Upload
others
View
12
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
1
La movilidad académica y estudiantil: un tema en la agenda de la
investigación educativa en México1
Por: Dira Plancarte Flores2
El XIII Congreso Nacional de Investigación Educativa fue organizado en torno al
planteamiento Aportes y reflexiones desde la investigación educativa: ¿qué sabemos… qué
nos falta?, y tuvo el objetivo de reflejar las principales preocupaciones de la comunidad de
investigadores de la educación. La movilidad estudiantil y académica fue abordada en
cuatro mesas, dos simposios y una conversación educativa. A continuación reseñaré los
elementos más importantes que dan cuenta del trabajo presentado por algunos
investigadores en torno al tema.
Alejandra Guadalupe Velázquez Ruiz y Juan Pablo Durand Villalobos, en su ponencia
Movilidad estudiantil en la Universidad de Sonora: 1997-2014 reportaron los resultados
de una investigación en curso, que busca detectar los patrones, tendencias y flujos de la
movilidad en la UNISON. Desprendieron como objetivos secundarios: 1) realizar un
análisis estadístico sobre movilidad estudiantil, durante el periodo 1997-2014; 2) contrastar
estos hallazgos con los datos nacionales e internacionales; y 3) sistematizar la información
sobre movilidad estudiantil en la Universidad.
Los investigadores señalaron que desde la década de 1990, la internacionalización de la
educación superior y la movilidad estudiantil han sido temas relevantes en México, Brasil y
Argentina. Sin embargo, fue a partir del surgimiento del programa Erasmus, y la
subsecuente reforma educativa que promovió el Proceso de Bolonia en Europa, cuando la
atención en la movilidad estudiantil se centró en:
1. Análisis cuantitativo del impacto y flujos
2. Oportunidades y amenazas para los países involucrados
3. Movilidad estudiantil e internacionalización de la educación superior
4. Motivaciones y representaciones de los universitarios con respecto a sus
experiencias en el extranjero
1 Reseña realizada con el apoyo de la Red sobre Internacionalización y Movilidades Académicas y Científicas
(RIMAC). Proyecto de Redes Temáticas CONACYT, no. 260402. 2 Ayudante de Investigación SNI de la Dra. Sylvie Didou Aupetit, en el Departamento de Investigaciones
Educativas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional.
2
Los investigadores ubican su investigación en el primer eje de análisis y apuntaron la
dificultad para analizar cuantitativamente el impacto y flujos de movilidad estudiantil,
debido a la ausencia de sistematización en los registros institucionales, organismos y
programas de becas.
Para Durand y Velázquez, los estudios más confiables sobre movilidad están focalizados en
instituciones que prestaron atención al tema, aunque éstos estén limitados a casos
particulares. De acuerdo a la tipología propuesta por Luchilo (2014) sobre la movilidad de
estudiantes desde las funciones atribuidas a la misma3, Durand y Velázquez propusieron
criterios para acercarse al fenómeno, a nivel licenciatura en la UNISON. Para ello,
integraron dos bases de datos primarias. Una, con los registros de los casos de participación
en programas de movilidad desde el ciclo 1992-2 hasta 2014-2, con un total de 2, 200
casos; otra, con datos sobre la población total de la UNISON por unidad regional, por
división y por sexo. Cruzaron ambas bases y compararon el crecimiento de población y el
de la participación en los programas de movilidad, para obtener proporciones.
Como resultados preliminares, apuntaron que la movilidad estudiantil en la UNISON data
de 1990 a través del Programa Trilateral de Movilidad Estudiantil, impulsado en el marco
del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Sin embargo, son los
convenios directos entre universidades, el principal medio para gestionar recursos para la
movilidad. Los investigadores descubrieron que más del 80% de los casos son financiados
por 10 programas aunque, dado que muchos programas funcionan por sí mismos (como
ECOES), la contabilización de estudiantes resulta complicada. Apuntaron que desde 1997 y
hasta 2006-1, creció la movilidad pero, para el ciclo 2009-1, se observó un decrecimiento
significativo, atribuible a la aparición de la movilidad de verano.
Con respecto a la movilidad por género, existe una brecha notoria en comparación con la
tendencia nacional. En la UNISON, los estudiantes móviles son mujeres en 62.7% de las
ocurrencias (1, 378), 56% (772) de ellas en movilidad nacional. La movilidad estudiantil
femenina en la UNISON es mayormente nacional, mientras que la masculina es más
internacional.
Por área de conocimiento o Divisiones, el mayor número de casos está en la División de
Ciencias Económicas y Administrativas (25%), seguida de la División de Ciencias Sociales
(23%) e Ingeniería (22%). Pero las primeras dos cuentan con un mayor número de casos de
movilidad nacional mientras que la de Ingeniería presenta mayor movilidad internacional.
El destino más recurrente en movilidad internacional es España con el 29.9% del total de
los casos y principalmente visitado por alumnos de Ciencias Económicas y
3Como componente de las políticas de cooperación internacional/instrumento de cooperación; modalidad de
creación de capacidades de investigación; fuente de recursos para las universidades participantes; o faceta de
la internacionalización del currículum.
