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LA DINAMICA DE LA INVESTIGACION EN CIENCIAS SOCIALES
LOS PROBLEMAS DE LA METODOLOGIA
PAUL. de BRUYNEProfesor de la Universidad de Louvain
JACQUES HERMAN y MARC DE SCHOUTHEETEAsistentes de la Universidad de Louvain
Prefacio de Jean LadrièreProfesor de la Universidad de Louvain
PRESSES UNIVERSITAIRES DE FRANCE1974
INTRODUCCION
METODOLOGIA Y PRACTICA DE LA INVESTIGACION EN CIENCIAS
SOCIALES
Traducido por Victoria Kairuz,
Transcripción Floralba Cano
Si bien nadie duda de la importancia y el rigor actual de la investigación en
ciencias sociales, las críticas respecto de sus pretensiones y de sus resultados
manifiestan, sinembargo, su estado de crisis permanente. Se sostiene aún que su
campo de acción es refractario a todo método científico y que por lo tanto, no
podría erigirse como ciencias :
“ Las "ciencias humanas" son ciencias falsas : de ninguna manera son
ciencias....ellas acuden y acogen las transferencias de modelos prestados a las
ciencias “.1 Toda ciencia digna de este nombre no podría establecerse sino en un
universo en el cual el hombre fuera externo a él, lo que comprometería
radicalmente la pretensión de cientificidad de las ciencias sociales.
Sinembargo, al querer afirmar incesantemente el carácter científico de la
investigación, no se hace sino desenmascarar las debilidades sin fundamentarlas
válidamente. Es menos importante trazar un línea precisa entre lo que es
“científico” y lo que no lo es, que favorecer cada ocasión de crecimiento científico.2
Constituye un peligro para el investigador en ciencias sociales el extrapolar
prácticas y modelos a partir de otras disciplinas más desarrolladas, para presumir
de un estado de su disciplina ( al cual no se habría llegado por el devenir de la
formación histórica de si discurso ), cuando se trata, por el contrario, de apuntar
hacia prácticas específicas para llegar a fundamentos más válidos y comparables,
pero diferentes de los de las ciencias más rigurosas.
Sin querer absolutizar el carácter “científico” de las ciencias del hombre, debe
convenirse que el carácter de sistematicidad, de atenerse a los hechos, de
acuerdo intersubjetivo de los investigadores en cuanto a los métodos y a los
resultados, confiere a la empresa científica una especificidad innegable con
11 M. FOUCAULT, Les mots et les choses. Une archéologie des sciences humanines, Paris, Gallimard, 1969-A, p. 378.2 A. KAPLAN, The conduct of Inquiry Methodology for Behavioral Science, San Fransico, Chandler Publishing Company, 1964, p. 28.
2
relación a las demás prácticas sociales. “ La ciencia, sin identificarse con el saber,
mas sin ignorarlo ni excluírlo, se localiza en él, estructura ciertos objetos,
sistematiza ciertos de sus enunciados, formaliza ciertos de sus conceptos y de sus
estrategias”.3
A) Autonomía de la Investigación e Interdisciplinariedad
El campo de las problemáticas de las ciencias sociales es demasiado amplio como
para que pueda pretender englobarse o reducirse a una sola disciplina. Nos
hallamos en un campo que es pluridisciplinario : Cada disciplina - Sociología,
Psicología, Etnología, Economía, etc.- no debe apuntar hacia el conjunto del
espacio epistémico de las ciencias del hombre, sino delimitar estrictamente-
metodológicamente- un campo de análisis, un aspecto particular de este espacio.
El trabajo científico tiene por objeto “dominios”, especializados, que se aislan de
manera artificial, en los cuales los conocimientos se sistematizan; “ dominios”
donde los investigadores deben llegar a un “consenso” intersubjetivo sobre los
conceptos, los protocolos experimentales, los criterios de validez, etc.4
Así, la unidad de “la” Ciencia es siempre problemática : Constituye un campo
heterogéneo en el cual, disciplinas parcelarias intentan articularse las unas con las
otras en una especie de edificio donde se realizará progresivamente la totalidad
del saber, según las promesas del positivismo. Si la ciencia no es una, o sea que
no totaliza todo el conocimiento posible, ella se encuentra por el contrario, inserta
en un devenir perpetuo donde se operan menos totalizaciones que redefiniciones,
revoluciones, descubrimientos.5 Las ciencias son parcelarias, abiertas, en la
búsqueda de nuevos métodos, de nuevos conceptos, de nuevos medios de
investigación y de verificación. En consecuencia, no existe “UN” método científico :
“....si una definición “del método científico” fuera lo suficientemente específica
como para
que fuera de alguna utilidad en metodología, no sería lo suficientemente general
para englobar todos los procedimientos que los científicos pueden eventualmente
encontrar útiles”.6
3 M. FOUCAULT, L'archéologie du savoir, Paris, Gallimard, 1969-B, pp. 241, 242.4 Sobre esta intersubjetividad de la ciencia, cf. K. R. POPPER, The Logic of Scientific Discovery, London, Hutchinson, 1972, pp. 44-47, 98-104.5 T. S. KUHN, La structure des révolutions scientifiques, Paris, Flammarion, 1972; R. W. FRIEDRICHS, A. Sociology of sociology, New York, The Free Press, 1972.6 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 27.
3
Las “Ciencias Sociales” pueden clasificarse en cuatro grupos,7 cuyas fronteras
aparecen con frecuencia convencionales y cuyas estrategias pueden combinarse
en la práctica : las ciencias nomotéticas, que buscan establecer leyes; históricas,
dedicadas a encontrar todas las determinaciones concretas de objetos
particulares; jurídicas, de carácter normativo; filosóficas, cuya ambición sería
universalista.
Las “ciencias nomotéticas” son las que se desarrollan más y las que aportan
los resultados más fecundos, establecen leyes más o menos constantes, se basan
en equilibrios sincrónicos y desarrollos diacrónicos, utilizan métodos de
experimentación en el sentido amplio y métodos de verificación que subordinan los
esquemas teóricos al control de los hechos de la experiencia.
“ La tarea de una ciencia es la de investigar las constantes y las leyes que siguen
fenómenos y hechos”. 8 La invariabilidad se expresa en números, relaciones,
estructuras, esencia, media, etc.
La fundamentación de una ciencia está subordinada a la delimitación de
fronteras claramente definidas que le confiere su especificidad y le permiten
desarrollarse construyendo rigurosamente sus objetos de conocimiento y sus
protocolos de investigación. El conocimiento científico no amerita su nombre sino
en la medida en que haya sido elaborado según las reglas de la metodología
científica. Solamente ésta permite garantizar un conocimiento fiable de la realidad,
haciendo ella misma prueba se su validez, puesto que propone un tipo de
comprensión, de prueba y de control, y puesto que plantea explicaciones y
predicciones.9 La reflexión metodológica existe además para establecer puentes
entre las diversas disciplinas, ya que los métodos son instrumentos
suficientemente generales como para ser comunes a todas las ciencias o a una
importante de ellas. El objetivo de la metodología, que es una “praxeo-lógica” de la
producción de los objetos científicos, es el de clarificar la unidad subyacente en
una multiplicidad de procedimientos científicos particulares. Ella ayuda a
desbrozar los caminos de la práctica concreta de la investigación de los
obstáculos que ésta encuentra, sin pretender reflejar el camino concreto de cada
investigación particular ya que éste es eminentemente variable....Esta reflexión
7 J. PIAGET, Epistémologie des sciences de l'homme, Paris, Gallimard, 1972-B, pp. 17-28.8 A. VIRIEUX-REYMOND, Introduction à l'épistémologie, Paris, Presses Universitaires de France, 1972, p. 21.9 G.-G. GRANGER, in L. APOSTEL et al., L'explication dans les sciences, Paris, Flammarion, 1973.
4
debe ser global, ya que si bien pueden distinguirse múltiples vías metodológicas
en la medida en que las diversas disciplinas recurren a diversos métodos, también
puede reconocerse una voluntad metodológica autónoma. Si es fundamentado y
fructífero el postular una cierta unidad de la ciencia, es sobre todo en el plano
metodológico que hay que actuar, según parece.
La reflexión metodológica debe presentar el más amplio abanico posible de
procedimientos epistemológicos, teóricos, morfológicos y técnicos, para ponerlo a
disposición de los investigadores de las disciplinas particulares : tal es la ambición
de una metodología general.
Por otra parte, las metodologías de las diversas aproximaciones científicas
revelan a veces diferencias tan grandes que todo esfuerzo de integración parece
inútil y aún perjudicial, puesto que parece, que a la fecundidad interdisciplinaria se
opone el carácter también fecundo da la prosecución de una vía metodológica
particular. Pero las metodologías particulares no se oponen a la metodología
general. Aquellas, por el contrario, extraen de ésta inspiraciones y procedimientos
que enriquecen su desarrollo específico. La metodología general debe proponer
conexiones entre las metodologías particulares y permitir la interfecundación de
éstas, sin negar el valor heurístico de un método aislado para encontrar, dentro de
su lógica específica, procedimientos originales de investigación.
Antes de entrar a precisar el carácter propio de la empresa metodológica, es
necesario situar el lugar del campo de la investigación. “ El campo de investigación
“, concebido como lugar efectivo del trabajo de los investigadores, es
esencialmente el lugar dinámico y dialéctico donde se elabora una práctica
científica que construye objetos de conocimiento específicos, los cuales imponen a
su turno, su código particular de aprehensión y de interpretación de los
fenómenos.
El campo de la investigación es pues el lugar práctico de la elaboración de los
objetos mismos del conocimiento científico, de su construcción sistemática y de la
constatación empírica de los hechos que esta investigación ha planteado. Es
esencial situar toda investigación en un campo epistémico, el campo propiamente
científico, es decir, apuntar a una “objetividad” de tipo científico. Sólo con esta
condición, será respetada; la integralidad de las exigencias metodológicas y
protegida de integridad de los investigadores, de las determinaciones y coerciones
exteriores a la práctica científica. Esta posición de “ descentralización “ es
indispensable a la “ autonomía de la investigación “, es decir, a su exigencia
interna de desarrollo y autocontrol. Así intentan las ciencias escapar a toda
5
explotación extracientífica que pueda comprometer los mecanismos mismos de su
desarrollo. Esto no impide de ninguna manera, afortunada o desafortunadamente,
que se efectúe una explotación extracientífica (filosófica, tecnológica, política, etc.)
de los resultados de las ciencias.10
Ciertos tipos de investigación, cuyo objetivo primordial no es el conocimiento o la
explicación sino la descripción y la transformación de situaciones existentes,
obedecen a normas exteriores a la práctica científica cuya dominancia destruye el
principio de la autonomía de la investigación. Los aspectos epistemológicos y
teóricos serán entonces negados en beneficio exclusivo de manipulaciones
técnicas, con propósitos directamente pragmáticos y a veces terapéuticos.
“El postulado de autonomía” de la investigación establece pues, la pertinencia
de una metodología general y la utilidad de las metodologías particulares. La
elección epistémica es entonces, “rechazo de la actitud natural que plantea el
mundo en sí como objeto.” 11 Y su efecto es arrancar el objeto científico de la
vivencia, pensar su especificidad, construir la teoría y efectuar la verificación
sistemática.
B. Lógica de la Prueba, Lógica del Descubrimiento, “ Diseño” e Investigación.
La metodología es a la vez una lógica y una heurística. La empresa metodológica
no es reducible a una reflexión “ a posteriori” sobre los resultados de la
investigación científica. Ella tiende, por una parte, a analizar los procedimientos
lógicos de validación y a proponer criterios epistemológicos de demarcación para
las prácticas científicas (lógica de la prueba ) y por otra, a examinar el proceso
mismos de la producción de los objetos científicos ( lógica del descubrimiento ).
La metodología es la lógica de los procedimientos científicos en su génesis y
su desarrollo y no se reduce por lo tanto a una “metrología” o tecnología de la
medida de los hechos científicos. Para ser fiel a sus promesas, una metodología
debe abordar las ciencias bajo el ángulo de su “producto” -como resultado en
forma de conocimiento científico-, pero también como “proceso”, o sea como
génesis de este mismo conocimiento.
La metodología debe ayudar a dar cuenta, no sólo de los productos de la
investigación sino sobre todo de su proceso mismo, puesto que sus exigencias no
son de sumisión estricta a procedimientos rígidos sino de mucha fecundidad en la
10 N. CHOMSKY, Les problèmes du savoir et de la liberté, Paris, Hachette, 1973.11 J. VIET, les méthodes structuralistes dans les sciences sociales, Paris, Mouton, 1969, p. 6.
6
producción de los resultados. Los principios de la investigación científica no deben
derivar de lugar diferente al de la práctica metodológica, puesto que ésta se
concibe, en sentido amplio, como reflexión crítica sobre las dimensiones concretas
de la investigación.
Cuando uno se interroga sobre un “ars inveniendi” más que sobre un “ars
probadi”, se está impelido a “romper con muchos esquemas rutinarios de la
tradición epistemológica y metodológica y en particular, con la representación de
la investigación como sucesión de etapas distintas y predeterminadas”.12
La práctica científica no puede reducirse a una secuencia de operaciones, de
procedimientos necesarios e inmutables, de protocolos codificados. Semejante
concepción, que hace de la metodología una tecnología, reposa sobre la visión
rigorista, y “burocrática” del “diseño” fijado al comienzo de la investigación y una
vez por todas, y se concreta en lo que W.H. White denomina la “manía del
proyecto”. Parece, por el contrario, que la complejidad de las problemáticas en
ciencias sociales exige interpenetraciones e intercambios constantes entre los
polos epistemológico, teórico, morfológico y técnico de la investigación.
Sinembargo, la división sociotécnica del trabajo y de la profesionalización del
investigador llevan hacia automatismos administrativos de tipo burocrático : “ La
compartimentalización de las operaciones de la investigación que sirve de
paradigma, al menos inconsciente, a la mayor parte de los investigadores, no es
cosa distinta a la proyección en el espacio epistemológico de un organigrama
burocrático...todo concurre a favorecer la dicotomía entre el empirismo y la teoría
sin control, la magia formalista y el ritual de los subalternos”.13
No muy alejada de esta noción del “diseño”, se desarrolla una concepción de la
metodología como un conjunto de técnicas que se aplican secuencialmente en la
cronología de una investigación. Se reduce así al método a un discurso “lógico” de
tipo inductivista para una investigación en forma de programa:14
a) Estudios exploratorios en “grado cero” de teorización y observación al azar ; b)
Estudios de “follow-up” para formular hipótesis particulares; c) Elaboración de
“modelos teóricos”, formales o descriptivos ; d) Validación de estos modelos
12 P. BOURDIEU, J.-C. CHAMBOREDON et J.-C. PASSERON, Le métier de sociologue, Paris, Mouton-Bordas, 1968, p. 25.13 Ibid., p. 110.14 J. E. McGRATH, Toward a "Theory of Metthod" for Research on Organizations, in W. W. COOPER, H. J. LEAVITT and M. W. SHELLY II, eds, New York, john Wiley, 1964, pp. 533-566; A. J. KAHN, The Design of research, in N. A. POLANSKY, ed., Social Work Research, Chicago, University of Chicago Press, 1960, pp. 48-58.
7
experimentados en contextos limitados ; e) “Validación cruzada” de la teoría en
situaciones concretas (cross - validación) estadio de la consolidación de la teoría.
Además de sus “ a priori” empirista. este procedimiento propone un modelo ideal
de la investigación bajo la forma de una especie de camino crítico, e impone una
concepción lineal de la metodología y de la investigación.
FALTA UN PARRAFO DEL TEXTO ORIGINAL
C. El Entorno Social de la Investigación
El campo de la investigación se inscribe desde el comienzo y a todo lo largo de su
elaboración, en un entorno social mucho más amplio : el de todas las “prácticas
sociales”. Sin entrar aquí en el análisis de las relaciones complejas entre la ciencia
y la sociedad, o de la producción de la una por la otra, parece útil discernir ciertos
campos de influencia, de entrabamientos y/o facilicitación respecto de la
investigación científica, que limitan o contrarían la libertad de las escogencias
metodológicas del investigador. Estos campos son de naturaleza e importancia
muy diversas y su influencia es específica en cada contexto particular de
investigación.
"La organización social de la investigación no escapa a los conflictos políticos y
sociales...los sabios no están por fuera del ámbito confuso y complejo de lo social
y de lo político, pero su ciencia no se reduce a la ideología de los actores que se
enfrentan...” 15
1.El campo de la demanda social. El sistema cultural de una sociedad permite y/o
legitima de cierta manera la actividad del investigador como miembro que es de
esa sociedad. La influencia de la “división socio-técnica” del trabajo ya ha sido
señalada; de tal suerte que, por ejemplo, al “teórico” se le distingue arbitrariamente
del “investigador sobre terreno”, a pesar de que sus trabajos son inseparables
metodológicamente. El “pedido social”,* el financiamiento de la investigación, son
amenaza para su autonomía, ya que pueden introducir propósitos normativos o
exclusivamente pragmáticos que desnaturalizan los procedimientos de
objetivación científica. La “cooptación”** le crea al investigador el riesgo de ser
15 A. TOURAINE, Production de la société, Paris, Seuil, 1973, pp. 100-101.* "Pedido social": aquello que se solicita realizar al investigador.** "Cooptación": Modo de reclutamiento que consiste en que un grupo designa él
8
manipulado por cualesquiera grupos de presión, de aceptar como “datos”,
informaciones recortadas. La “sociedad de discurso”,*** es decir, el conjunto
de los investigadores, las teorías y las experiencias, los rituales y las normas,
las instituciones académicas y científicas, ejercen un control directo sobre
toda la investigación. Los aspectos nefastos de las “sociedades de discurso” son
sin duda alguna numerosos -conservatismos, modas, nepotismos, dogmatismos,
etc-a pesar de lo cual su aporte positivo es capital: ellos son efecto, la
concretización, socialmente institucionalizada, de cierta autonomía de la
investigación, el lugar crítico de control mutuo, de elaboración intersubjetiva que
garantiza la objetividad científica. Cada sociedad de discurso puede incluir
diversas “escuelas”, lo que constituye un carácter fecundo de confrontación de
puntos de vista recíprocos, pero que puede también desencadenar la
intransigencia y el dogmatismo.16
El papel de las sociedades de discurso (constituyen la “ciudad sabia”),17 es el de
elaborar una ética de la profesión y un lenguaje común a los investigadores de
cada una de las disciplinas, favorecer un cierto “esoterismo” que cuida a la ciencia
de los apetitos de los grupos sociales exteriores y de una peligrosa vulgarización...
(FALTA UNA LINEA DEL TEXTO ORIGINAL)
Así pues, toda producción científica responde a una demanda que le impone su
sello, siendo aquí donde se justifica una sociología de la práctica científica.18
2. El campo axiológico. Es el campo de los valores sociales e individuales que
condicionan la investigación científica.19 La prosecución misma del esfuerzo
científico está sostenida por valores específicos (conocimiento, poder, etc.)
Los “valores culturales” inherentes a la sociedad imponen al investigador la
elección de sus problemáticas, de los temas que aborda. Así, Marx Weber insistía
sobre “volver a los valores” y Marx decía que los hombres sólo se plantean los
problemas que pueden resolver, reconociendo con ello conexiones de la
investigación con los contextos sociales, técnicos y culturales en los cuales de
inscribe. Ahora, la elección de la problemática debe esforzarse por ser explícita,
mismo sus miembros.*** "Sociedades de discurso": podría entenderse como "comunidades científicas" (notas de la traducción).16 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, pp. 117-127.17 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, pp. 109-113.18 B. BARNES, ed., Sociology of Science. Readings, London, Penguin, 1972; R. W. FRIEDRICHS, op. cit., 1972.19 K. R. POPPER, op. cit., 1972; J. HABERMAS, Knowledge and Human Interests, London, Heinemann, 1972.
9
para no ceder ante los múltiples embates de las ideologías.20 Los “intereses
propios del investigador” mismo, le sugieren igualmente orientaciones específicas.
Pertenecería al campo del psicoanálisis el determinar el impacto del factor
individual sobre el desarrollo de los conocimientos científicos. El investigador, en
lo que compete, debe apartarse de sus juicios personales de valor... (FALTA
LINEA DEL TEXTO ORIGINAL)
Lo dicho no impide de ninguna manera, que las investigaciones en ciencias
sociales, cuyo objeto con frecuencia concierne al estudio de valores, normas y
significaciones, puedan tratarlos como “hechos normativos”21 sin caer en el
subjetivismo. No hay que confundir el subjetivismo del investigador (sus juicios de
valor) con el subjetivismo de los objetos de investigación (individuos, grupos,
sistemas socioculturales, etc.).22
3.El campo doxológico .Es el campo del saber no sistematizado, del lenguaje y de
las evidencias de la práctica cotidiana, de donde la práctica científica debe
precisamente esforzarse por arrancar sus problemáticas específicas. El campo
doxológico es el soporte y el producto de lenguaje común, de las prácticas
empíricas, y puede determinar en el investigador una “ certeza sonámbula”
( Mannheim ) sobre la realidad que investiga. El investigador debe, por el
contrario,desembarazarse de las prenociones del sentido común. Una “doxología”,
tendría por tarea, estudiar la incidencia del saber sobre las prácticas científicas:23
una “gnoseografía” ( Wittgenstein )24 debe por su parte, encargarse de purgar el
lenguaje científico tan contaminado de premoniciones vagas, etéreas, ideológicas.
El conjunto de la “tradición teórica” de las disciplinas de las ciencias humanas
tiene aún nexos orgánicos con el campo doxológico, en la medida en que su
práctica apenas inicia la ruptura con el lenguaje común : la prueba de ello es
el diálogo constante de estas ciencias con las preocupaciones pragmáticas e
ideológicas corrientes, diálogo (y este es el signo de una carencia de ruptura) que
se desarrolla por medio del mismo lenguaje. Esta es una “consecuencia
inesperada” de la vulgarización de las investigaciones en ciencias sociales. Ahora,
20 W. W. GOULDNER, The Coming Crisis of Western Sociology, London, Paperback, 1972.21 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, p. 24.22 P. BOURDIEU, Esquisse d'une théorie de la practique, précédé de Trois études d'ethnologie kabyle, Gnève, Librairie droz, 1972.23 M. FOUCAULT, op. cit., 1969-B; G. DELEUZE, Un nouvel archiviste, Bruno-Roy, 1972-D.24 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, pp. 189-193.
10
el diálogo, o mejor la interacción, debería instaurarse a partir de dos tipos
diferentes del lenguaje, cada uno de ellos con su especificidad propia, sin que
llegue a convertirse en un simple juego de espejos.
Si ninguna práctica científica funciona por fuera del conjunto de las prácticas
sociales, no podrá hablarse de “corte” epistemológico entre el conocimiento
y la práctica espontánea de la vida cotidiana por una parte, y el conocimiento y la
práctica reflexionada de la ciencia, por otra. Se hablará más bien, de una “ruptura”
epistemológica, ruptura a ser recomenzada permanentemente, continuada,
reformulada. “ La fase científica de la investigación se inicia cuando, disociando lo
verificable de lo que no es sino reflexivo o intuitivo, el investigador elabora
métodos especiales, adaptados a su problema, de tal manera que sean
simultáneamente métodos de aproximación y de verificación”25
4. El campo epistemológico . Es el campo del conocimiento científico que ha
alcanzado un grado de objetividad reconocido : situación de las teorías, de la
reflexión epistemológica, de la metodología, de las técnicas de investigación. La
región epistémica más próxima de una investigación específica es, evidentemente,
la de la disciplina del investigador, a partir de la cual él efectúa sus el elecciones
teóricas, epistemológicas, técnicas, etc, en el seno mismo de lo que la tradición de
esta disciplina le ofrece. El campo epistémico contiene, por otra parte, elementos
de otras disciplinas que son generalizables y por lo tanto importables -bajo ciertas
condiciones de vigilancia-, para los propósitos de investigaciones particulares.
Estas deberán someterse y dejarse guiar, en gran medida, por la productividad del
campo epistémico mismo : “...No hay una buena razón para creer que no existe un
proceso inmanente de desarrollo de la ciencia misma.26 En este sentido, el sujeto
de la ciencia no es el investigador, ni un el cuerpo de investigadores, sino las
teorías y los método ceintíficos en su desarrollo con todas sus crisis y conflictos.27
D. Un espacio metodológico cuadripolar
El campo autónomo de la práctica científica-autonomía cuya precariedad es
aparente-, puede ser concebido desde el punto de vista metodológico como la
articulación de diferentes instancias, de diferentes polos que determinan un
25 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, p. 42.26 T. PARSONS, The Structure of Social Action, New York, The Free Press, 1968, p. 27.27 T. S. KUHN, op. cit., 1972; R. BOUDON, La crise de la sociologie, Genève, Droz, 1971-B.
11
espacio donde la investigación se presenta como sumergida en un campo de
fuerzas, sometida a ciertos flujos, a ciertas exigencias internas.
Pueden distinguirse cuatro polos metodológicos, en el campo de la práctica
científica : epistemológico, teórico, morfológico, técnico. Estos polos no
representan momentos separados de la investigación sino aspectos particulares
de una misma realidad de producción de discurso y de prácticas científicas. Toda
investigación compromete implícita o explícitamente estas diversas instancias
cada una de las cuales está condicionada por la presencia de las otras. Estos
cuatro polos definen un campo metodológico que asegura la cientificidad de las
prácticas de investigación.
El polo epistemológico : Ejerce una función de vigilancia crítica. A todo lo largo
de la investigación es garante de la objetivación-es decir de la producción- del
objeto científico, de la explicitación de las problemáticas de la investigación. Se
encarga de renovar continuamente la ruptura de los objetos científicos con los del
sentido común. Decide, en última instancia, sobre las reglas de producción y de
explicación de los hechos, de la comprehensión y de la validez de las teorías,
explícita las reglas de transformación del objeto científico y critica ;los
fundamentos de ésta transformación.
El polo epistemológico tiene en su órbita una gama de “procesos discursivos”,
de ‘métodos” muy generales que impregnan de su lógica los caminos del
investigador, y son especialmente : la dialéctica, la fenomenología, la lógica
hipotético-deductiva, la cuantificación. Estos procesos no se excluyen mutuamente
: algunos de ellos puede ser omnipresentes y otros, pueden no aparecer en
investigaciones particulares.
El polo teórico : Guía la elaboración de las hipótesis y la construcción de los
conceptos. Es el lugar de la formulación sistemática de los objetos científicos,
propone reglas de interpretación de los hechos, de especificación y de definición
de las soluciones dadas provisionalmente a las problemáticas. Siendo lugar de
elaboración de los lenguajes científicos, determina el movimiento de la
conceptualización.
El polo teórico trabaja con “marcos de referencia” que le proveen inspiraciones
y problemáticas provenientes de los aportes teorético-prácticos de las disciplinas y
de los “hábitos” adquiridos. Estos cuadros de referencia juegan un papel
paradigmático implícito y son, principalmente, los marco de referencia
“positivistas”, “comprehensivo“, “funcionalista” y “estructuralista”.
El polo morfológico : Es la instancia que enuncia las reglas de estructuración,
12
de formación del objeto científico. Impone una cierta figura del objeto y un cierto
orden entre sus elementos. Permite establecer un espacio de causación en red,
donde se construyen los objetos científicos, bien sea a la manera de modelos, o
como simulacros de problemáticas reales. El polo morfológico suscita diversas
modalidades de marcos de análisis, diversos métodos de disposición de los
elementos constitutivos de los objetos científicos : la tipología, el tipo ideal, el
sistema, los modelos estructurales. Estas diversas formas de configuración
comprometen a la investigación, en la mayor parte de los casos, en escongencias
mutuamente exclusivas : la causalidad está pensada de manera particular en cada
uno de estos marcos de análisis.
El polo técnico : Controla la recolección de los datos y se esfuerza por
constatarlos para poder confrontarlos con la teoría que los ha suscitado. Exige
precisión en la constatación pero no garantiza, por sí sólo, la exactitud.
El polo técnico tiene en su órbita modos de investigación particulares, estudios
de caso, estudios comparativos, experimentaciones, simulación. Estos modos de
investigadores optan por un tipo particular de encuentro con los hechos empíricos.
La interacción dialéctica de estos diferentes polos constituye el conjunto de la
práctica metodológica. Esta concepción introduce un modelo “topológico” y “no
cronológico” de la investigación. Infinitamente variada en el tiempo y en el espacio,
la investigación se mueve en este campo metodológico de manera más o menos
explícita en cada sinuosidad de su práctica.
CAMPO EPISTEMOLOGICO DE LA INVESTIGACION
METODOS -Dialéctica MARCOS -Tipologías
-Fenomenología DE -Tipo ideal
-Cuantificación ANALISIS -Sistemas
-Lógico hipotético -Modelos estructurales
deductiva -Modelos Procesuales
POLO EPISTEMOLOGICO POLO MORFOLOGICO
POLO TEORICO POLO TECNICO
13
MARCOS -Positivismo MODOS DE -Estudios de caso
DE -Comprensión INVESTIGAC. -Estudios comparativos
Referencia -Funcionalismo -Experimentaciones
-Estructuralismo -Simulaciones
CAPITULO PRIMERO
EL POLO EPISTEMOLOGICO
1. INVESTIGACION EPISTEMOL0GICA
Para descubrir el papel y la contribución de una instancia epistemológica en el
curso de la investigación, conviene distinguir dos funciones de la epistemología en
sí misma. Se la puede calificar de metaciencia en la medida en que ella está más
arriba y sobre las ciencias: reflexión sobre los principios, los fundamentos y la
validez de las ciencias. Pero al lado de ésta característica metacientífica, la
epistemología revela también un carácter intracientífico y, como tal, representa un
polo intrínseco en la investigación científica.
La concepción y el desarrollo de las ciencias exige una epistemología que no
sea fixista, que no pretenda regir las ciencias desde afuera, sino más bien una
epistemología unida a la producción misma de la ciencia, hecha por los mismos
investigadores en sus propias disciplinas, que permanentemente se aproxime a
las epistemologías de las otras disciplinas científicas. Esta concepción de la
epistemología como reflexión-vigilancia interna de la ciencia sobre sus
procedimientos y sobre sus resultados es la única que respetará el carácter
constantemente abierto de las ciencias, sin que les importe dogmáticamente
exigencias ilusorias de cercanía.
2. Función de la Epistemología
La epistemología establece las condiciones de objetividad de los conocimientos
científicos, de los modos de observación y de experimentación, ella examina
igualmente las relaciones que las ciencias establecen entre las teorías y los
hechos.
La epistemología de cualquier modo como se la defina, supone de alguna
14
manera que una ciencia de la ciencia es posible1. Pero ello no significa que esta
“metaciencia” tienda hacia una comprensión absoluta de las ciencias ; es
necesario afirmar que un cierto saber ligado a la producción científica se hace
posible a partir de la reflexión epistemológica. “...La epistemología debe someter la
noción de ciencia a un estudio crítico “2. Aquello viene a ser claro, si se considera
que los grandes problemas epistemológicos nacen a partir de las crisis dentro de
las ciencias, remitiéndose a las causas no de sus resultados, sino de sus
fundamentos. Con el fin de legitimar los nuevos puntos de vista y de reestructurar
los marcos teóricos, la reflexión epistemológica impone la reflexión de los mismos
investigadores sobre los instrumentos de conocimiento de que disponen sus
ciencias, reflexión con miras a superar las crisis revisando la pertinencia de los
conceptos, de las teorías y de los métodos frente a las problemáticas que
constituyen el objeto de sus investigaciones.
La epistemología provee, en cuestión, los instrumentos de revisión de los
principios de las ciencias, esto es, lo que es esencial a aquellas; “se podría
sostener que ellas llegan a los mismos principios de los cuales han partido. Lo
mínimo de su rigor absoluto es la facultad de “autocorrección a la que deben su
progreso “3. Brunschvieg indica que los progresos de las ciencias no son
solamente “progresivos” sino también “reflexivos”; la lineridad de su desarrollo es
entonces compromiso para la redefinición de sus mismos principios motores. Así
la teoría del conocimiento que define clásicamente la epistemología se enriquece
de múltiples reflexiones epistemológicas internas, elaboradas en y para la práctica
de las ciencias, y sus campos, de acuerdo con las necesidades de cada ciencia en
particular. La epistemología en el sentido clásico fué orientada por intenciones
filosóficas extrañas a las ciencias; la epistemología que se desarrolla actualmente
es interna a las prácticas científicas en sí-misma : “...ella se convierte entonces en
un instrumento del progreso científico en tanto que organización interior de sus
fundamentos...”4. He aquí por qué la epistemología tiene sobre todo una función
de vigilancia crítica en la investigación. Bachelard había visto que a la razón
arquitectónica de la ciencia se le sumaba una razón “polémica”, también
indispensable como la primera para el progreso científico. “La epistemología se
distingue de una metodología abstracta, en que aquella se esfuerza en tomar la
1 D. LECOURT, Pour une critique de l’épistémologie, Paris, Maspero, 1972, pp 5-152 J. PIAGET, Introduction et variétés de l’épistémologie, in J. Piaget (sous la direction de), Logique et connaissance scientifique, Paris, Gallimard, 1967, p. 42.3 L. VAX, L’empirisme logique, Paris, Presses Universitaires de France, 1970, p. 44.4 J. PIAGET, in J. PIAGET, op, cit. 1967, p. 51
15
lógica del error para construir la lógica del descubrimiento de la verdad como
polémica contra el error y como esfuerzo para someter las verdades próximas a la
ciencia y a los métodos que utiliza para una rectificación metódica y permanente 5.
El proceso del conocimiento científico es un proceso de constante aproximación,
“pasa de una validez menor a una validez mayor “6.
Se introduce entonces el problema del contenido de la reflexión epistemológica.
Esta reflexión se encontrará enriquecida por la colaboración de diversas
disciplinas entre sí, por la puesta en común interdisciplinaria de reflexiones
epistemológicas internas específicas a cada ciencia. Así, se constituye una
epistemología general que es la articulación de epistemologías internas que se
fundamentan mutuamente. La epistemología general no se pregunta por lo que es
el conocimiento científico considerado como un todo sino más bien sobre “ cómo
se acrecientan los conocimientos considerados en su multiplicidad, y sobre todo
en la diversidad de sus desarrollos respectivos “7. Los métodos de la
epistemología son entonces necesariamente múltiples : para juzgar los hechos, el
método histórico-crítico, y para juzgar las reglas, los procedimientos de la lógica. A
esto se puede añadir el método psicológico de Piaget que estudia los modos de
desarrollo del conocimiento, las operaciones concretas del pensamiento cognitivo (
epistemología génetica ).
La epistemología, en tanto que polo esencial de la investigación se sitúa
entonces de plano, si se la considera así, dentro de una lógica del descubrimiento
más bien que dentro de una lógica de la prueba,8 lo que le interesa es tanto el
modo de producción de los conocimientos como los procesos de validación. Así, la
metodología ( y los investigadores que fundan su razón de esperar en el rigor, en
la exactitud y en la pertinencia de sus investigaciones ) debe tomar la ciencia
como un proceso (no secuencial sino viviente) y nunca como producto.
Los investigadores están en la base del proceso científico, armados de la
metodología, los filósofos de las ciencias están al término de las investigaciones
para analizar los productos, los resultados. Los investigadores encontrarán en la
reflexión epistemológica no solamente los fundamentos para asegurarse del rigor,
de la exactitud, de la precisión de sus pasos, sino igualmente, preciosas
indicaciones que guiarán la imaginación indispensable que deberán poner a
5 P, BOURDIEU, et al. , op. cit. , 1968, p. 96 J. PIAGET, Psychologie et épistémologie. Pour une théorie de la connaissance, Paris, Denoël- Gonthier, 1970, p. 15.7 Ibid . , p. 121.8 R.S RUDNER, Philosophy of social Science, Englewood Cliffs, Prentice-Hall1966, pp. 5-7.
16
prueba para evitar los obstáculos epistemológicos y para tener éxito en hacer
progresar el conocimiento de los objetos que investigan. Se apoyarán entonces en
consideraciones formales, relevantes de la lógica, y sobre consideraciones
concretas, contenidas en la historia de sus prácticas y de su dominio científico
(epistemología interna), en la historia del conjunto de disciplinas científicas
(epistemología general) 9.
La amplitud de los puntos de vista y de los métodos de la epistemología indican
que ella no puede construir un dominio rigurosamente definido y sistematizado; es
justamente su carácter no sistemático lo que produce su fecundidad. Sería
igualmente erróneo considerarla en sí misma como una ciencia empírica. En
efecto, sus enunciados son en buena parte inverificables empíricamente, y su
razón de ser no es por demás nulamente, el de confrontarse con los hechos
(excepción hecha por la epistemología psicogenética). Esta concepción empirista
de la epistemología no podría más que arruinar lo que hace su fecundidad misma,
de no ser solamente rigor sino también crítica y polémica. Así, la epistemología no
se puede separar completamente de la filosofía, contrariamente a las voces del
positivismo; en efecto, aquél rehusa la idea de que habría, en la filosofía una
verdadera teoría del conocimiento, o una metodología. “ El quiere ver en los
problemas filosóficos que surgen alguna clase de pseudo-problemas o de
acertijos. “10
De hecho, todo investigador se hace filósofo y está obligado por los problemas
que reencuentra en su camino : naturaleza de la explicación, naturaleza de los
hechos, validez de los procedimientos, etc. “La epistemología parece en efecto
escapar más y más a los filósofos para pasar a las manos de los sabios
mismos...En la medida en que la reflexión epistemológica sea directamente
suscitada por los obstáculos del trabajo científico, ella permanece aún muy cerca
de este trabajo en lo que el tiene de específico. “11
De donde la naturaleza particular del polo epistemológico dentro de la
búsqueda metodológica, polo considerado como motor interno de cualquier clase
obligada de investigación del investigador que, conscientemente o no, se mete en
cuestiones epistemológicas, porque ellas pueden ayudarle a resolver sus
problemas prácticos y a elaborar soluciones teóricas válidas. Esta epistemología
9 Sin subestimar por demás la importancia de la epistemología “externa” tradicional -filosófica- que puede inspirar las epistemologías internas particulares y generales.10 K.R. POPPER, op. cit. , 1972, p. 51.11 R. BLANCHE, L'épistémologie, Paris, Presses Universitaires de France, 1972, pp.17-23
17
interna “ nace de cualquier manera bajo los pasos mismos del sabio...ella es
exigida por los problemas que se manifiestan al interior mismo de la ciencia “12. El
investigador como practicante se refiere forzosamente a una epistemología interna
específica; como metodólogo se coloca en otras cuestiones de epistemología
general que no pueden más que ayudar a la buena marcha de la investigación. La
epistemología interna y/o general no debe limitarse al análisis del lenguaje
científico porque ella se referiría entonces a la ciencia como producto; los
procesos genéticos del descubrimiento y la producción científica escaparían a ella.
Ella no debe tampoco ser considerada como una ciencia particular del hombre, lo
que reduciría a las tareas del socioanálisis de las instituciones científicas, del
psicoanálisis de los investigadores, etc. Su fin es justamente el de proporcionar
reglas a las ciencias sociales particulares. Ella encontrará, sinembargo, en los
resultados de aquellas, instrumentos útiles para las tareas que le son propias :
tareas tanto de naturaleza polémica como de naturaleza arquitectónica, tanto de
crítica como de consolidación de los conocimientos científicos.
3. PRINCIPIOS DE EPISTEMOLOGIA GENERAL
Estos principios animan a la investigación e inspiran los cambios metodológicos,
en su mayor parte, simplemente están dados por su carácter heurístico; el fin no
es entonces el de refutarlos o el de verificarlos, son simples instrumentos para las
investigaciones y los métodos mas fructíferos.
“ La investigación científica presupone y controla ciertas hipótesis filosóficas
importantes. Entre ellas emergen: la realidad del mundo exterior, la estructura
multiestratificada de la realidad, el determinismo en sentido amplio, el carácter
cognoscible del mundo, y la autonomía de la lógica y de las matemáticas .“13
El carácter “filosófico” de éstos principios no se debe negar, pero tampoco debe
autorizar una presencia cualquiera de la filosofía en la ciencia.
No es cuestión de basar la ciencia en la filosofía ni a la inversa; es necesario
sinembargo, dar cuenta de sus relaciones mutuas a la vez fundamentales y
críticas.
Principio de causalidad (o de neo-determinismo): Caracteriza el aspecto
12 Ibid, p. 33.13 M. BUNGE, Scientific Research, Berlin, Springer, 1967, p. 291.
18
nomotético de las ciencias que impone la existencia de conexiones entre los
fenómenos : uniones lógicas de proximidad, de conjunción, de sucesión, de
correlación, de covariación, de causación.
El principio de determinismo no se debe tomar en su sentido absoluto y
metafísico de explicación total, adecuado y definitivo: sólo debería aplicarse en
la hipótesis de una puesta en orden -la más frecuentemente parcial- de un
conjunto de condiciones determinantes...”La explicación del fenómeno consiste
en la construcción de un esquema relacionado más o menos estrechamente con
esquemas más amplios, dentro de un análisis si posible riguroso de un orden de
determinación de las variables“.14
FALTA UN PARRAFO DEL TEXTO ORIGINAL
“El determinismo así entendido supone solamente : 1) que toda cosa y todo
evento emerge de condiciones previas (hipótesis genéticas o no mágicas); 2) que
toda propiedad está legalmente unida a otras propiedades, sea de manera simple,
sea de manera estocástica (hipótesis de legalidad ó de unión regular...).” 15
Una noción emparentada con este principio es aquélla de la ley; la ley manifiesta
una relación constante entre los fenómenos; de acuerdo con los votos de Comte
para que aquella destronara al principio de causa, la ley es simple constatación de
correlación. Aunque, además de leyes verificadoras, las ciencias se orientan
hacia explicaciones de tipo “causal” mediante el sesgo de teorías explicativas, de
búsqueda de constantes, de estructuras, colocadas como causa de series
particulares de fenómenos.
"...Si la explicación reposa sobre un conjunto de leyes, añade estos dos
caracteres fundamentales, y por demás solidarios, el de sustentar una
“necesidad deductiva” (aunque no se reduzca a una simple extensión ) y el de
hacer un llamado a la teoría antes de ser aceptada en “su totalidad”, es decir, con
sus carácter de “estructuras.” 16
Principio de Finalidad : Es la contraparte del principio de causalidad. “La finalidad
14 G.-G GRANGER, in L. APOSTEL et al. , op. cit. , 1973, p. 16315 M. BUNGE, et al. , Les théories de la causalité, Paris, Presses Universitaires de France, 1971, p.128.16 J. PIAGET, In L. APOSTEL et al. , op.cit. , 1973, p. 229.
19
sería la causa, ella misma, en tanto que produce los medios de su realización.”17
El funcionalismo, como cuadro de referencia y método general de explicación
de los fenómenos, adopta este principio según el cual los individuos, los grupos,
vistas las estructuras, tiene una meta, una finalidad inmanente.
La cibernética ha reafirmado este concepto que habla particularmente de
retroacción (feedback) o regreso del efecto sobre la causa, de autoregulación, de
teleonomía como finalidad inscrita dentro del mecanismo adaptativo.
Principio de conservación: Invita a investigar la huella de los fenómenos que
sólo se manifiestan más a nivel de lo dado, suponiendo su transformación, su
paso a otro nivel donde la investigación deberá seguirlos para reencontrarlos.
Principio de Omisión (négligeabilité): Permite distinguir lo esencial de los
accesorio y autoriza una cierta forma de reducción operatoria. Un paradigma para
ello es que “todas las cosas permanencen, por demás, iguales”. Este principio
es indispensable para seleccionar las teorías, las hipótesis, el material de las
informaciones empíricas.
Principio de Concentración: Postula que ciertos niveles de análisis, ciertos
dominios empíricos ocultan más informaciones para la investigación que otras. Es
el principio basado en estudios de caso que concentran la investigación en un
pequeño número de casos, de variables o de elementos, porque éstos casos son
reputados de ser muy significativos, hasta cosntituír patrones privilegiados.
Principio de Economía: Exige un rigor operatorio sistemático, e impide
multiplicar inútilmente las hipótesis y las medidas. Previene contra el error de
precisión superflua y procura reducir la complejidad del sistema explicativo, a
encontrar las leyes, las teorías, las estructuras más simples. Introduce criterios de
alguna manera “estéticos” para guiar la escogencia de las teorías y las leyes en
competencia. Pero la simplicidad exigida por el principio de economía no es,
vanamente, en sí, una garantía de cientificidad mayor.18
Principio de identificación: Trata de sumergir en las teorías, las leyes, las
estructura comunes, los fenómenos aparentemente contrarios. Es el motor de
análisis comparativo que debe pensar las diferencias en un sistema coherente de
articulación de las singularidades. Este principio rompe con las apariencias
inmediatas, investiga lo diverso en lo semejante, lo idéntico en lo diferente. Es un
principio dialéctico.
Principio de la mayor información: Está basada en las ciencias empíricas
17 A. VIRIEUX-REYMOND, op.cit. , 1972, p. 77.18 M. BUNGE, The myth of simplicity, Englewood Cliffs, Prentice Hall, 1963.
20
modernas, concebidas como estructuras hipótetico-deductivas en las cuales las
teorías son consideradas como verdaderas, mientras algun hecho no venga a
falsearlas. Toda teoría permanece falseable, todo concepto, todo objeto científico
puede ser transformado, abandonado, si no ofrece una solución satisfactoria a las
problemáticas que lo han suscitado.
Este principio está equilibrado por el principio de correspondencia ( N. Bohr )
según el cual toda nueva teoría debe contener la vieja bajo la forma de
aproximación. Este principio tiene la ventaja de forzar al investigador a una real
teorización sin caer en las facilidades “pragmáticas” imperdonables del
empirismo metodológico, que abandona una hipótesis por alguna otra, por
razones de pura comodidad, de pura contingencia, sin tentativa de integración.
Está por demás en conexión directa con el problema de explicación causal : sin
explicar científicamente los fenómenos “ es establecer un esquema conceptual o
modelo abstracto, y mostrar que este esquema se integra a un esquema mas
comprensivo ...deducimos.... como explicación al poner en relación este esquema
con otro esquema mas amplio.19
El principio de correspondencia exige, de toda investigación científica una
congruencia de métodos y resultados con los principios y las leyes a la luz
de otras ramas de la ciencia.
4. PRINCIPIOS DE EPISTEMOLOGIA INTERNA
El carácter científico de una investigación es el resultado de un proceso continuo
ruptura con las prenociones del sentido común, con los conocimientos vagos,
míticos o ideológicos. La investigación debe llegar a una autonomía por la
especificidad de sus métodos y por sobre todo en la delimitación estricta de sus
objetos, delimitación que no se hace a priori una vez por todas, sino que
manifiesta el movimiento mismo del conocimiento científico en su transformación. “
No son las relaciones reales entre las “cosas” lo que constituye el principio de la
delimitación de los diferentes dominios científicos sino las relaciones conceptuales
entre los problemas.”20
A. Objeto y problemática científica
19 G.-G GRANGER, in L. APOSTEL et al. , op.cit. , 1973, p. 14920 M. WEBER, Essais sur la théorie de la sciencie, Paris, Plon, 1965, p. 146.
21
El lugar de la investigación es entonces el lugar práctico de la elaboración y de la
transformación del objeto mismo de conocimiento, de su construcción sistemática
y de verificación de hechos que lo manifiestan. El objeto de la práctica científica se
produce entonces como un efecto de las reglas o del conjunto de relaciones que
las investigaciones manipulan; es necesario “definir los objetos sin referencia al
fondo de las cosas, pero en relación con el conjunto de reglas que permiten
formarlos como objetos de un discurso constituyéndose así sus condiciones de
aparición histórica”21. La forma del objeto científico no concierne directamente con
el contenido sensible sino con el lenguaje, “la ciencia aprehende los objetos en
tanto que construyen los sistemas de formas en un lenguaje y no directamente
sobre los datos sensibles.”22
Así el lenguaje científico es la garantía del rigor, y dentro de una cierta medida
de validez, de los objetos de investigación, objetos que se modifican a medida que
evolucionan los métodos y las problemáticas que los constituyen. “Los métodos se
modifican porque se les aplica a objetos nuevos”23 y recíprocamente, “cada
ciencia, a medida que progresa, tiende a modificar el objeto mismo de su
investigación para adaptarla a sus propios medios de concepción y expresión”. En
lugar que ella se defina por un objeto previamente dado, llega un momento en que
es lo contrario es el objeto el que se deduce como “aquello que constituye el
objeto” de la ciencia.”24
El objeto científico no trasciende el proceso de investigación que lo colocaría
exterior a la investigación, por el contrario él es éste proceso de investigación
concretizado. Este objeto no es de ningún modo impuesto desde el exterior “a una
actividad concretamente ejercida, su trascendencia no es más que una ilusión de
la reflexión”. Esta estructura ...objetiva, lo mismo que la lengua, está sujeta a
transformación”25. Así todo objeto científico guarda él, necesariamente, el estatuto
de una hipótesis científica, se le tiene provisionalmente como un constructo válido,
aunque los nuevos hechos pueden invalidarlo. El objeto científico no es una
esencia externa, es falseable, transitorio, no es más que un instante dentro de un
proceso constante de transformación de rectificación. “ El objeto científico no es
jamás un “ser” sino una interacción : relación, correlación vista. Es “abstracto-
21 M. FOUCAULT, op.cit. , 1969-B, p. 6522 G.-G GRANGER. Pensée formelle et sciencie de l'homme, Paris, Aubier, 1960, p.12/13.23 J.-P. SARTRE, Questions de méthode, Paris, Gallimard, 1972, p. 13.24 R. BLANCHE, op.cit. , 1972, p. 121.25 G.-G GRANGER, Essai d'une philosophie du style, Paris, Armand Colin, 1968, pp. 130, 131.
