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La espera 22: FED & BCE. Golpes de timón... La espera 23: Europa, Europa. La espera 24: Gestión "K” Hemos compartido juntos reflexiones sobre el país, Latinoamérica y EEUU. Se impone un repaso por las condiciones del viejo continente. Abordemos juntos, éste, su particular momento.\\r\\n\\r\\nLa historia que vivimos comenzó con la caída del Muro, y sigue alimentándose de los cambios surgidos con aquel acontecimiento. La desaparición de la URSS entronizó al capitalismo como orden social rector; pero además, alteró profundamente la geopolítica europea. Es que el orden social instituido por la mafia y la antigua burocracia comunista, condenó a la Madre Rusia a un ingreso nacional cuyo valor absoluto no alcanza la quinta parte del alemán; y como luego de la Gran Guerra... gestó un vacío en Europa oriental.\\r\\n\\r\\nSolo existe un país capaz de llenarlo: Alemania. En otras circunstancias, ya se hubiera derramado hacia el este. Si no ha ocurrido, es porque además de ser un hito universal, la caída del Muro es también un hecho propio de su historia nacional. La reunificación impuso la obligación de integrar rápidamente, aquel trozo de patria liberada al elevado nivel de bienestar germano. La opción fiscal fue llevar el endeudamiento a un nivel que catapultó las tasas europeas, dando la extremaunción al olvidado SME. El orgullo teutón no permitió disminuir el nivel de vida con una tributación acorde al desafío, hecho que resintió notablemente su performance económica. Hoy, Alemania mantiene un estado de bienestar incompatible con sus aspiraciones. La demografía y su sistema financiero lo pondrán de manifiesto en pocos años.\\r\\n\\r\\ nFrancia está en cuarentena. Incapaz de liderar la economía y victima de un masturbatorio anhelo de liderazgo político, ha quedado nuevamente en un brete. Es que su oposición a la política imperial para el Medio Oriente, la condenó al aislamiento, limitando en lo inmediato las posibilidades de sus empresas en materia de comercio e inversión. Tal como enseña la historia, la Galia puede frustrar los objetivos ajenos, pero no es capaz de imponer los propios. Una falta de realismo que ningún inversor debiera olvidar.\\r\\n\\r\\nComo Ud. sabe, mi hipótesis es que los atentados contra EEUU, destruyeron los pruritos morales del aislacionismo yankee, embarcando a dicho Estado en una aventura imperial de dimensión planetaria. Gran Bretaña se ha enancado en el proyecto, y probablemente intente restaurar mínimamente, su imperio decimonónico. El hecho fundamental, es que la Guerra de Irak permitió a EEUU fragmentar la UE. Pergeño una alianza que rodeó a las potencias centrales, hostiles a su política. El Reino Unido, España e Italia se le alinearon conforme el patrón clásico; para ser seguidas luego, por todos los estados de Europa oriental, que ven en el vacío arriba mencionado, la antesala de una nueva

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La espera 22: FED & BCE. Golpes de timón... La espera 23: Europa, Europa. La espera 24: Gestión "K”

