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UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL
LA ORTOGRAFÍA Y SU ENSEÑANZA EN EL SEGUNDO AÑO DE EDUCACIÓN PRIMARIA
T E S I N A
QUE PARA OBTENER EL TITULO DE LICENCIADO EN PEDAGOGÍA
P R E S E N T A URIZ REYES HERNÁNDEZ
México, D.F. Diciembre de 2006
DEDICATORIA Este trabajo lo dedico con todo mi corazón a mi padre y a mi madre por su amor, comprensión, y apoyo infinitos y sin igual desde siempre. A mi esposo Sergio por su ayuda y ánimo para seguir adelante, a nuestros hijos Eyhair y Yusemi por ser el motivo y alegría de nuestras vidas A mis hermanos Yelina, Sajalín , Ariel, Eliud, Rogelio, Yuri, Tachira por su respaldo y amor incondicional en todo momento. A todos mis maestros que a lo largo de mi formación académica contribuyeron con su conocimiento, enseñanza y experiencia en mi desarrollo como ser humano y como profesionista. A mis amigas y amigos particularmente a todos aquellos que apoyaron mi desarrollo profesional. A todas las personas que a lo largo de este trabajo de titulación han dedicado parte de su tiempo y conocimiento para el logro de esta tesina
AGRADECIMIENTO Expreso toda mi gratitud a la Maestra Amalia Nivón Bolán por la oportunidad brindada para ser la asesora de esta tesina así como toda la admiración que siento por su labor docente, su ayuda y comprensión humana a todos los momentos que yo viví a lo largo de este trabajo. Quiero externar lo valioso que ha sido, la confianza que ella siempre tuvo en mí, al guiarme y motivarme constantemente para que esta tesina llegara a buen fin y así pudiera titularme. Reitero lo maravillosa que es como persona. De todo corazón, muchas gracias por ser así maestra Hago un reconocimiento especial a los sinodales: Maestra María de Jesús López Cervantes a quien agradezco toda su alegría, tiempo y paciencia en apoyarme en la realización de este trabajo. Maestro Roberto Pulido Ochoa a quien agradezco su confianza, y apoyo en la revisión de la tesina. Debo decir que admiro su valioso trabajo en todos los campos que él ha abordado y aportado dentro de la educación. Maestra María del Carmen Pérez Hernández por sus valiosos comentarios y sugerencias para el desarrollo óptimo de esta tesina.
I N D I C E
Introducción ........................................................................................4
I. II. Importancia actual de la ortografía en la enseñanza de la escritura.
I.1. El lenguaje...................................................................................6 I.2. La comunicación..............................I ..........................................13 I.3. Expresión escrita....................................................................... 20 I.4. Definición de ortografía............................................................. 28
III. Problemática de la ortografía en la enseñanza de la escritura.
II.1. El desarrollo del niño............................................................ 32 II.2. Adquisición de la ortografía.................................................. .35 II.3. Dificultades en el proceso de la adquisición de
la ortografía.......................................................................... .38
IV. Experiencias didácticas para abordar la ortografía en la escuela primaria.
III.1 Papel de las instituciones educativas en la enseñanza
de la ortografía..................................................................... .44 III.2. Metodología......................................................................... .47 III.3. Experiencias docentes..................................................... 52 III.4 Mi experiencia con la enseñanza de la ortografía............ ..57 Conclusiones................................................................................ ..66 Bibliografía.................................................................................. ..71
INTRODUCCION
El papel que la ortografía juega en el lenguaje escrito es imprescindible, es un arte
que puede dominarse por medio de trabajo constante. Este hábito debe enseñarse
en la educación primaria principalmente en la que el papel de la escuela y del
maestro es muy importante.
Mi trabajo está dividido en tres capítulos:
En el primero hablo sobre el lenguaje como el medio más efectivo que el hombre ha
utilizado para comunicarse con sus semejantes desde hace varios milenios y cómo
a través del tiempo, el lenguaje ha ido modificándose en el espacio geográfico,
social, económico y político.
Considero que el lenguaje, como medio de comunicación, puede ser estudiado a
través del análisis de los elementos que conforman la comunicación, y resaltar que
es importante que existan regulaciones para lograr una comunicación efectiva, que
sean sólidas para los hablantes del mismo idioma; sobre todo en el lenguaje escrito,
donde la comunicación se da a través de papel, o de medios electrónicos como la
computadora, y donde no pueden corregirse los errores con gestos o ademanes en
caso de emitir alguno.
La comunicación la conforman diversos elementos: el emisor (el que escribe), el
receptor (el que lee), el mensaje (lo escrito), el código (el lenguaje que se usa), el
medio o canales (la hoja de papel), dentro de los cuales se hace presente la
ortografía.
En el siguiente capítulo hago referencia a la problemática de la ortografía en la
enseñanza de la escritura enfocándome en el desarrollo del niño de siete años que
cursa el segundo grado de educación primaria .Es importante que los niños en esta
etapa de su vida escriban con corrección, esto implica una buena ortografía. Las
reglas básicas de ortografía pueden y deben adquirirse; se requiere de paciencia,
dedicación y constancia, por parte del niño e instructor en donde es de relevada
4
importancia promover en ambos el gusto por la escritura y la lectura; también es
importante crear el hábito de buscar el significado social y acorde, ya sea con ayuda
del diccionario o de alguien capaz de resolverla, sea el profesor , padre, etc.
Trato también la expresión oral que se inicia desde el seno materno, principalmente
con la voz de la madre, y la expresión escrita, que es cuando el niño ya es capaz de
escribir se abre a un mundo nuevo de expresión que también influye, a su vez, en la
comunicación. Hablo sobre las dificultades en el proceso de la adquisición de la
ortografía, donde los vicios adquiridos en primaria son muy difíciles de erradicar. El
profesorado de primaria tiene una gran responsabilidad en la enseñanza de la
ortografía. Las habilidades que un niño debe adquirir son interdisciplinarias y su
aprendizaje refleja una serie de conocimientos, entre ellos, la ortografía, la cual
debe tener prioridad, porque la lecto-escritura es la base de donde despegan otros
conocimientos posteriores.
Sucesivamente hablo sobre la metodología para la enseñanza de la ortografía , en
donde el aprendizaje de la misma se logra leyendo en primera instancia,
escribiendo, estudiando y aplicando las reglas, utilizando el diccionario, para mas
tarde relacionar la palabra escrita con su significado, que es la clave para lograr una
buena ortografía.
Con esto doy la pauta para el penúltimo capítulo donde abordo el papel que deben
tener las instituciones educativas en la enseñanza de la escritura y ortografía, es
en este nuevo ámbito social en donde el niño se desenvuelve, y aprende el
lenguaje, es en la escuela donde este mundo se expande y se inicia normalmente
la lecto-escritura; donde puede desarrollarse su gusto por escribir correctamente
considerando que la enseñanza de la ortografía depende tanto de la institución
educativa con sus programas y proyecciones escolares, así como también de la
dedicación del maestro en cada aula en particular.
Por último, menciono mi experiencia docente, incluyendo mi práctica profesional
realizada en la Escuela Primaria Héroes de Chapultepec, adscrita a la Delegación
de Tlalpan, donde apliqué los conocimientos adquiridos en la Universidad
Pedagógica Nacional.
5
I. IMPORTANCIA ACTUAL DE LA ORTOGRAFÍA EN LA ENSEÑANZA DE LA
ESCRITURA
I.1. EL LENGUAJE
Mabel Manacorda, al hablar sobre la comunicación humana señala que “El ser
humano para vivir, para realizarse totalmente, tiene que actuar en grupos, es decir
en sociedad, y para establecer relaciones sociales con los miembros del grupo en
que se desenvuelve tiene que utilizar señales que le permitan comunicarse con los
demás”.1Estas señales representan objetos y actividades, se llevan a cabo en este
mundo en el que se capta y se vive intensamente cada acontecimiento. Así, el
lenguaje se va forjando por la necesidad de laborar en conjunto y de crear
instrumentos de trabajo.
La necesidad de unir actos y pensamientos para la resolución de una tarea común
obliga a la gente a elaborar un sistema lingüístico para nombrar los fenómenos y
acontecimientos con igual significado para los que forman parte de esa producción
de sonidos.
En la medida en que el pensamiento humano se desarrollaba sobre la base del
trabajo y convivencia social, se enriquecía también el lenguaje, convirtiéndose en
parte del conocimiento y patrimonio humano.
Podemos decir junto con J. Romero Rivas que “El lenguaje cumple una función
social, es un instrumento fundamental en la regularización de los intercambios y en
la comunicación. Una lengua es el depósito de la memoria colectiva de la
comunidad o comunidades que la hablan y es, a la vez, el instrumento que permite
integrar al niño en la comunidad que le acoge. El lenguaje ha de ser considerado
como el instrumento con el que los interlocutores producen y negocian significados
en el marco de una situación de comunicación” 2
1 Mabel Manacorda . La gramática estructural en la escuela primaria Pág.67 2 Romero Rivas José. Lenguaje y Comunicación Pág.6
6
El hombre primitivo formaba una sola cosa entre su actividad y el objeto con que se
relacionaba; ambos formaban una unidad indeterminada; poco a poco el lenguaje
fue dándole sentido a esa unidad social.
El lenguaje se hace más fluido y ordenado al repetirse las experiencias.
Transmitiéndose de unos hombres a otros, este sistema que sirve para generalizar,
fijar y transmitir la experiencia se enriquece y perfecciona cada vez más bajo la
influencia de la experiencia social y se hace más amplio, formando al fin el idioma
constante de la sociedad.
Buscamos palabras a través de nuestra existencia para expresar lo que queremos
decir. El niño aprende el lenguaje por su necesidad de comunicarse y de escuchar a
los demás; aprende las unidades de la comunicación humana, sus significados y el
encadenamiento que las une.
Herder Ernest Fisher al hablar del lenguaje comenta que “es el más rico y
complicado código de señales de que disponemos; es un conjunto de signos que
permiten matizar cuidadosamente las señales que emitimos los hablantes”3
Usamos el leguaje sin pensar en lo importante que es para nosotros poder
comunicarnos con efectividad; encontrar en el momento justo la palabra necesaria,
con la inflexión de voz adecuada y el tono justo de acuerdo a cada situación. Por
ejemplo: según el estado de ánimo que nos encontremos manejaremos el habla de
diferente manera, al igual que si queremos advertir a un niño que tenga cuidado de
no lastimarse será diferente la entonación de nuestra voz; para llamarle la atención
si desobedeció una petición o al contrario nuestra forma de hablar será más afectiva
si se le mima o si se le dicen palabras con una modulación suave; dependiendo
de cada situación que se nos presente en la cotidianidad será la pronunciación de
las palabras sin tener una predisposición al hablar porque no sabemos qué es lo
que pueda ocurrir en el transcurso de cada día o en la vida misma.
3 Herder Ernest FISHER. Universidad Pedagógica Nacional. El Lenguaje en la escuela. Antología. Pág. 12.
7
La función primordial del leguaje es la comunicación del pensamiento tanto oral
como escrito, lo que logra la vida de relación entre grupos sociales y establece un
enlace activo entre el pasado y el presente, además de hacer posible la proyección
de la humanidad hacia el futuro.
Las lenguas no son una calca de una realidad invariable vista del mismo modo por
todas las lenguas. La experiencia de cada pueblo o nación, su situación política,
social, cultural y geográfica, determina el tipo de códigos usados en el lenguaje.
Cuando las lenguas son habladas en una vasta región territorial, como el español,
los códigos tienden a diferenciarse por ejemplo: la palabra foco se usa en México;
en Chile se le conoce como ampolleta, en Cuba como bombilla. También las
lenguas se modifican a través del tiempo y de la historia, incluso encontramos que
en una misma ciudad se pueden encontrar modalidades y diferencias sociales que
permiten ubicar a los hablantes en relación con su nivel sociocultural. Por ello, el
lenguaje está íntimamente relacionado con la cultura, con la historia de los pueblos
y con los estratos sociales, porque el habla varia de acuerdo con el tipo de personas
en las diferentes clases sociales, y en las diferentes comunidades.
Los elementos lingüísticos no se estudian aisladamente sino como partes
integrantes de una totalidad, dentro de ellos el idioma o lengua podría definirse
como un sistema de signos distintos producidos socialmente de manera deliberada
para servir como instrumentos de comunicación. Estos signos se rigen de código y
reglas para su uso.
Dentro de los componentes de la comunicación, está el emisor, al que también se le
ha dado el nombre de fuente, codificador, comunicador, actor.
El emisor es quien produce el mensaje. El emisor tiene un objetivo, un propósito y
una razón para iniciar la comunicación. Este inicia y guía el acto de comunicación.
Este momento de emisión del mensaje se caracteriza por la necesidad de
transformarlo en hecho objetivo para transmitirlo al interlocutor; para ello, el emisor
debe determinar dentro del cúmulo de ideas, cuál es exactamente el mensaje que
quiere transmitir.
8
El emisor debe emplear un lenguaje que pueda comprender el receptor. Los signos
utilizados deben tener un significado común, utilizando elementos que sean fáciles
de decodificar e identificar en el contexto cultural dentro del cual se realiza la
comunicación. Sus creencias culturales y valores dominantes, las formas de
conducta que son aceptables o no, exigidas o no por su cultura.
El emisor desea que su mensaje tenga alta fidelidad y ello depende de sus
habilidades comunicativas, dentro de las cuales se encuentran: las habilidades
codificadoras, que serían leer y escuchar y el pensamiento o reflexión. El emisor
debe poseer las habilidades lingüísticas necesarias que codifiquen en forma exacta
el mensaje.
Aquí hablo de reglas, y en forma particular de reglas de ortografía.
Así pues, existe en el lenguaje escrito un propósito para la comunicación y una
respuesta para producirse. Estamos inclinados a pensar en cosas que hemos
experimentado y para las cuales poseemos nombres que podemos manipular y
visualizar. El nombre es esencial para pensar. Un hombre de habla española
utilizará mesa, un hombre de habla inglesa utilizará table, etcétera.
El receptor del mensaje puede ser uno mismo, otra persona o un auditorio.
Se entiende código como un sistema estable de signos que se necesitan para
recibir y transmitir el mensaje.
El stok (conjunto de alternativas) dentro del cual se escogen las unidades del
lenguaje para construir los enunciados comprende también el conjunto de reglas,
según las cuales, está permitido combinar las unidades entre sí.
Aprendemos palabras a partir de las combinaciones de los sonidos orales y
adquirimos significados a partir de las percepciones, objetos y palabras para las
cuales ya tenemos significado y después las plasmamos en signos más perdurables
que son las palabras escritas.
9
La palabra signo no es la cosa, solo la representa y para ellas no existen
significados correctos. Los significados no están en las cosas sino en la gente. No
todo el mundo tiene el mismo significado para la misma palabra. Por ello es muy
importante que emisor y receptor estén de acuerdo en su significado y que exista un
código común en cuanto a las reglas de la escritura, lo que seria la ortografía.
