Upload
fredy-ronal-matos-perez
View
2
Download
0
Embed Size (px)
DESCRIPTION
jhghjkhkj
Citation preview
I. CAPITULO
FUNDAMENTO DEL SABER FILOSOFICO,
El sistema de los conocimientos filosóficos es susceptible de ser considerado
desde dos puntos de vista: uno, por así decirlo, externo, según el cual se le
relaciona y enfrenta a las demás especies de conocimientos, y otro, en cambio,
interno, y que es el de la propia organización o estructura de la filosofía como
un conjunto divisible en partes. Estos dos puntos de vista dan lugar a otras
tantas especies de cuestiones. El primer grupo lo constituyen las relativas a las
fronteras y diferencias existentes entre el saber filosófico y las actividades
intelectuales que con él guardan una cierta afinidad; el segundo grupo está
integrado por las que atañen a la división y articulación de la filosofía en sus
partes capitales.
Ambos grupos coinciden en la consideración total del ámbito de la filosofía, y
por ello serán estudiados en un mismo capítulo: no, sin embargo, con la misma
extensión, pues las cuestiones del segundo grupo serán aquí tocadas en un
único epígrafe -el final-, habida cuenta de que en el estudio de cada una de las
disciplinas filosóficas fundamentales serán objeto del respectivo y detallado
tratamiento.
Filosofía, fe y teología
Por su más alta significación, la filosofía limita con la fe y la teología; en sus
aspectos menos trascendentes, con las llamadas ciencias particulares y lo que
suele denominarse, en un especial sentido, "concepción del universo”.
Son muy frecuentes las confusiones en torno a la cuestión de la filosofía y la fe.
Por ello mismo es necesario, ante todo, precisar el sentido del problema; y, por
de pronto, justificar y definir su planteamiento. Para ello es menester que
comencemos por una idea de la fe, que no haga superflua su comparación con
la filosofía. Si la fe consistiera en algo meramente relativo a nuestra actividad
sentimental, no habría por qué contraponerla o enfrentarla a la totalidad de la
filosofía; bastaría estudiarla, dentro de ésta, como uno de los puntos de la
psicología afectiva. Pero es el caso que la fe, aunque produzca o determine
sentimientos, no es formalmente un sentimiento más. La fe concierne, de una
manera propia e inmediata, al entendimiento humano. Creer y no creer son
actos que sólo la facultad intelectiva puede realizar.
Pero esto no significa que el entendimiento verifique el acto de creer sin
necesidad de ninguna ayuda y condición. “Creer -dice SANTO TOMAS- es el
acto del entendimiento que asiente a la verdad divina imperado por la voluntad,
a la que Dios mueve mediante la gracia" [1]. Es el entendimiento, no la
voluntad, lo que tiene la facultad de asentir o de disentir ante cualquier
proposición. Pero en el caso de la verdad divina, que se propone como objeto
de creencia en tanto que no es evidente, el entendimiento no puede asentir de
una manera espontánea, pues de esta manera sólo lo que es evidente
despierta o produce nuestro asentimiento. El hecho, sin embargo, de que una
proposición no sea evidente no significa que sea evidente su falsedad. No son
iguales estos dos conceptos: "no, ser evidente que" y "ser evidente que no".
Para que algo se nos proponga a título de creencia es preciso que no sea
evidente, ni como verdadero ni como falso. De ahí que el asentimiento a las
verdades de fe suponga una moción o impulso de la voluntad sobre la facultad
intelectiva. El creer es un acto del entendimiento; pero el "querer creer"
concierne a la voluntad. (Y puesto que el objeto de esta fe trasciende de lo
puramente natural, es preciso que la voluntad sea movida por Dios; lo cual
ocurre, precisamente, mediante la gracia.)
Filosofía y ciencias particulares
Tan habituados estamos a la actual tensión de la filosofía y los demás saberes
naturales, que se nos hace sumamente difícil comprender que las cosas hayan
podido ser alguna vez de otra manera. Hubo, no obstante, un tiempo en que la
unidad del conocimiento humano, aunque provista de órganos y establecida
como un cierto conjunto de saberes, prevaleció sobre sus divisiones, y toda ella
era designada con un solo vocablo: el de "filosofía". Esta palabra significaba
toda ciencia humana, y no sólo cada una de ellas, sino también su íntegro
conjunto o repertorio. En la Antigüedad, y sobre todo en Grecia, la división del
ámbito total de los conocimientos humanos era, pues, primordial y
esencialmente, la que distinguía entre el conocimiento vulgar y el conocimiento
filosófico, esto es, la ciencia.
Con todo, dentro de la esfera filosófica se dio también una fundamental
división: la que ARISTÓTELES estableciera al acuñar las denominaciones
“filosofía primera” y “filosofías segundas” [5]. La filosofía primera, sin embargo,
más que una ciencia entre otras, era, en efecto, la forma más perfecta de las
ciencias , la filosofía pura y simplemente dicha -philosophia simpliciter-, sin
restricciones de ninguna especie, pues se ocupaba, en general, de todo ente
precisamente en tanto que ente y, por tanto, según su más profundo y
entrañable sentido. A diferencia de ella, las filosofías segundas eran
modalidades "relativas" de la noción de ciencia, formas imperfectas,
declinadas, de esta misma noción, ya que no se ocupaban de todo cuanto es
apto para ser estudiado por "la ciencia", sino que restringían, cada cual a su
modo, el alcance de ésta, limitándola a un tipo determinado de entes, y no
indagaban, en consecuencia, las más profundas y universales causas, sino tan
sólo las concernientes a sus respectivos objetos. En este sentido cabe, pues,
hablar de alguna forma, ya entre los filósofos antiguos, de la distinción entre
filosofía y ciencias particulares, pero no a la manera, hoy generalizada, según
la cual se trataría de una propia y formal diversidad entre el conocimiento
filosófico y el meramente científico, pues la filosofía primera y las segundas
coincidían precisamente en eso: en ser filosofía, que era entonces lo mismo
que decir que convenían en ser ciencias.
La estructura del saber filosófico
La distinción, a que venimos aludiendo, entre la filosofía primera y los demás
saberes filosóficos no es, en rigor, la que hay entre una parte y todas las
restantes de un conjunto unívoco. El estudio del ente en cuanto ente no es,
como ya dijimos, ningún saber parcial, sino la forma propia y rigurosa del saber
filosófico, la filosofía simplemente dicha y sin ninguna condición o limitación). A
su vez, los demás saberes filosóficos son, antes que miembros de un sistema,
modos imperfectos, secundarios, de la noción de filosofía ("filosofía segunda").
La estructura. del saber filosófico no es, por tanto, la del con junto de las
especies de un mismo género. Lo que se comporta como especie cumple
siempre estas dos condiciones: 1.ª, tiene todas las notas que definen al género;
2.ª, añade algo a éste, de tal manera que lo delimita o contrae. Así, por
ejemplo, el hombre, que es un animal racional, constituye una especie del
género animal porque posee todas las notas que este género tiene, y le añade,
a su vez, una determinación por cuya virtud lo especifica: la nota de la
racionalidad. Pero esta doble condición esencial de toda especie no es
cumplida ni por la filosofía propiamente dicha, ni por los modos secundarios o
imperfectos del saber filosófico.
ORIGEN
El origen de la filosofía ha sido una cuestión controvertida a lo largo de la
historia del pensamiento. Por lo general los filósofos griegos han considerado
que la filosofía nace con Tales de Mileto allá por el siglo VII a. c., pero no se
consideraba necesario explicar cómo se había producido ese surgimiento de
una nueva forma de pensamiento. Sí parecía haber un común acuerdo en
considerar la filosofía como la forma de pensamiento racional por excelencia,
es decir, una forma de pensamiento que no recurre a la acción de elementos
sobrenaturales para explicar la realidad y que rechaza el uso de una lógica
ambivalente o contradictoria. Es a partir de la polémica que suscitan los
filósofos alejandrinos durante el período helenístico cuando el origen de la
filosofía comienza a convertirse en un problema. Y será a lo largo del siglo XX
cuando se comiencen a encontrar respuestas explicativas de la aparición del
fenómeno filosófico. Para nuestro objetivo nos bastará considerar las dos
hipótesis más difundidas acerca del origen de la filosofía: aquella que sostiene
el origen a partir de la filosofía oriental, y aquella que hace de la filosofía una
creación original de los griegos, y que estudiaremos a continuación.
