Bol. Serv. Plagas, 6: 17-30, 1980

La utilización de la aviación en laagricultura española

F. ROBREDO

La aviación agrícola se utilizó en España por primera vez en 1950 en el trata-miento de 1.234 Has. de pinar contra la Lymantria monacha. Actualmente, operan20 Compañías con unas 150 aeronaves entre aviones de ala fija y helicópteros.

La aplicación de insecticidas y fungicidas (unos 34.000.000 Kg.-l. de mediaanual) fertilizantes (unos 30.000.000 Kg.-l) y herbicidas (unos 7.000.000 Kg.-l) sonlos principales trabajos realizados en España por la aviación agrícola.

La vigilancia y extinción de incendios forestales (unas 1.500 horas anuales),la lucha contra mosquitos, la siembra de arroz y pratenses, la lucha contra el gra-nizo y heladas, las prospecciones aéreas y los censos de fauna, son trabajos frecuentesde la aviación agrícola en España.

Según los últimos datos disponibles, los tratamientos aéreos se realizan prin-cipalmente sobre trigo (unas 400.000 Has.), arroz (230.000 Has.) algodón (130.000 Has.)cítricos (115.000 Has.) bosques (120.000 Has.) olivos (80.000 Has.) etc.

También se tratan por aviación tomates, viñas, remolacha azucarera, maíz ysorgo, tabaco y plátanos en superficies importantes.

F. ROBREDO. Servicio de Defensa contra Plagas e Inspección Fitopatológica.Madrid. España.

ANTECEDENTES

En el verano de 1950 un avión AEROVANtrató por espolvoreo un bosque de pinos de1.234 Has. contra Lymantria monacha L. en laProvincia de Teruel. Este fue el primer tra-bajo realizado por la aviación agrícola enEspaña. Los resultados fueron tan alentado-res que, en 1952, el Ministerio de Agriculturaconvocó un concurso oficial para contratar,

por primera vez en España, la aplicación deplaguicidas por avión.

Desde entonces, el Ministerio de Agriculturay la Subsecretaría de Aviación Civil han pro-mocionado la aviación agrícola hasta talpunto que, actualmente, España ocupa uno delos primeros puestos en Europa con 22 com-pañías que operan 130 aviones y 23 helicóp-teros.

• Presentado en el VI Congreso Internacional de Aviación Agrícola. TURIN, septiembre de 1980.

DESARROLLO DE LA AVIACIONAGRICOLA EN ESPAÑA

Se resume en el cuadro siguiente:

CUADRO nB 1.— TRABAJOS REALIZADOS POR LAAVIACIÓN AGRÍCOLA EN ESPAÑA HASTA 1979

Durnte la primera parte de la década de los50, España se encontraba aún aislada del restodel mundo por razones políticas. Como con-secuencia de esto era imposible, al país, conse-guir aviones excedentes de guerra o comprar-los a países extranjeros. Debido a esto, la avia-ción agrícola comenzó más tarde que en lamayor parte de los países europeos y su de-sarrollo durante la década de los cincuenta fuemuy lento.

En 1961, un helicóptero Hughes 269 A,comenzó a operar en España. Cuatro años mástarde, en 1965, había ya 9 helicópteros tra-bajando en la agricultura española. Desde

entonces, la aviación agrícola se ha ido ex-pandiendo continuamente en España y parecetener un futuro prometedor.

Durante los últimos años el número deaeronaves se ha ido incrementando lentamen-te. Durante 1978 y 1979, sin embargo, el nú-mero de aeronaves agrícolas ha disminuidoalgo, debido a que los pequeños aviones que sehan dado de baja por antigüedad o accidentese han sustituido por un número menor deaviones, pero de mayor capacidad. Así, lacapacidad total de carga de la flota no ha dis-minuido.

Sin embargo, la superficie tratada no au-menta proporcionalmente con la capacidad decarga del total de aeronaves.

