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    Poltica y Cultura

    ISSN: 0188-7742

    [email protected]

    Universidad Autnoma Metropolitana Unidad

    Xochimilco

    Mxico

    Presentacin

    Poltica y Cultura, nm. 28, otoo, 2007, pp. 5-6

    Universidad Autnoma Metropolitana Unidad Xochimilco

    Distrito Federal, Mxico

    Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26702801

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    http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/comocitar.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/fasciculo.oa?id=267&numero=9388http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/revista.oa?id=267http://www.redalyc.org/http://www.redalyc.org/revista.oa?id=267http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/fasciculo.oa?id=267&numero=9388http://www.redalyc.org/comocitar.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26702801http://www.redalyc.org/revista.oa?id=267
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    Las estructuras sociales se han modificado a razde la insercin de la mujer en el mundo laboral,

    as como su creciente participacin en puestos de alta responsabilidadpoltica, social y econmica. El fenmeno indica que la situacin de lamujer est cada vez ms normalizada y que el arquetipo madre-esposa hapasado a privilegiar un segundo modelo que afirma la igualdad de gnerofrente a las responsabilidades profesionales y familiares.

    Dicha transformacin ha dado paso a que ciertos movimientos favorez-can algunos cambios en las polticas estatales ligadas con el empleo, losderechos, la familia, el ciudadano de los hijos, las licencias de maternidad

    y paternidad, etctera; es decir, estas transformaciones han facilitado el ac-ceso de la mujeres madre-esposas al empleo, contribuyendo de este modo

    a los cambios de mentalidad.Podemos decir que la imagen de las mujeres inglesas en la calle pidien-

    do el voto femenino en el siglo XIXpertenece a una historia ya escrita. Hoy,la disputa radica en la competencia ante los hombres por los puestos detrabajo con un mismo sueldo y por la igualdad de oportunidades.

    La presencia de la mujer en la actividad poltica y econmica se haincrementado en los ltimos aos. En Europa, el ndice de mujeres que ter-minan sus estudios superiores es mayor que el de los hombres. El acceso aniveles superiores de formacin ha facilitado el que las mujeres opten porpuestos de direccin ms altos y de mayor responsabilidad en las jerar-quas de las organizaciones. En pases como Noruega, Suiza, Dinamarca,Canad, Suecia, Finlandia, Repblica Checa, Francia, Reino Unido, Austria,Nueva Zelanda, Islandia y Estados Unidos, la tasa de participacin de lamujer en el mundo laboral es de alrededor del 80 por ciento. En las ltimaselecciones democrticas a Jefaturas de Estado se marc un ascenso en el

    Presentacin

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    Poltica y Cultura, otoo 2007, nm 28, pp. 5-6

    nmero de mujeres al poder: M. McAleese en Irlanda, Vaira Vike-Freiberga

    en Letonia, o Gloria Macapagal en Filipinas, ngela Merkel en Alemania,Michelle Bachelet en Chile, Ellen J. Sirleaf en Liberia, y Tarja K. Halonen enFinlandia. Este fenmeno, unido a la creciente participacin de mujeres enpuestos de alta responsabilidad poltica, indica que la situacin de la mujerest cada vez ms normalizada y que la extendida idea de ser ciudadanasde segunda est siendo abandonada por los individuos de ambos sexos.La presencia de mujeres en cargos de representacin poltica y ministerialha sido apoyada en una gran cantidad de pases por reformas constitucio-nales: al integrar en sus legislaciones un sistema de cuotas, que ha llegadoa ser una estrategia cada vez ms frecuente para reducir la subrepresenta-cin femenina en la poltica, se han ampliado los alcances que stas tienenpara manifestar sus posiciones ideolgicas. Al respecto, los avances se hanobservado en pases como Rwanda, Alemania, Espaa, Suecia y Noruega,principalmente, donde las mujeres representan el 50 por ciento de la po-blacin que ocupa cargos pblicos.

    No obstante el incremento de la participacin femenina en casi todoslos mbitos, la mayora de los estudios demuestran lo limitado de esta par-ticipacin. Los problemas que enfrentan se relacionan fundamentalmentecon la pobreza, desnutricin, malas condiciones de vida, discriminacin,desempleo, subcontratacin, bajos salarios, analfabetismo, subrepresenta-cin, entre otros.

    Las situaciones anteriores han sido relacionadas con la desventaja do-mstica y familiar que por tradicin le ha sido asignada. La mayora de lasmujeres que deciden dedicarse a actividades socialmente reconocidas pre-sentan una serie de menoscabos, entre los que se encuentran el sacrificio

    de algunos aspectos de la vida personal y familiar, como lo son el casarseo tener hijos. El hogar y la profesin aparecen como mbitos antagnicosdonde las mujeres tienen que establecer estrategias de conciliacin o plan-tearse la disyuntiva de elegir o abandonar el otro.

    En este sentido, los estudios con enfoque de gnero que presentamosen este volumen tratan de dar una explicacin sobre las desigualdades enla sociedad actual. Se pone al descubierto la marginacin de las mujeres enlas distintas esferas pblica y privada, la inequidad de oportunidades en elmbito laboral y poltico al que se enfrentan; as como la disminucin enla maternidad y cuidado del hogar debido a los distintos dispositivos insti-tucionales y culturales que consideran como naturales y complementarioslos roles de gnero, al tiempo que generan resistencia social para lograr laigualdad poltica y social del gnero femenino.

    COMIT EDITORIAL