A) La hipótesis del origen oriental.
Los defensores de esta hipótesis mantienen que los griegos habrían copiado la
filosofía oriental, por lo que la filosofía no podría considerarse una creación
original del pueblo griego. Los primeros filósofos, sostiene esta hipótesis,
habrían viajado a Egipto y Babilonia en donde habrían adquirido sus
conocimientos matemáticos y astronómicos; lejos de ser los creadores de la
filosofía habría sido unos meros transmisores del saber oriental que, en
contacto con la civilización griega habría alcanzado un desarrollo superior al
logrado en sus lugares de origen. Esta hipótesis la mantuvieron:
- Los filósofos alejandrinos. En polémica con las escuelas filosóficas
griegas, y con el ánimo de desacreditarlas, los filósofos alejandrinos
ponen en circulación la tesis del origen oriental de la filosofía.
- Los padres apologistas cristianos. Con intención polémica similar a la
de los filósofos alejandrinos, los primeros padres apologistas del
cristianismo, airean la hipótesis del origen oriental de la filosofía,
hipótesis que posteriormente no será mantenida por la filosofía cristiana
occidental.
La cuestión que se debate es si existe esa supuesta filosofía oriental. Si
asimilamos la filosofía a un discurso racional entendido como la imposibilidad
de recurrir a lo sobrenatural para explicar los fenómenos naturales, y al rechazo
de la contradicción, resulta difícilmente sostenible la existencia de una filosofía
oriental. La cuestión que se plantea, pues, es la de determinar si esa
astronomía y esas matemáticas orientales eran o no eran filosofía. Los estudios
sobre el tema parecen indicarnos que no, que la astronomía babilónica tendía a
degenerar en astrología, es decir, en arte adivinatoria; y que las matemáticas
egipcias, lejos de alcanzar el grado de abstracción necesario para considerarse
ciencia, no superaron nunca el estadio de unas matemáticas o de un saber
práctico, generado al amparo de las necesidades de medición de los terrenos
luego de cada una de las inundaciones periódicas del Nilo.
¿Qué hace que sea en Grecia donde se desarrolle la filosofía y no en cualquier
otra zona de oriente? ¿Cómo explicar que, en una civilización concreta, se
genere una forma de pensamiento nueva, en contraposición con las anteriores
formas de pensamiento? ¿Cuáles son sus características? ¿Y cuáles eran las
características del pensamiento anterior? Tanto los orientales como los griegos
disponían de una mitología y de unas creencias religiosas similares. Y la
estructura explicativa de las mismas es también similar. Un mito es un relato
acerca de los orígenes, una narración, no una solución a un problema; puede
referirse al origen del mundo, o al origen de un objeto particular, o de una clase
específica de animales, etc. Al mismo tiempo que narra, sitúa al hombre en la
realidad, le asigna un papel, una función, un sentido, por lo que adquiere
también una función social: hacer inteligible el orden social.
La existencia de esta forma de pensamiento está atestiguada en todas las
civilizaciones, y también, por supuesto, en la griega. De especial importancia
para la comprensión de la aparición de la
filosofía pueden ser los mitos de Hesíodo
que encontramos especialmente en la
teogonía. En todo caso, esas explicaciones
míticas acerca del origen, comunes a todas
las civilizaciones, poseen unas
características también comunes que
contrastan con las características del pensamiento filosófico: el recurso a
entidades sobrenaturales para explicar ese origen, y el recurso a una lógica
ambivalente, permitiendo que el mismo elemento o la misma entidad se
comporte ya sea como un dios, ya sea como un elemento natural, estarían
entre las más significativas. El rechazo de estas características, será propio de
la filosofía. Y tal rechazo no parece producirse en la llamada filosofía oriental.
B) La hipótesis del origen griego.
Según esta hipótesis la filosofía sería una creación original del pueblo griego.
Nos vamos a centrar en las explicaciones de historiadores del siglo XX, de las
que destacamos
La explicación de J. Burnet. Es la llamada tesis del "milagro griego".
Según esta hipótesis la filosofía habría aparecido en Grecia de una manera
abrupta y radical como fruto de la genialidad del pueblo griego. Esta
hipótesis prescinde de los elementos históricos, socioculturales y políticos,
por lo que termina por no explicar nada, cayendo en un círculo vicioso: Los
griegos crean la filosofía porque son geniales, y son geniales porque crean
la filosofía. La mantiene en su obra "La Aurora de la filosofía griega",
(1915).
La explicación de F. M. Cornford. Defiende la tesis del desarrollo del
pensamiento filosófico a partir del pensamiento mítico y religioso. Según
esta hipótesis la filosofía sería el resultado de la evolución de las formas
primitivas del pensamiento mítico de la Grecia del siglo VII antes de Cristo.
Para Cornford existe "una continuidad real entre la primera especulación
racional y las representaciones religiosas que entrañaba" de tal modo que
"las maneras de pensar que, en filosofía, logran definiciones claras y
afirmaciones explícitas ya estaban implícitas en las irracionales intuiciones
de lo mitológico". En su obra "De la religión a la filosofía", (1912), Cornford
explica cómo la estructura de los mitos de Hesíodo en la "Teogonía" se
mantiene en las teorías de los primeros filósofos, rechazando éstos
solamente el recurso a lo sobrenatural y la aceptación de la contradicción.
Destaca la influencia educativa de Homero y Hesíodo en la constitución y
posterior desarrollo de la civilización griega, y analiza también cómo
algunos de los conceptos que serán fundamentales posteriormente en la
filosofía, [ moira (hado, destino), diké, (justicia), physis, (naturaleza), ley,
dios, alma, etc.] proceden directamente del pensamiento mítico-religioso
griego.
La explicación de J. P. Vernant, en su obra "Mito y pensamiento en la
Grecia antigua", (1965), añade importantes elementos derivados del
contexto sociocultural, político y económico de la época para explicar cómo
este paso del mito a la racionalidad fue posible, y por qué se produjo en
Grecia en lugar de en otra civilización de la época. La inexistencia de una
casta sacerdotal, la figura del sabio, el predominio de la ciudad, la
transmisión pública del saber, la libertad individual y el desarrollo de la
escritura, hacen posible la puesta en entredicho de las explicaciones
cosmológicas y su sustitución por una forma de pensamiento que no
entrañe la creencia y la superstición propias de los pensamientos mítico y
religioso. La estructura del mito hesiódico (en la "Teogonía") sirve de
modelo según Vernant a toda la física Jonia, siguiendo a Cornford. En este
mito, en efecto, la realidad se genera a partir de un estado inicial de
indistinción, por segregación de parejas de contrarios que interactúan
hasta acabar configurando toda la realidad conocida. Existen pues tres
momentos fundamentales en el discurrir de la narración:
1) Se parte de un estado de indistinción del elemento originario.
2) De él brotan, por segregación, parejas de contrarios.
3) Conforme a un ciclo siempre renovado se produce una continua
interacción de contrarios.
MISION Y METODOS Y ETAPAS
El método deductivo, fundado sobre la razón pura, manifiesta propiamente del
acuerdo del pensamiento consigo mismo. En este método el principio
de identidad es el alma y la razón del ser.
2. La inducción concluye de algunos a todos, se eleva de los hechos a la ley y
de los individuos al género. Es un método más fecundo, es el que verifica
los descubrimientos y las conquistas que el método deductivo se contenta
con explorar. La deducción concluye de todos a algunos; lo que conviene a
todo el género, conviene a cada individuo comprendido en este género.
3. El método inductivo es el método de invención; el método deductivo es más
bien un método de demostración.
4. La deducción es de un manejo más fácil y seguro, engendrando una
certeza metafísica que excluye hasta la misma posibilidad de duda. El
mecanismo de la inducción en cambio es más dedicado a las ocasiones de
error son más numerosas pues la experiencia que es el punto de partida
obligada solo permite llegar a la certeza física.
