La Historia del helicóptero que ametralló Teniente Ortiz

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Basado en un relato del combatiente Luis Honores GuangaPor Jenner Baquero

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  • LA HISTORIA DEL HELICPTERO QUE AMETRALL EL DESTACAMENTO TENIENTE ORTIZ

    BASADO EN EL RELATO DEL COMBATIENTE LUIS HONORES GUANGA

    Por Jenner Baquero

    Me encontraba con el pase prestando servicios en el Batalln de infantera Nro. 63

    Gualaquiza. Como comandante de la batera Antiarea estaba el Capitn Alexander

    Levoyer; por entonces estaba yo comisionado para dar proteccin al espacio areo en el

    sector de responsabilidad del Batalln de Infantera Nro. 61 Santiago.

    Por orden de mi comndate de batera me desplac con mi unidad de tiro al Destacamento

    Teniente Ortiz el 20 de Enero de 1995 en el sector de Cuzumaza donde el 27 de enero a las

    6 de la maana fuimos atacados por unidades peruanas en los puestos avanzados del

    destacamento producto del cual result herido en la pierna el soldado pillareo Hctor

    Pilco; aunque ste valiente combatiente fue evacuado al destacamento y luego al batalln

    morira poco despus a consecuencia de complicaciones en esa herida.

    Las Fuerzas Ecuatorianas abrimos fuego contra las fuerzas peruanas durante todo el da 27,

    utilizando ametralladoras y morteros de 60 mm y 81mm. Al da siguiente continuaban los

    ataques enemigos con helicpteros artillados sobre el destacamento Soldado Monje pero

    no se registraron bajas de nuestro lado.

    La guerra segua el da 29; en medio de la tensin en esa selva en disputa dieron las 7 de la

    maana cuando me llam el comandante del destacamento mayor Pablo Burbano para

    decirme con suma gravedad que inteligencia militar le haba informado que nuestro

    destacamento sera atacado: Honoresprepara los misiles para la defensadebes estar

    listo para cualquier sorpresa del enemigomantente alerta orden; yo solo atin a decirle

    con nerviosismo pero con firmeza que le iba a demostrar a la patria que los soldados

    ecuatorianos somos buenos profesionales; me mir por un instante con satisfaccin y luego

    se alej con andar preocupado pero con seguridad.

    Reun a mis subordinados y les dije que no debamos tener miedo de nada: todos unidos

    saldramos adelante en esta complicada lucha; entonces seleccion el mejor misil para no

  • fallar y me mentalic en que debera dar una gran y sbita sorpresa al enemigo atacante;

    comenc a realizar ensayos de disparouna y otra vez; no quera que mis sentidos se

    embotasen en el momento decisivo.

    Ms o menos a las 10:30 de la maana en la enmaraada y catica selva se comenz a

    adivinar con ms y ms precisin el sonido de helicpteros que se acercaban pero no se

    los poda ver; todos nos mirbamos a los ojos tratando de explicar lo que suceda, pero sin

    palabras; la tensin era intensa en el destacamento; luegoalgo asomaba detrs de los

    rbolesera una pequea nave: No le dispares a esadjala pasardetrs viene un

    helicptero grande; escuchaba yo los latidos de mi corazn en los odospequeos

    retumbos de tamborrespiraba aceleradamente y estaba empapado de sudor el sonido

    de motores era ahora intenso pero no apareca mi blancolos segundos se hacan eternos;

    ser que le acierto?...si no doy en el blanco seremos enganchados y barrern con todo el

    destacamento, mis manos estaban sudorosas y mi corazn bata a des ritmo; se senta la

    sangre en mis orejas como lavame quemaba la cara hasta la cabeza y el cuellorespiraba

    profundamenteall estall est gritarones un helicptero enormedesde las

    puertas se divisan las ametralladoras vomitan fuego sobre nuestro pequeo

    destacamentotiros intermitentes y percusivos ojal nadie est heridodispara

    Honoresdisparaaaapor Dios disparaaa me gritan mis compaerosDios

    moperdname por lo que haraydame, enganch el misil, tragu saliva; sta resbal

    por mi garganta secaapunt y Booooom; el rebufo de candela caliente impuls el misil

    que sali disparado dibujando una gran estela; llevaba su recado de muerte y destruccin;

    era el costo de la guerra; el helicptero fue impactado de lleno dejando un brillo

    instantneo y deslumbrante; la nave comenz a descender lastimeramente cayendo en la

    selva impenetrable y hostil provocando una terrible explosinnos quedamos perplejos por

    unos momentos; entonces tom otro misil para dispararle al helicptero pequeo pero

    perd la visibilidad de ste; apenas all me di cuenta que mis camaradas gritaban de

    alegrasonre con satisfaccin y di un gran respiro de alivio; luego enseguida todo el

    mundo comenz a disparar con lo que tuviese a la mano pues estbamos an en combate;

  • la lucha dur hasta el medio da; estbamos exhaustos. Ms tarde todos los soldados me

    venan a felicitar por el derribo del helicpterohabamos cumplido con la patria.

    ARTILLERO CON ALMA DE GUERRERO Y CORAZN DE ACERO

    En la foto: Luis Honores Guanga en posicin de tiro del lanzamisiles Igla durante la guerra del Cenepa

  • Luis H. Guanga (con terno y banda roja) en una recepcin con el presidente Correa en Carondelet.