Esto puede ser debido a dos factores prin-cipalmente:

a) Durante el verano, la mayor parte de losaviones de mayor capacidad de carga se con-tratan para la lucha contra los incendiosforestales y los aviones pequeños son los quequedan para hacer las aplicaciones agrícolas.De esta manera la capacidad real para estostrabajos agrícolas disminuye, así como el ren-dimiento. Además, el número de horas regis-trado parece indicar también un rendimientomuy bajo en superficie tratada por hora devuelo, lo cual no es exacto debido a que hay ungran número de horas de vuelo dedicadas a lavigilancia y extinción de fuegos forestales.

b) La subida de precios del combustible,junto con una disminución de las subvencio-nes para combustible de aviones y un mante-nimiento de las subvenciones para el combus-tible de la maquinaria agrícola, hacen que elprecio de las aplicaciones aéreas no sea tancompetitivo como lo era antes.

Por otra parte, la demanda de tratamientosagrícolas y sobre todo la aplicación aérea defertilizantes, que suele tener un gran volumenen España, está muy supeditada a las condi-ciones climáticas de la estación, especialmentea la abundancia de lluvia. Durante las épocasde lluvia la demanda de aplicaciones aéreas es

Fig. 1. Helicóptero con toberas Venturi para espolvoreo accionadas mediante aire forzado. (Foto Archivo Servicio De-fensa contra Plagas).

mayor debido a que, en muchos casos, losequipos de aplicación terrestre no pueden uti-lizarse. Si la estación viene seca, no suele habermucha demanda de trabajo para los aviones ylos equipos terrestres harán la mayor parte deltrabajo a precios generalmente más econó-micos. Este hecho puede justificar las dife-rencias entre las superficies totales tratadascada año.

Otros factores, tales como los fallos en lascosechas, las condiciones del mercado, etc.,pueden tener también cierta influencia sobrela cantidad de trabajo realizado en un ciertoaño.

ANÁLISIS DE LOS TRABAJOSREALIZADOS POR LA AVIACIÓNAGRÍCOLA EN ESPAÑA

Aplicación de productos fitosanitarios yfertilizantes

Tratamientos

En el Cuadro 1 podemos ver que la superfi-cie total tratada por medios aéreos y el númerototal de horas voladas durante los últimoscinco años sigue un ritmo ascendente, a pesarde la naturaleza cíclica y estacional de estostrabajos y a la diferencia entre estaciones

debida a las fluctuaciones meteorológicas.La influencia de estos factores se puede

observar en las fluctuaciones anuales de losdistintos tipos de aplicaciones, sobre todo enlas fluctuaciones en la aplicación de fertili-zantes. Estos tuvieron un máximo en 1977,mientras en 1980, aunque aún no hay datosdefinitivos, parece haber decrecido sensible-mente en comparación con años anteriores.

En cambio, la aplicación de herbicidas, porel contrario, se mantiene relativamente cons-tante a lo largo de los últimos años. Parece serque las condiciones meteorológicas no tienenuna gran influencia sobre la demanda de estetipo de tratamientos, que se mantienen comouna práctica agrícola de rutina en ciertoscultivos como el arroz, trigo, remolacha azu-carera, etc.

La aplicación de insecticidas y fungicidas es

la principal tarea de la aviación agrícola enEspaña. Durante los cinco últimos años se hanlanzado anualmente, como término medio,unos 34.000.000 Kg.-l. de productos insecti-cidas y fungicidas por medios aéreos.

La aplicación de fertilizantes, con mayoresdiferencias de un año a otro, puede decirse quealcanzaron casi una media anual de 30.000.000Kg.-l. durante 1977-79, si bien la cifra en 1975y 1976 osciló alrededor de 8.500.000 Kg.-l. demedia anual. Este tipo de aplicación propor-ciona una gran cantidad de trabajo durante losinviernos lluviosos.

La aplicación de herbicidas por mediosaéreos se ha mantenido casi constante durantelos últimos cinco años, oscilando alrededor delos 7.000.000 Kg.-l. anuales con muy escasasdiferencias de un año a otro.

Fig. 2. Avión Cessna Ag-Wagon en una pista de aterrizaje provisional durante un tratamienio con la técnica de Vo-lúmenes Bajos en pinares. {Foto Archivo Servicio Defensa contra Plagas).

Fig. 3. Cessna Ag-wagon al fi-nal de la pasada en untratamiento con la técni-ca ULV. Obsérvese elglobo de señalización depasadas. (Foto ArchivoServicio Defensa contraPlagas).