Extraemos significados de la escritura cuando una palabra- signo nos ayuda a
captar otra palabra- signo o cuando la secuencia de las palabras-signos nos enseña
algo sobre una relación. Los significados son personales, cuando aprendemos los
significados, les agregamos algo, los desfiguramos, los olvidamos y los modificamos
cada vez que nos comunicamos.
Evidentemente el significado está en relación con los códigos que elegimos al
comunicarnos. Utilizamos el lenguaje para expresar y producir significados. Este
código, como ya se mencionó, debe adaptarse al receptor, a sus posibilidades de
decodificación y a su repertorio conocido.
Las palabras las usamos como sustitutos conocidos y portátiles de las cosas y sólo
utilizamos las unidades de pensamiento que están ligadas a nuestra experiencia.
Esto es muy importante en la enseñanza de la ortografía, ya que sólo serán
significativas aquellas palabras que conocemos y utilizamos.
El mensaje son los códigos y contenidos seleccionados y estructurados por la
fuente de comunicación.
Es una selección ordenada de contenidos y códigos; ordenada porque buscamos
una disposición deliberada de selección y porque fueron escogidos de entre un
conjunto mayor de alternativas.
Los canales son los elementos por donde fluye la información, une la fuente con el
receptor y les permite comunicarse. El canal en este estudio sería el mecanismo
verbal o escrito y el auditivo o visual del receptor. Son los sentidos a través de los
cuales un decodificador receptor puede percibir un mensaje que ha sido transmitido
por la fuente codificadora.
10
Codificar y decodificar son imprescindibles en el proceso de la comunicación. Giles
en Pio Ricci Bitti, pone de relieve dos aspectos que operan en el proceso de
codificación y que consisten en el control del lenguaje propio y el control del
comportamiento ajeno.
Un codificador de alta fidelidad es aquel que expresa en forma perfecta el
significado de la fuente. Nuestra esencia como seres humanos reside en la facilidad
para codificar y decodificar los estímulos lingüísticos, en interpretarlos y en darles
significado, en donde toma un papel muy importante la ortografía.
El proceso de comunicación, dice implica toda la actividad interior prelocutoria, es
decir las frases que preceden a la exteriorización y en las que se realiza la
organización interior del mensaje que se expresa.
El proceso de codificación comprende una serie compleja de operaciones a nivel
cognoscitivo, emotivo-afectivo, interpersonal, los que se encuentran estrechamente
interrelacionados. Por ello la comprensión de un mensaje se da sólo cuando éste
se ha colocado en el interior de un contexto.
El proceso de codificación comprende una serie compleja de operaciones a nivel
de decodificación. Este es un proceso dinámico activo que comporta una rica
actividad consciente, atención y esfuerzo para recaudar todos los datos
necesarios para la comprensión de lo expresado.
Junto a la percepción y reconocimiento de los signos existe una operación
fundamental a saber; la interpretación de las señales proporcionadas, así como las
experiencias vividas por el receptor. Influyen en ella tres factores: la sensibilidad
física, la atención selectiva y la categorización como probable resultado de un
proceso de preatención.
El receptor es el que recibe e interpreta el mensaje. La forma en como lo reciba
dependerá de sus formas habituales de conducta y del ambiente en el cual está
inmerso.
11
El receptor debe conocer a qué se refiere el contenido del mensaje y la naturaleza
del proceso; si el receptor no posee la habilidad de leer, escuchar y pensar, no
estará capacitado para decodificar los mensajes que la fuente codificadora ha
transmitido. Hay que tomar en consideración que el receptor puede tener también
sus propósitos al recibir un mensaje, por ejemplo en la lectura de un libro o en ir al
cine a ver una película. El receptor de un mensaje puede ser uno mismo, otras
personas o un auditorio.
Por último hablaré de lo que se interpone entre el transmisor y el receptor, que
pueda entorpecer y deformar, e incluso anular el mensaje
Son factores que distraen y distorsionan la calidad de una señal. La eliminación de
alguna cuestión que pueda intervenir con la intención del mensaje aumenta la
fidelidad. Encontramos deficiencias en el código cuando no se utilizan o se siguen
las reglas de ortografía; en estos casos podemos dominar o superar ese obstáculo,
lo podemos suprimir o reducir real o subjetivamente al escribir correctamente, o
eliminar indirectamente los efectos negativos del lenguaje sobre el mensaje; leer en
voz alta para poder entender lo que dice un texto con muchas faltas de ortografía.
El ruido en la comunicación oral y escrita limita la transmisión efectiva del mensaje.
Reed dice que existen dos tipos principales de ruido en la comunicación: el del
canal y el semántico.
El del canal dice, es cualquier ruido que perturbe la fidelidad del mensaje, en la
comunicación escrita puede ser letra pequeña, tinta borroneada, mala ortografía,
problemas de visión. Estas son también todas las causas de distracción entre la
fuente y el auditorio.
El ruido semántico es la interpretación equivocada del mensaje: Discrepancias entre
los códigos del emisor y receptor, palabras demasiado difíciles, diferencias en el
significado de las palabras o en los significados que ellos asocian a las palabras,
estructura de organización confusa para el receptor, diferencias culturales,
estructura de oración confusa, mala ortografía. Cualquier sonido o fonema transmite
una idea a la mente que lo percibe (vaya, baya, valla); seremos más efectivos en la
12
transmisión de nuestro mensaje si utilizamos el mismo código. Por ejemplo en la
oración: ¡Vaya, vaya! Que la vaca baya saltó la valla con una baya en la boca.
George Mounin nos dice que la lingüística es el estudio científico de cualquier
aspecto del lenguaje, muestra que cada lengua comprende una reorganización que
puede ser particular de los datos de la experiencia y que la articulación de esa
lengua es precisamente la manera según la cual se analiza, ordena y clasifica la
experiencia común a todos los pueblos de una comunidad lingüística determinada.4
En todas las lenguas que conocemos encontramos un armazón básico:
- Un sistema fonético
- Asociación concreta de los elementos lingüísticos
- La capacidad de atender con eficacia a la expresión formal de cualquier clase
de relaciones
- Todo ello perfeccionado y sistematizado. 5
La ortografía nos dice Sergio Zamora que no es sólo un hecho estrictamente
gramatical sino que también obedece a motivos claramente extra lingüísticos. La
ortografía no es un mero artificio que pueda cambiarse con facilidad; un cambio
ortográfico representa un cambio importante en una lengua hablada; si la ortografía
cambiara para ajustarse solo a criterios fonéticos, el español podría fragmentarse
en tantas lenguas como regiones del mundo donde se habla, pues poseen algunos
hábitos articulatorios diferentes, y si se representara en la escritura, con el paso del
tiempo aparecerían graves problemas de comprensión que conducirían a la
incomunicación” 6
Para que sea posible la comunicación por medio del lenguaje, la transmisión de
algo por medio de la palabra, es necesario que lo que se transmite tenga la misma
denominación para todos los miembros de la sociedad.
4 George Mounin. Claves para la lingüística. Pág. 63 5 Raúl Ávila. La lengua y los hablantes. Pág. 73. 6 Sergio Zamora. La nueva lengua española. Pág. 11
13
Bolívar Guarderas dice: “Mediante el lenguaje nosotros expresamos algo, nos
referimos a un contenido, la lengua es forma.”7; y debe atenerse a reglas.
Es indispensable que las palabras tengan la misma denominación para todos los
miembros de la sociedad para que se pueda dar una comunicación eficaz; para ello
se requiere tener un solo criterio y mantener siempre el mismo punto de vista; lo
cual en el caso de nuestra lengua, esta tarea la ha llevado acabo La Real Academia
Española.
El lenguaje es en parte normativo y semejante a todos los que lo usan, pero
además tiene mucho de personal y creativo. Se pueden distinguir en el lenguaje dos
estratos; señala Ermilio Abreu que la lengua es el conjunto de signos que utiliza
una comunidad para entenderse; y el habla, que es el uso individual de los signos.8
Los hablantes de una lengua lo emplean aunque no conozcan sus normas y
estructura. Incluso la usan de forma particular, la adaptan a su personalidad, su
entorno social y a su educación.
Gerardo Ramos olguín comenta lo que expreso Gabriel García Márquez haciendo
referencia a la importancia del lenguaje “La humanidad entrará al tercer milenio bajo
el imperio de las palabras. No es cierto que la imagen esté desplazándolas ni que
pueda extinguirlas. Al contrario, está potenciándolas: nunca hubo en el mundo
tantas palabras con tanto alcance, autoridad, albedrío, como en la inmensa Babel
de la vida actual. Palabras inventadas, maltratadas o sacralizadas por la prensa, por
los libros desechables, por los carteles de publicidad, habladas y cantadas por la
radio, la televisión, el cine, el teléfono, los altavoces públicos, gritadas a brocha
gorda en las paredes de las calles o susurradas al oído en las penumbras del
amor.”9
7 Bolivar Guarderas. La enseñanza de la ortografía en la escuela primaria. Pág. 27 8 Ermilio Abreu Gómez Aprende a escribir. Pág. 32 9 Gerardo Ramos Olguín. Cuadernos Cervantes. Pág. 2
14
Actualmente, los gobiernos se orientan cada vez más hacia la comunicación. El
administrador público y el ejecutivo viven en un mundo de palabras; en el aspecto
internacional y la industria se orienta de igual manera hacia la comunicación;
entender a los demás y hacer qué estos nos entiendan, también se invierte mucho
dinero en conservar el material escrito, producirlo y recibirlo; el lenguaje da al
individuo conciencia del papel que está llamado a desempeñar dentro de la
colectividad y lo coloca en aptitud de manifestar sus deseos y experiencias,
haciendo a la vez posible el progreso humano.
I.2 LA COMUNICACION
La comunicación humana no es un fenómeno simple, pero la capacidad del hombre
para reflexionar sobre su propia lengua nos permite autorregular la comunicación.
Cuando establecemos contacto con las demás personas buscamos ser eficaces,
pero la autorregulación se produce no sólo por las necesidades de los hablantes,
sino porque así lo requiere el sistema lingüístico para mantener su eficacia, su
funcionalidad y su unidad.
El lenguaje se ha convertido en un instrumento de comunicación flexible, refinado e
irremplazable. La finalidad del lenguaje es comunicar.
Es importante considerar que sólo utilizamos palabras que tienen significado para
nosotros. Lo que no se nombra, no existe indistintamente; por ejemplo, para el
hombre de la ciudad existen los árboles, así puede decir, “esos son unos árboles”, y
para el todos los árboles están incluidos en este concepto; pero para el hombre de
campo, que requiere del conocimiento de las diferentes clases de árboles dirá: “ese
árbol es un fresno, ese es un olmo, ese es un abedul, etc”. Por ello necesitamos
analizar el vocabulario al que están expuestos los niños como punto de partida en la
escritura y en la enseñanza de las reglas de ortografía.
15
Ermilio Abreu señala que los elementos del lenguaje deben asociarse con grupos
enteros, con clases bien definidas de experiencias, y no propiamente con
experiencias aisladas en sí mismas. Solo de esta manera es posible la
comunicación”10
Para comunicarse dice Gauquelin, “debe ser sencillo, para lo cual se deben de
utilizar palabras cortas y usuales, porque éstas se pronuncian más rápidamente y
se escriben también más rápidamente. Las frases cortas con verbo activo o el uso
de sub frases son más fáciles de entender. Las palabras más frecuentes de una
lengua son las más breves, las más antiguas, las más simples en el plano
morfológico y las de mayor extensión semántica” 11
El mantener la comunicación implica que si nos encontramos con un extranjero que
habla mal el español y pregunta por algo, tendremos que adaptar nuestro lenguaje a
su situación para interactuar con él; lo mismo sucede con un doctor al explicarle a
un niño de siete años la intervención quirúrgica a la que tendrá que someterse.
Para analizar el modo en que los hombres se comunican a través del lenguaje
escrito se requiere, antes que nada, del análisis del mecanismo de la comunicación
para conocer los elementos que la construyen y resaltar la importancia de escribir
correctamente en la dinámica de este proceso.
Hacerse comprender ante los demás y auto comprendernos unos con otros sigue
siendo primordial en todos los actos de la vida; así mismo al comunicarnos
establecemos contacto con nuestro entorno, transmitimos y hacemos circular la
información.
La comunicación es un proceso que podemos analizar y mejorar. Así, de ser una
actividad inconsciente, logramos una actividad más consciente por medio de la cual
podemos controlar nuestros pensamientos y emociones, y a través de ello,
modificar nuestra conducta y lograr ser más humanos en nuestro contacto con las
demás personas, influir en el medio ambiente y más plenos con nosotros mismos. 10 Ermilio Abreu Gómez. Op. Cit: Pág. 34. 11 Francoise Gauquelin. Saber comunicarse. Pág. 27.
16
Evitar incurrir en las faltas de ortografía mejorará nuestra comunicación en
diferentes planos de nuestra vida.
El objetivo básico de la comunicación es convertirnos en agentes conscientes y
expresivos. Por ello entendemos que manejamos de forma consciente los
elementos que requerimos, para poder comunicar lo que realmente queremos,
buscando las palabras adecuadas, las inflexiones de voz, la puntuación, la
ortografía. La ortografía es el código o conjunto de reglas que rigen sobre la
comunicación escrita que utilizamos y deben concordar para el receptor y el
emisor.
Según Ermilio Abreu Gómez la comunicación tiene tres funciones con respecto al
individuo:
a) Le proporciona un esquema del mundo, b) le define su posición con respecto
a otras personas y c) le ayuda a adaptarse con éxito a su ambiente. 12
Una forma muy importante de comunicación es por medio de la escritura ya que se
nos da como una actividad tan cotidiana que, a veces no le prestamos suficiente
atención. La encontramos en la correspondencia, los diarios, las cartas que
escribimos o dictamos, los menús, entre otras la usa el medico en sus recetas, el
comerciante al registrar sus ventas, el ama de casa en sus recetas, los trabajadores
al anotar instrucciones; el poeta, el escritor, el maestro, la burocracia.
Constantemente nos estamos comunicando unos con otros y no siempre somos
conscientes de ello. Es importante tomar en cuenta la gran cantidad de ocasiones
que también tienen los niños para escribir; usan sus cuadernos para escribir y
dibujar, se mandan recados, escriben en el pizarrón, copian textos y diferentes
letras; por que diario están en contacto con etiquetas de productos que consumen,
en los comics que ven, en los juegos de mesa, en los anuncios espectaculares, por
la televisión, en las diversas propagandas; todas estas actividades que se dan en la
escuela abren la gama de usos de la lengua escrita a la cual están expuestos los
12 Ermilio Abreu Gómez. Op. Cit. Pág. 33
17
alumnos o en la cual participan. En estas experiencias conjuntas el niño se va
apropiando de la lectura y la escritura.
