20
LA VERDAD DE LOS SOLOS un proyecto documental de Teresa Sáez

La verdad de los solos

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Dossier del proyecto documental realizado en el marco del Master de Documental de Creación de IDEC-Pompeu Fabra (Barcelona)

Citation preview

Page 1: La verdad de los solos

LA VERDAD DE LOS SOLOS

un proyecto documental de

Teresa Sáez

Page 2: La verdad de los solos

Solo ante la moralidad imperante. Solo ante el cliente. Solo ante elpresunto culpable. Solo ante la duda. Este es el retrato de un abo-gado penalista en el ejercicio diario de su profesión. ¿Cuáles sonsus contradicciones a la hora de conciliar la ética profesional consu moral? ¿Duda?

Page 3: La verdad de los solos

Esta es la historia de Dionisio Sáez. Un hombre de57 años, abogado penalista de profesión, tanto deoficio como privado, que ha defendido a lo largo desu vida a toda clase de delincuentes: desde narco-traficantes hasta camellos, pasando por todo tipode ladrones, estafadores, homicidas, chaperos, ma-fiosos, y demás personas que en algún momento (oen varios) quebrantan alguna de las normas escri-tas en nuestro Código Penal.La película retrata la parte humana de un abogadopenalista en el ejercicio de su profesión. En la mi-sión de desempeñar la defensa de un “presunto cul-pable” conoceremos los procesos interiores yexteriores que vive en el transcurso de su cotidia-neidad. Su soledad ante el cliente. Su soledad antela moralidad imperante. La irrupción (subjetiva)

de la moral humana en la moral profesional; el ca-rácter aparentemente inquebrantable pero a la vezfrágil del hombre, del sistema; las dudas moralesy las imposibilidades humanas a la hora de afrontarun caso.En un formato coral se tratará de realizar el segui-miento de varios casos a lo largo del proceso penalcon el abogado como punto de referencia del re-trato. Él será el guía del recorrido por los diferen-tes espacios que marca el proceso (desde lacomisaría hasta el juzgado) y el punto neurálgicode las relaciones que se establecen con los diferen-tes agentes que intervienen en él.Relaciones con policías, fiscales, jueces, abogadosy funcionarios que aportarán a su vez una visiónglobal del funcionamiento del sistema jurídico.

SINOPSIS

Page 4: La verdad de los solos

DESCRPICION DEL PERSONAJE

Cuando trabaja siempre va vestido con traje y corbata,incluso en verano. A pesar del calor, no se quita la cor-bata ni debajo del agua. Los fines de semana sí, aunquetambién trabaje. Desde que empezó como abogado pe-nalista, su primer cliente lo tuvo cuando tenía 24 años,su jornada laboral se extiende a los fines de semana,momento en el que se encierra en su pequeño despacho

ubicado en la Judería Vieja de Segovia y estudia loscasos pendientes para la semana siguiente. El único mo-mento en el que la corbata parece desaparecer de suvestimenta es cuando realiza un juicio. El uso de togadurante la celebración de procesos judiciales es obliga-torio. Dice que los juicios son cómo una gran descarga de adre-nalina para él, y cuánto más complejo es el caso puesmayor es la sensación que le produce una vez concluido.Acumula mucha tensión; y más si está en juego la pri-vación de la libertad de su defendido. Para él, la pre-sunción de inocencia no es una condición de suprofesión sino algo en lo que cree profundamente. In-cluso, en muchas ocasiones, y cuando ya hay una sen-tencia firme sobre su defendido, considera que el juezde turno se ha ensañado imponiendo una condena ex-cesiva.La sociedad está dominada por una escala de valoreséticos y morales rígidamente preestablecidos y media-tizada por los juicios paralelos de los medios de comu-nicación. Cuando alguien comete un delito, siempre le

Dionisio Sáez en su despacho con un cliente.