Las aplicaciones aéreas de productos fito->anitarios y fertilizantes sobre trigo, arroz yotros cereales, llegan a ser casi la mitad deltrabajo de este tipo realizado por la aviaciónagrícola en España. A continuación los trata-mientos del algodón, cítricos, olivos y bosquesocupan los primeros puestos en volumen detrabajo.

También se tratan por medios aéreos im-

portantes extensiones de otros cultivos comoremolacha azucarera, patatas, tomates, tabaco,viñedos, maíz, sorgo y plátanos.

Para dar una idea de la importancia rela-tiva que tienen los diferentes cultivos en laaviación agrícola, damos una media anual delas hectáreas tratadas por medios aéreos y elporcentaje que supone en cada uno de loscultivos.

Fig. 4. Atomizador rotatorio MícronairAV -3000 para api icacíón deplaguicidas con la técnica devolúmenes Ultra Bajos (ULV).(Foto Archivo Servicio Defensacontra Plagas).

Todas las aplicaciones de herbicidas y fer-tilizantes, por medios aéreos, son contratadosparticularmente por los agricultores. Sola-mente, en casos muy especiales, o para demos-trar nuevas técnicas de aplicación, el Minis-terio de Agricultura, a través de sus organis-mos especializados, lleva a cabo pequeñasaplicaciones experimentales o demostrativas.

En el extremo opuesto tenemos los trata-mientos contra plagas y enfermedades fores-tales. En este caso, dadas las especiales carac-terísticas de los ecosistemas forestales en que esabsolutamente necesario realizar los trata-mientos con técnicas que aseguren un impactomínimo sobre la biocenosis y el biotopo de

dichos ecosistemas, al mismo tiempo que seelimina la plaga, una gran proporción dedichos tratamientos se realizan directamentepor el Servicio de Defensa contra Plagas delMinisterio de Agricultura, a través de susespecialistas. Aproximadamente de un 75 a un80% de los tratamientos aéreos forestales sontratamientos oficiales y, de éstos, práctica-mente el 100% de los tratamientos fitosanita-rios contra plagas de los pinares se ejecutanpor el grupo forestal de especialistas del Ser-vicio de Defensa contra Plagas del Ministeriode Agricultura que además aporta, en conjun-to, más del 75% de los fondos necesarios.

En las aplicaciones aéreas de productos fi-tosanitarios contra enfermedades o plagasagrícolas, el Ministerio de Agricultura, através del citado Servicio de Defensa contraPlagas, presta ayuda técnica y, en algunoscasos, ofrece subvenciones directamente o através de otras organizaciones oficiales. Lassubvenciones aportadas por el Ministerio sonde cuantía muy variable y, excepcionalmente,cubren el 50% de los gastos de tratamiento. Lostratamientos aéreos contra plagas y enferme-dades agrícolas en los que el Ministerio actúaoficialmente de una u otra forma no superan,

Fig. 5. Atomizador rotatorioACUMIST para aplica-ciones ULV. (Foto Ar-chivo Curso Aplicacio-nes Agro-Fores tal es dela Aviación).

Fig. 6. Piper Pawnee calentando mo-tores al amanecer para comen-zar los tratamientos. Nótese latransparencia del cíelo, presagiode buenas condiciones meteo-rológicas para la aplicación.(Foto Archivo Curso Aplicacio-nes Agro-Forestales de la Avia-ción).

en general, el 40% de la superficie tratada.Normalmente, la acción directa del Minis-

terio de Agricultura y las ayudas económicas alos agricultores tienen lugar cuando la ex-tensión afectada por una determinada plaga,su incidencia sobre los productos de expor-tación (mosca mediterránea de la fruta, mosca •del olivo, etc.), su acción catastrófica (lan-gosta, L. dispar), el deterioro de zonas recrea-tivas (procesionaria del pino, galeruca del

olmo), etc. mueven a las organizaciones oficia-les a financiar, en todo o en parte, o a realizardirectamente, los tratamientos necesarios.

Técnicas de aplicación

Durante la etapa inicial de establecimientode la aviación agrícola en España práctica-mente todas las aplicaciones se realizabanmediante espolvoreo. Poco a poco, los tra-

Fig. 7- Tratamiento de un enci-nar con la técnica ULV.(Foto Archivo ServicioDefensa contra Plagas).

