213
2° de la Trilogía El Clan de Mallaig (Sorcha – 2008) Una intensa y apasionante historia de amor en la Escocia Medieval. Sorcha Lennox, quien vive refugiada en un convento, es llamada por Gunelle MacNéil para vivir como su dama de compañía en el castillo de Mallaig. Baltair MacNéil, el hijo de Gunelle, deberá acompañar a la joven en el camino y, durante el recorrido, se forjará entre los dos jóvenes un lazo muy especial. Pero al llegar y descubrir que el jefe del clan ha muerto, todo se trastoca. ¿Podrá el vínculo resistir a los hechos nefastos que amenazan la tranquilidad de la vida cotidiana de Mallaig? Continúa la historia de las mujeres de El clan de Mallaig, personajes entrañables que viven una vida fascinante en las Highlands escocesas. Escaneado y Corregido por GEMA – Editado por Mara Adilén Página 1

Lacombe, Diane - El Clan de Mallaig 02 - Sorcha

Embed Size (px)

DESCRIPTION

romantica historica

Citation preview

2 de la Triloga El Clan de Mallaig(Sorcha 2008)Una intensa y apasionante historia de amor en la Escocia Medieval.Sorcha Lennox, quien vive reu!iada en un convento, es llamada por "unelle Mac#$il para vivir como su dama de compa%&a en el castillo de Mallai!. Baltair MacNil, el hi'o de "unelle, de(er) acompa%ar a la 'oven en el camino y, durante el recorrido, se or'ar) entre los dos '*venes un la+o muy especial. ,ero al lle!ar y descu(rir que el 'ee del clan ha muerto, todo se trastoca. -,odr) elv&nculo resistir a los hechos neastos que amena+an la tranquilidad de la vida cotidiana de Mallai!./ontin0a la historia de las mu'eres de El clan de Mallai!, persona'es entra%a(les que viven una vida ascinante en las 1i!hlands escocesas.Escaneado y Corregido por GEMA Editado por Mara Adiln Pgina 1PRIMERA PARTE2345 2330 Captlo !Descubrir un to.6evant$ los o'os de mi (ordado y vi que mi madre dormita(a en su sill*n. 6a coia se le ha(&a descolocado y una de las puntas ro+a(a su (oca y tem(la(a cada ve+ que respira(a. Se dir&a una (anderaderrotada, a+otadaporel viento. 6oencontr$divertidoynopudeevitarsonre&r. ,or ortuna, est)(amos solas en la ha(itaci*n. #o ha(r&a permitido que me riera de ella. 7e'$ mi la(ory me puse en pie. Esta(a oscuro, y cuando me dispon&a a encender la l)mpara de se(o colocada so(re la mesa, o& ruidos en el patio. Entra(a un carrua'e. Me precipit$ a la ventana, demasiado tarde para ver a los que lle!a(an, porque ya ha(&an dado la vuelta a la torre. 8& el !olpeteo de +uecos que (a'a(an hacia los esta(los.-Erami padre, devueltadesue9pedici*n.:6oespera(atanto, mi vidaeratantediosaen invierno cuando $l alta(a de Morar; Est)(amos a 22 de e(rero, y hac&a ya quince d&as que ha(&a marchado con el 'ee Mac#$il. Mi madre no ha(&a reci(ido nin!una noticia de $l, que yo supiera,pero eso no ten&a nada de raro< mi padre considera(a una cuesti*n de honor me+clar lo menos posi(le su vida amiliar con sus asuntos. /reo que aquello se de(&a a un suceso que data(a de mucho antes de mi nacimiento, cuando mi padre no esta(a al servicio del clan Mac#$il y todav&a no conoc&a a mi madre.El !ato salt* al al$i+ar de la ventana, y al tocar el cristal con la punta de su morro ne!ro de'* una peque%a marca de vaho en la supericie escarchada. 