Page 5: La verdad de los solos

recordamos por el hecho en sí, y no porque fulanito detal fuera panadero y tuviera cuatro hijos que ahora vana visitarle todas las semanas a la cárcel de Valdemoro.Para él, en cambio, las personas tienen un valor muchomayor en relación a los errores que puedan cometer ensus vidas.Dionisio conoce lo que supone la privación de libertadcasi como si la viviera en sus carnes. Acude con bas-tante frecuencia a diferentes centros penitenciarios avisitar a sus clientes: estudiar en qué estado se encuen-tra su caso, los plazos para la puesta en libertad o losdiferentes recursos que se pueden interponer apelandoa tribunales mayores a los que han emitido la sentenciaque ha hecho que acaben entre rejas. La mañana detodos los 24 de diciembre acude a hacer una visita atodos ellos. Claro, para los que están en la cárcel, suabogado se convierte en su principal protector e inclusoamigo. Tal es el punto, que muchos de ellos utilizan laúnica llamada telefónica que se les permite al día(cinco minutos absolutamente cronometrados) para lla-marle a él. Cuándo éstos salen de la cárcel, el protec-cionismo se gira del lado contrario y “que no le pasenada a nuestro abogado”. En alguna ocasión, algunosgitanos/as (fieles clientes de este abogado) han hecho

Dionisio saliendo del juzgado.

Page 6: La verdad de los solos

barricada alrededor del coche mal aparcado del letradofrente a la policía municipal y la grúa, mientras otrocorría a su despacho para ponerle en preaviso de la po-sible retirada de su coche.Su despacho es como su segunda casa. En él no sólo es-tudia los casos o realiza los escritos y demás trámiteslegales que requiere cualquier procedimiento, sino quetambién recibe las visitas. En ocasiones dice que su des-pacho se parece a “un consultorio sentimental”. Talesson las tesituras en las que se encuentra a veces (ma-dres que lloran por su hijo que era un santo hasta quele pillaron con cinco kilos de cocaína; hijos sin oficioni beneficio que aparcan en la puerta su Audi A4 des-capotable pero ellos nunca han traficado con drogas;personas condenadas por alcoholemias que aseguranante Dios y todos los santos que no habían bebidocuando dieron un positivo descomunal,…) que su facetacomo psicólogo adquiere una gran relevancia. Y es quecuando le oyes hablar con alguno de ellos lo hace en untono tan paternal que parece que está hablando con un

niño pequeño recriminándole por haberse metido otravez en el charco.Lo que más lata le da de su trabajo son los turnos deguardia como abogado de oficio. Él tiene su despachoprivado, pero como colegiado de Segovia, responde aunos turnos de oficio que van rotando y que implicanuna guardia de 24 horas. Y si estos turnos coincidencon el fin de semana, pues peor, puesto que el alcohol yel tiempo libre disparan las posibilidades de cometerdelitos. Entonces, no es raro que le veas salir por elportal de su casa el sábado a las 4 de la mañana tras lainterrupción del sueño por parte de un policía al otrolado del móvil solicitando su presencia en el punto máslimítrofe de la provincia (el lugar más alejado de sucompetencia) para asistir a un detenido que ha dadopositivo en un control de alcoholemia, que se ha metidoen una pelea o que cargaba con un buen cóctel de estu-pefacientes en dirección al parking de turno de una dis-coteca.

Page 7: La verdad de los solos

La estructura dramática del film sigue los espacios porlos que circula Dionisio a lo largo del proceso penal. Elfilm arrancará con una detención (primer contacto delabogado con su cliente y toma de declaración por la po-licía), continuará con las consultas en el despacho(punto crucial de construcción del discurso) y concluiráen las salas del tribunal (exposición pública de la de-fensa); realizando también una aproximación al ámbitocarcelario (visitas concertadas en centros penitencia-rios).

LOCALIZACIONES Y ESTRUCTURA DRAMATICA

Page 8: La verdad de los solos

COMISARÍA DE POLICÍA La verdad de los solos co-mienza cuando Dionisio es telefoneado desde la comi-saría de policía. Su voz en off sobre negro: “No realicesninguna declaración hasta que no hables conmigo”. Elprimer plano revela una calle desierta; es de noche. Unhombre sale de un portal y se dirige hacia un coche. Lovemos en la lejanía y de espaldas.En la comisaría el abogado charla (conversaciones ba-nales) con los policías y tiene su primer encuentro conel cliente. Es la asistencia al detenido y, dependiendodel caso, Dionisio le aconseja el declarar, o no.

