LA HISTORIA DE LOS PATROCINIOS EN LOS UNIFORMES DEL FÚTBOL MEXICANO DURANTE LOS AÑOS SETENTA Y OCHENTAS.

Por Armando Anaya

La presencia de anuncios publicitarios en los uniformes de los equipos de primera división en el fútbol mexicano no es tan añeja como en otros países pues la Federación Mexicana de Fútbol Asociación no permitía que nadie se hiciera de recursos económicos ni en especie y amenazaba con desafiliar al equipo que desobedeciera dicha indicación. Algunos equipos al observar que en otros países se estaba utilizando la parte frontal de la playera decidían poner anuncios como el siguiente pero sin faltar a la instrucción de la federación.

En el año de 1976 la ciudad de León Guanajuato festejaba el 400 aniversario de su fundación y el gobierno municipal junto con el equipo de fútbol no podrían pasar la oportunidad de integrarse a esa ola promocional e invitar a los turistas a que fueran a visitarla. En esa ocasión la directiva del equipo solicitó a los federativos su permiso, argumentando que no pretendían vender ni publicitar nada, más que apoyar en el fomento de la ciudad y la Femexfut accedió dando origen así al primer anuncio propagandístico en los uniformes de fútbol nacional. En esa temporada 1975-1976 el León, al mando de Ignacio “Gallo” utilizaban en su camiseta, playera o chamarra el logotipo León 400 como se aprecia en la imagen correspondiente a aquella época.

Sin embargo, no tan contundentemente se puede determinar quién fue el primer equipo, mucho menos cual fue el primer jugador que usaría publicidad en sus uniformes por diversos motivos. A finales de los años setenta, el mejor portero mexicano pasaba del Atlético San Luis al Tigres de la UANL. Se trataba de José Pilar Reyes Requena, un carismático cancerbero conocido por su atrevimiento a salir del arco con el balón en los pies, siendo que en el Fútbol de la época eso sería muy criticado pero aun así lo hacía y anotaba goles. Se hizo una frase muy conocida entre los aficionados de los Tigres de la UANL que iban al estadio, pues cuando abandonaba el arco le gritaban "sube Pilar sube" (quizás por aquello de un popular programa televisivo de la época llamado igual, “sube Pelayo sube”..) Se le conocía como el “number one” y fue si no el primero uno de los primeros en usar publicidad en su uniforme: pantaloncillo negro, medias blancas y un suéter verde en el que traía un letrero rectangular que decía “Deportes Hernández Jr.” Que era una conocida tienda regiomontana que fabricaba uniformes de fútbol propiedad de un cronista local muy conocido por aquella ciudad.

A pesar de la disposición de la Femexfut se pudo encontrar que el mismo equipo León durante la temporada 1983 – 84 colocó el primer anuncio publicitario en su playera, se trataba de la marca de aceite lubricante automotriz Bardahl.

Hasta mediados de los años ochenta, todos los equipos mandaban hacer sus uniformes con pequeños comerciantes casi siempre locales, que a pesar de tener su marca registrada y con cierta imagen “corporativa” no acostumbraban poner su logotipo en alguna zona exterior de las prendas.

Las marcas locales que confeccionaban los uniformes de los equipos de primera división muchas veces eran propiedad de ex futbolistas y vendían a los equipos los uniformes que necesitaban a lo largo de la temporada y prácticamente ninguno presumía públicamente ser el proveedor oficial.

Por ejemplo la marca deportiva Rigg muy pocos aficionados la han escuchado mencionar, sin embargo era ésta quien confeccionaba los uniformes de Cruz Azul de los años ochenta.

Miguel Ángel Cornero al final de un entrenamiento en el Seminario Menor de Acoxpa. En la playera se observan sólo seis estrellas pues el séptimo campeonato se lograría a la siguiente temporada: 1979 – 80.