6ue!o se acerc* a m& en (usca de una caricia. 6o tom$ en (ra+os, le rasqu$ las ore'as con una mano y lo devolv& al suelo, so(re la esterilla de 'uncos h0meda y olorosa. 7e(ido al mal h)(ito que ha(&a adquirido de 'u!ar con los la+os de mivestido, me ha(&an prohi(ido tenerlo conmi!o. =o hac&a trampas muchas veces< nada me atra&a tanto como su pela'e c)lido y suave. = tampoco me desa!rada(a el cosquilleo de sus dientecitos en la punta de mis dedos cuando me mordisquea(a.>olv& a la mesa y tom$ el esla(*n, de e9tremos curvados, y la piedra de s&lice, que !olpe$ 'unto a lamechadela l)mpara. 7einmediato (rotaron(onitas chispas yse encendi*elue!o en elrecept)culo de vidrio. /err$ de nuevo la puerta de la l)mpara con toda la delicade+a que pude, pero el chasquido del cierre despert* a mi madre.?-@u$ haces, hi'a. ?me di'o al tiempo que se er!u&a?. Es demasiado pronto para encender. -/u)ntasvecesten!oquedecirtequeahorreslasmechas.?Sea'ust*lacoiayel delantal,mientras se!u&a murmurando so(re el mismo tema?< Apa!a esa l)mpara. >emos muy (ien aqu&.-Esperamosaal!uien.#o. #adiehaanunciadosulle!ada, ysi tut&onocomeconnosotros,cenaremos solas las dos.?Sa(es muy (ien, Sorcha, que tenemos que dar e'emplo de econom&a dom$stica a los criados. Si no, -qui$n va a hacerlo. Bienes que aprender pronto eso. Si no te preocupas por ese !$nero de cosas, no podr)s hacer un (uen matrimonio. #o te ha!as la sorda. Be veo y s$ lo que piensas so(re ese tema. ,ues has de sa(er que laprincesa Mar!arita ten&a trecea%os cuando se cas* con el Escaneado y Corregido por GEMA Editado por Mara Adiln Pgina 2del&n6uis, el a%opasado. As& que, atusdie+a%os, noeresdemasiado'ovenparaempe+ara preparar tu destino. #o lo olvides, Sorcha, eres la hi'a de un no(le./ontrariada, desvi$ la mirada y me a(stuve de inormar a mi madre de que aca(a(a de lle!ar un carrua'e. Escuch$ distra&da el sempiterno ar!umento de los matrimonios, que la o(sesiona(a. A m& meparec&aquenuestracondici*nnoeraladelaamiliaMac#$il, quesinlamenorduda orma(a parte de la no(le+a. Me irrita(an las pretensiones de mi madre en lo reerente a nuestros t&tulos en el seno del clan. #o tuve tiempo de apa!ar la l)mpara, porque la puerta de la ha(itaci*n se a(ri* de !olpe y entr* mi t&o Cnnes, con aire aterrado. =o interrump& el !esto y mir$ detr)s de $l.7os !uardias de la escolta de mi padre y una criada se api%a(an a la entrada, )vidos de noticias.,ero ni rastro del teniente 6enno9. 7e pronto tuve el presentimiento de que al!o le ha(&a sucedido a mi padre.?:El rey ha muerto; ?Anunci* mi t&o de (uenas a primeras, mientras (usca(a con la mirada un asiento?. Anteayer, en ,erth, en el convento de los railes ne!ros. Deci(i* veinte pu%aladas. :Una a(ominaci*n; :Un asesinato;?:7ios del cielo; ?e9clam* mi madre, y cru+* las manos so(re su pecho.Mi t&oseha(&ade'adocaerso(reun(ancoymi madreselevant*al mismotiempo, muy a!itada. =o los mir$ a am(os, y me pre!unt$ qu$ era lo que les causa(a una emoci*n tan !rande.