Fig. 8. Aplicación a bajo volumen so-bre viñas. (Foto Archivo Cur-so Aplicaciones Agro-Foresta-les Aviación).

tamientos contra plagas y enfermedades agrí-colas comenzaron a realizarse con productoslíquidos que se aplicaban a volúmenes relati-vamente altos, normalmente más de 80 I/Ha.Sin embargo, los olivares y las zonas forestalessiguieron tratándose, hasta hace relativamentepocos años, mediante la técnica de espolvoreoaéreo. España es un país seco y en muchaszonas, la falta de agua, su costo y los proble-mas de transporte de grandes cantidades deagua a las pistas de aterrizaje eran las princi-pales razones para seguir aplicando formula-ciones para espolvoreo.

Actualmente, las técnicas de aplicación devolúmenes ultrabajos (ULV) se usan amplia-mente en España principalmente en trata-mientos forestales en que más del 90% de lasaplicaciones en bosques se realizan con dichatécnica. También se utilizan ampliamente enlos tratamientos contra la mosca mediterráneade la fruta, Ceratitis capitata, en cítricos ycontra Dacus oleae en las plantaciones deolivos. La mayor parte de estas aplicaciones serealizan con atomizadores rotatorios, Micro-nair AU 3.000 y Acumist. Las boquillas TEE-JET también se utilizan ampliamente.

Como ejemplo de las técnicas de tratamien-to que se aplican en España describiré con

algún detalle los principales tratamientos fo-restales y los tratamientos contra Ceratitiscapitata en la zona citrícola de Levante.

En los tratamientos forestales tenemos:

Encinares y Alcornocales.Superficie aproximada tratada en 1980:

70.000 Has.Plagas principales: Tortrix viridana y Ly-

mantria dispar.

Técnica de lucha contra T. Viridana.0.75 - 1.00 litro/Ha, de Malathion ULV,

(96%).Aplicado por atomizadores rotatorios, Mi-

cronair AU 3.000 o Acumist.Es necesaria una gran penetración por estar

la oruga en el interior de los refugios forma-dos por hojas enrolladas y en el interior de lasyemas.

Técnica de lucha contra L. dispar.100 g. de Dimilín 45 ULV en 2 litros de gas-

oil/Ha.200 g. de Dimilín 25 WP en 15 litros de

agua/Ha, aplicado con atomizadores rotato-rios.

Es necesaria una buena cobertura.

Fig. 9. Primeras pasadas, a] amanecer,en una aplicación por espolvo-reo contra plagas forestales.(Foto Archivo Servicio Defensacontra Plagas).

Pinares.Está programado y realizándose ya el tra-

tamiento de 75.000 Ha. de pinares atacadospor la procesionaria del pino.

Técnica de lucha contra la procesionaria.De 100 a 150 g. de Dimilín 45 ULV en 5 L.

de gas-oil/Ha.De 250 a 300 g. de Dimilín 25 WP en 20 L. de

agua/Ha, aplicado con atomizadores rotato-rios en ambos casos, aunque en la aplicaciónde las soluciones acuosas suelen utilizarsetambién boquillas TEEJET.

Es necesaria una buena cobertura.

Lucha contra la Ceratitis capitata.Este año está programado el tratamiento en

toda la superficie de cítricos, unas 200.000 Ha.,esperando que sólo sea necesario el tratamien-to de unas 75.000 Ha. a las cuales se les haránde 1 a 3 aplicaciones durante la época de tra-tamientos, lo que supondrá una superficie deaplicación de unas 150.000 Ha.

Las zonas citrícolas están divididas en polí-gonos que oscilan alrededor de las 1.200 Ha.Cada uno de estos polígonos, a su vez, estádividido en Retículas de unas 150 Ha. de ex-tensión y en ellas se colocan puntos de

muestreo, con 3 mosqueros cada uno, repre-sentativos de 20 Ha. Dichos mosqueros se re-visan cada 3 días.