Hemos compartido juntos reflexiones sobre el país, Latinoamérica y EEUU. Se impone un repaso por las condiciones del viejo continente. Abordemos juntos, éste, su particular momento.\\r\\n\\r\\nLa historia que vivimos comenzó con la caída del Muro, y sigue alimentándose de los cambios surgidos con aquel acontecimiento. La desaparición de la URSS entronizó al capitalismo como orden social rector; pero además, alteró profundamente la geopolítica europea. Es que el orden social instituido por la mafia y la antigua burocracia comunista, condenó a la Madre Rusia a un ingreso nacional cuyo valor absoluto no alcanza la quinta parte del alemán; y como luego de la Gran Guerra... gestó un vacío en Europa oriental.\\r\\n\\r\\nSolo existe un país capaz de llenarlo: Alemania. En otras circunstancias, ya se hubiera derramado hacia el este. Si no ha ocurrido, es porque además de ser un hito universal, la caída del Muro es también un hecho propio de su historia nacional. La reunificación impuso la obligación de integrar rápidamente, aquel trozo de patria liberada al elevado nivel de bienestar germano. La opción fiscal fue llevar el endeudamiento a un nivel que catapultó las tasas europeas, dando la extremaunción al olvidado SME. El orgullo teutón no permitió disminuir el nivel de vida con una tributación acorde al desafío, hecho que resintió notablemente su performance económica. Hoy, Alemania mantiene un estado de bienestar incompatible con sus aspiraciones. La demografía y su sistema financiero lo pondrán de manifiesto en pocos años.\\r\\n\\r\\nFrancia está en cuarentena. Incapaz de liderar la economía y victima de un masturbatorio anhelo de liderazgo político, ha quedado nuevamente en un brete. Es que su oposición a la política imperial para el Medio Oriente, la condenó al aislamiento, limitando en lo inmediato las posibilidades de sus empresas en materia de comercio e inversión. Tal como enseña la historia, la Galia puede frustrar los objetivos ajenos, pero no es capaz de imponer los propios. Una falta de realismo que ningún inversor debiera olvidar.\\r\\n\\r\\nComo Ud. sabe, mi hipótesis es que los atentados contra EEUU, destruyeron los pruritos morales del aislacionismo yankee, embarcando a dicho Estado en una aventura imperial de dimensión planetaria. Gran Bretaña se ha enancado en el proyecto, y probablemente intente restaurar mínimamente, su imperio decimonónico. El hecho fundamental, es que la Guerra de Irak permitió a EEUU fragmentar la UE. Pergeño una alianza que rodeó a las potencias centrales, hostiles a su política. El Reino Unido, España e Italia se le alinearon conforme el patrón clásico; para ser seguidas luego, por todos los estados de Europa oriental, que ven en el vacío arriba mencionado, la antesala de una nueva satelización. \\r\\n\\r\\nLa integración es una quimera negada por la historia de Europa; pero no imposible, por su elevada madurez y las traumáticas experiencias vividas. Pero cuidado, una federación con rivalidades ancestrales no pareciera el instituto más idóneo para lograr tal objetivo. Además, es temerario unificar la moneda antes de articular un poder que contenga los desbordes presupuestarios de Estados incapaces de subordinar su fiscalidad, a objetivos supranacionales. Sumado a la fragmentación geopolítica, debemos aceptar que puede hipotecarse un ascenso del euro, que no por obedecer a las ridículas tasas greenspanianas, es menos meritorio. \\r\\n\\r\\nEl anhelo europeo puede abortar si no se resuelven algunas contradicciones fundamentales. El desarrollo del Este puede ser imposible sin una divisa que por su calidad, proporcione años de endeudamiento a titulo gratuito; pero ni fragmentación política, ni un aquelarre fiscal que campea por doquier, no son los mejores puntales para articular esa fuente de ingresos. Complementariamente, deberá Europa aceptar que la independencia deviene en mera declamación sin un aparato militar que disuada a terceros, de interferir los intereses del viejo mundo. Desde la última guerra, Europa renunció a su defensa. En occidente, para acelerar el desarrollo económico y social. En oriente, para lograr un statu quo que garantizara la supervivencia. Perpetuar tal conducta puede ser un obstáculo para la evolución que se pretende alcanzar.\\r\\n\\r\\nEl fin de las soberanías nacionales en aras de la centralización política, el retorno

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de una ortodoxia financiera que desarticule el monopolio yankee de la divisa patrón, un rearme que entierre una seguridad ilusoria y extorsiva, una integración que parta del futuro, y un estado de bienestar notablemente atenuado. Tales los desafios que en medio de innumerables protestas populares, deberá enfrentar los líderes europeos. \\r\\n\\r\\n“¡Cosas vederes Sancho, que no creyeres!” dijo el ingenioso Hidalgo.\\r\\n\\r\\nBARUCH\\r\\n