3
Administrativas. Sigue Francia (16.4%), Estados Unidos (12.2%), Argentina (11.2%) y
Canadá (10.9%), todos visitados predominantemente por estudiantes de Ingeniería.
A manera de conclusión, Durand y Velázquez explicaron que de acuerdo a la información
presentada y en comparación con PATLANI, la UNISON presenta un perfil institucional
de movilidad estudiantil diferente a la tendencia nacional, especialmente en lo que
corresponde a las áreas de conocimiento y los países de destino. Pero, para conocer a
profundidad el fenómeno de la movilidad estudiantil en la UNISON, los autores consideran
importante incluir otros factores como el tipo de institución de destino y detalles sobre el
financiamiento.
Otro evento fue el simposio PATLANI: encuesta de movilidad estudiantil internacional
temporal en las instituciones de educación superior mexicanas: principales tendencias
de movilidad entrante y saliente, con las intervenciones de Alma Maldonado
Maldonado y Roberto Villers Aispuro.
PATLANI4 representa un esfuerzo interinstitucional coordinado por la ANUIES, para
recoger y sistematizar información general sobre la movilidad estudiantil entrante y
saliente en México; mediante una encuesta nacional, es aplicada a Instituciones de
Educación Superior (IES) tanto públicas como privadas5.
El simposio, dirigido por la Dra. Alma Maldonado Maldonado, investigadora del
CINVESTAV, tuvo como objetivo dar cuenta de las principales tendencias de la movilidad
estudiantil a partir de las dos encuestas PATLANI correspondientes a los períodos 2012-
2013 y 2013-2014.
La Dra. Maldonado señaló que la movilidad estudiantil es un fenómeno que, en números,
ha evolucionado con el paso de los años. En 1950, 110,00 estudiantes se movían; en 2015,
había más de 2.5 millones de estudiantes internacionales. Ese incremento explicó, implica
que valga la pena preguntarse ¿qué es un estudiante internacional? Como toda
conceptualización, la respuesta depende de las variables consideradas para definirla. Puede
incluirse en ella el tipo de sujeto móvil, el nivel (pregrado-posgrado), el objetivo de la
movilidad, el desplazamiento geográfico, la duración de la movilidad y el tipo de
financiamiento.
En términos generales, la importancia de los estudiantes internacionales no radica sólo en
los impactos de la movilidad a nivel institucional, sino en la dinámica de la economía
mundial y por consecuencia, en las políticas Open doors. En Estados Unidos, el principal
país de recepción de estudiantes internacionales, la movilidad genera aproximadamente 27
4Primera edición disponible en:
http://www.sincree.sep.gob.mx/work/models/sincree/Resource/archivo_pdf/movilidad.pdf 5 La UNAM no participa en la encuesta.
4
mil millones de dólares anuales y miles de empleos. Francia, otro país receptor popular,
reporta que sólo en subsidios, obtiene 4.6 mil millones de euros anuales.
Es importante reconocer que PATLANI compara sus resultados con los de la Estadística
9116. De acuerdo con esa base, 4% de la matrícula de educación superior ha tenido
experiencias de movilidad, sin embargo, sólo el 2% de la matrícula corresponde a
población entrante. En éste último punto, los resultados de PATLANI y de la 911 difieren.
De hecho, la Dra. Maldonado comentó que un problema radica en cómo son generados los
datos en las IES participantes y en la no distinción entre pregrado y posgrado o tipos de
institución a los que está referidos los datos.
Señalado lo anterior, la Dra. Maldonado proporcionó algunos datos que afirman tendencias.
Para 2013, PATLANI reportó que el 4% de la matricula nacional correspondía a estudiantes
internacionales lo que, en comparación con Canadá (8%), Australia (25%), Suiza (28%) y
Reino Unido (18%), es un porcentaje bajo. Igualmente, apuntó que existe una ligera
mayoría de mujeres en movilidad internacional y que los principales destinos de los
estudiantes mexicanos son España, Estados Unidos, Francia, Alemania, China, Italia,
Brasil, y Argentina. Los principales países de origen de los estudiantes en movilidad
entrante son Estados Unidos, Francia, Colombia, Alemania y España. Las IES privadas
como el TEC de Monterrey, la Universidad del Valle de México y la Universidad
Autónoma de Guadalajara reportan los mayores porcentajes de movilidad estudiantil,
entrante y saliente.
A manera de conclusión, la Dra. Maldonado expuso que la mayor parte de la movilidad de
estudiantes en México se produce en la licenciatura, en universidades particulares y en
áreas de ciencias sociales y administrativas. El financiamiento tiende a ser privado y no hay
una clara distinción entre la movilidad de hombres y la de mujeres. En cuanto a los retos
para PATLANI, destacó la necesidad de incrementar el número de instituciones
participantes y de discutir las ventajas y desventajas de una encuesta muestra frente a un
censo. De igual manera, subrayó la importancia de trabajar conjuntamente con la SEP y con
otras instituciones para que la información producida por el país pueda ser considerada en
estadísticas globales como las de la OCDE o Project ATLAS; sobre todo, insistió en la
urgencia de generar un amplio debate sobre la internacionalización de la educación
superior.