#o conoc&a !ran cosa del rey de Escocia. Sa(&a tan s*lo que era impopular entre los se%ores de las 1i!hlands, que se (urla(an de su !usto por el lu'o y se que'a(an de lo elevado de los impuestos.Mi idea de lo que eran el lu'o y los impuestos era muy va!aE en cam(io, pod&a ima!inar muy (ien lo que eran veinte pu%aladas. En todas las novelas de ca(aller&a, siempre se atravesa(a al enemi!o con esa cira m)!ica. Me parec&a natural que uera tam(i$n el caso con el rey de Escocia.?Cnnes, -c*mo lo has sa(ido. ?pre!unt* mi madre con diicultad.?,or tu marido, hermana. 6le!a ahora de Mallai!. =a ves, "raham ha pasado inalmente a los hechos..., :el muy (andido;Me lan+* una mirada contrariada, y se diri!i* a m&.?Sorcha, querida, de(er&as (a'ar a la sala a reci(ir a tu padre. >amos, vamos. 7$'anos...#o me lo hice repetir dos veces y sal& de la ha(itaci*n a toda velocidad. Deci(ir a mi padre< eso era en eecto lo que desea(a hacer. Fl me dir&a lo que de(&a pensar so(re todo aquello. Bodav&a ten&aenel cora+*nunnudoques*lodesaparecer&acuandoloviera. El asesinatodel reyme importa(a cien veces menos que el re!reso sano y salvo de mi padre a nuestra casa.Ga'$ a la carrera la escalera que lleva(a a la sala y all& vi de inmediato a mi padre< me da(a la espalda, inclinado delante del ho!ar, con las manos e9tendidas so(re las llamas. 1a(&a de'ado los !uantes so(re la repisa de la chimenea, para que se secaran. Sus !randes (otas de cuero, r&!idas por la helada, se levanta(an en la punta de los pies. /on las espuelas que apunta(an por detr)s, encontr$ que sus pies parec&an !arras. Me acerqu$ sin hacer ruido, con la mirada i'a en su rostro.1a(&a aprendido a no distraerlo de sus meditaciones y a(ordarlo con discreci*n. 6o llama(an Hvie'oI. =onopensa(aquetenercincuentaydosa%osueraservie'o.Siempreha(&avistoalteniente 6enno9 con los ca(ellos !rises, el (i!ote tam(i$n, la espalda un poco encorvada y el andar pesado. /re&a que $sos eran los atri(utos normales de un laird, el propietario de un terreno de varias hect)reas y de un re(a%o de cien ca(e+as de !anado vacuno.Al darsecuentademi presencia, volvi*despaciolaca(e+aenmi direcci*n,mededic*una sonrisaquedesment&anlasarru!asdepreocupaci*ndesurente, ylue!odesvi*denuevola Escaneado y Corregido por GEMA Editado por Mara Adiln Pgina 3miradaalasllamasmientrasmurmura(aunsaludo. =omeacerqu$, losalud$ami ve+yme acurruqu$ a sus pies.?Guenasnoches, padre?empec$adecircontodatranquilidad?. 7ime, -tendremosotro rey. B&oCnnesdicequeelrey ha muerto.Fl y madre sesienten muyinelices. -B0tam(i$nte sientes ineli+.?#o me siento ineli+, Sorcha, aunque lo que ha ocurrido es muy triste ?me respondi*.Se inclin* so(re m&, tendi* los (ra+os y me levant* del suelo. =o me aerr$ inmediatamente a su cuello, encantada. Ami madrenole!usta(aquemetuvieraen(ra+osdeesemodoyselo reprocha(a cada ve+ que lo hac&a, record)ndole que yo ya no era una ni%a. Bom* asiento en su sill*n y me coloc* so(re sus rodillas mientras se!u&a comentando el suceso.?B&o Cnnes y tu madre est)n inquietos porque tienen miedo de lo que pueda suceder ahora. =a ves, Sorcha, por loquesesa(e, quienasesin*al reyten&ac*mplices enlas 1i!hlands. 6as repercusiones del asesinato podr&an ser desastrosas para al!uno de los clanes, incluido el de tu madre.?,ero no para el clan Mac#$il, padre, -no es verdad.