La resistencia[filodecaballos, 2003]Julin HerbertTal vez sea
esta la descripcin de una mancha de tinta.LichtenbergEl dcimo
octavo libro de la biblia narra la historia de Job, un hombre al
que Yahv exilide Su misericordia sin razn aparente. Siglos despus
de la coneccin de esa obra, el a!o "d. #., el
poeta$ublio%vidio&asnuedesterradode'omapor (ugusto. El
decretoimperial lo condenaba a vivir en el glido puerto de Tomis,
rente al $onto Euxino o mar&egro. Seg)nciertatradicin,
seleacusabadepervertirala*uventudatravsdesusversos. +a verdadera
causa del castigo es unmisterio.Pntica,i esp-ritu me inclina a
cantarlas metamorosis de los cuerpos en palabras.So. un vapor de
hielo tras los vagones militares. la vigilia de un helvecio al
cruzar el 'ubicn/una vez l0tex, otra el peril de un sodomitaen
monedas de oro 0vidascomo un re. enamorado1ola muslo/ holacuchillo
de caza 2este es el copretritode los perros de (cten3/ holacad0ver
de #sar (ugusto. Yo celebroestremecido rente al $ontoel pitagrico
vencimiento del mundo.+a lina del idioma, como una ra.a de agua,cae
de m- . se aposenta en un silbido,una escala de ventanas danzando
hacia el uturo.#anto la resistencia.4elocidad que traza
grietas.(huecado glaciar que en la memoria se deslizacomo un
desnudo pie se desliza*unto al r-o5 los dedos de la 4enus,el taln
de las ninas,arco de la ni!era que por unos centavosposaba
siil-tica en tertulias de opio,el empeine cubierto de espumade una
rubia acuchillada en la ba!era.#ada pie un rasgo de estilo,un
or0culo impreso,geometr-a ulminada.Jo.as que pule . desbasta la
riberamientras el r-o murmura su descomposicin.DisciplinaJob4ie*o .
lleno de d-as.Termin de mec0nico en un taller de barrio,obrero
montador en el 6erl-n amargo,propietario de taxis que transitan el
sue!o.4ie*o, lleno de d-as, humillado en el blancode los o*os de
7ios.,is carnes son la esquina de un daguerrotipo,mi corazn es una
echa oscura,mi a0n es el salmn puesto a las brasas*unto a las
m0rgenes del r-o que remontaba.#a-do en m-, distante,hecho de
campos de verdura. o*os como canarios.&o he sido .o m0s m-o que
este plato de sopa.#ada noche derribo, como un licor amargo,las
letras de mi nombre.#ada ma!ana vuelve el Se!or a ediicarlas.Tal es
nuestro secreto. +a mutua cicatriz.4ie*o, lleno de d-as, me vuelve
sabio el modoen que vo. parecindome a las piedras.Y as- como las
chispas de un motorse dan al aire,as- .o me abandono a la
aliccin.!idio" Metamorfosis$roundizar en las palabrascomo se
proundiza en unos labiosba*o el portal a oscuras.888Sepultado en
agua verde . musgo inmvil.ace un p0ramo de larvas .
derrumbes.888Silba el acero de la enumeracin.9rases redondas cortan
los dedos de la mano.888En el ondo del bosque.En el ondo de un ra.o
de verano.En el ondo recin ailado de un cuchillo.El rele*o de la
cierva en el estanque.888+os nombres de lo azul: las comisurasdel
aire . la articulacin.+o azul aueraque nimba la memoria. desti!e
los prismas de un tmpano en el mar.+a resistencia:rases
vencidas5parvadas de hielo.De la retrica1e vistoen 0noras
mentalesrevolotear cenizas.Job,0s all0 de esta puerta hiede el
mundo a matadero.+as bestias en los patios a)llan proec-as. se
muerden los belos mientras un gario ro*otrizando las costillas
sostiene el Sina-.1igueras arden 0cidasen las cuencas del
sim)n.6a*o el escombro .acenlos hi*os de los hombres5los hi*os de
la mente.acen tambin a oscuras.;n matadero.&o m0s que un
matadero.;n leviat0n que chilla en costas de agua viol0cea,una
vasta pregunta sin un grano de sal,una v-bora de arena corro-da por
el soplo.Esto es lo que murmuro,pienso,atino a maldecir,mientras me
rasco con un trozo de te*alas p)stulas del pecho.!idio" Tristia+a
ep-stola que lees dibu*a un mapa.$rimero es una valla de maderas
podridas/las chispas que abrican borrachos los obreroscontra el
muro al apedrear una garraa/anuncios que proh-ben nadar en
calzoncillos/el r-o como un antasma de acero inoxidable/la marea
del exilio azotando la costacomo pez de pelea,igual que pasa el
vinoa travs del bulboso cuello de un centurin/las auroras/
7obrud*a/ los estanques de Escitia/el recuerdo de las hi*as de #sar
con un gramoderramado sobre plata de &umancia/el deseo de ser
un dios o un albatros los lunes/la velocidad de una escollera que
comienza a meditar.Y por )ltimo el 6soro al ondo del
paisa*e,descollantecomo una botella rota.De la geograf#aver 2una
estela de *et. en el murouna galaxia anaran*0ndose de xido. un
reseco adem0nque se ablanda en el charco3: rosan0utica el o*o la
miradaes un mapa ininitamente accidentalvocea la tormenta l0minasde
cartncru*en oloreslate la madera @ c>A#moapreciar
lapereccindelos emblemas enlos 0ngulos
queormanlamateriaempedernida, la esera un poco reclinable de la
mente, la mesura con sabor a sargazo delalientoB... Toda
conciencia, al abstraerse de sus n)meros, inaugura lisamente 5tan
parecidaaltri0ngulodeunvelamenlacustreClos0mbitosoce0nicosdelapronunciacin.
