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La lucha de clases, es siempre una guerra encubierta. (Miguel Enríquez, Comandante de la Revolución Chilena) Hay que tener en cuenta que el imperialismo es un sistema mundial, última etapa del capitalismo y que hay que batirlo en una gran confrontación mundial. La finalidad estratégica de esa lucha debe ser la destrucción del imperialismo. (Ernesto Guevara, Comandante de la Revolución Indo Americana) EDICIÓN Nº 2, OCTUBRE 2008

La lucha de clases, es siempre una guerra encubierta. · desconocimiento que existe, con respecto a cual es realmente EL ENEMIGO a enfrentar, la composición, ... la clase y de los

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La lucha de clases, es siempre una guerra encubiert a.

(Miguel Enríquez, Comandante de la Revolución Chile na)

Hay que tener en cuenta que el imperialismo es un s istema mundial, última etapa del capitalismo y que hay que batirlo en una gran confrontación mundial. La finalidad estratégica de esa lucha debe ser la destrucción del imperialismo.

(Ernesto Guevara, Comandante de la Revolución Indo Americana)

EDICIÓN Nº 2 , OCTUBRE 2008

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Sin teoría revolucionaria,

no puede haber movimiento revolucionario (LENIN) En la Edición anterior de TRINCHERA MÓVIL, dimos a conocer nuestro planteamiento respecto al estado de situación del Capitalismo, en su fase suprema, el Imperialismo. En esa ocasión realizamos un diagnost ico, donde enfatizamos la atención a las actuales contradicciones Inter-imper ialistas y las repercusiones que a partir de ellas, veríamos suceder. Nuestra intención ha sido, iniciar una lucha ideoló gica desde posiciones revolucionarias, que emergen desde nuestro pueblo y desde la Patria Grande. Lucha enmarcada en la batalla de ideas, frente a la ideología dominante burguesa y pequeño burguesa imperante, la cual, lamentableme nte ha penetrado las filas del movimiento popular y revolucionario; manejados por nuestro enemigo de clase, el cual llega al extremo de financiar institutos de análisis y estudio, con supuesto “carácter marxista”, intelectuales revisio nistas, todos fomentados por dineros de la NED, la Fundación Ford, Amnistía Inte rnacional y un sin numero de ONGs; las cuales funcionan, con dinero entregado po r los Estados imperiales, teniendo como objetivo último, el retraso de nuestr os pueblos en la toma de conciencia de clase. En esa Primera Edición de TRINCHERA MOVIL, planteamos desde una posición de clase, que los revolucionarios no debíamos dejarnos encantar por cantos de sirena, y dejar de repetir el discurso burgués, de la existencia del “libre mercado” o del “neoliberalismo”; fundamentamos la a ctual fase de la Formación Económico-Social capitalista, como una etapa monopo lista y que a ésta, le corresponde una ideología fascista. Y que por lo ta nto, el enfrentamiento del campo popular, es contra toda la maquinaria institu cional fascista y la única salida que deja el capitalismo actual, es que los e xplotados y los pobres del campo y la ciudad, diseñen de una buena vez su prop ia estrategia político-militar. Siguiendo en esta lucha ideológica, en esta oportun idad, queremos dar a conocer los lineamientos y métodos doctrinarios por los cua les llagamos a determinar el diagnostico y análisis de la realidad histórica pla nteados, poniendo especial relevancia a las situaciones concretas y a la mater ialidad de los procesos; ello definido por un método y una ideología; el Marxismo -Leninismo y una concepción Político-Militar. Según nuestro juicio, si existe algo que no podemos abandonar y dejar que el enemigo celebre, es nuestra teoría revolucionaria, el Marxismo-Leninismo. Ello por una razón fundamental; es la única que, no sólo posibilita una interpretación acertada de los procesos históricos- naturales, sino también, proporciona elementos que permiten proyectar desde un piso real y no sobre meras hipótesis idealistas. Entonces, ¿Por qué abandonarl a y dejar ciegos nuestros pasos?, ¿Por qué no reconocer que sin teoría revolu cionaria es muy difícil avanzar y a la vez, apostar por la vida? No bastan las buenas intenciones, ni si quiera el hambre; no podremos tener unidad, profund idad en el avance sin esta guía, sin el Marxismo-Leninismo.

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En primer lugar, esta doctrina revolucionaria es la única capaz de tener el punto de vista de la totalidad y a la vez, de su mo vimiento; ésta plantea certeramente las determinaciones materiales, que en última instancia, permiten orientar hacia la superación de esta realidad y no perderse en el mundo de las ideas; acierta las contradicciones y por ende, cond uce por el camino que permite encontrarlas y estar preparados. En definitiva, es la única teoría de clase que apuesta a nuestro favor. Sin embargo, el Marxismo-Leninismo no es una sumato ria de libros, tampoco un conjunto de categorías basadas en simples supuestos teóricos y menos ideas de unos hombres que vivieron hace unos siglos. Es y debe ser nuestra teoría revolucionaria porque es capaz de autoconstatarse e n la práctica todos los días . Esta última afirmación es tan dialéctica que nos ob liga a realizarla en una Formación Económico-Social (FES) concreta; no basta con referirnos a la sociedad en general, al imperialismo en general, a la explot ación, a la pobreza, al Socialismo, sin ver sus detalles e interconexiones, sus particularidades y generalidades. Nuestro desafío, entonces, consiste en representar la mediación entre la práctica y la teoría de tal forma que, nuestro acci onar realmente represente el interés de clase. Este equilibrio supera, por un la do el dogmatismo, el revisionismo y por el otro, el voluntarismo y la im provisación. Muchos lo han abandonado y no nos cabe duda que hay un gran porcentaje de debilidad ideológica ya que el trasfondo contiene u n cambio en el interés de clase, o simplemente, el desgano de no auto-formars e como cuadro revolucionario, capaz de avanzar de manera comprometida en todos lo s ámbitos. Además del desconocimiento que existe, con respecto a cual es realmente EL ENEMIGO a enfrentar, la composición, la moral y las capacida des de NUESTRAS FUERZAS, como asimismo el TERRENO donde se van a dar los encuentr os.

Nuestro enemigo es muy hábil y pretende engañarnos, levantando discursos y teorías seudo revolucionarias que son tomadas y ena rboladas por sectores débiles ideológicamente, que usan un “discurso revolucionar io”, pero considerando una cuota de “diferencia”, en su creación teórica; por ejemplo, se habla de Socialismo, pero “del siglo XXI”; se habla de Revol ución, pero minusvalorando la experiencia Cubana, China o Rusa, por considerarlas “extemporáneas”. En definitiva, lo único que busca nuestro enemigo, es dilatar la toma de conciencia de los pueblos, con estas estratagemas y posiciones adelantadas, sobre todo cuando en la actualidad los servicios de inteligenc ia de cada uno de nuestros países son monitoreados e inducidos por la intelige ncia Estadounidense y/o Israelí y estos a su vez por la FED y el club de Bi lderberg.

Las necesidades y aspiraciones de los pueblos, dist an mucho de las recetas implementadas, como medidas salvadoras por sectores llamados progresistas, que actúan bajo los marcos burgueses, incapaces, en ult ima instancia, de enfrentar y derrotar a un enemigo que cuenta con los recursos f inancieros, militares y tecnológicos como los que manejan la FED y sus títe res; el no poseer una estrategia político-militar, ante tal enemigo, es u n acto genocida.

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En consecuencia nuestra práctica Político-Militar - desde una mirada de clase- está obligada a responder a esta práctica del enemi go, pues la organización, composición y disposición de sus fuerzas, se encuen tran en todas las esferas, orientadas a mantener y reproducir ampliadamente el capital y su dictadura de clase. Por lo tanto, para ellos la política, las id eas, el arte, las organizaciones sociales, todo, en tanto sea posible , es conducido desde los aparatos de inteligencia.