El umbral económico práctico se sitúa entre1 y 2 moscas de media por mosquero y día. Apartir de esta cifra se da la orden de trata-mientos a los aviones. El tratamiento consisteen la aplicación de un cebo envenenado com-puesto de proteínas hidrolizables más uninsecticida fosforado.

Este cebo se aplica a razón de 20 litros porhectárea en fajas de 50 m. de anchura. El aviónvuela a unos 15 m. de altura sobre la copa delos árboles. En estos tratamientos la coberturay la penetración no tienen importancia al-guna, ya que se trata de aplicar un cebo. Eltamaño de la gota media es de 1,5 a 2 mm. dediámetro real. La densidad media es de unas170 gotas por decímetro cuadrado.

Se utilizan equipos convencionales de barray boquillas de cono hueco.

Las aplicaciones más corrientes en agricul-tura se realizan igualmente con los equiposconvencionales de barra y boquillas. En laszonas agrícolas el agua no es un problema. Lasextensiones a tratar no son excesivamentegrandes y las distancias entre las pistas deaterrizaje y las fuentes de agua son relativa-mente cortas. Los volúmenes de pulverización

Kig. 10. (A) Aviones Lear Jetutilizados para trabajosde modificación me-teorológica. (Foto J.Aragonés).

más utilizados en la mayor parte de los casososcilan entre 15 y 40 l./Ha., aunque en algu-nos cultivos, como tomates, se suelen aplicarvolúmenes mayores.

Incendios forestales

En 1980, 14 Canadair CL-215, biomotoresanfibios y otros 11 aviones ligeros, ThrushCommander, Cessna Ag-Truck y Piper Paw-nee Brave, estuvieron asignados a la vigilanciay extinción de incendios forestales en diversasbases del territorio nacional, al igual que en1979.

Los aviones anfibios son propiedad delInstituto Nacional para la Conservación de laNaturaleza del Ministerio de Agricultura, perose hallan cedidos al Ejército del Aire que losadministra y mantiene, siendo tripulados porpilotos militares destinados en el Grupo 43 delas fuerzas Aéreas de Salvamento (FAS) en elcual quedan integrados.

Estos aviones volaron en 1979 un total de3.957 horas en trabajos de extinción de in-cendios forestales. Siete de estos aviones fue-ron adquiridos durante los primeros meses de1979.

Los 11 aviones ligeros fueron dedicados,sobre todo, a la patrulla y vigilancia de in-cendios forestales, aunque también realizarontrabajos de extinción en los que son muy efi-caces en los primeros momentos, sobre todo sise utilizan retardantes del fuego. Estos avio-nes actuaron desde bases complementarias y,muchas veces, desde pistas de aterrizaje provi-sionales abastecidas previamente de agua. Entrabajos de extinción y vigilancia estos avio-nes realizaron un total de 1.036 horas de vuelodurante el verano del pasado año.

Otras aplicaciones de la aviación agrícola

Modificación del tiempo atmosférico

a) Prevención de heladasEn algunas zonas se utilizan helicópteros

para producir turbulencia en el aire y evitar asíla helada.

El paso de un helicóptero una y otra vezsobre campos de siembra y huertos agita el airefrío que se mantiene quieto sobre ellos cau-sando una mezcla entre las capas de aire, quetienen distinta temperatura, mezclándolas y

evitando así que la temperatura baje lo su-ficiente para causar daño a las cosechas.

Este método se ha utilizado en escasas oca-siones en las zonas llanas del centro de Es-paña.

b) Prevención del granizoLas nubes de granizo se pueden detectar

mediante radar y sembrarse con ioduro deplata para inducir precipitación en forma delluvia en vez de granizo. Este método es muysofiticado y necesita un complicado equipo dedetección y aplicación, así como técnicos muyespecializados si se quieren conseguir resul-tados aceptables.

En 1978 se inició en España un proyectopiloto de prevención y lucha contra el granizode cinco años de duración en la región sudestede España, cubriendo amplias zonas de lasprovincias de Murcia, Albacete y Valencia conuna superficie de 400.000 Ha. Este proyectoestá dirigido por la sección de Lucha Preven-tiva del Servicio de Defensa contra Plagas delMinisterio de Agricultura.