Necesidad de los dos métodos
Uno de los grandes errores de la mente humana consiste en mostrarse parcial
hacia uno u otro de los dos métodos, hasta el punto de querer aplicarlo a
toda materia y a toda ciencia.
- Cualesquiera que sean las ventajas y los inconvenientes inherentes a
cada método, se cometería el error de concluir que el uno debe ser preferido al
otro, o que el uno puede suplir al otro. En realidad, el uno y el otro son
igualmente necesarios de acuerdo a los sujetos que se estudian y a las
finalidades que se persiguen.
- Por una parte los espíritus geométricos no tienen gusto sino por la
deducción. Según Pascal "El Método para no errar es buscando por todo el
mundo: los lógicos hacen profesión de conducir hacia allá, solamente los
geómetras llegan allá y fuera de su ciencia y de aquello que la imita, no existe
en absoluto verdadera demostración".
- El mismo Descartes seducido por el rigor del procedimiento matemático
y de la certeza absoluta que engendra, cree poder aplicarlo a toda ciencia y a
todo objeto. En lugar de observar la naturaleza, la adivina, y pretende deducir a
priori (antes de la observación) las leyes del mundo material.
- Por otra parte, ciertos espíritus que se dicen positivos, no aprecian sino
la observación. Hemos visto a Bacon constituirse en campeón exclusivo del
método inductivo, hasta el punto de desconocer el papel y el alcance del
silogismo, además de no ver en él sino una fuente de error cuando se aplica a
las ciencias de la naturaleza.
- Estas son exclusiones lamentables; el espíritu verdaderamente
científico sabe aplicar a cada objeto el método que le conviene, y contentarse
con el género de certeza en el continente. Comprende que la mente inductiva
es tan necesaria a la ciencia como la mente deductiva: si la segunda sabe
sacar rigurosamente todas las consecuencias de un principio , es la primera la
que imagina la hipótesis , las supone y las prevé ; la que según la necesidad
adivina y en definitiva encuentra y descubre.
Toda ciencia inductiva tiende a convertirse en deductiva.
1. El ideal de la ciencia es el de dispersarnos en cuanto lo permiten los
diversos fenómenos de toda observación directa, consistiendo: a).- Deducir
de pocos datos inmediatos el mayor numero posible de consecuencias.
2. Su finalidad ultima es la de remplazar el análisis por la síntesis ,la
experiencia por el razonamiento y la inducción por la deducción.
3. El método inductivo no hace sino amasar el capital que la deducción se
encargará de explotar y de hacer fructificar. Una vez determinadas las leyes
generales, le es permitido al físico , como al químico abandonar la balanza
para contentarse con el calculo.
4. El periodo inductivo representa para una ciencia el periodo laborioso, la edad
de la juventud y del crecimiento . El periodo deductivo representa la edad
adulta donde concentra los recursos acumulados de su trabajo.
5. La deducción pura será siempre para el espíritu humano , un ideal al cual
debe tender sin pretender , según una frase de Malenbranche y que los dos
métodos serán siempre aunque en proposiciones diversas , indispensables a
la ciencia.
M. Analógico
Definición del Método analítico: Movimiento filosófico de carácter antimetafisico
que abarca diversas tendencias. A este movimiento se incorporan muchos de
los que trabajan en temas de lógica simbólica y de semiótica.
Características del Método analítico: a).-el rechazo de los rasgos especulativos
del pensamiento filosófico. b).-La reducción del pensamiento filosófico a un
pensar critico y analítico, con el consiguiente descubrimiento de
los problemas tradicionales como embrollos causados por las complejidades
del lenguaje ordinario. Junto a ello es común, pero no exclusivo de las
tendencias analíticas, la negación de que la filosofía tenga un objeto propio;
con ello la filosofía se reduce a un examen de las proposiciones con el fin de
averiguar si posees o no significación:
-Si son reglas lógicas ( o lingüísticas)
-Si son proposiciones sobre hechos
-Si son meras expresiones de emociones
II CAPITULOFILOSOFIA SISTEMATICA (LOS VALORES) Y LOS PROBLEMAS DEL
HOMBRE Y LA SOCIEDAD
Periodo sistemático:
A1) Platón 437 – 437 a.c.). Nació en Atenas, probablemente.
De familia aristocrática, tanto él como sus parientes se creían descender de
dioses (de Neptuno, en este caso), para justificar así la superioridad de su
linaje. A los 20 años conoce a Sócrates, sintiéndose inclinado hacia
la acción política (entre los Treinta Tiranos de Atenas hubo dos parientes suyos
y varios conocidos, lo que explica quizás su escaso interés por la democracia),
y se desilusionó cuando condenaron a muerte a Sócrates (acusado de
corromper a la juventud, no dar culto a los dioses y de inducir demonios, fue
maestro de violentos tiranos como Alcibíades y Critias). Sostiene que solo la
filosofía puede mostrar donde esta la justicia.
Su propuesta con respecto al problema del ser es:
Platón influenciado por los grandes problemas que afectaban a su ciudad (la
gran inestabilidad política y social, y el relativismo sofistico) postulo a esta la
existencia de un mundo que no esta sujeto al cambio y a la inestabilidad propia
del mundo que nos rodea, en el cual estamos y que es, captado por nuestros
sentidos, es aparente, superficial y, lo denomina mundos sensible. Considera
que a través de la razón podemos llegar al mundo de las ideas donde se
encuentran la esencia última de las cosas, del mundo sensible.
Mundo de las ideas Mundos sensible
universal
inmutable
originales
incorpóreo
captado por el intelecto
particular (hay multiplicidad)
esta sujeta al cambio
copias (aproximación de los
perfecto)
corpóreo (material)
captado por los sentidos
Aclaración: las ideas, a diferencia del significado que tenia esta palabra
actualmente, no forma parte de la creación humana, y por ello las ideas no son
el producto fantasioso de la mente de platón (de hecho platón creía en su
existencia).
A2) Aristóteles 384 – 322 a.c.), nacido en Estagira (Macedonia) cuyo padre era
médico del rey de macedonia. Fue maestro de Alejandro magno, y en el 335
fundó en Atenas su escuela cerca del templo de Apolo llamado Liceo (escuela
peripatética o Liceo), y se dedica a ella hasta que muerto Alejandro
Magno (323), el partido antimacedónico lo acusa de impiedad, obligándolo a
retirarse de falcidia, en donde muere.
Con respecto al problema del ser Aristóteles planteó:
Que el objeto de la filosofía de investigación del ser en cuanto a ser, es decir,
indagar los principios y causas de seres, en cuanto seres. A diferencia de
Plantón, plantea que la esencia del ser no se encuentra en las ideas, sino que
tiene que ser buscada en las cosas mismas y no fuera de ellas. El ser es la
sustancia que existe y que puede ser pensado en si y en si, es la realidad
concreta, el individuo (entendido como singular o particular). Ejemplos; la tierra,
el fuego, el agua y todas las demás cosas, que van desde las sillas donde nos
sentamos hasta nosotros mismos, la sustancia es pues en individuo. Unidad de
materia y de forma.
Teoría de platónCritica de Aristóteles a
la teoría de platón
Teoría de las causas. Aristóteles plantea que las condiciones o causas de la
existencia de la sustancia (ser) son cuatro:
causa materia (materia). Aquello de lo que una cosa esta hecha: madera–
causa material de la silla.
Causa eficiente. Llamado también agente, es de quien procede el
movimiento y permite que las cosas lleguen a lo que son. Ejemplo: un
carpintero es la causa eficiente para que la madera se transforme en silla.
Causa formal. Es la esencia de las cosas, provista de forma, la cual permite
mediante su acción que la materia se actualice y se convierta en realidad.
Ejemplo: el modelo que el carpintero tiene de la silla, va ha permitir darle
forma a la materia (la materia).
Causa final. La finalidad de las cosas, la cual es propia o inmanente del ser
o sustancia. Ejemplo: la silla hecha por el carpintero va ha servir para
sentarnos. La razón de ser de la silla es el uso que se le va ha dar.