Por último, y en conclusión, no podemos ser derroti stas porque nos jugamos la vida y el planeta, no podemos entregarnos a batalla s perdidas, porque nos jugamos la guerra.

Por lo tanto, el pueblo con su vanguardia, y no nue stro enemigo, serán los que decidirán -dependiendo del transcurso de nuestra ma rcha- si es necesario eliminar, neutralizar o evadir y continuar la march a, en pos del objetivo estratégico. Nosotros elegiremos qué combates, bata llas o campañas daremos; no las inducidas y planificadas por el enemigo.

Para lograr lo anterior, una vanguardia cumple una función trascendental; garantizar la marcha y permitir la introducción en combate de las fuerzas principales, es decir, el pueblo. Además, media ent re los grupos mayoritarios de la clase y de los pueblos oprimidos, marginados y l a transformación de los aparatos políticos-militares en gestores para la co nstrucción y la defensa del socialismo, antesala del comunismo.

El imperialismo como fase superior del capitalismo, apuesta todas sus cartas para sobrevivir y nosotros las nuestras para vivir .

Con el PUEBLO, como Fuerza Principal Político-Milit ar, Con la vanguardia creando CONCIENCIA Revolucionaria y Con el FUSIL, como guía de la lucha histórica y con stante.

Con estos componentes, mas el arte de la guerra que debemos desarrollar, es lo que nos permitirá el uso correcto y la medida justa de nuestras fuerzas; métodos, terreno, blancos etc. Esto nos permitirá l a victoria, el logro de nuestra estrategia y el cumplimiento de nuestros ob jetivos.

POR LA RAZON Y LA FUERZA, LOS TRABAJADORES AL PODER

SÓLO PODEMOS LA VÍA REVOLUCIONARIA

COMBATE O MUERTE

Movimiento de Izquierda Revolucionaria – Ejército Popular Revolucionario

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ANÁLISIS DE SITUACIÓN POLÍTICO-MILITAR MARXISTA-LEN INISTA

INTRODUCCIÓN

Miguel Enríquez, el Comandante de la Revolución chilena, planteó que la lucha de clases, es siempre una guerra encubierta , y como toda guerra define espacios de acción y movimientos (el terreno) y los diversos actores que intervienen en ella (el enemigo y nuestras fuerzas).

Sin embargo, la realidad que vivimos a diario, en todo ámbito, no se expone de manera clara, perceptible, ni menos aún se nos muestra de manera ahistórica, ni neutral, por el contrario; para poderla comprender, leer y hablar, lo hacemos desde un significado contextulizado. Ello mediado, además, desde las ideologías que la expresan desde una posición de clase.

Es así que nosotros, al utilizar la ideología marxista-leninista, configuramos los procesos históricos-naturales desde esta específica forma de concebir la realidad; para la cual, es fundamental, desde su lógica definitoria, atender a los procesos materiales en su movimiento dialéctico.

De lo contrario, desde un punto de vista burgués, ven los acontecimientos separadamente, no aprecian la unión contradictoria, y se refieren, por ejemplo, a la “pobreza” solamente, como si ella brotara de sí, y por lo tanto, las consecuencias de cómo se enfoca la misma realidad llamada “hambre”, cambia radicalmente.

La sensatez del Marxismo-Leninismo se la da una de sus premisas que sostiene que no es serio “inventar”, buscar o crear situaciones y categorías fuera del terreno histórico real, porque no explica la práctica partiendo de la idea; por el contrario, es la práctica material , donde se determina, en ultima instancia, el desarrollo de la lucha de clases y en definitiva los pasos que debemos dar en esta guerra. En ese aspecto, los verdaderos revolucionarios jamás deben abandonar el terreno del análisis y síntesis cuidadoso de las relaciones de clase, al valorar una situación dada, deben partir NO de lo posible, sino de lo REAL .

Para interrelacionar lo anterior en un real contexto, resulta necesario: A- MIRADA DESDE LA TOTALIDAD: El Marxismo-Leninismo es una teoría capaz de dar explicación a la totalidad de lo que sucede y para ello ha establecido una estructura de síntesis y análisis. Marx expresa la totalidad diciendo que “… el conjunto de estas relaciones de producción forma la estructura

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económica de la sociedad, la base real sobre la que se levanta la superestructura jurídica-política y a la que corresponden determinadas formas de la conciencia social” , explicando de paso el movimiento de ésta (1) . Este hilo conductor de su trabajo, como él lo denomina, le ayudó, metodológicamente, a la verificación en su estudio de los distintos modos de producción anteriores y a posibilitar las proyecciones verificables hoy, tales las derivadas de la contradicción capital trabajo y la configuración del imperialismo como lo detalló en todos sus elementos esenciales de manera muy científica Lenin.

Actualmente : Es el estudio del imperialismo en su movimiento presente, los procesos de monopolización, las contradicciones generadas entre el capital financiero-especulativo y el capital productivo-real, cuál es el estado actual de las fuerzas productivas y de las relaciones sociales; las expresiones de esta realidad, en la superestructura política, por ejemplo, como lo señaláramos en la Primera Edición de TRINCHERA MOVIL,

respecto del fascismo, como la representación política de los Estados que administran, ya no los capitales productivos nacionales, sino representan la localización de estas esferas mundiales de poder; son Estados monopólicos. Por consiguiente, un fascismo entendido como el reflejo del imperialismo en su expresión política no coyuntural, sino consustancial (2) . B- MATERIALISMO- DIALÉCTICO. Esta unidad considera: la determinación de aspectos materiales de la sociedad, es decir, la práctica , y no la materia como átomos, bienes, sino como proceso de la producción ; del cómo la sociedad produce en un momento determinado , lo que sucede fuera e independiente de las voluntades de los hombres que referimos en el acápite anterior. Sin embargo, la dialéctica nos orienta, el movimiento preciso y certero de estos procesos materiales, e incluso de la totalidad; nos obliga a mirarlos de manera interrelacionada y no estática; considerar la relación contradictoria que existen como unidad; no se puede erradicar la pobreza, sin hacer lo mismo con la riqueza. La consideración de los saltos cualitativos nos diferencian de los reformistas que nunca los dan y reproducen el actual orden de cosas con participación política sin leer los procesos superadores necesarios; las síntesis. Asimismo, debemos atender a los cambios cualitativos, que los procesos dan, producto de las acumulaciones previas. No es posible seguir considerando que los cambios actuales no han modificado elementos que deben ser comprendidos desde la

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lógica Marxista-Leninista y no desde su literalidad. Desde ahí la necesidad de vanguardia conductora a los avances de nuestras fuerzas producto de las condiciones objetivas. Estas, más que considerar la cantidad de pobreza y lo que ello implica, apunta a considerar la agudización de las contradicciones materiales del capitalismo que señalamos anteriormente. Condiciones dadas en la base material , y como pensamos dialécticamente diremos que, la síntesis de la lucha de contrarios (estados revolucionarios), es el salto de avance, donde las condiciones objetivas, expresan esa situación como interpretación de la historia, la que no provienen de inventos en nuestras cabezas (no nos sentamos a planear como sería un mundo ideal, ello sería un idealismo).

C- OBJETO ESPECIAL, LÓGICA ESPECIAL: Un análisis y síntesis serio y profundo de la situación, debe establecer el estudio concreto de la situación concreta, la necesidad de no dormirse en un solo momento del proceso, de recurrir a la historia, pero estudiando las nuevas condiciones objetivas del presente. Todo desde una posición clasista y una óptica político-militar, ya que corresponde al tipo de accionar que se dan los elementos que intervienen en la realidad actual.