Por esto se dice que la escritura no es un sistema de signos que expresan sonidos
individuales del habla, es una forma de representación grafica del lenguaje y
requiere de un aprendizaje, estudio y práctica constante. Aunque el texto escrito se
relaciona directamente con el dibujo, la escritura no es un derivado del dibujo; para
pasar a la escritura se requieren de procesos de reflexión sobre el lenguaje, y a su
vez la escritura ya constituida permite nuevos procesos de reflexión que no se
podrían dar sin ella; el niño pasa de saber hacer, que es el niño que ya habla, a
saber acerca de, que es el niño que ya escribe.
Dentro del lenguaje escrito podemos distinguir:
• La lengua discursiva.- que trata de comunicar fielmente el pensamiento.
Busca un vocabulario preciso y una construcción simple. Aparece en obras
científicas, textos y manuales.
• La lengua expresiva.- que da a entender por medios indirectos la actitud de
escritos. Predomina la imaginación, deseos, modos de volar. Usa un
vocabulario rico en matices, construcciones no habituales, comparaciones,
imágenes, efectos sonoros o musicales. Es sinónimo de lengua literaria
cuando son creadas con intención de belleza.
Cuando hablamos o escribimos damos información sobre nosotros, aunque no lo
deseemos; nuestra manera de hablar o de escribir ofrece a quien nos escucha o
lee un gran número de datos sobre nosotros mismos; dejamos nuestra huella
personal, manifestamos nuestras actitudes y estado de ánimo, o nuestra
pertenencia a un grupo social determinado.
18
Para expresarnos con claridad y precisión tenemos que respetar las normas y
utilizar correctamente todos los elementos del lenguaje escrito para que quien lea
nuestros escritos, sepa entenderlos tal y como hemos querido expresarlo,
manejando bien las ideas para poder desarrollar bien nuestros pensamientos.
Ermilio Abreu Gómez dice que: la facilidad lingüística de una fuente de
comunicación es un factor importante en este proceso. En nuestra calidad de
fuentes de comunicación nos hallamos limitados en cuanto a capacidad para
expresar nuestros propósitos, si no poseemos las habilidades necesarias que
codifiquen en forma exacta los mensajes.”13
Si la principal función del lenguaje es la comunicación “escribir bien” por lo tanto es
saber comunicarse lo mejor posible.. La práctica constante y razonada de la lengua
escrita es un proceso de comunicación que nunca finaliza; siempre podemos
hacerlo mejor por la capacidad humana de recrearnos a nosotros mismos a través
del lenguaje.
Por otro lado los medios de comunicación han influenciado de manera determinante
las formas de cómo nos comunicamos unos con otros; por ejemplo existen
actualmente programas en los cuales la manera de hablar es copiada por los niños,
jóvenes y personas adultas que manejan el lenguaje tal y como lo escuchan
creyendo que así lograran parecerse al personaje que se les esta presentando por
la televisión, esto ha generado una manera de ser y de pensar de acuerdo con lo
establecido por las diferentes cadenas informativas
13 Ibidem. Pág.42.
19
I. 3 EXPRESION ESCRITA
El lenguaje es la forma más completa y total de expresión humana, ya sea para
expresar los propios sentimientos, sensaciones y pensamientos o para recibir la
comunicación de los demás y corresponder a ella en forma de diálogo o
conversación.
En el momento de expresarnos es cuando construimos nuestro mundo interior, le
damos forma y lo unificamos. Así mismo, esta capacidad de expresión es la que nos
hace aptos para asumir lo que nos rodea, para interpretar y deducir lo que vemos y
observamos en los demás y el mundo circundante.
El niño se inicia en el mundo del lenguaje desde que nace; algunos científicos han
demostrado que aun antes de nacer, en el seno materno, el niño ya tiene contacto
auditivo con las personas que rodean a la madre y principalmente con ella, a la que
escucha constantemente.
El niño pequeño expuesto a oír de una manera repetida el lenguaje hablado,
aprende a descubrir las diferentes unidades y su encadenamiento, antes incluso de
llegar a dominar su propia conducta; el niño comienza a dominar su entorno con la
ayuda del lenguaje. Este le facilita crear nuevas relaciones con el entorno y una
nueva organización de su propia conducta. En una primera etapa, el lenguaje
acompaña a las acciones del pequeño y refleja la problemática de la resolución de
problemas en forma caótica y desorganizada; pero más tarde, el lenguaje acaba por
preceder a la acción.
El niño va reconociendo poco a poco palabras que van adquiriendo significado para
él. El vocabulario con que el niño está en contacto tanto en su casa como en la
escuela formará parte de las palabras más importantes para él. Este vocabulario
básico será el que para el niño tendrá más importancia a la hora de escribir. “No
existen en sentido estricto, órganos del habla; lo que hay son solamente órganos
20
que de manera incidental pueden servir para la producción de los sonidos del habla;
los pulmones, la laringe, el paladar, la nariz, la lengua, los dientes y los labios.”14
Los elementos básicos de un idioma son los sonidos. Agrupamos estos elementos
en lo que llamamos fonemas y después en grupos de sonidos de un nivel más alto
llamados morfemas, los que se estructuran para formar las palabras; la estructura y
los elementos coexisten, no se dan separadamente.
Todos hablamos de acuerdo con el uso o la norma lingüística de la comunidad a la
que pertenecemos; la gramática y el sentido común prácticamente son adquiridos
por todas las personas, sin esfuerzo, de una manera uniforme, simplemente
viviendo en una comunidad bajo las condiciones mínimas de interacción, exposición
y cuidado.
En casa, el niño ya ha experimentado el concepto de un primer lenguaje, a través
de la participación y ayuda de mamá.
Los niños requieren de la ayuda de los adultos para ampliar su vocabulario y
aprender la coordinación en oraciones del lenguaje. Al enriquecer su lenguaje
enriquecen su pensamiento también. El niño para alcanzar su pleno desarrollo
intelectual necesita ser socializado y civilizado.
“Los instrumentos de la ortografía, las letras del alfabeto, ya forman parte de la
dotación que muchos niños pequeños llevan consigo a la escuela. Los padres han
aportado este conocimiento en la creencia de que facilitará el aprendizaje de la
lectura y la escritura.”15
Entre todas las creaciones revolucionarias del hombre, la escritura descuella como
la suprema hazaña intelectual. Fue inventada hasta en seis épocas diferentes y en
lugares distintos como China y América Central.
14 Edna Horrocks y Grace Sackett. Lectura, ortografía y composición en la escuela primaria. Pág. 68. 15 Edna Horrocks y Grace Sackett. Op. Cit. 70.
21
La forma oral fue la primera que el hombre empleó para exteriorizar o expresar sus
pensamientos; pero con ella sólo podía comunicarse con las personas vecinas, y
cuando tuvo la necesidad de hacerlo con otros hombres a través de las distancias y
de las épocas inventó signos que hicieron perdurables sus pensamientos y sus
experiencias.
La escritura comienza con simples trazos o puntos principalmente para registrar
objetos o números. Para prolongar la duración de supervivencia del mensaje, al
hombre se le ocurrió grabarlo en piedra, luego en arcilla; las primeras escrituras
fueron pictogramas; cada idea se representaba por una escena completa. Así en el
cuarto milenio antes de nuestra era nace la escritura cuneiforme en Mesopotamia,
la que también se utilizó para registrar textos de filosofía y religión.
Más adelante, con los egipcios se crea la escritura a través de jeroglíficos: éstos se
usaban principalmente para las transacciones comerciales y para satisfacer las
necesidades de los faraones y sacerdotes egipcios. Pasó luego a las palabras y
llego a las silabas; y finalmente, el signo que termina por corresponder a un sonido
aislado, separando las vocales y las consonantes.
Así, en el segundo milenio antes de nuestra era (1500 y 1300 a. C.), nace el
alfabeto fenicio, que fue el precursor de nuestro alfabeto actual; en el se hallan las
raíces de todos los sistemas alfabéticos. Las diferentes escrituras alfabéticas se
basan en lo mismo: son una serie de signos escritos que representan, en teoría, un
único sonido del habla. Estos signos se usan intercambiándolos para formar las
diferentes palabras de que están compuestos los idiomas.
En el siglo XI a. C. los griegos perfeccionaron el alfabeto y en el siglo IX d. C.
aparecen las letras minúsculas con trazos hacia arriba y hacia abajo.
El alfabeto, según el cual a cada signo corresponde un sonido del lenguaje, supone
grandes ventajas: a) el número de signos que hay que aprender es reducido, b) aun
siendo desconocida una palabra, puede ser fonéticamente descifrada de inmediato,
c) la clasificación de las palabras se facilita siguiendo el orden alfabético, de donde
22
viene la posibilidad de construir un diccionario de uso corriente; esto facilita
grandemente la escritura.
Sin embargo la lengua es una cosa demasiado compleja para plegarse fácilmente a
la lógica de su escritura alfabética; así nos encontramos con redundancias
ortográficas, consonantes dobles, signos diversos para un mismo sonido.
Los griegos transmiten el alfabeto a Europa, Asia y Oriente. Desde entonces la
escritura ha sufrido todavía múltiples variaciones de formas y estilo que han
conllevado a adelantos como la aparición de la imprenta en 1436 y la de las
computadoras en el siglo XX.
Con la imprenta se alcanza la mente de muchos otros y se da la conclusión
necesaria para la información personal y su impulso crea nuevos hábitos. Con la
práctica de escribir se descubre que el pensamiento es susceptible de traducirse en
forma gráfica, lo cual significa romper las barreras del espacio y del tiempo.
Y por ello que entre más conocemos nuestra lengua y más la manejamos como en
las obras literarias, más se requiere del uso adecuado de las reglas de ortografía.
El lenguaje escrito consiste en un sistema de signos que designan los sonidos y las
palabras del lenguaje hablado, y que a su vez, son signos de relaciones y entidades
reales. Hasta que el lenguaje hablado desaparece y el lenguaje escrito se
transforma en un sistema de signos que simbolizan directamente las relaciones y
entidades entre ellos.
La escritura es nuestro instrumento más natural para comunicarnos y su desarrollo
y evolución han contribuido a mejorar nuestras relaciones con los otros, con las
cosas, y a expresar mejor nuestras ideas y sentimientos.
A través del tiempo se han cambiado las formas de escribir los signos y de
pronunciar las palabras, las lenguas y sus escrituras han ido por caminos
divergentes; esto ha influido en nuestra manera de escribir.
23
“El pensamiento es un instrumento de experiencias, su materialización en el
lenguaje escrito también lo es, así la educación no es una preparación para la vida,
sino la vida misma”16.
Al hablar de lenguaje escrito necesariamente incluimos la lectura en silencio y en
voz alta, porque hay una estrecha relación entre ellas, y su fundamento es la
expresión por medio de la escritura.
“La enseñanza inicial en la lectura procura ayudar al niño a “ver” las letras y a “oír”
bien los sonidos: es el proceso denominado de discriminación visual y auditiva.
Cuando el niño lee, mira las palabras de una página y lee las letras de cada
palabra. Sin embargo, cuando el niño deletrea una palabra debe visualizar las letras
en su mente y transferirlas luego a una página en la secuencia correspondiente.”17
Aunque la expresión oral es la primera manifestación, el lenguaje escrito influye
también en el desarrollo del lenguaje oral; ambos se desarrollan mejor cuando el
niño se dispone a relatar lo que ha leído, en escribir el resumen de lo que va a
relatar, o cuando escribe las ideas fundamentales de lo que ha leído.
Al escribir adquirimos una nueva forma de expresión y comunicación.
Las asociaciones auditivo-motoras están presentes al leer o pensar. Cuando
hablamos, leemos, o escuchamos nos relacionamos con las imágenes auditivas, y
cuando hemos dominado la escritura también con las imágenes escritas.
“Para el aprendizaje de la ortografía, la memoria de imágenes es un “factor
positivo”, esto es: la capacidad para recordar la secuencia de las letras de una
palabra mediante una memoria fotográfica,
la capacidad para aprender la ortografía de una palabra nueva mediante el examen
intensivo de las letras y la memorización de su secuencia, la capacidad para escribir
automáticamente la palabra completa y para examinarla para “ver si parece bien 16 Luz Maria Morales Zavaleta. Didáctica critica de la ortografía. Revista Nueva Época Siglo XXI. Vol. 17 Edna Horrocks y Grace Sackett. Op. Cit. 71.
24
escrita” y la capacidad para utilizar la pronunciación como ayuda para la
ortografía.”18
Al iniciar la escritura, el niño ya maneja un número considerable de palabras y trae
consigo un conjunto de conocimientos acerca de su idioma y su uso. Aprende poco
a poco a relacionar el sonido de las palabras con su escritura. Con esto se da un
proceso de adquisición de la escritura donde se dice que cuando los niños ingresan
a la escuela ya han iniciado el trabajo de reflexión sobre la escritura, ya que en la
sociedad actual los textos aparecen en forma permanente en el medio: propaganda
en la calle y en la televisión, periódicos, revistas, libros, envases de alimentos, de
productos de limpieza, por ejemplo:
A continuación se muestran las diferentes conceptualizaciones de los niños que
caracterizan los distintos momentos evolutivos del proceso de adquisición de la
lengua escrita.
• Escrituras diferenciadas: Las producciones de los niños representan
diferentes significados mediante diferencias objetivas en la escritura. Cuando
el repertorio es bastante amplio el niño puede utilizar grafías diferentes, todas
o algunas, para palabras diferentes. Es el descubrimiento que el niño hace
de la correspondencia entre la escritura y los aspectos sonoros del habla que
marca el inicio del siguiente momento evolutivo.
• Representaciones de sitio silábico: Esta correspondencia requiere un ajuste
entre la cantidad de grafías y los recortes sonoros de las palabras que el niño
puede hacer. Al tratar de interpretar los textos, el niño elabora y prueba
diferentes hipótesis que permitirán descubrir que el habla no es un todo
indivisible. El niño hace correspondencia grafía-silaba, es decir, a cada silaba
de la emisión oral le hace corresponder una grafía. Por ejemplo, que la A
representa cualquier silaba que la contenga (ma, sa, pa).
18 Ibidem. Pág. . 65.
25
• Representaciones e interpretaciones presilabicas: En un primer momento los
niños consideran el dibujo y la escritura como elementos indiferenciados.
Para estos niños los textos no remiten a un significado, son interpretados
como dibujos, rayas, letras, etc. Posteriormente sus representaciones
manifiestan diferencias objetivas entre una y otra, porque consideran que los
textos representan los nombres de los objetos.
• Representaciones e interpretaciones silábicas: Las reflexiones que realiza el
niño le permite establecer una relación entre las emisiones sonoras y los
textos. Una emisión sonora larga le corresponde un texto largo; a una
emisión sonora corta le corresponde un texto corto. Descubre que el habla no
es un todo indivisible y hace corresponder cada grafía a cada una de las
sílabas que componen la palabra.
• Representaciones e interpretaciones alfabéticas: Cuando un niño ha
descubierto la relación entre la emisión oral y la representación gráfica
construye nuevas hipótesis que lo llevan a tomar conciencia de que, en el
habla, cada sílaba puede contener distintos fonos. La relación entre la
secuencia gráfica y la secuencia de fonos en el habla para que los textos
sean leídos, es decir, para que pueda obtener significado de ellos.