El Dr. Roberto Villers Aispuro, Director General Académico de la ANUIES, explicó la
importancia de contar con encuestas como PATLANI que aporten información real sobre la
movilidad estudiantil. Al concebir a la internacionalización de las IES mexicanas como una
manera de hacer frente a la globalización, a partir del conocimiento, el Dr. Villers explicó
6La Estadística 911 recaba estadísticas de todos los niveles educativos: básica, media y superior. Está
elaborada conjuntamente por la SEP, la ANUIES y la SHCP. Para más información:
http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v11/docs/area_04/1041.pdf
5
que la movilidad de estudiantes es una de las dimensiones más importantes de la
internacionalización porque, tomando el programa ERASMUS europeo como ejemplo, las
repercusiones de una movilidad afectan la vida de los estudiantes.
Sin embargo, señaló, las repercusiones de la movilidad no pueden explicarse en sí mismas:
es necesario comprender los elementos contextuales y demostrarlos. De manera general, el
Dr. Villers señaló que, a partir de 2009, en la Conferencia Mundial de Educación Superior
(CMES) de la UNESCO, el impulso a la internacionalización fue considerado como una
responsabilidad global; en México, fue incluido tanto en el Plan Nacional de Desarrollo
2013-2018 como en el Plan Sectorial de Educación.
Sin embargo, dijo, para medir el proceso de integración de la internacionalización en las
IES, es necesaria contar con información que dé cuenta de las capacidades institucionales,
de la existencia de planes o programas de internacionalización y evidencie los resultados de
los esfuerzos de cooperación y de las redes. Para los primeros dos puntos, el Dr. Villers
consideró que PATLANI representa hasta el momento un valioso esfuerzo para documentar
la movilidad de estudiantes. Cuestionar la movilidad, agregó, es sólo la punta del iceberg de
la internacionalización. Debajo, hay una estructura con dimensiones jurídicas, económicas
y políticas en relación a la que discutir las formas en las que las IES deben
internacionalizarse. Si bien PATLANI es sumamente importante para conocer la movilidad
estudiantil en México, uno de sus principales retos radica en institucionalizar su
levantamiento, concluyó.
En la mesa sobre Movilidad estudiantil y estudiantes de posgrado, el 18 de noviembre,
Aldo Colorado Carvajal (UV), Sagrario Pérez Callejas (UV) y Argelia Ramírez
(UNAM) presentaron una investigación sobre La movilidad estudiantil en la Universidad
Veracruzana, orientada a detectar las características generales de los estudiantes en
movilidad de la Universidad Veracruzana.
Señalaron que la movilidad estudiantil en la Universidad Veracruzana data de 1994 pero
fue formalizada hasta el 2010 al crearse la Dirección General de Administración Escolar
(DGAE) y la Coordinación de Movilidad Estudiantil y Académica. Debido a las
características de la institución, la movilidad estudiantil de la UV ha sido de diferentes
tipos: intra universitaria (entre los campus en el estado de Veracruz), interregional, nacional
e internacional.
De acuerdo a los investigadores, las características específicas de los estudiantes y las
experiencias de movilidad aún son un tema desconocido, aunque existen requisitos
particulares para la movilidad: promedio igual o superior a 8.5, acreditación del idioma
para la movilidad internacional; 50% de los créditos cubiertos para movilidad nacional y
40% para movilidad internacional.
6
Con base en la información proporcionada por la DGAE, Colorado, Pérez y Ramírez
comentaron que, entre 1991 y 2014, 2, 205 estudiantes efectuaron una estancia de
movilidad. Xalapa (67%) y Veracruz (19%) son las regiones que presentan mayor
movilidad de estudiantes; por disciplina, el área económico-administrativa tiene un mayor
porcentaje de estudiantes en movilidad; por género. 61% de los estudiantes móviles son
mujeres; por ciclo, 93% realiza movilidad en licenciatura pero se registra un aumento de
la movilidad en el posgrado; por duración. 83% hacen estancias largas y 49% realiza
movilidad internacional.
De los estudiantes que recibió la UV entre 2008 y 2012, un 51% tenía padres con educación
superior, 24% con escolaridad media y 23% con escolaridad básica. 37% de padres de los
estudiantes de la UV tenían escolaridad básica, 32% superior y 29% media. En la misma
muestra de estudiantes, sólo un 10% del grupo tiene uno o ambos padres que hablan una
lengua indígena. Aproximadamente un 50% de los estudiantes que realiza una estancia de
movilidad presenta un nivel alto de bienes y servicios, mientras que el 30% y 20%
presentan niveles medio y bajo respectivamente.