Acto o potencia.- se ha mencionado las causas del ser aristotélico, la materia
y la forma coexisten en la sustancia o ser, son una unidad; pero su desarrollo
consiste la materia ya posee en si la posibilidad (potencia) de convertirse en
materia con alguna forma particular y esto se va concretando en una serie
de acciones que la llevan a esa forma (acto). Así por ejemplo el escultor que
crea una estatua.
Es así que Aristóteles concibe que la naturaleza esta en constante movimiento,
desarrollo, proceso en que la materia cobra forma, es decir, como paso de la
potencia al acto.
Obras:
la metafísica
la política
Ética nicomáquea, etc.
La lógica aristotélica.- Aristóteles fue el fundador de la lógica, aunque tuvo su
precedente en la dialéctica de platón, para el la lógica es el instrumento de la
ciencia porque piensa que no hay ciencia sino de lo universal y necesario. La
ciencia explica la realidad deduciéndola. El silogismo expresa una relación de
inclusión, teniendo tres elementos; una premisa mayor, una premisa menor y
una conclusión.
B) PERIODO HELENÍSTICO ROMANO
(IV a.c. - V d.c.)
Comprende las etapas de expansión y conquistas de Alejandro magno, así
como el auge y consolidación del imperio romano.
A mediados del siglo II roma absorbe la cultura griega helenizándose,
corresponde también al AUGE Y DECLIVE DEL ESCLAVISMO que estuvo
marcada por rebeliones de esclavos, luchas emancipadoras contra el imperio
romano, todo esto llevo a los pueblos a una crisis económica, social, política y
cultural y dentro del cual la crisis moral. Es a partir de estas crisis que muchas
corrientes filosóficas nacidas en esta etapa, tuvieron como tema de reflexión
principalmente el problema moral y la búsqueda de la felicidad humana. Así
tenemos las siguientes corrientes:
MORALISTAS SOCRÁTICOS
EL CINISMO
Escuela filosófica fundada por ANTÍSTENES y tuvo como su máximo
representante a DROGENES DE SINOPE, se le conoce también como escuela
socrática menos, porque surge después de Sócrates con los cirenaicos y los
megaricos, posteriormente el cinismo se difundió hasta el periodo helenístico
romano.
Cinismo viene de cínico, que significa perro, así los llamaban, de manera
despectiva, a estos filósofos por el modo de vida que adoptaron, pues los
cínicos se caracterizan por:
Rechazarlos progresos de la civilización, el politeísmo y la diferencia de
clases.
Abogar la limitancia de las necesidades del hombre (ascetismo).
Despreciar las normas morales, sociales, la decencia, costumbres
y cultura.
Renunciar a las riquezas, a la gloria y a la satisfacción de los sentidos.
Expresar la mentalidad de las capas democráticas.
DROGENES DE SINOPE
Sostenía que todo lo natural no es deshonroso ni indecente, y por lo tanto debe
hacerse en publico y que todas las convenciones opuestas a estos principios
deberían ser desechadas y no tomados en cuenta.
LOS CIRENIACOS
Fundada por ARISTIPO DE CIRENE, un sofista agregado, tiene profunda
semejanza con la cínica, para Aristipo el bien supremo es el placer, el problema
consiste en que el placer no debe dominarnos, sino que nosotros a el. Además
el placer se convierte en desagrado cuando nos domina y altera, al
mismo tiempo el cireniaco tiene que seleccionar sus placeres para que estos
sean demorados, así el hedonismo tiene una extraordinaria semejanza con el
ascetismo de los cínicos.
EL PROBLEMA DEL HOMBRE Y LA SOCIEDAD EN TOMÁS DE AQUINO
1. El hombre.
Por su alma, el hombre pertenece todavía a la serie de los seres inmateriales;
pero su alma no es una Inteligencia pura, como lo son los ángeles; no es más
que un simple intelecto. La adopción del actus essendi como un acto que no es
"forma", sino acto con respecto a la forma misma, capacita a Tomás para
admitir seres que, aun no teniendo materia alguna, son "compuestos" de
potencia y acto y, por lo tanto, creados. El último grado de la jerarquía de estos
seres es el alma humana, especie de puente entre lo espiritual y lo material,
por cuanto, a la vez que substancia espiritual es forma de un cuerpo; este
carácter de forma del cuerpo (y de un solo cuerpo) no es accidental, sino
esencial al alma. El intelecto humano puede conocer un determinado inteligible,
pero no es Inteligencia, pues es esencialmente unible a un cuerpo. El alma es,
efectivamente, una sustancia intelectual, pero a la que es esencial ser forma de
un cuerpo y constituir con él un compuesto físico de la misma naturaleza que
todos los compuestos de materia y forma. El alma humana señala los confines,
la línea divisoria entre el reino de las puras Inteligencias y el de los cuerpos.
Por ser substancia espiritual, el alma subsiste aunque se "separe" del cuerpo;
ni siquiera esta "separación" suprime la relación esencial del alma al cuerpo
concreto del que es forma. Por ser substancia espiritual, el alma tiene un
conocimiento no sensible; por estar esencialmente unida al cuerpo, todo su
conocimiento está ligado a la sensación. El entendimiento agente que posee
toda alma humana es aquella facultad por la que más nos aproximamos a los
ángeles.
La doctrina de Tomás de Aquino afirma que el hombre no es ni el alma sola, ni
el cuerpo solo, sino la síntesis de ambos; el compuesto sustancial de ambos
elementos. El cuerpo orgánico y el alma intelectiva se unen en el hombre como
materia y forma sustancial del mismo. Frente a la tradición franciscana, Tomás
opta por el hilemorfismo aristotélico, por la teoría de la unión sustancial del
alma y del cuerpo, afirmando el principio intelectivo como forma propia del
hombre y negando la composición en el alma de materia y forma. Con ello se
opone a San Buenaventura.
Sin embargo supera a Aristóteles desde su perspectiva cristiana, al afirmar que
el alma humana no se agota en ser forma del compuesto orgánico sino que es
una realidad irreductible a la materia y sus procesos, siendo de origen divino y
capaz de subsistencia; si bien la subsistencia no es un estado natural. No hay
que olvidar que la creencia cristiana fundamental no es la inmortalidad del alma
(Platón) sino la resurrección de los muertos. A su vez Tomás negará la
pluralidad de formas de Ibn Gabirol (Avicebrón) y se opondrá a la doctrina del
entendimiento agente separado de los averroístas.
Aunque el alma es más perfecta en el cuerpo (como forma sustancial suya),
ambos elementos unidos son los que constituyen propiamente al hombre. El
alma, sin embargo, no es para Tomás de Aquino una sustancia completa e
independiente que lo mismo puede estar en este cuerpo que en aquél; ni
depende del cuerpo para existir, pues sobrevive a la muerte de éste.
Aquí estribará la diferenciación ideológica con Aristóteles. Como él, para
Tomás de Aquino el alma, en su sentido más amplio, es "el primer principio de
las cosas vivas que se hallan entre nosotros". De ahí que todas las cosas vivas
tengan "alma": las plantas, los animales y los hombres. Es el "alma vegetativa"
o principio vital de la planta la que hace que sus actividades de nutrición y
reproducción sean posibles. Como el "alma sensitiva" en el animal la que le da
a éste la capacidad de sentir y de otras múltiples actividades para las que las
plantas no están capacitadas. En los seres humanos es el "alma racional" la
que nos permite desarrollar las actividades de pensar y de elegir con libertad.
Son las actividades desarrolladas por los seres vivos las que nos revelan la
clase de alma que se da en ellos. Lo que no quiere decir que los seres
superiores tengan los distintos modelos de almas inferiores: el animal la
vegetativa y el hombre la vegetativa y la sensitiva además de la suya propia. El
animal y el hombre sólo poseen una, la suya, por la que son capaces de
desarrollar las actividades vitales que les correspondan; aunque en cierto
sentido, virtualmente según la expresión lingüística, puede decirse que también
las tienen.
ESTUDIANDO AL HOMBRE
Han existido diferentes formas de acercarse al estudio del hombre que abarca
desde la concepción de un todo indivisible hasta la contemplación de diferentes
parcelas que pueden estudiarse por separado.