22
concreto”, manifiesta el poder inagotable del concepto, capaz él mismo de
inscribirse en una realidad, fuente de constantes verificaciones y construcciones”26.
El objeto científico es a su vez más abstracto que el objeto inmediato,
pintoresco, pertenece a la experiencia sensible, y más concreto que él por su
mayor complejidad, más congruente con una problemática, aunque de una
congruencia momentánea: no es más que el medio de investigación de lo real, que
adquiere en el curso del proceso de objetivación una clase de sobre-realidad que
garantiza su valor y eficacia propias. De la misma manera que él no trata de
sacrificar a la ilusión de una conocimiento científico totalmente separado de otros
saberes, igualmente la separación entre los objetos de las ciencias y los objetos
de la experiencia común no es jamás tan clara que exija una teoría ideal.
Es decir, el objeto científico no se puede reducir al lenguaje científico, como lo
desean ciertas tendencias del positivismo lógico. Otra cosa es que un lenguaje
fundamenta el simbolismo científico. El objeto científico recibe su fundamentación
y su garantía de validez de una operación “referencial” constantemente confirmada
por el lenguaje con el objeto real al cual se orienta tal operación. La eficacia de la
ciencia, su posición en el mundo, sus explicaciones de los acontecimientos,
dependen de la adecuación de ésta operación. Lo que instaura constantemente
aquello, es la problemática, es decir, lo que permite someter a una interrogación
sistemática los aspectos de la realidad puestos en relación por el sistema de
preguntas teóricas y prácticas, que le son hechas. La problemática comanda la
visión global del objeto de investigación y el dominio de los objetos (disciplina
científica) donde ella se desenvuelve, ella es la base más o menos explicitada de
las preguntas que son hechas a la realidad. Así el objeto científico sólo es en
definitiva el inicio de un conjunto de problemas teórico-prácticos. La
transformación de los objetos de las ciencias, manifiesta la persistencia de
problemas en el diseño de las soluciones que han sido dadas.
Según Lautman, todo problema tiene tres aspectos : difiere por naturaleza de
las soluciones, es trascendente frente a aquellas pues tiene sus propias
determinaciones, es inmanente a diversas soluciones teóricas que acaban por
descubrirlo.27
Una problemática, conjunto de problemas y de sus condiciones de aparición, es
tanto mejor resuelta, formulada y explicitada en cuanto más se determine.
26 F. DAGOGNET, Bachelard, Paris, Presses Universitaires de France, 1972, p. 16.27 G. DELEUZE, Différence et répétition, Paris, Presses Universitaires de France, 1972-A, p. 232.
23
b. objeto real, objeto percibido, objeto construido : la ruptura epistemológica
Parece de capital importancia insistir en la especificidad del objeto científico
construido. con relación a los otros objetos del saber; el objeto de la ciencia es un
sistema de relaciones construídas expresa y explícitamente, se opone al objeto
preconstruido por la percepción, con el cual es necesario romper continuamente.
“Todo objeto propiamente científico está científica y metódicamente construído,
para saber construír el objeto y para saber del objeto que se construye .“ 28
La ruptura epistemológica debe conservar la toma de distancia siempre
recomenzada del objeto científico frente (vis-a-vis) a los objetos del sentido
común, prenociones, evidencias de “buen sentido”, mitos, ideologías.” La
espontaneidad de la objetividad en la percepción se opone a la búsqueda
laboriosa de la objetividad... Aclarar de una manera específica la relación de la
cualidad de un objeto psíquico y de su estructuración como objeto de ciencia, es
sin duda la tarea fundamental de una epistemología de las ciencias humanas.”29
El objeto percibido es aquél que se da a los sentidos, bajo la forma de
imágenes. Piaget ha denunciado el origen del mito sensorial de nuestros
conocimientos, mito que postula que el sujeto cognoscente es de alguna forma
receptor pasivo de informaciones venidas del exterior; el objeto percibido es
entonces él mismo, en cierta medida, construído por esquemas asimilados y
acomodados del espíritu30. Este objeto percibido aparece espontáneamente como
“real”, garante de la transparencia de las cosas en un lenguaje, arraigado a la
significación, significante y significado, en un referente. Sinembargo, el objeto
percibido no es toda la realidad, está fuera de la experiencia; es lo menos que la
ciencia admite en su proyecto mismo de abrir nuevos campos a la observación.
Esta realidad “latente” no se identifica de ningun modo sin duda con los
testimonios de los sentidos, con lo que aparece. El objeto real es la causa
presumida del testimonio de nuestros sentidos. Los objetos percibidos son los
efectos supuestos de los objeto reales latentes.31
28 P. BOURDIEU, et.al. , op.cit. , 1968, p. 77.29 G.-G GRANGER, op.cit. , 1960, pp. 12-109.30 J. PIAGET, op.cit. , 1970, pp. 80-109.31 B. RUSSEL, Problèmes de Philosophie, Paris, Payot, 1972, pp. 7-18
24
El objeto del conocimiento construído es una traducción específica, conceptual,
de lo real; es un objeto que responde a leyes de composición autónoma,
construída por métodos explícitos. Es un sistema simbólico que difiere en
naturaleza del objeto real y en complejidad, del objeto percibido. Esta complejidad
reside no en lo “concreto”, confuso, rico o vago, propio del objeto percibido, sino
en los procesos metódicos de construcción que lo hacen una forma simple, una
ley, una estructura, un concepto, una constante permitiendo definir las
transformaciones complejas de los fenómenos.
El objeto científico es producto de un largo proceso de objetivación,
conceptualización, formalización, estructutación. El objeto científico ya sea una
representación de lo real percibido, ó estadio de una simple descripción preliminar,
es la copia de un modelo real, aunque sea un simulacro en el que el investigador
espera producir efectos específicos.
Hay entonces un proceso de objetivación, de producción de hechos y de
objetos científicos, lo que es el camino desde la formación, la estructuración y la
ruptura de los hechos, hasta los procedimientos de recolección de la información.
La objetivación es el conjunto de métodos y técnicas que elaboran el objeto de
conocimiento sobre el cual va a descansar la investigación; este objeto es
trascendente a toda consciencia, y solo se da “por esbozos, siempre incompletos,
aunque simpre adheridas a una presencia”32. La ciencia entra al lenguaje y a las
cosas, insinúa, extrae proposiciones sobre las cosas, sobre los estados de las
cosas. Expresa proposiciones, habla de acontecimientos abstractos, de hechos
que sobrepasan las cosas concretas. La ciencia no puede alcanzar las cosas,
aunque construye, manipula, realiza y produce hechos, “ los acontecimientos
producidos no existen fuera de las proposiciones que las expresan “33. Esto es
propio en toda operación de sentido, a todo lenguaje.
El lenguaje científico se despliega a diversos niveles de objetivación, las
ciencias construyen sus objetos en diferentes planos de investigación y de
explicación.
“Las diferentes escalas de observación crean fenómenos diversos y ... hay nuevas
estructuras descubiertas en cada nuevo nivel de análisis, hay un nuevo curso
especializado y diferenciado...” 34.
32 G. -G GRANGER, op.cit. , 1960, p. 107.33 G. DELEUZZE, logique du sens, Paris, les Editions de Minuit, 1971, p. 36.34 A. VIRIEUX-REYMOND, op.cit. , 1972, pp. 113, 135.
25
Estos diferentes modos de investigación intervienen en el descubrimiento de las
leyes, de las estructuras, de las constantes, de los índices particulares. Estos
descubrimientos están a menudo limitados en cierta forma a su propio nivel de
explicación. Es la noción de zona de validez de los principios.
La escogencia del nivel empírico de investigación debe ante todo ser
explicitada por los investigadores. El individuo, el grupo, la sociedad, la
organización total, son otros de los tantos niveles de pertinencia que deben
aislarse analíticamente para poder observar los “momentos” (los pasos) que hacen
posible la articulación entre diferentes niveles. Se trata de no confiar en las
analogías tramposas entre diferentes niveles de análisis, donde cada uno necesita
de un proceso de objetivación.
Además de una exigencia de ruptura entre realidades vividas y realidades
objetivadas en los discursos científicos, es necesario insistir sobre la exigencia de
la explicación causal y de comprensión objetiva, a lo cual, las ciencias sociales
deben responder.
Los problemas de la causalidad científica serán evocados más ampliamente en
el polo morfológico, aunque es necesario señalar desde este momento las
exigencias epistemológicas del establecimiento de dicha causalidad. “Una
explicación debe, creemos nosotros poder ser invalidada, poder servir a una
predicción, poder concordar con las otras explicaciones de fenómenos limítrofes ó
englobar las primeras”35. La explicación es entonces concebida como fundada en
un espacio de causación, en una configuración en red que permite despejar el
conjunto de conexiones y de determinaciones. La explicación estará entonces
constituída por las uniones intrínsecas de estas configuraciones y también por las
relaciones extrínsecas de ajuste total de configuraciones particulares y de otras
configuraciones, dentro de una extensión jerarquizada del espacio de causación.
La noción de explicación desemboca entonces en los otros dos polos, teóricos y
técnico, de la práctica científica.
C. Génesis de la teorización
Las fuentes de formulaciones teóricas se busca a nivel del polo epistemológico. Se
proponen diferentes orígenes para la conceptualización. Entre ellos, se
encontrarán, involucrados de filigrana, los grandes procesos discursivos:
fenomenología, dialéctica, lógica hipotético-deductiva y cuantificación.
35 G.-G GRANGER. in L. APOSTEL et. al. , op. cit. , 1973, p. 151.
26
a) La inducción : La inducción en tanto que panacea metodológica no es más que
un mito del empirismo puro. Ella no sabría en efecto apoyarse en procedimientos
operatorios unívocos y decisorios. Algunas concepciones ingenuas en cuanto al
papel y al valor de la inducción deben entonces abandonarse al “folklore” de la
metodología.
"La noción vulgar de que la inducción y la deducción son “opuestas” (...) que la
deducción “va” de lo general a lo particular, y la inducción de lo particular a lo
general, no es solamente errónea sino seriamente engañosa. No solamente la
deducción no se reduce a la inferencia de lo general a lo particular, sino
también, la inducción -que comprende la selección de hipótesis- implica
frecuentemente, como una de sus etapas, el hacer una deducción." 36
La “inducción amplificante” que permitiría la inferencia del hecho a la ley, del caso
singular al universal, está siempre sometida al principio de la mayor información y
no autoriza sino la producción de generalizaciones empíricas o de conceptos
genéricos. Lo que no es más que una fórmula vaga que no ofrece alguna ayuda
concreta a la práctica metodológica. No hay corte entre inducción y deducción, tal
como aparecería en el proceso hipotético-deductivo.
“La epistemología contemporánea no conoce ni las ciencias inductivas ni las
ciencias deductivas (...) no es posible hablar apropiadamente de método inductivo.
Lo que es inducción, es decir, la invención de hipótesis en la ciencia
experimental, es el signo más nítido de la insuficiencia del método para
explicar el progreso del saber.” 37
Pero el rechazo de la lógica inductiva no autoriza de ningún modo el rechazo de la
reconstrucción racional de procesos de descubrimiento de hipótesis. Uno no
puede contentarse con admitir en la fuente de la producción teórica un
“elemento irracional”(Wittgenstein), una“inspiración creadora” (Popper), un “amor
intelectual a objetos de la experiencia” (Einstein)..Eso no puede satisfacer una
metodología consecuente que debe poder pensar el aspecto heurístico de la
investigación y proponer especialmente una lógica de los problemas, una
36 R.S RUDNER, op.cit. , 1966, p. 66.37 G. CANGUILHEM. Lecons sur la méthode, in P. BOURDIEU et al. , op. cit. , 1968. p. 313.
27
praxeológica bajo la forma de la estrategias para suscitar la investigación38.
b) El azar : La génesis de una nueva teoría, de un cuerpo de hipótesis, puede ser
provocada por el descubrimiento, por puro azar y por casualidad, de hechos
inesperados: es lo que R.K. Merton llama el serendípity 39. Estos hechos son a
veces aberrantes, sobre todo si son inesperados y por esto atraen la atención del
investigador que intentará entonces, “experiencias para ver”, investigaciones
exploratorias... Pero esta forma de génesis no puede lograr éxito sino mediante
una oposición crítica a las teorías constituídas :
“Lo inesperado sólo puede aparecer como tal con referencia a un sistema de
hipótesis y no resulta en hecho científico sino en la medida en que provoque una
restructuración del sistema de hipótesis.” 40
c) La crítica : La reflexión crítica y dialéctica sólo se desarrolla en oposición a
cuerpos teóricos establecidos, a experiencias ya conocidas. La crítica dialéctica es
aquí concebida como demolición de todos los conceptos establecidos,
adquiridos, cristalizados, “momificados”, y de cuadros teóricos de referencia. Es un
llamado a un “continuo volver atrás de los “sistemas” en favor de la profundización
siempre renovadora de los problemas”41. Pero la existencia misma de estos
problemáticos, fundamentos genéticos de la teorización, no se manifiestan sino
por soluciones teóricas particulares a estos problemas.
La crítica sólo es posible como oposición a objetos constituídos.
d) El análisis comparativo : Sustituto tradicional de la experimentación en las
ciencias sociales (Comte, Durkheim), el análisis comparativo toma muy a menudo
la forma cuantitativa de un test estadístico. Esto puede hacer aparecer
correlaciones inesperadas (cf. análisis factorial) y dar lugar de éste modo a
nuevas hipótesis, hasta nuevas teorías 42. , pero es necesario que una formulación
teórica interprete el sentido de las correlaciones relevantes. El examen estadístico
de las apariencias, de las evidencias admitidas por el sentido común, es a
38 M. BUNGE, op. cit. , 1967, t.I. , pp. 165-213.39 R.K. MERTON, Eléments de théorie et de méthode sociolgiques, Paris, Plon, 1968, pp. 47, 52. 40 P. BOURDIEU, et. al ., op. cit. , 1968, p. 155.41 G. GURTVICH, Dialectique et Sociologie, Paris, Flammarion. 1973, p. 236.42 Se llama “hipótesis crucial” aquélla que tiene por finalidad suscitar una experiencia en donde la razón de ser es falsación de la teoría entera.
28
menudo la fuente de revisiones teóricas, la ocasión de nuevas hipótesis. El
análisis comparativo puede igualmente conllevar en las homologías estructurales
un nivel formal de teorización (C. Lévi-Strauss).
La hipótesis estratégica ( H. Lefebvre) emerge a nivel de la experiencia, en la
práctica y en la realidad dinámica 43. Esta hipótesis surge gracias al carácter
aleatorio de procesos dinámicos sociales reales, este carácter aleatorio implica
una exploración de campos posibles, donde la imaginación del investigador es una
guía preciosa aunque poco controlable.
La hipótesis estratégica que hace un llamado a la imaginación y a la categoría
de lo aleatorio se aproxima a las ficciones idealizantes preconizadas por Husserl:44
fundadas sobre la categoría de lo posible, la “visión eidéctica” es un procedimiento
de análisis intelectual que procede por “libre variación” imaginaria de ciertos
hechos; lo que no puede ser variado sin que el objeto mismo desaparezca, es la
esencia, lo típico. Este camino metodológico procederá por variaciones efectivas
( y no arbitrarias) considerando casos múltiples que son realmente realizadas
para despejar los casos posibles. Esto es lo que Husserl llama interpolación, una
variante del análisis comparativo.
e) La analogía controlada : La analogía puede ser considerada como el principio
unificador de los objetos sometidos a la definición en los sistemas teóricos: así
como las grandes analogías de las teorías funcionalistas, estructuralistas,
genéticas, dialécticas, etc.
La analogía puede ser un instrumento provisional de determinación de
hipótesis, mientras que éste carácter provisional sea dudoso, pues la analogía
alimentaría mejor la teoría de hecho latente. (N. Campbell).
Si el lenguaje común recurre a la analogía espontánea, al paralogismo del
“todo está en todo” y a las facilidades del no importa qué, el lenguaje científico
debe esforzarse en reglamentar metódicamente y en explicitar totalmente los
esquemas analógicos que emplea en la construcción concreta de sus objetos, sus
paradigmas operatorios (Kuhn). La analogía espontánea solo se adorna de un
“halo semántica” (Bourdieu) que extrae su legitimidad de las funciones sociales e
ideológicas que ella satisface. La analogía controlada debe ser confrontada con
las consecuencias mismas de las deducciones que ella autoriza en el plan teórico.
43 R. PINTO y M. GRAWITZ, Méthodes des sciences sociales, Paris, Dalloz, 1969, p. 311.44 M. MERLAU-PONTY, Les Sciences de l'homme et la phénoménologie, in P. BOURDIE et al. , op.cit. , 1968, pp. 273- 275.
29
“ La espontaneidad de la objetividad en la percepción se opone a la investigación
laboriosa de la objetividad científica”45.
Lo cualitativo tiene necesidad de la analogía para acceder a la
conceptualización, la cual toma prestado del sesgo de la analogía controlada
que sólo se da por bosquejos siempre incompletos aunque siempre ajustados a
una totalidad, ésta idea de bosquejos conduce a la esquematización. Lo cualitativo
toma entonces la forma conceptual de propiedad estructural “cuyo sentido
depende no de la determinación aislada de un objeto individual, sino de un
sistema de virtuales manipulaciones efectuadas sobre un conjunto de objetos.”46
f) La intuición : No se trata de considerar aquí la intuición como conocimiento
inefable y misterioso sino la intuición como método elaborado que permite llevar la
reflexión al nivel mismo de las problemáticas. Ella contendría en Bergson tres
reglas principales:47
- Crítica de falsos problemas y encuentro de verdaderos, es necesario probar lo
verdadero y lo falso en los problemas mismos, trátese de problemas
inexistentes o mal planteados (aspectos problematizantes);
- Lucha contra la ilusión : investigación de verdades de diferente naturaleza, de
articulaciones de lo real. Lo real no es solamente lo que se destaca según
las diferencias de naturaleza, sino también lo que se destaca según caminos
convergentes en un mismo punto ideal o virtual (aspecto diferenciante);
- Ubicación y resolución de problemas en función del tiempo, de la duración, más
que en función del espacio (aspecto temporalizante).
g) La problemática : Concretamente, la fuente directa de las teorías y de las
hipótesis debe ser vista principalmente en las instancias de los problemas
concretos que las han suscitado, tanto ellas como toda la teorización
anterior. La problemática es aquello que permite someter
a una interpolación sistemática los aspectos de la realidad puestos en relación
mediante la pregunta que los ha suscitado.
45 G.-G GRANGER, op. cit. , 1960, p. 12, p. 110.46 Ibid. , p. 110.47 G. DELEUZE, le bergsonisme, Paris, Presses Universitaires de France, 1968, pp.1-2; H. BERGSON, La pensée et le mouvant, Paris, Presses Universitaires de France, 1934, pp. 25-98.
30
“Yo pienso que la ciencia parte de problemas (mejor de informaciones, ó también
de teorías, aunque se puede admitir que lo que subyace en el problema abarcará
teorías y mitos)... Así aprenderemos a comprender ensayando soluciones o
fracasando en dicho intento.” 48
Así, la problemática como campo constantemente rectificado es el fundamento de
toda pregunta científica (de toda inquietud científica), y la verdadera idea rectora
consiste en adaptar un método a un problema. La problemática es la visión global
del objeto mismo de la investigación y el campo en que se desenvuelve. Es lo que
hace decir al investigador ante los hechos o las hipótesis : “es importante” ó “es
interesante”; ella opera a partir de la selección de temas de reflexión, y de la
búsqueda, hasta el menor detalle en la investigación empírica. Dentro de
una óptica weberiana, la problemática puede ser cercana de la “producción de
valores”, del campo axiológico que determina los puntos de vista que suscitan las
teorías.
"La producción de valores es la base del cuestionamiento que hacemos de la
realidad. (...) Sólo es en los límites de ésta selección que el sabio aplica los
procedimientos ordinarios de la investigación científica (los “métodos”).” 49
La formulación de un problema es subyacente a todo proceso de
conceptualización (Canguilhem), esta formulación exige la presencia simultánea
de un número indeterminado de otros conceptos; estos no figuran necesariamente
como tales en los cuadros teóricos explícitos. P. Macherey sugiere el
reconocimiento, a través de la sucesión de teorías y conceptos, de “lo que persiste
de un problema en el seno de una solución que cree haberse dado”50...Las
problemáticas quedan así ubicadas “en un vacío” dentro de las definiciones
implícitas de los conceptos. Igualmente es tarea del investigador interrogarse
sobre los modos de producción de los conceptos, sobre el proceso de teorización,
pues si aquellos dependen de su inclusión en un sistema abierto de la teoría, éste
último depende de su aplicación a una problemática, ella misma originada en la
inclusión de las ciencias dentro del campo de todas las prácticas sociales,
notoriamente dentro del campo del saber, que es el mismo, la base de la
48 K. POPPER, op.cit, . 1972, p. 18149 J. FREUN, Sociologie de Max Weber, Paris, Presses Universitaires de France, 1968, pp.45,46.50 In D. LECOURT, op.cit. , 1972, p. 78.
31
estructuración de los objetos científicos.
En definitiva, la pertinencia de las formas de “objetividad” que describen las
ciencias sociales, dependerá en última instancia de nuestra comprensión de la
realidad social en donde ellas se insertan; es necesario entonces, como lo
dice C.W Mills que “los hechos científicos revelen auténticamente nuestra
concepción de la estructura social y de lo que allí pasa efectivamente”51.
51 C.W MILLS, L'imagination sociologique, Paris, Maspero, 1969, p. 78.
32
CAPITULO SEGUNDO
LOS PROCESOS DISCURSIVOS
I. La Dialéctica
Las brutales separaciones por demás dogmáticas entre lo científico y lo ideológico,
lo dialéctico y lo mecanicista no retendrán más la atención, se trata más bien de
situar la dialéctica dentro de una metodología general, indicando sobre todo las
principales extrapolaciones que ella puede suscitar.
La dialéctica puede en efecto presentar tres aspectos, según se le considere :
a) El movimiento concreto natural y socio-histórico de la realidad estudiada por
sí misma (“sentido objetivo”); b) La lógica del pensamiento, que pretende ser el
conocimiento adecuado de los procesos históricos de los cambios y de los
conflictos sociales (“sentido subjetivo”); c) Las relaciones entre el objeto
construido por una ciencia, el método empleado y el objeto real visto por esta
ciencia (“sentido metodológico”).
El primer aspecto concierne a la ontología, el segundo al método filosófico
general, el tercero a la metodología de las ciencias sociales propiamente dichas.
Las concepciones son diversas y se articulan según los autores de manera
muy diferente sinembargo, parece posible indicar las características previas,
comunes a todo proceso dialéctico.1
1. Se refiere a la vez a los conjuntos y a sus elementos constitutivos, a las
totalidades y a sus partes, es a la vez análisis y síntesis, es movimiento reflexivo
del todo a las partes y viceversa.
1. G. GURVITCH, op., 1972, pp. 33-38.
33
2. Es siempre proceso de negación porque niega las leyes de la lógica formal
(identidad, no contradicción, tercero excluido),* en la medida en que las hipótesis y
los hechos que esta permite analizar son abstraídos del conjunto concreto que las
supera (una totalidad englobante). Ningún elemento, por ejemplo, una proposición,
es idéntico a sí mismo desde el punto de vista de la dialéctica. La dialéctica niega
todo lo que es pura abstracción separada de lo concreto. Rehusa todo lo que es
estrictamente sometido a las etapas del proceso.
3. Es conmoción de todo conocimiento rígido, de todo concepto momificado.
Muestra que todos los elementos de un mismo conjunto se condicionan
recíprocamente en infinito número de grados intermedios entre términos opuestos.
En el plano ontológico, la dialéctica como concepción del mundo, dialéctica
“filosófica” como dice Piaget,2 puede ceder a la tentación de querer fundar y
orientar las ciencias3 de plantearse en teoría todas las teorías posibles
(Althusser).4 La dialéctica es entonces un paso inmanente a un contenido, que
investiga las causas internas de su desarrollo, sus contradicciones, estas causas
internas son las razones de los cambios, mientras que las causas externas no
constituyen sino condiciones accidentales de los cambios.
“Las causas puramente externas son solamente capaces de provocar los
movimientos mecánicos de las cosas y de los fenómenos, es decir, las
modificaciones de volumen, de cantidad no pueden explicar por qué las cosas y
los fenómenos son de una diversidad cualitativa infinita, por qué de una cualidad a
otra.” 5
La representación de lo real cambia sin cesar porque las ciencias continuamente
lo descubren bajo ángulos siempre renovables, pero igualmente porque
“(...) la materia misma está en movimiento perpetuo, lo que hace que el objeto por
conocer cambié él mismo”. 6
* Nota del traductor: respectivamente, A=A; A es no B; A diferente B.2 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, p. 86.3 B. KEDROV, Dialectique, logique, gnoséologie: leur unité, Moscou, Editions de Moscou, 1970.4 L. ALTHUSSER, Pour Marx, Paris, Maspero, 1972, pp. 161-224.5 MAO TSE-TOUNG, De la contradiction, Pékin, Editions en langues étrangères, 1967, p. 5.6 J. KLIABITCH, Précis d'histoire de la philosophie, Moscou, Editions du Progrés, p. 78.
34
Nos encontramos aquí en presencia de una ontología y una concepción del mundo
materialista que engloba a la vez las ciencias de la naturaleza, las ciencias
sociales y la historia.
La dialéctica que se pretende aprehensión del movimiento concreto, natural y
socio-histórico integra en su proceso la lógica del pensamiento reflexivo y
científico mismo. La dialéctica como reflexión subjetiva se articula con la dialéctica
como movimiento objetivo, lo racional es lo real (Hegel), es la historia. Así, el
método dialéctico no se realiza plena y rigurosamente sino en la aprehensión del
movimiento histórico en sus contradicciones constituyentes (Luckas).
Para Hegel, la dialéctica como modo de conocimiento ontológico, en la
confrontación de lo idéntico y lo contrario, de lo inmediato y de lo mediato realiza
una superación de estas antinomias. El movimiento de lo real se identifica
entonces con el movimiento del pensamiento, la realidad, es el Espíritu absoluto
que toma progresivamente conciencia de sí mismo. El modelo Hegeliano de la
dialéctica está centrado en torno a una unidad originaria simple, de un “sujeto”
diferenciándose de sí mismo, pero recuperando sus diferenciaciones, bajo una
misma idéntica forma (tesis, antítesis, síntesis).
L. Althusser distingue de este modelo hegeliano al modelo marxista de la
dialéctica que no es una simple “inversión” del primero (en lugar de alcanzar a la
idea, la dialéctica alcanzaría a lo real), sino que parte de otro presupuesto teórico :
“El marxismo establece en principio el reconocimiento de lo dado de la estructura
compleja de todo “objeto” concreto...Ya no tenemos esencia originaria sino un
siempre ya dado....Ya no tenemos unidad simple sino una unidad compleja
estructurada.” 7
Al análisis dialéctico apunta a un objetivo que determina el sentido del desarrollo
histórico (leyes dialécticas de la historia), define las relaciones de lo general a lo
particular en su concreción histórica. Las leyes dialécticas revelan el sentido
objetivo de un conjunto histórico, proponen así una especie de hermenéutica del
sentido objetivo de la historia.
“....Una teoría dialéctica de la sociedad procede de manera hermenéutica. Para
ella es constitutiva la comprensión del sentido...Extrae sus categorías ante todo de
7 L. ALTHUSSER, op. cit., 1972, p. 203.
35
la conciencia que los individuos actuantes tienen de la situación, en el
espíritu de un medio social (Lebenswelt), se articula el sentido con el cual se
enlaza la interpretación sociológica, a la vez identificadora y crítica...ella corrige el
sentido vislumbrado subjetivamente, de algún modo a través de las
tradiciones reinantes y lo hace estallar” 8
La dialéctica como metodología, en estricto sentido, es un esfuerzo
epistemológico, “que intenta despejar los rasgos comunes, o, al contrario,
diferenciados, de un caso a otro, de todos los progresos científicos que intentan
dar cuenta de los desarrollos que tienen lugar en el tiempo”.9 No se trata en
absoluto de considerar a la dialéctica filosófica como método por excelencia, de
hacer de ella la Teoría, como lo propusiera el joven Althusser (teoría de todas las
teorías), como el positivismo haría del método hipotético-deductivo, el
procedimiento científico. Esto sería de manera estéril dos abstracciones filosóficas
que no son en realidad de ninguna pertinencia en la práctica efectiva de la
investigación científica. Las leyes demasiado generales, las reglas demasiado
vagas, tanto dialécticas como hipotético-deductivas, son sólo su perfume filosófico,
“desviación, teoricista, racionalista, especulativa”.10
Esta metodología reclama una crítica previa del dominio estudiado, del objeto y
del procedimiento, una crítica de las reducciones y de las extrapolaciones, una
determinación del grado de coherencia del objeto. Es un pensamiento que se
mueve en el tiempo, pero que se inscribe en el espacio que va de la forma lógica
racional al contenido práctico.
Es la consciencia de la forma, del movimiento interno del contenido. Y es “el
contenido mismo”, el movimiento dialéctico que hay en él, que lo empuja hacia
adelante, incluso su forma. 11
Dialéctica no significa entonces nada más que “el ensayo de concebir en cada
momento el análisis como parte del proceso social analizado y como su
consciencia crítica posible. Esto implica que se renuncia a suponer entre los
instrumentos analíticos y los datos analizados (una) relación exterior puramente
8 J. HABERMAN, Zur Logik der Sozialwissenschaften, Frankfurt am Main, Suhrkamp Verlag, 1970, p. 9.9 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, p. 86.10 L. ALTHUSSER, Réponse à John Lewis, Paris, Maspero, 1973.11 H. LEFEBVRE, Logique formelle et logique dialectique, Paris, Anthropos, 1969, p. XXXI.
36
contingente”.12
La dialéctica es así un proceso epistemológico crítico esencial, cuyo campo de
pertinencia se sitúa no a nivel de la teoría en tanto que formulación analítica de las
soluciones, sino a nivel pre-teórico de los problemas que fundan la posibilidad de
la teoría. La dialéctica es la articulación entre la epistemología y lo conceptual en
la teoría, cada problema dialéctico produce un campo simbólico (teoría) en el que
se expresa.
"La idea dialéctica, problemática, es un sistema de uniones entre elementos
diferenciales, un sistema de relaciones diferenciales entre elementos genéticos...”
"Por dialéctica, no entendemos en absoluto una cualquiera circulación de las
representaciones opuestas que las haría coincidir en la identidad de un concepto,
sino el elemento del problema, en tanto que él se distingue del elemento...de las
soluciones...
Los problemas son siempre dialécticos, la dialéctica no tiene ningún otro
sentido, los problemas no tienen tampoco otro sentido”.13 Las diferencias
(Deleuze), las contradicciones (Mao Tse-Tung, Althusser), son tomadas como la
esencia misma de los problemas reales y el método dialéctico debe descubrirlas
bajo todas sus formas específicas.
La relación esencial sobre la cual arroja luz dialéctica es la de la identidad en la
diferencia, así como de la contradicción en la identidad, la “evidencia de lo dado”.
La dialéctica, no sigue una ruta preestablecida, se trata de un pensamiento.
“(...) que hace él mismo su ruta, que se encuentra a sí mismo al avanzar, que
prueba que el camino es realizable y realizándolo, este pensamiento por entero
cometido a su contenido (...) es la génesis de una relación a partir de otra ( la
opuesta).” 14
Varios procedimientos críticos están disponibles, su escogencia dependerá
únicamente de la experiencia sobre los problemas reales estudiados. G. Gurtvich
formula así cinco procedimientos “operatorios”:15
12 J. HEBERMAS, op. cit., 1970, p. 29.13 G. DELEUZE, op. cit., 1972-A, pp. 234, 231, 232.14 M. MERLEAU-PONTY, Existence et dialectique. Textes choisis, Paris, Presses Universitaires de France, 1971-B, p. 196.15 G. GURVITCH, op. cit., 1972, pp. 245-283.
37
1. La complementariedad revela la apariencia de exclusión recíproca entre
elementos estudiados develando sus relaciones mutuas. Es ésta una primera
etapa de dialectización que quiere mostrar simplemente la relatividad e
insuficiencia de los conceptos contrarios (Ej. , estructura formal vs. estructura
informal). Estos elementos están en realidad en un continúo.
2. La implicación dialéctica mutua pretende volver a encontrar en los sectores a
primera vista heterogéneos. los elementos comunes que se interpenetran (Ej. , no
hay explicación sin comprensión y viceversa).
3. La ambigüedad dialéctica insiste en la ambivalencia de ciertos fenómenos
que son a la vez de una naturaleza A y de una naturaleza no A. (Ej. , atracción y
repulsión). Las situaciones concretas vividas son muy a menudo de esta
naturaleza y una investigación empírica debe ayudarse de la reflexión dialéctica so
pena de ignorar estas realidades.
4. La polarización dialéctica pretende revelar lo antinómico en el seno de los
elementos aparentemente idénticos, es el procedimiento más empleado, aquél
que denuncia las contradicciones latentes. Pero no se trata aquí de reducir el
conjunto de procedimientos dialécticos y de ver las contradicciones por todas
partes convirtiéndolas en antinomias. Es el desarrollo de la historia la que
condiciona la pertinencia del empleo de la polarización, así en período de crisis, de
revolución, las antinomias tienen más posibilidad de ser percibidas como
antagónicas (Mao Tse-Tung).
5. La puesta en reciprocidad de las perspectivas hace resaltar en los elementos
que no admitan ni identificación ni separación, su inmanencia recíproca, su
paralelismo, su simetría.
Estrictamente, estos procedimientos no son aplicables ni en las regiones de
teorización rigurosa (Polo teórico), ni lo más frecuente, en el establecimiento de
los objetivos científicos (Polo morfológico) donde reina la lógica formal. Tampoco,
el carácter operatorio-crítico de dialéctica es el carácter operatorio formal, ni es el
carácter operacional verificable de las configuraciones y de las teorías (Polo
técnico).
La dialéctica no explica, no da esquemas de interpretación “ella sólo prepara
los marcos de la explicación”16 . Plantea preguntas sin dar las respuestas, si no
tuviera límites quedaría encerrada en la pura descripción incluso en el
dogmatismo. H. Lefebvre muestra el carácter totalmente “no operatorio”, del
sentido científico, de la dialéctica :
16 Ibid., p. 281.
38
“Ni sus conceptos teóricos, ni sus leyes y reglas permiten ordenar, clasificar,
separar - cómo recortar y disponer- las cosas que sean (...) Ella implica la
historicidad y pierde su sentido si no hay o si no hubiera historia. En su
marco global ella permite colocar en su puesto (subordinado, secundario) los
conceptos operatorios que cada conocimiento parcial tiende a erigir en absoluto
por vía ideológica." 17
Es sólo al interior de una unidad global, de una totalidad (Goldman, Gurtvich),
donde la dialéctica puede encontrar un campo operatorio. Pero esta totalidad no
puede ser puramente abstracta, el investigador debe siempre
“(...) emplear este análisis abstracto en el estudio de formas históricas concretas
(...) hacerlo servir a este estudio (...). La dialéctica no llega a ser interior al
contenido de la teoría sino en el momento cuando permite pensar tal o cual
relación concreta histórica y determinada” 18
El pensamiento dialéctico puede entonces definirse por su movimiento de
totalización19 que es esencialmente un movimiento progresivo-regresivo de
apertura sobre lo concreto en transformación.
La dialéctica se da (...) la cohesión global, primordial,de un campo de experiencia
en el que cada elemento obra sobre los demás” 20
El problema es saber si esa totalidad es cerrada -lo que parece incompatible con
la esencia misma de la dialéctica- o, si ella es simplemente un campo abierto, no
completamente ordenado, compuesto de :
“(...) estructuras semirigurosas (lattices) y no unas estructuras rigurosas”, 21 más
bien de una problemática, más un sistema abierto de conceptos que un sistema
cerrado”
17 H. LEFEBVRE, op. cit., 1969, p. L.18 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, pp. 66-67.19 J.-P SARTRE, Critique de la raison dialectique, Paris, Gallimard, 1960.20 M. MERLEAU-PONTY, op. cit., 1971-B, p. 195.21 H. LEFEBVRE, op. cit., 1969, p. XIX.
39
El re-aprehender es el proyecto específico de la dialéctica, la trayectoria que va
hacia ese contenido es incierta porque está determinada por los obstáculos, por
las diferencias, los objetos encontrados, es sinembargo, una trayectoria obligada :
de ahí una metodología que propone H. Lefebvre, que reconciliaría las lógicas
formal y dialéctica: 22
a) El término de partida es neutro (formal), el otro término es una totalidad, la
de saber que re-aprehende el contenido primero reducido (descartado); b) en el
trayecto, en el curso de la investigación, se encuentran los contenidos; c) éstos
son diferentes, diversos, específicos; d) cada contenido pide (a partir de la forma)
un análisis infinito; e) no se trata entonces de partir de objetos estrictamente
recortados, aislados; f) el recorrido mismo de la salida a la totalidad es incierto y
problemático.
M. Godelier intenta establecer el vínculo entre el método dialéctico y el método
hipotético-deductivo en el papel operatorio de las hipótesis y en el interior del
movimiento del método dialéctico.23 El análisis dialéctico permite la intelección de
la realidad concreta a partir de la abstracción, reproduce idealmente lo concreto
revelándonos la lógica interna de éste.
“Para el marxismo,la explicación de todo fenómeno es, en última instancia,
interna : es la “contradicción” interna la que es “motriz”. Las circunstancias
externas actúan : pero mediante el; “relevo” de la contradicción interna, que ellas
sobredeterminan.” 24
La idea esencial de la dialéctica es la interacción del sujeto con el objeto en el
conocimiento (Goldman), este es el problema central de la práctica.
"...El discurso dialéctico está situado, momento de una praxis que se totaliza e
integra en su desarrollo el conjunto de los elementos del campo, con frecuencia
heterogéneo en el cual ella se despliega.” 25
El proyecto dialéctico de alcanzar lo concreto pasa por la práctica científica, que
22 Ibid.23 M. GODELIER, Rationalité et irrationalité en économie, Paris, Maspero, 1971, t. II, pp. 120-124.24 L. ALTHUSSER, op. cit., 1973, p. 82.25 L. SEBAG, Marxisme et structuralisme, Paris, Payot, 1969, p. 29.
40
no es sino una práctica social particular. El nexo entre teoría y práctica es
primordial porque si el método se esfuerza en descubrir las eventuales
contradicciones en los hechos mismos que ella estudia, es en la práctica de la
dialéctica misma donde sería necesario buscar el criterio de la verdad científica. L.
Althusser habla a este respecto de “práctica teórica”.26 Pero la práctica dialectizada
puede exceder el campo estrecho de la práctica teórica. De tal manera la
dialéctica sería pertinente al nivel mismo de la observación empírica (polo técnico).
La “encuesta dialéctica” (Mao), el “análisis institucional” (Lapassade, Lourau) se
inspira en ella directamente, así, para la encuesta dialéctica de una ciudad:27
a) Los encuestadores vienen de afuera ; b) adquieren conocimiento externo
superficial de realidades contradictorias (estadio analizador), pueden consultar
evaluaciones prácticas (es el momento de toma de consciencia de los
problemas) ; c) elaboran los conceptos para aprehender las contradicciones
internas de las cosas (estadio analítico), pueden entonces formular evaluaciones
lógicas (es el momento de la elaboración teórica de las soluciones) ; d) sobre la
base de los conceptos elaborados, pasan a la práctica, formulan juicios, emiten
conclusiones (es el momento de la aplicación).
La implicación del observador con su objeto de encuesta es la condición, más que
el obstáculo para la validez de la encuesta.
Pero nada, si no el Discurso del maestro, (Lacan) o el pseudo-criterio del éxito,
garantiza la calidad de la práctica de los investigadores, ni la validez de los
conceptos que ellos construyen. Esta presentación del método dialéctico
permanece entonces más acá del proyecto científico que exige control sobre los
resultados, una intersubjetividad que se define como la posibilidad para todo
investigador de rehacer el proceso llegando a resultados comparables y por lo
tanto más objetivos.
Querer a todo precio la unidad mítica de la teoría y de la práctica lleva a
confundir las operaciones técnicas de la prueba minuciosa de las teorías, con las
acciones a menudo incontroladas de la práctica. Los criterios de testabilidad
(verificabilidad) del conocimiento no son del mismo orden que los criterios de
eficacia instrumental de la acción. Una tal representación de la actividad dialéctica
como práctica es poco útil en el proceso de investigación misma, por que las leyes
“dialécticas” encontradas son demasiado vagas, demasiado abstractas y no
26 L. ALTHUSSER, op. cit., 1972, pp. 186-197.27 D'après MAO TSE-TOUNG, in G. LAPASSADE et R. LOURAU, Clefs pour la sociologie, Paris, Editions Seghers, 1971, pp. 55-57.
41
pueden engendrar sino las peores confusiones.
De este imperativo de la práctica es necesario destacar que las ciencias
sociales se deben a sí mismas el ser críticas y atentas para elaborar sus objetos a
partir de sus problemas y de las prácticas sociales.
“Se fetichizaría la ciencia si se separa radicalmente sus problemas inmanentes de
los problemas reales que se reflejan sutilmente en sus formalismos.” 28
La dialéctica pretende pensar la relación del investigador con su objeto de
conocimiento, de las ciencias con lo real, “el proceso de investigación ejecutado a
través de los actos del conocimiento por los sujetos, pertenece él mismo al
contexto objetivo que nos es preciso conocer” (Zusammenhang). 29
La dialéctica rechaza las abstracciones de la lógica formal y trascendental, pero
así mismo rechaza los “hechos empíricos” de la experiencia inmediata. El
pensamiento dialéctico llega hasta lo concreto, que se constituye el vínculo entre
la estructura de lo real y la estructura del pensamiento. Este pensamiento
dialéctico es un forma de pensamiento no operacional, en el sentido tecnológico
del término, porque ella es no positiva. El método dialéctico es entonces opuesto
en su proyecto, a todo método de tipo positivista, es extraño a los métodos
operacionales de la ciencia e igualmente, a los comportamientos operacionales;
(...) se opone a un modo de pensamiento en el que el orden de la cantidad y de las
matemáticas se conviertan en norma. La lógica dialéctica se opone a toda
organización administrativa del pensamiento (...). 30
2. La Fenomenología
"Comprender la fenomenología quiere decir : aprehender sus posibilidades”. 31 Se
la puede presentar como una práctica científica, como una estética de la
existencia. 32 Las posibilidades de interpretación, como se ve, son en un principio
múltiples, se tratará de despejar aquí el aspecto metodológico de la herencia
fenomenológica.
“La fenomenología como ciencia de las “esencias”, análisis eidético, se
28 T. W. ADORNO, Zur Logik der Sozialwissenschaften, Kölner Zeitschrift für Sociologie und Sozialpsychologie, 14, 1962, p. 252.29 J. HABERMAS, op. cit., 1970, p. I.30 H. MARCUSE, L'homme unidimensionnel, Paris, Les Editions de Minuit, 1968, p. 166.31 M. HEIDEGGER, L'Etre et le Temps, Paris, Gallimard, 1964, p. 57.32 A. DARTIGUES, Qu'est-ce que la phénoménologie? Toulouse, Privat, 1972.
42
distingue de la filosofía fenomenológica en tanto que sistema de filosofía
trascendental. La fenomenología como técnica de análisis eidético no puede ser
descartada (tumbada) por la crítica a la fenomenología trascendental”. 33
Como actitud reflexiva, la fenomenología tiene ambiciones epistemológicas
radicales, particularmente en lo concerniente a las ciencias sociales, aunque ella
es consciente se los límites epistemológicos de su propio procedimiento :
"La fenomenología intenta, no reemplazar las ciencias del hombre, sino establecer
su problemática, seleccionando de este modo sus resultados y reorientando su
investigación”. 34
Ella pretende ser así el “revelador” de las ciencias sociales mediante el análisis
crítico de sus instrumentos conceptuales y de sus fundamentos epistemológicos.
Se trata efectivamente de un método original cuyo interés para la investigación
se sitúa al nivel fundamental de la elaboración conceptual. este proceso va de lo
constituido (realidad concreta) a lo constituyente (esencia); éste último contiene la
inteligibilidad de lo constituido, explicita la forma “lógica” que lo hace posible, que
lo constituye como tal.
Este análisis impugna las apariencias empíricas, pero en el mismo movimiento se
dá cuenta de ellas; estas apariencias pueden ser suficientes a la práctica pero
constituyen un conocimiento “científico”, un conocimiento de las razones y de la
evolución de esta práctica. La fenomenología sería entonces según Husserl
mismo, el método de un positivismo superior,que permitiría volver “a las cosas
mismas”.
El primer movimiento del método es el de efectuar una ruptura radical con las
certidumbres positivistas que pueblan la conciencia “ingenua” del sentido común.
Esta ruptura es la reducción fenomenológica, que coloca entre paréntesis
(époche) la confianza espontánea en la positividad del mundo. “La reducción
fenomenológica consistiría simplemente en “suspender” esta adhesión ingenua, en
distender de alguna manera los lazos que nos unen al mundo, en hacer
abstracción también de todo lo que las ciencias sociales y el saber constituido
pretende enseñarnos sobre él...”. 35 Mediante una exclusión radical de toda
33 M. GODELIER, op. cit., 1971, t. II, pp. 46, 47.34 J. F. LYOTARD, La phénoménologie, Paris, Presses Universitaires de France, 1969, pp. 8, 9. 35 F. ROUGER, La phénoménologie. Une description rigoureuse de l'expérience, in la philosophie, Verviers, éd. Gérard et Cie, 1972, p. 512.
43
interpretación espontánea, es preciso someter las evidencias previas al “indice de
la vida”, para no dejarse engañar por ellas :
"La consciencia natural, irreflexiva se ignora a sí misma y la ingenuidad de su
actitud le oculta su propia participación en la confrontación del mundo, mediante la
ingenua aceptación del mundo existente, ella disimula su propia operación
anónima de constitución de un mundo real” 36
La reducción caracteriza la actitud metodológica del fenomenólogo. El paréntesis,
la suspensión, la reducción es una actitud metodológica de
“colocar fuera del juego, de nuestro compromiso con el mundo objetivo para que
aparezca en su evidencia esa relación con el mundo...relación natural, inmediata
que precede toda reflexión...” 37
Son las cosas mismas las que constituyen la meta del método y es en y por la
experiencia del fenómeno donde ella se empeña en alcanzarlas. “ La experiencia
del fenomenólogo es una experiencia del fenómeno”. 38 Y el fenómeno se define
como el ser mismo del aparecer, el método fenomenológico no busca un ser
detrás del fenómeno, sino más bien la esencia misma de aquél. Ella “reduce todo
ser a la pureza de ser fenómeno”. 39 Para el fenomenólogo el interés se dirige
siempre “a la cosa existente en su individualidad y en el modo irreductible de su
aparición”. 40 La distinción se hace entonces radical entre el fenómeno y el hecho
positivo, la característica de éste es el de permanecer exterior a la consciencia,
mientras que el fenómeno es el modo de aparición interno de las cosas en la
consciencia. “Nosotros vivimos los fenómenos como pertenecientes a la trama de
la consciencia mientras que las cosas nos aparecen como pertenecientes al
mundo fenoménico. Los fenómenos no nos aparecen, son vividos”. 41 El método
fenomenológico estará entonces en su comienzo fundado sobre una especie de
intuición, aprehendido por una reflexión. La intención fenomenológica inicial es
36 A. L. KELKEL et R. SCHERER, Husserl, Paris, Presses Universitaires de France, 1971, p. 54.37 F, ROUGER, in La philosophie, op. cit., 1972, p. 515.38 A. DARTIGUES, op. cit., 1972, pp. 40, 41.39 A. L. KELKEL et R. SCHERER, op. cit., 1971, p. 49.40 R. SCHERER, Husserl. La phénoménologie et ses développements, in F. CHATELET, sous la direction de, La philosophie du monde scientifique et industriel (1840-1940), Paris, Hachette, 1973, p. 268.41 E. HUSSERL, in A. L. KELKEL et R. SCHERER, op. cit., 1971, p. 42.
44
pues francamente descriptiva, descripción concreta de contenidos de consciencia
“en situación”.
“Proceder a un análisis fenomenológico es, en efecto, ante todo sustituir a las
construcciones explicativas la descripción de “lo que ocurre” efectivamente, desde
el punto de vista de aquél que vive tal o cual situación concreta.” 42
La descripción fenomenológica se funda sobre lo vivido, sobre lo real más íntimo,
que ella se esfuerza por recuperar sobre un plano temático. Se trata de un
“retornar a las cosas mismas” según el programa husserliano, de trascender las
representaciones espontáneas del empirismo, en el mismo movimiento, la
fenomenología quiere alcanzar la esencia de los fenómenos.
“La intuición de la esencia se distingue de la percepción del hecho, es la visión del
sentido ideal que otorgamos al hecho materialmente percibido y que nos permite
identificarlo.” 43
La esencia designa “el conjunto de condiciones, el conjunto de necesidades a
priori que presume la existencia de un cierto tipo de fenómeno”. 44 La visión de las
esencias hace transformar la reducción fenomenológica en “reducción eidética”
(eidos : esencia : forma : idea ).