Lenin planteaba que si no se consideraba lo anterior, acecharían los vicios de la inercia, de la miopía, la posibilidad de adormecerse. A veces, los nuevos acontecimientos pasan delante de los ojos y no se los ve. Es notable la dialéctica en el análisis y manejo concreto de la situación concreta, en el estudio riguroso de la correlación de fuerzas en el plano nacional e internacional, eliminando determinismos antojadizos, no concretos e idealistas… el marxismo exige de nosotros un análisis estrictamente exacto y objetivamente verificable de las relaciones de clase y de los rasgos concretos propios de cada momento histórico.

Este revolucionario reconoce el aporte de MARX cuando refiere a la formación económica social FES (ver Primera Edición de TRINCHERA MOVIL), pues esta interrelación entre la base económica y superestructura es histórica, de ahí que Marx desecha referir la sociedad en términos abstractos y generales, como lo hacen los sociólogos y economistas burgueses.

Mario Roberto Santucho, planteó que la utilización correcta de la teoría depende del "punto de vista" con que se aplica. Sólo ubicándose en el punto de vista del proletariado la clase a que corresponde tal ideología y teoría científica de la revolución, se puede obtener el resultado correcto. Por ello, cuando hablamos de marxismo-leninismo, que a decir del revolucionario argentino, no es otra cosa que la acumulación del conjunto de las experiencias prácticas de la Revolución y de los elementos de análisis científicos de la sociedad, que surgen del conjunto de la práctica social , de paso nos estamos

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refiriendo a una ideología que establece una visión de mundo, que expresa y entiende a ese mundo, pero también es un instrumento para transformarlo. D-CONDICIONES SUBJETIVAS De las condiciones objetivas, provienen los factores subjetivos, que a decir de Lenin, se circundan en la esfera de acción de la estrategia y la táctica , considerando siempre los elementos que surgen, que se forjan en el estudio riguroso de las condiciones objetivas, que emergen de la situación histórica concreta y de la correlación de fuerzas entre las clases, dentro del país y en el ámbito mundial.

La claridad ideológica, trae consigo, otro elemento fundamental. Este se refiere a la necesidad de que exista una conciencia de clase que permita entender lo que está pasando, entender que la miseria del mundo, las carencias, la opresión y marginación de nuestros pueblos, viene dado por las contradicciones fundamentales del capitalismo, que como dijimos, se dan en la base material. Elemento esencial de entender, ya que por lo tanto, lo que hay que revolucionar, viene dado por la base material, la que al mismo tiempo, a partir de sus contradicciones, nos señala la clase revolucionaria, que es la que participa de las contradicciones esenciales de la lucha de clases.

E-LA PRÁCTICA ES LA QUE DETERMINA LA VERDAD DEL MARXISMO-LENINISMO

Por último hay que reconocer que el Marxismo-Leninismo es una teoría que guía nuestra lectura de la realidad y da los elementos para su modificación. Nos indica la

imperiosa necesidad de asimilar la verdad indiscutible, que un revolucionario no puede dejar de considerar; la materialidad de los procesos, los acontecimientos exactos de la realidad, y no aferrarse a una teoría de antaño, que, como todas las teorías, a lo sumo solo esboza lo fundamental y lo general, solo se “aproxima” a abarcar la vida en toda su complejidad. Tratar a la antigua el problema del presente, es sacrificar al Marxismo-Leninismo viviente a la letra muerta; “la teoría, mi amigo, es gris, pero el árbol eterno de la vida es siempre verde”. Ante ello los precursores del Marxismo-Leninismo, siempre plantearon que “nuestra doctrina no es dogma, sino una guía para la acción”, criticando a quienes mecanizaban formulas que siempre deben ajustarse y modificarse a la situación política, económica y social concreta de cada periodo particular de un proceso histórico.

Criticando enconadamente a quienes históricamente han seguido r epitiendo sin sentido, fórmulas aprendidas de memoria, en lugar de

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estudiar los rasgos específicos de la nueva situación, de la realidad viva.

Decíamos, que la ideología burguesa entiende la realidad, como si fuera ajena a nosotros, ahistórica; esta es la forma de ver de la clase dominante, donde lo grave radica, en que sectores débiles ideológicamente, hablen, piensen y sienten, como habla, piensa y siente, la clase dominante (3) . Es ahí donde se producen las confusiones, al transmitir muchas ideas “que creemos que son nuestras”, pero que expresan una dominación a niveles que no somos capaces de percibir a simple vista. Sólo logramos darnos cuenta, cuales son las ideas de la clase dominante, cuando tenemos de referencia ideas que no son iniciadas desde ella, como en este caso lo es el marxismo-leninismo . Él nos ayuda a entender desde el punto de vista revolucionario. Él es un instrumento para entender la realidad y modificarla. También decimos que nos aporta una ayuda científica porque es fundamentado tanto en sus aspectos filosóficos, económicos, políticos y militares. Por ello, cuando nos decimos Marxistas-Leninistas, debemos ser cuidadosos, en el estudio de sus categorías, ya que estamos frente a un método, donde la fuente del conocimiento proviene de la propia práctica, que es la actividad transformadora del mundo. Estamos frente a una teoría que es esencialmente revolucionaria, y hasta el momento, es la única que nos puede conducir a transformar las estructuras de la sociedad y realizar un cambio radical, que termine con la explotación de unos contra otro, es decir, de una clase frente a otra.

TERRENO

La Formación Económico-Social Capitalista, como toda FES sustentada en la lucha de clases, tiene un comportamiento dialéctico constructivo y destructivo. El capitalismo-imperialista, debido a su proceso de acumulación y concentración de capital, ha desarrollado enormemente sus fuerzas productivas, por otro lado, ha llevado a que sus propias fuerzas destructivas asociadas a su reproducción, están propiciando un desastre planetario sin parangones en la historia de la humanidad. Hoy nos encontramos con una crisis medio ambiental sin precedentes y con un gran porcentaje de la humanidad sobrante, inútil para la reproducción del capitalismo, ya que no se pueden integrar, ni siquiera como mano de obra esclava.

Un planteamiento marxista-leninista establece que la competencia entre los monopolios, trae la concentración, tesis que la misma práctica ha confirmado como ley; esto se cumple a cabalidad en este

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capitalismo-imperialista ya que al concentrar la propiedad en su magnitud más elevada, la concentración entra en contradicción con las relaciones de cambio y se abren las posibilidades para dar paso a una nueva formación económico social.

Cuando desde esta trinchera hacemos referencia al TERRENO, donde se está llevando a cabo esta guerra de clases, nos referimos precisamente a esta Formación Económica Social, llamada Capitalismo y su fase suprema: el Imperialismo Monopolista, que en estos momentos se desarrolla hegemónicamente, utilizando al capital financiero como punta de lanza. Estableciendo nítidamente, la esencia del capitalismo y sus contradicciones fundamentales, que al expandirse por el mundo y concentrarse, se ha hecho más monopolista, agresivo y fascista, desencadenando un sin numero de conflictos bélicos fundamentalmente ínter imperialistas, condicionando de paso, los procesos productivos, la desorganización de los mercados, generando una crisis económica estructural, que lleva varias décadas y que seguirá agudizándose, producto de que la contradicción principal del capitalismo (producción social y apropiación individual) se ha trasladado a todo el mundo por la conocida mundialización de la economía, emprendida por las llamadas transnacionales; donde los monopolizadores del gran capital, desarrollan la dictadura del mercado, que tiene como resultante la deslocalización de la masa obrera, la miseria creciente de la humanidad y la destrucción de los recursos naturales (4) .