De acuerdo con la información obtenida, los autores consideran que, para tener una mayor
comprensión de la experiencia de la movilidad estudiantil, es necesario incluir en el estudio
la perspectiva de las políticas de internacionalización, un análisis de las construcciones de
las identidades de los estudiantes universitarios y observar el impacto de la movilidad en su
formación académica.
Mónica López Ramírez presentó por su parte la ponencia “¿En México o en el
extranjero? Análisis del proceso de toma de decisiones de estudiantes mexicanos sobre
el lugar para realizar su doctorado”, orientada a comprender la manera en la que los
estudiantes mexicanos de ingeniería eligen destinos de formación doctoral, tanto en México
como el extranjero.
De acuerdo a sus datos, los mexicanos representan al grupo más grande de estudiantes de
posgrado latinoamericanos en el extranjero y sus principales destinos, según la información
proporcionada por el CONACYT, son Estados Unidos, Reino Unido, España, Canadá,
Francia y Alemania.
La Dra. López indicó que para comprender la movilidad estudiantil es necesario conocer el
papel de los estudiantes y preguntarnos ¿por qué se van o por qué se quedan? , desde la fase
de pre movilidad, en el momento de la toma de decisión. Para su investigación, orientó su
mirada a este momento y tomo en cuenta tres ejes:
a) Caracterización del origen social: éste incluye el capital viajero (dominio de
diferentes idiomas y experiencias de vida en el extranjero) y la escolaridad y
ocupación de los padres.
7
b) Profundización en las trayectorias y contextos institucionales: acceso a capital social
a través de las relaciones sociales, experiencias de movilidad previas, y continuidad
institucional de los estudios superiores.
c) Acciones, estrategias y agencia que los estudiantes utilizaron para la búsqueda de
información, lapso para trámites, rango de elección y evaluación de las opciones
para continuar su formación doctoral.
Con una perspectiva cualitativa, la Dra. López enfocó su atención a los doctorantes de
CONACYT, estudiantes de Ingeniería en tres posgrados nacionales (IPN, UNAM e
ITESM) y tres posgrados en el extranjero (en Francia, Estados Unidos y Reino Unido). Con
esta población, realizó 43 entrevistas, 19 en México y 24 en el extranjero. Sus informantes
se agruparon entre los 23 y 36 años, la mayoría hombres y sin compromisos conyugales.
Los estudiantes en doctorado en el extranjero provienen de entornos familiares con mejores
condiciones económicas, culturales y educativas que los de los doctorantes nacionales. Su
capital viajero es igualmente más elevado (sobre todo en el idioma, aprendido desde la
infancia). Las instituciones por donde transitaron los estudiantes en el extranjero fueron
diversas pero accedieron a ellas por medio de convocatorias, recomendaciones e
invitaciones; los nacionales se caracterizan por ser endogámicos. En ambos casos, las
relaciones establecidas con los asesores de tesis jugaron un papel fundamental en la toma
de decisión.
Para el último eje, los estudiantes nacionales tendieron a limitar sus opciones de búsqueda
de posgrado en espacios conocidos, mientras que los estudiantes en el extranjero ampliaron
sus opciones a varias instituciones y programas de posgrado, además de anticipar por
mucho los trámites.
La Dra. López concluyó que los efectos del origen social se plasman en la forma en la que
operan las decisiones de los estudiantes de ingeniería en el momento de elegir un posgrado;
así mismo, los contextos educativos previos y el acceso al capital social son elementos
clave para su elección de movilidad. Esto refuerza las diferencias basadas en los diversos
capitales de los estudiantes y enmarca la toma de decisiones en cuatro tipos:
1. Estratégica: en ella están agrupados los estudiantes en el extranjero (principalmente
en Estados Unidos) con orígenes sociales privilegiados que optan por las
universidades con mejores posiciones en los rankings. Estos estudiantes se ven a sí
mismos como exitosos y buscan las opciones de mayor prestigio.
2. Institucional: la toman estudiantes en el extranjero y nacionales con origines
sociales privilegiados. La elección del posgrado obedece a las oportunidades y
programas de colaboración para financiar sus posgrados; se basa en aquello que es
para los estudiantes más accesible y está apoyada por un elevado capital social,
viajero y cultural.
8
3. Por relaciones: en este tipo de decisión, las redes que los estudiantes tejieron en las
instituciones de formación previas al doctorado, juegan un papel importante. Aquí
se agrupan los estudiantes n el extranjero con menores ventajas sociales y los
estudiantes en programas nacionales de orígenes sociales bajos.
4. Adaptativa: aquí se agrupan la mayor parte de los estudiantes en posgrados
nacionales, cuyos orígenes sociales son bajos y no cuentan con recursos para optar
por más opciones que las conocidas. Su decisión está basada en reducir los riesgos y
aprovechar las oportunidades.
En el simposio organizado por la Red de Observatorios de Movilidad Académica y
Científica de los Mexicanos (ROMAC)7, coordinada por los Dres. Rocío Grediaga Kuri y
Étienne Gerard, ¿Por qué los mexicanos de distintas generaciones decidieron irse a
estudiar a los países desarrollados? participaron Rocío Grediaga Kuri, Magdalena
Fresán Orozco, Mónica López Ramírez y Estela Maldonado Pérez.