Cuando leemos, leemos de dos modos; las palabras desconocidas o difíciles las
desmenuzamos letra por letra, pero las usuales o familiares las abarcamos de una
sola ojeada, independientemente de las letras que las componen; la imagen de
estas palabras adquieren un valor ideológico. Así en un principio el niño leerá S I L
L A y más tarde la abarcará de una mirada, así, si el niño aprende a relacionar silla
con el objeto del mismo nombre y más tarde si ve la palabra C I Y A, aunque el
sonido sea igual, dirá que no es la misma.
La relación mental del niño con el símbolo es indispensable. Éstas serán sus
primeras palabras escritas. Aquí se inicia la enseñanza de la ortografía, con las
primeras palabras escritas.
26
La lectura en la época escolar irá aumentando su acervo de palabras y le irá
fortaleciendo el lenguaje oral, y también complicando la escritura correcta de las
palabras. Empezará a tener contacto con reglas ortográficas y palabras nuevas
constantemente al comunicarse y al leer textos escritos.
Su contacto con la lectura le abrirá un campo enorme y casi infinito de palabras. Es
importante que el niño adquiera desde siempre el gusto por la lectura y así poder
corroborar la escritura de las palabras nuevas, tanto como su significado y su uso.
“No hay defensa del idioma sin lectura, pues es de la lectura que nace la extensión
del idioma. Nuestra lengua será más fuerte en la medida en que las personas la
lean, escriban y entiendan.” 19
Porque si no leen nunca podrán hablar su lengua con la fluidez, inteligencia y
creatividad necesarias para comunicarse.
19 Ibidem. Pág. 66.
27
I. 4. DEFINICION DE ORTOGRAFIA
La enseñanza del idioma en la escuela primaria condiciona todos los demás
trabajos intelectuales que han de desarrollarse. En la aula se debe esforzar por
enseñar a hablar y escribir con sentido y con corrección; se debe hacer reflexionar
sobre el lenguaje, llamando la atención sobre el significado de las palabras, sobre el
sentido inmediato de lo que se lee, sobre los rudimentos de la estructura gramatical;
forma de las palabras , funciones psíquicas y lógicas que desempeñan: El cultivo de
esta forma de expresión afecta a todas las actividades del espíritu: a lo emotivo y a
lo intelectual; y lo que se haga por educar como hablantes a los niños vale más
aíun que por su contenido, por su valor formativo.
Ramón García Pelayo y Gross Define ortografía como el arte de escribir
correctamente las palabras con signos y letras que indican las normas del idioma.”20
Pero es bueno recordar que el lenguaje no es algo concreto y delimitado, sino algo
cambiante e incierto y , además, sometido a la interpretación del hombre. La
imprecisión, la inseguridad, la inquietud son condiciones esenciales del lenguaje; y
por estas condiciones está en todo momento, pendiente la espada del error. Es
evidente que la inseguridad al escribir sea manejada bien en la escuela. La labor del
maestro estribará en guiar al alumno a fin de que mire el idioma no como un
catálogo de palabras, sino como un mundo de formas capaces de revelar el sentir y
el pensar del hombre. Para ello procurará seguir pasos graduados, eslabonados,
coherentes y considerará que cada tarea es un problema expresivo que tiene
diferentes soluciones y que entre todas, acaso una sea la preferible. Lo que importa
es descubrir la intención expresiva del niño y no su fidelidad a las normas
gramaticales.
Para Bolivar Guarderas la ortografía es la parte de la gramática que enseña a
escribir correctamente, por el acertado empleo de las letras y demás signos
auxiliares de la escritura.” 21
20 Diccionario Larousse. Ramón García Pelayo y Gross.
28
Lo que más importa en la enseñanza de la ortografía es no adulterar la natural y
espontánea expresión del niño. Es necesario que éste tenga confianza en sí mismo
y en su idioma y , sobre todo, en sus ensayos de expresión. Sus propias
equivocaciones son útiles, pues sirven para señalar el camino y el método
adecuado para corregirlas. Al niño se le brindarán ocasiones propicias para que
descubra, por comparación sus errores y también sus aciertos. Así conocerá mejor
el valor de su escritura y llegará a entender que esté es producto de su propio
esfuerzo, de su propia inteligencia e iniciativa. El niño debe descubrir y recrear el
mundo de su escritura.
Si embargo comenta Jesús Eduardo López Acosta la convención ortográfica ha ido
perdiendo prestigio en la misma medida en que se han ido acrecentando las faltas
de ortografía en gentes de la más variada extracción social; indiferencia de amplios
sectores del profesorado ante los errores ortográficos que cometen los escolares en
sus escritos; desidia de esos mismos escolares, para quienes las equivocaciones
ortográficas carecen de la menor importancia, tanto más si producen en áreas y
materias que “nada tienen que ver” con el lenguaje; y, finalmente descuido
frecuente de los medios de comunicación, con su parte de responsabilidad en la
degradación de la lengua.”22
No podemos hablar de ortografía como algo inamovible, rígido, estático, pues la
lengua es viva y sufre cambios y alteraciones. Por ello al hablar de ortografía,
debemos centrarnos en un estudio sincrónico; ubicarnos en un tiempo determinado,
con determinadas características y en un lugar determinado en el hoy, en el tiempo
actual.
En el Congreso Internacional de la Lengua Española surgieron muchos comentarios
acerca de la ortografía. Transcribo algunos de los que consideré importantes para
explicar lo mencionado:
21 Bolivar Guarderas. Op. Cit. Pág. 29. 22 Jesús Eduardo López Acosta. http://www.aplicaciones.info/articu/arti64thtm
29
Torres Mirta y Ulrich Stella dicen que: la lengua es de todos y de nadie. ¿Y las
normas que la rigen?. Si, nuestra lengua, como todas, poseen un conjunto de reglas
pero estas reglas son flexibles y están sujetas a los usos y costumbres... El idioma
vive un perpetuo cambio y movimiento, esos cambios aseguran su continuidad y
ese movimiento su pertenencia. Gracias a sus variaciones el español sigue siendo
una lengua universal, capaz de albergar las singularidades y el genio de muchos
pueblos.”23
Las mismas autoras considerán útil la existencia de normas en el uso del lenguaje; “
pero de normas que cambien como las lenguas cambian, porque una actitud de
excesiva rigidez – lo que en lingüística se llama purismo – no tiene sentido. Forzar
la expresión es como pretender poner puertas al campo. No es posible, se escapa
por todos lados la realidad social y la lengua. Esto no significa que vayamos a
perder de una manera tonta nuestra gramática o nuestra ortografía, que son reglas
muy valiosas y muy razonables para nuestra lengua; que hay que cambiar, si, para
mantener nuestro idioma rico, fresco y vivo.”24
Al igual García Márquez expresó en el foro de Zacatecas su deseo de jubilar la
ortografía y comentó “ es el terror del ser humano desde la cuna. Enterrar las
haches rupestres, firmar un tratado de limites entre la ge y la jota y poner más uso
de razón en los acentos escritos que al fin y al cabo nadie ha de leer lagrima donde
dice lagrima, ni confundirá revolver con revolver ¿ y que de nuestra be de burro,
nuestra ve de vaca que nuestros abuelos españoles nos trajeron como si fueran dos
y siempre sobra una?.”25
Todos ellos están de acuerdo en la necesidad de reglas que rijan el idioma, reglas
flexibles, vivas, no sólo para mantener la unificación del idioma sino para mantener
una comunicación efectiva.
23 Torres Mirta – Ulrich Stella. Algunas aproximaciones al problema de la ortografía. Pág. 82. 24 Torres Mirta – Ulrich Stella. Op. Cit. Pag.82. 25 Gerardo Ramos Olguín. ¿Reformar la ortografía o reformar la enseñanza de la ortografía?. Pág. 6.
30
Cualquiera que sea la profesión escogida necesitamos tener una formación general
basada en saber leer y escribir correctamente
“¿Hes o no importante la hortografía? ¿Se trata de una cuextión esencial al decir de
shekspir o es una creasión de la mente umana para complicar laz cozas y dificultar
el acseso al conosimiento? ¿Se trata de huna consecuensia de la espesialisasión?
¿ Emos hentendido el testo antherior?.”26
Difícilmente podríamos entender un texto con faltas de ortografía. Cuando realizaba
mi servicio social en la escuela primaria; un día, una niña de ocho años, de nombre
Jazmín me contó que había recibido una carta plagada de faltas de ortografía, la
cual no podía entender, hasta que se le ocurrió leerla en voz alta. Las faltas de
ortografía impiden que la comunicación sea eficaz; el ruido que esto provoca en el
proceso requiere de auxiliares, en este caso la lectura en voz alta, pero en muchos
casos nos llevaría a la búsqueda de especialistas para poder inclusive comprender
un texto escrito.
26 Gerardo Ramos Olguín. Op. Cit. Pág. 7.
31
II. PROBLEMÁTICA DE LA ORTOGRAFIA EN LA ENSEÑANZA DE LA ESCRITURA.
I I. 1. EL DESARROLLO DEL NIÑO
En un inicio la vida mental del niño se reduce al ejercicio de aparatos reflejos. Se
integran los hábitos y percepciones organizadas que a su vez van incorporando
nuevos elementos y van formando totalidades organizadas más amplias.
Considero que es muy importante la primera etapa de la vida de un niño porque es
aquí donde se le enseñan las bases de lo que le puede apoyar en cuanto a hábitos,
valores, normas, reglas, y el instrumental para el acercamiento con sus primeras
lecturas y demás ejercicios que le puedan beneficiar, respetando su individualidad y
creatividad.
La inteligencia aparece mucho antes que el lenguaje. Es una inteligencia totalmente
práctica. Esta es la etapa que Piaget denomina sensorio-motriz. “Al parecer el
lenguaje, las conductas se modifican profundamente en su aspecto afectivo e
intelectual.”27 El niño puede ahora, por medio del lenguaje, reconstruir sus acciones
pasadas en forma de relato y de anticipar las futuras por la representación verbal.
El niño de 7 años
El niño en edad escolar se relaciona con el mundo del universo físico, social y de
las representaciones interiores. En esta etapa ya hay concentración individual
cuando el niño trabaja para sí, y colaboración efectiva cuando hay vida en común.
Puede colaborar porque ya no confunde su propio punto de vista con el de los
demás, sino que lo disocia para coordinar, lo que es perceptible en el lenguaje entre
los niños.
27 Jean Piaget. Seis estudios de psicología. Pág. 91.
32
El niño ya es susceptible de reflexión, piensa antes de actuar y surgen nuevas
formas de explicación.
El núcleo operatorio de la inteligencia tiene sus raíces en los esquemas sensorio-
motrices, en las experiencias afectivas o mentales (intuitivas) y constituyen, antes
de convertirse en operatorias, la materia misma de la inteligencia sensorio-motriz y
posteriormente de la intuición.
En la elaboración de los esquemas sensorio-motrices del primer año existe una
estrecha relación entre la percepción y la inteligencia bajo sus formas más
elementales. La inteligencia verbal o reflexiva reposa sobre una inteligencia práctica
o sensorio-motriz que se apoya a su vez en los hábitos y asociaciones adquiridos
para combinarlos de nuevo.
Silvana Sacierain dice que: las nociones de tiempo, velocidad, espacio y las ideas
fundamentales de orden, continuidad, distancia, longitud y medida, no se empiezan
a construir en forma racional sino a partir de los siete años”28
El paso de la intuición a las operaciones se da en forma de organización total y a
menudo rápida, constituyéndose siempre en función de la totalidad de las
operaciones (los números no aparecen 3, 7 y 10, sino que son captados en
sucesión ordenada 1, 2, 3, etc.).
El pensamiento del niño no se convierte en lógico más que por medio de las
organizaciones de sistemas operacionales que obedecen a leyes de conjunto.
La misma autora comenta que las nociones y relaciones no pueden constituirse
aisladamente sino que constituyen globalmente organizaciones de conjunto en los
cuales los elementos son solidarios y se equilibran entre sí. Existe una asimilación
de las cosas y una acomodación a éstas, que se traduce en un equilibrio
permanente; el niño se libera de su punto de vista inmediato para agrupar las
28 Silvana Sacierain. Alfabetización en nivel inicial. Pág. 43.
33
relaciones, lo que desemboca en la cooperación que subordina al yo, a las leyes de
reciprocidad.”29
El lenguaje es una forma particular de la función simbólica, el pensamiento precede
al lenguaje, y el lenguaje se limita a transformarlo profundamente, ayudándolo a
alcanzar sus formas de equilibrio mediante una esquematización más avanzada y
una abstracción más móvil.
La función simbólica consiste en una diferenciación de los significantes (signos y
símbolos) y de los significados (objetos o acontecimientos, ambos esquematizados
o conceptualizados).
Cuando el niño tiene seis años ha aprendido lo básico de un idioma, empieza la
escuela y el aprendizaje de la lectura y escritura (ortografía).
Aunque las grandes funciones del pensamiento permanezcan constantes existe una
creación continua de estructuras variadas, las funciones invariantes entran en el
marco de las funciones biológicas de organización y adaptación.
Adaptación es el equilibrio entre el organismo y el medio. “La adaptación no ha
equilibrio entre la acomodación y la asimilación.”30y eso no concluye hasta que el
terminado más que cuando desemboca en un sistema estable, es decir, cuando hay
sujeto deja de aprender, es decir hasta su muerte.
Emilia Ferreiro dice que: el niño es un sujeto activo que no sólo define sus propios
problemas sino que además constituye espontáneamente los mecanismos para
resolverlos. Es el sujeto que re-construye el objeto para apropiárselo a través del
desarrollo de un conocimiento y no de la ejercitación de la técnica.”31
29 Silvana Sacierain Op. Cit. Pág. 44. 30 Jean Piaget. Op. Cit. Pág. 95. 31 Emilia Ferreiro. Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. Pág.357.
34
II. 2 ADQUISICION DE LA ORTOGRAFÍA
Cuando hablamos de adquisición nos referimos al proceso de enseñanza-
aprendizaje, cuyo punto de partida está más allá de nuestras aulas, en el propio
hogar de cada niño, porque es en la cotidianidad de su casa donde se encuentra
más inmerso en el aprendizaje, está más en confianza para poder asimilar mejor el
conocimiento.
Dolores Uribe dice que: el hombre desde el momento de ser engendrado, tiene en
los cromosomas los elementos que originan la maduración e individualidad
orgánicas, consideradas como fuerzas impulsoras del aprendizaje,”32 por eso; el
aprendizaje es un cambio relativamente permanente que se da en la conducta y que
ocurre como resultado de una práctica reforzada; lo que le da al individuo la
oportunidad de adaptarse e integrarse a su sociedad y a su cultura.