Apuntes durante el proceso de escritura.

Dionisio habla con el secretario general de la Comisaría de Segovia en la sala de declaraciones por estupefacientes.

Page 9: La verdad de los solos

DESPACHO Un reloj de principios del siglo XX marcacon fuerza su segundero llenando el silencio de la sala.Una luz tenue recae sobre los papeles que inundan lamesa de madera de pino con tapete verde. Las estante-rías cargadas de libros de leyes parecen inmunes alpaso del tiempo. A lo lejos se escucha el murmullo dela calle, en ocasiones leve; en otras, más fuerte. En elcentro del encuadre está el abogado, mirando fijamentelos papeles que tiene sobre la mesa. De vez en cuando,toma la pluma Montblanc que tiene en el bolsillo inte-rior de la americana y realiza unas cuantas anotacio-nes. Coge un cigarro. La sala se inunda de humo.Elsilencio es interrumpido por tres golpes en la puerta.Aparece la secretaria. “Tienes visita”.Este es el punto neurálgico de la película. Es el lugaren el que el abogado se define y redefine a sí mismo.Su espacio personal y a la vez público. El lugar dondeexpone sus seguridades, pero también sus miedos ydudas a través de sus momentos de soledad, sus con-versaciones telefónicas, sus charlas con otros abogadosdel buffet y, sobre todo, sus consultas con el cliente,momento en el que establece la relación más estrechay el comienzo en la construcción de un relato de los he-chos.

Calle de la Judería Vieja donde está ubicado el despacho.

Dionisio en su despacho.

Page 10: La verdad de los solos

CENTRO PENITENCIARIO Un enorme complejo peni-tenciario domina como un esqueleto metálico sobre loscampos de Castilla. Es el Centro Penitenciario de Pero-gordo. A lo lejos puede observarse la Sierra de Guada-rrama. Desde dentro también. Un coche accede alparking. De él sale el abogado con un maletín en lamano. Al cruzar la puerta principal se encuentra anteel control. Muestra el contenido de su maletín a la fun-cionaria, con la que charla amigablemente. “Vengo aver a xx”. Tras unos minutos de espera, el abogadocruza una serie de pasillos interminables cuya única luzpenetra a través de pequeñas ventanas con una dobleverja. Al final, una sala dividida en dos por una enormemampara de cristal; al otro lado se encuentra el presocustodiado por un policía. El abogado se sienta y cogeel auricular.En este caso alguien comete un delito y el juez no per-mite su libertad con cargos, así que tiene que perma-necer en la cárcel hasta el momento del juicio. En estecaso, será el abogado el que acuda al centro para pre-parar la defensa del acusado. En esta parte del film po-dremos ver la relación entre abogado-cliente mediadapor los controles penitenciarios (funcionarios y/o po-licías).

Centro Penitenciario de Perogordo (Segovia).

Sala de comunicaciones del Centro Penitenciario de Perogordo.

Page 11: La verdad de los solos

TRIBUNAL ”¡Audiencia Pública!”, grita la funcionariadesde el umbral de la puerta. En ese momento, accedeel público a la sala. En el interior, el juez preside lavista en el centro de la sala, frente a él, el acusado seencuentra sentando en el banquillo de madera y a suderecha está el abogado, vestido con la toga negra queexige la Ley.Es el punto de conclusión de cada caso. Veremos los úl-timos preparativos de la defensa en dependencias judi-

ciales, las tomas de contacto previas al juicio del abo-gado con fiscal y juez y el acceso al tribunal. A lo largodel juicio se mostrarán algunos de los matices de la de-fensa. La intención no es enseñar todo el proceso sinosólo la puesta en marcha de la defensa preparada pre-viamente. Resultará interesante el alegato final del abogado, mo-mento en el que concluye la película. En ningún casoconoceremos el veredicto.