En este evento fueron discutidos los avances sobre la generación de información en torno a
los mexicanos que quieren ir a estudiar al extranjero, quienes actualmente están estudiando
en otros países y sobre quienes concluyeron sus estudios y residen y desarrollan sus
trayectorias profesionales, dentro y fuera de México y sobre la reconstrucción de las
trayectorias formativas y profesionales de miembros de las élites científicas,
gubernamentales y del sector productivo del país.
A partir de la aplicación de una encuesta en línea, la Dra. Grediaga explicó que los
resultados presentados estaban enmarcados en 4 ejes:
a) Inflexiones en la dinámica del contexto para caracterizar a las distintas
generaciones. Dentro de este eje, la población analizada fue dividida en tres
categorías: 1. Pioneros (los que realizaron estudios de posgrado en la década de
1980); 2. Herederos (los que realizaron sus estudios en la crisis de los 90); y 3.
Nueva Generación (los actuales y potenciales estudiantes de posgrados en el
extranjero).
b) Indicadores sobre el origen social de las generaciones.
c) Factores del contexto nacional que tienen mayor peso para estudiar en el extranjero.
Incluyen problemas socioeconómicos nacionales, dificultades a la incorporación
laboral en docencia e investigación y problemas en la calidad educativa del país en
diversos campos del conocimiento.
d) Vinculación por generaciones. Elementos que vinculan y diferencian las trayectorias
de las distintas generaciones para irse del país.
7http://romacm.azc.uam.mx/
9
Como miembro de esta Red, Mónica López explicó que en la línea que ella trabaja ¿Por
qué elijen el país, la institución y programa de estudios? Encontró cambios importantes en
las percepciones sobre el país entre las diferentes generaciones. Las razones para estudiar
en otro país están vinculadas con la calidad científica de los programas en el extranjero y el
prestigio asociado; estos elementos están principalmente tomados en consideración por los
mexicanos de las nuevas generaciones como factores importantes para su incorporación a
espacios laborales posteriores. Con base en los datos del CONACYT, encontró que entre
los estudiantes de la nueva generación, existe una disminución en la movilidad a Estados
Unidos y un aumento en destinos como Reino Unido y España. Siendo las Ingenierías un
área prioritaria, los estudiantes se distribuyen entre países considerados polos de atracción,
mientras que España se ha convertido en el principal destino de los estudiantes de ciencias
sociales.
López presentó una caracterización de los pioneros y de la nueva generación. Los pioneros
al momento de realizar sus estudios en el extranjero eran hombres de más de 30 años, en su
mayoría casados y de origen social alto. Los de la nueva generación, los actuales
estudiantes, tienen menos de 30 años, la mayoría están solteros pero igualmente cuentan
con un origen social alto. Para los pioneros, los motivos para realizar estudios en el
extranjero estuvieron determinados por la carencia de programas, el interés por estudiar en
escuelas de prestigio y en muchos caso, la necesidad de un posgrado como un requisito
laboral; para los de la nueva generación, los motivos están vinculados con la
especialización en un área de conocimiento, en escuelas de prestigio y corresponden al
interés por buenas oportunidades laborales posteriores al posgrado. A esto, Mónica López
lo llamo, el sueño americano de investigación, al visualizar el pos grado como una
oportunidad para canjear grados por libras o euros.
En cuanto a las trayectorias, explicó que existen diferencias significativas en las
trayectorias de ambas generaciones. Los pioneros estudiaron la licenciatura entre los 20 y
24 años, incursionaron al ámbito laboral entre los 27 y 35 y, entre los 36 y 40, optaron por
cursar un posgrado en el extranjero. Las oportunidades laborales estaban provistas por el
Estado debido a la industrialización del país y a la consolidación del mercado académico.
Los de la nueva generación cursan estudios de licenciatura entre los 20 y 26 años e ingresan
al posgrado entre los 28 y 36 años, optando en muchos casos por realizar pos doctorado.
No tienen una idea laboral concreta y están dispuestos a buscar trabajo en el extranjero.
Aprovechan una amplia oferta de programas de becas y con las facilidades que Internet y
los trámites en línea proporcionan.
Para concluir, López indicó que si bien existen características comunes en la formación en
el extranjero entre una generación y otra, los resultados demuestran que los motivos para
optar por esta opción, divergen por sus características contextuales (especialmente en el
ámbito laboral) y los momentos históricos de cada generación.