+etras:guarismos que gotean hasta vaciar su condicin de
monumentos.Job %circa &'(0)En mi siglo. En mi lugar. (codado a
la ventanaexaminaba el movimiento: una bandera de vaporque desde la
estacin demoraba su saludo.Eran tiempos de gran*eros paseando en
bicicleta. cometas aureoladas por el o*o del sol.,arzo de canciones
pelirro*as . esbeltas,sabat interminable, silencio en los
bald-os.7-as elices disolvindose en ocasos prematurosmientras el
corazn se estremec-acomo tocado por un 0ngel de sal.Era la guerra.
+a ca-da de los templos.+a hormiga que nunca terminade ascender el
muro de las lamentaciones.Yo me de*aba conducir a ceremonias
clandestinascomo un carnero se abandona a las mesas de
piedra:desco.untado, lamiendo todav-alos .erba*os que crecen en las
grietas.Era mi siglo. ,i lugar. ,i alegr-a m0s all0 de los
*ardines.Yo resist-a. 'esist-a con la memoria,con mi lengua
extran*era,mis ocho a!os,mi nombre di-cil de pronunciarpara los
nuevos gobernantes.'esist-aporque tal es la vocacin de cualquier
animal.!idio %a*o + d" ,")#antamos a la patriacuando es una
muchacha de tacones delgadosaprendiendo a bailar en nuestros
brazos,tan prximo el olor del maquilla*eque a veces nos obliga a
estornudar.#antamos su memoriacuando en un tren se marcha toda
nuestra destreza. ella prolonga su adem0n de novia paradecir adis,
. un beso,. que vuelvas milagrosamente a salvo de la ira.%tra clase
de patria para qu.De la historiaJorge se para rente a un peque!o
6uda . dice:DEl 6uda m0s alto del mundo mide EFG pies.Sus colores
son pardo . gris . verde.H+as historias de siempre. Jorge habla de
sus via*es,%mar de basquetbol, .o de mi inancia.Es como si la voz
se volviera un ata*ohacia el rasgu!o oscuro: nuestro barrio.7etr0s
de las palabras est0n las zanahoriasque en el huerto del patio no
germinaron nunca,Juan Ermilo golpeando con el pu!o. el cuchicheo
del odio en ventanas vecinascuando mam0 regresaba borracha.7etr0s
de las palabras vibran otras palabrascomo la m0s precisa intuicin
de un epitaio:1emos vuelto. Somos los de la esquina.4olamos a
Tailandia,ganamos el partido . le-mos a %vidio,pero lo hicimos solo
para pasar el rato.(hora compramos dulces en la tienda de #hago.
m0s tarde iremos a patear a Juan Ermilo.#omo el rostro de 6uda,las
personas que nos acompa!abanse vuelven grises, pardas, verdes.Y
metemos el brazo de la voz en el airebuscando no s: algo. (lguna
zanahoria.;n ob*eto que ue nuestro en el pasado. que al altar ahora
nos arruina el paisa*e.Heroidas-./0/0 D/L 12/3JobYo, como
(braham,miraba largamente las estrellas.$isaba quedo las piedras
para no despertarlas.Y muchas veces so! que 7ios trazabanuestra
(lianza en el csped de un peque!o *ard-npara luego borrar todo con
pu!ados de cal viva.,arta del profesorSo. un pueblo abatido por las
plagas.2+o s, no es de buen gustomencionar la peste en una
carta.3&uestro hi*o ,osh se ha pervertido. Se vistecomo si
nadie lo mirase,de harapos se viste,como quien renuncia a la
Eternidad.+os salones de la escuela est0n cada vezm0s r-os. Toso .
creo tener los pulmonesadornados por una enramada de escarcha.1o.
no dir vuelve, Sarah.S que el se!or ha puesto su pu!o entre
nosotros.$ero tratemos de mirarnospese a que la distancia exhala un
vaho de plata sucia.Sin ti so. un pueblo abatido por las plagas.;na
barca de remos que da tumbosdel sue!o a la ribera.1arahIu dulces
mu*eres, las putas. (.er por la tardesal- al balcn del hotel a
contemplarlas.Sollozaban de resaca. *ugaban volibol. $arec-an
bailarinassorteando piedras sueltas en la calle.4osh5;na mu*er
maldec-a toda la noche.#eceaba . maldec-a . azotaba una
puertapeque!a 5tal vez la de un ropero.+as bisagras chirriaban como
un trenle*ano pero aqu- *unto a la ore*a,. quin se atreve a huir de
un tren en plena oscuridad.Jolpeaba, maldec-a la puertala mu*er
hasta que el hombrele lanz una amenaza. &o supe qu dec-anesas
palabras entre chasquidos de madera.,e levant. 9ui a la ventana.