Ante ello, lo esencial en estos momentos es analizar, las resultantes provocadas por la contradicción principal de esta FES capitalista, donde lo más relevante es comprender que el conflicto inter-imperialista se acrecienta, expresándose directamente en el concepto fundamental de las contradicciones planteadas por el antagonismo entre clases (capital y trabajo asalariado), a escala mundial y al interior de las clases dominantes entre los múltiples capitales transnacionales, representados por los Estados Imperialistas, que si bien tratan por todos los medios de evitar que el conflicto se desate en términos directamente "territoriales", irremediablemente esto se está produciendo y para esa contienda, se preparan las grandes potencias imperialistas. En ese terreno, debemos prestar atención a múltiples factores, que últimamente se vienen desarrollando y que se están transformando en elementos catalizadores de los actuales conflictos.

Uno de ellos tiene que ver con la crisis energética, que debido al incremento en más de un 50% en el transcurso de los próximos 20 años, se ha transformado en la base fundamental de la reproducción

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imperialista, por lo tanto quien maneje estos recursos, hegemonizará los destinos del desarrollo imperialista. Por eso, es que preocupa tanto al imperialismo europeo y principalmente estadounidense, la arremetida de la demanda asiática, especialmente la de China (5) . El otro conflicto ínter imperialista, tiene que ver con la mantención del sistema financiero mundial. Esto ya lo estamos apreciando en la actualidad cuando vemos aparecer la contradicción Inter-imperialista, entre el capital financiero y el capital productivo. El primero, actúa como fracción dominante en estos momentos, con la característica de no poder sustentarse, al no tener un respaldo en la economía real -aquella que se basa en el valor creado en los procesos productivos- ya que en esencia el capital financiero, se nutre de inversiones especulativas y ficticias. En esta fase monopolista del capitalismo vemos como las inversiones financiero- especulativas, crecen por sobre las productivas, llegando a los desequilibrios financieros, como los que vemos en estos momentos, donde han tenido que actuar los Estados imperialistas para oxigenar –dar liquidez- al sistema financiero mundial (6) . Quedando en evidencia el carácter intrínsicamente monopolista de esta fase del capitalismo, ya que los monopolios “salvados” por la “oxigenación imperial” comenzaron inmediatamente su cacería carroñera, con quienes fueron quebrando y quedando en el camino, dejando a la luz el otro conflicto interimperialista, que tiene que ver con la imposición del factor moneda (7) .

EL ENEMIGO Para entender el accionar de nuestro enemigo de clase, es necesario realizar una adecuada lectura del actual proceso y no dejarnos embaucar. Debemos recalcar, que en esta guerra de clases, nos encontramos en la fase imperialista del capitalismo y que este, se ha transformado en un régimen planetario, donde la concentración de la producción, está en unas pocas manos, es decir, es más monopolista que nunca. Podemos ver en la realidad concreta, que no existen las tan manoseadas “libertades de mercado”, artilugio para definir lo que llaman “neoliberalismo”, algunos progresistas, embaucados por el discurso burgués y la propaganda constante de las oligarquías financieras, que mantienen controlado el orden económico mundial, a través, de los grupos monopólicos, el Banco Mundial, FMI, organizaciones político-militares como la OTAN, OEA, ONU, etc. El imperialismo internacional, enemigo fundamental de la humanidad, opera en todo el ámbito del mercado mundial, estructurando el avance del gran capital, el cual, se sirve de la institucionalidad burguesa de los distintos Estados imperialistas del mundo, para desarrollarse. Quienes manejan la economía capitalista mundial, son las grandes transnacionales, las mismas que mandan en Perú, Ecuador, la India, Singapur, EE.UU., Europa, etc. Esto, debido a la fusión de las entidades bancarias con el capital productivo lo que dio origen al capital financiero, formando una oligarquía

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financiera internacional, las que se reparten y disputan el mundo en zonas de influencia para gobernar, dictaminar políticas, saquear recursos naturales y de vida. Por lo tanto, para los revolucionarios resultaría falso, poco objetivo y engañador realizar un análisis, político, económico, sociológico o militar sólo de Chile, obviando la realidad y los acontecimientos del resto del mundo; nuestro país es una pieza más en el engranaje y reparto de zonas de influencia imperialista mundial. Ese rol, nuestro país lo ha jugado históricamente, desde la época de la llegada de los invasores europeos a las tierras indoamericanas, pasando por las administraciones serviles de la oligarquía local, la dictadura militar y continuada por la transición pactada, por lo tanto, quien vino y quien venga sólo administrará las políticas del banco mundial, el fondo monetario internacional y la oligarquía financiera internacional, y el rol de colonias-capitalistas dependientes, no sufrirá variaciones. Nuestro enemigo fundamental, en cada una de nuestras naciones sólo tiene pequeños peones que transmiten lo que les llega desde los centros imperialistas. Lo que sucede en el país es sólo una resultante, de la vorágine capitalista mundial, que para poder entenderlo, actuar y enfrentarlo, es necesario entender la realidad internacional, las políticas que están dictadas desde los centros imperialistas. El despliegue estratégico de nuestro enemigo de clase, lo debemos

entender, inserto en el conflicto interimperialista, donde la lucha de competencias no se detiene y se manifiesta en la guerra económica-militar, en que se encuentran enfrascados hoy, los grandes monopolios y sus vanguardias, los Estados imperialistas; claramente podemos definir como la Comunidad Económica Europea y el bloque compuesto por China, India y Rusia, han desarrollado esencialmente una Estrategia Económica, mientras que Estados Unidos ha decidido una Estrategia de carácter militarista, basado en su complejo industrial militar, sus FF.AA y sus aparatos de inteligencia.

Para entender esto último y ver la importancia de ello, ya que como pueblos indoamericános, nos toca directamente, tenemos que decir que el imperialismo estadounidense se ha desplegado militarmente por todo el

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orbe, dividiendo el planeta en cinco zonas militares, sobre las cuales esta incrementando su despliegue militar. Estas zonas son la región Andina incluida Colombia, el norte de África, Asia central, Medio Oriente y las Filipinas e Indonesia. A ello debemos agregar los nueve comandos de combates , desplegados territorialmente por el imperialismo estadounidense, sus transnacionales y oligarquía financiera, para llevar adelante operaciones de inteligencia, incursiones militares abiertas, invasiones militares disfrazadas de ayudas humanitarias, expansiones de la democracia, justicias infinitas, luchas contra el terrorismo, planes Colombia, Patriotas, etc.,etc. (8) . El Pentágono, por medio de todos sus tentáculos, la CIA por medio de los suyos, el Mossad, los MI ingleses, la OTAN en conjunto, etc., es decir el brazo armado del imperialismo internacional, están en todo nuestro continente, incluido nuestro país, donde la embajada estadounidense es la punta de lanza y el cuartel central las FF.AA. chilenas, que son adiestradas por el Comando Sur, añadiendo a ello, que los militares norteamericanos, están desde hace un tiempo, ocupando dependencias en el norte de nuestro país. La política fascista de las administraciones estadounidenses, tienen su base ideológica en la Doctrina de Seguridad Nacional, desarrollada en las décadas del 70 y 80, manifestándose en la violación constante por parte de los Estados Unidos de sus propios tratados de “convivencia pacífica” e implementando su avance en el Medio Oriente a través de las invasiones y el genocidio del Estado judío contra

el pueblo palestino y la resistencia árabe.