Marx Sheler fundador de la antropología filosófica pretende construir una idea
unitaria del hombre mientras que Michel Focault fragmenta al hombre en
diferentes estructuras de las que se ocuparan las diferentes ciencias.
Los griegos entendían el alma de dos formas distintas. Por un lado la
consideraban cono principio de la vida, todos los seres vivos tienen alma, y por
otro como principio del conocimiento racional.
Cuando Platón habla del alma, aunque entiende este concepto a la manera
tradicional del mundo griego, va a insistir sobre todo en el alma como principio
del conocimiento racional. Desde este punto de vista y recogiendo opiniones de
filósofos anteriores, va a partir de que el alma es eterna, y que es la causa de
la capacidad de pensar que tiene el hombre.
La visión del hombre de Platón, va a ser una concepción dualista, por un lado
se encuentra el alma (principio del conocimiento racional), y por otro lado el
cuerpo que va a ser considerado como el receptáculo (la cárcel) del alma.
Platón se enfrenta con dos hechos que son obvios, por un lado el hombre tiene
un cuerpo, y por otro lado tiene una capacidad de pensamiento, que le permite
alcanzar el conocimiento
La identificación del hombre con el alma o espíritu que reside en un cuerpo es
adoptada también por una corriente del pensamiento occidental representada
por San Agustín y Descartes.
Sin embargo, otra tradición filosófica apunta al hombre como un ser corpóreo.
De acuerdo con esta concepción Aristóteles dice que el alma no es sino la
forma primera de un cuerpo natural organizado, es decir, la “función” que
realiza ese cuerpo que se encuadra dentro de la naturaleza.
III CAPITULO
FILOSOFIA ANTIGUA
Durante miles de años los hombres explicaban la utilidad del mundo
exclusivamente en términos religiosos. La interpretación de la naturaleza desde
el hombre, y no desde dioses y sacerdotes nos dan uno de los problemas de la
filosofía como lo es el mundo, siendo este de tipo Cosmológico. En la etapa
preatica, la cual es fundamentalmente filosofía de la naturaleza o del mundo.
Se postula para ella una ley interna que asegura la uniformidad del acaecer de
los fenómenos: la misma causa determina siempre, en todas partes y sin
excepción alguna, los mismos efectos. Sin este postulado no hay ciencia, ni
racionalidad, ni lógica. Los representantes de la filosofía preatica son: Tales de
Mileto, Anaximandro, Anaximenes, intentan fijar el ser último de la naturaleza:
agua, aire caos; Heraclito señala hacia un fuego cósmico inteligente y
Parmenides y su discípulo Zenón enfatizan que lo que es tiene que ser
inmutable e inmóvil; en consecuencia las cosas perecederas no son el ser
como tal; son apariencias y apariciones inconsistentes. Los preaticos
posteriores: Demócrito, Anaxágoras y Empedocles continúan la línea de Tales
de Mileto: su doctrina de la naturaleza, es realista y materializante: son los
cuatro elementos que constituyen el mundo.
En la filosofía Griega, se inaugura la razón como un instrumento para la
búsqueda de la verdad, se siembran los principios de la ciencia moderna.
Surge como una respuesta a los mitos1, para dar argumento acerca de su
naturaleza (el porque de las cosas), ya que la mitología no es un pensamiento
filosófico, puesto que no da una afirmación racional y deductiva de sus
afirmaciones.
Filosofía Preática.
Tales de Mileto (c. 625-c. 546 a.C.).
Filósofo griego nacido en Mileto (Asia Menor). Fue el fundador de la
filosofía griega, y está considerado como uno de los Siete Sabios de Grecia.
Tales llegó a ser famoso por sus conocimientos de astronomía después de
1
predecir el eclipse de sol que ocurrió el 28 de mayo del 585 a.C. Se dice
también que introdujo la geometría en Grecia. Según Tales, el principio
original de todas las cosas es el agua, de la que todo procede y a la que todo
vuelve otra vez. Antes de Tales, las explicaciones del universo eran
mitológicas, y su interés por la sustancia física básica del mundo marca el
nacimiento del pensamiento científico.
Anaximandro (c. 611-c. 547 a.C.).
Filósofo, matemático y astrónomo griego. Nació en Mileto (en la actual
Turquía). Discípulo y amigo del filósofo griego Tales de Mileto, Anaximandro
está considerado el descubridor de la oblicuidad de la eclíptica, que es el
ángulo que forman el plano de la eclíptica y el plano del ecuador celeste.
También se le considera introductor del reloj de sol en Grecia y fundador de
la cartografía.
La contribución más relevante de Anaximandro fue elaborar la más temprana
obra en prosa en relación al cosmos y los orígenes de la vida, por lo que
también es mencionado como fundador de la cosmología. Concebía el
Universo como un número de cilindros concéntricos, de los cuales el más
exterior es el Sol, el del medio la Luna y el más interno contiene las estrellas.
Dentro de estos cilindros está la Tierra, sin base firme y en forma de bombo.
Anaximandro postulaba una teoría del origen del Universo que defendía que
éste era el resultado de la separación de opuestos desde la materia primaria.
Así, el calor se movió hacia fuera, separándose de lo frío y, después, lo hizo
lo seco de lo húmedo. Además, Anaximandro sostenía que todas las cosas
vuelven con el tiempo al elemento que las originó.
Anaxímenes (c. 570-500 a.C.).
Filósofo griego de la naturaleza, el último miembro de la escuela jónica
fundada por el filósofo Tales de Mileto. Nació en Mileto (Jonia), en Asia
Menor. Anaxímenes afirmaba que el aire es el elemento primario al que todas
las demás cosas pueden ser reducidas. Para explicar cómo los objetos
sólidos se forman a partir del aire, introdujo las nociones de condensación y
rarefacción. Estos procesos, afirmaba, transforman el aire, en sí mismo
invisible, en entidades visibles —como el agua, el fuego y las materias sólidas
—. Pensaba que el aire se calienta y se vuelve fuego cuando se rarifica y que
se enfría y se vuelve sólido al condensarse. La importancia de Anaxímenes
no radica en su cosmología sino en su intento de descubrir la naturaleza
última de la realidad.
Pitágoras (c. 582-c. 500 a.C.).
Filósofo y matemático griego, cuyas doctrinas influyeron mucho en
Platón. Nacido en la isla de Samos, Pitágoras fue instruido en las enseñanzas
de los primeros filósofos jonios Tales de Mileto, Anaximandro y Anaxímenes.
Se dice que Pitágoras había sido condenado a exiliarse de Samos por su
aversión a la tiranía de Polícrates. Hacia el 530 a.C. se instaló en Crotona,
una colonia griega al sur de Italia, donde fundó un movimiento con propósitos
religiosos, políticos y filosóficos, conocido como pitagorismo. La filosofía de
Pitágoras se conoce sólo a través de la obra de sus discípulos.
Para Pitágoras, la esencia permanente del mundo puede encontrarse
en los principios matemáticos y especialmente en los números. La propuesta
fundamental de la escuela Pitagórica, se reduce a que el número es la
esencia de todas las cosas ya que ocupan un lugar intermedio entre la
percepción sensible y las ideas.
Como sus doctrinas básicas, los pitagóricos asumieron ciertos misterios,
similares en muchos puntos a los enigmas del orfismo. Aconsejaban la
obediencia y el silencio, la abstinencia de consumir alimentos, la sencillez en el
vestir y en las posesiones, y el hábito del autoanálisis. Los pitagóricos creían
en la inmortalidad y en la transmigración del alma. Se dice que el propio
Pitágoras proclamaba que él había sido Euphorbus, y combatido durante la
guerra de Troya, y que le había sido permitido traer a su vida terrenal la
memoria de todas sus existencias previas.
Heráclito (c. 540-c. 475 a.C.).
Filósofo griego, quien sostenía que el fuego era el origen primordial de
la materia y que el mundo entero se encontraba en un estado constante de
cambio. Nació en Éfeso, una antigua ciudad griega en Asia Menor, que ahora
pertenece a Turquía. Debido a su vida solitaria, y a la oscuridad y misantropía
de su filosofía, es llamado algunas veces el oscuro.