“Método que busca despejar los rasgos consecutivos de una esencia, es decir
aquellos cuya esencia imagina completamente en una experiencia mental, no
permite ya pensar esta esencia en su especificidad.” 45
Metodológicamente, si uno se imagina todas las relaciones implicadas por una
noción, una representación cualquiera y que las haga variar -siempre mediante la
imaginación- lo que no puede ser variado sin que el objeto mismo desaparezca, el
invariante, es la esencia.” 46
“La esencia (ú objeto ideal) es un objeto de consciencia al mismo título que todo
42 R. SCHERER, in F. CHATELET, op. cit., 1973, p. 256.43 A. DARTIGUES, op. cit., 1972, p. 21.44 F. ROUGER, in La philosophie, op. cit., 1972, p. 505. 45 M. DUPUY, La philosophie allemande, Paris, Presses Universitaires de france, 1972, p. 95.46 M. MERLEAU-PONTY, in P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 274.
45
objeto, de la multiplicidad de representaciones subjetivas, ella se distingue como
la invariante.” 47
La visión de las esencias implica en suma la actualización de esquemas
inteligibles que dan cuenta de lo real dejándose “habitar” por aquello que se
observa para volverlo a aprehender mediante la “intuición”, lo que supone un
esfuerzo crítico de reducción, un esfuerzo de imaginación constante, como lo
señala Husserl. La esencia puede ser desde entonces definida como una “regla de
organización que sirve de unión entre lo que es delimitable por la intuición, lo que
es formulable por los discursos, lo que es atestiguable por un conjunto de índices
sensibles”. 48
En efecto, la reflexión fenomenológica (como análisis ideal-típico de Weber)
exige un esfuerzo sostenido por una “comprensión” cada vez más elaborada de la
real comprensión siempre en devenir.
Esta comprensión es el objeto de la investigación, el investigador tendrá
tendencia a objetivar la comprensión de su objeto de investigación, pero no se
trata aquí de cierto artificio de exposición, porque metodológicamente esta
comprensión no es jamás cerrada. Esta objetivación puede hacer pensar en una
intemporalidad de las esencias, más allá sólo constituye un procedimiento útil y
fecundo para aprehender las esencias.
El aspecto más radical del método fenomenológico se manifiesta en la voluntad
de explicitar constantemente las capas de sentido más originarias, las esencias
más ocultas; la fenomenología se convierte así en hermenéutica, ciencia de la
interpretación.
“Siempre hay un pre-reflexivo, un irreflexivo, un antepredicativo en el cual se
apoya la reflexión, la ciencia y aquella escamotea cuando quiere dar razón de ella
misma .“ 49
La fenomenología como la hermenéutica se alía en el marco de referencia de la
“comprensión” (Verstehen) y puede ir hasta pretender una prioridad metodológica
en las ciencias culturales, históricas, sociales. 50
La hermenéutica es a la vez una forma de experiencia y un análisis gramatical.
47 A. L. KELKEL et R. SCHERER, op. cit., 1971, p. 33.48 N. MOULOUD, Langage et structures. Essais de logique et de sémiologie, Paris, Payot, 1969, p. 31.49 J.-F. LYOTARD, op. cit., 1969, p. 7.50 E. CASSIRER, An Essay on Man. An Introduction to a Philosophy of Human Culture, New York, Bantam Books, 1970, p. 216.
46
“El lenguaje del intérprete hermenéutico se adapta él mismo en el curso de la
interpretación a la experiencia vivida concentrada en torno a la significación
individual... la hermenéutica puede ser elaborada como procedimiento explícito o
condición de que sea posible explicar este aspecto de la estructura del lenguaje
ordinario que nos permite hacer lo que la sintaxis de un lenguaje puro prohibe,
precisamente, hacer comunicable...lo que es irreductiblemente individual.” 51
La hermenéutica descubre en el análisis de los tejidos que forman los seres
humanos, que éstos se apoyan en una base implícita informulada; “se podría decir
que en una “estructura-ley” que se ofrece como tema al conocimiento, tiene
generalmente por correlativo una “estructura-valor” que se une con alguna
inserción fundamental de la gente en el mundo”. 52 Los métodos hermenéuticos
pretenden además circunscribir las significaciones posibles de los enunciados
válidos de las ciencias sociales a partir del sentido vivido y el “conocimiento
hermenéutico es siempre mediatizado a través de la precomprensión (del
intérprete) que se deriva de la situación inicial de este intérprete.” 53
Una tendencia reciente de la investigación bajo el nombre de la
etnometodología recomienda especialmente los métodos fenomenológicos y
hermenéuticos, inspirándose además en la gramática de Chomsky.
El término de etnometodología remite al :
“...estudio del razonamiento práctico de todos los días como constitutivo de todas
las sociedades humanas. El etnometodólogo ve la significación como una
interacción situada, auto-regulada y reflexiva entre la organización de la memoria,
el razonamiento práctico y la palabra.” 54
Esto hace que la interacción fenomenológica de “reducción”, de lo explícito, se
vuelva a encontrar con una esencia más íntima, la “intersubjetividad” planteada en
las raices de las significaciones por Husserl, es transformada en “interacción” por
la etnometodología, que ve el a priori material de toda actividad cognitiva.
La fenomenología se preocupa de los fundamentos de la significación del
substrato originario del sentido, se lo informulado que subtiende la formulación, de
51 J. HABERMAS, op. cit., 1972, p. 163.52 N. MOULOUD, op. cit., 1969, p. 34.53 J. HABERMAS, op. cit., 1972, p. 309.54 A. V. CICOUREL, Cognitive Sociology. Language and Meaning in Social Interaction, London, Penguin, 1973, pp. 99, 100.
47
lo implícito que prepara la explicitación. Ella pretende despejar las condiciones de
inteligibilidad del objeto mismo dela investigación científica.
"La fenomenología forma ... una pre-ciencia positiva cuya función de
investigación preliminar no explicativa constituye sus límites". 55
El rigor en la observación exige una metodología que no disocia la investigación
de las esencias de los procedimientos de constatación de los hechos, la teoría no
se debe separar de la experiencia, tal es la lógica del método fenomenológico.
"El análisis fenomenológico rehabilita la "conciencia de generalidad" negada
por los empiristas. Explicita, de lado de los actos de conciencia, la abstracción
ideatríz ... la institución de las esencias ó la institución categorial siempre
"fundada" en los sensibles sin, no obstante, confundirse con él". 56
En su utilización metódica mínima, la fenomenología proporciona una descripción
sistemática, permite un inventario de las relaciones pertinentes y de las funciones
de los objetos estudiados; en este sentido está al nivel del análisis exploratorio -
conceptual - a partir del cual se elaborará el aparato metodológico total.
La reflexión fenomenológica guiará el investigador cuando se trate de plantear
problemas, hipótesis, de desprender los conceptos con miras a la observación
teórica; para garantizar la fecundidad siempre renovada de la investigación.
Ningún análisis es definitivo, lo real contiene tal infinidad de "esencias" que es
preciso esclarecer los esquemas de inteligibilidad posibles que están en constante
transformación.
"La esencia es el sentido de los actos de los objetos, "el haz permanente de los
predicados que le sobrevienen necesariamente"... Ella es una unidad de "sentido
objetivo de especie ideal", que determina las fronteras de lo posible ...". 57
Por otra parte el método fenomenológico, aprehendiendo lo esencial, evitará la
parcelación de la investigación, la atomización de los datos que reprocha Zorokin
a las investigaciones empíricas.
La fenomenología constituye un proceso epistemológico en el que las ciencias
55 R. SCHERER, in F. CHATELET, op. cit., 1973, p. 260.56 A. L. KELKEL et R. SCHERER, op. cit., 1971, p. 38.57 M. DUPUY, op. cit., 1972, p. 94.
48
sociales deberían aclarar sus problemáticas; ella sobrepasa sinembargo, como
filosofía, sus ambiciones estrictamente científicas.
"La riqueza de la fenomenología, su lado positivo, es su esfuerzo por volver a
aprehender al hombre mismo por fuera de los esquemas objetivos, con los cuales
la ciencia antropológica no puede dejar de recubrirlo y es evidentemente a partir
de esta base, que es preciso discutir con la fenomenología".58
La fenomenología y más ampliamente la filosofía, es no solamente compatible con
las ciencias sociales, sino que le es necesaria
"como una constante llamada a (sus) tareas .. cada vez que el sociólogo vuelve a
las fuentes vivas de su saber, a lo que, en él, opera como medio de comprender
las formaciones culturales más alejadas de él, hace espontáneamente filosofía ..
La filosofía no es un cierto saber, ella es la vigilancia que no nos permite olvidar la
fuente de todo saber". 59
3. LA CUANTIFICACION
Entre los diferentes procesos discursivos, los cuales son otros tantos modos de
razonamiento que permiten guiar la investigación y exponer rigurosamente los
resultados, ha desempeñado la cuantificación un papel nada despreciable. En
ocasiones de manera alusiva y esporádica interviene la cuantificación para
consolidar una argumentación al proveerla de precisión y, por ende, de una base
suplementaria. Pero en sentido pleno, la cuantificación constituye un vínculo entre
la operacionalización de las hipótesis y el allegamiento de información; ella somete
en este caso el conjunto de la investigación a sus exigencias metodológicas. La
cuantificación impone un orden al universo semántico del discurso y lo reduce a un
universo simbólico de números; ella autoriza entonces la comparabilidad numérica
y la aplicación de métodos cuantitativos de tratamiento.
La cuantificación consiste en la atribución a dimensiones, propiedades o
cualidades de ciertos conceptos, de un orden de naturaleza clasificatoria, serial,
58 J.-F. LYOTARD, op. cit., 1969, p. 125.59 M. MERLEAU-PONTY, Eloge de la philosophie, Paris, Gallimard, 1971-A, p. 138.
49
cuasi-serial ó métrica. La cuantificación establece de esta manera una
correspondencia entre las dimensiones de cada concepto y los números
ordenados según ciertas reglas. Las dimensiones son, por consiguiente,
reducidas a cierto número de valores posibles expresados bajo la forma de una
escala; ellas constituyen en esta forma el concepto de variable. Esta operación,
en el estadio de allegamiento de la información, confiere a cada indicador de la
variable, una dimensión sobre la escala que permite observar el perfil de la
variable. Se denomina "medida" a esta representación simbólica del indicador,
que lo reemplaza por un número. El conjunto de estas medidas indica el aspecto
de cada dimensión.
Diversos ordenes intervienen en la cuantificación dando lugar a operaciones
distintas, las cuales permiten la construcción de escalas a partir de las cuales se
obtienen diferentes tipos de variables.
MODOS DE CUANTIFICACION
ORDEN OPERACION ESCALA VARIABLE
Clasificatorio Categorización Nominal Nominal y
atributiva
Serial y cuasi-
serial
Ordenamiento Ordinal Ordenada
Escalar Medición De intervalo y
razón
Continua ó
discreta
El orden clasificatorio agrupa los elementos de un conjunto definido en categorías
tan homogéneas como sea posible. Esta clasificación debe formar
necesariamente clases exhaustivas y mutuamente excluyentes. Es decir, que
permite clasificar sin sobre posiciones todos los casos. Esto no obstante, nada se
presume en cuanto a las relaciones entre las categorías: no se postula ningún
orden entre ellas. 60
El orden serial establece una relación entre los elementos, relación que es a la
vez irreflexiva (x—>x), asimétrica (si x—>y, entonces, y—>x) y "conectada" (sea x
60 H. BLALOCK, Introduction à la recherche sociale, Gembloux, Duculot, 1973, pp. 54-56.
50
—>y, sea y—>x).61 El orden serial impone a sus elementos un "orden completo" 62 en el que cada uno de ellos se encuentra diferenciado de los demás.
Más frecuentemente las ciencias recurren al orden cuasi-serial el cual
combina el orden clasificatorio con el orden serial: cada par de elementos es
definido, sea por una relación irreflexiva, asimétrica y transitiva, sea por una
relación reflexiva, simétrica y transitiva. 63 El orden cuasi-serial impone un "orden
débil": 64 este orden forma "clases de equivalencia" ordenadas en una serie, las
unas con respecto a las otras. El ordenamiento que es instaurado por medio de
un orden serial ó cuasi-serial, clasifica los elementos en rangos (puestos
ordenados). Para que exista un orden métrico es necesario que las relaciones
entre los elementos reunan otro de condiciones no necesarias para el orden serial
ó cuasi-serial. Es necesario que las proposiciones analíticas que definen el orden
métrico entre los elementos (transitividad, etc), sean tales que el juego de axiomas
de una teoría de números (por ejemplo la de los números racionales, ó la de los
números reales, ó aún la de los números complejos) constituya un modelo.65 Si
existe esta correspondencia el orden así introducido autoriza la medida entre los
elementos y la aplicación a éstos de los postulados de la actividad, los cuales
permiten la adición, la sustracción, la multiplicación y la división. 66 Esto no
obstante, la construcción de ordenes métricos no ha sido realizada hasta el
presente hasta el presente en forma completa, si no en contadas ocasiones en las
ciencias sociales.
El orden cuantitativo introducido en los indicadores autoriza la representación
simbólica de cada indicador bajo la forma de un número, el cual se integra a algún
tipo de escala.67
La escala nominal - la cual tiene por fin la formación de categorías - constituye el
"nivel más burdo". 68 de la cuantificación, por cuanto los números empleados
tienen como única función la de diferenciar los indicadores a objeto de clasificarlos
61 R. S. RUDNER, op. cit., 1966, p. 36; L. S. KOGAN, Principles of Measurement, in N. A. POLANSKY, op. cit., 1960, p. 9.62 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 178-179.63 R. S. RUDNER, op. cit., 1966, p. 37.64 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 181-182.65 R. S. RUDNER, op. cit., 1966, pp. 39-40.66 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 185.67 Ibid., p. 189. Sur les échelles, cf. : H. M. BLALOCK Jr, Social Statistics, New York, McGraw Hill, 1960, pp. 11-12; C. SELLTIZ, M. JAHODA, M. DEUTSCH and S. COOK, Research Methods in Social Relations, New Fetter Lane, Methuen & Co., 1969, pp. 186-197; J. GALTUNG, Theory and Methods of Social Research, Oslo, Universitetsforlaget, 1967, p. 72; P. E. GREEN and D. S. TULL, Research for Marketing Decisions, Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 1971, pp. 176-180.68 H. BLALOCK, op. cit., 1973, p. 54.
51
en diferentes categorías. La única propiedad de los números reales presente
aquí, es aquélla que precisa que dos números diferentes no son iguales. 69
En la escala ordinal o topológica, los números atribuidos a los indicadores
revelan el rango al cual estos pertenecen (revelan la posición ó el puesto que
ocupan en una serie ordenada de atributos). Sinembargo, a causa de la falta de
una unidad de medida, no se puede conocer la distancia entre los rangos.
En la escala de intervalos, los números atribuidos a los indicadores se refieren
a una misma unidad de medida, la cual permite el conocimiento de la distancia
precisa entre las posiciones. Se define, en este caso, un punto cero, el cual es
relativo al ser impuesto arbitrariamente por pura conveniencia (Ejemplo: el tiempo,
la altura, la temperatura empírica). Esta escala permite efectuar operaciones
aritméticas a partir de la diferencia entre los números que representan las
posiciones en la escala.
La escala de razón ó de relaciones es una escala de intervalos que posee un
cero absoluto y no ya un simple punto de origen arbitrario (Ejemplo: la edad, la
temperatura en termodinámica). "Los ceros absolutos dependen de definiciones y
leyes que pertenecen a cualquier teoría; en la mayor parte de los casos
corresponden a la desaparición de la propiedad correspondiente (en tanto que
entendía en un cuerpo cualquiera de conocimiento)". 70 Esto es lo que permite las
operaciones de multiplicación entre los valores de la escala. 71
Cuando la dimensión de un concepto puede ser descrita por una escala,
constituye una variable, respecto del tratamiento cuantitativo. Aparecen entonces,
diferentes tipos de variables según el tipo de escala construida: 72 las variables
"nominales" - que se describen mediante clases nominales - (entre estas las
variables denominadas "atributos" que se describen mediante clases dicótomas);
las variables "ordenadas" - que se describen mediante aquellas clases ordenadas
- en fin, las variables "discretas" y "continuas", descritas por un gran número,
hasta por una infinidad de clases. Las variables continuas ofrecen siempre la
posibilidad de intercalar una clase nueva, no importa qué par de clases y, no
importando qué tan juntas puedan ser.
69 L. S. KOGAN, in N. A. POLANSKY, op. cit., 1960, p. 92; A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 191.70 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. II, p. 223.71 L. FESTINGER et D. KATZ, Les méthodes de recherche dans les sciences sociales, Paris, Presses Universitaires de France, 1963, p. 552.72 R. BOUDON, Les méthodes en sociologie, Paris, Presses Universitaires de France, 1969, p. 49; Les mathématiques en sociologie, Paris, Presses Universitaires de France, 1971-A, pp. 37-39.
52
La cuantificación debe permitir la obtención de una medida fiel, discriminante y
válida. Una medida fiel es aquella que permanecen constante cuando es medida
bajo condiciones constantes. 73 La fidelidad es función de la reproductibilidad de
los resultados. Esta es una condición necesaria pero no suficiente para que exista
la validez.74 Una evaluación de la fidelidad puede ser obtenida por el empleo
repetido de la medida por el mismo investigador o por la aplicación simultánea de
la medida por investigadores diferentes.75 Siembargo esta evaluación no se refiere
solamente a la fidelidad de medida, sino que concierne igualmente a todo el
procedimiento de la medición, las condiciones bajo las cuales es practicada y sus
modos de aplicación (validez-N.T). 76
La medida debe ser igualmente discriminante a fin de distinguir los indicadores
y de revelar así, las diferencias pertinentes.77
Finalmente, la validez empírica de la medida implica que las diferencias entre
las medidas correspondan a diferencias que existen efectivamente entre los
indicadores.78
Sinembargo, la cuantificación como tal no podría ser el garante de la validez los
resultados medidos, sin caer en la "ficción de la medida verdadera".79 La validez
es función del conjunto de operaciones metodológicas y no de la sola precisión de
las medidas.
Sobrevalorarla, sería admitir que "la ciencia avanza con el último decimal". De ello
proviene el escollo de la precisión mal situada, proveniente del empleo exagerado
de medidas ó de su precisión superflua. De ésto proviene también el error de la
73 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 200; R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, p. 403.74 L. S KOGAN, in N. A. POLANSKY, op. cit., 1960, pp. 98-99.75 C. SELLTIZ et al., op. cit., 1969, pp. 166-186.76 L. S. KOGAN, in N. A. POLANSKY, op. cit., 1960, pp. 98-99.77 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 199-200; R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, p. 404-405.78 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 198; R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, p. 404.79 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 172, 202-205.
53
falta de precisión, cuando la medida es efectuada sin una conceptualización previa
suficiente, o cuando el procedimiento de cuantificación el llevado más allá de los
límites permitidos.
Separadas de la teoría, reducidas a la sola virtud de su comparabilidad
numérica, las variables contribuyen a menudo a provocar inferencias ilegítimas o
no significativas. De hecho, "las cifras como tales, no rechazan jamás ser
combinadas con otras cifras".80 Esta búsqueda de la precisión por ella misma
engendra lo que Sorokin denomina la "cuantofrenia".81
Los instrumentos de la cuantificación, más utilizados en las ciencias sociales,82
intervienen solos ó en combinaciones, en diferentes momentos de la investigación.
Dado que los procedimientos de análisis suponen, cada uno, tipos de medidas
y de escalas específicas, a fin de ser válidamente empleados, es menester que las
técnicas que se acojan para la recolección de datos se hagan de tal manera que
no les sean impuestas medidas o escalas que no les convengan. 83
De manera general, los análisis cuantitativos se aplican a los datos que figuran
en tabla a manera de matriz. Verticalmente, las columnas de las tablas
representan el número n de unidades (U) y las hileras horizontales representan el
número de p variables (V) tomadas en consideración. La tabla comprende los np
valores (R) que corresponden a cada combinación (U,V):
p variables
U1 U2 . . . . . Un
V1 R11 R21 . . . . . Rn1
80 J. SIMIAND, Le statisticien doit savoir ce qu'il fait, in P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 250.81 P. A. SOROKIN, Tendances et déboires de la sociologie américaine, Paris, Aubier, 1959. 82 Un lenguaje de trabajo para el análisis de los datos en las ciencias sociales es presentado de una manera a la vez sintética y operacional en N. H. NIE, D. H. BENT and C. H. HULL, Statistical Package for de Social Sciences (S.P.S.S.), New York, Mc. Graw Hill, 1970. El S.P.S.S.S es un sistema integrado de programas en un computador que pretende simplificar los procesos de tratamiento y análisis de resultados. Susceptible de satisfacer la mayor parte de las necesidades de análisis, el S.P.S.S. posee la capacidad de tratar hasta 500 variables. Los diversos procedimientos que comprende pueden ser aplicados no importa en qué orden, de tal manera que el investigador pueda escoger las técnicas que va a emplear en el marco de su proyecto teniendo en cuenta sus datos. La flexibilidad del sistema S.P.S.S. lo mismo que el número de métodos y programas que contiene, no dispensan al investigador de la obligación de escoger los métodos de tratamiento útiles y adecuados para su proyecto específico.. Hace falta entonces, por una parte, conocer suficientemente, la técnica y el uso de los métodos disponibles y, por otra, preparar los datos a fin de que puedan ingresar al sistema y ser objeto de tratamiento estadístico escogido.83 H. M. BLALOCK Jr, op. cit., 1960, pp. 19-20.
54
V2 R12 R22 . . . . . Rn2
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Vp R1p R2p . . . . . Rnp
n Unidades
Esta tabla de datos se presenta como tal a dos tipos de análisis, el uno vertical,
centrado en las unidades y el otro horizontal, centrado en las variables.84 El
análisis combinado de columnas e hileras se apoya en ambos tipos de análisis y
se refiere a dos variables a la vez, o bien a varias variables (análisis multivariado);
este análisis considera una o varias variables como dependiendo de otras, o
estudia las variables interdependientes miradas todas en un mismo pie de
igualdad.
Una primera tarea previa al análisis propiamente dicho, consiste normalmente
en la descripción de las características que presentan las variables
individualmente.85 A partir de observaciones se procede en primera instancia a
realizar una representación gráfica y a deducir los estimativos de las
características esenciales de la distribución: moda, mediana, media, varianza,
curtosis, asimetría. Estas características numéricas de las distribuciones
estadísticas se expresan en forma condensada por medio de los parámetros.86
Cuando se dispone de observaciones referidas a dos variables, es posible estimar
los parámetros de una distribución conjunta (bivariada, N.T). A partir de estos
estimativos se podrá entonces elaborar pruebas de significación de los parámetros
de las distribuciones. Un método muy frecuentemente empleado consiste, en
efecto, en calcular la distribución de la frecuencia conjunta de los datos en función
de dos ó más variables clasificatorias; la forma más simple es el cuadro latino de
2x2. Las distribuciones conjuntas pueden, después, analizarse por medio de las
pruebas de significación y de asociación, con el fin de establecer si ellas reflejan
relaciones estadísticamente significativas. La tabla de base autoriza las
extensiones, sea por la adición de variables, sea por la adición de categorías en el
interior de cada variable.87
De otra parte, si el análisis se centra en las unidades individuales, para cada
una de las cuales las diferentes variables dan un valor diferente, tendrá el análisis
84 J. GALTUNG, Theory and methods of Social Research, Oslo, Universitetsforlaget, 1970, p. II, p. 178.85 N. H. NIE et al., op. cit., 1970, pp. 96 et s.86 J. GALTUNG, op. cit., 1970, pp. 205-208.87 N. H. NIE et al., op. cit., 1970, p. 117.
55
por objetivo la caracterización del "perfil" de estas unidades, al construir índices
más comprehensivos88 ó el descubrimiento de variables latentes, inferidas de los
datos observador.89
Un breve resumen de los principales métodos no tendrá otro fin que el de mostrar
los tipos de problemas sometidos al análisis y los tipos de datos que cada uno
trata. El análisis de regresión simple conviene para estudiar la evolución de una
variable en función de otra y el de estimar el valor de una, llamada variable
dependiente, que corresponde a uno o varios valores conocidos de otra, llamada
variable independiente. Los modelos más frecuentes y más cómodos son los
modelos lineales.
La regresión múltiple tiene por fin estimar el valor de una variable dependiente,
no ya en función de una variable independiente, sino de varias, las cuales pueden,
por lo demás, estar más o menos ligadas entre sí. En lugar de la ecuación de
regresión simple se utiliza, aquí, la ecuación de regresión múltiple, generalmente
lineal como la primera. De igual manera se utilizan los sistemas de regresión
simultánea para estudiar y estimar los valores de las variables de un grupo, en
función de los valores de las variables de otro grupo.90
El análisis de correlación simple suministra el medio de medir la dependencia
entre dos variables y la intensidad de su relación eventual. Sirve de base el
empleo de métodos más complejos, pero el análisis de la correlación puede
revestir, él mismo, diversas formas, dependiendo de la naturaleza de las
observaciones y del tipo de variables. El coeficiente de correlación múltiple mide
la dependencia de una variable con relación a dos ó más y muestra cómo ella
evoluciona en función de otras que actúan de manera conjunta.
La correlación parcial da una medida de la unión existente entre dos variables,
al hacer abstracción o al controlar los efectos de una ó varias variables a la vez.
Puede servir para comprender y clarificar las relaciones entre tres ó más variables,
particularmente, para descubrir las relaciones de carácter engañoso (cuando la
correlación entre A y B resulta de hecho de una correlación de A y C, siendo C la
variable determinante de B), para localizar las variables intermedias ó para hacer
aparecer relaciones que otras variables ocultan.91
88 J. GALTUNG, op. cit., 1970, pp. 240 et s.89 Ibid., pp. 274 et s.90 H. M. BLALOCK Jr, op. cit., 1960, pp. 287 et s. ; J. GALTUNG, op. cit., 1970, pp. 232-233 (coeficientes de correlación utilizados siguiendo los tipos de escalas nominal, ordinal y de intervalo).91 N. H. NIE et al., op. cit., 1970, pp. 158-161.
56
El análisis canónico permite medir la intensidad de las relaciones existentes
entre dos grupos de variables, por ejemplo , investigar las más altas entre las
variables dependientes e independientes.92
(FALTA PARRAFO DEL TEXTO ORIGINAL)
El análisis factorial se refiere al primer tipo de problemas y tiene por fin poner en
evidencia un número reducido de variables fundamentales independientes a partir
de datos relativos a un número mayor de variables interdependientes. Tal análisis
reduce un gran volumen de datos a algunos factores significativos, identifica
variables independientes a partir de un conjunto más amplio de variables unidas
entre sí. No se establece ninguna subdivisión a priori, ni entre las variables ni
entre las unidades (elementos).93
En cuanto al segundo tipo de problemas, la formación de clases, responden
métodos tales como el análisis de gráficos ("por graphes") ó el análisis por
comunalidades ("por grappes"), así como el análisis discriminante. En los dos
primeros casos, grupos de variables se discriminan sobre la misma base, esto
significa que la correlación entre las variables al interior de los grupos son más
altas, que las intercorrelaciones entre las variables de grupos diferentes. Mientras
que en el análisis "por graphes" se decide de antemano lo que constituyen
correlaciones fuertes ó débiles, en el análisis "por grappes" es la medida de las
correlaciones entre las variables al interior de un grupo y entre los grupos, lo que
determina la pertinencia ó la no pertinencia.94
El análisis discriminante tiene por función integrar, en uno u otro grupo,
unidades suplementarias, las cuales no se sabe a priori a cual pertenecen.
Mientras que la categorización tiende a distribuir grupos en función de datos
observados, la clasificación supone a priori la existencia de diferencias entre los
elementos de los grupos conocidos, así como entre éstos y los elementos por
clasificar.95
4. EL METODO HIPOTETICO DEDUCTIVO
"Una idea entre dos hechos: una hipótesis a partir de observaciones; de ésta y,
después, una deducción que retorna a la experiencia para controlar la hipótesis,
92 P. E. GREEN et D. S. TULL, op. cit., 1971, pp. 377-398.93 P. DAGNELIE, Introduction à l'analyse statistique à plusieurs variables, Biométrie-Praximétrie, 1966, nº I, pp. 43-66, p. 50.94 J. GALTUNG, op. cit., 1970, pp. 303-306.95 P. DAGNELIE, op. cit., 1966, p. 51.
57
Tal es el método hipotético-deductivo".96
La noción de método hipotético se aplica a ciertos rasgos fundamentales de las
categorías científicas:
"Una teoría es un sistema hipotético-deductivo constituido por un conjunto de
proposiciones, en las que los términos son rigurosamente definidos, sistema
elaborado a partir de una conceptualización de la realidad percibida y observada". 97
Por otra parte, el método hipotético-deductivo está íntimamente ligado,
históricamente, al método experimental, el cual no constituye para las ciencias
sociales sino un método de investigación demasiado limitado.
Este preámbulo justifica el lugar atribuido al método hipotético-deductivo:
1. En el conjunto de procesos discursivos, como método original que tiende a
penetrar en todos los sectores de la investigación;
2. como proceso adaptado particularmente al polo teórico;
3. caracterizando el derrotero experimental, el cual no agota de ninguna manera
los modos de investigación de que disponen las ciencias sociales;
4. indicando desde ya, el lugar de un polo morfológico por cuanto la concepción
hipotética deductiva desemboca en la idea de la coherencia lógica que se
desarrolla en axiomatización.
"Lo axiomático introduce la idea de un día rudo (una labor ardua .. N.T.) ... la
forma hipotética-deductiva tiende ahora hacia la totalidad de la ciencia". 98
Para G. Bénézé, este método es reductible a un "ciclo elemental", que representa
las exigencias del espíritu, abstracción hecha de las condiciones sensibles de la
experiencia.99
Sinembargo, la universalidad de este método oculta su carácter abstracto, de
demasiada generalidad: toma figura de lógica reconstruida, procedimiento cómodo
96 R. BLANCHE, La méthodé expérimentale et la philosophie de la physique, Paris, Armand Colin, 1966, p. 16.97 R. ARON, in A. BRIMO, Les méthodes des sciences sociales, Paris, Monthrestien, 1972, p. 303.98 R. BLANCHE, L'axiomatique, Paris, Presses Universitaires de France, 1970, pp. 105-107.99 G. BENEZE, La méthode expérimentale, Paris, Presses Universitaires de france, 1955, pp. 1-48.
58
de exposición del método.
"A decir verdad, una lógica reconstruida no logra suministrar una descripción
adecuada de aquello que es realmente alcanzado por los científicos... en la
reconstrucción "hipotético-deductiva" los sucesos más importantes del drama
científico se desarrollan en algún lugar detrás del escenario ... la reconstrucción
convencional presenta el desenlace, pero nosotros permanecemos ignorantes de
la intriga".100
Considerar el método hipotético-deductivo, como el único que da cuenta de la
investigación científica, es postular implícitamente que el progreso científico se
constituye por acumulación de resultados en una teoría que se iría ampliando por
adecuación rigurosa "de largos y variados troncos hipotéticos-deductivos".101 O,
como lo ha dicho muy bien Bachelard, el progreso científico se efectúa también
por saltos, por rupturas sucesivas que inauguran una reestructuración general de
la misma teoría, de lo cual no puede rendir cuentas únicamente el método
hipotético-deductivo.
HIPOTESIS- LEY UNIVERSAL
Inducción Derivación
amplificable ---------------------
POLO MORFOLOGICO
(axiomático).
----------------------
_____________
Hipótesis <—POLO TEORICO—> Previsión de un
caso
conjetura ______________ singular
|
_____________ |
Observación inicial <—POLO TECNICO—> Observación final
_____________
| |
100 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 10.101 M. SERRES, Hermès ou la communication, Paris, Les Editions de Minuit, 1968, p. 52.
59
------------------
Experimentación POLO Aplicaciones
Exploratoria EPISTEMOLOGICO Prácticas
(problemática)
-------------------
Repetición de un nuevo
ciclo con diferenciaciones
progresivas de la situación
empírica inicial.
El desarrollo hipotético-deductivo se desarrolla en la investigación en forma de
ciclo, siendo su proceso teórico-empírico irreversible. En forma esquemática, se
coloca en presencia de fenómenos una hipótesis que se presume los va a
reencontrar como consecuencias (nivel de hipótesis); se derivan, a continuación,
en forma lógica otras posibles consecuencias de esta hipótesis y se les confronta
con hechos disponibles (nivel de la deducción).
Hempel denomina simplemente "método de la hipótesis" a aquél que inventa
hipótesis para intentar aportar una respuesta al problema estudiado y las somete
luego a un control empírico. "Tal puesta a prueba consistirá, en primer lugar, en
ver si la hipótesis es corroborada por todos los resultados significativos que se han
podido reunir antes de su confirmación, una hipótesis para ser aceptable, deberá
ser conciliable con los datos (significativos) disponibles que han sido informados.
En segundo lugar, tal puesta a prueba consistirá en derivar de la hipótesis nuevas
implicaciones verificables y enexaminarlas a la luz de observaciones o
experimentaciones juiciosas". 102
Es importante indicar en este lugar la diferencia que existe con toda pretendida
"lógica inductiva". Un sistema "inductivo" no es más que una generalización
empírica de observaciones, generalización obtenida por inducción baconiana o
amplificante. Esta generalización desborda lo conocido, lo experimentado, para
afirmar que ésto será siempre así. Pero parece difícil "admitir, como se hace aún
frecuentemente, que el movimiento de inducción sea sólo aquél que universaliza,
sino también aquél que encuentra la adecuada fórmula empírica de la ley".103
102 C. G. HEMPEL, Eléments d'épistémologie, Paris, Armand Colin, 1972, p. 26.103 G. BENEZE, op. cit., 1955, p. 17.
60
Se trata entonces de clarificar104 la pareja inducción-deducción:
1. Se dice que una hipótesis es "sostenible" si es confirmada: se la denomina
proposición;
2. se dice que es "válida" si es deducible: se la denomina teorema;
3. un sistema de hipótesis sostenibles se denomina sistema inductivo;
4. un sistema de hipótesis válidas se denomina sistema deductivo;
5. un sistema inductivo-deductivo (hipotético-deductivo), o teoría científica es un
sistema en el que ciertas hipótesis válidas son sostenibles y en el que casi
ninguna es insostenible.
La naturaleza de la hipótesis en un sistema científico es de tipo conjetural: la
hipótesis-conjetura es un enunciado, el cual aún no se sabe si es verdadero o
falso, pero sobre el cual se sabe que el suceso (experiencia, observación) podrá
decidir. De esta forma el método invierte el sentido de la prueba, se justifica por
los efectos que permite explicar, depende de lo real.105
El método hipotético-deductivo realiza una demostración a posteriori, en la que
el efecto explica (prueba) la causa. Este método rechaza entonces una estrategia
"filosófica" de fundamento de las verdades en absoluto, para adoptar una
"estrategia de compromiso" (Gonseth), frente a la experiencia, a la realidad. No se
le pide entonces a las hipótesis que sean al mismo tiempo fundamentos, es decir,
que sean por ellas mismas verdaderas:
"Ellas no tendrían su certeza sino por las lejanas consecuencias que implicaron,
en la medida en que ellas concordaron con la experiencia: estas son certezas
experimentales, las que son para nosotros los garantes de su verdad".106
Spinoza ya había dicho que los hechos de experiencia se presentan a nosotros
como consecuencias a las cuales faltan las premisas. Se trata de ascender de
aquéllas a éstas por el análisis conjetural antes de descender por intermedio del
movimiento deductivo, a otras implicaciones posibles y a verificar sus
implicaciones.
104 J. GALTUNG, op. cit., 1967, p. 453.105 "Aquí los principios se verifican por las conclusiones de que ellos se derivan" (Huygens). "La experiencia produce en su mayor parte efectos muy ciertos, las causas de donde son deducidos no sirven tanto para probarlos como para explicarlos, todo lo contrario, son ellas las que son por ellos probadas". descartes. 106 R, BLANCHE, op. cit., 1969, p. 86.
61
Es precisamente el papel de lo axiomático explicitar, reducir y fundamentar el
sistema de estas premisas descubriendo las condiciones de posibilidad, bajo
formas de axiomas, del sistema de hipótesis que se desprende de la teoría. Ello
implica el paso a otra región de la metodología, a saber, la del polo morfológico, lo
que constituye un salto cualitativo. El progreso realizado por lo axiomático
consiste en una separación de lo intuitivo (momento hipotético) y lo lógico
(momento deductivo), en un desdoblamiento de estos dos momentos de la
investigación científica. El sistema axiomático constituye la forma más acabada
que puede alcanzar una teoría hipotético-deductiva.
Apoyarse únicamente en el método hipotético deductivo es descuidar el papel
de los polos epistemológicos y morfológicos en la objetivación de la problemática
científica; es dejar en la sombra los mediatos estructurales de un conocimiento
científico a la vez simbólico y objetivo, material y formal. Esta mediación será
explicitada en el cuadro estructural de lo axiomático, "que permite a los dominios
de las legalidades formales y de las legalidades empíricas construirse de una
manera recíproca según los mismos esquemas ...(de) conjugar más
estrechamente los polos de la racionalidad: el poder de lo formal y el de la
experiencia, las condiciones de la articulación de los enunciados y la del análisis
de los estados de cosas".107
107 N. MOULOUD, Les structures, la researche et le savoir, Paris, Payot, 1968, p. 15.
62
CAPITULO TERCERO
EL POLO TEORICO
En las ciencias sociales la teoría no es un lujo para el investigador: es más que
todo una necesidad. Afirmar lo contrario sería un error que debería rechazarse
bajo la pena de privarse del propio fundamento de toda ciencia.
"... Sin teoría no hay Ciencia .." (Bunge)
La teoría, modo de construcción del objeto de conocimiento científico es
inmanente a toda observación pertinente, pues es la condición de posibilidad
condición necesaria - pero no suficiente - de la ruptura con las explicaciones
precientíficas de lo social.
"Es la formulación de sistemas conceptuales dotados de una pertinencia teórica,
lo que está a la vista en el proceso científico (...). Pero ... la posibilidad teórica
reside en que nuevos medios de prueba son descubiertos, lo que vendría a poner
en cuestionamiento las observaciones actuales y conduciría, así, al rechazo de la
63
teoría que ellas validan".1
1. FUNCION DE LA TEORIA
El progreso de la investigación y el de la elaboración teórica no son solamente
paralelos, sino más bien disociables. Este proceso no consiste solamente en una
acumulación de "hechos" sino en un cambio cualitativo en la estructura de los
sistemas teóricos. Si se quiere llegar a conclusiones pertinentes que trasciendan
el sentido común, no puede permitirse dejar de lado el polo teórico, inherente a
toda investigación empírica válida.
" (...) La localización del interés (del investigador) sobre un hecho empírico será
canalizada por la estructura lógica de un sistema teórico. (...) La teoría no formula
solamente lo que debemos, sino que nos dice aquello que queremos saber, es
decir, nos dá las preguntas para las cuales buscamos respuestas".2
El progreso científico no va de los datos a la teoría, sino que parte de ciertas
informaciones, mediatizas por una problemática, para ir a una formulación
epistemológica de problemas y , de ahí, hacia un cuerpo de hipótesis que forma la
base de la teorización.
La teoría hipotética suscita y produce "evidencias" de hecho que controlarán a su
vez su validez. En última instancia, la razón de ser de las teorías científicas,
"... este es precisamente el papel que ellas juegan frente a los hechos: dan un
cuadro coherente de hechos conocidos, indican como están organizados y
estructurados, los explican, preveen y proveen de esta manera puntos de
referencia para la formación de nuevos hechos. Sin los hechos las teorías no
podrían construir sus objetos".3
La verdadera función de la teoría, concebida como parte integrante del proceso
metodológico, consiste en ser el instrumento más poderoso de la ruptura
epistemológica frente a las prenociones del sentido común, por el establecimiento
de un cuerpo de enunciados sistemático y autónomo de una lengua que tiene sus
reglas y su dinámica propia que le aseguran un carácter de fecundidad.
La teoría así concebida impregna todo el proceso concreto de la búsqueda, y
1 .C.G. HEMPEL, Fundamentals of Concept Formation in Empirical Research, Chicago, University Chicago press, 1952-A, p. 47.2 T. PARSONS, op. cit., 1968, p. 9.3 W. M. O'NEIL, Faits et théories, Paris, Armand Colin, 1972, p. 280
64
es inmanente a toda observación empírica; toda experimentación, en el sentido
más amplio de la confrontación con lo real, es una pregunta hacia el objeto real
sobre el cual la investigación va en función de la teoría que se construye por el
aprender.
"Las teorías son hilos como anzuelos para aprehender lo que nosotros llamamos
"el mundo" para racionalizarlo, explicarlo y dominarlo". 4
Cuando una teoría trabaja más en su auto-justificación (lo que es el papel de la
Epistemología) que en la preparación minuciosa de su confrontación con los
hechos experimentados, esta falsa teoría se vuelve ideología, es decir tentativa de
conservación y justificación de un "orden establecido" conceptual o material. No
especulación sino construcción de la práctica científica, la teoría debe implicar la
búsqueda empírica, la confrontación con lo real que ella se esfuerza por
aprehender. De esta manera la teoría se concibe en función de la investigación.
Se trata de marcar el lugar de una teoría integrada a la investigación y
denunciar toda visión dicotómica entre teoría e investigación.
A la práctica de la investigación empírica, objeto del polo técnico, concierne la
recopilación de las informaciones. En ciencias sociales esta práctica está a
menudo disociada del cuadro teórico indispensable que la pueda validar. Se
sacrifica entonces a un empirismo inocente.
El empirismo ingenuo o metódico es la principal fuente del desconocimiento del
polo teórico en ciencias sociales. Esta teoría coloca el "a priori" de datos
(experiencias, datos sensibles, datos brutos) en toda realización científica bajo el
pretexto de refutar al "a priori" de las hipótesis, lo que entraña una serie de
paradojas: en efecto, dentro de toda investigación científica para formular una
buena teoría no se puede ignorar las hipótesis, proposiciones y conceptos
apropiados, pero de otra parte, para encontrar los conceptos, proposiciones e
hipótesis apropiados, es necesario una buena teoría. En realidad esta paradoja no
puede ser superada sino dentro de un proceso histórico de aproximación que nos
condena a una objetividad transitoria, tributaria de la transformación de los
sistemas teóricos que deben ser formulados.
"suficientemente claro y de manera definida para convertir cada nuevo enunciado,
fácilmente reconocible por lo que él es: una modificación y por lo tanto una
4 K. POPPER, op. cit., 1972, p 59.
65
revisión del sistema".5
El reconocimiento de la función indispensable del polo teórico en el proceso
metodológico, conduce a rechazar el "datismo" (Bunge) que prolifera en las
ciencias sociales. La simple acumulación de datos no puede ser apertura para
una ciencia. Una tal acumulación no puede sino viciar toda teorización efectiva.
Por otra parte un proceso de teorización sistemático no tiene nada en común
con una "suma teórica", síntesis, "final", más o menos ecléctica de proposiciones
teóricas dispersas.
Esta concepción tradicional de la teoría está ligada al tema filosófico del
conocimiento universal de lo real, la "teoría" es entonces la suma de
conocimientos adquiridos dentro de un dominio y el progreso teórico es concebido
como una acumulación indefinida de datos; esta concepción concuerda
naturalmente con la investigación empirista ingenua que acumula "retazos de
conocimiento" dispersos en cuadros "teóricos" débilmente sistematizados.
Lógicamente la "teoría" es entonces el resultado de una generalización a partir
de hechos conocidos:
"... el proceso de descubrimiento del hecho es considerado como esencialmente
independiente del "cuerpo teórico" existente, como el resultado de algún impulso,
por ejemplo, la simple curiosidad" 6
La concepción tradicional de la teoría no tiene sino una utilidad didáctica de
representación "a posteriori" de los resultados de la investigación que enmascara
el movimiento efectivo del proceso teórico propiamente dicho. Confundir una cosa
con la otra es confundir la lógica del descubrimiento con la lógica de la exposición,
el orden de la invención con el orden de la demostración.
La práctica teórica debe ser consciente de ella misma, pero sin caer en la
obsesión de una pensamiento absoluto que caracteriza la concepción tradicional
de la ciencia. Esta obsesión en efecto, que puede manifestarse tanto a nivel de la
definición de los conceptos como en la aplicación de las técnicas, no hace sino
paralizar la investigación. Es necesario evitar el terrorismo de la teoría tanto como
la relación parasitaria con cuerpos teóricos estáticos ("congelados"), tanto el
bloqueo de la investigación como la erudición interesada.
5 Ibid., p 71.6 T. PARSONS, op., 1968, p. 6.
66
El "método" que legitima la teorización a posteriori es, para expresarlo
burdamente, aquel que se califica como "inductivo"" esto es, el método para
descubrir los principios generales a partir de los hechos particulares. Dentro de
una cierta tradición positivista, la función de la teoría es de representar a
posteriori tan rigurosamente y exhaustivamente como sea posible, un conjunto de
leyes, de hipótesis y de recetas experimentales.
O la verdadera acumulación supone rupturas:
"el desarrollo teórico supone la integración de datos nuevos, al precio de poner en
cuestionamiento crítico los fundamentos de la teoría que los nuevos datos ponen
a prueba (...) el refinamiento de la trama de desciframiento no se persigue jamás
al infinito sino que se acaba siempre en la sustitución pura y simple de una trama
por otra." 7
Como simple resumen de generalizaciones empíricas que juegan un papel
clasificatorio de "datos", la "teoría" se constituye entonces, a partir del proceso de
investigación del que la teoría está totalmente separada. El fenómeno de
retroacción por el cual la "teoría" alimentaría la investigación puede bien
suministrar un salpicón8 de hipótesis dispersas de donde los investigadores sacan
la inspiración, pero donde él (fenómeno de retroacción) no puede de ningún modo
autorizar las operaciones metódicas y rigurosas de la verificación sistemática.
Así la investigación puede con la mayor libertad y con la mayor facilidad
reproducirse ella misma sin producir nada según la lógica del "bombeo manual".9
En efecto la "teoría" así concebida no ejerce ningún control sobre resultados
dispersos que no tienen que justificarse delante de una instancia rigurosa y que se
refugian a menudo detrás de la "evidencia" de "hechos" esencialmente hipotéticos
o que se acumulan bien que mal sin ninguna esperanza de conciliación.
Otra doctrina más allá del empirismo exige una especificación de sentido:
"Los conceptos operacionales no son capaces por sí mismos de describir los
hechos. De estos hechos, ellos sólo toman ciertos aspectos, ciertos segmentos
que si se toman por el todo impiden que la descripción tenga carácter empírico y
7 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 53.8 Se ha preferido el término salpicón en lugar del término farrago menos conocido y que significa "conjunto de noticias prolijas e inconexas o conjunto de cosas superfluas y en desorden. (N. D. T.)9 Ibid., p. 25.
67
objetivo".10
Lo que el concepto operacional no rechaza, lo que el reduce es todo sentido
transitivo, toda significación que va más allá de la formulación posible de términos
operacionales. Lo que es eliminado es el concreto real que quedaría en el "vacío"
dentro del carácter universal del caso particular. La traducción metodológica de lo
universal dentro del concepto operacional es una reducción del pensamiento para
la práctica científica esta debe ser consciente de este carácter reductor y
parcelado y no tomar los conceptos operacionales por los conceptos plenamente
significativos.
Toda definición operacional u otra no puede ser mas que provisoria, transitoria
a defecto de ser transitiva ella favorece un acuerdo intersubjetivo sobre su
contenido y su posible extensión. "Nuestras definiciones operacionales" tienen la
ventaja de ayudarnos a transferir el problema a un campo donde nada o poco
depende de las palabras. hablar claramente es hablar de tal manera que las
palabras no tienen importancia".11
Una tercera concepción, la opuesta, rechaza toda especie de enraizamiento de
la teoría dentro de la realidad investigada. La teoría no es más que pura
convención, útil, cómoda, puesta arbitrariamente por los investigadores. Su
criterio de validez no es la prueba empírica, sino la sola coherencia lógica, su
verificabilidad es, pues circular. El "convencionalismo" es entonces compatible con
un "instrumentalismo" que reconoce la implicación de la teoría dentro de la
realidad investigativa, pero que rechaza la pretensión de una ciencia que se
referiría, en última instancia, a esa realidad en cuanto tal. Los criterios de validez
no pueden sino implicar exigencias utilitaristas, pragmatistas: la mejor teoría es
aquélla que aporta el mejor instrumento para manipular la realidad dada.
Esta posición conlleva una paradoja: en efecto; si una teoría funciona quiere
decir que en definitiva ella es pertinente a ciertas estructuras de lo real no
cognoscible sino como efecto de la aplicación de la teoría. La negativa de anclar
la teoría dentro de una realidad", la negativa de considerar la teorización no más
que como una ficción cómoda, olvida el hecho de que, en la teorización efectiva de
los investigadores, tanto en sus conceptos como en sus hipótesis, se manifiesta la
necesidad de evocar la realidad investigada, de realizar una función referencial. El
"realismo" teórico sería entonces una solución aceptable?. Su peligro reside en la
10 H. MARCUSE, op. cit., 1968, p. 143.11 K. POPPER, The Open Society and its Enemies, vol. 2, New york, Harper & Row, 1967, p. 296.
68
confusión posible, en el paso siempre tangente de una realismo "crítico" que se
vuelve a poner en cuestionamiento a un realismo "ingenuo" ó dogmático que recae
en una forma particular del "datismo".
La posición adoptada aquí se esfuerza en responder a las exigencias
epistemológicas particulares que encuentran las ciencias sociales en sus
investigaciones. Más allá de todo empirismo, convencionalismo, instrumentalismo.
criticismo, ó cualquiera otro "fundamentalismo", las ciencias sociales están
sujetas, visto el constante cambio y transformación de sus objetos, a una
teorización que no es la reproducción de una realidad, pero que no es tampoco
producción exnihilo de una "subrealidad", ni ideología, ni utopía, sino proceso
problemático y creador que se ubica y ubica sus objetos como proposiciones
probables. La teoría es práctica metodológica, lo que implica una formulación
estricta de los objetos de investigación lo mismo que su constante explicación en
el campo teórico.