El Fascismo o la reacción política es la ideología que mueve e implementa nuestro enemigo de clase; en la práctica es, tal como lo planteara Galeano, la máquina del miedo, que utiliza la tortura para prevenir “el delito” de la dignidad, y que algunos personalizan en lideres imperialistas, que sólo son la cara visible de una gran institucionalidad que opera a escala planetaria. Es evidente que en tiempos de guerra, las administraciones burguesas, necesitan de la subordinación “pacífica” de las clases oprimidas, del acuerdo irrestricto de las instituciones, organizaciones, partidos políticos, que conforman la institucionalidad fascista, ya que esta viene a ser la defensa en escala real del capitalismo, que al encontrarse mundializado y monopolizado, inevitablemente mundializa y monopoliza su ideología, expandiéndose rápidamente desde los centros imperialistas, a las colonias-capitalistas dependientes.

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El uso de la fuerza está en la genética del imperialismo, ya que como sistema explotador, necesita mantener a raya los mercados, el precio de las materias primas, recursos de todo tipo, incluyendo la mano de obra, la dictadura financiera, etc. Para mantener lo anterior sería imposible lograrlo sino es por medio de la fuerza, combinando medidas políticas, diplomáticas, económicas y militares, o sea el Fascismo reaccionario. A ello debemos agregar la lógica de su accionar, considerando las disputas Inter-imperialistas, que muy bien entienden sus estrategas militares, en el caso de los imperialistas del norte y basados en su “Guía para la Planificación de Defensa”, difundida en 1992, donde establecía que “Estados Unidos debía impedir la competencia de quienes aspiren a jugar un papel preponderante en el ámbito regional o global”, contemplando para ello, el uso de armas nucleares, biológicas y químicas de manera preventiva, “aún

en conflictos en los que los intereses estadounidenses no estén directamente amenazados” ,

abandonando de paso el antiguo modelo “basado en las amenazas” y adoptando el modelo “basado en las capacidades ” .

Los antiguos Fascismos y nacionalismos reaccionarios, como los administrados por Hitler, Mussolini, Franco o Pinochet, fueron adaptados e integrados, en un proceso de superación de la explotación imperialista, hacia nuestra clase; hoy el fascismo se desarrolla como una ideología planetaria, donde la militarización aparece como un elemento central e integrado al proceso productivo mundial, operando además con la ayuda de una serie de nuevos recursos de orden, represión y alineación que pasan a ser instrumentos fundamentales de manipulación de masas; la prensa, radio, internet y principalmente la TV, son controlados por grupos monopolistas y los Estados pro-imperialistas, quienes potencian informativamente una escalada de acontecimientos ficticios o reales, pero que siempre van en beneficio de la implementación de la estrategia del imperialismo, fabricando argumentos legitimadores de la fuerza y la violencia fascista (9) .

En el caso chileno, en el ultimo tiempo, hemos asistido a un sin numero de acontecimientos que vienen a blanquear el accionar de la institucionalidad fascista, contra las incipientes organizaciones que se han rebelado contra el imperialismo; es el caso de el asesinato de carabineros, asaltos a bancos televisados en directo, las publicitadas entregas de armamento por parte de la población, los

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secuestros con resultado de muerte, etc. Mientras en el sur asesinan a comuneros mapuches, persiguen a luchadores sociales, instaurando al enemigo interno, siguiendo la misma practica del imperialismo estadounidense, quienes utilizando el mismo recurso de la “afectación a la seguridad nacional” o el “peligro de los intereses nacionales norteamericanos”, han salido a desplegar su guerra fraticida por el orbe, apoyado por su complejo militar industrial, que transfiere directamente recursos financieros a sus alicaídas arcas.

El imperialismo y su doctrina fascista han desarrollado los llamados “ataques preventivos”, usando la fuerza militar unilateralmente, cuando exista “la mínima sospecha” de que alguien o algo amenace su seguridad, expandiendo de paso las injerencias de sus Fuerzas Armadas, en regiones consideradas estratégicas. Para ello define claramente sus adversarios insertos en “el eje del mal”, ampliamente publicitados por los medios de comunicación imperialistas, como la sátira que se viene tramando con la guerrilla colombiana, que según los agentes fascistas “secuestran mujeres y niños”, pero nada dicen de los miles de combatientes prisioneros en las mazmorras que los Estados fascistas

mantienen, de los millones de desplazados, de los extraditados a Estados Unidos. Basta ver como se viene desarrollando el accionar de la institucionalidad fascista chilena, como cada día se llenan de prisioneros mapuches y luchadores sociales, en las cárceles que el imperialismo mantiene en nuestro territorio. Con esto queremos decir que el enfrentamiento ahora es directo con el imperialismo, ya no existe ese paso intermedio, de las llamadas burguesías nacionales, o lo que también se solía llamar el bloque en el poder; todos en forma transversal son candidatos a ser administradores de la oligarquía financiera internacional. Las disputas que hemos presenciado últimamente, entre los administradores del imperialismo en Chile, debemos encausarla en la disputa Inter-imperialista mundial, que desarrollan su juego de inteligencia, en forma transversal el arco político que juega con las reglas del sistema; los monopolios tienen sus agentes operando, para llevar a uno de los suyos a la cabeza de la administración del Estado. En ese contexto de deben entender las rabietas de Zaldivar y sus colorines, de Flores, de Shaulson y los llamados díscolos. Es todo un juego de espejismos y lo real es que cada uno de estos personajes responde a los intereses de un grupo monopólico en especial; no podemos obviar el carácter fascista del Estado chileno, inserto en la misma lógica del imperialismo internacional, donde el presidente, ministros y congresistas, son meros administradores y operadores de los monopolios (ver análisis al respecto, en la próxima Edición).

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La lucha súper estructural a la que incita el enemigo hoy, está dado por acontecimientos que el mismo sistema genera; la delincuencia, la violencia intrafamiliar, el transantiago, los actos de corrupción, etc. Son la resultante de un sistema basado en la violencia, la explotación y el robo de unos pocos, contra la mayoría trabajadora y de los pobres del campo y la ciudad. Todo es utilizado por la institucionalidad fascista para exacerbar a la población, para de paso manejar los hilos de las políticas imperialistas en Chile; se introdujo la idea que en las poblaciones pobres se engendra la cuna de la delincuencia, el narcotráfico, con altos niveles de alcoholismo, que los pobres son flojos, que no aprovechan las oportunidades ofrecidas; para la burguesía, los pobres del campo y la ciudad, pasaron a ser sinónimo de delincuencia, drogas, alcohólicos, ladrones, lanzas, cuna de cultivo de terroristas. En resumen, mantienen sumido al país en una psicosis, pensando que en cualquier momento será asaltado en la calle o en su casa, el fascismo en Chile tiene una oficina llamada “ Paz Ciudadana” dirigida por el dueño de El Mercurio, quienes determinan las directrices para llenar el país de carabineros, detectives, planes cuadrantes, fomentar el individualismo y el soplonaje. Lo concreto es que el grupo político proimperialista que administra la institucionalidad fascista en Chile, pasa por la crisis generada por su propia base material; el imperialismo internacional. Si bien no existen diferencias conceptuales

de fondo, se ha generado una nueva variante, ya que la característica fundamental, radicaba que al inicio de la transición pactada, el bloque concertacionista, estaba un escalón por sobre la derecha, ya que estos arrastraban “el pecado original” de haber apoyado la dictadura militar. Ahora se ha producido un empate que podríamos calificar de “moral”, ya que la Concertación socialdemócrata bajó el “escalón de ventaja”, al estar al frente de una serie casos de robos, defalco y corrupción, inherentes a un sistema basado en el robo. El “empate moral” del grupo político de la administración imperialista, es el vivo reflejo de lo que representan: Son asesinos y

ladrones, tal como el sistema que representan y

administran: el

Imperialismo-Capitalista. Pero lo concreto es que las contradiccione

s vienen generadas

desde la base material, que es donde debemos prestar atención, y es lo que el enemigo de clase oculta o disfraza. Como botón de muestra podemos decir que la cesantía real en el país fácilmente llega al 20%, que el trabajador temporero sobrevive con salarios abusivos después de ser explotados de sol a sol, que mantienen acorralado al pueblo y lo único que queda algunas veces es robar para comer. Pero quienes están sentados cómodamente en las migajas limosneadas al capitalismo, no lo entenderán jamás…

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NUESTRAS FUERZAS

Sin teoría revolucionaria no hay Movimiento Revolucionario, por lo que se hace prácticamente imposible la conducción de un proceso con esas características, sin ese elemento. Es aquí donde vuelve a cobrar relevancia, la necesidad de mantener una concepción ideológica clara y la configuración de una doctrina que conjugue la teoría y practica como un solo andar. El retroceso del movimiento revolucionario internacional, tiene entre sus causas esenciales, precisamente el haber dejado de lado los principios básicos de la teoría liberadora del marxismo-leninismo.