10
Magdalena Fresán en su ponencia Movilidad académica de los funcionarios públicos
mexicanos formados en el extranjero, presentó los avances de una investigación sobre las
carreras de los funcionarios públicos después de realizar estudios en el extranjero. El
retorno implica para muchos ingresar a los procesos de renovación de las élites políticas del
país. Planteó que si bien la obtención de un cargo político aumenta notoriamente la
movilidad social, los estudios de posgrado son importantes para obtener diversos puestos
debido a la búsqueda de fortaleza formativa en algunas Secretarias de Estado. Empero,
existen diferencias en las trayectorias entre las distintas generaciones en aspectos como los
antecedentes familiares, los resultados del proceso formativo, los factores del contexto que
influyeron en la decisión de estudiar fuera del país, los criterios para el acceso a una carrera
política en el país y los motivos de la elección del programa en el extranjero.
Los pioneros son personas con abuelos con estudios de primaria y algunas de secundaria,
varios de ellos inmigrantes. Sin embargo, en su mayoría, tienen estudios de doctorado en el
extranjero y sus motivaciones para salir del país radican en la inexistencia de programas de
posgrado en México en su momento; así como en el prestigio de los programas. A su
regreso, tuvieron relativa facilidad para hacer una carrera política. Los herederos cuentan
con familias cuyos niveles de escolaridad oscilan entre el bachillerato y carreras técnicas y
militares. Cuentan con una o varias maestrías, o bien, doctorados y son frecuentes aquellos
que buscaron posgrados profesionalizaste. La mayoría recibió una invitación o un
ofrecimiento por parte de las dependencias donde trabajan para estudiar en el extranjero; en
general, tuvieron contacto previo con profesores de la institución en la que planeaban
realizar sus estudios y conocieron el programa. El acceso posterior a las carreras políticas
estuvo caracterizado por la solicitud de dominar algún idioma y tener pleno conocimiento
de las oportunidades en varias dependencias.
La nueva generación proviene de familias cuyos abuelos y prácticamente todos los padres y
madres tienen estudios de licenciatura e incluso de posgrado; cuenta con trayectorias
completas en México y viajan al extranjero para pos doctorados y estancias de
investigación. Esto, debido a la falta de perspectivas de desarrollo laboral y los bajos
salarios. Para acceder a carreras políticas, necesita dominar idiomas y tener pleno
conocimiento de las oportunidades y becas. La elección de los programas está basada en el
prestigio de la carrera y de la institución.
Magdalena Fresán apuntó que la búsqueda de alternativas de formación en el extranjero, en
este caso, fue basada en la ausencia de programas en el país, en la idea de fortalecer las
capacidades técnico-administrativas para el desarrollo de las carreras en el ámbito político y
en ampliar el conocimiento sobre oportunidades de mayor desarrollo y presencia en el
ámbito global. Indicó que los entrevistados manifestaron que los niveles de habilitación
tienen una influencia clara en la carrera política, particularmente en los procesos de
reclutamiento; así mismo, admitieron que los estudios en el extranjero constituyen una
11
ventaja competitiva para la carrera en el sector público y que el aprovechamiento de las
redes internacionales es esencial para su desarrollo profesional.
Estela Maldonado Pérez, en su trabajo sobre la élite empresarial, buscó conocer la
función de los estudios de posgrado y la conformación de las élites en el sector empresarial.
Exploró el caso de algunos empresarios hombres con puestos de poder para conocer las
razones, vivencias y expectativas de sus estudios en el extranjero. Dado que su trabajo aún
está en construcción, expuso las directrices de su investigación. Mencionó que la
transcripción de sus entrevistas le permitirá ligar contextos e información, para articular
significados en paralelo y determinar cuáles son los principales polos de interrogación con
respecto a esta población.
El jueves 19 de noviembre 2015, tuvo lugar la mesa: Procesos históricos en el contexto
universitario. En esta mesa, Rosa Martha Romo Beltrán, de la Universidad de
Guadalajara, presentó la ponencia “Procesos de exilio e innovación universitaria: el caso
argen-mex”, sobre la trayectoria e historia universitaria de una académica argentina
exiliada en México, que participó en el proyecto de refundación de la Facultad de Filosofía
de la Universidad de Nuevo León, durante la segunda mitad del siglo pasado.
Conforme con su pregunta central ¿cómo los procesos de exilio generan proceso de
innovación universitaria?, la Dra. Romo fundamentó su trabajo en el marco metodológico
de los relatos de vida, para dar cuenta de la forma en la que la historia de una académica
argentina en exilio significó un punto importante para el proceso de transformación de la
Universidad de Nuevo León. Develó que en la familia de la académica y en su misma
trayectoria personal existió una predisposición a migrar; sin embargo, ésta migración
siempre había sido interna y para su informante, el exilio significó un acontecimiento de
fisura en todas las dimensiones de su vida.
La primera parte de la trayectoria académica de la informante fue desarrollada durante la
primera mitad de la década de 1970 en la Universidad de Córdoba, Argentina;
posteriormente a la descomposición del proyecto peronista por la dictadura, el cierre de
algunas universidades en Argentina y la agudización de las represiones, tras un breve
encarcelamiento, la académica huyó a Buenos Aires a encontrar redes de migración que le
permitieran salir del país. Su proceso de exilio inició en 1976 e implicó que recorriera tres
países en un plazo de siete meses: Perú, Ecuador y México. En éste último, la informante se
desplazó de la Cd. De México a Monterrey debido a las oportunidades que su formación
académica en Pedagogía y las redes de exiliados le aportaron. Al llegar a la Universidad de
Nuevo León, se incorpora con propuestas de innovación curricular que habrían de ser,
tiempo después, parte aguas para la innovación universitaria.