Las ciencias sociales concebidas únicamente por la aplicación práctica directa
transcurren en un empirismo más o menos artesanal; los fenómenos se toman en
su sentido inmediato y se asiste a una investigación de un seudo objeto científico,
que no es mas que una versión esotérica de banalidades de sentido común.
"El hecho humano se toma en su apariencia inmediata como generalización del
evento vivido".12 Esta aprehensión inmediata conduce a la reproducción sabia
aunque ingenua de los mitos sociales más triviales.
De otro lado, las ciencias sociales concebidas en toda su "pureza" transitan en
el campo del objetivismo que tiende "naturalmente" a traicionar sus objetos
mediante el olvido orquestado del origen de sus problemáticas. Es necesario
ensayar a comprender esta especulación teórica como un "momento de la praxis"
y descubrir como ella se articula en otros procesos que constituyen nuestra
actividad ... el objeto humano no se descubre como objeto sino a quien acepte
visualizar un desorden a través del sentido mediato, el cual, recubre la unidad de
una significación a otro nivel: aquél del fenómeno estructurado por la ciencia.13
Las teorías prueban su validez en el contexto operatorio de una metodología
global, solamente en la práctica congruente con sus objetivos, y no
"sobre el campo de batalla, la oficina del consultor ó la plaza pública ... la doctrina,
según la cual, la práctica es la piedra de toque de la teoría, se asienta sobre una
12 G.-G. GRANGER, op. cit., 1960, p. 67.13 Ibid., pp. 18, 132.
69
incomprensión, tanto de la práctica como de la teoría: sobre una confusión entre
práctica y experimentación y sobre una confusión anexa entre la norma y la
teoría". 14
2. METODO Y TEORIZACION
La teorización debuta, pues, desde que comienza la investigación, y la ubicación
constante y explícita del nivel de teorización se vuelve primordial. La ubicación de
los objetos de la investigación ordena la pertinencia, la coherencia y la
verificabilidad de las teorías.
Es necesario recalcar que la investigación en ciencias sociales se encuentra
todavía en un estado relativamente embrionario en cuanto al desarrollo de sus
teorías científicas, las cuales están más bien en una estado de teorización parcial
que es uno de desarrollo deductivo avanzado.
Las grandes teorías generales entran, entonces, en competencia con las
teorías en las cuales el objeto se limita a algunos aspectos de una problemática.
Las teorías de "mediano alcance" no parecen ser la solución si ellas hacen fallar la
amplitud de las problemáticas descubiertas por las grandes teorías y si ellas
abandonan el rigor y el control permitido para las teorías parciales. Las "grandes
teorías" son marcos de referencia frente a los cuales toda teoría parcial debe
situarse constantemente. Por otra parte, una convergencia sobre los principios
epistemológicos fundamentales en ciencias sociales puede y debe ser despejada.
(P. Bourdieu et al. op. cit., 1968). De todas maneras, la ambición de una teoría
general como marco de referencia o como teoría autónoma es controvertida, el
espacio epistemológico de las ciencias sociales no puede ser de tipo "euclidiano" -
lo que autorizaría un objetivo teórico global y extensivo de tipo ("riemanniano") -
que acantonaría la razón teórica en objetivos estrechos y parciales. (G. -G.
Granger, op. cit., 1960).
Las pretensiones de la organización sintética del objeto se oponen a la
posibilidad concreta de investigaciones particulares, con todos los titubeos y
conciliaciones más o menos logradas entre los diferentes niveles que
necesariamente implican estas investigaciones. Una teoría de "objetos parciales"
se haría, pues, por el conjunto de las ciencias sociales.
La teoría, como polo interno del campo de la metodología de la investigación,
debe realizar el vínculo entre los contextos de la prueba y los del descubrimiento.
14 M. BUNGE, op. cit., 1967, p. 128.
70
El contexto de la prueba es aquél dentro del cual promovemos la pregunta para
saber si aceptamos o rechazamos las hipótesis y las teorías, "sin preocuparnos
de la manera como hemos descubierto y examinado estas hipótesis y éstas
teorías".15
El contexto del descubrimiento es aquél dentro del cual nos preguntamos cómo
encontramos, cómo construimos nuestras hipótesis y nuestras teorías. Es
evidente allí, un contexto que la reflexión metodológica no puede dejar de lado sin
condenarse a un formulismo poco compatible con la función heurística que toda
metodología consecuente debe promover.
Los dos contextos deben estar reunidos en el contexto más globalizador de
una metodología general, si no "se renuncia a dar alguna ayuda al trabajo del
descubrimiento y no se reduce como tantos metodólogos a invocar y evocar como
se evocan los espíritus y los milagros de la iluminación creadora, que conduce a la
hagiografía del descubrimiento científico o a los misterios de la Psicología de las
profundidades".16
Igualmente es claro que éstos dos contextos introducen una distinción cuya
pertinencia misma es relativa. Así, se ha enfatizado que las teorías son más
frecuentemente escogidas o rechazadas por razones extrañas a toda lógica de la
prueba; el carácter apremiante de paradigmas, de hábitos metodológicos, juega en
definitiva el papel principal en la selección. "No hay algoritmo neutro para la
escogencia de una teoría. La persuasión es el modo de difusión de las teorías".17
Así mismo, la escogencia de los datos que servirán para probar empíricamente
las teorías está subordinada a la apreciación intersubjetiva de los investigadores,
por consiguiente, a su comprensión de los datos. La parte de la explicación
preteórica es determinante.
Hace falta también distinguir el papel respectivo de las grandes hipótesis de
investigación, que son la formulación no sistematizada de problemáticas, y de
hipótesis de trabajo, que son ya modalidades particulares más rigurosas de
soluciones teóricas llevadas conjeturalmente a éstas problemáticas.
Los fines de la teorización son diversos: ya se trate de explicación de hechos,
de predicción, de derivación de consecuencias verificables de un cuerpo de
hipótesis, de modelización para surtir un cuadro heurístico en la investigación.
Por otra parte, la teoría puede ser aprehendida como actividad o como
producto terminado, es necesario pues, antes de describir la dinámica de la
15 R. RUDNER, op. cit., 1966, p. 6.16 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 25.17 T. S. KUHN, op. cit., 1972, p. 234.
71
teorización, analizar sus condiciones y sus materiales.
3. FORMULACION TEORICA Y EXPLICACION CONCEPTUAL
Toda teoría es un artefacto para los investigadores, que pertenece al orden de lo
simbólico. La teoría está formulada en lenguaje simbólico, podría decirse, en un
lenguaje "artificial" construido por las necesidades de la causa y, en ésta medida,
tolera conceptos de tipo "semántico", refiriéndose a aspectos de fenómenos y
conceptos de tipo "sintáctico", donde el papel de los operadores es la articulación
de otros conceptos.
Los niveles operadores y sintácticos son dos aspectos no disociables de los
sistemas teóricos que toman la forma de sistemas proposicionales, de cuerpos
sistemáticos de hipótesis.
El sistema teórico se formula en términos de proposiciones: la proposición
sintética es la forma lógica que toma la hipótesis para someterse al examen
empírico, ella está "provista de sentido", refutable en cuanto se refiere a la
"realidad". (Popper).
La proposición analítica, en cuanto ella, se reduce a una simple tautología que
puede ser anulada o confirmada; tiene una función puramente operatoria de
ligazón entre proposiciones sintéticas, por ejemplo.
"Una proposición expresa la unidad más pequeña del sentido que se puede
considerar como cerrada sobre ella misma: puede ser afectada por los predicados
semánticos que se designan comúnmente con los términos "verdadero" y "falso".18
Dos aspectos fundamentales se desprenden, pues, de la teoría: el aspecto
conceptual que es el aspecto de explicitación del sentido, y el aspecto
proposicional que es el aspecto de la formulación lógica.
La formulación obedece a un principio de reducción que permite la
manipulación de un objeto teórico claramente delimitado y "formulable"; la
explicitación obedece a un principio de comprensión que viene a dar a la hipótesis
de investigación su más grande pertinencia. exigencias complementarias y
siempre dialécticamente presentes en toda teorización.
La formulación es el aspecto propiamente sintáctico que toman los sistemas
teóricos como articulaciones de proposiciones, según las reglas de derivación
lógica: la formulación es el pre-requisito de la verificabilidad de la teoría.
La explicitación es en cambio el aspecto significativo de sistemas teóricos en
18 J. LADRIERE, in L. APOSTEL et al., op. cit., 1973, pp. 108-109.
72
cuanto conllevan los conceptos en los cuales la comprensión debe ser
intersubjetivamente "evidente", ésta comprensión es posible por referencia al
contexto semántico de la teoría. La explicitación conceptual manifiesta la
dependencia de toda teoría frente a su problemática.
Esta distinción analítica mostrará la articulación interna de los elementos del
polo teórico y la dependencia de éste frente a los otros polos: epistemológico,
morfológico y técnico, dentro de su aspecto dinámico.
Como marco de formulación, la teoría mantiene un sistema de proposiciones y
obedece al criterio de coherencia formal que exige una concatenación, una ligazón
de todas las preposiciones de la teoría, en un cuerpo articulado y no
contradictorio, el sistemas teórico tiene una naturaleza hipotético-deductiva
coordinada.
Lo que hace la fuerza demostrativa y operativa de las teorías es su carácter
sistemático, este carácter es la mejor garantía de la eficiencia y de la
comprensión científica de lo real. En efecto, "negarse a la construcción consciente
de un sistema de proposiciones para criticar y probar, es condenarse a las
construcciones subjetivas, fantásticas y arbitrarias colocadas en el común de las
nociones construídas o articuladas.19
La teoría crea un cuerpo de hipótesis metódicamente construido a la luz de la
prueba experimental, es decir, a la luz de la confrontación con la realidad de las
informaciones recogidas. La sistematicidad de la elaboración teórica encuentra su
expresión en el polo morfológico de la investigación.
Por qué insistir en el carácter sistemático de la teoría?. Porque solamente la
resistencia explícita de un cuerpo sistemático de hipótesis definidas tanto por la
coherencia de lo que él establece, como por la coherencia de lo que él excluye;
puede "dar a la experimentación su pleno poder de desmentir, presentándole un
cuerpo de hipótesis tan sistemático, que se expone enteramente en cada una de
ellas.".20
Refutar la construcción teórica es condenarse a manejar "pruebas" parcelarias
sin relación entre ellas: ahora que, "un juicio verdadero aislado no tiene fuerza de
exigencia para la ciencia ... es necesario un cuerpo de juicios verdaderos (un
sistema) para que haya verdad y ciencia".21 La teoría debe ser un sistema
integrado de proposiciones con relaciones lógicas entre ellas, "en el sentido de
que un cambio sustancial, cualquiera que sea, en el enunciado de una proposición
19 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p 211.20 Ibid., p. 95.21 A. VIRIEUX-REYMOND, op. cit., 1972, p. 106.
73
importante del sistema, tiene consecuencias lógicas para el enunciado de las otras
(..). La importancia científica de una cambio en el conocimiento del hecho
consiste precisamente en las consecuencias que dicho cambio tiene para el
sistema teórico".22
Toda teoría, en tanto que sistema, tiende al cierre lógico de sus sistemas de
proposiciones, por la especificación analítica, ciertamente "axiomática", de
aquellas. La teoría será cerrada por la determinación unívoca de interpretaciones
concretas de elementos del sistema, si "la adjunción a los axiomas de una
proposición no demostrable (ni refutable) vuelve el sistema contradictorio.23
Pero este cierre no es esterilizante si se respeta la apertura dialéctica de los
conceptos de la teoría, el sistema de la teoría se caracteriza en efecto por una
"apertura del sentido" (Hempel).
El sentido sistemático es siempre abierto, pues el conjunto de proposiciones
que forma una teoría no es jamás completo. El valor de una teoría no descansa
solamente en las explicaciones que suministra y a partir de las cuales ha sido
construída, sino también, por sus consecuencias inesperadas.24
La proposición universal permite sintetizar un gran numero de leyes hipotéticas
particulares, es el corazón mismo de la teoría pues permite y suscita,
observaciones más complejas que simples, constataciones empíricas; por ella el
campo de investigación se extiende considerablemente. La proposición universal
formula hipotéticamente, bajo forma condicional, las situaciones posibles y
permite, pues, su previsión efectiva.
Como marco de explicitación la teoría manifiesta su consistencia semántica.
Sus conceptos fundamentales deben ser homogéneos, pertenecer a familias
semánticas equivalentes, deben estar articulados y relacionados entre sí,
distribuídos en la redecilla compleja de proposiciones. El cierre semántico, si se ve
como efectivo y total no es más que un mito (Kaplan), debe significar simplemente
la interdicción de la introducción ex post de postulados adhoc que contienen
propiedades, nuevos predicados, lo que contravendría el principio de
verificabilidad (testabilidad) de las teorías. Este cierre semántico, no significa,
pues, la detención de la explicitación conceptual, sino que esta debe efectuarse en
el curso de la investigación para preparar el examen de la hipótesis, no para
justificar a posteriori los resultados efectivos.
Las proposiciones de los sistemas teóricos contienen, ellas mismas, conceptos
22 T. PARSONS, op. cit., 1968, p. 7.23 G-G. GRANGER,op. cit., 1960, p. 163.24 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 65.
74
y suministran la forma lógica de su puesta en conexión, ... "las proposiciones del
sistema (teórico) implican referencias empíricas a los fenómenos reales, dentro del
marco de un esquema conceptual, sobre un todo observado correctamente".25
Muchos tipos de conceptos pueden distinguirse según su papel teórico. Se
puede abordar la división de los conceptos en dos clases: los conceptos
particulares y los conceptos universales:
- Los conceptos particulares recurren a los nombres propios, son conceptos "para
la definición, para los cuales los nombres propios son indispensables. Si toda
referencia a los nombres propios puede eliminarse completamente, entonces el
concepto es universal";26
- Los conceptos universales son directamente explicitados de manera general.
Engloban todos los casos particulares posibles;
-Los conceptos genéricos son primordialmente medios, generalizaciones
empíricas, clases definidas de sucesos singulares. Permiten categorizar de una
manera abstracta, los datos.
- Los conceptos analíticos se refieren a una abstracción del tipo de propiedad
general; no tienen referentes empíricos. No se pueden observar más que valores
particulares dentro de casos singulares. Tienen el carácter de universales
(Ejemplo. el "equilibrio");
- Los conceptos puros no son totalmente reducibles a casos singulares; son
ficciones idealizantes que trascienden los casos particulares. El tipo ideal, como
término de una proposición teórica, es un concepto puro (Ejemplo. la "burocracia");
- Las variables no existen en sí mismas, sino solamente en relación con un
conjunto de elementos que tienen un modo de relaciones uniformes (expresadas
cuantitativamente) entre ellos. Es por ésto que el cambio afecta el fenómeno.
La explicitación conceptual manifiesta de alguna manera la unidad material de la
teoría, permitiéndole operaciones referenciales sobre sus objetos de investigación.
La formulación proposicional confiere a la teoría su unidad formal, lógica,
permitiéndole operaciones sintácticas al interior de sus objetos de análisis.
Estos dos tipos de coherencia no tienen, sinembargo, funciones separadas de
manera dicotómica: de una parte ciertos conceptos "analíticos" desempeñan
funciones no referenciales y, de otra parte, la forma proposicional que permite
recibir el rechazo ó la confirmación de hechos es sólo garantía de la materialidad,
25 T. PARSONS, op. cit., 1968, p. 16.26 K. POPPER, op. cit., 1972, p. 66.
75
la verificabilidad de la teoría.
La dinámica de la teoría, como práctica metodológica, puede describirse como
el resultado de la interacción de los polos de la investigación.
La teoría se presenta, así, de tres maneras complementarias, conforme a lo
que ella considera a partir de cada uno de los tres polos metodológicos. Frente al
polo epistemológico, la teoría es un conjunto signifiativo pertinente a una
problemática, la cual presenta una solución válida. Frente al polo morfológico, la
teoría es un conjunto d proposiciones coherentes que suministran un cuadro
explicativo y comprehensivo. Frente al polo técnico, la teoría es un conjunto de
hipótesis falsables, verificables.
El polo teórico es un lugar de confluencia de los otros polos metodológicos: el
epistemológico con su exigencia de pertinencia, el morfológico con su exigencia
de coherencia, el técnico con su exigencia de verificabilidad. Estas tres exigencias
condicionan el valor de las teorías, "validez y verdad" (la validez concierne al
dominio formal, la verdad al dominio material ó "fáctico"). Una teoría válida será,
pues, idealmente falsable a la vez que, coherente y pertinente.
No hay que perder de vista la inseción particular de la teoría en la investigación
global.
"Los problemas son expuestos y los datos recogidos a la luz de teorías y con la
esperanza de concebir nuevas hipótesis que puedan a su turno ser desarrolladas
o sintetizadas dentro de las teorías; las observaciones, las medidas y los
experimentos se ejecutan no solamente para recoger información y formular
hipótesis, sino también para examinar las teorías y encontrar su dominio de
verdad ...".27
POLO TEORICO
FORMULACION EXPLICITACION
-orden lógico -orden significativo
-sistema de proposiciones - conjunto de conceptos
- lenguajes simbólicos - lenguajes naturales
POLO EPISTEMOLOGICO
(Exigencia
de pertinencia)
27 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 380.
76
- analítica de las soluciones -hermenéutica de los problemas
- exigencia de reducción - exigencia de interpretación
- procesos: -hipotético-deductivo
- cuantitativos procesos: - dialécticos
- fenomenología
POLO MORFOLOGICO
- sistema concatenado - totalidad sobredeterminada
- explicación causal - comprehensión significativa
- modelos formales - conceptos en vía de
axiomatización
POLO TECNICO
(Exigencia
de verificabilidad)
- especificación horizontal y analítica - especificación vertical y
contextual
- hipótesis a examinar - hipótesis de investigación
- cierre de sentido
(sentido denotativo?) - apertura de sentido
(sentido connotativo?)
A) La teoría como conjunto significativo pertinente (aspecto epistemológico).
Todo sistema teórico debe ser en última instancia, pertinente a una problemática:
es decir, debe ser significativo, referirse efectivamente a una "realidad" que trata
de interpretar.
En efecto, se puede construir una infinidad de sistemas teóricos y de modelos,
pero todos no son "pertinentes", algunos pueden ser absurdos aunque de una
perfecta coherencia lógica. (N. Campbell).
Esta exigencia sitúa de golpe a la teoría en el contexto del descubrimiento más
que en el de la prueba. La explicación teórica de las hipótesis de investigación
toma la forma de una hermenéutica de los problemas. Se trata, en efecto, del
77
acrisolamiento preteórico (de la máxima y más "pura" prueba) para suministrar una
interpretación que sea lo más comprehensiva posible. Esta exigencia de
comprehensión es sobretodo asumida por el proceso de conceptualización
subyacente a la teoría. El análisis conceptual tendrá por tarea definir y clarificar
los términos claves que aparecerán en la teoría; por tanto, sin perder de vista que
"un juego de conceptos no constituye una teoría".28 Estos pueden figurar en una
teoría, que se definirá esencialmente por las ligazones formales, religando estos
conceptos entre sí, en proposiciones, ellas mismas articuladas en el sistema.
Este sistema permite colocar en forma analítica las soluciones teóricas, pero
éstas no son más que casos particulares de los problemas de los cuales han
surgido y de cuyos procesos epistemológicos, dialéctico y fenomenológico en
particular, se deben investigar los "méandres". La hermenéutica de la
problemática es indispensable a la pertinencia del análisis de las soluciones
teóricamente formuladas.
Esta explicitación de los problemas es indispensable en las ciencias sociales,
donde la complejidad de los objetos del conocimiento no permite una reducción
muy rápida y muy estrecha a cualquier sistema explicativo.
La exigencia de reducción no es posible sin una exigencia previa de
comprehensión(FALTA PARTE DEL ORIGINAL).
Los problemas operan una selección a nivel de las informaciones consideradas
como "importantes" por los investigadores, pero los hechos no se establecen más
que a nivel de la formulación de las soluciones, donde la lógica de la prueba
retoma sus derechos. Los hechos presentan un aspecto "empírico", positivo, al
interior de un sistema explicativo; dentro de la totalidad de la problemática, las
informaciones presentan, por el contrario, un carácter concreto pero diferencial,
contradictorio. Una crítica constante de las informaciones se impone entonces
paralelamente a una lógica positiva de los hechos, donde los procesos hipotético-
deductivo y cuantitativo pueden jugar un papel esencial en la formulación de las
soluciones teóricas.
"Un conjunto de hipótesis científicas es una teoría científica, sí y solamente sí se
refiere a un tema fáctico dado y si cada elemento del conjunto lo ------ sea un
postulado inicial (axioma, hipótesis auxiliar, dato), sea una consecuencia lógica de
uno ó muchos postulados iniciales". 29
28 R. K. MERTON, op. cit., 1968, p. 32.29 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p.381.
78
Este tema, esta problemática generadora, está sometida a una reducción
objetivación que suscita los modelos (implícitos ó explícitos) simbólicos y las
aproximaciones a lo "real" que se visualiza. El imperativo de reducción tiene por
consecuencia privilegiar solamente ciertos aspectos de los fenómenos y llega
hasta a desarticularlos.
La objetivación no está inmunizada contra el cuestionamiento, sino que debe,
por el contrario, ir más allá de las ocasiones de verificación.
Así toda teoría elabora más o menos explícitamente "modelos" de se referente.
Para hacerlo, coloca a la vez los axiomas, hipótesis-postulados no refutables, pero
puestos allí en razón de fecundas implicaciones verificables, e hipótesis auxiliares
para hacer corresponder sus axiomas a los datos recogidos dentro de contextos
empíricos particulares.
Las hipótesis auxiliares cuya forma canónica se expresaría como todas," de
todas maneras", no deben multiplicarse sin control y de manera ad hoc, después
de la puesta a prueba de la hipótesis derivada de los postulados. su papel de
facilitadoras en la recolección de datos no debe degenerar en práctica auto-
justificadora de la teoría.
La pertinencia de los modelos que utiliza la teoría es dependiente de la
pertinencia del nivel de teorización.
Si el objeto de la teoría es muy vasto, es caso para las "teorías generales", el
campo empírico estará muy alejado, y las reglas de correspondencia entre los dos
muy laxas.
Si el objetivo de la teoría es muy restringido, demasiado reducido, la
investigación empírica se hace posible, pero la significación de la teoría frente a la
problemática de las ciencias sociales, será muy débil. La exigencia de pertinencia
no será respetada.
El proceso de "modelización" es factible en términos de conceptualización. Así
la abstracción conceptual es el instrumento privilegiado de la toma científica de lo
real, pero los conceptos abstractos no deben verse como el fin en sí mismo del
desarrollo de las ciencias sociales. Estos deben también esforzarse en encontrar
la particular, lo individual. El proceso de conceptualización debe llegar a una
concretización. Lo concreto es la síntesis particular de numerosas
determinaciones, que deben aparecer como resultado del desarrollo habiendo
hecho previamente el retorno necesario para la abstracción.
".. el método de elevarse de lo abstracto a lo concreto no es para el pensamiento
79
sino la manera de apropiarse de lo concreto, de reproducirlo en tanto que pensado
concreto".30
Pero la necesidad de abstraer se mantiene indispensable a toda ciencia.
Mantenerse en la pseudo-concreción de los objetos "reales" y querer reproducirlos
inmediatamente bajo la forma de conceptos, es condenarse a mantenerse a nivel
de las apariencias. El proceso de producción de los conceptos, según Bachelard,
es una transacción continua entre un polo abstracto y un polo concreto., la ciencia
es un proceso histórico de concretización de lo abstracto, de materialización de lo
conceptual, pero aquello no debe hacer perder de vista que "los conceptos
constituyen las definiciones (o las prescripciones) de lo que debe ser observado;
es decir las variables entre las cuales se deben buscar las relaciones. Cuando las
proposiciones se hayan lógicamente entrelazadas, solamente entonces, se ha
establecido una teoría".31
La exigencia de formulación no puede entonces realizarse sino solamente bajo
la forma de proposiciones analíticas y sintéticas, universales y particulares. Pero
esto no es posible sin recurrir a una explicación a una explicitación conceptual
subyacente, que es la obra dentro de la problemática inaugurante del avance de
los investigadores.
El proceso de conceptualización puede ser mirado como coadyuvante de la
teoría: la razón de ser de la conceptualización es la constitución de un sistema de
términos significativos al cual la investigación puede referirse de manera rigurosa y
no equívoca.
El concepto científico no debe verse como una esencia fija: no puede él,
conservar su estatus científico sino "al precio de un esfuerzo constante de análisis
y de estructuración de hechos ... (los conceptos) son operadores estratégicos ...
concebidos en el contexto de una práctica que los pone a prueba y exige
incesantemente revisión. (...) EL concepto es la sistematización de actos
operatorios que tienen correlativamente una estructura explícita, y también por
cualidad, la coherencia ... el concepto designa ... un modo de la experiencia pero
descentrada, organizada, y abierta a una jerarquía posible de evidencias".32
B) La teoría como un conjunto explicativo coherente (aspecto morfológico).
30 K. MARX, Introduction générale à la critique de l'économie politique, in Euvres, t. I, Paris, Gallimard, 1965, p. 255.31 R. K. MERTON, op. cit., 1968, p. 33.32 G- G. GRANGER, op. cit., 1960, pp. 68, 143.
80
La coherencia del sistema teórico permite garantizar una explicación más
fragmentada de los hechos cuyas hipótesis tienen en cuenta. La explicación es
indisociable de una configuración donde la teoría encuentra un espacio de
causación.
Desde el punto de vista de la formulación, la estrategia morfológica puede
consistir en una formalización o en una axiomatización de la teoría:
- La formalización es la operación que reduce el lenguaje de una teoría a reglas
de construcción y de expresiones simbólicas primitivas unívocas;
- axiomatizar es "proponer principios de tal manera que constituyan una base
coherente y suficiente de deducción para todas las proposiciones de una teoría".33
Para construir modelos axiomatizados es necesario, sinembargo, recurrir muy a
menudo a formulaciones parciales. Se tratará entonces de llenar por lo menos dos
condiciones34 :
a) Seleccionar las definiciones bien formuladas (operatorias) y denominarlas
axiomas; b) Formular un conjunto de reglas sintácticas, de reglas de
transformación que permitan establecer de alguna forma teoremas, por medio de
axiomas de base.
Es necesario que se pueda construir una axiomática puramente formal, es decir,
sin ninguna referencia empírica, que es lo que se denomina un calculo. Los
símbolos empleados podrán tener significaciones concretas y aplicarse a
problemas concretos, sólo si son interpretados por una teoría y solamente así.
La axiomatización, en el plano de la explicitación permite la derivación de
nuevos teoremas y autorizan su especificación empírica, ella permite igualmente la
modificación eventual de ciertos enunciados de base cuyo carácter fructífero será
reconsiderado por las pocas implicaciones verificables que podrían sacarse de
ella. Así una axiomática es "el espacio proyectivo en el cual la estructura global
define los objetos que están en ese espacio y determinan sus propiedades".35
El movimiento axiomático manifiesta la autonomía de lo morfológico en el
proceso de la investigación, las estructura-modelo de las ciencias formales son un
33 Ibid., p. 160.34 R. RUDNER, op. cit., 1966, pp. 14-18.35 G.-G. GRANGER, op. cit., 1968, p. 70.
81
ejemplo. Los axiomas deberán ser lógicamente coherentes y semánticamente
congruentes, para dar la base deductivo-explicativa de las hipótesis examinables y
de los hechos que de ella se coligen.
"Hay solidaridad entre la fachada estructural de una ciencia y la posibilidad de
utilizar los procedimientos constructores de una axiomática ... la forma deductiva
en una ciencia axiomática-estructural hace algo más que asegurar "la
concordancia del enunciado consigo mismo" ... ella contribuye a asegurar la
"concordancia del objeto con él mismo", tan implicados están unos
procedimientos con los otros, que determinan el objeto y los procedimientos que
establecen el lenguaje, o sea, el sistema simbólico del que habla racionalmente
ese objeto".36
A un nivel poco desarrollado de teorización, la axiomatización puede verse según
la perspectiva de la explicación morfológica como un proceso de aproximación que
trata de desmembrar constantes conceptuales.
Para Granger,
"el concepto científico ... no puede ser finalmente definido sino por movimiento
axiomático. (...) Toda noción utilizada eficazmente por la ciencia es una noción en
vía de axiomatización ó un concepto axiomatizado". 37
La axiomatización no es más que la resultante formal del movimiento de
conceptualización que va de la imagen concreta al concepto abstracto y de la
intuición a la aprehensión intelectual de los objetos.
Pero la axiomatización sobrepasa la conceptualización de la misma manera
que la teoría sobrepasa la definición; lo que ella agrega son las conexiones entre
los conceptos, son las proposiciones las que mantienen los conceptos en relación,
en movimiento. El resultado de ésto es la formalización de las teorías, éstas son
entonces conjuntos calculables, dotados de una autonomía en la cual la
coherencia garantiza la validez.
Una teoría se formaliza cuando los elementos que la caracterizan pueden ser
descritos por medio de reglas estrictas y suficientes para especificar su propia
naturaleza. Hay dos maneras de formalizar una teoría: el método extrínseco y el
36 N. MOULOUD, op. cit., 1968, pp. 11-13.37 G.-G. GRANGER, op. cit., 1960, p. 179.
82
método intrínseco.38
El método extrínseco describe la clase de proposiciones que forman la teoría
siguiendo paso a paso el proceso de construcción de esas proposiciones. Es de
hecho la descripción de un dominio de hechos estructurados, es decir, afectado
por una trama de relaciones definidas.
El método intrínseco aisla en el seno de la teoría una clase particular de
proposiciones llamadas axiomas que se pueden enumerar efectivamente y que
ofrece las reglas por medio de las cuales se pueden obtener todas las
proposiciones de la teoría.
Se obtiene entonces un modelo que se denomina "sistema formal" el cual autoriza
un proceso de investigación puramente operacional. El curso de una investigación
operacional es un proceso puramente interno (Hempel) de la teoría que permite
manipular los objetos teóricos, "desprovistos" (Bénézé) de todo contenido
empírico, y poner en marcha todas las posibilidades de la lógica y de los
procedimientos analíticos. El pensamiento deductivo no puede partir sino de
reducciones y simplificaciones, lo que exige opciones precisas entre las hipótesis;
el conjunto de esas opciones debe tomar el estatus de "canon" frente a los
fenómenos cuya aparición debe poder reglamentar.
La coherencia morfológica de la teoría permite desarrollar sus procedimientos
explicativos: los hechos se unen por medio de hipótesis-leyes a un nivel de
generalización empírica; éstos se toman como hipótesis postulados (axiomas) de
un nivel de abstracción superior; el cuerpo axiomático puede a veces recibir un
"modelo formal" que permite reglamentar sus mecanismos operacionales
deductivos. Dentro de los eslabones proposicionales se sitúan los conceptos; bajo
el sistema hipotético-deductivo, la totalidad comprehensiva. Esta no está
concatenada a la manera de una cadena verificadora de proposiciones sino más
bien, sobredeterminada a la manera de un conjunto diferencial de conceptos y de
enunciados preteóricos..
La causación no es allí un modo de derivación lógica sino de
sobredeterminación dialéctica. Esta sobredeterminación que caracteriza la
problemática es el conjunto de un juego complejo de diferencias, de oposiciones,
de contradicciones que son los motores de las posibles soluciones que se
desprenderán de esas problemáticas.
La concatenación es del dominio de la formulación sistemática y rigurosa, la
38 J. LADRIERE, Le théorème de Löwenheim-Skolem, Cahier pour l'analyse, nº 10, hiver 1969, pp. 108-130, B, pp. 109,110.
83
sobredeterminación es del dominio de la explicitación dialéctica que contiene la
apariencia implícita de todo concepto teórico.
C. La teoría como conjunto hipotético verificable (aspecto técnico)
El sistema teórico es hipotético: algunos de sus elementos son hipótesis, es decir,
enunciados conjeturales que pueden ser siempre refutados por los hechos, así,
toda teoría científica debe permitir ser refutada en su totalidad por los hechos que
investiga. La verificación, el examen empírico de las teorías, es una exigencia
primordial.
Las hipótesis universales (teóricas) sólo pueden ser verificadas por refutación
(infirmation) ("todos los burócratas son revolucionarios" ó "existe un burócrata de
avanzada"). Las hipótesis particulares (empíricas) no pueden ser verificadas más
que por confirmación ("existe un burócrata de avanzada" ó "he ahí un burócrata de
avanzada"). En cuanto universales, la naturaleza de las hipótesis teóricas es tal
que las teorías no pueden jamás confirmarse, sino falsearse, como lo ha mostrado
K. Popper.
A nivel de la formulación lógica, la prueba óptima de la validez de las teorías
sólo puede ser obtenida deductivamente. Sinembargo, las teorías confirmadas en
espera de su "falsación" no tienen por ello, menos estatus científico (M. Bunge, op.
cit., 1967).
Las teorías científicas no consisten en sumarios de observaciones, sino en
invenciones, es decir, conjeturas. Así la base de la ciencia es el "universal
hipotético" y no la observación de casos particulares. Se litiga lo general para
saber lo singular.
El examen deductivo de las teorías puede seguir cuatro caminos39:
1. Comparación lógica de las conclusiones deducidas de las hipótesis (examen
que consistencia interna).
2. Investigación de la forma lógica de la teoría.
3. Comparación con otras teorías: respetando entre ellas el "principio de
correspondencia" (N. Böhr), según el cual toda teoría nueva debe rendir cuentas
de las viejas en la forma de aproximaciones, son ellas "analógicas" con las teorías
anteriores y con nuestros otros sistemas de conocimiento ó con el lenguaje
común. (N. Campbel)?.
39 K. POPPER, op. cit., 1972, pp. 32-33.
84
4. Examen indirecto de la teoría por aplicación empírica de las conclusiones que
pueden obtenerse: experimentos científicos y/o aplicaciones tecnológicas.
Si se examina el caso del examen empírico de las teorías, es necesario insistir en
las dificultades de este procedimiento para las ciencias sociales, derivado ello,
netamente de la naturaleza de los hechos que ellas reúnen (véase polo técnico).
No obstante, la investigación que mediatiza su problemática mediante la
construcción de un sistema teórico, no puede en última instancia sustraerse de "la
tiranía de la observación final".40
La existencia de su objeto no puede establecerse en definitiva, sino a favor de
experiencias sensibles, guiadas por la razón. De otro modo, no "importa quién
pueda sostener, no importa qué a condición de que tome la precaución de no
adelantar tesis que escapen a toda posibilidad de verificación empírica".41 Cuando
se ponen a prueba las hipótesis particulares, es la teoría entera la que está
implicada; es necesario examinar una hipótesis de trabajo "después de que ella ha
sido propuesta a partir de hechos diferentes de aquéllos que han precedido su
formulación".42
Los hechos establecidos (evidencias provisionales) sirven de contenido a las
hipótesis de las cuales las implicaciones examinables conllevan el descubrimiento
de otros hechos que confirman o invalidan las hipótesis de partida.
Tal es el esquema lógico visto bajo el ángulo de la formulación teórica, pero
éste no debe hacer olvidar que las hipótesis a examinar suponen hipótesis
implícitas de investigación que son los problemas de los cuales las hipótesis
operacionales examinables, no son más que soluciones particulares. ¿Qué es
necesario entender por "operacional?". Simplemente, la posibilidad de decidir,
para una hipótesis, su veracidad ó su falsedad. En realidad, esta posibilidad
propicia el tipo de problemas como podría ilustrarlo el caso de la historia del
"positivismo lógico"43 . Los enunciados verificables deben contener términos a los
que que la comunidad de investigadores pueda asignar, sin ambigüedades,
referentes empíricos.
"La apertura de sentido (openness of meaning) es fundamentalmente una
consecuencia del hecho de que no haya contextos terminales en la investigación.
40 G. BENEZE, op. cit., 1955, p. 99.41 L. VAX, op. cit., 1970, p. 38.42 W. M. O'NEIL, op. cit., 1972, p 177.43 L. KOLAKOWSKI, Positivist Philosophy, London, Penguin, 1972.
85
Nuevos problemas surgen a diario, nos confrontan con nuevas e imprevistas
preguntas, con una significación y con una verdad. La penumbra de la vaguedad
no es "sentido superfluo", científicamente desdeñable (expendable). Porque las
significaciones son abiertas, nuestras conceptualizaciones pueden apuntar a
asegurar una mejor captación de la realidad".44
Se llamará entonces operacional a la exigencia de dar un contenido descriptivo,
una interpretación empírica a proposiciones y conceptos dentro de un cuadro
teórico que contiene términos "sintéticos", llamados también pre-teóricos o
comprehensivos (Hempel).
Para Karl Popper, es necesario contentarse con un concepto de verificación
parcial según el cual
"los enunciados de base (basic sentences) son convenciones científicas, es decir,
postulados arbitrarios necesarios para evitar la regresión al infinito en la
investigación científica".45
J. L. Austin46 hace la siguiente crítica de las concepciones lógicas positivistas en
materia de verificación empírica:
a) No hay ninguna clase de enunciados para los que se pueda decir que, como
tales, no sean corregibles, ofrecen una base para otras formulaciones y deben ser
examinados para verificar otros enunciados teóricos;
b) Los enunciados de existencia tomados de la "realidad" no deben
fundamentarse o justificarse por la evidencia, no deberían ser verificados y no
podrían, por lo demás, hacerse concluyentes, sino solamente de manera
provisional y convencional.
Los enunciados de existencia, los hechos que verifican las teorías no son en sí
mismos falsables, sino que la comunidad de investigadores decide sobre su
pertinencia.
La verificación de las teorías, aunque siempre parciales, no son por ello menos
indispensables. Exige una especificación previa del sentido de sus términos y una
precisión semántica semi-rigurosa de aquéllas.
44 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 70.45 In L. KOLAKOWSKI, op. cit., 1972, p. 214.46 J.-L. AUSTIN, Le langage de la perception, Paris, Armand Colin, 1971.
86
"Aunque la teoría corresponda a los hechos, aunque los hechos se deriven
lógicamente, ella no se deriva lógicamente de ellos. La teoría no es formalmente
exigida por ello y contiene algo más ... pero, la teoría implica lógicamente los
hechos".47
La articulación de las proposiciones teórica a los hechos empíricos podría
describirse de la siguiente manera:
Proposición universal (U (x) )
: derivación lógica
Proposición particular (P (v) )
: confrontación técnica (prueba)
Proposiciones singulares (e (z) )
de existencia
El examen de proposiciones no es realizable sin procedimientos de especificación
de términos y sin definición de conceptos. El peligro está en caer en el rigorismo
para escapar del confusionismo. Dos modos de definición son lógicamente
posibles, esencialista y nominalista.
La definición esencialista48 , es decir puramente verbal, parte de lo que debe
ser definido (definiendo) (por ejemplo: "la burocracia") para llegar a lo que se
define (definido) (por ejemplo, la línea jerárquica, una especialización de tareas,
etc).
El riesgo del verbalismo es grande, pero tales definiciones pueden servir para
animar la búsqueda de argumentos y explicitar la hipótesis de investigación.
La definición nominalista va de la fórmula definitoria a la definición, que no
funciona entonces más que como una breve etiqueta, arbitraria, cómoda y útil.
" ... Los rótulos se utilizan con miras a relatar brevemente una larga historia ...
toda cadena de definiciones debe comenzar por los términos no definidos, cuya
significación puede ser ejemplificada, pero no definida". 49
La definición previa, ó noción, es un primer elemento de conceptualización útil
47 W. M. O'NEIL, op. cit., 1972, pp. 198-199.48 K. POPPER, op. cit., 1967, pp. 11-15.49 Ibid., pp. 13, 190.
87
para librarse de las prenociones; la definición previa, señala Durkheim, construye
nuevos objetos, es decir, nuevas relaciones entre los aspectos de las cosas. Pero
definir no es el objetivo, solamente es el medio:
"... El cuidado de la definición rigurosa es vano y también engañoso, si el principio
unificador de los objetos sometidos a la definición, no está sometido a la crítica." 50
La definición será de tipo analítico si se hace con la ayuda de términos cuya
significación ya se ha determinado en la teoría; de tipo contextual si se refiere a un
espacio semántico exterior a aquél de la teoría; ella introduce entonces, términos
pre-teóricos (Hempel). La definición "operacional" (Bridgman) es aquélla que
incluye la descripción de operaciones permitiendo producir la situación que denota
el concepto definido (Ejemplo, el muestreo, definido según las técnicas
estadísticas).
La definición operacional no es definitiva sino la resultante de especificaciones
instrumentales aplicadas a un objeto de investigación, su contenido está
íntimamente ligado a nuestras posibilidades técnicas de medida, de observación
de la realidad.
"La definición operatoria conlleva la intervención y la limitación de instrumentos ...
la operación de observación y de medida no disocia en manera alguna el objeto
del instrumento. Lo que ella provee es un resultado relativo a su interacción y que
es lo observable ... Se puede decir que la noción de observable completa la
definición operacional".51
La definición puede satisfacer sea la exigencia de formulación ó aquélla de la
explicitación, según el uso que de esta se haga.
La definición que construyen los lenguajes simbólicos responde a la exigencia
de la formulación (Ejemplo., la definición analítica de términos, de conceptos
universales); aquélla que se fundamenta en lenguajes naturales (lenguajes de la
práctica extra-científica) responde a la exigencia de explicitación.
Lo importante es no sacrificar lo esencial a la comodidad, no simplificar a
ultranza. Así la definición nominal sería no más que un resumen de prenociones,
un método engañoso y artificial para introducir un rigor totalmente estéril.
50 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 44.51 J. ULLMO, in J. PIAGET, op. cit., 1967, p. 640.
88
La definición de términos debe permitir la investigación coherente, debe ser la
señal que nos indica el objeto de investigación y nos permite asirlo,
"... como un hilo conductor, con la ayuda del cual se introduce un orden en los
hechos observados y que nos coloca sobre la pista de los hechos a investigar"52
"El paso de lo concreto a lo abstracto en la simple descripción conceptual del
hecho social ofrece ... mil dificultades, de las cuales la menor no es, sin duda, la
necesidad de mantener claro y rigurosamente determinado el modo de aplicación
del concepto a la experiencia".53
El concepto habrá sido especificado verticalmente cuando un conjunto de
"indicadores", de enunciados descriptivos, hayan sido asociados a un término
teórico que es la contraparte simbólica. Cada enunciado descriptivo ó enunciado
de existencia (Popper) corresponde a un conjunto de hechos, de ocurrencias
singulares, de acontecimientos posibles ó por ocurrir. La especificación permite
caracterizar de manera clara los elementos del campo técnico de investigación.
El polo teórico no deja entonces reducir sus elementos a observaciones más o
menos sistematizadas. Un término teórico, por ejemplo, "no contiene en él mismo
las técnicas que pudieran referirlo a la experiencia".54 Los términos teóricos
trascienden fundamentalmente los términos de toda experiencia sensible, tienen
características y exigencias propias. Así se puede rechazar la idea según la cual
un concepto científico es "sinónimo" de un conjunto de operaciones.55
"La significación de un término teórico es dado por las unidades horizontales
como también por las verticales de la estructura conceptual y sólo la estructura
como un todo que reposa, al menos, sobre un piso empírico firme".56
Así, la teoría provee por sí misma las premisas a partir de las cuales
enunciados descriptivos pueden derivarse; éstos enunciados son las implicaciones
verificables de la teoría.
Como la totalidad de los sistemas teóricos está en expansión constante, las
definiciones están a un mismo tiempo sujetas a posibles transformaciones. Es
52 A.-A COURNOT, Critique philosophique, Paris, Presses universitaires de France, 1958, p. 111.53 G.-G GRANGER, in L. APOSTEL, op. cit., 1973, p. 159.54 Ibid., p. 159.55 K. HEMPEL, op. cit., 1972, p. 152.56 A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 57.
89
entonces importante evitar, de manera vigilante, la clausura arbitraria de las
teorías, clausura que fijaría la investigación en un formalismo estéril.
Esta exigencia de explicitación es garantía de la "apertura del sentido" que
debe ser mantenida en los sistemas reduccionistas formulados simbólicamente.
Así, una teoría no es simplemente un conjunto de leyes, sino mejor, una suerte
de red sistémica cuyas proposiciones-leyes formarían las mallas. Bachelard
enfatiza que la hipótesis, siendo en adelante síntesis, es síntesis a la vez
"sistemáticamente" explicativa y 'totalmente" comprehensiva.
90
CAPITULO CUARTO
LOS MARCOS DE REFERENCIA
Traducido por: Ana Claudia Delgado,
Hernán de los Ríos, María Cristina
Tenorio, Floralba Cano.
Dentro del rigor de la formulación teórica, pero más allá de sus imperativas
restricciones, los marcos de referencia constituyen, en las inmediaciones de la
práctica teórica, una especie de matriz disciplinaria que reagrupa un conjunto de
paradigmas, en el sentido dado a este término por T.S. Kuhn: un conjunto de
conocimientos científicos.
"Universalmente reconocidos que, por un tiempo, proporcionan tanto los
problemas tipo como las soluciones a un grupo de investigadores".
"... Los paradigmas pueden determinar la ciencia normal sin la intervención de
reglas perceptibles".1
Puede tratarse de protocolos informales que, generalmente, no adquieren la forma
de reglas explícitas, pero que, no por ello, condicionan y orientan toda práctica
teórica, inclusive, la búsqueda tras su totalidad.
Estos paradigmas cumplen una función de clarificación y de orientación,2
fecundan las teorías y permiten plantear, más fácilmente, una cantidad de
hipótesis de trabajo particulares, más operacionales y más rigurosas.
"El paradigma proporciona una guía práctica y lógica para evitar las hipótesis ad-
hoc ...".3
Realiza en cierta forma una codificación de las "intuiciones" de los investigadores
y permite una mayor intersubjetividad, una comprensión más fácil para lograr una
mayor comunicación entre los mismos.
Dentro de la armazón metodológica tomada en conjunto, los marcos de
1 T. S. KUHN, op. cit., 1972, pp. 10, 65.2 D. L. PHILLIPS, Abandoning Method, San Francisco, Jossey- Bass publisher, 1973, p. 103.3 R. K. MERTON, op. cit., 1968, p. 23.
91
referencia permiten reagrupar en cuatro "matrices disciplinarias" principales
(positivismo, comprehensión, estructural-funcionalismo, estructuralismo), los
principales paradigmas de éstas especies de "corrientes" - a veces recopiladas en
"escuelas - que reagrupan las más importantes "convicciones" metodológicas.
Estas últimas son compartidas de manera muy diversa por los diferentes grupos
de especialistas de las ciencias sociales.
Las cuatro corrientes representadas son, sin lugar a dudas, las principales,
pero es un error creer que son las únicas posibles y, a fortiori, que están
netamente delimitadas. Más que ríos en una planicie de accidentes, habría que
hablar de un mar agitado con corrientes contrarias. Tampoco se pueden asimilar
las funciones del polo teórico (formulaciones rigurosas, verificaciones precisas de
hipótesis a aquellas de los marcos de referencia mucho más ambiguas por estar
en los límites de los campos epistémicos y doxológicos.'
"...una teoría denota una estructura mucho más limitada por su naturaleza y su
alcance".4
La práctica teórica es el orden de la explicitación rigurosa de los conceptos y de
las proposiciones. Los marcos de referencia son más bien el registro de "hábitos"
metodológicos, síntesis pasivas de los paradigmas que orientan tradicionalmente
la investigación. La teoría tiene como fin elaborar un sistema coherente de
proposiciones falsables. Las "matrices" de los marcos de referencia contienen
ideas directrices que no están más que débilmente integradas, de ahí el carácter
fluctuante de esos marcos paradigmáticos frente a las teorías particulares:
".. las ideas, como tales, sufren un cambio y pasan, transformándose, de sistema
a sistema".5
El vínculo de los marcos de referencia con el polo teórico no es menos orgánico.
En efecto, proporcionan a éste último las "hipótesis de la investigación" o hipótesis
"genéricas";
"... la función principal de estas ideas directrices es la de proveer un contexto
4 T. S. KUHN, op. cit., 1972, p. 215.5 F. ALQUIE, L'idée de causalité, de Descartes à Kant, in F. CHATELET, sous la direction de, Les lumières, Paris, Hachette, 1972, p. 203.
92
general para la investigación; facilitan el acceso a determinadas hipótesis".6
El propósito de este capítulo no es presentar un desarrollo exhaustivo de diversos
paradigmas en los diferentes marcos de referencia, ni mostrar su permanencia,
sus puntos comunes o sus carencias, sino limitarse a sugerir la importancia
específica de éstos paradigmas para la metodología de la investigación en
ciencias sociales. Antes de caracterizar cada uno de los principales marcos de
referencia, conviene aclarar el papel que le atribuyen a la teoría misma, e indicar
algunos elementos constitutivos de esos marcos matrices en general.
- Para el "positivismo", la teoría como tal es superflua o inaccesible, solamente
cuentan las leyes abstractas, producidas bajo la forma de generalizaciones
empíricas. Más que de teorización, se tratará de conceptualización abstracta que
puede conducir a taxonomías "genéricas", a tipologías "concretas".
- Para la "comprehensión", la teoría es igualmente, superflua, las ciencias
sociales, culturales (Weber) o del espíritu (Dilthey), no pueden hacerse más que
bajo la forma de conceptualización concreta. Se tratará de despejar estructuras
significativas, "tipos sociales" que condensan en una totalidad significativa las
diferencias específicas que hacen la singularidad de los fenómenos sociales.