En 1978 no se detectó granizo sobre la zonaprotegida, durante el período de actuación delequipo, pero las condiciones meteorológicasno fueron favorables a la formación de gra-nizo en la zona.

En 1979 tampoco se detectó granizo de ta-maño suficiente para causar daños aprecia-bles en el área defendida, aunque se detecta-ron fuertes tormentas en la zona.

Durante 1980, hasta la fecha, ha habidovarios días tormentosos en que no se hancausado daños en la zona. Sin embargo, el 16-7-80, hubo varias grandes tormentas sobre elárea objetivo que fueron sembrados y se evi-taron los daños en la zona, aunque, posterior-mente, una tormenta a primeras horas de latarde se regeneró y causó daños de conside-ración en la zona limítrofe. También ese díalos aviones quedaron 2 horas en pista, sinpoder utilizarse, como consecuencia del cierredel aeropuerto al quedar bajo mínimos me-teorológicos como consecuencia de dichas tor-mentas. Esto indica la necesidad de defender

zonas de mayor superficie y, lo que es másimportante, tener más de una base disponiblepara el aterrizaje de aviones.

Desde el punto de vista estadístico, los dosprimeros años de actuación no son aún signi-ficativos, si bien se perfila ya una tendenciapositiva que, esperamos nos permita afianzarese criterio a finales de este año, cuando estéterminado el estudio final de resultados.

Durante la campaña de 1978, se utilizó enestos trabajos un avión Piper Azteca. En 1979,2 aviones, un Piper Azteca y un Cessna 300. En1980, 2 aviones Piper Azteca. Todos estos avio-nes son bimotores, turbo alimentados, sinpresurizar, pero con oxígeno disponible parael piloto. Tienen un techo aproximado de

F i g . 11. (JB) P a n z a d e u n L e a r Jei m o s t r a n c i o las ( e s t a s I l i -nas de cartuchos de ioduro potásico. (Foto J. Ara-gonés).

8.500 m., necesario para alcanzar las altas cotasde la parte superior de las nubes de granizo,donde se suelen hacer las siembras. Llevanradar meteorológico y están provistos de equi-pos para navegación nocturna.

Los pilotos están especializados en este tipode tratamientos y necesitan una gran expe-riencia, pues el trabajo requiere el manejo deinstrumentos muy sofisticados y puede ser po-tencialmente muy peligroso si no se conoce ono se determina concretamente la zona desiembra de la nube mediante el correspon-diente modelo matemático proporcionado porel computador de la estación central de ope-raciones y el radar.

c) Siembra aérea

La mayor parte del arroz se siembra desde elaire. Alrededor de unas 20.000 Ha. de arroz sesiembran anualmente, principalmente en lasMarismas del Guadalquivir, Delta del Ebro yAlbufera de Valencia.

La semilla del arroz, convenientemente pre-parada y a punto de brotar, se lanza desde elaire sobre los campos inundados.

d) Lucha contra mosquitos

En la mayor parte de los lugares turísticosde nuestras costas es necesario tratar contra los

mosquitos dos o tres veces cada verano. Estetrabajo suele llevarse a cabo mediante heli-cópteros que aplican Maíathión ULV a razónde 1 I/Ha, normalmente.

e) Prospecciones aéreas

Se han realizado prospecciones aéreas paradetectar infestaciones de perforadores (barkbeetles) en zonas de pinar de los Pirineos ySierra Morena para delimitar y evaluar losataques de Ips acuminatus y Blastophagusdestruens respectivamente, y poder así tomarlas medidas de control adecuadas.

Con este objeto se han utilizado fotos encolor y en infrarrojo a escala 1:8.000.

f) Censos de animales

Las prospecciones aéreas se han mostradocomo un excelente método en los estudios depoblaciones de animales silvestres, ya que es elúnico medio de obtener datos exactos enun espacio corto de tiempo, sobre todo cuandose estudian poblaciones de animales en migra-ción.

Hace algún tiempo se realizó en España uncenso de aves acuáticas en 220 localidadesrepartidas por todo el país. Este censo ha sidouno de los más extensos realizados en Europa.

Fig. 12. (C) Sala de operaciones de labase mostrando el Radar y laComputadora. (Foto J. Arago-nés).