Su mal entendimiento y aplicación, pasan a ser una de las causales de la derrota ideológica y político-militar, del bloque socialista y los posteriores errores y desviaciones de casi la totalidad del movimiento revolucionario mundial. Este proceso se ve favorecido por el trabajo enemigo, que induce a sectores enquistados desde siempre al interior del movimiento revolucionario mundial, que utilizando a la pequeña burguesía intelectual, comienzan a configurar las diversas fracciones revisionistas y reformistas, que terminan erosionando seriamente los

fundamentos ideológicos del movimiento revolucionario mundial. Esas posturas las podemos observar en la actualidad, insertas en gran parte de sectores denominados progresistas, operando como quinta columna del imperialismo, haciendo eco de posiciones ideológicas que el enemigo necesita impulsar. Esa misma intelectualidad, dicta cátedra y da orientaciones de cómo deben conducirse los actuales procesos sociales en marcha, en nuestra Indoamerica. Levantan teorías supuestamente superadoras del socialismo científico, demonizan el papel de los partidos de vanguardia y de los movimientos guerrilleros, son parte importante en el entramado enemigo, en el desarrollo de la guerra de cuarta generación, al ser penetrada la retaguardia intelectual amorfa, desclasada y entreguista, que reproduce la propaganda fascista, que por ejemplo, limita el conflicto colombiano, a un problema de secuestros y rehenes, que critican como extemporánea la lucha armada, no entendiendo, que no es viable otra alternativa, contra un estado fascistas-narco-paramilitar y que en el ámbito de la guerra las condiciones del tipo y forma de combate las impone el terreno y la disposición de las fuerzas de nuestro enemigo y no la voluntad de una persona, ni mucho menos, de analistas pequeño burgueses, “superadores del marxismo-leninismo”. Por su parte, el Movimiento Revolucionario, debe desprenderse de antiguos vicios y apreciaciones del pasado; comprender que la lucha armada, es una parte de lo militar, que si no son capaces de abordar la

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problemática militar, jamás podrán desarrollar ese tipo de lucha, ni ninguna otra. Lo militar es la esencia, no es una mera elección; es una necesidad que determina finalmente la estrategia, las tácticas, las formas y tipos de combate, los movimientos, la preparación de condiciones, la inteligencia y contrainteligencia. En resumen, determina las cualidades esenciales de un movimiento revolucionario. Por eso es preocupante escuchar a aquellos que irresponsablemente llaman a las masas a la calle, a disponer la autodefensa, a enfrentarse con las fuerzas de choque, etc., sin haber preparado las condiciones reales o previamente haber definido la línea político-militar sobre la cual operar. Desde esta Trinchera, hacemos un llamado a estudiar la lógica de Guerra, sus desarrollos históricos, sus actuales cualidades, sus variantes y sobre esa base configurar y preparar científicamente el Ejército del Pueblo, el que vanguardizará los cambios revolucionarios, el que se enfrentará al Ejército imperialista, que se presenta como FF.AA, gobiernos, institucionalidad burguesa, ONGs, Partidos Políticos, etc., que manejan la misma lógica de guerra del enemigo; manipulando, desorientando, cooptando y aniquilando. Los pueblos indoamericanos tenemos que comenzar a preparar la Gran Guerra Patria –de la cual nos hablaba el Comandante Iván Ríos-, con un tipo de combate beneficioso para la composición de nuestras fuerzas. Y ésta no es otra, que la

DEFENSA, con posicionamientos escalonados de las fuerzas y utilizando la ventaja del terreno. Debemos tener claro, que en una situación de guerra, no combatir e inducir al pueblo a participar en la vía electoral o cualquiera otra que se rija con las reglas del enemigo -conociendo los planes del imperialismo, para nuestra región- eso si sería un acto genocida .

Los actuales movimientos sociales, que vanguardizan el avance popular, en distintos países de nuestra Indoamerica, están en condiciones de superar el Estado burgués, con asambleas constituyentes, nuevas constituciones, progresismo institucional, etc. siguen estando dentro de los márgenes burgueses, siguen actuando dentro de las redes que el imperialismo internacional a

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tejido en la institucionalidad burguesa. Ejemplos de no avanzar y no confiar en el poder del pueblo, tenemos muy cercanos; la UP en Chile, el actual proceso boliviano que está enfrentado en una lucha de clases que se presenta con toda su crudeza; los pueblos indígenas y los obreros luchan por mantener y no retroceder en lo logrado hasta el momento, la oligarquía busca su aniquilamiento. En Venezuela los grados de conciencia del pueblo no se condicen con las reformas de su actual administración política, seudo reformistas que sólo intentan maquillar el capitalismo, formando de paso una nueva casta de burócratas y nuevos ricos; sin embargo, el pueblo sigue empujando hacia el cambio de sociedad. En todos los casos nombrados con anterioridad, la generación del poder popular es un hecho objetivo, lo que falta es la conducción revolucionaria, que permita dar los saltos cualitativos en organización, composición y disposición de las fuerzas populares en la lucha, para lograr derribar las bases económicas del imperialismo. Para el imperialismo, la estoicidad y el ejemplo moral de la Revolución Cubana, sigue siendo un flanco insalvable. A ello sumamos la consecuencia y validez de la lucha encabezada por las FARC-EP, en Colombia, quienes se presentan como el vivo ejemplo de proceder revolucionario; una guerrilla formada y construida de cara y con el pueblo pobre y marginado por años de dictadura oligárquica, que se han transformado en la fuerza moral de los revolucionarios del continente. El imperialismo, no podrá derrotar militarmente a un enemigo móvil, que

conoce el terreno, a qué enemigo se enfrenta y tiene una importante base social entre el campesinado y los obreros. Las FARC-EP, están dando un claro ejemplo, de cómo NUESTRAS FUERZAS no se pueden fijar al terreno, pues la Guerra de Guerrillas es la única posibilidad que nos deja un enemigo, militarmente superior.