La Dra. Romo puntualizó, en sus conclusiones, que el arribo de exiliados argentinos
coincidió con el crecimiento de la izquierda y la ubicación de militantes de la misma en
12
cargos directivos dentro de las universidades. Este hecho no sólo alentó la apertura de las
universidades y la rápida inserción de exiliados, sino que contribuyó a un proceso de
renovación conceptual alentado por los mismo exiliados. Así mismo, a partir del caso
estudiado, la Dra. Romo destacó la importancia de discutir el estado de conocimiento sobre
las memorias militantes tanto en Argentina como en México para generar una mayor
comprensión de la diada exilio-innovación.
Ese mismo día, en la mesa Movilidad, conocimiento y enseñanza académica, Daniela
García González y Rosario Hernández Castañeda, de la Universidad de Guadalajara,
analizaron los “Efectos de la movilidad internacional en académicos: un estudio
cualitativo”. La investigación de García y Ramírez está centrada en los profesores del
Centro Universitario de Ciencias Económica-Administrativas (CUCEA), que tuvieron una
estancia académica internacional en el período entre 2006 y 2013 y se reintegraron a sus
funciones académicas después de su estancia internacional.
Entendida como una estrategia para la internacionalización, García y Hernández explicaron
que la movilidad académica es uno de los ejes estratégicos del Plan de Desarrollo
Institucional 2030 de la Universidad de Guadalajara. Apoyada con recursos PIFI está
planteada a partir de las redes, asociaciones, los programas de estancias y jornadas de
investigación, seminarios y coloquios. Señalaron también que el período 2006-2013 fue
elegido porque fue cuando se registró mayor índice de movilidad académica. En su
estudio, participó el 80% de los sujetos.
Las entrevistas mostraron a García y Hernández que los efectos de la movilidad tuvieron
que ver con:
a) La reflexión crítica sobre la práctica como investigadores
b) Actualización e innovación académica
c) La obtención de una perspectiva global-local de sus roles como investigadores
en universidades extranjeras
Con respecto al punto a), las investigadoras plantearon que la movilidad de los académicos
fue en general motivada por la búsqueda de perspectivas alternativas de enriquecimiento de
la labor investigativa. Por ende, los informantes seleccionaron las universidades por su
prestigio en las disciplinas y sus líneas de interés personal, generando una mayor auto
exigencia al momento de preparar su trabajo en las universidades receptoras. Consideraron
que su movilidad había tenido efectos en su pensamiento crítico y comparativo.
En el punto b), García y Hernández expusieron que la inmersión en un nuevo contexto
estimuló a los académicos a apreciar las diferencias y valorar la propia cultura; a tejer redes
de colaboración tanto institucionales como personales; a actualizar sus líneas de
investigación y a enriquecer las publicaciones y los trabajos en coautoría. La movilidad se
13
convierte en oxígeno para la vida académica al ser una actividad que impide a los
académicos permanecer en zonas de confort.
El punto c), indicaron que la movilidad académica genera mayor seguridad y motivación
para hacer propuestas concretas para mejorar condiciones institucionales, docentes,
laborales y académicas. Esto es, motiva la búsqueda de modificaciones que contribuyan a
evolucionar las tradiciones universitarias, al apreciar y tener mayor apertura hacia nuevas
formas de gestión.
Las investigadoras concluyeron que la movilidad en el CUCEA impactó en la vida personal
y académica de los profesores y les proporcionó elementos que facilitaron la actualización
y la innovación de su labor profesional. Sin embargo, sólo 2.5% de la población muestra
participó en acciones de movilidad prolongada, siendo esto un factor que lleva a cuestionar
los procesos institucionales vinculados con la participación de los académicos en
movilidades así como el seguimiento de las mismas.
Finalmente, tuvo lugar una Conversación Educativa entre Arturo Velázquez Jiménez,
Director de la oficina de la OEI en México y Armando Alcántara que versó sobre “La
cooperación internacional para el desarrollo de la educación en México: el papel de la
OEI”.
La Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura
(OEI) es un organismo de cooperación internacional de carácter gubernamental, integrado
por Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, República Dominicana,
Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Guinea Ecuatorial, Honduras, México, Panamá,
Paraguay, Perú, Portugal, Uruguay y Venezuela.
Arturo Velázquez comenzó por explicar que con base en los Objetivos del Milenio,
planteado por la ONU, la OEI elaboró un documento normativo llamado Metas Educativas
2021. Es un documento regulador de las acciones que en materia educativa, realiza la OEI.
En México, tiene vinculación con el Programa Sectorial de Educación 2013-2018. Así, las
Metas Educativas de la OEI, están articuladas por los ejes que definen la UNESCO, la
ONU y los planes educativos de cada uno de los países miembro.