Poco tiempo atrás, en charla con distinguidos foristas, sugerí que de mantenerse los lineamientos de política monetaria enunciados por las instituciones del título, el precio del euro podía superar USD 1,30. Dicha conclusión estaba sustentada en dos declaraciones de significativa trascendencia.\\r\\n\\r\\nEn primer lugar, Mr. Greenspan había tomado el toro por las astas en cuanto al riesgo deflacionario. Con el micrófono abierto, había dicho al Congreso de su país, que de ser necesario y con el objeto de mantener bajas las tasas de interés, embestiría contra el mercados de bonos monetizando el agujero fiscal producido por la política de Júnior; y el � �financiero, imputable a los antecesores de éste. Evidentemente, el veterano banquero había dicho lo que pensaba...\\r\\n\\r\\nDel otro lado del Atlántico, el regordete Sr. Duissemberg, hacía oídos sordos a las elípticas apreciaciones yankees sobre la conveniencia económica europea, y fiel a la ortodoxia del viejo mundo, afirmaba categóricamente que el BCE no rebajaría las tasas de interés más allá del 2%, pues según el diagnostico de esa institución, el bajo crecimiento comunitario debía resolverse con medidas que afectasen al sector real. El máximo burócrata monetario de la UE, también decía lo que pensaba...\\r\\n\\r\\nConsiderando lo dicho, el pronostico era sencillo. Si EEUU iba a monetizar su déficit financiero, sin mayor intervención cambiaria, ni control del flujo de capitales; y paralelamente, la UE mantenía tasas no solo mayores a las estadounidenses, sino también más elevadas que su propio crecimiento, era evidente que no solo veríamos caer al dólar, sino que asistiríamos simultáneamente a una apreciación del euro. Ante tal divergencia, un overshooting del 10% sobre los máximos vistos no podía considerarse descabellado.\\r\\n\\r\\nEn � �ese punto, alguien tomo el guante arrojado por el enigmático presidente de la FED...\\r\\n\\r\\nFueron los tenedores de bonos estadounidenses, quienes al grito de ¡A que no te animas, Alan! � �produjeron una liquidación que erizó los pelos del Board. Sin trepidar un minuto, la tasa del T-10 aumentaba 1% en poco más de un mes. La FED dudó. Algunos esperaban incluso, una lección ejemplar para los bajistas. Se pensó que algún anuncio podría tener lugar en agosto, durante la � �visita del pope monetario a los parlamentarios de su país. Lejos de mantener su posición, Mr. Greenspan dio muestras de un llamativo relativismo, indicando que en vista de nuevos datos, las operaciones no convencionales para mantener bajas las tasas, quedarían para otro momento. El � �banquero pensó lo que decía.\\r\\n\\r\\nEn paralelo y bajo el extenuante calor europeo, un alto miembro de la institución comunitaria, volvía sobre el tema monetario. Como de costumbre, la opinión fue contraria a la del Tío Sam. Con los números del crecimiento de la UE en mano, la ortodoxia comenzó a vacilar. Es que el producto no despega, y el sector externo comunitario pierde, día a día, atractivo para su principal cliente: el consumidor americano. Previendo los efectos laborales de tal coyuntura, se atenuaron las declaraciones de BCE, en el sentido de que ni la política monetaria era inconmovible, ni la estabilidad de precios podía ser su objetivo excluyente. Allende el Atlántico, también comenzaban a pensar lo que decían.\\r\\n\\r\\nAlteradas las premisas mayores, las menores deben modificarse. Es evidente que si los extremos asumen políticas convergentes, esto debería acotar la inestabilidad cambiaria; y en caso que Mr. Greenspan continué haciéndose el distraído y el Sr. Duissemberg sea acorralado por la realidad, no sería descartable incluso que una apreciación del dólar precediera la campaña electoral de Junior.\\r\\n\\� �r\\nPero más allá de toda discrecionalidad y de un costo financiero insignificante, el presupuesto de EEUU muestra un déficit superior al 4% del ingreso. Alemania y Francia, el corazón de la UE, han reconocido su impotencia para cumplir con Maastrich, cuyas cláusulas fiscales prescribían otrora admonitoriamente, al resto de sus confederados. Ambos fiscos denunciaron desequilibrios que

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exceden el límite allí impuesto. En tanto Japón, en plena lucha contra el estancamiento, exhibe un desborde presupuestario superior al 7%. Ponderando por los respectivos productos, el desequilibrio público del OCDE supera ya el 4%. Esto implica: o tasas bajas o crecimiento.\\r\\n\\r\\nSolo una absorción raquítica, medios de difusión complacientes y el Altísimo, nos separan de otra caída en el mercado de bonos; y quizás, de un acto reflejo en las bolsas. \\r\\n\\r\\nCuidado. El sismógrafo ha comenzado a oscilar...\\r\\n\\r\\nBARUCH\\r\\n