- Para el "estructural-funcionalismo", se trata de recuperar la visión
comprehensiva bajo la forma de una teoría general integrada que, por el uso de
los sistemas permite conectar en un todo el conjunto de los fenómenos sociales,
para así poder explicarlos.
- Para el "estructuralismo", se trata de axiomatizar las teorías para encontrar de
nuevo los hechos sociales como variantes homológicas, transformaciones
específicas en una misma matriz sistémica. Los modelos estructurales eliminan la
significación para despejar mejor el sentido formal.
Para cada uno de estos marcos de referencia encontraremos una serie indefinida
de paradigmas que los constituyen:
- Generalizaciones simbólicas, paradigmas formales (Merton), de forma legal,
sintáctica o lógica, funcionan en general no como leyes - de carácter revisable -
sino como definiciones, postulados implícitos, categorías clasificatorias - que son
6 R. K. MERTON, op. cit., 1968, p. 31.
93
modificables porque son analíticas;7
- creencias "ontológicas", las metáforas, las analogías, por ejemplo aquellas
vehiculadas por el atomismo, el intuicionismo, etc;
- valores concernientes por ejemplo a la elección de las teorías: simplicidad,
coherencia, analogía con otras teorías; exactitud deseada para las previsiones;
preferencia por la cuantificación, etc. La utilizadad social de las teorías en sin
duda un "valor" determinante en la elección de las teorías de las ciencias sociales;
- ejemplos: encuestas famosas, experiencias cruciales,8 que los grupos
científicos toman como modelos a seguir, como paradigmas en sentido estricto:
"... Un conjunto de ilustraciones repetidas y casi estandarizadas de diferentes
teorías, en sus aplicaciones conceptuales, observables e instrumentales".9
Los paradigmas se elaboran entonces en el proceso de investigación y es
necesario usarlos sin abusar de ellos.
"... El abuso es hacer del paradigma un tirano cuando no es más que un simple
consejero .. los paradigmas están destinados a ayudar al sociólogo a realizar su
trabajo" 10
1. EL MARCO POSITIVISTA
La característica propia del marco positivista en las ciencias sociales es la
concepción de la investigación a partir de la observación de los datos de la
experiencia, de las leyes generales que rigen los fenómenos sociales. La
constancia o la regularidad de los fenómenos comprobados conduce a generalizar
a partir de ellos, es decir, a formular leyes positivistas.
La posición epistemológica de base del positivismo es el rechazo al
conocimiento inmediato de la realidad, a la comprensión subjetiva de los
fenómenos, a la búsqueda intuitiva de sus esencias. Quiere evitar una
interpretación psicologizante de lo social en la cual "el individuo" determina toda la
7 R. BOUDON, Note sur la notion de théorie dans les sciences sociales, Archives européennes de sociología, XI, nº 2, 1970, pp. 203-210, in J. W. LAPIERRE, L'analyse des systèmes politiques, Paris, Presses Universitaries de france, 1973, p. 13.8 Cf. T. CAPLOW, L'enquête sociologique, Paris, Armand Colin, 1970, chap. II: "La tradition américaine".9 T. S. KUHN, op. cit., 1972, p. 61.10 R. K. MERTON, op. cit., 1968, pp. 24, 22.
94
explicación. En efecto, en sociología es necesario "explicar los fenómenos que se
producen en el todo por todas las propiedades características del todo, lo complejo
por lo complejo, los hechos sociales por la sociedad"11 . En consecuencia, el
conocimiento sociológico no puede basarse sino en la observación y en la
experiencia, es decir, en los caracteres exteriores, objetivamente manifiestos, de
los hechos sociales.
La actitud positivista "se caracteriza, en cuanto al método, por la subordinación
de la imaginación a la observación"12 . Los hechos sociales son considerados
como cosas y
"es cosa todo objeto del conocimiento que no es naturalmente asequible
(comprensible) a la inteligencia, todo aquello de lo cual no podemos crearnos una
noción adecuada por un simple procedimiento de un análisis mental, todo aquello
que el espíritu no puede llegar a comprender sino con la condición de salirse de él
mismo, por la vía de observaciones y experimentaciones, pasando
progresivamente de los caracteres más externos y los más inmediatamente
inaccesibles a los menos visibles y a los más profundos".13
El proyecto positivista es substraer la observación y la formulación de las leyes
que organizan la sociedad de todo proceso intelectual que recurre a causas
sobrenaturales o metafísicas:
"El hombre se limita a observar los fenómenos y a fijar los lazos regulares que
pueden existir entre ellos, ya sea en un momento dado, ya sea en el tiempo.
Renuncia a descubrir las causas de los hechos y se contenta con establecer las
leyes que los rigen"14
La inducción de estas leyes reposa en la concordancia entre los enunciados
hipotéticos que describen la constancia de un fenómeno o la regularidad de una
relación entre dos o varios fenómenos y las observaciones empíricas. La lógica
que articula estas observaciones es de naturaleza comparativa:
11 E. DURKHEIM, in D. HOLLIER, sous la direction de, Panorama des sciencies humaines, Pris, Gallimard, 1973, p. 140.12 A. COMTE, Philosophie positive, Résumé par E. RIGOLAGE, t. 3, Paris, Flammarion, 1917, p. 78.13 E. DURKHEIM, Les règles de la méthode sociologique, Paris, Presses Universitaires de France, 1967, p. XIII.14 R. ARON, Les étapes de la pensée sociologique, Paris, Gallimard, 1967, pp. 81 et 82.
95
"El simple paralelismo de los valores por los cuales pasan los fenómenos, siempre
que haya sido establecido con un numero suficiente de casos bien variados, es la
prueba de que existe entre ellos una relación".15
Se compara
"los casos en los cuales los fenómenos están simultáneamente presentes o
ausentes .. Cuando pueden ser producidos artificialmente a gusto del observador,
el método es la experimentación propiamente dicha. Cuando por el contrario, la
producción de los hechos no depende de nosotros y no podemos mas que
compararlos tal y como espontáneamente se produjeron, el método que se
emplea es aquél de la experimentación indirecta o método comparativo".16
Si la relación es constante, la concomitancia se plantea como general, es decir,
como ley. Esta es producida, entonces, por una inducción amplificada que aplica,
a todos los casos implicados por la ley, la relación comprobada solamente por
algunos casos.
"La concomitancia constante es entonces, por sí misma una ley, sea cual fuere el
estado de los fenómenos que quedan fuera de la comparación".17
Esta ley tiene, así, el estatus de una generalización empírica.
Pero como lo advierte Comte,18 el uso de la comparación a través del espacio y el
tiempo postula obligatoriamente la identidad constante de la naturaleza humana, la
única que legitima los acercamientos realizados.
Una ley puede enunciar, ya sea una relación de simultaneidad, o bien, una
relación de sucesión entre los fenómenos. En el primer caso, las leyes describen
los caracteres estructurales de la sociedad, a saber, los elementos constitutivos de
la organización social y las aproximaciones entre estos elementos que constituyen
la coexistencia social. Las leyes, cuyo eje es la "estática social" (es decir el
análisis profundo y desarrollado del conjunto de las condiciones de existencia
comunes a todas las sociedades),19 explicitan sobre todo el orden y el consenso
social.
15 E. DURKHEIM, op. cit., 1967, p. 129.16 Ibid., p. 124.17 Ibid., p. 130.18 P. ARNAUD, Sociologie de Comte, Paris, Press Universitaires de France, 1969, p. 104.19 A. COMTE, ibid., p. 126.
96
En el segundo caso, las leyes indican una sucesión temporal entre los
fenómenos. Integradas en una perspectiva de "dinámica social" (es decir de
"explicación directa de las leyes fundamentales de los diversos aspectos del
desarrollo humano"),20 las leyes describen las etapas del cambio de las
sociedades humanas y de su progreso.
El tipo de explicación buscada es la descripción: la ley aclara lo que pasa,
indica una constancia. Elaborada de acuerdo con lo observado, está a nivel de la
adecuación a lo conocido: la previsión sólo es posible en una perspectiva de
constancia y de repetición.
"La ley hace pasar el pasado sobre el presente y el futuro, va en el sentido de la
continuidad, de la homogeneidad.."21
Para la búsqueda de la regularidad de las ligazones entre fenómenos, la búsqueda
positivista recurre voluntariamente a la cuantificación y al análisis estadístico. Este
evidencia con más precisión los diversos tipos de correlaciones entre las variables
y da a la exposición un rigor y una claridad específicos.
Finalmente, el punto de vista positivista adopta con frecuencia posiciones
pragmáticas, El conocimiento de las leyes que rigen la actividad humana puede
favorecer la eficacia de la acción.
"La ciencia (positivista) es ... doblemente pragmática. Es el principio donde son
tomadas las recetas técnicas como consecuencias inevitables; tiene un valor
educativo con relación a nuestra inteligencia o más bien con relación a nuestra
conciencia".22
Ya sea por medio del establecimiento de leyes que organizan la sociedad y su
historia (ley de los tres estados de Comte), de la distinción entre lo patológico y lo
normal (Durkheim, sociología de la desviación) o del análisis de los "problemas
sociales",23 el positivismo aspira a la deducción de preceptos a partir de la
observación de las regularidades. De la ley comprobadora se pasa, entonces, a la
ley práctica, del saber al poder.
20 . Ibid., p. 157.21 R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, p.333.22 R. ARON, op., 1967, p. 119.23 H. BLALOCK, op. cit., 1973, p. 112.
97
2. EL MARCO DE LA COMPREHENSION
La aproximación comprehensiva aspira a asir y a explicitar el sentido de la
actividad social individual y colectiva, entendida como la realización de una
intención. Se justifica en la medida en que la acción humana es esencialmente la
expresión de una conciencia, el producto de valores, la resultante de
motivaciones.
"... Toda acción es siempre una acción simbólica y prevee los resultados
inmediatos en el evento, al igual que el efecto que producirá como gesto
significativo y huella de una intención".24
El objetivo de la comprensión es exhibir los significados internos de los
comportamientos:
"... Comprender una conducta es percibirla, en alguna medida, desde el interior, el
punto de vista que la anima y por lo tanto, en lo que la vuelve propiamente
humana y la distingue de un movimiento físico".25
Si bien el fundamento de la comprehensión reside en la "persona" que es el lugar
privilegiado del entendimiento (del discernimiento) de los significados de la
acción26 puede, sinembargo, ser atribuida a un "actor" no personal. Así, por
ejemplo, el "sujeto histórico" según Touraine, que "define una cierta relación de la
sociedad, trabajador colectivo, relación definida por la capacidad de esta sociedad
para captar su entorno como su producto, como su obra".27
El método comprehensivo se preocupa por investigar fenómenos singulares o
únicos: un evento no es analizado como un caso particular subsumido por una ley
general, sino como un elemento original y específico.
24 M. MERLEAU-PONTY, op. cit., 1971-B, p. 216.25 A. DARTIGUES, op. cit., 1972, p 53.26 J. FREUND, op. cit., 1968, pp. 98 et s.27 A. TOURAINE, Sociologie de l'action, Paris, Editions du Seuil, 1965, p. 38. Le sujet historique ne doit cepedanta pas être confondu avec un acteur collectif: "Il n'est pas un personnage, mais un autre nom du champ d'historicité d'une société... L'historicité dont je parle n'est pas l'oeuvre d'un acteur, elle est la caracteristique de la société au niveau que je définis comme celui de la production de la société par elle-même ou, ce qui est la même chose, de la société comme sujet historique", A. TOURAINE, op. cit., 1973, pp. 39-40.
98
".. lo que nosotros buscamos lograr es precisamente el conocimiento de un
fenómeno histórico, es decir, significativo en su singularidad." 28
La comprehensión de la relación entre la actividad humana y la intención
significativa que la anima es radicalmente diferente del análisis que procede por
reagrupamiento de los fenómenos bajo conceptos genéricos, por la multiplicación
de las observaciones y de las experimentaciones y por el descubrimiento de las
leyes que ordenan lo social. Si éste puede ser "explicado desde el exterior" por un
determinismo idéntico a aquél que rige el orden natural, entonces, no puede ser
"comprehendido". No obstante, a pesar de sus diferencias, los dos pasos se
excluyen,
".. la explicación por las leyes generales y la comprehensión de lo individual son
igualmente legítimas y la una no podría superar a la otra." 29
El avance "comprehensivo" procede a la elección y descripción de una red de
causas singulares. Llega él a imputar los hechos sociales a un conjunto causal
que determina la especificidad histórica.
".. Siempre que se trate de la individualidad de un fenómeno, el problema de la
causalidad no se refiere a leyes sino a conexiones causales concretas. El
problema no es saber bajo qué fórmula se debe subsumir el fenómeno a título de
ejemplo, sino a qué constelación hay que imputárselo en tanto que resultado".30
La aprehensión de las totalidades significativas, reconstruídas bajo la forma de
tipos ideales en las constelaciones históricas, está subordinada a la
ocmprehensión previa de la acción social. Comprenderla, es remontarse a los
motivos, a las intenciones, a los proyectos de los actores a partir de los cuales
estas manifestaciones se vuelven significativas. Este retroceso implica un
acercamiento entre una conciencia que conoce y una conciencia para conocer,
hasta llegar a una intimidad entre sujeto y objeto: En el nivel menos elaborado, la
comprehensión de tipo fenomenista.
"... Explicita la verdad de la primera experiencia del mundo social, es decir, la
28 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 162.29 J. FREUND, op. cit., 1968, p. 79.30 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 163.
99
relación de familiaridad con el entorno, aprehensión del mundo social como
mundo natural y que, evidentemente, por definición, no se refleja y que excluye la
pregunta sobre sus propias condiciones de posibilidad".31
Pero, debido a la ausencia de preguntas tanto metodológicas como teóricas, el
investigador corre el riesgo de atribuir a la acción, tan sólo a la acción un
sentimiento inmediato e ingenuo.
La comprehensión puede ser intuitiva: Para hacer inteligible un comportamiento
deduciendo los motivos a los cuales ha obedecido, el investigador no elimina su
propia particularidad sino, al contrario, hace de ella un medio para captar el
comportamiento observado a través de la reminiscencia.
"... La experiencia vivida es una forma bien característica de percibir la existencia
de una realidad. En efecto, el Erlebnis se nos presenta como una percepción
ordinaria o una representación; no se nos es dado, pero su realidad existe para
nosotros puesto que tomamos conciencia de ella ... el Erlebnis se objetiva
solamente en el pensamiento."32
El investigador convierte la comprehensión de otro en una comprehensión
introspectiva de él mismo. En cierta forma, asimila enfáticamente el
comportamiento de otro a su propia experiencia, a lo vivido por él. Siembargo,
esta comprehensión está limitada por una dificultad de elaboración conceptual
rigurosa y de acuerdo intersubjetivo sobre los resultados de la investigación.33
Además, el peligro de identificación con el actor reside en la atribución de un
sentido erróneo a la acción: el investigador puede racionalizar las intenciones del
actor e ignorar sus motivaciones inconscientes, y el registro de la opinión del actor
(percepciones y concepciones) no disminuye en nada estas dificultades ya que
plantea a priori que el actor puede comprender claramente su situación efectiva.34
La comprehensión puede ser llamada racional si explica la racionalidad
desarrollada por la acción, es decir, la correspondencia entre los valores, los fines
a los cuales el actor se adhiere y los medios puestos en juego en la acción para
realizarlos.
"... Solamente la acción orientada hacia fines instrumentales y que escoge los
31 P. BOURDIE, Op. cit., 1972, p. 163.32 W. DILTHEY, Le monde de l'Espirit, t. 2, Paris, Aubier, pp. 312, 313.33 J. FREUND, op. cit., 1968, pp. 38-39.34 A. TOURAINE, op. cit., 1965, pp. 26 et s.
100
medios más apropiados para alcanzar estos fines es plenamente
comprehensible".35
Esta correspondencia, que describe la dinámica de la articulación "fines-medios",
contiene un razonamiento implicativo que evidencia la acción:
"... La noción esencial de intención ... se reduce, desde el punto de vista de la
conciencia, a la de un valor que orienta la acción o el pensamiento y a las
anticipaciones deductivas, que proporcionan los medios para realizarla, es decir a
un nuevo juego de implicaciones".36
Sinembargo, puesto que "no es suficiente que la relación comprehensiva sea
inteligible para ser verdadera ...",37 la comprehensión que descifra el sentido de
una acción singular, debe ver la relación significativa confirmada por una
imputación causal positiva.
"... La combinación entre la explicación y la comprehensión da un sentido a la
imputación causal: se vuelve significativa, es decir que las relaciones causales se
vuelven por eso mismo relaciones significativas".38
3. EL MARCO FUNCIONALISTA
La aproximación funcionalista, adopta, de súbito, frente a los hechos sociales una
visión totalizante, incluso sistémica, debido a la cual cada uno de estos está
englobado en un conjunto integrado de naturaleza teleológica. Cada elemento, o
algunas de sus características, determina cierto estado de la totalidad-sistema, la
cual, a su vez, condiciona su funcionamiento de conjunto.
Contrariamente a la aproximación comprehensiva que se interesa por los
fenómenos en su singularidad, el funcionalismo investiga las formas durables de la
vida social y cultural, productos de una institucionalización: los roles, las
organizaciones, las normas, etc.
Aunque el funcionalismo en las ciencias sociales tuvo precursores tales como
35 Ibid., p 33 au sujet de WEBER.36 J. PIAGET, op. cit., 1967, p. 1134.37 R. ARON, Inttoduction, in M. WEBER, Le savant et le politique, Paris, Unión générale d'Editions, 1963, p. 11.38 J. FREUND, op. cit., 1968, p. 88.
101
Durkheim (solidaridad orgánica), Comte (inmovilidad social) y Mauss (fenómeno
social total), se desarrolló sobre todo, bajo el impulso de etnólogos tales como
Manilowsky y Radeliffe-Brown. El análisis de estos últimos se opone a la
perspectiva evolucionista de Spencer ( por lo cual la institución se explica por el
estadio de desarrollo alcanzado) estableciendo la interdependencia de las
instituciones y su adaptación recíproca. Estas formas, entonces, un conjunto
unificado e integrado. Recurriendo a una analogía entre la vida social y la vida
orgánica, el funcionalismo capta toda institución en función, en su aparte al
mantenimiento del sistema. La institución esencialmente la respuesta a una
necesidad de la sociedad, es una condición útil a su funcionamiento. Una vez
introducido en la sociología, el funcionalismo fue desarrollado y sistematizado
especialmente por Merton.
El análisis comparativo y el uso de las analogías son frecuentemente
explotados por las investigaciones funcionalistas,39 lo que trae la atención del
investigador sobre el hecho que "de la misma forma en que un solo elemento
puede tener varias funciones, una sola función puede ser cumplida por elementos
intercambiables"40 Es decir que, en los límites dados por la interdependencia de
los elementos en una misma estructura, existen equivalente o substitutos
funcionales. Por otra parte, una institución no es necesariamente funcional para la
sociedad global: ella puede serlo para una parte y no para la otra. esta posibilidad
requiere la especificación de "la unidad orgánica" cuyo elemento mantiene el
equilibrio.41
Para identificar una función, el investigador no puede limitarse a la
comprensión "de las disposiciones subjetivas" explícitas de los actores
(necesidades, intereses, fines), ésto limitaría su estudio a las funciones
manifiestas (aquellas de las cuales los actores son conscientes y que ellos han
querido). Tiene que descubrir, igualmente, las funciones latentes, es decir las
consecuencias objetivas de la institución, puestas en evidencia por su propio
análisis independientemente del punto de vista de los actores.42
Pero esta distinción latente/manifiesta, en lugar de ser útil se presta a
confusiones, porque no muestra claramente la diferencia entre el análisis científico
y las motivaciones vividas por los actores; podría más bien funcionar como una
39 A. BRIMO, op. cit., 1972, p. 94.40 R. K. MERTON, po. cit., 1968, p 83.41 Ibid., p. 78.42 Ibid, pp. 112 et s.
102
hipótesis ad hoc, que legitima todo el análisis.43
En el estudio de la contribución de las partes al equilibrio y al funcionamiento
del todo, el funcionalismo conviene para estudiar la sociedad como una totalidad
que integra las diferentes instituciones y que las utiliza para su conservación.
Sinembargo, la problemática del cambio está limitada a las consecuencias
contenidas en la transformación de elementos ya existentes, en otras partes del
sistema. El funcionalismo puede rendir cuentas, sobre todo, de los retrasos y de
los obstáculos (frenos) para adoptar el cambio.44
La noción de disfunción, que indica en qué un elemento impide la adaptación o
el ajuste de un sistema,45 no cuestiona el principio fundamental del equilibrio social
y por lo tanto del consenso. Permite, como máximo, tener en cuenta
"discordancias estructurales"46 y recuperables en un todo funcional siguiendo la
hipótesis según la cual "las formas culturales persistentes tienen un saldo positivo
en relación con sus consecuencias funcionales"47 Está claro que ésta noción
expresa una contradicción del análisis funcionalista al describir el statu quo y
querer rendir cuentas del cambio. Esto es sin duda un rasgo de las limitaciones
metodológicas de la extrapolación de un método inicialmente aplicado a las
sociedades simples.
Otra limitación del funcionalismo surge de una reflexión de Durkheim: "Hacer
ver la utilidad de un hecho no es explicar cómo nació ni cómo es lo que es".48 Al
ignorar el origen de las instituciones y las determinaciones que las han formado, el
estudio funcionalista no es más que una descripción de su aporte a la sociedad.
Sólo permite una lectura analítica del equilibrio y de la integración de una
sociedad. La explicación desarrollada no da cuenta de ninguna causalidad
externa entre los fenómenos, explica más bien una causalidad circular que indica
la inserción y por consiguiente el "significado de los elementos en un conjunto.
Progresivamente las ciencias sociales vieron desarrollarse una teoría general
de tipo estructural-funcionalista cuyo aporte principal se debe a T. Parsons.49 Asta
teoría propone un modelo conceptual general de la acción humana: identifica las
principales necesidades para su realización (pre-requisitos funcionales: estabilidad
43 Cf. R. S. RUDNER, op. cit., 1966, p. 110.44 A. INKELES, What is Sociology? An Introduction to the Discipline and Profession, Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 1964, p. 36.45 R. K MERTON, op. cit., 1968, p. 102.46 D. HOLLIER, op. cit., 1973, p. 159.47 R. K. MERTON, op. cit., 1968, p. 81.48 E. DURKHEIM, op. cit., 1967, p. 90.49 Cf. par exemple, T. PARSONS, Societies, Evolutionary and Coparative Perspectives, Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 1966, chap. 2.
103
normativa, integración, persecución de metas, adaptación) y los sistemas que
cumplen las funciones correspondientes a éstas necesidades (sistema cultural,
social, psíquico, orgánico). Estas funciones se efectúan a través de las
estructuras - tales como, para el sistema social, los roles, las colectividades, las
normas, los valores - que son modelos relativamente estables de relaciones entre
actores, y sedimentos de la institucionalización de las normas socio-culturales.
Los diferentes sistemas - que sustentan los diversos campos científicos (cultural,
social, psíquico, biológico) - se articulan mutuamente siguiendo un orden
jerárquico (valores, normas, motivaciones, necesidades): entre más rico en
informaciones sea un sistema (el sistema cultural por ejemplo), más se extiende
su control y recíprocamente, entre más rico en energía sea un sistema (el orgánico
por ejemplo), más se extiende su carácter condicionante.
El sistema general de la acción está situado en un medio en el cual mantiene
relaciones cibernéticas: la acción significativa se refiere en última instancia a las
representaciones de las "las realidades últimas" de las cuales recibe las
informaciones que van a controlarla y se sitúa en un medio físico-orgánico del cual
recibe la energía que va a condicionarla.
El estado de las interrelaciones entre los sistemas y sus medios constituyen el
principal punto de referencia para comparar varias sociedades. Es posible así,
describir una evolución histórica a largo plazo hacia una diferenciación funcional y
estructural progresiva.50 Para estudiar una transformación rápida, es decir una
cambio, "el análisis dinámico debe referirse a bases morfológicas, (en el presente
casos sistemáticos), sin las cuales corre el riesgo de perder todo sentido de
orientación".51 Es por esto que el cambio se describe en relación con un estado de
equilibrio homeostático del sistema: es una ruptura que acarrea o no (siguiendo el
grado de tensión alcanzado, la amplitud de las transformaciones y los subsistemas
implicados) un cambio de estructura que afecta la naturaleza de todo el sistema.
La corriente funcionalista continúa siendo una de las más fecundas para las
ciencias sociales, a pesar de que las críticas que le atañen son importantes; éstas
tienden principalmente a revelar sus contradicciones internas (Ejemplo:
disfunciones, funciones latentes, etc) y a limitar su alcance "explicativo" a la
descripción de las formas de equilibrio social.
50 T, PARSONS, op. cit., 1966 et The system of Modern Societies, Englewood Cliffs. Prentice-Hall, 1971.51 T. PARSONS, in G. ROCHER, Introduction à la sociologie générale, Paris, Editions H.M.H., 1970, t. II, p. 225.
104
4. EL MARCO ESTRUCTURALISTA
El estructuralismo no tiene valor ni interés sino en la media que se define como
método, en que tiende explícitamente a plantear al comienzo a plantear los
problemas de la investigación desde el punto de vista del método y a considerarse
a sí mismo como una "actividad" (Barthes). Las actividades estructuralistas son
múltiples (etnología; análisis de los lenguajes míticos, retóricos (publicidad,
propaganda), literarias; Psicología Genética, Biología; etc.).
Desde un punto de vista epistemológico, el estructuralismo se presenta como
un análisis inmanente de sus objetos de investigación, busca
"conocer ante todo las propiedades intrínsecas de ciertos tipos de ordenes.
Estas propiedades no expresan nada que les sea del exterior".52
El instrumento para llevar a cabo esta búsqueda es el sistema en el sentido que
Sausure daba a éste término para definir la lengua: conjunto de relaciones de
dependencia mutuas, de oposiciones pertinentes, de diferencias significativas,
entidad autónoma de dependencias internas (Hjelmslev). La estructura se
caracteriza, primero, por su naturaleza sistémica. Esta estructura-sistema debe
distinguirse radicalmente de las estructuras totalidades concretas a las cuales
recurre el funcionalismo, porque no es imposición de sentido sino transformación y
producción de sentido nuevo:
"... si el sistema hace aparecer un sentido nuevo, quiere decir que es formal y
operatorio, solo puede ser formal en la medida en que es formal. El sistema no es
una teoría representativa, que facilite como un doble, una imagen de realidad; es
una realidad por sí misma, pero en el sentido de una realidad formal .... incorpora
el momento de la construcción, donde la inteligibilidad propia de la construcción
sirve de cobertura a la génesis del sentido".53
Así para el estructuralismo, el sentido se encuentra incluido y como comprimido al
interior del sistema que se basta a sí mismo para su propia inteligibilidad; el
análisis estructural se desarrolla al nivel del lenguaje, nunca se relaciona
directamente con el mundo sensible.
52 C. LEVI-STRAUSS, L'homme nu, Paris, Plon, 1971, p. 561.53 J. LADRIERE, Sens et système, Espirit, mai 1967, pp. 822-824, p. 822.
105
"... El método estructuralista contemporáneo se define bastante bien como un
logoanálisis .. designa un asignación nueva entre los abstracto indeterminado y la
proliferación de los contenidos significativos de la cultural humana... se trata de
vaciar la forma de la totalidad de su sentido, de todos sus sentidos posibles, es
decir de pensar lo formalmente, es decir, a pesar de eso de pasar de la escritura
ideográfica del análisis simbólico al lenguaje abstracto del análisis estructural".54
Veamos entonces, lo que distingue al marco de referencia estructuralista de los
otros marcos: análisis formal de tipo matemático y/o lingüístico, separado de toda
significación exterior a priori, así como todo centro con el cual se relacionaría en
última instancia el sentido último del sentido. La estructura es una forma
desprovista de centro, cuyo sujeto es producido como una carencia, el lugar del
sujeto (individual, colectivo o trascendental) está vacío (Lacan).55 No hay en la
estructura elemento privilegiado, no hay palabra clave ni tampoco referente
trascendente:
"... El estructuralismo es un pensamiento que pretende la más total
excentricidad ... el sentido de las palabras no está en ellas y el lenguaje no es más
que un sistema de diferencias en el cual todos los elementos remiten los unos a
los otros sin que jamás sea posible detenerse en uno de ellos".56
El estructuralismo no quiere ser un nominalismo ya que se esfuerza en inscribir la
inteligibilidad del modelo en los hechos, es decir en los comportamientos sociales,
quiere ser un análisis inmanente de lo real. La estructura no es ni la verdad de la
cosa (realismo), ni una verdad sobre la cosa (nominalismo), es la cosa misma
como simulacro inteligible (estructuralismo). Espíritu = cosa = estructura: esta
ecuación paradigmática del estructuralismo implica un abandono del corte radical
idealismo/materialismo, cultural/naturaleza; se necesita para las ciencias
"... reintegrar la cultura en la naturaleza, y finalmente la vida en el conjunto de
las condiciones fisicoquímicas".57
El principio organizador y generador de sentido es el de la más pequeña
54 M. SERRES, op. cit., 1968, pp. 26, 35, 27.55 Cf. G. DELEUZE, op. cit., 1971, pp. 63-67.56 D. HOLLIER, op. cit., 1973, p. 52.57 C. LEVI-STRAUSS La pensée sawage, Paris, Plon, 1962, p. 327.
106
diferencia.
El análisis estructural predica un inmanentismo de carácter trasnformacional, lo
que define la estructura es su movimiento operatorio, sus resultados significativos:
"El ser de la estructura es su estructuración." 58
El estructuralismo valora la letra (significante) y le somete al espíritu (el
significado), abandona toda tentativa de comprensión de un sentido para sustituirla
por operaciones de transformación de signos. Tiende a mostrar que el sujeto
epistémico es por naturaleza un conjunto de funcionamientos, una actividad, no un
centro un lugar inmóvil de un sentido. Piaget insiste sobre la naturaleza
constructiva de todo estructuralismo consecuente. Se llamará entonces análisis
estructural a la "aplicación a los fenómenos sociales de "transformaciones" en las
cuales las relaciones de posición entre elementos de un sistema permanecen
invariantes mientras que los elementos son sometidos a variación."59
Sus reglas generales son:
"Economía de explicación; unidad en la solución; posibilidad de restituir el
conjunto a partir de un fragmento y de prever los desarrollos ulteriores a partir de
los datos actuales".60
Si el estructuralismo es una actividad operatoria de naturaleza esencialmente
constructivista, construye sus objetos como simulacros, entonces el mismo es una
actividad de simulacro. Sus dos operaciones principales son según R. Barthes:
a) El Découpage : búsqueda de los fragmentos móviles (monémas, fonemas,
semas ...)
"Cuya situación diferencial engendra un cierto sentido en si, sinembargo la mínima
variación producida en su configuración produce un cambio del conjunto". 61
b) El descubrimiento de las reglas de asociación (actividad de organización);
aspecto sintáctico que revela formas: es decir, reglas de combinación que
58 J. PIAGET, Le structuralisme, Paris, Press Universitaires de France, 1972-A, p. 120.59 J. CUISENIER, Le structuralisme du mot, de lìdée et des outils, Esprit, mai 1967, pp. 825-842, p. 842.60 C. LEVI-STRAUSS, Anthropologie structurale, Paris, Plon, 1958, p. 223.61 R. BARTHES, in D. HOLLIER, op. cit., 1973, p. 56.
107
permiten despejar un sentido - una repetición - a partir del inventario de los
elementos sistematizados.
"La estructura es un instrumento forjado por el sabio para comprender,
descodificándolas, la sociedad y la cultura, y para hacer aparecer las instituciones
como reglas derivadas de un operador escondido; el modelo es entonces
inventado para expresar en términos inteligibles una realidad en sí misma opaca y
muda".62
La actividad estructuralista produce así un objeto a partir de la codificación de las
informaciones que ella recoge en conjunto, en inventarios de elementos situados
en las relaciones diferenciales, en una combinatoria.
Es necesario tener cuidado en no cofundir jamás el "ser" de la estructura con
el sistema de las relaciones observables, el ser de la estructura es la operación y
"y ... lo propio de las operaciones por oposición a cualesquiera acciones, es
coordinarse, y organizarse en sistemas".63
Una definición más profunda de la estructura nos la detalla entonces como un
objeto/simulacro con transformaciones ordenadas, como una totalidad donde sólo
cuentan las leyes de composición entre los elementos: esta totalidad es un
sistema de transformaciones/estructuraciones auto regulado. Estas
autoregulaciones pueden ser de naturaleza muy diversa: operaciones o
regulaciones perfectas con carácter reversible, reversible, regulaciones, o juego de
anticipaciones y de retroacción (feed-back) ritmos, simetrías y repeticiones.64
Frente a la recolección de los datos el estructuralismo reconoce que las
ciencias sociales "trabajan sobre los símbolos de cosas que ya son en sí mismas,
símbolos".65
Sinembargo, el estructuralista no se esfuerza en interpretar esta información, en
referirla a un sentido, sino en trabajarla al interior, en elaborarla: la organiza, la
distribuye, le asigna niveles, la descompone en elementos, la codifica, la seria, le
confiere un conjunto de relaciones, las coordina.
Las relaciones de oposición y de diferenciación emergen vigorosamente del
análisis comparativo en su fase de descomposición/descripción. La constitución
62 M. DUFRENNE, Pour l'homme. Essai, Paris, Editions du Seuil, 1968, pp. 84-85.63 J. PIAGET, op. cit., 1972-A, p. 124.64 Ibid, pp. 5-16.65 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1971, p. 574.
108
de un cuerpo de información coherente, más o menos abierto, más o menos
indefinido, es un pre-requisito para la descripción estructural, así como la
determinación de los criterios distintivos y de las reglas operatorias. Esta
descripción tiene un carácter intrínseco, inmanente:
"... La descripción estructuralista hace aparecer relaciones sin las cuales no
habrían podido ser aisladas; permite definir elementos recurrentes, con sus
formas de oposición y sus criterios de individualización; también permite
establecer leyes de construcción, equivalencias y estilos de transformación".66
Así emerge emerge entonces la fecundidad de los métodos estructurales que
toman su distancia con respecto al sentido común inmediato, de las
significaciones todas hechas de las informaciones empíricas.
De esta manera responden a los deseos más "objetivistas" de las ciencias
naturales positivas, colocan al investigador en ciencias sociales al mismo nivel de
la inteligibilidad.
"... cambiando el nivel de observación, y considerando más acá de los hechos
empíricos, las relaciones que los unen, constata y verifica que estas relaciones
son más simples y más claras que las cosas entre las cuales se establecen".67
Así se combinan dos articulaciones esenciales del método estructural: la
operación estructurante propia a los modelos formales de inteligibilidad, y el
inventario estructurado que define el corpus de los signos entre los cuales
circulará el sentido como su "efecto de superficie".
La operación estructurante confiere a las estructuras un carácter autoregulador
y Lévi Strauss puede afirmar que "el estructuralismo es resueltamente
teleológico".68 En otros, se presenta como un formalismo crítico que construye
esquemas racionales bajo los discursos simbólicos mismos. Esta
esquematización toma entonces la forma axiomática.
Se trata aquí de una voluntad de objetivación de las problemáticas de la
investigación por la vía de la formalización. Las reglas del juego y del intercambio
social son entonces vistas como asimilables a aquellas de la lógica, como conjunto
66 M. FOUCAULT, op. cit., 1969-B, p. 262.67 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1971, p. 614.68 Ibid., p. 615.
109
de reglas formales. Esta tendencia se inspira más en las matemáticas que en la
lingüística; así, Grager invita a las ciencias sociales a axiomatizarse, es decir
"enunciar una o más teorías, y plantear principios que constituyen una base
coherente y suficiente de deducción para todas las proporciones de la teoría."69
Si este breve análisis del marco de referencia estructuralista ha puesto el
énfasis sobre paradigmas esencialmente metodológicos, es porque el
estructuralismo como actividad se requiere ante todo como reflexión sobre sus
propios métodos de investigación. Un paradigma menos "puro" sería el tema _
remanente en todos sus pasos - de la exclusión del sujeto individual, o colectivo o
trascendental: es decir de la conciencia constituyente tal como la preconiza el
marco referencial de la comprehensión.
"El hacer desaparecer el sujeto representa una necesidad de orden, podría
decirse, metodológica, donde el estructuralismo quiere revelar a la conciencia
otro objeto ... "
"Después de las ciencias físicas, las ciencias humanas deben convencerse de
que la realidad de su objeto de estudio no está completamente alojado al nivel
donde el sujeto la percibe ... los unos y los otros no alcanzan jamás las cosas,
pero los símbolos a través de los cuales el espíritu los percibe en función de las
sujeciones y de los umbrales de la organización sensorial."(70
Esta expulsión del sujeto de las ciencias sociales parece paradójica en la medida
en que traiciona en alguna forma su objeto real. Esta exclusión o expulsión,
ruptura epistemológica eficaz, no carece sinembargo de pertinencia y concuerda
con los principios mismos del análisis; además, parece responder a ciertas
realidades del sujeto mismo en la medida en que revela condiciones de
posibilidad.
"... si se disocia así el sujeto del "yo" y de lo "vivido", quedan sus operaciones, es
decir lo que extrae por abstracción reflexiva de las coordinaciones generales de
sus acciones: ahora bien, son precisamente estas operaciones los elementos
constitutivos de las estructuras que utiliza".71
69 M. DUFRENNE, La philosophie de néo-positivisme, Esprit, mai 1967, pp. 781-800, p. 799.70 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1971, pp. 562, 570, 574.71 J. PIAGET, op. cit., 1972-A, p. 120.
110
También el estructuralismo busca sus vías entre las riveras de la etnología (Levi
Strauss) y las profundidades del psicoanálisis (Lacan). Sus reflexiones deben
tomar prestados igualmente los caminos de la historia (Marx, Althusser), de la
arqueología del saber (Foucault); lo que parece establecer el carácter global de su
empresa, la pertinencia profunda de sus desarrollos para el conjunto de las
ciencias sociales.
111
CAPITULO QUINTO
EL POLO MORFOLOGICO
La metodología de la investigación debe velar continuamente por la calidad
epistemológica de su procedimiento, por la elaboración de la teoría, el afinamiento
de los conceptos y la crítica de los datos.
Es más, debe esforzarse por enfocar su objeto en un espacio configurativo, un
espacio cualquiera de representación; debe esforzarse por articular los conceptos,
los elementos, las variables en una arquitectónica construida más o menos
rigurosamente. Si la teoría es el lugar de la formulación de la problemática, el polo
morfológico es el lugar de la objetivación. Múltiples problemas, cruciales para la
orientación y la naturaleza misma de la investigación, se refieren al polo
morfológico y requieren un tratamiento metodológico específico. Este polo
configura el plan de la organización de los fenómenos y los modos de articulación
de la expresión teórica objetivada de la problemática de la investigación. Es al
mismo tiempo el cuadro operatorio, práctico, de la representación, de la
elaboración, de la estructuración de los objetos científicos.
Cuatro cuadros principales de análisis, realizan , cada uno a su manera, en las
Ciencias Sociales, las funciones metodológicas del polo morfológico. Se trata de
las tipologías, los tipos ideales, los sistemas y los modelos estructurales
Tres caracteres fundamentales permiten ilustrar la función del polo morfológico
en la economía general de la investigación: la exposición, la causalidad y la
objetivación. Estos caracteres son complementarios, o mejor indisociables.
112
1. LA EXPOSICION
La exposición metódica es la función más evidente de toda formalización,
estructuración y objetivación. El polo morfológico puede verse como un
despliegue, una distribución espacial de tesis o acontecimientos, de conceptos o
de proposiciones, de hechos o de leyes, etc., es el lugar de la articulación del
sentido, de la puesta en forma de teorías y de problemáticas útiles a la
investigación. Aquí la conceptualización va a la par con la abstracción y la
formalización:
"Trabajar un concepto, es hacerlo variar en su extensión y en su comprensión,
generalizarlo mediante la incorporación de rasgos excepcionales, sacarlo lejos de
su región de origen, tomarlo como modelo ó inversamente buscarle un modelo; en
breve, conferirle progresivamente, mediante transformaciones reguladas, la
función de una forma." 1
El aspecto más "superficial" del modo de articulación del sentido se revela en el
estilo mismo en el cual el investigador expresa sus resultados. El modo de
expresión es frecuentemente un correlato del modo de reflexión y de la misma
práctica metodológica. Kaplan distingue seis "estilos cognitivos" 2 principales, por
orden de rigor (no de pertinencia metodológica):
a) El estilo "literario" es el menos alejado del saber no científico, el menos
riguroso en la exposición;
b) El estilo "académico" se ve más nocional, opera una cierta ruptura con el
sentido común al desarrollar el lenguaje esotérico, pero cuya coherencia es
totalmente relativa;
c) El estilo "erístico" es concebido más directamente para el desarrollo riguroso
de una argumentación; las definiciones y las proposiciones son mejor
concatenadas con miras a la administración de una prueba;
d) El estilo "simbólico" hace un llamado a la abstracción lógico-matemática o a
la cuantificación, lo que implica una formulación más estricta;
e) El estilo "postulativo" corresponde a la lógica hipotético-deductiva, cuyo fin
es ofrecer pruebas rigurosas, al desarrollar un sistema de axiomas;
f) El estilo "formal" realiza la abstracción completa y se desarrolla en el rigor
1 G. CANGUILHEIM, in La formalisation, Cahiers pour l'analyse, 1969, p. 2.2 A. KAPLAN, op. cit., 1964, pp. 258-263.
113
deductivo, sin preocuparse de problemas sustanciales.
Los estilos son tan diversos como las investigaciones cuya individualidad
expresan.
Cada uno de estos estilos es la expresión de la "puesta en forma" de la teoría,
de los conceptos, de los desarrollos y de los resultados de la investigación; cada
estilo realiza una articulación significativa diferente entre los elementos de la
investigación; no son incompatibles, pero poseen una lógica propia, es decir, un
tipo de rigor particular. Los tres primeros son más nocionales, mientras que los
otros tres se esfuerzan por elaborar la problemática de una manera más
formalizada.
Pero el estilo no es más que la expresión, cuando no refleja un procedimiento
global riguroso.
"por oposición a la estructuración manifiesta y a la temática operada por la ciencia
sobre sus contenidos, el estilo es esta estructuración latente y vivida de la
actividad científica misma en tanto que constituye un aspecto de la práctica."3
Más allá del modo de articulación del sentido se plantea al problema más esencial
de la conveniencia misma del espacio morfológico frente a la problemática que se
propone objetivar, hacer coherente y ubicar. La noción de validez de una ciencia,
cuando es tomada en serio, remite a la conveniencia del sistema teórico en su
totalidad; agita un problema global, morfológico, más que un problema particular
de verificación teórica. Es en su totalidad que la teoría apunta hacia un referente
en un nivel de la realidad multiestratificada de la que ella es la expresión
simbólica. Ahora bien, si es verdad que la "fuerza de lo formal es hacer presente", 4 falta por preguntarse sobre lo bien fundada de esta presencia, sobre lo pertinente
de la analogía que ella reivindica frente a la problemática que explicita.
El carácter "analógico" de una teoría es su correspondencia con el cuerpo de
conocimientos científicos reconocidos en una época dada; una teoría científica
debe en última instancia ser compatible con las teorías anteriores que ésta pueda
reemplazar, pero de las que debe dar cuenta integrándolas o rechazándolas de
manera motivada.
Campbell insiste en este carácter "analógico" de toda teoría válida, y muestra
3 G.-G. GRANGER, op. cit., 1968, p. 16.4 J. JADRIERE, op. cit., 1969-B, p. 130.
114
como se puede perfectamente construir una teoría lógicamente impecable, pero
perfectamente absurda, pues no posee relación alguna con la problemática. La
analogía estará, pues, en la base del poder explicativo de toda teoría; el sentido
de ésta no se reduce al aspecto de la articulación interna de sus elementos, de la
coherencia de sus preposiciones, sino que trasciende la simbolización hacia una
significación que la desborda.
"En la historia de la ciencia algunas teorías han sido frecuentemente recibidas y
tenidas en alta estima, teorías que, en opinión de todos no eran completamente
verdaderas ni constituían el equivalente estricto de las leyes experimentales, por
cuanto estaban organizadas intelectualmente a partir de nociones consideradas
como intrínsecamente válidas." 5
De lo que se trata es del problema de las "metáforas científicas" que son parte
esencial de las teorías científicas, sin las cuales éstas no tendrían "valor alguno y
serían indignas de su nombre".6 La teoría es un "modelo" de la problemática que
ésta enfoca a través de sus operaciones referenciales. La diferencia capital con el
polo teórico es que en el cuadro morfológico no se trata de aplicar una lógica de
prueba, de proceder a "verificaciones empíricas". La sola "prueba" es aquí el
rigor, la coherencia interna de los objetos científicos, coherencia semántica y
sintáctica, coherencia "pragmática" (Apostel) y "estilística" (Granger).
En efecto, no toca al polo morfológico pronunciarse sobre cuestiones de
prueba, de querer suministrar un protocolo que permita la prueba empírica. Es
éste el papel de la teoría. Al polo morfológico incumbe la sola función
metodológica de suministrar una configuración, una arquitectura.
Esta función de exposición, con la exigencia de coherencia que ella comporta,
y más allá de su expresión "estilística" latente, toma todo su sentido a la luz de la
noción de red. En la concepción de un "cuadro morfológico" que toma lugar del
espacio de causalidad, de exposición y de objetivación, parece que la idea de red -
como categoría epistemológica7 - es esclarecedora. cada punto ó vértice de la
"red morfológica" puede representar, a la libertad, una hipótesis, una variable, un
elemento cualquiera, un fenómeno, un acontecimiento, por un artificio de
desarrollo espacial. Este diagrama de red configura un cuadro de razonamientos
5 N. R. CAMPBELL, Analogie, théorie et hypothèse, in P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 295.6 N. R. CAMPBELL, in A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 297.7 M. SERRES, op. cit., 1968, pp. 11-20.
115
con varias entradas y múltiples conexiones. Una modalidad posible de esta red es
el modelo lineal en el que se plantea explícitamente la irreversibilidad temporal de
la secuencia. Para M. Serres, el argumento dialéctico tradicional, la forma
silogística, tomaría este tipo de modelo y aseguraría la linealidad de conceptos
tradicionales tal como se expresan en la cadena sintagmática del discurso.
Al contrario, tomada la red en su más amplia extensión, demuestra bien a las
claras que esta linealidad no es fatal; la red es tabular: los elementos son
interdependientes, la irreversibilidad es superada (por ejemplo, el feedback en la
cibernética), la causalidad puede ser librada del simplismo del antecedente y el
consecuente, es posible recortar en esta red subconjuntos delimitados, localmente
organizados, y separar totalidades parciales, plurales, sectoriales.
Todo elemento de causalidad está conectado al conjunto de los elementos de
la red. De esta manera los elementos, siguiendo el estado complejo de la red,
serán "indeterminantes" (es decir despreciables ó "accidentales" desde el punto de
vista de la causalidad) ó sobredetermiantes (es decir, esenciales desde el punto
de vista causal).
Esta red configura un espacio morfológico disponible para objetivar la
problemática de la investigación y articular un sistema teórico,
"...refinando y complicando el modelo, abordamos la realidad generalizando la
técnica metodológica ... La complejidad no es ya un obstáculo para el
conocimiento, ó peor, un juicio descriptivo, es la mejor de las ayudas del saber y la
experiencia." 8
El espacio morfológico puede desdoblarse en varios planos para acoger la
construcción de "modelos" teóricos que se refieren a modelos materiales que
describen estados de las cosas. Los modelos teóricos pueden ser icónicos o
simbólicos; si, por otra parte, sirven para interpretar una teoría abstracta, se
inscriben en un movimiento axiomático: son modelos de una teoría cuyas
condiciones de posibilidad enuncian.
Más frecuentemente los modelos teóricos son modelos para una teoría,
expresan y precisan ciertas regiones particulares de una teoría que los engloba y
les da sentido.
La categoría de red morfológica permite situar problemas específicos en gran
número de investigaciones, así:
8 Ibid., pp. 17, 20.
116
a) Sistema Vs. Proceso: el sistema es una totalidad parcial recortada de la red y
conectada con otras totalidades, otros sistemas; supone un funcionamiento
autónomo: es un gráfico tabular. El proceso es la extensión lineal de la red; sigue
una progresión secuencial lógica y/o cronológica, iterativa ó reiterativa. La
temporalidad del sistema es sincrónica: todo funciona al mismo tiempo, mientras
que en un proceso los sucesos se encadenan sucesivamente.
b) Totalidad global Vs. totalidad parcial: problema del nivel de "análisis". El
investigador tenderá hacia una totalidad global, si identifica el conjunto de la red
en el objeto de su investigación; tenderá hacia una totalidad parcial, si busca
definir un conjunto en su contexto, si delimita otras totalidades parciales
conectadas a la primera. Notemos que un proceso busca frecuentemente un tipo
de causalidad global abstraída de todo contexto; sinembargo, diversos procesos
interconectados pueden configurar el aspecto de funcionamiento de un sistema.
c) Continuidad Vs. discontinuidad: el problema de la (dis) continuidad está
íntimamente ligado al de la causalidad. la causalidad continua implica la
explicación de todos los fenómenos por el mismo cuerpo de principios. La
causalidad discontinua apela a diversos principios que pueden ser aún
contradictorios. La continuidad supone la conexión sin ruptura, la unitemporalidad
de la deducción; la discontinuidad en cambio, admite rupturas, diferentes niveles
de interpretación y de explicitación que no son extrapolables a otros niveles. Lo
que anuncia la segunda característica del polo morfológico es constituir un
espacio de causalidad.
