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En una de las muchas fiestas que se hacen en mi casa, fue cuando te vi por primera vez, no estoy seguro, pero creo que fue en una fiesta del payo, bueno ahí me invitaron a que fuera al grupo juvenil de la iglesia, y la verdad, quería ir solo para volver a verte. Cuando llegó el sábado (el día del grupo juvenil), yo ni me acorde de que iba a ir hasta ya tarde, le dije al Alexis que si porque no me avisó, y pues ya para el otro sábado ni me acorde de ir. Pasó el tiempo y no te volví a ver, para serte sincero, ni me acordaba de ti, yo seguí viviendo mi vida. Fue un 3 de Enero del 2014, cuando te vi nuevamente y en cuanto te vi me atrajo tu mirada, tu cabello y tu sonrisa, todo lo que el primer día me atrajo de ti, en resumen fue Amor a primera (en sí, segunda) vista. Ese mismo día me volvieron a invitar al grupo juvenil, yo me senté un lado de ti mientras que el Pancho me decía sobre lo que se trataba el grupo, y yo casi no lo escuchaba, nomás decía “ajam” y asentaba con la cabeza, porque

la gran historia

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En una de las muchas fiestas que se hacen en mi casa, fue cuando te vi por primera vez, no estoy seguro, pero creo que fue en una fiesta del payo, bueno ahí me invitaron a que fuera al grupo juvenil de la iglesia, y la verdad, quería ir solo para volver a verte.

Cuando llegó el sábado (el día del grupo juvenil), yo ni me acorde de que iba a ir hasta ya tarde, le dije al Alexis que si porque no me avisó, y pues ya para el otro sábado ni me acorde de ir.

Pasó el tiempo y no te volví a ver, para serte sincero, ni me acordaba de ti, yo seguí viviendo mi vida.

Fue un 3 de Enero del 2014, cuando te vi nuevamente y en cuanto te vi me atrajo tu mirada, tu cabello y tu sonrisa, todo lo que el primer día me atrajo de ti, en resumen fue Amor a primera (en sí, segunda) vista.

Ese mismo día me volvieron a invitar al grupo juvenil, yo me senté un lado de ti mientras que el Pancho me decía sobre lo que se trataba el grupo, y yo casi no lo escuchaba, nomás decía “ajam” y asentaba con la cabeza, porque entre la música fuerte y tú (tu mirada) no me dejaban escucharlo, si hubo momentos donde lo escuche y cosas que me llamaron la atención del grupo. Entonces ese día dije “ahora no se me va a olvidar ir”. Y pues no, no se me olvido.

Recuerdo también la vez que nos pusimos a discutir por si la estrella era un planeta o un sol, y usaba esa discusión como motivo para hablarte en los momentos donde íbamos de la iglesia a nuestras casas y no sabía de qué hablar con Tigo.

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De otro recuerdo que tengo es cuando fuimos a llevarle la despensa a la familia de enfrente del OXXO, recuerdo que yo iba a mi casa y me los tope por la ferretería, les pregunte para donde iban y me dijeron que a entregar la despensa y pues me fui con ustedes, esa vez no recuerdo de haber hablado con Tigo, nomás cuando me despedí, que estiraste la mano para que me despidiera de ti como lo hacían en el siglo XVIII.

El 22 de Enero del 2014, hicimos un convivio en mi casa (no supe por qué motivo fue ese convivio), yo saque mesas y sillas, esperé a que todos se sentarán para yo también sentarme y no sé si fue el destino o se pusieron de acuerdo, pero cuando yo me iba a sentar la única silla desocupada era a tu lado.

Todos estaban platicando, cada quien con el de a lado y los únicos que estábamos callados éramos tú y yo, y pues dije (pensé) “de aquí soy” y te empecé a sacar platica (no recuerdo ni de que estuvimos hablando), y luego no me acuerdo quien me hablo, se me hace que fue una gemela o mi tía lupita, pero bueno, el caso es que yo voltie y en ese momento tú me agarraste de la mano, la verdad yo ni sabía que estaba pasando en ese momento.

Yo pensé que pues ya éramos algo, y pues yo no te soltaba y me sentía muy feliz en ese momento, no paso mucho cuando empecé a ver que todas las miradas se centraban en nosotros, luego nos dieron una servilleta que decía “¿son novios?” y yo te dije, contéstales tú, y les dijiste “NO” y en ese momento te solté la mano y en mi mente pasaban infinidades de pensamientos del porque les dijiste que no éramos novios, y lo más lógico que pensé fue que era que no te avía preguntado si querías ser mi novia, y

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deje que pasara un momento, unos 20 minutos más o menos, y te puse la mano por atrás de tí y te dije al oído “¿quieres ser mi novia?” y tú me dijiste “NO” entonces en ese momento no supe ni que pensar, te pregunte “¿y por qué no?” a lo que tú me respondiste “que te diga mi hermana”, ¿yo para que quería que me lo dijera tu hermana?, yo quería que me lo dijeras tú, en fin vino tu hermana y me conto el por qué tú no querías ser mi novia (en ese momento), me dijo que tu querías que cuando yo te la cantara que fuese algo bonito y romántico que no se olvide (y si se me olvido), bueno pues cundo me dijo eso tu hermana, me pareció un poco absurdo, pero muy bonito a la vez.

Al día siguiente fui a la escuela (porque estaba reacomodando la biblioteca para las horas del servicio) y les conté a las morras del salón que fueron (a la alma, a la melly y al Emmanuel) y ahí estuvimos sacando ideas de como cantártela y hasta la bibliotecaria (abelina) estaba ayudándome sacando ideas y opinando.

Bueno, ya en la tarde yo fui a tu casa, con una rosa y bien decidido de cantártela, cuando llegué a tu casa ustedes ya iban de salida, por que íbamos a ir a ver cuánto le llegaba de luz a la señora (no me acuerdo de su nombre), que por que según unos gringos la iban a ayudar a pagarla o algo así, bueno cuando te vi, te di la rosa (me la saque de atrás de la espalda así bien romántico) y te di un abrazo, bueno fuimos a ver eso de la luz y ya cuando regresamos a tu casa, nos quedamos platicando abajo, recargados en el carro de tu abuelo, había momentos en el que el silencio se apoderaba de la conversación y solo nos quedábamos mirando el uno al otro, en uno de esos momentos yo quise inclinarme para darte un beso en

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la boca y tú te quitaste y dijiste que todavía no, (a lo que yo me acuerdo, tú la otra vez me contaste una historia diferente) en uno de esos momentos de silencio tú me robaste un beso, momentos después salió tu abuelo, y pues me tuve que ir y tú te metiste.

Al llegar a mi casa, casi casi al conectarme me hablaron tus hermanas preguntando “¿ya se la cantaste?” “¿qué te dijo?” “¿Cómo se la cantaste?” y yo me acorde que en ningún momento te dije “¿quieres ser mi novia?”, al decirle a tus hermanas que no te la avía cantado, me llovieron regaños y ofensas (muy bien merecidas).

Ya al día siguiente fui a tu casa, te hable, bajaste, y nos pusimos a platicar un rato recargados en el carro de tu abuelo (recuerdo que se quedaron tus nalgas marcadas), unos 20 minutos antes de irme te dije unos secretos míos que tenías que saber antes de ser mi novia, ya después que te dije eso, te dije “ya que sabes esto de mí, ¿quieres ser mi novia?” a lo que tú me respondiste con un beso.