En cierto sentido, Heráclito fue uno de los iniciadores de la metafísica
griega, aunque sus ideas se derivan de las de la escuela jónica de la filosofía
griega. Consideraba el fuego como la sustancia primordial o principio que, a
través de la condensación y rarefacción, crea los fenómenos del mundo
sensible. Heráclito incorporó a la noción de "ser" de sus predecesores el
concepto de "devenir" o flujo, al que consideró una realidad básica
subyacente a todas las cosas, incluso a las más estables en apariencia. Para
aclararlo, afirmaba que una persona no podía bañarse dos veces en el mismo
río.
Para Heráclito, su principio es la dialéctica misma, busca el equilibrio,
todo es parte de todo, las cosas cambian por eso son o no son.
En ética, Heráclito introdujo un nuevo énfasis social, manteniendo que
la virtud consiste en la subordinación del individuo a las leyes de una armonía
razonable y universal. Aunque su pensamiento estaba influido por la teología
popular, atacó los conceptos y ceremonias de la religión popular de su
tiempo.
Sólo una obra, De la Naturaleza de las cosas, se puede atribuir a
Heráclito, aunque algunos autores sostienen que también escribió un libro
sobre las leyes. Numerosos fragmentos de su obra fueron preservados por
escritores posteriores y se pueden encontrar recopilaciones de estos
fragmentos en diversas ediciones modernas.
Hipócrates (c. 460-c. 377 a.C.).
El médico más importante de la antigüedad, es considerado el padre
de la medicina. Nacido probablemente en la isla de Cos, Grecia, realizó
numerosos viajes antes de establecerse definitivamente en la isla para
dedicarse a la enseñanza y la práctica de la medicina. Murió en Larissa,
Grecia, y poco más se sabe de él. Su nombre se asocia al juramento
hipocrático, aunque es muy posible que no fuera el autor del documento. De
hecho, de las casi setenta obras que forman parte de la Corpus
hippocraticum, es posible que sólo escribiera alrededor de seis.
La Corpus hippocraticum probablemente es lo único que queda de la
biblioteca médica de la famosa Escuela de Medicina de Cos. Sus
enseñanzas, su sentido del distanciamiento y su capacidad para la
observación clínica directa quizá influyeran a los autores de esos trabajos y,
sin duda, contribuyeron en gran medida a desterrar la superstición de la
medicina antigua. Entre las obras más importantes de la Corpus
hippocraticum está el Tratado de los aires, las aguas y los lugares (siglo V
a.C.) que, en vez de atribuir un origen divino a las enfermedades, discute sus
causas ambientales. Sugiere que consideraciones tales como el clima de una
población, el agua o su situación en un lugar en el que los vientos sean
favorables son elementos que pueden ayudar al médico a evaluar la salud
general de sus habitantes. Otras obras, Tratado del pronóstico y Aforismos,
anticiparon la idea, entonces revolucionaria, de que el médico podría predecir
la evolución de una enfermedad mediante la observación de un número
suficiente de casos.
Escuela eleática.
Corriente griega de filosofía que tuvo su apogeo en los siglos VI y V
a.C. El pensamiento eleático se opone tanto a la filosofía materialista de la
escuela jónica como a la teoría del flujo universal formulada por el filósofo
griego Heráclito. Según los eleáticos, el universo es en esencia una unidad
inmutable, que, siendo infinita en tiempo y espacio, está más allá de la
cognición proporcionada por los sentidos humanos. Sólo a través de la
reflexión filosófica, afirmaban, se puede alcanzar la verdad última. Las
observaciones sensoriales ofrecen tan solo una visión limitada y
distorsionada de la realidad. El nombre de eleática viene de la ciudad griega
de Elea, al sur de Italia, el hogar de Parménides y Zenón, máximos
exponentes de la misma escuela. Los eruditos difieren en si la escuela fue
fundada por Jenófanes o Parménides. Muchas de las doctrinas eleáticas se
basaron en las enseñanzas de Jenófanes, mientras que Parménides
desarrolló sus doctrinas dentro de un sistema de metafísica. La filosofía
eleática sirvió como base para el sistema metafísico de Platón.
Jenófanes (fl. final del siglo VI y principios del V a.C.).
Poeta griego, filósofo y reformador religioso, nació en Colofón, Asia
Menor. Dejó su ciudad natal en el 545 a.C. para convertirse en un poeta
errante y rapsoda en Grecia y Sicilia. En el 536 a.C., según la tradición, se
estableció en la colonia fenicia de Elea, al sur de Italia. Allí, según dicen,
fundó la escuela eleática, cuyos conceptos filosóficos fueron más tarde
ampliados y sistematizados por su discípulo, el pensador griego Parménides.
En sus obras Jenófanes satirizaba con inteligencia las creencias
politeístas de los primeros poetas griegos y de sus contemporáneos.
Ridiculizaba sus deidades como dioses creados a imagen de los mortales
que los adoraban. En un famoso pasaje afirmó que si los bueyes pudieran
pintar y esculpir, pintarían dioses que parecerían bueyes. Los humanos,
sentía, debían rechazar el antropomorfismo politeísta y reconocer en su lugar
una única deidad no humana oculta y unificadora de todo fenómeno
universal. En otras obras ridiculizó la doctrina de la transmigración de las
almas y deploraba la preocupación griega por el atletismo y la vida lujuriosa a
expensas de la sabiduría. Sólo perduran escasos fragmentos de sus poemas.
Parménides (c. 515-c. 440 a.C).
Filósofo griego, considerado por muchos eruditos como el miembro
más importante de la escuela eleática. Natural de Elea (colonia griega en el
sur de la península Itálica), se cree que visitó Atenas cuando tenía 65 años
de edad y que, en tal ocasión, Sócrates, entonces un hombre joven, le oyó
hablar. Parménides expuso su filosofía en forma de versos y la única obra
suya que ha perdurado se nutre de extensos fragmentos de un poema
didáctico, Sobre la naturaleza. En esta reflexión aboga por la existencia del
‘Ser absoluto’, cuya no existencia Parménides declaraba resultar
inconcebible, pero cuya naturaleza admitía ser también inconcebible, ya que
el ‘Ser absoluto’ está disociado de toda limitación bajo la cual piensa el ser
humano. Mantenía que los fenómenos de la naturaleza son sólo aparentes y
debidos, en esencia, al error humano; parecen existir, pero no tienen entidad
real. Sostenía también que la realidad, ‘Ser verdadero’, no es conocida por
los sentidos, sino que sólo se puede encontrar en la razón. Esta creencia le
convirtió en un precursor del idealismo de Platón. La teoría de Parménides de
que el ser no puede originarse del no ser, y que el ser ni surge ni desaparece,
fue aplicada a la materia por sus sucesores Empédocles y Demócrito, que a
su vez la convirtieron en el fundamento de su explicación materialista del
Universo.
Empédocles (c. 493 a.C.-433 a.C.).
Filósofo griego, estadista y poeta, nacido en Agrigentum (hoy
Agrigento), Sicilia, discípulo de Pitágoras y Parménides. Según afirma la
tradición, Empédocles rechazó aceptar la corona ofrecida por el pueblo de
Agrigentum después de haber colaborado a librarle de la oligarquía
gobernante. En su lugar instituyó una democracia.
El conocimiento moderno de la filosofía de Empédocles se basa en los
fragmentos que perduran de sus poemas sobre la naturaleza y la purificación.
Afirmaba que todas las cosas están compuestas de cuatro elementos
principales: tierra, aire, fuego y agua. Dos fuerzas activas y opuestas, amor y
odio, o afinidad y antipatía, actúan sobre estos elementos, combinándolos y
separándolos dentro de una variedad infinita de formas. De acuerdo con
Empédocles, la realidad es cíclica. Al comenzar un ciclo, los cuatro elementos
se encuentran unidos por el principio del amor. Cuando el odio penetra en el
círculo, los elementos empiezan a separarse. El amor funde todas las cosas;
entonces el odio reemprende el proceso. El mundo como lo conocemos se
halla a medio camino entre la esfera primaria y el estado de total dispersión
de los elementos. Creía también que no es posible que ningún cambio
conlleve la creación de nueva materia; sólo puede ocurrir un cambio en las
combinaciones de los cuatro elementos ya existentes. Asimismo formuló una
primitiva teoría de la evolución en la que declaraba que las personas y los
animales evolucionaban a partir de formas precedentes.