2. LA CAUSALIDAD
En la red morfológica, las conexiones entre tesis, acontecimientos, variables,
proposiciones, pueden presentar múltiples formas; un factor cualquiera puede
aparecer como determinante, determinado, esencial, accesorio, independiente,
dependiente, etc.
La causalidad es la operación que permite que "cualquier cosa"
(acontecimiento, efecto, situación, hecho) suceda bajo ciertas condiciones teóricas
determinadas. Es a través de la configuración utilizada, como se precisa el tipo de
causalidad: causalidad simple ó múltiple, determinación unívoca ó múltiple.
"La causalidad me hace pasar de cualquier cosa que me ha sido dada a la idea de
117
otra cosa que jamás me ha sido dada y aunque no es dable por la experiencia ...
la causalidad es una relación según la cual, yo sobrepaso lo dado, más aún,
aquello que es dado o dable; brevemente, yo infiero y creo, yo espero, yo espero
que..." 9
La causalidad es posición de una coherencia lógica y/o significativa que articula
los hechos científicos en una configuración operatoria: No se trata aquí de
abordar el problema clásico de la causalidad en todos sus matices,10 sino
simplemente de notar que esta noción funciona - no en desprecio de un
positivismo estrecho - al interior de la investigación científica, así no sea más que
a título heurístico. La causalidad será denominada "expresiva" ó "comprehensiva"
dentro de un tipo ideal y será "positiva" dentro de un sistema empírico, y
"estructural" en los modelos formalistas.
El marco morfológico relieva notablemente el problema del atomismo y del
holismo metodológicos: será preciso considerar el objeto de la investigación como
un agregado o como una totalidad, un "sistema"?. Es decir, será preciso suponer
y volver a buscar rastros de causalidad externa o bien considerar vínculos de
causalidad interna.? La distinción clásica entre los tipos de causalidad:
explicativa y comprehensiva (Dilthey, Weber ...) ha de examinarse de manera
crítica.
La "explicación" propone un tipo de causalidad "externa" que sigue el modelo
"fisicalista" entre elementos, variables, fenómenos. Frecuentemente la secuencia
temporal sirve de guía al establecimiento de la explicación: siendo un suceso "a"
anterior a otro "b", se buscará establecer la influencia de "a" sobre "b". Al
contrario, razonamientos de tipo "finalista" demostrarán que "a" es producto de la
realización subsiguiente de "b"; este razonamiento es frecuente en modelos
funcionalistas de explicación: la finalidad, el fin, constituyen la causa determinante
(teleonomía).
La explicación busca descubrir constantes nomológicas o leyes estocásticas.
La comprehensión propone un tipo de causalidad "interna", de tipo expresivo, que
se refiere a la significación de fenómenos comprendidos como totalidades por un
sujeto. Se trata de la consistencia lógica y de la coherencia semántica, poniendo
el acento en el predominio del todo sobre sus partes.
Pero toda explicación es interpretación y remite entonces a una teoría, a un
9 G. DELEUZE, Hume, in F. CHATELET, op. cit., 1972, p. 68.10 Cf. F. ALQUIE, in F. CHATELET, op. cit., 1972, pp. 203-222; J. LOSEE, A Historical Introduction to the Philosophy of science, Oxford, Oxford University Press, 1972.
118
sentido. La explicación es imposible sin una cierta comprensión del fenómeno
global que plantea un cuadro de referencia para esta explicación. Por otra parte,
la comprensión por coherente y plausible que sea, jamás garantizará ella sola la
validez de una ciencia empírica; los conjuntos formados deben ser verificados
empíricamente para ser totalmente válidos. En esta forma un "tipo ideal"
comprensivo no es nada si no permite incluir la investigación en la vía de la
explicación causal; comprensión y explicación son pues separables pero
complementarias, son dos aspectos metodológicos de la causalidad porque
comprender es percibir ya una necesidad.11
Más generalmente, la causalidad puede verse como el resultado de la
distribución específica de un conjunto de determinaciones producidas por una red
de estados de cosas. Estos estados de cosas que corresponden a un tipo de
determinación, producen un conjunto de efectos, de acontecimientos. Estos
acontecimientos pueden igualmente ser incorporados en la explicación causal, en
una red ampliada - que comprende el conjunto de estados de cosas y la red de
acontecimientos - y desempeñan el papel de cuasi-causas. La red es entonces
vínculo de causas entre los sí y ligazón de los efectos entre sí. El efecto aparece
en la singularidad del suceso puesto que difiere de la causa y de los otros
acontecimientos que son su cuasi- causa.12 Es esencial para el investigador
distinguir las causas de los efectos, pero es igualmente importante ver el choque
en cambio de los efectos sobre los estados de las cosas y sobre el tipo de
causalidad que de allí puede derivarse.
La red morfológica puede contener conexiones13 de tipo diferente entre los
fenómenos sociales o sus correspondientes teóricos, conexiones laxas o densas.
1) La proximidad espacial ó temporal no permite más que establecer la existencia
de agregados sin cohesión interna;
2) El vínculo "causal-indirecto", que designa semiagregados, puede ser
establecido entre hechos, elementos, etc., que son los correlatos contingentes de
otro grupo de hechos ó elementos;
3) El vínculo "causal-simple", que designa "sistemas causales", se establece bajo
forma de "ley hipotética" cuando una interdependencia relativamente constante ha
11 Max WEBER habla de la "comprensión explicativa" y de la "explicación comprensiva" para señalar bien su solidaridad.12 G. DELEUZE, op. cit., 1971, p. 115, pp. 115-121.13 P. A. SOROKIN, Sociological Theories of Today, New York, Harper & Row, 1966, pp. 17-21.
119
podido ser establecida entre fenómenos sociales;
4) El vínculo "significativo" propio de los "sistemas significativos", establece un
género de causalidad comprensiva, una totalidad (Ganzheit) significante;
5) El vínculo "causal y significativo" que designa "sistemas" del mismo nombre,
integra los dos tipos de causalidad precedentes, la explicación y la comprensión.
3. LA OBJETIVACION
La tercera característica del polo morfológico es su facultad de objetivación. La
puesta en evidencia de una forma, la especificación de una red de relaciones
tiene la función indispensable de constituir un espacio de causación y de
significación; implica además una analogía", una operación referencial que
fundamente la validez de esta estructuración de la problemática. El polo
morfológico ayuda a separar un campo de "inter-objetividad" donde la crítica
intersubjetiva de investigaciones puede desempeñar su papel regulador. Se parte
allí del empirismo fragmentario, del diletantismo, se forma un espacio de lenguaje
común. Es esta la función "metalingüística" o de glosa (Jackobson) del polo
morfológico. Así, la forma delimita
"un conjunto que tiene un sentido y que ofrece un punto de apoyo al análisis
intelectual. Pero al mismo tiempo no es una idea, se constituye, se altera, ó se
organiza delante de nosotros como un espectáculo".14
Esta explicación del sentido por la forma permite la acumulación de búsquedas y
resultados en un cuadro de análisis coherente (tipología, sistema, estructura, tipo
ideal). La teoría aquí se fortifica y se consolida constamente.
El polo morfológico tiene dos régimenes de funcionamiento netamente
diferenciados, según que su función metodológica sea configurativa ó
arquitectónica. Los "modelos" (en el sentido amplio de la palabra) que prevee el
espacio morfológico, es decir, los ordenamientos de la red en singularidades
determinadas, pueden tender, sea hacia una copia de lo real, de la problemática, o
sea hacia un simulacro de esta realidad, de la problemática. La copia es el
aspecto configurativo, el simulacro, el aspecto arquitectónico. La copia es
representación del objeto de la investigación concebida como exploración
detallada, transcripción fiel, expresión bien fundada y adecuada. El simulacro es
14 M. MERLEAU-PONTY, in J. VIET, op. cit., 1969, p. 241.
120
construcción, autoproducción del objeto científico que se "inventa" a sí mismo. La
copia se quiere fiel a una "realidad" significativa, es expresión científica de una
metáfora, tiene una perspectiva simbólica del restablecimiento de un sentido,
busca una verdad, una adecuación de modelos. El simulacro, en posición
subvierte un dominio problemático al esforzarse por producir un nuevo sentido; es
instrumental, contiene potencialidades fecundas de producción original del sentido,
pues contiene sus propias reglas de construcción; es autoregulado. Si la copia es
producción de "modelos icónicos", de imágenes "parecidas" de la realidad, el
simulacro es producción de "modelos fantasmas",15 es decir, de imágenes
profundamente diferentes (des-semejantes) de la realidad aprehendida en el punto
de partida; el simulacro no es ya una copia degradada sino que encubre un poder
positivo que niega, el original y su copia, el modelo y su reproducción.
El polo morfológico en régimen de simulacro organiza elementos no
significativos para acceder progresivamente a un sentido, producido in fine. La
aproximación axiomática instaura un cierto régimen de construcción de
significaciones.
En la vía configurativa, se parte de un sentido para especificar, concretar,
refinar todo, permaneciendo fiel, se trata de traducir un contenido de sentido en
signos, de pasar de la complejidad del sentido a la claridad del signo. La copia va
entonces a la par con la aproximación simbolizante: los símbolos o arquetipos son
conjuntos concretos con significación sobredeterminada, ellos vuelven a un
sentido, a una semántica subyacente y no son la clave de un método que éstos
llegan a definir como un campo semántico preciso. De esta manera, el tipo ideal
es una forma con capacidad de sentido, sobrecargada de significación, indica
familias de configuraciones por similitud de sentido. El método comparativo sólo
lleva a una adecuación más o menos exacta de contenido a contenido. El
"modelo" es entonces una forma con saturación de sentido, una constelación
sintética, una esencia eminentemente realizada. El simulacro va a la par con la
aproximación formalizante: no se preocupa por un contenido significativo, se
esfuerza por formar un lenguaje que desarrolle sus propias reglas, define un
código de señales y reglas de formación sintáctica que no poseen ninguna
semántica subyacente.
"Se estudia solamente la serie de buenas conformaciones de objetos (indefinidos)
entre ellos, dándose por entendido que hayan sido propuestas al comienzo las
15 G. DELEUZE, op. cit., 1971, pp. 292-324.
121
reglas de buena formación." 16
Estas dos formas de objetivación - copia y simulacro - engendran a veces formas
debilitadas, ilegítimas: "copia esquemática" y "artefacto".
La copia esquemática constituye el objeto en un modelo reducido a algunos
rasgos específicos considerados como esenciales. La simplicidad es un criterio
metodológico que tiene sus límites (Bunge); ella no puede hacer que un
esquematismo reductor substituya una complejidad más inteligible y más
verificable. El esquematismo va a menudo paralelo al "mimetismo", aquello que
Kaplan llama "realismo pictórico". El peligro está en asimilar la totalidad del objeto
como problemática a algunas propiedades que se han descrito en un modelo
icónico. Sería cometer un error grave el querer "reencontrar" analógicamente en
lo real todos los aspectos de una copia esquemática, de un modelo mimético.
El artefacto es una copia de copia, simple traducción en otro lenguaje de un
modelo teórico, icónico, o simbólico cualquiera. El debe ponerse en guardia, aquí,
contra una pretendida "formalización", que no es otra cosa que una traducción
servil en lenguaje cuantitativo, matemático, lógico de un simple esquema icónico o
de un modelo simbólico sin agregarle nada. Ese género de formalización no sirve
gran cosa, sino para obscurecer y esterilizar la problemática mediante la práctica
terrorista de un lenguaje esotérico que sólo masculla una indigencia conceptual.
Así pues, el polo morfológico se define por sus tres grandes características de
exposición, de causación y de objetivación. Se trata de un "polo" autónomo de la
investigación. La cual sinembargo no se reduce solamente a ese aspecto de
configuración o estructuración arquitectónica. Esta autonomía sólo tiene sentido
dentro de relaciones concretas con el conjunto de pasos metodológicos:
epistemológico, teórico y técnico.
Bachelard ya decía que una forma es sólo un momento de un proceso de
deformación, todo "modelo" es sólo un momento de la problemática, una puesta
en forma provisional del sentido.
"El modelo, momento técnico o figura ideal, toma lugar, de la mejor manera
posible, en las fronteras de la práctica científica ... todo detenimiento sobre el
modelo constituye un obstáculo epistemológico."17
16 M. SERRES, op. cit., 1968, pp. 31, 32.17 A. BADIOU, Le concept de modèle, Paris, Maspero, 1972, p. 17.
122
Es un "mito estructuralista" reducir toda la empresa científica al aspecto de
estructuras, de tipos, modelos, formas abstractas. El lugar particular asignado a
la morfología le traza sus límites metodológicos.
El cierre de la problemática es un peligro inherente a la autonomización
abusiva en la práctica del polo morfológico; en efecto, es un riesgo grande unir el
rigor con la rigidez, se debe al menos recordar que
"si el sentido se desplaza hacia el objeto, este no puede ser ya más ubicado en la
realidad como exterior al sentido, sino solamente como el límite de su proceso." 18
El polo morfológico es pues, el lugar de una necesaria "regresión topológica"
(Serres) que sólo permite la aplicación eficaz de la lógica de la prueba: es un
campo de determinabilidad, un espacio de causación; es también el lugar de una
combinatoria, de un cálculo de problemas del que se desprenden progresivamente
los objetos científicos y que permite establecer hechos que les son soluciones
teóricas.
Las ciencias sociales han producido y/o utilizado cuatro espacios principales de
"cuadros de análisis" para realizar las funciones morfológicas: las tipologías, los
tipos ideales, los sistemas y los modelos estructurales.
18 G. DELEUZE, op. cit., 1972-A, p. 200.
123
CAPITULO SEXTO
LOS MARCOS DE ANALISIS
1. LAS TIPOLOGIAS
En las ciencias sociales la noción de tipo es indisoluble de la idea de clasificación.
La tipología entendida como voluntad de especificación está ligada a la taxonomía
como voluntad de clasificación. El tipo integra elementos discretos en una unidad
coherente, la taxonomía es la integración de series discretas en un orden
continuo.
Las tendencias empiristas en las ciencias sociales utilizan corrientemente las
tipologías, instrumento indispensable para la conceptualización, y se someten a
menudo a un psicologismo remanente,1 sobretodo a nivel de la recolección de
datos por medio de la compilación de indicadores que no son sino formas
agregadas en torno a individuos interrogados, entrevistados, etc.
Las tipologías empiristas presentan una marcada afinidad con el marco de
referencia empirista analítico y de hecho corresponden a un estado poco
avanzado del desarrollo de una disciplina científica. Contribuyen a la formación de
un marco conceptual ampliamente descriptivo que, a lo sumo tiene un poder de
generalización empírica. En este marco el objetivo de la tipologización o de la
clasificación sistemática es la elaboración conceptual, el afinamiento o, una mejor
precisión en los conceptos. La tipología es una estructura conceptual analítica
que no se debe asimilar pura y simplemente a una teoría.
1 No es por casualidad que las tipologías han encontrado en la psicología un terreno fructífero alrededor de las nociones de persona y de individuo; el tipo al igual que el individuo, se considera como una unidad autónoma que tiene una coherencia interna específica.
124
"Una clasificación sistemática ... consiste en la organización de un grupo de
conceptos ... es una jerarquía .. Un sistema taxonómico no es, entonces, una
teoría (un sistema de proposiciones) sino un sistema de conceptos y un conjunto
asociado de hipótesis." 2
De hecho, la tipología como tal no es invalidable y uno verifica que en la práctica
de la investigación el concepto original (tipo) permanece intacto a pesar del
descubrimiento de numerosas excepciones empíricas ..."3
Este proceso analítico de clasificación destaca la acumulación de rasgos
específicos, de factores, para caracterizar los fenómenos, para calificar la esencia
de un concepto. El tipo constituido, "tipo concreto" según Lazarsfeld, restituye una
imagen sintética totalizante.
El tipo concreto es la "combinación lógica de atributos esenciales" (Lazarsfeld),
la tipología quiere ser copia semejante, adecuada. Descriptivo en su construcción,
el tipo concreto pretende cierta forma de "explicación" mediante la demostración
lógica o estadística de la coherencia de la taxonomía en donde se inserta.
El marco de referencia positivista tampoco carece de relación con la voluntad
taxonómica, en la medida en que ésta no es sino la expresión de la tendencia a
ordenar en cuadros estadísticos los fenómenos sociales, de los catálogos.
Pero un simple espíritu de orden y clasificación no es evidentemente, la única
garantía de la cientificidad del análisis. Para asegurarlo más firmemente es
necesario interrogarse sobre los principios mismos de clasificación, sobre lo que
autoriza el análisis. Surge, entonces, el problema del origen de las hipótesis que
orientan estos análisis: el "realista" criticaría el carácter demasiado arbitrario de las
tipologías y acusará a los "nominalistas" de "sustituir las estructuras existentes (o
no) objetivamente en los fenómenos estudiados, por su propia estructuración
(ordenación) arbitraria." 4
Pero, de todas maneras, la precisión analítica - reforzada por la precisión
cuantitativa o formalista - no reemplaza la validez teórica, porque rehusarse a
despejar sistemáticamente las condiciones de posibilidad de la conceptualización,
es privarse de las garantías y los recursos heurísticos de la teorización.
La tipologización que rechaza el apoyo de una teoría explicativa está
condenada a desaparecer desde el momento en que otro análisis demuestre
atributos diferentes. Es más el refinamiento de los esquemas taxonómicos no se
2 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 80.3 T. CAPLOW, op. cit., 1970, p. 251.4 P. A. SOROKIN, op. cit., 1966, p. 113.
125
puede incitar indefinidamente sin caer bajo la causación de la precisión gratuita.
De esta manera constatamos la acumulación, sin integración posible, de
diferentes tipologías que sinembargo, parecen tratar los mismos fenómenos
empíricos. La verdadera acumulación supone una integración teórica, solamente
posible por una morigeración previa de la tipologización con referencia a un
sistema teórico. De otra forma no hay sino amontonamiento de imágenes, de
reproducciones, de copias siempre parcelarias de una realidad fluctuante.
"Para que un modo particular de análisis y de clasificación de resultados
empíricos conduzcan a una explicación de fenómenos considerados, es
necesario que se base en hipótesis acerca de la manera en que estos fenómenos
están ligados; si faltan tales hipótesis, el análisis y la clasificación son ciegas." 5
La reunión de diversas contribuciones en un cuadro "de mosaicos", cuya
coherencia es muy débil, y el carácter sincrético obstaculizante, atomizan el saber
en parcelas irreconciliables, cada una ligada íntimamente a operaciones
clasificatorias particulares. Las tipologías tienen, entonces, una utilidad bastante
restringida, que se cubre púdicamente bajo la etiqueta "heurística": no son más
que un instrumento de búsqueda y no un método de explicación." 6
La construcción tipológica aislada de la teorización no es una respuesta a la
problemática de investigación; ella no puede ser más que un medio cómodo de
abordar un estudio.
Para caracterizar metodológicamente la noción de tipologías es necesario
enunciar las condiciones formales de construcción: 7
1. Es necesario un concepto que defina el objeto de la tipología;
2. Después, relaciones que determinen un orden entre los elementos de la
tipología, lo que constituye su carácter esencialmente taxonómico;
3. Luego, proposiciones que impliquen ciertas características (Ejemplo, la
transitividad) a propósito de estas relaciones;
4. Por último un conjunto de conceptos que designen elementos específicos de los
universos de discurso (tipos), distantes entre sí, o situados en los extremos de la
tipología.
5 C. G. HEMPEL, op. cit., 1972, p. 20.6 A. TOURAINE, op. cit., 1965, p. 109.7 R. S. RUDNER, op. cit., 1966, p. 37.
126
La noción de tipo no se identifica con aquella de categoría, lo "típico" designa una
selección de atributos esenciales, una mirada a lo específico que permite hacer a
un lado los atributos accesorios. El problema fundamental consiste en encontrar
criterios pertinentes de discriminación que permitan un aislamiento unívoco y
representación del objeto analizado.
Así, se habla de tipos "naturales" cuando estos criterios clasificatorios
constituyen rasgos observables permanentes, "propiedades" tales como la edad,
el sexo, etc.
En ciencias sociales, el tipo es esencialmente "construido, es decir, es más
"artificial", más conceptual, más abstracto, aunque busque en última instancia
recuperar lo concreto. Se trata siempre de deteminar las variables, los atributos
pertinentes a una situación que se quiere describir; las combinaciones posibles
entre estos elementos llegan a caracterizar diferentes tipos, a elaborar una
tipología.
Toda taxonomía, aún basada en tipos "naturales", se cimenta en última
instancia en una teoría, pues "las propiedades están representadas por conceptos,
y la interrelación de un conjunto de propiedades está representada por las
relaciones lógicas entre los conceptos correspondientes; estas relaciones entre
conceptos están enunciadas en proposiciones, a su turno organizadas en cuerpos
teóricos."8
La clasificación va a la par con la definición de las entidades, por medio de sus
relaciones recíprocas de similitud y diferencia, su tipologización. la clasificación
designa, entonces, una rejilla de denominaciones y la tipologización, entonces, es
el uso concertado de los nombres. Constituyen un dominio de empiricidad
ordenable y descriptible a la vez.
La tipología debe comprender el principio de las conexiones que unen a los
diferentes tipos entre sí. Estas conexiones son relaciones de orden que
constituyen el carácter esencial de la tipología; ésta es entonces la dimensión
explicativa de un sistema de clasificación:
"...Se querrá ... estudiar las diferencias implícitas a una clasificación dada: se
hablará entonces de tipología ... El orden tipológico puede considerarse así, como
la explicación del orden estadístico." 9
8 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 85.9 R. BOUDON et P. LAZARSFELD, éds, Le vocabulaire des sciences sociales. Concepts et indices, Paris, Mouton, 1967, pp. 16, 18.
127
La taxonomía es el artificio metodológico que permite organizar series de
observaciones. Una serie única define un orden lineal, circular o periódico, la
conexión de dos series define un orden correspondiente a una tabla de doble
entrada. La conexión de varias series define un orden matricial enésimo. Varias
operaciones tipológicas son posibles: en primer lugar, la simple partición y la
yuxtaposición de tipos (ejemplo de una escala nominal), los tipos alveolares
presentan una relación de exclusión mutua, están construidos como clases
extensivas: el proceso es "cualitativo" aun cuando arroje tipos intermedios
definidos por su varianza y su frecuencia estadística.
La partición más simple es la oposición dicótoma que utiliza conceptos
bipolares gracias a los cuales se elaboran sistemas de medida. Los tipos
opuestos son tipos extremos "puros" y autorizan el paso de un orden cualitativo
nominal a un orden cuantitativo de medida:
"Los casos individuales no se pueden esconder bajo ellos (los tipos extremos
puros, N. T), solamente se pueden caracterizar de acuerdo a la intensidad con la
cual se aproximan a los tipos extremos." 10
El tipo puro al cual se atribuye un orden por medio de las relaciones antisimétricas
y transitivas permite determinar criterios de comparación más refinados entre los
elementos de la tipología:
"... Un tipo extremo T perteneciente puramente al género comparativo u ordinal
está definido, no por su genus et differentie a la manera de un concepto clase,
sino especificando dos relaciones diádicas (de díadas, N. T.), "más T que" y "tan
T como". 11
Para definir un "grado de tipificación" es necesario, además, definir un orden
numérico, o por lo menos un sistema estructurado linealmente: se trata no
solamente de operaciones de clasificación sino también de reducción en el
movimiento mismo de la complejidad del fenómeno hacia dos componentes o
dimensiones, donde las diferencias cualitativas entre los tipos considerados se
descomponen en una variación de frecuencias.
Se puede hablar de cuantificación "cuando una estructura de orden está ligada
10 C. G. HEMPEL, Typological Methods in the Social Sciences, Science, Language and Human Rights, 1952, vol I, pp. 65-86, B, p. 214.11 Ibid., p. 214.
128
a una estructura algebraica."12
El tipo puro es entonces simplemente un polo extremo dentro de una escala
lineal definida por un criterio específico de categorización.
Otra operación tipológica es la combinación de tipos: se asocian diferentes
dimensiones independientes con valores precisos para cada una de ellas y así
constituir un cuadro analítico, una combinatoria u orden cruzado.
El procedimiento es llamado algunas veces "reducción", si consiste en
combinar un gran número de tipos en algunos tipos fundamentales, dejar de lado
las clases más raras y acercar las clases comparables (fundir clases, N. T.) Este
procedimiento es cualitativo.13
Una última operación es la subdivisión: a partir de tipos dados se construyen
otros, sea por diferenciación taxonómica simple, por fraccionamiento, sea por
"substitución": se parte de tipos establecidos y se busca especificarlos por medio
de un conjunto de categorías, para proseguir a combinarlos en una tipología más
amplia que más o menos se aparte de la inicial. Hay, aquí, una perspectiva de
evolución dinámica de las tipologías, en la medida en que éste procedimiento
"abre" la tipología a espacios de nuevos atributos por incluir... La substitución
"consiste en descubrir y definir de manera precisa el espacio de atributos
subyacentes en una tipología implícita."14
El marco tipológico permite muchas veces la aplicación del método
comparativo, construye el discurso científico en un sistema de clasificación que
permite ordenar los fenómenos en categorías lógicas, según criterios que las
definen. Los criterios que discriminan entre tipos, pueden ser de naturaleza
conceptual, formal ó indicativa. La comparación entre los tipos permite eliminar
diferencias menores y obtener tipos abstractos de naturaleza genérica.
Sinembargo, es necesario tener sumo cuidado en no asimilar un tipo "concreto"
a una teoría verificada y de no asimilar la frecuencia de aparición de un fenómeno
a su importancia conceptual. Solamente un control teórico sistemático permitirá
evitar estos deslices. Abstraer la tipologización de la teorización es condenarse a
fijar los fenómenos sociales en taxonomías estáticas, es eliminar la historia bajo la
máscara de la evolución, incluso del orden.
12 G.-G. GRANGER, op. cit., 1960, p. 137.13 A. BARTON, Le concept d'espace d'attributs en sociologie, in R. BOUDON et P. LAZARSFELD, op. cit., 1967, pp. 148-170.14 J. GREENBERG, Nature et usage typologies linguistiques, in R. BOUDON et P. LAZARSFELD, op. cit., 1967, pp. 195-196.
129
2. EL TIPO IDEAL
La elaboración ideal-típica sintetiza un cierto número de rasgos propios de un
fenómeno para formar un todo, una "constelación". Estos rasgos se escogen en
virtud de su carácter típico, a partir de un punto de vista privilegiado, de una
problemática que engendra la dinámica de la construcción ideal-típica. Este punto
de vista selecciona los elementos y les da una coherencia, produciendo así una
totalidad significativa. El tipo ideal es, entonces, a la vez una "eidética descriptiva"
y una "eidética formal esquematizante",15 se esfuerza tanto en describir los
fenómenos de manera significativamente coherente, como en aprehender la
estructura y la ley.
El objetivo del tipo ideal no es reseñar todas las determinaciones de un
fenómeno, sino hacer su existencia inteligible desde un punto de vista científico.
Rebasa el enfoque "generalizante"16 que busca establecer conexiones constantes
entre varios factores (es decir, leyes). Este enfoque es únicamente un trabajo
preparatorio útil, no agota la explicación de los fenómenos, su "comprensión."17
En efecto, no sólo la búsqueda de la acusación jamás está cerrada, sino lo que es
lo más importante, las leyes generales jamás autorizan un conocimiento deductivo
adecuado, de toda la complejidad de una situación ó de un evento particular. Las
leyes articulan conceptos genéricos que se hacen constantes a través de series
de eventos comparables y permanecen limitadas a generalidad o a regularidades
empíricas. El tipo ideal, por el contrario, constituye en la investigación del evento
singular, esa "constelación" de conexiones causales-significativas que da cuenta
de un fenómeno social. El interés reside en el evento individualizado tomado en
su totalidad y "significativo en su singularidad." 18
"...Todo tipo ideal es una organización de relaciones inteligibles propias, ya sea a
un conjunto histórico, ya sea a una serie consecutiva de eventos." 19
Este proceso individualizante" se prohibe utilizar conceptos "genéricos" que
reagrupan las características comunes a varios fenómenos. Elabora un concepto
específico para cada fenómeno singular, un concepto individual.20 Para hacer
15 G.-G. GRANGER, in J. VIET, op. cit., 1969, p. 214.16 J. FREUND, op. cit., 1968, pp. 33 y sgtes.17 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 158.18 Ibid., pp. 162, 166, 212.19 R. ARON, op. cit., 1967, p. 519.20 J. FREUND, op. cit., 1968, p. 53.
130
esto, despeja y pone en evidencia lo que el evento contiene de original, de
característico, de distinto, de típico. El tipo ideal no es, entonces, ni un promedio
ni una copia esquemática de lo real - como tal, es inobservable -21 porque está
diseñado con la intención de llevar hasta el límite cada uno de los rasgos de la
situación concreta para producir una representación sobre-real, un concepto
hiperconcreto. La construcción ideal típica no busca reproducir adecuadamente
"la realidad concreta", ni despejar su estructura ideal, sino dar al fenómeno una
descripción "excesiva" (superlativa, N. T.) a fin de poder identificarlo mejor. El tipo
ideal es una ficción idealizante" (Husserl), una representación coherente y
estilizada, una especie de utopía concreta.
El tipo ideal como expresión de una problemática contiene su propio principio
de constitución, su propia génesis, sus propias condiciones de posibilidad. En
este sentido, es un concepto genético.22
"Un ideal tipo se obtiene acentuando unilateralmente uno o varios puntos de vista
y encadenando una multitud de fenómenos dados aisladamente, difusos y
discretos, que se encuentran, ya sea en gran cantidad, ya sea en pequeña
cantidad y que en ocasiones no están presentes, que se ordenan según los
puntos de vista precedentes escogidos unilateralmente, para formar un marco de
pensamiento homogéneo." 23
El tipo ideal se constituye por una relación explícita con valores seleccionados por
la investigación. En función de esta relación, el tipo ideal organiza las
informaciones, las hace significativas integrándolas en una "constelación": es el
principio unificador.24
Para Weber, la relación con los valores no puede constituir un juicio de valor.
El investigador plantea los valores por la fecundidad que presentan para una
compresión de los fenómenos. No los propone para ser la apología de una ética o
de una ideología. La "neutralidad axiológica"25 se impone al interior de la
investigación científica. Los tipos ideales "constituyen procedimientos puramente
experimentales que el sabio crea voluntariamente y arbitrariamente, siguiendo las
necesidades de la investigación, y que abandona de la misma forma si no prestan
21 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 181; T. PARSONS, op. cit., 1968, p. 603.22 Cf. M. WEBER, op. cit., 1965, pp. 185, 186.23 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 181.24 T. PARSONS, op. cit., 1968, pp. 602-603.25 M. WEBER, op. cit., 1965, p. 193.
131
el servicio buscado."26 De este nominalismo metodológico, se desprende que
varios tipos ideales pueden proporcionar simultáneamente, a propósito de un
mismo fenómeno, puntos de vista particulares donde cada uno puede completar
los otros. Llegamos entonces, "a un conjunto de interpretaciones, cada una
selectiva e inseparable del sistema de valores escogido."27
Al unir los polos morfológico y teórico, el papel que va a jugar el tipo ideal
dentro de la investigación es doble, según se intervenga como concepto analítico
ó como cuadro sintético.28 Como término analítico introducido en un marco teórico
cualquiera (en un sistema de proposiciones), el tipo ideal, copia simbólica
"comprehensiva", cumple únicamente una función semántica designando un
conjunto nocional (de nociones) complejo. No propone ninguna aserción teórica,
solamente expresa un conjunto de predicados definidos. Como tal, no puede ser
entonces, ni invalidado ni confirmado, juega un papel puramente operativo dentro
de un marco teórico dado.
Considerado en sí mismo como un simulacro en constante elaboración, como
forma genética, el tipo ideal es un modo de teorización: contiene en resumen un
conjunto de generalizaciones, juega el papel de un sistema de proposiciones, una
suerte de axiomática y en ese sentido, cumple una función teorética: tiene un valor
explicativo y predictivo.
En la unión de los polos morfológico y técnico, el tipo ideal cumple una función
heurística en cuanto es constelación cerrada. Bajo su aspecto de "eidética
descriptiva", sirve de punto de referencia para comparar los contenidos
significativos de los tipos empíricos observados en la realidad:"29 guía la
recolección de información, permite medir la distancia de ésta respecto a lo típico
y aclarar la singularidad de los eventos, su perfil como indicador.
En su asécto de "eidética formal esquematizante", el tipo ideal puede ser
comparado semánticamente con otros tipos ideales en base a sus "homologías
estructurales,30 con el fin de llegar a totalidades conceptuales más comprensivas,
más englobantes, porque están mejor interrelacionadas en totalidades
significativas.
3. LOS SISTEMAS
26 J. FREUND, op. cit., 1968, pp. 57, 58.27 R. ARON, op. cit., 1967, p. 509.28 R. S RUDNER, op. cit., 1966, pp. 54-63.29 M. WEBER, op. cit., 1965, pp. 180, 181.30 R. BOUDON, op. cit., 1969, p. 101.
132
El marco de análisis sistémico reconoce en cualquier problemática de
investigación el predominio del todo sobre las partes y por consiguiente aborda su
objeto bajo la forma coherente y globalizante de una red de relaciones. Un marco
así, generalmente tiende a dar cuenta la totalidad de las realidades sociales
estudiadas, privilegiando sus aspectos estructurales, queriendo aprehenderlos a
través del conjunto de sus elementos constitutivos y de las relaciones mutuas
entre estos últimos.
Desde un punto de vista metodológico, un sistema implica por lo menos:
1. Una identificación de los elementos que lo componen (conjunto de unidades u
objetos);
2. una especificación de las características o de las propiedades de los elementos,
en relación con los cuales se puede describir los estados del sistema;
3. una especificación de las reglas o de las leyes que rigen las interacciones de los
elementos o de sus propiedades, así como la sucesión de los estados del
sistema.31
En principio, los elementos constitutivos de un sistema pueden ser cualesquiera,
siempre y cuando haya una orden entre ellos, una interdependencia, un carácter
relacional.32 La noción de sistema no remite a una "cosa", sino a un orden de
cosas entre eventos, fenómenos, variables, etc.33
Por el hecho de constituir un conjunto, el sistema implica que sus elementos
tienen propiedades comunes y no únicas.
El orden que caracteriza al sistema concierne, antes que todo, a las relaciones
entre las propiedades de sus elementos, sus cualidades o sus estados, no entre
unidades concretas como tales.34
Además de sus elementos, propiedades y relaciones, que forman una totalidad
31 R. S RUDNER, op. cit., 1966, p. 89.32 Un sistema puede estar compuesto particularmente de símbolos sin referente empírico y apuntar no a un contenido que se puede conocer, sino a una forma elaborada por métodos lógico-matemáticos. Se convierte, entonces, en un "sistema operatorio" y se desarrolla de una manera completamente deductiva a partir de una axiomática (N. MOULOUD, op. cit., 1969, pp. 10-12.)33 R. J. HILL, The Concept of Sistem, Eugene, Center for the Advanced Study of Educational Administration, University of Oregon, 1967, p. 3.34 A. KUHN, The Study of Society: A Unified Approach, Homewood, Dorsey, 1963, p. 50. Así las unidades de un sistema social pueden ser roles: la ciencia no se interesa en un rol en tanto que entidad simple, sino que procede a partir de la definición de las propiedades del rol, es decir de las variables utilizadas para caracterizarlos.
133
diferente a la suma de sus componentes tomados separadamente, un sistema
generalmente contiene subsistemas y mantiene relaciones con otros sistemas
exteriores a él. Por consiguiente, cada sistema se analiza a varios niveles
correspondientes a "super-" ó a "sub- " sistemas, articulados entre sí.
Tal como comúnmente se entiende en ciencias sociales, y especialmente en la
corriente funcionalista, el concepto de sistema nació de la biología y de la
cibernética. Si se lo compara con un organismo vivo, un sistema tal es un sistema
abierto, es decir, que tiende a mantenerse en un estado de equilibrio dinámico
(homeostático) a pesar de las variaciones del medio interno y del medio externo.
Se caracteriza por la transformación de ciertos inputs - o recursos - en ciertos
outputs- o productos - con su dependencia correlativa con respecto a otros
sistemas. Su capacidad de equilibrio y aceptación resulta de la entropía negativa
que desarrolla y del mecanismo Feed-back que incorpora en su funcionamiento.
Estas dos características le dan una continuidad y aseguran su supervivencia o su
crecimiento.35
A partir de esta noción o de esta "imagen" del sistema social y de las
categorías que lo describen, se elaboraron sistemas específicos para cada objeto
de las ciencias sociales en función de las teorías formuladas, en relación con
estos sistemas. Es así como se tiene, por ejemplo, "sistemas políticos", "sistemas
de organización", "sistemas económicos" que, a falta de un mismo sistema
fundamental de base en las ciencias sociales en su estado actual de desarrollo ( a
excepción del sistema general de la acción, de Parsons) varían de acuerdo con
las teorías que los originaron.
El marco sistémico de análisis, al cual acuden las ciencias sociales, es a la vez
concreto y abstracto. No es "física y espacialmente distinto", pero puede incluir
ciertos rasgos concretos. Es esencialmente abstracto en la medida en que reposa
sobre conceptos o categorías teóricas no directamente operacionalizables. El
concepto de sistema es teorético y proporciona "las hipótesis representacionales
que pretenden denotar propiedades reales: no son simples variables auxiliares
útiles para condensar y calcular los datos."36
35 Cf. J. G. MILLER, Living Systems, Behavioral Science, vol. 10, 1965; A. A. MOLES, La
pensée technique, in La philosophie, Verviers, Editions Gérard & Cie, 1972, pp. 670-684; E. E. HAGEN, Analytical Models in the Study of Social Systems, American Journal of Sociology, 47, 1961.36 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 248.
134
Para T. Parsons, las unidades o partes (concretas o hipotéticamente concretas)
de un todo orgánico son abstracciones porque no pueden ser observadas como
existentes fuera de sus relaciones con la totalidad. Y de la misma forma, las
propiedades generales de las unidades son abstracciones cuyos correlatos
observables constituyen sólo su valor particular dentro de un caso particular.37
Todo sistema concebido de esa manera es teórico y no "real", define solamente
propiedades y relaciones generales. Para aplicarlo a los fenómenos empíricos, es
necesario darle un contenido semántico particular a las propiedades que
constituirán los valores específicos de las categorías generales de los conceptos
analíticos. En este sentido, el sistema teórico no es sólo un marco abstracto
carente de todo contenido empírico conocible; remite a lo concreto y está sometido
indirectamente al control de la experiencia.38 No es entonces, solamente una
forma pura, "un conjunto de relaciones puras que persisten independientemente
de las cosas que relacionan."39 Así, alejado del puro empirismo como del puro
formalismo, tiende a incorporar" las ideas a las cosas y las cosas a las ideas."40
El marco sistémico de análisis se presta a usos diferenciados en la
investigación y plantea exigencias metodológicas diferentes, según la extensión
del concepto de sistema.
En todos los casos, implica la misma intención globalizante al estudiar los
fenómenos sociales teniendo en cuenta su contexto y refiriéndolos a una totalidad.
El método sistémico es un estado de espíritu41 y proporciona una orientación
general a la investigación. No debe verterse por lo tanto dentro de un "espíritu del
sistema" que correría el riesgo de cristalizar el pensamiento en marcos rígidos que
pueden momificar la realidad o enmascarar su complejidad evolutiva. Todo lo
contrario, el método debe servir para "problematizar la experiencia" y para
modificar o extender el sistema del cual parte. En este aspecto su valor es
sobretodo heurístico más que explicativo.
Desde un acepción limitada del concepto de sistema, éste se circunscribe a
describir y clasificar los elementos de un objeto en categorías que supuestamente
forman la estructura. Si un sistema de categorías, así, es aceptado, permiten
entonces ordenar y analogar sistemáticamente el conocimiento disponible o
37 T. PARSONS, op. cit., 1968, p. 34.38 J. VIET, op. cit., 1969, p. 149.39 H. LEFEBVRE, Vers le Cybernanthrope, Paris, Gonthier, 1971, p. 66.40 Según la expresión de J. LACROIX, in N. HERPIN, Les existentialismes, in La Philosophie, Verviers, Editions Gérard & Cie, 1972, p. 22041 A. ISAAK, Scope and Methods of political Science. An Introduction to the Methodology of Political Inquiry, Homewood, The Dorsey Press, 1969, p. 220.
135
adquirido y, si fue construido de manera analítica en un lenguaje diferente al de las
categorías del sentido común, permite caracterizar el objeto estudiado en función
de las propiedades, de sus elementos y de sus relaciones.42 Un "sistema" tal es
una taxonomía que combina las operaciones metodológicas de partición, de
ordenamiento, y muy a menudo, de medida a la luz de una teoría subyacente.43
Proporciona un cuadro más fecundo para la investigación, que participa, a la
vez de una taxonomía y de una teoría. En suma concreta un sistema de
proposiciones (teórico) en un orden taxonómico, las constituye en conjunto
orgánico considerado a la vez en su coherencia jerárquica con una realidad
teorizada.44 El sistema entonces es "la articulación de la teorías en un todo."
En la óptica de una "teoría general de los sistemas" (Von Bertalanffy), el marco
sistémico de análisis englobaría el conjunto de los sistemas sociales que forman el
campo de las diversas ciencias sociales. Aún si se restringe a un dominio limitado
de la investigación, debería sinembargo, para alguno de sus sustentadores ofrecer
un carácter de generalidad suficiente como para permitir el establecimiento de
conexiones con otros dominios, y contribuir así a la unificación de las ciencias
sociales (Parsons). Otros, por el contrario, limitan la extensión del sistema a
teorías particulares, de mediano alcance (Merton).
Por la forma que confiere al contenido de la investigación, el marco sistémico
prohibe considerar los hechos singulares en una perspectiva atomista45 y estudiar
"datos sin relación", pero pone el acento en el todo estructurado y unificado que da
cuenta de los fenómenos sociales. Privilegia el bosque en relación con los árboles
y distingue radicalmente los sistemas sociales, con sus estructuras, sus
propiedades y reglas de funcionamiento, de los agregados ó simples reuniones de
eventos. El enfoque "atomista" está centrado en hechos singulares que analiza y
mide como tantas unidades ó variables separadas, lo que implica un método
"analítico" de investigación aplicado a micro-fenómenos directamente observables
y que descubre entre ellos uniformidades puramente es "holístico" y orienta el
estudio de marco-fenómenos hacia la búsqueda de relaciones a la vez causales y
significantes entre sus elementos o propiedades.
Por otra parte, el marco sistémico, cualquiera que sea su extensión, debe
permitir reunir las proposiciones teóricas con las observaciones. Es decir, estar
42 R. J. HILL, op. cit., 1967, pp. 14-15.43 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. II, pp. 82-87.44 Así, Parsons hace una clasificación de las sociedades de acuerdo con su grado de diferenciación funcional y estructural, basado en un sistema teórico general. (T. PARSONS, op. cit., 1966 y 1971).45 P. A. SOROKIN, op. cit., 1966, pp. 39-41, 133.
136
abierto semánticamente y abrirse a la prueba empírica. El marco de análisis
sistémico es "algo más que el modelo de análisis usualmente asociado con las
ciencias físicas; es también algo menos que una teoría predictiva rigurosa de
algún dominio restringido del comportamiento."46
Muchas veces la investigación se refiere sólo a algunos aspectos de un
sistema más amplio, pero su marco sistémico le proporcionará la orientación
teórica que le evitará recurrir a un cierre artificial o prematuro, guiar la recolección
de datos y su incorporación dentro de un esquema coherente, y además utilizan
los resultados de otras investigaciones pertinentes a su objeto, las que habrían
sido efectuadas dentro del mismo marco.47
El análisis sistémico en ciencias sociales remite de entrada al marco de
referencia estructural-funcionalista, a un tipo de sistema teleológico.48 Se presta
tanto al estudio de las estructuras que forman la base de un sistema como al de
los procesos que se desarrollan y que cambian o mantienen el estado de sus
estructuras. Permite también un análisis sincrónico y diacrónico.
En primer lugar, la escogencia del sistema ó del subsistema en referencia debe
ser explícitamente definido y sus límites deben ser claramente especificados.
Después, deben seleccionarse sus propiedades en función de su pertinencia para
la investigación y expresarse en términos de variables o de constantes que sean
empíricamente observables. Cada nivel de análisis y de explicación invita a
seleccionar unidades de análisis diferentes, corresponde a una "zona de validez"
específica, e impone "un nuevo proceso especializante y diferenciador."49
Aún en el caso en el que la investigación está centrada sobre tal o cual
aspecto de un subsistema, el marco sistémico impide privilegiar un nivel
cualquiera de análisis en particular, pero asegura precisamente que se considera
a la vez su especificidad y sus relaciones con otros niveles y respecto al
conjunto.50
Sobretodo, impide reducir un nivel a otro, favorece el pluralismo metodológico
contra el micro y el macro reduccionismo, estableciendo lazos de analogía formal
entre diferentes niveles de explicación, sin privilegio ninguno, ni "inferior" (sistema
biológico), ni "superior" (sistema cultural).
46 F. E. EMERY, Systems thinking, Harmondsworth, Penguin, 1969, p. 12.47 I. HEISKANEN, Theoretical Approaches and Scientific Strategies in Administrative and Organizational Research. A. Methodological Study, Commentationes Humanarum Litteraum, 1967, vol. 39, nº 2, Helsinki, p. 149.48 R. S. RUDNER, op. cit., 1966, pp. 103-106; cf. le cadre de référence fonctionnaliste.49 A. VIRIEUX-REYMOND, op. cit., 1972, pp. 135, 113.50 M. GODELIER, op. cit., 1971, p. 142.
137
4. LOS MODELOS Y LAS ESTRUCTURAS
La componente morfológica de la investigación científica puede lograrse de la
manera más clara y más imperativa cuando se hace un uso "estructuralista" del
método y de los modelos. Con el "estructuralismo de modelos" la investigación se
polariza ante todo bajo el aspecto morfológico de la metodología, sin reducirse por
eso: "Las investigaciones de corte estructural tiene por objeto el estudio de las
relaciones sociales con la ayuda de modelos (Levi Strauss).
Se trata de caracterizar el aporte estructuralista por el uso morfológico
específico que hace de las nociones centrales de estructura, de modelo, de forma
axiomática. Las otras acepciones de la palabra estructura - que son múltiples -51
que no son del caso examinar aquí, se encuentran en otros apartes del polo
morfológico (tipo ideal, taxonomía, sistema...). La estructura será entonces,
concebida en un sentido próximo a aquél definido por Levi-Strauss:52 para merecer
el nombre de estructura, los modelos deben satisfacer cuatro condiciones:
1. Ofrecer un carácter sistémico, estar compuestas por elementos tales que la
modificación de uno conlleva la modificación de los otros;
2. pertenecer a un grupo de transformaciones en el cual cada una corresponde a
un modelo de la misma familia. El conjunto de esas transformaciones constituye
una estructura, un grupo de modelos.
3. ofrecer la posibilidad de prever de qué manera reaccionará el modelo en caso
de modificación de alguno de sus elementos.
4. dar cuenta, por medio de su funcionamiento, de todos los hechos observados.
Es conveniente examinar algunas polarizaciones epistemológicas de un
estructuralismo de modelos. Esta noción de estructura no se refiere a la realidad
empírica. No es necesario, una copia inmediata. Esta noción de estructura se
refiere a los simulacros construidos para darse cuenta de ésto, para producir la
realidad concreta como efecto de la estructura. Los hechos investigados no
tienen sentido como datos, adquieren sentido dentro de la estructura y por la
estructura.
La estructura aprehende el aspecto sintáctico de los fenómenos, el "idioma" de
51 Cf. J. VIET, op. cit., 1969.52 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1958, p. 306.
138
la realidad investigada. El aporte de la lingüística aquí es esencial. Ningún
universo semántico se investiga por sí mismo - como en la construcción del tipo
ideal comprehensivo - , sólo se investiga la constante sintáctica latente bajo las
significaciones vividas como manifiestas. La inspiración freudiana se tiene en
cuenta aquí, clara y metodológicamente.
"A partir de Rousseau, Marx, Durkheim, Saussure y Freud, el estructuralismo
busca revelar a la conciencia otro objeto. Esto es, enfrentarla a fenómenos
humanos, en una posición comparable a aquella propuesta de las ciencias físicas
y naturales que probaron que sólo ella (la conciencia) podía permitir al
conocimiento ejercerse." 53
Pero, esta latencia, esta eidética subyacente, no es significante por sí misma, es
puramente formal, no se trata de una simbolización, es decir, del establecimiento
de correspondencias precisas entre un signo particular y un contenido semántico,
sino de formalización y de su correlato: la axiomatización.54 "En un sistema formal
uno nunca se preocupa por el sentido, uno no se remite jamás ni explícitamente, ni
implícitamente a un contenido significativo. Se estudia solamente la secuencia de
las buenas formaciones de objetos (indefinidos), dando por entendido que al
principio se plantearon las reglas de buena formación."55
El análisis estructural consiste en crear un lenguaje que, desarrollando sus
propias reglas, produce un sentido, nuevamente encontrado en los modelos,
concretizaciones de la estructura en paradigmas particulares. La formalización se
concibe aquí como un proceso de abstracción que elimina lo empírico, lo concreto,
para reencontrarlo, enseguida en familias de modelos que no son más que
variaciones específicas.
La estructura es simulacro, forma genética del sentido que produce, se puede
definir como posibilidad práctica de transformación del sentido.
