La honestidad y la sensibilidad social, perjudican a los
parlamentarios?Vicente Brunetti
El amigo Enrique Careaga me envi el siguiente texto. Despus de
hacerle unos pequeos cambios, y agregarle la ms que alusiva y
oportuna caricatura de Langer, comparto con Ustedes.
EL PELUQUEROUn da, un florista fue al peluquero a cortarse el
pelo. Luego del corte pidi la cuenta y el peluquero le contest: -
No puedo aceptar dinero. Esta semana estoy haciendo un servicio
comunitario. El florista qued agradecido y dej el negocio. Cuando
el peluquero fue a abrir el negocio, a la maana siguiente, haba una
nota de agradecimiento y una docena de rosas en la puerta. Luego
entr un panadero para cortarse el pelo, y cuando fue a pagar, el
peluquero respondi: - No puedo aceptar dinero. Esta semana estoy
haciendo un servicio comunitario. El panadero se puso contento y se
fue. A la maana siguiente cuando el peluquero volvi, haba una nota
de agradecimiento y una docena de medialunas esperndolo en la
puerta. Ms tarde, un profesor fue a cortarse el pelo y en el
momento de pagar, el hombre otra vez respondi: - No puedo aceptar
dinero. Esta semana estoy haciendo un servicio comunitario. El
profesor con mucha alegra se fue. A la maana siguiente, cuando el
peluquero abri, haba una nota de agradecimiento y una docena de
diferentes libros, tales como ' Cmo mejorar sus negocios' y 'Cmo
volverse exitoso'. Entonces un parlamentario fue a cortarse el pelo
y cuando fue a pagar y el peluquero nuevamente dijo: - No puedo
aceptar dinero. Esta semana estoy haciendo un servicio comunitario.
El diputado contento se alej. Al da siguiente, cuando el peluquero
fue a abrir el local, haba una docena de parlamentarios haciendo
cola para cortarse el pelo gratis. Esta ancdota, muestra la
diferencia fundamental que sigue existiendo actualmente entre la
ciudadana comn, honesta y socialmente sensible, versus los miembros
del Honorable (?) Congreso de la Nacin. En las prximas elecciones,
aparecern los impresentables de siempre, junto a los nuevos
impresentables, as como los chuppteros habituales, enredados con
los narcoparlamentarios y con los narcos que ansan ser, tambin,
parlamentarios y algo ms. Es hora de entender que es el voto
ciudadano el que posibilita la toma del poder por parte de los
delincuentes, los chuppteros y los inescrupulosos. Es hora de votar
eligiendo a los mejores. Porque los peores, ya han hecho un
esfuerzo titnico por demostrar su voracidad y rapacidad personal.
Atentamente, El Peluquero