La misma autora comenta que el niño aprende a expresar sus pensamientos por
medio de la palabra hablada antes que la lectura y a su vez, ambos aprendizajes –
el de hablar y el de leer - se enlazan con la adquisición de la escritura.”33
La escritura parte de la lectura. El niño necesita conocer las letras y las palabras
para transcribirlas en una hoja de papel. El niño aprende que los signos que lee se
refieren a palabras que unidas toman significado, para él es una experiencia nueva
y maravillosa. Desde un principio la ortografía va aunada al conocimiento de nuevas
palabras, el niño aprende que cada palabra tiene una grafía especifica. El niño no
sabrá lo que es ciya, pero si lo que es silla.
“Tanto el lenguaje oral como el escrito deben descansar para su desarrollo y
perfeccionamiento, en la formación sistemática de habilidades y hábitos., 34 y eso
se logra con la práctica y con el conocimiento global y estructural del lenguaje.
32 Dolores Uribe. Didáctica de la lectura y escritura. Pág. 104. 33 Dolores Uribe. Op. Cit. Pág. 81. 34 Ibidem. Pág. 59.
35
Edna Horrocks dice “que la ayuda de las nuevas series ortográficas ofrecen
actualmente lecciones en que se agrupan algunas de las palabras de acuerdo con
pautas ortográficas. Las nuevas series ayudan a los alumnos de la escuela primaria
a fijar la imagen de una ortografía idéntica como azo en palabras tales como
perrazo, bastonazo y portazo.” 35
Cuando tenemos una imagen visual, auditiva, articulada, somos capaces de escribir
las palabras correctamente. El ojo es capaz de percibir una palabra o incluso
muchas palabras en una sola imagen, pero cuando el desciframiento es demasiado
detallado le impide comprender el sentido de la palabra o de la frase.
Por ejemplo con la palabra coca cola, el niño ya sabe identificar la palabra por
medio de la imagen, puede incluso escribirla nada más viendo el refresco, esto se
da porque está viendo y escuchando la palabra constantemente y tal vez la
consume diariamente en casa; esto no ocurre con otras palabras que son
totalmente ajenas a su entendimiento, como por ejemplo palabras muy
especializadas que casi nunca las ve ni las escucha en ningún medio ni en su
propia casa porque los integrantes de su familia no poseen ese vocabulario ni son
comunes para ellos mencionarlas, entonces si no se fijan en la mente del niño ni se
reconocen fácilmente mucho menos las pueden escribir.
Dolores Uribe comenta que durante muchos años se ha utilizado en ortografía la
memoria cenestésica o muscular. Para escribir sin faltas es necesaria la
coordinación de los movimientos del cerebro, ojo, mano, y ello implica la memoria
muscular de dichos movimientos.” 36
Así mismo la autora hace notar que la capacidad de memoria cenestésica no se
desarrolla mediante la anticuada práctica de obligar al alumno a escribir cincuenta
veces una palabra, sino más bien mediante el examen visual de una palabra nueva;
luego se copia el término, se comprueba la copia y se escribe de memoria varias
35 Ibidem. Pág. 67. 36 Ibidem. Pág. 68.
36
veces la palabra en cuestión. Esta práctica de la memoria muscular es parte del
aprendizaje de la ortografía de todas las palabras”37
Es necesario una serie de procesos de reflexión sobre el lenguaje para pasar a la
escritura, pero a su vez, la escritura constituida permite nuevos procesos de
reflexión que difícilmente hubieran podido tener lugar sin ella.
Aquí me apoyo en la teoría psicogenética de Piaget y de las conceptualizaciones de
la psicolingüística contemporánea en donde se habla que pasamos de un sujeto
como receptor de conocimiento a un sujeto como productor de conocimiento. El
conocimiento se obtiene a través de un conflicto cognitivo a partir del cual el sujeto
realiza el esfuerzo de acomodación que tiende a incorporar lo que resulta
inasimilable; sin embargo, es importante considerar que no cualquier conflicto es un
desequilibrio cognitivo.
En la teoría de Piaget el conocimiento objetivo aparece como un logro y no como un
dato inicial, nos acercamos a él por grandes reestructuraciones globales, dentro de
esas reestructuraciones globales puedo considerar que son constructivas en la
medida que nos llevan a la solución correcta; por ejemplo: a una niña, a la que se le
presentan dos palitos del mismo tamaño y en medio de estos otro más pequeño,
dirá que ninguno de los tres palitos ( I i I ) es igual.
Para una psicología piagetana es importante poder distinguir, entre los errores, a
aquellos que constituyen pre requisitos necesarios para la obtención de la respuesta
correcta. En la derivación de los verbos el niño descubre una regla general y la
aplica; así dirá yo andé o está rompido; o dirá comer, comí, entonces poner, poní;
estos son errores constructivos, que no impiden, sino que acceden a la respuesta
correcta.
37 Ibidem. Pág. 69.
37
II.3 DIFICULTADES EN EL PROCESO DE LA ADQUISICION DE LA ORTOGRAFIA.
Si a un niño le toma aprender a leer y a escribir un año escolar, ¿Cuánto tiempo
debería de tomarle aprender las reglas básicas de ortografía y un dominio de la
escritura y redacción? , ¿Por qué actualmente aún en universidad, después de doce
años de estudio, no se ha logrado el dominio y el gusto por escribir correctamente? ,
¿Será una tarea tan difícil?.
Vicente Barbera menciona varios problemas en su enseñanza:
1. No puede existir un método único para enseñar ortografía; lo que funciona en
un aula no funciona en otra,
2. Se trabaja poco, mal y sin metodología.
3. Se lee de dos modos: las palabras nuevas o desconocidas se desmenuzan
letra por letra, pero las de uso familiar se abarcan de una sola ojeada, la
imagen de la palabra adquiere un valor ideológico,
4. Se aprende por ejercicio y no por la memorización. ( La relajación en su
enseñanza, la permisividad y condescendencia, no pueden llevar al
aprendizaje).38
La ortografía deficiente viene siendo un mal, que bien podríamos llamar endémico,
de la escuela primaria y más aún de las postprimarias. Frecuentemente se ven
personas de largos y aveces distinguidos antecedentes escolares y académicos a
quienes se les escapan bastantes palabras con muy mala escritura.
38 Vicente Barbera. Como enseñar la ortografía a partir de un vocabulario básico. Pág. 36.
38
“Guarderas Bolívar39 dice que las causas para que la enseñanza de la ortografía no
sea muy efectiva en la escuela primaria son numerosas. Entre ellas se destacan las
siguientes:
1.-Nuestro idioma ha dejado de ser estrictamente fonético, porque la pronunciación
de las palabras no responde exactamente a su escritura, pues de la misma manera
decimos por ejemplo, casa que caza; cocer que coser; pollo que poyo; baca que
vaca; o sea que confundimos en la dicción la c (sonido suave) con la s y z; la g
(sonido fuerte) con la j; la g (sonido fuerte) con la k; la b con la v; la ll con la y.
2.-Falta de sistematización de la enseñanza de la ortografía en la escuela primaria,
debido a que no se ha hecho un estudio meditado, profundo, general e investigativo
sobre el grado de dificultad que ofrecen las palabras en su escritura con el fin de
ordenar la enseñanza de acuerdo con dichas dificultades y con los intereses y
desenvolvimiento del lenguaje en el niño. Por el momento, hasta los programas
oficiales pecan en ese aspecto, o bien en ellos se consigna la materia de
enseñanza en términos generales como este: Uso de las siguientes letras: b, v, c, z,
s, h, g, j, m, n, y, ll, a partir del segundo o tercer grado hasta el sexto grado de la
escuela primaria; o bien se cae en el defecto de señalar mes por mes, y en forma
arbitraria, las reglas que debe aprender el niño en cada etapa escolar.
3. La ortografía carece de actividad e interés para el alumno. Unas veces se debe a
que se pretende enseñar ortografía sólo por la memorización de reglas ortográficas,
basándose en repeticiones abstractas, sin significación para el transcurrir
conciencial del niño; otras por copias o dictados de palabras u oraciones que
pueden ser tan elevadas o tan pueriles y disparatadas que están completamente
alejadas del interés infantil y carentes de emoción interna que pone en movimiento
su voluntad por aprender. Claro es que la ortografía es un producto de
memorización sensorial y no simplemente de mecanización de actos. Toda palabra
es síntesis compleja de la formación de imágenes: visual, auditiva, motriz de
articulación y motriz gráfica; luego una buena enseñanza de esta asignatura
39 Ibidem. Págs. 20-27.
39
demanda, precisamente oportunidades para que en la conciencia del niño se
formen estas clases de imágenes.
4. Uso y abuso de las reglas de la enseñanza de la ortografía; porque estas carecen
de todo fundamento psicológico, no despierta interés en el alumno y descarta la
posibilidad de realizar un proceso elaborativo hasta formar el hábito ortográfico, ya
que el eje principal de las corrientes pedagógicas modernas se empeñan en liberar
las capacidades energéticas y creadoras del niño, en respetar su libertad y
favorecer su actividad personal.
5. Otra causa responsable del poco o ningún adelanto ortográfico de los alumnos
es la falta de sentido funcional en la enseñanza de esta materia, cuya finalidad es,
lograr una buena expresión, en este caso por escrito.
6. Falta de ejercicios de fijación, comprobación y aplicación de los conocimientos
ortográficos hasta formar el hábito de escribir bien una palabra. Por ejemplo, si
escribimos o vemos escrito advertir en lugar de advertir, insensato seria decir que a
primera instancia recordamos que se usa v después de ad. Nos guió solo la
memoria grafica, que a fuerza de mucho leer y escribir forma en nuestro cerebro la
imagen exacta de la palabra. En la ortografía, tiene tanta importancia la fijación de
los conocimientos como la propia elaboración de los mismos.
7.-Toda acción que se realiza en el campo educativo es intencionada,
preconcebida; trata de alcanzar finalidades concretas; el azar y la improvisación
deben quedar fuera de los dinteles de la escuela; pero por desgracia, lo último está
precisamente ocurriendo con la enseñanza de la ortografía. El maestro absorbido
en las matemáticas, la geografía y la historia, poco o nada se preocupa de preparar
una verdadera y consciente lección de ortografía, que se inicie con la selección o
elaboración de un texto u otro motivos de percepción y termine con la aplicación de
formas de evaluación y apreciación de los rendimientos.
40
Esto puede mejorar con la posesión de una buena técnica de enseñanza, y con la
práctica de la escritura con corrección, teniendo un amplio conocimiento sobre el
asunto, aplicados con celo y espíritu científico, pueden salvar esos pequeños
escollos y librar al maestro y a la institución escolar de caer en la indiferencia de la
rutina; esto se ejercerá teniendo la necesidad o vivencia de la función comunicativa
del lenguaje, por tanto es importante generar esta necesidad y deseo en el niño.
Así el aprendizaje de la ortografía se inicia con el aprendizaje de las primeras
palabras, con ellas se va sembrando el hábito del bien escribir. El aumento de
conocimientos y de vocabulario van complicando y enriqueciendo este arte de
escribir.
Escribir correctamente lleva mucho tiempo, pero no sólo por parte de quien enseña,
sino del alumno cuyo interés, trabajo y esfuerzo lo llevan al perfeccionamiento; la
formación del hábito de escribir con certeza lleva a las personas a la búsqueda de
la correcta ortografía cuando se enfrentan con palabras nuevas, y a multiplicar las
repeticiones y asociaciones. Con esto quiero decir que a los niños se les puede
hacer complicado el manejo de la escritura, a lo mejor porque no tienen las bases
necesarias para llevarla a cabo o también por el desgano que tienen por corregir y
ordenar sus ideas con precisión y la falta de motivación en sus hogares hacen que
se vea reflejada una deficiente ortografía en sus escritos, sin embargo si existe una
adecuada estimulación y un gusto por aprender se les puede hacer menos tediosa
esta labor, empezando por ellos mismos a querer conocer diferentes palabras para
poder interrelacionarse con los demás por medio de sus escritos y así ellos tengan
presente que sus trabajos son valorados y útiles para las demás personas; esto
puede empezar desde muy temprana edad comenzando por inculcarle al niño el
gusto por la lectura y la escritura, así como buenos hábitos en cuestión de escribir
correctamente las palabras.
La formación de estos hábitos debe llevar a la automatización. Es importante
recalcar que este aprendizaje debe ser continuo y que implica el deseo de la
persona de mejorar.
41
Dolores Uribe nos dice que: uno de los rasgos peculiares de los hábitos, cuando ya
se han formado, estriba en que las acciones se realizan sin previa recapacitación,
sin fragmentar la acción mediante operaciones parciales, ni trazar un esquema
para la ejecución de la actividad. Esto sucede porque la acción habitual se ha
practicado antes muchas veces y no exige, por parte del sujeto, que fije la atención
en las operaciones incluidas en el conjunto de la actividad” 40
La ortografía no debe distraer nuestra atención cuando queremos expresarnos
oralmente, por escrito o al leer, por ello es importante la corrección y el aprendizaje
de bien escribir.
Día a día debemos practicar el descubrimiento y formar hábitos ortográficos para lo
cual ayuda mucho la lectura, el conocimiento de las reglas y de los usos fonéticos y
la aplicación que cada persona ponga al escribir.
En este proceso juega un papel muy importante la ejercitación constante y la
formación de imágenes auditivas, motoras y visuales.
Dolores Uribe destaca que la pronunciación de una palabra puede mejorar o
perjudicar la ortografía. El niño que dice dotor por doctor, refalar por resbalar,
esamen por examen, probablemente tropezará con dificultades para escribir
correctamente las palabras. La pronunciación correcta de una palabra, tanto por el
maestro como por el alumno, constituye un definido valor positivo que ayuda a
escribir bien todas las letras de una palabra.”41
La ortografía es un aprendizaje memorístico en su mayor parte, ya que las reglas de
ortografía no obedecen siempre a criterios lógicos sino también de uso y fonéticos.
40 Dolores Uribe. Op. Cit. Pág. 59. 41 Idem. Pág. 69.
42
“En los estudios realizados por Laureano Jiménez y Coria, con respecto al proceso
del aprendizaje de la ortografía se obtuvieron los siguientes resultados:
1.- La presentación visual es superior a la auditiva.
2.- Hay mejores resultados al combinar ambas.
3.- Otros estudios han comprobado que el mayor éxito se obtiene cuando las formas
auditivas y visuales se combinan con las motoras (lo que se refiere al movimiento
del brazo, mano y articulaciones de las palabras”)42
El aprendizaje de la ortografía exige la participación de la atención y de la memoria
sensorial, fundándose en la observación visual, la impresión auditiva, motora y de
articulación apoyadas en el significado de las palabras en el diccionario. Es
importante enseñar a los alumnos todos estos aspectos porque no todos los niños
de segundo grado de primaria aprenden del mismo modo; para unos es más fácil
por la vista, para otros el oído y para otros el aspecto motriz.
42 Lauriano Jiménez y Coria. Técnicas de la enseñanza de la ortografía. Pág. 380.
43
III EXPERIENCIAS DIDÁCTICAS PARA ABORDAR LA ORTOGRAFÍA EN LA
ESCUELA PRIMARIA.
III.1. PAPEL DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS EN LA ENSEÑANZA DE LA
ORTOGRAFÍA.