Fig. 13. (O) Carga de cartuchosmontados en la panzade un Piper Azteca Tur-bo. (Foto J. Ararmés).

Fig. 14. (E) Avión Azteca Turbo mos-trando daños producidos poruna tormenta de granizo. (Al-bacete, España, 16 7 80). (Fo-to j . Aragonés).

PREPARACIÓN PROFESIONAL DE LOSPILOTOS

Para obtener una licencia como piloto agrí-cola es necesario estar en posesión de un cer-tificado UFR de piloto comercial con unmínimo de 200 horas y tener suscrito un con-trato de trabajo con una compañía que estédedicada a la realización de trabajos agrícolas.

Una vez cumplidos estos requisitos, la Sub-secretaría de Aviación Civil, perteneciente alMinisterio de Transportes y Comunicaciones,expide una licencia que faculta para la rea-lización de trabajos agrícolas aéreos a todopiloto que la solicite.

En los comienzos de la aviación agrícola enEspaña, la mayor parte de los pilotos que tra-bajaban en esta rama eran pilotos militares

con un nivel profesional muy alto como pilo-tos. Actualmente, como entonces, aunque muybuenos pilotos, los pilotos agrícolas no poseenel suficiente conocimiento básico necesariosobre técnicas de aplicación y sus fundamen-tos, productos químicos, plagas y enferme-dades, etc.

El Ministerio de Agricultura, consciente deesta realidad, consideró que era necesario es-tablecer un curso sobre «Aplicaciones Agrí-colas y Forestales de la Aviación» para lospilotos agrícolas. En 1978 la UniversidadPolitécnica de Madrid, en colaboración con elMinisterio de Agricultura y la Subsecretaría deAviación Civil, estableció el citado Curso deun año de duración que consta de las 13 asig-naturas siguientes:

1. Ecología.2. Legislación.3. Fotografía aérea y Detección de plagas.4. Incendios forestales.5. Entomología y Patología Agrícola.6. Entomología y Patología Forestal.7. Planificación de Tratamientos.8. Técnicas de Vuelo.9. Métodos y Equipos de Aplicación.

10. Economía y Cálculu de Costos.11. Productos Fitosanitarios.12. Seguridad de vuelo.13. Meteorología y Modificación Meteoro-

lógica.

En la primera edición de este Curso se ad-mitieron 20 alumnos, todos pilotos agrícolas.En 1979 el Curso se amplió con objeto de ad-mitir técnicos no pilotos que trabajaban en elcampo de las aplicaciones fitosanitarias y quedeseaban recibir también las enseñanzas delCurso.

En 1980 el Curso se dividió en dos grupos,uno para pilotos y el otro para técnicos nopilotos, entre los cuales se encuentran inge-nieros agrónomos, forestales y aeronáuticos.Este año asisten al curso un total de 40 alum-nos divididos en los dos grupos antedichos,entre los cuales se encuentran alumnos ex-tranjeros. Hasta la fecha se han matriculadomás de 100 alumnos durante los dos años ymedio transcurridos.

Al final del Curso los alumnos que hansuperado las pruebas reciben un Diploma dela Universidad Politécnica de Madrid.

ABSTRACT

ROBREDO, F. 1980.— La utilización de la aviación en la agricultura española. Bol.Sew. Plagas, 6: 17-30.

Aircraft was used in Spain for the first time in 1950 for forest pest control. Today22 companies operate about 130 fixed wing aircraft and 23 helicopters.

The application of insecticides and fungicides (34.000.000 Kg.-l.), fertilizers(30.000.000 Kg.-l.) and herbicides (7.000.000 Kg.-l.) are the main uses of agriculturalaviation.

Forest fires fighting and surveillance (1.500 flying hours), mosquito control,aerial seeding, hail and frost prevention, aerial surveys and animal census are someother tasks carried out by aircraft.

According with the last data available, aerial treatments are performed mainlyon wheat (400.000 Ha.), rice (230.000 Ha.), cotton (130.000 Ha.), citrus (115.000 Ha.),forest (120.000 Ha.), olive trees (80.000 Ha.), etc.

Sugar beets, tqmatoes. vineyards, corn and sorghum, tobacco and banana arealso treated by aircraft on fairly large surfaces.