Desde “La espera 11: Fe de erratas” no escribo sobre política nacional. Luego de la presidencial, formule en ella una autocrítica y breves reflexiones. Consideraba prematuro admitir la hegemonía duhaldista, apresurado certificar la defunción menemista y aventurado pensar que el poder real se había fusionado con el formal. A posteriori, y conciente de que el tema se jugaría en la legislativa, me llamé a silencio. Atónito ante el estéril escarnio ideológico con que dos minorías parásitas enfrentan a los argentinos, esperé la consumación del primer requisito, que puntualizara en 2002 DEFAULT ARGENTINO 41 ¿Mercado sin piso?: “...poder homogéneo con soporte legislativo”. ¡No se dio!.\\r\\n\\r\\nEl Dr. Kirchner llegó a la más alta dignidad ejecutiva con poder prestado; y una vez encumbrado, no pudo ocupar el espacio con tropa propia. Pasemos revista. El matrimonio Duhalde no solo le había elegido compañero de formula (asegurándose así la presidencia del Senado), sino que había impuesto a la nueva administración un aluvión de acólitos que en última instancia, reportaban a su mando. Los ministerios de economía, interior, defensa y salud quedaron bajo su égida; en tanto que la SIDE, el BCRA, la AFIP y la Cámara de Diputados siguieron dirigidos por sus designados. Fue suficiente para disipar mis dudas respecto de su hegemonía. Congratulo al matrimonio bonaerense por su férrea táctica política.\\r\\n\\r\\nEl Dr. Kirchner supo entonces que jamás se olvidaría su mísero desempeño electoral. Aquel 22% constituirá su pesadilla vitalicia. Es que el Dr. Menem, para evitar su público escarnio, impidió que la pendularidad nativa, se mimetizara de adhesión al santacruceño. “Ofensivo hasta en la retirada” diría el Gral. Mitre. Tanto la decisión del riojano, como la demonización de su gestión, inhiben hoy al PEN de cualquier articulación parlamentaria funcional a las actuales necesidades del poder. Esta es la más útil prestación que el progresismo brinda al duhaldismo: confinar a nuestro atolondrado Presidente, a una política sin opciones. ¿Será eterna?...\\r\\n\\r\\nEn aquel trabajo había previsto taxativamente tal encerrona, así como la única réplica que la ideología permitiría a la gestión “K”. Fue cuando escribí: “El Dr. Kirchner, en tanto, necesitará apelar a formas de legitimación extremas, eventualmente a algún amañado engendro de democracia directa, mediante el cual el populacho avale las decisiones que Argentina deberá tomar. Es probable que para ello, subordine nuevamente algunos derechos constitucionales a la conveniencia electoral de corto plazo. Considerando la pasividad del pueblo argentino, supongo que una discreta demagogia puede convertirse en vía obligada para los próximos moradores del poder”. \\r\\n\\r\\nEl botón de muestra tuvo lugar cuando el Presidente forzó la renuncia del Dr. Nazareno apelando a la presión popular. El primer mandatario parecía haber comprendido sus opciones. Como sentenciara el toscano inmortal, sin alternativa de gobernar con el apoyo de los grandes señores, el principe ha de refugiarse en el favor popular. Era la única forma de ocupar los bastiones que detentaban las tropas auxiliares... cuando no mercenarias. Además, si el pueblo retribuía encumbrando legisladores afines al PEN, un “poder homogéneo con soporte legislativo” podría encumbrarse en Argentina. Pero el Dr. Kirchner no se animó. Dos acontecimientos lo confirmaron. \\r\\n\\r\\nEn primer lugar, las elecciones provinciales. Desde la presidencial renovaron autoridades varias provincias. El electorado fue mayormente reticente a los candidatos oficialistas; y aunque improbable, no creo que un triunfo “ibarrista” altere el panorama. Ante lo dicho, fue llamativa la pasividad presidencial para con el ministro del interior... a la sazón duhaldista. Resalta al compararla con la defenestración de la Secretaría de Turismo; reducto de un vicepresidente que había osado apartarse del contestatario discurso oficial... en apariencia, sin faltar a la verdad. Poco

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democrático. Similar a la entronización del Dr. Zaffaroni en la Corte, evidencia de que rencor y enfrentamiento social, siguen siendo arietes básicos de nuestra política. Se siembran vientos.\\r\\n\\r\\nLa segunda muestra fue más sutil, pero igualmente lapidaria. Tuvo lugar al armarse las listas de candidatos a diputados bonaerenses. La ofensiva presidencial para meter baza, se topo con una gélida actitud de los Duhalde, que lo impidieron sin mayor explicación. Los anhelos presidenciales claudicaban nuevamente ante el poder fáctico. La ratificada inclusión de la Sra. Caamaño, cónyuge de Barrionuevo, debiera evocar en la mente presidencial algunas reflexiones maquiavélicas sobre los amigos de mis enemigos. Además, el líder bonaerense fue claro respecto de la elección porteña. Donde el PJ compita –dijo- tendría su apoyo. ¿No fue el diputado Argüello, hoy luminaria del macrismo, referente principal del duhaldismo porteño pocos años atrás?. \\r\\n\\r\\nEl Dr. Kirchner tiene el cetro y el duhaldismo el poder. Creo que el mismo “Júnior” pronto pensará en conceder al Dr. Duhalde la entrevista que le negara en Monterrey; cuando la “alternativa Carbonetto” nublara su visión sobre la conveniencia de la civilización.\\r\\n\\r\\nBARUCH\\r\\n