1930. Ivonne Pini.
Víctor Hugo Jiménez Durango.