=o sa(&a que orm)(amos parte del clan Mac#$il de Mallai!, y que su 'ee, el se%or Cain, ha(&a reali+adovariasmisionesporcuentadel reyenlas1i!hlands. Sedec&atam(i$nqueladama "unelle, su esposa, manten&a desde hac&a varios a%os correspondencia asidua con la reina. "racias a las relaciones de mi padre, laird y primer conse'ero de los Mac#$il, nuestra amilia no de(er&a estar e9puestaalas represalias queprovocar&ael asesinatodel reyentrelos clanes delas 1i!hlands. ,or lo menos, eso cre&a yo.Mi padre entorn* los o'os y se mordi* los la(ios. Su respuesta tarda(a en lle!ar, y empec$ a inquietarme. Me concentr$ en mirar su (oca y apret$ las solapas de su 'u(*n h0medo, impaciente por escuchar sus pala(ras, pero cuando inalmente me dio una e9plicaci*n, no la entend&.?#o para el clan Mac#$il. B0 sa(es, Sorcha, que los Mac#$il se cuentan entre los s0(ditos m)s ieles del rey en las 1i!hlands. El se%or Cain participar) pro(a(lemente en las investi!aciones para encontraralosculpa(les, enel casodequeven!anareu!iarseentreloshi!hlanders. Enlas pr*9imassemanas,ser) muyimportantepara el clanquenadapueda sem(rar dudasso(resu lealtad y colocarlo del lado de los enemi!os de la /orona.?=a veo, padre ?murmur$.En realidad, en ese momento preciso yo no ten&a la menor idea de la amena+a que se cern&a so(re el clan Mac#$il, ni del incomprensi(le tormento que asalta(a a mi padre, mi madre y mi t&o.As& pues, (a'$ de las rodillas de mi padre y ui a las cocinas, atra&da por el (uen olor de las !alletasde miel que cocina(an all& y decidida a olvidar la cuesti*n de la muerte del rey, que supera(a porcompleto mi capacidad de comprensi*n.1asta dos d&as despu$s no entend& lo que ha(&a querido decirme mi padre esa noche. Aquel 23 de e(rero de 2345 me levant$ al amanecer, como todos los d&as, y asist& a los maitines en el (ur!o en compa%&a de mi madre, de mi t&o Cnnes, de nuestra criada Jinella y del escudero que !uia(a nuestro carrua'e. 1ac&a un r&o que cala(a los huesos y yo maldec&a mi capa, demasiado del!ada y demasiado corta para mantenerme caliente. -,or qu$ no ten&a yo como la se%orita /eit, la hi'a delse%or Mac#$il, un manto !rande orrado de piel. -,or qu$ tampoco ten&a +apatos orrados. -#o era yo, al decir de mi madre, hi'a de un no(le. -,or qu$ no me vest&an de orma acorde con miEscaneado y Corregido por GEMA Editado por Mara Adiln Pgina 4ran!o. ,ensando en mis vestidos me distra'e en varios momentos importantes durante el oicio en la peque%a i!lesia, en particular la elevaci*nE m)s tarde ha(r&a de lamentar esa distracci*n.En el camino de vuelta a Morar, decid& ha(lar a mi madre de la cuesti*n de mis vestidos, y la encontr$ muy receptiva. =o ha(&a presentado mi reivindicaci*n de manera que adulara su or!ullo y estimulara el inter$s que presta(a a todos los si!nos e9ternos que revelan una posici*n alta en un clan, de los que la vestimenta no era el menos importante. /uando entramos en el patio, casiha(&ao(tenidolapromesadequerevisar&amosel contenidodemi core, perosurimosuna (rusca interrupci*n.Un hom(re de la !uardia de mi padre se precipit* hacia nuestro carrua'e y reclam* con toda ur!encia a mi madre y mi t&o Cnnes. En un rinc*n ha(&a un ca(allo que no reconoc&. 