Anaxágoras (c. 500-428 a.C.).
Filósofo griego responsable de introducir la noción de nous (en griego
'pensamiento' o 'razón') en la filosofía de los orígenes; sus predecesores
habían estudiado los elementos (tierra, aire, fuego, agua) como realidad
última.
Nació en Clazomenae (cerca de la actual Azmir, Turquía). Anaxágoras
fue el primer pensador en establecerse (c. 480) en Atenas, más tarde un
destacado centro filosófico. Entre sus alumnos se encontraban el estadista
griego Pericles, el dramaturgo griego Eurípides, y quizás también Sócrates.
Anaxágoras había enseñado en Atenas durante cerca de treinta años cuando
se le encarceló acusado de impiedad al sugerir que el Sol era una piedra
caliente y la Luna procedía de la Tierra. Después marchó a Jonia (en Asia
menor) y se estableció en Lampsacus (una colonia de Mileto), donde murió.
Anaxágoras explicó su filosofía en su obra Peri physeos, pero sólo
algunos fragmentos de sus libros han perdurado. Mantenía que toda la
materia había existido en su forma primitiva como átomos o moléculas; que
estos átomos, numerosos hasta el infinito e infinitesimalmente pequeños,
habían existido desde la eternidad; y que el orden que surgió al principio de
este infinito caos de átomos diminutos era efecto de la actuación de una
inteligencia eterna (nous). También consideraba que todos los cuerpos son
simples agregaciones de átomos; así, una barra de oro, acero o cobre se
compone de inconcebibles partículas diminutas del mismo material.
LA ANTIGÜEDAD
Durante miles de años los hombres explicaban la utilidad del mundo
exclusivamente en términos religiosos. La interpretación de la naturaleza desde
el hombre, y no desde dioses y sacerdotes nos dan uno de los problemas de la
filosofía como lo es el mundo, siendo este de tipo Cosmológico. En la etapa
preática, la cual es fundamentalmente filosofía de la naturaleza o del mundo.
Se postula para ella una ley interna que asegura la uniformidad del acontecer
de los fenómenos: la misma causa determina siempre, en todas partes y sin
excepción alguna, los mismos efectos. Sin este postulado no hay ciencia, ni
racionalidad, ni lógica. Los representantes de la filosofía preatica son: Tales de
Mileto, Anaximandro, Anaximenes, intentan fijar el ser último de la naturaleza:
agua, aire caos; Heraclito señala hacia un fuego cósmico inteligente y
Parmenides y su discípulo Zenón enfatizan que lo que es tiene que ser
inmutable e inmóvil; en consecuencia las cosas perecederas no son el ser
como tal; son apariencias y apariciones inconsistentes. Los preáticos
posteriores: Demócrito, Anaxágoras y Empedocles continúan la línea de Tales
de Mileto: su doctrina de la naturaleza, es realista y materializante: son los
cuatro elementos que constituyen el mundo.
En la filosofía Griega, se inaugura la razón como un instrumento para la
búsqueda de la verdad, se siembran los principios de la ciencia moderna.
Surge como una respuesta a los mitos, para dar argumento acerca de su
naturaleza (el porque de las cosas), ya que la mitología no es un pensamiento
filosófico, puesto que no da una afirmación racional y deductiva de sus
afirmaciones.
ÉPOCA
Corriente griega de filosofía que tuvo su apogeo en los siglos VI y V a.C. El
pensamiento eleático se opone tanto a la filosofía materialista de la escuela
jónica como a la teoría del flujo universal formulada por el filósofo griego
Heráclito. Según los eleáticos, el universo es en esencia una unidad inmutable,
que, siendo infinita en tiempo y espacio, está más allá de la cognición
proporcionada por los sentidos humanos. Sólo a través de la reflexión filosófica,
afirmaban, se puede alcanzar la verdad última. Las observaciones sensoriales
ofrecen tan solo una visión limitada y distorsionada de la realidad. El nombre de
eleática viene de la ciudad griega de Elea, al sur de Italia, el hogar de
Parménides y Zenón, máximos exponentes de la misma escuela. Los eruditos
difieren en si la escuela fue fundada por Jenófanes o Parménides. Muchas de
las doctrinas eleáticas se basaron en las enseñanzas de Jenófanes, mientras
que Parménides desarrolló sus doctrinas dentro de un sistema de metafísica.
La filosofía eleática sirvió como base para el sistema metafísico de Platón.
LOS PRESOCRATICOS: Cosmologo, pitagórico, metafísicos, pluralista,
atomista y sofista
Se llaman así por haber desarrollado su filosofía con anterioridad a Sócrates,
filósofo que marca un estudio diferente en la filosofía griega (otra razón más
para calificarlos con este nombre).
La principal preocupación de los presocráticos es la naturaleza (fisis) y el
principio de las cosas (arjé); por ello, se considera esta etapa, dentro de la
filosofía griega, como la etapa cosmológica.
La filosofía en este tiempo se desarrolla en las colonias jónicas e itálicas.
Colonias jónicas: situadas en el mar Jónico y Egeo. Son filósofos más
empíricos, más apegados a la experiencia sensible, con caracteres más
materiales. Colonias itálicas: situadas en torno al Adriático y al Tirreno. Son
más especulativos, más abstractos.
No el hombre sino el agua, es la realidad de las cosas", Tales de Mileto
Como señalara Nietzsche que el paso de Tales fue fundamental puesto que
marcó un punto de inflexión a partir del cual se comenzaba a creer en la
naturaleza en cuanto al menos, se creía en la naturaleza del agua. "Como
matemático y como astrónomo, era hóstil a todo lo mítico y alegórico, y si llegó
hasta la pura abstracción de 'todo es uno' y formuló una expresión fúsica, se
constituyó en una excepción entre los griegos de su tiempo" F. Nietzsche, La
filosofía en la época trágica de los griegos (1932)
Aristóteles dice claramente que para Tales, el agua es el principio (arché) de
todas las cosas, aunque poco se sabe lo que quizó decir Tales en realidad.
Podría pensarse que ser refería a que todas las cosas están compuestas por
agua o que la tierra procede del agua y que por sobre el agua flota.
Posiblemente, éstas ideas tengan su origen en la mitología egipcia y babilónica
y que además, se base en la observación.
Otra de las famosas afirmaciones de tales es que todas las cosas 'están llenas
de dioses', la interpretación más difundida al respecto es que esta physis, que
es el agua, está dotada de vida y movimento propios; por lo tanto, todo está
vivo y animado.
ANAXIMANDRO DE MILETO (547 a. C.)
Actividad científica: gnomon (escuadra o vara vertical cuya sombra señala la
dirección y altura del sol . Es la parte básica de un reloj de sol y la herramienta
con la que Eratóstenes midió el radio de la Tierra), mapa (primero en dibujar un
mapa de la tierra habitada)
El principio material de las cosas
esápeiron (sin término, sin límite, sin
definición): lo indeterminado, lo indefinido.
No se parecía a ninguna clase de materia
del mundo ya formado. El razonamiento
tiene mucho sentido, ¿se les ocurre cuál
puede ser?. Aplicó a lo Indefinido los atributos propios de los dioses
(inmortalidad, poder ilimitado, …)
También es el primero en hablar de los opuestos como esenciales en la
evolución del mundo que luego retomarán Heráclito, Parménides, Empédocles
y los pitagóricos.
Creyó en la existencia de mundos innumerables, no sabemos con certeza si
sucesivos o coexistentes.
ANAXÍMENES DE MILETO (525 a. C.)
Del aire surgen todas las cosas por condensación y rarefacción
Principio material: el aire por condensación y rarefacción.