El contexto social más común para el aprendizaje de la escritura es la escuela, en
donde el niño aprende a socializarse, a trabajar en equipo, en grupos pequeños y
grandes; y es en ella donde se realizan las interacciones entre alumnos y maestros,
lo que tiende a agilizar y hacer lógico el pensamiento infantil.
Los alumnos al trabajar en equipo se ven obligados a buscar relaciones entre los
diversos puntos de vista y a construir un sistema de conjunto, observando y
diferenciando las diferentes opiniones y comentarios de sus compañeros; así el
pensamiento se vuelve más amplio el significado de las cosas.
José Bernal Romero Rivas dice que desde los primeros años escolares se inicia el
descubrimiento de intereses comunes: cuando el niño cursa segundo grado de
primaria, es la edad en la que se comparten secretos, se hacen cosas juntos, se
incrementan los juegos grupales de reglas y se tienen amigos inseparables que
pueden dejar de serlo por una acción incongruente con el propio interés. En
definitiva, es un momento en el que la conciencia creciente de pertenecer a un
grupo, de que es más provechoso hacer las cosas con otros que hacerlas solo, lleva
a los niños y niñas a participar activamente en las propuestas que se generan en la
escuela.”43
El profesorado puede potenciar la capacidad de interacción social. A tal fin, se debe
propiciar el trabajo en grupo, de manera que el alumno se sienta suficientemente
estimulado para participar en el, y al mismo tiempo perciba que el resultado final
que se obtiene sea producto de la colaboración y el deseo de compartir.
43 José Bernal Romero Rivas. http://didac.urizar.es/jilbernal/ordipd.html Educación Primaria. Orientaciones didácticas.
44
Los alumnos y alumnas de segundo año de primaria se van incorporando de forma
más participativa en las actividades de los grupos sociales con los que se
relacionan. La integración progresiva en otros ambientes sociales no debe hacer
olvidar que la familia sigue desempeñando un importante papel en la educación de
los niños. Desde este punto de vista, conviene cuidar las relaciones con las madres
y padres de los niños con el fin de conocer las características de cada alumno y el
contexto socio-familiar en el que se desenvuelve, con el objeto de establecer
posibles pautas de intervención comunes de la escuela y la familia.
Con base en esta idea, en la escuela primaria donde realicé el servicio social,
aplicamos un cuestionario para padres de familia acudiendo a sus domicilios para
hacerles una entrevista, ahí nos dimos cuenta del desarrollo de cada alumno en
cuanto a su aprendizaje de la escritura; percatándome que en algunos casos sí es
propicio el ambiente alfabetizador; en otros casos es muy limitado por las
condiciones del lugar o por el ambiente disfuncional de cada familia, ya que nos
percatamos que en algunos hogares solo contaban con la ayuda económica de la
mamá, o con problemas de alcoholismo por parte del papá; con esto comprobamos
que sí es muy necesario conocer el contexto socio-familiar en el que están inmersos
los niños para poder de alguna forma ayudarles con el mejor desempeño de sus
aprendizajes y pedirles apoyo a sus padres para que en ellos también se vea una
mejoría para el beneficio de sus hijos, proporcionándoles suficiente motivación y
esfuerzo de ambas partes así como de la propia escuela.
Por lo tanto Vigotski dice que al imitar el modo en que los adultos hacen uso de las
herramientas, objetos y el lenguaje el niño se siente involucrado en el proceso
social y este tiene influencia sobre él (concepción mecánica de la repetición)”44
En este proceso social podemos distinguir tres dimensiones de la escritura: La
escritura en sí, los usos escolares y el acceso a otros conocimientos por medio de
la lengua escrita. Porque se puede decir que por medio de la escritura es donde
encontramos más formas de socializarnos y se tienen diferentes puntos de vista que
nos permiten asegurarnos un criterio propio, empezando por la escuela misma que
44 Vigotski. El lenguaje en la escuela. Pág. 58.
45
nos brinda esa oportunidad de crear, pensar y expresarnos con un sentido propio,
recuperando todas las experiencias que se nos fueron proporcionando con la
lectura y escritura de diferentes textos y autores.
Es la escuela quien nos permite relacionarnos con otros y donde la comunicación
efectiva es muy importante. Si queremos comunicarnos con eficiencia debemos
escribir con corrección.
Uno de los objetivos de la educación es escribir sin error una palabra vista, oída o
pensada así como expresar correctamente la idea que se desea comunicar. La
ortografía denota la preparación de una persona. Abarca el empleo correcto del
acento, de los signos de puntuación y otros auxiliares de la escritura.
“Aunque no tiene un valor formal como las matemáticas, su posesión es prueba que
se ha adquirido la información elemental que exige la sociedad para cooperar con
éxito en las actividades de la comunidad. Aunque no tiene un valor científico, la
ortografía es una forma de dar claridad, precisión, pulcritud, belleza y elegancia a la
lengua, siendo los errores ortográficos una manifestación de descuido, desaliño,
indiferencia, falta de clasificación, ordenación y valoración de las ideas.”45
45 Ibidem. Pág. 376.
46
III.2. METODOLOGÍA
Más que un método en particular se requieren de ciertas condiciones ( profesor
capacitado, material didáctico adecuado, mobiliario suficiente y en buen estado, sin
ruido, aulas con suficiente luz, ventilación, pizarrón con buena claridad, limpieza
general). ) para ser efectivos en la enseñanza de la ortografía y de tomar en
consideración las capacidades o aptitudes necesarias involucradas en el
aprendizaje (lateralidad, espacio, visual-auditivo).
Cuando los niños llegan a la escuela traen consigo un sin número de experiencias
personales con textos, libros, cuentos y han tenido más o menos relación con la
lengua escrita; hay que empezar donde el niño se encuentra.
“Debemos partir de los esquemas anteriores de que el niño dispone; como seres
humanos partimos de esquemas elementales para formar sistemas cada vez más
complejos y más móviles. Todo acto intelectual se construye progresivamente a
partir de reacciones anteriores, más primitivas”46
Desde que el alumno está haciendo pre-escritura y pre-lectura está aprendiendo
ortografía, por ello es importante que desde la enseñanza de las primeras palabras
se eviten los errores, se corrijan inmediatamente y se atiendan personalmente
facilitando los caminos del aprendizaje.
La primera imagen gráfica de la palabra es muy importante, por ello debemos
intentar asegurar que esas primeras imágenes sean fijadas con patrones correctos.
Es importante una continua y constante vigilancia en la corrección ortográfica.
El maestro debe pedirle al alumno que tenga una colaboración más activa en
cuanto a que realice diferentes escritos para aprender a conocer su manera de
pensar y razonar.
46 Ibidem. Pág. 102.
47
El aprendizaje de la ortografía debe motivarse. Promover el amor por su lengua,
favorecer la conciencia de satisfacción por el éxito y el progreso de logros
obtenidos.
Las alabanzas y recompensas pueden ser útiles. Las letras y palabras deben
convertirse en elementos corrientes de la vida de los niños, al igual que el lenguaje.
“La escritura debe poseer un cierto significado para los niños, debería representar
en ellos una inquietud intrínseca y ser incorporada a una tarea importante y básica
para la vida.”47
Es muy importante que a los niños se les vaya inculcando el gusto por leer y
escribir desde muy pequeños para que así cuando lleguen a la escuela no les
parezca demasiado lejano ni imposible el aprender a leer y escribir, y sea para ellos
algo bonito y disponible que genere en ellos una conciencia de formación integral
para que en su vida misma no represente ninguna dificultad; el poder comunicarse
con los demás a la vez que les sea agradable hacerlo, sin ningún problema ni miedo
por hacerlo.
Captando la atención de los alumnos mediante los mejores estímulos entran en
juego las funciones positivas en mayor grado.
No debe enseñarse la ortografía como algo extraño al niño y en forma mecánica,
sino como un objeto de su interés al cual se aproxima en forma inteligente.
El maestro debe poseer una honda conciencia de la importancia de la ortografía. La
enseñanza de la ortografía tiene por objetivo capacitar a los niños para aumentar
las posibilidades de ser comprendido el mensaje o idea que desean transmitir, de
acuerdo con las normas impuestas por el uso corriente.
Vigotski dice que la enseñanza de la ortografía, tiene sus finalidades, emanadas de
su importancia individual y social.¿Para qué sirve la ortografía en nuestra vida
diaria?. Para dar a nuestros escritos cierta pulcritud, decoro, urbanidad lingüística y
47 Ibidem. Pág. 102.
48
exquisitez idiomática, con las cuales se hacen más estimables y de mayor valor
nuestras producciones.”48
Sólo cuando se ha logrado algún dominio en el manejo de las palabras depende en
gran parte lo que se pretende expresar.
“La ortografía nos sirve también para expresar con veracidad y sinceramente
nuestros pensamientos en sincronía exacta, en identificación fiel con nuestra
manera de “estar” en determinados momentos de la vida anímica o emotiva. La
función significativa de la palabra es utilizada para expresar un estado de animo
subjetivo, inmanente, emocional, como creación de nuestro propio espíritu. La
ortografía nos sirve también para enriquecer el vocabulario: Toda palabra, que no
evoca idea precisa por cualquier causa (falta de ejercicio, olvido, poca intensidad
mental) se expone a ser mal escrita.”49
En el desarrollo de estos ejercicios se ha de tener presente que ninguna expresión
de calidad se logra al primer intento, sino sólo a costa de reiterados ensayos;
adquirir el hábito de escribir, siquiera con propiedad, es difícil, pero con disposición
se puede lograr para que se adquiera soltura y fluidez en los escritos.
“Aunque la ortografía debe pasar por una etapa empírica antes de la normativa o
estructurada, es necesario establecer objetivos para que el aprendizaje sea
significativo (relacionados con conocimientos previos), que exista retroalimentación
y que haya una organización de configuraciones globales”.50
Descubrir y formar conciencia de contrastes, series y reglas.
Implementar un estudio sistemático y progresivo.
Una práctica corriente de las adquisiciones ver- pronunciar- oír- imaginar- escribir-
corregir- retener.
48 Vigotski. Op. Cit. Pág. 71. 49 Ibidem. Pág. 40. 50 Ibidem. Pág. 41.
49
Los niños aprenden mejor por el método inductivo, ya que parten de los hechos en
sí, con los que están en contacto para obtener generalizaciones o reglas. Sólo con
método y trabajo se pueden lograr aprendizajes significativos. El niño debe de tener
una práctica sistemática de estudio de la ortografía teniendo como principio ver la
palabra, pronunciarla, oírla, imaginarla, escribirla, corregirla, y retenerla, para que se
adquiera y se fije en su memoria.
“La educación sistemática es aquella en la que los maestros y alumnos estudian las
palabras que presentan dificultades ortográficas. Se hacen diagnósticos, se
organizan planes de recuperación, se planifican unidades de ortografía, horarios de
estudio y evaluación.”51
Pero es necesario tomar muy en cuenta la educación incidental que es aprovechar
toda oportunidad que se presente: de copia, dictado, o cualquier palabra nueva
(éstas se deben escribir en el pizarrón) que sea desconocida para el niño, o se le
haga difícil escribirla, tenga dudas sobre ella; y quieran compartirla con la clase; por
ejemplo algunas palabras que se les dificultan al escribirlas son: consciente,
residuo, división, hemisferio, afluencia, rotación, aborigen, civilización, prehistoria.
“El maestro debe tener claro didácticamente el fin que quiere alcanzar:
1. Presentar en forma práctica el problema.
2. No usar un simbolismo al principio, sino integrarlo poco a poco
3. Plantear el problema en forma de acción práctica, aplicación en la existencia
cotidiana.” 52
En la enseñanza de la ortografía se debe partir de un vocabulario básico y reglas
ortográficas definidas para ir, poco a poco, aumentando el vocabulario y la
enseñanza correcta de esas nuevas palabras, así como incrementando su uso en el
lenguaje diario de los niños.
51 Ibidem. Pág. 73. 52 Ibidem. Pág. 82.
50
El vocabulario que utilizamos es muy variado: el que necesitamos para leer, el que
necesitamos para comprender lo que expresa una persona al hablar, una plática, un
discurso, el que usamos para comunicarnos oralmente y el que usamos para
escribir.
Los niños requieren de un vocabulario básico para expresar lo que sienten y lo que
desean comunicar.
La escuela primaria debe esforzarse en proporcionar a sus alumnos un vocabulario
preciso y tan rico como sea posible. Velará para que las palabras enseñadas sean
perfectamente conocidas en cuanto a su sentido propio y ortografía y tendrá
cuidado en no proponer palabras con dificultades ortográficas que el niño todavía no
pueda manejar, y de proporcionarle la posibilidad de verlas y mirarlas cuantas veces
sea necesario.
51
III. 3 EXPERIENCIAS DOCENTES.
En la enseñanza de la escritura diversos profesores han propuesto actividades con
sus alumnos de grupo como crucigramas, adivinanzas, textos mutilados, historias
contadas y narradas que enriquecerían con un nuevo vocabulario el lenguaje de los
niños.
La enseñanza de la escritura puede enriquecerse grandemente.
Por ejemplo el Profesor Roberto Pulido realizó un programa de investigación “La
lengua escrita, la alfabetización y el fomento a la lectura en la educación básica
(PILEC), en la UPN en 1991. “ Este programa tiene como propósito construir
alternativas metodológicas para fomentar la lectura en la educación básica, así
como desarrollar, paralelamente, procesos de formación de docentes y de
innovación de las prácticas escolares.”53
En específico con la ortografía en dicho programa, encontramos serios
cuestionamientos a ciertas practicas institucionalizadas. Llama la atención las que
hacen referencia al uso de color rojo en las letras mayúsculas y acentos, a la
corrección ortográfica como elemento esencial en la escritura. Ante esto, los
maestros de grupo buscaron alternativas que permitieron formas de trabajo más
libres y creativas, sosteniendo como premisa fundamental el respeto al papel
protagónico del alumno en el proceso de aprendizaje.
La ortografía es un aspecto de la lengua escrita que muy pocos docentes dominan.
Encontramos con frecuencia que desde alumnos de primaria hasta universitarios
tienen una deficiente escritura, y no digamos en cuanto a redacción, porque también
a este respecto habría mucho que decir.
53 Ibidem. Pág. 114.
52
“La forma tradicional de enseñar ortografía es mediante la repetición, memorización
y corrección de un cúmulo de palabras que al niño no le dicen nada porque están
aisladas, no forman parte de su mundo de significaciones.”54
La enseñanza del idioma debe estar basado en hablar y escribir con sentido y con
corrección; que se haga reflexionar sobre el idioma, llamando la atención sobre el
significado de las palabras; sobre el sentido inmediato de lo que se lee; sobre la
estructura gramatical y la forma de las palabras.
“La escuela debe partir de los conocimientos previos para fomentar la toma de
conciencia de los alumnos con respecto a sus ideas, ya que sólo haciéndolas
explicitas y siendo conscientes de ellas lograran modificarlas. El saber debe
mostrarse no sólo en la forma verdadera, sino también útil.”55
La aplicación de estrategias, primero de lectura y después de producción de textos,
permite que surjan en el niño la duda ortográfica al involucrarse con textos propios y
ajenos. Es más importante que el niño produzca con libertad, y sólo después ver si
cada palabra está correctamente escrita.