Sala de vistas del juzgado de primera instancia e instrucción de la ciudad de Segovia.

Page 12: La verdad de los solos

TRATAMIENTO

1. APUNTES SOBRE LA IMAGEN Y EL SONIDO

Partiendo de la perspectiva de varios casos en corali-dad, el film arrancará con una asistencia al detenidoen comisaría (primer contacto del abogado con sucliente y toma de declaración por la policía), continuarácon las consultas en el despacho (punto crucial de cons-trucción del discurso) y las salas del tribunal (relación,con magistrados, fiscales y funcionarios), realizandotambién una aproximación al ámbito carcelario (visitasconcertadas en centros penitenciarios).

El documental gira entre dos ejes: Uno es la soledad delprotagonista y el otro su relación con las demás piezasque intervienen en el proceso legal: el cliente, los jue-ces, fiscales, funcionarios de prisiones, policías,…Todoello retratado con una cámara observacional.

1. La soledad: en el despacho; en sus viajes en cochehasta la comisaria; o hacia la cárcel; caminando por la

zona vieja de la ciudad hacia su despacho,… Utilizaciónde planos largos, con profundidad de campo, que enfa-tizan en la soledad del protagonista frente a los valoresmorales de la sociedad. El sonido directo del contextopor el que se mueve irá acompañado de algunos maticesreflexivos materializados a través de la voz en off deDionisio. Estas secuencias más personales irán inter-caladas con las secuencias del apartado segundo.

2. La relación con los demás: Desde la asistencia al de-tenido hasta el juicio en la sala del tribunal. Orden cro-nológico de los hechos y coralidad entre diferentescasos. En este caso se utilizarán planos más cortos delprotagonista en su relación con los demás agentes queintervienen en el proceso. El punto central del sonidoson las conversaciones con el resto de personajes, queaportarán a su vez la reflexión sobre el funcionamientodel sistema de justicia.

Page 13: La verdad de los solos

2. PERSONAJES SECUNDARIOS

El esquema de personajes secundarios girará entornoa Dionisio y la relación que establece con cada uno deellos en el desarrollo de los procesos penales. En esteentramado se podrá observar la cotidianeidad en elejercicio del derecho. No sólo las escenas reveladorasen la evolución de la defensa, sino también los momen-tos más espontáneos y cotidianos, que aportan el tono

humano a la figura del protagonista y las diferentes ma-neras de relacionarse con unos y otros.De esta manera, podrán verse las diferentes relacionesde “poder” que se generan entre ellos y desde el puntode vista del protagonista. Su tratamiento con el cliente,con jueces y fiscales, con abogados colegas y con el per-sonal policial, judicial y penitenciario.

A la izda., el juez Jesús Marina con un magistrado y una fiscal. A la dcha., Dionisio con su socia, la abogada Alicia Garzón.

Page 14: La verdad de los solos

MOTIVACION

Mi padre no procede de una familia de abogados. Mis abuelos regentaban un pequeño comercio (una ferretería)en el centro histórico de la ciudad de Segovia. Un negocio puramente familiar que fue pasando de padres a hijosdesde mediados del siglo XIX. Es decir, el abuelo de mi abuelo fue el motor responsable de un legado consideradocomo la “única” opción de futuro para sus herederos. Entre clavos, tornillos y escarpias creció mi padre. Y asícomo su hermano mayor ejerció su papel de eslabón de la cadena empresarial y a la edad de 12 años ya dominabael mundo del tornillo, mi padre decidió matricularse en la Universidad de Derecho de Segovia, porque era la únicacarrera universitaria que había entonces en la ciudad. Allí conoció a mi madre con la que se casó recién acabadala carrera. Y de esta manera, mi padre rompió la cadena genealógica entorno a una ferretería creando el origende una nueva entorno a un juzgado. Somos siete hermanos y yo soy la mayor. Desde mi infancia viví muy de cercael trabajo de mi padre. Hasta que cumplí los 15 años, su despacho estaba en el piso inferior de nuestra casa. Asícomo mi padre creció entre tornillos, yo lo hice entre delincuentes menores, juzgados y cárceles. Admiraba sumanera de entender el mundo, su forma de defender con pasión a cualquier persona, independientemente de suraza, su condición, o el posible delito que hubiera podido cometer; en definitiva, su manera de construir la verdad.Mi opción de futuro se planteaba muy clara: yo sería abogada como mi padre, formando un eslabón de esa cadenaque él mismo había inaugurado. Cuando me encontré ante la inminente elección de un futuro que prácticamenteme venía dado, surgió en mí el conflicto moral: ¿cómo podía yo erigirme en pos de alguien que había podido co-meter un crimen? ¿cómo separar mi ética personal de una profesional que se me iba a imponer como una losa?Yo no fui capaz de evadir mis conflictos morales y rompí aquella cadena que él había iniciado. Por eso ahoraquiero aproximarme a su trabajo en busca de las respuestas que no quise encontrar.