El Aire, aliento del mundo, su fuente eterna y divina. “Al igual que nuestra alma,
que es aire, nos gobierna, igualmente el soplo y el aire envuelven el mundo
todo”
Tiene alguna de las cualidades indefinidas del Ápeiron de Anaximandro.
Ocupa una vasta región del mundo ya formado.
Tierra: como gran hoja flotando en el aire.
JENÓFANES DE COLOFÓN (530 a. C.)
Su importancia depende de los autores: unos consideran que es de enorme
importancia, mientras que otros afirman que se hubiese reído de saber que iba
a tener tanta influencia.
Fue básicamente un poeta, interesado fundamentalmente por problemas
religiosos, reaccionando contra Homero, arquetipo de poetas y base
fundamental de la educación contemporánea.
Sus ataques se fundamentan en la inmoralidad y la naturaleza
antropomórfica de los dioses de la religión convencional.
Los dioses de Homero y Hesíodo son, con frecuencia, inmorales –lo que es
absolutamente cierto; y en segundo lugar, no hay motivos convincentes para
creer que los dioses sean en modo alguno antropomórficos. Jenófanes se da
cuenta de dos cosas:
1ª. Que las diferentes razas atribuyen a los dioses sus propias características
particulares.
2ª. Que por reducción al absurdo, los animales harían lo mismo.
Concluye con la afirmación de que tales consideraciones son subjetivas y
carentes de valor y que el cuadro establecido por Homero respecto a la
concepción de los dioses como hombres y mujeres debe ser abandonado.
HERÁCLITO DE ÉFESO (500 a. C.)
Heráclito y Demócrito de Rubens
Ficción biográfica: pretendían ridiculizarle por su aire de superioridad. Elaborar
leyes, jugar con los niños, misantropía, hidropesía, propositor de obscuros
enigmas, etc…
Calificativos: enigmático, obscuro, filósofo llorón.
El universo está en continuo devenir, en incesantetransformación, en
continuo movimiento. “Todo fluye”, “No se puede uno bañar dos veces en el
mismo río”.
Ese devenir o cambio no es irracional o caótico sino que se realiza atendiendo
a unaley o logos interno. Ley = Razón = Dios.
Esta ley que rige el universo es la lucha de contrarios (día-noche, invierno-
verano, guerra-paz, hartazgo-hambre, etc …)
El orden, la armonía del universo procede de la contradicción, de la lucha de
contrarios.
Este cósmos no lo hizo ni alguno de los dioses ni de los hombres, sino que era
y es y será, fuego siempre viviente
Creador de ladialéctica. La naturaleza es dialéctica, un continuo devenir
conforme a una ley que la ordena.
El fuego es el principio material, razón del movimiento y cambio.
PARMÉNIDES DE ELEA (470 a. C.)
La razón es la única fuente válida de conocimiento (Vía de la Verdad),
lossentidos (Vía de la Opinión) nos ofrecenmeras apariencias.
A partir de una única realidad es imposible que surja la pluralidad (en contra de
lo que afirmaban los milesios). Supongamos que originariamente sólo existía
agua. ¿por qué no sigue habiendo sólo agua? Si solamente había agua, ésta
no pudo generarse a partir de otra sustancia (que, por hipótesis, no había) ni
puede transformarse tampoco en otra cosa o desaparecer (¿qué podría hacerla
desaparecer o transformarse si nada hay aparte de ella?) Lo que no hay ni
había desde siempre, no puede originarse; lo que hay desde siempre, no
puede ser destruido. Lo que hay, lo que es, el ente, es ingendrado,
indestructible, inmutable, compacto, indivisible, esférico.
Lo que hay, lo que existe ha de ser una única realidad.
Consecuencias de estas dos afirmaciones: si, por una parte, de una única
realidad no puede surgir la pluralidad y si, por otra parte, la razón nos obliga a
aceptar la existencia de una única realidad, no queda más remedio que negar
el movimiento y la pluralidad. Parménides elimina lo cambiante al afirmar lo
permanente, elimina lo que las cosas parecen ser (múltiples y cambiantes) al
afirmar lo que son, elimina la pluralidad al establecer la unidad; elimina el
conocimiento sensible sacrificándolo por la razón.
LOS PITAGÓRICOS
Pitágoras de Samos (532 a.C.) es una figura
legendaria que da origen a una escuela (más bien,
hermandad o asociación religiosa en la que estudiaban
igualmente hombres y mujeres, una de las cuales,
Teano, fue esposa de Pitágoras) cuya posterior
influencia será enorme. Pocas cosas se saben del
Pitágoras histórico y de los primeros pitagóricos. Éstos
últimos tenían tanto respeto a la figura del maestro que
posiblemente muchos de los hallazgos matemáticos
realizados por ellos se los atribuyeran a Pitágoras
mismo. También parece que tenían en la comunidad una regla de secreto que
castigaba divulgar la doctrina pitagórica. Se cree que fue el primero en llamarse
a sí mismo <<filósofo>>, acto de humildad del << sabio>> consciente de lo
mucho que le falta por aprender.
Lo que da acceso a la naturaleza es la razón, pero entendida como razón
Los números no son puras abstracciones o meros signos, sino que tienen
entidad material, lo que los llevó a identificarlos con los elementos geométricos
elementales: uno-punto, dos-línea, tres-superficie mínima, cuatro volumen
mínimo (tetraedro).
La correspondencia entre el número y las cosas inicia el camino de explicación
de las matemáticas al estudio de la naturaleza, construcción de modelos
matemáticos de explicación de la naturaleza.
EMPÉDOCLES DE ACRAGÁS (450 a. C.)
Sacerdote, místico, predicador ambulante, político, médico, poeta. Se dice que
la muerte le vino al arrojarse al Etna.
Cuatro son los elementos: fuego, tierra, aire y
agua.
Todo lo que hay se ha formado a partir de la
mezcla y separación de estos cuatro elementos,
todo responde al movimiento mecánico de estos
elementos.
Existen dos fuerzas externas que impulsan a
estos movimientos de mezcla y separación:
el Amor, que lleva a la unión y la Discordia, que
impulsa a la separación. Así se han formado los periodos de constitución del
mundo, según vaya predominando una fuerza u otra.
9. ANAXÁGORAS DE CLAZOMENE (460 a. C.)
Acepta el razonamiento de Parménides de que ninguna realidad nueva puede
originarse; luego, todo existe desde siempre. Partículas diminutas de todas las
sustancias existen por siempre
(homeomerías). Estas innumerables
partículas se hallaban primero mezcladas
en una masa compacta. ¿Cómo empezó
a moverse y las partículas a separarse y a
unirse para dar lugar a los distintos seres?
Recurre a una causa exterior, elNous,
Entendimiento o Inteligencia que imprimió
a esa masa inerte un movimiento de
remolino. Con Anaxágoras aparece, por
primera vez, de un modo explícito, la idea
de Dios como principio rector del
universo (no como creador sino como Arquitecto del Mundo).
Su astronomía es mucho más racional que la de los predecesores. Las
estrellas son enormes piedras incandescentes, si no notamos su calor es por
su lejanía. También afirmó que la luna no tenía luz propia sino que la recibía
del sol y que tenía planicies y simas. Dio explicación a los elipses de luna y de
sol.
Por lo que respecta a la biología defendió la idea de que los animales nacieron
originariamente en lo húmedo y después los unos de los otros.
10. LOS ATOMISTAS: LEUCIPO DE MILETO (440 a. C.) y DEMÓCRITO DE
ABDERA (420 a. C.)
Billete griego con la imagen de Demócrito
Explican la realidad a partir de dos principios: lo lleno y el vacío. El mundo está
lleno de un número infinito de principios materiales e indivisibles, deátomos.
Estos átomos se mueven en el vacío.
El movimiento es eterno, sin cesar, sin un plan determinado, por azar, por
necesidad, automático y mecánico.
El atomismo es la culminación del pensamiento presocrático. Muchas de las
afirmaciones realizadas por Demócrito son admitidas como esencialmente
válidas por la ciencia actual.
Defendió una doctrina ética no basada en los presupuestos del atomismo físico
sino en la moderación, sentido común y cordura, sentimientos típicamente
griegos.