#ontempl largamenteel resplandor de las s0banas colgadas en el
patio.1ue*o del profesor( veces te disrazas. Tu voz es un letrero
al ilo del barranco,tu cuerpo es una balaustrada,tus labios una
orilla . otra orilla por donde paso sin saberlocomo un puente de
tablas. Te busco entoncesen tu disraz de sue!o . te desnudo sin
tocarte,con los brazos abiertos para hacer equilibrio. Entre tus
piernascruzo las aguas de la noche. So. cauteloso como la llamaba*o
el soplo:s que los dos estamos hechos de ceniza. en cualquier
instante el tacto podr-a desvanecernos.1arah+o dicen los rumores de
la hierba,un verde que desciende la monta!acon la dignidad del
proeta tras la 'evelacin.+o dicen los rel0mpagos temblandoen mapas
que descubren desviaciones luminosas. entronques que transitan del
cobalto al violeta.+o dice el gris de la autopistacon sus ribetes
blancoscomo de m0rmol o ballena:7ios est0 parado *unto a la
carreterapidiendo un aventn. los coches no saben qu hacercon tanta
prisa.1ue*o del profesortu sombra sin pesoremolino de olatoparecida
a la densa alegr-a de los parques tu sombra como un mirto desho*ado
en el aguaherida de un guerrero que besara su espadaperume . humo
entre los labioscon la e del silbido . el paisa*e de la nieblallega
. traza mis sienesllega . constru.e una pieza en mi memoriacomo si
.o uera el sue!o de tu sombra4osh56ienaventurados los de borracho
corazn,los que incendiaron su pelle*o una noche decarrera por el
bosque . vomitabanen sus propios tobillos retozando entre
brasas.6ienaventurados los atronadorestristes de carne abierta .
ropas sucias,novios embusteros de la vie*a orqu-dea,traidores
imberbes inventores de nostalgia.6ienaventurados sean,
amigos,tigres, palomas,santos . amados sean sus cr0neos,sus
genitales,sus lenguas brillantes de saliva.Ya no hi*os de 7iossino
trocitos de 7ios sean llamados,desde el d-a de ho. . hasta el d-aen
que abandonen el horror . la ternura.racin del profesor$u!o de
7ios, no golpeesel rincn de mi nombre donde me he pertrechado.El
d-a es cruel . cada hombre muerde su pan,su anetamina,su perpetua
oracin. En los estadioslos ni!os derrotados aprenden a
traicionar.En aeropuertos runas de unicel nos gu-anhacia el )ltimo
nombre del silencio.Y mu*eres desnudas, r-as como cristalesbailan
decapitadas en la cresta nocturna.$u!o de 7ios, mi amada duermeen
una de tus hendiduras. El trigo de sus labiosbesa las manchas de
nicotina de tus dedos.Sus pechos son *arrones de mielque endulzan
tus nudillos.Su carne es el agua que no logras apresar.Su
pensamiento es una l0mpara encendidaen un hotel de paso a las
aueras de tus golpes.$u!o de 7ios,mi amada es una estatua de la sal
de la tierra.&o es un telono p)blico.&o bastan diez
centavos.1arahEscap de los m-os . ahora me alcanzan.4ienen del
sue!o con sus corbatas grises,con sus visiones turbias . sus pipas
humeantes,vienen del sue!ocon su hombruna . su mu*eril cortes-a,con
su amor a los ni!os . su absurdo sopor de los s0badosvienen del
sue!ocon sus cuerpos tapiados,la mirada encogida como un guante de
estambre,con o*os de cordero vienen del sue!o,con los o*os que los
corderos posan en las mesas de piedra.El hi*o . el amado,la piedad
que no tuve,me alcanzan,me miran,.a no llego hasta mi aliento,pisan
quedo las piedras para no despertarlas,entre cien millones de
almas,sin torcer el camino,no se detienen,vienen del sue!o,esa
berme*a distancia sin cesar.Se!or m-o, 7ios m-o, mi Se!or:escap.
ahora me alcanzan.Job2&adie di*o: amar0s lo concreto, la orma
que temes pero enca*a en la tu.a, la sien que oprime tus m)sculos/
una piedra de ulgor marital.&adie dict: multiplicar0s esta
ribera de las desventuras.&o hab-a nadie ah- ni las palabras se
hab-an escrito o dicho ni erig-a la noche su columna deiebre.Slo
dos cuerpos ba*o la colcha . murmullos provenientes de la
calle.36/1/.D7en el nombre de (riadna2un laberinto3la inicial
amanece