La situación en nuestra patria no es muy distinta del resto de los pueblos indoamericanos, en las tierras de Leftraru, O´Higgins y Miguel Enríquez, vivimos el golpe demoledor del fascismo, del cual aún las fuerzas revolucionarias no nos podemos parar; militarmente el enemigo penetró hasta lo mas profundo de nuestras líneas de defensa, dislocó nuestras fuerzas hasta un grado de desarticulación, que ya se acerca a las cuatro décadas, sumado a ello una larga lista de asesinados, torturados, que en muchos casos, tuvieron la osadía de enfrentarse a un enemigo cualitativa y cuantitativamente superior, ejemplo que debemos tomar y con el conocimiento militar adquirido por los revolucionarios, tiene que ayudar a los combatientes de hoy y mañana, en la formación de un sólido cuadro político-militar. La formación de los cuadros políticos-militares que se enfrentarán al mas poderoso enemigo

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que jamás se halla tenido, no sólo tienen que conocer el arte militar -y este es un punto en el cual nuestras fuerzas no pueden equivocarse otra vez- pues la formación de los valores revolucionarios del cuadro; ese hombre nuevo que planteara el Comandante de la Revolución Indoamericana, Ernesto Che Guevara, ese ser humano sensible y que por amor a los suyos es capaz de empuñar un fusil o inmolarse frente al enemigo. Por ello duelen las últimas bajas producidas a los combatientes colombianos, quienes dedicaron sus vidas y las dieron por la liberación de Colombia y la Patria Grande, renunciaron a todas las comodidades que pudieron usufructuar del capitalismo, prefirieron vivir cuarenta años en una selva a veces cubierto sólo con un plástico, todo por amor, jamás se cansaron, jamás transaron con el enemigo a pesar de lo difícil que fuera la situación.

Cuando un revolucionario desconoce y no toma el real valor de esas vidas, de esa consecuencia, y las transforma en un mito, en algo inalcanzable, solo podrá llegar a ser un buen combatiente pero no un revolucionario. Esto último lo podemos observar, cuando asistimos a un sin numero de descalificaciones entre supuestos

compañeros de lucha, desconociendo el aporte que muchos han realizado a este proceso, que muchas veces cometieron errores -por eso somos humanos, en vías de superación-, pero no por ello se debe caer en la delación. El respeto por lo que pueda plantear un compañero, parte por analizar lo que quiere decir, no podemos descalificar a priori. Y acá de nuevo, los revolucionarios colombianos, nos dan una tremenda lección moral, al reconocer que el Comandante Marulanda, siempre les incitó a cuidarse para no emitir opiniones apresuradas sobre los procesos revolucionarios que libran los pueblos en las diferentes latitudes, sin antes estudiar a fondo todas las circunstancias que engendraron tal o cual conflicto; las particularidades de los mismos; los métodos de lucha empleados por el adversario; la historia; las tradiciones y experiencias de lucha… en fin todo el acervo de conocimientos que tuvieron en cuenta los revolucionarios de esos pueblos para impulsar una u otra forma de lucha o combinar todas las formas de lucha de masas en un momento dado del desarrollo de la confrontación, en un país determinado, y durante un período de tiempo en concreto. Incluso, manejando una determinada situación con cierta solvencia, siempre nos recomendó prudencia, prudencia y más prudencia… lo anterior nos impide caer en el facilismo de “dictar recetas” o imponer a otros movimientos, partidos políticos, organizaciones armadas o no; la línea de conducta a seguir, que en el caso de las FARC-EP y la insurgencia colombiana, obedecen a situaciones históricas, políticas, sociales, culturales, geográficas…

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Ante lo anterior, sólo podemos decir que un revolucionario del nuevo tipo, jamás descalifica a sus compañeros; rebate ideas desde un punto de vista ideológico y no es sectario. No olvidemos que detrás de cada sectario, se esconde un oportunista. El primer enemigo que tenemos que derrotar es con el que convivimos a diario, ese que está dentro de nosotros; el sectarismo, la arrogancia, la falta de humildad, la autosuficiencia, el arte del engaño y la mentira con nuestros compañeros de clase, el oportunismo, la falta de rigurosidad revolucionaria, etc.

CONCLUSIÓN Viendo el terreno y la distribución de las fuerzas de nuestro enemigo, los revolucionarios tenemos que abocarnos a realizar una parte del trabajo político-militar, el conocimiento cabal del enemigo. Los revolucionarios tenemos que determinar a qué poderes económicos responden cada uno de las caras públicas que actúan en los ámbitos políticos, judiciales y sociales; sólo ahí nos podremos anteponer a los movimientos llevados adelante por nuestro enemigo de clase. También conociendo esto, podemos entender realmente el acontecer político, que en términos políticos–militares es parte del terreno, el dictador de la guerra. Conocer y determinar el tipo de terreno nos llevara a no embarcarnos en movimientos generados por nuestro enemigo, es ahí cuando podemos determinar, en nuestra marcha hacia los objetivos estratégicos de comenzar la construcción del socialismo. Si enfrentamos al enemigo, si desplegamos nuestras fuerzas, si los aniquilamos en la marcha o simplemente se evade el enfrentamiento, porque es insignificante y seria un retraso en el cumplimiento de la misión, tarea u objetivo, o simplemente determinar que son posiciones falsas; todo ello se determina al hacer un análisis de situación de la realidad concreta, considerando y conociendo el terreno, la composición del enemigo y el de nuestras fuerzas. Recién ahí no nos equivocaremos; presentando combates que no son los que busca el pueblo, lo que lleva a generar y aumentar la frustración y la desesperanza de un

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pueblo, que lucha y lucha y nunca logra concretar sus sueños. Ese pueblo se va desmoralizando, y eso es lo que precisamente busca nuestro enemigo; lo que ellos llaman quitarle el agua al pez. Cuando nuestro enemigo intenta llevar adelante la separación entre pueblo y revolucionarios, es el momento de plantear, lograr entender y hacerlo doctrina; que la génesis de nuestra lucha es la iniciada por Leftraru y el pueblo Mapuche contra el invasor español; continuada por el Ejercito Libertador de O’Higgins y San Martín; es la misma lucha de

los obreros de las salitreras, del carbón; la causa que impulsó el Comandante de la Revolución chilena, Miguel Enríquez, contra la dictadura fascista y el imperialismo; esas causas por la que han caído miles, sigue siendo la misma. Por lo tanto, no tenemos porque importar pensamientos envasados de garúes que siguen la brújula, manipulada al norte del río Bravo; el marxismo-leninismo ahora mas que nunca, es un método de interpretación y transformación de la sociedad, esa es nuestra base, no las definiciones antojadizas y acomodaticias.

NOTAS: (1) En el “ Prólogo de la Contribución a la Crítica de la Econo mía”, de 1859, Marx establece que “Al llegar a una determinada fase de desarrollo, la s fuerzas productivas materiales de la sociedad entran en contradicción con las relaciones de producción exis tente ... de esta forma estas relaciones se convierten en trabas suyas. Y se abre así una época de revolución social. Al cambiar la base económica, se revolucion a, más o menos rápidamente, toda la inmensa superestructura erigida sobre ella”. (2) Analíticamente, si vemos el proceso de producción e ncontraremos dos elementos, que podemos sostener, conforman la base material; las f uerzas productivas y las relaciones sociales de producción. Las fuerzas productivas son los medios del trabajo; instrumentos que enten didos como los elementos materiales del proceso del trabajo, confo rman los medios de producción, agregando además, la forma del trabajo. Las relaciones sociales de producción que los hombres establecen en ese proceso, determinan la división d el trabajo y las formas de apropiación. Ellas, desde un materialismo histórico, están movid as por leyes que consideramos dialécticas ; en las que el cambio y la interrelación son funda mentales desde las contradicciones, que son las que determinan los ava nces y retrocesos. En términos generales, esto es lo que determinan la s contradicciones sociales que llamamos condiciones objetivas, y que se pueden explicar en todos los cambios de m odo de producción, como así mismo entender los distintos procesos revo lucionarios, el cambio social, en que siempre el centro determinante se encuentra en la m aterialidad; con la salvedad que las anteriores, como las revoluciones burguesas, (franc esa, industrial, por ejemplo) no abolieron la lucha de clases, (como lo plantea el m arxismo-leninismo, para la revolución proletaria), sólo las sustituyeron; una clase domin ante por otra; amos, señores feudales, nobleza, burguesía (los que llevaron a cabo las rev oluciones dichas, fueron clases revolucionarias, lo que no quiere decir que son “lo s pobres por sí”, en estos casos, por ejemplo, la clase revolucionaria fue la propia burg uesía). Lo importante ahora, es que la clase revolucionaria, el proletariado y sus aliados , no sólo va a terminar con la lucha de clases anterior, sino que va a abolir para siempre la lucha de clases, por ello y para ello, tiene un programa dado por el marxismo-leninismo cl ásico y que determina seriamente un método científico.