Teresa Sáez

Page 15: La verdad de los solos

BIO

Teresa Sáez se licenció en Periodismo por la UCM enel año 2004. Desde entonces, ha ido desarrollando di-versos trabajos como redactora en diferentes mediosde comunicación. A partir del año 2006 comenzó aidear y desarrollar contenidos televisivos para Inter-net, creando formatos como ENTRE LÍNEAS, pro-grama televisivo adaptado a la Red. En 2010 inicia el Master de Documental de Creaciónde la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona) donde

comienza el desarrollo del presente proyecto.Además, ha colaborado en producciones cinematográ-ficas como HUIDAS, de Mercedes Gaspar; ha reali-zado exposiciones fotográficas (NO ASÍ EN LATIERRA COMO EN EL CIELO); ha trabajado comomontadora en varios cortometrajes (UX, de MaríaLlopis); y en la actualidad está inmersa en un pro-yecto documental del director catalán Abel GarcíaRoure.

Page 16: La verdad de los solos

ENTREVISTA

“Yo quería estudiar psicología, pero Segovia, la ciudaden la que me he criado y vivo, no tiene una universidadcon estos estudios, así que decidí matricularme en De-recho. Con el paso de los años y mi experiencia comoabogado me he dado cuenta que mi profesión está muycerca de la Psicología, porque tienes que entender muybien los procesos mentales de tus clientes y a la vez,saber trasmitírselos al juez de una manera favorablepara tu cliente”.“Lo que hizo decantarme por el Derecho Penal fue unhecho concreto que me marcó profundamente. Un grupode alumnos acudimos a un importante juicio con granrepercusión mediática. Se trataba de uno de los proce-sos contra Jesús Gil, un político adinerado y mafioso,que dio licencia para la construcción de un edificio enun municipio de Segovia y que se hundió el día de su in-

DIONISIO SÁEZ, 57 AÑOS

“Todo ciudadano tiene derecho auna defensa, haya hecho lo quehaya hecho”

Page 17: La verdad de los solos

auguración con el resultado de una veintena de perso-nas muertas. Me resultó asombroso cómo los abogadoscon sus argumentos consiguieron poner en duda la presunta culpabilidad de este hombre”. Sus inicios en la profesión estuvieron marcados por sumilitancia política. Él fue uno de los primeros afiliadosde Segovia al Partido Socialista y fue en el año 1977“cuando me ofrecieron la asesoría jurídica de UGT, queestaba comenzando su actividad sindicalista. Era muybuena gente, idealistas y ninguno liberado, que curra-ban en sus trabajos y después sacrificaban su tiempolibre por los demás trabajadores. Me pareció muy ro-mántico”. Tras unos años en UGT, decide comenzar su andaduraen solitario. Desde entonces, ejerce su profesión tantoen el ámbito privado como en el público (abogado deoficio cuando le corresponden los turnos de guardia).Dice que “es una profesión que se lleva por dentro; quete tiene que gustar porque a nivel económico es muy sa-crificado. Hay que tener en cuenta la situación de mu-chas personas que acuden a ti en busca de ayuda.Muchos no pueden pagarte y es esa vocación la que haceque olvides la minuta y te dediques en cuerpo y alma atu cliente”.