Generar la duda ortográfica es sustancial como parte de su desarrollo social, ya que
llegará el momento en el que él mismo no entregará un texto con errores. 56
Cuando un niño logra producir sus propios textos, lo primero que debemos hacer es
estimularlo, y sólo hasta que tenga la confianza suficiente para expresarse, el
maestro procederá hacerle ver su error de manera informal, por medio de la
comparación de su texto con el de sus compañeros; por medio de la lectura en voz
alta, del análisis de significados e iniciarlo en la auto corrección. Todo lo anterior lo
llevará a realizar un juicio crítico al trabajo personal y al de sus compañeros, a
decidir sobre la escritura correcta con base en la consulta de diccionarios, a darse
cuenta de si la entonación corresponde a lo que quiere expresar, a corregir, a
54 Ibidem. Pág. 34. 55 Idem. Pág. 34. 56 Ibidem. Pág. 35.
53
depurar y, si lo considera necesario, a redactar nuevamente su texto pero por
convicción, no porque se sinta obligado por el maestro.
En el libro de “La letra con gusto entra” un maestro realizó la siguiente estrategia
con sus alumnos: “como suena”57 en la cual proporcionaba al grupo una palabra y
los niños que quisieran pasar al pizarrón a escribirla de todas formas que
consideraban adecuadas según el sonido. “Les dije cebolla y ellos escribieron:
sebolla, cevolla, ceboya, cevoya, seboya, sevolla; de gis escribieron: jis, giz, jiz.”
¿De qué manera es correcto escribir cebolla o gis? – preguntó.
Alguien comentó – buscándola en el diccionario.
Hicieron uso de sus conocimientos previos, ya que desde el principio de año
manejaron el orden alfabético.
Después de haber analizado todo lo expuesto, el profesor Pulido concluyó que es
importante crear en el niño la duda ortográfica, como un reto que lo lleva a activar
su memoria visual y sus conocimientos previos; por lo tanto, se le deben
proporcionar los estímulos suficientes para lograrlo; así mismo, que la lectura y la
producción de textos son los medios más eficaces para obtener avances
significativos en la ortografía.
Otro trabajo fue expuesto por la Profesora Silva Comelin Maria Inés: “Una mirada a
la escritura de niños y jóvenes escolares de la Ciudad de México” 58
Este trabajo tiene como propósito dar a conocer, a interesados en la educación
básica y especialistas en la escritura, es una síntesis de un informe reciente (2004)
de investigación acerca de la expresión escrita de los estudiantes de nivel primaria,
en escuelas federales y privadas de la Ciudad de México.
57 Ibidem. Pág. 36. 58 Silva Comelin Maria Inés. Revista de educación Nueva Época. Núm. 8. enero-marzo 2004. Lectura y escritura.
54
Es preciso realizar una aclaración inicial que contextualice este trabajo. El citado
informe de investigación fue un producto no esperado del desarrollo de un estudio,
“Educación ambiental”: disposiciones y resistencias al cambio en escolares del
Distrito Federal, por requerimientos específicos de este estudio, el instrumento de
recolección de información, un cuestionario sobre asuntos ambientales y estilos de
vida, distribuidos entre alumnos de segundo de primaria en mayo, junio y julio de
2004, contenía una buena cantidad de preguntas abiertas, cuyas respuestas no
correspondían a una buena ortografía por no decir nula. Se revisaron
exhaustivamente 326 cuestionarios de la muestra y encontraron en los textos, en
forma extendida y recurrente, deficiencias gramaticales de diferente orden en el
discurso escrito.
Era notable la presencia de problemas de tipo ortográfico relacionados tanto con el
uso correcto de las letras, como con la utilización de la acentuación y puntuación e
incluso se observaron no pocos casos de estudiantes que manifestaban además
serios problemas de escritura relacionados con su misma construcción.
El tipo de dificultades más comunes que tienen los estudiantes en materia de uso
de letras radica en el empleo de la (“h”) , de la (“b”) y de la (“v”), de la (“c”), (“s”), y
(“z”), de la (“ll”) y de la (“y”), de la (“g”) y de la (“j”).
Encontraron estudiantes que muestran no sólo problemas de ortografía con
respecto al empleo correcto de las letras, sino graves problemas en el ejercicio de la
lengua escrita, en su misma construcción.
En lo que respecta específicamente a la acentuación y puntuación, vemos una
conducta regular entre los estudiantes de educación básica entrevistados. Es
común encontrar, entre los alumnos que no emplearon los signos gráficos de
puntuación en su texto, la utilización de la conjunción “y” como sustituto.
Mucho se comenta la importancia que tiene el ejercicio de la lectura en el
aprendizaje de la expresión escrita de los estudiantes. De los alumnos de educación
básica encuestados para esta investigación, una parte menciona gustarle la lectura,
porque según su apreciación mejora su escritura ya que por medio de ella se
55
introducen a mundos nuevos e interesantes. Sin embargo, de este conjunto son
muy pocos los que leen por propia iniciativa, más allá de un deber escolar; casi
todos ellos se limitan a leer los libros obligatorios para ese grado escolar en su
escuela; cuando se les pregunta qué libros han leído el último año, se repiten los
títulos al interior de cada grupo analizado. En no pocos casos, al dar el nombre del
libro, incurren en errores de ortografía.
Carlos Monsiváis expresó en alguna oportunidad que las actuales generaciones
vivían insertas y estaban siendo formadas en una “cultura de imagen”, la que había
desplazado a la “cultura de la palabra”. Muy probablemente, Monsiváis tenga la
razón. Para un numeroso contingente de los estudiantes de educación básica, ver la
televisión forma parte de su vida cotidiana, de su rutina o agenda diaria, como ir a la
escuela” 59
Más de la mitad de los escolares declara ver más de tres horas de televisión por día
y una quinta parte de ellos reconoce entre varias alternativas que es su actividad
preferida en el uso de su tiempo libre. Podríamos suponer que la omnipresencia de
la “cultura de la imagen” en la vida cercana de los niños y jóvenes estudiantes, vía
televisión, pudiera estar afectando su expresión escrita y su ortografía.
Resulta necesario fortalecer y diversificar la enseñanza de la escritura en la escuela
básica y poner un énfasis especial en el ejercicio de la expresión escrita entre sus
estudiantes. Al respecto, conviene recuperar tanto la idea de Paulo Freire de que “ a
leer se aprende leyendo y a escribir escribiendo”60, como otras recomendaciones ya
señaladas por especialistas en el sentido de que, mejor que hacer planas enteras
de escritura y ortografía, se estimule la redacción y se motive a la producción de
textos. Resultaría conveniente que los estudiantes desarrollaran periódicamente
escritos breves sobre temas que les llamen su atención.
59 Carlos Monsiváis. La comunicación como proceso social. Pág. 42. 60 Paulo Freire. Teorías del aprendizaje. Pág. 58.
56
III. 4 MÍ EXPERIENCIA CON LA ENSEÑANZA DE LA ORTOGRAFÍA.
En el estudio realizado por Elvia Balderas De La Cruz y una servidora: Uriz Reyes
Hernández como estudiantes de la carrera de Pedagogía en el Programa de
Investigación “Transformación de la Educación Básica desde la Escuela” (TEBES),
incorporándonos al colectivo “El aprendizaje significativo de la ortografía: un
acercamiento desde el aula”, se llevó a cabo en segundo grado, en la Escuela
Primaria “Héroes de Chapultepec”; con ubicación en: Otomíes y Tepehuanos s/n.
Col. Tlalcoligia. Junto con la profesora Elizabeth Camacho González.
Siguiendo las instrucciones y lineamientos señalados por el colectivo TEBES y por
la profesora responsable del proyecto, la participación de nosotras fue la
observación e intervención didáctica en el grupo, así como la organización y
sistematización de actividades, es decir, la planeación de clase con referencia al
aprendizaje significativo de la ortografía.
Al estar dentro del aula observamos alumnos con diferentes inquietudes,
caracteres, círculos familiares, encontramos también que a pesar de los años que
transcurren y las teorías que han surgido sobre educación, seguimos trabajando la
ortografía de manera aislada y en un horario establecido, con base al conocimiento
de reglas ortográficas, a través de la memorización, repetición de palabras por
escrito, practicar constantemente la lectura, hacer planas y copiar, búsqueda de
palabras en el diccionario, elaboración de enunciados, dictados, tachar o remarcar
palabras mal escritas, palabras derivadas, clasificación de palabras frente al grupo,
hasta el grado de asignar menor calificación al trabajo elaborado por los alumnos
con errores ortográficos independientemente de la asignatura a la que se refiera.
Por la situación anteriormente señalada se desarrollaron estrategias con base en
las siguientes hipótesis:
-El fomento de la lectura por placer favorece la escritura sin errores ortográficos.
-La discriminación visual es un elemento que facilita la escritura sin fallas
ortográficas.
57
-La producción libre de textos aporta evidencias de las transformaciones que el
niño se hace al escribir.
-Los maestros al diseñar estrategias a partir de las inferencias que el niño hace
acerca de algunas normas ortográficas pueden acceder a las que le presenten
mayor complejidad.
Pudimos observar que mientras más se practicaba la escritura de textos como el
diario personal, la correspondencia o producción de cuentos, menores errores
ortográficos se cometían; asimismo, que el gusto por la lectura no se logró en todos
los niños como esperábamos, pero encontramos una estrecha relación con la
escritura, ya que los niños leyeron más libros durante este año y también
desarrollaron el gusto por escribir.
Se trabajó con el grupo partiendo de las siguientes consideraciones: Trabajar la
lectura y escritura de acuerdo al enfoque comunicativo y funcional en donde se
genere un ambiente que los motivara a leer y escribir, respetar los procesos y ritmos
de aprendizaje de cada alumno, realizar actividades acordes con las hipótesis
establecidas con anterioridad, involucrar a mamás y papás en las actividades del
grupo.
Nosotras propusimos y realizamos diferentes actividades como crucigramas,
adivinanzas, textos mutilados, historias narradas, que enriquecerían con nuevo
vocabulario el lenguaje de los niños. Leímos el texto sobre “Freddy encontró una
rana” haciendo pautas para que los niños predijeran que sucedería, lo que
incrementó su vocabulario; a la vez se les pidió que escribieran qué harían ellos
con una rana, cómo se mueve, a qué sabe, qué se siente tocarla, dónde las
encontramos y qué clase de ruidos hacen. Así al escribir sobre las ranas podrían
dar elementos vivénciales para corregir y enseñarles nuevas reglas de ortografía.
También promovimos juegos ortográficos, utilizando el diccionario por ejemplo:
buscar palabras con v, con mp, s, c, z; diciéndoles que de una palabra grande
pueden obtener muchas pequeñas utilizando las mismas letras de esa palabra;
fabricamos sustantivos utilizando la última letra de cada palabra para buscar
58
nuevas; arroz-zapato-olla-amor; pusimos en una bolsa las palabras estudiadas y se
dictó la palabra que salió.
Realizamos ejercicios en los que los alumnos descubrían por sí mismos las reglas
ortográficas, por ejemplo: observar palabras y descubrir lo que hay de común en
todas ellas (hombre, sombra, timbre, sombrero), compararlas (campana, lámpara,
Amparo, empleado), o descubrirlas en un párrafo: Amparo era una niña campesina,
cuando tomaba un sombrero para cruzar por la cumbre e ir a ver a su abuelita.
También hicimos ejercicios de generalización, ejercitación y evaluación; dimos
trabajos bien seleccionados para que los alumnos practicaran su descubrimiento y
construyan hábitos ortográficos correspondientes; por ejemplo: buscar en el
periódico palabras con mp, realizar dictados, copias y composiciones con estas
letras. Es de suma importancia el que los niños desarrollen la distinción visual, pues
consideramos que de ella depende que los alumnos puedan acceder al sistema
convencional de escritura: reconocer formas, posiciones, rasgos de las letras, y más
tarde resolver dudas ortográficas al recordar dónde y cómo han visto escritas
algunas palabras.
Otra estrategia para que el niño adquiriera una convencionalidad ortográfica es la
producción de textos con los alumnos, como: carteles elaborados por ellos mismos,
invitaciones, avisos y relatos de cuentos que fueron leídos por la maestra o por
algunos alumnos, cartas, sopa de letras y ahorcado.
La participación de los padres de familia fue muy importante con relación a la
lectura y escritura porque apoyaron el trabajo de sus hijos en casa como es el
fomento a la lectura y con la colaboración de materiales didácticos para el salón de
clase, también leyeron cuentos en el aula para todos los niños.
En cuanto a las interacciones que se dieron fueron de la siguiente manera: maestra-
alumno; la maestra Elizabeth es una profesional innovadora, respeta a sus alumnos
en cuanto a sus intereses y decisiones, implícitamente tiene normas que solo sirven
para llevar una mejor dinámica de la clase. Alumno-alumno, se dio entre niños y
niñas; los que saben escribir y leer mejor ayudaron a los que todavía les costaba
59
trabajo hacerlo; esto se realizó formando equipos para generar así una mejor
interacción entre ellos así como una forma de socializar. Maestra –estudiantes de
pedagogía; nuestra relación fue muy satisfactoria, porque desde que llegamos nos
trató muy bien, nos brindó su apoyo y apertura para participar en sus actividades y
en la planeación de ellas.
A continuación se presentan algunos contenidos de segundo año para poder
resolver posibles problemas que observamos en cuanto al aprendizaje
convencional de la ortografía:
• Lengua escrita.- conocimientos, habilidades y actitudes.
• Representación convencional de las vocales en letra script y cursiva.
• Representación convencional de las letras: p, l, m, d, y t en letra script
y cursiva.
• Representación convencional de las letras r, rr, c, q, b, v, n, ñ, f, j en
letra script y cursiva.
• Representación convencional de las letras ch, h, ll, y, g, z, x, w, k, en
letra script y cursiva.
• Direccionalidad de la escritura.
• La separación entre palabras.
• El espacio entre letras.
• Identificación y uso de mayúsculas en el nombre propio y al inicio de
párrafos.
• Identificación del punto final y del punto aparte. Comprensión de la
lectura de oraciones y textos breves.
• Lectura en voz alta de textos elaborados por los alumnos y materiales
impresos.
• Reconocimiento de la escritura como una forma de comunicación.
Por lo anterior mencionado surgió la necesidad de realizar diferentes actividades
como la revisión de cuadernos y la realización de producciones de textos de los
niños, así como dictados para saber el nivel de escritura que tienen los alumnos, de
acuerdo con el proyecto PALEM (“Propuestas para el Aprendizaje de la Lengua
60
Escrita y la Matemática”); este proyecto ha tenido un avance significativo desde su
implantación, tan es así, que la demanda de los docentes por apropiarse de el ha
aumentado, ya que es una alternativa pedagógica que tiene un enfoque
psicogenético desde la perspectiva de Jean Piaget que nos brinda las
investigaciones más sólidas sobre el desarrollo del niño y sobre los mecanismos
que permiten saber “cómo” aprende el niño. Este enfoque considera que las
estructuras cognoscitivas manifiestan características propias en cada estadio del
desarrollo y tienen su origen en el nivel anterior.