"Construcción y explicitación de modelos que se confunden en la praxis de
descubrimiento y de descripción... Porque la praxis descriptiva conlleva un saber-
hacer bajo la forma de un catálogo de modelos del que uno puede disponer a su
manera."56
53 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1971, p. 563.54 Cf. J. GALTUNG, op. cit., 1967, p. 462.55 M. SERRES, op. cit., 1968, p. 31.56 A. J. GREIMAS, Du sens, Paris, Editions du Seuil, 1970, p. 113.
139
La estructura asume, entonces, toda una variedad de modelos que explica como
otros tantos paradigmas concretos, producidos por el conjunto de las reglas de
transformación que articula. Cada modelo manifiesta, así, una variación
recurrente pero específica de la estructura.
"Así procede un análisis estructural: examina uno o varios modelos particulares,
que reduce a una (o a varias): orden previo, orden transitivo. Luego encuentra de
nuevo, analógicamente, ésta forma o estructura en otro dominios..."57
¿Cómo concibe el estructuralismo de los modelos (quizá se entiende mejor si
pensamos en modelos estructurales... N. T.) el polo técnico de la investigación, es
decir, la obtención de información (la obtención de datos)?
La observación escrupulosa de los hechos es la condición esencial de la validez
de la concepción estructural. La estructura deberá dar cuenta de todos los hechos
observados y solamente de los hechos pertinentes a su problemática para
garantizar su validez. La estructuración privilegia la autonomía de una
constelación de hechos sociales elementales; de ellos deduce las leyes de
construcción del conjunto, a partir de los cuales la existencia y la organización de
los elementos constantes pueden ser reducidas. Es un movimiento prospectivo-
reflexivo de estructuración del objeto científico:
"En lugar de una formalización de los elementos, el proceso de producción del
objeto pasa... por una objetivación de sus relaciones. En otros términos, el
sistema significante es considerado desde el punto de vista de las condiciones de
posibilidad de sus elementos." 58
Así, la formalización no es más que un instrumento y un producto terminado de la
estructuración, la formalización parte de una abstracción a priori, de un intuición
respecto de la forma de un objeto y propone sus límites, define sus atributos,
señala sus índices. La estructuración no prejuzga las relaciones entre los
elementos sino que las define, como lo haría el fenomenólogo, mediante una
57 M. SERRES, op. cit., 1968, p. 121.58 G. BARLAN, A. DEGENE et N. RAMOGNINO, Structuralisme et pratique de la
recherche sociologique, Epistémologie sociologique, nº 11, Ier semestre, 1971, pp. 3-18, p. 15.
140
descripción rigurosa. Pero es necesario aprehender los elementos a un nivel
bastante profundo, a la vez que esencial."
"Para estar seguros que permanecerán idénticos, cualquiera sea el contexto
cultural donde ellos intervienen."59
Todo esto impone al principio una descripción signética (compuesta de signos, en
el sentido "cosa que evoca en el entendimiento otra cosa"...N. T.) minuciosa que
no busca dar un sentido inmediato tendiente a copiar simbólicamente lo real, sino
estructurarlo de una manera específica. La investigación toma prestada la vía
descriptiva de construcción de los signos (o señales) que la especifican: los
fenómenos son codificados y esta codificación - respondiendo a un conjunto de
reglas operatorias de construcción - organiza la producción de éstos fenómenos.
Dentro de un movimiento prospectivo-reflexivo, la descripción se sustenta
mediante procesos formales, aún matemáticos:
"El pensamiento se ejerce "prospectivamente", proponiendo al objeto formas
matemáticas de inteligibilidad, y se ejerce analítica o "reflexivamente",
garantizando la validez lógica de estas formas... nosotros tendremos un ritmo de
desarrollos prospectivos y críticos."60
No se trata por lo tanto de cuantificación, los modelos estructurales se inspiran
mucho más en las matemáticas cualitativas (teoría de grupos, de categorías, etc).
"...No sabríamos llevar la estructura-modelo a alguna medida de tamaño, cuando
la mayoría de los modelos examinados... traducen los fenómenos sin por ello
reducirlos a procesos cuantitativos." 61
La recolección de datos no sabría prescindir del análisis comparativo, para deducir
el código de las constantes. Pero el método comparativo como modo de
investigación en el análisis estructural, se desarrolla a una nivel superior para
realizar una verdadera"experimentación", que es una fase diferente de la
observación.
59 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1958, p. 315.60 N. MOULOUD, op. cit., 1969, p. 17.61 J. VIET, op. cit., 1969, p. 216.
141
"Por "experimentación" de modelos, entiendo el conjunto de procesos que
permiten saber cómo un modelo dado reacciona a las modificaciones, ó comparar
entre sí modelos del mismo tipo o de tipos diferentes." 62
El método comparativo hará referencia, aquí, a las homologías estructurales que
constituyen la base de la existencia diferenciada de los modelos. Si estas son
isomorfas, es porque tienen las mismas propiedades estructurales. Hay una
analogía a nivel de la forma y no a nivel de contenido. La estructura está en
efecto definida por leyes de combinación y de transformación, estas leyes
organizan todos los modelos de los cuales dan cuenta.
Las familias de modelos estructurales, cada una de contenido distinto, se
define por un análogo estructural (isomorfismo) que es la constante metodológica
formal que las organiza independientemente de su contenido, y le permite
compararlas con otras familias de modelos. De aquí se desprende entonces una
relación de oposición y de diferenciación entre todos los modelos que manifiestan
así su naturaleza diacrítica.
De esta forma cada modelo está en relación de oposición dialéctica con otros
pertenecientes a la misma familia; igualmente a un nivel superior, entre las familias
de modelos. Como dice C. Levi-Strauss, a propósito de los mitos, los mitos "se
piensan" entre ellos de manera diacrítica y sólo existen gracias a, y para , sus
relaciones de oposición dialéctica en el conjunto de los mitos, del cual no son sino
una traducción específica.
Los modelos estructurales se tornan mediación entre lo inteligible y lo sensible,
lo formal y lo material, lo abstracto y lo concreto, ellos reunen por ello un
movimiento axiomático. La axiomática es el sistema de las proposiciones
analíticas (axiomas) totalmente explicitadas, planteadas como simples hipótesis-
postulados a partir de los cuales todas las proposiciones teóricas pueden
construirse de acuerdo con los canones de la lógica deductiva. La axiomática
propone un "modelo matricial" para una o varias teorías "factuales" que
constituyen otros tantos modelos derivados. Las "realizaciones concretas de una
axiomática se llaman modelos."63 El cuerpo de una teoría, así como el de las
estructuras, posee una cierta homogeneidad operatoria que describe la
presentación axiomática. De igual manera que la estructura es una forma que
incorpora modelos paradigmáticos,
62 C. LEVI-STRAUSS, op. cit., 1958, p. 307.63 R. BLANCHE, op. cit., 1970, pp. 18-46.
142
"una teoría axiomatizada se convierte en una especie de "función teórica" un
molde de teorías concretas... al revelar analogías formales. La axiomática revela
correspondencias insospechadas entre diversos dominios de un misma ciencia..
despejando la estructura constante común a teorías aparentemente
heterogéneas..." 64
Las relaciones entre estructura y axiomática son relaciones de consanguinidad si
se admite una definición estricta de la estructura como
"un conjunto de elementos definidos por ciertas relaciones, de tal manera que
podamos construir todas las propiedades relacionales convenientes a estos
elementos cuando estamos en posesión de las reglas operatorias que nos
permiten la transformación de las relaciones determinantes." 65
Así, la estructura, en tanto que axiomática, es un sistema operatorio que fija el
código de las convenciones metodológicas definiendo un lenguaje destinado a dar
cuenta deductivamente de las relaciones propias, a sus modelos. La estructura se
emparenta con la axiomatización en el sentido estricto de posición de los
principios que constituyen una base deductiva coherente y suficiente para las
proposiciones de una teoría. Ahora bien la incompletud66 esencial de las
axiomáticas implica la no saturación de las estructuras, o sea, su apertura.
En lugar de ser una "eidética descriptiva" cerrada a priori, la axiomática
estructural es de naturaleza transformacional, abierta y móvil.
"...Una ciencia axiomática-estructural restablece sin cesar la coherencia de sus
enunciados y la consistencia de sus sistemas, haciendo de esa consistencia el
objeto mismo de la investigación siempre abierta, que debe tener en cuenta la
extensión de los campos de objetos ó de la emergencia de las realidades
experimentales." 67
Lo morfológico es aquí exigencia de sistematización y de regulación progresivas,
de un movimiento iterativo en miras de un perfeccionamiento, es no exigencia de
64 Ibid., p. 77.65 N. MOULOUD, op. cit., 1969, pp. 11, 12, 13.66 J. LADRIERE, Les limites internes des formalismes, Paris, Louvain, 1957.67 N. MOULOUD, op. cit., 1969, p. 16.
143
estabilidad. La axiomática estructural no separa lo empírico de lo racional, lo
efectivo de lo posible, pero concibe sus objetos de investigación como la
resultante de condiciones formales y experimentales. Se puede precisar el
carácter abierto de la estructura si se define como constituido por dos series
heterogéneas: la una "significante" (conjunto de signos o señales), la otra la
"significada" (la axiomática-estructural). Ahora bien, la serie significante presenta
exceso, desborda la serie significa que presenta un defecto.
"...Cualquiera que sean las totalizaciones que el conocimiento opere (serie
significada), permanecen asíntotas a la totalidad virtual de la lengua o del lenguaje
(serie significación). La serie significante organiza una totalidad previa, mientras
que el significado ordena las totalidades producidas." 68
Del rompimiento irreductible, del desequilibrio entre las dos series nace
precisamente la posibilidad de la estructura.
Esta, sinembargo, no existe sino cuando asegura la correspondencia necesaria
entre la textura de las "relaciones materiales" y las "relaciones formales" -
constituyendo el lenguaje simbólico susceptible de formular la verdad del objeto
material. Esta pregunta remite nuevamente a la de la pertinencia de la teoría
frente a la problemática.
"Decir que las estructuras son objetivas ... no es por ello afirmar una nueva
ontología. Esta objetividad no define nada que no esté en correlación con una
fase determinada de la práctica..." 69
68 G. DELEUZE, op. cit., 1971, p. 63.69 G.-G GRANGER, op. cit., 1968, p. 139.
144
CAPITULO SEPTIMO
EL POLO TECNICO
La investigación científica se construye con referencia al mundo de los eventos.
Estos son únicamente los efectos de situaciones presumidas, efectos de una
"realidad" supuesta. Esta realidad debe "retomar las enseñanzas suministradas
por la realidad y traducirlas en programas de realización".1 La realidad vista por las
ciencias, sus objetos, es tanto para descubrir prospectivamente como para
demostrarla reflexivamente. Los "datos" deben recolectarse en esos dos puntos
extremos de todo proceso de investigación: " Como desencadenantes (triggers) y
como pruebas de teorización, jamás como materiales de construcción de las
teorías".2 Por otro lado, está muy claro que no hay límites a la precisión de la
observación, a su completud, a la fineza de la clasificación.
1. INFORMACION, DATOS, HECHOS
El polo técnico tiene que ver con los procedimientos de obtención de información y
de la transformación de esta información en datos que sean pertinentes a la
problemática general. Tiene por función concretar los "hechos" en sistemas
1 G. BACHELARD, La philosophie du nom. Essai d'une philosophie du nouvel esprit scientifique, Paris Presses Universitaires de France, 1966, p. 6.2 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 455.
145
significantes mediante protocolos que ponen bajo evidencia experimental los datos
empíricos. La investigación, en su polo técnico, recogerá los datos y en función
de ellos elaborará sus hechos. La forma lógica de estos datos se expresará en
enunciados existenciales singulares, para afirmar eventos observables,
intersubjetivamente controlables, sea directamente (perceptibles), sea
indirectamente (inferibles).
Puede ser más claro hacer algunas distinciones analíticas en cuanto a la
naturaleza de estos "datos" que son el material de las ciencias sociales y resituar
el estadio de la obtención de información en el entorno real de toda investigación.
__________________________________________________________
Campo doxológico
______________________________________________
Campo epistemológico
________________________
Campo teórico
HECHOS
Reducción
_______________________
Selección
DATOS
Transformación
______________________________________________
Recolección
INFORMACION
____________________________________________________________
La información pertinente a las ciencias sociales, los eventos, "los fenómenos"
son a menudo "huellas" ya significantes, ante toda investigación científica. Esta
146
significación de las "cosas sociales" le vienen de la práctica simbólica de los
actores sociales mismos,3 práctica sedimentada, codificada en conjuntos
lexicales. Por más que el campo doxológico sea aquél de la "realidad de cada
día",4 de la experiencia y del saber reflexivo, del conocimiento espontáneo e
ingenuo, de las síntesis pasivas, es el dato primario de la investigación lo que está
para transformar y reducir.
Si simplemente, las ciencias sociales no quieren repetir discursos míticos ni
ideológicos, deben introducirles diferenciales para producir sus diferencias. Una
ruptura epistemológica consecuente debe entonces caracterizar la investigación
de dichas ciencias. Para éstas, los "hechos" no deben imponerse de manera
absoluta como verdad - así como ellas se imponen en las prácticas sociales
corrientes; - ellas son confrontadas a "hechos normativos" (Piaget), a
premoniciones (Durkheim) y se esfuerza constantemente en objetivarlas, esto es,
ponerlas en su lugar: el teórico.
Ese proceso de investigación debe hacerse en toda práctica científica. Así, uno
puede diferenciar como lo hace P. Bourdieu, tres modos de conocimiento de los
hechos, de aproximación a los datos:5 "fenomenológico", "objetivista",
"praxeológico", según se preste más o menos atención a las condiciones de
posibilidad de toda investigación, a los presupuestos culturales y metodológicos.
En todo caso se tratará de pensar la propia situación de investigador frente a los
datos recolectados, sea que se intente adherir a lo más intimo
("fenomenologismo"), o que desee separarse de manera radical ("objetivismo"),
sea que se intente pensar la propia manera de acercarse siendo parte integrante
de las observaciones, para controlar mejor su aparición ("praxeología").
La"información" se torna en "dato" por la aplicación misma de las técnicas de
recolección. En efecto, se opera una selección específica según las problemáticas
de la investigación, ciertamente, orientando la elaboración y la verificación teórica,
según las hipótesis de trabajo.
Al término "dato" - que no es inocente, sino consagrado por el uso - sería
conveniente, en este caso sustituírle por el término de "toma", pues se trata
realmente de una toma de lo real que la investigación científica quiere asegurar
desde su polo técnico. Esta toma efectuada le permite "basarse" menos sobre
3 J. PARAIN-VIAL, La nature du fait dans sciences humaines, Paris, Presses Universitaires de France, 1966, pp. 1-16.4 P. L. BERGER and T. LUCKMANN, The Social Construction of Reality. A Treatise in the
Sociology of Knowledge, New York, Doubleday & Cie, 1967, pp. 19-46.5 P. BOURDIEU, op. cit., 1972, p. 163.
147
esta realidad (doctrina empirista) que producir efectos específicos verificables y
controlables. La información detenta su significación de las prácticas sociales
efectivas, el dato debe neutralizar esta primera significación y transformarla en
significación pertinente para la investigación científica. Así, el dato no hace perder
piso doxológico y nos introduce en el lugar epistémico, éste queda dependiente
del terreno originario, pero permite subvertirlo y darle un conocimiento particular.
Para acceder al estatus de "hecho", los datos deben ser pertinentes a
hipótesis teóricas precisas, mejor dicho, deben constituir la confirmación (ó la
negación) de dicha hipótesis, y en definitiva verificar (ó falsar) los sistemas
teóricos en donde se inscriben esas hipótesis particulares.
Así, los hechos científicos son conquistados, construidos, constatados
(Bachelard), su naturaleza misma es "instrumentada" por la técnica que los ha
recolectado, significada por el sistema teórico que ha producido/recibido dichos
hechos. Los hechos reenvían a los enunciados empíricos describiendo
situaciones observadas, luego las teorías no tienen sino que poner, en su lenguaje
hipotético, la posibilidad de tales situaciones.
"...La confirmación de una teoría y la observación de situaciones que ellas
suponen son cosas muy diferentes." 6
Sinembargo, las dos instancias son indisociables, observamos únicamente las
huellas de los estados de las cosas, pero las interpretamos sobre las bases
teóricas que suponen los estados de las cosas. La hipótesis de trabajo es
supuesta como si indicara la realidad (en el sentido de tener un enlace con ella...
N. T.) La teoría más verdadera, es aquella que se muestra más eficaz para
pensar los fenómenos. "Las teorías y los hechos no son enteramente distintos...
Lo que llamamos "hechos" no pueden asimilarse a observaciones puras".7 La
"evidencia" empírica no puede ser separada de la "pertinencia" teórica, el hecho
es el correlato de la idea.
Hay únicamente una distinción relativa entre hechos y teorías (Whewell), no
puede haber "hecho puro" separado de toda idea, en la medida en que los hechos
científicos, enunciados bajo una forma proposicional, se muestran en un lenguaje.
El polo técnico es el momento de la observación, del informe de los hechos,
mientras que el polo teórico es el de la interpretación y explicación de esos
6 W. M. O'NEIL, op. cit., 1972, p. 242.7 Ibid, p. 26.
148
hechos.
En cuanto a la consideración del tratamiento de la problemática, de la
formulación de su objeto, el polo epistemológico, en su función de vigilancia
reflexiva, está directamente ligado a la recolección de la información durante el
estadio del enunciado de las "hipótesis de investigación", las cuales se limitan a
trazar las grandes rutas, las direcciones principales de la investigación y ésto,
previamente a toda formulación rigurosa de las hipótesis teóricas específicas que
se van a examinar. Toda hipótesis de investigación surge de cualesquiera
"acercamiento" o "manera amplia, no específica de considerar un sujeto (quien)
implica a la vez un punto de vista y un fin."8
El papel epistemológico de la hipótesis de investigación no puede confundirse
con el papel de la hipótesis de trabajo, pues, estrictamente hablando,
"... el género de datos que es conveniente recolectar no está determinado por el
problema con el cual nos enfrentamos, más aún por la solución transitoria que el
investigador intenta darle, bajo la forma de una conjetura ó hipótesis... En buena
lógica no se puede calificar de significativo hechos ó descubrimientos empíricos
sino en relación de una hipótesis dada, y no en relación con un problema dado." 9
El contexto general de la recolección de datos, desde el ángulo de su propia
naturaleza, se presenta de la manera siguiente:
a) Problemáticas, que dan lugar a grandes hipótesis de investigación y orientan los
datos en forma de preguntas;
E: Lugar de la problemática
O: Lugar de la teoría
T: Lugar de la información
b) dominio de los paradigmas, de los marcos de referencia, de la naturaleza a la
8 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 513.9 C. G. HEMPEL, op. cit., 1972, p. 18.
149
vez teórica ("sustancial") y epistemológica ("pragmática");
c) elementos teóricos "no verificables" (conceptos puros universales, reglas de
relación, etc.);
d) "datos" propiamente dichos, bajo la forma de hechos pertinentes, recolectados
a partir de la hipótesis de trabajo, de preguntas particulares, orientada a
información disponible;
e) "hechos significativos", surgidos de hipótesis teóricas donde la prueba se ha
podido realizar, respuestas particulares, de acuerdo con las preguntas dirigidas
por la problemática;
f) consecuencias factibles inesperadas producidas por la teoría en sus
implicaciones verificables;
g) dominio de informaciones-eventos que no responden a los objetivos particulares
de la investigación.
La estructura de los hechos será de naturaleza diferente según el (los) marco(s)
de referencia seleccionado(s), que no son además, incompatibles. Es suficiente
indicar que el acercamiento positivista consideró hechos atómicos para
reagruparlos bajo conceptos genéricos, los cuales serán de la clase, para la cual,
cada hecho será un hecho particular, y así llegar a esos "hechos fuertes" que son
las leyes generales abstractas. La orientación comprehensiva enfatizará el
carácter esencialmente significativo de los hechos sociales, los relacionará a tipos
ideales ó a esencias, insistirá en su naturaleza fenomenológica indisociable de la
interpretación de un sujeto individual, colectivo ó trascendental. La corriente
estructural-funcionalista subrayará la dependencia de los hechos frente a los
sistemas en los cuales se integran, liberando su naturaleza casual-significante
(Sorokin) postulará su carácter de totalidad (hecho social como totalidad). La
actividad estructuralista insistirá en la producción de hechos por la transformación
de sistemas que la explícitan, señalando su independencia frente a las
representaciones conscientes de los sujetos quienes las manifiestan.
2. LAS TRANSFORMACIONES TECNICAS
Las operaciones técnicas de recolección efectúan las transformaciones
específicas de la información obtenida, de la misma manera que las operaciones
técnicas de selección de datos, implican procesos teóricos de reducción a un
150
objeto de conocimientos verificables.
Hay grados de ruptura epistemológica que van desde el trabajo de observación de
la información, de selección de datos, hasta la reducción factible operada por las
especificaciones y la interpretación teórica.
Observación/
<—>
Información
Selección/ Datos
<—>
Reducción/
Hechos
Transformaciones
técnicas
Cuantificación
Codificación
Descripción
Indicadores,
Indicios, Rasgos,
Fenómenos
Variables,
factores, signos,
esencias, tipos.
- La descripción, si quiere ser rigurosa prestará del método fenomenológico la
intuición del fenómeno y la visión/ construcción de las esencias y de los tipos.
- La codificación de la información es una operación particular que realizan ciertas
investigaciones estructuralistas inspirándose en la lingüística,10 las que
descomponen su objeto (corpus) en unidades discriminantes no significativas
(rasgos) para desprender de ello conjuntos significativos, los sistemas de signos.
- Los datos cuantificados se presentan en la forma de indicadores que, reunidos
por mediación conceptual, suministran indicios globales (índices).
La investigación empírica debe decidir sobre la coherencia semántica del sistema
de indicadores, así como de todo sistema de "datos". La interrelación de los
indicadores expresa en primer lugar correspondencia no causales,
compatibilidades ( ó incompatibilidades) alógicas. Los indicadores son
compatibles cuando la serie de eventos que se organizan alrededor de sus
singularidades (sus "perfiles lexicales") se encadenan los unos a los otros en
todas sus dimensiones. Son incompatibles si las series divergen cuando se las
confronta ante los perfiles.
Uno de los grandes temas metodológicos de la aproximación cuantitativa es
aquél del tránsito del concepto "cualitativo" a su especificación cuantitativa, ó
según Lazaferd, aquél tránsito de la noción del concepto.11 Es todo el problema de
10 Cf. por ejemplo R. BARTHES, Système de la mode, Paris, Editions du Seuil, 1969.11 De la noción si ninguna ruptura teórica no está efectuada.
151
la congruencia del sistema de atributos y del sistema de indicadores. Es
necesario recordar que el sistema de atributos no es el sistema teórico (lo que
requiere de las proposiciones), sino que es parte integrante y que, además, sólo
las proposiciones (donde figuran conceptos y atributos) pueden ser sometidas a
procedimientos empíricos verificatorios (Hempel, Popper, etc).
Cada concepto puede ser especificado en muchas dimensiones, ser precisado
en diferentes clases indicativas, y cada atributo, calidad representativa de ese
concepto, puede a su turno reagrupar un sistema de indicadores, de "datos
brutos".
Dos grandes categorías de datos que sirven de indicadores pueden ser
arbitrariamente - y bastante sumariamente - distinguidos: 12 las "informaciones
agregadas" y las "informaciones globales".
1. Las informaciones agregadas se basan en la información recogida sobre
miembros individuales de la clase estudiada especialmente por medio de
encuestas dirigidas a una población ó a una muestra representativa de la misma.
El riesgo es tomar , así, los indicadores por "naturales" (falta de ruptura
epistemológica); además hay una tendencia a contentarse con un único ítem, con
una sola información, ó a llegar a descripciones superficiales, únicamente.
Por la obtención exclusiva de informaciones agregadas, uno se priva de los
servicios de su propia teorización y en cambio la obtiene en forma de coherencia
artificialmente asegurada por el campo doxológico, uno sacrifica la pertinencia
teórica de los indicadores. Los "datos" se agregan como por encanto, en forma
completamente natural, las series de indicadores se alinean en orden y de manera
banal, porque "... es verdad que a nivel del individuo, la forma de la primera
persona, asegura ordinariamente la conexión de una serie, la forma del mundo, la
convergencia de series prolongables y continuas..." 13
El "naturalismo social" implicado en la sumisión a los indicadores agregados es
patente, prohibe todo análisis verdaderamente científico de los fenómenos
sociales. Se debe violentar la naturalidad de los indicadores agregados para
operacionalizar válidamente su teoría sin dejar que dicha teoría se disuelva en las
12 Cf. E. W. LEHMANN, Social Indicators and Social Problems, in E. O. SMIGEL, ed., Handbook on the Study of Social Problems, Chicago, Rand McNally, 1971, pp. 149-176; A. BARTON, Methods of Research on Organization (prepared for the International Encyclopedia of Social Science), Bureau of Applied Social Research, Columbia University, septembre 1966, pp. 3-7.13 G. DELEUZE, op. cit., 1971, p. 205.
152
apariencias de los hechos sociales, en la falacia ecológica (Lehmann). Su única
ventaja reside en su abundancia y en su relativa facilidad de obtención.14
2. Los indicadores globales son los que se basan en observaciones orientadas
por las propiedades de la teoría como tal. Responden a enunciados empíricos
que se derivan de proposiciones de la teoría en referencia, pero se encuentran
raramente (o sea nunca) al estado "natural", fácilmente disponibles.
En las ciencias sociales, si se posee una teoría más o menos coherente, muchos
conceptos no pueden especificarse sino de manera parcial, el el miedo de la
cobertura parcial de los conceptos, de la medida fraccionaria. Es difícil constituir
una definición operacional que abarque todas las dimensiones y ramificaciones de
un concepto.
De todas maneras, la estrategia más apropiada parece ser aquella que reune
los dos tipos de indicadores entre sí: unos, con la cualidades y defectos que son
las (los) contrarios de las (los) de los otros. Se trata, entonces, de especificar las
dimensiones de los conceptos, en la manera que algunos requieran de los
indicadores individuales agregados y otros de los indicadores globales.
Otra estrategia posible, es la ponderación posicional de las dimensiones del
concepto y de los indicadores de cada dimensión. Sólo consideraciones teóricas -
animadas por la problemática - deben decidir sobre esta materia.
La presentación de las diferentes técnicas de investigación puede abordarse, si
la naturaleza diferencial de las informaciones, de los datos y de los hechos ha sido
explicitada. Así las técnicas toman todo su sentido, no debiendo jamás asimilarse
como lo más importante de la investigación ó como si fueran toda la investigación.
las técnicas de investigación son únicamente servidoras del proceso metodológico
en su dinámica global multipolar. Lo metodológico no puede reducirse a lo técnico.
3. LAS TECNICAS DE RECOLECCION
La recolección de datos se apoya sobre un abanico de técnicas que responden,
cada una, a reglas propias de utilización. A menudo, muchas técnicas pueden y
deben utilizarse en una misma investigación con el fin de reunir un haz de datos a
la vez, disponibles, accesibles y conformes a su objeto de investigación.
La selección de informaciones a obtener y la organización de su recolección se
14 Por ejemplo, los ingresos de la población, las opiniones individuales, las estadísticas nacionales, todos datos "naturales" y por eso sobredeterminados.
153
inscriben en el progreso global de la investigación, de alguna manera presuponen
los elementos de interpretación y de explicación posibles, respecto de los hechos
que ellas constituirán. Un dato, por consecuencia, nunca es "verdadero" en sí y
no tiene utilidad y pertinencia sino, únicamente, en relación con una problemática,
con una teoría y con una técnica, en fin, en relación con una investigación.
"Los datos más ricos jamás podrán responder total y adecuadamente a preguntas
por las cuales y para las cuales no han sido construidos." 15
Independientemente de las reglas específicas de cada procedimiento, la
recolección de datos obedece esencialmente a criterios de fidelidad y de validez,
además de criterios de calidad (exactitud, precisión de los datos) y de eficiencia
(costo de la información). Su validez origina preguntas de naturaleza
epistemológica sobre el valor de los procedimientos de recolección y sobre el valor
de los mismos datos. Esta validez reenvía a la transformación técnica de la
información y puede controlarse desde un punto de vista técnico,16 poniendo en
correspondencia los resultados obtenidos y los resultados suministrados a través
de otros procedimientos comprobados. La fidelidad de la recolección se tiene con
el rigor en el empleo del procedimiento. El "coeficiente de confiabilidad" de una
técnica se determina, por ejemplo, "estableciendo una correlación entre dos series
de medidas tomadas sobre la misma muestra con el mismo instrumento ó
poniendo en correlación dos series de medidas hechas sobre los mismos sujetos
en épocas diferentes ó dos medidas hechas sobre los mismos sujetos por
observadores diferentes."17 Así, se examina en resumen la exactitud de los
instrumentos utilizados, su invarianza.
Tres modos de recolección se describen a continuación brevemente, junto con
sus principales usos y los rasgos más característicos de su empleo: las encuestas
por entrevista y cuestionario, la observación directa y participante y el análisis de
documentos (Ver cuadro sobre técnicas de recolección de los datos.") La tabla a
continuación, relaciona referencias bibliográficas que los tratan de manera
detallada. Después, se encuentra una corta nota relativa a los tipos de muestreo
más corrientemente utilizados y sobre cuándo se ponen en acción procedimientos
de recolección de datos.
15 P. BOURDIEU et al., op. cit., 1968, p. 65.16 C. SELLTIZ et al., op. cit., 1969, pp. 155-163.17 A. BRIMO, op. cit., 1972, p. 158; R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, pp. 403 y sgtes.
154
REFERENCIAS
Para la encuesta:
BOURDIEU (P.) y otros, op. cit., 1968, pp. 69-73.
BRIMO (A.), op. cit., 1972, pp. 209-217.
CANNEL (C,F.) and KAHN (R. L.), The collection of Data by Interviewing, in
FESTINGER (L.) and KATZ (D.), eds, Research Methods in the Behavioral
Sciences, Holt, Rinehart & Winston, 1965, pp. 334- 340.
GALTUNG (J.), op. cit., 1970, pp. 150-154.
KAHN (R.L.) and CANNEL (C.F.), The Dynamics of Interviewing Theory,
Techniques and Cases, New York, J. Wiley & Sons, 1960, pp. 3-64.
MOUCHOT (J.M.) et MOLES (A.), Les Méthodes des Sciences humaines
dans l'entreprise, Paris, Fayard-Mame, 1971, pp. 166-171.
PARAIN-VIAL (J.), op. cit., 1966, pp. 42-43.
PINTO (R.) et GRAWITZ (M.), op. cit., 1969, pp. 598-684.
SELLTIZ (C.) et al., op. cit., 1965, pp. 236-268, 546-587.
ZELDITCH (M.), Some Methodological Problems of Field Studies in
FILSTEAD (W.J), ed., Qualitative Methodology, Chicago, Markham
Publishing Company, 1971, pp. 218-229.
Para la observación:
BOURDIEU (P.) et al., op. cit., 1968, pp. 68-74.
BRIMO (A.), op. cit., 1972, pp. 141-155.
BRUYN (S.T), The Methodology of Participant Observation, in FILSTEAD
(W. J.), op. cit., 1966, pp. 283-287.
PARAIN-VIAL (J.), op. cit., 1966, p. 42, p. 50.
PINTO (R.) et GRAWITZ (M.), op. cit., 1969, pp. 770-801.
SELLTIZ (C.) et al., op. cit., 1965, pp. 200-234.
ZELDITCH (M.), op. cit., 1971, pp. 218-229.
Para el análisis documental:
155
ANGELL (R.C) and FREEDMAN (R.), The Use of Documents, Records, Census,
Materials and Indices, in FESTINGER (L.) and KATZ (D.), op. cit., 1965, pp. 300-
326.
BRIMO (A.), op. cit., 1972, pp. 134-155.
MOUCHOT (J.M.) et MOLES (A.), op. cit., 1971, pp. 27-28.
PARAIN-VIAL (J.), op. cit., 1966, pp. 43, 49-50.
PINTO (R.) et GRAWITZ (M.), op. cit., 1969, pp. 433-459, 462-502.
SELLTIZ (C.) et al., op. cit., 1965, pp. 316-330.
156
TECNICAS DE OBTENCION DE DATOS
Modos de
obtención
Tipo de
información
Selección de
técnicas
Obstáculos (a
minimizar)
Ventajas
Relativas
1. Encuesta
por:
A. Entrevista
(oral)
-estructurada
(protocolo fijo)
-libre sobre un
tema general;
-centrada sobre
un tema
particular (lista-
control);
-informal y
continua;
-panel,
entrevistas
repetidas;
-en profundidad
indirecta.
-hechos
observados
y/o opiniones
expresadas
sobre:
.
acontecimient
os
.los otros
. sí mismo;
-cambios de
actitudes y de
influencias;
-evolución de
fenómenos;
-significación
de las
respuestas;
-contenido
latente.
-selección de
informantes
(aptos y
dispuestos a
responder):
.muestra;
.encuestados
"representativo
s"
.personas
"competentes"
(informantes
claves).
-barrera de
comunicación;
relación artificial;
-mecanismos de
defensa (fuga,
rechazo,
racionalización,
conformismo,
etc).
-grado de
información
aleatoria de los
encuestados;
-subjetividad;
-disparidad entre
declaraciones y
comportamientos
-inadecuación de
los conceptos a
la realidad,
dificultades del
lenguaje, falta de
comprensión.
-
Disposición
a responder
(acogida,
deseo de
comunicar,
etc);
-cantidad y
calidad
acrecentad
a de la
información
, problemas
más
complejos o
más
cargados
afectivamen
te
-flexibilidad.
157
B. Cuestionario
(escrito)
-formulación de
preguntas
(para Ay B):
.cerradas
(selección
entre pocas
respuestas);
.abiertas
(contenido y
forma de libre
escogencia en
las
respuestas).
.preformadas
(combinación
entre pregunta
cerrada y
abierta)
idem
-sesgo debido a
la rigidez;
-escrutinio y
clasificación más
difíciles;
-interpretación
delicada, riesgo
de cometer error;
-costo más
elevado.
-economía;
-
uniformidad
;
-anonimato;
-facilidad de
escrutinio;
-filtración
de
preguntas;
-respuestas
más
complejas
Modos de
obstención
Tipo de
información
Selección de
técnicas
Obstáculos (a
minimizar)
Ventajas
relativas
158
II.
Observaciones
A.Observación
directa
sistemática
(observación
exterior):
-Características
o propiedades
de un número de
acontecimientos
o de unidades
(distribuciones,
frecuencias);
-diversas
características o
propiedades de
la misma
situación ó del
mismo objeto;
-acciones
constatadas
explicaciones
recibidas,
significaciones
referidas;
-incidentes ó
historias, hechos
recurrentes.
-definición de
objetos a
observar y
definición de
unidades;
-muestreo
representativo
-tabulación;
-selección de
datos;
-monografía o
etnografía
(pequeña
muestra
conglomerado
de
observaciones)
-necesidad de
sistematizar la
toma de notas
(categorías,
escalas).
-manifestaciones
sensibles
(signos a
interpretar)
-diversidad de
objetivos y de
niveles de
observación;
-marco de
referencia
"sobre-
determinado";
-el sujeto
observado
comportándose
diferente a
cuando está
solo, su
pensamiento se
comporta de
manera
deficiente,
conductas
ambiguas;
-imprecisión,
acumulación
inútil de datos,
observación
intencional,
interpretación ex
post de notas.
-mínima
intervenció
n del
investigado
r.
159
B.
Observación
participante
(observador
conocido u
oculto):
-hechos tal como
ellos son para
los sujetos
observados:
-fenómenos
latentes (que se
escapan a los
sujetos pero no
al observador).
-entrevista "en
vivo" durante el
acontecimiento
y observación
directa o
indirecta por
interpuestas
personas
(informadores
"colegas");
-relación cara a
cara
"permanente",
activa o no(ver,
escuchar,
-posible rechazo
del observador ó
integrador y
socialización
excesivas;
-acontecimiento
interesante es a
menudo fortuito;
-problemas de
ética.
-máxima
participació
ndel
investigado
r;
-relación
menos
artificial.
Modos de
obtención
Tipo de
información
Selección de
técnicas
Obstáculos (a
minimizar)
Ventajas
Relativas
160
III. ANALISIS
DOCUMENTA
L
Fuentes
privadas u
oficiales
(archivos,
informes,
estadísticas,
directa o
indirectamente
pertinentes,
correspondient
es a la
institución o a
la situación
estudiada.
- hechos,
atributos,
opiniones,
comportamient
os,
evoluciones,
tendencias
(exploración,
pre-enquete;
verificación de
hipótesis.
-Análisis
cualitativo de
contenido;
-necesidad de
una crítica
histórica;
-autenticidad,
valor;
-motivos y
condiciones del
establecimiento
de un texto;
-análisis del
contenido
cuantitativo;
-elección de los
textos
(preparación de
muestras);
-descripción
cuantificada del
texto;
-determincación
de las
unidades.
-dificultad de
acceso
(secreto);
-dificultad de
interpretación
(sentido de las
palabras,
contexto..);
-reutilización
dentro de una
perspectiva de
investigación
-lo importante
no está siempre
escrito.
-
instrumento
s "no
reactivos";
-economía
de tiempo y
dinero.
161
EL MUESTREO
En muchas técnicas de recolección, la obtención de informaciones, a menudo se
limitará a una ó más muestras de la población estudiada. A las características de
la población se les llama "parámetros" y a las características de las muestras,
"estadísticos".18 El muestreo pone al investigador el problema de la
representatividad de la muestra y de su validez externa. Hay dos grandes
posibilidades de muestreo.19
En la primera, el investigador conoce la probabilidad que tiene cada individuo
de la población para quedar en la muestra, él puede entonces - mediante el
cálculo de probabilidades - precisar la representatividad de la muestra.20 Los
principales tipos de muestras probabilísticas - que pueden combinarse entre sí -
son las siguientes:
- La muestra aleatoria en la cual, no únicamente cada individuo tiene una
probabilidad igual de ser seleccionado, sino que, todas las combinaciones entre
los individuos tienen igualmente las mismas probabilidades de ser seleccionados.
(No obstante, en la práctica un individuo seleccionado raramente es restituido a la
población de la cual ha sido seleccionado, para evitar por ejemplo, interrogar dos
veces a la misma persona). La selección se hace según una tabla de números
aleatorios y supone una lista completa y correcta de todos los individuos que
hacen parte de la población;
18 H. M. BLALOCK Jr, op. cit., 1960, p. 89.19 Para una presentación comparativa de los diferentes tipos de muestra, cf. J. GALTUNG, op. cit., 1967, p. 56; H. M. BLALOCK Jr, op. cit., 1960, pp. 392-409; C. SELLTIZ ET AL., OP. CIT., 1969, PP. 516-535.20 Cuando el número de muestras es insuficiente, las técnicas estadísticas probabilísticas no pueden aplicarse.
162
- la muestra sistemática se utiliza cuando el listado de la población es muy largo y
cuando la muestra a seleccionar es importante. El investigador escoge de la lista
un individuo de cada K lugar, ésto, a partir de un primer individuo escogido al azar
entre los K primeros de la lista;
- la muestra estratificada, para su construcción se reagrupan los individuos en
algunos estratos, de los que, después se selecciona un cierto número de
individuos al interior de cada estrato. Este número puede ser el mismo por cada
estrato ó diferente de un estrato a otro. Cada individuo puede aparecer
únicamente en un estrato y cada estrato debe ser lo más homogéneo posible en
relación a las variables estudiadas. Se recurre al muestreo estratificado cuando
uno compara grupos entre sí;
- la muestra por conglomerados a menudo se utiliza en investigaciones a gran
escala. Se divide la población en un número elevado de grupos, llamados
conglomerados, donde la composición de dichos conglomerados debe ser los más
heterogénea posible. Después, se selecciona un cierto número de conglomerados
de los cuales se muestreará aleatoriamente (ó estratificadamente). Sí se evita la
necesidad de tener listas completas y los costos de la encuesta se reducen
fuertemente.
Se debe anotar de manera general que los métodos de tratamiento estadísticos
aplicables, difieren según el tipo de muestra.
Cuando el investigador no conoce la probabilidad que tiene cada individuo para
quedar en la muestra, utilizará muestras no probabilísticas. En este caso, la
inferencia estadística no podrá ser legítima.21 Este tipo de muestra se utiliza por
razones de economía y facilidad en estudios exploratorios ó en encuestas a
testigos privilegiados, a individuos "típicos", etc. La muestra por cotas, por
ejemplo, se practica en dos fases: primero, el investigador determina un modelo
de población, después, da al encuestador ciertas y determinadas "cotas" según el
modelo, y según éste, se guiará la selección de los individuos.
21 H. M. BLALOCK Jr, op. cit., 1960, pp. 410-411.
163
CAPITULO VIII
LOS MODOS DE INVESTIGACION
La especificación del objeto de la investigación y su operacionalización son
indisociables del campo del análisis empírico y de sus modos de investigación.
Estos constituyen los medios de acercamiento a lo "real", fijan el marco
instrumental de la recolección de datos y deben, por lo tanto, hacerse de acuerdo
con las técnicas de recolección.
Hay varios modos de investigación para escoger, pueden combinarse y
reforzarse mutuamente y su empleo depende en cada caso del objeto de
investigación, de los datos de los conocimientos, así como de las contingencias
múltiples que pesan sobre la realización del proyecto. Según la variedad de sus
usos parece oportuno centrar la presentación en sus aplicaciones a un mismo
campo de investigaciones pluridisciplinarias, y por eso, representativo de la
investigación en ciencias sociales en sus principales orientaciones: aquél de las
organizaciones. Se utilizan principalmente cinco modos: el estudio de caso, el
análisis comparativo, la experimentación "en el laboratorio" o "la de campo", la
simulación por computador.
Estos diferentes modos de investigación se inscriben a lo largo de un
continuum en función de las características que presenta el conjunto de datos que
164
han sido recogidos:1 es su campo, más o menos "construido" (real-artificial), más o
menos "limitado" (abierto-cerrado), más o menos manipulable (incontrolado-
controlado).
Estudio de caso Comparación
(muestra)
Experimentación
(de campo/
laboratorio)
Simulación
(modelo)
Real Artificial
Abierto Cerrado
Incontrolado Controlado
Frente a su campo de investigación, el investigador puede ocupar una posición
muy diferente según sea, por una parte, un observador durante y separado de la
realidad que está estudiando, ó, al otro extremo, que está implicado
personalmente y de alguna manera la aborda desde su interior.
En la primera perspectiva, el investigador intenta permanecer neutro y emplea
preferiblemente procedimientos a los cuales no reaccionan los objetos que les son
sometidos.2 Los modos de investigación y recolección seleccionados, ni implican
ningún proceso de interacción social; las fuentes documentales y estadísticas se
revelan en este aspecto como las más "objetivas".
Por contraste, la segunda concepción se apoya sobre la idea que el investigador
debe adoptar una orientación subjetiva frente a los fenómenos y acercarse a ellos
lo más posible, para entender los actores y sus comportamientos.3
Esta actitud "comprehensiva" supone una participación activa en la vida de los
sujetos y un análisis profundo, de tipo introspectivo; el propósito del investigador
no siendo el de adquirir "conocimientos sobre" la realidad, sino "familiarizarse" con
la realidad tal cual está definida por los actores mismos.4 De ahí el recurso, por
ejemplo, de apelar a la observación participante,5 y a los modos de investigación,
1 J. E. McGRATH, in W. W. COOPER et al., op. cit., 1964, pp. 540-541, 552-556.2 E. J. WEBB, D. T. CAMPBELL, R. D. SCHWARTZ and L. SECHREST, Unobtrusive Measures: non reactive research in the social sciences, Chicago, Rand McNally, 1966, pp. 13-20, 53-111; N. K. DENZIN, The Research Act, Chicago, Aldine, 1970, part. III.3 D. L. PHILLIPS, Knowledge from what? Theories and Methods in Social Research, Chicago, Rand McNally, 1971, cap. 6.4 W. J. FILSTEAD, op. cit., 1971, pp. 4-5; H. GARFINKEL, Ethnomethodology, Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 1967.5 S. BRUYN, The Methodology of Participant Observation, Human Organization, nº 21, 1963, pp. 224-235.
165
como la investigación-acción que ponen el acento en una comprehensión
intersubjetiva de datos, respecto de una interpretación de la realidad a partir de
los sujetos mismos más que a partir de conceptos y protocolos que falsearían el
conocimiento del mundo empírico por su objetivación misma.
Todas estas diferencias entre los modos de investigación, en cuanto al campo
de objetos y en cuanto al papel del investigador, hacen de ellos estrategias de
investigación de valor sin igual desde respecto del plan metodológico.
Sinembargo, existe complementariedad entre ellos, lo que justificaría su
integración en un mismo programa de investigación donde cada uno consistiría
"un momento" y aportaría, cada uno, una luz particular.6
1. LOS ESTUDIOS DE CASO
Un número grande de investigaciones están basadas en el estudio profundo de
casos particulares, es decir, en un análisis intensivo, llevado a cabo en una sola o
en algunas organizaciones reales. El estudio de caso reune informaciones tan
numerosas y tan detalladas como es posible, con miras a entender la totalidad de
una situación. Por eso, recurre a técnicas de recolección de información
igualmente variadas (observaciones, entrevistas, documentos) y muy a menudo a
técnicas refinadas: observación participante, sociometría aplicada a la
organización, encuesta de tipo etnográfico.
- Ciertos estudios tienen un objetivo de exploración y tienden a descubrir
problemáticas nuevas, a renovar perspectivas existentes, o a sugerir hipótesis
fecundas, preparando así la vía a investigaciones ulteriores. 7
- Otros son esencialmente descriptivos y toman la forma de una monografía,
6 W. M. EVAN, ed, Organizational Experiments: Laboratory and Field Research, New York, Harper & Row, 1971, p. 262.7 R. PINTO et M. GRAWITZ, op. cit., 1969, pp. 765-766.
166
intentando describir toda la complejidad de un caso concreto sin pretender lo
general.
- Otros persiguen un propósito práctico y muy a menudo utilitario con miras a
establecer el diagnóstico de una organización, 8 ó a hacer la evaluación, 9 ó
buscando prescribir una terapia,10 ó cambiar una organización.11
El estudio de caso, en su particularidad, puede pretender cientificidad en la
medida en que se integre a un proceso de investigación global, donde no esté
deformado el papel de la teoría, ó donde no se descuiden las críticas
epistemológicas de los problemas y de los conceptos. Generalmente, el caso
singular "pone los problemas, sugiere las conjeturas, las refuta, ilustra una teoría,
pero no puede engendrarla."12
Aunque sea muchas veces de naturaleza "cualitativa", la recolección y manejo
de los datos puede también centrarse en el examen de ciertas propiedades
específicas, de sus relaciones y de sus variaciones, y recurrir a métodos
cuantitativos. Así, en su aplicación al cambio, el estudio de caso puede tender a
trazar las fases de un fenómeno en relación con lo que pasó en la organización
durante el período sometido a investigación, pero puede también si se apoya
sobre muchas variables medidas diacrónicamente, dar luz a través de un análisis
de series cronológicas, sobre la secuencias del cambio y sobre las relaciones de
causa-efecto entre variables intervinientes.
Sinembargo, para una gran parte los estudios de casos se inspiran en una
doctrina empirista apoyados sobre el pretendido rechazo de toda teoría y sobre la
convicción de que la simple acumulación de hechos aportaría una explicación
satisfactoria de las situaciones reales.13 Para comprender la realidad hay que
referirse a ella, siempre, dentro de un proceso de tipo "inductivo".
En esta concepción de la investigación, donde se admite que "los hechos
hablan por sí mismos", hay por lo menos un postulado teórico subyacente a saber:
8 Cf. H. LEVINSON, Organizational Diagnosis, Cambridge, Harvard University Press, 1972.9 P. A. CLARK, Action Research and Organizational Change, London, Harper & Row, 1972-B, p. 17.10 Cf. C. ARGYRIS, Intervention Theory and Method. A Behavioral Science View, Reading, Addison-Wesley, 1970.11 Cf. por ejemplo G. F. WIELAND and H. A. LEIGH, Change in Hospitals: Hospital Internal Communication Project, London, Tavistock, 1972.12 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 455.13 V. L. ALLEN, La doctrine de l'empirisme et l'étude des organisations L'Homme et la Société, janvier-février-mars 1970, p. 224.
167
que nada puede ser enunciado sin previa investigación empírica.14 Este postulado
abre la vía a todo tipo de interrogaciones incontroladas, que implican ellas
mismas, numeroso presupuestos, preconcepciones y juicios de valor.
"Insistir sobre la descripción de situaciones es sólo un vestigio del estado
preteórico de la ciencia cuando el fin de la investigación parecería ser la
acumulación de informes, de observaciones, que no resolvían ningún problema y
no eran tomados en cuenta por ninguna teoría. Esta filosofía de boticario cayó en
desuso en la misma ciencia de la administración.." 15
El estudio de caso tiende a veces al "datismo" (Bunge), la creencia según la cual,
cada parte del conocimiento científico es un conjunto de datos producidos por un
"método inductivo".