Entre las acciones que promueve la OIE, destacan los esfuerzos por impulsar la movilidad
de docentes, estudiantes e investigadores, como el Proyecto Paulo Freire. Esa iniciativa
busca promover la movilidad de alumnos universitarios que cursan estudios de grado y
posgrado en carreras que conducen al ejercicio de la profesión docente. Hasta el momento,
comentó Velázquez, la OEI ha impulsado 1,000 movilidades entre los países miembros.
A través de otras iniciativas como la del Programa Iberoamericano de Alfabetización y
Aprendizaje a lo largo de la Vida, la OEI buscó reforzar sus vínculos con la Unión
14
Europea, África y Asia; siendo la construcción de un catálogo de experiencias en educación
para los derechos humanos, un eje articulador.
Destacó también la creación del Centro de Altos Estudios Universitarios (CAEU) y la
creación de la Universidad Abierta Iberoamericana, ambas derivadas de las acciones de la
OEI en la búsqueda de la formación de especialistas. Igualmente, enfatizó la instalación de
los programas de IBERMUSICA, IBERMUSEOS, IBERESCENA e IBER-RUTAS, cuyas
funciones están enfocadas a impulsar diversas artes, las poblaciones migrantes y la difusión
de la cultura a partir de los museos; y de los programas IBERCIENCIA, IBERTEC,
IBERTIC, del Instituto de Educación en Derechos Humanos y el Centro de Formación e
Innovación en Políticas Públicas, cuyas funciones, como sus nombres lo indican, están
vinculadas a la innovación en ciencia y tecnología y la formación para las funciones
públicas.
En México, la OIE está aliada con la SEP, CONAFE, CONACULTA, SER, INEE, UNAM,
AMEXID, ANUIES, CONACYT, ILCE, UDUAL, AUM, INEA y AMC, como organismos
públicos y a un gran número de empresas privadas. Las asambleas de la OEI son realizadas
cada 4 años y durante la última, explicó Arturo Velázquez, fue nombrado como Presidente
del Consejo del Secretario de Educación de México (en éste momento Aurelio Nuño
Mayer). La Secretaria General de la OEI la preside el Dr. Paulo Speler.
Armando Alcántara expuso que la OEI es una organización que contribuye al desarrollo
educativo en los países asociados debido a que esta organización tiene presencia extra
regional en Asia y África; además de buscar vinculación con otras asociaciones estratégicas
para la cooperación.
Es una organización versátil con un interesante papel puesto que maneja programas sino
también difunde conocimientos en plataformas como la Revista de la OIE considerado
como un instrumento útil para conocer el trabajo académico en Iberoamérica.
Como parte de la conversación, Armando Alcántara preguntó a Arturo Velázquez cuáles
son los principales desafíos que desde la OEI, visualizan para los Estados Iberoamericanos.
Velázquez comentó que si bien están planteados en el diagnóstico de las Metas Educativas,
en México considera que uno de los principales retos es la conclusión de la Reforma
Educativa y la correcta cobertura, calidad y adecuaciones internacionales en la educación
mexicana. Así mismo, México aún necesita superar los problemas de analfabetismo
vinculados a la cultura científica y la comprensión lectora.
Ante la pregunta de Alcántara sobre cómo puede la OIE apoyar a la superación de estos
retos, Velázquez comentó que uno de los objetivos de la Organización es justamente ayudar
a los sistemas educativos en procesos de transición, como el mexicano y algunos otros, a
partir de las iniciativas planteados en sus Metas Educativas.
15
Para finalizar, Alcántara preguntó a Velázquez si había manera de registrar el impacto de
las acciones que tiene la OIE: Velázquez apuntó que las Metas tienen bien definidos
indicadores de impacto y concreción de acciones.
Conclusión
A pesar de ser considerada hasta el momento como el principal indicador a partir del que
dan cuenta de la internacionalización de las Instituciones de Educación Superior, la
movilidad de estudiantes y académicos es un tema poco recurrente en la investigación
educativa en el país. Durante el XIII Congreso de Investigación Educativa, el escaso
número de presentaciones que abordaron el tema evidencian un proceso en ciernes de
construcción de un campo de estudio: este, en sus primeros momentos, genera datos
cuantitativos que sirven de base para analizar la dinámica de la movilidad en México y en
el extranjero.
Lo anterior nos permite observar que aunque el estudio de la movilidad depende de una
mínima población de investigadores, los resultados de los trabajos presentados muestran
que es necesario cuestionar y analizar los impactos sociales e institucionales de la
movilidad y en crear con ello líneas de investigación que expongan la dimensión cualitativa
del tema. Así mismo, en general, las presentaciones coinciden en subrayar la urgencia de
debatir la forma en la que los datos sobre la movilidad son generados por las propias
universidades, de buscar nuevas estrategias para recuperar información y la necesidad de
promover la reflexión sobre la movilidad a partir de las voces de los estudiantes y
académicos, así como de los organismos que la suscitan.