La marca que confeccionaba los suéteres para los porteros de Cruz Azul era Danell que tenía un pequeño local comercial en la calle Dr. Vertiz de la colonia Narvarte. Aquí vemos a Carlos Rafael

Novoa, uno de los tantos cancerberos que llegó a Cruz Azul después del retiro de Miguel Marín. Llegó a Cruz Azul en la temporada 1983 – 84 procedente del Atlético Potosino.

Uno de los porteros extranjeros más reconocidos por la afición mexicana fue Miguel Marín Acotto, arquero argentino que siempre jugó para Cruz Azul y que en los últimos años de su carrera decidió utilizar en partidos oficiales sueteres a rayas que eran los jerseys de la selección de Rugby de su natal país, también conocidos como Pumas. Con ese mismo suéter se retiró y Ricardo Ferrero, otro portero argentino lo heredó en esa temporada. En esta foto vemos al equipo de rugby argentino jugando con el mismo jersey que usaba Miguel Marín.

Otra marca bastante conocida en aquellos años era Famax, creada por los hermanos Fausto y Max Prieto dos ex jugadores de las Chivas del Guadalajara. Fundada en 1939, tuvo su apogeo en los años setenta y llegó a venderle los uniformes en distintos momentos a todos los equipos de Jalisco de aquel entonces (Atlas, Chivas, U de G, UAG, Jalisco y Oro) Era muy conocida como la marca de la banderita.

Uno de los uniformes más conocidos del fútbol mexicano fue el de las Aguilas del América con una letra “v” en el pecho y el escudo en el centro. Ese uniforme era marca Reyher propiedad del ex jugador chileno Carlos Reinoso y del directivo del club Panchito Hernández quien estuviera desde 1969 a 1996; durante su gestión llegaron jugadores importantes como los argentinos Héctor Miguel Zelada, Norbertos Outes, Eduardo Bacas y Daniel Brailovsky, así como los brasileños Edu y Cecilio de los Santos.

El caso del equipo Atletas Campesinos fue muy sonado ya que se consideraba publicidad la impresión de un tractor en la playera del quipo recién ascendido en la temporada 1980 – 81. El dueño del equipo pagaba en el periódico Ovaciones desplegados para que se permitiera y nada de eso tuvo efecto. Por cierto el dueño al no recibir el visto bueno por parte de la federación para utilizar el uniforme con colores de la selección nacional, tuvo que optar por un elegante jersey a rayas como el del Inter de Milán.

Véase esta playera de la U de G de mediados de los años ochenta donde en el interior de la prenda viene la etiqueta fabricada por la marca Reyher y en exteriores contiene el logotipo de la marca inglesa Power.

Para la temporada 1985 – 86 ya eran varios los equipos que insistían en utilizar publicidad en sus uniformes y la Femexfut finalmente cedió. Aquí vemos en la foto al Atlético Morelia de esa temporada con el patrocinio de Martí y la indumentaria marca Adidas.

Otras marcas conocidas de los años setenta y ochenta fueron Chagar (Pumas) Agip Sport (ropa de concentración Cruz Azul 1980 – 1982) Eder (Cobras 80´s) Brio (Tampico) Hidgui (Pumas) etc.

En la temporada 1984 – 85 el equipo Tampico Madero traía Brio en su uniforme

En 1993, la marca Pony que seguía diseñando el uniforme del equipo Tiburones de Veracruz crea un nuevo modelo, en donde incluyó unos novedosos vivos en las mangas, y por primera vez apareció publicidad en el jersey, que fue la conocida refresquera transnacional Coca-Cola. Este uniforme fue presentado en el marco de un partido amistoso ante el club español Atlético de Madrid en la cancha del Estadio Luis "Pirata" Fuente, en donde en el primer tiempo se presentó el clásico azul con rojo, y en la parte complementaria el diseño todo en blanco.

Por cierto el futbol mexicano se jugaba con diferentes balones hasta el año de 1977 que se comenzaron a utilizar de manera formal los balones marca Garcís. Balones Estrella, Súper Crack, Cosmos, etc. Eran solamente algunas famosas marcas de la época.