Con base en esto se encontró como resultado que de los 34 alumnos que
conformaban el grupo, 18 mujeres, 16 hombres se clasificaron de la siguiente
manera:
• Alfabéticosconvencionales 27%
• Alfabéticos 7%
• Con problemáticas localizadas como inserción de una letra 15%
• Escriben d por b y d por p y q por d, ll por ñ 25%
• Dificultades en silabas inversas ar 20%
• Separación de palabras 10%
• Direccionalidad de la escritura 2%
• Espacioentrepalabras 10%
• Identificación y uso de mayúsculas 10%
• Identificación del punto final y punto y aparte 10%
Para poder ayudar a los niños a que adquirieran un aprendizaje significativo de la
ortografía se realizaron intervenciones pedagógicas con actividades de innovación
como las arriba mencionadas de acuerdo a las capacidades de cada niño o niña,
pidiéndoles que escribieran las letras que ellos creyeran que van en cada palabra,
respetando la escritura de cada uno, nunca tachando o encimando su trabajo para
corregirlo, al contrario motivándolos a leer y a escribir palabras o pequeños textos.
61
Con lo que mencioné y de acuerdo con mi experiencia dentro del grupo escolar de
segundo grado haré una auto evaluación de lo realizado:
En el ejercicio de mis actividades, como pedagoga pude detectar necesidades que
requieren ser canalizadas; en este caso es la deficiencia que presentan algunos
alumnos en la comunicación escrita. En conjunto con mi compañera de práctica y la
maestra del grupo analizamos el problema y presentamos alternativas de
soluciones; enfocado el problema de la ortografía se toman medidas para proceder
a su solución.
Realizamos un diagnóstico que nos ayudó a centrar el problema en determinado
ambiente socio-cultural. A partir del diagnóstico se elaboró un glosario de palabras
de uso más frecuente, para tener un punto de partida y proceder a la elaboración de
un programa de clases.
Visualizamos el problema desde un marco más amplio, no sólo requerimos de un
programa de ortografía sino de personal capacitado para aplicarlo, por lo que
tendríamos que elaborar cursos o ciclos de conferencias para los maestros y las
instituciones educativas y así poder contar con su apoyo en la implementación de
una innovación pedagógica.
Hacer que renazca el gusto por el arte de escribir es todo un reto; es un trabajo
enorme y vasto, pero creo que es motivador y alentador. La ortografía debe partir
del vocabulario básico que manejan los niños y de su vivencia cultural y social es
indispensable hablar y hacer conscientes a las autoridades escolares de cada
centro escolar en particular, de la necesidad de escribir con corrección y de tomar
medidas apropiadas para que sus alumnos adquieran este hábito en la educación
primaria.
Si partimos del vocabulario que el niño maneja, estamos hablando de grandes
diferencias según el ambiente y el lugar en el que el niño ha crecido y se ha
desarrollado, así como de las circunstancias heterogéneas de nuestra escuela en
cuanto a su situación geográfica y nivel cultural.
62
Por ello resulta muy importante considerar que el material que se utilizó dependió
en gran parte del diagnóstico sobre las palabras que los niños utilizan, y la
elaboración de un glosario de palabras de uso más frecuente, lo que desembocó en
una unificación en la enseñanza.
Hicimos una labor básica en el nivel elemental para lograr que los alumnos
adquirieran el uso correcto de su idioma, y puedan manejarlo para lograr
comunicarse con facilidad; tanto en lectura, que implica velocidad, comprensión,
dicción; como en escritura, que requiere de redacción y ortografía.
Una forma que lleve a los niños a la adquisición del hábito de la escritura no debe
ser pesado ni tedioso y debe lograr que el niño se sienta orgulloso de saber escribir
con corrección.
El aprendizaje fue sistemático y constante; pocas cosas bien aprendidas jamás se
olvidan.
Fomentamos el hábito del uso del diccionario; existen muchas palabras que el niño
no usa en su lenguaje cotidiano y es importante que aprenda a leerlas o escribirlas
correctamente y esto sólo puede hacerse desde un diccionario que les indique el
significado de las palabras y de su ortografía.
Partimos de lo más sencillo a lo más complicado, y no pasamos a un nuevo
concepto hasta que el anterior estaba bien asimilado y practicado; esto no sólo dará
un aprendizaje más significativo, sino también dará más seguridad al niño que lo
usa.
Había heterogeneidad en el salón de clase; cada niño aprendió a diferente
velocidad y de diversas maneras; el grupo llevaba un ritmo, pero se tuvieron que
tomar medidas con los niños más lentos o más rápidos en su aprendizaje.
Los niños naturalmente van interiorizando las reglas de ortografía, por ello en las
excepciones, o en la asimilación de grandes cantidades de vocabulario nuevo, los
63
niños tienen confusiones en cuanto a la escritura; en ese momento reforzamos aún
más las explicaciones, repeticiones y prácticas ortográficas.
Nos percatamos que el niño estaba más atento a lo que daba, que a lo que recibía;
le gustaba más escribir y que sus demás compañeros leyeran lo que escribió; en
esto también había un aprendizaje, el corroborar que entendió lo que otro le quiso
decir. Preguntaban : ¿cómo debo escribir para que mis mensajes lleguen como yo
los quiero?.
La enseñanza de las reglas de ortografía partió de las más sencillas, que se
aplicaran a muchos de los términos más usados por los niños y que se pudieran
aplicar de inmediato.
Nos enfocamos principalmente a demostrar la importancia de escribir correctamente
las palabras y motivarlos para que se esforzaran en la enseñanza de la ortografía.
Hicimos ver a los niños la importancia del lenguaje escrito en la comunicación
humana, presentamos un texto con faltas de ortografía y otro sin división entre las
palabras, para que el niño se diera cuenta que no iba a comprender lo que decía el
mensaje, además de que se distorsionaba el mensaje.
Motivamos el amor por nuestro idioma, hablamos sobre la historia de nuestro
lenguaje, como se ha enriquecido con nuestros propios vocablos, y cómo nos
hemos apropiado de él.
Dimos herramientas, juegos, actividades, promoviendo que el alumno disfrutará de
su aprendizaje; despertando interés y estimulando su creatividad.
En lo personal esta experiencia fue muy significativa tanto para mi preparación
académica como para mi desarrollo como ser humano, me di cuenta del gran valor
que tiene la ortografía desde los primeros años de educación, porque hace que los
niños se puedan comunicar correctamente exponiendo en un pequeño texto sus
ideas y pensamientos, es gratificante saber que existen docentes que se abocan
íntegramente a su labor de enseñanza y guía de sus alumnos, sabiendo como
64
conducir la clase de una forma dinámica e interesante; esta oportunidad me sirvió
también para descubrir lo que sienten los maestros al estar frente a un grupo
heterogéneo de cuarenta alumnos y como poder llevar la clase y por otro lado la
atención y el control de la misma, es una tarea difícil y que se debe tener
completamente la vocación para poder desempeñarla con gusto y amor; considero
que aprendí bastante de la maestra Elizabeth, me enseñó a dominar mis nervios y
temores para realizar alguna actividad y cómo lograr que los niños estuvieran
atentos a mi explicación, también me sugirió la mejor forma de poner estrategias
para la enseñanza de la ortografía a sus alumnos, fue un apoyo muy valioso dentro
de mi trabajo escolar como en lo personal.
65
CONCLUSIONES
EL Lenguaje es indispensable en la vida humana; vida orientada y enriquecida,
hecha posible gracias a las experiencias pasadas de los miembros de nuestra
especie. A través del lenguaje, podemos intercambiar con otras personas nuestras
experiencias y enriquecernos mutuamente.
Se debe tomar en cuenta que las palabras pueden tener distintos significados para
las diferentes personas; que entre más acercamiento, más comprensión existe, que
entre más distancia hay, se hace indispensable definir el sentido de palabras clave y
de explicar de forma más amplia lo que pretendemos decir.
El análisis de la comunicación nos permite tener una visión más clara sobre la
importancia que tiene el escribir correctamente, el emisor que es en sí la palabra
escrita debe expresar exactamente lo que pretende decir.
Una palabra mal escrita causa confusión y ruido en el mensaje, los canales, el
medio, y el código. En un texto con mala ortografía habría confusión en los canales
visuales, pudiendo salvar la situación si lo leyéramos en voz alta para poder
descifrarlo y usar en su lugar el canal auditivo.
Para escribir con corrección un texto se requiere de atención y esfuerzo, es un
proceso dinámico, activo y complejo.
Al recibir un mensaje entran en activación tanto la vista como todo lo que el
individuo conoce, ha vivido y leído; por ello, si no usáramos un sistema de reglas
comunes en la escritura, no lograríamos comunicarnos. Siendo el lenguaje un
código, debe tener reglas y normas con las cuales se usa el lenguaje.
Si el código no es común entre las personas no se podrá establecer la
comunicación entre ellas.
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La ortografía es una herramienta de expresión y comunicación, se le debe dar
desde el nivel elemental, la importancia que requiere el aprendizaje de la lecto-
escritura (en ortografía: redacción, entonación, puntuación, etc.), como elementos
necesarios e indispensables para una comunicación escrita efectiva, así como para
la preparación para la vida y el estudio.
Necesitamos utilizar los signos correctamente para comunicarnos efectivamente.
Saber leer y escribir permite participar y aprovechar el logro de otros seres
humanos y poner a disposición todos nuestros saberes; el lenguaje es
principalmente social.
A través de la escritura se acumulan vastos depósitos de saber muy superiores a
los que una sola persona de determinada cultura puede ser capaz de leer o de
recordar en toda su vida.
La escritura es importante en la vida individual y de relaciones sociales; interviene
en todo trato comercial, de negocios o de relaciones particulares. La coordinación
de esfuerzos para lograr que una familia, una escuela o una empresa funcione, se
da a través de la comunicación por medio del lenguaje.
Tomando en cuenta que el idioma español se habla en muchos países y que esa
misma lengua se va diversificando y enriqueciendo según el lugar y la situación
histórica, política y social, deben existir normas y reglas comunes para mantener el
contacto comunicativo con todo ese enorme mundo hispano-parlante.
Se deben tomar medidas, para que el enorme desarrollo de la nueva tecnología que
invade el mundo y la necesidad cada vez mayor de usar neologismos para nombrar
todas esas innovaciones, sean comunes para todos y tener la facilidad de
comunicación mundial con este nuevo acervo de vocabulario; de lo contrario,
corremos el riesgo de crear mil nuevas lenguas diferentes que en vez de comunicar
a más personas entre sí, las aíslen.
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Las palabras tienen importancia en cuanto la tienen las ideas que expresan.
Ortografía es la relación del símbolo con el objeto, y el objeto en general, solo tiene
un símbolo.
La ortografía no es un conjunto de reglas para aprenderse de memoria, es una
forma de expresión y comunicación, de sentimiento, pensamientos e intenciones. La
ortografía es un arte que debe cultivarse desde que inicia la escritura, es un hábito
que debe adquirirse; implica ver, oír y escribir (vista, oído, movimiento motor fino).
La ortografía va más allá de la escritura pues está íntimamente ligada a la
adquisición del lenguaje; el lenguaje español no es tan complicado y, fácilmente,
con perseverancia, se puede alcanzar los objetivos de la adquisición de una buena
ortografía ya que el español es más fonético, es decir de ortografía más
representativa de los sonidos y por lo tanto, menos complicada.
La ortografía es una de las más grandes y delicadas áreas de la escuela primaria.
Se debe centrar en aprendizajes significativos para el alumno, para que garantice
su interiorización y su aprendizaje. Las palabras nuevas y difíciles deben repetirse;
se debe dar el significado y escribirlas en el pizarrón muchas veces.
En la enseñanza se debe llevar un paso constante más que una gran cantidad de
conocimientos. La enseñanza debe contener en sí la práctica y repetición de las
mismas palabras, usándolas en distintas frases, contextos y con diferentes tipos de
letras. Un aprendizaje duradero requiere de mucha práctica y repetición.
Al aprender palabras nuevas el niño debe formarse el hábito de escribir
correctamente. Y poco a poco ir aprendiendo las reglas de ortografía para poder
aplicarlas.
La ortografía se aprende escribiendo y leyendo las palabras que conocemos o
manejamos; no se debe darle a un niño reglas ortográficas de palabras que no usa
o no conoce.
68
Hay que establecer objetivos a lograr en tiempos y periodos fijos dentro de la
enseñanza primaria.
El hábito de bien escribir debe cultivarse en primaria, pero no debe descuidarse en
secundaria, preparatoria e incluso en la universidad. Un niño ve una y otra vez las
mismas caricaturas, lee los mismos cuentos; pues solo con base en la repetición es
que aprendemos las cosas. En cada lectura el niño aprende nuevas cosas,
empezando por las sencillas y más conocidas para él; poco a poco va integrando
nuevas palabras, preguntando por ellas y su significado e integrándolas a su
vocabulario. El niño en un ambiente propicio se interesa por aprender.
En el aprendizaje de la ortografía partimos del vocabulario que manejamos, que
conocemos; podemos aprender que consejo se escribe con “s” o con “c”, pero si
para nosotros no tiene significado, no lo utilizamos y pronto lo olvidamos.
La enseñanza de la ortografía debe de ir a la par con la enseñanza del nuevo
vocabulario que se va adquiriendo (utilizar el mismo libro de lectura con un libro de
reglas de ortografía)
La ortografía es un aprendizaje lento, continuo y progresivo por ello requiere de una
larga, constante y metódica ejercitación y su lugar adecuado es en la escuela
primaria.
Adquirir el hábito de escribir correctamente, de consultar palabras desconocidas y la
preocupación por la escritura correcta darán un fuerte cimiento al uso correcto del
lenguaje.
Las personas de un grupo social aprenden a hablar el idioma del grupo en donde
viven, pero el aprender a escribir y leer implica un proceso de pensamiento más
complejo y en el que se debe incluir el aspecto del bien escribir, lo que implica
aprendizaje, repetición y constancia (aprendemos a vestirnos y arreglarnos pero
esto es un hábito que debe practicarse todos los días).
69
El responsable de la adquisición de este hábito, es el maestro de primaria, en
primera instancia.
El descuidar la ortografía es como descuidar la apariencia, y una persona
descuidada no puede dar confianza.
La mala ortografía hace dudar de la preparación cultural del sujeto. Ortografía,
lectura, redacción y elocución son para muchas personas el toque del grado de
cultura de una institución de enseñanza.
Con ortografía demostramos nuestra cultura, amor a nuestra propia lengua e interés
por lo que estudiamos; exhibe el grado de instrucción de cualquier persona,
demuestra acierto y esmero en la redacción, así como orden en las ideas.
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