Los estudios de caso basados en "método inductivo" se concentran en
problemas concretos hallados en el funcionamiento particular de las
organizaciones tal como ellas son. Conciernen a problemas definidos y
formulados por los diferentes responsables de las organizaciones, sea que el
investigador los acepte tal como son (aproximación "técnica"), sea que el
investigador explore la manera como la problemática se da definida por quienes la
experimentan (la viven, la sienten ... N. T.) y están más o menos conscientes de
ella (aproximación "clínica").16 Tal manera de proceder conduce a centrar el
estudio de caso en preocupaciones pragmatistas, sin examinar la pertinencia y sin
percibir las implicaciones conceptuales y los límites que ellas imponen al análisis.17
Los problemas son abordados como si tuvieran una pertinencia científica propia
y pudieran, a gusto del investigador, descomponerse en cierto número de
problemas menores, donde cada uno de los cuales puede ser analizado de
manera separada.
Como ningún conjunto teórico avanza "a priori", pero si existe a priori una
pluralidad de causas, la investigación tiene que reunir una masa indefinida de
informaciones, sin que sea guiada por "ningún principio director". De ahí la
tendencia a clasificar en vez de explicar, y a "abandonar el análisis causal por
sencillos estudios descriptivos".18
14 Ibid., p. 235.15 M. BUNGE, op. cit., 1967, t. I, p. 188.16 A. W. GOULDNER and D. MILLER, Applied Sociology, New York, The Free Press, 1964, pp. 5-22.17 V. L. ALLEN, op. cit., 1970, p. 290.18 Ibid., p. 232.
168
Los rigurosos estudios de caso, no tienen que limitarse a una descripción, por
más bien documentada que sea, sino que deben apoyarse sobre conceptos e
hipótesis. deben guiarse por un esquema teórico que sirve de principio director
para la obtención de datos y evitar así, "el error del concreto mal ubicado"
(Hempel) y asegurar mejor la pertinencia y la interpretación de los datos que tales
estudios reúnen.
Esos estudios, por sí mismos, tienen un carácter "particularizante"19 y su poder
de generalización es limitado en la medida en que su validez está limitada a la
contingencia de sus conclusiones.20 Estas conclusiones no se revelarían
necesariamente correctas dentro de otros casos, aún similares, y además, otras
fuentes diferentes a los contenidos en el caso, escapan completamente al
análisis.21
De la misma manera, un estudio de caso que se apuntala sobre el cambio, no
puede permanecer al Post hoc, ergo propter hoc, (después de, entonces por eso),
a falta de controlar los factores accidentales o aleatorios que lo pudieran afectar.22
Sinembargo, a pesar de esas limitaciones evidentes, este tipo de caso tiende a
superar lo particular y autoriza ciertas generalizaciones empíricas basadas en una
"inducción amplificadora" que "se esfuerza en penetrar la red compleja de los
hechos, los fenómenos..., constituye objetos de pensamiento para análisis y
abstracción, y así deducir implicaciones."23 Pero la generalización de un caso a
una clase de otros casos, ó a todos los otros casos posibles, queda sometida al
principio de "la más amplia información." 24
Los estudios de casa basados en una teoría y que se refieren a un objeto de
conocimiento resultante directamente25 de ella, tienden a validar la validez
empírica de un sistema de hipótesis metódicamente construidas en la visión de la
prueba experimental. El modo de investigación llega a ser un campo de control
empírico para examinar el valor de la exposiciones teóricas.
La determinación del marco teórico es netamente más exigente aquí y requiere
19 S. M. LIPSET, M. TROW and J. S. COLEMAN, Organizational Analysis, in N. K. DENZIN, ed., The Research Act, Chicago, Aldine Publishing, 1970, p. 127.20 N. MOUZELIS, Organization and Bureaucracy, London, Routledge & Kegan Paul, 1967, p. 68.21 S. M. LIPSET et al., op. cit., 1970, p. 135.22 A. BARTON, op. cit., 1966, p. 13; D.T. CAMPBELL and J. C. STANLEY, Experimental and Quasi_experimental Designs for Research on Teaching, in N. R. CAGE, ed, Handbook of Research on Teaching, 1963, p. 176.23 H. LEFEBVRE, op. cit., 1969, pp. 93-102.24 A. VIRIEUX-REYMOND, op. cit., 1972, p. 89.25 S. M. LIPSET et al., op. cit., 1970, p. 129.
169
de la definición precisa de los niveles de análisis, del que se pueda recurrir a
conceptos generales y a la construcción de variables susceptibles de
observaciones rigurosas. Este tipo de estudio de caso presupone la separación
de lo accidental y de lo esencial en el caso analizado, y el descubrimiento de
fenómenos más típicos que únicos.
2. LOS ESTUDIOS COMPARATIVOS
El interés de los estudios comparativos reside en la superación de la unicidad y en
la puesta al día de regularidades o de constantes de muchas organizaciones, para
las cuales se analizan las semejanzas y diferencias. Los estudios comparativos
permiten estudiar las relaciones entre gran número de variables dentro del
contexto de una muestra de organizaciones.
Para estudiar las organizaciones no a nivel de las unidades que la componen
sino como una "totalidad", mirada desde el ángulo de su forma y en su
funcionamiento global, el caso de una sola organización no ofrece ciertamente el
mayor campo de investigación: una aproximación comparativa de sus caracteres y
de sus variaciones se impone.
Como modo de investigación, el análisis comparativo se apoya sobre la
realidad concreta y compleja de las organizaciones y no, como en la
experimentación en laboratorio, sobre un objeto de investigación reducido d
manera artificial a las capacidades de manipulación del investigador. Si es cierto
que "la experimentación rebasa siempre el dato, hace aparecer combinaciones
nuevas, entonces la comparación se refiere siempre a una realidad preexistente,"26
no obstante, el método comparativo obliga al investigador a "descentrarse" y a
abandonar un punto de vista subjetivo particular, a adaptar sus exigencias
normativas a un sistema de referencia múltiple; son los objetivos mismos que de
alguna manera se sitúan los unos con relación a los otros. 27 Llevando a conocer y
a entender lo que es una organización en una forma de "razonamiento
homológico" ejerciéndose no sobre objetos empíricos sino sobre las propiedades
de esos objetos y sobre las relaciones entre estas propiedades.28
El estudio comparativo de las organizaciones se compone de formas muy
variadas, según el número de organizaciones analizadas, la naturaleza y el
26 L. SEBAG, op. cit., 1969, p. 238.27 J. PIAGET, op. cit., 1972-B, pp. 29-33.28 P. M. BLAU, The Comparative Study of Organizations, Industrial and Labor Relations Review, vol. 18, 1965, p. 323.
170
tratamiento - cualitativo ó cuantitativo - de los datos, la perspectiva sincrónica o
diacrónica del estudio. El estudio comparativo no necesariamente se apoya sobre
el sondeo de un gran número de organizaciones y tampoco excluye el recurso de
análisis intensivo de casos. Al contrario, puede útilmente combinar el estudio de
una muestra de organizaciones de las cuales analiza las variables más
significativas para la investigación, con la investigación más profunda de algunos
casos, escogidos de la muestra, con el propósito de profundizar o de afinar las
conclusiones obtenidas.
La comparación "intensiva" de un pequeño número de casos similares permite,
mejor que un caso único, teorizar a propósito de la organización misma. El
estudio comparativo de casos utiliza un lenguaje de conceptos y categorías para
aprehender los hechos. Tal acercamiento esencialmente de tipo cualitativo,
contribuye por otro lado a la elaboración de tipologías que, a la vez, expresamente
se ligan a los resultados de la investigación empírica y a las exigencias de la
teoría.
La comparación en el tiempo puede efectuarse bajo la forma de una serie de
casos sucesivos mostrando no únicamente situaciones "antes y después" de un
cambio, sino los procesos mismos de cambio y sus diferentes fases
interdependientes.
- Si dos organizaciones formalmente iguales se diferencian netamente desde un
solo aspecto, una "cuasi-experimentación" permite descubrir las consecuencias de
la diferencia observada ó explicar las causas, con la condición, siempre y cuando,
que pueda llevarse a cabo un control suficiente sobre los resultados.
- Si dos o más organizaciones comparables son diferentes entre sí en varios
aspectos, un "cuasi" análisis de correlación puede dar cuenta de las diferencias
comprobadas, sin que todavía los resultados obtenidos puedan generalizarse a
todos los casos, ni que tampoco tengan un valor de prueba definitivo.29
- Por lo mismo, el estudio comparativo de algunos casos durante un largo período
de tiempo, permite establecer relaciones entre variables organizacionales y
examinar hipótesis a propósito de las funciones desempeñadas por los diferentes
elementos de la organización, observando lo que pasa cuando uno de estos
cambia. La comparación provee los medios para una mejor verificación, que el
estudio de caso único, y ayuda a especificar bajo qué condiciones se verifican las
29 A. BARTON, op. cit., 1966, p. 12.
171
relaciones que aparecen.30
A medida que el número de casos aumenta, se pueden utilizar métodos
estadísticos para el tratamiento de los datos recolectados.
Cuando el estudio comparativo se refiere a una muestra lo suficientemente
grande de unidades, su desarrollo implica el examen sistemático de los atributos
específicos de la organización, los que pueden ser captados y medidos sin la
necesidad de una investigación en profundidad de cada una de las
organizaciones estudiadas.31
El polo morfológico brinda al estudio comparativo un denominador común para
los elementos que son objeto de la comparación. Así lo dice Sebag,
"no hay verdaderas comparaciones sin formalización; es por ésta única condición
por lo que las realizaciones empíricas se encuentran integradas a la cadena de las
transformaciones posibles y que el abandono de los rasgos secundarios permite
dar siempre más amplitud al campo tematizado por la investigación." 32
Algunos marcos de análisis son utilizables y reenvían, por sí mismos, a sistemas
teóricos e incorporan datos diferentes, según el objetivo perseguido en cada
estudio.
Con los tipos ideales, aquellos a los cuales organizaciones concretas pueden
ser referidas, las tipologías de las organizaciones constituyen el marco de análisis
ex ante (N. T.) con ayuda del cual el estudio comparativo puede procesarse
empíricamente. Algunos son muy generales, otros más específicos, según su
objeto, mejor dicho, según sea su nivel de conceptualización. Estas tipologías
pueden ser "naturales" ó "construidas", según que los criterios que sirven de base
a la clasificación sean en sí mismos directamente observables, ó por el contrario,
sean artificiales.
De otra parte, los mismos estudios comparativos engendran, como
subproductos, tipologías para la identificación y ordenación de elementos
organizacionales distintos y constantes.33
Taxonomías más extensivas, que se refieren a un número elevado de atributos
organizacionales y que, teóricamente deberían variar cuanti ó cualitativamente
30 Ibid., pp. 14-15.31 D. DUNKERLEY, The Study of Organizations, London, Routledge & Kegan Paul, 1972, p. 58.32 L. SEBAG, op. cit., 1969, p. 238.33 T. BURNS, The Comparative Study of Organizations, in V. H. VROOM ed., Methods of Organizational Research, Pittsburgh, University of Pittsburgh Press, 1967, p. 120.
172
entre las diferentes organizaciones, brindan un marco de análisis para ordenar y
correlacionar los atributos identificados de tal manera que permite entender mejor
los fenómenos de la organización. Una simple lista de variables, juzgadas como
características, representa con seguridad una preciosa fuente de información, pero
además de su carácter siempre incompleto, provoca por su heterogeneidad
dificultades de operacioanalización y de medida. Bien a menudo se reduce a un
catálogo de atributos de naturaleza factual y descriptiva y por lo tanto, tal
clasificación no constituye una base suficiente de conceptualización.34
Una objeción análoga vale, sinembargo, para un estudio que deseara comparar
datos clasificados bajo rubros demasiado amplios y necesariamente abstractos e
imprecisos.
Es por eso, que el marco que mejor conviene al estudio comparativo de las
organizaciones es aquél de un análisis sistémico, multidimensional, que se apoya
sobre categorías o conceptos coherentes provenientes de un plan lógico,
permitiendo así una investigación empírica y un tratamiento de los datos
compatible con los conceptos utilizados. Así concebidos, los estudios
comparativos pueden comprender de manera separada o simultánea diferentes
niveles de análisis de la organización con el propósito de establecer relaciones
entre las características de sus estructuras internas, de sus procesos y de su
entorno.
Los estudios comparativos basados sobre un caso y con un marco de análisis
sistémico, recurren a muchas fuentes de información como estudio de casos con
datos comparables, sondeos aplicados a muestra de organizaciones, datos
institucionales buscados en documentos de archivos ó en "bancos de datos", etc.35
Según las unidades de análisis escogidas para la comparación, los datos a
recolectar son de diferente tipo, indicadores globales o agregados.36 Así, medidas
aditivas (promedio, tasa, por ejemplo), datos sobre sus miembros, pueden
caracterizar la organización como tal, si existe una correspondencia entre los
datos individuales y los de la organización. Las unidades de análisis pueden
igualmente tener lugar a partir de indicadores de organizaciones de
características más complejas, que no son la sencilla suma de aspectos
individuales. También, medidas como la varianza de la distribución de datos
relativos a los miembros puede caracterizar la organización (la desviación
estandar por ejemplo).
34 Ibid., pp. 124-127.35 A. BARTON, op. cit., 1966, p. 17.36 E. W. LEHMANN, in E. O. SMIGEL, op. cit., 1971, pp. 149-176.
173
En fin, datos que intervienen en el estudio comparativo, provienen de
propiedades relacionales de las organizaciones: características
intraorganizacionales que se derivan de las relaciones entre subunidades o
elementos constitutivos: características interorganizacionales que se derivan de
las relaciones entre la organización y su entorno exterior; propiedades
"contextuales" inherentes a la más grande organización, al sector ó la comunidad
de la cual la organización de estudio hace parte.
Una dificultad inherente a los estudios comparativos cuantitativos está
precisamente en la definición y medida de los datos y en la construcción de
variables , de tal manera que haga posible y fecundo el recurrir a los métodos
estadísticos.37
La comparación puede referirse no únicamente a una muestra de
organizaciones que representan uno o más "sectores", ni tampoco militarse al
estudio sincrónico de sus propiedades; también puede tomar una dimensión
temporal que la haga más apta al estudio de los procesos y del cambio
organizacionales.
Un análisis diacrónico, llevado a cabo con la ayuda de datos tomados durante
un tiempo en momentos sucesivos, permite distinguir con más seguridad la
naturaleza y las causas de los fenómenos observados. Pero aplicando el mismo
marco teórico en cada momento, este análisis diacrónico deja de revelar cuáles
otras variables habrían podido ser operantes ó cuáles cambios más
fundamentales habrían podido introducirse. También, cuando se trata de estudiar
el cambio mismo o la evolución de las organizaciones en relación con el entorno
social, el análisis comparativo debe de preferencia hacerse con referencia a un
método de investigación histórica y utilizar conceptos que den cuenta de los
procesos secuenciales del cambio.38
El estudio histórico, donde el tiempo interviene sin solución de continuidad
como una variable independiente mayor, puede revelar la multiplicidad de los
efectos sobre la organización del cambio surgido en la sociedad y señalar el
origen de las transformaciones institucionales de larga duración.
En fin, para analizar los determinantes de los cambios organizaciones, la
técnica del panel podría ser un instrumento de investigación muy valioso, pero aún
muy poco utilizado a nivel de la organización. Esta técnica consiste en la
recolección de datos estandarizados repetida sobre la misma muestra de unidades
37 T. BURNS, in V. H. VROOM, op. cit., 1967, p. 152.38 Ibid., pp. 139-142.
174
en el curso de un período de tiempo, lo cual permite revelar consecuentemente los
procesos de cambio y las relaciones de causa-efecto entre variables. Por lo
mismo, esta técnica podría servir para el estudio de las relaciones entre
comportamiento individual y características organizacionales a través del tiempo,
aportando los datos necesarios para el desarrollo de modelos simulados.39
3. LAS EXPERIMENTACIONES
Dentro de las investigaciones en ciencias sociales y más especialmente en
organización, hay muchas estrategias de experimentación posibles, donde las
exigencias y el valor metodológicos varían sensiblemente, desde la
experimentación "pura" en condiciones de "laboratorio" hasta la "investigación"
que mide los efectos de un cambio inducido y constituye una especie de
experiencia "sobre el terreno".
La diferencia entre la experimentación en laboratorio y la experimentación
sobre el terreno, reside esencialmente en la situación, a veces arreglada
especialmente en función de la experiencia, a veces, al contrario, natural, y por lo
mismo, reside en la precisión, más o menos grande, del control y de la
manipulación de las variables.40
La experimentación en laboratorio
En una primera aproximación, esta forma de experimentación responde a tres
criterios mínimos: debe definir y medir un cambio en la estructura, en los procesos,
ó en el entorno de la organización; debe llegar a cuantificar las variables y debe,
en cierto modo verificar las relaciones de causa efecto a través de la observación
de las diferencias inducidas por la variable experimental.41
Comparada con las demás estrategias de investigación, la experimentación
ofrece la ventaja de establecer con más seguridad el sentido de las relaciones
entre las variables estudiadas, gracias al control que esta opera sobre la
naturaleza de su respectivo cambio durante el período en el cual aparece. Esta
39 W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 2; A. BARTON, op. cit., 1966, pp. 22-23.40 L. FESTINGER, Laboratory Experiments, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 9.41 S. E. SEASHORE, Field Experiments with Formal Organizations, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 147.
175
experimentación es conveniente de manera particular a la verificación de
hipótesis, ciñendo más cercanamente la explicación causal.
Toda experimentación supone una o más variables independientes
manipuladas por el investigador y la obtención de medidas sobre una o más
variables dependientes.
Idealmente es necesario que las observaciones se hagan antes y después del
tratamiento aplicado a uno o más grupos experimentales y que se hagan
observaciones similares sobre uno o más grupos de control a los que no se ha
aplicado ningún tratamiento (pretest-posttest, diseño con grupo control).42 Todos
estos grupos deberán seleccionarse al azar. Las medidas tomadas antes y
después del cambio, así como la comparación con el grupo control, aseguran la
validez interna de la experiencia.
Una situación de laboratorio es aquella que, por naturaleza, da al investigador
un control sobre las condiciones de su observación tan total como es posible,
gracias a un "aislamiento" del sistema empírico a observar y a la utilización
rigurosa de los instrumentos de medida.43
En el laboratorio, idealmente, "el investigador crea una situación tal como él
desea y dentro de la cual controla o manipula las variables. Así está en capacidad
de observar y medir el efecto de la manipulación de las variables independientes
sobre las variables dependientes donde la intervención de todos los otros factores
está reducida al mínimo."44 El investigador no busca reproducir una situación real,
sino manipular variables no muy numerosas aunque si críticas, en condiciones
bien determinadas, "puras". De esta manera llega a resultados netamente
tajantes y concluyentes.
Esta concepción estricta de la experimentación lleva a un modo de
investigación esencialmente "técnica",45 haciendo abstracción de todos las
relaciones complejas, de naturaleza psicológica y social, entre experimentador,
sujetos y entorno del laboratorio.46
42 D. T. CAMPBELL and J. C. STANLEY, in N. R. CAGE, op. cit., 1963, pp. 183-194; L. B. BARNES, Organizational Change and Field Experiment Methods, in V. H. VROOM, op. cit., 1967, pp. 80-81.43 M. ZELDITCH and T. K. HOPKINS, Laboratory Experiments with Organizations, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 40.44 L. FESTINGER, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 9.45 Sobre los problemas técnicos de la experimentación en laboratorio, cf. L. FESTINGER, in W. M. EVAN, op. cit., 1971., pp. 12-23; Ross and SMITH, Orthodox Experimental Designs, in H. M. BLALOCK and A. B. BLALOCK, Methodology in Social Research, New York, McGraw Hill, 1968, pp. 33-389.46 Sobre la experimentación como proceso psicosociológico, cf. W. M. EVAN, op. cit., 1971, Cap 2 et 3.
176
En el domino de las organizaciones, los sujetos sometidos a experimentación
pertenecen a pequeños grupos en el sentido de la psicosociología. A través de
estos pequeños grupos, la investigación tiende a analizar, bien su funcionamiento
propio (training group), bien sea su funcionamiento en situaciones impuestas (task
oriented group) ó bien, el funcionamiento de un sistema social más amplio. Así,
los grupos reducidos en tamaño y con duración limitada en el tiempo, pueden
"simular" organizaciones formales complejas: Cuatro modos de simulación se
proponen,47 según que los grupos experimentales constituyan una miniaturización
de la organización, una réplica parcial, una "cuasi" organización, ó que éstos
grupos representen únicamente una sub-unidad. Evidentemente es importante
que la experiencia enfoque propiedades características de la organización como
tal, salidas de teorías formuladas con éste propósito y que estas propiedades
puedan reproducirse en laboratorio. La escogencia y el número de propiedades
que se deben incluir dependen de las variables que deseen manipular en el plan
teórico, sin que su multiplicidad y su complejidad haga la observación y el control
demasiado difíciles.48 Es importante además que las propiedades examinadas
obedezcan a las mismas leyes que aquellas a las que obedecen las variables que
representan. O sea, que se comportamiento sea análogo. A pesar de las
diferencias que aparecen de pronto a este respecto entre los grupos
experimentales y las organizaciones complejas, se puede admitir que el tamaño,
la duración y el carácter ad hoc y la naturaleza de las interrelaciones entre los
miembros del pequeño grupo, no son un obstáculo a la extensión de los
resultados a la gran organización, con tal que las relaciones entre sus respectivas
propiedades sean similares.49
Cualquiera que sea la forma de la experimentación, su desarrollo en las
condiciones de laboratorio presenta, en sí, una superioridad frente a las
experiencias hechas en el mundo real. Esta forma de experimentación permite
crear situaciones poco comunes y obtener contrastes útiles para el estudio, aislar
entre los múltiples factores y casi inseparables que intervienen en una situación
47 M. ZELDITCH and T. K. HOPKINS, Laboratory Experiments with Organizations, in A. ETZIONI, ed., Complex Organizations. A Sociological Reader, New York, Holt, Rinehart & Winston, 1961, pp. 464-478.48 M. ZELDITCH and W. M. EVAN, Simulated Bureaucracies: A. Methodological Analysis, in H. GUETZKOW, ed., Simulation in Social Science Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 1962, pp. 52-53.49 Ibid., pp. 59-60.
177
"natural", aquellos por los que el investigador se interesa. De otro lado, asegura
un mayor control sobre los factores extrínsecos que falsificarían la interpretación
de los resultados, por la reducción a la exclusión de las fuentes de perturbación.
Facilita, así, la medida de los resultados de la experiencia, los cuales serán mucho
más precisos.
Por otra parte, el laboratorio permite una flexibilidad de experimentación y una
precisión de la observación más adecuadas a las necesidades de la investigación,
lo mismo que una administración de los tratamientos, más libre y neutral que la
experiencias conducida en el marco de una organización real. Estas condiciones
y este carácter artificial de la experimentación en el laboratorio, constituye una
técnica apropiada especialmente para la investigación fundamental, pero no
impide que extraiga información o tome orientaciones de los estudios de
situaciones reales y que sea confirmada con estudios de campo.50 La
experimentación puede, con más facilidad que otros procedimientos, privilegiar
situaciones que ofrecen un gran interés teórico, pero que aparecen raramente en
el mundo real o que son ocultados por otros efectos.51
No obstante lo anterior, la experimentación en el laboratorio es limitada por la
artificialidad de las situaciones y choca con el problema de la reactividad de los
sujetos.
Forzosamente, los procedimientos de laboratorio siempre simplifican y aislan
de manera experimental las variables ligadas entre sí en situaciones sociales
reales. Y de otra parte, el dispositivo mismo de laboratorio y la relación entre los
sujetos y el investigador, las influencias intencionales del investigador (resultado
de su papel como maestro de la experiencia) son elementos que determinan el
comportamiento de los sujetos tanto como la manipulación de las variables.
La experimentación sobre el terreno
También enfocada a manipular una o más variables independientes para verificar
alguna hipótesis, la experimentación "de campo" constituye a primera vista un
modo de investigación radicalmente diferente de la experimentación en
laboratorio. Transforma el entorno de la experiencia que ya no es simulada sino
"natural", transforma igualmente los papeles del investigador y de los sujetos que
50 L. FESTINGER, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 23.51 M. ZELDITCH and W. M. EVAN, in H. GUETZKOW, op. cit., 1962, p. 49.
178
participan tanto en la experiencia como en sus relaciones mutuas.
Las experiencias controladas, calcadas sobre el modelo de laboratorio, son en
efecto muy difícilmente practicables en las ciencias sociales "a menos que se
introduzcan concepciones de una abstracción tal que asuma que la experiencia no
tiene sino muy poca relación con la situación en cuestión."52
Bajo sus diversas formas, las experimentaciones adelantadas en situaciones
reales, recurren a métodos que sacrifican la mayoría de los controles utilizados en
laboratorio. Su análisis en efecto, ya no se hace sobre grupos seleccionados al
azar ni se validan mediante grupo control, hablando en sentido estricto.
Experimentación sobre el terreno
Cuasi-
experimentac.
Experimentac.
"operacional"
Investigación-
acción
Posición del
investigador
Observador/
pasivo
Operador/
involucrado
Catalizador/
implicado
Papel del
investigador
Análisis Consulta Colaboración
Objetivo de la
investigación
Explicación del
cambio
Causación y
evaluación del
cambio
Conocimiento y
práctica de la
dinámica del
cambio
Formulación de la
problemática
Hipótesis
explícitas
Hipótesis
explícitas
Preguntas
conjeturales
Variable(s)
experimental(es)
Pocas
seleccionadas y no
provocadas
Pocas
seleccionadas y
provocadas
Numerosas, no
seleccionadas y
provocadas
Tratamientos No reactivo Reactivo Reactivo
La experimentación toma, entonces, formas más adaptadas al "terreno", lo que
no hace sin entropía metodológica. Se transforma en "cuasi-experimentación" en
experimentación "operacional" ó en "investigación-acción".
La cuasi-experimentación, cuando no hay selección al azar ni control
experimental posibles, representa un primer método. El investigador interviene
52 V. L. ALLEN, op. cit., 1970, p. 223.
179
como observador pasivo de un cambio introducido a iniciativa de agentes
externos. La experiencia es, entonces, concebida y ejecutada por estos con fines
políticos, económicos, culturales, etc., mientras que el investigador tiene el papel
de recolectar y analizar los datos que le permitirán evaluar el cambio e identificar
las causas.53 Su objetivo de investigación está limitado a un pequeño número de
factores dentro de la situación. Analizando los datos recogidos antes y después
de la experiencia, las correlaciones que el investigador establece pueden aportar
una interpretación causal del cambio estudiado, con tal que hayan sido
explorados, lo más completamente posible, las demás explicaciones plausibles.54
Más que la experimentación en laboratorio, la "cuasi experimentación de
campo" conlleva problemas de validez interna y externa.55
La validez interna es exigencia mínima sin la cual la experiencia no podría ser
legítimamente interpretada: los efectos de los tratamientos no pueden sesgarse
por variables que se salen de control. Estas variables extrínsecas a la
experimentación son en su orden principal: los eventos que intervendrían entre las
tomas de las medidas ("historia"), los cambios que afectan los sujetos en el
transcurso del tiempo ("maduración"), los efectos del primer test en los resultados
de un segundo test (efectos del test), las modificaciones en los instrumentos de
medida ó en las observaciones ("instrumentación"), la "regresión estadística",
resultado de la disparidad de los grupos la que es función de los resultados
extremos, los sesgos provenientes de la "selección diferencial" de las personas
que contestan y que conforman los grupos de comparación ó, la pérdida
diferencial de los encuestados según los grupos ("mortalidad experimental").
Cada uno de estos factores pueden producir efectos que se confunden con
aquellos de la variable experimental, si no se controlan. 56
La validez externa concierne a la representatividad de la experiencia, o al
grado en el cual sus resultados pueden ser generalizados. Los factores que la
comprometen provienen de la interacción ocurrida entre los sucesivos test que
53 D. KATZ, Field Studies, in L. FESTINGER and D. KATZ, eds, Research Methods in the Behavioral sciences, New York, Dryden Press, 1953, p. 53. (citado por L. B. BARNES, Classical Versus Nonclassical Designs in Field Experimentation, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 165).54 D. T. CAMPBELL and H. L. Ross, The Connecticut Crack-down on Speeding. Time-Series Data in Quasi-Experimental Analysis, Law and Society Review, août 1968, pp. 33-53. 55 D. T. CAMPBELL and J. C. STANLEY, in N. R. CAGE, op. cit., 1963.56 Cada vez más, la experimentación se choca con la dificultad, a veces más grande, de producir un cambio en ciertas variables que de mantener constantes los otros factores. (A. KAPLAN, op. cit., 1964, p. 167.
180
modifican la sensibilidad de los examinados a la variable experimental,
reacciones de los sujetos a los dispositivos de la experimentación, o aún, las
posibles interferencias entre los varios tratamientos aplicados a los mismos
sujetos.
Los dos tipos de validez van raramente apareados, una experimentación está
siempre confrontada al dilema entre control y representatividad: así, por ejemplo,
la homogeneidad de la población de la cual se sacan los sujetos, aumenta la
precisión y el control de la experiencia, pero produce resultados menos
generalizables. Al contrario, el control disminuye a medida que aumenta el
número de unidades estudiadas, la magnitud de los cambios introducidos, la
duración de la experiencia, etc.57 de la misma manera, la simulación de numerosas
propiedades de la organización puede aumentar la validez externa, pero ir en
detrimento del control y, en consecuencia, de la validez interna.58
Una segunda forma, muy diferente, de la experimentación de campo es
calificada de operacional.59 En relación a la precedente, ésta se caracteriza por un
vuelco en los respectivos papeles del investigador y de los miembros de la
organización: mientras el primero (individuo ó equipo) concibe la experiencia y
planifica el desarrollo, los segundos asumen las tareas de observación y de
evaluación. Aquí el investigador se constituye en operador e introduce un cambio
en la organización actuando sobre un cierto número de variables en función de
hipótesis que él mismo ha puesto al iniciar la investigación. El mismo investigador
está, por consiguiente, fuertemente involucrado en la realización del cambio y por
consecuencia, ejerce una influencia directa en el curso de la experiencia. De
hecho, él interviene como consultor y actúan en estrecha relación con los
miembros de la organización cliente. De su lado, éstos últimos cooperan a la
aplicación del cambio y observan los resultados. La organización pone en marcha
controles que permiten medir los efectos del cambio en las unidades sometidas a
la experiencia.
Bajo una forma aún más apartada de la experimentación clásica, una corriente
de investigación orientada a la dinámica del cambio conduce a la vez a su
producción concreta y al estudio de su proceso y de sus efectos. Como su
nombre lo indica, la investigación-acción se orienta, al mismo tiempo, a conocer y
a hacer. Su desarrollo es una especie de dialéctica del conocimiento y de la
57 S. E. SEASHORE, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, pp. 150-151.58 W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 3.59 L. B. BARNES, in W. M. EVAN, op. cit., 1971, p. 166.
181
acción. En lugar de limitarse a utilizar un saber existente como en la investigación
aplicada, la investigación tiene simultáneamente a crear un cambio en una
situación natural y a estudiar las condiciones y los resultados de la experiencia
efectuada.
Más precisamente, el objeto de la investigación - acción es el cambio y el
desarrollo de la organización bajo un aspecto significativo de sus estructuras y de
sus modos de funcionamiento.60 El objeto de la investigación-acción toca las
propiedades del sistema organizacional a diferentes niveles de análisis, pero toma
siempre en consideración un amplio abanico de variables. A menudo orientada
hacia las experiencias del cambio a nivel del comportamiento de los individuos y
de los grupos, la investigación-acción encuentra igualmente su campo de
aplicación a nivel de las estructuras. De otra parte, no puede descuidar las
dimensiones del contexto social y del entorno donde la acción se desarrolla y fuera
de los cuales, esa acción no puede entenderse o comprenderse. Bajo este
ángulo, toma a veces la forma de un análisis y de una terapia "institucional",61 la
cual impide toda intervención orientada a cambias los individuos o los grupos sin
cambiar las estructuras y el funcionamiento de las instituciones de las cuales ellos
hacen parte, además, insistiendo sobre la necesidad de hacer participar a los
mismos interesados en la definición y puesta en marcha de una nueva
organización.
El objetivo de la investigación no es especificado desde un principio de manera
definitiva y no permanece en absoluto constante desde el inicio hasta la
terminación: éste se descubre a medida que surgen las preguntas que orientan la
investigación. Inicialmente y de manera esquemática, un problema es definido
entre el investigador y los miembros de la organización, lo que conduce a una
concepción de un programa de cambio. En el marco de este problema, un
diagnóstico del sistema de organización expone la situación existente, analiza los
factores y las alternativas de solución. En fin, la evaluación y la escogencia de la
solución son seguidas de las medidas y de las modificaciones requeridas para
establecer y poner en marcha una nueva situación.62 Para proceder al
diagnóstico, a la escogencia de una solución y a la realización del cambio, la
investigación-acción se apoya sobre el conjunto de propuestas y de conceptos
60 P. A CLARK, op. cit., 1972-B, p. 23.61 G. LAPASSADE, Groupes, organisations, intitutions, Paris, Gauthier-Villars, 1967; G. LAPASSADE, L'analyseur et l'analyste. Research institutionnelles, Paris, Gauthier-Villars, 1971.62 P. A. CLARK, op. cit., 1972-B, pp. 17, 95-96.
182
sacados de las ciencias sociales. Sus hipótesis, sinembargo, provienen más
inmediatamente de la experiencia invocada por los practicantes y de la
observación corriente, vivida, de las situaciones encontradas.
El investigador, en resumen, clarifica y traduce en lenguaje científico, hipótesis
de sentido común que mantienen como tal el carácter de preguntas conjeturales.
Las teorías intervienen en la investigación como una especie de repertorio de los
conocimientos, permitiendo un abanico ecléctico de conceptos sirviendo de
variables al análisis y permitiendo la indagación y la interpretación de situaciones
concretas.
A menudo y de manera deliberada, el papel del investigador es reducido al
mínimo,63 tanto porque renta a la imprecisión de las relaciones entre investigador y
los miembros de la organización, como porque la investigación y el cambio
progresan en función del aprendizaje efectuado in vivo por quienes están
participando en la investigación-acción, lo cual es el objeto.
Además de los métodos de la investigación-acción utiliza sobre el terreno, en
algunos de los estadios de su desarrollo, ésta se distingue por las exigencias
particulares hechas a la recolección de datos. Ello requiere de la puesta en
escena de una "infraestructura" destinada a recolectar las informaciones mediante
una variedad de técnicas apropiadas y a actuar a partir de los datos que dichas
informaciones suministran. De hecho, todo este proceso se caracteriza por ciclos
repetidos que incluyen: definición del problema, conducción de investigaciones,
feef-back de las informaciones y la concepción de un plan de acción.
Tanto el investigador (o los investigadores) como los miembros de la
organización e y los otros colaboran con el mismo proyecto, donde cada fase
reclama un acercamiento conjunto,64 animando una confrontación, en pie de
igualdad, entre las dos partes y caracterizada por un espíritu de indagación y de
descubrimiento. A lo largo de toda la investigación, las informaciones y los
resultados dan lugar a intercambios mutuos que sirven de base a la clarificación
del problema y al proseguimiento de la acción.
La colaboración puede, entonces, tomar formas diferentes según los papeles
que desempeñen cada una de las partes y el tipo de relación que se dé entre
ellas.65 Tan pronto, son los miembros de la organización quienes conducen el
63 R. W. REVANS, Studies in Institutional Learning, Bruxelles, European Association of Management Training Centers, 1967.64 E. H. SCHEIN, Process Consultation: its Role in Organization Development, Reading, Addison-Wesley, 1969; R. BECKHARD, Organization Development, Reading, Adisson-Wesley, 1969.65 P. A. CLARK, Organizational design. Theory and Practice, London, Tavistock, 1972-A,
183
proyecto (eventualmente, dichos miembros reciben para ese fin una formación
previa de tipo metodológico)66 y transforman su propia situación, mientras que el ó
los investigador(es) - ó el equipo de especialistas -facilitan la actividad de los
miembros de la organización, coordinándola y adoptando una actitud no directiva.
Tan pronto, por el contrario, el ó los investigador(es) intervienen con un papel más
activo para orientar el trabajo ó para acelerarlo, para revelar los problemas mal
percibidos o mal abordados, o sea, para influenciar la actividad de grupo y la
dirección del cambio; su actitud directiva podría, entonces, engendrar o reforzar
las tensiones entre las partes.
En un proyecto de investigación-acción, el investigador tendrá el propósito de
ayudar a la organización donde él interviene y de participar en el cambio: el
cúmulo de papeles - el de investigador y el de consejero, animador, formador ó el
de conceptualizador-, puede dificultarle la evaluación del proyecto. Otro
investigador puede eventualmente hacerse cargo de ello, paralelamente al
desarrollo de la experiencia de la cual sería testigo.
Una evaluación se muestra como necesaria, a la vez para medir objetivamente
los efectos del cambio y para validar la experiencia en el plano científico.67 Esta
necesita de la recolección independiente de muchas informaciones sobre los
resultados de la acción: idealmente, su precisión provendrá de las medidas
tomadas antes y después del cambio. En su defecto, encuestas y observaciones
permiten el análisis de numerosas variables en momentos diferentes y un control
estadístico de los factores determinantes.
Los resultados del proyecto deben ser apreciados a la luz de los criterios
correspondientes a los objetivos de sus autores. Pero, resultados inesperados
pueden igualmente derivarse de las actividades emprendidas en el marco del
proyecto y los resultados negativos, o los costos, pueden disminuir sus beneficios.
Es cobre todo importante observar la secuencia de los resultados parciales o
intermedios, con sus mutuas interacciones, las que acompañan el proceso de
cambio en el tiempo.
4. LA SIMULACION
p. 105.66 Por ejemplo en el proyecto descrito en G. F. WIELAND and H. E. LEIGH, eds, Changing Hospitals. A Report on the Hospital Internal Communications Project, London, Tavistock, 1971.67 G. F. WIELAND, Evaluating Action-Research: Some Psychological Problems, Revue internationale de Sociologie, décembre 1968, pp. 3-17.
184
Como modo de indagación y de investigación, la simulación se refiere a la
construcción y a la manipulación de un modelo operatorio, que representa todo o
parte ó, de los procesos que lo caracterizan. Por ejemplo, un modelo simulado de
una organización sería la representación simbólica, destinada a reproducir las
características o las propiedades de un sistema organizacional, las cuales son
reputadas como pertinentes al objetivo de la investigación (reputadas en el sentido
que son consideradas justificadas, sustentadas y aceptadas,...N.T.). Entonces, en
este método, se trata de abstraer previamente los elementos y las relaciones que
se suponen teóricamente que son esenciales a la construcción del modelo que se
desea simular.68 El objetivo principal de la simulación no es el de reproducir el
funcionamiento real del sistema, sino de programar en un computador ciertos
procesos teóricos y observar qué género de comportamiento producen dichos
procesos,69 para comparar eventualmente los resultados obtenidos con los datos
empíricos recolectados.70
En el marco de la simulación, los modelos simulados responden a diferentes
objetivos posibles. Los modelos simulados permiten aplicar una teoría ya
aceptada a problemas concretos, describir el comportamiento de organizaciones
existentes, ayudar a concebir o mejorar la forma y funcionamiento de una
organización. Pueden también utilizarse como soporte de la experimentación (en
laboratorio) de los comportamientos dentro de una organización, brindando un
entorno controlable para los sujetos estudiados71 y aún situarse como sustitutos de
los métodos experimentales, donde éstos no son practicables.
Sinembargo, su objetivo principal es explorar las consecuencias de las
proposiciones teóricas concernientes a los comportamientos organizacionales. El
método tiende a producir en un modelo operatorio un conjunto de hipótesis
derivadas de proposiciones relativas a la estructura y al funcionamiento de un
sistema, las cuales "tienen una coherencia interna, poseen un poder de
explicación y son ellas mismas susceptibles de análisis y de verificación."72 Los
pasos seguidos en la simulación aparentan ser el proceso hipotético-deductivo
68 R. E. DAWSON, Simulation in the Social Sciences, in H. GUETZKOW op. cit., 1962, p. 3.69 J. S. COLEMAN, Analysis of Social Structures and Simulation of Social Processus with Electronic Computers, in H. GUETZKOW, op. cit., 1962, pp. 61-69.70 J. P. GRÉMY, Les techniques de simulation, in R. BOUDON, op. cit., 1971-A, p. 241.71 T. B. ROBY, Computer Simulation Models for Organization Theory, in V. H. VROOM, op. cit., 1967, pp. 173-174; K. J. COHEN and R. M. CYERT, Simulation of Organizational Behavior, in H. G. MARCH, Handbook of Organizations, Chicago, Rand McNally & Co, 1965, p. 332.72 T. B. ROBY, in V.H. VROOM, op. cit., 1967, p. 175.
185
propio de una cierta tradición científica.73
La simulación puede servir de instrumento de investigación y de
descubrimiento orientado a la indagación y explicación especulativa, cuando
apunta al estudio teórico de un sistema "independientemente de su relación con lo
real", ó al estudio teórico de un proceso "para ver cómo pueden ocurrir las cosas",
sin preocupación de verificación subsecuente.74 La simulación puede igualmente
comparar los resultados del modelo con datos empíricos exteriores para examinar
la adaptación de dicho modelo a los sistemas reales, con el propósito de describir
la evolución futura del proceso que representa ("previsión") ó de reconstruir las
etapas intermedias ("postdicción"), extrapolando o interpolando los datos, amén
de experimentar y aislar la incidencia de factores determinantes sobre los
resultados, haciendo variar los parámetros del modelo ("cuasi-experimentación").75
De manera general, el modelo simulado define los elementos del sistema que él
representa, sus mecanismos de funcionamiento y las conexiones que existen
entre los diferentes elementos.76 Así, permite estudiar la estructura misma de la
organización y el comportamiento del sistema como tal, de una manera mucho
más sintética que los otros métodos.
El modelo simulado es entonces, un tipo de modelo formal construido en
función de la simulación en computador. Es una versión específica del modelo
matemático ("las operaciones efectuadas por computador, tratándose de un
modelo simulado son siempre operaciones lógico-matemáticas"),77 pero no no
obstante se diferencia de aquél, en que permite una complicación y una
especificación más grandes. Un modelo de simulación "no se muestra bajo la
forma de ecuación, sino en forma de diagrama". Puede construírse a partir del
momento en que se define un sistema, a la vez, en sus elementos y en sus reglas,
deterministas o probabilísticas, las cuales gobiernan su funcionamiento.78 Puesto
que la formulación de un modelo matemático o analítico impone simplificaciones o
73 Ibid., p. 206.74 BASOUL, in R. BOUDON, De la simulation comme remède à quelques maux de la sociologie, Epistémologie sociologique, 1-5, 1964-1968, pp. 39-72, pp. 68-69.75 J. P. GRÉMY, in R. BOUDON, op. cit., 1971-A, pp. 257-261.76 C. P. BONINI, Simulation Organizational Behavior, in W. W. COOPER et al., op. cit., 1964, p. 276. Particularmente, él precisa los diferentes fines del sistema, identifica las partes componentes, detalla las funciones cumplidas por cada una de ellas, describe la red de interacciones entre las mismas y analiza la dinámica del entorno a donde se sitúa el sistema.77 R. BOUDON, L'analyse mathématique des faits sociaux, Paris, Plon, 1967, p. 431 (n. 5). 78 R. BOUDON, op. cit., 1964-1968, pp. 50-51.
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conduce a "idealizaciones excesivas",79 la técnica de la simulación autoriza la
introducción de una mayor complejidad y de un mayor número de hipótesis dentro
del modelo. Por eso, esta técnica permite cercar de manera más precisa la
riqueza de los fenómenos sociales.80
Además, la simulación supone un sistema regulado, pero no necesariamente
cerrado como en el modelo matemático: informaciones y parámetros
suplementarios pueden introducirse en el modelo en el curso de su desarrollo.81 La
estimación de los parámetros del modelo puede ser "extrínseca" esto es, prestada
a la realidad y derivada del análisis de datos, o bien, a falta de parámetros
empíricos, esta estimación puede ser "intrínseca", mejor dicho, fijada de manera
arbitraria pero con el propósito de minimizar el número de parámetros, al mismo
tiempo que se obtiene un acuerdo máximo entre los datos y la teoría.82
Una vez construido el modelo, es puesto a "funcionar", haciendo variar los
valores de los parámetros para observar su comportamiento. En otros términos, la
simulación procede mediante observación de un sistema artificial en diferentes
condiciones creadas experimentalmente.
La elaboración de un modelo supone, con el peligro de condenar el método de
simulación a un puro "instrumentalismo", un fundamento de orden teórico. Del
mismo modo, si una teoría puede dar lugar a diferentes modelos válidos, un
modelo existe únicamente en relación con una teoría. Sea que el modelo parta de
una teoría ya existente, la cual modifica o afina, así sea que se apoye sobre un
haz de hipótesis equivalente a una teoría implícita.83 Una teoría, aún indefinida, y
un cuerpo de hipótesis, aún indeterminado, deben siempre precisarse y
especificarse para construir un modelo a partir de ellos.
El pasaje de la teoría al modelo puede efectuarse con la combinación de
diferentes procedimientos que R. Boudon llama especificación, simplificación y
reducción, donde estos representan modos de correspondencia entre teoría y
modelo.84 La especificación tiende a redefinir algunas nociones ó particularizar
algunas relaciones inherentes a la teoría. La simplificación consiste en ignorar
algunas proposiciones de la teoría para facilitar la formulación y el tratamiento del
modelo ó en substituir una teoría específica por otra, donde algunas variables
aparecen como constantes y donde variables continuas se transforman en
79 R. BOUDON, op. cit., 1967, p. 384.80 J. P. GRÉMY, in R. BOUDON, op. cit., 1971-A, p. 243.81 R. BOUDON,op. cit., 1964-1968, p. 42. 82 Ibid., pp. 41, 53. 83 P. NAVILLE, ibid, pp. 61-63.84 R. BOUDON, op. cit., 1967, pp. 381-382; R. BOUDON, op. cit., 1964-1968, pp. 43-47.
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variables discretas, etc. La reducción no restringe la teoría misma, sino que
asocia el modelo a un subconjunto de sus consecuencias. Por ende, la simulación
según Boudon permite, mejor que los métodos estadísticos, evitar el recurso
injustificado a la simplificación y a la reducción y, también, las equivocaciones
metodológicas subsecuentes.
En su estructura el modelo simulado de la organización se refiere, bien al
sistema real tomado en totalidad, pero en el cual las interacciones o las relaciones
funcionales entre los elementos constitutivos están deliberadamente simplificados,
ó bien, únicamente a algunos elementos del sistema organizacional. Según el
objeto de la investigación y el estado de la teoría, uno y otro acercamiento le
convendría mejor: el modelo tiende a veces a una descripción global aunque
burda y aproximativa del sistema real, a veces, a su idealización formal y a veces,
al aislamiento de un "segmento" de dicho sistema.85 El objetivo buscado en la
investigación regirá la elección de los elementos que aparecerán en el modelo, la
serie de eventos que sucederán, el tipo y volúmen de datos que se registrarán, así
como la manera en que el programa será especificado y cómo será articulada su
secuencia.
Una vez construido, un modelo debe evaluarse y, si es el caso, revisarse y
modificarse previamente al mismo proceso de simulación, con el propósito de
ajustarlo a los datos y para que represente mejor el fenómeno estudiado. En
efecto, muchos criterios generales contribuyen a establecer su validez, desde el
punto de vista de su coherencia lógica, de su pertenencia al plan empírico, del
grado de generalización de su aplicación, de su poder o posibilidad de explicación
y predicción y, en fin, de su simplicidad y de su economía (o de su parsimonia).86
Aunque existen ejemplos de aplicación a la investigación en la organización,87
la técnica de la simulación parece presentar ciertas ventajas: para empezar por el
esfuerzo de clarificación y de formalización de las hipótesis que dicha técnica
exige.
La técnica de la simulación permite una forma de experimentación dinámica en
contraste con métodos de investigación, como el análisis comparativo, que salen
de una imagen estática del objeto estudiado. La simulación puede repetirse
85 T. B. ROBY, in V. H. VROOM, op. cit., 1967, pp. 176-177.86 Cf. ibid., pp. 192-206; J. P. GREMY, in R. BOUDON, op. cit., 1971-A, pp. 252-255.87 Un ejemplo reciente e interesante desde el punto de vista metodológico es el modelo de toma de decisiones en el seno de "anarquías organizadas" de las cuales las universidad son una ilustración, en M. D. COHEN, J. G. MARCH and J. P. OLSON, A, Garbage Can Model of Organizational Choice, Administrative Science Quarterly, mars 1972, pp. 1-25.
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muchas veces modificando el valor de los parámetros, el tipo de relación entre las
variables y las condiciones del funcionamiento del modelo.
La técnica también permite acortar o alargar el tiempo real de un proceso o de
un cambio con el fin de analizarlo mejor. En fin, por el número y la complejidad de
las hipótesis que el modelo autoriza a incorporar, la simulación constituye un
medio d investigación eficaz de los fenómenos sociales.
En contraparte a esas ventajas, la simulación está expuesta a peligros y a
límites: es evidentemente tributaria o dependiente del modelo construido y, por
consecuencia de las escogencias operadas por el investigador, así como de las
cualidades de la teoría de referencia. Los criterios de evaluación del modelo más
arriba mencionados, indican las numerosas dificultades inherentes a su
construcción y a las dificultades ligadas a su validación.
En fin, interpretando los resultados obtenidos por la simulación, es conveniente
no confundirlos con las observaciones empíricas, porque dichos resultados "son
únicamente una caracterización de las consecuencias posibles de una teoría, de la
cual, el modelo es la expresión", en efecto, la simulación, en cuanto experimenta
con el funcionamiento de un modelo no se refiere a la realidad, sino a la
representación simbólica de dicha realidad."88
88 J. P. GRÉMY, in R. BOUDON, op. cit., 1971-A, p. 263.
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