Él considera que “no hay nadie malo per se sino que susmaldades, delitos que se llaman, se cometen por cir-cunstancias sobrevenidas. Es evidente que hay algunoshechos que son inicialmente repugnantes, ejemplos mil,como el de Sandra Palot, pero cuando llega el clienteque ha cometido uno de estos hechos te cuenta su ver-sión. Es un reto para ti como abogado. Yo tengo muyclara una cosa, que tengo grabada a fuego y es que todociudadano tiene derecho a una defensa, haya hecho loque haya hecho, otra cosa será que le absuelvan o no.He defendido a homicidas, ladrones, traficantes demayor o menos escala, pero siempre teniendo en cuentaque no son culpables hasta que sean juzgados y paraque llegue ese momento tienen que ser defendidos poralguien”. “Únicamente tengo un caso que rechacé y fue el si-guiente, tenía un cliente que su hija le acusó de abusossexuales, en principio no la creí, me hice cargo delasunto hasta que declaró la hija y me pareció total-mente sincera y veraz en sus declaraciones, de maneraque dije a su padre que se buscara otro abogado, queencontró, le defendió y le cayeron 15 años de prisión.En otra ocasión, en el año 82, me correspondió por elturno de oficio un parricida. Mató a su mujer a la salida

Page 18: La verdad de los solos

de la misa mayor de un pueblo, delante de la hija deambos que era de unos 7 u 8 años, me hice cargo de ladefensa y le condenaron a 22 años de prisión. En estecaso, como en tantos otros, no niegas la autoría del de-lito sino que buscas las razones de cometerlo, ya queuna persona en estado normal de conciencia es difícilque cometa un acto de ese tipo. Naturalmente, las ate-nuantes y eximentes que contempla el Código Penal noson las mismas que nuestro raciocinio puede evaluar,pues todo el que comete un acto así sería eximido de suresponsabilidad porque evidentemente no está en ple-nas facultades, pero eso no quiere decir que esté locodesde un punto de vista jurídico”.“Hay una cuestión fundamental en nuestro trabajo yque por muchos años que transcurran sigue influyendoen tu ánimo diario, eso son las sentencias, las resolu-ciones judiciales, tanto del ámbito penal como de cual-quier otro del Derecho, aunque en el penalevidentemente se juega con la libertad que es uno delos bienes más preciados, pues en el resto de ramas sesuelen ventilar cuestiones económicas, más o menosimportantes, pero la libertad de la persona es lo básico,al menos, para mí. De ahí la respuesta a la satisfacción,no hay nada como una sentencia favorable, es la cumbre

de nuestra aspiración de cada día, sobre todo en el ám-bito penal y no vayas a creer que las absoluciones nosparecen injustas porque conocemos que el cliente hapecado, no es así, esto es un juego, como el juego de lavida, una representación en la que los papeles están re-partidos cuando entras a realizar la función, juicio oral,estás totalmente imbuido de tu papel y convencido delo que estás defendiendo que no siempre es la inocen-cia, sino las circunstancias que hacen que una pena de15 años se quede en 5, por ejemplo”. “Lo peor de esta profesión es obtener una condenacuando estás convencido de que el tío es inocente, peroesto no sucede casi nunca, es muy difícil que condenena un inocente y mucho más fácil que absuelvan a un cul-pable, pero así tiene que ser para velar por la seguridadjurídica, tu puedes pensar que fulanito es culpable deun delito, pero hay que probarlo, no solo suponerlo, sinose quebraría esa seguridad y cualquier podría ir al ta-lego”.

ESTADO DEL PROYECTO:2011: Desarrollo de guión.2012: Producción y rodaje

Page 19: La verdad de los solos

PRENSA

El Norte de Castilla,

21 de febrero de 2008

El Norte de Castilla,

23 de febrero de 2008

Page 20: La verdad de los solos