7e sus ollares espumeantes y su !rupa reluciente de sudor se eleva(an nu(ecillas de vaho condensadoE aquelanimal ha(&a lle!ado a nuestra casa despu$s de una carrera. Mi t&o salt* del coche y ayud* a (a'ar ami madre.=omequed$sentada'untoaJinella,uninstante,va!amenteinquieta. >i quemimadreymi t&ocorr&anal interiordelamansi*nymepre!unt$qu$clasedevisitantepod&a provocar tanto so(resalto entre quienes lo aco!&an.#o tuve oportunidad de encontrarme con el visitante propietario delca(allo,porque la sala esta(a vac&a en el momento en que entr$ en ella. Bodos ha(&an su(ido a la c)mara del piso alto, y la puerta al inal de la escalera esta(a cerrada. Jinella parec&a indierente a lo que ocurr&aE se quit* su capa y se puso tranquilamente a te'er, despu$s de invitarme en tono cansado a que hiciera lo mismo.K#uestracriada, deunaedadrespeta(le,ha(&aservidoal anteriordue%odeMorar, messire Aindreas, hermano de Galtair el >ie'o, que ha(&a diri!ido el clan Mac#$il antes que el se%or Cain.=ono ha(&aconocidoaaquel 'ee,quemuri* mucho antesdeminacimiento,perotodav&ase honra(a su memoria y todos se hac&an len!uas de su !rande+a.,or lo que respecta al tal Aindreas, ten&a mala reputaci*n en el clan, del que por lo dem)s ha(&a sidoe9pulsado,y Jinella erala0nicarepresentante de la anterior servidum(re.En el (ur!ose conta(aqueha(&asuplicadoami padrequenolaecharacuando$l compr*lapropiedadde Aindreas antes de que yo naciera. Bodav&a hoy, ella sent&a hacia el teniente 6enno9 una !ratitud eterna y una admiraci*n que en ocasiones ro+a(a la adoraci*n. = de hecho, me parec&a que mimadre se sent&a a menudo molesta por los sentimientos que Jinella al(er!a(a en relaci*n con mipadre.Encuantoa m&, me !usta(a la compa%&a deaquella mu'er, porque sucharla incesante alimenta(a micuriosidad so(re elpasado de Morar y de Mallai!. /omo mimadre ven&a de un condado situado m)s al norte y no ha(&a conocido al clan Mac#$il antes de su matrimonio, esta(a pocoal corrientedesuhistoria. Adem)s, eradenaturale+areservada, ynoten&ael inmenso talento de narradora que pose&a Jinella. A pesar de las recuentes alusiones de mi madre al tema,el despido de nuestra criada me ha(r&a dis!ustado mucho. /omo mi padre lo desea(a tan poco como yo, no ha(&a novedades en esa cuesti*n y Jinella se!u&a con nosotros, tan campante.?>en aqu&, Sorcha ?me di'o?. >en a ayudarme. Si quieres un manto orrado como has pedido a tu madre, tendr)s que tra(a'ar en $l.?#o quiero tart)n. Eso es (ueno s*lo para los plaids y para los mantos de nuestros hom(res de armas. 6levar$ lana ina de Edim(ur!o o terciopelo de ,alma, como la dama "unelle o la se%orita /eit. Si hace alta (ordar, lo har$, y ele!ir$ un (roche de A(erdeen del core de mi padre. :Eso es;Escaneado y Corregido por GEMA Editado por Mara Adiln Pgina 57e momento, no ten&a nin!una !ana de te'er. #ecesita(a sa(er lo que se trama(a all) arri(a, y ui a sentarme en el 0ltimo escal*n, a la espera de que la puerta se a(riera. /uando por in ocurri*, pasadas dos horas, yo ya no esta(a all&. Mi paciencia ue derrotada, y yo me ha(&a marchado de la sala en (usca de otras actividades.El