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Resumiendo, podemos afirmar en términos generales q ue en todas las sociedades, las fuerzas productivas se desarrollan de una forma que no se c ondicen con las relaciones de producción que se estancan, y que traban el desarrollo de las primeras; en el capitalismo la contradicción señalada se expresa en el carácter so cial de la producción y la apropiación privada , lo que lleva a que por el desarrollo de las fuerz as productivas se produzcan crisis de superabundancia, producto de que las relaciones sociales producen una gran cantidad de mercancía y por el empobrecimiento correlativo, no puedan satisfacer la oferta del mercado. (3) Algunos conceptos y categorías creadas por el enemi go para configurar el actual momento, tales como “economía de mercado”, “neolibe ralismo”, “globalización”, etc. Son fácilmente adaptados por sectores llamados progresi stas, aplicándolos –y esto es lo grave- sin saber su connotación en la realidad que vivimos . El llamado progresismo dejó de hablar de imperialismo o monopolismo, no porque la realida d material se lo indicase, sino porque dejó de leer la realidad concreta y comenzó a compr ar el discurso enemigo. Y este no es un fenómeno nuevo, la derrota del camp o socialista, es precisamente una derrota ideológica; la aparición de los eurocomunis mos, la invención de las bestias negras del comunismo, las fracciones, el revisionismo y el reformismo, son enfermedades letales en el campo popular revolucionario, que deben ser fina lmente denunciadas y eliminadas de raíz. Son precisamente esas tendencias las que primero “c ompran y avalan” el discurso enemigo, son ellas las que, por ejemplo, en vez de discutir con bases al interior de las orgánicas políticas crearon el fraccionalismo interno y exter no en la ex URSS, son las que publicitaban el carácter aventurero y pequeño burgu és del Che, Fidel, los fundadores del MIR, ERP, etc. Son las que publicitaban el supuesto asesinato del Che por parte de la Revolución Cubana, son esos pseudo compañeros los q ue hacían eco y publicitaban el carácter narco-terrorista de las FARC-EP y a la vez aplaudía n a un pseudo rebelde que se paseaba en moto, custodiado por militares burgueses, a quienes decía combatir, en México. Son los mismos que configuraron que el enemigo a derrotar e n Chile, era Pinochet, mientras que el capitalismo-monopolista pasaba a enquistarse en las esferas financieras y productivas y el fascismo se lavaba la cara y seguía administrando e l Estado proimperialista. No queremos sacar a relucir las viejas rencillas de la izquierda local ni mundial, lo único que nos mueve, es hacer un llamado de atención a qu e no abandonemos los métodos de análisis legados por la clase revolucionaria, que fueron y s eguirán siendo NUESTROS métodos, que el enemigo siga con sus viejas herramientas melladas .

(4) Siguiendo con la misma lógica de la Nota anterior, es conveniente clarificar la errada concepción de algunos, que al realizar un análisis económico se refieren “al sistema neoliberal” y dejan el “imperialismo” para referirs e al avance militar de los Estados Imperialistas, como si se tratasen de dos “sistemas ” diferentes; lo militar por un lado y lo económico por otro. En la práctica, la FES Capitali sta es un solo sistema concatenado desde su base material hasta su superestructura jurídico- política. El brazo militar de las potencias imperialistas son quienes van abriendo ca mino a los grandes monopolios, ayudando a estos mantener el sometimiento, para realizar los s aqueos.

(5) Es por esta razón que la región del Golfo Pérsico, desde un punto de vista geopolítico y militar, se ha transformado en una gran base de ope raciones para el imperialismo internacional, quienes implementan sus estrategias económicas y militares, con el objetivo de controlar el 65% de las reservas de petróleo y 3 3% de gas, existente en el planeta y que se encuentra en esa área y de paso, proyectar su po der hacia la zona del Cáucaso y Asia Central, también estratégicos en este mismo aspecto . El petróleo seguirá siendo la principal fuente energética por los próximos 30 años, represe ntando en la actualidad el 40% del consumo energético del planeta, transformándose en la principal causa del interés de las potencias imperialistas en la zona, para aprovechar de controlar precios y así reestructurar la industria petrolera y de paso los grupos del com plejo militar-industrial, prueben con seres humanos todo su arsenal de armas de nueva gen eración, biológicas, nucleares, etc. (6) Es importante destacar el “robo a mano armada” más grande del siglo, efectuado por los Estados imperialistas, que utilizando recursos públ icos –ahorros de la población de sus países- para dar liquidez a los más grandes consorc ios financieros. Tal fue el caso en los

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EE.UU, la Unión Europea y lo mas cercano, el caso c hileno, donde el Estado proimperialista autorizó la entrega de fondos a cuatro consorcios b ancarios transnacionales que operan en nuestro país. (7) La disputa por imponer el factor moneda, es ya un c onflicto de larga data. El dólar estadounidense corrió sólo durante décadas, hasta q ue la Comunidad Económica Europea logra rearticularse y posicionar su moneda, el Euro, apar eciendo también en escena el Yen chino, que pretende disputar mano a mano, los espacios fin ancieros. Este conflicto es grave para toda la economía mundial, especialmente las colonia s capitalistas-dependientes del dólar, como las nuestras, ya que los desordenes en sus res ervas, los colapsos financieros, producirán un cambio en el balance financiero y pol ítico del mundo, donde el Euro y el Yen, debido al tamaño de los mercados, de las potencias que los impulsan, podrían convertirse de hecho en la monedas stándards para el mundo, desplazando al dólar estadounidense . (8) En cuanto a los Comandos de Combate, cuatro de ello s son deslocalizados geográficamente, con responsabilidades funcionales, un Comando de Fuerzas Conjuntas, un Comando Estraté gico, un Comando de Transporte y un Comando de Operaciones Especiales , a los que se agregan los cinco comandos que están a cargo de una región en e specifico, es decir, se trata de comandos regionales centralizados; aquí tenemos al Comando Sur (USSOUNTHCOM) que vigila y monitorea Centro y Sudamérica teniendo su base en Miami, Flor ida. Después tenemos al Comando del Norte (USNORTHCOM) que vigila el propio territorio estadounidense. Ta mbién tenemos el Comando Europeo (USEUCOM) con el puesto central en Alemania, que vigila tod a Europa y gran parte de África. Está también el Comando Central (USCENTCOM ) que vigila y controla la parte central del planeta, todo Medio Oriente, hasta el cuerno de África y por ultimo está el Comando del Pacifico (USPACOM ), con base en Hawai, quien controla y vigila el su r de Asia, Australia y la Antártica.

(9) Ejemplo de ello, es el intento por hegemonizar la información a nivel planetario de las cadenas de TV CNN, o la BBC, o como el caso italian o en manos del fascista Berlusconi, el caso chileno tenemos a Megavisión del grupo Claro, Chilevisión del grupo Piñera, Canal 13 de la Iglesia y TVN del Estado pro-imperialista, ci erran el hermético circulo de la información alienante.