d&aesta(aoscuroaprimerahoradeaquellama%anaenMallai!, yla0nicaventanadeldespachode'a(ailtrarunalu+p)lida,queo(li!a(aalosocupantesatra(a'aralalu+deuna l)mpara. A la mesa, la dama "unelle se ocupa(a de los asuntos de la semana, inclinada so(re el li(ro de cuentas. S*lo los ruidos discretos de su pluma al rascar el papel y el crepitar del ue!o romp&an el silencio que reina(a en la ha(itaci*n.Sentado delante del ho!ar, Cain Mac#$il remov&a las (rasas con la punta del ati+ador, con aire distra&do. El asesinatodel reyocupa(atodos suspensamientos desdehac&aunasemana. El,arlamentonoha(&atardadoendeclararal asesino,Do(ert"raham, ueradelaley.Seha(&a puesto precio a su ca(e+a y a las de sus c*mplices. En su condici*n de 'ee del clan Mac#$il y en nom(re de la lealtad que de(&a a la corona de Escocia, el se%or Cain ard&a en deseos de implicar a sus tropas enaquellaca+adel hom(re. 6aposici*nestrat$!icadeMallai!enlas 1i!hlands convert&aasuclanenunaliadoid*neoparaemprender la(0squeda, si seconirma(aque "raham (usca(a reu!io en el norte del pa&s. En eecto, se dec&a que apoya(an a aquel hom(re numerosos 'ees hi!hlanders, insumisos y enemi!os 'urados del rey. 6os clanes hi!hlanders constitu&an, desde el inicio de su reinado, el tal*n de Aquiles del rey de Escocia.Al evocarlamuertedel reyLaco(o, queha(&ahechounacortavisitaaMallai!yloha(&a reci(idoenaudienciauna docena dea%osantes,CainMac#$il sesinti*llenodeamar!ura. 6as preciosasrelacioneste'idaslentamenteentreMallai!ylacortedeEscoc&apod&anrompersealmenor rev$s pol&tico. >olvi* la ca(e+a hacia su esposa y vio que ella lo o(serva(a.?,ensa(a en el rey, mi se%ora, como t0 misma sin duda. En el rey y en su viuda, con la que te escri(es ?se%al*, de pasada?. Era una pare'a unida, -no es cierto., y $l ha sido un (uen rey, a pesar de todos los reproches que se le hacen.?/ierto, mi se%or. Bienes ra+*n. :@ue7ios seapiadedesualma; =quepon!a(a'osu protecci*n a la reina Luana y a sus hi'os. -En qui$n recaer) ahora la corona.6adama"unellede'*laplumaso(reel escritorioysecontempl*losdedosmanchadosde tinta. Sent&a no ha(er podido trasladarse a ,erth para los unerales del monarca. 1a(r&a tenido la oportunidad de ha(lar con la reina en lu!ar de mandarle una lar!a carta, como se ha(&a resi!nado a hacer. Un c0mulo de circunstancias la ha(&a retenido en Mallai!. En primer lu!ar la enermedad desucapell)n, el reverendo1enriotE despu$s, unacontrariedadamorosadesuhi'a/eit, que ha(&a hecho recaer su despecho so(re todos los ha(itantes del castilloE y inalmente, la amena+a latente que pesa(aso(resu clan cada ve+ que en las 1i!hlands se maniesta(a laoposici*n alpoder real. En esta cuesti*n, su esposo era inle9i(le y no se permit&a el menor despla+amiento ueradesustierras cuandosetensa(anlasrelacionesentrelos clanesdelnorteyelsuyo.Un ataqueal castilloerasiempreunaposi(ilidadqueeraprecisotenerencuenta, enMallai!. En aquellos d&as, dispuesto a deender personalmente sus propiedades y a sus !entes, dele!a(a en su primo B*mas el acudir a los distintos lu!ares en los que era requerida su presencia. Bal ue el caso de los unerales del rey Laco(o en las 6oMlands.7espu$s de un lar!o silencio, la dama "unelle si!ui* e9presando en vo+ alta sus pensamientos